Alfredo Urich
Alfredo Urich
Alfredo Urich
en el Desempeño Sismorresistente
de Nuestros Edificios
Experiencias Recientes1
Alfredo José Urich B., José Luis Beauperthuy U. y Rodolfo Scannone M.
B.R.S. Ingenieros, C.A.
Caracas, Venezuela.
1 Introducción
Por uso y costumbre, en nuestros modelos de análisis y diseño, estas paredes son
consideradas sólo por su aporte como carga permanente (gravitacional) y masa sísmica. Muy
rara vez, se incorporan en el sistema resistente a sismos como miembros que alteran la rigidez
y resistencia al edificio. Esta filosofía de análisis y diseño está muy influenciada por la de otros
países donde se acostumbra construir las paredes con materiales mucho más flexibles y
livianos.
Los últimos sismos importantes ocurridos en Venezuela, desde Caracas 1967 hasta
Tucacas 2009, han evidenciado el protagonismo de las paredes en el desempeño de las
edificaciones, bien sea, salvándolas de sufrir daños en aquellos sitios cuya intensidad no logró
agrietarlas o promoviendo grandes lesiones estructurales en aquellas que, como fusibles,
vencieron bruscamente su resistencia y rigidez.
1
Edición original presentada en eI I Congreso Ingeniería Forense, Cumaná, Venezuela. Octubre de 2011.
2 El rol de las paredes en el análisis y diseño estructural venezolano
Los sistemas estructurales que usamos hoy en día son muy recientes. Hasta hace
menos de un siglo los muros de mampostería eran uno de los principales sistemas utilizados
para la estructura portante de las edificaciones. Poco a poco, se fue evolucionando hacia la
concepción de un esqueleto estructural, generalmente de tipo pórticos, mientras que las
paredes de mampostería se comenzaron a considerar sólo como divisiones internas y
cerramientos de fachada, sin funciones estructurales. Es así como las estructuras basadas en
pórticos de concreto armado comienzan a popularizarse en la década de los años cincuenta y
con esto la construcción de edificios de mediana a gran altura.
Figura 1: Edificios típicos venezolanos
Figura 2: Filosofía y conceptos generales del análisis estructural
Para lograr que se desarrolle un comportamiento dúctil se deben cumplir una serie de
requisitos muy estrictos en el diseño y detallado de la estructura que no viene al caso
desarrollar aquí. Uno de estos requerimientos, que será el centro de atención en esta
oportunidad, es evitar la interacción de la estructura con otros componentes que puedan
restringir su libre deformación. La normativa vigente probablemente es muy tímida en sus
advertencias en esta materia, pero es sabia en su advertencia.
.
Figura 3: Esquemas de cómo se incorporan usualmente las paredes en los modelos
Figura 4: Diagramas tensión‐deformación típicos para paredes de mampostería y pórticos de concreto armado
Otra diferencia importante, es que las paredes tienden a desarrollar una deformada
netamente de corte, mientras que en los miembros estructurales del pórtico dominan la
deformada por flexión, tendiendo a una forma “s”.
Lo que ocurre es que los primeros pulsos son resistidos netamente por las paredes,
con una contribución mínima de la estructura principal, que entra en juego sólo si las paredes
se agrietan y degradan su rigidez y resistencia. Si la resistencia de las paredes es relativamente
En muchos casos no hay un dominio absoluto de las paredes o los pórticos en todo el
edificio, sino que en algunos sectores o entrepisos prevalecen las paredes y en otros los
pórticos, promoviendo irregularidades y discontinuidades en la resistencia y rigidez que son
altamente nocivas. Cuando esto ocurre, toda la demanda de deformación se concentra en los
entrepisos o las regiones del edificio que no poseen paredes o en aquellos cuyas paredes se
rompen primero, mientras que el resto se comporta prácticamente como un cuerpo rígido,
generando mecanismos de Entrepiso Blando y el Efecto de Columna Corta, entre otros.
