QUIMICA
QUIMICA
QUIMICA
Átomo
Introducción
Demócrito, máximo exponente de la escuela atomista griega (s. V a. C.). Tenía el hábito de
reírse todo el tiempo.7
El concepto de átomo como bloque básico e indivisible que compone
la materia del universo fue postulado por la escuela atomista en la Antigua Grecia, en el
siglo V a. C., siendo Demócrito uno de sus exponentes.
Aristóteles, posteriormente, postula que la materia estaba formada por esos 4 elementos
pero niega la idea de átomo, hecho que se mantuvo hasta 2000 años después en el
pensamiento de la humanidad. Tras la Revolución científica, la escuela atomista griega fue
reconsiderada por las nuevas generaciones de científicos de mediados del siglo XIX,
cuando sus conceptos fueron introducidos para explicar las leyes químicas. Con el
desarrollo de la física nuclear en el siglo XX se comprobó que el átomo puede subdividirse
en partículas más pequeñas.89
Los átomos son objetos muy pequeños con masas igualmente minúsculas: su diámetro y
masa son del orden de la diez mil millonésima parte de un metro y cuatrillonésima parte
de un gramo. Solo pueden ser observados mediante instrumentos especiales tales como
un microscopio de efecto túnel. Más de un 99,94 % de la masa del átomo está
concentrada en su núcleo, en general repartida de manera aproximadamente equitativa
entre protones y neutrones. El núcleo de un átomo puede ser inestable y sufrir
una transmutación mediante desintegración radioactiva. Los electrones en la nube del
átomo están repartidos en distintos niveles de energía u orbitales, y determinan las
propiedades químicas del mismo. Las transiciones entre los distintos niveles dan lugar a la
emisión o absorción de radiación electromagnética en forma de fotones, y son la base de
la espectroscopia.
Estructura atómica
Partículas subatómicas
Véase también: Partículas subatómicas
A pesar de que átomo significa ‘indivisible’, en realidad está formado por varias partículas
subatómicas. El átomo contiene protones, neutrones y electrones, con la excepción del
átomo de hidrógeno-1, que no contiene neutrones, y del catión hidrógeno o hidrón, que
no contiene electrones. Los protones y neutrones del átomo se denominan nucleones, por
formar parte del núcleo atómico.
El electrón es la partícula más ligera de las que componen el átomo, con una masa de 9,11
· 10−31 kg. Tiene una carga eléctrica negativa, cuya magnitud se define como la carga
eléctrica elemental, y se ignora si posee subestructura, por lo que se considera
una partícula elemental. Los protones tienen una masa de 1,67 · 10−27 kg, 1836 veces la
del electrón, y una carga positiva opuesta a la de este. Los neutrones tienen una masa de
1,69 · 10−27 kg, 1839 veces la del electrón, y no poseen carga eléctrica. Las masas de
ambos nucleones son ligeramente inferiores dentro del núcleo, debido a la energía
potencial del mismo, y sus tamaños son similares, con un radio del orden de 8 · 10−16 m o
0,8 femtómetros (fm).10
El protón y el neutrón no son partículas elementales, sino que constituyen un estado
ligado de quarks u y d, partículas fundamentales recogidas en el modelo estándar de la
física de partículas, con cargas eléctricas iguales a +2/3 y −1/3 respectivamente, respecto
de la carga elemental. Un protón contiene dos quarks u y un quark d, mientras que el
neutrón contiene dos d y un u, en consonancia con la carga de ambos. Los quarks se
mantienen unidos mediante la fuerza nuclear fuerte, mediada por gluones —del mismo
modo que la fuerza electromagnética está mediada por fotones—. Además de estas,
existen otras partículas subatómicas en el modelo estándar: más tipos de
quarks, leptones cargados (similares al electrón), etc.
El núcleo atómico
Artículo principal: Núcleo atómico
Los protones y neutrones de un átomo se encuentran ligados en el núcleo atómico, en la
parte central del mismo. El volumen del núcleo es aproximadamente proporcional al
número total de nucleones, el número másico A,11 lo cual es mucho menor que el tamaño
del átomo, cuyo radio es del orden de 105 fm o 1 ángstrom (Å). Los nucleones se
mantienen unidos mediante la fuerza nuclear, que es mucho más intensa que la fuerza
electromagnética a distancias cortas, lo cual permite vencer la repulsión eléctrica entre los
protones.12
Un átomo está constituido por un núcleo central muy denso, que contiene protones y
neutrones, y por electrones que se mueven alrededor del núcleo a una distancia
relativamente grande13
Los átomos de un mismo elemento tienen el mismo número de protones, que se
denomina número atómico y se representa por Z. Los átomos de un elemento dado
pueden tener distinto número de neutrones: se dice entonces que son isótopos. Ambos
números conjuntamente determinan el nucleído.
El núcleo atómico puede verse alterado por procesos muy energéticos en comparación
con las reacciones químicas. Los núcleos inestables sufren desintegraciones que pueden
cambiar su número de protones y neutrones emitiendo radiación. Un núcleo pesado
puede fisionarse en otros más ligeros en una reacción nuclear o espontáneamente.
Mediante una cantidad suficiente de energía, dos o más núcleos pueden fusionarse en
otro más pesado.
En átomos con número atómico bajo, los núcleos con una cantidad distinta de protones y
neutrones tienden a desintegrarse en núcleos con proporciones más parejas, más
estables. Sin embargo, para valores mayores del número atómico, la repulsión mutua de
los protones requiere una proporción mayor de neutrones para estabilizar el núcleo. 14
Nube de electrones
Artículo principal: Nube de electrones
La materia está formada por partículas muy pequeñas llamadas átomos, que son
indivisibles y no se pueden destruir.
Los átomos de un mismo elemento son iguales entre sí, tienen su propio peso y
cualidades propias. Los átomos de los diferentes elementos tienen pesos diferentes.
Los átomos permanecen sin división, aun cuando se combinen en las reacciones
químicas.
Los átomos, al combinarse para formar compuestos guardan relaciones simples.
Los átomos de elementos diferentes se pueden combinar en proporciones distintas y
formar más de un compuesto.
Los compuestos químicos se forman al unirse átomos de dos o más elementos
distintos.
Sin embargo desapareció ante el modelo de Thomson ya que no explica los rayos
catódicos, la radioactividad ni la presencia de los electrones (e-) o protones(p+).
Modelo de Thomson
Artículo principal: Modelo atómico de Thomson
Contradecía las leyes del electromagnetismo de James Clerk Maxwell, las cuales
estaban muy comprobadas mediante datos experimentales. Según las leyes de
Maxwell, una carga eléctrica en movimiento (en este caso el electrón) debería emitir
energía constantemente en forma de radiación y llegaría un momento en que el
electrón caería sobre el núcleo y la materia se destruiría. Todo ocurriría muy
brevemente.
No explicaba los espectros atómicos.
Modelo de Bohr
Artículo principal: Modelo atómico de Bohr
Cada órbita tiene una energía asociada. La más externa es la de mayor energía.
Los electrones no irradian energía (luz) mientras permanezcan en órbitas estables.
Los electrones pueden saltar de una a otra órbita. Si lo hace desde una de menor
energía a una de mayor energía absorbe un cuanto de energía (una cantidad) igual a la
diferencia de energía asociada a cada órbita. Si pasa de una de mayor a una de menor,
pierde energía en forma de radiación (luz).
El mayor éxito de Bohr fue dar la explicación al espectro de emisión del hidrógeno, pero
solo la luz de este elemento proporciona una base para el carácter cuántico de la luz, el
fotón es emitido cuando un electrón cae de una órbita a otra, siendo un pulso de energía
radiada.
Bohr no pudo explicar la existencia de órbitas estables y para la condición de cuantización.
Bohr encontró que el momento angular del electrón es h/2π por un método que no puede
justificar.
Modelo de Sommerfeld
Artículo principal: Modelo atómico de Sommerfeld