Hora de Juego Diagnostica 1 Autora Lic Silvina Cohen Imach PDF
Hora de Juego Diagnostica 1 Autora Lic Silvina Cohen Imach PDF
Hora de Juego Diagnostica 1 Autora Lic Silvina Cohen Imach PDF
1- CONCEPCIÓN DE JUEGO
El juego, desde la Filosofía, en sus formas más sencillas y hasta dentro de la vida animal, es
algo más que un fenómeno puramente fisiológico. El juego, en tanto tal, afirma Huizinga
(1968), llega a constituirse en un fenómeno que ha de ser analizado en forma global, desde
lo histórico, lo cultural, lo social y lo psicológico. Huizinga habla del hombre como "homo-
ludens", es decir, que es la característica principal del ser humano.
El jugar, sostiene este autor, es ante todo una actividad libre. "El juego por mandato no es
juego. Además, es diferente a la vida cotidiana; más bien consiste en escaparse de aquella"
(p. 21). El juego tiene ritmo y armonía, es orden y crea un orden; es una representación, una
figuración de la realidad. Todo niños que juega, dice Freud, se comporta como un poeta,
pues crea un mundo propio, nuevo y diferente, o mejor dicho, inserta las cosas de su mundo
en un nuevo orden que le resulta satisfactorio. No es que el juego sea pura diversión; por el
contrario, el niño lo toma muy en serio, por lo cual "no es la seriedad el opuesto al juego,
sino la realidad efectiva" (Freud, S., 1908).
Pero, ¿qué nos dice la Psicología acerca del juego? ¿Cómo interpretamos el juego de un
niño?, ¿Cuáles son los mecanismos psicológicos que llevan a un niño a jugar? Quien nos
abre el camino para analizar el juego en el niño es Sigmund Freud, en su artículo "Mas allá
del Principio del Placer" (1920). También son importantes las concepciones de Anna Freud,
su hija, primero en Viena y luego en Estados Unidos; la posición de M. Klein, en Inglaterra,
y Arminda Aberastury en Argentina; la concepción de Winnicott, también en Inglaterra y
Piaget, en Suiza.
1
Clase Teórica Cátedra Teoría y Técnicas de Exploración psicológica (Niños) Fac. de Psicología UNT.
Disponible en pagina Web de la Cátedra.
en alemán significa "se fue", y el segundo movimiento era acompañado por un "Ah..." o
"da", que significa "acá está".
El juego completo era pues hacer desaparecer y luego aparecer el objeto. Freud
interpreta que ante la angustia que le causa la partida de la madre, el niño la compensa
escenificando con los objetos que tiene a su alcance: desaparece y aparece.
Si bien sabemos que este en artículo en realidad Freud está más preocupado por
describir el mecanismo de la repetición y el "más allá del principio del placer" que por la
actividad lúdica del niño, de este juego, Freud concluye que:
1- Freud descubre a través de este juego algo esencial: que el niño repitió en el juego
una impresión desagradable, repetición que iba asociada a una ganancia de placer
de otra índole (lo que Lacan llamará Goce).
2- Si bien en el juego el niño fue pasivo, o afectado por la situación, ahora se pone en
un papel activo, repitiendo la escena a pesar de ser displacentera, quizás,
justamente, para apoderarse de esa situación.
3- Según Freud, el acto de arrojar el objeto, "para que se vaya", quizás corresponda a
la satisfacción de un impulso reprimido por el niño de vengarse de la madre por su
partida. Es como si dijera "no te quiero más, yo mismo te hecho". En realidad estas
dos interpretaciones remiten a lo mismo.
4- Afirma que el juego del niño está presidido por un deseo dominante: el de ser
grandes y adultos, y poder hacer lo que la gente grande hace.
5- La satisfacción que el niño encuentra al jugar va dejando lugar al placer por el producto
final de la actividad. Esto es un requisito indispensable para el buen rendimiento escolar
del niño.
6- Van apareciendo ciertas facultades: control, inhibición, utilización de materiales en
forma constructiva, tolerancia a la frustración y pasaje del Principio del Placer hacia el
Principio de Realidad; facultades que permiten el pasaje de la capacidad lúdica a la
capacidad laboral, a partir del período de latencia.
7- Luego aparecen los hobbies y los juegos estructurados.
puedan surgir dentro del juego, sino todos los mecanismos y formas de representación
usados en el trabajo onírico" (Reynoso, 1980).
El análisis de niños nos muestra repetidamente los diferentes significados que puede tener
un mismo juguete o fragmento de juego, interpretado a partir de la singularidad de cada
niño y de la situación analítica global. Es por esto que la autora sostiene que el juego es el
mejor medio de expresión del niño, ya que jugando el niño habla y dice toda clase de cosas
que tienen el valor de genuinas asociaciones.
