VIIDocumento 112 REGLAS
VIIDocumento 112 REGLAS
VIIDocumento 112 REGLAS
MORIN DE VILLEFRANCHE
Así tenemos que un mismo lugar del primer cielo puede simultáneamente
constituir el Horóscopo (Ascendente) en la natividad de un individuo y
ejercer así su acción sobre la vida y constitución de este sujeto y, en la
natividad de otro, encontrarse sobre la cúspide de otra casa y obrar así
sobre este otro sujeto en el sentido de las significaciones propias de esta
otra casa.
Esto que está dicho aquí del cuerpo de los planetas, debe aplicarse
también a sus aspectos.
10- Cada casa astrológica difiere por sus propiedades de toda otra casa
astrológica.
11 - Todo planeta difiere de los otros por su naturaleza, o al menos por las
propiedades activas de su influencia.
12- Todos los signos zodiacales difieren entre ellos ya por su naturaleza
elemental, ya por las propiedades activas de su influencia, o por las dos a
la vez.
13- Los diferentes aspectos de un mismo planeta difieren entre ellos por
las propiedades o por su potencia.
17- Dos planetas no pueden producir cada uno los mismos efectos en el
tema natal de un individuo, ni tomados separadamente, ni por su
combinación.
19- Ningún planeta produce, por su influencia, los mismos efectos sobre s
asuntos de diferente especie, ni tampoco sobre numerosos asuntos de igual
especie.
29- Desde el punto de vista del efecto de los cuerpos celestes tal cual este
resulta de su determinación particular, hay cuatro puntos para observar:
1) éste puede realizar el objeto de esta determinación; 2) puede impedir
que se produzca; 3) una vez realizada, destruirla nuevamente; 4) hacer
que su realización devenga para el sujeto una fuente de dicha o de
desdicha.
30- La posición o dominación de un planeta en una casa astrológica solo
designa a primera vista una categoría de cosas o de accidentes que pueden
tocar o no al sujeto; pero a priori y por sí misma ellas solo presagian la
realización de estas cosas. Su realización efectiva - o lo contrario-
depende de la naturaleza del planeta que se encuentra en la casa donde se
presenta, o de la de su señor, y de su estado celeste: estos mismos
elementos deciden, llegado el caso, de la cualidad y de la naturaleza de las
cosas a producirse.
31- Cuando una casa astrológica presentada no está ocupada por ningún
planeta, se juzga de la realización o no y de la cualidad de las cosas
significadas esencialmente por esta casa según la naturaleza y el estado de
su señor.
34 - Todo planeta que posee por sí mismo una analogía con las
significaciones de la casa que él ocupa (o en la cual domina) realiza las
cosas o accidentes así significados, sea en bien, sea en mal, según la
concordancia de su estado celeste o la contrariedad que él experimenta. Si
sus analogías propias son contrarias a las significaciones de la casa, ello
impide o traba en mayor o menor grado la realización o destruye de
nuevo lo que ella ha producido primero, o se torna una fuente de
infortunio.
Sin embargo, para que ello sea así, es necesario que este estado celeste
favorable comprenda los aspectos felices de planetas benéficos; si él está
constituido únicamente por la circunstancia de que el maléfico ocupe su
propia casa celeste o su signo de exaltación, su potencia maléfica se
encontrará, al contrario, intensificada.
55 - Cuando varios planetas ocupan una misma casa, ellos operan cada
uno según su naturaleza y según sus otras determinaciones propias. Así
pues, cada uno debe ser considerado primeramente según las reglas 22 a
53.
58 - Cuando los planetas que ocupan una misma casa son todos benéficos,
ellos presagian la realización del bien y liberan del mal significado por la
casa; si ellos son todos maléficos, sucederá lo contrario, a menos que ellos
no estuviesen en estado celeste favorable y que además se trate de una
casa astrológica feliz.
Un benéfico seguido, en casa infeliz, por otro benéfico, indica que el mal
significado por esta casa no se realizará o al menos tendrá lugar de
manera muy limitada. Si este benéfico está seguido de un maléfico el mal
significado por la casa se realizará con seguridad pero el sujeto escapará.
Pero si un maléfico está seguido de otro maléfico, los males producidos
tendrán un carácter más grave y el sujeto no escapará en absoluto a ellos.
Es necesario entender aquí benéfico y maléfico en el sentido expuesto en
la regla 26.
Esta combinación se hace según las posibilidades que ofrecen las cosas
significadas por las casas en cuestión. Entre estas posibilidades son las
que concuerdan más con la naturaleza, el estado celeste y las analogías del
planeta que se presenta las que se realizan con preferencia.
80 - Los lugares del Primer Cielo donde tienen su extremo los arcos
midiendo los aspectos están determinados hacia la naturaleza y la
constitución accidental del planeta del cuál proceden los aspectos
considerados. Los planetas obran así pues, por medio de sus aspectos.
Como por otra parte estos mismos lugares sufren la determinación local,
es decir la que derivan de las casas astrológicas en las cuales caen los
aspectos, resulta de ello que los planetas están "determinados por sus
aspectos".
85 - Todo planeta ejerce una acción favorable por sus aspectos benéficos
(que son en su orden de potencia, el trígono, el sextil y el semisextil ; una
acción maligna por sus aspectos maléficos (la oposici6n, la cuadratura, el
quincuncio).
86 - Los aspectos benéficos viniendo de un planeta por naturaleza
benéfico produce sus efectos benéficos con facilidad y abundancia. Ellos
realizan las cosas buenas significadas por las casas en las cuales caen e
impiden producirse a las malas.
105 - Cuando varios planetas envían aspectos a una misma casa, es aquel
cuya naturaleza y determinaciones están más en armonía con las
significaciones de esta casa o de quien las determinaciones son desde este
punto de vista las más potentes, el que lleva la ventaja sobre los demás
para la consideración de su aspecto.
106 - Cuando un planeta está situado fuera de su casa celeste, sus aspectos
operan de una manera más marcada en el sentido de las significaciones de
la casa astrológica que él ocupa, que en el que se relaciona con las casas
donde él domina.
107 - Todo aspecto sufre, por el hecho de la casa en la cual cae, una
determinación análoga a la que allí recibe un planeta.
108 - Es necesario observar siempre si las significaciones de la casa
ocupada por el planeta del cual procede un aspecto dado, concuerdan con
el bien o el mal significado por la casa en la cual cae el aspecto.
Todas las otras cosas iguales, así pues, la circunstancia de que un aspecto
caiga en una casa angular Allí acrecienta su eficacia. Terminando en casa
infeliz su poder maléfico en esta casa está aumentado o su poder benéfico
disminuido, según el caso; e inversamente, si el aspecto termina en casa
feliz.
112 - Un planeta solitario (feral), es decir, sin conexión con ningún otro
por aspecto (fuerte) o por conjunción, presagia cualquier cosa de insólito
o de extraordinario en relación a las significaciones relacionadas con la
casa que él ocupa.
VIII
COMPLEMENTOS A LA
TEORÍA DE LAS DETERMINACIONES
ASTROLOGICAS
7 - Las estrellas con las cuales él se encuentra unido o con las cuales el
asciende, culmina o se pone.
4 - Se debe examinar, pues, con el más grande cuidado, si los planetas que
ocupan una casa o que en ella son señores, están en configuraci6n
favorable o desfavorable con el planeta cuya significación por analogía es
la misma que la de esta casa; luego, cual es el estado celeste de éste último
planeta y su determinación particular en la figura.
9 - Estas predicciones serán pues halladas falsas cada vez que no se tenga
en cuenta los elementos de la determinación particular del sujeto, dicho
de otro modo, de lo que constituye el "estado terrestre" del planeta
considerado, de su posición y de su dominación en tal casa astrológica.
3) Que ellas puedan - una vez realizado este objeto- destruirlo de nuevo.
Por su posición.
2) Su estado celeste
30 - Todo planeta, pues, que por él mismo tenga una significación análoga
a la de la casa que el ocupa o domina, realiza esta significación sea en bien
o en mal, según la concordancia que allí aporte su estado celeste o la
contrariedad que allí él experimente. Pero si su propia significación es
contraria a la de la casa que ocupa o en la cual él domina, él impedirá o
trabará la realización o destruirá lo nuevo que él una primera vez había
producido o hace allí una fuente de infortunio.
Esta regla debe ser modificada par Marte y Saturno en el sentido de que
en buen estado celeste y en casas felices, ellos permiten pronósticos de
cosas felices. Aunque en estado celeste favorable pero situados en casas
infelices (VIII y XII y parcialmente VII) ellos producen las cosas infelices.
Estos males se agravan considerablemente si conjuntamente con las
circunstancias precedentes Saturno y Marte hieren con malos aspectos
maléficos al señor de I o X
60- Este examen tiene por objeto descubrir cual es de éstos planetas el que
posee la más grande potencia para realizar o no las significaciones de la
casa.
63- Si entre varios planetas en una casa se encuentra uno que posee
analogía con las cosas significadas por esta casa o es señor de los otros
planetas, o si uno de ellos posee la analogía y otro es el señor, esos planetas
deben ser tomados en consideración antes que los otros en calidad, de más
eficacia para realizar o no las significaciones suministradas por la casa.
65 - Cuando entre varios planetas en una misma casa, unos son contrarios
a los otros, habrá necesidad de ver cuál es el más potente para
producir lo que la casa significa.
a) El de su propia naturaleza
b) El de su estado celeste
Cada uno de estos elementos, tocando uno de los dos planetas, puede
combinarse con cada uno de los tres elementos concernientes al otro
planeta. Es ello lo que hace tan difícil la predicción astrológica.
Las significaciones de estas dos casas se combinan siempre entre ellas por
este hecho ?
PLANETA Y SIGNO
78 - De todo lo dicho resultará claro que los regentes de las casas que
están en sus propias casas celestes realizan de una manera notable los
significados de estas casas, ante todo si son Benéficos y están en buen
Estado Celeste. Pues no necesita de un Dispositor para su acción por esta
razón ellos son más potentes y siempre benéficos por ellos mismos. Aún
en casas como VIII y XII los males serían impedidos o mitigados o muy
atenuados. Incluso Marte y Saturno podrían ejercer estos efectos de no
ser que estuviesen maleficiados por otras circunstancias ( mal estado
cósmico o muchos aspectos que hieran a los luminares, al regente natal o
al señor del mediocielo).
Por otra parte, un signo en una casa astrológica en la cual el señor esta
ausente, actúa siempre en razón de la naturaleza propia y del Estado
Celeste de su Señor, pero no siempre en razón delEstado Terrestre de éste,
es decir, de su determinación local.