El Entrepiso Blando es aquel que tiene una rigidez lateral significativamente inferior a la
de los entrepisos adyacentes, configuración que induce a concentrar la demanda de
deformaciones y tensiones en los miembros estructurales de ese entrepiso. El caso más común
se presenta cuando hay discontinuidad en las paredes, típico de la planta baja de muchos
edificios para permitir áreas de estacionamiento (Figura 5).
Figura 5: Efecto de Columna Corta y Entrepiso Blando por planta baja libre
Figura 6: Efecto de Columna Corta generado por muros de concreto armado
Figura 7: Entrepiso Blando típico debido a planta baja libre
Figura 8: Planta baja libre y Efecto de Columna Corta
Figura 9: Efecto de Columna Corta inducido al fallar parcialmente la tabiquería
Figura 10: Mecanismo de Entrepiso Blando inducido al fallar la tabiquería
Figura 12: Riesgo de lesiones por caída de paredes
(a)
Aún cuando las normas venezolanas son muy tímidas en la regulación de la posible
influencia de los componentes no estructurales en el desempeño de la edificación, no dejan de
advertir su importancia. A continuación se citan algunas consideraciones: “los elementos no
estructurales que puedan restringir las deformaciones de la estructura… deberán ser
aprobados… por el ingeniero estructural responsable del proyecto”(Covenin 2002, 1988); “se
prestará particular atención a la eventual interacción de la estructura portante con la
tabiquería.”(Covenin 1756, 2001); “se deberá considerar el efecto de elementos rígidos,
estructurales o no, que puedan afectar la respuesta dinámica”(Covenin 1753, 1987); “La
influencia de la tabiquería no estructural en el comportamiento ante fuerzas laterales de la
estructura debe ser tomada en cuenta”(Fondonorma 1753, 2006); con relación al Entrepiso
Blando “en el cálculo de las rigideces se incluirá la contribución de la tabiquería”(Covenin 1756,
2001); con relación al piso débil “en la evaluación de la resistencia de los entrepisos se incluirá
la contribución de la tabiquería”(Covenin 1756, 2001); “El contratista no podrá construir
componentes o elementos no estructurales que no estén contemplados en el
proyecto,…”(Covenin 1756, 2001); entre otras.
9 Conclusiones
Las normas actuales advierten sobre la necesidad vital de contemplar la influencia que
tienen los elementos no estructurales en el desempeño estructural, en especial las paredes
rígidas, recomendando que sean aisladas de la estructura o incorporadas en el análisis y
diseño. Pese a estas advertencias, aún en la actualidad se sigue arrastrando la herencia de
contemplar las paredes en los modelos sólo por su peso y masa, menospreciando su rigidez,
resistencia y fragilidad, lo que en ocasiones propicia Mecanismos de Entrepiso Blando y el
Efecto de Columna Corta, entre otros.
En algunas ocasiones, ante sismos de poca intensidad las paredes han sido favorables
y ni siquiera se han agrietado. Es evidente que en estos casos, debido a la gran rigidez de las
paredes, los edificios han experimentado derivas muy inferiores a las que se pueden inferir del
análisis estructura sin restricciones de deformación. Sin embargo, no hay que menospreciar la
vulnerabilidad de estos edificios ante sismos de intensidad superior a la ocurrida, ya que al
vencerse la resistencia de las paredes podrían inducirse los mecanismos ya descritos.
Por otra parte, inclusive si los pórticos dominan el desempeño sobre las paredes, a los
niveles de deriva que se están aceptando en la actualidad, el daño en la mampostería será de
10 Bibliografía
Covenin 1753. (1987). Estructuras de Concreto Armado Para Edificaciones. Análisis y Diseño. Caracas,
Venezuela: Covenin‐Mindur.
Covenin 1756. (2001). Norma Venezolana: Edificaciones Sismorresistentes. Caracas, Venezuela:
Fondonorma.
Covenin 2002. (1988). Criterios y Acciones Mínimas para el Proyecto de Edificaciones. Caracas,
Venezuela: Covenin‐Mindur.
Fondonorma 1753. (2006). Proyecto y Construcción de Obras en Concreto Estructural. Caracas,
Venezuela: Fondonorma.