Así, si consideramos al juego como equivalente al sueño, podemos suponer que también
aquél es una manifestación del Icc, y que ha sufrido un proceso de transformación,
apareciendo ahora tras una fachada tal como la elaboración secundaria del sueño. Esto nos
lleva a pensar a la actividad lúdica como estructurada a partir de las leyes del Icc, a saber,
la condensación y el desplazamiento. Proceso de simbolización que consiste esencialmente
en ofrecer otro significante a lo imposible de nombrar.
Juego y palabra, ambos implican el reemplazo de un objeto inalcanzable, significante
primordial para el sujeto, perdido y originario del deseo, por otros más accesibles, que
encuentren con aquél alguna suerte de conexión asociativa. Es decir que el sujeto habla y
juega, recién cuando ha interiorizado al otro.
misma autora señala más adelante, que esto es así, mientras la ansiedad es latente. Pero cuando
se vuelve manifiesta, pone fin al juego.
4- El Proceso del juego: Según Winnicott, "hay un desarrollo que va de los fenómenos
transicionales al juego, de éste al juego compartido y de él a las experiencias
culturales". Winnicott describe 4 fases en el desarrollo del juego:
1- Hay una fusión entre el niño y la madre. El bebé tiene una percepción subjetiva del
objeto y la madre intenta hacer real lo que el niño está dispuesto a encontrar. Es la
madre quien muestra al niño los juguetes.
2- Hay una visión más objetiva del objeto, siempre que haya una "buena madre", de
una figura materna en condiciones de participar de la escena. El objeto es
repudiado, reaceptado y percibido más objetivamente. Este proceso de
diferenciación requiere de una madre dispuesta a jugar, a participar y devolver lo
que se le propone. Ella se encuentra en un constante "ir y venir" que oscila entre lo
que el niño quiere que sea y, alternativamente, ser ella misma. Gracias a esto el niño
vive la experiencia de "control mágico", de omnipotencia, de confianza. En esa
confianza comienza el juego.
3- En esta etapa el niño puede encontrarse "solo en presencia de alguien. El niño juega
confiado en una presencia interna de la madre que recuerda después de haberla
olvidado".
4- El niño permite la superposición de dos zonas de juego y disfruta con ello. La
madre es quien primero juega con el bebé, tratando de adaptar su actividad de juego
al bebé. Luego introduce su propio modo de jugar, cuando el bebé está preparado
para aceptar o rechazar esta introducción. Queda así allanado el camino para "jugar
juntos en relación".
La Hora de Juego se inscribe dentro de las técnicas proyectivas, ya que al jugar el niño proyecta
realidades que pertenecen tanto a su mundo interno como a su realidad externa. Así, el juego
constituye una verdadera creación simbólica , en tanto condensa en un espacio determinado,
diferentes elementos del pasado y presente de su vida; en este sentido; en este sentido, señala
Reynoso (1980), el juego nos descubre una historia.
Es importante realizar la diferencia entre hora de juego diagnóstica y la hora de juego
terapéutica, pues es muy común que se las confunda.
La primera supone un proceso, que tiene un comienzo, un desarrollo y fin en sí misma;
opera como una unidad y se la debe interpretar como tal.
La segunda, en cambio, es un eslabón más de un amplio continuo en el que van
surgiendo aspectos nuevos y modificaciones estructurales por intervención activa del terapeuta.
En general, la hora de juego diagnóstica va precedida por la entrevista inicial a padres,
donde el psicólogo elabora junto a los padres una consigna que darán al niño. Dado que pueden
intervenir diversos factores para que esta información llegue adecuadamente o no, se hace
necesario reformular al niño en el primer contacto, dicha consigna en forma clara y precisa.
En síntesis en esta primera hora el niño nos trasmite las fantasías Icc de enfermedad o el
motivo Icc por el cual es traído al psicólogo, y en algunos de los casos las fantasías de curación
(M. Klein) permitiendo esto al psicólogo valorar, de acuerdo al tipo y nivel de juego, la
gravedad o no de la sintomatología.
- El consultorio debe permitirle al niño determinada libertad de movimiento, sin que ello
signifique la necesidad de un espacio demasiado amplio.
- El mobiliario debe ser adecuado: una mesa, dos o tres sillas, pizarrón). Es preferible que
el piso y las paredes sean lavables.
- También hay terapeutas que sugieren la posibilidad de que el niño juegue con agua. Al
comienzo se recomendaba, incluir en la misma sala una pileta con agua. Dadas las
condiciones actuales, en general, si bien se contempla la posibilidad de jugar con agua,
esta actividad es realizada en un lugar cercano al consultorio.
- En cuanto a los materiales, algunos autores señalan que los juguetes y otros elementos
deben estar expuestos sobre la mesa, al lado de la caja abierta. Otra postura (a la cual
adhiero), en cambio, señalan que deben estar dentro de la caja, y esta debe estar abierta.
Por su parte, el canasto o caja funciona muchas veces como otro elemento más para la
actividad lúdica del niño. Si bien Efron y otros (1982) señalan que los juguetes fuera de
- Con respecto a los juguetes a incluir, hay diversas modalidades que responden al marco
teórico de cada terapeuta:
a) Erikson prefiere utilizar elementos estructurados o figurativos. Sostiene que los
elementos deben responder y discriminar las distintas áreas de la problemática del niño.
Por ello pondrá teléfono, revolver, muñecos, etc.
b) M. Klein utiliza material inestructurado, ya que considera que un elemento muy
determinado formalmente podría ejercer un efecto sugestivo en el niño, y con ello,
limitar la proyección. Por ello pone en la caja: piolín, aguja, papelitos, goma de pegar,
tijera, retazos de tela.
c) Efron y otros poseen un criterio intermedio, brindando al niño la posibilidad de elegir
entre el material estructurado y el inestructurado. Las autoras, postura a la cual
adherimos desde la Cátedra, incluyen el siguiente material:
- Hojas de papel,
- Lápiz negro y lápices de colores
- Crayones
- Tijera de punta redondeada
- Plastilina
- Goma de borrar
- Sacapuntas
- Goma de pegar
- Papel glacé
- Hilo piolín
- Muñecos
- Familia de animales salvajes y domésticos
- Autitos
- Avioncitos
- Platitos con tacitas
- Cubos
- Retazos de tela
- Pelota chica
- Es importante que el material esté en buen estado y sea de buena calidad, para evitar la
fácil rotura o deterioro del mismo, lo que causa culpa a los niños.
3.3. Consigna
- Definición de roles
- Material a utilizar
- Objetivos perseguidos
La consigna es la siguiente: "Los juguetes que están dentro de la caja (o sobre la mesa) puedes
utilizarlos como quieras. Yo mientras observaré para conocerte y así poder ayudarte". M. Klein
recomienda también, al final de la sesión, recordar al niño día y hora del próximo encuentro.
Efron y otras elaboraron una guía de pautas para analizar la hora de juego, las cuales
apuntan tanto a lo emocional como así también a lo madurativo del niño, que desde la Cátedra
resumimos en las siguientes:
1- Elección de juguetes y de juegos
a- Modalidad de Aproximación
b- Primer juguete elegido
2- Modalidad del juego. Creatividad
3- Capacidad simbólica. Personificación
4- Motricidad
5- Tolerancia a la frustración. Adecuación a la realidad
plan previo, es espontáneo y lábil. Pasa de un juego a otro sin terminar ninguno.
La atención se centra principalmente en la investigación del objeto, en sus
funciones y en el placer que le proporciona el ejercicio y el manipuleo de los
mismos. Restringido sentido de la realidad.
- De los 4 a los 7 años: hay una mayor aproximación a lo real, con creciente
preocupación por la veracidad de la imitación. Reconoce al otro como
copartícipe del juego, pidiendo al psicólogo que tome un rol activo en su juego.
Personificación:
Es la capacidad de asumir y adjudicar roles en forma dramática, capacidad que en cada
momento evolutivo adquiere características diferentes.
a) En niños pequeños se expresa de un modo inmediato, la realización de deseos. Asume
el rol de otro haciendo suyo el personaje temido o deseado.
b) En una etapa posterior la personificación se enriquece con figuras imaginarias (hadas,
monstruos, cucos), disociando y proyectando en estas figuras sus diferentes imagos. El
niño así, se somete, domina, ataca, es perseguido, etc. por estas figuras.
4. Motricidad:
Este indicador nos permite ver la adecuación del desarrollo motriz del niño con la etapa
evolutiva por la que atraviesa. En cada período hay pautas esperables, que responden al grado
de maduración y desarrollo neurológico como así también a factores psicológicos, sociales y
culturales. Ya que consideramos que un manejo adecuado de las posibilidades motoras permite
un mayor dominio del mundo externo, es importante observar cuando este desarrollo se detiene
o presenta dificultades. Para ello vamos a registrar lo siguiente:
1- Desplazamiento geográfico del niño
2- Posibilidad de encaje
3- Alternancia de los miembros
4- Lateralidad
5- Movimientos voluntarios e involuntarios
6- Ritmo del movimiento
7- Hiperkinesia
8- Hipokinesia
todo inferencias pronósticas. Por ello es fundamental observar dónde pone el niño la fuente de
frustración: si deriva de su mundo internos (dibujar algo que no está a su alcance madurativo) o
en el mundo externo (desear algo que no está presente), así como la reacción frente a ella:
encontrar elementos sustitutivos (buena adaptación) o desorganizarse, ponerse a llorar (actitud
negativista).
Esta capacidad de tolerar la frustración está íntimamente ligada a la adecuación a la
realidad, es decir de adaptarse plásticamente a la realidad que le propone. Lo primero que
debemos observar aquí es la capacidad del niño para desprenderse de la madre, para entrar al
consultorio, demostrando comprensión y aceptación de la consigna. Esto también nos permite
evaluar posibilidades yoicas.
BIBLIOGRAFIA: