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SENTENCIA ELBERT Alias HH PDF

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Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad.

interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

TRIBUNAL SUPERIOR DE BOGOTÁ


SALA DE JUSTICIA Y PAZ

Magistrado Ponente:
EDUARDO CASTELLANOS ROSO

Bogotá D.C., octubre treinta (30) de dos mil trece (2013)

ÍNDICE

PÁG.
I. OBJETO DE LA DECISIÓN 3
II. IDENTIDAD DEL POSTULADO 3
III. ANTECEDENTES PROCESALES 6
IV. SITUACIÓN FÁCTICA Y CARGOS ATRIBUIDOS 9
1. Hechos cometidos bajo la vigencia del Decreto Ley 100 de 1980 13
2. Hechos Cometidos Contra Integrantes De La Unión Patriótica 71
3. Hechos Cometidos contra integrantes de sindicatos en la zona del Eje Bananero 80
4. Hechos cometidos bajo la vigencia de la Ley 599 de 2000 93
5. Reclutamiento ilícito de Niños, Niñas y Adolescentes 94
V. AUDIENCIA DE INCIDENTE DE IDENTIFICACIÓN DE LAS AFECTACIONES
CAUSADAS A LAS VÍCTIMAS, ALEGATOS DE CONCLUSIÓN Y PETICIONES 98
A. La Fiscal Delegada 99
B. Delegada para la Orientación y Asesoría a las víctimas del
Conflicto Armado Interno de la Defensoría del Pueblo 100
C. Solicitud de Nulidad Legal y Constitucional 100
D. Solicitud de Excepción de Inconstitucionalidad 101
E. Intervención de las Defensoras Públicas 104
F. El Ministerio Público 135
G. El Postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA 135
VI. ALEGATOS Y PETICIONES EN TORNO A LA INDIVIDUALIZACIÓN
DE LA PENA Y SENTENCIA (ART. 447 CPP) 137
A. La Fiscal Delegada 137
B. El Defensor del Postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA 137
C. El Postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA 142
VII. DE LOS BIENES CON VOCACIÓN DE REPARACIÓN 143
A. La Fiscal Delegada 143

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B. La Fiscal 25 de la Sub Unidad Élite de persecución de bienes para la


Reparación de las víctimas 144
C. Unidad de Atención y Reparación Integral a las víctimas 144
VIII. CONSIDERACIONES DE LA SALA 145
A. Competencia 145
B. Requisitos de Elegibilidad 148
C. Elementos Históricos y contextuales para comprender el caso de Urabá 158
D. Calificación jurídico penal de los hechos 308
E. Análisis de los cargos 324
De la responsabilidad del postulado 325
Del análisis concreto de los hechos 341
Del genocidio político a la Unión Patriótica 370
F. De la dosificación punitiva 418
G. De la pena alternativa 435
H. De la Acumulación Jurídica de Penas 445
I. De la Extinción de Dominio 448
J. Del Incidente de identificación de las Afectaciones
Causadas a las Víctimas 451
De la Nulidad Legal y Constitucional 451
Del control constitucional por vía de excepción 454
La Reparación Integral de las víctimas 466
K. Otras Determinaciones 541
IX. RESUELVE 541

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I. OBJETO DE LA DECISIÓN

1. Una vez legalizados los cargos parciales formulados por la Fiscalía 17 de la Unidad
Nacional de Justicia y Paz al postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias “HH”, comandante
del Bloque Bananero de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC)1, y tramitado el
incidente de identificación de las afectaciones causadas a las víctimas, procede la Sala a
proferir sentencia parcial, según lo establecido en el artículo 25 de la Ley 1592 de 2012,
por medio de la cual se modificó el artículo 24 de la Ley 975 de 2005. De igual manera,
se resolverán las peticiones presentadas durante el desarrollo del incidente de
afectaciones y sobre la pena principal y alternativa del procesado.

II. IDENTIDAD DEL POSTULADO

2. HÉBERT VELOZA GARCÍA2, conocido con el alias de “Don Hernán”, “Mono Veloza”,
“Care Pollo”, “Hernán Hernández”, por sus iniciales “HH”, nació el 4 de julio de 1967 en
Trujillo (Valle del Cauca), identificado con la cédula de ciudadanía 7.843.301 de Cubarral
(Meta), hijo de Emiliano Veloza (mecánico de profesión) y Aracely García (dedicada a
labores de hogar o ama de casa); es el octavo de 10 hermanos.

3. Parte de la niñez y adolescencia la vivió en Cubarral (Meta), allí estudió hasta


primero de bachillerato; a la edad de 15 años, abandonó su casa paterna y viajó al
departamento del Guaviare, y se dedicó a la actividad conocida como “raspachín” de hoja
de coca; posteriormente viajó a la ciudad de Bogotá, y se desempeñó como conductor,
realizando rutas al sur de la ciudad; luego vivió en Acacias (Meta), en donde también se
empleó como conductor de vehículos de servicio público. Posteriormente sus padres
fijaron su residencia en el Urabá Antioqueño, lugar al que se trasladó HÉBERT VELOZA,
empleándose nuevamente como conductor, esta vez transportando alimentos.

4. HÉBERT VELOZA se casó una primera vez por el rito católico en la iglesia del
municipio de Turbo (Antioquia), con la señora Yorladys Guillen, con quien tiene dos hijos.
Luego de su separación, se casó nuevamente el 3 de septiembre de 2010, esta vez por la
vía civil, con la señora Carolina López Fonnegra.

5. En marzo del año 1994 HÉBERT VELOZA conoció a un desmovilizado del Ejército
Popular de Liberación (EPL), alias “El Flaco”, quien le comentó que por su conocimiento de

1
La Sala aclara que el Bloque Bananero hizo parte de la estructura de la ACCU, aunque en esta oportunidad se hace
referencia a las AUC por haber sido la forma en la cual se autodenominó este grupo organizado al margen de la Ley.
2
Audiencia de control de legalidad, sesión del 7 de marzo de 2011.

3
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la zona y de los grupos subversivos que tenían influencia en la región hombres de Carlos
Castaño lo habían contactado para que se vinculara con el grupo armado irregular que
éste comandaba.

6. En diligencia de versión libre VELOZA manifestó que debido a que pasaba por una
situación económica difícil le manifestó a alias “El Flaco” que él también estaría interesado
en trabajar bajo las órdenes de Castaño, pues por su trabajo como conductor de camión
conocía muy bien la zona, además sabía las rutas y los sitios en los cuales permanecían
algunos subversivos, debido a que en algunas oportunidades había tenido que
transportarlos. Su ingreso al grupo de la Casa Castaño se perfecciona cuando alias “El
Flaco” lo lleva a una casa ubicada en el barrio “El Poblado” de la ciudad de Medellín
(Antioquia), en la cual estaban Vicente y Carlos Castaño, estos le hicieron una propuesta
para que se vinculara con las autodefensas, porque tenían pensado incursionar en la
región de Urabá, ante lo cual alias “HH” dijo no tener conocimiento en el manejo de armas
o instrucción militar; sin embargo los Castaño le manifestaron que ese tipo de instrucción
lo brindaban ellos en escuelas destinadas para tal fin, que para ese entonces operaban en
el departamento de Córdoba, más exactamente en el caserío Villanueva.

7. En Villanueva (Córdoba) fue recibido por alias “Móvil 5”, días más tarde hicieron
presencia Carlos y Vicente Castaño, al igual que alias “Rodrigo Doble Cero”. Los primeros
días en ese campamento ubicado en la hacienda Las Tangas se utilizó por parte de alias
“Doble Cero” para interrogar a alias “HH” y a alias “El Flaco”, buscando información sobre
los movimientos, el modus operandi y los campamentos de los guerrilleros. Posteriormente
les invitaron a formar parte del proyecto paramilitar que se iba a implementar en Urabá,
así fue como HEBERT VELOZA se comunicó con su hermano José Barney y otras personas
más que se encontraban en los Llanos Orientales y les informaron de la posibilidad de
hacer parte de esa nueva estructura armada.

8. Luego de la convocatoria fueron trasladados a un predio denominado “La 35”


(ubicado en Valencia, Córdoba), donde quedaron bajo las órdenes de alias “JL”, el cual
para ese entonces era el instructor de esa escuela paramilitar, quien estaba acompañado
por alias “Doble Cero”. Según la manifestación de VELOZA, en total se “instruyeron” 20
hombres. Empezando el año 95, Vicente Castaño ordena a estos hombres trasladarse al
nuevo escenario de operaciones y es así como se constituye el primer grupo de la llamada
“Casa Castaño” que busca la entrada a sangre y fuego a Urabá3. Antes hacen una primera
incursión en la vereda “El Dos” (Turbo, Antioquia), en la cual se buscaba a dos presuntos

3
Ver: versión libre del postulado HÉBERT Veloza García, sesión del 29 de octubre de 2007, fiscalía 17 de Justicia y Paz.

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milicianos de la guerrilla, pero al no encontrarlos, por orden de alias “Gabriel” se queman


las casas y una tienda de abarrotes de los presuntos milicianos.

9. Luego de esta primera incursión alias “HH” es destinado como urbano del grupo,
posición en la cual desarrolló labores de “inteligencia”, recopilar información y confirmar
datos suministrados por diferentes personas respecto a miembros o colaboradores de las
guerrillas que operaban en la región, especialmente en los municipios de Turbo, Apartadó,
Carepa y Chigorodó.

10. Durante su actividad ilícita, HÉBERT VELOZA, utilizó las siguientes identidades
falsas:

 Miller Mora Marroquín, identificado con la cédula de ciudadanía número


86.035.578 de Amalfi (Antioquia);
 Jorge Adrian Arroyave Castro, identificado con la cédula de ciudadanía número
8.012.516; y
 Wilson Javier Delgado Banquéz, identificado con la cédula de ciudadanía número
7.563.896, ésta sí original.

11. En cumplimiento de la orden de captura No. 00652-72, proferida por la Fiscal 21 de


la Unidad de Derechos Humanos dentro del proceso radicado bajo el número 1015, en el
que se investiga el hecho conocido como “La Masacre de El Naya”, HÉBERT VELOZA, fue
capturado el 3 de abril de 2007, en la finca denominada “Arroyo de Mulato”, ubicada en la
vía que del corregimiento de Bolombolo conduce al Municipio de Tarso (Antioquia).

12. Tres meses después de su captura, la Embajada de los Estados Unidos de


Norteamérica en Colombia, mediante Nota Verbal No. 1925 del 9 de julio de 2007, solicitó
la detención provisional con fines de extradición de VELOZA GARCÍA, para que
compareciera en juicio por el delito de narcotráfico, principalmente.

13. El 31 de julio de 2008, la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia,


emitió concepto favorable -condicionado4- para la extradición del ciudadano HÉBERT
VELOZA. El 13 de agosto de 2008, el Gobierno Nacional, atendiendo las observaciones de

4
CSJ, concepto de extradición 28503 del 31 de julio de 2008, M.P. Dr. Javier Zapata Ortiz: “…Todo lo expresado obliga a la
Corte a considerar, en aras del imperio de la justicia nacional, el respeto de los compromisos internacionales del Estado en
materia de derechos humanos y la efectividad de los derechos fundamentales, que si en un supuesto concreto de
extradición se produce como consecuencia del mismo la violación de los derechos de las víctimas, el concepto deberá ser
emitido en forma negativa o si el mismo es de carácter favorable será condicionado para evitar el desamparo de quienes
han padecido las consecuencias de los delitos confesados por el desmovilizado-postulado, supuesto ineludible que de no
atenderse convertirá el concepto en negativo, con las respectivas consecuencias”

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la Corte, ordenó aplazar por 6 meses la extradición de VELOZA GARCÍA, para que pudiera
comparecer al proceso de Justicia y Paz.

14. Cumplido el plazo, el 5 de marzo de 2009, HÉBERT VELOZA GARCÍA fue


extraditado a los Estados Unidos de Norteamérica, y actualmente se encuentra recluido en
la Metropolitan Correctional Center de la ciudad de New York.

15. En la justicia ordinaria, de acuerdo con lo informado por la Fiscalía, VELOZA


GARCÍA, está vinculado en 222 investigaciones; tiene 42 sentencias condenatorias en su
contra; 42 procesos en sentencia anticipada; 38 medidas de aseguramiento, 9 procesos en
los que está pendiente de que se resuelva su situación jurídica; 7 procesos que se
encuentran en la etapa instructiva y esperando su vinculación; 3 procesos suspendidos y 1
proceso en el que fue absuelto, por hechos ocurridos el 19 de enero de 1996, en los que
resultaron víctimas los señores Alfredo Manuel Flórez García y Marcelino Blanquicet,
proceso en el que fue vinculado mucho antes de su desmovilización.

III. ANTECEDENTES PROCESALES

16. A través de la Resolución No. 233 del 3 de noviembre de 2004, el Gobierno


Nacional de la época reconoció la calidad de miembro representante de las Autodefensas
Unidas de Colombia (AUC) al señor HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias “HH”; comandante de
los Bloques Bananero y Calima, para efectos del proceso de desmovilización5. Mediante
Resoluciones Nos. 300, 128 y 343, fechadas el 14 de diciembre de 2004, 26 de enero y 19
de diciembre de 2005, se prorrogó su condición de miembro representante de las AUC,
cada una por 6 meses.

17. A través de la resolución 246 de 19 de noviembre de 2004, el Gobierno Nacional,


estableció como zona de ubicación temporal la finca “La Macarena”, en el corregimiento
“El Dos”, del municipio de Turbo, Departamento de Antioquia, con el propósito de
concentrar y desmovilizar a los integrantes del Bloque Bananero de las Autodefensas
Unidas de Colombia, por el término comprendido entre el 20 de noviembre y el 10 de
diciembre de 2004.

18. HÉBERT VELOZA GARCÍA, asumió como comandante del Bloque Bananero, a
mediados de 20046, se desmovilizó de forma colectiva, junto con otros 447 hombres que
integraban el Bloque, en el corregimiento “El Dos”, del municipio de Turbo, (Antioquia), el

5
Ver folio 3 carpetas anexa titula “requisitos de postulación a los beneficios de la Ley 975 de 2005.”
6
Cuando Raúl Emilio Hasbún Mendoza, quien fuera el comandante del frente “Árlex Hurtado” del Bloque Bananero
abandonó la zona días antes de la desmovilización.

6
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25 de noviembre de 2004; y manifestó su voluntad de someterse a la Ley 975 de 2005 el


2 de febrero de 2006 ante el Alto Comisionado para la Paz, comprometiéndose a cumplir
con los requisitos previstos en el artículo 10 ibídem.

19. De igual modo, para la desmovilización del Bloque Calima, con 564 integrantes, el
18 de diciembre de 2004, el Gobierno Nacional, expidió la Resolución 297 de 10 de
diciembre de 2004, en la que se fijó como zona de ubicación temporal, la finca “El jardín”
ubicada en el corregimiento de Galicia del municipio de Buga la Grande, departamento del
Valle del Cauca.

20. La lista de personas postuladas, dentro de la que se encuentra HÉBERT VELOZA,


fue remitida a la Fiscalía General de la Nación el 15 de agosto de 20067. A través de acta
de reparto No. 017 de 7 de septiembre de 2006, la Jefatura de la Unidad Nacional de
Fiscalías para la Justicia y la Paz asignó a la Fiscalía 17 Delegada las diligencias del señor
VELOZA GARCÍA; y mediante orden No. 01 de 30 de septiembre de 2006 se dispuso el
inicio del correspondiente trámite procesal.

21. A través de edicto emplazatorio fechado el 9 de abril de 2007, se convocó a las


víctimas del postulado y del grupo armado organizado al margen de la ley, Bloque
Bananero, de las extintas ACCU (o AUC)8, para que asistieran a las diferentes audiencias
de versión libre con el fin de ejercer sus derechos a la verdad, a la justicia y a la
reparación.

22. Habiendo ratificado el postulado su voluntad de comparecer al proceso de Justicia


y Paz, entre el 29 de octubre de 2007 y el 27 de febrero de 2009 9, se efectuaron 47
sesiones de versión libre, en las cuales confesó 347 hechos como comandante del Bloque
Bananero; 488 como comandante del Bloque Calima; enunció 1500 hechos cometidos por
los integrantes del Bloque Bananero y más de 2000 del Bloque Calima.

23. La primera audiencia de formulación de imputación parcial de cargos se llevó a


cabo ante el Magistrado de Control de Garantías del Tribunal Superior de Medellín, durante
los días 27, 28, 29 y 31 de octubre; 11, 12, 18 y 19 de noviembre de 2008, en la cual se
le imputaron 88 cargos y se le dictó medida de aseguramiento por los delitos de: (i)
concierto para delinquir agravado; (ii) fabricación, tráfico y porte de armas y municiones

7
Ver folio 2 y ss. carpeta anexa titula “requisitos de postulación a los beneficios de la Ley 975 de 2005.”
8
Se fijó el edicto emplazatorio por el término de 20 días en la Secretaria de la Unidad Nacional de Fiscalías para la Justicia y
la Paz, y se expidió copia para su publicación por dos veces en día domingo en un diario de amplia circulación nacional y en
radiodifusora con cobertura en las localidades del área de influencia del mencionado postulado, como también en la página
web: www.fiscalia.gov.co.
9
Fecha previa a su extradición a los Estados Unidos de Norteamérica, el 5 de marzo de 2009.

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de uso privativo de las fuerzas armadas; (iii) utilización ilegal de uniformes e insignias; (iv)
reclutamiento ilícito; (v) desaparición forzada; (vi) homicidios agravados, entre otros.
Posteriormente, los días 3, 4, 5, 6 y 7 de mayo, 17 y 21 de junio y 02, 23 y 24 de agosto
de 2010, tuvo lugar la audiencia de formulación de cargos.

24. Formulados los cargos en contra de HÉBERT VELOZA GARCÍA, en su condición de


comandante de los Bloques Bananero y Calima de las Autodefensas Unidas de Colombia
(AUC), la Sala de Conocimiento del Tribunal Superior de Bogotá convocó a audiencia para
el control de legalidad formal y material de las acusaciones, de conformidad con lo que
ordena el inciso 3º del artículo 19 de la Ley 975 de 2005.

25. La vista pública de control de legalidad10 tuvo lugar con la presencia de la Fiscal 17
de Justicia y Paz, el Delegado de la Procuraduría General de la Nación, los apoderados de
víctimas, el postulado y su defensor, en retransmisión desde su centro de reclusión en la
ciudad de New York (Estados Unidos de América).

26. El 31 de octubre de 2012, la Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bogotá,
profirió la decisión de control formal y material de legalidad de los cargos imputados de
forma parcial por la Fiscalía 17 de Justicia y Paz, en contra del postulado HÉBERT VELOZA
GARCÍA. En ese escenario hicieron presencia representantes de la Fiscalía General de la
Nación, Procuraduría General de la Nación, Defensoría del Pueblo (representantes de las
víctimas), abogados particulares en representación de víctimas, el apoderado del
postulado y el postulado en retransmisión desde su centro de reclusión en la ciudad de
New York (Estados Unidos de América). Los cargos se declararon legalizados y no se
presentaron recursos en contra de la decisión.

27. Durante los días 11, 13, 14 15, 18 y 19 de marzo y 25 de abril del presente año, la
Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bogotá, realizó la audiencia de incidente de
identificación de las afectaciones causadas a las víctimas por el accionar del Bloque
Bananero, de conformidad con lo establecido en el artículo 23 de la Ley 1592 de 2012, y
en aras de garantizarle a las víctimas las condiciones necesarias y adecuadas para que
participaran de forma activa en la audiencia de incidente de afectaciones y de ser
escuchadas, la Sala se trasladó al municipio de Apartadó durante los días 13 y 14 de
marzo de 2013.

10
Diligencia que se llevó a cabo los días 7, 8, 9, 10, 22, 23 y 24 de marzo; 5, 6, 7, 25, 26, 27 y 28 de abril; 16, 17, 24 y 23
de mayo; 6, 7, 8, 11, 12, 13, 14 y 19 de julio; 8, 9, y 10 de agosto del año 2010.

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IV. SITUACIÓN FÁCTICA Y CARGOS ATRIBUIDOS

28. En la decisión de control de legalidad la Sala narró las situaciones fácticas que
fueron expuestas por la Fiscalía General de la Nación, teniendo en cuenta las pruebas
documentales y testimoniales que fueron aportadas, así como las confesiones del postulado
en las diferentes sesiones de versión libre.

29. Sin embargo, la Fiscal Delegada, una vez finalizó la diligencia de audiencia de
control de legalidad y ante las confesiones hechas en diligencias de versión libre por otros
postulados del Bloque Bananero, que daban cuenta de la comisión de estas conductas y
con el fin de garantizarle a las víctimas el esclarecimiento de los hechos y la búsqueda de
la verdad, libró varias órdenes de policía judicial, con el fin de corroborar la información
obtenida en las versiones libres.

30. Estos informes de policía judicial fueron presentados en la audiencia de incidente de


identificación de las afectaciones causadas a las víctimas, y fueron revisados y analizados
por la Sala para precisar en algunos casos, la narración de los hechos que ahora son objeto
de sentencia.

31. Lo anterior no significa que se estén adicionando circunstancias a las situaciones


fácticas o nuevas calificaciones jurídicas a los cargos que ya fueron legalizados,
simplemente si se compara la narración de los hechos de la decisión de control de legalidad
con la de la sentencia, se advertirán algunas precisiones principalmente frente a las
personas que participaron en las comisión de las conductas punibles.

32. Al respecto la Corte Suprema de Justicia ha manifestado que:

“La pretensión del proceso es reconstruir, en lo posible de forma completa, hechos que
eventualmente se traduzcan en conductas jurídicamente relevantes para el derecho penal,
en orden a determinar si se descarta o se confirma la vigencia de la acción punitiva.

El proceso penal así concebido brinda un abanico infinito de posibilidades en punto de los
caminos que puede experimentar hasta llegar a su conclusión por las distintas vías que
ofrece la legislación procedimental, de modo que ese amplio espectro de posibilidades de
por sí representa un reto mayúsculo frente a las garantías debidas a las partes en
desarrollo de las distintas fases, pues entran a jugar un papel protagónico cada vez que se
produzcan las actuaciones judiciales.

Las particularidades de cada caso serán entonces la base para determinar los derroteros
frente a las garantías debidas y no a la inversa, pues en la investigación penal lo que es
posible gobernar y controlar son los actos de las partes y las actuaciones judiciales, mas no
ese pasado que ahora se aspira a recoger con los elementos de persuasión, entre otras
cosas, porque las limitaciones humanas y tecnológicas a menudo impiden hacerlo
completamente y en forma inmediata.

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Como la reconstrucción de los hechos es por excelencia paulatina y a medida que ello
sucede igualmente avanza el proceso, todo lo cual, en principio, se produce de manera
simultánea, no obstante ello no siempre es posible y por tanto y en general, la
recuperación de las fuentes de información a través de las cuales se conocen los hechos
pueden estar rezagadas de las condiciones jurídicas que ofrece el proceso.” 11

Hecho 1: concierto para delinquir.

33. HÉBERT VELOZA GARCÍA, se vinculó con el grupo armado ilegal, en el


corregimiento de Villanueva de Valencia (Córdoba), a finales de 1994, recibió
entrenamiento militar en las fincas conocidas como “La 35”, ubicada entre los
corregimientos El Tomate y San Pablo, en Antioquia, y “Jaraguay”, ubicada en el municipio
de Valencia (Córdoba). En febrero de 1995, en la vereda El Limón del municipio de Turbo
(Antioquia), los hermanos Castaño Gil, conformaron un grupo de 20 personas, que operó
de forma transitoria en los municipios de Turbo, Apartadó, Chigorodó y Carepa, ubicados
en el Urabá Antioqueño, y de manera permanente se ubicó en la vereda Monteverde
(Turbo, Antioquia).

34. Dicho grupo, denominado “Los Escorpiones”, estuvo comandado por Iván Darío
Ramírez Serna alias “Gabriel e Iván Álvarez” y Juan Bautista Mesa Henao, alias “Estopín”,
quien fungió como comandante militar. Además, hicieron parte de este grupo Lorenzo
Córdoba Álvarez, alias “Barbas”; Enrique Mestra Yáñez, alias “Wilson”; Jesús Albeiro Guisao
Arias, alias “El Tigre”; José Luis Negrete Hernández, alias “Caimán”; Wilmer Aguado
Álvarez, alias “Carroloco”; José Ruperto Quiroga, alias “El Gato”; Rubén de Jesús Taborda
Meneses, alias ”Escudero”; José Uber Coca Ceballos, alias “Uber Coca”; Román de Jesús
Taborda Meneses, alias “Escudero”; Forferinzo Flórez Arizal, alias “Montador”; Ramiro
Antonio Caro Durango, alias “Burro Cuadrado”; Gregorio Antonio Oviedo, alias “Tribilín”;
Hernán Alberto Bertel Hernández, alias “El Llanero”; Manuel María Correa Gómez, alias
“Negro Fino” también hicieron parte de este grupo alias “Olafo”, “Gata Ciega”, “El Bola”,
12
“Chéchere”, José Barney Veloza García, alias “El Flaco” (hermano de alias “HH”), y el
mismo HÉBERT VELOZA, que cumplió labores de patrullero. El material de intendencia y de
guerra para este grupo fue financiado por la denominada Casa Castaño.

35. A mediados del año 1995, quienes tenían el mando de “Los Escorpiones” decidieron
hacer sus primeras incursiones en la zona urbana, específicamente en el Municipio de
Turbo, para lo cual conformaron un sub grupo al mando de alias “Gabriel”, integrado por 7
hombres que se desempeñaron como patrulleros, entre ellos HÉBERT VELOZA, que para
esa época era conocido con el alias de “Mono Veloza”. Posteriormente, Carlos Mauricio

11
Sala de Casación Penal, CSJ, Segunda instancia del 14 de agosto de 2013, M.P. Luís Guillermo Salazar Otero, control de
legalidad RAMÓN MARÍA ISAZA ARANGO y otros.
12
Condenado por la Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bogotá el 31 de enero de 2012. MP. Dra. Uldi Teresa
Jiménez López.

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García Fernández, alias “Rodrigo Doble Cero”, quien se desempeñaba como comandante
militar de las ACCU, lo designó como comandante de los urbanos en remplazo de alias
“Gabriel”.

36. Durante el primer semestre del año 1996, Vicente Castaño, dividió la zona del Urabá
Antioqueño, en dos frentes, el primero conocido como el “Frente Turbo”, ratificando como
su comandante a HÉBERT VELOZA GARCÍA; y el segundo, el “Frente Pedro Hasbún”,
comandado por Raúl Emilio Hasbún Mendoza; ambos frentes conformaron el Bloque
Bananero13, estructura que se mantuvo así hasta su desmovilización el 25 de noviembre de
2004. El frente comandado por Raúl Emilio Hasbún Mendoza, se desmovilizó
posteriormente como frente “Árlex Hurtado”.

37. Durante los primeros meses del año 2000, las Autodefensas Campesinas de
Córdoba y Urabá (ACCU), empezaron su proceso de expansión en el departamento del
Valle del Cauca; fue así como HÉBERT VELOZA GARCÍA, conocido para esta época con el
alias de “Hernán Hernández”, asumió como comandante del Bloque Calima, el cual estaba
conformado por los frentes Calarcá14, Calima15, La Buitrera16 y Pacífico17. Además, se creó
un grupo denominado “Kilometro 18”18 y el frente “Farallones” en el departamento del
Cauca. Seis meses antes de la desmovilización del bloque Calima, el 18 de diciembre de
2004, se conformó el frente “San José de Itsnos” en el departamento del Huila.

38. En conclusión, desde su ingreso al grupo armado ilegal, a finales del año 1994,
HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias “HH”, se desempeñó como patrullero rural y urbano, hasta
el segundo semestre del año 1995, cuando fue designado por alias “Rodrigo Doble Cero”
como comandante de los grupos urbanos; a mediados del año 1996, fue nombrado como
comandante del frente Turbo, y para el momento de la desmovilización del Bloque
Bananero, asumió como comandante de éste. Desde el mes de julio de 2000, cuando fue
designado por Vicente Castaño, se desempeñó como comandante del Bloque Calima, hasta
el momento de su desmovilización.

Hecho 2: porte ilegal de armas de uso personal y de uso privativo de la Fuerzas


Militares

39. La Fiscalía 17 de Justicia y Paz manifestó en audiencia de control de legalidad que


HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias “HH” cometió el delito de concierto para delinquir

13
Según la información manifestada por el postulado HEBERT VELOZA, la denominación de Bloque Bananero fue impuesta
para el proceso de desmovilización, pues antes no le correspondía nombre alguno.
14
Comandado por Juan Carlos Martín.
15
Comandantes: Julián, Giovanny y Camilo.
16
Comandantes: Ramiro y Giovanny.
17
Comandante: Alex o el fino
18
Comandante: Diego la marrana.

11
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

agravado en concurso heterogéneo y sucesivo con los delitos de porte ilegal de armas de
uso personal y de uso privativo de la Fuerzas Militares, así como con el delito de utilización
ilegal de uniformes e insignias, pues como comandante de una estructura de los
paramilitares, adquirió y portó de forma ilegal armas de corto y largo alcance, al igual que
los hombres bajo su mando. Durante la desmovilización de los Bloques Bananero y Calima,
éstos entregaron gran cantidad de material bélico, como por ejemplo 383 granadas, 627
fusiles, 142 armas cortas y 33 de apoyo, etc.

40. Sumado a lo anterior, la Fiscalía pudo comprobar que durante su militancia en el


grupo organizado al margen de la ley, HÉBERT VELOZA GARCÍA utilizó uniformes de uso
privativo de las Fuerzas Militares, entre ellos el camuflado, los cuales en su mayoría fueron
adquiridos con el propio personal orgánico de las Fuerzas Militares19.

41. En el presente asunto, la Fiscal 17 Delegada ante la Unidad de Justicia y Paz,


formuló cargos en contra de HÉBERT VELOZA GARCÍA, por el delito de concierto para
delinquir agravado, conforme al artículo 340 incisos 2 y 3, a título de coautor propio,
conducta que encuentra fundamento en las pruebas documentales presentadas por el
ente acusador, así como en la confesión del mismo VELOZA GARCÍA.

42. Pero, como el 24 de abril de 2008, el Juzgado Segundo Penal del Circuito
Especializado de Descongestión (OIT) de la ciudad de Bogotá, condenó anticipadamente a
VELOZA GARCÍA, “… a la pena principal de trescientos nueve meses de prisión y multa de
cinco mil ochocientos ochenta salarios mínimos legales mensuales, como determinador de
los delitos de homicidio agravado en concurso heterogéneo con secuestro agravado y
concierto para delinquir agravado…”, la Sala delimitó en la decisión de control de legalidad
el tiempo por el cual se legalizó el delito de concierto para delinquir agravado, así:

Grado de participación y adecuación típica20:

Delito Título Tiempo de Ejecución


Concierto para delinquir agravado, art. Autor Octubre de 199421 hasta el 28 de junio
340 incisos 2 y 3. de 2000.
Utilización ilegal de uniformes e Autor Octubre de 1994 al 25 de noviembre de
insignias art. 346. 2004 (fecha de la desmovilización).

43. En cuanto a los delitos de fabricación tráfico y porte de armas de fuego o


municiones artículos 365 y 366 del Código Penal, la Sala siguiendo los lineamientos de la

19
Diligencia de versión libre del 6 de marzo de 2008, hora: 10:14 a.m.
20
Decisión del 31 de octubre de 2012.
21
Fecha de su vinculación a las AUC.

12
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Corte Suprema de Justicia22, en los cuales afirma que el delito de concierto para delinquir
agravado (art. 340 inciso 2), subsume estas conductas, no legalizó estos cargos y aplicó la
figura de la subsunción23.

1. Hechos cometidos bajo la vigencia del Decreto Ley 100 de 1980

Hecho 3: homicidio en persona protegida en concurso24

44. A través del análisis de las pruebas aportadas al proceso, la Fiscalía reveló que el
16 de diciembre de 1995, en la vereda La Arenera del corregimiento Currulao de Turbo
(Antioquia), los señores Leonel de Jesús Durango, Argemiro López Drago, Alcides Torres
Arias y Ángel David Quintero Benítez se movilizaban en dos motocicletas, cuando fueron
detenidos por integrantes del Batallón Vélez adscrita a la XVII Brigada del Ejército
Nacional, asentada en el municipio de Carepa (Antioquia). Los militares condujeron a las
cuatro personas detenidas hasta las instalaciones de esa guarnición militar y “legalizaron”
las capturas, con base en la declaración rendida por Ricardo López Lora, quien en calidad
de informante dijo conocer de las presuntas actividades ilícitas de dos de los detenidos.

45. Durante los días 17, 18 y 19 de diciembre de 1995, los familiares de Alcides Torres
Arias y Ángel David Quintero Benítez se acercaron a las instalaciones de la Brigada XVII,
con el objetivo de visitarlos, llevarles ropa y alimentos. Regresaron el día 20 de diciembre;
después de esperar durante varias horas, miembros de la Brigada les informaron que
Torres y Quintero habían sido puestos en libertad. Sin embargo, testigos informaron a sus
familiares que presenciaron cuando el señor Ricardo López Lora, alias “Robert” –conocido
en la zona por su presunta pertenencia a grupos paramilitares– los había sacado en la
parte de atrás de un jeep rojo del edificio de la Brigada XVII.

46. En el mismo sentido, el señor Ramón Rodríguez, suegro de Alcides Torres Arias,
manifestó que vio a su yerno el día 20 de diciembre, en horas de la tarde, a la entrada del
hotel “El Descanso” de Chigorodó, dentro de un jeep rojo, y que Torres mostraba signos
de haber sido golpeado y se encontraba ensangrentado. Respecto del señor Ángel David

22
Segunda instancia rad. 36563 del 3 de agosto de 2011, M.P. Dr. José Luís Barceló Camacho. Posición fue ratificada por el
alto Tribunal en decisión el 31 de agosto de 2011, rad. 36125 M.P. Dr. Sigifredo Espinosa Pérez.
23
“El concierto para delinquir cargado en contra de los postulados al trámite y beneficios de la Ley 975 del 2004, (sic) parte
del presupuesto necesario de la conformación o pertenencia a grupos armados ilegales.
Los delitos contra personas y bienes protegidos por el DIH, tienen como elemento estructurante indispensable que las
conductas se realicen “con ocasión y en desarrollo de conflicto armado”.
En esas condiciones, no admite discusión que la persona se encuentra vinculada al trámite de justicia y paz, en razón de que
necesariamente hizo parte de un grupo armado ilegal. Por tanto, el empleo de armas de fuego se convierte en un elemento
de los tipos penales imputables, desde donde surge que tal conducta no puede ser cargada de manera independiente, pues
ella se subsume dentro de aquellas que hicieron viable la vinculación al procedimiento de la Ley 975 del 2005.”(Segunda
instancia rad. 36563 del 3 de agosto de 2011, M.P. Dr. José Luís Barceló Camacho.)
24
La Sala hará referencia a la tipificación principal realizada por la fiscalía, pero se aclara que generalmente se está en
presencia de un concurso.

13
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Quintero Benítez, se dijo que varias personas presenciaron cuando éste escapó del
vehículo (jeep rojo) y fue recapturado por presuntos miembros de las AUC que se
movilizaban en una camioneta. Desde este momento no se conoce sobre el paradero de
estas personas.

47. Por este hecho el Estado Colombiano se encuentra demandado ante la Corte
Interamericana de Derechos Humanos25. La situación fáctica descrita anteriormente fue
confesada por HÉBERT VELOZA en sesión de versión libre del 4 de agosto de 2008. El
postulado manifestó que tuvo participación directa en la retención y posterior desaparición
de los señores Alcides Torres Arias y Ángel David Quintero Benítez, a quienes sacaron de
un calabozo de la sede de la Brigada XVII en Carepa (Antioquia). El postulado también
expresó que en la comisión de los hechos participaron otros cuatro paramilitares más,
además de algunos miembros orgánicos de la Brigada XVII del Ejército, oficiales del Gaula
de Cali y un funcionario judicial. Según alias “HH”26, Torres y Quintero fueron sacados de
la Brigada XVII en un Trooper rojo carpado y trasladados a Turbo; en el trayecto el señor
David Quintero intentó fugarse a la altura de Currulao, donde después de ser perseguido,
fue capturado nuevamente y continuaron con el traslado de los mismos hasta Turbo y
para ser finalmente llevados en avioneta al puerto de Buenaventura (Valle del Cauca),
donde fueron torturados para que informaran sobre el paradero de una mujer que
supuestamente habían secuestrado; el mismo versionado afirmó que los dos hombres
quedaron con vida bajo la custodia de los oficiales del Gaula de Cali (Valle), dijo
finalmente que desconoce la suerte que hayan podido correr o la ubicación de estas
personas.

48. En las sesiones de versión libre del 29 y 31 de octubre, del 27 de noviembre de


2007, el postulado manifestó que el móvil de la retención y posterior desaparición de los
señores Torres27 y Quintero fue el haber sido señalados como los responsables del
secuestro de la esposa del señor Siliano Valentierra, persona conocida en la región por
desempeñarse como comerciante de maderas.

25
Ver: Alcides Torres Arias v. Colombia, Caso 0597/2000, Informe No. 6/03, Inter-Am. C.H.R., OEA/Ser./L/V/II.118 Doc. 70
rev. 2 en 252 (2003), en: http://www1.umn.edu/humanrts/cases/S6-03.html, consultada el 13 de agosto de 2013. Por su
participación en el secuestro de los presuntos subversivos Alcides Torres Arias y Ángel David Quintero Benitez, el Juzgado
Primero Penal Adjunto del Circuito Especializado de Antioquia condenó al sargento primero del Ejército Nacional, Héctor
Julio Vanegas Ruiz, a 10 años y cinco meses de prisión. La Fiscalía estableció que el 20 de diciembre de 1995 las víctimas
fueron sacadas de la sede de la Brigada XVII del Ejército Nacional en el municipio de Carepa (Antioquia), por integrantes de
las autodefensas con la ayuda de varios militares, y que desde entonces se desconoce su paradero. Los investigadores
también confirmaron que dos días antes del plagio Torres Arias y Quintero Benítez habían sido capturados en el
corregimiento Currulao, municipio de Turbo, señalados de integrar, supuestamente, el Frente 57 de las Farc. Por los mismos
hechos ya purgan condenas el ex cabecilla paramilitar Ricardo López Lopez Lora, 20 años de prisión; y los suboficiales (r) del
Ejército Nacional, Belkis Margarita Villarruel Molina y Héctor Gutiérrez Vélez, 14 y 25 años de prisión, respectivamente.
26
Versiones libres rendidas por HÉBERT VELOZA, los días 31 de octubre y 26 de noviembre de 2007. Ver también informe
de policía Judicial FPJ 11 N° 232 OT 263 de 13 de junio de 2011.
27
El postulado HÉBERT VELOZA señaló al señor Alcides Torres Arias de ser el comandante de las milicias de Frente V de la
FARC en Currulao. Ver versión libre rendida por el postulado el día 27 de noviembre de 2007.

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49. Por este hecho se adelantó investigación en la Unidad Nacional de Derechos


Humanos de la FGN, a la cual fue vinculado Ricardo López Lora, quien resultó condenado.
La investigación contra otros partícipes en el hecho se encontraba en etapa preliminar en
la Fiscalía 37 de la Unidad Nacional de DH y DIH, la cual se reactivó luego de la confesión
que HÉBERT VELOZA hiciera dentro del proceso de Justicia y Paz. En este proceso se
dispuso la vinculación de VELOZA GARCÍA, quien fue escuchado en indagatoria y a quien,
después de realizada ésta, se le impuso medida de aseguramiento por el delito de
secuestro simple.

50. Además de reconocer su participación en la comisión de los hechos, HÉBERT


VELOZA GARCÍA señaló que también participaron otros cinco paramilitares: Wilmer
Aguado Álvarez, alias ‘Carroloco’, Luis Enrique Mestra Yáñez, alias ‘Wilson’, Uber Coca,
alias ‘Uber’, José Ruperto García Quiroga, alias ‘El Gato’, y Ricardo López Lora, alias ‘La
Marrana’28.

Víctimas Alcides Torres Arias y Ángel David Quintero Benítez.


Elementos materiales de -Informe 4284 del 16 de diciembre de 1995, mediante el que
prueba el comandante del Batallón de Infantería Nº 47 Francisco de
Paula Vélez, teniente coronel Eduardo León Figueroa
Cifuentes, dejó a disposición de la Fiscalía General de la
Nación, Regional Carepa (Antioquia), a los señores Leonel de
Jesús Durango, Argemiro López Drago, Alcides Torres Arias y
Ángel David Quintero Benítez.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 1189
adelantado en la Unidad de Derechos Humanos y DIH de la
Fiscalía 37 de Medellín.
-Resolución del 20 de diciembre de 2005, proceso rad. 246, la
Fiscalía Regional de Carepa, ordenó la libertad inmediata e
incondicional de los señores Alcides Torres Arias y Ángel David
Quintero Benítez.
-Declaración del señor Alcides Torres Arias, el 20 de diciembre
de 1995 ante la Fiscalía Regional de Carepa (Antioquia).
-Manuscrito presentado por los señores Leonel de Jesús
Durango, y Argemiro López Drago, del 15 de septiembre de
1996, en el cual solicitaron la libertad, y manifestaron haber
estado detenidos en la misma celda con los señores Alcides
Torres Arias y Ángel David Quintero Benítez.
- Declaración del señor Ángel David Quintero Benítez, el 20 de
diciembre de 1995 ante la Fiscalía Regional de Carepa
(Antioquia).
-Fotocopia del libro de minuta de la XVII Brigada del Ejército
Nacional, en la cual se informa que los señores Alcides Torres
Arias y Ángel David Quintero Benítez fueron dejados en
libertad, por orden de la Fiscalía Regional de Carepa.
-Declaración de la señora Nelcy Torres Arias, hermana del
señor Alcides Torres Arias, el 16 de agosto de 2002, ante un
Fiscal Especializado de la ciudad de Medellín.
-Declaración del señor Argemiro López Bravo, el 1 de octubre
de 2002 ante la Unidad 3º Derechos Humanos y Derecho
Internacional Humanitario de Medellín.

28
Ver Transcripción de versión libre rendida por HÉBERT VELOZA GARCÍA, 26 de noviembre de 2007, pág. 7 (minuto: 10.28
y ss.). El extracto aparece citado en Informe de Policía Judicial 232 OT 263, Medellín, 13 de junio de 2011, 17 páginas.

15
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

-Entrevista a la señora Consuelo Rodríguez Peña, compañera


del señor Alcides Torres Arias, el 13 de octubre de 2008.
-Indagatoria rendida por HÉBERT Veloza García el 13 de julio
de 2008, ante la Fiscalía 37 de la Unidad de DH y DIH de la
Fiscalía General de la Nación, proceso rad. 1189.
-Informe 009 del 21 de enero de 2009.
-Entrevista a la señora Blanca Yaneth Graciano Acevedo,
compañera del señor Ángel David Quintero Benítez, el 31 de
marzo de 2009.
-Informe de Policía Judicial No. 071 del 21 de abril de 2009.
-Clip de versión libre rendida por Ricardo López Lora, el 29 de
agosto de 2009, en el que confiesa su participación en los
hechos ocurridos el 20 de diciembre de 1995.
-Informe de Policía Judicial 232 OT 263 del 20 de junio de
2011.

Grado de participación y adecuación típica29:

Delitos Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor
Desaparición forzada art. 165. Coautor
Tortura en persona protegida art. 137. Coautor

Hecho 4: homicidio en persona protegida

51. El 14 de febrero de 1995, a las 10:30 am, hombres armados dispararon causándole
la muerte al señor Ivo de Jesús Hernández Muñoz. La víctima acababa de salir de una de
las prenderías de su propiedad, la que lleva por nombre “Almacén de bicicletas”, ubicada
en la carrera 50 No. 49 B -72 (esquina), barrio El Jardín, diagonal a la inspección de policía
del corregimiento de Currulao de Turbo30 (Antioquia).

52. De acuerdo con la entrevista presentada el 7 de marzo de 2008 por uno de los
hijos de la víctima, el señor Farley Alberto Hernández Lopera, su padre “… salió y como
que lo estaban esperando porque lo asesinaron pasando la esquina; el motivo fue el no
pagar una extorsión de la cual era objeto, porque los paramilitares, al que le pedían plata
y no la daba, simplemente lo iban matando…”31. El señor Hernández Lopera manifestó que
no supo de testigos del hecho, pues entonces “nadie decía nada por miedo”32.

53. Este hecho fue confesado por el postulado HÉBERT VELOZA durante las diligencias
de versión libre realizadas el 27 de noviembre de 2007 y el 27 de marzo de 2008. El
postulado se refirió a la víctima como “un señor que tenía prenderías (…) en Currulao y

29
Decisión del 31 de octubre de 2012.
30
El señor Hernández Muñoz también era propietario de otras dos prenderías: “La Única” y “Casita de Bebé”. Ver Informe de
Policía Judicial 317 OT 333, Medellín, 20 de junio de 2011, pág. 2 (archivo de la FGN: “Evidencia física y elementos
materiales de prueba” correspondientes al hecho 4). En este informe se advierte que el señor Hernández Lopera declaró el 7
de noviembre de 2006 que su padre “se movilizaba para donde un amigo”. Ibídem.
31
Ver Informe 0106 de UNJYP sobre verificación de hecho confesado por HÉBERT VELOZA GARCÍA, Medellín, 24 de marzo
de 2008, pág. 2 (archivo de la FGN: “Evidencia física y elementos materiales de prueba” correspondientes al hecho 4).
32
Ibídem.

16
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almacenes”. También manifestó: “no recuerdo quienes cometieron el hecho, pero yo lo


había ordenado”33.

Víctima Ivo de Jesús Hernández Muñoz


Elementos materiales de -Acta de necropsia 95-033 suscrita por el médico legista del
prueba hospital de San José de Turbo el 14 de febrero de 1995, en la
que se concluyó que la causa de la muerte fue “choque
traumático, heridas viscerales múltiples producidas por
proyectil de arma de fuego”.
-Certificado de defunción expedido el 8 de marzo de 1995 por
la Notaría Única del Circuito de Turbo.
-Unidad Nacional de Justicia y Paz de la FGN, Formato único
de entrevista: Farley Alberto Hernández Lopera, Apartadó, 26
de febrero de 2006.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 014. Inspección judicial al
proceso radicado bajo el número 1988, adelantado por la
Fiscal 80 Seccional de Turbo por la muerte del señor
Hernández Muñoz, Medellín, 25 de enero de 2009.
-Informe de Policía Judicial FPJ 11 037. Labores de verificación
de los hechos confesados por el postulado, Apartadó, 8 de
marzo de 1995.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 317 OT 333. Inspección
judicial al radicado 1988, Medellín, 20 de junio de 2011.

Grado de participación y adecuación típica34:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador

Hecho 5: homicidio en persona protegida

54. Según lo expuso la Fiscalía 17 de Justicia y Paz, el 8 de marzo de 1995 el señor


Gonzalo Antonio Ríos Salinas se encontraba en un expendio de carnes de su propiedad,
ubicado en el sitio conocido como “El Caney” del corregimiento El Tres de Turbo
(Antioquia), cuando fue atacado con armas de fuego por varios “sujetos vestidos de
azul”35.

55. El postulado confesó haberle ordenado la comisión del homicidio del señor Ríos
Salinas a Enrique Mestra Yáñez, alias “Wilson”, y a Wilmer Aguado Álvarez, alias “Carro
Loco”, pues era “un reconocido miembro de las milicias de las Farc en esa zona”36.

33
Ver Transcripción de versión libre rendida por HÉBERT VELOZA GARCÍA, 27 de marzo de 2008, pág. 2 (hora: 9.40 y ss.).
El extracto aparece citado en Informe de Policía Judicial 317 OT 333, Medellín, 20 de junio de 2011, pág. 2.
34
Decisión del 31 de octubre de 2012.
35
En un informe de policía judicial se lee: “Dentro de las diligencias se entrevistó en repetidas ocasiones a la señor Ana del
Carmen García Blandón (…), esposa del hoy occiso, quien indica que su esposo fue asesinado por unos sujetos vestidos de
azul”. Según la inspección judicial del radicado adelantado en la Fiscalía Seccional de Turbo, el asesinato del señor
Hernández Muñoz fue perpetrado “por miembros de los Comandos Populares, que hacían parte de las autodefensas”. Con
base en esas informaciones, el investigador judicial concluyó: ”Por labores realizadas por miembros de la policía judicial, y lo
comentado por el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA en repetidas versiones, se puede concluir que los miembros de los
Comandos Populares para la época efectivamente se vestían de azul”. Informe de Policía Judicial 015, Medellín, 26 de enero
de 2009, pág. 2 (archivo de la FGN: “Evidencia física y elementos materiales de prueba” correspondientes al hecho 5).
36
Ver Transcripción de versión libre rendida por HÉBERT VELOZA GARCÍA, 26 de noviembre de 2007, pág. 30 (hora:
2:50:02). El postulado confesó inicialmente el asesinato de Ríos Salinas en esta versión. Posteriormente, se refirió al
homicidio durante las sesiones de versión libre realizadas el 27 de marzo y el 9 de julio de 2008, reiterando la pertenencia
de la víctima a las milicias de las Farc. Los extractos de éstas aparecen citadas en Informe de Policía Judicial 249 OT 265,
Medellín, 7 de julio de 2011, pág. 2.

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Víctima Gonzalo Antonio Ríos Salinas


Elementos materiales de -Acta de necropsia 95-047 suscrita por el médico legista del
prueba Instituto Nacional de Medicina Legal de Turbo el 8 de marzo
de 1995, en la que se indica que la víctima murió a
consecuencia de las heridas producidas por cinco impactos de
proyectil de arma de fuego.
-Unidad Nacional de Justicia y Paz de la FGN, Registro único
de entrevista: Ana del Carmen García Blandón (esposa del
señor Ríos Salinas), Medellín, 10 de octubre de 2008.
- CTI de la FGN, Entrevista realizada a la señora Ana del
Carmen García Blandón, Medellín, 10 de julio de 2009.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 015. Inspección judicial
realizada al proceso radicado bajo el número 2030, adelantado
por la Fiscal 83 Seccional de Turbo, Medellín, 26 de enero de
2009.
-La investigación previa 2030, adelantada por la Fiscal 83
Seccional, fue suspendida el 26 de octubre de 1995.

56. Por estos hechos HÉBERT VELOZA GARCÍA se encuentra condenado por el Juzgado
Primero Penal del Circuito Especializado de Antioquia37.

Hecho 6: homicidio en persona protegida

57. El barrio Julia Orozco es un barrio que comenzó como invasión en Turbo, ubicado
sobre la vía que conduce de este municipio a Apartadó. El postulado se refirió a este
barrio en relación con los asesinatos del señor Rubén Darío Lora y la joven Martha Luz
Echavarría Palencia y otros hechos criminales, en los siguientes términos38:

“Se inició como un barrio de invasión, en donde por lo regular vivían o residían miembros
del EPL [Ejército Popular de Liberación]. Esta invasión fue liderada por el EPL y por eso [se
presentó] una serie de sucesos en ese barrio, ya que ahí por lo regular vivían o
permanecían miembros de la milicia del EPL. Y nosotros generalmente, yo personalmente
he entrado muchas veces en los carros que he mencionado varias veces a ese barrio a
hacer incursiones y a asesinar gente en ese sector. […].
“[…] siempre incursionábamos a ese sector, siempre incursionábamos los mismos que nos
manteníamos en Turbo, que eran ‘Wilson’, ‘El Gato’, ‘Uber’, ‘Carro Loco’ y yo”39.

58. En ese contexto, la Fiscalía 17 de Justicia y Paz estableció que el 13 de marzo de


1995, en horas de la noche, el señor Rubén Darío Lora y la joven Martha Echavarría
Palencia (17 años de edad), se encontraban en su residencia, ubicada en la calle 115 del
barrio Julia Orozco de Turbo (Antioquia), cuando HÉBERT VELOZA GARCÍA, junto a
Enrique Mestra Yáñez, alias “Wilson”, José Ruperto García, alias “El Gato”, Wilmer Aguado
Álvarez, alias “Carro Loco”, y José Uber Coca Ceballos, alias “Uber”, ingresaron a la

37
Ver Rad. 1010-00065. El postulado VELOZA GARCÍA fue condenado por la muerte de Gonzalo Antonio Ríos Salinas a la
pena de 150 meses de prisión por el delito de homicidio agravado.
38
En el registro de defunción aparece Chavarría. Sin embargo, la cuñada de Rubén Darío (Ebis Enith Vásquez Duarte)
manifestó: “Martha Echavarría no tuvo más hijos solamente a Martha Julio Echavarría quien vive con nosotros. Quiero decir
que en [el] expediente que está en la Fiscalía se equivocaron con el apellido de Martha por que (sic) aparece como Chaverra
y no como Echavarría a pesar [de] que los documentos como el registro civil de Martha y demás tienen el apellido
Echavarría”. Declaración del 5 de febrero de 2010 (Policía Judicial).
39
Transcripción de versión libre rendida por HÉBERT VELOZA GARCÍA, 27 de noviembre de 2007, pág. 9 (hora: 10:21:56 y
10:25:09).

18
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

vivienda y los asesinaron con arma corto contundente40 (machete). La hija de la pareja,
que para esa época contaba con 18 meses de edad [la ex cuñada de Martha dice que 14
meses de edad], fue dejada sobre la cama, al lado de los cuerpos41.

Víctimas Rubén Darío Lora Díaz y Martha Luz Echavarría Palencia.


Elementos materiales de Martha Luz Echavarría Palencia (17 años de edad):
prueba -Registro de defunción No. 1223654 expedido el 21 de marzo
de 1995 por la Notaría Única del Círculo de Turbo.
-CTI de la FGN, Entrevista realizada a la señora Ebis Enith
Vásquez Duarte (hermana del padre del hijo de la joven
Martha Luz), Medellín, 5 de febrero de 2010.
Rubén Darío Lora Díaz (28 años de edad):
-Acta de necropsia 95-053 suscrita por el médico legista del
Instituto Nacional de Medicina Legal de Turbo el 13 de marzo
de 1995, en la que se concluyó que la muerte fue
consecuencia de ”heridas por arma corto punzante, de
naturaleza esencialmente mortal”.
-CTI de la FGN (FPJ 14), Entrevista realizada a la señora
Carmen Elena Lora Díaz (madre del señor Lora Díaz),
Apartadó, 21 de marzo de 2009.
-Registro de Defunción No. 1223652 expedido el 21 de marzo
de 1995 por la Notaría Única del Círculo de Turbo.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 016. Inspección judicial al
proceso radicado 2033 adelantado por la Fiscalía 83 Seccional
de Turbo, Medellín, 26 de enero de 2009.
-La investigación previa 2030, adelantada por la Fiscal 83
Seccional, fue suspendida.

Grado de participación y adecuación típica42:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor

Hecho 7: homicidio en persona protegida

59. Este hecho se refiere al homicidio de Jaime Iván Holguín Oquendo, ocurrido el 24
de marzo de 1995. Siguiendo el material probatorio recopilado por la Fiscalía 17 y por
declaraciones rendidas por la esposa43 y por la madre44 del occiso, se ha podido establecer
que en la fecha mencionada, en el corregimiento de “El Tres”, vereda “La Esperanza” del

40
Al respecto, la señora Ebis Enith Vásquez, la cuñada de la joven Martha Echavarría, declaró: “Los vecinos de Martha
fueron los que sacaron [a] la niña. Ahí fue cuando los vecinos se dieron cuenta [de] que habían (sic) dos muertos. Entraron
empujando la ventana. Vieron que estaba muerta (sic) Marta Echavarría y Rubén Darío Lora tendidos al pie de la cama de la
niña. Él tenía un machete y ella una daga, como puestos así. La gente comentaba que era pelea de ellos”. Policía Judicial,
Entrevista a Ebis Enith Vásquez Duarte, Medellín, 5 de febrero de 2010, pág. 2 (archivo de la FGN: “Evidencia física y
elementos materiales de prueba” correspondientes al hecho 6).
41
Ver Informe de Policía Judicial 249 OT 266, Medellín, 20 de junio de 2011, pág. 3. Además de que en este informe se
incluyen los extractos de las versiones libres rendidas por el postulado el 27 de noviembre de 2007, el 27 de marzo y el 9 de
julio de 2008, se hace alusión a las entrevistas tomadas por personal de Justicia y Paz a la señora Carmen Elena Díaz, madre
del señor Rubén Darío Lora, y a la señora Ebis Enith Vásquez Duarte, cuñada del padre de la hija de la joven Martha
Echavarría, señor José María Julio Duarte.
42
Decisión del 31 de octubre de 2012.
43
La señora Margarita Maria Taborda Rico, cónyuge de la víctima, manifiestó que para la fecha de los hechos, ellos vivían en
la finca “Villa Amparo” en la vereda la Esperanza de Turbo Antioquia, que al lugar llegó un grupo armado, sacaron a su
cónyuge de la casa y como no se dejo amarrar para llevárselo, lo mataron en el corredor de la casa.
44
La señora Maria del Carmen Oquendo de Holguin, madre de la víctima manifiestó que para la fecha de los hechos ella
vivía con su cónyuge en la finca El Prado ubicada en la vereda la Esperanza de Turbo Antioquia y que su hijo JAIME IVAN
HOLGUIN OQUENDO vivía en la finca Villa Amparo de la vereda la esperanza corregimiento el tres de Turbo Antioquia, con
su cónyuge cuando fue asesinado.

19
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

municipio de Turbo (Antioquia), en la Finca “Villa Amparo”, varios hombres armados


ingresaron a la vivienda donde pernoctaba la víctima con su familia, procedieron a sacarlo
de la habitación y en un corredor del inmueble le dispararon de forma indiscriminada y
permanente hasta causarle la muerte. En sesión de versión libre, alias “HH” manifestó que
en el hecho participaron alias “Wilson”, alias “Uber”, alias “Carroloco” y él mismo, no se
hizo claridad sobre el móvil o motivación del homicidio45.

Víctima Jaime Iván Holguín Oquendo


Elementos materiales de - Informe de Policía Judicial FPJ-11 017. Inspección judicial
prueba realizada al proceso radicado bajo el número 2040, adelantado
por la Fiscal 80 Seccional de Turbo, Medellín, 26 de enero de
2009, el cual terminó con suspensión de la investigación art.
326 CPP, el 15 de diciembre de 1995.
- Unidad Nacional de Justicia y Paz de la FGN, Registro único
de entrevista: María del Carmen Oquendo de Holguín (madre
del señor Holguín Oquendo), finca “El Prado”, vereda La
Esperanza, corregimiento El Tres, Turbo, 10 de marzo de
2009.
-CTI de la FGN, Entrevista realizada a la señora María del
Carmen Oquendo de Holguín (madre del señor Holguín
Oquendo), Apartadó, 10 de febrero de 2010.
- Informe de Policía Judicial FPJ-11 OT. 118. Entrevista a
realizada a la señora María del Carmen Oquendo de Holguín
(madre del señor Holguín Oquendo), Apartadó, 10 de febrero
de 2010.
-Informe de Policía Judicial FPJ 11 034. Labores de verificación
de los hechos confesados por el postulado, Apartadó, 18 de
marzo de 2009.
-Registro de defunción No. 1223506 expedido el 28 de marzo
de 1995 por la Notaría Única del Círculo de Turbo.
-Subproceso Justicia y Paz, formato único de declaración
Juramentada: Margarita María Taborda Rico (compañera
permanente del señor Holguín Oquendo), Apartadó, 6 de
febrero de 2010.
-Informe de Policía Judicial FPJ.-11 251 OT 267. Inspección
judicial al radicado 1048356 adelantado por la Fiscalía 33
Especializada de Medellín, Medellín, 20 de junio de 2011.

Grado de participación y adecuación típica46:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor

Hecho 8: homicidio en persona protegida

60. La Fiscalía 17 de Justicia y Paz estableció que en la noche del 25 de marzo de


1995, en el establecimiento público “Heladería Candilejas”, ubicado en la entrada “Las
Palmeras” del barrio “Julia Orozco”, se encontraban departiendo los señores Wilson
Alberto Acevedo Pulgarín, conductor del municipio de Turbo47 y Francisco Javier Echavarría

45
CD 02: Versión libre del postulado HÉBERT Veloza García, alias “HH”, sesión del 9 de julio de 2008, min. 33:00 y ss.
46
Sala de Justicia y Paz, Legalización de Cargos de fecha del 31 de octubre de 2012.
47
El señor Acevedo Pulgarín fue nombrado como empleado distrital para el cargo de conductor, mediante la resolución de
nombramiento 033 del 16 de enero de 1995, y tomó posesión del cargo el 1º de febrero siguiente. Ver Certificación del

20
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Pérez, conductor de volqueta del municipio de Turbo, principalmente en los corregimientos


“El Uno”, “El Dos” y “Nueva Antioquia”. La señora Adriana Echavarría Correa, hija de
Francisco Javier manifestó a la Fiscalía que su padre había sido amenazado presuntamente
por los paramilitares por transportar trabajadores y llevarlos a arreglar la carretera en los
corregimientos de “El Uno” y “El Dos”, pues por ser lugar de influencia de las
autodefensas su presencia podría poner en evidencia la presencia del grupo armado ilegal
en esos sitios48.

61. Según manifestaciones de testigos, recopiladas por la Fiscalía, cuando Acevedo y


Echavarría se disponían a beber unas cervezas, al establecimiento entraron hombres
armados y procedieron a dispararles hasta causarles la muerte49. El postulado alias “HH”
declaró en diligencia de versión libre haber dado la orden de realizar el doble homicidio a
Enrique Mestra Yáñez, alias “Wilson” y José Uber Coca Ceballos, alias “Uber”, aunque no
hizo claridad sobre el motivo para ordenar el homicidio50.

Víctimas Wilson Alberto Acevedo Pulgarín y Francisco Javier Echavarría


Pérez
Elementos materiales de -Informe de Policía Judicial FPJ-11 018. Inspección judicial
prueba realizada al proceso radicado número 2039, adelantado por la
Fiscal 80 Seccional de Turbo, Medellín, 26 de enero de 2009. -
-El 13 de diciembre de 1995 la Fiscal 80 Seccional de Turbo
decidió suspender la investigación previa 2039. El 26 de marzo
de 2009 fue asignado el radicado bajo el número 3538 (SIJUF
146327) al Fiscal 73 Seccional de Turbo. El 31 de marzo de
2009 éste decidió remitir el sumario a la Fiscalía Delegada
ante los Jueces Especializados de Medellín.
-Informe de Policía Judicial FPJ.-11 252 OT 268. Inspección
judicial al radicado 2039 adelantado por la Fiscalía 80
Seccional de Turbo, Medellín, 20 de junio de 2011.
Wilson Alberto Acevedo Pulgarín.
-Acta de necropsia 95-061 suscrita por el médico legista del
Instituto Nacional de Medicina Legal de Turbo el 26 de marzo
de 1995, en la que se indica que la víctima murió a
consecuencia de “heridas por proyectil arma de fuego, de
naturaleza esencialmente mortal”.
-Registro de defunción No. 1223657 expedido el 27 de marzo

Secretario de Gobierno del Distrito Portuario de Turbo, Turbo, 23 de febrero de 2009 (archivo de la FGN: “Evidencia física y
elementos materiales de prueba” correspondientes al hecho 8).
48
El señor Echavarría Pérez hacía tres meses que había trasladado su residencia del corregimiento Currulao a la cabecera
municipal de Turbo. En Currulao, “trabajaba en el matadero regional”. Departamento de Policía de Urabá-Unidad
Investigativa de Policía Judicial, Declaración de la señora Gloria Elena Villa Arango (esposa del señor Echavarría Pérez),
Turbo, 25 de marzo de 1995 (archivo de la FGN: “Evidencia física y elementos materiales de prueba” correspondientes al
hecho 8). Según la señora Adriana Echavarría Correa, hija del señor Echavarría Pérez, “su padre trabajaba como conductor
de volqueta del municipio [de Turbo] para los lados de los corregimientos El Uno, El Dos y Nueva Antioquia, [e] indica que
su padre estaba amenazado por llevar los trabajadores a esos sectores a arreglar la carretera”. Informe de Policía Judicial
FPJ.-11 252 OT 268. Inspección judicial al radicado 2039 adelantado por la Fiscalía 80 Seccional de Turbo, Medellín, 20 de
junio de 2011, pág. 4.
49
Informe de Policía Judicial 018, Medellín, 26 de enero de 2009, pág. 2 (archivo de la FGN: “Evidencia física y elementos
materiales de prueba” correspondientes al hecho 8).
50
Ver Transcripción de versión libre rendida por HÉBERT VELOZA GARCÍA, 30 de octubre de 2007, pág. 17. El postulado
confesó inicialmente el asesinato del señor Acevedo Pulgarín en esta versión: “También por esa misma época, en la
heladería Las Palmas, en el Instituto, fueron muertas dos personas, una con el nombre de Wilson (no recuerdo el apellido).
También por órdenes mías a esos muchachos los mataron ‘Wilson’ y ‘Uber’”. Ibídem. Posteriormente, el postulado se refirió
al homicidio durante las sesiones de versión libre del 26 de marzo de 2008 [Transcripción, pág. 15 (hora: 2.41)], del 27 de
marzo de 2008 [Transcripción, pág. 5 (hora: 10.25)] y del 10 de junio de 2008 [Transcripción, pág. 15 (hora: 3.24 p.m.)].
Los extractos de éstas aparecen citadas en Informe de Policía Judicial 252 OT 268, Medellín, 20 de junio de 2011, pág. 2.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

de 1995 por la Notaría Única del Círculo de Turbo.


-Unidad Nacional de Justicia y Paz de la FGN, Registro único
de entrevista: Nubia del Carmen Pulgarín Monsalve (madre del
señor Acevedo Pulgarín), Apartadó, 28 de septiembre de
2008.
Francisco Javier Echavarría Pérez:
-Acta de necropsia No. 95-062 suscrita el 26 de marzo de
1995 por el médico legista del Instituto Nacional de Medicina
Legal de Turbo, en la que se indica que la víctima murió a
consecuencia de “heridas por proyectiles arma de fuego, de
naturaleza esencialmente mortal”.
-Departamento de Policía de Urabá -Unidad Investigativa de
Policía Judicial, Declaración de la señora Gloria Elena Villa
Arango (esposa del señor Echavarría Pérez), Turbo, 25 de
marzo de 1995.
-Certificado de defunción expedido el 27 de marzo de 1995
por la Notaria Única del Círculo de Turbo.

Grado de participación y adecuación típica51:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador

Hecho 9: homicidio en persona protegida

62. Según la situación fáctica presentada por la Fiscalía 17 de Justicia y Paz, y por
declaración en versión libre del postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias “HH”, el 24 de
abril de 1995 José Alfredo Ruíz Lever en compañía de otro sujeto los atacó con arma de
fuego en inmediaciones del barrio “El Gaitán” de Turbo, ubicado detrás de la plaza de
mercado. Ante los disparos alias “HH” y otros respondieron causando la muerte a Ruíz
Lever.

63. Cuando el postulado alias “HH” confesó su participación en el asesinato del señor
Ruíz Lever, lo narró de la siguiente manera:

“Fueron dos personas del EPL que me hicieron un atentado. Yo estaba con ‘Carro Loco’ y
‘Wilson’. Ellos persiguieron a las personas y murió uno. Creo que es el barrio Gaitán, que es
la vía que va a la playa. Se cayó del puente y quedó enterrado. La otra persona logro
escapar. No era un puente, sino uno de tablitas o un paso para personas. El día antes había
llegado de Medellín a Turbo. Al otro día de haber llegado, estaba ubicado, hablando con
una persona, y dos personas, morenos, nos comienzan a disparar. Yo estaba convaleciente.
Reaccionamos; sí, disparé. ‘Wilson’ y ‘Carro Loco’ los persiguieron. Este muchacho al pasar
el puentecito se cayó y ahí fue donde lo matamos y pertenecía al Epl ”52.

64. Según manifestaciones de José Ruperto García, alias “El Gato”, participaron en el
homicidio, alias “HH”, Enrique Mestra Yañez, alias “Wilson”, Wilmer Aguado Álvarez, alias

51
Decisión del 31 de octubre de 2012.
52
Ver Transcripción de versión libre rendida por HÉBERT VELOZA GARCÍA, 30 de octubre de 2007, pág. 20.

22
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

“Carro Loco” , José Uber Coca Ceballos, alias “Uber”, Forferinzo Flórez Arizal, alias
“Montador” y él mismo53.

Víctima José Alfredo Ruíz Lever


Elementos materiales de -Informe de Policía Judicial FPJ-11 019. Inspección judicial
prueba realizada al proceso radicado bajo el número 2109, adelantado
por el Fiscal 113 Seccional de Turbo, Medellín, 26 de enero de
2009.
-Acta de necropsia No. 95-088 suscrita el 24 de abril de 1995
por el médico legista del Instituto Nacional de Medicina Legal
de Turbo, en la que se indica que la víctima murió a
consecuencia de “heridas por proyectil arma de fuego, de
naturaleza esencialmente mortal”.
-Certificado de defunción expedido el 26 de abril de 1995 por
la Notaría Única del Círculo de Turbo.
- Unidad Nacional de Justicia y Paz de la FGN, Registro único
de entrevista: José María Ruiz Paternina (hermano del señor
Ruíz Lever), Apartadó, 19 de noviembre de 2008.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 271 OT 263. Clips de las
diligencias de versión libre del postulado José Ruperto García
Quiroga, Medellín, 26 de abril de 2010.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 253 OT 269. Inspección
judicial realizada al radicado 2109, adelantado por el Fiscal
113 Seccional de Turbo, Medellín, 20 de junio de 2011.
-El 30 de enero de 1996 el Fiscal 113 Seccional de Turbo
decidió suspender la investigación previa 2109.

Grado de participación y adecuación típica54:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor

Hecho 10: homicidio en persona protegida

65. Según la situación fáctica reconstruida por la Fiscalía, el 29 de abril de 1995, Javier
Enrique Mercado Julio se encontraba en el centro comercial “Estrella del Mar”, ubicado en
el barrio “Buenos Aires” de Turbo, cuando fue interceptado por varios hombres armados
que le dispararon hasta causarle la muerte.

66. Este hecho fue confesado por el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, en diligencia
de versión libre del 29 de octubre de 2007 y 27 de marzo de 2008, en la que manifestó
que ordenó a Wilmer Aguado Álvarez, alias “Carro Loco” y a Enrique Maestra Yáñez, alias
“Wilson”, asesinar al señor Mercado Julio, por cuanto la víctima era señalado de ser
integrante de la guerrilla.

53
Extracto de transcripción de versión libre rendida por José Ruperto García Quiroga, alias “El Gato”, 5 de diciembre de
2008, citado en Informe de Policía Judicial FPJ-11 271 OT 263. Clips de las diligencias de versión libre del postulado José
Ruperto García Quiroga, Medellín, 26 de abril de 2010, págs. 1 y 2.
54
Decisión del 31 de octubre de 2012.

23
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Víctima Javier Enrique Mercado Julio


Elementos materiales de -Informe de Policía Judicial No. 020 del 27 de enero de 2009,
prueba mediante el cual se da cuenta de la inspección judicial
realizada al proceso radicado No. 2126 adelantado en la
Fiscalía 113 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido.
-Acta de necropsia No. 95097 del 30 de abril de 1995.
-Certificado de Defunción de la Notaría Única de Turbo.
Entrevista a la señora Liris Mercado Julio, hermana del occiso.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 No. 254 OT 270 de 20 de
junio de 2009.

Grado de participación y adecuación típica55:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador

Hecho 11: homicidio en persona protegida

67. Según la situación fáctica presentada por la Fiscalía, el 19 de mayo de 1995, en


horas de la noche, hombres armados que se identificaron como supuestos miembros del
Ejército hicieron presencia en el corregimiento “El Tres” del municipio de Turbo e
ingresaron a la vivienda de Rubén Darío Agudelo Duque y a la residencia de Cerbulo de
Jesús Aguirre Chaverra, los sacaron a la fuerza de sus hogares y procedieron a asesinarlos
con impactos de armas de fuego.

68. En versión libre del 23 de enero de 2009, el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA,
aceptó su participación en estos hechos, junto a Enrique Mestra Yanes alias “Wilson”,
Wilmer Aguado, alias “Carro Loco” y José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca”, por
cuanto era señalado de ser miliciano de la guerrilla56.

Víctimas Rubén Darío Agudelo Duque y Cerbulo de Jesús Aguirre


Chaverra
Elementos materiales de -Informe de Policía Judicial No. 022 de 27 de enero de 2009,
prueba mediante el cual se da cuenta de la inspección judicial
realizada al proceso rad 2161 adelantado en la Fiscalía 113
Seccional de Turbo, el cual fue suspendido, el 25 de abril de
1996.
-Informe No. 064 de 2 abril de 2009, mediante el cual se
informa de las labores de verificación realizadas por la Fiscalía
frente a los hechos confesados por el postulado.
- Informe de Policía Judicial FPJ-11 No. 255 OT 271, de 07 de
julio de 2011.
Rubén Darío Agudelo Duque:
-Acta de necropsia No. 95117 del 20 de mayo de 1995.
-Registro de Defunción No. 1223696 del 23 de mayo de 1995
-Entrevista a la señora Yudi Elena Morales Carmona,
compañera permanente el señor Agudelo Duque.
Cerbulo de Jesús Aguirre Chaverra:
-Acta de necropsia No. 95118 del 20 de mayo de 1995.
-Registro de Defunción No. 1223694 del 23 de mayo de 1995
-Entrevista a la señora Alix del Carmen Quintero.

55
Decisión del 31 de octubre de 2012.
56
De acuerdo con lo expuesto por el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, en versión libre 26 de noviembre de 2007.

24
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Grado de participación y adecuación típica57:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor
Secuestro simple art. 168. Coautor

Hecho 12: homicidio en persona protegida

69. El día 25 de mayo de 199558, cerca al establecimiento público denominado “Bar


Caney” del municipio de Turbo, más exactamente frente al Banco de Bogotá, se
encontraban los jóvenes Herley Alexander Márquez Ortega y Marcial de Jesús Bertel Ríos,
cuando fueron sorprendidos por varios hombres armados que se les acercaron y sin
mediar palabra les dispararon causándoles la muerte.

70. En versión libre del 27 de marzo y del 9 de julio de 2008, HÉBERT VELOZA
GARCÍA, manifestó que en este hecho participaron José Huber Coca Ceballos, alias “Huber
Coca” y José Ruperto García, alias “El Gato”, quienes siguiendo sus órdenes asesinaron a
Márquez Ortega y Bertel Ríos, señalados de ser supuestos milicianos de la guerrilla de las
FARC y además de estar extorsionado a comerciantes del municipio de Turbo59.

Víctimas Herley Alexander Márquez Ortega y Marcial de Jesús Bertel


Ríos.
Elementos materiales de -Informe de Policía Judicial No. 023 del 28 de enero de 2009,
prueba mediante el cual se da cuenta de la inspección judicial
realizada al proceso rad 2176 adelantado en la Fiscalía 113
Seccional de Turbo, el cual fue suspendido, el 25 de abril de
1996.
-De acuerdo con el informe No. 447 del 14 de septiembre de
1195, realizado por la Policía Judicial del Cuerpo Técnico de
Investigaciones de la Fiscalía General de la Nación, se indica
que al parecer el móvil del asesinato de estas personas,
obedece a que supuestamente se encontraban extorsionando
a los comerciantes de la región y al parecer eran miembros de
las milicias bolivarianas de la FARC radicadas en el
corregimiento de Currulao.
- Informe de Policía Judicial FPJ-11 No. 289 OT 305 de 21 de
junio de 2011.
Herley Alexander Márquez Ortega
-Acta de necropsia No. 95123 del 25 de mayo de 1995.
- Registro de Defunción No. 1223705 del 26 de mayo de 1995.
-Entrevista a las señoras Diana María Márquez Ortega y
Claudia Isabel Márquez Ortega, hermanas de la víctima.
Marcial de Jesús Bertel Ríos.
-Acta de necropsia No. 95122 del 25 de mayo de 1995.
-Certificado de la Notaría Única de Turbo en la que se da
cuenta de la muerte del señor Marcial de Jesús Bertel Ríos.
-Entrevista a los señores Lucelly Ríos Nobles y Apolinar del
57
Decisión del 31 de octubre de 2012.
58
De acuerdo con lo expuesto por el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, en versión libre del 27 de marzo de 2008,
manifestó que durante el año 1995, en la zona conocida como la “Calle del Comercio”, se cometían entre 3 y 4 homicidios
diarios a manos del grupo armado de las AUC.
59
Ver Informe de Policía Judicial FPJ-11 No. 289 OT 305 de 21 de junio de 2011.

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Cristo Márquez Velásquez, padres del occiso.

Grado de participación y adecuación típica60:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador

Hecho 13: homicidio en persona protegida

71. El 24 de abril de 1995, cuando Oscar de Jesús Montoya Patiño y José Manuel
Martínez Cárdenas se movilizaban en un vehículo tipo Montero de color negro por el
centro del municipio de Turbo, frente al centro comercial “Don Diego” (a dos cuadras de la
Estación de Policía), sujetos fuertemente armados abordaron a los señores y les
dispararon hasta causarles la muerte.

72. Luego del homicidio del señor Oscar de Jesús Montoya Patiño, sus familiares
presentaron denuncia por el hurto del vehículo en el cual se movilizaba. Mediante informe
presentado por la SIJIN, se indicó que el 3 de noviembre de 1995, fue hallado el vehículo
de propiedad de la familia Montoya Patiño en la zona urbana del municipio de Turbo, y
que les fue entregado el 20 de noviembre de ese mismo año.

73. De acuerdo con lo expuesto en versión libre del 27 de noviembre de 2007, HÉBERT
VELOZA GARCÍA manifestó que participó en este hecho en compañía de José Ruperto
García, alias “El Gato”, Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”, Wilmer Aguado Álvarez, alias
“Carro loco”, Forferinzo Flórez Arizal, alias “Montador”, además estuvieron alias “Lechero”
y Orlando Manuel Ramírez Cuadrado, alias “Rambo”, quien falleció producto de disparos
que realizó un integrante del DAS, que reaccionó ante la situación antes descrita.

Víctimas Oscar de Jesús Montoya Patiño y José Manuel Martínez


Cárdenas.
Elementos materiales de -Informe de Policía Judicial No. 021 del 27 de enero de 2009,
prueba mediante el cual se da cuenta de la inspección judicial
realizada al proceso rad 2103 adelantado en la Fiscalía 113
Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 27 de noviembre
de 1995.
- Informe de Policía Judicial No. 368 del 19 de julio de 1995,
en el que se indica que “…lo móviles del homicidio de las
personas antes mencionadas, se debe a causa que en un
buque de nombre nueva Esther, llego un cargamento de
armas con destino a las FARC, y la persona encargada de
recogerlas era el señor OSCAR MONTOYA PATIÑO, quien
inicialmente tuvo que esperar en el municipio de Turbo ya que
el cargamento había sido decomisado.
-Recorte del diario “El Colombiano” del 26 de abril de 1995, en
el que se da cuenta de la muerte de los señores Oscar de
Jesús Montoya Patiño y José Manuel Martínez Cárdenas, de
quienes se dice se “dedicaban al comercio.”
60
Decisión del 31 de octubre de 2012.

26
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Oscar de Jesús Montoya Patiño:


-Acta de necropsia No. 95089 del 24 de abril de 1995
- Certificado de Defunción No. 1223716 del 25 de abril de
1995
-Entrevista al señor Mauricio Alexander Montoya López, hijo
de la víctima.
-Entrevista a la señora Luz Olivia López Granada, esposa del
occiso.
José Manuel Martínez Cárdenas:
-Acta de necropsia No. 95090 del 24 de abril de 1995
-Certificado de defunción No. 1223717 del 25 de abril de
1995.
-Entrevista a la señora María Lucelly Cárdenas de Martínez,
madre de la víctima.

Grado de participación y adecuación típica61:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor

Hecho 14: homicidio en persona protegida

74. El 6 de junio de 1995, el señor Alfredo Hernando Gómez Rico, salió en su vehículo
del municipio de Apartadó para dirigirse a la finca “Las Margaritas”, cuando se encontraba
en la entrada del predio, fue sorprendido por varios sujetos armados quienes le
manifestaron que estaba siendo “investigado” y lo obligaron a dirigirse hasta la zona de
“Palos blancos”. Al día siguiente su cuerpo apareció abaleado en el sitio conocido como
“La Quinta”, a un lado de la vía pública cerca de la finca “Santa Marta”, en el municipio de
Turbo.

75. En diligencias de versión libre realizada el 26 de noviembre de 2007 y el 09 de julio


de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA confesó el hecho y manifestó haber dado la orden a
Durbay Enrique Durango Gómez, alias “Sancocho” quien además confirmo el hecho 62, y a
Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “el Tigre”, de darle muerte al señor Gómez Rico, por
cuanto tenían información de que supuestamente pertenecía a grupos guerrilleros.

Víctima Alfredo Hernando Gómez Rico


Elementos materiales de - Informe de Policía Judicial No. 024 del 28 de enero de 2009,
prueba en el que se da cuenta de la inspección Judicial realizada al
proceso radicado 526439 adelantado en la Fiscalía
Especializada de Medellín, el cual se suspendió el 4 de julio de
2002.
-Acta de levantamiento No. 289 del 7 de junio de 1996.
-Acta de necropsia No. 96278 del 7 de junio de 1996.
-Certificado de Defunción expedido por la Notaría Única de
Turbo.
-Entrevista a la señora María Eugenia Marín Gómez.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 No. 290 OT 306 de 22 de
junio de 2011.

61
Decisión del 31 de octubre de 2012.
62
Ver diligencia de versión libre de HÉBERT VELOZA de 26 de noviembre de 2007.

27
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Grado de participación y adecuación típica63:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador
Secuestro simple art. 168. Determinador

Hecho 15: homicidio en persona protegida

76. El 9 de junio de 1995, entre la bomba la Orillana y la bomba del Tancon64, en el


establecimiento público denominado “Billares el Turista”, ubicado en el casco urbano del
municipio de Turbo, fue asesinado el señor Julio Hernando Rico Sánchez, quien se
desempeñaba como Administrador de las fincas “Maracaibo” y “La Paz” (ubicadas en
Turbo).

77. En diligencia de versión libre del 9 de julio de 2008 HÉBERT VELOZA GARCÍA,
confesó el hecho y manifestó haberle dado la orden a Enrique Mestra Yañez alias “Wilson”,
a Wilmer Aguado Álvarez alias “Carroloco”, a José Huber Coca Ceballos alias “Huber” y a
Benito Antonio Martínez Bertel alias “Caimán”.

Víctima Julio Hernando Rico Sánchez.


Elementos materiales de -Acta de levantamiento de cadáver
prueba -Certificado de Defunción No. 1682016 expedido por la
Notaría Única de Turbo, el 12 de junio de 1995.
- Acta de necropsia No. 95132 del 10 de junio de 1995.
-Entrevista de María Gloria García Agudelo, esposa del señor
Rico Sánchez.
-Informe No. 110 del 21 de mayo de 2009, mediante el la
Fiscalía da cuenta de las labores investigativas realizadas con
el fin de corroborar los hechos confesados.
-Inspección judicial realizada a la investigación preliminar No.
2230 adelantada en la Fiscalía 113 Seccional de Turbo, que
fue suspendida el 25 de abril de 1996.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 No. 291 OT 307 el 22 de
junio de 2011.

Grado de participación y adecuación típica65:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador

Hecho 16: homicidio en persona protegida

78. El 8 de junio de 1995, en el barrio “Chucuna” del municipio de Turbo,


específicamente en la orilla de la playa de la desembocadura del río “El Tres”, fueron

63
Decisión del 31 de octubre de 2012.
64
Según diligencias de versión libre realizadas al postulado HÉBERT VELOZA los días 27 de noviembre de 2007 y 9 de julio
de 2008.
65
Decisión del 31 de octubre de 2012.

28
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

hallados los cuerpos de Andrés Córdoba Castillo, Carlos Arturo Córdoba Vélez y Mariela
Inés Padrón Calderón. Según la información recopilada por la Fiscalía, testigos
manifestaron que las víctimas habían salido a pescar el día anterior y cuando regresaban
fueron atacados por hombres armados, que les dispararon hasta causarles la muerte. Así
mismo, se pudo establecer que los posibles móviles de los homicidios se presentaron
debido a que estas personas fueron “denunciadas” por haber cometido hurtos en esa zona
de Turbo.

79. Este hecho fue confesado por el postulado VELOZA GARCÍA, en sesiones de versión
libre realizadas el 27 de noviembre de 2007 y 9 de julio de 2008, en las cuales manifestó
que en el hecho participaron: Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”, Wilmer Aguado
Álvarez, alias “Carro Loco”, José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca”, Benito Antonio
Martínez Bertel, alias “Caimán” y él mismo.

Víctimas Andrés Córdoba Castillo, Carlos Arturo Córdoba Vélez y


Mariela Inés Padrón Calderón
Elementos materiales de - Inspección judicial al proceso 2209 adelantado en la Fiscalía
prueba 113 Seccional de Turbo.
-Informe de Policía Judicial, el 15 de diciembre de 2009, en el
cual se relacionan las labores adelantadas por la Fiscalía
General de la Nación para verificar los hechos confesados.
Mariela Inés Padrón Calderón:
-Acta de necropsia No. 92128 del 8 de junio de 1995
- Entrevista a la señora Ivón Cristina Padrón Calderón, hija de
la víctima.
Carlos Andrés Córdoba Vélez:
-Acta de necropsia No. 92129 del 8 de junio de 1995
Andrés Córdoba Castillo:
-Certificado de Defunción No. 1682798 del 13 de octubre de
1995.

Grado de participación y adecuación típica66:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor

Hecho 17: homicidio en persona protegida

80. El 9 de junio de 1995, el señor Yrlan González Pineda se encontraba trabajando en


un predio ubicado en el sector conocido como “Wafe” de la zona urbana del municipio de
Turbo, al sitio llegaron varios sujetos armados y procedieron a dispararle hasta causarle la
muerte.

81. De acuerdo a lo manifestado en sesiones de versión libre por parte de los


postulados HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias “HH” y José Ruperto García, alias “El Gato”,
66
Decisión del 31 de octubre de 2012.

29
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

estos confesaron su participación en el hecho junto a Enrique Mestra Yanes, alias


“Wilson”, Wilmer Aguado, alias “Carro Loco” y Forferinzo Flórez Arizal, alias “Montador”.
Según los postulados, el móvil de su asesinato fue el señalamiento de que González
Pineda era supuesto integrante de las FARC.

Víctima Yrlan González Pineda


Elementos materiales de - Inspección judicial al proceso 2233 adelantado en la Fiscalía
prueba 113 Seccional de Turbo, el cual fue archivado mediante
resolución del 29 de abril de 1997.
-Acta de levantamiento de cadáver del 9 de junio de 1995.
-Registro Civil de Defunción No. 03814608.
-Entrevista a la señora Luz Miriam Pineda, hermana de la
víctima.
-Informe de Policía Judicial, del 22 de mayo de 2009, en el
cual se relacionan las labores adelantadas por la Fiscalía
General de la Nación para verificar los hechos confesados.

Grado de participación y adecuación típica67:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor

Hecho 18: homicidio en persona protegida

82. El 12 de junio de 1995, en el corregimiento “Riogrande” por la vía que conduce a


“Nueva Colonia” en la entrada a la carretera comunal conocida como “La Suerte” (Turbo,
Antioquia), apareció el cadáver de Vicente Zambrano Palencia con múltiples impactos de
armada de fuego. Según la información recolectada por la Inspección Departamental de
Policía del corregimiento de Riogrande, el occiso era obrero en la finca “El Retorno”
(Turbo), lugar del cual salió el día sábado 10 de junio de 1995 hasta la fecha en que
apareció muerto68.

83. En versión libre del 28 de noviembre de 2007 y 9 de julio de 2008, HÉBERT


VELOZA GARCÍA, confesó este hecho y manifestó que por orden de él, Jesús Albeiro
Guisao Arias, alias “el Tigre”, alias “Durbays” y alias “San Pedro” le dieron muerte al señor
Zambrano, quien era señalado de ser supuesto miliciano de las FARC.

Víctima Vicente Zambrano


Elementos materiales de -Acta de levantamiento de cadáver del 12 de junio de 1995.
prueba -Registro de Defunción No. 1682020 del 13 de junio de 1995.
-Entrevista a la señora Hermilas de Jesús Romero Mendoza,
compañero de trabajo de la víctima.
-Entrevista a la señora María Leonor Zambrano, hermana del
occiso.
-Informe de Policía Nacional 0210 del 29 de junio de 2009,
mediante el cual se informa de las labores de verificación
realizadas, con el fin de corroborar el hecho confesado.
67
Decisión del 31 de octubre de 2012.
68
Ver Informe de Policía Judicial FPJ-11 No. 256 OT 272 de 21 de junio de 2011.

30
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

- Inspección judicial al proceso 2247 adelantado en la Fiscalía


113 Seccional de Turbo, el cual fue archivado mediante
resolución del 21 de mayo de 1996.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 No. 256 OT 272 de 21 de
junio de 2011.

Grado de participación y adecuación típica69:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador

Hecho 19: homicidio en persona protegida

84. El 19 de junio de 1995, el señor Jhon Jairo Celada David, se encontraba en el bar
denominado “El Kiosco”, ubicado en el corregimiento de “Curruluao”, municipio de Turbo,
cuando fue abordado por hombres que le dispararon hasta causarle la muerte. Según el
postulado alias “HH”, el homicidio del señor Celada David, obedeció a que era señalado de
ser simpatizante de la subversión, razón por la cual, él en compañía de Enrique Mestra
Yanes, alias “Wilson”, Wilmer Aguado Álvarez, alias “Carro Loco” y José Ruperto García,
alias “El Gato”, lo asesinaron.

Víctima Jhon Jairo Celada David


Elementos materiales de -Acta de necropsia No. 95153 del 19 de junio de 1995.
prueba - Registro de Defunción No. 1682030 del 20 de junio de 1995,
expedido por la Notaría Única de Turbo.
-Entrevista a la señora Edilma Celada David, hermana de la
víctima.
-Inspección judicial al proceso 2264 adelantado en la Fiscalía
113 Seccional de Turbo, el cual fue archivado mediante
resolución del 26 de febrero de 1996.

Grado de participación y adecuación típica70:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor

Hecho 20: homicidio en persona protegida

85. El 20 de junio de 1995, en el sitio conocido como “La Curva del Diablo”71, en
postrimerías de la finca “La Lucila”, ubicada a las afueras del casco urbano del municipio
de Turbo, fue encontrado el cuerpo sin vida del señor León Antonio Correa, el cual
presentaba múltiples impactos de arma de fuego. Según declaración rendida por Gloria
Cecilia Giraldo, compañera de la víctima, a León Antonio lo vieron subirse a un automotor
marca “UAZ” y desde ese momento no se volvió a saber de su paradero.

69
Decisión del 31 de octubre de 2012.
70
Sala de Justicia y Paz de Bogotá, Control de legalidad del 31 de octubre de 2012.
71
De acuerdo con lo expuesto por el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, en versión libre del 27 de noviembre de 2007, el
sitio conocido como la “curva del diablo” era uno de los lugares acostumbrados por los integrantes del grupo armado ilegal
para arrojar los cuerpos de las personas que sacaban del municipio de Turbo para asesinarlas.

31
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

86. VELOZA GARCÍA, confesó este hecho en sesión de versión libre del 26 de
noviembre de 2007, en la que manifestó que él en compañía de José Ruperto García, alias
“El Gato”, Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson” y Forferinzo Flórez Arizal, alias “Montador”,
le dieron muerte al señor León Antonio Correa, por cuanto era señalado de ser supuesto
miliciano de la guerrilla. Además manifestó que regularmente los cuerpos de las personas
halladas sin vida y que se encontraban en el sitio denominado “La Curva del Diablo”, eran
trasladados desde otros lugares y los homicidios se cometían en otros sitios, pero que “La
Curva” era un sitio destinado para arrojar cadáveres.

Víctima León Antonio Correa


Elementos materiales de -Inspección judicial al proceso 2259 adelantado en la Fiscalía
prueba 113 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 18 de
septiembre de 1996.
-Acta de necropsia No. 95156 del 20 de junio de 1995.
-Acta de levantamiento de cadáver No 076 de fecha de 20 de
junio de 1995.
-Registro de Defunción No. 1682043 del 21 de junio de 1995.
-Entrevista a la señora Gloria Cecilia Giraldo González,
compañera permanente de la víctima, quien manifestó que
testigos del hecho le informaron que su esposo fue subido a
un vehículo “UAZ o Montero” que era conocido como de
propiedad de los paramilitares, apareciendo muerto horas
después.
- Informe de Policía Judicial No. 099, del 24 de marzo de
2008, en el cual se relacionan las labores adelantadas por la
Fiscalía General de la Nación para verificar los hechos
confesados.

Grado de participación y adecuación típica72:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor
Secuestro simple art. 168. Coautor

Hecho 21: homicidio en persona protegida

87. El 22 de junio de 1995, en las afueras de la plaza de mercado del municipio de


Turbo, se encontraban los jóvenes Dorian Rene Montoya Orozco, Lindelia Rojas Ortiz,
Beatriz Elena Delgado Caicedo y Jaime Alberto Giraldo Jiménez, a bordo de unas
motocicletas, cuando fueron abordados por hombres fuertemente armados, quienes sin
mediar palabra alguna les dispararon hasta causarles la muerte.

88. Según diligencias de versión libre realizadas los días 11 de junio y 9 de julio de
2008, el postulado HÉBERT VELOZA confesó que en la comisión de este hecho
participaron Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”, Wilmer Aguado Álvarez, alias “Carro

72
Decisión del 31 de octubre de 2012.

32
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

loco”, José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca”, José Ruperto García, alias “El Gato”,
y alias “El Chavo”, por orden directa de HÉBERT VELOZA GARCÍA73.

89. En las mismas diligencias de versión libre el postulado HÉBERT VELOZA manifestó
dio la orden de dar muerte a los señores Dorian Rene, Lindelia Rojas, Beatriz Elena y
Jaime Alberto debido a que habían recibido información según la cual las víctimas eran
auxiliadores del Ejército Popular de Liberación (EPL). Sin embargo, aclaró que en estos
casos ellos no hacían ningún tipo de confirmación o averiguación en torno a la
información, pues se le daba total credibilidad y lo que procedía era montar el operativo
para “ajusticiar” a las personas señaladas de ser presuntos colaboradores o miembros de
los grupos subversivos con presencia en la región74.

Víctima Dorian René Montoya Orozco, Lindelia Rojas Ortiz, Beatriz


Elena Delgado Caicedo y Jaime Alberto Giraldo Jiménez.
Elementos materiales de - Inspección Judicial al proceso radicado 2263 adelantado en
prueba la Fiscalía 113 Seccional de Turbo.
-Informes Nos. 116 y 126 de 25 de marzo de 2008 y 8 de
junio de 2009, respectivamente, mediante los cuales se
informa de las labores de verificación realizadas por la Fiscalía
frente a los hechos confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 259 OT 275 de 1 de
febrero de 2009.
Jaime Alberto Giraldo Jiménez:
-Acta de necropsia No. 95161 del 23 de junio de 1995
-Certificado de Defunción expedido por la Notaria Única de
Turbo.
-Entrevista a la señora Amparo del Socorro Jiménez de
Giraldo, madre de la víctima.
-Entrevista a la señora Liliana María Giraldo Jiménez, hermana
del occiso.
Dorian René Montoya Orozco:
-Acta de necropsia No. 95162 del 23 de junio de 1995.
-Certificado de Defunción expedido por la Notaria Única de
Turbo.
-Entrevista a la señora Olivia Orozco de Montoya, madre de la
víctima.
-Entrevista a la señora Adriana Patricia Montoya Orozco,
hermana del occiso.
Lindelia Rojas Ortiz:
-Acta de necropsia No. 95160 del 23 de junio de 1995.
-Entrevista a la señora María Consuelo Ortiz Usuga, madre de
la víctima.
-Entrevista al señor Danilo Rojas Ortiz, hermano de la occisa.
Beatriz Elena Delgado Caicedo:
-Acta de necropsia No. 95159 del 23 de junio de 1995.
-Certificado de Defunción expedido el 23 de junio de 1995 por
el DANE.
-Entrevista a la señora Aura Nelly Caicedo Sánchez, madre de
la víctima.

Grado de participación y adecuación típica75:

73
Ver diligencia de versión libre del 27 de noviembre de 2007.
74
Ver Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 259 OT 275 de 1 de febrero de 2009.
75
Decisión del 31 de octubre de 2012.

33
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador

Hecho 22: homicidio en persona protegida

90. El 24 de junio de 1995, en momentos en que el señor Carlos Enrique Cuesta


Cantillo se dirigía hacia su residencia, ubicada en el barrio “Baltazar de Casanova”, casco
urbano del municipio de Turbo, fue abordado por hombres armados, al notar la presencia
de estos Cuesta Cantillo emprendió la huida, pero en su intento fue interceptado y atacado
con impactos de armas de fuego que le causaron la muerte.

91. Según lo manifestado por HÉBERT VELOZA GARCÍA, en sendas sesiones de versión
libre del 27 de noviembre de 2007 y de 9 de julio de 2008, respectivamente, el homicidio
de la víctima fue ordenado por él, y el hecho fue cometido por José Ruperto García, alias
“El Gato”, Enrique Mestra Yañez, alias “Wilson” y Rubén de Jesús Taborda Meneses, alias
”Escudero”.

Víctima Carlos Enrique Cuesta Cantillo


Elementos materiales de - Inspección Judicial al proceso radicado 2271 adelantado en
prueba la Fiscalía 113 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el
26 de febrero de 1996.
-Acta de necropsia 95163 del 24 de junio de 1995.
-Partida de Defunción de la Diócesis de Apartadó.
-Certificado de Defunción de la Notaría Única de Turbo.
-Entrevista al señor Iván Gregorio Cuesta Durán, padre de la
víctima.
-Entrevista al señor Julio César Cuesta Cantillo, hermano del
occiso.
-Versión libre de José Ruperto García, alias “El Gato”, en la
que confesó su participación en este hecho.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 260 OT 276 de 21 de
junio de 2011.

Grado de participación y adecuación típica76:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador

Hecho 23: homicidio en persona protegida

92. El 9 de agosto de 1995, en horas de la tarde, los señores Jesús Antonio Pedroza y
Jorge Eliécer Guerra Venegas, transitaban a bordo de una motocicleta por la vía que de
Turbo conduce a Apartadó, cuando fueron interceptados por hombres fuertemente
armados que les dispararon hasta causarles las muerte, exactamente entre la bomba “La
Garza” y “La curva del diablo”77. Sus cuerpos y la motocicleta fueron abandonados en el

76
Decisión del 31 de octubre de 2012.
77
Según diligencia de versión libre rendida por el postulado, HÉBERT VELOZA el día 27 de marzo de 2008.

34
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

sitio conocido como “La Curva del Diablo” del municipio de Turbo. El asesinato se debió a
que las víctimas fueron señaladas de ser supuestos milicianos de la guerrilla, pues según
informaciones recibidas por ellos, los señores Pedroza y Guerra, empleaban la camioneta
de la empresa de gaseosas para la que trabajaban para movilizar material de guerra de las
guerrillas78.

93. De acuerdo con las versiones libres rendidas en el proceso de Justicia y Paz, los
días 26 de noviembre de 2007 y 26 y 27 de marzo de 2008, por los desmovilizados
HÉBERT VELOZA GARCÍA y José Ruperto García, alias “El Gato”, quienes aceptaron su
responsabilidad por la muerte de los señores Jesús Antonio Pedroza y Jorge Eliécer Guerra
Venegas, la Fiscalía logró establecer que además participaron Enrique Mestra Yanes, alias
“Wilson”, Wilmer Aguado Álvarez, alias “Carro loco”, Forferinzo Flórez Arizal, alias
“Montador” y José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca”.

Víctima Jesús Antonio Pedroza y Jorge Eliécer Guerra Vanegas.


Elementos materiales de -Inspección Judicial al proceso radicado 2356 adelantado en la
prueba Fiscalía Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 26 de
febrero de 1996.
- Informe No. 124 de 25 de marzo de 2008, mediante el cual
se informa de las labores de verificación realizadas por la
Fiscalía frente a los hechos confesados por el postulado.
-Versión libre del postulado José Ruperto García, quien
confesó su participación en estos hechos, y manifestó que
alias “René”, comandante de las AUC en San José del
Guaviare, señaló a alias “Wilson” a los señores Jesús Antonio
Pedroza y Jorge Eliécer Guerra Vanegas, como milicianos de
las FARC. (Ver clip del 22 de abril de 2009)
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 261 OT 277 de 22 de
junio de 2011.
Jorge Eliécer Guerra Vanegas:
-Acta de necropsia No. 95211 del 9 de agosto de 1995.
-Certificado de Defunción No. 1682513 del 10 de agosto de
1995.
-Entrevista a la señora Dora Elena Ballesteros Cano, esposa
del señor Guerra Vanegas.
-Entrevista a la señora María Caridad Vanegas de Guerra,
madre del occiso.
Jesús Antonio Pedroza:
-Acta de necropsia No. 95212 del 9 de agosto de 1995.
-Entrevista a la señora Liliana Hurtado Mejía, esposa del señor
Jesús Antonio Pedroza.

Grado de participación y adecuación típica79:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor

78
Ver Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 261 OT 277 de 22 de junio de 2011.
79
Decisión de control de legalidad del 31 de octubre de 2012.

35
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Hecho 25: homicidio en persona protegida

94. Según información recopilada por la Fiscalía, el 12 de septiembre de 1995, en el


barrio “Julia Orozco” del municipio de Turbo (Antioquia), fue interceptado el señor Luciano
Torres Urango y obligado a subirse a una de las camionetas utilizadas por el grupo
armado ilegal y conocida como “Camino al cielo”, momentos después el señor Torres logró
bajarse del automotor y emprender la huida, pero ante tal acción fue atacado por sujetos
armados que le dispararon hasta causarle la muerte.

95. En versión libre del 27 de noviembre de 2007 y 9 de julio de 2008, este hecho fue
confesado por el desmovilizado HÉBERT VELOZA GARCÍA, manifestando que además de
él, participaron José Ruperto García, alias “El Gato”, Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”,
José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca”, Wilmer Aguado Álvarez, alias “Carro Loco”
y José Luís Negrete Hernández, alias ‘Caimán’.

Víctima Luciano Torres Urango80


Elementos materiales de -Informe 036 de enero 2 de 2009, en el cual se da cuenta de
prueba la inspección judicial realizada al proceso 2460 que se
adelantó en la Fiscalía 83 Seccional de Turbo, por la muerte
del señor Luciano Torres Urango, y el cual fue suspendido
mediante resolución del 12 de marzo de 1996.
-Acta de necropsia 95245 del 13 de septiembre de 1995.
-Registro de Defunción 1682528 del 13 de septiembre de
1995.
- Entrevista realizada a la señora María Candelaria Torres
Urango, hermana del occiso.
-Informe de Policía Judicial No. 022 del 18 de marzo de 2009,
mediante el cual se informa sobre las labores de verificación
de los hechos confesados por el postulado.
-Versión libre del postulado José Ruperto García Quiroga alias
“El Gato”, quien confesó su participación en los hechos.

Grado de participación y adecuación típica81:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor

Hecho 26: homicidio en persona protegida

96. El 1º de octubre de 1995, Filadelfo Bertel Pérez, se encontraba en el


establecimiento público denominado “Bar El Mesón”, ubicado en la calle “Guayaquilito” del
casco urbano del municipio de “Turbo”, cuando fue abordado por sujetos que se
encontraban en el mismo lugar, quienes se le acercaron y sin mediar palabra, le
dispararon hasta causarle la muerte.

80
Aunque en la audiencia de formulación de cargos se hizo referencia que la víctima se llamaba Lucio Torres Urango, de
acuerdo con el Registro Civil de Nacimiento No. 5079409 de la Notaría Única de Turbo (Antioquia), se pudo establecer que la
víctima respondía al nombre de LUCIANO TORRES URANGO. (Ver CD correspondiente al hecho 25)
81
Decisión del 31 de octubre de 2012.

36
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

97. HÉBERT VELOZA, confesó este hecho en versión libre realizada el 27 de noviembre
de 2007 y 9 de julio de 2008, manifestando que el homicidio fue cometido por José
Ruperto García, alias “El Gato”, y Forferinzo Flórez Arizal, alias “Montador”, quienes fueron
detenidos por miembros de la Policía Nacional y luego dejados en libertad.

Víctima Filadelfo Bertel Pérez


Elementos materiales de -Informe fechado el 2 de enero de 2009, mediante el cual se
prueba da cuenta de la inspección judicial realizada al proceso 2512
que se adelantó en la Fiscalía 83 Seccional de Turbo, por la
muerte del señor Bertel Pérez, y el cual fue suspendido
mediante resolución el 12 de abril de 1996.
-Acta de necropsia 95263 del 2 de octubre de 1995.
-Acta de levantamiento de cadáver del 1 de octubre de 1995
-Certificado de Defunción expedido por la Notaría Única de
turbo.
-Informe de Policía Judicial No. 0111 del 25 de marzo de
2008, mediante el cual se informa sobre las labores de
verificación de los hechos confesados por el postulado.
-Clip de versión libre del postulado José Ruperto García
Quiroga alias “El Gato”, realizada el 5 de diciembre de 2008,
en la que confesó su participación en el hecho.

Grado de participación y adecuación típica82:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 27: homicidio en persona protegida

98. El 6 de octubre de 1995, Samuel Antonio Jiménez Madera, administrador de la


finca denominada “Villa Sonia”, quien se desplazaba en su vehículo por la vía que conduce
de la Vereda San Jorge, corregimiento de “Nueva Colonia”, hacia el Corregimiento “Rio
Grande” del municipio de Turbo, fue interceptado, por hombres armados que le dispararon
en repetidas ocasiones hasta causarle la muerte, además se pudo establecer que hurtaron
el vehículo en que se transportaba la víctima, identificado con las placas JKF 658.

99. De acuerdo con la declaración de la señora Carmenza Jiménez Pineda, hija de la


víctima, su padre entró a la finca “Villa Aide” y recogió a sus tres nietas menores de edad,
con el fin de llevarlas al Colegio de Nueva Colonia. Posteriormente en el camino recogió a
tres hombres que necesitaban transportarse hasta el pueblo. Cuando se encontraban en el
sitio conocido como “Las partidas de Nueva Colonia”, el señor Jiménez Madera fue atacado
y recibió un tiro en la cabeza, las menores salieron corriendo y avisaron a sus familiares.
Horas después su cuerpo fue hallado en este sitio con varios impactos de arma de fuego.

82
Decisión del 31 de octubre de 2012.

37
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

100. Este hecho fue confesado por el postulado HÉBERT VELOZA, en diligencia de
versión libre realizada los días 27 de marzo y 24 y 25 de septiembre de 2008, en la que
manifestó que el homicidio del señor Samuel Antonio Jiménez Madera, fue ordenada por él
y ejecutada por Jesús Albeiro Guisao Arias alias ‘El Tigre’, alias “San Pedro”, Durbay
Enrique Durango Gómez, alias “Sancocho” y Carlos Vásquez, alias “Cepillo” (fallecido),
debido al señalamiento de supuestamente pertenecer a los comandos populares del EPL.

101. Mencionó además que Jesús Albeiro Guisao Arias, alias ‘El Tigre’, hurtó el vehículo
de propiedad del señor Jiménez Madera y lo dejó para trasladarse en la zona y cometer
otros delitos, al cual además le fueron cambiadas las placas y llevado a la zona de Necoclí
para trabajar83. Además informó que fue por orden de Carlos Castaño que se realizó este
homicidio, debido a que la víctima había sido señalada de pertenecer a los comandos
populares del EPL.

Víctima Samuel Antonio Jiménez Madera


Elementos materiales de -Informe No. 039 del 2 de enero de 2009, mediante el cual se
prueba da cuenta de la inspección judicial realizada al proceso 2529
que se adelantó en la Fiscalía 83 Seccional de Turbo, por la
muerte del señor Jiménez Madera, y el cual fue suspendido
mediante resolución el 12 de abril de 1996.
-Acta de necropsia 95549 del 6 de octubre de 1995.
-Certificado de defunción expedido por la Notaría Única de
Turbo.
-Declaración de la señora Margarita Jiménez Argel, hija de la
víctima.
-Informe No. 522 del 20 de 1995, suscrito por un investigador
del CTI, en el que se indica que al señor Jiménez Madera, le
fue hurtado un vehículo, al que le colocaron la placa AMC 361
de Bogotá y se lo llevaron a la zona rural del municipio de
Necoclí (Urabá antioqueño) para ser utilizada por ellos.
-Declaración de la señora Almida Claret Pineda Galindo,
compañera permanente del occiso.
- Entrevista a la señora Carmenza Jiménez Pineda, el 30 de
abril de 2009, hija de la víctima.
-Informe de Policía Judicial No. 173 del 6 de julio de 2009,
suscrito por el investigador Erney Rodrigo Rua Foronda,
mediante el cual se informa sobre las labores de verificación
de los hechos confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 264 OT 280 de 22 de
junio de 2011.

Grado de participación y adecuación típica84:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador
Hurto calificado y agravado art. 350 y 351. Determinador

83
Según Informe No. 522 de 20 de enero de 1995 del Cuerpo Técnico de Investigación.
84
Decisión del 31 de octubre de 2012.

38
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Hecho 28: homicidio en persona protegida

El 31 de octubre de 1995, en el sector conocido como “La Caleta”, corregimiento de “El


Tres”, municipio de Turbo, fueron hallados los cuerpos sin vida de los señores Celso
Lozano Casas y Euclides Cuesta Cuesta, los cuales presentaban varios impactos de arma
de fuego, también se pudo establecer que en el hecho fue hurtada una camioneta marca
Toyota Land Cruiser, de color blanco, de placas LHE 270 de Envigado85.

102. HÉBERT VELOZA GARCÍA, en diligencia de versión libre del 26 y 27 de noviembre


de 2007 y del 27 de marzo de 2008, reconoció haber dado la orden del asesinato y señaló
que el automotor lo dedicaron a la movilización de miembros de las AUC, que al vehículo
le quitaron la puerta trasera, “…para poder meter la gente ahí”, y fue conocido con el
nombre de “camino al cielo”;

103. A su vez, en diligencia de versión libre rendida por el postulado HÉBERT VELOZA,
el día 24 de septiembre de 2008, reconoció que los señores Lozano y Casas antes fueron
retenidos por alias “Estopín” y Rubén de Jesús Taborda Meneses, alias “Escudero” en un
retén que montaron en “El Tres” y después de darles muerte los dejaron en el
mencionado sector de “La Caleta”86.

Víctimas Celso Lozano Casas y Euclides Cuesta Cuesta.


Elementos materiales de -Informe No. 0120 del 25 de marzo de 2008, mediante el cual
prueba se da cuenta de la inspección judicial realizada al proceso
2573 que se adelantó por estos hechos en la Fiscalía 83
Seccional de Turbo, el cual fue suspendido mediante
resolución del 3 de mayo de 1996.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 267 OT 283 de 23 de
junio de 2011.
Celso Lozano Casas
-Acta de necropsia No. 95283 del 31 de octubre de 1995.
-Registro de Defunción No. 1682242 del 1 de noviembre de
1995.
- Entrevista al señor Alberto Luís Lozano Calderón, hijo del
señor Lozano Casas.
-Entrevista a la señora Aura Calderón Rodríguez, esposa del
señor Celso Lozano Casas.
Euclides Cuesta Cuesta
-Acta de necropsia No. 95282 del 31 de octubre de 1995.
-Registro de Defunción No.
-Declaración del señor Tarcilo Cuesta Cuesta, hermano del
señor Euclides Cuesta Cuesta.
-Entrevista al señor Exneider Cuesta Cuesta, hermano de la
víctima.
-Entrevista a la señora Rosalía Hernández Mena, esposa del
señor Euclides Cuesta Cuesta.
-Informe de Policía Judicial fechado el 21 de marzo de 2009,
mediante el cual se informa sobre las labores de verificación

85
Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 267 OT 283 de 23 de junio de 2011.
86
Ver Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 267 OT 283 de 23 de junio de 2011.

39
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

de los hechos confesados por el postulado.


-Clip de versión libre del postulado José Ruperto García
Quiroga alias “El Gato”, realizada el 5 de diciembre de 2008,
en la que confesó su participación en el hecho.

Grado de participación y adecuación típica87:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato
Hurto calificado y agravado art. 350 y 351. Autor Mediato

Hecho 29: homicidio en persona protegida

104. El 8 de noviembre de 1995, en la tienda conocida como “Los Laureles”, ubicada en


el barrio “Santo Domingo” del corregimiento “El Tres” del Municipio de Turbo, hombres
armados ingresaron al establecimiento y dispararon contra el señor Gustavo Alberto
Sepúlveda Zapata, hasta causarle la muerte.

105. Luego de asesinar al señor Sepúlveda Zapata, salieron del establecimiento público,
y se dirigieron a la residencia de la joven Beatriz Helena García López, ubicada en el sitio
conocido como “calle larga”, la sacaron de su residencia y le dispararon causándole la
muerte.

106. En diligencia de versión libre del 26 de noviembre de 2007, HÉBERT VELOZA


GARCÍA, confesó este hecho, y afirmó haber dado la orden de matar a estas personas, por
ser consideradas auxiliadores de la guerrilla. Manifestó además que la orden fue cumplida
por José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca” y Rubén de Jesús Taborda Meneses,
alias “Escudero”.

Víctimas Gustavo Alberto Sepúlveda Zapata y Beatriz Helena García


López.
Elementos materiales de -Informe fechado el 3 de febrero de 2009, mediante el cual se
prueba da cuenta de la inspección judicial realizada al proceso 2595
que se adelantó por estos hechos en la Fiscalía 63 Seccional
de Turbo, el cual fue suspendido mediante resolución del 13
de mayo de 1997.
Gustavo Alberto Sepúlveda Zapata:
-Acta de necropsia No. 95291 del 8 de noviembre de 1995.
- Declaración de la señora Sol María Jiménez, esposa de la
víctima.
-entrevista a la señora Mariela Zapata de Sepúlveda, madre de
la víctima.
Beatriz Helena García López:
-Acta de necropsia No. 95291 del 8 de noviembre de 1995.
-Certificado de Defunción expedido por la Notaría Única de
Turbo el 9 de noviembre de 1995.
-Registro Civil de Defunción No. 1682257 del 9 de noviembre
de 1995.

87
Decisión del 31 de octubre de 2012.

40
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

-Declaración del señor José Emilio García Salazar, padre de


Beatriz Elena García.
-Informes de Policía Judicial Nos. 127 del 8 de junio de 2009 y
401 del 19 de febrero de 2010, mediante el cual se informa
sobre las labores de verificación de los hechos confesados por
el postulado.

Grado de participación y adecuación típica88:


Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador
Secuestro simple art. 168. Determinador

Hecho 30: homicidio en persona protegida

107. El 16 de febrero de 1996, en horas de la tarde, el señor Arley de Jesús Caro


Zapata, salió de la finca “La Recanelia”, ubicada en el corregimiento de Nueva Colonia,
municipio de Turbo, con el fin de comprar unos pescados, pero nunca regreso. Fue visto
por última vez a la entrada de la finca “La Revancha”.

108. El señor Caro Zapata, era un desmovilizado del EPL (Ejército Popular de liberación),
y para la época de los hechos trabajaba en la finca “La Revancha”, había sido elegido por
sus compañeros como representante de los trabajadores ante el Comité de Sintrainagro
(Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria Agropecuaria).

109. En diligencia de versión libre los días 27 y 28 de noviembre de 2007, y 10 de julio


de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA, aceptó su responsabilidad por este hecho, manifestó
que le ordenó a Jesús Albeiro Guisao Arias alias “El Tigre”, darle muerte al señor Caro
Zapata, luego del señalamiento que sobre él se hiciera de ser auxiliador de la guerrilla.

110. Del cuerpo del señor Caro Zapata, se sabe que fue enterrado en la zona donde fue
asesinado, pese a los esfuerzos de la Fiscalía General de la Nación para localizar la fosa,
esto no ha sido posible.

Víctima Arley de Jesús Caro Zapata


Elementos -Inspección judicial al proceso 2462 que adelantaba en la Fiscalía 117
materiales de prueba Seccional de Apartadó, el cual se inició por denuncia presentada por la
señora Nelly Morales el 19 de enero de 2011.
-Entrevista a la señora Nelly Morales Chaverra, esposa de la víctima y
quien se encuentra en el programa de protección a víctimas y testigos.
-Declaración del señor Jaime Moreno, testigo de los hechos.
-Informe de Policía Judicial del 3 de febrero de 2010, sobre las labores
de verificación efectuadas.

88
Decisión del 31 de octubre de 2012.

41
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Grado de participación y adecuación típica89:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador

Hecho 31: homicidio en persona protegida

111. Según la información recopilada por la Fiscalía, el 18 de febrero de 1996, el señor


Famir Eduardo Machado Murillo, quien se desempeñaba como administrador de la finca “El
Ébano” del grupo Banadex, se movilizaba en un vehículo Suzuki (modelo 1987, tipo
campero, blanco, carpado) en la vía que conduce a la finca “Santa Marta limitada”,
ubicada en el corregimiento de Riogrande del municipio de Turbo, cuando fue asesinado
con impactos de arma de fuego.

112. Se establece, según denuncia instaurada el día 23 de abril de 1996 por la señora
Aimara Mina Julio, compañera del señor Machado Murillo, que el vehículo Susuki samurái
blanco modelo 1987, carpado, de placas EAO 493, de propiedad del señor Machado y en
el que el mismo se movilizaba el día de su muerte, fue hurtado, puesto que no volvió a
aparecer después de la misma90.

113. HÉBERT VELOZA, en versión libre del 27 de marzo de 2008, confesó que ordenó su
muerte, pues tuvo información de que Machado Murillo había transportado a algunos
guerrilleros, que días antes habían incursionado en la Finca “Mapaná” y habrían asesinado
a varias personas. Según su misma declaración en el hecho participaron Durbay Enrique
Durango Gómez, alias “Sancocho”, Diego Manuel Gómez, alias “Guajiro” y alias “Hanober”.

Víctima Famir Eduardo Machado Murillo.


Elementos - Informe de Policía Judicial No. 117 del 25 de marzo de 2008, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 No. 287 OT 303 de 22 de junio de
2011.
-Entrevista a la señora Aimara Mina Julio, compañera permanente de la
víctima.
-Acta de necropsia 96068 del 19 de febrero de 1996.
-Certificado de Defunción expedido el 20 de febrero de 1996 por la
Notaría Única de Turbo.
- Inspección judicial realizada al proceso rad 2832 adelantado en la
Fiscalía 83 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido, el 24 de
septiembre de 1996.

Grado de participación y adecuación típica91:

Delito Título
89
Decisión del 31 de octubre de 2012.
90
Ver Informe de Policía Judicial FPJ-11 No. 287 OT 303 de 22 de junio de 2011.
91
Decisión del 31 de octubre de 2012.

42
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador


Hurto calificado y agravado art. 350 y 351. Determinador

Hecho 32: homicidio en persona protegida92

114. El 4 de marzo de 1996, Ever David Zapata Palacio, se encontraba en la finca


bananera denominada “Villa Lupe” (Turbo, Antioquia), allí fue abordado por sujetos
armados que se identificaron como de las ACCU y lo obligaron a subirse a un vehículo
automotor que luego fue encaminado por la vía que conduce al corregimiento de “Nueva
Colonia” (que de Turbo conduce a Apartadó), posteriormente el cuerpo de Zapata Palacio
fue abandonado en la vía pública, en predios de la finca “Santa María”, en el municipio de
Apartado93.

115. Este hecho fue confesado por el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, en diligencia
de versión libre del 26 de noviembre de 2007 y 9 de julio de 2008, en la que manifestó
que en la muerte del señor Zapata Palacio participaron alias “Guajiro” y alias “Cheche”. En
la audiencia de formulación de cargos ante el Magistrado de Control de Garantías del
Tribunal Superior de Medellín, HÉBERT VELOZA GARCÍA, manifestó que no participó de
manera directa en el hecho.

Víctima Ever David Zapata Palacio


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0233 del 20 de septiembre de 2008,
materiales de prueba mediante el cual se informa sobre las labores de verificación de los
hechos confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 268 OT 303 de 23 de junio de
2011.
-Acta de necropsia 97072 del 4 de febrero de 1997.
-Registro Civil de defunción del 5 de febrero de 1997.
-Entrevista a la señora Lina Marcela Zapata Palacio, hermana de la
víctima.
-Entrevista a la señora Heroína Palacio Zapata, madre del occiso.
-Entrevista a la señora Ennis Mira Pérez.

Grado de participación y adecuación típica94:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador
Secuestro simple art. 168. Determinador

Hecho 33: homicidio en persona protegida

116. El día 13 de marzo de 1995, en el casco urbano del municipio de Turbo, en la zona
conocida como “La calle del comercio”95, fue asesinado el señor José Jesús Gómez Giraldo,

92
Según diligencia de versión libre realizada al postulado HÉBERT VELOZA del día 26 de noviembre de 2007.
93
Ver Acta de diligencia de levantamiento de cadáver Nro. 064 de 04 de febrero de 1997.
94
Decisión del 31 de octubre de 2012.
95
Según Acta 033 del 13 de marzo de 1995 de diligencias de inspección a cadáver, fue más exactamente en la Carrera 14
Nro. 103 – 12, en el municipio de Turbo.

43
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

en momentos en que se encontraba atendiendo una venta de carne, la víctima


regularmente se dedicaba a la comercialización de ganado.

117. En versión libre del 27 de marzo de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó el
hecho y manifestó que éste fue cometido por Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”, José
Huber Coca Ceballos alias “Huber Coca”, José Ruperto García, alias “el gato”, Wilmer
Aguado Álvarez alias “Carro loco” y Forferinzo Flórez Arizal alias “Montador”, por orden
dada por él, pues la información que tenía era que el señor Gómez Giraldo tenía vínculos
con un grupo guerrillero.

Víctima José Jesús Gómez Giraldo


Elementos -Inspección judicial realizada al proceso rad 2030 adelantado en la
materiales de prueba Fiscalía 83 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido, el 23 de octubre
de 1995.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 265 OT 281 de 03 de febrero de
2010.
-Acta de diligencias de inspección a cadáver 033 del 13 de marzo de
1995.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de marzo de 1995.
-Acta de necropsia 95052 del 13 de marzo de 1995.
-Registro Civil de Defunción No. 1223511 del 29 de marzo de 1995.
-Entrevista al señor Gildardo Gómez Giraldo, hermano del occiso.

Grado de participación y adecuación típica96:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador

Hecho 34: homicidio en persona protegida

118. El 15 de marzo de 1996, Eleuterio Zambrano Palencia, se encontraba en la finca


“Los Bongos”, ubicada en la comunal “San Jorge”, jurisdicción del municipio de Turbo,
realizando una instalación eléctrica. A la finca llegaron hombres armados, quienes
solicitaron a todos los trabajadores que exhibieran sus cédulas de ciudadanía; cuando el
señor Zambrano Palencia se identificó, lo inmovilizaron, le ataron las manos y lo
condujeron al interior de un cultivo de banano, desde ese momento no se supo más de su
paradero.

119. Este hecho fue confesado por HÉBERT VELOZA, en diligencia de versión libre
llevada a cabo los días 26 de noviembre de 2007 y 9 de julio de 2008, en la que manifestó
que de acuerdo con la información que le fue suministrada, el señor Zambrano Palencia,
dada su actividad de electricista, se desplazaba por diferentes fincas del sector, con el fin
de ubicar los sitios en donde se encontraban radicados miembros de las autodefensas,

96
Decisión del 31 de octubre de 2012.

44
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

para luego informarle a la guerrilla, y fue ésta la razón por la que le ordenó a Durbay
Enrique Durango Gómez alias “Sancocho”, y a alias “Espitia” y “Cheche”, que lo retuvieran
y asesinaran, como en efecto ocurrió. En cuanto al paradero de los restos del señor
Eleuterio Zambrano Palencia, se están adelantando las investigaciones con los demás
integrantes del grupo para informar el sitio en el que fue enterrado.

Víctima Eleuterio Zambrano Palencia


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 020 del 18 de marzo de 2009, suscrito
materiales de prueba por la investigadora Sandra Nohelly Monsalve Rojas, mediante el cual se
informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
-Informe de Policía Judicial del 24 de abril de 2010, mediante el cual se
informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado y anexa formato único de entrevista, diligenciado por la
señora Sandiego Zambrano Palencia.
-Entrevista a la señora Sandiego Zambrano Palencia, hermana de la
víctima, realizada el 6 de marzo de 2009.
- Informe de Policía Judicial No. 102 del 25 de mayo de 2009, suscrito
por el investigador Juvenal Montoya Vélez, mediante el cual se informa
de la inspección judicial realizada al proceso adelantado en la Fiscalía
Seccional de Turbo.

Grado de participación y adecuación típica97:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador
Desaparición forzada art. 165. Determinador

Hecho 35: homicidio en persona protegida

120. El 10 de junio de 1995, hombres armados llegaron hasta el barrio “Chucunate”,


ubicado en el centro del casco urbano del municipio de Turbo, y dispararon en seis
oportunidades contra el señor Pedro Pablo Bran Garcés, quien laboraba en la finca
bananera conocida como “Berlín”.

121. En diligencia de versión libre rendida los días 27 de noviembre de 2007 y 9 de julio
y 24 de septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó este hecho y aceptó su
participación directa en el mismo; junto a él participaron Enrique Mestra Yanes, alias
“Wilson”, José Ruperto García, alias “El Gato”, Wilmer Aguado Álvarez, alias “Carro Loco”,
José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca” y Forferinzo Flórez Arizal, alias “Montador”.

122. Frente a este hecho, el postulado refirió que al igual que en múltiples casos, “…en
los que murieron personas inocentes…”, el móvil siempre fue el mismo, el tener
información de la supuesta pertenencia a grupos subversivos.

97
Decisión del 31 de octubre de 2012.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Víctima Pedro Pablo Bran Garcés


Elementos -Informe fechado No. 044 del 4 de febrero de 2009, mediante el cual se
materiales de prueba da cuenta de la inspección judicial realizada al proceso 5879 que se
adelantó por estos hechos en la Fiscalía Seccional de Turbo.
-Entrevista a la señora Flor Edilia Bran, hermana del occiso.
- Informe No. 0266 del 24 de noviembre de 2008, mediante el cual se
informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
-Certificado de Defunción expedido el 16 de junio de 1995 por la Notaría
Única de Turbo.
-Acta de necropsia 95136 del 11 de junio de 1995.
-Clip de versión libre rendida por José Ruperto García, alias “el gato” el 5
de diciembre de 2008, en el que confiesa su participación en los hechos
ocurridos el 10 de junio de 1995.

Grado de participación y adecuación típica98:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor

Hecho 36: homicidio en persona protegida

123. El 15 de noviembre de 1995, en horas de la noche, hombres fuertemente armados


y vestidos con prendas de uso privativo de las fuerzas militares e identificándose como
tales, llegaron hasta la finca “Mi Ranchito”, ubicada en la vereda “La Esperanza”, entre “El
Dos” y el “El Tres”99, jurisdicción del municipio de Turbo, procedieron a realizar una
requisa a las viviendas de los señores José Daniel Cantero Martínez e Ismael Antonio
Martínez Quintero, a quienes posteriormente inmovilizaron, amarraron y asesinaron con
armas de fuego.

124. En versión libre rendida los días 27 de noviembre de 2007, 9 de julio y 24 de


septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó este hecho e informó que
hombres bajo su mando fueron responsables de darle muerte a los señores José Daniel
Cantero Martínez e Ismael Antonio Martínez Quintero, entre ellos, Rubén de Jesús Taborda
Meneses, alias ”Escudero”, Carlos Vásquez, alias “Cepillo”, Lorenzo Córdoba Álvarez, alias
“Barbas” y alias “Estopín”.

Víctimas José Daniel Cantero Martínez e Ismael Martínez Quintero.


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 095 del 24 de marzo de 2008, suscrito
materiales de prueba por el investigador Jaime Henao Arteaga, mediante el cual se informa
sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
-Informe de Policía Judicial No. 036 del 18 de marzo de 2009, suscrito
por el investigador Erney Rodrigo Rua Foronda, mediante el cual se
informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
-Inspección judicial proceso radicado bajo el número 1034385 que se
adelantó en la Fiscalía 16 Especializada de Medellín por la muerte de los
98
Decisión del 31 de octubre de 2012.
99
Según diligencia de versión libre realizada al postulado HÉBERT VELOZA, del 24 de septiembre de 2008.

46
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

señores José Daniel Cantero Martínez e Ismael Martínez Quintero.


José Daniel Cantero Martínez:
-Entrevista a la señora Evangelina Isabel Martínez Ramos, madre del
occiso.
- Acta de necropsia No. 95302 del 16 de noviembre de 1995.
-Certificado de defunción expedido el 13 de septiembre de 1996, por la
Notaría Única de Turbo.
Ismael Martínez Quintero:
- Acta de necropsia No. 95301 del 15 de noviembre de 1995.
-Certificado de defunción expedido el 13 de septiembre de 1996, por la
Notaría Única de Turbo.

Grado de participación y adecuación típica100:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 37. Masacre en el billar “El Golazo”:

125. El miércoles santo 3 de abril de 1996, aproximadamente a las 7:30 de la noche, en


el barrio “Policarpa Salavarrieta”101 del municipio de Apartadó (Antioquia), un grupo
aproximado de 20 sujetos que portaban armas de corto y largo alcance, y que se
movilizaban en una camioneta Toyota Hilux de color blanco, tipo estacas, sin placa y en
dos motocicletas de alto cilindraje, hicieron su arribo a este lugar y procedieron a
distribuirse estratégicamente por diferentes sitios del barrio, entre otros en el billar “El
Golazo”; el establecimiento comercial “La Charcutería”; los supermercados “Rambo” y
“Comunal” y el granero “El Pino”, luego de lo cual procedieron a disparar de forma
indiscriminada contra quienes se encontraban en el establecimiento público “El Golazo” y
sus alrededores. Está incursión armada arrojó como resultado la muerte de diez personas
y otras heridas, de las cuales cuatro han sido identificadas.

126. Por estos hechos la Fiscalía General de la Nación adelantó la investigación 492 en
la Unidad de Derechos Humanos, y el 23 de octubre de 1997, se profirió resolución
acusatoria en contra de Manuel Salvador Giraldo Urriago alias “El Perro”; Diego Manuel
Gómez Guerra, alias “El Guajiro” y Arnulfo Caicedo Córdoba, alias “Caicedo”; Durbays
Enrique Durango Gómez, alias “Sancocho”; Albeiro Antonio Guisao Martínez, Dadivo Ángel
López Urrego, Alexon Mosquera Caicedo y José Abel Bermúdez Murillo. Y el 29 de junio de
2006, la Fiscalía 35 de la Unidad de DH y DIH, emitió resolución de preclusión de la
investigación a favor de Fredis Alonso Miranda González, alias “Vampiro o Patica Mala”.

127. En diligencia de versión libre rendida los días 26 de noviembre de 2007, 26 de


marzo y 24 y 25 de septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó este hecho, y
100
Decisión del 31 de octubre de 2012.
101
El Policarpa Salavarrieta es un barrio de invasión de Apartadó que para la época de los hechos estaba habitado en su
mayoría por simpatizantes de la Unión Patriótica (UP) y el Partido Comunista. (Diario El Tiempo abril 4 de 1996)

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

narró como Dadivo Ángel López Urrego, alias “Ratón”, un desmovilizado del EPL, le
informó que en el billar conocido como “El Golazo”, se reunirían algunos insurgentes para
planear acciones en Apartadó. Fue entonces cuando decidió informarle a Carlos Castaño y
a alias "Rodrigo Doble Cero", quienes impartieron la orden para asesinar o capturar a
estas personas.

128. HÉBERT VELOZA, atendiendo las instrucciones de sus comandantes, le ordenó a


Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre”, que preparara la incursión paramilitar al barrio
“Policarpa Salavarrieta”, y le indicó que Dadivo Ángel López Urrego, alias “Ratón”, sería el
encargado de señalarle a las personas que debía ejecutar, que la noche de los hechos
estarían reunidos en el billar “El Golazo”.

129. Indicó alias “HH”, que además de Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre” y
Dadivio Ángel López Urrego, alias “Ratón”, en esta masacre participaron Durbay Enrique
Durango Gómez, alias “Sancocho”, Diego Manuel Gómez Guerra, alias “Guajiro”, Manuel
Salvador Giraldo Urriago, alias “El Perro”, Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”, y alias
“Manito”.

Víctimas Del delito de Homicidio:


Willington Restrepo Sepúlveda, Abel Antonio Areiza Zapata, Gabriel
Areiza Ortiz, Antonio José Zapata Borja, Javier Luís Mora Estrada, Raúl
Antonio Usuga Duarte, Marleny de Jesús Borja, Lisandro Oviedo
Mendoza, Javier Orlando Ocampo Arias y Mayibis Arcia Beltrán.
Del delito de tentativa de homicidio:
Luz Dary Viloria Arrieta, Sandy Didson Arrieta, Iván Darío Londoño,
Javier Vergara Marín y Luís Eduardo Naranjo Jiménez.
Elementos -Informe de Policía Judicial No. 247 del 6 de octubre de 2008, suscrito
materiales de prueba por el investigador Luís Fernando Giraldo García, mediante el cual se
informa sobre la inspección judicial realizada al proceso 0492 que se
adelantaba en la Fiscalía 35 de la Unidad de Derechos Humanos.
-Informe de Policía Judicial No. 229 del 14 de agosto de 2009, suscrito
por el investigador Erney Rodrigo Rua Foronda, mediante el cual se
informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
-Inspección judicial realizada al proceso 492 que por estos hechos se
adelantó en la Unidad de Derecho Humanos de la Fiscalía 21
Especializada de Medellín.
Del delito de Homicidio:
Willington Restrepo Sepúlveda:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 3 de abril de 1996.
- Acta de necropsia No. 96147 del 3 de abril de 1996.
-Registro Civil de Defunción expedido por la Notaría Única de Apartadó,
del 8 de abril de 1996.
-Entrevista a los señores José Uriel Restrepo Durango y Luz Melida
Sepúlveda Ramírez, padres de la víctima.
-Entrevista al señor Frank David Restrepo Sepúlveda, hermano del
occiso.
Antonio José Zapata Borja:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

-Acta de necropsia No. 0144, fechada el 3 de abril de 1996.


-Acta de levantamiento de cadáver del 3 de abril de 1996.
-Entrevista al señor Antonio de Jesús Zapata Castañeda, padre de las
víctimas Antonio José Zapata Borja y Marleny de Jesús Borja.
-Entrevista a la señora Romelia de Jesús Zapata Borja, hermana del
occiso.
Marleny de Jesús Borja:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de necropsia No. 0144, fechada el 3 de abril de 1996.
-Acta de levantamiento de cadáver del 3 de abril de 1996.
-Registro Civil de Defunción No. 1048261 expedido por la Notaría de
Apartadó, del 11 de junio de 1996.
Jaime Luís Mora Estrada: (15 años de edad)
-Acta de necropsia No. 0146, fechada el 3 de abril de 1996.
-Acta de levantamiento de cadáver del 3 de abril de 1996.
-Registro Civil de Defunción No. 1048161 expedido por la Notaría de
Apartadó, el 9 de abril de 1996.
-Entrevista a la señora Jovita de la Cruz Estrada Castillo, madre de la
víctima.
Javier Orlando Ocampo Arias:
-Acta de necropsia No. 0151, fechada el 3 de abril de 1996.
-Acta de levantamiento de cadáver del 3 de abril de 1996.
-Registro Civil de Defunción No. 1048155 expedido por la Notaría de
Apartadó, el 8 de abril de 1996.
-Entrevista a la señora Blanca Nelly Graciano, esposa del señor Ocampo
Arias.
Raúl Antonio Usuga Duarte:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 3 de abril de 1996.
- Acta de necropsia No. 96152 del 4 de abril de 1996.
-Registro Civil de Defunción No. 1048157 expedido por la Notaría Única
de Apartadó, del 8 de abril de 1996.
-Entrevista a la señora Luz Dary David Terán, compañera permanente de
la víctima.
Lisandro Oviedo Mendoza:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 3 de abril de 1996.
-Registro Civil de Defunción No. 1048260 expedido por la Notaría Única
de Apartadó, del 11 de junio de 1996.
-Entrevista a la señora Elsy del Carmen Oviedo Algarín, hija del occiso.
Gabriel Areiza Ortiz:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
- Acta de necropsia No. 96153 del 4 de abril de 1996.
-Acta de levantamiento de cadáver del 3 de abril de 1996.
-Registro Civil de Defunción No. 1048152 expedido por la Notaría Única
de Apartadó, del 8 de abril de 1996.
-Entrevista a la señora María del Carmen Ortiz de Areiza, madre del
occiso.
Nayibis Arcia Beltrán: (10 años de edad)
- Acta de necropsia No. 96148 del 4 de abril de 1996.
-Acta de levantamiento de cadáver del 3 de abril de 1996.
-Registro Civil de Defunción No. 1048156 expedido por la Notaría Única
de Apartadó, del 9 de abril de 1996.
Abel Antonio Areiza Zapata:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
- Acta de necropsia No. 96149 del 4 de abril de 1996.
-Acta de levantamiento de cadáver del 3 de abril de 1996.
-Registro Civil de Defunción No. 1048156 expedido por la Notaría Única
de Apartadó, del 8 de abril de 1996.
Del delito de tentativa de homicidio:
Luz Dary Viloria Arrieta:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

-Entrevista realizada a la señora Luz Dary Viloria Arrieta, quien manifestó


que ella y su sobrina Sandy Didson Arrieta de 14 años de edad, y quien
ahora figura en la Registraduría con el nombre de Natalia Paola Arias
Didson, resultaron heridas en los hechos conocidos como la masacre “El
Golazo”.
-Entrevista a la señora Natalia Paola Arias Didson,
Javier Vergara Marín:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
Iván Darío Londoño
Luís Eduardo Naranjo Jiménez: Faltan pruebas
-Copia de la historia Clínica.
- Constancia del sindicato nacional de trabajadores de la industria
agropecuaria SINTRAINAGRO seccional de Carepa (Antioquia), de fecha
11 de diciembre de 2008, donde hace constar que Luis Eduardo Naranjo
Jiménez, perteneció como dirigente sindical en el cargo de fiscal desde
1994 hasta 1996, firmado por Never Ortiz como vicepresidente.
-Reconocimiento de evaluación de incapacidad del señor Luis Eduardo
Naranjo Jiménez de medicina legal de fecha 08 de Abril de 1998, dirigido
a la Doctora María Cecilia Machado Villamizar de la Red de Solidaridad
Social trabajo con Desplazados y víctimas de la violencia de la
Delegación de Córdoba, firmado por el Médico legista Código No. 1007-
1, por las lesiones presentadas el día 03 de Abril de 1996, en la cual
concluyen como secuelas medico legales: “deformidad que afecta el
rostro y perturbación funcional del órgano de la visión, ambas de
carácter permanente, de acuerdo con la tabla de evaluación de
incapacidades del código sustantivo del trabajo contenidas en su artículo
209 la deformidad física que afecta el rostro produce una merma de la
capacidad laboral del 5% y la perturbación funcional del órgano de la
visión(perdida del ojo) 50% de la capacidad laboral”. Para lo cual anexa
tres folios que incluye la historia clínica.
Estudio tomográfico de orbitas realizado por el centro Radiológico
Conquistadores S.A. No. 16435 de fecha 20 de Abril de 1996 con dos
folios firmado por la doctora Olga Arango Arboleda medica radióloga.

Grado de participación y adecuación típica 102:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1, Determinador
en la modalidad de tentativa.
Actos de terrorismo art. 144. Determinador

Hecho 38: homicidio en persona protegida

130. El 29 de diciembre de 1996, siendo aproximadamente las cuatro de la tarde, dos


hombres armados llegaron hasta la vivienda de la señora Carmen Rosiris Alemán Pacheco,
ubicada en finca “Yerbazal”, sector de “El Trapiche”, corregimiento “Río Grande”,
jurisdicción del municipio de Turbo (Antioquia), y la obligaron a marcharse con ellos,
amenazándola y diciéndole que alias “Cheche”, necesitaba hablar con ella. Horas después
su cuerpo fue encontrado con varios impactos de arma de fuego en la cabeza, en la vía
que del corregimiento de “Río Grande” conduce al corregimiento de “Nueva Colonia”.

102
Decisión del 31 de octubre de 2012.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

131. En versión libre del 26 de noviembre de 2007 y 27 de marzo de 2008, HÉBERT


VELOZA, confesó y aceptó su responsabilidad por la muerte de la señora Alemán Pacheco,
y manifestó que en el hecho participaron Diego Manuel Gómez Guerra, alias “Guajiro” y
alias "Cheche”, quienes seguían órdenes impartidas por Jesús Albeiro Guisao Arias, alias
“El Tigre”; y éste a su vez órdenes directas de HÉBERT VELOZA.

132. Según declaración del 25 de febrero de 2009, ante funcionarios de la Unidad


Nacional de Justicia y Paz, Sandra Patricia Carvajal Alemán (hija de la fallecida), el motivo
de la muerte de su madre fue haber sido acusada de ser presunta auxiliadora de la
guerrilla, ya que se encontraba vinculada sentimentalmente con el señor Elkin Cuesta,
quien para la época pertenecía a las milicias de la guerrilla103.

Víctima Carmen Rosiris Alemán Pacheco


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 090 del 24 de marzo de 2008, suscrito
materiales de prueba por el investigador Jaime Henao Arteaga, mediante el cual se informa
sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
- Informe de Policía Judicial No. 39 del 15 de marzo de 2009, suscrito
por el investigador Elkin de J. Rodríguez Porras, mediante el cual se
informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 271 OT 287 de 23 de junio de
2011.
-Inspección judicial realizada al proceso 3546 que se adelantaba en la
Fiscalía Seccional de Turbo, y que fue suspendido el 12 de marzo de
1998.
- Acta de necropsia No. 96667 del 30 de diciembre de 1996.
-Certificado de defunción expedido el 28 de octubre de 1997, por la
Notaría Única de Turbo.
-Entrevista a la señora Sandra Patricia Carvajal Alemán, hija de la
víctima.

Grado de participación y adecuación típica104:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato
Secuestro simple art. 168. Autor Mediato

Hecho 39: homicidio en persona protegida

133. El 19 de diciembre de 1994, siendo aproximadamente las 7:30 de la noche, un


grupo de hombres armados a bordo de un automóvil tipo Mazda de color blanco de placas
247, una camioneta Toyota cromada105 y una motocicleta, llegaron hasta el barrio las
Acacias, calle 57 No. 54-23 del municipio de Itagüí (Antioquia), ingresaron de manera
violenta, encerraron en el baño a la señora Gilma Doris Jiménez Guerrero con sus menores
hijas y se llevaron al señor Leonidas de Jesús Gómez.

103
Ver informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 271 OT 287 de 23 de junio de 2011.
104
Decisión del 31 de octubre de 2012.
105
Ver Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 319 OT 335 de 23 de junio de 2011.

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134. Siendo las diez de la noche de ese mismo día, el señor Leonidas de Jesús Gómez,
se comunicó telefónicamente con su familia y les informó que se encontraba en las
instalaciones del DAS. Dos días después y al ver que el señor Gómez no aparecía, su
esposa fue a buscarlo a los calabozos del DAS, pero allí le informaron que él nunca había
ingresado. Dice la señora Jiménez Guerrero que cuando recorrió el parqueadero del DAS,
pudo verificar que allí se encontraba parqueado el vehículo Mazda, color blanco, de placas
247, el mismo en el que fue subido su esposo la noche anterior. Hasta el momento no se
tiene noticia sobre el paradero de la víctima.

135. En diligencias de versión libre realizada el 27 de noviembre de 2007 y 24 de


septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA, confesó este hecho, aceptó su responsabilidad en
el mismo, y manifestó que: “…el señor Leonidas fue secuestrado por orden de Carlos
Castaño; que fue informado que el señor Leonidas vendía armas a las FARC y al EPL;
Carlos fue el que quedó encargado de Leonidas y por versión del mismo Carlos la iglesia
había mediado para su liberación y eso no se dio…”.

136. En versión libre llevada a cabo el 24 de septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA,


informó que si bien, se han hecho las averiguaciones necesarias para dar con el paradero
del cuerpo del señor Leonidas Gómez, con los demás integrantes del grupo armado ilegal
que participaron en el hecho o que conocieron en dónde pudo haber sido sepultado, aún
no ha sido posible la ubicación de la fosa. Esto dijo al respecto: “…la versión pasada me
había comprometido con la esposa del señor Leonidas, hemos tratado de ubicarlo y la vez
pasada di la dirección de una casa en el Poblado106, donde podría estar enterrado y no fue
encontrado por la Fiscalía; Carlos Castaño, por un allanamiento que hubo en esa casa
posiblemente saco algunos cuerpos de esa casa y estamos pendientes de una persona que
conoce bien el sitio para ir y sino ahí si se perdería el rastro del lugar donde se encuentra
esta persona. (…) Mi intereses es ubicar el cuerpo de este señor y me he entrevistado con
el muchacho que nos está dando información y dice que parece que fue arrojado al río
Medellín la orden de CARLOS era sacar los cuerpos y arrojarlos al río Medellín porque el
sitio donde fue enterrado el cuerpo no se encuentra…”.

Víctima Leonidas de Jesús Gómez


Elementos materiales -Informe de Policía Judicial No. 045 del 5 de febrero de 2009,
de prueba mediante el cual se da cuenta de la inspección judicial realizada al
proceso rad 462 S-94 adelantado en la Fiscalía de Itagüí, el cual fue
archivado el 5 de julio de 1995.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 319 OT 335 de 23 de junio de
2011.
106
En diligencia de audiencia de formulación de cargos del 7 de mayo de 2010, HÉBERT VELOZA GARCÍA, manifestó que
esta vivienda le fue incautada a alías “El Arete” lugarteniente de Pablo Escobar Gaviria, y que estando en manos de la
autoridades hacia como oficina para las reuniones de las Autodefensas y para secuestrar y asesinar personas.

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-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.


-Copia de la denuncia presentada el 19 de diciembre de 1994, por la
señora Gilma Doris Jiménez Guerrero ante la inspección de policía de
Itagüí.
-Entrevista a la señora Gilma Doris Jiménez Guerrero, esposa del señor
Leonidas Gómez y testigo presencial de los hechos.
-Entrevista al señor Erneyson Gómez Graciano, hijo de la víctima.

Grado de participación y adecuación típica107:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor
Desaparición forzada art. 165. Coautor

Hecho 40: Caso “La Mojana” (homicidio en persona protegida y desaparición


forzada)

137. El 28 de marzo de 2000, en el barrio “Pablo Escobar” de la ciudad de Medellín, los


ciudadanos Oswar Alexis Urrego Valencia, Álvaro de Jesús Gómez Álzate, Juan Bautista
Durango Guerra, Abdón Alberto Guisao y Víctor David Valdez Duarte, salieron de sus
respectivos hogares con el fin de jugar un partido de futbol. De acuerdo con algunos
testigos, estas personas se subieron a un carro blanco el cual tomó un rumbo
desconocido.

138. Tres días después, esto es, el 31 de marzo de ese mismo año, regresó al barrio
uno de los jóvenes que hacían parte del grupo mencionado anteriormente. Esta persona,
conocida como César informó a las familias: “que a ellos les habían hecho una propuesta
de trabajo, en la cual iban a recibir muy buenos ingresos, la propuesta era que se tenían
que ir por un espacio de dos meses. Pero que esas promesas resultaron falsas, ya que la
noche en que los llevaron… nos recogió una camioneta blanca y nos metieron río adentro
por varias horas (cerca al río Nechí)… en un momento determinado llegamos hasta un
campamento que al parecer era paramilitar… después de estar allí un comandante llamado
Ramón Mojana les informó que ellos estaban ahí porque iban hacer parte de esas fuerzas
armadas paramilitares, y que quienes no quisieran iban a ser asesinados… así fue como
fueron presionados y obligados a vertir unos uniformes sucios… en un descuido de ellos
logré escapar…” 108.

139. El postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, luego de que se le pusiera de presente la


fotografía de dos de las personas desaparecidas, se refirió a este hecho en diligencia de
versión libre llevada a cabo los días 6, 7 y 28 de marzo y 9 de julio de 2008, en la que

107
Decisión del 31 de octubre de 2012.
108
Relato expuesto en la denuncia presentada ante el CTI de la Fiscalía General de la Nación en febrero de 2007, por
señoras madres de las víctimas.

53
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manifestó que109: “…alias “Samuel”, quien era un piloto retirado de las fuerza aérea y
quien le vendía los helicópteros a Mancuso, secuestró en Bucaramanga a un señor que
supuestamente era testaferro de la guerrilla…. Alguna persona cercana a los Castaño les
informó del secuestro del presunto testaferro de la guerrilla…”.

140. Ante esta situación Vicente Castaño envió a alias “HH” para que fuera hasta la
Mojana e indagara lo que estaba sucediendo, a su regreso HÉBERT VELOZA, le informó a
Vicente que este señor: “puede tener plata pero que no era guerrillero ni testaferro de la
guerrilla”. Luego de corroborar esta información, Vicente Castaño, citó a “Samuel” quien
fue asesinado por haber realizado este secuestro sin autorización. Posteriormente VELOZA
GARCÍA fue enviado a la Mojana para que le informara a “Ramón Mojana” que debía
liberar al señor secuestrado, que además debías “ajusticiar” a las personas que trabajaban
con “Samuel” y que debían arrojaran sus cuerpos al río Cauca.

141. HÉBERT VELOZA se limitó a transmitir la orden dada por Vicente Castaño, pero no
supo con exactitud qué fue lo que hizo alias “Ramón Mojana”. Al parecer las personas que
salieron de Medellín e iban a ser “reclutadas” a las autodefensas se encontraban en ese
momento en el campamento en el cual estaba la persona secuestrada y “Ramón Mojana”
decidió “deshacerse” de ellos. Cuando alias “HH” llegó a la región de la Mojana encontró
que: “había una gente de “Ramón Mojana” entrenando a esos muchachos, les pregunté
qué estaban haciendo y me dijo que “Samuel” los estaba entrenando para hacer unos
trabajos en Medellín…”. Tampoco le es posible indicar el sitio o la fecha en que fueron
muertos, pues no recordaba este hecho y ni siquiera “tenía previsto confesar”.

142. Aun así, en diligencias de versión libre realizadas los días 29 de Mayo y 9 de julio
de 2008, HÉBERT VELOZA, confiesa que si bien él no dio la orden de matar a esos 5
muchachos, pues la orden provino de “Ramón Mojana”; después de investigar sobre el
hecho, logro establecer que ese hecho ocurrió en La Mojana, pero que los cuerpos fueron
arrojados al Rio Cauca mientras los transportaban en lancha a unos 15 o 20 minutos de
“San Jacinto”110, por los motivos ya expuestos. HEBERT VELOZA le solicitó a la Fiscal
Delegada, que este hecho se le ponga de presente a las personas desmovilizadas del
frente “La Mojana”, a fin de que se tengan más elementos que les permita a los familiares
de las víctimas aclarar lo sucedido.

109
Se refiere a las señoras madres y familiares de los señores Oswar Alexis Urrego Valencia, Álvaro de Jesús Gómez Álzate,
Juan Bautista Durango Guerra, Abdón Alberto Guisao y Víctor David Valdez Duarte, quienes hicieron presencia en las
diferentes diligencias de versión libre de varios de los postulados al proceso de Justicia y Paz, con el fin de indagar por la
suerte de sus seres queridos.
110
Según diligencia de versión libre de 29 de mayo de 2008 donde HÉBERT VELOZA dice lo siguiente, según transcripción:
“Salimos de CAUCASIA en lancha, llegamos a SAN JACINTO donde permanecía la gente de RAMON MOJANA, allí fuimos y
hablamos con RAMON y en SAN JACINTO por este sector (señala en mapa) fueron arrojados los muchachos. Por ahí a unos
15 o 20 minutos de SAN JACINTO, en lancha.”

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143. Como quiera que no va a ser posible la recuperación de los cuerpos de los señores
Oswar Alexis Urrego Valencia, Álvaro de Jesús Gómez Álzate, Juan Bautista Durango
Guerra, Abdón Alberto Guisao y Víctor David Valdez Duarte, la Fiscalía General de la
Nación, en un acto simbólico hizo entrega de los cuerpos a las señoras madres y a sus
familiares.

Víctimas Oswar Alexis Urrego Valencia, Álvaro de Jesús Gómez Álzate, Juan
Bautista Durango Guerra, Abdón Alberto Guisao y Víctor David Valdez
Duarte.
Elementos -Informe de Policía Judicial No. 046 del 5 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se da cuenta de la inspección judicial realizada al proceso rad 5-
1-10405, adelantado en la Fiscalía Seccional de Medellín, donde figuran
como desaparecidos las personas aquí registradas.
- Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 316 OT 332 de 30 de junio de
2011.
-Denuncia presentada ante el CTI de la Fiscalía General de la Nación por
las señoras Gilma Rosa Guerra Higuita, María Lilian Álzate, María Irene
Valencia García y Aura Guisao Celada.
-Copia de las tarjetas de preparación de las cédulas de ciudadanía de
cada una de las víctimas.
-Entrevista a la señora María Irene Valencia García, madre de Oswar
Alexis Urrego Valencia.
-Entrevista a la señora María Lilian Álzate de Gómez, madre de Álvaro de
Jesús Gómez Álzate.
-Entrevista a la señora Gilma Rosa Guerra Higuita, madre de Juan
Bautista Durango Guerra.

Grado de participación y adecuación típica111:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato
Desaparición forzada art. 165. Autor Mediato

Hecho 41: homicidio en persona protegida

144. El 22 de marzo de 1998 en la vereda “El Porvenir”, sector de “Villa María” en la vía
principal que del municipio de Turbo conduce al Municipio de Necoclí, fue hallado el
cuerpo del señor Omar Albeiro Cuesta Montero, el cual presentaba varios impactos de
arma de fuego.

145. De acuerdo con la declaración de la señora Edith María Montero Cerda, su hijo salió
ese día en la mañana para el municipio de Turbo, y cuando regresaba, el vehículo de
servicio público en el que se movilizaba fue interceptado por dos sujetos que se
transportaban en una motocicleta, obligaron al señor Omar Albeiro que descendiera y le
ordenaron al conductor que continuara la marcha, cuando las demás personas que se
encontraban en el automotor voltearon para mirar lo que sucedía, advirtieron como le
dispararon hasta causarle la muerte.

111
Decisión del 31 de octubre de 2012.

55
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

146. En versión libre del 9 de julio y 24 de septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA,


confesó y aceptó su responsabilidad por la muerte del señor Omar Albeiro Cuesta
Montero, y manifestó que en el hecho participaron Alejandro Ortega, alias “Grandulón”112
y Jonavis de Jesús Ávila Villadiego, alias “Chiquito Malo”, quienes eran hombres bajo su
mando, añadiendo además que el hecho ocurrió en la Vereda Camerún, un sitio conocido
de la playa de Turbo113.

147. En sesión de versión libre del 24 de septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA


manifestó que este: “fue un hecho que cometió alias Grandulón, cuando él salió de la
zona, que todos esos comandantes segundos como responsables de la zona, estaba
Grandulón tenían la autonomía para darle muerte a personas que tuvieran información
que fueran guerrilleros y hacer operaciones, hay muchas oportunidades en que se me
informaba después de que se cometía el hecho, como dije el motivo era el mismo, por ser
colaborador de las FARC, del EPL, siempre eran los mismos motivos combatir la guerrilla,
yo no puedo asegurar que eran guerrilleros pero por información, matábamos estas
personas”.

Víctima Omar Albeiro Cuesta Montero


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0238 del 24 de septiembre de 2008,
materiales de prueba suscrito por el investigador César Augusto Echavarría González,
mediante el cual se informa sobre las labores de verificación de los
hechos confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 272 OT 288 de 23 de junio de
2011.
-Inspección judicial realizada al proceso 4297 que se adelantaba en la
Fiscalía 37 Seccional de Turbo, y que fue suspendido el 20 de octubre de
1998, por la Fiscalía 105 Seccional.
- Acta de necropsia No. 98027 del 22 de marzo de 1998.
-Registro de Defunción No. 2013182 expedido el 25 de marzo de 1998,
por la Notaría Única de Turbo.
-Entrevista a la señora Edith María Montero Cerda, madre de la víctima.
-Certificado de Defunción No. A072925 expedido por el DANE.

Grado de participación y adecuación típica114:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

112
En versión libre del 24 de septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA manifestó: “fue un hecho que cometió alias Grandulón,
cuando él salió de la zona, que todos esos comandantes segundos como responsables de la zona, estaba Grandulón tenían
la autonomía para darle muerte a personas que tuvieran información que fueran guerrilleros y hacer operaciones, hay
muchas oportunidades en que se me informaba después de que se cometía el hecho, como dije el motivo era el mismo, por
ser colaborador de las FARC, del EPL, siempre eran los mismos motivos combatir la guerrilla, yo no puedo asegurar que eran
guerrilleros pero por información, matábamos estas personas” .
113
Ver diligencia de versión libre realizada al postulado HÉBERT VELOZA, el día 24 de septiembre de 2008.
114
Decisión del 31 de octubre de 2012.

56
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Hecho 42: homicidio en persona protegida

148. El 2 de julio de 1998, aproximadamente a las siete de la noche, cuando Walter


Arley Becerra Mosquera regresaba de su jornada de trabajo a su residencia ubicada en el
barrio “Obrero”, a la altura de la calle 98 con carrera 10, municipio de Turbo, hombres
armados le dispararon causándole la muerte115.

149. En versión libre rendida los días 27 de noviembre de 2007, 11 de junio, 9 de julio,
24 y 25 de septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA, confesó y aceptó su responsabilidad por
la muerte del señor Becerra Mosquera, y manifestó que en el hecho participaron Jonavis
de Jesús Ávila Villadiego, alias “Chiquito Malo”, y alias “Moño liso”, por orden que les diera
Alejandro Ortega, alias “Grandulón”, quien para esa época era el comandante de los
urbanos de Turbo, y actuaba con “…plena autonomía para la comisión de estos homicidios
cuando tuvieran la información de que eran auxiliadores de la guerrilla, milicianos o
guerrilleros….”, información que no era corroborada como lo ha expuesto en diferentes
ocasiones.

Víctima Walter Arley Becerra Mosquera


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 047 del 5 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 273 OT 289 de 23 de junio de
2011.
-Inspección judicial realizada a la investigación preliminar No. 334842
adelantada en la Fiscalía 114 Seccional de Turbo. El 20 de abril de 2001,
la Fiscalía decidió precluir la investigación a favor de Jonavis de Jesús
Pineda Torres. Por este hecho fueron capturados Jaime de Jesús Pineda
Torres, Jhon Bayron Herrera Ruiz y Jonavis de Jesús Ávila Villadiego
alias “Chiquito Malo”, quienes fueron señalados de haber sido autores de
las lesiones que causaron la muerte a Walter Becerra Mosquera.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
- Acta de necropsia No. 98074 del 3 de julio de 1998.
-Acta de levantamiento de cadáver Nro. 090 de 3 de julio de 1998.
-Entrevista a la señora Ana Julia Mosquera Moreno, madre de la víctima.

Grado de participación y adecuación típica116:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 43: homicidio en persona protegida

150. El 30 de marzo de 1996, en el sitio conocido como “La Caleta” del municipio de
Turbo, fue hallado el cuerpo sin vida del señor José Hernando Ardila Gómez, el cual

115
Según Acta de levantamiento de cadáver Nro. 090 del 3 de julio de 1998.
116
Decisión del 31 de octubre de 2012.

57
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

presentaba heridas producidas por arma de fuego y se encontraba en avanzado estado de


descomposición.

151. En versión libre rendida los días 26 de noviembre de 2007 y 11 de junio de 2008 el
postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó este hecho y narró como un señor que se
hacía llamar Carlos Correa o Carlos Ardila, y quien dijo ser primo del señor José Hernando
Ardila Gómez, le hizo saber a Vicente Castaño, que su familiar era el encargado de traer
de Panamá y Centro América la provisión de armas para el grupo de las FARC que operaba
en la región del Choco y el Urabá.

152. Teniendo en cuenta la información referenciada anteriormente, Vicente Castaño le


ordenó a alias “HH” citar al señor Ardila Gómez a la finca Maryuri del municipio de Turbo,
situación que se cumplió el 28 de marzo de 1996, Ardila Gómez viajó desde la ciudad de
Medellín y se presentó ante “HH”, quien le dio a conocer la información que el grupo
paramilitar tenía de él, además le informó que desde ese momento tendría que abandonar
la zona que frecuentaba en el Chocó y que debía proveer al grupo paramilitar de armas,
pero la primera entrega sería un regalo a los paramilitares y luego las autodefensas le
seguirían comprando el armamento.

153. El señor José Hernando Ardila Gómez, negó los hechos que se le estaban
enunciando, les manifestó que él no era un vendedor de armas, que no tenía ningún
vínculo con grupos guerrilleros, que él era un finquero y que no estaba en capacidad de
suministrarle armas a las autodefensas. Ante esta situación, y como quiera que la
información que se tenía del señor Ardila Gómez había sido proporcionada por su primo, lo
dejaron retenido, y de inmediato le comunicaron a Vicente Castaño el resultado de la
reunión, y manifestarle que el señor José Hernando no estaba en condiciones de comprar
armas para las autodefensas.

154. Vicente Castaño le ordenó a “HH” asesinar al señor José Hernando Ardila Gómez y
enterrarlo en predios de la finca “Maryuri”, así se hizo y dos días después, el 30 de marzo
de 1996, el cuerpo fue desenterrado y arrojado en el sitio conocido como “La Caleta”, por
los lados de “El tres”, con el fin de que fuera encontrado por las autoridades y entregado a
su familia.

155. HÉBERT VELOZA GARCÍA, manifestó que en este hecho participaron junto a él,
Carlos Correa, José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca”, Rubén de Jesús Taborda
Meneses, alias Escudero”.

58
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Víctima Jorge Hernando Ardila Gómez


Elementos -Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 2918 adelantado
materiales de prueba en la Fiscalía 21 Especializada de Medellín, el cual fue suspendido el 10
de abril de 1997.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 300 OT 316 de 28 de junio de
2011.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de necropsia No. 96097 del 30 de marzo de 1996.
-Certificado de defunción, expedido el 1º de abril de 1996, por la Notaría
Única de Turbo.
-Entrevista a la señora Juliana Ardila Restrepo, hija de la víctima.
-Entrevista al señor Jaime Humberto Ardila Gómez, hermano del occiso.

Grado de participación y adecuación típica117:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor
Secuestro simple art. 168. Coautor

Hecho 44: homicidio en persona protegida

156. El 14 de enero de 1996, José Francisco Vadiris Hurtado, se encontraba en el


establecimiento público denominado “Bar Los Amigos”, ubicado en el casco urbano del
municipio de Turbo, cuando fue sorprendido por tres hombres fuertemente armados que
se lo llevaron. Horas más tarde su cuerpo fue encontrado con varios impactos de arma de
fuego, en el sitio conocido como “La Caleta” del municipio de Turbo.

157. En versión libre rendida los días 9 de julio y 25 de septiembre de 2008, HÉBERT
VELOZA, manifestó que el señor Vadiris Hurtado, fue sacado del bar y llevado en uno de
los vehículos conocidos como “Camino al cielo”, hasta la entrada de “La Caleta” en donde
fue asesinado y su cuerpo abandonado. En este hecho participaron junto a alias “HH”,
Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”, José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca” y
Forferinzo Flórez Arizal, alias “Montador”. No se dio información respecto al móvil del
homicidio.

Víctima José Francisco Vadiris Hurtado


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 010 del 9 de enero de 2009, suscrito
materiales de prueba por el investigador Juvenal Montoya Vélez, mediante el cual se informa
sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
- Acta de necropsia No. 96019 del 15 de enero de 1996.
-Entrevista a la señora Teresa de Jesús Valle Tuberquia, esposa del
señor José Francisco Vadiris Hurtado.
-Certificado de defunción, expedido el 24 de abril de 1999, por la Notaría
Única de Turbo.

Grado de participación y adecuación típica118:

117
Decisión del 31 de octubre de 2012.
118
Decisión del 31 de octubre de 2012.

59
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor
Secuestro simple art. 168. Coautor

Hecho 45: homicidio en persona protegida

158. El 13 de mayo de 1995, Pedro Luís Bustamante, conocido como “Pedro Trampa”,
quien se desempeñaba como conductor de un vehículo tipo campero “UAZ”, con el que
cubría la ruta Turbo a San Pedro de Urabá, se encontraba estacionado a la entrada de la
plaza de mercado del municipio de Turbo, cuando fue sorprendido por tres sujetos
armados, que lo obligaron a abordar su vehículo y se lo llevaron hasta la entrada de la
vereda “Casanova” (Turbo), allí lo asesinaron y abandonaron su cuerpo junto al vehículo
de su propiedad.

159. HÉBERT VELOZA, confesó su participación en este hecho, en versión libre rendida
los días 9, 10 y 11 de julio de 2008, en la que además manifestó que junto a él
participaron José Ruperto García, alias “El Gato”; Rubén de Jesús Taborda Meneses, alias
“Escudero”; Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”; Wilmer Aguado Álvarez, alias “Carro
Loco”; José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca”, Forferinzo Flórez Arizal, alias
“Montador” y Arfay119. No se dio información respecto al móvil del homicidio.

Víctima Pedro Luís Bustamante


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 048 del 6 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 274 OT 290 de 23 de junio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 2151 adelantado
en la Fiscalía 113 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 27 de
noviembre de 1995.
- Acta de necropsia No. 95101 del 13 de mayo de 1995.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.

Grado de participación y adecuación típica120:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor
Secuestro simple art. 168. Coautor

Hecho 46: homicidio en persona protegida

160. El día 18 de mayo de 1996, el señor John Jairo Zapata Enamorado, quien trabajaba
como obrero de la finca “Ana María” comunal “San Jorge”, se encontraba en una gallera
ubicada en el corregimiento de “Nueva Colonia”, jurisdicción del municipio de Turbo, hasta

119
Según diligencia de versión libre rendida por el postulado HÉBERT VELOZA, el 10 de julio de 2008.
120
Decisión del 31 de octubre de 2012.

60
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

allí llegaron varios hombres armados que lo abordaron y sin ninguna explicación se lo
llevaron hasta la entrada de la comunal “Palos Blancos”. El cuerpo de Zapata Enamorado
fue hallado con varios impactos de arma de fuego en la vía que conduce al corregimiento
de Rio Grande.

161. En versión libre los días 27 de noviembre de 2007 y 26 de marzo de 2008,


HÉBERT VELOZA, manifestó que en la muerte del señor Zapata Enamorado, participaron
Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre” y alias “Coyote”, quienes hacían parte de los
grupos urbanos de Turbo y estaban bajo su mando. No se dio información respecto al
móvil del homicidio.

Víctima John Jairo Zapata Enamorado.


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 093 del 24 de marzo de 2008, suscrito
materiales de prueba por el investigador Jaime Henao Arteaga, mediante el cual se informa
sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 302 OT 318 de 28 de junio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 3019 adelantado
en la Fiscalía 113 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 26 de
mayo de 1997.
- Acta de levantamiento de cadáver del 19 de mayo de 1996.
-Acta de necropsia No. 96233 del 19 de mayo de 1996.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora Lucy Zapata Enamorado, hermana de la víctima.
-Certificado de defunción, expedido el 21 de mayo de 1996, por la
Notaría Única de Turbo.

Grado de participación y adecuación típica121:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato
Secuestro simple art. 168. Autor Mediato

Hecho 47: homicidio en persona protegida

162. El 23 de mayo de 1996, Franklin Isaías Poveda Molina, transportaba un viaje de


banano de la finca cultivos “El Darién” al embarcadero de Turbo, cuando en el sector
conocido como “Palos Blancos”, corregimiento de Rio Grande, fue interceptado por
hombres armados que le dispararon hasta causarle la muerte.

163. En diligencia de versión libre llevada a cabo los días 26 de noviembre de 2007, 26
y 27 de marzo y 9 de julio de 2008, HÉBERT VELOZA, manifestó que hombres bajo su
mando fueron los encargados de cometer este hecho, entre ellos, los conocidos como alias
“Espitia y Cheche”, por orden directa de él, pues se tenía información de que el señor

121
Decisión del 31 de octubre de 2012.

61
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Poveda Molina, transportaba personas en su vehículo que pertenecían a grupos


subversivos, y que además como era una persona que transitaba por toda la región,
obtenía información que luego transmitía a la guerrilla.

Víctima Franklin Isaías Poveda Molina


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 092 del 24 de marzo de 2008, suscrito
materiales de prueba por el investigador Jaime Henao Arteaga, mediante el cual se informa
sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 3054 adelantado
en la Fiscalía 83 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 25 de
noviembre de 1996.
- Acta de levantamiento de cadáver del 23 de mayo de 1996.
-Acta de necropsia No. 96248 del 24 de mayo de 1996.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora Rosa Angélica Moreno Muñoz, esposa del occiso.
-Certificado de defunción, expedido el 28 de mayo de 1996, por la
Notaría Única de Turbo.

Grado de participación y adecuación típica122:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Determinador

Hecho 48: homicidio en persona protegida

164. El 27 de mayo de 1996, en el sector conocido como “Palos Blancos”, fue sacado de
su casa el señor Evangelista Antonio Pájaro Ruiz, quien laboraba en la Finca “La Bodega”
del grupo “Bagatela” en el cargo de oficios varios y pertenecía al sindicato de la empresa.
Su cuerpo, con varios impactos de arma de fuego, fue encontrado posteriormente en la
vía que conduce del corregimiento de “Rio Grande” al de “Nueva Colonia”, jurisdicción del
municipio de Turbo123.

165. Este hecho fue cometido por Jesús Albeiro Guisao Arias alias “El Tigre”, quien era
el encargado del grupo que militaba en esta región, Diego Manuel Gómez, alias “Guajiro” y
quien era conocido con el alias de “Hanober”, hombres que actuaban bajo las órdenes de
HÉBERT VELOZA GARCÍA, quien confesó el hecho en diligencia de versión libre llevada a
cabo los días 26 de noviembre de 2007, 27 de marzo y 10 de julio de 2008. No se dio
información respecto al móvil del homicidio.

Víctima Evangelista Antonio Pájaro Ruiz


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0122 del 25 de marzo de 2008, suscrito
materiales de prueba por el investigador César Augusto Echavarría González, mediante el cual
se informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados
por el postulado.

122
Decisión del 31 de octubre de 2012.
123
Según diligencia de versión libre rendida por el postulado HÉBERT VELOZA, el dia 26 de noviembre de 2007.

62
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 304 OT 320 de 8 de julio de


2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 3067 adelantado
en la Fiscalía 21 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 10 de abril
de 1997.
-Entrevista a la señora María Idelisa Rivas Murillo, esposa del occiso.
-Acta de necropsia No. 96255 del 27 de mayo de 1996.
-Acta de levantamiento de cadáver del 27 de mayo de 1996.
-Certificado de defunción, expedido el 28 de mayo de 1996, por la
Notaría Única de Turbo.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.

Grado de participación y adecuación típica124:


Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 49: homicidio en persona protegida

166. El 10 de junio de 1995, Presentado Gómez, salió de su residencia, ubicada en el


barrio Obrero del Municipio de Turbo, cuando se dirigía hacia un establecimiento de
expendio de carnes, fue abordado por dos sujetos armados que le dispararon hasta
causarle la muerte.

167. En entrevista rendida por la señora Fabia Hinestroza Guariz, ante la Fiscalía
Seccional de municipio de Turbo (Antioquia), ésta manifestó que si bien no conoce el
motivo de por el cual fue asesinado su compañero, si sabía que él asistía a reuniones de
un sindicato bananero denominado SINDEBRA125.

168. De acuerdo a lo confesado por HÉBERT VELOZA GARCÍA, en diligencia de versión


libre realizada los días 27 de noviembre de 2007 y 27 de marzo de 2008, la muerte del
señor Presentado Gómez sucedió a manos de Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”, José
Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca”, Forferinzo Flórez Arizal, alias “Montador”, alias
“El Gato” y alias “Carroloco”126, quienes para esa época eran hombres bajo su mando. No
se dio información respecto al móvil del homicidio.

Víctima Presentado Gómez


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0119 del 25 de marzo de 2008, suscrito
materiales de prueba por el investigador César Augusto Echavarría González, mediante el cual
se informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados
por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 281 OT 297 de 29 de junio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 2232 adelantado
en la Fiscalía 113 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 18 de
septiembre de 1996.

124
Decisión del 31 de octubre de 2012.
125
Ver informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 281 OT 297 de 29 de junio de 2011.
126
Según diligencia de versión libre rendida por el postulado HÉBERT VELOZA, el día 9 de julio de 2008.

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Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

-Entrevista a la señora Fabia Hinestroza Guariz, compañera permanente


del occiso.
-Acta de necropsia No. 95134 del 10 de junio de 1995.

Grado de participación y adecuación típica127:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 50: homicidio en persona protegida

169. El 11 de junio de 1995, en la calle 13, frente al sitio conocido como “Bar Los
Cuyos” del municipio de Turbo, fue hallado el cuerpo sin vida del señor Leonel de Jesús
Romero Montes128, el cual presentaba varios impactos de arma de fuego.

170. Este hecho fue cometido por Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”, José Huber
Coca Ceballos, alias “Huber Coca” y Forferinzo Flórez Arizal, alias “Montador”, quienes
actuaban bajo el mando y las ordenes de HÉBERT VELOZA GARCÍA; así lo confesó éste en
diligencia de versión libre realizada los días 27 de noviembre de 2007 y 27 de marzo de
2008. No se dio información respecto al móvil del homicidio.

Víctima Leonel de Jesús Romero Montes


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0113 del 25 de marzo de 2008, suscrito
materiales de prueba por el investigador Jaime Henao Arteaga, mediante el cual se informa
sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 2235 adelantado
en la Fiscalía 113 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 25 de
abril de 1996.
-Acta de necropsia No. 95137 del 11 de junio de 1995.
-Acta de levantamiento de cadáver del 11 de junio de 1995.
-Certificado de defunción, expedido el 13 de abril de 1996, por la Notaría
Única de Turbo.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.

Grado de participación y adecuación típica129:


Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 51: homicidio en persona protegida

171. El 13 de agosto de 1996, un grupo aproximado de ocho hombres armados,


llegaron hasta la finca “El Oasis”, ubicada en el corregimiento de Nueva Colonia,
jurisdicción del municipio de Turbo, y se llevaron al señor Jesús Ernelio Andrade Becerra,

127
Decisión del 31 de octubre de 2012.
128
Como quiera que nadie reclamó el cuerpo del señor Romero Montes, éste fue inhumado en el cementerio “La Esperanza”
del Municipio de Turbo, por personal de la Alcaldía.
129
Decisión del 31 de octubre de 2012.

64
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

hasta el sector conocido como “Palos Blancos”, corregimiento de Rio Grande, en donde le
dieron muerte y abandonaron su cuerpo.

172. Este hecho según lo manifestado por HÉBERT VELOZA GARCÍA, en diligencia de
versión libre llevada a cabo los días 26 de noviembre de 2007 y 9 de julio de 2008, fue
cometido por hombres bajo su mando, entre ellos Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “el
Tigre” y alias “Durbays”. No se dio información respecto al móvil del homicidio.

Víctima Jesús Ernelio Andrade Becerra


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0125 del 25 de marzo de 2008, suscrito
materiales de prueba por el investigador César Augusto Echavarría González, mediante el cual
se informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados
por el postulado.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 3249 adelantado
en la Fiscalía 26 Seccional de Turbo.
-Certificado de defunción, expedido el 21 de agosto de 1996, por la
Notaría Única de Turbo.
-Acta de necropsia No. 962371 del 14 de agosto de 1996.
-Entrevista a la señora María Aurelina Córdoba Andrade, madre del
occiso.
-Entrevista a la señora Geanet maría Díaz Quintana, compañera
permanente del señor Andrade Becerra.
-Entrevista al señor José Alfredo Córdoba Palacios, hermano de la
víctima.
- Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.

Grado de participación y adecuación típica130:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato
Secuestro simple art. 168. Autor Mediato

Hecho 52: homicidio en persona protegida

173. El 12 de septiembre de 1996, entre un cultivo de plátano de la finca “La Suerte”,


ubicada en el municipio de Turbo, fue hallado el cuerpo sin vida del señor Luís Eduardo
Palacio Núñez, el cual presentaba varios impactos de arma de fuego.

174. En versión libre del 27 de marzo y 9 de julio de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA,
manifestó que este hecho fue cometido por Diego Manuel Gómez, alias “Guajiro”131, quien
dijo tener información de que el señor Palacio Núñez, era un miliciano de la FARC, y añade
que el lugar donde ocurrió el homicidio fue en el retorno de Apartado, según la
información que le dio alias “Durbays”132. No se dio información respecto al móvil del
homicidio.

130
Decisión del 31 de octubre de 2012.
131
Quien pertenecía al grupo de urbanos que era comandado por Jesús Albeiro Guisao Arias alias ‘el Tigre’.
132
Ver Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 298 OT 314 de 29 de junio de 2011.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Víctima Luís Eduardo Palacio Núñez.


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0118 del 25 de marzo de 2008, suscrito
materiales de prueba por el investigador César Augusto Echavarría González, mediante el cual
se informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados
por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 298 OT 314 de 29 de junio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 3316 adelantado
en la Fiscalía 118 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 14 de
mayo de 1997.
-Entrevista a la señora Egla Belén Núñez Urango, madre del occiso.
-Acta de necropsia No. 96413 del 13 de septiembre de 1996.
-Certificado de defunción, expedido el 13 de septiembre de 1996, por la
Notaría Única de Turbo.

Grado de participación y adecuación típica133:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 53: homicidio en persona protegida

175. El 18 de diciembre de 1996, Jaime Hernán Moreno Cossio transitaba en su vehículo


en la vía que conduce del corregimiento de “Nueva Colonia” al de “Río Grande” (Turbo,
Antioquia), fue interceptado por varios hombres armados, quienes lo bajaron del
automotor y le dispararon hasta causarle la muerte134.

176. En versión libre rendida los días 26 de noviembre de 2007 y 9 de julio de 2008,
HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó este hecho y manifestó que hombres bajo su mando
fueron los responsables de la muerte del señor Moreno Cossio, entre ellos, Jesús Albeiro
Guisao Arias, alias “El Tigre” y Durbay Enrique Durango Gómez, alias “Sancocho”. Alias
“HH” manifestó que el motivo del asesinato, fue la información que se dio a los
paramilitares respecto a que Moreno Cossio era supuesto colaborador de la guerrilla.

Víctima Jaime Hernán Moreno Cossio


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 049 del 6 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 275 OT 291 de 23 de junio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 3551 adelantado
en la Fiscalía Seccional de Turbo, el cual fue archivado el 2 de julio de
2007 con resolución inhibitoria.
- Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 19 de diciembre de 1996.
-Acta de necropsia No. 96651 del 19 de diciembre de 1996.
-Entrevista a la señora Blanca Nelly David de Moreno, esposa del occiso.

133
Decisión del 31 de octubre de 2012.
134
El señor Alfonso Bermúdez Henao en declaración recibida el día 14 de febrero de 1997 ante la Fiscalía 48 seccional de
Apartado, afirma que era el despachador de vehículos en el trabajo del señor Moreno Cossio y que lo despacho a eso de las
4:45 pm con un viaje para Nueva Colonia, pero nunca regreso.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

-Declaración del señor Alfonso Bermúdez Henao de 14 de febrero de


1997, jefe del occiso.

Grado de participación y adecuación típica135:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 54. Masacre “El Aracatazo”: homicidio en persona protegida

177. El 12 de agosto de 1995, siendo aproximadamente las 9:30 de la noche, un grupo


de personas se encontraba departiendo en la discoteca conocida como “El Aracatazo”,
ubicada en el barrio “El Bosque” del municipio de Chigorodó (Antioquia), cuando fueron
sorprendidos por un grupo de hombres que portaban armas de corto y largo alcance,
quienes ingresaron al establecimiento público, ordenaron apagar la música y obligaron a
las personas a tenderse en el piso, procediendo a interrogarlos, exigiendo información por
armas que supuestamente guardaban o encaletaban. Igualmente procedieron a insultarlos
y a llamarlos “guerrilleros”, al no encontrar respuesta frente a la ubicación de las armas,
procedieron a disparar sobre ellos indiscriminadamente, resultando muertas 18 personas y
otro tanto heridas. Algunas de las víctimas pertenecían al Sindicato Nacional de
Trabajadores de la Industria Agropecuaria (Sintrainagro) y otras al Partido Comunista
Colombiano (PCC).

178. En versión libre rendida los días 29, 30 de octubre, 26 de noviembre de 2007, 9 y
10 de junio de 2008, el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó el hecho y manifestó
que éste fue planificado y dirigido por Dalson López Simancas, alias “Mono Pecoso”, quien
comandó al grupo armado que incursionó en el barrio El Bosque, entre ellos alias
“Pablito”, “Mocho”, “Los Saizas”, “Cama Renga”, “El Chivo”, “Care Camión”, “Fredy
Vampiro”, José Gabriel Conrado Pérez, alias “Care Vieja” o “Camilo”. Alias “HH” manifestó
además que:

“Este hecho había sido cometido por miembros de las autodefensas, donde murieron 18
personas y una quedo herida; cuando nosotros llegamos al Urabá antioqueño ya existían
los comandos populares y habían en el sector el siete o zungo, un grupo liderado por alias
“Mono Pecoso”, “Lázaro” o “Pedro”, él tenía un grupito por ahí de 7 u 8 personas que
dependían de un señor “Veterina” y cuando nosotros llegamos allá entramos a vincular
estos grupos a las autodefensas y este grupo queda bajo nuestro mando. Un día el señor
“Pedro” y “Pablito” que eran representantes de este grupo, pidieron permiso para matar a
tres personas en Chigorodó y yo los autorizo y resulta que no mueren tres personas sino 18
(…) Yo era comandante. Fue la primera masacre de Urabá y Carlos se pone bravísimo
porque se vienen las fuerzas militares que qué había pasado y Carlos me dice que reciba
unos UAZ (automotores tipo campero) que vienen de Urabá mandados por “Monoleche” o
“Cero cuatro”, mandaron dos UAZ para que le mandara la gente que había participado en la
masacre y se suben en los carros con uniformes y armas y Carlos coordina con el Ejército
para que fueran capturados entre Río grande y Apartadó, y Ruperto García alias “El gato”,
yo lo puse esa noche pendiente de que si los UAZ se pasaban del sitio donde los iban a
135
Decisión del 31 de octubre de 2012.

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coger, entonces los cogieran en otro lado; las personas fueron capturados no por la
masacre sino por porte de armas (…) “Mono pecoso” y “Pablito” no iban en esos carros y
Carlos (Castaño) los cita y los hace ir a la finca la 35, donde son amarrados por orden de
Carlos y “Doble Cero” e iban hacer ajusticiados por haber hecho la masacre sin orden y
después se vio que no era conveniente asesinarlos y se dejan trabajando en Urabá.” 136

179. El 16 de abril de 2009, en versión libre rendida ante el Fiscal 19 de la unidad


Nacional de Justicia y Paz de la ciudad de Medellín, el postulado Carlos Arturo Furnieles
Álvarez, alias “Saiza”, desmovilizado del Bloque Elmer Cárdenas de las Autodefensas,
confesó este hecho y manifestó que “… para el año 1995-1997, cuando era miembro
activo del Ejército Nacional, se realizaron acciones conjuntas con las Autodefensas Unidas
de Colombia, De igual manera relató la forma como participó el Ejército de Colombia en la
masacre del Aracatazo, ocurrida el 12 de agosto de 1995 en el barrio El Bosque del
municipio de Chigorodó Antioquia…”137.

180. Mediante oficio No. 032-16 del 25 de febrero de 2008, la Fiscalía 16 Delegada ante
los Jueces Penales del Circuito Especializados de Medellín y Antioquia, informó a la Fiscal
17 Delegada ante la Unidad de Justicia y Paz de la Fiscalía General de la Nación, que por
estos hechos se adelanta la investigación radicada bajo el número 861264, en el que
fueron sindicados Juan Carlos Gómez Pérez o Fredy Alfonso Miranda González; Gerardo
Antonio Palacio o Asdrúbal Jiménez Borja; Hoover Silgado Rivas o Uber Salgado o
Francisco Silgado Ríos o Francisco Salgado y Virgilio Arturo Conrado Pérez; y el 26 de abril
de 1999, un Juzgado Regional de Medellín profirió sentencia condenatoria por “…18 delitos
de homicidio consumados y uno tentado…”, imponiendo una pena de 60 años de prisión.
El 25 de agosto de 2004, la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia,
decretó la nulidad de todo lo actuado a partir del cierre de la investigación, inclusive; y
actualmente el expediente “…se encuentre en periodo de prueba, pendiente del nuevo
cierre de instrucción.”

Víctimas Del delito de Homicidio:


Luís Alberto Guisao Ríos, Héctor Alonso Tascón Duque, Antonio Marino
Moreno Asprilla, Julio Alfonso Díaz Petro, Willington de Jesús Tascón
Duque, Rodolfo Ramiro Ramos Ruíz, Pedro Luís Usuga Borja, Leonardo
Minota Mosquera, Jorge Iván Zúñiga Becerra, Misleida Pérez Márquez,
Julio César Oviedo Guevara, Libia Usuga Usuga, Luís Aurelio Sánchez
Cuesta, Francisco Leonardo Paneso Castañeda, Jorge Luís Julio
Cárdenas, Melida María Jiménez Borja, Jorge González López, Manuel del
Cristo Ballesta Álvarez.
Del delito de tentativa de homicidio:
José Luís Ciro Galeano.
Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0061 del 26 de febrero de 2008, marzo
materiales de prueba de 2008, suscrito por el investigador César Augusto Echavarría González,

136
Ver clip de versión libre del 9 de junio de 2008.
137
Ver Oficio 850 del 25 de junio de 2009, dirigido a la Fiscal 17 de la Unidad de Justicia y Paz de la Fiscalía General de la
Nación, mediante el cual se le informa de la compulsa de copias para que se investigue la presunta participación de
miembros de la Brigada 17 de Carepa (Antioquia) y del Batallón de Contraguerrilla No. 26, entre ellos al General Rito Alejo
del Río.

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mediante el cual se informa sobre las labores de verificación de los


hechos confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial No. 063 del 27 de febrero de 2008, suscrito
por el investigador Luís Fernando Giraldo García, mediante el cual se
informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
-Informe de Policía Judicial No. 067 del 31 de marzo de 2008, suscrito
por el investigador Luís Fernando Giraldo García, mediante el cual se
informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
-Informe de Policía Judicial No. 0204 del 7 de julio de 2008, suscrito por
el investigador Jaime A. Henao Arteaga, mediante el cual se informa
sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 861264
adelantado en la Unidad de Derechos Humanos y DIH de la Fiscalía 91
de Medellín.
-Inspección judicial a los diferentes procesos judiciales que se han
adelantado por estos hechos.
- Clip de la versión libre del desmovilizado Carlos Arturo Furnieles
Álvarez alias “Saiza”, quien se desempeñó como soldado del Ejército y
luego ingresó al grupo paramilitar, en el que confiesa su participación y
lo que le consta sobre los hechos conocidos como la “Masacre del
Aracatazo”.
Del delito de Homicidio:
Luís Alberto Guisao Ríos:
-Entrevista a la señora Martha Luz Guisao Ríos, hermana de la víctima.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
Antonio Marino Moreno Asprilla:
-Entrevista a la señora Inés Catalina Asprilla, madre de la víctima.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
-Entrevista a la señora Emilse del Carmen Galindo Flórez, compañera
permanente del occiso.
Julio Alfonso Díaz Petro:
-Entrevista a la señora Glenis María Licona López, esposa del señor Díaz
Petro.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
Héctor Alonso Tascón Duque:
-Acta de levantamiento de cadáver 0242.
Willington de Jesús Tascón Duque:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
-Entrevista de la señora Ana Joaquina Duque de Rua, madre de Wilinton
de Jesús y Héctor Alonso Tascón Duque.
Rodolfo Ramiro Ramos Ruiz:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
-Entrevista a la señora Neila Esther Ramos Ruiz, hermana de la víctima.
Pedro Luís Usuga Borja:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
Leonardo Minota Mosquera:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
-Entrevista a la señora Elvia Cecilia Moreno Muñoz, compañera
permanente del señor Minota Mosquera.
-Entrevista a la señora Mercedes Matute Asprilla, quien también dijo ser
la compañera permanente del señor Minota Mosquera.
-Entrevista a la señora María Neiva Mosquera Mena, madre del occiso.

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Jorge Iván Zúñiga Becerra:


-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
-Entrevista a la señora Elvia María Becerra, madre del occiso.
Misleida Pérez Márquez:
-Entrevista a la señora Malby Arleny Márquez Hernández, hermana de la
víctima.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
-Entrevista al señor Deiro Eliud Sánchez.
-Entrevista al señor Hernando Abad García Delgado, compañero
permanente de la víctima.
Julio César Oviedo Guevara:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
-Entrevista de la señora María Mafelina Mulasco Causil, compañera
permanente del occiso.
Libia Usuga Usuga:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora Ana Elisa Usuga de Usuga, madre de la víctima.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
-Entrevista a la señora Martha Cecilia Usuga Usuga, hija de la occisa.
Luís Aurelio Sánchez Cuesta:
-Entrevista a la señora Luz Mary Sánchez Mosquera, hija del occiso y
testigo de los hechos.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
-Entrevista de la señora María Griselda Mosquera Ramírez, esposa del
occiso.
Francisco Leonardo Paneso Castañeda:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
-Entrevista a la señora Ángela María Álvarez Correa, compañera
permanente del señor Paneso Castañeda.
Jorge Luís Julio Cárdenas:
-Entrevista a la señora Ana Rita Amaya Zapata, compañera permanente
del señor Julio Cárdenas.
-Entrevista a la señora Aracelis del Carmen Gutiérrez Mendoza, quien
también dijo ser la compañera permanente del señor Julio Cárdenas.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
-Entrevista al señor Darío de Jesús Julio Cárdenas, hermano de la
víctima.
Melida María Jiménez Borja:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora Rosa Margarita Borja de Jiménez, madre de la
occisa.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
Jorge González López:
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
Manuel del Cristo Ballesta Álvarez:
-Entrevista a la señora María del Carmen Largo Ladino, esposa del señor
Hernán Ballesta Álvarez, hermano de la víctima.
-Entrevista al señor Hernán Ballesta Álvarez.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de agosto de 1995.
Del delito de tentativa de homicidio:
José Luís Ciro Galeano:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Declaración del señor José Luís Ciro Galeano.

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Grado de participación y adecuación típica138:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1, Autor Mediato
en la modalidad de tentativa.

2. Hechos cometidos contra integrantes de la Unión Patriótica (UP)

Hecho 56: homicidio en persona protegida

181. El 18 de abril de 1995, Alejandro Valoyes Mena, integrante del partido político
Unión Patriótica (UP), y quien además pertenecía al comité obrero patronal de la finca en
la que laboraba, salió de su residencia hacia la Finca “La Virginia”, ubicada en la comunal
“El Silencio” del municipio de Carepa (Antioquia), cuando fue detenido por un retén
instalado a 500 metros del puesto de Policía de Carepa, los individuos que se encontraban
en el retén se identificaron como paramilitares de Carlos Castaño, lo obligaron a
descender del vehículo, mientras con insultos le gritaban “…que no trabajaba ni dejaba
trabajar…”, luego en presencia de los demás trabajadores de la finca, le dispararon hasta
causarle la muerte139.

182. En versión libre rendida el 25 de septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA,


aceptó su responsabilidad por este hecho, como quiera que hombres bajo su mando,
entre ellos, Carlos Vásquez, alias “Cepillo” y Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre”, le
dieron muerte al señor Valoyes Mena.

Víctima Alejandro Valoyes Mena


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 050 del 6 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 3551 adelantado
en la Fiscalía Especializada de Medellín y a la preliminar 469526 que se
adelantó en la Fiscalía Especializada de la Unidad de DH y DIH.
-Entrevista a la señora Marina Edith Mosquera Mena, compañera
permanente del occiso.
-Acta de levantamiento de cadáver del 18 de abril de 1995.
-Registro Civil de Defunción No. 1012370, expedido el 19 de abril de
1995, por la Notaría Única de Carepa (Antioquia).
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Comunicado del 10 de septiembre de 1995, del Partido Comunista y la
Unión Patriótica, en el que se informa la grave situación de violencia que
se vive en el Urabá Antioqueño, en contra de los integrantes de los
sindicatos y del Partido Comunista, y se hace una relación de las
personas que han sido asesinadas, entre ellos el señor Alejandro Valoyes
Mena.

138
Decisión del 31 de octubre de 2012.
139
Ver declaración de la señora Marina Edith Mosquera Mena (compañera permanente del occiso), tomada en la inspección
de policía de Carepa el día 19 de abril de 1995.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Grado de participación y adecuación típica140:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 57: homicidio en persona protegida

183. El 29 de abril de 1995, el señor Wilton Antonio Garcés Flórez (Montaño)141,


integrante de la Unión Patriótica (UP), y quien para la época trabajaba en la alcaldía de
Turbo, salió de su residencia, ubicada en el corregimiento de Currulao, con el fin de
amenizar una reunión familiar –matrimonio-, cuando a la altura del corregimiento “El
Tres”, del municipio de Turbo, se encontraba instalado un retén paramilitar, detuvieron el
vehículo en el que se transportaba y obligaron al señor Garcés Flórez a que se bajara y a
los demás ocupantes del automotor a que continuaran la marcha.

184. Días después, el 4 de mayo de 1995, en el sitio conocido como “La Curva de
Coldesa”, personas de la comunidad hallaron el cuerpo de Wilton Antonio con impactos de
arma de fuego, abandonado en un hueco y cubierto con hojas de plátano, en terrenos de
la finca “Medellín” (Turbo).

185. HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó este hecho en diligencia de versión libre
realizada los días 9 de julio y 25 de septiembre de 2008, y manifestó que este retén fue
montado por alias “Estopín”, quien se desempeñaba como comandante militar del grupo y
por Carlos Vásquez, alias “Cepillo”, quienes eran hombres bajo su mando.

Víctima Wilton Antonio Garcés Flórez (Montaño)


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 051 del 6 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 23545 que se
adelantaba en la Fiscalía Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el
26 de diciembre de 1997.
-Acta de necropsia No. 95175 del 4 de mayo de 1995.
-Certificado de defunción No. 1682111, expedido el 29 de marzo de
1996, por la Notaría Única de Turbo.
-Entrevista a la señora Adriana Patricia Arias Arias, compañera
permanente del señor Garcés Flórez.
-Denuncia de la Señora Hideliza Montaño Duque, madre de la Víctima.
-Declaración del señor Plutarco Serna Rodríguez.

140
Decisión del 31 de octubre de 2012.
141
De acuerdo con la información aportada por la Fiscal Delegada, al realizar la búsqueda en la Registraduría Nacional del
Estado Civil, aparece que la víctima se identificaba con la cédula de ciudadanía número 71940177, cupo numérico que
corresponde al nombre de WILTON GARCES FLORES; sin embargo, en el registro civil de nacimiento y en la partida de
bautismo aparece como WILTON ANTONIO GARCES MONTAÑO, hijo de Manuel Elías Garces y Idelisa Montaño. Así mismo
se anexa declaración extrajuicio de la señora Ana Margarita Montaño Duque, hermana del señor Wilton Antonio, quien
manifestó que existía un error en el segundo apellido de su hermano en la cédula de ciudadanía.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Grado de participación y adecuación típica142:


Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato
Secuestro simple art. 168. Autor Mediato

Hecho 58: homicidio en persona protegida (secuestro simple y actos de


barbarie)

186. El 17 de mayo de 1995, Edilberto Cuadrado Llorente, miembro de la Unión


Patriótica y del Comité Obrero de la finca la “Apartada”, se dirigía a su sitio de trabajo en
la finca mencionada, cuando el vehículo en el que se movilizaba fue detenido por un retén
paramilitar en la vía que del municipio de Carepa conduce al de Apartadó, a unos 20
metros del casco urbano de este último municipio. Allí, lista en mano, los paramilitares
indagaron por Cuadrado Llorente, a quien una vez identificado le ataron las manos, lo
bajaron del automotor y procedieron a adentrarlo a una de las bananeras de la zona, en
donde lo ultimaron con arma de fuego, luego de lo cual fue decapitado. Su cabeza fue
abandonada en la vía pública y su cuerpo en predios de la finca “La niña de mis ojos” del
municipio de Carepa (Antioquia).

187. Según entrevista rendida por la señora Rosa Cuadrado Fabra, compañera del señor
Cuadrado Llorente, el día 3 de abril de 1997, y según el acta de levantamiento de cadáver
del mismo de 17 de mayo de 1995, los autores del homicidio sindicaron al occiso de ser
guerrillero y por ello le dieron muerte143, a lo que se suma que era aspirante al Consejo de
Carepa144.

188. De acuerdo con lo manifestado por HÉBERT VELOZA, en versión libre del 9 de julio
de 2008, este hecho fue cometido por Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre”, en
compañía de alias “San Pedro” y alias “Manigueto”, quienes eran hombres bajo su mando.
Manifestó que este tipo de modus operandi pretendía generar terror en la población, las
personas eran decapitadas para que la comunidad se sintiera intimidada ante los
paramilitares, al respecto dijo:

“…como lo he explicado, este es un caso también de principios del año 95, mayo, lo he
explicado en varias de las versiones acá. Lamentablemente muchos de los errores que
cometimos en ese afán y esa inexperiencia que teníamos en la vida y órdenes que recibíamos
de Doble Cero y el entrenamiento que nos dieron, una de las formas de ganar la guerra era
generar terror, una de las formas de combatir al enemigo era generar terror ante las
comunidades, para que esas comunidades no le sirvan al enemigo, una forma de generar

142
Decisión del 31 de octubre de 2012.
143
Ver informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 277 OT 293 de 5 de julio de 2011.
144
Ver informe No. 360 de 8 de mayo de 1997 rendido por la Policía Judicial del CTI.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

terror era esa: decapitando gente para generar terror ante la comunidad, por eso se
presentaban estas situaciones…”145.

Víctima Edilberto Cuadrado Llorente


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 052 del 8 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial del CTI Nro. 360 de 8 de mayo de 1997.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 277 OT 293 de 5 de julio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 406203,
adelantado en la Fiscalía 91 Especializada de Medellín.
-Acta de necropsia No. 95212 del 17 de junio de 1995.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora Rosa Cuadrado Fabra, esposa del señor Cuadrado
Llorente.
-Entrevista a la señora Julia Llorente Vergara, madre del occiso.
-Entrevista a la señora Teanis Yolima Hernández Morales, quien también
dijo ser la esposa del señor Cuadrado Llorente.
-Certificado de Defunción No. 1012393 del 19 de mayo de 1995.
-Comunicado del 10 de septiembre de 1995, del Partido Comunista y la
Unión Patriótica, en el que se informa la grave situación de violencia que
se vive en el Urabá Antioqueño, en contra de los integrantes de los
sindicatos y del Partido Comunista, y se hace una relación de las
personas que han sido asesinadas, entre ellos el señor Edilberto
Cuadrado Llorente.

Grado de participación y adecuación típica146:

Delito Título
Por estos hechos HÉBERT VELOZA GARCÍA se encuentra condenado por el Juzgado Segundo Penal
del Circuito Especializado de Antioquia147.
En la decisión de control de legalidad se adicionó el delito de Coautor
secuestro simple art. 168.
En la decisión de control de legalidad se adicionó el delito de Coautor
actos de barbarie art. 145.

Hecho 59: homicidio en persona protegida

189. El 23 de mayo de 1995, en horas de la mañana, un grupo de hombres armados y


encapuchados, llegó hasta la finca “Banafinca” (Carepa, Antioquia), ubicada en la vía
“Zungo” rumbo a “Embarcadero”, una vez allí, llegaron hasta la “empacadora de banano”
e indagaron por el señor Melquisedec Rentería Machado, a quien una vez identificado
procedieron a llevárlo hasta un paraje de la finca y allí le dispararon causándole la muerte.

190. Coetáneamente, el mismo grupo de paramilitares montó un retén ilegal y bajaron,


de un vehículo que transportaba a obreros de la misma bananera (Banafinca), a los
señores Camilo Solano Baltazar y Walter de Jesús Borja David, este último integrante del

145
Ver CD que contiene el clip de la versión libre rendida el 9 de julio de 2008, relacionado en el hecho 58.
146
Decisión del 31 de octubre de 2012.
147
Condenado por los delitos de homicidio simple, fabricación, tráfico o porte de armas de fuego o municiones, a la pena de
6 años y 8 meses de prisión, víctima Edilberto Cuadrado Llorente.

74
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Comité Obrero y delegado de la Asamblea Nacional Sintrainagro. Una vez identificados les
dispararon causándoles la muerte, dejando sus cuerpos en la vía pública.

191. HÉBERT VELOZA GARCÍA, aceptó su responsabilidad por este hecho, en versión
libre realizada los días 9 de julio, 24 y 26 de septiembre de 2008, como quiera que
hombres bajo su mando, entre ellos, Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre”, Carlos
Vásquez, alias “Cepillo”, alias “San Pedro” y alias “Manigueto”, fueron los encargados de
darle muerte a los señores Camilo Solano Baltazar, Walter de Jesús Borja David y
Melquisedec Rentería Machado, quienes pertenecía para la época de los hechos al partido
político de la Unión Patriótica (UP) y además eran sindicalistas.

Víctimas Camilo Solano Baltazar, Walter de Jesús Borja David y Melquisedec


Rentería Machado.
Elementos -Informe de Policía Judicial No. 053 del 9 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 278 OT 294 de 5 de julio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 469626
adelantado en la Fiscalía 39 Especializada de Medellín.
-Comunicado del 10 de septiembre de 1995, del Partido Comunista y la
Unión Patriótica, en el que se informa la grave situación de violencia que
se vive en el Urabá Antioqueño, en contra de los integrantes de los
sindicatos y del Partido Comunista, y se hace una relación de las
personas que han sido asesinadas, entre ellos los señores Camilo Solano
Baltazar, Walter de Jesús Borja David y Melquisedec Rentería Machado.
Camilo Solano Baltazar:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de necropsia No. 95224 del 23 de mayo de 1995.
-Certificado de defunción No. 1012397, expedido el 31 de mayo de
1995, por la Notaría Única de Carepa.
-Acta de levantamiento de cadáver del 23 de mayo de 1995.
Walter de Jesús Borja David:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de necropsia No. 95222 del 23 de mayo de 1995.
-Certificado de defunción No. 1012395, expedido el 26 de mayo de
1995, por la Notaría Única de Carepa.
-Acta de levantamiento de cadáver del 23 de mayo de 1995.
-Entrevista a la señora Yorlanis Patricia Borja Perlaza.
Melquisedec Rentería Machado:
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Certificado de defunción No. 1012406, expedido el 13 de junio de 1995,
por la Notaría Única de Carepa.
-Acta de levantamiento de cadáver del 23 de mayo de 1995.
-Acta de necropsia No. 95223 del 23 de mayo de 1995.
-Entrevista a la señora Ángela Beatriz Saldarriaga Martínez, compañera
permanente del señor Rentería Machado.

Grado de participación y adecuación típica148:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

148
Decisión del 31 de octubre de 2012.

75
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Hecho 60: homicidio en persona protegida

192. El 7 de junio de 1995, Arturo Moreno López, quien para la época de los hechos era
integrante del Partido Comunista y de la Unión Patriótica, además pertenecía al sindicato
de Sintrainagro y también al Comité Obrero de la finca “Doña Francia”, fue interceptado
por hombres que portaban armas de corto y largo alcance, estos lo inmovilizaron,
amarraron y llevaron hasta las afueras de la mencionada finca, donde le dieron muerte,
con arma de fuego.

193. Este hecho fue confesado en diligencia de versión libre rendida el 9 de julio de
2008, por el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, quien aceptó su responsabilidad, por
cuanto hombres bajo su mando fueron los encargados de asesinar al señor Moreno López,
entre ellos Pedro Camacho, alias “Camacho”149 y Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “el
Tigre”.

Víctima Arturo Moreno López.


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 054 del 9 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 279 OT 295 de 28 de junio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 469526
adelantado en la Fiscalía 39 Especializada de Medellín.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 7 de junio de 1995.
-Acta de necropsia No. 95249 del 7 de junio de 1995.
-Certificado de defunción No. 1014872, expedido el 7 de septiembre de
1995, por la Notaría de Apartadó.
-Entrevista a las señoras Mary Luz y Sandra Bibiana Moreno Fernández,
hijas del occiso.
-Comunicado del 10 de septiembre de 1995, del Partido Comunista y la
Unión Patriótica, en el que se informa la grave situación de violencia que
se vive en el Urabá Antioqueño, en contra de los integrantes de los
sindicatos y del Partido Comunista, y se hace una relación de las
personas que han sido asesinadas, entre ellos el señor Arturo Moreno
López.

Grado de participación y adecuación típica150:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 61: homicidio en persona protegida

194. El 14 de julio de 1995, en horas de la noche, Julio César Serna, administrador del
bar “El Roble” e integrante de la Unión Patriótica, se encontraba en el mencionado
149
Pedro Camacho había sido integrante de los Comandos Populares del Ejército Popular de Liberación (EPL) y se había
desempeñado como comandante, agrupación que luego abandonó para unirse a los paramilitares bajo el mando de HÉBERT
VELOZA.
150
Decisión del 31 de octubre de 2012.

76
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

establecimiento comercial, cuando fue atacado por hombres armados que le dispararon
hasta causarle la muerte. Respecto del móvil se manifestó por parte de HÉBERT VELOZA
que una de las políticas de las autodefensas era “desarticular” y debilitar los movimientos
que tenían una supuesta relación con la política de izquierda e influencia de las “guerrillas”
de izquierda.

195. En versión libre del 9 de julio de 2008, HÉBERT VELOZA, confesó este hecho y
manifestó que fue cometido por alias “Chilapo”, quien estaba bajo el mando de Jesús
Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre”.

Víctima Julio César Serna


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 055 del 9 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 314 OT 330 de 30 de junio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 3765 adelantado
en la Unidad de Derechos Humanos y DIH de la Fiscalía 90 Especializada
de Medellín.
-Acta de necropsia No. 95342 del 15 de julio de 1995.
-Acta de levantamiento de cadáver del 15 de julio de 1995.
-Certificado de defunción No. 1014807, expedido el 19 de julio de 1995,
por la Notaría de Apartadó.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora Luz Zorela Rodríguez Agudelo, compañera
permanente de la víctima.

196. Por estos hechos HÉBERT VELOZA GARCÍA se encuentra condenado por el Juzgado
Segundo Penal del Circuito Especializado de Antioquia151.

Hecho 62: homicidio en persona protegida

197. El 14 de julio de 1995, Humberto Pacheco Castillo, integrante de la Unión


Patriótica, se encontraba en su residencia, ubicada en el barrio “Obrero” del municipio de
Apartadó. A eso de las ocho de la noche un grupo de hombres armados tumbaron la
puerta e ingresaron a la vivienda en busca de Pacheco Castillo, éste se había escondido
debajo de una cama, de allí lo sacaron y en presencia de su esposa y un bebe, le
dispararon hasta causarle la muerte.

198. De acuerdo con lo manifestado por HÉBERT VELOZA, en versión libre del 9 de julio
de 2008, este hecho fue cometido por Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre”, junto a
alias “San Pedro” y alias “Manigueto”, quienes eran hombres bajo su mando.

151
Condenado por los delitos de homicidio simple y fabricación tráfico o porte de armas de fuego o municiones, a la pena de
6 años y 8 meses de prisión, víctima Julio César Serna.

77
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

199. Mediante sentencia del 11 de noviembre de 2008, el Juzgado Segundo Penal del
Circuito Especializado de Medellín, rad 2008-0071, condenó a HÉBERT VELOZA GARCÍA, a
la pena de 6 años y 3 meses, como coautor de la muerte del señor Humberto Pacheco
Castillo.

Víctima Humberto Pacheco Castillo


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 056 del 9 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 3768 adelantado
en la Unidad de Derechos Humanos y DIH de la Fiscalía 90 de Medellín.
-Acta de necropsia No. 95344 del 15 de julio de 1995.
-Acta de levantamiento de cadáver del 15 de julio de 1995.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Certificado de defunción No. 1014799, expedido el 16 de julio de 1995,
por la Notaría de Apartadó.
-Entrevista a la señora Margarita Rosa Barraza Payaes, compañera
permanente del señor Pacheco Castillo.
-Comunicado del 10 de septiembre de 1995, del Partido Comunista y la
Unión Patriótica, en el que se informa la grave situación de violencia que
se vive en el Urabá Antioqueño, en contra de los integrantes de los
sindicatos y del Partido Comunista, y se hace una relación de las
personas que han sido asesinadas, entre ellos el señor Humberto
Pacheco Castillo.

Hecho 63: homicidio en persona protegida

200. El 17 de enero de 1996, Luís Eduardo Cubides Vanegas, Concejal del municipio de
Turbo para el periodo comprendido entre el 1992-1994, y quien fuera militante del partido
comunista y la Unión Patriótica, se dirigía hacia su residencia, ubicada la vereda “La Coiba”
del municipio de Turbo (Antioquia), ubicada entre “El Dos” y “La Playona”, cuando fue
abordado por hombres armados que lo torturaron y posteriormente lo asesinaron.

201. Afirmó el postulado, HÉBERT VELOZA, en diligencias de versión libre rendidas 9 y


10 de junio, 10 de julio y 24 de septiembre de 2008, que el abordaje del señor Cubides
fue realizado entre integrantes de su grupo paramilitar e integrantes del ejército nacional,
ya que para la época solían patrullar en compañía del “Batallón Vélez” y más
concretamente con un capitán de apellido Carvajal152.

202. El cadáver del señor Cubides Vanegas, fue encontrado por su hijo Luís Antonio
Cubides Ramírez, en predios de la finca “Coiba”, en “…un potrero enrastrojado, y estaba
cubierto con ramas de un árbol…”, en avanzado estado de descomposición, y “…amarrado
con las manos atrás, con heridas causadas con arma blanca, torturado porque a él le
cortaron las orejas, el rostro chuzado como con un cuchillo, el abdomen totalmente

152
Ver informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 295 OT 311 de 05 de julio de 2011.

78
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

abierto, las tetillas con cortadas, por último le cortaron fue la cabeza como con una
peinilla de las denominadas Rula, porque su cabeza le quedo medio pegada al tronco. (…)
lo llevamos en una hamaca para la parcela de nosotros, allí lo preparamos con licor y
permaneció como dos días en la finca, mientras lo podíamos sacar porque los
paramilitares no nos lo dejaban mover, ya que ellos estaban pendientes de la sacada de
mi papá para el municipio de Turbo; a los dos días lo logramos sacar en horas de la
153
noche… ” .

203. En versión libre llevada a cabo los días 9 y 10 de junio, 10 de julio y 24 de


septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó que hombres bajo su mando
fueron los encargados de darle muerte al señor Luís Eduardo Cubides Vanegas, entre ellos
los conocidos con los alias de “Caturro”154, “Estopín”, “Jairo Orejas” y otros integrantes del
grupo rural que militaba en la zona del Dos del Municipio de Turbo, agrego además que el
motivo de este hecho fue la pertenencia del señor Cubides a la Unión Patriótica (UP),
puesto que los integrantes de ese partido tenían vínculos con la subversión155.

Víctima Luís Eduardo Cubides Vanegas


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0225 del 17 de septiembre de 2008,
materiales de prueba suscrito por el investigador Juvenal Montoya Vélez, mediante el cual se
informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el
postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 295 OT 311 de 5 de julio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 2752 adelantado
en la Unidad de Derechos Humanos y DIH de la Fiscalía 91 de Medellín.
-Acta de levantamiento de cadáver del 19 de enero de 1996.
-Acta de necropsia No. 96021 del 19 de enero de 1996.
-Certificado de defunción expedido el 23 de enero de 1996, por la
Notaría Única de Turbo.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista al señor Luís Antonio Cubides Ramírez, hijo del occiso.
-Constancia Secretarial expedida por el Concejo Municipal de Turbo
(Antioquia), que da cuenta de la calidad de concejal del señor Luís
Eduardo Cubides Vanegas, durante el periodo 1992-1994.

Grado de participación y adecuación típica156:

Delito Título
Por estos hechos HÉBERT VELOZA GARCÍA se encuentra condenado por el Juzgado Segundo Penal
del Circuito Especializado de Antioquia157.
En la decisión de control de legalidad se adicionó el delito de Coautor
actos de barbarie art. 145.
Tortura en persona protegida art. 137. Coautor

153
Entrevista realizada al señor Luís Antonio Cubides Ramírez, hijo del occiso, el 18 de marzo de 2009.
154
Dijo HH: “…Caturro es hermano de Iván Álvarez o Gabriel que fue el primer comandante que llegó con nosotros allá…”
155
Según diligencia de versión libre rendida por el postulado HÉBERT VELOZA, el día 9 de junio de 2008.
156
Decisión del 31 de octubre de 2012.
157
Condenado por los delitos de homicidio agravado a la pena de 14 años y 3 meses de prisión. Segunda instancia Tribunal
Superior de Antioquia confirma y adiciona agravación Art. 104 numeral 8 Fecha 19/12/2008, víctima Luis Eduardo Cubides
Vanegas.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Hecho 64: homicidio en persona protegida

204. El 30 de abril de 1995, Vidal Devia Ramírez, quien se desempeñaba como escolta
de dirigentes de la Unión Patriótica, se encontraba en una fiesta en “La Cabaña”, sitio
cercano a la finca “Rancho Amanda”, ubicada en el municipio de Apartadó, hasta allí
llegaron varios hombres armados y le dispararon hasta causarle la muerte.

205. Este hecho fue versionado por HÉBERT VELOZA GARCÍA, los días 9 de julio y 25 de
septiembre de 2008, manifestando que Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre” y alias
“San Pedro”, quienes actuaban bajo su mando, fueron los encargados del homicidio y
afirma que el motivo del mismo fue precisamente el de ser escolta de integrantes de la
Unión Patriótica (UP).

Víctima Vidal Devia Ramírez


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 057 del 09 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 282 OT 298 de 28 de junio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 3643 adelantado
en la Unidad de Derechos Humanos y DIH de la Fiscalía 91 de Medellín.
-Acta de necropsia No. 95168 del 30 de abril de 1995.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de levantamiento de cadáver del 30 de abril de 1995.
-Entrevista a la señora Herminda Ramírez de Devia, madre del occiso.
-Entrevista al señor José Santos Devia Ramírez, hermano de la víctima.

Grado de participación y adecuación típica158:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

3. Hechos cometidos contra integrantes de sindicatos


en la zona del Eje Bananero

Hecho 65: homicidio en persona protegida

206. El 21 de marzo de 1996, Luís Álvaro David Oliveros, integrante del Comité Obrero
Patronal, cuando se trasladaba desde su residencia ubicada en el barrio “La Paz” hacia su
sitio de trabajo, la finca “Planes Uno” del municipio de Apartadó, fue atacado por hombres
armados, quienes le dispararon hasta causarle la muerte.

207. En versión libre llevada a cabo los días 10 de julio y 25 de septiembre de 2008,
HÉBERT VELOZA, aceptó su responsabilidad por estos hechos, como quiera que hombres

158
Decisión del 31 de octubre de 2012.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

bajo su mando, entre ellos, Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre”, alias “San Pedro” y
alias “Manigueto”, fueron los encargados de asesinar al señor David Oliveros.

Víctima Luís Álvaro David Oliveros


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 058 del 9 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 349405
adelantado en la Fiscalía Especializada de Medellín.
-Entrevista a la señora María Consuelo David Higuita, hija del occiso.
-Certificado de defunción No. 1048131, expedido el 26 de marzo de
1996, por la Notaría de Apartadó.
-Acta de necropsia No. 96109 del 21 de marzo de 1996.
-Acta de levantamiento de cadáver del 21 de marzo de 1996.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Certificación expedida el 18 de noviembre de 2008, por el doctor Carlos
Julio Díaz Lotero, Presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de
Colombia “CUT”, mediante la cual relaciona los nombres de las personas
que hacían parte de Sintrainagro y que fueron víctimas del bloque
bananero, entre ellos el señor Luís Álvaro David Oliveros.

Grado de participación y adecuación típica159:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 66: homicidio en persona protegida

208. El 22 de abril de 1996, en horas de la mañana, Elkin de Jesús Escobar López y


Gustavo Alberto Gutiérrez López, miembros de Sintrainagro, se dirigían a su sitio de
trabajo en la finca “Flores Negras” del municipio de Apartadó, cuando el vehículo en el que
se movilizaban fue interceptado por hombres armados, quienes los identificaron y los
obligaron a bajar del automotor, luego de lo cual fueron conducidos a la finca “Cabo de
Hornos” en el mismo municipio de Apartado160, posteriormente obligaron a Escobar y a
Gutiérrez a tenderse en el piso, y una vez en esta posición les dispararon hasta causarles
la muerte, posteriormente sus cuerpos fueron abandonados en la vía pública.

209. En versión libre rendida los días 10 de julio, 24 y 25 de septiembre de 2008,


HÉBERT VELOZA, aceptó su responsabilidad por estos hechos, pues Jesús Albeiro Guisao
Arias, alias “El Tigre” y alias “San Pedro” fueron los autores materiales del asesinato de los
señores Elkin de Jesús Escobar López y Gustavo Alberto Gutiérrez López.

Víctimas Elkin de Jesús Escobar López y Gustavo Alberto Gutiérrez López


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 061 del 11 de febrero de 2009,
materiales de prueba mediante el cual se informa sobre las labores de verificación de los

159
Decisión del 31 de octubre de 2012.
160
Ver diligencias de versión libre rendidas por el postulado HÉBERT VELOZA, de los días 10 de julio y 24 de septiembre de
2008.

81
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

hechos confesados por el postulado.


-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 286 OT 302 de 8 de julio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 1034230
adelantado en la Fiscalía Especializada de Medellín.
-Certificación expedida el 18 de noviembre de 2008, por el doctor Carlos
Julio Díaz Lotero, Presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de
Colombia “CUT”, mediante la cual relaciona los nombres de las personas
que hacían parte de Sintrainagro y que fueron víctimas del bloque
bananero, entre ellos los señores Elkin de Jesús Escobar López y
Gustavo Alberto Gutiérrez López.
Elkin de Jesús Escobar López:
-Acta de necropsia No. 96184 del 22 de abril de 1996.
-Certificado de defunción No. 1048199, expedido el 6 de mayo de 1996,
por la Notaría de Apartadó.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora Ana Milbia Durango Durango, esposa del señor
Escobar López.
Gustavo Alberto Gutiérrez López:
-Acta de necropsia No. 96183 del 22 de abril de 1996.
-Acta de levantamiento de cadáver del 22 de abril de 1996.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora Rosmira Durango Álvarez, esposa del señor
Gutiérrez López.

Grado de participación y adecuación típica161:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 67: homicidio en persona protegida

El 2 de diciembre de 1995, Jairo Alberto López Manco, quien para la época de los hechos
laboraba en la finca “Agromar”, se encontraba en el establecimiento comercial “El
Tancón”, ubicado en el barrio “Jesús Mora” del municipio de Turbo, en donde se realizaba
una fiesta, hasta allí llegó un grupo de hombres armados que identificaron a López Manco,
lo sacaron del sitio y se lo llevaron con la supuesta pretensión de interrogarlo. Su cadáver
apareció el 3 de diciembre de 1995, cerca al lugar de los hechos.

210. En versión libre realizada los días 10 de julio y 25 de septiembre de 2008, HÉBERT
VELOZA GARCÍA, confesó su participación en la muerte del señor López Manco y
manifestó que lo realizó junto a Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson” y José Huber Coca
Ceballos, alias “Huber Coca”, quienes fueron los autores materiales del hecho, añadiendo
que la muerte del señor López Manco tuvo lugar en la bomba de “Trancón” en el
municipio de Turbo.

Víctima Jairo Alberto López Manco


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0265 del 24 de noviembre de 2008,
materiales de prueba mediante el cual se informa sobre las labores de verificación de los

161
Decisión del 31 de octubre de 2012.

82
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

hechos confesados por el postulado.


-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 311 OT 323 de 30 de junio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 2673 adelantado
en la Fiscalía Seccional de Turbo.
-Acta de levantamiento de cadáver del 3 de diciembre de 1995.
-Acta de necropsia No. 95323 del 4 de diciembre de 1995.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora María Eneida Suárez, tía y madre de crianza de la
víctima.
-Entrevista a la señora Maricela Pérez Manco, hermana de la víctima.
-Certificado de defunción expedido por la Notaria de Turbo, el 4 de
diciembre de 1995.

Grado de participación y adecuación típica162:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor
Secuestro simple art. 168. Coautor

Hecho 68: homicidio en persona protegida

211. El 23 de mayo de 1995, Elmer Antonio Urquijo Beltrán, miembro del sindicato de
Sintrainagro, se encontraba en su sitio de trabajo en la empacadora de la finca “La
Florida” (Apartadó, Antioquia), hasta allí llegó un grupo de hombres armados, que
procedió a indagar, lista en mano, por Urquijo Beltrán, una vez identificado le dispararon
hasta causarle la muerte.

212. Este hecho fue confesado por HÉBERT VELOZA GARCÍA, en diligencia de versión
libre llevada a cabo los días 10 de julio y 25 de septiembre de 2008, en la que manifestó
que el señor Urquijo Beltrán, murió a manos de Jesús Albeiro Guisao Arias alias ‘el Tigre’ y
alias “San Pedro”, integrantes del grupo armado ilegal que se encontraban bajo su mando.

Víctima Elmer Antonio Urquijo Beltrán


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0232 del 30 de septiembre de 2008,
materiales de prueba suscrito por el investigador César Augusto Echavarría González,
mediante el cual se informa sobre las labores de verificación de los
hechos confesados por el postulado.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 1368 adelantado
en la Fiscalía Seccional de Chigorodó (Antioquia).
-Acta de levantamiento de cadáver del 23 de mayo de 1995.
-Acta de necropsia No. 95225 del 23 de mayo de 1995.
-Certificado de defunción No. 1012422 expedido por la Notaria de
Carepa (Antioquia), el 28 de junio de 1995.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora Piedad Patricia León Muriel, compañera
permanente de la víctima.
-Certificación expedida el 18 de noviembre de 2008, por el doctor Carlos
Julio Díaz Lotero, Presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de
Colombia “CUT”, mediante la cual relaciona los nombres de las personas

162
Decisión del 31 de octubre de 2012.

83
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

que hacían parte de Sintrainagro y que fueron víctimas del bloque


bananero, entre ellos el señor Elmer Antonio Urquijo Beltrán.

Grado de participación y adecuación típica163:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 69: homicidio en persona protegida

213. El 23 de mayo de 1995, Luis Antonio Espitia González, integrante del Sindicato
Sintrainagro, se encontraba en su residencia ubicada en el corregimiento “El Tres”, del
municipio de Turbo (Antioquia), hasta allí llegaron hombres armados a bordo de una
camioneta, lo llamaron por su nombre y una vez él se identificó lo obligaron a subirse al
vehículo y se lo llevaron. Al día siguiente su cuerpo fue hallado con impactos de arma de
fuego a la orilla de unos cultivos de plátano, cerca de su residencia.

214. En diligencia de versión libre realizada el 10 de julio de 1995, HÉBERT VELOZA


GARCÍA, confesó este hecho y manifestó que el señor Espitia González fue asesinado por
hombres bajo su mando, entre ellos, Carlos Vásquez, alias “Cepillo” y alias “Estopín”.

Víctima Luís Antonio Espitia González.


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0236 del 24 de septiembre de 2008,
materiales de prueba suscrito por el investigador César Augusto Echavarría González,
mediante el cual se informa sobre las labores de verificación de los
hechos confesados por el postulado.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 2181 adelantado
en la Fiscalía 83 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 25 de abril
de 1996.
-Acta de levantamiento de cadáver del 24 de mayo de 1995.
-Acta de necropsia No. 95121 del 24 de mayo de 1995.
-Certificado de defunción expedido por la Notaria de Turbo (Antioquia),
el 24 de mayo de 1995.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora Sixta Tulia González Yanes, madre del occiso.
-Certificación expedida el 18 de noviembre de 2008, por el doctor Carlos
Julio Díaz Lotero, Presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de
Colombia “CUT”, mediante la cual relaciona los nombres de las personas
que hacían parte de Sintrainagro y que fueron víctimas del bloque
bananero, entre ellos el señor Luís Antonio Espitia González.

Grado de participación y adecuación típica164:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato
Secuestro simple art. 168. Autor Mediato

163
Decisión del 31 de octubre de 2012.
164
Decisión del 31 de octubre de 2012.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Hecho 70: homicidio en persona protegida

215. El 13 de septiembre de 1995, un grupo de hombres armados llegaron hasta la


empacadora de la finca “Las Margaritas”, ubicada en el corregimiento de “Nueva Colonia”
del municipio de Turbo, en el sector de “La Llana”, allí preguntaron por Epifanio y Luís
Carlos, al no encontrarlos, dispararon de forma indiscriminada en contra de los
trabajadores de la finca, resultando muertos los señores Arcesio Gallego Lozano y Misael
Antonio Moreno Córdoba, integrantes de Sintrainagro.

216. HÉBERT VELOZA, confesó este hecho en diligencia de versión libre llevada a cabo
los días 10 de julio y 25 de septiembre de 2008, y manifestó que hombres bajo su mando,
entre ellos, Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre”, alias “San Pedro” y alias
“Manigueto”.

Víctimas Arcesio Gallego Lozano y Misael Antonio Moreno Córdoba


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0229 del 26 de septiembre de 2008,
materiales de prueba suscrito por el investigador César Augusto Echavarría González,
mediante el cual se informa sobre las labores de verificación de los
hechos confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 305 OT 321 de 29 de junio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 2444 adelantado
en la Fiscalía 113 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 25 de
abril de 1996.
Arcesio Gallego Lozano:
-Certificado de defunción expedido por la Notaria de Turbo (Antioquia),
el 13 de septiembre de 1995.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de septiembre de 1995.
-Acta de necropsia No. 95476 del 13 de septiembre de 1995.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora Luz Marina Mosquera Fernández, compañera
permanente del señor Arcesio Gallego.
Misael Antonio Moreno Córdoba:
-Certificado de defunción expedido por la Notaria de Turbo (Antioquia),
el 9 de octubre de 1995.
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de septiembre de 1995.
-Acta de necropsia No. 95477 del 13 de septiembre de 1995.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora Ana Felisa Lloreda Córdoba.
-Certificación expedida el 18 de noviembre de 2008, por el doctor Carlos
Julio Díaz Lotero, Presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de
Colombia “CUT”, mediante la cual relaciona los nombres de las personas
que hacían parte de Sintrainagro y que fueron víctimas del bloque
bananero, entre ellos los señores Arcesio Gallego Lozano y Misael
Antonio Moreno Córdoba.

Grado de participación y adecuación típica165:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

165
Decisión del 31 de octubre de 2012.

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Hecho 71: homicidio en persona protegida

217. En la tarde del 29 de junio de 1995, Rogelio Mosquera Palacios, integrante de


Sintrainagro, salió de la finca “Banalinda”, y cuando se trasladaba sobre la vía que
conduce al municipio de Turbo, el vehículo en el que se desplazaba fue detenido en un
retén ilegal instalado cerca a la empacadora de la finca “La Magdalena”, en la comunal
“San Jorge”166, allí hombres armados lo obligaron a descender del automotor, lo alejaron
20 metros aproximadamente del resto de las personas y le dispararon hasta causarle la
muerte.

218. En versión libre llevada a cabo los días 10 de julio y 25 septiembre de 2008,
HÉBERT VELOZA, manifestó que Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre” y alias
“Danilo”, hombres bajo su mando fueron los encargados de darle muerte al señor
Mosquera Palacios, razón por la cual aceptó su responsabilidad como comandante.

Víctima Rogelio Mosquera Palacios


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0240 del 24 de septiembre de 2008,
materiales de prueba suscrito por el investigador César Augusto Echavarría González,
mediante el cual se informa sobre las labores de verificación de los
hechos confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 306 OT 322 de 30 de junio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 2352 adelantado
en la Fiscalía 113 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 27 de
mayo de 1997.
-Acta de necropsia No. 95384 del 30 de julio de 1995.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista de la señora Flor Alba Ospina Ruiz, esposa del occiso.

Grado de participación y adecuación típica167:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 72: homicidio en persona protegida

219. En la mañana del 23 de septiembre de 1995, el profesor Ángel Humberto Zabala


Bejarano, miembro de la Asociación de Institutores de Antioquia, ADIDA, salió de su
residencia ubicada en la vereda “La Arenera” del corregimiento de “Currulao”, hacía el
municipio de Turbo a cumplir con una cita médica168, en el trayecto fue sorprendido por
hombres armados que lo obligaron a abordar una camioneta blanca conocida como
“Camino al cielo”, lo llevaron hasta el sitio conocido como “La Caleta” y allí fue asesinado.

166
Ver informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 306 OT 322 de 30 de junio de 2011.
167
Decisión del 31 de octubre de 2012.
168
Según la declaración rendida por la señora Luz Stella Areiza el día 26 de septiembre de 1995, esposa del señor Zabala
Bejarano. Ver informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 285 OT 301 de 28 de junio de 2011.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Dos días después, su cuerpo fue encontrado en el cementerio del municipio de Turbo, con
heridas producidas con arma de fuego y en avanzado estado de descomposición.

220. En versión libre realizada los días 10 de julio y 25 de septiembre de 2008, HÉBERT
VELOZA, confesó su participación directa en este hecho junto a Enrique Mestra Yanes,
alias “Wilson”, Wilmer Aguado Álvarez, alias “Carro Loco”, José Ruperto García, alias “El
Gato” y José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca”.

Víctima Ángel Humberto Zabala Bejarano


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 060 del 11 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 285 OT 301 de 28 de junio de
2011.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Acta de necropsia No. 95261 del 26 de septiembre de 1995.
-Certificado de defunción expedido por la Notaria de Turbo (Antioquia),
el 28 de septiembre de 1995.
-Entrevista a la señora Primitiva González Arrieta, compañera
permanente del occiso.
-Certificación expedida el 18 de noviembre de 2008, por el doctor Carlos
Julio Díaz Lotero, Presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de
Colombia “CUT”, mediante la cual relaciona los nombres de las personas
que hacían parte de Sintrainagro y que fueron víctimas del bloque
bananero, entre ellos el señor Ángel Humberto Zabala Bejarano.

Grado de participación y adecuación típica169:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor

Hecho 73: homicidio en persona protegida

221. El 16 de septiembre de 1995, Dairo Pérez Negrete, integrante de Sintrainagro y


además del comité obrero patronal de la finca en la que trabajaba170, se encontraba en el
parque “La Martina”, ubicado en el barrio “La Esmeralda” del municipio de Apartadó, hasta
donde llegaron varios hombres armados, que le dispararon causándole la muerte.

222. En versión libre llevada a cabo los días 10 de julio y 25 de septiembre de 2008,
HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó el hecho en el que perdió la vida el señor Pérez
Negrete, y manifestó que hombres bajo su mando fueron los responsables, entre ellos,
Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre”, alias “Manigueto” y alias “San Pedro”.

Víctima Dairo Pérez Negrete


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0230 del 29 de septiembre de 2008,
169
Decisión del 31 de octubre de 2012.
170
Ver declaración de John Jairo Perez Negrete, hermano del occiso, ante la Fiscalía seccional de Apartado, de 3 de octubre
de 1995.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

materiales de prueba suscrito por el investigador César Augusto Echavarría González,


mediante el cual se informa sobre las labores de verificación de los
hechos confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 313 OT 329 de 30 de junio de
2011.
-Certificado de defunción No. 1014911 expedido por la Notaria de
Apartadó (Antioquia), el 21 de septiembre de 1995.
-Acta de necropsia No. 95492 del 17 de septiembre de 1995.
-Acta de levantamiento de cadáver del 16 de septiembre de 1995.
-Entrevista a la señora Carmen María Negrete Flórez, madre de la
víctima.
-Entrevista a la señora Arelis Guillín Barón, compañera permanente del
occiso.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.

Grado de participación y adecuación típica171:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 74: homicidio en persona protegida

223. El 13 de septiembre de 1995, hombres armados llegaron hasta la empacadora de


la finca “Alexandra Pia”, ubicada en el municipio de Apartadó, lugar en el que ordenaron
reunir a los empleados de la finca, como no lograron el objetivo empezaron a disparar de
forma indiscriminada causándole la muerte a los señores Iber Modesto Rojas Moreno y
Elías García Díaz, integrantes de Sintrainagro.

224. Este hecho fue confesado por el desmovilizado HÉBERT VELOZA GARCÍA, en
versión libre llevada a cabo los días 10 de julio y 25 de septiembre de 2008, y manifestó
que los responsables de la muerte de los señores Rojas Moreno y García Díaz, son Jesús
Albeiro Guisao Arias alias, “El Tigre”, alias “San Pedro” y alias “Manigueto”, quienes eran
hombres bajo su mando.

Víctimas Iber Modesto Rojas Moreno y Elías García Díaz


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0231 del 29 de septiembre de 2008,
materiales de prueba suscrito por el investigador César Augusto Echavarría González,
mediante el cual se informa sobre las labores de verificación de los
hechos confesados por el postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 318 OT 334 de 28 de junio de
2011.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 3889 adelantado
en la Fiscalía 49 Seccional de Apartadó, el cual fue suspendido el 20 de
abril de 1997.
-Entrevista a la señora Epifanía Díaz Cuadrado, madre de Elías García
Díaz y compañera permanente de Iber Modesto Rojas Moreno.
Iber Modesto Rojas Moreno
-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de septiembre de 1995.
-Acta de necropsia No. 95478 del 13 de septiembre de 1995.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
Elías García Díaz

171
Decisión del 31 de octubre de 2012.

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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

-Acta de levantamiento de cadáver del 13 de septiembre de 1995.


-Acta de necropsia No. 95479 del 13 de septiembre de 1995.
-Certificación expedida el 18 de noviembre de 2008, por el doctor Carlos
Julio Díaz Lotero, Presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de
Colombia “CUT”, mediante la cual relaciona los nombres de las personas
que hacían parte de Sintrainagro y que fueron víctimas del bloque
bananero, entre ellos el señor Elías García Díaz.

Grado de participación y adecuación típica172:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

Hecho 75: homicidio en persona protegida

225. En la noche del 28 de marzo de 1996, un grupo armado de aproximadamente 20


hombres, vestidos de civil y con botas militares, llegaron hasta la finca “La Teka”, ubicada
en el corregimiento de “Churidó Pueblo” del municipio de Apartadó; lista en mano
procedieron a identificar y requisar a cada uno de los empleados de la finca.
Posteriormente sacaron de sus campamentos a los señores Rosmira Guisao Castro y
Gustavo Antonio Vargas Usuga, éste último miembro de Sintrainagro y coordinador de la
finca mencionada, a quien le dijeron que lo necesitaban para una reunión, y que si no los
acompañaba asesinarían a su familia. Al día siguiente, fueron encontrados los cuerpos de
Vargas Usuga, con impactos de arma de fuego y de Guisao Castro, con heridas producidas
por arma corto contundente y de fuego, a 200 metros de la vía principal.

226. HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó este hecho en versión libre llevada a cabo los
días 10 de julio y 25 de septiembre de 2008, en la que manifestó que hombres bajo su
mando, entre ellos, Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre” y alias “Manito”, fueron los
encargados de comandar la incursión a la finca “La Teka”.

Víctimas Gustavo Vargas Usuga y Rosmira del Socorro Guisao Castro.


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 059 del 11 de febrero de 2009, mediante
materiales de prueba el cual se informa sobre las labores de verificación de los hechos
confesados por el postulado.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 358574
adelantado en la Fiscalía Especializada de Apartadó.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 284 OT 300 de 28 de junio de
2011.
-Copia de la declaración del señor Hermes Antonio Mejía Montoya,
testigo de los hechos sucedidos el 28 de marzo de 1996.
Gustavo Vargas Usuga
-Acta de levantamiento de cadáver del 29 de marzo de 1996.
-Acta de necropsia No. 96124 del 29 de marzo de 1996.
-Certificado de defunción No. 1048154 expedido por la Notaria de
Apartadó (Antioquia), el 6 de abril de 1996.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Certificación expedida el 18 de noviembre de 2008, por el doctor Carlos

172
Decisión del 31 de octubre de 2012.

89
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Julio Díaz Lotero, Presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de


Colombia “CUT”, mediante la cual relaciona los nombres de las personas
que hacían parte de Sintrainagro y que fueron víctimas del bloque
bananero, entre ellos el señor Gustavo Vargas Usuga.
Rosmira del Socorro Guisao Castro.
-Acta de levantamiento de cadáver del 29 de marzo de 1996.
-Acta de necropsia No. 96125 del 29 de marzo de 1996.
-Certificado de defunción No. 1048154 expedido por la Notaria de
Apartadó (Antioquia), el 6 de abril de 1996.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a la señora Lisbeth Audrey Vásquez Guisao, hija de la señora
Guisao Castro.

Grado de participación y adecuación típica173:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato
Secuestro simple art. 168. Autor Mediato

Hecho 76: homicidio en persona protegida

227. El 15 de mayo de 1995, Osvaldo Vergara Gómez, integrante del Sindicato


Sintrainagro, se encontraba en compañía de su esposa María Dolores Romero en su
residencia del barrio “Veranillo” del municipio de Turbo, hasta allí llegaron hombres
armados, quienes luego de ingresar a la vivienda les dispararon hasta causarles la muerte.

228. En versión libre realizada los días 9 de julio y 26 de septiembre de 2008, HÉBERT
VELOZA GARCÍA, confesó y aceptó su participación directa en estos hechos, junto a él
actuaron Wilmer Aguado Álvarez, alias “Carro Loco”, Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”
y José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca”.

Víctimas Osvaldo Vergara Gómez y María Dolores Romero Perea.


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0239 del 24 de septiembre de 2008,
materiales de prueba suscrito por el investigador César Augusto Echavarría González,
mediante el cual se informa sobre las labores de verificación de los
hechos confesados por el postulado.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 2150 adelantado
en la Fiscalía 113 Seccional de Turbo, el cual fue suspendido el 10 de
abril de 1996.
Osvaldo Vergara Gómez
-Acta de necropsia No. 95108 del 15 de mayo de 1995.
-Acta de levantamiento de cadáver del 15 de mayo de 1995.
-Certificado de defunción expedido por la Notaria de Turbo (Antioquia),
el 16 de mayo de 1995.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Entrevista a los señores Oswaldo Vergara Guzmán y Johny Vergara
Ramírez, hijos del occiso.
-Certificación expedida el 18 de noviembre de 2008, por el doctor Carlos
Julio Díaz Lotero, Presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de
Colombia “CUT”, mediante la cual relaciona los nombres de las personas
que hacían parte de Sintrainagro y que fueron víctimas del bloque
bananero, entre ellos el señor Osvaldo Vergara Gómez.

173
Decisión del 31 de octubre de 2012.

90
Tribunal Superior De Bogotá Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. interno 1432
Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

María Dolores Romero Perea


-Acta de necropsia No. 96109 del 15 de mayo de 1995.
-Acta de levantamiento de cadáver del 15 de mayo de 1995.
-Certificado de defunción expedido por la Notaria de Turbo (Antioquia),
el 16 de mayo de 1995.

Grado de participación y adecuación típica174:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Coautor

Hecho 77: homicidio en persona protegida

229. En horas de la tarde del 15 de junio de 1995, Severo Mosquera Angulo, integrante
de Sintrainagro y ex integrante del sindicato de Sinaltraifru (sindicato de la industria
bananera o frutera), del cual se retiró por amenazas175, salía de su residencia ubicada en
el barrio “Alfonso López” del municipio de Apartadó, cuando fue atacado por hombres
armados que le dispararon hasta causarle la muerte.

230. En versión libre realizada los días 10 de julio y 25 de septiembre de 2008, HÉBERT
VELOZA GARCÍA, aceptó su responsabilidad, como quiera que hombres bajo su mando,
entre ellos Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “El Tigre”, alias “San Pedro”, alias “Pinpino” y
alias “Cepillo”, integrantes del grupo urbano de las autodefensas, fueron los autores
materiales del hecho.

Víctima Severo Mosquera Angulo


Elementos -Informe de Policía Judicial No. 0242 del 29 de septiembre de 2008,
materiales de prueba suscrito por el investigador César Augusto Echavarría González,
mediante el cual se informa sobre las labores de verificación de los
hechos confesados por el postulado.
-Inspección judicial al proceso radicado bajo el número 3771 adelantado
en la Fiscalía 119 Seccional de Apartadó, el cual fue suspendido el 9 de
mayo de 1996.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 307 OT 323 de 30 de junio de
2011.
-Acta de levantamiento de cadáver del 15 de julio de 1995.
-Acta de necropsia No. 95347 del 15 de julio de 1995.
-Entrevista al señor Henry Mosquera Angulo, hermano de la víctima.
-Entrevista a la señora Alicia Duarte, esposa de la víctima.
-Certificación expedida el 18 de noviembre de 2008, por el doctor Carlos
Julio Díaz Lotero, Presidente de la Central Unitaria de Trabajadores de
Colombia “CUT”, mediante la cual relaciona los nombres de las personas
que hacían parte de Sintrainagro y que fueron víctimas del bloque
bananero, entre ellos el señor Severo Mosquera Angulo.

Grado de participación y adecuación típica176:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato
174
Decisión del 31 de octubre de 2012.
175
Ver entrevista rendida por el señor Henry Mosquera, hermano del occiso, ante la Unidad Nacional de Justicia y Paz de 22
de mayo de 2009.
176
Decisión del 31 de octubre de 2012.

91
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Sala de Justicia y Paz HÉBERT VELOZA GARCÍA

Hecho 87: homicidio en persona protegida

231. El 23 de agosto de 1998, en horas de la mañana, Ernesto Enrique Romero


Hernández y Rudolf Reinaldo Martin Paffen Durier, se movilizaban en un vehículo Land
Rover Discovery de placas VIF 578 modelo 1997, de color verde oscuro, por la vía que de
“Toluviejo” conduce a “San Onofre”, a la altura del puente “Palenquillo”, frente a la
entrada de la hacienda del mismo nombre, se encontraba instalado un retén, allí fueron
detenidos por hombres armados, quienes los obligaron a bajar del vehículo, y le dieron
muerte a Ernesto Romero. Posteriormente incendiaron el vehículo y obstruyeron la vía.
Respecto del señor Paffer Durier, éste fue secuestrado con fines extorsivos, a la fecha se
encuentra desaparecido.

232. Según diligencia de versión libre rendida por el postulado, HÉBERT VELOZA, el 9 de
julio de 2008, los implicados en el secuestro y posterior muerte del señor Rudolf, son
Edwin Tirado alias “Chuzo” y alias “El negro Ricardo” quien se desmovilizo con Mancuso en
grupo de Córdoba y San Jorge, y del Bloque Bananero participaron alias “Urino”, alias
“Patedanta”, alias “El mudo” y alias “el Mocho”177.

233. En diligencia de versión libre del 9 de junio de 2008, el postulado HÉBERT VELOZA
GARCÍA, manifestó sobre este hecho lo siguiente:

”…en San Onofre y Toluviejo, donde secuestramos al señor Rudolf Pafert y a otra
persona, donde participó Juancho Dique; alias “Chuzo”, quien trabajaba conmigo en
esta clase de operaciones que nos encomendaba Vicente Castaño, también el negro
“Ricardo”, “Augusto” y “Rodrigo Cadena” nos apoyo. esta persona fue llevada a Urabá,
estuvo retenida un tiempo, era un contratista de Tolú, por medio de abogados retiraron
unos dineros de Tolú, su esposa llamaba Angélica, con esa señora me reuní una o dos
ocasiones, después quedo encargado el “Mono Mancuso” y “Monoleche” en la
recolección de esos dineros, llevamos esa persona a turbo y esta persona fue muerta y
quemada y no quedo nada del cuerpo; es un hecho que “Monoleche” también sabe
porque él se reunió para los dineros… eso fue en el año 98. Vicente ordenó el secuestro
y llevarlo a la zona de Urabá, según ellos porque se venía robando grandes dineros de
Tolú como contratista. Mi función era ir a retenerlo y llevarlo y cuidarlo en Urabá y la
negociación la manejaban directamente estas personas, esa zona era manejada por
“Rodrigo Cadena”, no sé si “Diego Vecino” y “Mancuso”.

Víctimas Ernesto Enrique Romero Hernández y Rudolf Reinaldo Martin


Paffen Durier.
Elementos materiales de -Proceso con radicado 1343 de la fiscalía unidad de derechos
prueba humanos y derecho internacional humanitario de Bogotá,
delito homicidio y secuestro, denunciante de oficio, victima
Ernesto Romero Hernández (Presidente del concejo de Tolú).
-Ratificación de denuncia de Fabio de Jesús Villa Rodríguez
cédula de ciudadanía número 98.493.348 de Bello Antioquia,
Director Ejecutivo de la Federación Nacional de Concejos.
-Acta de inspección a cadáver sin número, con fecha 23 de

177
Ver informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 308 OT 324 de 5 de julio de 2011.

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agosto de 1998, Fiscalía Quinta Seccional de Santiago de Tolú


occiso Ernesto Enrique Romero Hernández.
-Solicitud de práctica de Necropsia número 425 del 23 de
agosto de 1998 Santiago de Tolú.
-Informe de homicidio y secuestro del 23 de agosto de 1998
número 929 policía judicial de la policía nacional.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 308 OT 324 de 5 de
julio de 2011.
-Diligencia de declaración jurada de Arcadio Romero Pérez con
fecha 26 de agosto de 1998, brigada especial Fiscalía Quinta y
Sexta Delegadas de Sincelejo.
-Protocolo de necropsia U03.NC-98.030.98 occiso Ernesto
Romero Hernández.
-Diligencia de levantamiento número 174 del 27 de octubre de
1998 en Tolú Sucre N.N de sexo masculino de 35 años de
edad.
-Cotejo dactiloscópico correspondiente a Rudolf Reinaldo Martin
Paffen Durier.
- Protocolo de necropsia numero 0018-2001, acta de
levantamiento de cadáver.

234. Por estos hechos HÉBERT VELOZA GARCÍA se encuentra condenado por el Juzgado
Penal del Circuito Especializado de Sincelejo178.

4. Hechos cometidos bajo la vigencia de la Ley 599 de 2000

Hecho 55: homicidio en persona protegida

235. El 28 de abril de 2002, Jenry Jameth Velasco Cuesta179, se encontraba afuera de su


casa, ubicada en el barrio “Obrero” del municipio de Turbo, cuando fue atacado por dos
personas que le dispararon hasta causarle la muerte.

236. En versión libre rendida los días 27 de noviembre de 2007, 11 de junio, 24 y 25 de


septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA, confesó este hecho y manifestó que el asesinato
del señor Velasco Cuesta, fue cometido por alias “Jhoncito”180, que para esa época
actuaba bajo las órdenes de alias “Mega o Megateo”, segundo al mando del frente Turbo.
Respecto del móvil del homicidio no se presentaron detalles.

Víctima Jenry Jameth Velasco Cuesta181


Elementos -Informe fechado No. 0234 del 24 de septiembre de 2008, suscrito por
materiales de prueba el investigador César Augusto Echavarría González, mediante el cual se
informa sobre las labores de verificación de los hechos confesados por el

178
Condenado por homicidio agravado y secuestro extorsivo a 234 meses y 10 días de prisión, víctimas Ernesto Romero
Hernández y Rudoll Reinaldo Martin Paffen Durier.
179
El nombre es escrito tal y como aparece en la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
180
Según diligencias de versión libre rendidas por el postulado HÉBERT VELOZA, los días 27 de noviembre de 2007 y 11 de
junio de 2008, alias “Jhoncito” era urbano en Turbo, y a su vez se encontraba bajo el mando de alias “mega”. Los dos se
encontraban bajos las órdenes del postulado puesto que hacían parte de la estructura que el postulado comandaba.
181
El nombre es escrito tal y como aparece en la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.

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postulado.
-Informe de Policía Judicial FPJ-11 Nro. 299 OT 315 de 29 de junio de
2011.
-Inspección judicial realizada al proceso 6294 que se adelantaba en la
Fiscalía 10 Seccional de Turbo, y que fue suspendido el 23 de diciembre
de 2002.
-Copia de la tarjeta de preparación de la cédula de ciudadanía.
-Protocolo de necropsia 053 del 28 de abril de 2002.
-Acta de necropsia 02-053 del 28 de abril de 2002.
-Entrevista a la señora Ana Josefa Cuesta Palacios, madre de la víctima.
-Certificado de Defunción expedido por la Notaría del Circuito de Turbo,
el 9 de mayo de 2002.

Grado de participación y adecuación típica182:

Delito Título
Homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1. Autor Mediato

5. Reclutamiento ilícito de Niños, Niñas y Adolescentes

Hecho 88: Reclutamiento ilícito183

237. La Fiscal 17 de Justicia y Paz formuló el cargo de reclutamiento ilícito de niños,


niñas y adolecentes –NNA-, en contra del postulado, amparada en el hecho de que
durante la existencia del extinto Bloque Bananero, quien fuera su comandante, el
desmovilizado HÉBERT VELOZA GARCÍA, efectúo, ordenó, facilitó, incorporó o permitió
que ingresaran a las filas de la organización armada ilegal, niños, niñas y adolecentes. El
postulado reconoció en versión libre del 29 de mayo y 9 de junio de 2008, que ordenó y
autorizó el reclutamiento de personal para el Bloque Bananero, porque: “servían para
hacer inteligencia en sitios de paso obligado de la guerrilla o de la fuerza pública. Habían
muchachos de 15, 16 ó 17 años. Ese era el promedio”.

238. El postulado narró además que el reclutamiento de los NNA fue una “práctica
generalizada” en las Autodefensas, que nunca fue prohibida por la “Casa Castaño”;
manifestó igualmente que en los cursos de instrucción militar y políticos que recibió, no se
le informó que el reclutamiento ilícito de niños, niñas y adolecentes fuera una conducta
considerada como un “crimen de guerra”. La Sala al hacer revisión de la práctica del
reclutamiento de NNA ha podido confirmar que en todas las estructuras de las
autodefensas analizadas hasta el momento se han presentado casos de NNA que fueron
reclutados por diferentes frentes y bloques paramilitares. Por la importancia del tema en
torno a establecer si el reclutamiento de NNA puede considerarse como un patrón de
macrocriminalidad, el Tribunal en su momento exhortará a la Fiscalía General de la Nación

182
Decisión del 31 de octubre de 2012.
183
En la presente decisión sólo se considerarán para análisis los hechos de reclutamiento ilícito cometidos por el Frente
Turbo (Bloque Bananero) y no los del Bloque Calima por las razones expuestas en la parte considerativa de la decisión.

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para que identifique elementos comunes a diversas estructuras paramilitares a fin de


determinar la procedencia del tratamiento del tema de forma específica.

239. En la zona del Urabá, comandada por alias “HH”, los encargados de reclutar, que
obviamente incorporaron NNA, eran alias “Mega” y alias “Chucho”, que a su vez era el
comandante de la escuela de instrucción. HÉBERT VELOZA GARCÍA manifestó además que
los jóvenes reclutados eran:

“… muchachos de las veredas donde había asentamiento de las autodefensas, entonces por
situaciones de pobreza o la forma cómo vivían, buscaban un apoyo del grupo armado y se
les permitía el ingreso. Nunca el reclutamiento fue obligado, siempre fue voluntario. Luego
se les daba un entrenamiento y se asignaban por lo general a los grupos rurales y en las
zonas donde eran oriundos por su facilidad de desplazarse y realizar labores de inteligencia.
Pasaban por el curso básico de cualquier miembro de las autodefensas e iban a la escuela
de entrenamiento…”184

240. El postulado, VELOZA GARCÍA, le narró a la Fiscalía que los niños, niñas y
adolecentes reclutados por el grupo armado ilegal, eran tratados como cualquier otro
integrante de la organización, no se les tenía ninguna consideración especial por ser
menores de edad; se les enseñaba sobre el manejo de armas; cómo maniobrar un radio;
cómo debían reaccionar frente al enemigo y cómo debían informar sobre la presencia de la
guerrilla o de la fuerza pública, entre otras.

241. Al respecto confirmó que:

“…los menores eran tratados como cualquier hombre más del grupo, en la guerra tanto
hombres como mujeres en los grupos son iguales, reciben el mismo tratamiento, el mismo
entrenamiento y las mismas obligaciones, una vez ingresan tiene el mismo trato niños y
niñas….”

242. VELOZA GARCÍA especificó que luego de recibir el entrenamiento respectivo, los
niños, niñas y adolecentes eran sometidos a una valoración sobre sus capacidades,
dependiendo de ello, unos eran enviados a conformar los grupos rurales que en la zona
combatían a la guerrilla, y otros, eran utilizados como “puntas o postes”, ubicados en
sitios estratégicos, dotados con un radio o un celular, con el fin de que informaran lo que
sucedía en la zona y sobre la presencia de miembros de la guerrilla o de la fuerza pública.
Enfatizó el postulado, que esta era la función que con mayor frecuencia se les asignaba a
los niños, niñas y adolecentes de la región, a quienes les era mucho más fácil pasar
desapercibidos por conocer a las personas de la población, además por esto mismo les era
posible desplazarse por las veredas y la zona urbana sin despertar sospecha, y además,
desde el punto de vista operativo, para los comandantes les era mucho más práctico y útil

184
Versión libre del 29 de mayo de 2008.

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reclutar niños, niñas y adolecentes de la misma zona en la que militaban, porque traer
personal de otra región les acarreaba más gastos e inconvenientes logísticos.

243. Los niños, niñas y adolecentes que hacían parte del Bloque Bananero, recibían una
remuneración mensual, igual a la de los demás integrantes del grupo, así por ejemplo,
para la época de la desmovilización se les entregaba una suma de $450.000 mensuales y
se les concedía un permiso cada dos meses, el cual duraba 12 días, para que visitaran a
sus familias, quienes, según alias “HH”, generalmente tenían pleno conocimiento de que
sus hijos hacían parte de los paramilitares185.

244. El 25 de noviembre de 2004, fecha en la que se desmovilizó el Bloque Bananero, y


conforme lo certificó el ICBF, HÉBERT VELOZA GARCÍA, en su condición de comandante,
le entregó por medio del Alto Comisionado para la Paz, siete (7) NNA, los cuales se
relacionan a continuación:

185
La Fiscalía 17 de Justicia y Paz, documentó como durante la existencia de los bloques Bananero y Calima, quienes fueron
sus comandantes incorporaron o permitieron que se incorporaran a sus filas, niños, niñas y adolecentes; conducta ilícita que
quedó plenamente establecida a través de la certificación que el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar remitió a la
Fiscalía General de la Nación, mediante oficio 1400-037748 del 10 de julio de 2008, en el cual se indica el nombre y apellido
del niño o niña desvinculado, edad, fecha de ingreso al programa del ICBF, departamento y municipio de la desvinculación,
grupo armado al margen de la ley al que perteneció, especificando el bloque o frente y la forma de desvinculación.

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No. Nombres Documento de Lugar y fecha de Edad, Fecha y lugar de ingreso al grupo Edad, Fecha y lugar de retiro del grupo Tiempo de
identidad nacimiento armado ilegal armado ilegal permanencia en el
grupo armado ilegal
1. Deicy Navales 1.045.492.468 de Turbo Turbo, Abril 8 de 1987. Fue reclutada en la vereda Los Indios del municipio En el corregimiento El Dos del municipio de Turbo 13 meses.
Durango. (Antioquia). de Turbo (Antioquia), a la edad de 15 años. No (Antioquia), el 25 de noviembre de 2004, a la edad
recuerda la fecha. de 17 años.
2. Héctor Eduardo 1.041.258.399 de San San Pedro de Urabá, Fue reclutado en San José del Guaviare, a la edad En el corregimiento El Dos del Municipio de Turbo 4 años
Velásquez Canchila. Pedro de Urabá (Antioquia), de 13 años. No recuerda la fecha. Durante su (Antioquia), el 25 de noviembre de 2004, a la edad aproximadamente.
(Antioquia). Diciembre 12 de 1987. permanencia en las Autodefensas, hizo parte del de 17 años.
Bloque Cacique Nutibara, Héroes de Tolobá en
Córdoba y finalmente del Bloque Bananero, con el
que se desmovilizó.
3. José Ignacio Madera 1.045.493.287 de Turbo Necoclí (Antioquia), Febrero Fue reclutado en el corregimiento “El Totumo”, del En el corregimiento El Dos del municipio de Turbo 4 años y 8 meses
Flórez . (Antioquia) 21 de 1988 municipio de Necoclí (Antioquia), a la edad de 11 (Antioquia), el 25 de noviembre de 2004, a la edad aproximadamente.
años y 5 meses. No recuerda la fecha. de 16 años.
4. José Luís Murillo 1.027.946.330 de Chigorodó (Antioquia), enero Fue reclutado en el Barrio Simón Bolívar del En el corregimiento El Dos del Municipio de Turbo 3 años
Mosquera. Apartadó. 11 de 1987. municipio de Chigorodó (Antioquia), durante el (Antioquia), el 25 de noviembre de 2004, a la edad aproximadamente.
primer semestre del año 2002, época para la cual de 17 años.
contaba con 14 años de edad.
5. Luz Amanda Chanci 1.027.954.391 de Dabeiba Dabeiba (Antioquia), abril 1 de Fue reclutada en el municipio de Dabeiba, a la edad En el corregimiento El Dos del Municipio de Turbo 4 años
Mazo. (Antioquia). 1988. de 12 años edad. No recuerda la fecha. Durante su (Antioquia), el 25 de noviembre de 2004, a la edad aproximadamente.
permanencia en el grupo armado ilegal, perteneció de 16 años.
al Bloque Elmer Cárdenas, luego en el Bloque Norte
y finalmente en el Bloque Bananero, con el que se
desmovilizó.
6. Rafael Enrique Registro civil de Chigorodó (Antioquia), el 4 de Fue reclutado a la edad de 14 años, en el En el corregimiento El Dos del municipio de Turbo 1 año y 6 meses
Valderrama Hoyos. Nacimiento No. 24253070. noviembre de 1988. corregimiento El Dos, vereda Los Indios del (Antioquia), el 25 de noviembre de 2004, a la edad aproximadamente.
municipio de Turbo (Antioquia). No recuerda la de 16 años.
fecha.
7. Yeison Yey Zurita 1.132.109.122 de Taraza Tierralta (Córdoba), Junio 20 Fue reclutado en Santafé de Ralito (Córdoba), a la En el corregimiento El Dos del municipio de Turbo 2 años
Ramos. (Antioquia). de 1987. edad de 15 años. No recuerda la fecha. (Antioquia), el 25 de noviembre de 2004, a la edad aproximadamente.
de 17 años.

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Víctimas Deicy Navales Durango, Héctor Eduardo Velásquez Canchila, José


Ignacio Madera Flórez, José Luís Murillo Mosquera, Luz Amanda Chanci
Mazo, Rafael Enrique Valderrama Hoyos y Yeison Yey Zurita Ramos.
Elementos -Versión libre del postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, realizada el 29 de
materiales de prueba mayo de 2008.
-Informe 632 del 23 de julio de 2010, suscrito por el investigador
Antonio José Moreno Hernández, mediante el cual da cuenta de las
labores de verificación realizadas para obtener información de los
menores reclutados por el Bloque Bananero.
-Informe No. 548472 del 23 de julio de 2010, suscrito por el
investigador Leonel Gutiérrez Herrera, mediante el cual se informa de
los datos que de cada uno de los jóvenes reclutados aparece en la
Registraduría Nacional del Estado Civil.
-Informe No. 553887 del 20 de agosto de 2010, suscrito por el
investigador Leonel Gutiérrez Herrera, mediante el cual se da cuenta de
la inspección judicial realizada a la Registraduría Nacional del Estado
Civil, con el fin de obtener copia de las tarjetas alfabéticas y de
preparación de cada uno de los números de las cédulas de ciudadanía
de los menores reclutados.
-Dictamen de medicina legal de edad, realizado a cada uno de los
menores por parte del Instituto Nacional de Medicina Legal de Apartadó
(Antioquia).
-Declaración de los NNA reclutados.

Grado de participación y adecuación típica186:

Delito Título
Reclutamiento ilícito art. 162 Ley 599 de 2000. Coautor

V. AUDIENCIA DE INCIDENTE DE IDENTIFICACIÓN DE LAS


AFECTACIONES CAUSADAS A LAS VICTIMAS, ALEGATOS DE CONCLUSIÓN Y
PETICIONES

245. Ejecutoriada la decisión de control de legalidad, de conformidad con lo establecido


en el artículo 23 de la Ley 1592 de 2012 que modificó el artículo 23 de la Ley 975 de
2005, la Sala adelantó la audiencia de incidente de identificación de las
afectaciones causadas a las víctimas, en la que cada uno de los diferentes actores
procesales presentaron sus pretensiones y alegatos previos a la sentencia, a las cuales se
hará referencia de forma sucinta, relacionando en primera instancia lo referente a las
afectaciones causadas por el accionar criminal del Bloque Bananero y posteriormente se
hará referencia a los alegatos y peticiones del art. 447 del CPP187:

186
Decisión del 31 de octubre de 2012.
187
En este apartado sólo se hará referencia a las generalidades de presentación de cada uno de los intervinientes, los
conceptos, argumentos, recomendaciones y conclusiones se tendrán en cuenta en la parte considerativa de la presente
decisión.
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De las afectaciones

246. A continuación se presentarán las intervenciones de las partes en el proceso que


hacen referencia a las afectaciones generadas por el accionar del Bloque Bananero de las
ACCU, durante la comandancia de HÉBERT VELOZA GARCÍA.

A. La Fiscal Delegada

247. La Fiscalía 17 adscrita a la Unidad Nacional de Fiscalías para la Justicia y la Paz,


representada por la doctora Nubia Stella Chávez Niño, presentó y acreditó en cada uno de
los hechos que fueron legalizados por la Sala a las víctimas directas e indirectas que se
hicieron presentes durante las diferentes etapas del proceso, aportando en cada caso la
documentación que le fue entregada por las víctimas (formato digital).

248. Teniendo en cuenta la presentación hecha anteriormente en la audiencia de


legalización de cargos, la Fiscalía hizo de nuevo un recuento de las razones por las cuales
consideraba que el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, cumplía con los requisitos de
elegibilidad, en esta instancia judicial confirmó tales proposiciones y manifestó que tal
situación no ha cambiado, para que así sea considerado por la Sala. Agregó que tal como
se expuso en la decisión de control de legalidad, se presentaron los hechos, cumpliendo
con los estándares de verdad exigidos por la Ley; igualmente, se enunciaron y
presentaron las características del fenómeno delictual de las Autodefensas Unidas de
Colombia (AUC) y en particular la génesis, accionar y desmovilización del Bloque
Bananero.

249. Por otro lado y respecto a las víctimas del delito de reclutamiento ilícito que fue
legalizado en contra de HÉBERT VELOZA GARCÍA, la Fiscal Delegada, indicó a la Sala, los
múltiples requerimientos que realizó al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF)
y a la Defensoría del Pueblo para que se les designara un representante legal a los NNA
que fueron víctimas del Bloque Bananero, pero no fue posible, y por ello solicita que al
momento de estudiar el tema de la reparación, se tenga en cuenta lo expuesto por esta
misma Sala en la sentencia proferida contra Freddy Rendón Herrera, alias “El Alemán”,
respecto de las reparaciones allí ordenadas.

250. Finalmente, la Fiscal Delegada, se refirió al tema de la resocialización de los


postulados al proceso de Justicia y Paz, el cual ve con preocupación, pues de acuerdo con

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la normatividad del Instituto Nacional Penitenciario (INPEC), no se les permite a los


desmovilizados estudiar o trabajar una vez son condenados por la justicia ordinaria por
delitos que fueron cometidos durante y con ocasión de su pertenencia al grupo armado
ilegal.

251. Por lo anterior solicita que la Sala requiera al Instituto Nacional Penitenciario
(INPEC), para que informe sobre cuáles son los programas destinados a los
desmovilizados y postulados en el proceso de Justicia y Paz, encaminados a obtener su
resocialización, cuáles son los tratamientos sicológicos a los que se ha sometido a los
postulados, pues sería importante conocer cuál ha sido el compromiso institucional con
estas personas que fueron “capacitadas para asesinar”, quienes lo hicieron durante
muchos años, y la pregunta sería si están preparados para reincorporase a la vida civil,
para ser cabezas de familia, padres, esposos, hijos y hermanos.

B. Delegada para la Orientación y Asesoría a las víctimas del Conflicto


Armado Interno de la Defensoría del Pueblo188

252. La doctora Luisa Fernanda Avellaneda Castañeda, psicóloga de la Defensoría del


Pueblo, presentó ante la Sala un informe sobre el proceso que adelantó la entidad para
orientar a las víctimas durante su participación en las diferentes audiencias que se llevan
a cabo en el proceso de Justicia y Paz, específicamente en el incidente de identificación de
las afectaciones causadas, tal como lo dispone el parágrafo 1º del artículo 23 de la Ley
1592 de 2012, para lo cual se desarrollaron diversas estrategias metodológicas con el
objetivo de explicarle a las víctimas de una manera clara y sencilla los derechos que les
asisten dentro de este proceso.

C. Solicitud de Nulidad Legal y Constitucional

253. Previo a la presentación de las afectaciones sufridas por las víctimas, el doctor
Fredy Edison Largo Suárez, representante de víctimas, solicitó la declaración de nulidad
del proceso, a partir del auto que da trámite al incidente de identificación de las
afectaciones, amparado fundamentalmente en los siguientes argumentos: (i) el proceso
de justicia y paz tiene como elementos esenciales la realización de los derechos a la
verdad, a la justicia y a la reparación integral de las víctimas, (ii) dentro del proceso de la
Ley 975 de 2005, se estableció el incidente de reparación integral para materializar el

188
Ibídem.
100
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derecho a la indemnización de las víctimas; (iii) no se ha logrado obtener verdad en torno


a que Samuel Antonio Jiménez Madera, no era auxiliador de la guerrilla; (iv) se cambió el
incidente de reparación integral por el incidente de reconocimiento de afectaciones (Ley
1592 de 2012), para que la indemnización la realice la UARIV; (v) el despacho está
incurriendo en causal de nulidad, art. 140 del CPC, que reza que el proceso será nulo en
todo o en parte cuando la demanda se tramite por proceso diferente al que corresponde;
y (vi) solicita la nulidad constitucional porque considera que se está vulnerando el art. 29
de la Constitución Política (derecho al debido proceso), pues al aplicar la Ley 1592 de
2012 se desconoce la regulación de validez y aplicación de las leyes (Ley 153 de 1887),
que reza que las leyes especiales priman sobre las generales; por tanto no se puede
aplicar de manera retroactiva la Ley 1592 de 2012, pues el proceso se inició con la Ley
975 de 2005.

D. Solicitud de Excepción de Inconstitucionalidad189

254. Previo a la presentación de las afectaciones sufridas por las víctimas, la doctora
Ruby Stella Castaño Sánchez, en representación de las Defensoras Públicas que actúan en
el presente asunto, solicitó a la Sala la inaplicación del artículo 23 de la Ley 1592 de 2012,
por encontrarlo violatorio de los derechos constitucionales a la igualdad en la reparación
integral, conforme a los Convenios y Tratados internacionales. El marco jurídico en el que
fundamentan la excepción de inconstitucionalidad o el control de constitucionalidad por
vía de excepción, es el artículo 4º de la Carta Política, así como los artículos 93 y 94, de la
Constitución Política de Colombia, la jurisprudencia y la doctrina nacional e internacional.

255. Además, para el solicitante el artículo 23 de la Ley 1592 de 2012, vulnera el


derecho a la igualdad, consagrado en el art. 13 C.N. y art. 24 de la CADH190; el cual se
manifiesta a través de cuatro mandatos: (i) trato idéntico a destinatarios que se
encuentren en circunstancias idénticas; (ii) trato diferenciado a destinatarios cuyas
situaciones no comparten ningún elemento en común, (iii) trato paritario a destinatarios
cuyas situaciones presenten similitudes y diferencias, pero las similitudes sean más
relevantes a pesar de las diferencias; y, (iv) trato diferenciado a destinatarios que se
encuentren también en una posición en parte similar y en parte diversa, pero en cuyo
caso las diferencias sean más relevantes que las similitudes.

189
Audiencia del 15 de marzo de 2013. En este apartado sólo se hará referencia a las generalidades de la presentación, los
conceptos, argumentos y conclusiones se tendrán en cuenta en la parte considerativa de la presente decisión.
190
Convención Americana de Derechos Humanos.
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256. Estos cuatro contenidos tienen sustento en el artículo 13 constitucional, pues


mientras el inciso primero del citado precepto señala la igualdad de protección, de trato y
en el goce de derechos, libertades y oportunidades, al igual que la prohibición de
discriminación; los incisos segundo y tercero contienen mandatos específicos de trato
diferenciado a favor de ciertos grupos marginados, discriminados o especialmente
vulnerables.

257. Igualmente considera que el artículo 23 de la Ley 1592 de 2012, vulnera el


derecho a la justicia, consagrado en el art. 8 de la CADH191; la adaptación de los derechos
de las víctimas a los estándares internacionales a través de la jurisprudencia, comporta el
reconocimiento de que los derechos universales a la verdad, la justicia y la reparación,
llevan implícita la potestad de intervenir en todas las fases de la actuación, en desarrollo
del derecho de acceder a la justicia en condiciones de igualdad.

258. Este acceso, se deriva del carácter bilateral del derecho a un recurso judicial
efectivo en virtud del cual los derechos de las víctimas no pueden verse menguados en
relación con los que le asisten al procesado. La consideración contemporánea de la
víctima como protagonista activa del proceso, conduce al goce de estándares de
protección similares a los de otros intervinientes en el proceso. En consecuencia, el hecho
de que la norma impugnada establezca explícitamente el derecho de las víctimas a tener
representación judicial durante el juicio, no puede interpretarse como exclusión de ejercer
el derecho de postulación en otras fases del proceso.

259. Esta vulneración se objetiviza cuando el artículo 23 de la Ley 1592 viola el debido
proceso al prohibir expresamente tasar las afectaciones (o daños), y por ende realizar las
solicitudes correspondientes. Esto porque vulnera el derecho que tiene toda persona a ser
reparada integralmente, por un juez competente y de manera individual, cuando de daño
individual se trate. Tal reparación está compuesta por la indemnización justa, que
comprende todas las formas de reparación aceptadas por el ordenamiento legal
Colombiano como son; el daño material, moral, daño a la vida de relación, proyecto de
vida, rehabilitación, restitución, compensación, satisfacción, garantías de no repetición,
entre otros.

260. Lo anterior implica que la víctima de graves violaciones de los derechos humanos,
solicite todas las medidas que le permitan recuperar su estado anterior a la vulneración

191
Convención Americana de Derechos Humanos.
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de sus derechos, o al menos a buscar compensar las consecuencias que ese daño le ha
ocasionado. Y es que tal reparación integral debe darse en sede judicial y no en sede
administrativa, más aún cuando la reparación administrativa no incluye a todas las
victimas que pudieron sufrir daños con el hecho victimizante, ni incluye todas las
conductas punibles que pueden presentarse en el terreno judicial.

261. Considera la Representante Judicial que todo esto constituye un atropello jurídico
puesto que se niega el derecho a la reparación material e inmaterial que tiene la victima
de graves violaciones a los derechos humanos, que había desarrollado la Ley 975 de 2005
y efectivizada por la Sala de Casación Penal de la Honorable Corte Suprema de Justicia en
los casos de Mampuján y Catatumbo, decisiones que se tomaron en derecho,
reconociendo una indemnización integral a las víctimas.

262. Es así como el operador judicial que está conociendo del caso, dice, es quien debe
pronunciarse sobre tales pretensiones de las víctimas. Tal y como está redactado el art.
23, no será posible que se procure una reparación integral, ni mucho menos judicial e
individual, lo que genera una desigualdad frente a las víctimas que ante situaciones
similares (víctimas de crímenes de guerra y de lesa humanidad) acudieron al trámite del
art. 23 de la Ley 975, e hicieron sus solicitudes en torno a la reparación, ante juez
competente, y obtuvieron una decisión judicial en tal sentido.

263. Según la recurrente, el artículo 23 de la Ley 1592 de 2012, no cumple con los
componentes de una reparación integral, pues se limita a unas afectaciones en las cuales
la norma guía a la víctima y preestablece, en qué aspectos puede ser reparada y qué
entidades estatales, del orden nacional o regional harían esa reparación según el caso y
los programas actuales que de por sí deben existir para la población vulnerable dentro de
un Estado Social de Derecho.

264. Finalmente y frente al contenido de las sentencias de Justicia y Paz, considera la


Defensora que el artículo 25 de la Ley 1592 de 2012, elimina lo concerniente a las
obligaciones de reparación moral y económica de las víctimas, y con ello se les está
cercenando su derecho a exigir del victimario la obligación de reparar, quien a su vez está
obligado a entregar, ofrecer y denunciar bienes, precisamente con fines de reparación y/o
restitución a víctimas. De tal forma que se deslegitimiza la premisa según la cual el
principal obligado a reparar es el postulado y de manera solidaria los demás integrantes

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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

del bloque, y queda en entredicho la responsabilidad subsidiaria que asume el Estado


frente a esta obligación reparadora.

265. Teniendo en cuenta tales argumentos las defensoras de las víctimas, solicitan que
la Sala se abstenga de aplicar el artículo 23 de la Ley 1592 de 2012 y se tasen los
perjuicios de las víctimas de acuerdo con lo establecido en la Ley 975 de 2005 y la
jurisprudencia de la Honorable Corte Suprema de Justicia.

E. Intervención de las Defensoras Públicas192

266. Por parte de la Defensoría del Pueblo, como representantes judiciales de las
víctimas, acudieron las doctoras Elvira Hernández Sánchez, Lucila Torres de Arango, Ruby
Stella Castaño Sánchez y Claudia Liliana Guzmán Sánchez, quienes durante la audiencia
de incidente de identificación de las afectaciones causadas a las víctimas y luego de
solicitarle a la Sala la excepción de inconstitucionalidad, presentaron de manera
alternativa las siguientes peticiones comunes para cada una de las víctimas, teniendo
como marco jurídico la Ley 1448 de 2011.

267. Daño material: se fije una reparación económica de 40 salarios mínimos legales
mensuales vigentes, monto máximo fijado en la Ley 1448 de 2011 para cada uno de los
integrantes de los núcleos familiares que representan.

268. Otras medidas de reparación: en el mismo sentido se solicitó para cada una de
las víctimas atención médica y psicológica; subsidios para la construcción o el
mejoramiento de vivienda de acuerdo con las características de la región; que a través del
SENA se de acceso preferencial a la oferta educativa para aprendices con apoyo al
sostenimiento mientras participan en los cursos, de acuerdo con las condiciones de
alfabetización y necesidades de la región (actividades económicas y culturales que allí se
desarrollan), para que fomenten programas focalizados en capacitación de competencias
laborales y que promuevan su emprendimiento y productividad dentro de los programas
laborales según el perfil socio-económico de los beneficiarios. Que de acuerdo con el
artículo 130 de la Ley 1448 de 2011, se diseñen programas y proyectos especiales de
generación de empleo rural a cargo del Ministerio del Trabajo y del SENA, para asegurar
el sostenimiento de las víctimas, teniendo en cuenta el perfil socioeconómico de las

192
Audiencia del 15 de marzo de 2013. En este apartado sólo se hará referencia a las generalidades de la presentación, los
conceptos, argumentos, recomendaciones y conclusiones se tendrán en cuenta en la parte considerativa de la presente
decisión.
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HÉBERT VELOZA GARCÍA

mismas y de la región, y para su implementación se incluya en el Plan Nacional para la


Atención y Reparación Integral de las Víctimas.

269. Consideran que una medida de satisfacción efectiva para las víctimas que
representan, sería el que la Sala ordene sentar el respectivo certificado de defunción en
los casos de desaparición forzada en concurso con homicidios en persona protegida.

270. Medidas de satisfacción: que se restablezca la dignidad y la reputación de cada


una de las víctimas que representan, expresando la disculpa pública y el perdón por los
hechos cometidos por parte del postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, como integrante del
Bloque Bananero, en donde exprese que estas personas no eran colaboradores o
auxiliadores de la guerrilla, que no conformaban grupos de delincuencia común, y que por
el contrario eran miembros de una comunidad en la cual no tenían rechazo alguno, que
eran hombres y mujeres trabajadores provenientes de familias honestas, disculpa que
deberá ser publicada en un diario de amplia circulación nacional y local; que al momento
de emitirse la correspondiente sentencia, se le ordene al postulado llevar a cabo actos de
contribución a la reparación integral, como son el reconocimiento público de
responsabilidad y la declaración pública de arrepentimiento y el compromiso de no
repetición.

271. Así mismo, solicitan se cree una cátedra de Derechos Humanos y/o democracia en
las escuelas y colegios del Urabá, en la cual se incorporen contenidos de memoria
histórica, que tengan entre sus programas de estudio, el origen, exterminio físico y
político de la Unión Patriótica, los crímenes contra sindicalistas, obreros, menores y en
general contra civiles en el marco del conflicto armado, como forma de garantizar la
reproducción de la memoria histórica a las próximas generaciones. Además que de
acuerdo con lo establecido en el artículo 56 de la Ley 1592 de 2012, se organicen,
sistematicen y conserven los archivos de los hechos y circunstancias relacionadas con las
conductas de las personas objeto de este incidente, con miras a garantizar sus derechos a
la verdad y preservar la memoria judicial.

272. Medias de reparación de orden pecuniario: solicita para cada uno de los
núcleos familiares que representa, el reconocimiento económico por concepto de daño
emergente, lucro cesante, daño moral y daño al proyecto de vida, que deberán ser
proporcionados y adecuados a la gravedad de las violaciones y al daño sufrido, de
conformidad con lo establecido en la jurisprudencia del Consejo de Estado.

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273. Así mismo, solicitan a la Sala se dé una interpretación amplía e incluyente al


concepto de víctima, que según lo establece la jurisprudencia de la Corte Interamericana
de Derechos Humanos y de la Corte Constitucional Colombiana, específicamente en la
sentencia C-052 de 2012, se ha entendido que son víctimas o perjudicados entre otros,
las víctimas directas y sus familiares, sin distinguir, al menos para reconocer su condición
de víctimas del delito, el grado de relación o parentesco, por ello, piden que se reconozca
a los hermanos de las víctimas su condición de tal, y se les asigne como daño moral una
cantidad económica acorde con la afectación sufrida.

274. Medidas especiales: que la Unidad Administrativa Especial para la Atención y


Reparación Integral a la Víctimas (UARIV), constituya un fideicomiso en una entidad
bancaria autorizada por la Superintendencia Bancaria a nombre de las víctimas que
correspondan a niños, niñas y adolescentes que se presentaron en este incidente.

275. Finalmente, requieren de la UARIV, reconozca y cancele los montos fijados en las
sentencias judiciales proferidas contra el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, y que serán
objeto de acumulación en este proceso, y que de conformidad con lo establecido en el 22
de la ley 1448 de 2011, la Unidad ejerza la acción de repetición y subrogación contra el
postulado VELOZA GARCÍA.

276. A continuación se hace una relación de los núcleos familiares que cada una de las
abogadas de la Defensoría Pública representa y de los abogados de confianza, así como
de la documentación que aportaron para acreditar la condición de víctima de cada uno de
ellos y de las afectaciones sufridas.

Doctora Elvira Hernández Sánchez:

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS193 APORTADOS194
ALCIDES TORRES Consuelo Rodríguez Compañera
32288777 Declaraciones extrajuicio
ARIAS Peña permanente
Abogada no legitimada
3 Delitos Legalizados: Katerine Torres para actuar.
Rodríguez Declaraciones extrajuicio.
Homicidio en persona 1193071417 Hija
Registro civil, NO prueba
protegida art. 135 parentesco, es hija de
parágrafo numeral 1. Aníbal de Jesús Gutiérrez.

193
Los nombres de las víctimas se han escrito como aparecen en las cédulas de ciudadanía.
194
Cuado se hace referencia a que las representantes de las víctimas no probaron las afectaciones, es la conclusión a la que
la Sala ha llegado luego de la revisión de cada una de las carpetas aportadas.
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VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS193 APORTADOS194
Desaparición forzada
art. 165. Dianelly Torres
1028001413 Hija Registro Civil
Tortura en persona Rodríguez
protegida art. 137.
ÁNGEL DAVID Declaración extrajuicio.
QUINTERO BENITEZ Juramento estimatorio de
Blanca Yanet
Graciano Acevedo 43143414 Compañera afectaciones.
Delitos Legalizados:
Luz Enith Quintero Registro civil.
3 Homicidio en persona Serna 1045493318 Hija Declaración extrajuicio.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Desaparición forzada
art. 165.
Tortura en persona Isneisa Quintero Registro civil.
protegida art. 137. Graciano 1040368289 Hija Declaración extrajuicio.
Registro civil.
Farley Alberto Juramento estimatorio de
IVO DE JESÚS Hernández Lopera 98665097 Hijo afectaciones.
HERNÁNDEZ MUÑOZ
Registro civil.
Delitos Legalizados: Linda María Partida de Bautismo.
4
Hernández Lopera 43871506 Hija Declaraciones extrajuicio.
Homicidio en persona
protegida art. 135 Danney Gicela Registro civil.
parágrafo numeral 1. Hernández Lopera 43733520 Hija Declaración extrajuicio.
Registro civil.
Ivonne Arleth Juramento estimatorio de
Hernández Lopera 43748223 Hija afectaciones.
Registro civil de
Ana del Carmen
22197884 Cónyuge matrimonio. Declaraciones
García Blandon
extrajuicio.
Paula Andrea Ríos Registro civil.
32280434
García Hija Abogada no legitimada
GONZALO ANTONIO
para actuar.
RIOS SALINAS
Abogada no legitimada
Condena proferida por para actuar.
5 Deisy Tatiana Ríos 32280534 Registro civil.
el Juzgado Primero Hija
Penal del Circuito García. Se anexan documentos
Especializado de pero no fue presentada en
Antioquia. el incidente.
Abogada no legitimada
para actuar.
Yeferson Alexander Registro civil.
Falta copia Hijo
Ríos García. Se anexan documentos
pero no fue presentada en
el incidente.
RUBEN DARIO LORA
DÍAZ y MARTHA LUZ
CHAVARRIA
PALENCIA
Carmen Elena Lora Madre de Rubén Registro civil.
6 22154753
Delitos Legalizados: Díaz Darío Lora Declaración extrajuicio.

Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1
Registro civil hijo.
Declaración extrajuicio que
María del Carmen no tenía unión marital que
JAIME IVÁN 21508195 Madre
Oquendo de Holguín vivía con sus padres.
HOLGUÍN OQUENDO
Juramento estimatorio de
afectaciones.
7 Delitos Legalizados:
Registro civil hijo.
Jaime de Jesús Declaración extrajuicio que
Homicidio en persona 3393297 Padre
Holguín Sierra no tenía unión marital que
protegida art. 135
vivía con sus padres.
parágrafo numeral 1
Abogada no legitimada
Margarita María Compañera
39304714 para actuar.
Taborda Rico. permanente
Declaración extrajuicio.

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VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS193 APORTADOS194
Registro Civil Hijo.
Declaraciones extrajuicio.
Nubia del Carmen Partida de Matrimonio con
21154414 Madre
Pulgarín Monsalve Héctor de Jesús Acevedo.
Juramento estimatorio de
afectaciones.
Registro civil hijo.
WILSON ALBERTO
Declaraciones extrajuicio.
ACEVEDO PULGARÍN Héctor de Jesús
639909 Padre Partida matrimonio con
Acevedo
Nubia del Carmen Pulgarín
8 Delitos Legalizados:
Monsalve.
Homicidio en persona Registro civil.
Rosalba Acevedo
protegida art. 135 39313861 Hermana Juramento estimatorio.
Pulgarín
parágrafo numeral 1 No probó afectaciones.
Rodrigo Alonso Registro civil.
71979869 Hermano
Acevedo Pulgarín No probó afectaciones195
Gloria Emilse Acevedo Registro Civil.
39301857 Hermana
Pulgarín No probó afectaciones
Registro Civil.
Dora Deisy Acevedo
39311003 Hermana Juramento estimatorio.
Pulgarín
No probó afectaciones
FRANCISCO JAVIER Registro civil.
Adriana Echavarría
ECHAVARRIA PÉREZ 1027942794 Hija Juramento estimatorio.
Correa
No probó afectaciones.
8 Delitos Legalizados: Juan Carlos
1128276834 Hijo Registro civil
Echavarría Villa
Homicidio en persona
Gustavo Adolfo
protegida art. 135 71785877 Hijo Registro civil
Echavarría Villa
parágrafo numeral 1
José María Ruiz Registro civil.
71977119 Hermano
Paternina No probó afectaciones.
JOSÉ ALFREDO RUIZ Registro civil del señor José
LEVER Alfredo Ruiz Lever, en el
Ana Clara Ruiz que consta que es hijo de
Delitos Legalizados: 22155467 Madre
9 Borbua Felipa Lever Caicedo y José
de los Santos Ruiz Soto.
Homicidio en persona No probó parentesco.
protegida art. 135 No se entregaron
parágrafo numeral 1 Felipa Caicedo 39317798 documentos para probar
Hermana
Bahena Falta copia parentesco.
No probó afectaciones.
Registro civil.
Liris Mercado Julio 39306468 Hermana Declaración extrajuicio.
No probó afectaciones.
JAVIER ENRIQUE
Luis Alberto Mercado Registro civil.
MERCADO JULIO 8774206 Hermano
Julio No probó afectaciones.
Delitos Legalizados:
10 Marleny María Registro civil.
39308289 Hermana
Homicidio en persona Mercado Julio No probó afectaciones.
protegida art. 135 Daisy Isabel Sánchez Registro civil.
39315354 Hermana
parágrafo numeral 1 Julio No probó afectaciones.
Pedro Rafael Mercado Registro civil.
8815213 Hermano
Julio No probó afectaciones.
Declaración Extrajuicio.
RUBEN DARIO Yuddi Elena Morales
33991830 Compañera Juramento estimatorio de
AGUDELO DUQUE Carmona
afectaciones.
Delitos Legalizados: Rubén Antonio
11 687831 Padre Partida de Matrimonio
Agudelo Agudelo
Homicidio en persona
protegida art. 135 Doralba Duque de
parágrafo numeral 1 22153782 Madre Partida de Matrimonio
Agudelo
Secuestro simple art.
Natalia Andrea
168. 1028004084 Hija Registro civil.
Agudelo Morales

195
Cuado se hace referencia a que las representantes de las víctimas no probaron las afectaciones, es la conclusión a la
que la Sala ha llegado luego de la revisión de cada una de las carpetas aportadas.
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VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS193 APORTADOS194

Declaración extrajuicio.
Alix del Carmen Juramento estimatorio de
39403087 Hija de Crianza
Quintero afectaciones.
CERBULO DE JESÚS No probó parentesco.
AGUIRRE
Wilson Antonio Declaración Extrajuicio.
CHAVERRA 8427070 Hijo de crianza
Quintero No probó parentesco.
Delitos Legalizados: Abogada no legitimada
11 para actuar.
Ana Lucia Quintero NA
Homicidio en persona Madre No se entregaron
Rincón. Falta copia
protegida art. 135 documentos para probar
parágrafo numeral 1 parentesco.
Secuestro simple art. Abogada no legitimada
168. para actuar.
Ricardo Humberto NA
Hijo de crianza No se entregaron
Sánchez Falta copia
documentos para probar
parentesco.
Gloria Aguirre
39300980 Hija Registro civil.
Quintero
Registro civil.
HERLEY ALEXANDER
Valoración Psicológica
MARQUEZ ORTEGA Diana María Márquez
39423580 Hermana Forense, en el que se
Ortega
concluye que padece una
12 Delitos Legalizados:
depresión moderada.
Claudia Isabel Registro civil.
Homicidio en persona 39425380 Hermana
Márquez Ortega No probó afectaciones.
protegida art. 135
Apolinar del Cristo
parágrafo numeral 1 15368601 Padre Registro civil hijo.
Márquez Velásquez
Registro civil hijo.
Declaración juramentada.
Luzely Ríos Nobles 39155797 Madre Facturas gastos funerarios.
Juramento estimatorio de
MARCIAL DE JESÚS afectaciones.
BERTEL RIOS
Registro civil hijo.
Delitos Legalizados: Catalino José Vertel
8186061 Padre de crianza Declaración extrajuicio.
12 Velásquez
No probó parentesco.
Homicidio en persona
protegida art. 135 Registro civil.
Víctor José Bertel 71949401
parágrafo numeral 1 Hermano Declaración extrajuicio.
Ríos Falta copia
No probó afectaciones.
Registro civil.
Alejandro Antonio
71983620 Hermano Declaración extrajuicio.
Bertel Ríos
No probó afectaciones.
Mauricio Alexander
98617692 Hijo Registro civil.
OSCAR DE JESÚS Montoya López
MONTOYA PATIÑO Luz Olivia López
Granada 21617899 Cónyuge Partida de Matrimonio
13 Delitos Legalizados: (FALLECIDA)
Registro civil.
Johanna María
Homicidio en persona 43145596 Hija Juramento estimatorio de
Montoya López
protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1 Orbilia Montoya de Registro civiles.
21618571 Hermana
Ríos No probó afectaciones.
Registro civil hijo.
Partida de matrimonio.
JOSÉ MANUEL María Lucelly
21618507 Madre Declaraciones extrajuicio.
MARTÍNEZ Cárdenas de Martínez
Juramento estimatorio de
CÁRDENAS afectaciones.
13
Delitos Legalizados: Registro civil.
Nidia Rocío Martínez
21620473 Hermana Juramento estimatorio.
Cárdenas
Homicidio en persona No probó afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1 Registro civil.
Gustavo de Jesús
71992451 Hermano Juramento estimatorio.
Martínez Cárdenas
No probó afectaciones.
ALFREDO Registro Matrimonio.
14 HERNANDO GÓMEZ María Eugenia Marín Declaraciones extrajuicio.
39405790 Cónyuge
RICO Góez Juramento estimatorio de
afectaciones.

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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
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VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS193 APORTADOS194
Delitos Legalizados:

Homicidio en persona Registro civil.


María Carolina Gómez
protegida art. 135 1128273543 Hija Juramento estimatorio de
Marín
parágrafo numeral 1. afectaciones.
Secuestro simple art.
168.
Partida de Matrimonio.
María Gloria García Declaraciones extrajuicio.
21576938 Cónyuge
Agudelo Juramento estimatorio de
afectaciones.
Julio Alberto Rico
70420118 Hijo Registro civil.
García

JULIO HERNANDO Alba Luz Rico García 43491327 Hija Registro civil.
RICO SÁNCHEZ
Delitos Legalizados: Natalia Andrea Rico
15 32135690 Hija Registro civil.
García
Homicidio en persona
protegida art. 135 César Augusto Rico
parágrafo numeral 1. 70419541 Hijo Registro civil.
García

Juan Guillermo Rico


70421427 Hijo Registro civil.
García

Patricia Rico García 43490198 Hija Registro civil.

Luis Norberto Rico Registros Civiles.


3417939 Hermano
Sánchez No probó afectaciones.
ANDRÉS CORDOBA Declaración Extrajuicio.
Marina Socorro Compañera
CASTILLO 39297516 Juramento estimatorio de
Taborda Gómez permanente
afectaciones.
16 Delitos Legalizados:
Leonel de Jesús Abogada no legitimada
Homicidio en persona Córdoba Taborda FALTA COPIA Hijo para actuar.
protegida art. 135 Registro civil.
parágrafo numeral 1.
MARIELA INÉS
PADRÓN CALDERÓN
Se anexó registro civil de la
Delitos Legalizados: Ivonne Cristina señora Mariela Inés Padrón
16 25800604 Hija
Padrón Calderón Calderón.
Homicidio en persona No probó parentesco.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Declaración extrajuicio y
Luz Miriam Pineda 41922761 Hermana Registros civiles.
No probó afectaciones.
Jenry de Jesús No probó parentesco.
79909910 Hermano
González Pineda No probó afectaciones.
YRLAN GONZÁLEZ
PINEDA Blanca Ligia Goez Registro civil.
39409079 Hermana
Pineda No probó afectaciones.
Delitos Legalizados: Registro civil.
17 Flor Marina Pineda 51736019 Hermana
No probó afectaciones.
Homicidio en persona No probó parentesco.
protegida art. 135 Milbia Rosa Pineda 39301280 Hermana
No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1. María Clementina Registro civil.
43588518 Hermana
Goez Pineda No probó afectaciones.
Flor Marina Torres Registro civil.
39307333 Hermana
Pineda No probó afectaciones.
María Eucaris Goez Registro civil.
21756930 Hermana
Pineda No probó afectaciones.
VICENTE Hermilas de Jesús
39417230 Compañera Declaración extrajuicio
ZAMBRANO Romero Mendoza.
18 Luís Vicente 1028015370
Delitos Legalizados: Hijo Registros civiles.
Zambrano Romero Falta copia
Catalina Zambrano
Homicidio en persona 22164630 Madre Registro Civil hijo.
Durango

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VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS193 APORTADOS194
protegida art. 135 Registros Civiles.
María Leonor
parágrafo numeral 1. 22157471 Hermana Juramento estimatorio.
Zambrano
No probó afectaciones.
JHON JAIRO CELADA
DAVID
Declaración Extrajuicio
Delitos Legalizados: Registros civiles ilegibles.
19 Edilma Celada David 39404680 Hermana
No probó afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
LEÓN ANTONIO Gloria Cecilia Giraldo
CORREA 24435211 Compañera Declaración Extrajuicio
González

Delitos Legalizados:
20
Nació 6/Dic/93 Abogada no legitimada
Homicidio en persona Darwing Ostherman
Falta copia de la Hijo para actuar.
protegida art. 135 Correa Giraldo
cédula Registro civil
parágrafo numeral 1.
Olivia Orozco de Registro civil hijo.
21685951 Madre
Montoya Declaraciones extrajuicio

DORIAN RENE Fernando Montoya Registros civiles.


71936135 Hermano
MONTOYA OROZCO Orozco No probó afectaciones.
Carlos Enrique Registros civiles.
Delitos Legalizados: 71931009 Hermano
21 Montoya Orozco No probó afectaciones.
Gloria Inés Montoya Registros civiles.
Homicidio en persona 39414968 Hermana
Orozco No probó afectaciones.
protegida art. 135 Ever Alberto Montoya Registros civiles.
parágrafo numeral 1. 71937839 Hermano
Orozco No probó afectaciones.
Adriana Patricia No probó parentesco.
39414972 Hermana
Montoya Orozco No probó afectaciones.
María Consuelo Ortiz
39401033 Madre Registro civil hija.
Usuga

LINDELIA ROJAS Alma Beatriz Rojas Registros Civiles.


39414281 Hermana
ORTIZ Ortiz No probó afectaciones.
Registros Civiles.
Francenit Rojas Ortiz 39409254 Hermana
Delitos Legalizados: No probó afectaciones.
21
Registros Civiles.
Lucelly Rojas Ortiz 39415927 Hermana
Homicidio en persona No probó afectaciones.
protegida art. 135 Registros Civiles.
parágrafo numeral 1. Bertulfo Rojas Ortiz 71315363 Hermano
No probó afectaciones.
Registros Civiles.
Danilo Rojas Ortiz 71943136 Hermano Juramento estimatorio.
No probó afectaciones.
BEATRIZ ELENA
DELGADO CAICEDO
Registro Civil, Partida de
Delitos Legalizados: Aura Nelly Caicedo Bautismo hija.
21 39409560 Madre
Sánchez Juramento estimatorio de
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.

JAIME ALBERTO Amparo del Socorro Registro civil hijo.


22158341 Madre
GIRALDO JIMENEZ Jiménez de Giraldo Declaración extrajuicio
Delitos Legalizados: Liliana María Giraldo Registros civiles.
21 39408526 Hermana
Jiménez No probó afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135 Jaime de Jesús
parágrafo numeral 1. 8278870 Padre Registro civil hijo
Giraldo Cardona

CARLOS ENRIQUE Registro civil hijo.


Iván Gregorio Cuesta
CUESTA CANTILLO 773169 Padre Partida de Bautismo.
Durán
22 Declaración Extrajuicio.
Delitos Legalizados:
Julio César Cuesta Registro Civil.
71977758 Hermano
Cantillo No probó afectaciones.
Homicidio en persona

111
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS193 APORTADOS194
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.

Declaración Extrajuicio
Liliana Hurtado Mejía 39410394 Compañera Juramento estimatorio de
afectaciones.
JESÚS ANTONIO Abogada no legitimada
PEDROZA Alicia Pedroza 26595970 Madre para actuar.
Registro de defunción hijo.
Delitos Legalizados: Juan Esteban Pedroza
23 FALTA COPIA Hijo Registro civil
Hurtado.
Homicidio en persona
Jesús Alejandro Registro civil, Declaración
protegida art. 135 1028010373 Hijo
Pedroza Hurtado extrajuicio.
parágrafo numeral 1.
Cristian Camilo Registro civil, declaración
1130643365 Hijo
Predoza Hurtado extrajuicio.
Registro Civil.
María Edith Pedroza 26598754 Hermana
No probó afectaciones.
JORGE ELIÉCER
GUERRA VANEGAS
Registro civil hijo y Partida
Delitos Legalizados: María Caridad de Bautismo hijo.
23 21672039 Madre
Vanegas de Guerra Juramento estimatorio de
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Registros civiles.
María Candelaria Declaración Extrajuicio.
39300572 Hermana
Torres Urango Juramento estimatorio.
LUCIANO TORRES
No probó afectaciones.
URANGO
Rufina Urango de Registro Civil Hijo, partida
22161812 Madre
25 Delitos Legalizados: Torres de Matrimonio.
Luis Manuel Torres Registro civil.
71972479 Hermano
Homicidio en persona Urango No probó afectaciones.
protegida art. 135 Registros civiles.
parágrafo numeral 1. Oscar Torres Urango 8425091 Hermano
No probó afectaciones.
Rosa Esther Torres Registros civiles.
39313492 Hermana
Urango No probó afectaciones.
FILADELFO BERTEL
PÉREZ

Delitos Legalizados:
Marciana Rosa Pérez
26 23174613 Madre Registro civil hijo.
Rosales.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.

EUCLIDES CUESTA Registros civiles.


CUESTA Exneiden Cuesta
72187354 Hermano Juramento estimatorio.
Cuesta
No probó afectaciones.
Delitos Legalizados:
28 Rosalia Hernández
Homicidio en persona 39299024 Compañera Declaración extrajuicio.
Mena
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Hurto calificado y Cristhian Alexander Nació 15/Sep/93
Hijo Registro civil
agravado art. 350 y Cuesta. FALTA COPIA.
351.
GUSTAVO ALBERTO
SEPÚLVEDA ZAPATA Sol María Jiménez
42090041 Compañera Declaración Extrajuicio
Bertel
Delitos Legalizados: Abogada no legitimada
para actuar.
29 Homicidio en persona Mariela Zapata de
21756629 Madre No se entregaron
protegida art. 135 Sepúlveda
documentos para probar
parágrafo numeral 1. parentesco.
Secuestro simple art.
168. Johana Sepúlveda Registro Civil.
1045676239 Hija
Jiménez Partida de Bautismo

112
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS193 APORTADOS194
Beatriz Helena
García López

Delitos Legalizados: No se entregaron


María Rubiela García 39321326 documentos para probar
29 Hermana
Homicidio en persona López FALTA COPIA parentesco.
protegida art. 135 No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Secuestro simple art.
168.
VICTOR DAVID Registro civil hijo.
VALDES DUARTE Elizabeth Duarte Juramento estimatorio de
43012881 Madre
Velásquez afectaciones. Informe
Delitos Legalizados: Pericial.
40
Homicidio en persona
protegida art. 135 Registros civiles.
Yanina Duarte
parágrafo numeral 1. 1017180968 Hermana Juramento estimatorio.
Velásquez
Desaparición forzada No probó afectaciones.
art. 165.

Doctora Lucila Torres de Arango:

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS196 CEDULA PARESTESCO APORTADOS197
FAMIR EDUARDO Declaraciones extrajuicio.
Compañera
MACHADO MURILLO Aimara Mina Julio198 39412782 Juramento estimatorio de
permanente
Delitos Legalizados: afectaciones.

Homicidio en persona
31
protegida art. 135
Maira Alejandra Registro civil y
parágrafo numeral 1. 1152447717 Hija
Machado Mina declaraciones extrajuicio
Hurto calificado y
agravado art. 350 y
351.
Lina Marcela Zapata Registros civiles.
43145573 Hermana
Palacio No probó afectaciones199.
Registro Civil hijo.
Heroína Palacio Declaración extrajuicio.
21508314 Madre
Zapata200 Juramento estimatorio de
afectaciones.
EVER DAVID ZAPATA Declaración extrajuicio.
PALACIO Compañera
Ennis Mira Pérez 39413679 Juramento estimatorio de
permanente
afectaciones.
Delitos Legalizados:
Iván Darío Zapata
1067924543 Hijo Registro civil
32 Mira201
Homicidio en persona
Ana Milena Zapata Registros civiles.
protegida art. 135 39311895 Hermana
Palacio No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Astrid Cecilia Zapata Registros civiles.
Secuestro simple art. 39311896 Hermana
Palacio No probó afectaciones.
168.
Rusby Magaly Zapata Registros civiles.
39307263 Hermana
Palacio No probó afectaciones.
Libardo de Jesús Registros civiles.
71351580 Hermano
Zapata Palacio No probó afectaciones.
Juan Guillermo Registros civiles.
1045487403 Hermano
Zapata Palacio No probó afectaciones.

196
Los nombres de las víctimas se han escrito como aparecen en las cédulas de ciudadanía.
197
Cuado se hace referencia a que las representantes de las víctimas no probaron las afectaciones, es la conclusión a la
que la Sala ha llegado luego de la revisión de cada una de las carpetas aportadas.
198
Recibió de Acción Social $21.600.000.
199
Cuado se hace referencia a que las representantes de las víctimas no probaron las afectaciones, es la conclusión a la
que la Sala ha llegado luego de la revisión de cada una de las carpetas aportadas.
200
Recibió de Acción Social $19.800.000.
201
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
113
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS196 CEDULA PARESTESCO APORTADOS197
Registros civiles.
Sandiego Zambrano
39303624 Hermana Juramento estimatorio.
Palencia
No probó afectaciones.
Elizabeth Zambrano Registros civiles.
39304951 Hermana
Palencia No probó afectaciones.
María Salome Registros civiles.
22164702 Hermana
Zambrano Palencia No probó afectaciones.
Benicia Zambrano Registros civiles.
39405821 Hermana
Palencia No probó afectaciones.
ELEUTERIO Senia Zambrano Registros civiles.
ZAMBRANO 22164808 Hermana
Palencia No probó afectaciones.
PALENCIA
Luz Zambrano Registros civiles.
39405682 Hermana
Palencia No probó afectaciones.
Delitos Legalizados:
Alba Nury Zambrano
34 39417458 Hija Registro civil
Arango
Homicidio en persona
Luis Alfonso
protegida art. 135 71946581 Hijo Registro civil
Zambrano Arango202
parágrafo numeral 1.
Desaparición forzada Eusebio Zambrano
773085 Padre Registro civil hijo
art. 165. Duran
Declaraciones extrajuicio.
Flor Emilse Sosa Compañera
43415823 Juramento estimatorio de
Duarte203 permanente
afectaciones.
Yurfari Zambrano
1027965857 Hija Registro civil
Sosa
Yurledis Zambrano
1028010673 Hija Registro civil
Sosa
Dani Esteduar
1028018418 Hijo Registro civil
Zambrano Sosa204
Registros civiles.
Flor Edilia Bran 39311220 Hermana
No probó afectaciones.
PEDRO PABLO BRAN Registro civil hijo.
GARCES Rosa Elena Bran Declaraciones extrajuicio.
21302187 Madre
Holguín205 Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.
35
Carmen Elena Registros civiles.
39318066 Hermana
Homicidio en persona Blanquicett Bran No probó afectaciones.
protegida art. 135 Registros civiles.
Gloria Cecilia Bran 39306658 Hermana
parágrafo numeral 1. No probó afectaciones.
Adiela Amparo Registros civiles.
39315137 Hermana
Tapias Bran No probó afectaciones.
ISMAEL ANTONIO Emilda Rosa Urango Compañera
MARTÍNEZ 26215740 Declaración extrajuicio
Bravo permanente
QUINTERO
Eglis Martínez
1073991919 Hija Registro civil
Urango206
36 Delitos Legalizados:

Homicidio en persona Ismael Antonio


1073998881 Hija Registro civil
protegida art. 135 Martínez Urango207
parágrafo numeral 1.
WILLINTON José Uriel Restrepo
15480127 Padre Registro civil hijo
RESTREPO Durango
SEPULVEDA Registro civil hijo.
Luz Melida Sepúlveda Declaración extrajuicio.
22173141 Madre
37 Delitos Legalizados: Ramírez Juramento estimatorio de
afectaciones.
Homicidio en persona
Frank David Restrepo Registros civiles.
protegida art. 135 8104897 Hermano
Sepúlveda No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1.

202
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
203
Recibió de Acción Social $825.000.
204
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
205
Recibió de Acción Social $20.600.000.
206
Recibió de Acción Social $20.000.000.
207
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
114
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS196 CEDULA PARESTESCO APORTADOS197
Registro civil hijo.
Antonio de Jesús Declaración extrajuicio.
3481627 Padre
Zapata Castañeda208 Juramento estimatorio de
afectaciones.
JOSÉ ANTONIO Jhenny Sabrina Registros civiles.
ZAPATA BORJA 44008154 Hermana
Zapata Borja No probó afectaciones.
Gabriel Antonio Registros civiles.
Delitos Legalizados: 71936892 Hermano
Zapata Borja No probó afectaciones.
Romelia de Jesús Registros civiles.
Homicidio en persona 39411925 Hermana
Zapata Borja No probó afectaciones.
protegida art. 135
María Emilse Zapata Registros civiles.
37 parágrafo numeral 1. 43539194 Hermana
Borja No probó afectaciones.
Homicidio en persona
José Aniceto Zapata Registros civiles.
protegida art. 135 15368545 Hermano
Guzmán No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1, en
la modalidad de Alfazar de Jesús Registros civiles.
1035867700 Hermano
tentativa. Zapata Borja No probó afectaciones.
Actos de terrorismo art. Román Antonio Registros civiles.
98584667 Hermano
144. Zapata Borja No probó afectaciones.
Registro civil (hija de
Yesenia Sandoval Martha Noelia Zapata Borja)
1017178107 Sobrina
Zapata Declaración extrajuicio.
No probó afectaciones.
Registro Civil, pero no dice
Antonio de Jesús
3481627 Padre que sea el padre.
Zapata Castañeda
No probó el parentesco.
Romelia de Jesús Registros civiles.
39411925 Hermana
Zapata Borja No probó afectaciones.
Registro civil.
Juramento estimatorio de
Aidenia Arango Borja 43974920 Hija
afectaciones. Informe
pericial.
Registro civil
MARLENY DE JESÚS Yudi Andrea Arango Juramento estimatorio de
BORJA QUINTERO 1020410744 Hija
Borja afectaciones. Informe
pericial.
Delitos Legalizados:
Registro civil.
Edinson Arango
71799558 Hijo Juramento estimatorio de
Homicidio en persona Borja
afectaciones.
protegida art. 135
Registros civiles.
37 parágrafo numeral 1. Jhenny Sabrina
44008154 Hermana Juramento estimatorio.
Homicidio en persona Zapata Borja
No probó afectaciones.
protegida art. 135
Gabriel Antonio Registros civiles.
parágrafo numeral 1, en 71936892 Hermano
Zapata Borja No probó afectaciones.
la modalidad de
Registro civil
tentativa.
(hija de Martha Noelia
Actos de terrorismo art. Yesenia Sandoval
1017178107 Sobrina Zapata Borja)
144. Zapata
Declaración extrajuicio
No probó afectaciones.
María Emilse Zapata
43539194 Hermana Registros civiles
Borja
Alfazar de Jesús
Registros civiles
Zapata Borja 1035867700 Hermano
Román Antonio Registros civiles.
98584667 Hermano
Zapata Borja No probó afectaciones.
Edgar de Jesús
8412120 Cónyuge Registro de Matrimonio
Arango Manco
JAIME LUIS MORA Registro civil hijo.
ESTRADA Jovita de la Cruz Declaraciones extrajuicio.
39410699 Madre
Estrada Castillo209 Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.

Homicidio en persona
37
protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Luis Alberto
10163819 Padre de crianza Declaraciones extrajuicio
Homicidio en persona Castañeda
protegida art. 135
parágrafo numeral 1, en
la modalidad de

208
Recibió de Acción Social $21.000.000.
209
Recibió de Acción Social $15.667.000.
115
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS196 CEDULA PARESTESCO APORTADOS197
tentativa.
Actos de terrorismo art.
144.

JAVIER ORLANDO DE Declaraciones extrajuicio.


Blanca Nelly Compañera
JESÚS OCAMPO 22158365 Juramento estimatorio de
Graciano210 permanente
ARIAS afectaciones.
Carlos Mario Ocampo
71947029 Hijo Registro civil
Delitos Legalizados: Graciano
María Piedad
Homicidio en persona 39419878 Hija Registro civil
Ocampo Graciano
protegida art. 135
37
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona
protegida art. 135
Huber Humberto
parágrafo numeral 1, en 8323337 Hijo Registro civil
Ocampo Graciano
la modalidad de
tentativa.
Actos de terrorismo art.
144.
RAÚL ANTONIO Declaraciones extrajuicio.
Luz Dary David Compañera
USUGA DUARTE 39409831 Juramento estimatorio de
Terán211 permanente
afectaciones
Delitos Legalizados: Sandra Milena Usuga
1027962746 Hija Registro civil
David
Homicidio en persona
protegida art. 135
37 parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona
protegida art. 135 Eliana Andrea Usuga
1028008381 Hija Registro civil
parágrafo numeral 1, en David
la modalidad de
tentativa.
Actos de terrorismo art.
144.
LISANDRO OVIEDO Elsy del Carmen
39408043 Hija Registro Civil
MENDOZA Oviedo Algarín212
Cecilia Inés Oviedo
52071327 Hija Registro civil
Delitos Legalizados: Algarín
Partida de Matrimonio.
Homicidio en persona Consuelo del Carmen 24705686 Cónyuge Juramento estimatorio de
protegida art. 135 Algarín de Oviedo
afectaciones
37 parágrafo numeral 1. Hernán Enrique
Homicidio en persona 71941770 Hijo Registro civil
Oviedo Algarín
protegida art. 135
parágrafo numeral 1, en
la modalidad de Marles Jhoana
tentativa. 1027950483 Hija Registro civil
Oviedo Algarín
Actos de terrorismo art.
144.
GABRIEL AREIZA Registro civil hijo.
ORTIZ María del Carmen Declaración extrajuicio.
22157379 Madre
Ortiz de Areiza213 Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.
Compañera
Liliana María Aguirre 39410039 Declaración extrajuicio
Homicidio en persona permanente
37 protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona
Carlos Humberto
protegida art. 135 1073684829 Hijo Registro civil
Areiza Aguirre
parágrafo numeral 1, en
la modalidad de
tentativa.

210
Recibió de Acción Social $19.000.000.
211
Recibió de Acción Social $19.000.000.
212
Recibió de Acción Social $9.000.000.
213
Recibió de Acción Social $22.000.000.
116
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS196 CEDULA PARESTESCO APORTADOS197
Actos de terrorismo art.
144.

NAYIBIS ESTER Sara María Arsia


ARSIA BELTRÁN 39411689 Madre Registro civil hija.
Beltrán214

Delitos Legalizados: Jessica Patricia Registro civil.


Homicidio en persona 1040360504 Hermana
Quintana Arcia No probó afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
37 Yubis Estella Arsia Registro Civil.
Homicidio en persona 39424889 Hermana
protegida art. 135 Beltrán No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1, en
la modalidad de
tentativa. Registro Civil.
Yomaira Arsia Beltrán 43146039 Hermana
Actos de terrorismo art. No probó afectaciones.
144.
ABEL ANTONIO Declaración extrajuicio.
Compañera
AREIZA ZAPATA Aurora David 39407448 Juramento estimatorio de
permanente
afectaciones.
Delitos Legalizados: Yadier Andrés Areiza
1038334430 Hijo Registro civil
David
Homicidio en persona Registro civil.
protegida art. 135 Kelly Cecilia Areiza Nació
Hija Juramento estimatorio de
37 parágrafo numeral 1. David 21/Mar/95
afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1, en Registro civil.
Jaiber Jair Areiza
la modalidad de 8085733 Hijo Juramento estimatorio de
David
tentativa. afectaciones
Actos de terrorismo art.
144.
LUZ DARY VILORIA Historia clínica.
ARRIETA Informe técnico médico
Luz Dary Viloria legal. Declaración
39414532 victima directa
Delitos Legalizados: Arrieta215 extrajuicio.
Juramento estimatorio de
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135 Jorge Hilder Viloria Registro civil.
71947997 Hermano
37 parágrafo numeral 1. Arrieta No probó afectaciones.
Homicidio en persona José Isaías Viloria Registro civil.
protegida art. 135 71940800 Hermano
Arrieta No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1, en Jaider Ineder Viloria Registro civil.
la modalidad de 8323835 Hermano
Arrieta No probó afectaciones.
tentativa.
Actos de terrorismo art. Luz Deisy Viloria Registro civil.
39418449 Hermana
144. Arriera No probó afectaciones.
SANDY DIDSON Historia clínica.
ARRIETA (NATALIA Dictamen médico legal.
PAOLA ARIAS Declaraciones extrajuicio.
Sandy Didson
DIDSON) Juramento estimatorio de
Arrieta216 (Natalia 20767997 victima directa
afectaciones.
Paola Arias Didson).
Delitos Legalizados: Informe de entrevista de
afectaciones psicológicas y
Homicidio en persona psicosociales.
37 protegida art. 135 Yerfeson Enrique Registro civil.
1027998230 Hermano
parágrafo numeral 1. Ayazo Didson No probó afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1, en
Registro civil.
la modalidad de Saudit Pinto Didson 39426929 Hermana
No probó afectaciones.
tentativa.
Actos de terrorismo art.
144.

214
Recibió de Acción Social $23.000.000.
215
Recibió de Acción Social $12.800.000.
216
Recibió de Acción Social $21.000.000.
117
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS196 CEDULA PARESTESCO APORTADOS197
LUÍS EDUARDO Registro civil.
NARANJO JIMÉNEZ Juramento estimatorio de
Luis Eduardo Naranjo
8173706 Víctima directa afectaciones.
Jiménez217
Delitos Legalizados: Informe médico técnico-
legal de lesiones no fatales.
Homicidio en persona Jader Eduardo
1027948560 Hijo Registro civil
protegida art. 135 Naranjo Valencia
37 parágrafo numeral 1. Diana Katerine
Homicidio en persona 1022387083 Hija Registro civil.
Naranjo Valencia
protegida art. 135 Erika Yazmin Naranjo
parágrafo numeral 1, en 1027962277 Hija Registro civil
Valencia
la modalidad de
tentativa. Gilma Victoria
Actos de terrorismo art. 43141043 Hija Registro civil
Valencia
144.
CARMEN ROSIRIS
ALEMÁN PACHECO

Delitos Legalizados: Registro civil. Declaración


Sandra Patricia extrajuicio.
38 39421038 Hija
Homicidio en persona Carvajal Alemán218 Juramento estimatorio de
protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Secuestro simple art.
168.
Declaración extrajuicio.
Juramento estimatorio de
LEÓNIDAS DE JESÚS Gilma Dorys Jiménez Compañera
39301334 afectaciones. Informe de
GÓMEZ Guerrero permanente
entrevista de afectaciones
psicológicas y psicosociales.
Delitos Legalizados:
Registro Civil.
39 Ángela January Informe de entrevista de
Homicidio en persona 43186010 Hija
Gómez Jiménez afectaciones psicológicas y
protegida art. 135
psicosociales.
parágrafo numeral 1.
Registro Civil.
Desaparición forzada
Leonela Gómez Informe de entrevista de
art. 165. 1036627259 Hija
Jiménez afectaciones psicológicas y
psicosociales.
Registro civil hijo.
Aura Guisao
21689519 Madre Declaración extrajuicio.
ALBERTO GUISAO Celada219
Informe pericial.
ABDON
Luisa Fernanda
1037595421 Hija Registro civil
Guisao Guerra
Delitos Legalizados:
Juan Felipe Guisao
1036631452 Hijo Registro civil
40 Guerra
Homicidio en persona
Registros civiles.
protegida art. 135
Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1. Jaime León Guisao 71616036 Hermano
afectaciones.
Desaparición forzada
No probó afectaciones.
art. 165.
Yeraldin Guisao
1017197629 Hija Registro civil
Guerra
Registro civil hijo.
Partida de Bautismo.
OMAR ALBEIRO Edith María Montero
39298584 Madre Declaración extrajuicio.
CUESTA MONTERO Cerda
Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados:
41 afectaciones.
Homicidio en persona
Alba Dollys Cuesta Partida de bautismo.
protegida art. 135 39312129 Hermana
Montero No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Aleyda Amparo Partida de bautismo.
39302710 Hermana
Cuesta Montero No probó afectaciones.
JORGE HERNANDO
ARDILA GÓMEZ
Registro civil.
Juliana Ardila
43 1036603589 Hija Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: Restrepo220
afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135

217
Recibió de Acción Social $5.900.000.
218
Recibió de Acción Social $21.400.000
219
Recibió de Acción Social $20.000.000.
220
Recibió de Acción Social $11.000.000.
118
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS196 CEDULA PARESTESCO APORTADOS197
parágrafo numeral 1.
Secuestro simple art.
168.
Declaraciones extrajuicio.
MANUEL FRANCISCO Teresa de Jesús Valle Compañera
39304073 Juramento estimatorio de
VALDIRIS HURTADO Tuberquia permanente
afectaciones.
Rosa Aida Valle Registro Civil.
Delitos Legalizados: 39319937 Hija
Tuberquia221 Partida de Bautismo.
44 Oscar William Valle Registro Civil.
Homicidio en persona 1045503224 Hijo
Tuberquia222 Partida de Bautismo.
protegida art. 135
Miguel Antonio Valle Registro Civil.
parágrafo numeral 1. 1045509827 Hijo
Tuberquia223 Partida de Bautismo.
Secuestro simple art.
168. Francisco Emilio Valle Registro Civil, Partida de
1045503225 Hijo
Tuberquia224 Bautismo.
JOHN JAIRO ZAPATA Declaraciones extrajuicio.
ENAMORADO Lucy Zapata Registros civiles.
39416591 Hermana
Enamorado225 Juramento estimatorio.
Delitos Legalizados: No probó afectaciones.
Catalina Enamorado
46 21160073 Madre Registro civil
Homicidio en persona Álvarez
protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Evelio Zapata Registro civil.
70522872 Hermano
Secuestro simple art. Enamorado No probó afectaciones.
168.
FRANKLIN ISAÍAS Partida de Matrimonio y
Rosa Angélica
POVEDA MOLINA 32285628 Esposa registro.
Moreno Muñoz
Declaración extrajuicio.
47 Delitos Legalizados:
Claudia Viviana
Homicidio en persona 43972562 Hija Registro civil
Poveda Moreno
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
EVANGELISTA
ANTONIO PÁJARO
RUIZ
Declaración extrajuicio.
María Idelisa Rivas Compañera
48 Delitos Legalizados: 26334781 Juramento estimatorio de
Murillo226 permanente
afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Declaraciones extrajuicio.
Fabia Hinestroza Compañera
39302230 Juramento estimatorio de
Guaris permanente
afectaciones.
Luz Bernarda Compañera
26377336 Declaraciones extrajuicio.
PRESENTADO GÓMEZ Quejada Caicedo permanente
Yuliana Gómez
1045510060 Hija Registro civil
Delitos Legalizados: Quejada
49 Yusepi Gómez
1045509066 Hijo Registro civil
Homicidio en persona Quejada
protegida art. 135 Glenis Johana Gómez
1045507746 Hija Registro Civil
parágrafo numeral 1. Hinestroza
Jhon Andrés Gómez
1045510021 Hijo Registro Civil
Hinestroza227
Gladis Matilde Gómez
1045498795 Hija Registro Civil
Hinestroza

221
Recibió de Acción Social $20.000.000.
222
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
223
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
224
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
225
Recibió de Acción Social $19.000.000.
226
Recibió de Acción Social $10.000.000.
227
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
119
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS196 CEDULA PARESTESCO APORTADOS197
Gloria Amparo
1045498794 Hija Registro Civil
Gómez Hinestroza

Doctora Ruby Stella Castaño Sánchez:

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS228 CEDULA PARESTESCO APORTADOS229
JOSÉ DANIEL Registro Civil hijo.
CANTERO Declaración extrajuicio.
Evangelina Isabel
MARTÍNEZ 32250533 Madre Juramento estimatorio de
Martínez Ramos
afectaciones.
36 Delitos Legalizados:

Homicidio en persona Edinson Cantero NACIÓ


Hijo menor Registro Civil.
protegida art. 135 Vanegas 29/MAYO/1995
parágrafo numeral 1. FALTA COPIA
Registro Civil Hijo.
ÁLVARO DE JESÚS María Lilian Álzate de Informe pericial.
29445992 Madre
GÓMEZ ALZATE Gómez230 Juramento estimatorio de
afectaciones.
Delitos Legalizados:
Edgar Gómez Alzate 71717470 Hijo Partida de Bautismo.
40
Homicidio en persona
protegida art. 135 Gilberto Gómez Alzate 71608258 Hijo Registro civil.
parágrafo numeral 1. Jhon Jairo Gómez
Desaparición forzada 71658490 Hijo Registro civil.
Alzate
art. 165. Eucaris de Jesús
43029702 Hija Registro civil.
Gómez Alzate
Registro Civil Hijo.
Gilma Rosa Guerra Informe pericial.
21691284 Madre
Higuita231 Juramento estimatorio de
afectaciones.
Registro civil.
Elizabeth Durango Nació
Hermana menor Declaración extrajuicio.
Guerra 26/10/1995
No probó afectaciones.
Registro Civil, en donde
JUAN BAUTISTA aparece que fue reconocido
DURANGO GUERRA Pedro Nel Durango por la señora Gilma Rosa
98700339 Hermano
Guerra Higuita e Iván Darío
Delitos Legalizados: Durango.
40 No probó afectaciones232.
Homicidio en persona Luz Elena Durango Registro civil.
protegida art. 135 1020396066 Hermana
Guerra No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Registro civil (no dice el
Desaparición forzada Gloria Eunise nombre de los padres)
art. 165. 43201579 Hermana
Durango Guerra No probó parentesco.
No probó afectaciones.
Compañera
Digna María López 43156295 Declaración extrajuicio.
permanente
Juan Esteban Nació Registro civil hijo.
Hijo menor
Durango López 23/03/1997 Declaración extrajuicio
José Luis Durango No probó parentesco.
98714697 Hermano
Guerra No probó afectaciones.

228
Los nombres de las víctimas se han escrito como aparecen en las cédulas de ciudadanía.
229
Cuado se hace referencia a que las representantes de las víctimas no probaron las afectaciones, es la conclusión a la
que la Sala ha llegado luego de la revisión de cada una de las carpetas aportadas.
230
Recibió de Acción Social $9.000.000.
231
Recibió de Acción Social $9.000.000.
232
Cuado se hace referencia a que las representantes de las víctimas no probaron las afectaciones, es la conclusión a la
que la Sala ha llegado luego de la revisión de cada una de las carpetas aportadas.
120
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS228 CEDULA PARESTESCO APORTADOS229
WALTER ARLEY
BECERRA
MOSQUERA Registro civil hijo.
Registro de defunción.
Ana Julia Mosquera
42 Delitos Legalizados: 26263219 Madre Declaración extrajuicio
Moreno
Juramento estimatorio de
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
JESÚS ERNELIO Declaraciones extrajuicio.
Geanet María Díaz Compañera
ANDRADE BECERRA 39401472 Juramento estimatorio de
Quintana233 permanente
afectaciones.
Delitos Legalizados:
Jesús Ernelio Andrade
51 1028008143 Hijo Registro civil
Díaz
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Andrés David
1040372107 Hijo Registro civil
Secuestro simple art. Andrade Díaz
168.
Partida de Bautismo hijo.
LUÍS EDUARDO Egla Belén Núñez Declaración extrajuicio.
22153942 Madre
PALACIO NÚÑEZ Urango Juramento estimatorio de
afectaciones.
52 Delitos Legalizados: Registro civil.
Sandra Ruiz Núñez 39303786 Hermana
No probó afectaciones.
Homicidio en persona Debora María Olier Registro civil.
protegida art. 135 43840952 Hermana
Núñez No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1. Hernando Alfonso Registro civil.
71983159 Hermano
Olier Núñez No probó afectaciones.
Partida de matrimonio.
Blanca Nelly David de
22157897 Cónyuge Juramento estimatorio de
Moreno
afectaciones.
Registro Civil Declaración
Martha Elena Moreno extrajuicio.
40098792 Hija
Cabezas234 Juramento estimatorio de
afectaciones.
Registro civil.
Aydee Moreno David 43802447 Hija Juramento estimatorio de
afectaciones.
Registro civil.
Astrid Milena Moreno
43279678 Hija Juramento estimatorio de
JAIME HERNÁN David
afectaciones.
MORENO COSSIO
Registro civil.
Oscar Jhovanny
Delitos Legalizados: 71712959 Hijo Juramento estimatorio de
53 Moreno David
afectaciones.
Homicidio en persona Registro civil.
protegida art. 135 Erika Yirley Moreno
1037601609 Hija Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1. David
afectaciones.
Registro civil.
Yoni Alesander
8175068 Hijo Juramento estimatorio de
Moreno David
afectaciones.
Registro civil.
Edwin Yulian Moreno
71799206 Hijo Juramento estimatorio de
David
afectaciones.
Registro civil.
Jaime Hernán Moreno
98501192 Hijo Juramento estimatorio de
David
afectaciones.
Registro civil.
Deison Alexis Moreno
1036602362 Hijo Juramento estimatorio de
David235
afectaciones.
LUÍS ALBERTO Registros civiles.
Martha Luz Guisao
54 GUISAO RÍOS 43485003 Hermana Partida de bautismo
Ríos
No probó afectaciones.

233
Recibió de Acción Social $20.000.000.
234
Recibió de Acción Social $20.000.000.
235
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
121
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS228 CEDULA PARESTESCO APORTADOS229
Delitos Legalizados: José Aldemar Guisao
637753 Padre Registro civil hijo
David236
Homicidio en persona
Registro civil hijo.
protegida art. 135 Rosana Ríos de
21692205 Madre Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1. Guisao
afectaciones.
Homicidio en persona
Registro civil.
protegida art. 135 Rosalba Guisao Ríos 21742717 Hermana
No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1,
Rosangela Guisao Registro civil.
en la modalidad de 21743191 Hermana
Ríos No probó afectaciones.
tentativa.
Rosa María Guisao Registro civil.
21692893 Hermana
Ríos No probó afectaciones.
Gilma Rosa Guisao Registro civil.
21692798 Hermana
Ríos No probó afectaciones.
María Mercedes Registro civil.
21743226 Hermana
Guisao Ríos No probó afectaciones.

ANTONIO MARINO Registro civil hijo.


Inés Catalina Ramírez 26354405 Madre
MORENO ASPRILLA Declaración extrajuicio

Delitos Legalizados: Johnatan Moreno Registro civil.


1017159564 Hermano
Moreno No probó afectaciones.
Homicidio en persona
54 protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Registro civil.
Leiny Patricia Ramírez 43908910 Hermana
Homicidio en persona No probó afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1, Declaraciones extrajuicio.
en la modalidad de Emilse del Carmen Compañera
22160856 Juramento estimatorio de
Galindo Flórez permanente
tentativa. afectaciones.
JULIO ALFONSO Declaración extrajuicio.
DÍAZ PETRO Glenis María Licona Compañera
32286912 Juramento estimatorio de
López permanente
afectaciones.
Delitos Legalizados: Iván Darío Díaz Nació
Hijo menor Registro civil
Licona 9/05/1995
Homicidio en persona
Declaración extrajuicio.
54 protegida art. 135 Yerly María Cortes Compañera
32292320 Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1. Hernández permanente
afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135 Declaración extrajuicio.
parágrafo numeral 1, Rosa María Cortez Nació
Presunta hija No probó afectaciones.
en la modalidad de Hernández 20/09/1995
No probó parentesco.
tentativa.
Registro civil hijos.
Declaraciones extrajuicio.
Ana Joaquina Duque Informe de entrevista de
32285981 Madre
de Rúa afectaciones psicosociales.
HÉCTOR ALONSO
Informe pericial. Juramento
TASCÓN DUQUE y
estimatorio de afectaciones.
WILLINGTON DE
JESÚS TASCÓN Registro Civil.
Judith Amparo Duque 32291075 Hermana
DUQUE No probó afectaciones.
(HERMANOS) Registro Civil, pero dice que
es hija de Ana Eva Duque y
Delitos Legalizados: no se indica el nombre del
54
padre. Los padres de la
Homicidio en persona Luz Stella Rincón
32288386 Hermana víctima son Ana Joaquina
Duque237
protegida art. 135 Duque y Héctor Tascón
parágrafo numeral 1. Legarda
Homicidio en persona No probó parentesco.
protegida art. 135 No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1,
en la modalidad de Jorge Edinson Tascón Registro de Defunción.
tentativa. Duque 8436191 Hermano No probó parentesco.
(FALLECIDO) No probó afectaciones.

Registro Civil.
María Esther Duque 32289517 Hermana
No probó afectaciones.

236
Recibió de Acción Social $44.000.000.
237
Recibió de Acción Social $23.000.000.
122
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS228 CEDULA PARESTESCO APORTADOS229
Neila Esther Ramos Registro civil.
50903722 Hermana
Ruiz No probó afectaciones.
Olga Lucia Ramos Registro civil.
50892464 Hermana
Ruiz No probó afectaciones.
Amalfi Sofía Ramos Registro civil.
50938185 Hermana
Ruiz No probó afectaciones.
Arturo José Ramos Registro civil.
RODOLFO RAMIRO 78711720 Hermano
Ruiz No probó afectaciones.
RAMOS RUÍZ
María Lucia Ramos Registro Civil.
50921126 Hermana
Ruiz No probó afectaciones.
Delitos Legalizados:
Mauricio Antonio Registro Civil.
10933447 Hermano
Ramos Ruiz No probó afectaciones.
Homicidio en persona
Rosmary del Rosario Registro Civil.
54 protegida art. 135 50916110 Hermana
Ramos Ruiz No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona Rubén Darío Ramos Registro Civil.
78698248 Hermano
protegida art. 135 Ruiz No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1, Yanis Ramos Usuga 1041262545 Hija Registro Civil
en la modalidad de
tentativa. Registro civil de
matrimonio.
Pedro Manuel Ramos
6573678 Padre Registros civiles.
Fabra
Juramento estimatorio de
afectaciones.
Registro civil hijo.
Ruth Rebeca Ruiz
34905458 Madre Juramento estimatorio de
Romero
afectaciones.

Declaración extrajuicio.
LEONARDO MINOTA Mercedes Matute Compañera
39301941 Juramento estimatorio de
MOSQUERA Asprilla permanente
afectaciones.
Delitos Legalizados:
Registro civil. Declaración
Homicidio en persona Yesica Paola Minota extrajuicio.
1028004789 Hija
54 protegida art. 135 Matute238 Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1. afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135 Leonardo Minota Ruiz 1147934485 Hijo Registros civiles.
parágrafo numeral 1,
en la modalidad de
Registros civiles. Factura
tentativa. María Neiva
26257336 Madre exequias. Declaraciones
Mosquera Mena
extrajuicio.

JORGE IVÁN ZÚÑIGA Registro civil hijo.


BECERRA Informe pericial.
Elvia María Becerra 32286844 Madre
Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.
Diana Cecilia Zuñiga Registro civil.
Homicidio en persona 32356722 Hermana
Becerra No probó afectaciones.
54 protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona
protegida art. 135 Bladimir Córdoba Registro civil.
1038802592 Hermano
parágrafo numeral 1, Becerra No probó afectaciones.
en la modalidad de
tentativa.
MISLEIDA PÉREZ Registros civiles.
Malby Arleny Márquez
MÁRQUEZ 32290979 Hermana Declaración extrajuicio.
Hernández
No probó afectaciones.
Delitos Legalizados: Deiro Eliud Sánchez Registro civil.
8435876 Hermano
Hernández No probó afectaciones.
Homicidio en persona
54 Hernando Abad Compañero Declaración extrajuicio.
protegida art. 135 71184523
parágrafo numeral 1. García Delgado permanente Registro Civil del Hijo.
Homicidio en persona Kelly Marlin Sánchez Registro civil.
protegida art. 135 32356857 Hermana
Hernández No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1, Anderson Berney
en la modalidad de 1038806432 Hijo Registro civil
García Pérez

238
Recibió de Acción Social $4.600.000.
123
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS228 CEDULA PARESTESCO APORTADOS229
tentativa. Niris Milena Sánchez Registro civil
32357432 Hermana
Hernández No probó afectaciones.
Jorge Enot Umanez Registro civil
71938626 Hermano
Márquez No probó afectaciones.
JULIO CÉSAR Declaración extrajuicio.
María Marfelina Compañera
OVIEDO GUEVARA 50911355 Juramento estimatorio de
Mulasco Causil permanente
afectaciones.
Delitos Legalizados: Registro civil.
Iris Esther Oviedo
1067897970 Hija Juramento estimatorio de
Mulasco
Homicidio en persona afectaciones.
54
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona Registro civil.
Saudith María Oviedo
protegida art. 135 1067887213 Hija Juramento estimatorio de
Mulasco
parágrafo numeral 1, afectaciones.
en la modalidad de
tentativa.
Registro civil. Declaración
extrajuicio.
Martha Cecilia Usuga
LIBIA USUGA USUGA 43159245 Hija Informe pericial.
Usuga
Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.
Registro civil.
Arleiber de Jesús
Homicidio en persona 1028280409 Hijo Juramento estimatorio de
Barrientos Usuga
54 protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1. Registro civil.
Jorge Andrés
Homicidio en persona 1038802889 Hijo Juramento estimatorio de
Barrientos Usuga
protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1, Registro civil.
Adolfo Enrique
en la modalidad de 1038807906 Hijo Juramento estimatorio de
Gómez Usuga
tentativa. afectaciones.
Daniel José Gómez
1040370638 Hijo Registro civil
Usuga
LUÍS AURELIO Luz Mary Sánchez Registro civil
1038804644 Hija
SÁNCHEZ CUESTA Mosquera Informe pericial.

Delitos Legalizados: Declaraciones extrajuicio.


María Griselda Compañera
26314614 Juramento estimatorio de
Mosquera Ramírez permanente
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135 Jhorfan Andrés
54 1038814599 Hijo Registro civil
parágrafo numeral 1. Sánchez Mosquera
Homicidio en persona Lucelly Sánchez
1038801220 Hija Registro civil
protegida art. 135 Valencia
parágrafo numeral 1, José Luis Sánchez
en la modalidad de 1038809438 Hijo Registro civil
Mosquera
tentativa.
Estivinson Sánchez
1038801088 Hijo Registro civil
Mosquera
Declaración extrajuicio.
Ángela María Álvarez Compañera
32289762 Informe pericial. Juramento
Correa permanente
estimatorio de afectaciones.
FRANCISCO Registro civil.
LEONARDO PANESO Luis Alfredo Paneso
1152199325 Hijo Juramento estimatorio de
CASTAÑEDA Hernández
afectaciones.
Declaración extrajuicio.
Delitos Legalizados: Kelly Johana Álvarez
1038816065 Presunta hija Registro civil.
Correa
No probó parentesco.
Homicidio en persona Francisco Leonardo
54 1038802572 Hijo Registro civil
protegida art. 135 Paneso Álvarez
parágrafo numeral 1.
Juan Guillermo
Homicidio en persona 1038806450 Hijo Registro civil
Paneso Álvarez
protegida art. 135
parágrafo numeral 1, Camilo Andrés
1038809435 Hijo Registro civil
en la modalidad de Panezo Álvarez
tentativa. Berta Palacio Registros civiles.
51804087 Hermana
Castañeda No probó afectaciones.
Yudis Ester Cortes Registros civiles.
42657062 Hermana
Castañeda No probó afectaciones.

124
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS228 CEDULA PARESTESCO APORTADOS229
Registros civiles (Figura
Ana Morelia Cortes como madre Ana Morelia
1020408914 Hermana
Castañeda Castañeda Urrego).
No probó afectaciones.
María de los Ángeles Compañera
32207552 No probó convivencia.
Cortes Urrego permanente
María Eugenia Registro civil
32287501 Hermana
Castañeda No probó afectaciones.
JORGE LUÍS JULIO Declaración extrajuicio.
CÁRDENAS Ana Rita Amaya Compañera Informe pericial.
43845189
Zapata permanente Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.

Homicidio en persona Ana Paola Julio Nació


Hija menor Registro civil
54 protegida art. 135 Amaya 15/06/1995
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona
protegida art. 135 Federman Julio Registros civiles.
parágrafo numeral 1, 19611177 Hermano
Cárdenas No probó afectaciones.
en la modalidad de
tentativa.
Registro civil.
Rosa Margarita Borja Registro matrimonio.
21690421 Madre
de Jiménez Juramento estimatorio de
afectaciones.
Registro civil.
Erika Yesenia Molina
1108932097 Hija Juramento estimatorio de
Jiménez239
afectaciones.
MELIDA MARÍA Registro civil.
Sebastián Antonio
JIMÉNEZ BORJA 128479684 Hijo Juramento estimatorio de
Molina Jiménez
afectaciones.
Delitos Legalizados: Registro civil.
Edward Adulber
8419999 Hermano Juramento estimatorio.
Jiménez Borja
Homicidio en persona No probó afectaciones.
54 protegida art. 135 Registros civiles.
Carlos Enrique
parágrafo numeral 1. 71312155 Hermano Juramento estimatorio.
Jiménez Borja
Homicidio en persona No probó afectaciones.
protegida art. 135 Registro civil.
parágrafo numeral 1, Hernando Jiménez
71336978 Hermano Juramento estimatorio.
en la modalidad de Borja
No probó afectaciones.
tentativa. Registro civil.
Verónica Cristina
1152203780 Hija Juramento estimatorio de
Jiménez Borja
afectaciones.
Gilberto Jiménez Registros civiles.
73197641 Hermano
Borja No probó afectaciones.
Registros civiles.
Gloria Elena Jiménez
43453117 Hermana Juramento estimatorio.
Borja
No probó afectaciones.
Registro civil hijo.
JORGE GONZÁLEZ María Rosalba López Informe pericial.
LÓPEZ 21686245 Madre
López240 Juramento estimatorio de
afectaciones.
Delitos Legalizados: Alberdina González Registro civil.
30078522 Hermana
de Usuga No probó afectaciones.
Homicidio en persona Fabiola González Registro civil.
54 32288491 Hermana
protegida art. 135 López No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1. Registro civil.
Homicidio en persona Oscar González López 8436586 Hermano
No probó afectaciones.
protegida art. 135 Magnolia González Registro civil.
parágrafo numeral 1, 32288597 Hermana
López No probó afectaciones.
en la modalidad de
tentativa. Rober de Jesús Registro civil.
8338862 Hermano
González López No probó afectaciones.
Hernán Ballesta Registro civil.
MANUEL DEL 8428701 Hermano
Álvarez No probó afectaciones.
54 CRISTO BALLESTA
ÁLVAREZ Nancy del Carmen Registro civil.
39304104 Hermana
Ballesta Álvarez No probó afectaciones.

239
Recibió de Acción Social $8.700.000.
240
Recibió de Acción Social $5.300.000.
125
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA INDIRECTAS228 CEDULA PARESTESCO APORTADOS229
Delitos Legalizados: Acta matrimonio civil.
Registro civil de
Homicidio en persona Yamile Morris Gil 26286230 Cónyuge matrimonio.
protegida art. 135 Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1. afectaciones.
Homicidio en persona Jover Fernando
128415104 Hijo Registro civil
protegida art. 135 Ballesta Morris
parágrafo numeral 1,
Marlon Ballestas
en la modalidad de 1128473135 Hijo Registro civil
Morris
tentativa.
Registro civil.
Historia clínica.
Declaraciones extrajuicio.
José Luis Ciro Concepto de medicina
70351286 victima directa
JOSÉ LUÍS CIRO Galeano legal.
GALEANO Informe pericial.
Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.
Registro matrimonio.
María Belisa
Homicidio en persona 43450969 Cónyuge Juramento estimatorio de
Castañeda Guarín
protegida art. 135 afectaciones.
54
parágrafo numeral 1. Luís Estiven Ciro
1037973479 Hijo Registro civil
Homicidio en persona Castañeda
protegida art. 135 Yeferson Ciro
parágrafo numeral 1, 1037974798 Hijo Registro civil
Castañeda
en la modalidad de Jeison Fernando Ciro
tentativa. 1036924924 Hijo Registro Civil
Castañeda
Registro civil.
Nació
Yuliza Ciro Castañeda Hija menor No había nacido para la
29/09/2000
época de los hechos.
Registro civil.
Yeraldin Ciro Nació
Hija menor. No había nacido para la
Castañeda 26/04/1996
época de los hechos.
JENRY JAMETH
VELASCO CUESTA
Registro civil hijo.
Delitos Legalizados: Ana Josefa Cuesta Declaración extrajuicio.
55 39299035 Madre
Palacios Juramento estimatorio de
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.

Doctora Claudia Liliana Guzmán Sánchez:

VÍCTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA
INDIRECTAS241 CÉDULA PARENTESCO APORTADOS242
María Irene Valencia Registro civil hijo.
42974782 Madre
García243 Declaración extrajuicio.
OSWAR ALEXIS
Arelis Patricia Zapata Compañera
URREGO VALENCIA 43636537 Declaración extrajuicio
Morales permanente
Mario Andrés Urrego
Delitos Legalizados: Nació 23/12/1999 Hijo menor Registro Civil
Zapata
40 Angie Valentina
Homicidio en persona Nació 25/08/1998 Hija menor Registro Civil
Urrego Zapata
protegida art. 135
Sandra Milena Urrego Registro Civil.
parágrafo numeral 1. 43154148 Hermana
Valencia No probó afectaciones.
Desaparición forzada
art. 165. Registro Civil, declaración
Orlando de Jesús
7525603 Tío extrajuicio.
Urrego Urrego
No probó afectaciones244.

241
Los nombres de las víctimas se han escrito como aparecen en las cédulas de ciudadanía
242
Cuado se hace referencia a que las representantes de las víctimas no probaron las afectaciones, es la conclusión a la
que la Sala ha llegado luego de la revisión de cada una de las carpetas aportadas.
243
Recibió de Acción Social $20.000.000.
244
Cuado se hace referencia a que las representantes de las víctimas no probaron las afectaciones, es la conclusión a la
que la Sala ha llegado luego de la revisión de cada una de las carpetas aportadas.
126
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VÍCTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA
INDIRECTAS241 CÉDULA PARENTESCO APORTADOS242
Declaración extrajuicio.
ALEJANDRO Marina Edith Compañera
54259007 Juramento estimatorio de
VALOYES MENA Mosquera Mena245 permanente
afectaciones.
Delitos Legalizados: Ledinson Valoyes
56 1038804160 Hijo Registro Civil
Mosquera
Homicidio en persona Elys Johana Valoyes
1040363848 Hija Registro Civil
protegida art. 135 Mosquera
parágrafo numeral 1. Cristhian Alejandro
1040368940 Hijo Registro Civil
Valoyes Mosquera
WILTON ANTONIO Declaración extrajuicio.
GARCÉS FLORÉZ Adriana Patricia Arias Compañera
39415960 Juramento estimatorio de
(MONTAÑO)246 Arias247 permanente
afectaciones.

Delitos Legalizados:
57
Homicidio en persona Ana Margarita Registros civiles.
protegida art. 135 43141178 Hermana
Montaño Duque No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Secuestro simple art.
168.
Compañera
EDILBERTO Rosa Cuadrado Fabra 32242334 Declaración extrajuicio
permanente
CUADRADO
Registro Civil
LLORENTE
(Figura como padre Rodrigo
Cuadrado Ruiz).
58 Sentencia Condenatoria Yudy Esther Nació el
Hija menor Declaración extrajuicio dice
por el Juzgado Segundo Cuadrado Cuadrado 20/junio/95
que padre muere sin
Penal del Circuito
poderla reconocer.
Especializado de
No probó parentesco.
Antioquia.
Julia Llorente Vergara 22155978 Madre Partida de Bautismo hijo
Declaración extrajuicio.
CAMILO SOLANO Fabiola de Jesús Compañera
21522805 Juramento estimatorio de
BALTAZAR Meneses Cataño permanente
afectaciones.
Registro civil.
Delitos Legalizados: Deysy Johana Solano
59 32355499 Hija Juramento estimatorio de
Meneses
afectaciones.
Homicidio en persona
Registro civil.
protegida art. 135 Claudia Liliana Solano
32294171 Hija Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1. Meneses
afectaciones
Yorlanis Patricia Borja
1017145061 Hija Registro civil
Perlaza
Ana Lucia Perlaza Compañera
WALTER DE JESÚS 32286800 Declaración extrajuicio
Jiménez permanente
BORJA DAVID
Registro civil.
Delitos Legalizados: Ayda Mabel Borja
43971601 Hija Juramento estimatorio de
59 Perlaza248
afectaciones.
Homicidio en persona
Registro civil.
protegida art. 135 Walter de Jesús Borja
8321263 Hijo Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1. Pulgarín249
afectaciones.
Edwin Duban Borja
71241662 Hijo Registro civil
Pulgarín
MELQUISEDEC Ángela Beatriz Compañera
59 39407191 Declaraciones extrajuicio
RENTERIA Saldarriaga Martínez permanente

245
Recibió de Acción Social $2.000.000.
246
De acuerdo con la información aportada por la Fiscal Delegada, al realizar la búsqueda en la Registraduría Nacional del
Estado Civil, aparece que la víctima se identificaba con la cédula de ciudadanía número 71940177, cupo numérico que
corresponde al nombre de WILTON GARCES FLORES; sin embargo, en el registro civil de nacimiento y en la partida de
bautismo aparece como WILTON ANTONIO GARCES MONTAÑO, hijo de Manuel Elías Garces y Idelisa Montaño. Así mismo
se anexa declaración extrajuicio de la señora Ana Margarita Montaño Duque, hermana del señor Wilton Antonio, quien
manifestó que existía un error en el segundo apellido de su hermano en la cédula de ciudadanía.
247
Recibió de Acción Social $10.712.000.
248
Recibió de Acción Social $2.000.000.
249
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
127
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VÍCTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA
INDIRECTAS241 CÉDULA PARENTESCO APORTADOS242
MACHADO
Registro civil.
Delitos Legalizados:
Elkin Andrés Rentería Dictamen del Seguro Social,
1038806943 Hijo (discapacitado)
Saldarriaga250 sobre pérdida de la
Homicidio en persona
capacidad de laboral.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
ARTURO MORENO Registro civil.
Sandra Bibiana
LÓPEZ 43202475 Hija Juramento estimatorio de
Moreno Fernández
Delitos Legalizados: afectaciones.
60
Registro civil
Homicidio en persona Mary Luz Moreno
39312959 Hija Juramento estimatorio de
protegida art. 135 Fernández.
afectaciones.
parágrafo numeral 1.
JULIO CÉSAR SERNA Luz Zorela Rodríguez Compañera
39414529 Declaración extrajuicio
Agudelo permanente
Sentencia condenatoria
proferida por el
61 Registro civil, no figura el
Juzgado Segundo Penal Daniel Alexander
Nació 26/01/1996 Hijo póstumo nombre del padre.
del Circuito Rodríguez Agudelo
Declaración extrajuicio.
Especializado de
Antioquia.
HUMBERTO Margarita Rosa Compañera
39311743 Declaraciones extrajuicio
PACHECO CASTILLO Barraza Payares permanente

Sentencia Condenatoria Yeison Humberto Registro civil.


1045507487 Hijo
62 por el Juzgado Segundo Barraza Payares Declaración extrajuicio.
Penal del Circuito
Especializado de Angie Lorena Barraza Registro civil.
Medellín. 1045513558 Hija
Payares Declaración extrajuicio.

LUÍS EDUARDO Luís Antonio Cubides


CUBIDES VANEGAS 71983698 Hijo Registro civil
Ramírez

Sentencia Condenatoria
63
por el Juzgado Segundo María de los Ángeles
Penal del Circuito 39307894 Hija Registro civil
Cubides Ramírez
Especializado de
Antioquia.
VIDAL DEVIA
RAMÍREZ
Delitos Legalizados:
Herminda Ramírez de
64 39401627 Madre Registro civil hijo
Devila
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
María Consuelo David
43662792 Hija Registro civil
Higuita251

Declaración extrajuicio.
María Ernestina Compañera
LUÍS ÁLVARO DAVID 39410606 Juramento estimatorio de
Rivera Usuga252 permanente
OLIVEROS afectaciones.

Delitos Legalizados: Jhon Jairo David


65 1028020438 Hijo Registro civil
Rivera
Homicidio en persona Ana Orlinda David
1027951388 Hija Registro civil
protegida art. 135 Rivera
parágrafo numeral 1. Luis Fernando David
1027963489 Hijo Registro civil
Rivera
Luis Álvaro David
71251675 Hijo Registro civil
Higuita253
Gloria Cecilia David
39414113 Hija Registro civil.
Higuita254

250
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Salud se efectué el trámite para que la victima reciba de forma continua y gratuita
pañales, dada su discapacidad.
251
Recibió de Acción Social $1.250.000.
252
Recibió de Acción Social $11.000.000.
253
Recibió de Acción Social $1.250.000.
254
Recibió de Acción Social $1.250.000.
128
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VÍCTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA
INDIRECTAS241 CÉDULA PARENTESCO APORTADOS242
Luz Elena David Registro civil.
39424013 Hija
Higuita255 Declaración extrajuicio.
Dora Alba David
39417993 Hija Registro civil
Higuita256
Registro civil matrimonio,
Ana Milbia Durango Partida de matrimonio.
ELKIN DE JESÚS 21744011 Cónyuge
Durango257 Juramento estimatorio de
ESCOBAR LÓPEZ
afectaciones.
Yuliana Escobar
Delitos Legalizados: 1040361026 Hija Registro civil
66 Durango
Delby Andrés Escobar
Homicidio en persona 1028004675 Hijo Registro civil
Durango
protegida art. 135
Registro Civil.
parágrafo numeral 1. Claudia Patricia
39424067 Hijastra Declaración extrajuicio.
Durango Durango
No probó parentesco.
Partida de Matrimonio.
Rosmira Durango
32275209 Cónyuge Juramento estimatorio de
Álvarez258
afectaciones.
Registro Civil.
Carlos Alberto
1028005274 Hijo Juramento estimatorio de
GUSTAVO ALBERTO Gutiérrez Durango259
afectaciones.
GUTIÉRREZ LÓPEZ
Registro Civil.
Eli Johana Gutiérrez
1027951424 Hija Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: Durango
66 afectaciones.
Registro Civil.
Homicidio en persona Gustavo Alfonso
1028013902 Hijo Juramento estimatorio de
protegida art. 135 Gutiérrez Durango
afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Bibiana María
39427071 Hija Registro Civil
Gutiérrez Castaño
Registro Civil.
Rodrigo de Jesús
1028017180 Hijo Juramento estimatorio de
Gutiérrez Durango260
afectaciones.
Registro Civil de Jairo
Alberto López Manco,
Registro de Defunción de la
señora Ana Francisca
Manco Suarez, madre de la
María Eneida Tía y madre de víctima, declaración
JAIRO ALBERTO 39400010
Suárez261 crianza. extrajuicio en el que se
LÓPEZ MANCO testifica que la señora María
Eneida Suárez fue la
Delitos Legalizados: encargada de la crianza del
67 joven Jairo Alberto López
Homicidio en persona Manco.
protegida art. 135 Patricia Sanmartín Compañera
parágrafo numeral 1. 43757528 Declaración extrajuicio
Arango permanente
Secuestro simple art.
María Camila López Nació Registro civil, Declaración
168. Hija
Sanmartín 21/julio/1996 extrajuicio
Registros civiles.
Ana María Galeano
39411035 Hermana Declaración extrajuicio.
Manco
No probó afectaciones.
Registros civiles.
Maricela Pérez Manco 39411045 Hermana
No probó afectaciones.
ELMER ANTONIO Declaración extrajuicio.
Piedad Patricia León Compañera
68 URQUIJO BELTRÁN 43707070 Juramento estimatorio de
Muriel262 permanente
afectaciones.

255
Recibió de Acción Social $1.250.000.
256
Recibió de Acción Social $1.250.000.
257
Recibió de Acción Social $19.000.000.
258
Recibió de Acción Social $18.000.000.
259
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
260
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
261
Recibió de Acción Social $21.000.000.
262
Recibió de Acción Social $9.800.000.
129
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VÍCTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA
INDIRECTAS241 CÉDULA PARENTESCO APORTADOS242
Delitos Legalizados:
Registro Civil. Declaración
Paola Andrea León Nació 14-dic- extrajuicio.
Homicidio en persona Hija póstuma
Muriel 1995 Juramento estimatorio de
protegida art. 135
afectaciones.
parágrafo numeral 1.
LUÍS ANTONIO
ESPITIA GONZÁLEZ

Delitos Legalizados:
Sixta Tulia González Registro Civil Hijo.
69 39302197 Madre
Homicidio en persona Yanes Declaración extrajuicio.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Secuestro simple art.
168.
Declaración extrajuicio.
Luz María Mosquera Compañera
39401091 Juramento estimatorio de
ARCESIO GALLEGO Fernández263 permanente
afectaciones.
LOZANO
Viviana Gallego
39429509 Hija Registro civil
Mosquera
Delitos Legalizados:
70 Yurilsa Gallego
39425825 Hija Registro civil
Mosquera
Homicidio en persona
Carmen Emilia
protegida art. 135 39424271 Hija Registro civil
Gallego Mosquera
parágrafo numeral 1.
Yessica Paola Gallego
1040363845 Hija Registro civil
Mosquera
Declaraciones extrajuicio,
MISAEL ANTONIO en el que se testifica que la
MORENO CÓRDOBA señora Ana Felisa Lloreda
Delitos Legalizados: de Machado, fue la
Ana Felisa Lloreda de Tía y madre de
70 26289808 encargada de la crianza del
Machado264 crianza
Homicidio en persona señor Misael Antonio
protegida art. 135 Moreno Córdoba.
parágrafo numeral 1. Juramento estimatorio de
afectaciones.
ROGELIO Declaraciones extrajuicio.
Flor Alba Ospina Compañera
MOSQUERA 43775875 Juramento estimatorio de
Ruiz265 permanente
PALACIOS afectaciones.
Delitos Legalizados: Abogada no legitimada para
71
actuar.
Brian Miguel Ospina
Homicidio en persona 1040368171 Hijo Registro civil.
Mosquera
protegida art. 135 Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1. afectaciones.
Declaraciones extrajuicio.
Primitiva González Compañera
39298163 Juramento estimatorio de
Arrieta266 permanente
afectaciones.
ÁNGEL HUMBERTO
Marlon Yecid Zabala
ZABALA BEJARANO 6135587 Hijo Registro civil
Moreno
Maim Humberto
Delitos Legalizados: 71987124 Hijo Registro civil
72 Zabala Moreno
Henry Alberto Zabala
Homicidio en persona 71351885 Hijo Registro civil
González267
protegida art. 135
Carlos Humberto
parágrafo numeral 1. 71986755 Hijo Registro civil
Zabala González
Ella Cecilia Zabala
39310199 Hija Registro civil
Moreno
DAIRO PÉREZ Carmen María
32270366 Madre Registro civil hijo
NEGRETE Negrete Flórez
73 Declaración extrajuicio.
Compañera
Delitos Legalizados: Arelis Guillín Barón268 39309580 Juramento estimatorio de
permanente
afectaciones.

263
Recibió de Acción Social $20.600.000.
264
Recibió de Acción Social $5.000.000.
265
Recibió de Acción Social $20.000.000.
266
Recibió de Acción Social $20.000.000.
267
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
268
Recibió de Acción Social $ 19.750.000
130
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VÍCTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA
INDIRECTAS241 CÉDULA PARENTESCO APORTADOS242
Homicidio en persona Dayner Andrés Pérez Nació 21-agosto- Registro civil.
protegida art. 135 Hijo menor
Guillin 1995 No probó afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Brigida Rosa Perez Registro civil.
39408634 Hermana
Negrete No probó afectaciones.
Fabricio Enrique Registro civil.
15511041 Hermano
Perez Negrete No probó afectaciones.
Ángela María Pérez Registro civil.
43145032 Hermana
Negrete No probó afectaciones.
Yolanda Milena Pérez Registro civil.
39423301 Hermana
Negrete No probó afectaciones.
Luis Gabriel Pérez Registro civil.
8322391 Hermano
Negrete No probó afectaciones.
José Ferney Pérez Registro civil.
8324168 Hermano
Negrete No probó afectaciones.
Registro civil, es hijo de
Jaime Perez Negrete 71241163 Sobrino Arnolis Pérez Negrete.
No probó afectaciones.
Fabricio Manuel Pérez
2821973 Padre Registro civil hijo
Galindo
Jhon Jairo Pérez Registro civil.
71976208 Hermano
Negrete No probó afectaciones.
Arnolis Judith Pérez 32253876 Falta No probó parentesco.
Hermana
Negrete Copia No probó afectaciones.
Luzmila Judith Sibaja Registros civiles.
39301220 Hermana
Negrete No probó afectaciones.
IBER MODESTO
ROJAS MORENO
Declaraciones extrajuicio.
Delitos Legalizados: Epifanía Díaz Compañera
74 39295071 Juramento estimatorio de
Cuadrado permanente
afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1
Registro civil hijo.
Epifanía Díaz
39295071 Madre Juramento estimatorio de
Cuadrado
afectaciones.
ELÍAS GARCÍA DÍAZ Oscar Ricardo García
71938463 Hermano Registro civil
Díaz
Delitos Legalizados: Nacira García
39306892 Hermana Registro civil
Mosquera
74
Homicidio en persona Esperanza García
39312434 Hermana Registro civil
protegida art. 135 Cuesta
parágrafo numeral 1 Wilfredo García Díaz 71978125 Hermano Registro civil
Ana María García Díaz 39309895 Hermana Registro civil
Selva García Díaz 39306980 Hermana Registro civil
José María Gómez
71977048 Hermano Registro civil
Díaz
GUSTAVO ANTONIO Rosa Ema Martínez Compañera
39411800 Declaración extrajuicio
VARGAS USUGA Posso269 permanente
Registro civil.
Mariel Janeth Vargas
Delitos Legalizados: 1027965159 Hija Juramento estimatorio de
Martínez
afectaciones.
75
Homicidio en persona
protegida art. 135
Edwin Alexis Vargas
parágrafo numeral 1. 1028014079 Hijo Registro civil
Martínez270
Secuestro simple art.
168.
ROSMIRA DEL Lisbeth Audrey Registro civil.
39416608 Hija
SOCORRO GUISAO Vásquez Guisao Declaración extrajuicio.
CASTRO Darío de Jesús Partida de matrimonio.
70430938 Cónyuge
75 Aguirre Usuga Declaración extrajuicio.
Delitos Legalizados: Edwin Arbey Aguirre Registro civil.
1020396534 Hijo
Guisao Declaración extrajuicio.
Homicidio en persona Robinson Darío Registro civil.
protegida art. 135 71383255 Hijo
Aguirre Guisao Declaración extrajuicio.

269
Recibió de Acción Social $21.000.000
270
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
131
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VÍCTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA
INDIRECTAS241 CÉDULA PARENTESCO APORTADOS242
parágrafo numeral 1.
José Willington
Secuestro simple art. 1035302835 Hijo Registro civil
Aguirre Guisao271
168.
Registro civil.
Osvaldo Vergara
71975856 Hijo Juramento estimatorio de
Guzmán272
afectaciones.
Johny Vergara
71985972 Hijo Registro civil
Ramírez
Jenis Vergara
43750598 Hija Registro civil
Ramírez
Jhonatan Vergara
OSVALDO VERGARA 71240784 Hijo Registro civil
Ramírez
GÓMEZ
Declaración extrajuicio.
Gloria Patricia Compañera
39298323 Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: Ramírez permanente
76 afectaciones.
Millerlandi Vergara
Homicidio en persona 39308502 Hija Registro civil
Guzmán
protegida art. 135
Partida matrimonio.
parágrafo numeral 1. Nancy Guzmán de
22154714 Cónyuge Juramento estimatorio de
Vergara
afectaciones.
Osdman Vergara
71977726 Hijo Registro civil
Guzmán
Tatiana Vergara
39316187 Hija Registro civil
Ramírez
Gilmar Osvaldo
1045507257 Hijo Registro civil
Vergara Romero
Candida Rosa Moreno
22164621 Madre Registro civil hija.
Perea273
Ángel María Romero Registro civil.
71986464 Hermano
Perea No probó afectaciones.
Luz Eneida Romero Registro civil.
MARÍA DOLORES 39308625 Hermana
Perea No probó afectaciones.
ROMERO PEREA
Humberto Romero Registro civil.
71976319 Hermano
Perea No probó afectaciones.
Delitos Legalizados:
76 Dolly María Romero Registro civil.
39300122 Hermana
Perea No probó afectaciones.
Homicidio en persona
Juan Romero Registro civil hija,
protegida art. 135 772580 Padre
Rodríguez declaración extrajuicio
parágrafo numeral 1.
Registro civil.
Willy Vergara
1045513539 Hijo Juramento estimatorio de
Romero274
afectaciones.
Gilmar Osvaldo
1045507257 Hijo Registro civil
Vergara Romero275
Henry Mosquera
1126338084 Hijo Registro civil
Duarte
Severo Mosquera
1085302323 Hijo Registro civil
Duarte
SEVERO MOSQUERA Henry Mosquera Registro civil.
ANGULO 11793829 Hermano
Angulo No probó afectaciones.
Olga María Mosquera Registro civil.
Delitos Legalizados: 26308859 Hermana
Mosquera No probó afectaciones.
77 José Busne Mosquera Registro civil.
Homicidio en persona 71979829 Hermano
Mosquera No probó afectaciones.
protegida art. 135 Pía Irene Angulo
parágrafo numeral 1. 26308523 Madre Registro civil hijo
Salas
Eliecer Mosquera Registro civil.
4822429 Hermano
Angulo No probó afectaciones.
Bárbara Mosquera de Registro civil.
26256901 Hermana
Moreno No probó afectaciones.

271
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
272
Recibió de Acción Social $ 2.050.000
273
Recibió de Acción Social $ 19.000.000
274
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
275
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
132
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VÍCTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA
INDIRECTAS241 CÉDULA PARENTESCO APORTADOS242
Alex Jhon Mosquera Registro civil.
71251364 Hermano
Angulo No probó afectaciones.
Edyson Mosquera Registro civil.
4825410 Hermano
Angulo No probó afectaciones.
Iván Mosquera Registro civil.
4825241 Hermano
Angulo No probó afectaciones.
Compañera
Alicia Duarte 39301900 Declaración extrajuicio
permanente
RUDOLF REINALDO María Angélica Compañera
50966515 Declaración extrajuicio.
MARTIN PAFFEN Esquivel Lora permanente
DURIER Claudia del Socorro
25845618 Cónyuge Partida de Matrimonio.
García García
87 Condenada proferida María Camila Paffen
Nació 2/09/1995 Hija menor Registro civil.
por el Juzgado Penal Esquivel
del Circuito Rudolf Paffen García 1064977541 Hijo Registro civil
Especializado de María Claudia Paffen
Sincelejo. 52690066 Hija Registro civil
García

Doctor Fredy Edison Largo Suarez:

VICTIMA DIRECTA VICTIMAS DOCUMENTOS


HECHO INDIRECTAS276 CEDULA PARESTESCO APORTADOS277
Margarita del Carmen
39308157 Hija Registro civil
Jiménez Argel
María Fernanda
1027966942 NA
Jiménez Álvarez No acreditó parentesco
Registro civil
Bernardo Jiménez Falta Registro del hermano
3636991
Madera Hermano fallecido para acreditar
FALTA COPIA
parentesco.
No probó afectaciones.
Registro civil
María Beatriz 22153520 Falta Registro del hermano
González Madera FALTA COPIA Hermana fallecido para acreditar
parentesco.
No probó afectaciones278.
SAMUEL ANTONIO
Almida Claret Pineda
JIMÉNEZ MADERA Compañera
Galindo fallecida No aportó documentos.
permanente
(FALLECIDA)
Delitos Legalizados:
27 Carmenza Jiménez
39306737 Hija Registro Civil
Homicidio en persona Pineda
protegida art. 135 Jorge Iván Jiménez
1027950250 Hijo Registro civil
parágrafo numeral 1. Pineda
Hurto calificado y Jaime Antonio
71938575 Hijo Registro civil
agravado art. 350 y 351 Jiménez Pineda
Nellyda Rosa Jiménez
39407640 Hija Registro civil
Pineda
Arisnel Jiménez Argel 71989800 Hijo Registro civil

Marco Antonio
Jiménez Pineda 71937762 Hijo Registro civil
Fanny Ester Jiménez
Pineda 39408482 Hija Registro civil
María Elubina
Jiménez Pineda 39416257 Hija Registro civil
Enilda Luz Jiménez
Pineda 39420503 Hija Registro civil
Sandra Milena
Jiménez Pineda 39421666 Hija Registro civil

276
Los nombres de las víctimas se han escrito como aparecen en las cédulas de ciudadanía.
277
Cuado se hace referencia a que las representantes de las víctimas no probaron las afectaciones, es la conclusión a la
que la Sala ha llegado luego de la revisión de cada una de las carpetas aportadas.
278
Cuado se hace referencia a que las representantes de las víctimas no probaron las afectaciones, es la conclusión a la
que la Sala ha llegado luego de la revisión de cada una de las carpetas aportadas.
133
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMA DIRECTA VICTIMAS DOCUMENTOS


HECHO INDIRECTAS276 CEDULA PARESTESCO APORTADOS277
Josefa María Jiménez
Ballesteros 39300349 Hija Registro civil
Yeny Elisa Jiménez
Argel 1027998583 Hija Registro civil
Carlos Mario Jiménez
Pineda 8323682 Hijo Registro civil
Luis Eduardo Jiménez
Argel 71938353 Hijo Registro civil
Magali del Carmen Compañera
Argel Montes 39303530 permanente Declaración extrajuicio

Jairo Jiménez Argel 71351916 Hijo Registro civil


Miguel Enrique
Jiménez Argel 71943087 Hijo Registro civil
Albeiro de Jesús
Jiménez Argel 71240472 Hijo Registro civil

Doctora Paola Andrea Hernández García:

HECHO VICTIMA DIRECTA VICTIMAS DOCUMENTOS


INDIRECTAS279 CÉDULA PARESTESCO APORTADOS280

Declaración extrajuicio
Nelly Morales Compañera
39409127 Escrito de identificación de
Chaverra permanente
las afectaciones.
ARLEY DE JESÚS
CARO ZAPATA
Registro Civil.
Arnel de Jesús Caro Declaración extrajuicio.
Delitos 1052392119 Hijo
Morales Escrito de identificación de
30 Legalizados:
las afectaciones.
Homicidio en persona Registro Civil.
protegida art. 135 Jheison Anderson Nació 26/Abril/95. Declaración extrajuicio.
Hijo
parágrafo numeral 1. Caro Morales FALTA COPIA Escrito de identificación de
las afectaciones
Registro Civil.
Katerine Esneda Caro Declaración extrajuicio
1052400904 Hija
Morales Escrito de identificación de
las afectaciones
Registro civil sin nombre de
JENRY JAMETH
Astrith Elena Velasco los padres.
VELASCO CUESTA 39317860 Hermana
Cuesta No acreditó parentesco.
No probó afectaciones281.
Delitos
55 Registros civiles.
Legalizados: Yina Paola Asprilla
1045509728 Hermana Declaración extrajuicio.
Cuesta
No probó afectaciones.
Homicidio en persona
Registro civil. Declaración
protegida art. 135
Jonny Velasco Cuesta 71352640 Hermano extrajuicio.
parágrafo numeral 1.
No probó afectaciones.
EDILBERTO Teanis Yolima Compañera Declaración extrajuicio.
43142244
CUADRADO Hernández Morales permanente Escrito de afectaciones.
LLORENTE Registro civil.
Adriana Cuadrado
1038806893 Hija Declaración extrajuicio.
Hernández
58 Sentencia Escrito de afectaciones.
Condenatoria por el Registro civil.
Juzgado Segundo Yenifer Hernández No aparece que se hija del
NA Hija
Penal del Circuito Morales señor Edilberto cuadrado
Especializado de Llorente.

279
Los nombres de las víctimas se han escrito como aparecen en las cédulas de ciudadanía.
280
Cuado se hace referencia a que las representantes de las víctimas no probaron las afectaciones, es la conclusión a la
que la Sala ha llegado luego de la revisión de cada una de las carpetas aportadas.
281
Cuado se hace referencia a que las representantes de las víctimas no probaron las afectaciones, es la conclusión a la
que la Sala ha llegado luego de la revisión de cada una de las carpetas aportadas.
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

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INDIRECTAS279 CÉDULA PARESTESCO APORTADOS280
Antioquia. No probó parentesco
Declaración extrajuicio de la
señora Teanis Yolima
Hernández Morales.
Escrito de afectaciones.
No anexo registro civil para
acreditar parentesco.
No probó parentesco.
José Leonardo
NA Hijo Declaración extrajuicio de la
Hernández Morales
señora Teanis Yolima
Hernández Morales.
Escrito de afectaciones.

F. El Ministerio Público:

277. El doctor Víctor Andrés Salcedo Fuentes, Procurador II Delegado en lo Penal, se


refirió a la modificación que consagra el artículo 23 de la Ley 1592 de 2012, respecto al
daño colectivo, y a la facultad que perdieron los Procuradores Judiciales para presentar
diagnósticos sobre el daño colectivo ocasionado a las víctimas, como se ha realizado en
otros casos, sin embargo, dice, basado en las intervenciones de la Fiscal Delegada y las
abogadas Representantes de víctimas, que es notorio el daño colectivo en cabeza de los
miembros de la Unión Patriótica, razón por la que solicita que se disponga, tal como lo
prevé el artículo 23 de la Ley 1592 de 2012 el traslado de este caso a la Unidad de
Victimas, como sujeto colectivo objeto de reparación.

278. Por otra parte, hizo énfasis en que la Ley 1592 de 2012, claramente modificó la
medida o forma de reparación de las víctimas, en tanto que ya no se trata de una
reparación judicial, sino administrativa, y además que dicha reparación deberá ser
conforme a lo establecido en la Ley 1448 de 2011; y en ese orden de ideas, hace un
llamado concreto a la Sala y a los intervinientes en el proceso, para que no se generen
falsas expectativas a las víctimas, independientemente de lo que se resuelva sobre la
excepción de inconstitucionalidad que fue propuesta.

279. Finalmente, hizo un llamado a la Sala para que se aborden metodológicamente las
audiencias de identificación de las afectaciones causadas a las víctimas, con el fin de
imprimirle dinamismo y agilidad.

G. El Postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA

280. El desmovilizado, inició su intervención indicando que ha cumplido con cada uno
de los requisitos de elegibilidad para acceder a la pena alternativa que consagra la Ley
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HÉBERT VELOZA GARCÍA

975 de 2005, que ha estado comprometido con la verdad oportuna y veraz que debe
primar en este proceso, y que con ello, ha puesto en peligro su vida y la de su familia.

281. Reiteró su voluntad y compromiso en confesar cada uno de los hechos cometidos
por él y los hombres bajo su mando, muestra de ello han sido las innumerables diligencias
judiciales en las que ha participado, incluso ahora después de ser extraditado. Debido a
sus confesiones, la justicia colombiana ha librado en su contra más de 111 órdenes de
captura y ha dictado más de 300 sentencias; se reactivaron procesos que se encontraban
archivados y de los cuales no se tenía un solo indicio de su participación. Lo anterior
sumado a que por sus declaraciones han sido condenados 8 Senadores de la República
por parapolítica, así como varios personajes de la vida pública del país; en sus diligencias
de versión libre identificó y enunció a las personas que estaban conformando nuevas
bandas criminales, lo que le implicó graves consecuencias para su seguridad; igualmente,
manifestó que ha entregado información que ha permitido la ubicación de decenas de
fosas comunes, incluso ha colaborado para que desmovilizados de otros bloques indiquen
la ubicación de cuerpos para su identificación y entrega a sus familiares.

282. Señaló además, que acatando una propuesta del Gobierno Nacional, luego de su
desmovilización y hasta el momento de su extradición, fue uno de los pioneros en
impulsar proyectos productivos que involucran a campesinos y desmovilizados, fomentó la
erradicación de cultivos de coca, y para ello siempre solicitó el acompañamiento de la
MAPP - OEA, con el fin de que se verificara que se trataba de verdaderos integrantes de
las autodefensas.

283. Expresó su arrepentimiento y se comprometió a no volver a cometer hechos


delictivos, reconoció que esa guerra irregular de la cual participó, dejó miles de víctimas
inocentes, pues como lo puso de presente en varias sesiones de versión libre, “no es
posible asegurar que todas las personas fueron asesinadas por tener vínculos con la
guerrilla, ya que ésta fue una información que nunca se verificó”. Agregó que se dejó
cegar por el poder de las armas y se dejó utilizar, dice, “por los ricos de este país”, en una
guerra que existía desde años atrás, desde cuando las guerrillas liberales fueron
despojadas de sus tierras, y ese es y seguirá siendo un detonante de la guerra, porque se
sigue beneficiando a los terratenientes y a la clase política del país.

284. HÉBERT VELOZA GARCÍA pidió perdón a las víctimas, y llamó la atención de todos
los partícipes del proceso de Justicia y Paz, para que se construya la verdad que la

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sociedad quiere y merece conocer, para que se identifiquen y juzguen a todas aquellas
personas que se siguen beneficiando de la guerra y que están detrás de ella, porque con
la desmovilización de las autodefensas no terminó todo, considera que es necesario
investigar y juzgar a altos dignatarios, políticos, alcaldes, gobernadores y terratenientes,
entre otros.

VI. ALEGATOS Y PETICIONES EN TORNO A LA


INDIVIDUALIZACIÓN DE PENA Y SENTENCIA (Art. 447 CPP)

A. La Fiscal Delegada

285. Frente a la sentencia que la Sala proferirá en contra del postulado, solicitó que
ésta sea condenatoria, pues VELOZA GARCÍA, al momento de su desmovilización y luego
de su ratificación dentro del proceso de Justicia y Paz, renunció a las garantías procesales
de no auto incriminación, de presunción de inocencia, y a la posibilidad de controvertir las
pruebas. Por ello, conforme al artículo 25 de la Ley 1592 de 2012, que reformó el artículo
24 de la Ley 975 de 2005, solicita que al momento de imponer la pena ordinaria en cada
uno de los hechos objeto de control de legalidad, se parta de los máximos establecidos en
la dosificación punitiva, atendiendo la gravedad de los delitos por los cuales se acusó a
VELOZA GARCÍA. Así mismo, solicita que se de aplicación al artículo 29 de la Ley 975 de
2005, y se le reconozca al postulado la pena alternativa en el máximo establecido, esto
es, 8 años de prisión, pues ha cumplido con todos y cada uno de los requisitos exigidos
para hacerse acreedor a este beneficio.

B. El Defensor del Postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA:

286. El Dr. Fernando Humberto Villota Grajales, en su calidad de defensor del postulado
VELOZA GARCÍA, solicitó que de acuerdo con la jurisprudencia de la Corte Suprema de
Justicia282 y los artículos 23 y 29 de la Ley 975 de 2005; el Tribunal fije la pena principal y
accesoria, así como la pena alternativa propia del proceso de Justicia y Paz, que debe
cumplir su representado.

282
Segunda instancia, radicado 36563 del 3 de agosto de 2003, M.P. Dr. José Luis Barceló Camacho.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

Sobre la pena ordinaria

287. En lo que se refiere a la metodología de la dosificación de la pena ordinaria, esta


se debe tasar de acuerdo con lo establecido en los artículos 54 y siguientes del Código
Penal, para luego definir la pena de conformidad con el artículo 61, aplicando el sistema
de cuartos.

288. Sobre la confesión como fundamento de la condena, el defensor hizo énfasis en


que ésta debe ser tenida en cuenta para la rebaja de la pena, puesto que se hizo de
manera voluntaria, libre y espontánea por parte del señor HÉBERT VELOZA GARCÍA, por
ello, con fundamento en el artículo 283 de la Ley 600 de 2000 y en aplicación del principio
de favorabilidad debe ser tenida en cuenta para la rebaja de pena, puesto que dicha
norma tuvo vigencia en algún lapso de tiempo en el cual los hechos sucedieron. Aún más,
si esas confesiones hicieron parte del fundamento de declaratoria de la condena de su
representado, en compañía de las demás pruebas que la rodean y validan.

289. En cuanto al evento concursal asociado con el máximo de pena a imponer, el


defensor solicita que la pena máxima a imponer al señor HÉBERT VELOZA no exceda los
cuarenta (40) años porque:

290. Con la entrada en vigencia de la Ley 599 de 2000, el artículo dio continuidad a las
reglas por las que se regía la imposición de pena privativa de la libertad en eventos
concursales, por lo que la misma debe ser el resultado de establecer una pena de
referencia, que no puede ser otra que la pena más grave que concursa, aumentada por
una vez hasta en otro tanto, resultado que además no puede ser superior a la suma
aritmética de las penas que corresponden por cada delito, debidamente dosificadas.

291. El inciso segundo de la misma norma establece que en ningún caso la pena
privativa podrá ser superior a cuarenta (40) años, argumento que se refuerza con el
artículo 37 de la misma norma.

292. La Ley 890 de 2004, que entró en vigencia el 1 de enero de 2005, modificó los
artículos 31 y 37 de la Ley 599 de 2004, aumentando los máximos de pena privativa de la
libertad, esa modificación no puede ser aplicada en el caso concreto porque todos los
cargos que fueron legalizados y que son objeto de sanción, fueron por hechos
consumados antes del 1 de diciembre de 2004.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

293. En el tránsito de leyes penales, siempre hay una más favorable que la otra, por
aplicación del principio de favorabilidad283, por tanto deben ser las contenidas en la Ley
599 de 2000 las que se tengan en cuenta para el caso en concreto.

294. Respecto de la acumulación jurídica de penas, el señor defensor solicita que de


conformidad con lo establecido en los artículos 20 y 24 de la Ley 975 de 2005 y 10 del
Decreto Reglamentario 3391 del 2006; se proceda a dicha acumulación por las condenas
previas que pesan en contra del postulado por hechos cometidos durante y con ocasión
de su pertenencia al grupo armado al margen de la ley.

Sobre la pena alternativa

295. Sobre la pena alternativa que se le ha de imponer al postulado VELOZA GARCÍA, el


señor defensor llamó la atención sobre los requisitos284 y parámetros285 que la Sala debe
tener en cuenta al momento de concederla, sumado a las reglas del Código Penal, la
gravedad de los delitos y la colaboración efectiva en el esclarecimiento de los mismos.

296. Señaló el defensor que de acuerdo con las reglas aplicables del Código Penal, la
Sala debe tener en cuenta el sistema de cuartos, que para el caso concreto implica que
como extremo mínimo se toman los 5 años y como el máximo los 8 años; así establecidos
los cuartos, se deberá indicar motivadamente en que cuarto se ubicará, teniendo en
cuenta la gravedad de los delitos y la colaboración efectiva en el esclarecimiento de los
mismos.

297. Respecto de la gravedad de los delitos y la colaboración efectiva en el


esclarecimiento de los mismos, el defensor hizo énfasis en que si bien los delitos
cometidos por el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA fueron claramente graves, el inicio
de la versiones libres rendidas por su defendido, partió en dos la historia de las versiones,
en lo que a verdad se refiere; es decir, antes de sus intervenciones, las versiones en

283
La Sala de Justicia y Paz del Honorable Tribunal Superior del Distrito Judicial de Bogotá, en los radicados 2.008-83194,
2.007-83070, 2.006-81366, ha dado aplicación al principio de favorabilidad sometiéndose al límite máximo de los cuarenta
(40) años que imponían los artículos 31 y 37 de la Ley 599 de 2000. En el Radicado 80585, en proceso contra Barney
Veloza García, se condenó a pena de 44 años, la cual fue apelada, y en segunda instancia con radicado 38381 y ponencia
del Dr. José Leónidas Bustos Martínez del 12 de diciembre de 2012, la Corte revocó en aplicación del principio de
favorabilidad rebajando la pena ordinaria al límite máximo de 40 años.
284
Este evento implica conceder la alternatividad, reglamentada en los arts. 3, 10, 11 y 29 inciso 3 de la Ley 975 de 2005 y
en el art. 8 del Decreto Reglamentario 4760 del 2005, referente a los siguientes requisitos: contribución del beneficiario a la
paz nacional, colaboración con la justicia, reparación de las víctimas, adecuada resocialización a través del trabajo, estudio
o enseñanza, cumplimiento de requisitos de elegibilidad y promoción de actividades orientadas a la desmovilización del
grupo armado al que perteneció.
285
Este evento se refiere a la tasación de la pena alternativa, reglamentada en art. 29 inciso 1 y 2 de la Ley 975 de 2005 y
en el art. 8 inciso 2 del Decreto reglamentario 4760 de 2005.
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HÉBERT VELOZA GARCÍA

general eran cuidadosamente elaboradas, no ahondaban en hechos, autores, temas de


contexto; por tanto, la aceptación y el verdadero compromiso con la verdad era mínimo;
en cambio, en las versiones rendidas por el postulado HÉBERT VELOZA se tocaron hechos
y verdades a fondo.

298. El defensor resaltó, en concordancia con lo anterior, que el señor HÉBERT VELOZA
aceptó el uso de prácticas para infundir terror, la existencia de torturas, secuestros
extorsivos, desapariciones forzadas, y el delito de narcotráfico como medio de
financiación de la guerra; aceptó igualmente la realidad del exterminio y genocidio contra
los miembros de la Unión Patriótica como ataque sistemático. Sus revelaciones incluso se
extendieron a la política, permitiendo conocer el fenómeno hoy conocido como
“parapolítica” al punto de haber permitido el desarrollo de investigaciones y procesos
contra funcionarios a nivel regional de gobernaciones y alcaldías. Además habló de las
Convivir, los gremios y empresarios bananeros y su papel en los métodos de financiación.
Confesó también la relación de su organización con miembros de la fuerza pública, entre
ellos el General Rito Alejo del Rio y hombres bajo su mando, junto a otros muchos
militares que tuvieron incidencia en delitos cometidos por el paramilitarismo, como los
mandos de la Armada en el municipio de Buenaventura implicados en masacres como la
de “Yurumangui”. A esto se suma que cuando se desarmó y desmovilizó, también
desmovilizó a hombres bajo su mando, creó e implementó procesos productivos para que
los desmovilizados y las victimas reconstruyeran la paz hombro a hombro.

299. Resaltó el defensor que la colaboración de HÉBERT VELOZA fue tal, que las
victimas reconocieron su aporte, al punto de interponer varias tutelas para evitar que
fuese extraditado; el pensamiento y opinión de las mismas se evidenció en algunas
víctimas como las de las masacres del “Naya” y por parte de la ONG de “Iniciativa de
Mujeres por la Paz” (IMP), quienes reconocieron el cambio que VELOZA GARCÍA y sus
aportes le imprimieron al proceso; ello también consta en grabaciones de versiones e
incluso en el escrito que la Comisión Colombiana de Juristas elevó al Congreso de los
Estados Unidos para que el postulado no fuese extraditado. A su vez, la prensa también
reconoció el aporte trascendente y oportuno que el señor VELOZA GARCÍA le dio al
proceso y a la paz del país, como consta en el artículo que fue publicado en la revista
Semana y suscrito por la periodista María Jimena Duzán286.

286
Artículo periodístico “¿Quién le teme a HH?” publicado en la Revista Semana, suscrito por María Jimena Duzán.
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HÉBERT VELOZA GARCÍA

300. Así mismo, solicitó que todo el tiempo que el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA
ha permanecido detenido desde el 4 de abril de 2007 hasta la fecha de proferirse el fallo,
le sea tenido en cuenta para descontarlo como tiempo cumplido de la pena alternativa, no
solo por todo lo establecido previamente sino porque: (i) el postulado se desmovilizó de
manera voluntaria, desde el 25 de noviembre de 2004; (ii) es un postulado ratificado, que
ha permanecido por todo el tiempo de su detención, privado de su libertad de manera
efectiva; y (iii) la medida de aseguramiento de detención preventiva que se le había
impuesto antes de su extradición en el marco de la Ley de Justicia y Paz, lo fue entre
otros, por los delitos que están legalizados y que serán objeto de sentencia, la cual se
encuentra vigente y en pleno cumplimiento.

301. Añadió además que el artículo 37 del Código Penal, vigente y aplicable al caso,
ordena que la detención preventiva en caso de condena, se debe computar como parte
cumplida de la pena; que el artículo 361 de la Ley 600 de 2000 (Código de Procedimiento
Penal) establece que el término de detención preventiva se debe computar desde el
momento de privación de la libertad; que según los principios fundamentales del derecho
penal y procesal penal de rango constitucional como el derecho a la libertad, igualdad
ante la ley, el debido proceso, legalidad de la pena y favorabilidad de la ley procesal penal
de contenido sustancial, obligan a un accionar idéntico con los sujetos pasivos de la Ley
de Justicia y Paz; y por último que el artículo 11 del Decreto Reglamentario 3391 de 2006
expresamente dice que el tiempo de privación de la libertad cumplido en establecimientos
de reclusión, sujetos al control del INPEC y una vez el Magistrado de Control de Garantías
profiera la respectiva medida de aseguramiento, se imputará al cumplimiento de la pena
alternativa que corresponda.

302. Concluyó que la detención preventiva no es pena, pero se computa como tal en
caso de condena y se comienza a contar desde el primer instante de privación efectiva de
la libertad, pudiéndose cumplir la pena alternativa en el exterior287 y siendo la detención
preventiva sufrida imputable a esa pena; todo el tiempo de detención preventiva cumplida
en el exterior, con medida de aseguramiento vigente y por disposición del Gobierno, es
imputable a la pena alternativa, por lo que solicita que así se declare en la sentencia.

287
Respaldo de ello, se encuentra contenido en el artículo 30 de la Ley 975 de 2005, el cual establece que “la pena podrá
cumplirse en el exterior”.
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HÉBERT VELOZA GARCÍA

303. Finalmente, enunció y entregó copias simples de los documentos, diplomas y


certificados288 de estudio y trabajo del señor HÉBERT VELOZA GARCÍA, para demostrar su
compromiso con la resocialización durante el tiempo de su detención.

C. El Postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA:

304. En cuanto a la pena alternativa, solicitó que de conformidad con el artículo 29 de


la Ley 975 de 2005, la Sala le tase una pena inferior a los ocho (8) años, pues aunque es
consciente de la gravedad de los delitos que ha cometido, también lo es de su
compromiso y colaboración efectiva en el proceso de Justicia y Paz, a diferencia de otros
comandantes de bloques y/o frentes, que se han limitado a esperar la imposición de la
pena máxima, porque saben que digan o no la verdad, o lo hagan de forma parcial, al
final, todos tendrán la misma pena alternativa.

305. Por ello, solicita que la Sala analice su eficaz colaboración con el proceso y le
beneficie de manera simbólica con el descuento de uno o dos días de la pena alternativa,
pues esto significaría que es importante reconstruir la verdad y además incentivaría a
otros desmovilizados para que colaboren de manera más eficaz con el proceso, lo que
redundaría en un mensaje positivo para todos aquellos desmovilizados que aún están
manipulados por otros comandantes, y por ello muchas verdades se han quedado ocultas.

306. También solicitó que para efectos de descontar la pena que deberá purgar en el
marco del proceso de Justicia y Paz, le sea contabilizado el tiempo que ha permanecido
privado de la libertad desde el día en que fue capturado hasta la fecha en la que se
profiera sentencia. Además le tengan en cuenta el tiempo que lleva detenido en los
Estados Unidos. Manifestó que él no ha sido un narcotraficante, que ingresó a las AUC
como patrullero, y fue ascendiendo hasta llegar al estado mayor, porque fue un
convencido de la lucha antisubversiva, pero que ahora se da cuenta que fue utilizado para
realizar los intereses oscuros de otras personas.

288
Certificación de la validación del grado quinto de básica primaria, en la Institución educativa Concejo Municipal de Itagüí,
Proyecto “Escuela sin Muros” del año 2008, con calificación de excelente. Certificado de participación del “Metropolitan
Correctional Center” de Nueva York en el “11 North GED review class” dl 14 de abril de 2011. Certificado de aprobación del
“Metropolitan Correctional Center” de Nueva York, del Programa de “Inside-Out Dad”, cursado del 24 de septiembre de
2010 al 19 de noviembre de 2010.
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VII. DE LOS BIENES CON VOCACIÓN DE REPARACIÓN

A. La Fiscal Delegada

307. En cuanto a los bienes que fueron ofrecidos y entregados por VELOZA GARCÍA
para la reparación de las víctimas, la Fiscal Delegada solicita se declare la extinción del
derecho de dominio, y llama la atención de la Sala, para que se requiera a la Unidad de
Atención y Reparación a las Víctimas (UARIV), a la Sociedad de Activos Especiales (SAE) y
al interventor del contrato realizado por la SAE, para que informen a la Sala sobre la
administración dada a los inmuebles, pues ha sido recurrente la información sobre las
presuntas irregularidades que se vienen presentando con la SAE como secuestre de los
bienes.

308. Añadió la Fiscal Delegada, que esta es una situación que no sólo ha ocurrido en el
caso de los bienes entregados por el aquí postulado, sino de otros desmovilizados del
proceso de Justicia y Paz, como ha quedado registrado en la audiencia de formulación de
cargos de José Germán Sena Pico, postulado del Bloque Sur de los Andaquíes, en la cual
la Magistrada de Control de Garantías de este Tribunal solicitó a la Contraloría General de
la República y Procuraduría General de la Nación, iniciar una revisión del estado de los
bienes entregados y la vigilancia del contrato con la SAE.

309. Igual situación se presentó en la audiencia de legalización de cargos del postulado


Jorge Iván Laverde Zapata y Edgar Ignacio Fierro, en los cuales se han denunciado
presuntos problemas en la administración de los bienes entregados con vocación de
reparación a la sociedad de activos especiales SAE, en el último de los casos, la
Procuraduría anunció que estaría vigilante, lo mismo ocurrió con los bienes entregados
por el postulado Salvatore Mancuso.

310. Lo anterior, dijo, evidencia que ha sido una práctica sistemática en desmedro de
las víctimas y del propio Estado que ha pagado más de 6.000 mil millones de pesos a la
SAE, para que administre los bienes objetos de reparación, pero lo que se ha encontrado
es que no solo los bienes se han deteriorado, sino que se han perdido sus frutos, los han
desmantelado, no se han cancelado los impuestos prediales, y algunos bienes están
invadidos u ocupados por personas a las que ahora hay que pagarles para que los
devuelvan. Se tiene información de arriendo de los bienes por cifras irrisorias, están
siendo usufructuadas por terceros que no reportan a ninguna entidad sus frutos, en

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algunos casos están siendo utilizados para cultivos ilícitos, tal como lo denunció el propio
defensor de Salvatore Mancuso, el abogado Jaime Alberto Paerez, en diligencias ante
Control de Garantías.

311. Agregó la Fiscalía que estas acciones permiten inferir que no hay una intención
seria por parte de estos organismos para responderle a la Sala de Justicia y Paz, en el
caso concreto del Tribunal de Bogotá, sobre sus requerimientos, por ello, solicitó que la
Sala compulse copias a las autoridades pertinentes en los casos en los cuales se han
denunciado las irregularidades ya mencionadas, para que se adelanten las investigaciones
respecto de la comisión de posibles delitos en la administración de los bienes con
vocación de reparación en el marco de la Ley 975 del 2005, pues mientras se afirma
insistentemente que no hay presupuesto para abordar temas de reparación, los bienes
con dicha vocación están sirviendo para que unos pocos se enriquezcan de forma
injustificada o ilícita, por ello las autoridades que participan de este proceso de justicia
transicional deben hacer lo posible para evitar que esta situación se siga presentando.

B. La Fiscalía 25 de la Sub Unidad Élite de persecución de bienes para la


reparación de las víctimas289

312. La doctora Liliana Patricia Donado Sierra, Fiscal 25 de la Unidad de la Sub Unidad
Élite de persecución de bienes para la reparación de las víctimas, de la Unidad de Justicia
y Paz de la Fiscalía General de la Nación, presentó un informe relacionado con los bienes
que fueron denunciados y entregados por el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, al
momento de la desmovilización, en su condición de ex comandante del Bloque Bananero.
Igualmente presentó un reporte de los bienes enunciados y entregados por el postulado
Raúl Emilio Hasbún Mendoza, para la reparación de las víctimas. Adicionalmente hizo
mención de los bienes que fueron afectados con medidas cautelares por el Magistrado de
Control de Garantías de la ciudad de Medellín y de los que se deben ser objeto de
extinción de dominio, tema al que la Sala hará referencia en la parte considerativa de este
decisión.

C. Unidad de Atención y Reparación Integral a las Víctimas290

313. El doctor Alex Duberney García Pulgarín, intervino durante la vista pública en
representación del Fondo para la reparación de las víctimas de la UARIV, y presentó un

289
Audiencia del 11 de marzo de 2013.
290
Ibídem.
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informe sobre los bienes que fueron entregados por el postulado, indicado la descripción
de estos, el titular del derecho de dominio, el avalúo comercial y los gravámenes o
limitaciones al derecho de dominio que pesa sobre los siguientes: “San Marino”,
“Hicoteas”, “El Saladito”, “El Diamante”, “Lote de Terreno 029-0000666”, “La Pocuna”,
“Peña Lisa”, “La Margarita”, “El Silencio”, “Hato Grande”, un edificio y una casa ubicados
en el municipio de Envigado (Antioquia), los cuales fueron entregados por el
desmovilizado HÉBERT VELOZA GARCÍA, para la reparación de las víctimas y respecto de
los cuales la Sala se pronunciará en el capítulo correspondiente a la extinción de dominio.

VIII. CONSIDERACIONES DE LA SALA

A. Competencia

314. Conforme a lo dispuesto en los artículos 23291, 24 y 25292 de la Ley 1592 de 2012,
la Sala es competente para dictar sentencia y pronunciarse sobre el incidente de
identificación de las afectaciones causadas a las víctimas por HÉBERT VELOZA GARCÍA,
alias “HH”, ex comandante del Bloque Bananero de las AUC. Además porque obran en el
proceso pruebas que conducen a la certeza de las conductas punibles y a la
responsabilidad del postulado, tal como lo establece el artículo 232 del Código de
Procedimiento Penal.

315. Así mismo, al momento de realizar el control formal y material de cargos, previo a
esta sentencia, la Fiscalía justificó el carácter parcial de la formulación e imputación de
cargos y la Sala consideró ajustada a derecho tal situación, atendiendo a: (i) la calidad de
comandante de HÉBERT VELOZA GARCÍA; (ii) el número de hechos registrados atribuibles
al Bloque Bananero en este proceso y, (iii) el número de víctimas registradas.

316. La decisión que aquí adopta la Sala en cuanto a responsabilidad penal del
postulado, individualización de pena y respuesta a las solicitudes en el incidente de
identificación de las afectaciones causadas a las víctimas, se ajustan a los parámetros
exigidos en el protocolo presentado por la Sala a todas las autoridades y partes que
tienen que ver con el proceso de Justicia y Paz.

291
Que modificó el artículo 23 de la Ley 975 de 2005
292
Que modificó el artículo 24 de la Ley 975 de 2005.
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317. A la hora de proferir sentencia la Sala ha tenido en cuenta que el postulado


HÉBERT VELOZA GARCÍA, ha transitado por las etapas administrativa y judicial previstas
por la Ley 975 de 2005, ejerciendo los derechos y haciendo uso de las garantías judiciales
que le son propias; así mismo, desde el inicio del proceso ha podido ejercer su defensa
material o técnica, por medio de la actuación de un abogado de confianza.

318. De la misma manera, las víctimas han accedido al proceso, han sido reconocidas y
acreditadas como víctimas y en consecuencia han tenido la oportunidad de participar en
el proceso, acompañadas por su representante judicial.

319. Así las cosas, está plenamente establecido por la Sala que se han cumplido las
exigencias de Ley, que no media irregularidad alguna que afecte la legalidad del proceso
y por ende se puede continuar con las etapas subsiguientes que conduzcan a la definición
de medidas de reparación por parte de la Unidad Administrativa Especial para la Atención
y Reparación Integral a las Víctimas, de conformidad con el artículo 24 de la Ley 1592 de
2012, y a la imposición de la pena principal, y si a ello hay lugar, a la imposición de la
pena alternativa.

320. El ámbito de aplicación de la Ley 975 de 2005, para el postulado HÉBERT VELOZA
GARCÍA, se limitará a aquéllos hechos delictivos que fueron cometidos durante y con
ocasión de la pertenencia del desmovilizado con el Bloque Bananero293. La Fiscalía 17
adscrita a la Unidad Nacional de Fiscalías para la Justicia y la Paz, en el presente proceso
ha documentado 77 hechos atribuibles a VELOZA GARCÍA y presentó imputación y
formulación parcial de cargos en contra del procesado referido anteriormente.

321. Las diligencias que ahora ocupan la atención de la Sala, comprenden la


documentación de los siguientes delitos: (i) concierto para delinquir agravado; (ii)
fabricación, tráfico y porte de armas y municiones de uso privativo de las fuerzas
armadas; (iii) utilización ilegal de uniformes e insignias, (iv) reclutamiento ilícito de
menores; (v) homicidio en persona protegida; (vi) secuestro; (vii) desaparición forzada;
(viii) tortura en persona protegida; (ix) hurto calificado y agravado; (x) actos de
terrorismo; y, (xi) actos de barbarie, los cuales han sido enunciados, reconocidos y
confesados por el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, pero que no son los únicos, toda
vez que se adelantan otras investigaciones en contra de VELOZA GARCÍA, en su condición
de ex comandante del Bloque Bananero.

293
Véase artículo 2 de la Ley 975 de 2005.
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322. El Tribunal viabiliza asumir la sentencia parcial de cargos294 del presente asunto
entendiendo que las condiciones y parámetros del proceso, tales como la multiplicidad y
complejidad de los actos criminales imputables a los postulados que participan en el
proceso de Justicia y Paz; la dificultad para reconstruir los casos, la forma en que se
cometieron los delitos y la cantidad de víctimas registradas; hacen complejo el trabajo de
investigación y por ende de formulación de cargos, por parte del Ente Acusador; empero
esta Sala reitera que es obligación de la Fiscalía General de la Nación, tal como lo ha
dispuesto la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia295, continuar
investigando las demás conductas que conforman el acervo criminal del Bloque Bananero
y en especial las que registren cada uno de los postulados pertenecientes a dicha
estructura criminal, entre ellos HÉBERT VELOZA GARCÍA, máxime cuando éste se
desmovilizó siendo comandante de los bloques Bananero y Calima de las AUC, con más
de 400 hombres bajo su mando en cada uno de ellos, y en el caso del Bloque Bananero
con más de 9000 hechos atribuibles, de los cuales VELOZA GARCÍA aceptó su
responsabilidad en más de 3000 de ellos, que están siendo enunciados, confesados y
verificados.

323. La Sala considera pertinente hacer una doble precisión frente a la legislación
aplicable a cada uno de los hechos legalizados y que son objeto de estudio dentro de la
presente sentencia; la primera, aclarar que la contextualización nacional y regional del
conflicto armado, así como la descripción de la estructura del Bloque Bananero, permiten
a la Sala abordar los elementos estructurales del conflicto para aplicar el Derecho
Internacional Humanitario al caso Colombiano; y segundo, precisar que en los casos de
reclutamiento ilícito de NNA, fue necesario valorar una serie de documentos e
instrumentos de orden interno e internacional con el fin de determinar el corpus iure
aplicable296.

294
Varios han sido los pronunciamientos de la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia, respecto a la
procedencia de las imputaciones parciales, concebidas excepcionalmente con el fin de imprimir celeridad a los trámites que
se adelantan bajo la Ley 975 de 2005, entre ellas aquella que establece que tal figura se aplica: “…porque encontró que con
su aplicación se protegían en mayor medida los derechos de las víctimas, dado que se avanza en el proceso de su
reparación, sin que tal solución comporte menoscabo del derecho de defensa del desmovilizado y, además, en tanto facilita
la labor investigativa de la fiscalía dentro de estos trámites…”.
Sin embargo, la Corte ha advertido que esta posibilidad “no persigue la concesión de beneficios penales sustantivos a
cambio de confesiones parciales; al contrario lo que se busca es precisamente facilitar el trámite de los procesos de Justicia
y Paz, de suyo estancados por la complejidad que revisten, propiciando que los desmovilizados aporten al Estado y a las
víctimas la información completa y veraz sobre los delitos cometidos”294. (Ver entre otras decisiones de la Corte Suprema de
Justicia, rad. 29560 del 28 de mayo de 2008, 30120 del 23 de julio de 2008 y 31582 del 22 de mayo de 2009).
295
Corte Suprema de Justicia, Sentencia del 24 de marzo de 2010, M.P. Dr. José Leonidas Bustos Martínez, radicado 33665.
296
La Sala considera apropiado recordar que la Fiscalía presentó hechos imputados a HÉBERT VELOZA que correspondían a
su militancia como comandante del Bloque Calima, sin embargo por unidad temática el Tribunal consideró adecuado
declarar que estos hechos deben ser análisados contextualmente, con el fin de identificar patrones de conducta y así
articular casos singulares, que permitan la efectividad de la priorización a cargo de la Fiscalía.
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B. Requisitos de Elegibilidad297

324. Los requisitos de elegibilidad, consignados en el artículos 10 de la Ley 975 de


2005, son exigencias para acceder a los beneficios que en ella se establecen, es decir,
“son condiciones de accesibilidad”298, que de conformidad con lo dispuesto en el artículo
2º ibídem, son aplicables a aquellas personas que “…vinculadas a grupos armados
organizados al margen de la ley, como autores o partícipes de hechos delictivos
cometidos durante y con ocasión de la pertenencia a esos grupos, que hubieren decidido
desmovilizarse y contribuir decisivamente a la reconciliación nacional”.

325. Los requisitos de elegibilidad son dinámicos, por ende pueden ser sujetos a
modificación, de análisis paulatino durante todas las etapas del proceso, no se estiman
satisfechos en un solo instante y declarado su cumplimiento, no mantienen vocación de
permanencia para todos los momentos subsiguientes del trámite. Así, en el presente caso,
se analizó su cumplimiento en la decisión de control de legalidad y ahora en este fallo de
sentencia se verificará su existencia, con miras a decidir sobre la alternatividad de la
pena.299

326. HÉBERT VELOZA GARCÍA concurrió a este proceso de manera voluntaria300, tal y
como lo ratificó en diligencia de versión libre, por tanto, adquirió el compromiso de
satisfacer plenamente los requisitos de elegibilidad, reparar y confesar las conductas
punibles que cometió durante su permanencia y militancia en el grupo armado ilegal301.

327. HÉBERT VELOZA GARCÍA, en su condición de comandante del Bloque Bananero,


se desmovilizó de manera colectiva, de modo que conforme al artículo 10 de la Ley 975
de 2005, los requisitos de elegibilidad que debe satisfacer son los siguientes:

(…)

297
Exposición de la Fiscal Delegada en la audiencia de control de legalidad, sesión del 9 de marzo de 2011.
298
Corte Constitucional, Sentencia C-370 de 2006, numeral 6.2.4.1.18
299
Artículo 29 ley 975 de 2005.
300
“…la materia prima con la cual se construyó la esperanza de un mejor país que subyace en la filigrana de la Ley de
Justicia y Paz, es la voluntad de sus intervinientes, de tal forma que decidan escoger el camino de la paz en vez del
sendero de la guerra; la voluntad, esa facultad intelectual en la que se concentra tanto la fuerza del querer como una
motivación, esa tan importante para el devenir social que se identifica con la realización de la paz y la convivencia,
presupuestos del orden, la seguridad, el progreso y la justicia.” Corte Suprema de Justicia, Segunda instancia, rad. 34423
del 23 de agosto de 2011, M.P.: Dr. José Leonidas Bustos Martínez.
301
“En efecto, según las disposiciones del bloque de constitucionalidad, el ocultamiento, el silencio o la mentira sobre los
delitos cometidos, no pueden ser las bases de un proceso de negociación que se ajuste a la Constitución. Sin embargo, el
relato genuino y fidedigno de los hechos, acompañado de investigaciones serias y exhaustivas y del reconocimiento de la
dignidad de las víctimas, pueden ser las bases de un proceso de negociación en el cual, incluso, se admita
constitucionalmente la renuncia a la imposición o aplicación plena de las penas que el derecho penal ordinario ha
establecido, inclusive para los delitos que la humanidad entera ha considerado de la mayor gravedad.” Corte Constitucional,
Sentencia C-370 de 2006. Numeral 6.2.2.1.7.11.
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a) Que el grupo armado organizado de que se trata se haya desmovilizado y


desmantelado en cumplimiento de acuerdo con el Gobierno Nacional.
b) Que se entreguen los bienes producto de la actividad ilegal.
c) Que el grupo ponga a disposición del Instituto Colombiano de Bienestar
Familiar la totalidad de menores de edad reclutados.
d) Que el grupo cese toda interferencia al libre ejercicio de los derechos
políticos y libertades públicas y cualquiera otra actividad ilícita.
e) Que el grupo no se haya organizado para el tráfico de estupefacientes o
el enriquecimiento ilícito.
f) Que se liberen las personas secuestradas, que se hallen en su poder. “

Proceso de desmovilización del Bloque Bananero

328. La desmovilización y desmantelamiento del Bloque Bananero, fue acreditado por la


Fiscal Delegada mediante la certificación dirigida al Fiscal General de la Nación, por parte
del Alto Comisionado para la Paz de la Presidencia de la República, mediante oficio 0F108-
00005219/AUV 12300 del 28 de diciembre de 2007,302 en el que se indicó que en el marco
del proceso de paz que se adelantaba con las AUC, el 15 de julio de 2003, se suscribió el
“Acuerdo de Santafé de Ralito para contribuir a la paz de Colombia”, en el que se definió
como propósito avanzar hacia su reincorporación a la vida civil y en consecuencia
desmovilizar a la totalidad de sus miembros.

329. HÉBERT VELOZA GARCÍA, fue reconocido como miembro representante del Bloque
Bananero, mediante Resolución Presidencial 233 del 2 de noviembre de 2004, y en
Resolución 246 del 19 del mismo mes y año, señaló como zona de ubicación temporal la
finca “La Macarena”, en el corregimiento “El Dos” del municipio de Turbo (Antioquia), sitio
en donde se realizó la desmovilización colectiva el 25 de noviembre de 2004, de 447
integrantes del grupo armado ilegal.

Armas entregadas por el Bloque Bananero

330. Una de las maneras a través de las cuales se confirma el desmantelamiento del
grupo armado ilegal que se desmovilizó es la entrega de las armas que estaban en su
poder. Es así como el Bloque Bananero entregó en los actos de desmovilización
colectiva303, un total de 257 armas largas, discriminadas así: 245 fusiles, 6 escopetas, 4
subametralladoras, 2 carabinas. Así mismo, hizo entrega de 38 pistolas y 44 revólveres,
para un total de 82 armas cortas; 2 ametralladoras, 6 lanzagranadas y 4 morteros, para

302
Visible a folio 13, Carpeta Requisitos de Elegibilidad.
303
Las armas de Bloque Bananero fueron entregadas en el Batallón de Servicios No. 17 de Carepa (Antioquia), así obra en
el acta 1260 del 27 de noviembre de 2004.
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un total de 12 armas de acompañamiento; 234 granadas y 41.016 cartuchos de munición


de diferente calibre. Además, se registró la entrega de 370 camisas y 354 pantalones
camuflados.

331. Finalizando el año 2007, en el municipio de Sogamoso (Boyacá), se celebró la


ceremonia de fundición de 18.000 armas entregadas a lo largo del proceso de
desmovilización de las Autodefensas Unidas de Colombia, así quedó registrado en el libro
de Memoria Fotográfica del Proceso de Paz con las Autodefensas304, de la oficina del Alto
Comisionado para la Paz, en donde se observan fotografías con miembros del Gobierno
como el Alto Comisionado para la Paz, Fiscal General de la Nación, de la CNRR, el
Secretario General de la MAPP/OEA, Ministro de Defensa, Representantes de la Iglesia y
del Cuerpo Diplomático acreditado en Colombia305.

Entrega de bienes

332. Para que el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA acceda al beneficio de la pena
alternativa establecida en la Ley 975 de 2005, es necesario que el grupo desmovilizado al
cual pertenecía, es decir, el Bloque Bananero, haya hecho entrega de todos los bienes con
los que contaba, incluyendo aquellos que fueron producto de la actividad ilícita y los
bienes de origen lícito de sus integrantes, a través de los cuales se garantice la reparación
integral de las víctimas en su modalidad de restitución e indemnización306.

333. Al estudiar la exequibilidad de la Ley 975 de 2005, la Corte fue clara en señalar
que incluso en los procesos de justicia transicional, como este, a través de los cuales se
enfrentan violaciones masivas y sistemáticas de derechos humanos y ante un universo
enorme de víctimas directas e indirectas, persiste el principio general según el cual, quien
causa un daño debe repararlo.

304
Tomo III 2002-2007, páginas 100-102.
305
En audiencia de legalización de cargos del 8 de marzo de 2011, la Fiscal Delegada informó a la Sala que “la MAPP/OEA
abrió el container donde fueron guardados estos elementos y se procedió a hacer el conteo e identificación plena de cada
uno de los mismos, por cuenta del grupo GIAT destinado para tal fin. El GIAT tomó las fotografías de las armas y los
números de identificación de éstas en formato digital, para compilarlas luego en un CD. Se determinó que por cuestiones de
seguridad y de higiene, era recomendable la destrucción del material explosivo y del material de intendencia. Este
procedimiento se realizó con la anuencia del Gral. Latorre en las instalaciones de la brigada. El GIAT utilizó el procedimiento
del Magnaflux para casos especiales donde era indispensable establecer el número de registro del arma y su importador,
aún cuando éste aparentemente había sido borrado. Se levantó el acta correspondiente el día sábado 27 de noviembre, la
cual se acompañó de un acta complementaria específica para la destrucción del material de intendencia y explosivo. Al acta
se le anexó un CD con las fotografías de las armas y de sus números de identificación. Cada firmante se quedó con una
copia de este material”.
306
Corte Constitucional, Sentencia C-370 de 2006 del 18 de mayo de 2006, M.P. Manuel José Cepeda.
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334. Siguiendo este precepto es necesario identificar si existe un nexo de causalidad


entre la actividad del grupo armado ilegal, en este caso el Bloque Bananero, y los daños
ocasionados individual y colectivamente por esta estructura delictiva, por lo que aunque la
responsabilidad penal continúa siendo individual, la responsabilidad civil derivada del
hecho punible admite el elemento de la solidaridad, “…no solamente entre los penalmente
responsables sino respecto de quienes por decisión judicial hayan sido calificados como
miembros del grupo armado específico, entendido como frente o bloque al que se impute
causalmente el hecho constitutivo del daño...” 307

335. El artículo 54 de la Ley 975 de 2005, establece que el Fondo para la reparación de
víctimas estará integrado por todos los bienes o recursos que a cualquier título se
entreguen por las personas o grupos armados organizados ilegales, por recursos
provenientes del presupuesto nacional y donaciones en dinero o en especie, nacionales o
extranjeras, es decir, que la satisfacción del principio de reparación exige la observancia
de un orden en la afectación de los recursos, así los primeros llamados a reparar son los
perpetradores de los delitos, en solidaridad con el bloque o frente.

336. Sin embargo, lo anterior no significa que aquéllos integrantes del frente o bloque
que se desmovilicen colectivamente y no cuenten con recursos propios para la reparación
económica de las víctimas, no puedan acceder al proceso de justicia y paz, por el
contrario, la invitación del Gobierno Nacional para la desmovilización y reincorporación a
la vida civil de miembros de grupos armados ilegales, supone la participación de personas
que en muchos casos no cuentan con bienes para entregar al fondo de reparación, de ahí
la responsabilidad subsidiaria y residual del Estado en la reparación a las víctimas,
condición propia de un proceso de justicia transicional.

337. Dentro de los derechos de las víctimas, en el proceso de la Ley 975 de 2005, está
la realización del derecho a la reparación integral, que comprende: “las acciones que
propendan por la restitución, indemnización, rehabilitación, satisfacción; y las garantías de
308
no repetición de las conductas…” . Lo anterior significa, que existen otras modalidades
o formas de reparación, distintas a la indemnización, a través de las cuales los
desmovilizados pueden cumplir con las víctimas, como son: la satisfacción de la verdad, a
través del relato de los hechos de la manera más amplia posible, precisando las
circunstancias de tiempo, modo y lugar, autores y móviles que propiciaron las conductas

307
Ibídem.
308
Artículo 8 Ley 975 de 2005.
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punibles; participar activamente en la reconstrucción de la memoria histórica, con lo cual


se satisface el derecho colectivo a saber qué, cómo y por qué se presentaron hechos
delictivos de impacto generalizado, para lo cual deben relatar lo acontecido con el
accionar del grupo armado ilegal, las formas de financiación, estructuras, modos
operandi, y en general las características del accionar del Bloque que se desmanteló y
desmovilizó, entre otros309.

338. Queda claro entonces, que la entrega de bienes al Estado, por parte de los
desmovilizados, para la reparación de las víctimas, no es el único acto de reparación al
que se obligan los postulados en el proceso de justicia y paz, pues deben cumplir con
otras medidas como las de satisfacción, entre las cuales están: la declaración pública que
restablezca la dignidad y el buen nombre de la víctima y de las personas vinculadas con
ella; el reconocimiento público de haber causado daño (material e inmaterial) a las
víctimas, la declaración pública de arrepentimiento, la solicitud de perdón dirigida a las
víctimas y la promesa de no repetir tales conductas punibles; la ayuda eficaz para la
localización de personas secuestradas o desaparecidas y de los cadáveres de las víctimas
con la respectiva colaboración para identificarlos y lograr inhumaciones según las
tradiciones familiares y comunitarias310.

339. Como miembro representante de los Bloques Bananero y Calima, HÉBERT VELOZA
GARCÍA, ofreció varios bienes para la reparación de las víctimas, sobre los cuales pesan
medidas cautelares de embargo y suspensión del poder dispositivo, ordenadas por el
Magistrado de Control de Garantías del Tribunal Superior de Medellín, los cuales fueron
discriminados por la Fiscal 25 Delegada ante el Tribunal, Sub-Unidad Élite de Persecución
de bienes para la reparación de las víctimas, doctora Liliana Patricia Donado Sierra,
durante la audiencia de incidente de identificación de las afectaciones causadas a las
víctimas311, en la que además indicó los bienes de los cuales la Sala podrá extinguir el
derecho de dominio, tema que será abordado en un apartado diferente de esta decisión.

PREDIOS RURALES
Ciudad y/o municipio Descripción del bien inmueble
Corregimiento Sevilla, San Marino: folio de matrícula inmobiliaria 029-0000662.
Municipio Ebéjico (Antioquia) Hicoteas: folio de matrícula inmobiliaria 029-0000663.
El Saladito: folio de matrícula inmobiliaria 029-0000664.
El Diamante: folio de matrícula inmobiliaria 029-0000665.
Lote de terreno: folio de matrícula inmobiliaria 029-0000666.
Lote La Pocuna: folio de matrícula inmobiliaria 029-0006152.

309
Corte Suprema de Justicia, Sentencia del 23 de agosto de 2011, M.P. Dr. José Leonidas Bustos Martínez, radicado 34423.
310
Artículo 44 Ley 975 de 2005.
311
Audiencia del 11 de marzo de 2013, sesión de la mañana. record 1:24:02.
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PREDIOS RURALES
Ciudad y/o municipio Descripción del bien inmueble
Peña Lisa: folio de matrícula inmobiliaria 029-0005400.
Vereda Salinas, Municipio de Predio Las Margaritas: folio de matrícula inmobiliaria 001-
Caldas (Antioquia) 195279.
Predio El Silencio: folio de matrícula inmobiliaria 001-79344.
Hacienda Hato Grande folio de matrícula inmobiliaria 001-
775837.

PREDIOS URBANOS
Ciudad y/o municipio Descripción del bien inmueble
Turbo (Antioquia) Carrera 20: folio de matrícula inmobiliaria 034-7047.

Envigado y Medellín Carrera 36 A No. 20 A sur 91, folio de matrícula inmobiliaria


(Antioquia) 001-356136.

340. Durante las diferentes audiencias que se han adelantado con HÉBERT VELOZA
GARCÍA, el postulado ha hecho alusión a los proyectos productivos que se implementaron
en la región del Urabá y Córdoba, cuyo objetivo principal era lograr la reintegración plena
a la vida civil de los desmovilizados. Sin embargo, según VELOZA GARCÍA el apoyo del
Gobierno fue mínimo, por tanto él y otros postulados crearon varios proyectos
productivos, con el fin de entregar las ganancias para la reparación de las víctimas; por
ejemplo una “secadora de yuca y maíz” y un proyecto de comercialización de ganado de
ceba estabulado.

341. Así mismo, el postulado hizo alusión a un predio en el cual se instaló una
camaronera con pozos y sistema de congelamiento, pero quien ahora posee el bien se
rehúsa a entregarlo, por tal razón se le solicitó a la Fiscalía que adelante los trámites
necesarios para que dicho bien haga parte del grupo de inmuebles entregados para la
reparación de las víctimas.

Entrega de Niños, Niñas y adolescentes (NNA) al Instituto Colombiano de


Bienestar Familiar (ICBF).

342. En cuanto al requisito establecido en el numeral 3º del artículo 10 de la Ley 975


de 2005, que se refiere a la obligación del grupo ilegal de poner a disposición del ICBF la
totalidad de los menores reclutados, se tiene que mediante oficio número 005893 del 19
de febrero de 2007, suscrito por la Subdirectora de Intervenciones Directas del ICBF, se
acreditó la entrega individual de siete NNA, pertenecientes al Bloque Bananero, ellos son:

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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

No. Nombres
1. Deicy Navales Durango
2. Héctor Eduardo Velásquez Canchila
3. José Ignacio Madera Flórez
4. José Luís Murillo Mosquera
5. Luz Amanda Chanci Mazo
6. Rafael Enrique Valderrama Hoyos
7. Yeison Yey Zurita Ramos

343. Por el material probatorio recaudado y presentado por la Fiscal 17 de Justicia y


Paz, al que ya se hizo alusión en la situación fáctica correspondiente al hecho 88; así
como por las manifestaciones de los desmovilizados y del comandante del extinto Bloque
Bananero312, esta Sala confirma que este requisito fue cumplido a cabalidad313.

Que el grupo haya cesado toda interferencia al libre ejercicio de derechos


políticos y libertades públicas, y cualquier otra actividad ilícita.

344. Sobre este punto, la Fiscal 17 Delegada, informó que HÉBERT VELOZA GARCÍA,
manifestó durante la diligencia de versión libre, que nunca tuvo injerencia en el ejercicio
ciudadano a elegir popularmente, menos aún después de la desmovilización.

345. Para establecer la veracidad de esta información, la Fiscal Delegada, ofició a las
diferentes autoridades del Estado, y obtuvo la siguiente información: (i) oficio 0816 del 19
de mayo de 2009, suscrito por Comandante del Departamento de Policía de Urabá, en el
que indica que luego de la desmovilización del Bloque Bananero, no ha tenido información
de que dicha estructura hubiese retornado a las armas por parte de sus integrantes para
continuar actividades delictivas en nombre de dicha organización ilegal; pero que algunos
integrantes de este grupo, “… continuaron realizando actividades delictivas de forma
individual y algunos de éstos de acuerdo a las informaciones se habrían vinculado a
organizaciones emergentes de índole criminal, concretamente a la hoy conocida banda
criminal de Urabá…”; (ii) oficio 5912 del 20 de junio de 2009, procedente de la XVII
Brigada en la cual hacen constar que la estructura del bloque bananero de las AUC, cesó
toda actividad ilícita después del 25 de noviembre de 2004; y (iii) oficio 0498 del 24 de
febrero de 2011, suscrito por el Director de Gestión Electoral, en el cual certificó que:
“…enviada su comunicación a las delegaciones departamentales del registrador Nacional
de Córdoba y Antioquia, NO se encontraron requerimientos o algún tipo de información,
referente a delitos contra los mecanismos de participación ciudadana, suscitados con

312
Versión libre del 9 de julio de 2008.
313
Lo anterior sin perjuicio de que a futuro nuevas investigaciones demuestren lo contrario, en cuyo caso, las instancias
judiciales y administrativas pertinentes realizarán las valoraciones jurídicas a las que haya lugar.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

posterioridad al 25 de noviembre de 2004 por los grupos armados al margen de la Ley.”


Teniendo en cuenta esta situación, la Sala concluye que este requisito se encuentra
cumplido.

Que el grupo no se haya organizado para el tráfico de estupefacientes o el


enriquecimiento ilícito.

346. En desarrollo de la audiencia de control de legalidad, la Fiscalía indicó que de las


labores de verificación realizadas en la zona del Urabá, ha podido documentar que el
Bloque Bananero, se creó como un grupo antisubversivo, pero que no fue ajeno al tema
de narcotráfico como fuente de financiación.

347. La Fiscalía presentó el informe de policía judicial 0081 del 24 de enero de 2010,
mediante el cual se indica que de fuentes no formales en la zona del Urabá, lograron
obtener dos documentos en los que se hace un compendio de entrevistas realizadas a
Carlos Castaño, uno de ellos titulado “Colombia Siglo XXI las Autodefensas y la Paz. Carlos
Castaño”, impreso por talleres Colombia Libre; en ellos se habla de la creación de las
ACCU, como respuesta forzosa a la agresión de la subversión y de la incapacidad del
Estado para reprimirla. Se dice que su nacimiento y creación tuvo origen en el conflicto
que vivía la zona del Urabá Antioqueño con la guerrilla. Además se hace alusión a un
comunicado a la opinión pública, del 17 de julio de 1998, en el que el estado mayor de las
ACCU le notifican al ELN que “…Si quieren ustedes que este conflicto se dirima en el
campo de batalla, entonces, ¡adelante señores! que aquí estaremos hasta la batalla final,
donde responderán por sus crímenes contra el pueblo colombiano.”314

348. Durante la audiencia de control de legalidad, la señora Fiscal presentó varios


documentos encontrados en la memoria USB que HÉBERT VELOZA, entregó a la
Fiscalía315, la cual pertenecía al señor Carlos Castaño, en uno de los escritos presentados,
se lee una comunicación fechada el 10 de noviembre de 2002, suscrita por Castaño y
dirigida a “Apreciados amigos comandantes de Autodefensa y compañeros de causa”, con
el siguiente aparte:

314
Libro: Colombia Siglo XXI las Autodefensas y la paz, impreso por Talleres de Colombia, diciembre de 199, pág. 79-80.
315
En diligencia de versión libre HÉBERT VELOZA, confesó haber participado en el homicidio de Carlos Castaño, y que luego
de su muerte obtuvo la memoria USB que él estaba utilizando en ese momento; en ésta memoria existen documentos que
hacen referencia a las desmovilizaciones y sus antecedentes; diferentes documentos que estaban siendo almacenados por
Carlos Castaño antes de su muerte; contiene además correos electrónicos; archivos de comunicaciones que le escribió a
Ernesto Báez, a Fredy Rendón Herrera alías “El Alemán” y a diferentes comandantes de las AUC.
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HÉBERT VELOZA GARCÍA

“No podemos desconocer que el narcotráfico entró a las AUC, y así como fue gestor
de nuestro crecimiento militar y en muchos casos, lo vimos hasta los más idealistas
como un método válido de fortalecimiento antisubversivo; es inocultable el daño que
nos ha causado, diferente a lo que sucedió con la guerrilla; ella sí supo capitalizarlo
sin hacerse evidentemente narcotraficantes sus jefes, pues en las Farc no hay
reconocidos capos del narcotráfico sino comandantes guerrilleros antiguos que ahora
resultan involucrados en el narcotráfico; y aunque tal vez las tengan, no se les conoce
enormes fortunas personales en latifundios y suntuosidades urbanas. Este caso en las
AUC es distinto e inocultable. Y aquí viene el más grande de los errores que se ha
cometido en las AUC, la oportunidad que se le dio a los grandes capos de la droga de
manipular nuestra organización hasta casi someter a varios de los grupos de las AUC
mediante fichas claves que se mueven en una frontera difusa entre el narcotráfico y la
autodefensa o la defensa del narcotráfico…”

349. Estos elementos materiales de prueba316, las verificaciones adelantadas durante el


programa metodológico, los antecedentes que se han presentado a lo largo del proceso
sobre el origen de los bloques y frentes de las AUC y de otros grupos armados que hacían
presencia en la zona del Urabá, le permiten a la Fiscalía afirmar que el Bloque Bananero
conformado por los frentes “Árlex Hurtado” y “Turbo”, que dependían de las ACCU, tuvo
un origen antisubversivo y no fue creado para el tráfico de estupefacientes o para el
enriquecimiento ilícito, pero sin desconocer que recursos provenientes de actividades de
narcotráfico fueron destinados a la financiación de esta estructura paramilitar,
entendiendo como tal, la compra de armas, uniformes, logística y pago de nóminas.

350. Para decidir sobre el presente requisito, la Sala ha considerado el contexto y los
antecedentes de creación, desarrollo y alcances del grupo armado ilegal como
contrainsurgente; es decir, las ACCU y el Bloque Bananero, según la información
presentada por la Fiscalía, fueron creados como “grupos armados ilegales” que buscaban
hacerle frente a las “guerrillas de izquierda” que estaban en la región de Urabá, empero,
se pudo comprobar que utilizaron dinero proveniente del narcotráfico para financiar la
estructura armada.

351. Finalmente, la señora Fiscal indicó a la Sala, que si bien hasta el momento de la
presente audiencia de control de legalidad, ninguno de los desmovilizados del Bloque
Bananero ha sido condenado por el delito de narcotráfico, y HÉBERT VELOZA GARCÍA317,
quien desmovilizó el Bloque Bananero, fue extraditado a los Estados Unidos de América,
316
Otro de los argumentos presentados por la Fiscalía para demostrar que este bloque nació como un grupo antisubversivo,
es la versión libre rendida el 27 de mayo de 2008, por el desmovilizado Danis Daniel Sierra Martínez alías “Samir”, quien
fuera el segundo comandante del frente V de las FARC.
317
Al respecto HÉBERT VELOZA indicó que: “…mi extradición no es por ser narcotraficante, sino por haber cobrado
impuesto al narcotráfico en las zonas en donde tenía injerencia, no se puede decir de que los grupos fueron creados para el
narcotráfico, ya que cuando se fundó el grupo bananero yo era patrullero y no tenía injerencia en la finanzas…”, manifestó
además que nunca va a reconocer que fue narcotraficante. El origen fue antisubversivo y se vieron en la necesidad de
recurrir al narcotráfico para financiarse, porque “la guerra es muy costosa”. Así mismo, dijo que el otro medio de
financiación fueron los ganaderos, empresarios y comerciantes de la zona. (Audiencia de control de legalidad, sesión del 9
de marzo de 2011).
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precisamente para que responda en juicio por el delito de narcotráfico; ni lo uno ni lo otro
le permite a la Fiscalía afirmar que ese grupo armado se haya organizado para el tráfico
de estupefacientes.

352. Conforme a las anteriores circunstancias, hasta el momento de emitir esta


sentencia parcial, se da por cumplido el requisito en cuestión, pues queda claro para la
Sala que si bien la actividad del narcotráfico por sus desfasadas ganancias, se constituyó
en una importante fuente de ingreso para los diversos grupos armados ilegales, hasta
este momento no se ha probado, que el Bloque Bananero se hubiera conformado con la
finalidad de traficar estupefacientes o para el enriquecimiento ilícito de sus integrantes.318

Que se liberen las personas secuestradas, que se hallen en su poder.

353. En cuanto a la liberación de personas secuestradas y el suministro de información


relacionada con personas desaparecidas, señala la representante de la Fiscalía que las
labores de verificación han corroborado lo dicho por miembros del Bloque Bananero,
quienes afirmaron que al momento de la desmovilización no tenían secuestrados en su
poder; de igual forma se tiene que el postulado HÉBERT VELOZA, como ex comandante
de esta estructura armada ilegal ha suministrado información que ha permitido adelantar
las diligencias de exhumación logrando la identificación de múltiples víctimas que se
encontraban desaparecidas319.

354. En la zona del Urabá se encuentran desaparecidas 754 personas


aproximadamente, pero teniendo en cuenta algunos testimonios de ex miembros del
Bloque Bananero, así como por la información que las víctimas han proporcionado, la
Fiscalía General de la Nación se han adelantado acciones, a través de la Unidad Nacional
de Justicia y Paz, logrando la exhumación de más de un centenar de restos humanos, de
los cuales al momento de la audiencia de control de legalidad se habían entregado el 80%
de estos plenamente identificados a los familiares, los demás están pendientes del
resultado de examen genético.

318
Lo anterior sin perjuicio de que a futuro nuevas investigaciones demuestren lo contrario, en cuyo caso, las instancias
judiciales y administrativas pertinentes realizarán las valoraciones jurídicas a las que haya lugar.
319
De las exhumaciones realizadas un 45% aproximadamente son personas que se han encontrado atadas y con señales de
desmembramientos.

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355. Por lo anterior se concluye que este requisito se encuentra satisfecho a la fecha,
sin perjuicio de toda la información que las investigaciones muestren a futuro y que sean
materia de nueva valoración.

C. Elementos históricos y contextuales para comprender el caso de Urabá

356. Presentación. El objetivo principal de incluir un contexto histórico y socio político


en las decisiones, es hacer un recorrido sobre las características generales de una
determinada región colombiana, en la cual se originaron, crecieron y expandieron las
diferentes estructuras ilegales pertenecientes a las Autodefensas Unidas de Colombia, en
este caso el Bloque Bananero. Aunque se tienen en cuenta elementos historiográficos, el
alcance de este tipo de trabajo no pretende agotar los referentes de reconstrucción de
memoria histórica del conflicto armado en la región de Urabá. La Sala considera que el
mayor aporte es encontrar argumentos que permitan analizar el fenómeno de macro y
micro criminalidad, los modus operandi y patrones delictivos, así como las dinámicas en
las cuales se desplegó la estructura criminal comandada por HÉBERT VELOZA GARCÍA,
alias “HH”320.

357. Igualmente el contexto permite identificar elementos materiales y conceptuales


para determinar las formas a través de las cuales se organizó la estructura armada ilegal,
se diseñaron políticas comunes, se impartieron órdenes y así comprobar hasta qué punto
éstas y aquellas estuvieron enmarcadas en el accionar del grupo o no. Lo que en últimas
significó la ocurrencia de actos criminales de la mayor gravedad sobre la población civil de
Urabá321.

358. Introducción. La Sala quiere reafirmar que la elaboración de contextos es una


“buena práctica” que se ha desarrollado por parte de la Magistratura de Justicia y Paz,
que contribuye en la construcción de la verdad judicial en el marco del proceso
transicional que desarrolla el país, esto con el fin de presentar determinadas acciones
macro criminales de grupos paramilitares en diferentes regiones del país y de este modo,

320
Este contexto es producto de un trabajo de organización del dossier presentado por la Fiscalía 17 de Justicia y Paz,
complementado con fuentes historiográficas primarias y secundarias, a través de las cuales se procuró reconstruir la historia
material de los hechos delictivos que cometió el Bloque Bananero, al mando de HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias “HH”, en la
región del Urabá colombiano.
321
PINEDA, Hugo, Atención psicojurídica a víctimas en el marco de la Ley 975 de 2005: una experiencia desde el trabajo de
ONG, Tesis de grado, Maestría en Derecho (énfasis investigación), Universidad Nacional de Colombia, Facultad de Derecho,
Ciencias Políticas y Sociales, febrero de 2012.
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las siguientes sentencias de cada bloque puedan sean más ágiles de desarrollar, al tener
el contexto general claro322.

359. Para la Sala, entender algunos de los elementos de la violencia paramilitar implica
identificar y analizar las dinámicas macro (de orden nacional), meso (de orden regional) y
micro (de orden local), de las trayectorias que siguieron los grupos paramilitares
desmovilizados323. Es decir, los grupos armad os ilegales, como las estructuras
paramilitares, operaron en territorios localizados y concretos, pero también tuvieron
lógicas regionales, dinámicas de expansión y búsquedas u objetivos distintos que
involucraron órdenes geográficos diversos que la Sala tuvo en cuenta.

360. La construcción de contextos ha sido reconocida también a través de


recomendaciones de organizaciones internacionales como la Organización de Naciones
Unidas (ONU), quienes han sostenido que las estrategias de persecución judicial en
contextos transicionales, es una perspectiva de análisis pertinente y útil para reconstruir
el funcionamiento general de aparatos organizados armados de poder, identificar los
máximos responsables, y establecer las relaciones existentes entre el funcionamiento de
la maquinaria de poder y la comisión de crímenes de guerra324.

361. Sumado a lo anterior, la Sala considera relevante señalar que los contextos sirven
para identificar factores y tendencias de los fenómenos socio-históricos, en cuyo marco
adquieren plena significación los relatos o las versiones de los actores. En este sentido, si
bien los elementos contextuales no permiten explicar con totalidad y abarcar con plenitud
los hechos criminales y las víctimas de dichas actuaciones, sí permiten comprender mejor
la intencionalidad de parte del grupo ilegal de violentar a cierto tipo de comunidades o
grupos específicos (políticos, sexuales, sindicales, económicos), y cómo entendía su
funcionamiento y su relación con los civiles y con las “personas” o “grupos” al margen de
la ley que decía atacar.

362. La Sala quiere reiterar que las víctimas resultantes del accionar paramilitar no
obedecen a hechos aislados, inconexos o a una violencia de criminalidad común, todo lo
contrario, esta Magistratura ha podido constatar en las múltiples audiencias, que las

322
Véase Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá, Sentencia en contra de Fredy Rendón Herrera, alias “El
Alemán”, rad. 2007 82701, M.P. Uldi Teresa Jiménez López, Bogotá, 16 de diciembre de 2011, 5.3. Antecedentes, historia
de los actores y la sociedad civil. Un intento de realización del derecho a saber, párrafos 175-185.
323
Véase Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá, Sentencia en contra de Orlando Villa Zapata, rad. 2008 83280,
M.P. Dr. Eduardo Castellanos Roso, Bogotá, 16 de abril de 2012, párr. 91.
324
Véase Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Instrumentos del Estado de
derecho para sociedades que han salido de un conflicto. Iniciativas de enjuiciamiento, Nueva York-Ginebra, doc.
HR/PB/06/4, 2006 (disponible en: www.ohchr.org/Documents/Publications/RuleoflawProsecutionssp.pdf).
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víctimas del proceso paramilitar, fueron consecuencia de la intencionalidad, racionalidad y


estrategia del grupo ilegal en una zona determinada o mediante las líneas generales,
instrucciones u órdenes directas que desde los comandantes se profería, lo cual se ha
plasmado en las diferentes decisiones de la Sala.

363. Por tanto, esta Sentencia realiza un análisis de ciertos tipos de victimización que
fueron comunes en la actuación del Bloque Bananero en la región del Urabá, que
demuestran cómo se afectaron las comunidades que vivían en ciertas zonas, producto de
los señalamientos y acusaciones de los paramilitares realizados en contra de un número
importante de personas o asociaciones, estigmatizados como “colaboradores” o
“miembros” de grupos insurgentes, lo cual resulta abiertamente injustificable y fuera del
marco constitucional y legal del Estado Colombiano.

364. Siguiendo esa misma línea argumentativa, se hará énfasis en cómo algunos
miembros de sindicatos y miembros o simpatizantes del partido político Unión Patriótica o
del Partido Comunista fueron victimizados por el grupo paramilitar, en una región que ha
sido considerada como zona de presencia histórica de personas afines a ideologías
políticas de izquierda. De igual manera el grupo ilegal realizó acciones violentas, atacando
a la población civil de forma masiva e indiscriminada, las cuales fueron “aprovechadas”
por sectores políticos para evitar perder su poder, así como se pudo identificar que
agentes o miembros de la Fuerza Pública325 fueron mencionados en diversos hechos
ilícitos, como presuntos aliados de los paramilitares; finalmente, también en las versiones
de los postulados se puso de presente que su accionar delictivo benefició a grupos o
sectores económicos ligados principalmente a la industria del banano, todo ello bajo
argumento irracional e ilegal de “pacificar” la región a través de las acciones ilícitas de los
grupos paramilitares.

365. En la presente decisión se realizó un análisis jurídico, sociológico, criminológico e


histórico, que permitió a la Sala comprender y reafirmar que: i) los crímenes cometidos
por los grupos armados ilegales, deben comprenderse dentro de un contexto general de

325
Así, en la sentencia contra el ex general Rito Alejo del Río, se aduce que no solo hubo aquiescencia o permisividad, sino
que se formó una estructura paralela a la legal de composición mixta “donde paramilitares y miembros activos de la Fuerza
Pública creaban las estrategias conjuntamente en la región de operación de la Brigada XVII (que cubre la Urabá), dentro de
los cuales el general retirado Del Rio Rojas “era uno de los encargados de diseñar la estrategia y los operativos junto con
aquellos [los comandantes paramilitares], así como asignar responsabilidades a los comandantes de segunda línea
(capitanes y tenientes, así como paramilitares como Casarrubia, “Yunda”, etc.) quienes a su vez transmitían las órdenes a
los comandantes de los grupos operativos o ejecutores… todo lo cual demuestra una verdadera organización criminal”.
Véase: Sentencia contra Rito Alejo del Río Rojas, rad. 2009-063, 23 de agosto de 2012, proferida por el Juzgado Octavo
Penal Especializado de Bogotá.
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conflicto armado326; ii) los grupos ilegales llamados de autodefensa o paramilitares, no


fueron homogéneos ni tuvieron la misma directriz o comandancia en el orden nacional, de
ahí se deduce que se debe crear una historia nacional de los grupos paramilitares, pero
también incluir los antecedentes y surgimientos de orden local y las lógicas regionales327;
y (iii) la utilización del término “tipo” o “modelos” de autodefensa y paramilitarismo,328 no
pretende exhortar o señalar alguna característica ejemplar o positiva en torno al tema,
todo lo contrario, el interés es revelar que fueron ciertos rasgos de la violencia macro
criminal ejercida, sus formas de operación (modus operandi), y sus estrategias e
imbricaciones con poderes locales lo que generó que pudieran ser consideradas dentro de
los grupos paramilitares como formas exportables o replicables a otros lugares del país.

366. Como se verá con detalle, el estudio del “modelo Urabeño del paramilitarismo” que
se realiza en esta sentencia, resulta relevante por su alta producción de violencia, su
capacidad de servir a gremios locales, su enorme estructura de financiación tanto de
economías legales como ilegales y su obtención de armamento por su posición
geográfica; pero sobre todo por develar las estrategias crueles, inhumanas y de barbarie
(fomentadas desde sus mismas escuelas de entrenamiento), lo que las hizo un modelo
considerado como “replicable” dentro de otras estructuras ilegales del paramilitarismo.

367. Lo que para la historia nacional está representado en un resultado nefasto en las
diferentes regiones donde fue replicado (por otras estructuras desconectadas
orgánicamente de las ACCU) o exportado, es decir, en los casos donde se usaron
hombres, instructores y comandantes de las mismas estructuras de Urabá en otras
regiones del país: casos Meta (región Mapiripán), Bloque Metro, Oriente antioqueño,
Bloque Calima, Nudo de Paramillo, Bajo Cauca Antioqueño, y gran parte de la Costa
Caribe y Norte de Santander, entre otros.

326
La existencia de un conflicto armado y el contexto general de violencia en el país operado por grupos armados al margen
a la ley no se abordará con profundidad en la presente Sentencia toda vez que ha sido ampliamente expuesto en decisiones
previas de la Sala de conocimiento de Justicia y Paz. Véase entre otras: Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá,
Sentencia contra Edgar Ignacio Fierro Flores, rad. 200681366, 07 de diciembre de dos mil once 2011, M.P. Léster María
González Romero; Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá, Sentencia en contra de Fredy Rendón Herrera, rad.
2007 82701, M.P. Uldi Teresa Jiménez López, Bogotá, 16 de diciembre de 2011; Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de
Bogotá, sentencia contra postulado José Barney Veloza García, rad. 2006 80585 M.P. Uldi Teresa Jiménez López, 31 de
enero 2012; Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá, Sentencia en contra de Orlando Villa Zapata, rad. 2008
83280, M.P. Dr. Eduardo Castellanos Roso, Bogotá, 16 de abril de 2012.
327
En su intervención, el Dr. Gustavo Salazar, abogado y magister en Ciencia Política y antiguo colaborador del
Observatorio Presidencial de Derechos humanos y DIH, en calidad de experto invitado por la Sala, resaltó la importancia de
los elementos contextuales locales y regionales para comprender no solo el surgimiento sino también la dinámica
(movimientos, estrategias, lógicas de la guerra, etc.). Véase: audiencia control legal y formas de cargos contra Víctor Julio
Díaz, Henry Ardila, Alexander Uribe, Omar Sosa y Germán Oswaldo Padilla, Frente Fidel Castaño, sesión de audiencia del 4
de septiembre de 2012.
328
En el control legal y formal de legalidad contra Ramón Isaza y otros de los comandantes de las Autodefensas
Campesinas del Magdalena Medio, se expuso con amplio detalle el llamado “Modelo de Puerto Boyacá” de los años ochenta
o lo que también se conoció como “Modelo de Magdalena Medio”. Véase: Sala de Justicia y Paz, Tribunal superior de
Bogotá, Control de legalidad Ramón María Isaza Arango y otros, 5 de octubre de 2012, rad. 2007-82855, M.P. Eduardo
Castellanos
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368. En esta Sentencia, la Sala reafirma las consideraciones que ha elaborado sobre el
contexto nacional del paramilitarismo y que están contenidas en otras providencias
precedentes a ésta, pero a su vez, amplía algunos elementos del antecedente inmediato
de las estructuras de las llamadas Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU)
que conformaron en la zona de Urabá en el año 1994, lo que en esta sentencia se
conoce como Bloque Bananero (nombre artificial puesto hacia el final de su operación, en
realidad siempre operaron como ACCU).

369. Para ello, la Sala retomará de forma breve cuáles fueron los antecedentes de las
ACCU y cómo entraron a la región de Urabá, primero esporádicamente desde fines de los
años ochenta, y luego con un grupo permanente, con lo que se conocería como los
grupos “Escorpiones”, “Los 13” y “Los güelengues”, estructuras primigenias de los frentes
Turbo y “Árlex Hurtado” de las AUC en la región. Se expondrá como antecedente
importante el surgimiento del grupo de Fidel Castaño, que luego sería retomado por sus
hermanos Vicente y Carlos Castaño Gil.

370. Igualmente se presentará el proceso de consolidación y expansión de los grupos


paramilitares en Urabá (contexto regional), también expondrá en detalle la caracterización
de los frentes “Árlex Hurtado” y “Turbo” –los cuales solamente en la víspera de la
desmovilización comenzaron a denominarse mediante un artificial nombre común: Bloque
Bananero de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC)–, conforme a las principales
categorías de análisis que aparecen en el Protocolo de presentación de prueba en la
audiencia de control de legalidad, cuyo examen orientó la realización de las audiencias de
control de legalidad de los cargos en contra del postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias
“H.H.”

371. Por otro lado, la Sala hará consideraciones relacionadas con la victimización de dos
grupos especiales: los sindicatos en la región de Urabá y los miembros de la Unión
Patriótica, partido político que fue objeto de una violencia masiva y que prácticamente fue
extinguido en las zonas de operación de este grupo ilegal. De ahí que la Sala haga un
análisis teniendo en cuenta no sólo el contexto local sino también algunas reflexiones de
orden nacional de cómo fue este tipo de violencia y cómo se afectaron las libertades
individuales de sus miembros, pero también la afectación a sus libertades colectivas como
asociación colectiva de tipo social o política.

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372. Una conclusión que saca la Sala respecto al accionar del Bloque Bananero,
siguiendo las manifestaciones del postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, es que su proceso
de “selección” de víctimas, en la mayoría de los casos, se limitaba a recibir información de
oídas o señalamiento de personas “confiables”, desmovilizados de grupos ilegales o de
agentes del Estado, respecto a la condición o situación de un ciudadano, sobre el cual
recaían acusaciones de pertenecer a un grupo guerrillero con presencia en la región o ser
“delincuente”, luego de lo cual se montaba un “operativo” para asesinarlo o lesionarlo de
forma grave. Igual ocurría con los sindicalistas329, simpatizantes o miembros de la Unión
Patriótica o de un movimiento social de izquierda. Esto denota un carácter altamente
sistemático y generalizado en el caso de los miembros de los sindicatos, y una intención
de destruir el grupo político de la Unión Patriótica, lo que se puede conocer como una
expresión clara de genocidio de carácter político.

373. Según ha podido revisar la Sala, en algunas decisiones de tribunales


internacionales y siguiendo algunas de sus buenas prácticas y aprendizajes, uno de los
propósitos de las sentencias es realizar una orientación explicativa y clara para las
víctimas y la sociedad en general sobre los hechos criminales y sus responsables. Razón
por la cual se tratará en lo posible de evitar la terminología técnica innecesaria, explicar
de la forma más clara los conceptos teóricos que se incluyen para analizar las dinámicas
de la violencia y en general, que la sentencia se oriente por preguntas que ayuden a
ubicar al lector. Se espera con ello contribuir, en términos de esclarecimiento judicial e
histórico, a la verdad de estos hechos en particular, pero también, aportar al gran relato
que se está creando en el proceso de Justicia y Paz en clave de construcción de verdad
judicial e histórica.

El contexto de la región de Urabá

374. El Urabá Antioqueño se extiende hasta la frontera con Panamá, incluyendo el Golfo
de Urabá, donde desemboca el río Atrato, en el noroeste del país. De esta región hacen
parte los municipios de Arboletes, San Juan de Urabá, San Pedro de Urabá, Necoclí,
Turbo, Apartadó, Carepa, Chigorodó, Mutatá, Murindó y Vigía del Fuerte (para la presente
decisión sólo se hará relación al Urabá Antioqueño, debido a que ahí se consolidó el eje
bananero, donde operó la estructura ilegal referida).

329
No todos los sindicatos fueron señalados, puesto que unos eran formados por los mismos grupos económicos locales
para generar contrapeso.
163
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375. La región ha tenido históricamente una alta complejidad, representada en sus


conflictos sociales, políticos, económicos y militares, los cuales están relacionados entre sí.
La situación de orden público desde la década del ochenta del siglo XX ha sido de gran
preocupación, y tal como lo ha afirmado el entonces Comandante de las Fuerzas
Armadas, general retirado Harold Bedoya Pizarro, para mediados de los años noventa,
Urabá era la zona de mayores dificultades de orden público a nivel nacional para el
Gobierno central330.

376. La aparición del paramilitarismo está relacionada con esa complejidad histórica de
la región de Urabá y las diversas expresiones sociales que fueron aprovechadas por los
grupos insurgentes del EPL y las FARC allí presentes. Así lo ha expuesto la Sala
previamente al afirmar:

“La aparición de grupos paramilitares en la región del Urabá, se dio en un escenario en el


que concurrían múltiples factores que llevaron a que conflictos sociales, tales como asuntos
laborales, agrarios, o políticos, recibieran un tratamiento militar por la entrada de diversos
actores, como las guerrillas insurgentes (FARC y EPL), la presencia de grupos paramilitares y
la llegada de unidades militares que señalaban que todos las reivindicaciones mencionadas
eran el desarrollo de agresión guerrillera”331.

377. A continuación se revisarán de forma concreta cuáles son algunos de los factores
que configuran este “escenario” del que se habló previamente. De una síntesis tanto de
fuentes académicas, historiográficas, así como de algunos elementos reconocidos por los
postulados en la región y consultados por la Fiscalía y la Sala, se puede afirmar que la
región de Urabá tiene cuatro características que importan para explicar la dinámica de la
violencia en la región: i) pasado de poblamiento y colonización compleja y desregulada; ii)
importancia estratégica de la región: puerto para el contrabando, narcotráfico y entrada
de armas; iii) zona de ubicación histórica del EPL y las FARC, que alentaron toma de
tierras y generaron divisiones explícitas de ciertas zonas; iv) fallida desmovilización del
EPL en negociaciones de principios de los noventa y conformación de grupos de
“Comandos populares”. A continuación se revisarán, de manera sucinta, cada uno de
estos factores esenciales para comprender la entrada y predominio de los grupos
paramilitares en la zona, durante un lapso de tiempo determinado.

330
Juzgado octavo penal especializado de Bogotá, sentencia contra Rito Alejo del Río Rojas, rad. 2009-063, 23 de agosto de
2012.
331
Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá, sentencia contra postulado José Barney Veloza García, rad. 2006
80585 M.P. Uldi Teresa Jiménez López, 31 de enero 2012, parr. 165
164
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Breve panorama histórico de Urabá

378. A partir de 1501, el litoral del golfo de Urabá fue uno de los primeros territorios
continentales explorados por los conquistadores españoles. En 1510, fue sede de las
primeras fundaciones españolas en suelo colombiano: a comienzos de ese año se
estableció el asentamiento de San Sebastián de Urabá; y antes de finalizar se fundó Santa
María la Antigua del Darién, que fue la primera ciudad establecida por los españoles en
tierra firme americana y la principal sede de la conquista en Colombia, hasta antes de que
fueran fundadas Santa Marta (1525) y Cartagena (1533). Con la fundación de San
Sebastián de Buenavista, en 1536, la región de Urabá se convirtió en epicentro de las
primeras expediciones a tierras antioqueñas, caucanas y sinuanas, y quedó adscrita a la
Gobernación de Cartagena332.

379. Durante las siguientes cuatro centurias al comienzo de la empresa conquistadora,


el aislamiento fue el principal rasgo de las relaciones entre el interior del país y la región
de Urabá. Hasta comienzos del siglo XX, ésta todavía es una “tierra incógnita”, que se
mantuvo lejana de la soberanía imperial española, primero, y de la soberanía republicana
nacional, después333. Sólo mucho tiempo después comenzó a superarse la incomunicación
en que se mantenía la región: en 1954, finalmente se hizo realidad la carretera que unió a
Turbo, en el litoral, y Medellín, en el interior montañoso334.

380. La distancia de Urabá respecto al interior del país y al poder español fue una
condición propicia para que la región, desde la Colonia, se convirtiera en un sitio de
refugio335. Además, en tanto la suerte de la región, desde el siglo XVII hasta el siglo XIX,
fue principalmente tributaria de la historia del Caribe336, su situación de aislamiento

332
Según Jairo Osorio, la “relación tradicional de Turbo con Cartagena es el vínculo más atávico de los pobladores del Golfo
con un territorio externo”. Jairo Osorio, Pueblos itinerantes de Urabá. La historia de las exclusiones. Retrato, Sevilla,
Universidad Internacional de Andalucía, 2006, pág. 23.
333
Entre múltiples factores que determinaron esta situación histórica de distancia respecto a los centros oficiales de poder,
cabe destacar dos: la resistencia opuesta por los pueblos indígenas a la ocupación española –inclusive después de la
extinción de los indios Cueva–, cuya fiereza y belicosidad impidió, por ejemplo, que se establecieran resguardos; y las
limitadas posibilidades de acceso a la región debido a sus accidentes geográficos y condiciones climáticas, especialmente en
la zona del Darién. Véase Carlos Meza, “Territorios de frontera: embate y resistencia en la cuenca del río Cacarica”,
Pontificia Universidad Javeriana, revista Universitas Humanistica, No. 62, julio a diciembre de 2006, pág. 394.
334
La construcción de la vía al mar (Medellín-Turbo) duró 28 años. El proyecto comenzó a ser realidad en 1926, en Villa de
Arteaga; en 1938, estuvo culminado el tramo de la carretera hasta Dabeiba; en 1947, el correspondiente hasta Chigorodó;
y, en 1954, finalmente, la vía unió a Turbo y Medellín. Véase: Osorio, Jairo. Apatentados, quindianos y chiveros: la otra
colonización de Urabá, Ed. Fiestas de amores, Medellín, Colombia, 1995, págs. 86 y 131.
335
Primero arribaron negros cimarrones que huyeron de las minas, indios que continuaron ejerciendo resistencia en contra
del “blanqueamiento” español, personas que huyeron de quienes los perseguían para conducirlas ante tribunales de justicia,
piratas y contrabandistas. Después, durante la segunda mitad del siglo XIX, Urabá también sirvió de refugio a combatientes
derrotados y poblaciones afectadas por las guerras civiles que siguieron al período de independencia. Esas migraciones
fueron uno de los procesos que modelaron el poblamiento de la región. Véanse J. Osorio, ob. cit., nota 15, pág. 88; y María
Teresa Uribe, Ma. Teresa Uribe, Urabá: ¿región o territorio?: un análisis en el contexto de la política, la historia y la
etnicidad, Medellín. INER-Universidad de Antioquia, 1992, pág. 40.
336
Al respecto, advierte la investigadora Uribe: “el territorio de Urabá se adscribió a la dinámica mercantil costera cuyos
lazos más orgánicos estaban dados con Jamaica, Santo Domingo, Panamá y Cartagena; y su ligazón mediterránea con
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favoreció que tempranamente emergieran y se consolidaran circuitos de contrabando en


Urabá337.

381. A lo largo del siglo XIX Urabá se constituyó culturalmente como territorio costeño,
negro e indígena, mediante procesos dispersos de colonización. Desde la segunda mitad
de éste, el auge de las economías extractivas de las provincias del Darién fue muy
importante para que en éstas se estableciera nueva población, en particular la explotación
natural del caucho, la recolección de tagua (o marfil vegetal) y de raicilla (o ipecacuana),
y muy especialmente la explotación de madera338.

382. A partir de 1905, cuando el Gobierno colombiano adscribió la Provincia de Urabá a


la jurisdicción de Antioquia, comenzó el lento proceso de colonización antioqueña. A
mediados del siglo XX, una vez estuvo lista la vía al mar (1954) y se asentó el negocio del
banano, el proceso de poblamiento se intensificó. La bonanza bananera fue tan
prometedora, que un estudioso de la región, James Parsons, consideró que el avance de
la agroindustria bananera podría ocasionar que llegara “a su fin el largo período de
aislamiento y abandono de Urabá”339.

383. Sin embargo, al revisar las cifras sobre criminalidad en el país, se puede concluir
que en la década de 1980, Urabá se convirtió en una de las regiones más violentas del
país. En 1988, la región fue uno de los escenarios de las 41 masacres en las que fueron
asesinadas simultáneamente entre seis y 43 personas340. En Urabá, “1988 es el año de las
sucesivas masacres en fincas que tienen la doble condición de contar con sindicatos
controlados por la guerrilla, especialmente por el EPL, y ser tierras invadidas bajo la
iniciativa del mismo. De marzo a septiembre suceden cinco masacres” 341. Justamente, a
finales de ese año la investigadora Ana María Bejarano publicó un estudio sobre la
violencia en la región, cuyo comienzo es el siguiente:

Santa Fe de Antioquia y Medellín fue más que precaria, fundamentalmente ilegal (contrabando)”. Ma. Teresa Uribe, ob. cit.,
nota 16, pág. 20.
337
Las cuatro zonas principales de contrabando fueron Cartagena, Riohacha, Santa Marta y Urabá. Durante los siglos XVII y
XVIII, Urabá se convirtió en una de las principales zonas de contrabando en la Nueva Granada. Hasta el siglo XIX, en ésta
tuvo especial importancia el contrabando que vinculó las zonas mineras del Chocó y Antioquia con el Caribe. Esta tradición
contrabandista se mantuvo y diversificó después de declarada la Independencia en territorio colombiano. Muriel Laurent,
“Nueva Francia y Nueva Granada frente al contrabando. Reflexiones sobre el comercio ilícito en el contexto colonial”, en
revista Historia Crítica, Bogotá, No. 25, Universidad de los Andes, diciembre de 2003, págs. 137-164 (disponible en:
historiacritica.uniandes.edu.co/view.php/361/view. php#63), consultada el 25 de agosto de 2013.
338
Véase: Mauricio Pardo, “Movimientos sociales y relaciones inter-étnicas”, en Arturo Escobar y Álvaro Pedroza
(compiladores), Pacífico: ¿desarrollo o diversidad? Estado, capital y movimientos sociales en el Pacífico colombiano, Bogotá,
Ed. CEREC-Ecofondo, 1996, pág. 303.
339
James Parsons, Urabá, salida de Antioquia al mar: geografía e historia de su colonización, Bogotá, Banco de la
República-El Áncora Editores, 1996.
340
Véase “1988 fue denominado el año de las masacres”, diario El Mundo, Medellín, 20 de enero de 1989.
341
C. I. García, ob. cit., pág. 158.
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“La noticia de las masacres de campesinos ocurridas en Urabá entre marzo y abril de este año
[1988] estremeció al país entero. Entonces, ese país adormecido por la violencia cotidiana
volvió los ojos hacia la región. Y encontró que, lejos de constituir un hecho aislado, las
masacres son solamente el más reciente episodio en una larga historia de conflictos sociales,
económicos y políticos ligados a la problemática global del país y, sobre todo, a sus propias
condiciones de desarrollo regional.

“La región de Urabá, ubicada en el extremo noroccidental del departamento de Antioquia,


constituye hoy una de las zonas más críticas del país dados los niveles que allí ha alcanzado la
violencia, y quizá el más dramático ejemplo de un futuro no muy lejano para la mayoría de las
regiones colombianas en conflicto”342.

384. A finales del siglo XX los habitantes de Urabá reconocían que ésta era una de las
regiones más violentas del país. En sentido contrario de lo que esperaba Parsons tres
décadas atrás, la mayoría de sus habitantes todavía sentían “que su región ha sido
permanentemente olvidada por los gobiernos centrales y por los habitantes de otras
partes de Colombia”343. Por esa misma época, el general Harold Bedoya Pizarro, entonces
comandante de las Fuerzas Armadas, sostuvo que Urabá era la región que, dada su
situación de orden público, más retaba la capacidad del Gobierno central344. En ese mismo
sentido, la academia se pregunta:

“¿Por qué la región de Urabá? Porque es un caso regional extremo y un icono del terror
dentro de la guerra contemporánea por sus masacres y su sevicia, no sólo de los
paramilitares sino también de las guerrillas. ¿Por qué entre 1988 y 2002? Porque el año
1988 marca la incursión paramilitar a Urabá cuando el control territorial era guerrillero y
eso define el nudo de la guerra, mientras que el año 2002 consolida las fronteras del
control territorial ahora paramilitar luego del repliegue de la guerrilla y marca el desenlace
de la guerra. La guerra se centra en las márgenes de territorio de Urabá hacia el sur en el
Río Atrato y hacia el oriente en la Serranía de Abibé con una presión y represión
permanente sobre las comunidades de paz asentadas en los dos territorios de frontera.” 345

385. Para la Sala, resulta de vital importancia recalcar que el escenario de Urabá tuvo
como hilo conductor, especialmente desde la década del 70 hasta la del 2000 un
fenómeno de violencia cíclico, el cual entre otros tuvo como elemento determinante la
ausencia institucional del Estado, un ejemplo de tal situación se puede expresar de la
siguiente manera:

342
Ana. Mª Bejarano, “La violencia regional y sus protagonistas: el caso de Urabá”, revista Análisis Político, Bogotá, No. 4,
IEPRI, mayo a agosto de 1988, pág. 54 (disponible en:
bibliotecavirtual.clacso.org.ar/ar/libros/colombia/pd630108952.htm?categoryId =0) (negrita fuera del original).
343
Comisión Andina de Juristas-Seccional Colombiana (CAJ-SC), Urabá, Bogotá, CAJ-SC, febrero de 1994, pág. 7.
344
Véase Juzgado octavo penal especializado de Bogotá, sentencia contra Rito Alejo del Río Rojas, rad. 2009-063, 23 de
agosto de 2012.
345
SUAREZ, Andrés Fernando, La sevicia en las masacres de la guerra colombiana, en:
http://www.scielo.org.co/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0121-47052008000200004, consultada el 22 de agosto de
2013. Ver también: Giraldo, Jorge, et al. Urabá: entre la abundancia y la disputa territorial. Aproximaciones a la relación
entre el conflicto armado y las estructuras de propiedad. Universidad EAFIT, Gobernación de Antioquia, Medellín, Colombia,
2011, págs., 22 y ss., en: http://antioquia.gov.co/catastro/Uraba_entre_la_abundancia_y_la_disputa_territorial.pdf,
consultada el 20 de agosto de 2013.
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“Finalmente, hay casos en los que el contexto de un Estado débil –en oposición a un
Estado fuerte– abre una “ventana de oportunidad” para el conflicto. La fortaleza estatal se
expresa en un mayor número de funciones realizadas con mayor efectividad (Fukuyama,
2004; 2005).

Entre estas funciones destacan: crear un ambiente que propicie el crecimiento económico
sostenible y equitativo; establecer y mantener instituciones políticas que sean legítimas,
transparentes y con rendición de cuentas; proteger a la población de conflictos violentos y
controlar el territorio; promover las libertades civiles y políticas; y satisfacer las
necesidades básicas humanas de la población (Rotberg, 2003; Rice y Patrick, 2008). En
contraste, la fragilidad, debilidad o falla estatal se refiere a la ausencia de la capacidad o
voluntad para llevar a cabo las funciones básicas del Estado. En términos más operativos,
el uso de la fuerza (presencia militar o policial), la administración de justicia, la recolección
de impuestos y la redistribución de rentas son elementos que pueden ser utilizados como
indicadores proxy de la presencia y la capacidad estatal en una región.

Velásquez (2008) llama la atención sobre esta hipótesis del “Estado débil”, según la cual
“los conflictos y los episodios de violencia no son aleatorios, y ocurren con mayor
frecuencia en los lugares donde el Estado está ausente o donde sus instituciones son
débiles” (2008, p. 124). En el caso colombiano, la apropiación de la tierra históricamente
ha sido un problema social de primer orden, lo cual se combina con una tendencia a una
“presencia diferenciada” del Estado: éste tiene una mayor o menor centralidad institucional
en los procesos sociales y políticos según el lugar (González, 2003).” 346

386. La región de Urabá desarrolló una historia propia en la cual se entrecruza su


desarrollo agrícola y económico con reivindicaciones de tipo político y laboral, en el cual la
confluencia de actores armados ilegales permeó una institucionalidad casi ausente en
materia de política pública. Analizar el devenir de tal situación es uno de los objetivos que
tiene la construcción de un contexto como el actual, por eso a continuación se realizará
tal construcción argumentativa.

Consideraciones generales sobre el Gran Urabá

387. La Fiscalía 17 de Justicia y Paz presentó a esta Sala una exposición sobre las
características geográficas y estratégicas de la región de Urabá, con base en los hallazgos
que obtuvo del análisis de diversos estudios sobre ésta. A continuación se transcribe un
extracto de la presentación oral que hizo la Fiscal:

“El Urabá se ubica en la parte del noroccidente de Colombia, extendiéndose hasta la


frontera con Panamá, incluyendo el gofo de Urabá, donde desemboca el río Atrato. Es
reconocida como una zona geoestratégica, relevante por su condición de puerto, su
cercanía con sistemas montañosos y selváticos, como lo es el nudo de Paramillo, así como
por la existencia de cultivos extensivos, específicamente el cultivo del banano. Estas
características han hecho del Urabá una región clave para los grupos armados irregulares,
los cuales desde sus orígenes han buscado asentarse en la zona con la finalidad de
346
Giraldo, Jorge, et al. Urabá: entre la abundancia y la disputa territorial. Aproximaciones a la relación entre el conflicto
armado y las estructuras de propiedad. Universidad EAFIT, Gobernación de Antioquia, Medellín, Colombia, 2011, págs., 22 y
ss., en: http://antioquia.gov.co/catastro/Uraba_entre_la_abundancia_y_la_disputa_territorial.pdf, consultada el 20 de
agosto de 2013.
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aprovecharse de sus condiciones geográficas que les permiten el ingreso de mercancías


de contrabando, tráfico de armas, la entrada de precursores químicos para el
procesamiento de coca, así como el embarque de narcóticos a los países de
Centroamérica y de allí al norte del continente americano. (…).

“Además, Urabá ha sido un territorio que se han disputado (…) los grupos armados
irregulares, que han luchado por mantener su presencia, expandiéndose o contrayéndose
de acuerdo a las situaciones políticas y sociales del momento, de acuerdo al ritmo de las
circunstancias de la confrontación armada, así como a las alianzas [y] rivalidades que se
tejen en torno al manejo de todo lo ilícito y todas las conveniencias estratégicas en la
zona. Con este panorama, tenemos que desde hace tres décadas el Urabá antioqueño ha
sido uno de los epicentros de la confrontación armada que [también] se ha extendido a
(…) parte del Chocó. (…). La población civil se vio abocada a mantener lealtades –o sea,
alianzas– con un grupo u otro de los armados irregulares que han hecho presencia en la
zona, como condición necesaria para permanecer en ella; sin espacio para la neutralidad,
la población se adaptó a ciertas restricciones que [les] fueron impuestas de acuerdo al
grupo armado que hacía presencia y tenía control territorial en la zona. Encontramos que
el Estado históricamente ha sido ausente en la mayoría de la zona urabaense y permitió
[ser] reemplazado por los grupos armados irregulares, que determinaron un dominio
territorial marcado por la acción militar, que es la que ha campeado en la zona urabaense,
tanto antioqueña como chocoana”347.

388. Urabá: región de colonización interna y frontera internacional348.


Simultáneamente, Urabá es una región de colonización interna y frontera internacional.
En virtud de esa doble condición, la mayoría de los análisis sobre las dinámicas de
violencia en esta región suelen insistir tanto en la persistencia de su situación de
aislamiento y abandono, respecto al interior del país, como en su importancia
geoestratégica349. Tal como sucedió en otras regiones de ampliación de la frontera
agrícola, hubo colonización del territorio, pero sin la correspondiente “extensión del
Estado”350. En la medida en que el Estado no fungió como ente regulador de la vida
social, aumentaron las posibilidades de que se presentaran fenómenos violentos y que
“otros agentes tomaran el control temprano de los territorios”351. Quizás hubiera sido
distinto, si El Estado colombiano se hubiera puesto a la cabeza de la colonización de las
fronteras agrícolas; lo que ocurrió fue que las colonizaciones fueron resultado de un

347
Ver “Exposición de la fiscal 17 de la Unidad Nacional para la Justicia y la Paz”, Audiencia de control de legalidad de
cargos contra Hébert Veloza García, Bogotá, 23 de marzo de 2011, minuto: 12.50 a 16.00. Citó fuentes: minuto 11:00 a
12:47.
348
Al respecto, la Fiscal 17 de la UNJP hizo suyas las palabras del Secretariado Nacional de Pastoral Social (SNPS): “Urabá
es una región de colonización permanente, espontánea y armada, en donde la presencia previa de actores sociales y
armados, y la existencia”.
349
En uno de los informes regionales elaborado por el Observatorio del Programa Presidencial de Derechos Humanos y DIH,
se lee: “Históricamente, el Urabá se presenta como una zona geoestratégica relevante, por su condición de puerto, su
cercanía con sistemas montañosos y selváticos –como lo es el Nudo de Paramillo–, así como la existencia de cultivos
extensivos, específicamente de banano. Estas características [la] han erigido como una región clave para los grupos
armados irregulares, los cuales desde sus orígenes han buscado asentarse en esta zona, buscando aprovecharse de sus
condiciones geográficas, por medio de ingreso de mercancía de contrabando, el tráfico ilegal de armas, la entrada de
insumos químicos para el procesamiento de la coca, así como el embarque de narcóticos hacia los países de
Centroamérica”. Observatorio del Programa Presidencial de Derechos Humanos y DIH, Dinámica reciente de la
confrontación armada en el Urabá antioqueño, Bogotá, septiembre de 2006, pág. 5 (disponible en:
www.derechoshumanos.gov.co/Observatorio/Publicaciones/documents/2010/Estu_Regionales/uraba. pdf).
350
Absalón Machado, Colonización, una revisión del aporte de la academia y sus implicaciones en la formulación de
políticas, Bogotá, documento de trabajo (multicopiado), 2003, pág. 1 (disponible en: www3.udenar.edu.co).
351
Ibídem.
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proceso espontáneo y desordenado, no planificado, tal como lo señala e ilustra el


investigador social Absalón Machado:

“La ocupación del territorio no ha constituido un proyecto estatal de largo plazo ni una
estrategia geopolítica definida; ha sido un proceso resultante de formas de apropiación
privadas del territorio en las que incidieron los ciclos del comercio exterior de materias
primas agropecuarias y la dinámica de la economía nacional. (…). La política agraria de
alguna manera estimuló directa o indirectamente la expansión de una frontera sin
suficiente atención estatal, en lugar de buscar una mejor distribución de los recursos al
interior de la frontera para evitar la gran destrucción de recursos que ha significado la
colonización, la inmensa generación de conflictos, la irracional explotación del suelo y la
gestación de movimientos y protestas contra el Estado.

“[Además], el mecanismo más importante de expansión de la ocupación del espacio ha


sido la construcción de vías, detrás de las cuales van los colonos en búsqueda de nuevos
horizontes, aquellos que les ha negado la estructura agraria del interior y las áreas
urbanas industrializadas. Con las vías camina una ganadería extensiva que invade áreas
no aptas para esa actividad con una amenaza seria a los equilibrios ecológicos y a la
biodiversidad”352.

389. Gran Urabá. El Gran Urabá es una región constituida por 17 municipios de
Antioquia, Chocó y Córdoba353. Con las provincias panameñas de San Blas y del Darién,
conforma la región mayor El Darién. Simultáneamente, el Gran Urabá hace parte de dos
sistemas ambientales mundiales: la Gran cuenca solar del Caribe y el Chocó
biogeográfico354 (ver mapa 1). A nivel nacional, la región Urabá-Darién “tiene la condición
de ser parte y elemento articulador de tres grandes regiones nacionales (Caribe, Pacífica y
Andina), situación que le permite tener gran variedad de ecosistemas”355.

Mapa 1
Ubicación del Gran Urabá

352
Ibídem.
353
El Urabá chocoano comprende cuatro municipios: Acandí, El Carmen del Darién, Riosucio y Unguía. El Urabá cordobés
comprende dos municipios: Valencia y Tierralta.
354
Ver Departamento Nacional de Planeación (DNP) y otros, Plan estratégico de la región de Urabá-Darién, Medellín, junio
de 1996, págs. 75 y 76.
355
Ibíd., pág. 76.
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390. Ventajas competitivas en Urabá: la zona franca. La posición geográfica de


Urabá lo convierten en una región geoestratégica para el desarrollo de megaproyectos
económicos como el de zona franca356. Según lo expuso la Fiscalía a esta Sala, la ventaja
competitiva de la localización de la Zona Franca de Urabá357 es la siguiente358:

“La Zona Franca de Urabá, en Colombia, ofrece fácil acceso a los mercados externos del
Pacífico y el Caribe, Centroamérica, EE.UU. y la Unión Europea. Está situada en el municipio
de Apartadó, epicentro del desarrollo económico, social y exportador de Urabá. Puerta de
entrada a Suramérica y al Mercado Andino, con 115 millones de consumidores. Urabá es el
puerto de destino sobre el Atlántico más cercano a Bogotá, Cali, Medellín, el centro y el sur-
occidente colombiano. El ahorro en distancia representa una economía que oscila entre 300
y 500 km. Urabá es considerada ‘la mejor esquina de América’, por su estratégica y
privilegiada posición geopolítica. Es terminal terrestre, aérea, marítima y fluvial”359.

Mapa 2
Rutas comerciales de la Zona Franca de Urabá360

356
Las zonas francas originalmente fueron definidas en el título IX del decreto 2685 del 28 de diciembre de 1999 (Estatuto
aduanero), modificado mediante los decretos 383 y 4051 de 2007. Según fue dispuesto mediante el artículo 392-4 de
aquel decreto, los “bienes que se introduzcan a las Zonas Francas Permanentes por parte de los usuarios, se considerarán
fuera del Territorio Aduanero Nacional para efectos de los tributos aduaneros aplicables a las importaciones e impuestos a
las exportaciones”. El artículo 1º de la ley 1004 del 30 de diciembre de 2005 define la zona franca como “el área geográfica
delimitada dentro del territorio nacional, en donde se desarrollan actividades industriales de bienes y de servicios, o
actividades comerciales, bajo una normatividad especial en materia tributaria, aduanera y de comercio exterior. Las
mercancías ingresadas en estas zonas se consideran fuera del territorio aduanero nacional para efectos de los impuestos a
las importaciones y a las exportaciones”.
357
La Zona Franca de Urabá “es una sociedad privada creada por un representativo grupo agroindustrial y exportador que
lleva más de treinta años operando en la región de Urabá, con una amplia experiencia y conocimiento en materia de
comercio exterior y aduanas”. “Quiénes somos”, Zona Franca de Urabá (disponible en: zonafrancadeuraba.com/site09-
Esp/quienes-somos). Su funcionamiento fue aprobado por la DIAN mediante resolución 5423 del 20 de junio de 2008.
358
Ver “Exposición de la fiscal 17 de la Unidad Nacional para la Justicia y la Paz”, Audiencia de control de legalidad de
cargos contra Hébert Veloza García, Bogotá, 23 de marzo de 2011, minuto: 1:06:34 y ss.
359
“Ubicación geográfica”, Zona Franca de Urabá (disponible en: zonafrancadeuraba.com/site09-Esp/2012-06-04-21-58-
10/localizacion). Extracto incorporado por la Fiscal 17 a una diapositiva de su exposición (disponible en: 02, Legalización de
cargos 22, 23 y 24 de marzo de 2011\Videos y documentos soporte 22 - 24 de marzo\PREAMBULO\megaproyectos.pptx).
360
Mapa tomado de la misma fuente antes citada. Ver Ibídem.
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391. Urabá en el sistema urbano de Antioquia. Los cuatro municipios del eje bananero
de Urabá conforman “un sistema urbano de segunda categoría (es la segunda zona más
urbanizada del departamento)”361. En 2005, 3’125.675 personas –que representaban el
72,29% del total de habitantes urbanos y el 55,01% de la población total de Antioquia–
habitaban en los centros urbanos de los diez municipios del Valle de Aburrá, es decir, en
el 1% del total del territorio antioqueño. También en ese año, 237.882 personas vivían en
las cabeceras municipales del eje bananero: Apartadó (111.887) y Turbo (47.259), que
son centros de relevo principal en el sistema urbano regional; y Carepa (29.105) y
Chigorodó (49.631), que son centros de relevo secundario (ver gráfica 1).

Gráfica 1
Sistema urbano de Antioquia362

392. Urabá: El Frente Turbo fue la estructura paramilitar que en principio comandó el
postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias ‘H.H.’. Ésta emergió y operó en los cuatro
municipios de la subregión centro del Urabá antioqueño o eje bananero, especialmente en
jurisdicción urbana y rural de Turbo. La cobertura territorial del Frente Turbo fue pactada
por VELOZA GARCÍA con Raúl Hasbún, alias ‘Pedro Bonito’, comandante del Frente Árlex
Hurtado, y con Fredy Rendón Herrera, alias ‘El Alemán’, ex comandante del Bloque Elmer
Cárdenas.

361
DNP, ob. cit., nota 35, pág. 84.
362
Tomado de Ibíd., pág. 87.
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393. Urabá antioqueño. El Urabá antioqueño se extiende hasta la frontera con


Panamá, incluyendo el Golfo de Urabá, donde desemboca el río Atrato, en el noroeste del
país. Comprende tres subregiones conformadas por 11 municipios que suman una
extensión total aproximada de 11.664 km2:

Subregión norte:
Arboletes, Necoclí, San Pedro de Urabá y San Juan de Urabá.
Extensión aproximada: 2.786 km2.
Subregión centro o eje bananero:
Apartadó, Carepa, Chigorodó y Turbo.
Extensión aproximada: 4.643 km2.
Subregión sur:
Murindó, Mutatá y Vigía del Fuerte.
Extensión aproximada: 4.235 km2.

Los procesos de colonización de Urabá

Herencia de la violencia de mediados del siglo XX: militarización guerrillera y


oficial de Urabá

394. En Urabá, el estudio del período conocido como La Gran Violencia deja en claro
que el ejercicio específico de la “violencia política” se manifestó como condensación de
conflictos regionales. De una parte, los alzamientos en armas de 1948 se produjeron
como reacción a un gobierno ausente social y culturalmente, pero decidido a imponerse
como expresión partidista. De otra parte, las tensiones partidistas progresivamente se
militarizaron y sin excepción se manifestaron directamente asociadas a conflictos
culturales históricos. En ese marco, la consecuencia más clara de opción seguida por las
autoridades fue la exacerbación de la violencia bipartidista, tal como lo señal Roldán:

“Si el gobierno departamental hubiera aceptado [las] victorias [electorales] liberales y


comprendido que al ejercer más presión no aumentaría el número de seguidores del
gobierno en el Urabá y el occidente antioqueño, es posible que la violencia (…) hubiera
podido prevenirse”363.

395. Ante todo, la violencia bipartidista finalmente expresó el conflicto entre una región
mayoritariamente liberal, abandonada e incomunicada, que, no obstante, quería ser
gobernada por una minoría conservadora principalmente asociada al poder asentado en

363
Mary Roldán, A sangre y fuego. La violencia en Antioquia, Colombia 1946-1953, Bogotá, Instituto Colombiano de
Antropología e Historia (ICANH)-Fundación para la promoción de la Ciencia y la Tecnología, 2003, pág. 222.
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Medellín. En ese sentido, “la muerte de Gaitán hizo aflorar una compleja combinación de
ira partidista y resentimiento profundo contra un gobierno departamental que por
décadas había ignorado las necesidades locales, gobernando mediante la imposición, sin
consultar ni negociar”364. Luego se celebraron las elecciones (en junio de 1949), después
de una campaña que se caracterizó por el resurgimiento de tensiones bipartidistas. Los
liberales se impusieron en los comicios; sin embargo, ni la minoría conservadora de Turbo
ni el gobierno departamental aceptaron los resultados electorales y, en consecuencia,
comenzaron a ahondarse las divisiones partidistas365.

396. En general, las “diferencias de vieja data, culturales, étnicas y regionales


(aparentes o reales), sumadas a las de carácter partidista, crearon un sentido de
alienación entre ciertos sectores específicos de las fuerzas del gobierno y las poblaciones
en las cuales debían ejercer su autoridad”366. El mapa de las diferentes combinaciones
entre afiliación política-origen étnico-región resultaría de juntar las siguientes piezas que
lo componen:

“Los soldados del departamento de Bolívar, a diferencia de muchos de los reclutados en


Antioquia, tendían a ser negros y a compartir la afiliación política liberal de la mayoría de
los habitantes del Urabá. (…) los urabeños acogieron a los soldados provenientes del
departamento del Bolívar con más simpatía y respaldo del que les brindaron a las fuerzas
de gobierno antioqueñas. En contraste, la minoría conservadora del Urabá, constituida
primordialmente por colonos e inmigrantes antioqueños, no de Bolívar ni de Chocó,
sospechaba que las tropas costeñas estaban confabuladas con la guerrilla y dudaban de
su disposición para defender la vida de los conservadores. Estas percepciones alimentaron
rumores de que el ejército no apoyaba al gobierno conservador. (...).

“En contraste con los soldados de la costa Caribe enviados a patrullar el Urabá, liberales y
negros en su mayoría, los policías nacionales desplegados al Urabá y el occidente
antioqueño provenían principalmente de departamentos identificados con una fuerte
presencia indígena como Boyacá, Cundinamarca y Huila, donde el Partido Conservador
históricamente había sido fuerte. Los conservadores del occidente antioqueño y el Urabá
tendían a preferir la presencia de la policía a la del ejército. (…). A su vez, la mayoría de la
población liberal en la zona despreciaba a la Policía Nacional tano por su origen étnico
como por percibirla como simpatizante del Partido Conservador. Para complicar la
situación aún más, la policía municipal del Urabá, además de ser nativa de la región, era
abrumadoramente liberal y se opuso a la Policía Nacional, conservadora y forastera. A su
vez, los agentes de aduanas, quienes eran nombrados en Medellín y se contaban entre los
pocos representantes del gobierno en el occidente antioqueño y el Urabá, enfrentaban el
resentimiento de los habitantes liberales porque la administración de aduanas se había
convertido al conservatismo después de 1948 y el contrabando constituía un mecanismo
primordial de supervivencia defendido ferozmente en el ámbito local ”367.

364
Mary Roldán, ob. cit., nota 44, pág. 221. Eso ocasionó que los esfuerzos de restablecimiento de unas mínimas
condiciones de paz se demorarán en producir frutos Por ejemplo, el alzamiento en armas en Turbo se prolongó más tiempo
que en otros lugares de Antioquia, así como tardó el restablecimiento de la comunicación entre Turbo y Medellín, después
de que la línea del telégrafo fuera destruida por guerrilleros liberales. Ibídem.
365
Por ejemplo, “los gaitanistas de Turbo, Dabeiba, Peque y Frontino ganaron mayorías en las elecciones al Concejo
Municipal”. Mary Roldán, ob. cit., nota X (libro), pág. 222.
366
Mary Roldán, ob. cit., nota 44, pág. 224.
367
Mary Roldán, ob. cit., nota 44, págs. 222-224.
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397. En particular, “la combinación de las divisiones partidistas y étnicas entre las
distintas ramas de las fuerzas armadas del gobierno impidió la posibilidad de desarrollar
una política de orden público coherente”368. A finales de 1949 ciudadanos de Turbo
atacaron e hirieron a agentes de aduanas. La respuesta de la Gobernación de Antioquia
consistió en adquirir dos mil revólveres Smith & Wesson (calibre 38 especial) y
distribuirlos regionalmente. Ninguno de esos revólveres llegó al Ejército. Los grupos que
recibieron esas armas fueron “las fuerzas cuyas tendencias culturales y partidistas fueran
más dadas a obtener el apoyo conservador local”, los grupos de contrachusmas,
voluntarios y constituidos localmente, y las fuerzas policiales aceptables culturalmente”,
“los civiles y policías de Antioquia” y a otros “policías confiables y civiles conservadores de
ciertos municipios selectos”369.

398. Después de las elecciones de 1949, surgieron los grupos guerrilleros que tuvieron
como propósito principal e inmediato “acosar y derrocar al gobierno conservador”370. Dos
años más tarde “habían establecido el dominio absoluto del área que abarca desde Turbo
hasta Puerto Abaldía, en el golfo de Urabá”371. Asimismo, estaban al servicio de “los
intereses políticos y personales de poderosos individuos de la región. Gradualmente,
surgió un floreciente mercado informal de bienes y animales robados (mulas, caballos,
ganado), del cual los guerrilleros hicieron parte integral”372.

399. En Chigorodó, al igual que ocurrió en Dabeiba, la guerrilla estuvo compuesta por
integrantes de clanes familiares locales que “se movilizaron constantemente entre Bolívar
y Antioquia”373. En el Urabá antioqueño, la guerrilla liberal más importante fue la
comandada por Sergio David:

“[El grupo] liderado por Sergio David tenía su base en el valle ubicado entre los
ríos Sinú, Sucio y San Jorge en el departamento de Bolívar (en una zona hoy en
día parte del departamento de Córdoba), inmediatamente al norte de Antadó e
Ituango, y al oriente del Urabá. A su vez, los campamentos satélites comandados
por hombres del clan David, junto con miembros de las familias Arias, Cartagena,
Duarte, Velásquez, Higuita, Montoya, Pino, Romero, Serna, Torres, Tuberquia y
Usaga, extendieron el alcance de la guerrilla hasta Chigorodó, Mutatá y a lo largo
de gran parte de la Carretera al mar. Además, un ramal del grupo David, bajo el
mando inmediato del capitán Patricio Usaga, estableció el control del caserío
conocido como Caucheras, cerca de Mutatá, donde había importantes plantaciones
de caucho”374.

368
Mary Roldán, ob. cit., nota 44, pág. 222.
369
Mary Roldán, ob. cit., nota 44, págs. 224-225.
370
Mary Roldán, ob. cit., nota 44, pág. 226.
371
Mary Roldán, ob. cit., nota 44, pág. 239.
372
Mary Roldán, ob. cit., nota 44, pág. 228.
373
Mary Roldán, ob. cit., nota 44, pág. 228. Advierte Roldán: “En una lista de hombres y mujeres buscados por el gobierno
como sospechosos de ser guerrilleros, 185 hombres y mujeres con el mismo apellido o identificados como miembros de
grupos familiares claramente distinguibles aparecen como la principal fuente de disturbios en la zona”. Ibídem
374
Mary Roldán, ob. cit., nota 44, pág. 226.
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400. En buena medida, las guerrillas liberales pudieron germinar y sostenerse gracias al
contrabando masivo de armas. Desde 1948, “las armas de contrabando fluyeron
libremente desde América Central y Panamá para abastecer a los grupos insurgentes a lo
largo de la Carretera al mar”375.

401. 1950 fue el año en que las guerrillas liberales lograron tener auge mediante
ataques como los que perpetraron en El Carmelo (hoy Arboletes) y Turbo. Después de
ese período, “todos los guerrilleros que alguna vez estuvieron activos en el Urabá se
rindieron o habían sido eliminados para octubre de 1953”376. 1950 también fue el año en
que más importancia tuvo el surgimiento de grupos informales de seguridad, bajo
justificaciones como proteger intereses económicos –según el entonces Inspector
Nacional de Bosques377– o reaccionar ante la amenaza que representaban grupos de
guerrillas de liberales y conservadores inconformes –según un integrante del Directorio
Conservador, el Alcalde de Cañasgordas y representantes del Comité de Cafeteros– que
también sembraban el pánico entre la población, como la cuadrilla de Inspolicía Cestillal
compuesta por “comisiones de civiles armados mezclados guardias”378.

402. Así, la militarización de la vida social fue la característica más sobresaliente de


Urabá al finalizar la primera mitad del siglo XX y comenzar la segunda:

“A mediados de 1951 el gobernador de Antioquia, Braulio Henao Mejía, anunció


que ‘había hecho todo lo posible en su capacidad como Gobernador’ por restaurar
el orden público en Urabá, pero que había fracasado. No quedaba más remedio
que entregarle la región al Ejército; éste podía establecer cuarteles y conducir
‘batidas’ para defender a la ciudadanía. El bombardeo y el racionamiento de
víveres y otros artículos de consumo como azúcar, café, cigarrillos, fósforos y sal
se volvieron medidas rutinarias. Se restringía además la movilidad de los
habitantes y en especial de los trabajadores de la zona a través de un sistema de
salvoconductos regulado por la Cuarta Brigada. De todas las tropas militares
presentes en diversos sectores de Antioquia para el mantenimiento de orden
público en noviembre de 1953, casi la tercera parte estaba estacionada en Urabá.
La transformación de la región en un Estado ocupado fue total”379.

375
Mary Roldán, ob. cit., nota 44, pág. 221.
376
Mary Roldán, ob. cit., nota 44, pág. 278.
377
El funcionario informó sobre quejas de vecinos por la actuación del propietario de un aserrío, quien era un importante
integrante del Partido Liberal: “[su] Empresa ha fomentado, apoyado y sostenido el Estado de Inseguridad reinante allí, con
fines de obtener un monopolio económico de los productos forestales que abundan en la región”. Archivo privado del señor
gobernador de Antioquia, 1951, tomo 7, Informe escrito por L. Ramírez, Inspector Nacional de Bosques, 18 de enero de
1951, citado en Mary Roldán, ob. cit., pág. 21 (nota 70). Añade la historiadora: “Mientras Antioquia no poseía una lancha
con qué patrullar la región, la empresa de maderas a la que hacía alusión el Inspector poseía cuatro camiones, una lancha
con motor y tenía acceso a otra lancha y una ametralladora”. Ibídem.
378
Mary Roldán, ob. cit., pág. 23.
379
Mary Roldán, ob. cit., pág. 24. Las fuentes citadas por la historiadora son las siguientes: Archivo privado del señor
gobernador de Antioquia, 1951, tomo 6, Telegrama enviado por Braulio Henao Mejía al Alcalde de Turbo, 27 de marzo de
1951; y 1953, tomo 2, Cuadro demostrativo de las comisiones de orden público destacadas en la jurisdicción de la 4ª
Brigada (Disposiciones radiogramas números DGE-787 y DGE-S3-56-36 del presente año), noviembre de 1953 (notas 80 y
81) (negrita fuera del original).
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403. Implantación de las guerrillas: reivindicación del agrarismo. En Urabá, las


guerrillas del EPL y de las FARC resultaron de la convergencia de las guerrillas liberales
creadas en la década de 1960 con sectores políticos distintos al bipartidismo tradicional,
especialmente los movimientos de izquierda en auge, y sectores del campesinado380.
Después de 1967, las primeras estructuras armadas del EPL arribaron a la región,
procedentes de las cuencas altas de los ríos San Jorge y Sinú381. Asimismo, en 1973 las
FARC crearon el Frente V, cuyas acciones iniciales fueron las represalias adoptadas en
contra de presuntos informantes y soplones, y la realización de “tomas” de algunas
cabeceras municipales382.

404. Ambas guerrillas “acompañaron los intereses campesinos como si se tratara de sus
propios intereses”383. En realidad, al igual que ocurrió en otras regiones del país,
inicialmente se propusieron como principal expresión de un movimiento agrarista que
pretendía expandirse como parte de un proceso de colonización armada:

“La fuerza ideológica que acompañó a las guerrillas, sobre todo a la del EPL, que era
seguidora del pensamiento de Mao, fue la convicción de que la lucha revolucionaria se
realizaba en las zonas rurales y con el campesinado. Así que los nuevos actores armados
acompañaron la colonización e incluso promovieron una colonización armada dirigida,
como lo hicieron las FARC en la zona de Mutatá, en dirección al Atrato, de la misma
manera que lo habían hecho en el piedemonte llanero y en Caquetá.

“Los móviles de actuación de la guerrilla agrarista de los años 1960 y 1970 era la
identificación con la problemática de los colonos y las acciones encaminadas a dotarse de
tierra y asentarse, y ese fue el sentido de su acción encaminada a crear fuertes lazos de
identidad en una zona de colonización como era Urabá”384.

380
Sobre el auge de algunas expresiones políticas de izquierda, cabe señalar: “Durante el Frente Nacional, el poderío del
Partido Liberal disminuye con la aparición en el escenarios político de otros partidos que fueron ganando adeptos con sus
discursos alternativos. En 1962, Urabá y los municipios cordobeses circundantes votan en su gran mayoría por el MRL, y
entre 1966 y 1972, es la ANAPO quien recoge los éxitos con la población. Estos partidos alternativos dieron pie al
surgimiento de los Frentes Populares y en 1976 a la Unión nacional de Oposición (UNO), con lo que se dio un cambio
perceptible en la posición de los pobladores que aumentaron su votación, también en los dos nuevos municipios, Necoclí
(1978) y San Pedro de Urabá (1978)”. Secretariado Nacional de Pastoral Social (SNPS), Urabá, Bogotá, colección
Desplazamiento forzado en Antioquia, n.º 8, SNPS, mayo de 2001, pág. 22.
381
En esas cuencas, el 17 de diciembre de 1967 fue creado el primer destacamento guerrillero del EPL. Véase Ernesto
Rojas, Notas de comandancia sobre la historia del EPL, Colombia, febrero de 2008, publicado por Centro de Documentación
de los Movimientos Armados (disponible en: www.cedema.org/ver.php?id=2449). Sobre las rutas de penetración del EPL
usadas por el EPL, Clara García advierte que las dos rutas de su ingreso fueron “el eje Tierralta-Valencia-San Pedro de
Urabá, desde donde se bifurcan hacia Necoclí y Turbo, y el eje que desde Saiza se extiende hacia Carepa y Chigorodó”. C.
I. García, ob. cit., nota 52, pág. 139.
382
Véase C. I. García, ob. cit., nota 52, pág. 142. Según William Ramírez, la presencia de las FARC en Urabá data de 1966 y
su primera operación significativa fue la toma de San Pedro de Urabá, en 1972. William Ramírez, Urabá, los inciertos
confines de una crisis, Bogotá, Ed. Planeta, 1994. Noel Matta Matta-Guzmán, alias ‘Efraín Guzmán’ o ‘Comandante Nariño’
fue el principal comandante del Frente V. En 1978, reemplazó a ‘Alberto Martínez’ en ese cargo; luego, fundó los frentes 18,
34 y 58; y, durante la Octava Conferencia de las FARC (1993), fue nombrado miembro del Secretariado del Estado Mayor
Central. En 2003, murió a consecuencia de una enfermedad. Véase ‘Iván Márquez’, “Efraín Guzmán. Síntesis para la
semblanza de un comandante que continúa en la pelea”, en revista Resistencia (edición internacional), n.º 32, mayo de
2004 (disponible en: farc.narod.ru/ magazine/32/02s.html).
383
Clara I. García y Clara I. Aramburo, Geografías de la guerra, el poder y la resistencia. Oriente y Urabá antioqueños 1990-
2008, Bogotá, CINEP-ODECOFI-INER, marzo de 2011, pág. 286.
384
Clara I. García y Clara I. Aramburo, Geografías de la guerra, el poder y la resistencia. Oriente y Urabá antioqueños 1990-
2008, Bogotá, CINEP-ODECOFI-INER, marzo de 2011, págs.. 300 y 301.
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405. Reacción oficial: la militarización como respuesta al orden público


alterado. Según Osorio, “la ‘invasión’ de las FARC a Urabá”385, que se produjo desde
1974, trajo como consecuencia “el viraje de la política de orden público en la región”386.
Durante la segunda mitad de la década de 1970, la región progresivamente se militarizó:
en mayo de 1980, “todos los alcaldes de la zona eran militares”387.

“Hasta entonces el Ejército y los organismos de seguridad habían actuado de


manera puntual y no coordinada. A partir de esa fecha en cambio, se coordina un
conjunto de acciones de diverso tipo. Entre ellas, una arremetida frontal y
generalizada del Ejército a los grupos armados; la instauración de las alcaldías
militares para los municipios de Mutatá, Chigorodó, Apartadó y Turbo; la acción
‘preventiva’ de los organismos de seguridad con respeto a los comunistas no
armados que organizan sindicatos agrarios y obreros en la región y se han
convertido en una opción electoral en algunas localidades.

“Al lado de las anteriores medidas se toman otras como la creación de una unidad
secreta antiextorsión y secuestro (julio/74); el propio Ministro de Defensa, General
Luis Carlos Camacho Leiva, sobrevuela la zona en la que las FARC ha incursionado
recientemente.

“Se decide la instalación de un Batallón de la IV Brigada con carácter permanente


(septiembre de 1975), convirtiéndose Urabá en la única región de Colombia con
una unidad militar de este tipo. Además, se recortan los horarios de bares y
cantinas (julio 74). Desde el Directorio Conservador de Antioquia (julio/74) y el
periódico El Colombiano (junio/76), se exige al gobierno central acciones
especiales para Urabá. El DAS realiza redadas y el Batallón Voltígeros se encarga
de las detenciones de los líderes comunistas.

“En agosto 16 de 1976, el gobierno departamental ordena reseñar a toda la


población de la zona, principalmente a obreros, colonos y pequeños agricultores.
En 1977, el Vicealmirante del Estado Mayor Naval reivindica ante los poderes
centrales la necesidad de construir un Apostadero como única manera de controlar
‘el punto de entrada de todo lo ilícito a Urabá’. En agosto 30 de 1979, se informa el
desplazamiento de la mayor parte de los efectivos de la IV Brigada –Antioquia–
hacia Urabá. Siguen las detenciones y allanamientos a las casas de los concejales
de la UNO y en enero de 1980 por orden del Comandante del Batallón Voltígeros
se les cancela el programa radial que emitían hacía dos meses en Radio
Prosperidad.

“En síntesis, en materia de orden público, el Estado coordina una serie de acciones
que se extiende por años, abarca diversos frentes y utiliza diversos medios. (…). ||
A partir de 1979 esta política pareciera cosechar sus frutos: el EPL desaparece del
panorama público, parte del V Frente de las FARC se repliega hacia las regiones
vecinas y las acciones sindicales desaparecen”388.

385
Clara I. García, ob. cit., pág. 142.
386
Clara I. García, ob. cit., pág. 142.
387
CCJ, ob. cit., pág. 68. “En Apartadó el capitán Mauricio Cújar (ya en 1978 había sido nombrado alcalde un hombre con
reputación de asesino apodado ‘Polvorete’), en Chigorodó el sargento Jorge Amado Mosquera, en Mutatá el sargento Dirigio
González y en Turbo el capitán Luis Arango Torres. Esa época coincidió on numerosas denuncias por torturas y malos tratos
cometidos por la policía y el Ejército. Inclusive, el coronel José J. Murillo, del Batallón Voltígeros, admitió la existencia de
una lista de personas que actuaban como supuestos colaboradores de la guerrilla. Posteriormente, fue nombrado alcalde en
Turbo, en 1983, el capitán Gámez Parra; en 1984 fue nombrado Ernesto Vergara en Chigorodó, considerado un asesino a
sueldo, quien a su vez también fue asesinado en 1985. Además, ciertos inspectores de policía, como en Churidó y Nueva
Colonia, impedían la sindicalización de los trabajadores”. Ibídem. Con base en periódico El Heraldo de Urabá, n.º 84, mayo
de 1980 págs. 1 y 6.
388
Clara I. García, ob. cit., págs. 142 y 143.
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406. Viraje estratégico de las guerrillas: la reivindicación obrera en la


agroindustria. Después de implantarse y garantizar una presencia permanente en las
zonas rurales periféricas de la región, las guerrillas se hicieron a un nuevo propósito:
acrecentar su influencia en los movimientos sindical y campesino del eje bananero. Esta
fue la consecuencia lógica de su decisión de convertirse en “actores político-militares de
peso gracias al control sobre sectores claves de la economía y del territorio nacional y a la
influencia ideológica sobre sectores proletarios y campesinos de importancia”389. La nueva
estrategia implicaba la construcción de una alianza que superaba el agrarismo:

“En este traslado, la guerrilla tuvo que cambiar el tradicional entendimiento con los
campesinos por un nuevo entendimiento con los obreros de la agroindustria.
Aunque tal disposición no hubiera sido asunto de los frentes regionales sino de sus
jerarquías nacionales, se trataba de incidir, a través de un labor política e
ideológica, en los centros urbanos y las áreas de mayor desarrollo, donde había
que capturar nuevas bases sociales y fortalecer sus anclajes para la expansión del
proyecto revolucionario.

“Para entenderse con los obreros tuvieron que vigorizar su fuera pública y
participar en el movimiento sindical, aprovechando el descontento de la fuerza
laboral con los propietarios y empresarios que por todos los medios querían
impedir la organización sindical. El tránsito del ámbito rural al urbano no significó
abandonar las causas agraristas sino consolidar nuevas identificaciones
‘revolucionarias’ con la fuerza laboral, en lucha contra el capital y los empresarios
bananeros, sobre quienes también ejercieron prácticas extorsivas”390.

Poblamiento y colonización compleja y no regulada

407. De lo presentado en anteriores exposiciones de la Sala, que recogen fuentes


bibliográficas y análisis de expertos invitados a audiencias de contexto sobre la región de
Urabá se puede concluir que esta presenta una compleja paradoja de ser,
simultáneamente, una región aislada con gran parte del país, y a su vez, ser un puerto no
regularizado donde se dan distintas formas de integración con Centroamérica y demás
zonas costeras del país391.

408. La característica de ser una zona alejada y con poca presencia institucional es
también común en esta región, como la mayoría de lugares de colonización interna. En
realidad, la alusión al abandono es recurrente cuando se trata de zonas de reciente

389
C. I. García, ob. cit., nota 52, págs. 122 y 123.
390
Clara I. García y Clara I. Aramburo, Geografías de la guerra, el poder y la resistencia. Oriente y Urabá antioqueños 1990-
2008, Bogotá, CINEP-ODECOFI-INER, marzo de 2011, págs. 301 y 302.
391
Véase las sentencias contra Freddy Rendón Herrera alias “El Alemán” y contra José Barney Veloza García, referidas
anteriormente. La región de Urabá ha tenido como característica histórica el ser “una zona de entrada y salida ilegal de
productos a lo largo de toda su historia: fue una zona de piratas y bucaneros en el siglo XVII; por allí salió el oro de
Antioquia sin quintar ni amonedar durante el siglo XVIII; (…) por allí se introdujeron las armas en las guerras civiles
decimonónicas y para las guerrillas liberales en los cincuenta; por allí se envió el ganado de Córdoba hacia la zona del Canal
de Panamá entre 1903 y 1914 y por allí se ha mantenido un flujo irregular de entrada de mercancías de contrabando al país
desde el siglo XVII hasta nuestros días” . URIBE, María Teresa, op. cit., pág. 45.
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colonización. Es común que tienda a ser comprendido como consecuencia directa de un


Estado ausente como ente regulador de la vida social y que, además, tal precariedad
estatal se asocie con una mayor probabilidad de que se presenten fenómenos violentos392.

409. En un país de extensas fronteras agrícolas, resulta lógico que se hayan gestado y
reproducido conflictos en los nuevos territorios colonizados como consecuencia de una
expansión de aquellas, sin la correspondiente “extensión del Estado”393. Cuando eso ha
sucedido, uno de los efectos ha sido que otros agentes tomen el “control temprano de los
territorios”394. Esas son evidencias o resultados que arrojan procesos menos perceptibles,
pero más profundos. En realidad, tal como lo sostiene el investigador social Machado, el
principal problema de la colonización de las fronteras agrícolas es haber sido un proceso
espontáneo y desordenado, no planificado; de tal forma que:

“La ocupación del territorio no ha constituido un proyecto estatal de largo plazo ni una
estrategia geopolítica definida; ha sido un proceso resultante de formas de apropiación
privadas del territorio en las que incidieron los ciclos del comercio exterior de materias
primas agropecuarias y la dinámica de la economía nacional. (…). La política agraria de
alguna manera estimuló directa o indirectamente la expansión de una frontera sin
suficiente atención estatal, en lugar de buscar una mejor distribución de los recursos al
interior de la frontera para evitar la gran destrucción de recursos que ha significado la
colonización, la inmensa generación de conflictos, la irracional explotación del suelo y la
gestación de movimientos y protestas contra el Estado.

“[Además], el mecanismo más importante de expansión de la ocupación del espacio ha


sido la construcción de vías, detrás de las cuales van los colonos en búsqueda de nuevos
horizontes, aquellos que les ha negado la estructura agraria del interior y las áreas
urbanas industrializadas. Con las vías camina una ganadería extensiva que invade áreas
no aptas para esa actividad con una amenaza seria a los equilibrios ecológicos y a la
biodiversidad”395.

410. Esto lo reafirma Legrand, quien ha analizado que en ciertas regiones,


especialmente de expansión agrícola, los campesinos colonizan tierras vírgenes que
después le son disputadas por los grandes hacendados. En palabras de esa investigadora
las regiones de frontera no fueron más democráticas que las áreas más antiguas del país:
“en la mayoría de los lugares se encuentra la proyección de desigualdades preexistentes
en el interior de las nuevas regiones”396.

392
PNUD, Colombia rural. Razones para la esperanza. Informe Nacional de Desarrollo Humano, Bogotá, septiembre de
2011, pág. 102.
393
Absalón Machado, Colonización, una revisión del aporte de la academia y sus implicaciones en la formulación de
políticas, Bogotá, documento de trabajo (multicopiado), 2003, pág. 1 (disponible en: www3.udenar.edu.co).
394
Ibid.
395
Ibid.
396
LEGRAND, Catherine, “Colonización y violencia en Colombia: perspectivas y debate”, en Ministerio de Agricultura, El agro
y la cuestión social, Bogotá, TM Editores- Banco Ganadero-Caja Agraria-Vecol, mayo de 1994, pág. 8
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411. En este entendido, se dan algunos procesos de colonizaciones de tierras de


manera masiva en los años sesenta, pero a diferencia de unas más pacíficas como las de
los años treinta, los colonos de la frontera fueron víctimas de violencia y, como reacción,
empezaron a considerar al Estado como enemigo del que había que defenderse:

“Al tiempo que las relaciones entre colonos y terratenientes se volvieron más conflictivas,
durante la violencia ocurrió un cambio importante en la relación entre colonos y el Estado.
Las zonas de colonización más antiguas empezaron a identificarse con el Partido
Comunista, aparecieron grupos de autodefensa y las llamadas ‘repúblicas independientes’
y el gobierno mandó el ejército a atacar esas zonas con miles de civiles muertos. (…) los
colonos empezaron a ver al Estado como un enemigo y no como un aliado como lo fue en
los treinta; ‘el campesinado ya no buscó estimular la intervención del Estado sino más bien
defenderse de él” 397.

412. En ese nuevo contexto, tal como lo advierte el profesor Alejandro Reyes sobre este
tipo de regiones de colonización: “(…) en las nuevas regiones en formación no hay una
estructura consolidada de relaciones de poder y de propiedad, los actores sociales
colectivos surgen y se disuelven con igual velocidad, y la sociedad civil pierde su espacio a
favor de dominios armados que de facto sustituyen al Estado, cuya acción no supera la
presencia nominal, esporádica o la ocupación militar”398.

413. Este aislamiento de gran cantidad de pobladores por parte del Estado, facilitó la
percepción de éste como un agente externo, extraño y desconocedor de las realidades
regionales, facilitó la creación y expansión de grupos insurgentes en la zona y la cercanía
de la población con ideologías de izquierda, incluso con una alta presencia de miembros
del Partido Comunista Colombiano quienes se encargaban de gran parte de la actividad
política local.

414. Lo anterior tendrá dos impactos que llevan a comprender la entrada del
paramilitarismo en la zona: por un lado, se crea una delimitación de cuáles son las bases
sociales de las guerrillas, es decir, quiénes son sus simpatizantes y potenciales
colaboradores; por otro lado, se tendrá como generalizado el hecho que cualquier
protesta social, forma de agremiación o acción colectiva será vista como contrario al
orden empresarial normal, y por ende, asociado a las fuerzas de izquierda, legal e ilegal,
presentes en la región. Así pues, el civil, altamente politizado, terminará como se verá
más adelante, siendo el más afectado por las acciones de todos los grupos en contienda.

397
MACHADO, Absalón, op. cit.
398
Alejandro Reyes, “Territorios de la violencia en Colombia”, Renán Silva (editor), Territorios, regiones, sociedades,
Bogotá, Universidad del Valle-Departamento de Ciencias Sociales-Cerec, 1994.
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415. Las distintas colonizaciones. Hasta la década de 1980 Urabá fue objeto, por lo
menos, de tres procesos de colonización vinculados entre sí. En primer lugar, durante la
primera mitad de la centuria se produjo la colonización antioqueña que, a la postre, sería
el pilar tanto de la consolidación temprana del latifundio ganadero como del posterior
auge agroindustrial. En segundo lugar, entre los años 1940 y 1960, población pobre,
despojada de tierra y perseguida por la violencia conservadora se sumó a la colonización
urabaense, proceso que influyó en la colonización campesina de terrenos baldíos, la
construcción de los nuevos centros urbanos y la configuración política de Urabá como una
región eminentemente liberal. Y, desde el primer lustro de los años 1960, ocurrió la
colonización bananera, a cuyas dimensiones se refirió García, en 1996, como sigue:

“En Urabá, en un lapso muy corto de tiempo entran en relación cerca de 16.000 obreros
directos, 4.500 directos y alrededor de 300 empresarios al interior de 20.000 hectáreas de
banano (el 4,5% del total de las hectáreas utilizadas de la región, que a su vez constituyen la
tercera parte de su área total). Este conglomerado social le produce al país dividendos del
orden de 200 millones de dólares al año. (…).

“De este modo, si a comienzos de los años cincuenta los municipios del eje bananero
escasamente llegaban a los 15.000 habitantes, en 1990 ya habían sobrepasado la barrera de
los 200.000”399.

416. Así por ejemplo, durante el período comprendido entre 1940 y 1960, “campesinos
sin tierra que llegaron de lo que hoy es Córdoba y de otras partes de la costa Atlántica y
personas desplazadas por la violencia política del centro y del occidente del país, (…)
tumbaron selva, se instalaron en el territorio de Urabá y formaron caseríos, sumándolos a
los ya existentes”400.

417. Igualmente, durante las décadas de los cincuenta y los sesenta, comenzó a
formarse otra tradición política que muy rápidamente se convertiría en un ingrediente
fundamental de la sociedad urabaense: el comunismo401. Durante el período que fue
declarada una fuerza política ilegal, el Partido Comunista Colombiano definió a Urabá
como objetivo de “una de sus más importantes estrategias de penetración”402.

418. Durante las décadas de 1960 y 1970, las lógicas que rigieron los procesos de
colonización de Urabá dieron origen a diferentes conflictos, entre los cuales se destacan
tres: el conflicto por la tierra, el conflicto laboral y el conflicto urbano. Esos conflictos

399
Clara I. García, Urabá. Región, actores y conflicto 1960-1990, Bogotá INER-Universidad de Antioquia, 1996, pág. 102.
400
Comisión Andina de Juristas-Seccional Colombiana (CAJ-SC), Urabá, Bogotá, CAJ-SC, febrero de 1994, pág. 15.
401
“El Partido Comunista Colombiano (PCC) no era ajeno a la importancia que hacia el futuro podría tener la región de
Urabá. En una decisión visionaria asigna a un cuadro profesional la tarea de construir la organización en esa zona de escaso
control gubernamental y con evidentes posibilidades para la acción política. Corporación para la Defensa y Promoción de los
Derechos Humanos-Reiniciar, ob. cit., nota 69, pág. 20.
402
GARCÍA, ob. cit., nota 52, págs. 32.
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constituyeron el marco en el cual se ejercieron diferentes modalidades de violencia.


Durante la década de 1980, esos conflictos dejaron de manifestarse como problemáticas
aisladas y se convirtieron en facetas de un conflicto regional, cuyo centro estuvo
representado por controversias obrero-patronales cada vez más militarizadas.

419. En 1960, el Partido Comunista de Colombia fundó el Sindicato de Colonos y


Asalariados, y realizó “la primera gran asamblea convocada por el Partido en Apartadó, a
la que asistieron 180 personas”403. Según un informe secreto, a finales de 1962 células
comunistas ya tenían influencia entre los trabajadores de empresas bananeras en
Chigorodó, Dabeiba, Mutatá y Turbo404 (especialmente en el corregimiento de Apartadó).

420. Colonización Bananera. En Urabá, la United Fruit Company, bajo el nombre de


Frutera de Sevilla, fue la empresa pionera de la producción industrial de banano para la
exportación405. La compañía estadounidense identificó que, respecto a otras regiones
como las localizadas en países centroamericanos, las zonas aledañas al golfo de Urabá
reunían algunas ventajas para la producción de banano como “suelos nuevos y libres de
enfermedades, además de estar protegidos de las tormentas tropicales [y] tierra de bajo
costo”406.

421. A finales del siglo XIX, en los alrededores de Ciénaga (Magdalena), la United Fruit
Company estableció un enclave económico caracterizado por el control casi plenamente
monopólico de “la producción, comercialización y transporte de la fruta”407. Desde 1959,
en Turbo, comenzó la explotación intensiva de banano bajo un nuevo modelo productivo
en el que la Frutera de Sevilla (capital extranjero) y los productores nacionales (capital
doméstico) se dividieron tareas en el marco de una asociación408. García sintetizó el
derrotero inicial que tuvo la puesta en marcha del nuevo modelo de la empresa
estadounidense de la siguiente manera:

403
Corporación para la Defensa y Promoción de los Derechos Humanos-Reiniciar, ob. cit., nota 69, pág. 21.
404
Véase informe secreto enviado al Gobernador de Antioquia el 29 de diciembre de 1962. Citado en Carlos M. Ortiz, Urabá,
tras las huellas de los inmigrantes, Bogotá, ICFES, 1999, pág. 81.
405
Según Ocampo, la producción de banano en Urabá contribuyó significativamente a la diversificación de la base
agropecuaria exportadora del país, que también incluyó productos tales como algodón, azúcar, bananos y flores. Véase
Ocampo, ob. cit., pág. 313.
406
Leonardo Agudelo, “La industria bananera y el inicio de los conflictos sociales del siglo XX”, revista Credencial Historia,
Bogotá, Nº 258, junio de 2011 (disponible en: www.banrepcultural.org/blaavirtual/revistas/credencial/junio2011/industria-
bananera-agudelo).
407
Fernando Botero, “La evolución de la economía bananera en la década de los ochenta: la experiencia colombiana”, en
Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), Cambio y continuidad en la economía bananera, San José,
FLACSO-CEDAL-FES, 1988, pág. 50 (disponible en: www.flacsoandes.org/biblio/catalog/resGet.php?resId=46679).
408
Dos experiencias negativas habrían conducido a la United Fruit Company a optar por un nuevo modelo de producción.
De una parte, el número y la dimensión de los problemas laborales que debió enfrentar el consorcio estadounidense en las
plantaciones magdalenenses. De otra parte, la confiscación que hizo de sus tierras el nuevo régimen cubano (1960). Este
último hecho habría inspirado al vicepresidente de la compañía, Jack Fox, para justificar la renuncia al establecimiento de
plantaciones propias con un razonamiento propio de la guerra fría: “convirtiendo a muchas personas en capitalistas se
impone una barrera al comunismo” (frase citada en C. I. García, ob. cit., pág. 26).
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“En 1962 la Frutera de Sevilla llega efectivamente a un acuerdo con la Corporación


Financiera de Desarrollo Industrial de Colombia para la explotación de más de 10.000
hectáreas de terreno en banano. En 1963 comienza la asignación de los terrenos y la
financiación de plantaciones para los empresarios nacionales, y en 1964 se realizan los
primeros embarques de exportación”409.

422. Según el nuevo modelo, la empresa “Frutera de Sevilla” se encargó tanto de la


inversión inicial requerida para obras de infraestructura y créditos de fomento para los
productores nacionales, como de la asistencia técnica, la comercialización y el transporte
de la fruta. Por su parte, los empresarios colombianos se encargaron del proceso
productivo como tal y de la gestión de las relaciones laborales al interior de las fincas410.
La participación de cada parte en el total de las ventas fue la siguiente: “(…) por cada
dólar originado de la venta de banano en los mercados consumidores, el productor recibe
apenas once centavos y los ochenta y nueve restantes son absorbidos por el
transportador, importador y comercializador final del producto”411.

423. Aunque no tuvieron importancia entre los primeros productores nacionales,


posteriormente los antioqueños se convirtieron en el sector hegemónico de los
empresarios bananeros nacionales412. Su participación fue decisiva para que se creara en
1966 la Unión de Bananeros (UNIBÁN) en respuesta a la pretensión de las empresas
extranjeras de imponer “condiciones inadmisibles”413:

“En el año de 1965 las corporaciones multinacionales United Brands (Chiquita), Castle &
Cooke (Dole) y Delmonte, controlaban la tecnología, el cultivo, el transporte, el mercadeo
y las finanzas del banano en el mundo. (…). Este monopolio de la industria bananera llevó
a un destacado grupo de colombianos vinculados a las actividades agrícolas y pecuarias de
la región de Urabá a crear la Unión de Bananeros de Urabá S.A., el 26 de enero de 1966
con el propósito de vender la fruta en los mercados internacionales.

“En abril de 1969 Unibán realizó el primer contrato de venta en el exterior, como reacción
a la baja del 20% en el precio que ofrecía United Brands a los productores colombianos de
banano. Este mismo año Colombia exportó 32.000 toneladas de banano, de las cuales el
88% correspondió a Frutera de Sevilla, subsidiaria de United Brands y sólo un 12% a
Unibán. Un año más tarde, su participación se elevó al 58% del total exportado” 414.

409
C. I. García, ob. cit., p. 38.
410
Véase F. Botero, ob. cit., págs. 50 y 51.
411
F. Botero, ob. cit., pág. 51.
412
“Los antioqueños no iniciaron la colonización empresarial ni la construcción de Turbo. (…). La mayor parte de los
antioqueños llegaron a los pueblos a poner negocio y desde ahí salieron a comprar fincas, una vez supieron que el negocio
del banano era bueno. Ellos no fueron bananeros al principio”. Testimonio de Gonzalo Samper, citado en C. I. García, ob.
cit., pág. 39.
413
Expresión textual del testimonio de Gonzalo Samper, citado en C. I. García, ob. cit., pág. 38.
414
Unión de Bananeros (Unibán), Antecedentes e historia (disponible en: www.uniban.com/home_espanol.htm). Según
Agudelo, “la comercializadora en la cual se agruparon los productores para exportar directamente sin la mediación de la
filial de la United, fue creada el 26 de enero de 1966 como sociedad anónima por 218 accionistas, propietarios de
plantaciones. Sus objetivos consistían en el mercadeo de banano y ñame, la investigación, planeamiento y ejecución de
proyectos agroindustriales y la búsqueda de la integración de todas las etapas del banano: del cultivo al consumo; junto
con el mejoramiento de los métodos y sistemas de producción”. L. Agudelo, ob. cit.
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424. El establecimiento de la industria bananera fue principalmente el resultado de una


colonización empresarial. Por supuesto, los empresarios-colonos requirieron el concurso
de diferentes poblaciones. En consecuencia, la colonización bananera generó “una
compleja sociedad donde conviven diversos grupos humanos originarios de varias
regiones del país”415. Con base en diferentes fuentes, se pueden citar algunas de las
poblaciones que participaron activamente de la colonización bananera:

“Mientras hacheros sinuanos descuajaron sin misericordia la selva del Darién, la fortaleza
silenciosa de los chocoanos fue el sustento de la construcción de miles de kilómetros de
canales para drenar los cultivos416. Tal como lo advierte un empresario, “los que
aguantaban todo eran los chocoanos. Hubo entonces una enorme afluencia de material
humano del Chocó… y son muy buenos… los llaman La Pala Negra” 417. En algunas fincas,
tractoristas y empleadas domésticas provinieron del Tolima. La mayoría de capataces
fueron traídos de Ciénaga (Magdalena), pues los empresarios no tenían “ni idea de que
era una mata de ese plátano”418. Progresivamente, gentes venidas de Caldas y Quindío se
encargaron de proveer el servicio de transporte, entre las poblaciones nacientes y las
fincas, que todos requerían419.

425. Conflicto por la tierra. Una de las causas del conflicto regional en Urabá ha sido
el conflicto por la tierra, pues ésta “es el recurso básico en torno al cual se articula el
proceso colonizador”420. Durante el período comprendido entre los años 1960 y 1980, los
conflictos se expresaron principalmente mediante invasiones como medio privilegiado
“para tomar posesión de la tierra en un territorio supuestamente abierto al proceso
colonizador”421 y “manifestación de la confrontación por un recurso sobre el cual no hay
claridad jurídica en un medio donde no hay tampoco medio regulador de los
desacuerdos”422.

426. En términos generales, la consolidación del latifundio ganadero antioqueño en


Arboletes, Necoclí, San Juan de Urabá y San Pedro de Urabá, todos municipios del norte
de Urabá, fue uno de los resultados que arrojaron los procesos de colonización antes
mencionados423. Asimismo, la producción bananera avanzó según un proceso de
concentración de la propiedad: entre 1977 y 1986, el número de fincas de menos de 30
hectáreas cultivadas con banano pasó de representar el 33,1% de todas las fincas al

415
A. Mª. Bejarano, ob. cit., pág. 55.
416
Véase J. Osorio, ob. cit., pág. 156.
417
Testimonio de Gonzalo Samper, citado en C. I. García, ob. cit., pág. 40.
418
Testimonio de Gonzalo Samper, citado en C. I. García, ob. cit., pág. 40.
419
Osorio registra: cada uno de ellos los trajo a Urabá un cuñado, o se vinieron detrás de un primo que trabajaba en una
proveedora o en una bananera (…); sus parientes les dijeron que necesitaban carros y choferes, y se montaron cinco en un
Willys 46 en Montenegro, en Circasia, en Calarcá, en La Tebaida (…). // La génesis del transporte y tránsito de Apartadó
está en ellos. (…). Ellos son... los emigrantes quindianos que llegaron a Urabá desde el inicio de la etapa fundacional de
Apartadó. Mejor, son los “chiveros” quindianos que convirtieron un gentilicio en sinónimo de una profesión”. J. Osorio, ob.
cit., págs. 157-158.
420
C. I. García, ob. cit., pág. 80.
421
C. I. García, ob. cit., pág. 80.
422
C. I. García, ob. cit., pág. 92.
423
Véase CAJ-SC, ob. cit., pág. 29.
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13,5%. Además, las nuevas colonizaciones afectaron la tenencia de tierra de por lo menos
84 comunidades indígenas424.

Conflicto laboral: auge sindical y reacción patronal.

427. Las relaciones obrero-patronales y las protestas de ciertos sectores por mejores
condiciones son un elemento central para entender la violencia que se ejerció en la región
contra las organizaciones obreras. En este sentido, se debe tener en cuenta el rápido
crecimiento de la mano de obra, unas formas de relaciones patronales precontractuales,
el involucramiento de los grupos guerrilleros con el movimiento obrero en la región,
ausencia de regulación de conflictos por parte del Estado o de otro garante y falta de
cumplimiento por parte del Estado en convenios internacionales sobre la protección a los
trabajadores. Brevemente se exponen los principales aspectos de estos elementos.

428. Desde la década de los sesenta, las relaciones laborales fueron el principal centro
de la vida social de Urabá. La incorporación de un número progresivamente mayor de
personas, como mano de obra, a diferentes y crecientes actividades productivas se tornó
un proceso altamente conflictivo, en buena medida porque “trabajadores y patronos [se
vieron] por primera vez sometidos a una relación contractual de tipo empresarial-
capitalista”425. En general, no se trató justamente de “relaciones contractuales modernas,
con reglas definidas y conocidas por las partes”426.

429. En 1960, ya existían sindicatos de agricultores, braceros y oficios varios en Urabá;


en consecuencia, la colonización bananera sencillamente dio lugar a una segunda etapa
de auge sindical, cuya principal característica fue la organización por finca de los
sindicatos de trabajadores bananeros427. Quizás el período de mayor auge fue el bienio
1975-1976, cuando los paros laborales adquirieron importancia en la Frutera de Sevilla,
Maderas del Darién y en Coldesa. La necesidad de contar con mecanismos de inspección-
regulación laboral y las precarias condiciones de trabajo ocasionaron que la afiliación a
sindicatos se convirtiera en la principal forma de asociación en Urabá. La existencia de un

424
En 1962 y 1965, por ejemplo, los territorios de los indios Cunas en Caimán Nuevo fueron objeto de invasiones masivas.
En la segunda ocasión la invasión de aproximadamente 700 hectáreas provocó que los indígenas recurrieran a la defensa
armada. Véase CAJ-SC, ob. cit., pág. 26.
425
C. I. García, ob. cit., nota 52, pág. 107.
426
Ibídem.
427
En 1960, existían por lo menos siete sindicatos. Desde 1964, los sindicatos que se crearon en las fincas bananeras
normalmente pertenecieron a alguna federación nacional (mencionada entre paréntesis): SINTRABANANO (1964, FEDETA,
orientación comunista); SINTRAINAGRO (1972, UTC, primero controlado por el MOIR y luego por el EPL); SINTRAIFRU
(1973, CTC, luego SINALTRAIFRU); SINTRAEXPOBAN (1977, UTC); SINDEJORNALEROS (1978, MOIR); SINRAUNIBAN
(1982); y UTRAIBAN (1985, MOIR). C. I. García, ob. cit., nota 52, págs. 108-111.
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mayor número de sindicatos, sin embargo, no significó la institucionalización de las


relaciones laborales:

“Urabá se encuentra entonces en 1982 –18 años después de iniciada a la exportación


bananera, de haberse convertido en el segundo exportador mundial de banano y con una
economía consolidada en su ‘eje’–, sin condiciones laborales pactadas, sin interlocutores,
[es decir], organizaciones sindicales ni patronales capaces de pactar civilizadamente, con
términos altamente polarizados de violencia que enmarcan las relaciones obrero-
patronales y sin poderes públicos con capacidad mediadora real”428.

430. La reacción patronal pretendió desestimular la vinculación de los trabajadores a los


sindicatos. En primer lugar, respecto a la presentación de los pliegos de peticiones “la
pauta general fue la de acudir en primera al despido”429. En segundo lugar, durante la
década de los setenta, los patrones también apelaron a los despidos masivos y
preventivos430, aunque el instrumento al que recurrieron con más frecuencia fue la
elaboración de “‘listas negras’ que circulaban entre los empresarios (…) con los nombres
de los trabajadores de su hacienda que consideraba no debían ser vueltos a enganchar
por otros finqueros”431. En tercer lugar, a comienzos de los años 1980 ya estaba forjada
una tradición patronal que no consideraba la mediación de instituciones estatales como
posible alternativa de solución a conflictos laborales y, en cambio, tiende
sistemáticamente a darle un tratamiento de fuerza a éstos, inclusive apelando a la
militarización de lugares de trabajo432:

“(…) la mayoría de los sindicatos debieron actuar clandestinamente durante la primera


década de producción bananera ante la represión desatada por los empresarios frente a
los intentos organizativos y reivindicativos de los trabajadores. La persecución sindical en
todas sus formas (despidos, detenciones, amenazas, asesinatos), la militarización de las
fincas bananeras, la introducción de contratistas para sabotear la lucha sindicalizada, la
firma de pactos colectivos sin intermediación de los sindicatos, el incumplimiento de
convenciones colectivas e incluso la compra de pliegos de peticiones, fueron algunas de
las modalidades utilizadas por los propietarios para debilitar el movimiento sindical.

“A esta reacción empresarial frente a los trabajadores, debe sumarse la ausencia del
Ministerio de Trabajo en Urabá, vacío que fue llenado por la presencia militar y la
consiguiente solución de los conflictos laborales por la fuerza” 433.

428
C. I. García, ob. cit., nota 52, pág. 119.
429
C. I. García, ob. cit., nota 52, pág. 113.
430
Al respecto García señala: “Algunos ejemplos los proporcionan los despidos entre 1974 y 1975 en fincas como Pradomar
y Currulao (120 trabajadores), Villanueva (63 trabajadores), La Margarita (80), Rancho Amelia (150), María del Rosario
(130) entre otros”. C. I. García, ob. cit., nota 52, pág. 115.
431
Ibídem. C. I. García, ob. cit., nota 52, pág. 115.
432
Al respecto, advierte García: “Acudir a la militarización de las fincas o sus empacadoras es también una medida
inveterada en la región. Así lo atestigua el caso del primer paro laboral registrado en la zona, en la Hacienda Pradomar y
Currulao en 1970, también en 1977 en CODELSA (dedicado al cultivo de palma africana) y en 1978 en la factoría de las
cajas de cartón de UNIBAN. En ambos casos se trata de desalojar a los trabajadores que ocuparon las instalaciones
respectivas durante el paro. (…). La vía no armada para dirimir conflictos laborales pareciera ser poco frecuente”. C. I.
García, ob. cit., nota 52, pág. pág. 120.
433
A. Mª. Bejarano, ob. cit., págs. 61 y 62.
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431. La exclusión del comunismo como confesión política válida dentro del sistema
democrático y la estigmatización del sindicalismo como práctica emblemática del
comunismo exacerbaron el conflicto obrero-patronal. El anticomunismo imperante
condujo a que se confundiera casi definitivamente “la lucha por el reconocimiento de
derechos entre oponentes (obreros-patronos) con la lucha contra un enemigo”434:

“Se polarizan entonces aún más los términos de la relación obrero-patrono, de forma que
las representaciones que construía cada grupo sobre su oponente estaban demarcados
por una confrontación antagónica. El estigma negativo de la cruzada anticomunista
reforzaba la lógica de una relación social que garantizaba ser no sólo conflictiva, sino
violenta, pues así no sólo los patronos vieron en sus obreros ‘un enemigo’, sino lograron
con su comportamiento que estos últimos ‘confirmaran’ en la práctica la tesis que sostenía
que el capitalismo era ‘el enemigo de clase’”435.

432. Sobre la complejidad sindical y las relaciones de grupos ilegales con algunos
miembros de estas organizaciones se profundizará en el acápite dedicado al análisis del
fenómeno de violencia contra trabajadores organizados.

433. Conflictos sociales urbanos. A diferencia de lo ocurrido en otras zonas bajas de


colonización, en Urabá muy rápidamente cobró importancia la ocupación del suelo urbano
que, en general, se caracterizó por ser un proceso caótico. “Innumerables, cotidianas y
masivas invasiones urbanas en Urabá aparecen ante las instituciones públicas como la
necesidad de sectores populares por vivienda”436. Al igual que en el caso de los predios
rurales, las invasiones fueron unas de las principales modalidades de apropiación del
espacio y urbanización. Dos de las invasiones más importantes en la región ocurrieron en
Apartadó, en 1971 y 1982: una dio origen al barrio “El Concejo” y la otra al “Policarpa
Salavarrieta”437.

434. En consecuencia, la cuestión urbana también fue una “dimensión central del
proceso de poblamiento y la construcción regional [pues] Urabá se construye no sólo con
una alta concentración urbana sino también con una malla urbana significativamente
amplia y jerarquizada”438. Casi simultáneamente a los conflictos rurales, los urbanos
cobraron importancia; se manifestaron primero como disputa por el suelo urbano y
después como demandas de servicios públicos de los pobladores urbanos al Estado. “En
general, se presiona primero por acueducto, luego por energía eléctrica y finalmente por
434
C. I. García, ob. cit., nota 52, pág. 120.
435
Ibídem. C. I. García, ob. cit., nota 52, pág. 120.
436
C. I. García, ob. cit., nota 52, pág. 95.
437
García señala que las ambas invasiones “fueron promovidas por algunos de los concejales y a la hora de negociar la
tierra con los dueños, asignar lotes y repartir derechos, todas las corrientes políticas estuvieron comprometidas. En el
primer caso liberales, anapistas y comunistas; en el segundo, liberales y comunistas más uno que otro funcionario de la
administración local”. C. I. García, ob. cit., nota 52, pág. 84.
438
C. I. García, ob. cit., nota 52, pág. 92.
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las dos”439. Y aunque hubo algún grado de presencia institucional, especialmente en el eje
bananero, su oferta “fue ampliamente desbordada por las demandas sociales, y sobrevino
lo que pudiéramos llamar un ‘infarto institucional’”440.

435. Puerto para el contrabando, narcotráfico y entrada de armas. El tráfico


ilegal de mercancías ha sido una constante histórica de la región de Urabá. Ser litoral y
ser parte de la frontera internacional colombiana, al mismo tiempo que mantener siempre
algún grado de aislamiento respecto al resto del país, son factores que han favorecido el
mantenimiento de mercados ilegales en el territorio de Urabá, el cual se mantuvo
integrado durante varios siglos al mercado mundial mediante el contrabando.

Presencia de las FARC y el EPL en la región: gestación de los grupos


guerrilleros

436. La fuente de las guerrillas, al menos las de origen rural, tienen como principal
problema la falta de consolidación del Estado en regiones periféricas441. Así, uno de los
principales informes sobre el conflicto armado, realizado en 2003 por el Programa de
Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) afirmaba: "el conflicto se ha ensañado sobre
todo en la ‘periferia’ campesina y ha sido marginal al sistema político colombiano. Esta
‘marginalidad’ —que sin duda ha disminuido de manera dramática en los últimos años—
fue sin embargo decisiva para formar el carácter y los modos de actuar de los
armados”442.

437. De esta forma, se debe comprender que el surgimiento de las guerrillas y,


posteriormente, de las autodefensas y paramilitares son algunas de las expresiones de la
falta de consolidación del Estado en zonas periféricas y de la realidad indisputable sobre
el carácter difuso de legalidad e ilegalidad en que se mueven muchas economías y formas
de relación social y autoridades alternas a la estatal en zonas periféricas, o lo que se ha
mencionado en este texto como órdenes paraestatales.

438. Sobre los conceptos “periferia” –y su contraposición– “centro”, debe hacerse la


siguiente indicación:

439
C. I. García, ob. cit., nota 52, pág. 93. En 1966, la Electrificadora de Antioquia consideró que no era necesaria la
interconexión eléctrica para Urabá. La red eléctrica sólo llegará a Apartadó, en 1980. Y, seguramente, no fue tanto el
resultado de la presión ejercida mediante movilizaciones, convocadas principalmente por comerciantes, como consecuencia
de la presión ejercida por los empresarios bananeros. Véase Ibíd., pág. 94.
440
C. I. García, ob. cit., nota 52, pág. 77.
441
PNUD, “Informe de desarrollo humano. El Conflicto, un callejón con salida”, 2003.
442
PNUD, Ibid, p. 21.
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“Como referente geográfico, político y cultural, la ‘periferia’ alude a regiones menos


pobladas, más campesinas, menos integradas al mercado, con menos poder político y a
menudo discriminadas o explotadas por el ‘centro’. Pero esta alusión debe matizarse en
cuando menos cuatro sentidos: primero, ‘periferia’ y ‘centro’ no son categorías rígidas,
sino atributos relativos y de grado; segundo, su extensión e intensidad varían con el paso
del tiempo; tercero, no son internamente homogéneos sino que admiten diversas
modalidades; cuarto, y en especial, no son universos aislados sino que interactúan de
maneras muy complejas443.

439. Estas relaciones entre centros y periferias, son importantes para comprender las
relaciones regionales y locales del conflicto violento generado por las guerrillas y los
grupos paramilitares como se verá en el desarrollo de este escrito.

440. Otra reflexión que ha logrado establecer la Sala es que, al igual que el surgimiento
y desarrollo del fenómeno paramilitar, la formación y evolución de las guerrillas, en tanto
organizaciones políticas y militares, se ha dado en medio de la confluencia de factores
históricos y coyunturales de distintos elementos, es decir que no existe una sola causa de
sus orígenes y sus factores de evolución son múltiples y complejos.

441. En el caso de la insurgencia, se trata de organizaciones que toman decisiones en


cabeza de sus mandos (no es en este sentido, una violencia dispersa, aleatoria y sin
objetivos), de tal modo que estas organizaciones ilegales son el producto de una serie de
actos racionales, reflexivos y conscientes donde los individuos fundadores y miembros de
órganos decisorios tomaron opciones estratégicas y posturas ideológicas a partir de lo que
conocían del sistema político, su exclusión e incapacidad y de lo que habían aprendido de
cómo reaccionaba el Estado (aduciendo que la reacción estatal era de violencia
generalizada para reprimir, en lugar del diálogo y la negociación).

442. En ese sentido, las FARC, el ELN, el M-19 y el EPL deben pensarse, adaptando la
noción de estructuración de Giddens444, como organizaciones y doctrinas y no como
eventos que surgieron espontáneamente producto de las circunstancias y la exclusión
político-social. Es decir, las organizaciones armadas son el producto de individuos que
decidieron tomar la vía armada (mientras que en otros países e incluso en Colombia, otros
actores han tomado otras vías no armadas para resolver sus problemáticas), como un

443
PNUD, “Informe de desarrollo humano. El Conflicto, un callejón con salida”, p. 21.
444
Giddens concibe que las estructuras no actúan sobre las personas determinándolas, sino que se debe tener en cuenta la
capacidad autoreflexiva de los individuos y colectivos, así como el conocimiento tácito o “conciencia práctica” que poseen
los humanos y que utilizan dentro de sus interacciones sociales, de esta manera, los individuos utilizan las estructuras para
ejercer sus acciones. Bajo esta visión, los individuos están ocupándose constantemente de sus acciones, reflexionan de
manera regular sobre las condiciones de éstas, incorporando de esta forma, el conocimiento adquirido sobre el camino y
cambiando según el contexto sus decisiones, estrategias y objetivos, no son en este sentido, víctimas de las circunstancias,
el contexto o las estructuras. Véase: GIDDENS, Anthony. La constitución de la sociedad. Fundamentos para una teoría de la
estructuración. Buenos Aires: Amorrortu, 1995.
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factor real de poder para lograr las “transformaciones”; sus fundadores no percibían
posibles las vías de derecho y de participación política por la vía democrática445.

443. Esta precisión, aunque probablemente evidente hoy día, es necesaria consignarla
porque el determinismo en la producción y reproducción de la violencia debe ser mirado
con cautela y no existen justificaciones suficientes para comprender el recurso a la
violencia como única o última opción. En consecuencia, la revisión del surgimiento de las
guerrillas o del paramilitarismo no pretende constituirse en atenuante que justifique la
acción violenta de uno u otro grupo, sino que su análisis se hace con propósitos
hermenéuticos.

444. De esta manera, detrás de la violencia armada “no hay sólo situaciones objetivas,
sino también la elaboración de estrategias, desarrollos organizacionales y construcción de
idearios políticos por parte de los actores”446. Así, la clásica percepción de las causas
objetivas de la violencia, no son suficientes para comprender el fenómeno complejo
violento. Así pues, es intención de la Sala, en los párrafos siguientes, analizar con mejores
herramientas interpretativas la evolución de esta violencia reciente.

Origen Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo


(FARC-EP)

445. El origen de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo


(FARC-EP)447, como se ha mencionado previamente, está relacionado con los efectos de
La Violencia bipartidista de fines de los cuarenta y la década del cincuenta. En esa época,
desde el sur del departamento de Tolima partió la “Columna de marcha” (1950), una
guerrilla liberal que llegó al río Davis y sus miembros tomaron posesión de diversos
territorios, bajo un modelo que se denominó por analistas posteriormente como de
“colonización armada”448, disputando tierras y asegurándolas por la vía de la “violencia
defensiva”.

445
Así por ejemplo Ferro y Uribe, conciben que “un actor político no surge como resultado automático de unas estructuras
sociales o políticas. Los grupos insurgentes no operan necesariamente bajo la lógica del comportamiento-respuesta y por lo
tanto no son sólo una respuesta a la violencia estructural o institucional”, FERRO, Juan Guillermo y URIBE, Graciela. El
orden de la guerra: Las FARC-EP, entre la organización y la política. Bogotá: CEJA, 2002, p. 18
446
Ibíd.
447
Las FARC fueron fundadas en mayo de 1964 como organización de autodefensa campesina y adaptan dicho nombre en
1966. La expresión Ejército del Pueblo “EP” se adicionó en la séptima conferencia de las FARC en 1982, y a partir de ahí se
denominan FARC-EP.
448
El concepto de "colonización armada" está asociado al surgimiento de las FARC y hace relación al proceso de
descomposición campesina, por la vía de la expropiación violenta por terratenientes y en un segundo aspecto, hace relación
al esfuerzo de recomposición del mismo campesinado, por la vía de “la violencia defensiva". RAMÍREZ, William. Estado,
Violencia y Democracia. Bogotá, Tercer Mundo Editores e Instituto de Estudios Políticos y Relaciones Internacionales de la
Universidad Nacional, 1990, p. 65.
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446. De este proceso inicial, los llamados “limpios”, o ala liberal de esta guerrilla se
acogieron a la amnistía de Rojas Pinilla, mientras que el ala de orientación más comunista
o llamados “comunes”, bajo el mando de “Charro Negro” y “Manuel Marulanda”
persistieron como autodefensa campesina449. Así, crearon el modelo de lo que entonces la
izquierda denominaba “zonas liberadas” o que más adelante se denominarían también
“Repúblicas Independientes” como lo llamó el congresista Álvaro Gómez Hurtado: zonas
donde no había presencia institucional y el dominio lo detentaba la autodefensa
campesina comunista.

447. Este modelo sería replicado por otros núcleos agrarios. De tal forma que
generarían las guerrillas desde donde surgirían iniciando la década del sesenta los núcleos
poblacionales que compondrían luego las FARC. Así, el conflicto armado campesino
constituyó un antecedente fundamental en la constitución de las FARC450. No obstante, las
FARC no pasarían a ser representantes del campesinado sino que también desde sus
inicios se dieron procesos de exclusión y violencia frente a los que no estaban en su
espectro ideológico o de acuerdo con sus métodos. Así, las FARC crearon “formas de
exclusión política y social frente a campesinos asentados desde antes en las zonas de
colonización, a las que llegaban los grupos de autodefensa comunista en su repliegue
frente a la represión estatal. Muchos campesinos fueron excluidos y desplazados de sus
tierras sino querían estar bajo las directrices del mando local guerrillero451.

448. Estos núcleos de autodefensas agrarias estuvieron concentrados en Marquetalia


(sur del Tolima), Natagaima y Chaparral (Tolima), Riochiquito (Cauca), Alto Pato
(Caquetá) y en el Alto Guayabero (Meta). En estas zonas, los campesinos crearon un
sistema autogestionado de producción y defensa de sus tierras frente al avance de los
latifundistas bajo la modalidad de “colonización armada”.

449. La ruptura entre los guerrilleros liberales fieles al Partido Liberal y los liberales con
tendencias comunistas, al frente del cual se puso Pedro Antonio Marín (alias “Manuel
Marulanda”) constituyó un primer factor en el surgimiento de dicho grupo, al separarse de
las políticas del Partido Liberal. Otro elemento fundacional, fue el operativo por parte del
Estado a la zona de Marquetalia en mayo de 1964 a partir del cual se crea el mito
fundacional de las FARC.

449
PNUD, op. cit. 2003, p. 28.
450
González, José Jairo. El estigma de las repúblicas independientes 1955-1965, Cinep, Bogotá.
451
González, José Jairo, op. cit., p. 43 y ss.
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450. Ésta operación militar creó como reacción que el grupo de 48 hombres
comandados por “Manuel Marulanda” que escaparon del ataque se estructurarán
incipientemente como una guerrilla móvil. En síntesis, son dos los elementos o
antecedentes fundacionales de las FARC: la violencia defensiva de grupos de liberales
para defenderse de los terratenientes que querían expulsar a los campesinos de esas
tierras teniendo como punto de partida la confrontación de Villarica (Tolima) de 1955 y
los ataques estatales a Marquetalia452.

Visión inicial de las FARC: agrarismo, comunismo y guerra de guerrillas

451. En este grupo primario de guerrilleros consolida su visión comunista y


antiburguesa, posición doctrinal que es avalada inicialmente por el Partido Comunista
Colombiano −PCC− al enviar a Jacobo Arenas y Hernando González. Igualmente, se
asumían antinorteamericanos (puesto que detrás de los ataques del Ejército, esta
incipiente guerrilla argumentaba se encontraba el Plan LASSO, estrategia
contrainsurgente del gobierno de Estados Unidos) y con una visión no de resistencia
agraria como lo fueron en un principio, sino con una perspectiva nacional, es decir, con
miras a crear lazos en todo el territorio colombiano y movilizar a las masas,
especialmente, campesinas.

452. El apoyo inicial del PCC estaba dado en función de orientación más ideológica que
en apoyo armado, y tenía como principal punto de confluencia con el naciente
movimiento guerrillero la valoración que hacía dicho partido de conformar "autodefensas
de masas contra la violencia reaccionaria"453. Aunque debe aclararse que ese momento el
PCC no consideraba la lucha armada como un instrumento para acceder al poder, sólo
como una forma de resistencia armada de masas454.

453. De esta forma, el ataque a Marquetalia, lejos de acabar con los grupos de
autodefensa campesina profundizó su proceso de consolidación y les dio un elemento

452
Intervención Alejo Vargas, En la audiencia de legalización de cargos del postulado “FREDDY RENDÓN HERRERA” alias “El
Alemán”, septiembre 23 de 2011, Magistrada Ponente Dra. Uldi Teresa Jiménez, rad. 110016000253200782701, p. 15.
Sobre este suceso, el informe del PNUD de 2003 afirmaba que “En 1955 el ataque masivo del Ejército en Villarrica (Tolima)
causa el desplazamiento de colonos armados hacia Marquetalia, Riochiquito, El Pato, Guayabero, el Duda y el Ariari, donde
crean las llamadas “repúblicas independientes” bajo influencia del Partico Comunista. Aunque su “comunismo” fue más una
forma de organizar la vida diaria, esta palabra, en pleno auge de la Guerra Fría, disparó las alarmas y escaló la respuesta
militar” PNUD, op. cit. 2003, p. 28
453
Comité Central del Partido Comunista de Colombia, Treinta años de lucha del Partido Comunista de Colombia, Bogotá,
Editorial Los Comuneros, sin fecha.
454
Ibid. Autores como Pizarro remontan el apoyo ideológico del PCC a los grupos de autodefensa campesina mediante la
pronunciación del partido comunista en su IX congreso en 1961, sobre la necesidad “de combinar todas las formas de
lucha” y en el X Congreso del PCC donde se aprueba la tesis sobre la lucha guerrillera en Colombia. PIZARRO, Eduardo, op.
cit. 1991.
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simbólico fundacional de que podían resistir a los operativos del Estado. Posteriormente,
pasan a conformarse en una organización político-militar, creando así el llamado “Bloque
Sur” en la Primera Conferencia en donde surge su primer documento constitutivo y
político: “Programa Agrario de las Guerrillas” (1964)455.

454. En esta conferencia se fija como objetivo prioritario la subsistencia del movimiento
y se dan los lineamientos generales partiendo del principio esencial de convertirse en una
guerrilla móvil para distraer las fuerzas oficiales. Su dirigente político para entonces,
Jacobo Arenas lo destacaba así:

“La idea de la Conferencia del Bloque Sur consistía en una guerrilla que hoy puede estar
aquí y mañana a leguas de distancia, que opera un mes en un departamento y en el
entrante en otro, y a los tres meses en otro departamento, y en un año pudo haber
recorrido parte considerable del país peleando; esa era la idea....La idea al mismo tiempo
quiere significar que la guerrilla siendo pequeña todavía, se puede hablar de 50, 100 ó 200
hombres, no es de fácil ubicación por parte del ejército.”456

455. Las FARC iniciaron su proceso de expansión a otros territorios mediante la táctica
de penetración territorial,457 donde un centro de control va estimulando y dirigiendo el
desarrollo periférico. Dicha centralización permitía que el poder estuviera concentrado y
no se formaran liderazgos autónomos que con el tiempo podrían generar conflictos458.

456. Esta es una organización creada de manera autónoma y ha cambiado en el tiempo


según sus debates y decisiones internas. Se consideran una organización política,
adoptando una ideología comunista y una forma de organización militar, con tácticas de
movilidad y una disciplina y estructura interna, autónoma e independiente del PCC.

457. En este sentido, fueron primero un grupo social y militar que adoptó
posteriormente una base ideológica y un proyecto político-militar. Diferente de otras
guerrillas, como el ELN por ejemplo, que primero tuvieron una fuente ideológica y luego
buscaron el apoyo popular.

455
El 20 de julio de 1964, la resistencia de Marquetalia, redactó el “Programa Agrario de las Guerrillas” donde planteaban
una reforma agraria que liquidara las bases de la propiedad latifundista, y hacia finales de 1965 en Marquetalia fue
convocada la Primera Conferencia Guerrillera, donde nace el Bloque Sur, como movimiento guerrillero integrado por los
destacamentos o movimientos agrarios de autodefensa de Riochiquito, Natagaima, Chaparral, el Pato, Guayabero y
Marquetalia., PIZARRO, Eduardo, op. cit. 1991.
456
ALAPE, Arturo. Tirofijo: los sueños y las montañas. 1994
457
FERRO y URIBE, op. cit. 2002, pp. 25-39
458
La estrategia de penetración territorial contrasta con la de difusión territorial, en la cual, líderes o élites regionales van
generando espontánea y descentralizadamente estructuras y ejércitos armados como es el caso de los grupos de
autodefensas y paramilitares y por ende, es más difícil de consolidar un liderazgo nacional y estable. FERRO y URIBE, op.
cit. 2002.
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458. Su principio fundacional es entonces una lucha de tipo guerrillera revolucionaria,


con base campesina y con el propósito de resistir al Estado. Sus objetivos revolucionarios
se fundan en los problemas agrarios que ya se han mencionado, más en la Segunda
Conferencia (1966) declaran que su lucha trasciende dicho problema y que su movimiento
busca el poder político en todo el territorio nacional, para cambiar el modelo económico y
el sistema político459.

459. Estos principios fundacionales de resistencia, carácter agrario y revolucionario,


fueron creando una cohesión e identidad de la organización. Asumieron desde sus inicios
que su diferencia militar con respecto al Estado no es una imposibilidad (como lo
demostró su mito fundacional en Marquetalia); y su carácter agrarista le da un soporte
popular campesino (en apoyo, logística y posibilidades de reclutamiento), el cual le ayuda
estratégicamente a la penetración territorial y le permite cooptar jóvenes campesinos
conforme van llegando a nuevas zonas, así, empieza su lento pero constante crecimiento
y penetración en distintos territorios del país.

Ejército Popular de Liberación (EPL): una versión maoísta de la subversión

460. Otro movimiento insurgente que surgió en los sesenta fue el Ejército Popular de
Liberación (EPL), originado desde la fragmentación del Partido Comunista y alimentado
desde la variante maoísta del comunismo Este estuvo concentrado especialmente en el
bajo Cauca antioqueño y las regiones de Córdoba y Urabá.

461. El EPL surge cuando el Pleno del Partido Comunista Marxista Leninista (PCML), que
era una disidencia del Partido Comunista (separado de este en 1964)460, ordenó el
traslado de los cuadros al campo461 y asumió la concepción de guerra de guerrillas
maoísta (de la Revolución de Mao Zedong en China). Tuvieron influencia no directa de
China, sino de Albania, en donde habían recibido algún entrenamiento, contactos y
algunos pocos recursos dos de los líderes de lo que se llamaría el EPL, Pedro Vásquez
Rendón y Pedro León Arboleda462.

462. Se tiene un primer registro de su presencia desde diciembre de 1967, cuando


lanza su primera proclama en Uré, en el Alto San Jorge (Córdoba). En la zona selvática

459
Pizarro, Eduardo, Insurgencia sin revolución. La guerrilla en Colombia en una perspectiva comparada, Tercer Mundo,
IEPRI, Bogotá, 1996.
460
CALVO, Fabiola. Colombia: EPL, una historia armada. Madrid, Vosa, 1996
461
PNUD, 2003, op. cit. p. 29
462
VILLARRAGA, Álvaro y PLAZAS, Nelson. Para reconstruir los sueños – una historia del EPL. Fondo Editorial para la Paz,
1994.
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entre el Sinú y el San Jorge, esta incipiente guerrilla pretendió crear modelos de gobierno
campesino autónomos a las que denominaron “juntas patrióticas”, el gobierno de Carlos
Lleras trató de disuadir que no se conviertan en otra guerrilla enviando a una
parlamentaria del Movimiento Revolucionario Liberal con este propósito para entablar
conversaciones con Julio Guerra, sin éxito. En 1968, el Ejército llegó a desestructurar
prácticamente toda la organización con múltiples operativos en lo que el EPL llamaría la
“primera campaña de cerco y aniquilamiento” 463.

463. Durante los años setenta tuvieron poca participación en el conflicto, no obstante
pudieron persistir a varias de los operativos que los dejaron en más de una ocasión al
borde de la extinción. En los años ochenta, debido a su cercanía con el M-19 y algunas
facciones de las FARC pudieron fortalecerse y entrar en negociaciones con los distintos
gobiernos que ofrecieron treguas y amnistías.

464. En su mayoría fue desmovilizado en 1991 con alrededor de 2000 hombres, pero
muchos de ellos pasaron posteriormente a conformar otras guerrillas o las filas de grupos
paramilitares como se verá en el acápite sobre el desarrollo de estos grupos.
Adicionalmente, una facción del EPL, dirigida por alias “Caraballo”, continúa como
disidencia hasta el presente.

465. A diferencia de otras guerrillas que han tenido orígenes más espontáneos en una
región, el EPL se implantó en Córdoba como parte de una decisión estratégica464 de sus
directivas a nivel nacional buscando aprovechar en este departamento “las ventajas en
torno a los antecedentes de las guerrillas liberales, la vigencia de conflictos agrarios no
resueltos, la existencia de sindicatos agrícolas organizados por el Partido Comunista, en
un contexto en el que el Estado no hacía presencia”465. En sus primeras manifestaciones,
el EPL se movilizaba cerca de Tierralta, en Juan José, en río Sucio y en Montelíbano; y en
Uré, ocurrió la primera toma466. Se ubicaron en dirección hacia Córdoba –ríos Sinú y San
Jorge– y hacia el Abibe.

466. La fuerza ideológica que acompañó al EPL, que era seguidora del pensamiento
maoísta de la guerra, fue la convicción de que la lucha revolucionaria debía realizarse en

463
VILLARRAGA y PLAZAS, 1994, op. cit. p. 43.
464
De las tres zonas que se habían elegido para focalizar fuerzas armadas del EPL, la del Alto Sinú y el Alto San Jorge en el
sur de Córdoba fue la única que se gestó. Las otras dos (Magdalena Medio y el zona norte del Valle del Cauca para
conectarse con Chocó y Risaralda, fracasaron por la captura de sus líderes o por el fortalecimiento de la presencia de otras
guerrillas. Álvaro Villarraga y Nelson Plazas. Para reconstruir los sueños: una historia del EPL. Fondo Editorial para la Paz,
1994, Bogotá, pp. 30 y ss.
465
Ibid, p. 47
466
VILLARRAGA y PLAZAS, pp. 39 a 43.
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las zonas rurales y con el campesinado467. En esta línea, el EPL, en sus inicios buscó
aprovechar el inconformismo que se estaba generando alrededor del incumplimiento de
diversos pactos que se habían hecho con las guerrillas liberales en los cincuenta.

467. Incluso varios ex guerrilleros que habían estado bajo el mando de Mariano Sandón
y Julio Guerra, líderes guerrilleros liberales en la época de La Violencia, integraron las filas
en los años 60 del EPL. Igualmente, en las zonas donde surgió el EPL tuvo un importante
arraigo el Movimiento Revolucionario Liberal (MRL), que incluso aportó algunos cuadros al
EPL, que decepcionados por el viraje de Alfonso López Michelsen que retornó al
oficialismo liberal, buscaron canalizar su inconformismo en la naciente guerrilla468.

468. De particular importancia en esos años fueron el movimiento campesino y el


movimiento estudiantil, el primero de ellos liderados principalmente por la Asociación
Nacional de Usuarios Campesinos (ANUC). Igualmente se gestaron diversas luchas
sociales, durante las cuales, muchos de los líderes estudiantiles se vincularon al
movimiento campesino y a otras expresiones sociales y políticas, incluido a las distintas
guerrillas, como el EPL469.

469. El contexto de Córdoba es importante para comprender esta movilización


campesina pues fue la fuente de múltiples luchas agrarias y toma de tierras durante
varios momentos en la década del sesenta y setenta, ante la frustración de una
interrumpida reforma agraria que adelantaba el Instituto Colombiano para la Reforma
Agraria (Incora) y que había impulsado la administración de Carlos Lleras Restrepo (1966-
1970).

470. Frente a la resistencia de terratenientes y hacendados de la región para que se


diera efectivamente esta reforma agraria, se dieron múltiples movilizaciones,
recuperaciones de tierras, marchas, paros cívicos y tomas de oficinas del Incora, al punto
que entre 1970 y 1973, las marchas y tomas campesinas de Córdoba y Sucre sumaban
alrededor de un 30% del total nacional de las acciones colectivas campesinas470.

467
GARCÍA, Clara y ARAMBURO, Clara. Geografías de la guerra, el poder y la resistencia Oriente y Urabá antioqueños 1990-
2008, 2010, Odecofi, INER, p. 300.
468
VICEPRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA, Ejército Popular de Liberación. Programa Presidencial de Derechos
Humanos y DIH. Observatorio de Los Derechos Humanos en Colombia, 2002
469
VICEPRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA. Dinámica de la violencia en el departamento de Córdoba, op. cit. 2009, p. 86
470
ROMERO, Mauricio. “Transformación rural, violencia política y narcotráfico en Córdoba, 1953-1991”. En: Controversia,
No. 167, CINEP.
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471. En este marco de conflictos agrarios y descontento popular, la estrategia del EPL
fue la de desarrollar la lucha armada en zonas rurales, dentro del marco de una guerra
popular prolongada, buscando la conformación de una base de apoyo campesina. Tanto
en Córdoba como en Urabá, el EPL “alentaba invasiones en las haciendas tradicionales de
ganadería extensiva, caracterizadas por un suelo casi improductivo y cuyos propietarios
ausentes eran sometidos al pago de “vacunas”471.

472. Posteriormente entraron en la práctica delictiva del secuestro y de la extorsión, lo


que llevaría a una cruenta oposición por parte de gremios locales que apoyaron formas de
seguridad privada y luego, grupos paramilitares para atacar estas modalidades delictivas
de la guerrilla, al punto que lograron desactivarla casi completamente en esta región del
Caribe.

Crecimiento y desarrollo de los principales grupos subversivos en la región de


Córdoba y Urabá

473. Crecimiento de las FARC. Las FARC contaban en los años sesenta con no más
de 300 hombres. La estrategia de expansión, definida en la Segunda Conferencia (1966)
contemplaba, según la base marxista de la interpretación de la realidad, que debían
crecer lentamente, mantenerse como una guerrilla móvil, con capacidad de operar en
varios departamentos, para lo cual requerían ser austeros y rápidos, generando así la
capacidad de evadir la confrontación con las Fuerzas oficiales472.

474. Su plan inicial no contemplaba duraciones, tiempos o cronogramas de


cumplimiento. Su fundamento doctrinario, basado en el marxismo, sostenía que “la
sociedad democrática, laxa y burguesa, se descompondría por sí sola en el egoísmo a
ultranza que preconizaba y en las costumbres utilitaristas que eran su práctica. Bastaba
tener, entonces, una organización y una metodología para forzar el desenlace a la hora de
la agonía del ‘sistema”473.

475. Las FARC pensaban que progresivamente superarían la etapa de las debilidades y
“debería venir, con el tiempo, la del crecimiento progresivo hasta llegar a la fase de
equilibrio con las fuerzas regulares del Estado. Y a partir de allí, la gran ofensiva para la
toma del poder por medio de las armas y las masas, organizadas y politizadas para la

471
GARCÍA, Clara y ARAMBURO, Clara, op. cit. 2010, p. 16
472
VALENCIA, Álvaro, op. cit. 1993, pp. 131 y 132.
473
Ibid. p. 132
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lucha. Por estas razones, en los doce años siguientes a su creación, hasta 1977, el
protagonismo militar de las FARC fue apenas esporádico”474

476. Debe aclararse que si bien en la década del sesenta y setenta, las FARC no fueron
protagonistas a nivel nacional sí se fueron consolidando como líderes en lo local. Se
asumieron como autoridad e incluso tenía legitimidad ante la población en zonas donde
era inocua o esporádica la presencia de las autoridades estatales, incluso se concebía en
algunas de estas regiones que las FARC eran una suerte de sustituto del Estado al
impartir órdenes, impartir justicia, resolver disputas entre pobladores y construir algunas
vías de manera rudimentaria.

477. En las primeras dos décadas de su existencia, las FARC preferían ocupar regiones
de colonización distantes de centros importantes, donde existían conflictos agrarios no
resueltos y vacíos institucionales. De esta forma, se podía trazar una relación entre las
zonas donde llegaban las FARC y el hecho que la población tuviera necesidades básicas
insatisfechas475.

478. En estas zonas, el movimiento guerrillero solía gozar del apoyo campesino debido
a que controlaban y ordenaban la zona, reducían los robos y el abigeato. Al respecto,
Rangel manifiesta:

“Es inocultable el apoyo popular que la guerrilla tiene en esas zonas [de colonización]
donde, para qué negarlo, es reconocida por los campesinos como autoridad legítima,
pues desde tiempo atrás ejerce el monopolio de la fuerza, de la justicia y del tributo
y, además, ha promovido la organización popular conformando una red de juntas de
acción comunal y de organizaciones campesinas por medio de las cuales controla a la
población en forma absoluta. La guerrilla en esas zonas ha sido un factor de orden
social y económico...”476.

479. Posterior a la II Conferencia, en la que se plantea la "necesidad de expandirse",


las FARC empiezan a abrir otros destacamentos. Hacia la III Conferencia (1969) se
plantea la creación del IV Frente en Magdalena Medio477 pero poco después, se retoma la
necesidad de ser más móviles y dispersos, debido a que a finales de ese año se da un
revés militar de las FARC en Quindío, en la confrontación con fuerzas del Estado en el que
474
Ibid.
475
ECHANDÍA Camilo (1999), “Expansión territorial de las guerrillas colombianas: geografía, economía y violencia”, en:
Malcom Deas y María Victoria Llorente Reconocer la Guerra para construir la Paz, Bogotá, Editorial Norma; y CUBIDES
Fernando, OLAYA Ana Cecilia y ORTIZ Carlos Miguel (1998), La violencia y el
municipio colombiano 1980 -1997, Bogotá, Facultad de Ciencias Humanas Universidad Nacional, Colección CES.
476
RANGEL, Alfredo, “Las FARC-EP: una mirada actual”, en: Malcom Deas y María Victoria Llorente Reconocer la Guerra
para construir la Paz, Bogotá, Norma, 1999.
477
En marzo de 1969, se realiza la tercera conferencia en Guayabero, donde se determina la creación del IV frente de las
FARC en el Magdalena Medio, para que funcione en los límites entre Boyacá y Santander, VÉLEZ, Maria Alejandra, Evolución
y expansión territorial de las FARC y el ELN, CEDE, 2002: 4.
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muere el comandante guerrillero “Ciro Trujillo” y pierden una parte importante de su


tropa y armamento.

480. Debido a ello retoman la iniciativa de ser dispersos, concentrar poca tropa y
movilizarse en distintos departamentos del país. Este proceso inicial de crecimiento lento
entre la década del sesenta y setenta es descrito por Rangel de esta forma:

“En el marco de la ausencia de políticas de largo plazo encaminadas a enfrentar el


desafío impuesto por los grupos insurgentes, las FARC han vivido una lenta pero
continua expansión militar, política y económica desde su fundación en 1964. A
diferencia de otros grupos que surgieron de manera relativamente abrupta, tales
como Sendero Luminoso en Perú, el Viet-Cong en Vietnam, o los Huk en Filipinas,
las FARC vivieron un largo proceso de hibernación que duró cerca de veinte años en
los que después de iniciadas sus primeras acciones armadas, sobrevivió de manera
inercial y vegetativa en muchas zonas marginales del país.” 478

481. No obstante esta fase de relativa inercia e hibernación, las FARC fueron creando
zonas de presencia paulatinamente con los frentes como estrategia expansiva479. Esta fue
adoptada en la IV Conferencia de las FARC (1971) en la que se abandona la modalidad de
destacamento y se adapta la de expansión vía creación de frentes.

482. También en dicha conferencia se decide la creación de un frente en Urabá para


asentarse en zonas más integradas a la vida nacional y aprovechar la movilización obrera
de esta región, relacionada con la producción bananera. Las zonas con presencia de
núcleos de expansión de las FARC entre finales de los sesentas y principios de los setenta
se pueden apreciar en el siguiente mapa:

478
RANGEL, Alfredo, Guerra Insurgente, Bogotá: Intermedio, 2001, p. 365.
479
Jacobo Arenas mencionaba en entrevista a Alape que luego de la IV Conferencia en 1971 “Todo el mundo sale con
entusiasmo de crear los frentes, comisiones que marchan en una y otra dirección, su trabajo consiste en la organización de
la población, en el desenmascaramiento de la política oficial del gobierno, en lo económico, en lo militar…” “La necesidad
de los frentes, surge de la necesidad de establecerse ya no como destacamentos en diversas áreas del país, sino
propiamente como frente, con todas sus posibilidades... Los frentes se convierten en guerrillas madres, que se desplazan
en diversas columnas a áreas lejanas del propio epicentro del frente. La idea es que los frentes den columnas, que luego
van convirtiéndose en nuevos frentes a medida y capacidad de sus desplazamientos, para que el nuevo frente ya en su
propia y absolutas capacidad, se desdoble en columnas bajo la dirección del frente...” ALAPE, Arturo. Tirofijo: los sueños y
las montañas, 1994.
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Núcleos
expansión
destacamentos
FARC

SESENTAS E INICIOS SETENTAS

Mapa Presencia de las FARC años 60 e inicios 70:


(780 hombres aprox.480 en 4 núcleos de expansión)

483. A partir de 1977 se genera una multiplicación de acciones y las FARC salen de su
relativo estado vegetativo481. Ese año se da una confluencia de diversos factores que
llevarían a las FARC a un estado de mayor actividad bélica y política. En el aspecto bélico,
las FARC habían aumentado su número de frentes y, en particular, el comandante
"Argemiro Martínez" había estado a cargo de la creación de varios de estas nuevas
estructuras. Igualmente, se tiene registro que para dicha época y probablemente también
ideado por el mismo comandante “Martínez” se planteó el impuesto del "gramaje" al
cultivador de coca y en reciprocidad, las FARC daba protección al cultivador482. Esta
vinculación con el campesinado cultivador de la hoja de coca les daría soporte logístico,
financiero y base poblacional que podía vincularse a las filas de la guerrilla483.

484. Para fines de los años setenta, el número de frentes había aumentado a 10 y
estaban en las zonas del sur de Tolima, Huila y Bota Caucana; Norte del Cauca; región de
La Uribe, Mesetas y Lejanías en el departamento del Meta; igualmente tenían presencia
en la región del Magdalena Medio; Oriente Antioqueño; Arauca y parte de la región de
Urabá. Contaban con 1000 hombres aproximadamente, en 10 frentes484.

480
VÉLEZ, Maria Alejandra, op. cit. 2002
481
Fundación Seguridad y Democracia, 2003.
482
VALENCIA, Álvaro, 1993, op. cit. 148
483
Los desmovilizados guerrilleros que están en el programa de Reintegración coordinado por la Alta Consejería para la
Reintegración, han manifestado que se vinculaban a estas organizaciones en parte por falta de oportunidades y por
necesidades económicas, otros han mencionado que una de las causas de vinculación a la guerrilla era porque habían
iniciado como raspachines de coca y eventualmente algunos ingresaron al grupo como una vía de sustento o convicción.
484
ESCOBEDO, Rodolfo y ECHANDÍA, Camilo "Violencia y Desarrollo en el Municipio Colombiano" 1994
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485. En 1978 se realiza la VI Conferencia en la que se fijan como prioridades la


capacitación de los guerrilleros y el desdoblamiento de frentes, para que se llegara a
tener presencia con al menos un frente en todos los departamentos485. Entrando los años
ochenta, con la VII Conferencia (sostenida entre mayo y junio de 1982, finalizando el
gobierno Turbay) se establece un proyecto expansivo y se traza un plan para la toma del
poder por la vía armada, con lo que las FARC entran en una etapa de crecimiento y
desarrollo sostenido486. A los frentes se les exigió manejar un cierto número mínimo de
hombres, y debían aportar una cuota a toda la organización, lo que demandaba
crecimiento en las actividades delictivas de extorsión, abigeato, robos y secuestros, entre
otros.

486. En menos de 10 años logran crecer más de lo que habían hecho en las tres
décadas anteriores, no solo en número de efectivos sino en su cubrimiento territorial.
Igualmente, se establece la ubicación de diversos frentes en la Cordillera Oriental, con un
doble propósito: establecer un eje de despliegue para aislar el país andino y costero del
amazónico y llanero487 e irse acercando estratégicamente hacia el centro del país, objetivo
que empezarían a cumplir hacia mediados de los noventa488.

487. Entre 1982 y 1984 se dan varios acercamientos del gobierno del presidente
Belisario Betancur y se entra en una fase de latencia y poca confrontación, pero en esta
misma época las FARC siguieron creciendo, ampliando de 10 frentes a 20 en pocos años.
La política de diálogo, amnistía y apertura política estaba en consonancia con la opinión
pública, debido a la opinión favorable que tenían ciertas guerrillas como el M-19 en la
población y a que, según lo reveló una encuesta de la revista Cromos en 1982, el 77% de
los colombianos estaba a favor de un diálogo con las guerrillas489.

488. Esta época de escasa confrontación por el Estado fue aprovechada para aumentar
el número de tropa guerrillera, ampliar su base política y fortalecer sus finanzas mediante
extorsiones y secuestros490. Esto fue ratificado posteriormente por el mismo jefe
guerrillero Jacobo Arenas quien en entrevista con Arturo Alape manifestó que

485
Jacobo Arenas, en: Arturo Alape (1994). Arenas afirmó sobre la VI conferencia que en ella “se comienza a estructurar la
concepción de lo que sería un ejército guerrillero (…) Se discutieron las cuestiones estratégicas sobre la necesidad de los
desdoblamientos de los frentes y la ocupación de nuevas áreas de influencia, como una parte de la estrategia de lo que
debía ser ese pequeño ejército”, citado en Alape, op. cit. 1994.
486
RANGEL, Alfredo, Colombia: Guerra en el Fin de Siglo, Bogotá: Tercer Mundo Editores, 1998, p. 12
487
RANGEL, Alfredo, "Estado actual del conflicto armado en Colombia". Ponencia, Oficina del Alto Comisionado para la Paz,
27-28 de noviembre de 1996.
488
ECHANDÍA, Camilo, Expansión territorial de la guerrilla colombiana: geografía, economía y violencia, mayo 1997, CEDE
Uniandes, documentos de trabajo No. 1, Grupo Paz Pública p 5.
489
PARDO, Rafael, op. cit. 471
490
Esta visión es manejada por PIZARRO, Eduardo, op. cit. 1991 y GRANADA, Camilo. La evolución del gasto en seguridad y
defensa en Colombia 1950-1994, Universidad de los Andes, Grupo Paz Pública, documento número 6, 1997
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precisamente cuando las FARC habían aprobado en su VII Conferencia (1982) una
estrategia expansiva se encontraron con la tregua de Belisario Betancur, lo cual les
posibilitó trabajar en el frente político y fortalecer su plan de expansión. Así, la tregua les
facilitó la creación de nuevos frentes y presencia en otras zonas casi sin ningún
obstáculo491.

489. Estos diálogos crearon malestar en algunos sectores de las Fuerzas Armadas que
concebían que dar un respiro a las guerrillas (los diálogos incluían también a otros grupos
insurgentes) era una señal de debilidad y representaba un riesgo para la nación.

490. Como parte de dichos procesos de paz, en 1984 nace la Unión Patriótica (UP) y
poco tiempo después, se inició la llamada "guerra sucia" contra miembros de esta
organización, la cual se concentró en atacar a varios de sus líderes y a cientos de
partidarios mediante la combinación de asesinatos por parte de algunos sectores de las
Fuerzas Estatales, el paramilitarismo y el narcotráfico.

491. La posibilidad de un desarme y desmonte de la guerrilla se vio truncado entonces


por la falta de acuerdos con el gobierno, el ataque generalizado a miembros de la UP 492 y
el efecto reaccionario que esto causó en las FARC al percibir que el cambio de las armas a
la política no se podía llevar a cabo realmente.

492. Para 1985, las FARC contaba con cerca de 3600 efectivos493 y seguía su proceso
expansivo: tenían presencia con un estimado de 24 estructuras en casi todos los
departamentos de la cordillera oriental, y había iniciado frentes en algunas zonas de la
región Caribe y del oriente del país como se observa en el siguiente mapa:

491
Jacobo Arenas citado por ALAPE, Arturo, op. cit. 1994.
492
Estos ataques aumentaron desproporcionalmente a partir de las elecciones de 1986, en las que varios candidatos de la
UP fueron elegidos en los concejos municipales y lograron 3 senadores y 6 representantes en el Congreso. Si bien estas
cifras no eran altas, para la derecha y el narcotráfico, la izquierda (“los comunistas” como solían denominarlos) estaban
ganando fuerza y debían ser contrarrestados, declarándolos objetivos. Cfr. Informe del Defensor del Pueblo para el
Gobierno titulado “Estudio de casos de homicidio de miembros de la Unión Patriótica y Esperanza, Paz y Libertad”, nota 76,
de octubre de 2002, Corte Interamericana de Derechos Humanos, Caso Manuel Cepeda Vargas Vs. Colombia, expediente de
prueba, tomo III, anexo 1 a la demanda, folios 1213 a 1214).
493
Cifras del Ministerio de Defensa.
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Frentes
FARC
19

5
24
18
12
4 20
23 10
11
9

22
21

17 65

8 6 7
15
2 14
1
3
13

INICIOS OCHENTAS

Mapa Presencia de las FARC mediados años 80


(3600 hombres aprox. en 30 estructuras)

493. Para fines de los ochenta, las FARC contaba con un número aproximado de 5000
hombres ubicados en 40 estructuras con influencia en casi todos los departamentos494.
Entre los años 1988-1991, se da un período de ajuste por parte de la guerrilla y
acercamientos en un segundo proceso de negociación con las guerrillas bajo el gobierno
de Virgilio Barco. Estos años se caracterizaron por una serie de modificaciones internas
que tuvieron tanto el gobierno como las guerrillas al tener que enfrentar el ajuste
financiero y estratégico como consecuencia del final de la Guerra Fría y los resultados de
los procesos de paz495.

494. Por otro lado, hubo poca confrontación por parte del Estado por las diversas
treguas que se dieron en los ochenta y porque la principal preocupación de las
autoridades eran la captura de los grandes capos del narcotráfico496.

494
SÁNCHEZ, Fabio et al. Op. cit. p. 10
495
Restrepo, J. Spagat, M, Vargas, J., 2006: 519
496
ECHANDIA, Camilo, “Expansión territorial de las guerrillas colombianas: geografía, economía y violencia”. En: Deas,
Malcom, y Llorente, Maria Victoria (comp.) Reconocer la guerra para construir la paz, Bogotá, Norma, 1999.
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Presencia del EPL en la región: un problema local con incipiente presencia


nacional

495. Como previamente se mencionó, el EPL fue una guerrilla cuya localización fue
direccionada desde sus directivas y no un surgimiento espontáneo local. Igualmente,
desde su mismo inicio, fue prácticamente extinguida por el Ejército Nacional que
desarticuló su cúpula inicial y al grueso de sus combatientes.

496. Pese a esta realidad, el EPL persistió bajo la consigna “mientras exista un solo
hombre, el EPL seguirá combatiendo”, llegando incluso a rechazar la propuesta de
amnistía del Gobierno de López Michelsen.

497. En los años setenta, el EPL tuvo un resurgimiento cuando el V frente de las FARC
con presencia en Urabá, en cabeza de “Bernardo Gutiérrez”, desertó de esa guerrilla y
pasó a conformar las filas del EPL. Luego, en su Segundo Congreso, le dieron énfasis a
crecer sus hombres mediante reclutamiento, acercarse a ciudades intermedias y a la
preparación de guerrilleros, fortaleciendo así sus frentes en Urabá y Córdoba. Sus
principales fuentes de financiación fueron la extorsión a ganaderos y hacendados, el
secuestro y algunos pocos recursos procedentes de sus contactos en la República
Socialista de Albania. Así, hacia 1978 se verá una reactivación de esta guerrilla en el
noroeste del país (norte de Antioquia y Córdoba).

498. En los años ochenta, el EPL fue una guerrilla pequeña y de poca importancia en el
país, no obstante, fue una preocupación local en Córdoba y Antioquia debido a la práctica
recurrente del secuestro. Con la tregua del gobierno de Belisario Betancur, el EPL se
fortaleció y visibilizó públicamente (como nunca antes) y entró en varias de las mesas con
el M-19, con los que tenían afinidad en su actuar y porque varios de los dirigentes de
ambas guerrillas tenían relación de amistad y trabajo político desde décadas atrás.

499. El EPL en la década del ochenta se concentró en zonas de desarrollo agroindustrial


con énfasis en Urabá; además, estuvo presente en zonas con capas de campesinos y
colonos y de expansión de nuevos grupos de terratenientes (Urabá y Córdoba); y en la
región del Viejo Caldas. Amplió también su influencia en Antioquia, Putumayo y Norte de

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Santander. En los centros urbanos, tuvo alguna tradición desde la década del setenta en
Medellín principalmente.497

500. El 20 de noviembre de 1985, Oscar William Calvo, máximo líder del EPL fue
asesinado en el centro de Bogotá. La versión de sus exmilitantes luego desmovilizados es
que fue el producto de una operación impartida por la Compañía de Operaciones
Especiales de la Brigada XX del Ejército498.

501. El EPL luego conformaría destacamentos en el sur del Cesar, la región del
Catatumbo, Ocaña y Cúcuta en Norte de Santander, Bucaramanga, Barrancabermeja en el
departamento de Santander. Igualmente, hicieron presencia en La Guajira, Sucre,
Risaralda, parte de Bolívar y Putumayo.

502. El proceso de paz adelantado con el EPL entre finales de los ochenta y 1990, se
reflejó en la reducción de la violencia en algunas de las zonas bajo su influencia (alto Sinú
y San Jorge en Córdoba y el Eje Cafetero). Un sector del EPL, sin embargo se escinde de
la organización y liderado por “Francisco Caraballo”, continuó en la insurgencia, con
alrededor de 400 hombres hacia mediados de los noventa.

Expansión del EPL en Córdoba y Urabá

503. Iniciando la década del ochenta en el departamento de Córdoba, comenzó a


operar el V Frente de las FARC que provenía del Norte de Antioquia al mando de Alfredo
Alarcón Machado, alias “Román Ruiz”, que incursionó en el Alto San Jorge descendiendo
del Nudo de Paramillo. Su crecimiento inusitado fue tal, que dio lugar a que de él
surgieran los Frentes 18, 35, 36 y, a su vez, con hombres de cada uno de estos grupos se
organizara el Frente 58, para actuar en el Departamento del Chocó.

504. Por su parte, el ELN se instaló en el municipio de Pueblo Nuevo, el PRT (Partido
Revolucionario de los Trabajadores), en San Andrés de Sotavento, mientras que el EPL499
se extendió a casi toda la geografía de departamento de Córdoba.

497
ECHANDÍA, Camilo, Expansión territorial de la guerrilla colombiana: geografía, economía y violencia, mayo 1997, CEDE
Uniandes, documentos de trabajo No. 1, Grupo Paz Pública
498
CALVO, Fabiola. Colombia: EPL, una historia armada. Ediciones Vosa, 1997, p. 16.
499
EPL proclamó su nacimiento en Río Verde, zona rural de Tierralta en el Departamento de Córdoba y declaró al Alto Sinú
como zona de guerra. (El Ejército Popular de Liberación –EPL- o el Águila fue creado en diciembre de 1967 como brazo
armado del Partido Comunista Marxista Leninista línea Pekín -PCML-, luego que se escindiera el Partido Comunista -PCC- en
1964 entre línea Moscú y línea Pekín; en el Corregimiento de Juan José, Quebrada Uré, Municipio de Puerto Libertador en el
Alto San Jorge, Llanos del Tigre y Manso, de donde se extendieron luego a las sabanas de Córdoba y al Urabá con los
Frentes Francisco Garnica Narváez y Pedro León Arboleda).
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505. Comenzó entonces una época de violencia en Córdoba por cuenta del EPL,
convirtiéndose en un grupo temido por la población general y los propietarios, pues tuvo
injerencia en todos los estamentos y estratos de la sociedad. Esta zona del territorio
nacional vivió desde finales de los años 70 y durante toda la década de los 80, una dura
época violenta marcada por la incursión de los grupos guerrilleros que operaban en el
país.

506. El EPL alcanzó gran penetración en la sociedad Cordobesa, pues, contaba dentro
de sus integrantes a diversos intelectuales y miembros de organizaciones de izquierda,
quienes hacían reuniones en Montería en dos puntos reconocidos.

507. El PCML se infiltró, entre otros, en el Colegio Nacional José María Córdoba y en la
Universidad de Córdoba, hasta donde llegaban muchos ganaderos a pagar las extorsiones
y boleteos. Fidel Castaño (alias “Rambo”), había adquirido extensas tierras en Antioquia y
en Córdoba. Como se ha mencionado en anteriores decisiones de la Sala, había formado
con sus hermanos, algunos amigos y trabajadores de sus fincas un grupo de “exterminio
a guerrilleros”, motivado entre otras razones por el secuestro y asesinato de su padre en
Segovia, nororiente antioqueño500, por parte de supuestos integrantes de grupos
guerrilleros.

508. A raíz de su organización militar, decidió instalar su primer campamento en el


departamento de Córdoba, entre los municipios de Valencia y Tierralta, más exactamente
en su finca “Las Tangas”. Fue así como los primeros reclutados por Castaño, se
conocieron con el nombre de “Los Tangueros”, quienes iniciaron una estrategia
contraguerrilla en el sur de Córdoba, especialmente en contra del EPL. En el año 1987 se
expandieron hacia la zona ganadera de Urabá, y así surgió un grupo que más adelante se
conocería con el nombre de Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU), la
cual heredaría Carlos Castaño, hermano menor de Fidel. El modus operandi de esta
organización sería reconocido en otros lugares, por su nivel de violencia masiva e

500
“En 1978 Fidel Castaño Gil, llegó desde Amalfi, su lugar de origen, a Segovia, con la intención de comprar tierras, allí
forjó dos fincas “El Hundidor” y “Las Guaduas”. En junio de 1979, en la finca “El Hundidor”, fue secuestrado el señor Jesús
Antonio Castaño González, padre de Fidel Castaño, por el IV Frente de las FARC. A pesar de que se pagaron 50 millones de
pesos, Jesús Castaño fue asesinado por sus captores. Luego de conocerse la muerte de Jesús Castaño, en agosto de 1981,
Fidel Castaño Gil organizó un grupo de hombres que se hizo cargo de las averiguaciones para identificar a los responsables
de la muerte de su padre, para lo cual Fidel buscó la colaboración de algunos militares y miembros de la fuerza pública.
Este fue el inicio de una alianza que a la postre determinaría que Fidel castaño u algunos de sus allegados, “Panina”, “H2”,
“Vanegas” se ofrecieran para ser informantes del Batallón Bomboná, con sede en Segovia y desde el cual se había iniciado
una estrategia contrainsurgente. Fidel Castaño financió acciones de miembros de la fuerza pública en conjunto con algunos
de sus trabajadores, para que en agosto de 1983 asesinaran a múltiples personas que tuvieron conocimiento del secuestro
de su padre, o que habían presenciado cuando las FARC pasaba por dichos lugares, realizando un recorrido entre las
veredas de Cañaveral y Manila en Remedios (Antioquia). Véase: Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá,
Sentencia en contra de Orlando Villa Zapata, rad. 2008 83280, M.P. Dr. Eduardo Castellanos Roso, Bogotá, 16 de abril de
2012
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indiscriminada. Al punto que en muchas regiones lejanas, cuando se perpetraba una


masacre, los habitantes solían referirse a que “llegaron los urabeños”.

509. A finales de los años ochenta se dieron entre otras, las masacres de Honduras, La
Negra, Tomate (Canalete), El Rincón, La Mejor Esquina (Buenavista), Las Tangas
(Valencia), Pueblo Bello (Turbo), Barrio Escolar (Tierralta), regiones ubicadas entre
Antioquia y Córdoba. Durante 1988 y 1990 hubo más de 20 masacres de campesinos y
sindicalistas cometidas por los paramilitares con no menos de 200 muertos. El 4 de marzo
de 1988, paramilitares que venían del Magdalena Medio ejecutaron dos masacres en las
fincas Honduras y La Negra, ubicadas en Urabá501.

510. Fidel Castaño ordenó desde “Las Tangas”, las masacres de Currulao (15
asesinatos), Buenavista, Córdoba (28 asesinatos), Punta Coquitos, Turbo (26 muertos),
Canalete, Córdoba (16 víctimas), Pueblo Bello (43 campesinos desaparecidos y
asesinados). En abril de 1990 en “Las Tangas” aparecieron seis cadáveres de los
desaparecidos en Pueblo Bello502.

511. Al finalizar los 80 y empezando los 90, la organización de Fidel Castaño en


Córdoba y parte de Urabá se perfilaba como la “de mayor crecimiento, contrario a lo que
acaecía con las demás, sumidas en múltiples pugnas determinadas por la ruptura entre
los carteles (del narcotráfico)”.503

Emergencia, consolidación y expansión de diferentes grupos paramilitares en


Urabá

512. Como se mencionó previamente, hacia finales de los años ochenta hubo
incursiones hacia otras regiones para realizar masacres en zonas consideradas de
presencia histórica de la guerrilla y sus auxiliadores. Desde 1988, las masacres volvieron a
ser una modalidad corriente de asesinato y su imperio se prolongó durante varios años.
“1988 fue denominado el año de las masacres”, fue un titular del diario El Mundo504. A
finales de ese año la investigadora Ana María Bejarano publicó un estudio sobre la
violencia en Urabá, cuyo texto inicial afirmaba:

501
Grupo memoria histórica, Informe La Rochela, op. cit. 2010, p. 307
502
Peritaje de Alfredo Molano Bravo sobre la dinámica de actores armados en diferentes regiones del país, en particular el
Urabá, p. 27, Corte Interamericana de derechos humanos, Caso de la Masacre de Pueblo Bello Vs. Colombia, Sentencia de
31 de Enero de 2006
503
Vicepresidencia De La República, Los derechos humanos en el departamento de Antioquia, 2004, p. 11.
504
“1988 fue denominado el año de las masacres”, diario El Mundo, Medellín, 20 de enero de 1989.
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“La noticia de las masacres de campesinos ocurridas en Urabá entre marzo y abril de este
año [1988] estremeció al país entero. Entonces, ese país adormecido por la violencia
cotidiana volvió los ojos hacia la región. Y encontró que, lejos de constituir un hecho
aislado, las masacres son solamente el más reciente episodio en una larga historia de
conflictos sociales, económicos y políticos ligados a la problemática global del país y, sobre
todo, a sus propias condiciones de desarrollo regional.

“La región de Urabá, ubicada en el extremo noroccidental del departamento de Antioquia,


constituye hoy una de las zonas más críticas del país dados los niveles que allí ha
alcanzado la violencia, y quizá el más dramático ejemplo de un futuro no muy lejano para
la mayoría de las regiones colombianas en conflicto”505

513. Respecto a la motivación común que tuvieron algunas de las masacres ocurridas
en 1988, en diferentes lugares del país, el investigador social Gonzalo Sánchez, en calidad
de coordinador del Grupo de Memoria Histórica de la Comisión Nacional de Reparación y
Reconciliación (CNRR), encontró que:

“Las masacres de La Negra y Honduras, Mejor Esquina, Punta Coquitos, Tres


amigos, Vistahermosa y Segovia, ocurridas todas en 1988, son masacres que
pusieron al descubierto la ocurrencia de dinámicas similares de violencia colectiva
contra la izquierda en todo el país. Esos sucesivos episodios sangrientos alertaron
sobre la rápida posibilidad de expansión de la masacre como modalidad de
violencia generalizada. Empero, la sociedad no se movilizó, y salvo en el caso de la
masacre de 1988 [ocurrida en Segovia (Antioquia)] que tuvo diligentes
investigadores judiciales, las autoridades no intervinieron con la competencia y
contundencia obligada. Limitaron su papel a convidados de piedra, como lo
denunciara una publicación de la época(*). La gravedad de esta claudicación dejó
el campo abierto en los años siguientes a una reproducción ampliada de la
violencia, la cual tuvo su expresión más notoria, aunque no la única, en lo que se
ha denominado el genocidio de la Unión Patriótica. Dos candidatos presidenciales,
9 congresistas, 70 concejales y 11 alcaldes se cuentan entre las víctimas de la UP,
además de miles de sus militantes o simpatizantes” 506.

514. Desde mediados de la década de los ochenta, las regiones de Urabá y Chocó
fueron un objetivo de la familia Castaño Gil (Fidel, Vicente y Carlos). Ésta ha sido la
respuesta que generalmente han dado a la pregunta los representantes de la Fiscalía, y
para sustentarla han apelado a la presentación recurrente del siguiente testimonio de
Carlos Castaño sobre su decisión de establecerse en Córdoba para impulsar lo que luego
se convertiría en las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU):

“Con Fidel buscábamos un sitio que nos diera las garantías, queríamos un lugar cerca de
las plantaciones de banano en la zona del Urabá, pero esa zona resultaba impenetrable en
1985. Necesitábamos una zona equidistante, un eje donde nuestra Autodefensa pudiera
expandirse, aspirábamos a tener salida al mar y frontera con los departamentos de
Córdoba, Antioquia y Chocó. Intentamos entrar al Alto San Juan, en el Urabá, y la guerrilla
505
Ana. Mª Bejarano, “La violencia regional y sus protagonistas: el caso de Urabá”, revista Análisis Político, Bogotá, Nº 4,
IEPRI, mayo a agosto de 1988, pág. 54 (disponible en:
bibliotecavirtual.clacso.org.ar/ar/libros/colombia/pd630108952.htm?categoryId =0) (negrita fuera del original).
506
Gonzalo Sánchez, “Prólogo”, en Grupo de Memoria Histórica- Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación (GMH-
CNRR), Silenciar la democracia. Las masacres de Remedios y Segovia 1982-1997, Bogotá, Ed. Taurus-Semana-GMH-CNRR,
septiembre de 2010, págs. 17 y 18. (*) “La masacre de Segovia”, revista Semana, Bogotá, n.º 341, 12 de diciembre de
1988.
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nos mató a algunos muchachos. Recuerdo que sacamos un mapa de alto relieve y
definimos una nueva zona dónde nacer, el Alto Sinú. Pusimos la punta del lápiz en las
tierras alrededor del río, allí existía guerrilla hasta llegar a Montería, pero estar cerca del
departamento de Córdoba conllevaba sus ventajas”507.

515. Este es un elemento anecdótico y debe ponerse en perspectiva puesto que la


expansión obedeció a factores más complejos que una simple decisión calculada de entrar
a una zona. Como se ha mencionado, la región de Urabá presentaba características
históricas que habían generado inconformidades sociales y la presencia de la guerrilla era
sólida. Esta fue una motivación sin duda, dado que el EPL había sido aminorado en la
zona del sur de Córdoba, donde Fidel Castaño tuvo su grupo paramilitar, era lógico que
antes que esperar al enemigo, salieran a buscarlo.

Antecedentes inmediatos de los grupos paramilitares que emergieron y se


consolidaron en Urabá

Narcotraficantes, compras de tierras en Urabá y primeros grupos paramilitares:

516. Durante la década de los ochenta, los narcotraficantes realizaron compras masivas
de tierras en el país. Esas compras cumplieron con un doble propósito: se ampliaron las
posibilidades de que los narcotraficantes ejercieran influencia en muchas regiones del
país, al mismo tiempo que la inversión de algunas de sus ganancias ilegales les permitió
“reinsertar el capital en la circulación del mercado”508. Respecto al primer objetivo, que
fue el que a la postre primó, Alejandro Reyes propone tres consideraciones generales
mediante las cuales se puede comprender la interacción de intereses económicos,
políticos y militares:

“La compra de territorios por narcotraficantes tuvo entonces, durante los años
ochenta, varios sentidos. Por una parte, benefició a grandes propietarios,
afectados por una prolongada crisis de productividad, debida no sólo a su
ineficacia como empresarios sino también a la falta de resolución del conflicto
agrario y el acoso depredador de las guerrillas. La euforia inicial de los narcos por
el éxito del negocio de las drogas y la tolerancia generalizada del Estado y la
sociedad a los nuevos ricos, los convirtió en compradores bastante liberales en
materia de precios, a quienes muchos ganaderos arruinados buscaban para ofrecer
a mejores precios sus tierras desvalorizadas por la violencia.

507
Mauricio Aranguren, Mi confesión. Carlos Castaño revela sus secretos, Bogotá, Ed. Oveja Negra, 8ª edición, abril de 2002
(1ª edición: diciembre de 2001), pág. 103.
508
Ciro Krauthausen y Luis F. Sarmiento, Cocaína & CO. Un mercado ilegal por dentro, Bogotá, Tercer Mundo Editores-
IEPRI-Universidad Nacional de Colombia, febrero de 1993, pág. 78. Los autores advierten que el “patrimonio representado
en las 140 fincas de las cuales Rodríguez Gacha según los organismos de seguridad fuera dueño –sin contar vehículos, ni
títulos inmobiliarios, ni las 30 empresas o más– lo ubicaría en el puesto número doce de las empresas con mayor
patrimonio” (estimaron que ninguna de las fincas podrían valer menos de $ 350 millones de pesos). Ibíd., pág. 81.
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“Por otra parte, la compra de los paramilitares encajó en el interés estratégico de


las Fuerzas Armadas y los políticos tradicionales de contar con aliados bien
financiados y dispuestos a defender militarmente territorios en poder de las
guerrillas. Este fue uno de los orígenes de los grupos paramilitares (…).

“La extensión que los narcotraficantes desean y pueden comprar tiene limitaciones
naturales y sociales. En primer término, la compra de tierras no es una opción muy
avanzada desde la perspectiva empresarial, por la sobrevaluación generalizada de
las buenas tierras del país respecto de su capacidad productiva y la baja tasa de
retorno de la inversión. Más bien puede afirmarse que la apropiación de tierras
tiene la lógica económica de ser un ahorro a largo plazo y una protección segura
contra la devaluación de la moneda, y la lógica social de representar uno de los
principales fundamentos del dominio político regional”509.

517. La creación de los primeros grupos paramilitares en Urabá está directamente


asociada a la creciente presencia que hicieron narcotraficantes en la región,
especialmente en la subregión norte ganadera. Según la encuesta realizada por Reyes
sobre compra de predios rurales por narcotraficantes, durante el período comprendido
entre 1980 y 1995, Antioquia fue el departamento con más municipios en los que fueron
compradas tierras510 y Urabá fue una de las regiones en las que hubo “mayor asociación
entre compra de tierras por narcotraficantes y [acciones] paramilitares”511.

518. Durante los años ochenta, narcotraficantes del cartel de Medellín512 –que en su
momento fueron socios de Fidel Castaño– adquirieron un número significativo de tierras
en Urabá, especialmente en el norte de Antioquia y Chocó. Entre 1981 y 1989, tan sólo en
Arboletes (Antioquia), los hermanos Ochoa Vásquez compraron 48 fincas513. En Necoclí
(Antioquia), aún es famosa la finca “La Virgen del Cobre” de José Antonio Ocampo
Obando –también conocido como alias “Pelusa”514–, que sirvió como sede de reuniones
políticas y eventos de impulso del proyecto político “Urabá Grande, Unida y en Paz” del

509
Alejandro Reyes, “Compra de tierras por narcotraficantes”, en Francisco Thoumi (Director), Drogas ilícitas en Colombia.
Su impacto económico, político y social, Bogotá, Ed. Ariel-PNUD-DNE, mayo de 1997, págs. 289 y 293.
510
Alejandro Reyes, Guerreros y campesinos. El despojo de la tierra en Colombia, Bogotá, Ed. Norma-FESCOL, febrero de
2009, pág. 35. Se registraron compras en 88 municipios de los 124 que comprende Antioquia, es decir, el 70,9% del total.
Ese porcentaje sólo fue superado por otros cuatro departamentos que, en todo caso, tienen un número menor de
municipios: Valle (36 de 42, 85,7%), Córdoba (22 de 26, 84,6%) y Risaralda (10 de 14, 71,4%). Véase Ibíd., pág. 75,
cuadro 1.
511
Ibídem. Respecto al caso del oriente de la costa Atlántica, fue “mayor la asociación entre conflictos por la tierra y
presencia por la tierra, lo que indica que allí el paramilitarismo representa más la defensa armada de la gran propiedad”.
Ibíd., págs. 35 y 36. Las cifras generales que arrojó el estudio fueron “373 municipios de acción paramilitar y 251 de alta
compra de tierras por narcotraficantes”. Ibíd., pág. 82.
512
Sobre el cartel de Medellín, Reyes advierte: “Una de las estrategias de los narcos de Antioquia para ganar aceptación
social fue la vinculación de inversionistas establecidos, al estilo de los joint ventures, para cofinanciar embarques de drogas
y multiplicar a corto plazo las sumas aportadas. La inversión en tierras tuvo lugar en fincas de recreo, haciendas
productivas en la región antioqueña tradicional y en las áreas de la nueva colonización antioqueña en tierras bajas del
departamento (Urabá, Bajo Cauca y Magdalena Medio) y en las regiones de la Costa Atlántica de fuerte expansión
antioqueña”. Alejandro Reyes, “Compra de tierras por narcotraficantes”, en Francisco Thoumi (Director), Drogas ilícitas en
Colombia. Su impacto económico, político y social, Bogotá, Ed. Ariel-PNUD-DNE, mayo de 1997, pág. 298.
513
Carlos Ortiz, Tendencias en el desarrollo municipal y violencia en Colombia, 1985-1993: Informe final, Bogotá, CES,
1995.
514
Para una reseña inicial, véanse: Fabio Castillo, Los jinetes de la cocaína, Bogotá, Documentos periodísticos, 1987, pág.
68 ss. (www.derechos.org/nizkor/colombia/libros/jinetes/); y Norbey Quevedo, “El lío de la Virgen del Cobre”, diario El
Espectador, Bogotá, 12 de septiembre de 2010 (disponible en: www.elespectador.com/noticias/judicial/articulo-224004-el-
lio-de-virgen-del-cobre).
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Bloque Elmer Cárdenas515. A su vez, en el bajo Atrato, Pablo Escobar adquirió una finca
de 880 hectáreas a la cual le puso como nombre “Los Pisingos”516. Después, otros
narcotraficantes de Antioquia compraron “tierras cercanas al mar en Acandí y Unguía, en
el golfo de Urabá, y en Juradó, en el norte de [Chocó]”517.

519. Según se advierte en uno de los informes que elaboró el Grupo de Memoria
Histórica de la CNRR: “hacia 1987, Henry Pérez y su padre compraron tierras en Urabá;
luego, en 1988, asesoraron y coordinaron con Fidel Castaño la ejecución de las primeras
masacres en la zona bananera”518. Sin embargo, el interés de éste en Urabá, habría sido
anterior al de los Pérez, según testimonio de Carlos Castaño sobre la decisión familiar de
establecerse en Córdoba para impulsar lo que luego se llamaría las Autodefensas
Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU):

“Con Fidel buscábamos un sitio que nos diera las garantías, queríamos un lugar
cerca de las plantaciones de banano en la zona del Urabá, pero esa zona resultaba
impenetrable en 1985. Necesitábamos una zona equidistante, un eje donde
nuestra Autodefensa pudiera expandirse, aspirábamos a tener salida al mar y
frontera con los departamentos de Córdoba, Antioquia y Chocó. Intentamos entrar
al Alto San Juan, en el Urabá, y la guerrilla nos mató a algunos muchachos.
Recuerdo que sacamos un mapa de alto relieve y definimos una nueva zona dónde
nacer, el Alto Sinú. Pusimos la punta del lápiz en las tierras alrededor del río, allí
existía guerrilla hasta llegar a Montería, pero estar cerca del departamento de
Córdoba conllevaba sus ventajas”519.

520. Según los académicos Krauthausen y Sarmiento, dado que la mayoría de


actividades agenciadas por la empresas narcotraficantes es ilegal, para éstas siempre será
“necesario el mantenimiento de un aparato de violencia mínimo”520, que les garantice “la
defensa de [sus] intereses en el mercado ilegal”521. Que esos aparatos tengan otros

515
En cuanto a las reuniones realizadas en la mencionada hacienda “La Virgen del Cobre”, ver: Corte Suprema de Justicia,
Sala de Casación Penal, Sentencia por parapolítica en contra del ex representante a la Cámara Oscar de Jesús Suárez Mira,
del 24 de julio de 2013. Ver también: Unidad Investigativa, “Líder asesinado en Urabá iba a declarar ante la Corte sobre
'carta de cobro' que envió a congresista”, diario El Tiempo, Bogotá, 26 de noviembre de 2008 (disponible en:
www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-4689880); y “Urabá, en la mira de los narco del norte del Valle”, diario El
Tiempo, Medellín, 29 de junio de 2007 (disponible en: www.eltiempo.com/archivo/documento/CMS-3618543).
516
“El narcotraficante llegó a la zona en los años 80. Cuando abandonó la tierra, el Incoder, antes Incora, tituló esas tierras
a unos campesinos aunque comunidades afrocolombianas ancestrales ya vivían allí. Esos campesinos duraron poco en el
terreno. Y luego aparecieron los paramilitares y la finca de 880 hectáreas terminó titulada a nombre del jefe de las AUC
Carlos Castaño. Mientras tanto, las comunidades ancestrales seguían allí”. Camila Osorio y Dora Montero, “Los ganaderos
acusados por las víctimas en Curvaradó y Jiguamiandó”, en La Silla Vacía, Bogotá, 14 de mayo de 2012, 12:01 am
(www.lasillavacia.com/historia/ los-ganaderos-acusados-por-las-victimas-en-curvarado-y-jiguamiando-33251).
517
Alejandro Reyes, “Compra de tierras por narcotraficantes”, en Francisco Thoumi (Director), Drogas ilícitas en Colombia.
Su impacto económico, político y social, Bogotá, Ed. Ariel-PNUD-DNE, mayo de 1997, pág. 314.
518
Grupo de Memoria Histórica de la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación (CNRR), La Rochela: Memorias de
un crimen contra la justicia, Bogotá, Taurus, Semana, 2010, pág. 298.
519
Mauricio Aranguren, Mi confesión. Carlos Castaño revela sus secretos, Bogotá, Ed. Oveja Negra, 8ª edición, abril de 2002
(1ª edición: diciembre de 2001), pág. 103.
520
Ciro Krauthausen y Luis F. Sarmiento, Cocaína & Co. Un mercado ilegal por dentro, Bogotá, Tercer Mundo Editores-
IEPRI-Universidad Nacional de Colombia, febrero de 1993, pág. 60.
521
Ciro Krauthausen y Luis F. Sarmiento, Cocaína & Co. Un mercado ilegal por dentro, Bogotá, Tercer Mundo Editores-
IEPRI-Universidad Nacional de Colombia, febrero de 1993, pág. 66.
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alcances dependerá de cada empresa narcotraficante en particular. Así, por ejemplo, la


mayoría de las empresas narcotraficantes de los años ochenta y noventa usaron, e
inclusive poseyeron522, empresas de vigilancia privada como aparatos básicos de
prevención y protección, pero no todas profesaron el “ferviente anticomunismo de los
dirigentes narcotraficantes del paramilitarismo, Gonzalo Rodríguez Gacha y Fidel
Castaño”523.

521. Respecto a otros alcances que puedan tener los aparatos de violencia de los
empresarios narcotraficantes, la historia del país demuestra que fue muy común que
ellos, especialmente en las zonas rurales donde compraron tierras, hicieran parte de
coaliciones con “propietarios de tierra tradicionales –no necesariamente latifundistas–
amenazados por la extorsión guerrillera y las Fuerzas Armadas que a través de las
llamadas ‘autodefensas’ buscaban una mayor eficiencia en la guerra irregular contra el
movimiento insurgente”524. En realidad, “los narcotraficantes, por disponer de recursos
para costear su protección personal y de sus bienes, podían ganarse el diferencial de
precios que se deriva de la amenaza guerrillera”525.

522. Muy temprano, la idea de un proyecto paramilitar articulado nacionalmente


comenzó a hacer carrera con la creación del movimiento Muerte a Secuestradores (MAS),
que fue un aparato que potenció las coaliciones regionales entre propietarios de tierra,

522
Al respecto, Fabio Castillo presenta la siguiente información sobre las empresas privadas de seguridad que fueron
propiedad de los carteles de Cali y Medellín: “El Cartel de Cali cuenta con su propio ejército privado, autorizado por el
Ministerio de Defensa Nacional, con hombres y armas oficiales. En Bogotá los hermanos Rodríguez controlan la firma La
Nacional de Seguridad, que es gerenciada por el ex-general del Ejército, Raúl Martínez Espinosa. Tiene autorizada una
dotación de cien armas de fuego y unos 150 hombres, que prestan servicio de vigilancia en las empresas y las residencias
de los testaferros de Rodríguez. Como el domicilio habitual de los Rodríguez es la ciudad de Cali, allí también constituyeron
la sociedad Servicios de Seguridad Ltda., que cuenta con autorización del Ministerio de Defensa para el uso de 50 armas de
fuego como dotación de cien hombres. El Ministerio se escuda para tamaña gaffe en que los declarantes sobre la buena
conducta de estos narcotraficantes son los senadores Eduardo Mestre Sarmiento y Germán Bula Hoyos”. “Pablo Escobar
también cuenta con su propio ejército privado, autorizado por el Ministerio de Defensa: Seguridad Nutibara, con sede en
Medellín, Cuenta con permiso para 143 armas amparadas con salvoconducto, y un centenar de hombres”. Fabio Castillo,
Los jinetes de la cocaína, Bogotá, Documentos periodísticos, 1987, págs. 132 y 137
(www.derechos.org/nizkor/colombia/libros/jinetes/).
523
Ciro Krauthausen y Luis F. Sarmiento, Cocaína & Co. Un mercado ilegal por dentro, Bogotá, Tercer Mundo Editores-
IEPRI-Universidad Nacional de Colombia, febrero de 1993, pág. 97. En realidad, la demanda de seguridad especializada
determinó la existencia de vínculos entre narcotraficantes, miembros de la Fuerza Pública y organismos de seguridad: “Por
lo general, sobre todo los mandos medios y altos, al igual que los socios de las empresas de vigilancia privada son
verdaderos profesionales en el área: miembros de las Fuerzas Armadas o de la Policía retirados, o incluso, en servicio
activo. El propio ministro de Defensa Óscar Botero Restrepo, quien en 1973 creó Seguridad de Colombia Ltda. y todavía en
1989 era representante legal de Inversiones Botero Restrepo & Cía. S. en C. que es dueña de una cuarta parte de
Seguridad de Colombia, en una carta al Congreso escribió: ‘Las bandas de narcotraficantes y cuadrillas de delincuencia
organizada, han pretendido utilizar ese medio [las empresas de seguridad privada] como fachada para cubrir sus acciones
criminosas, circunstancias que obligan a adoptar una legislación técnica y coherente que permita contrarrestar tan funesto
propósito’. En vista de la estrecha relación entre empresarios narcotraficantes y empresas de seguridad privada no debe
sorprender que con regularidad se descubra que los jefes de seguridad de varios grandes empresarios oligopolistas como
Gilberto Rodríguez Orejuela, Pablo Escobar y los hermanos Ochoa sean mayores o tenientes en retiro”. Ibíd., pág. 91.
524
Ciro Krauthausen y Luis F. Sarmiento, Cocaína & Co. Un mercado ilegal por dentro, Bogotá, Tercer Mundo Editores-
IEPRI-Universidad Nacional de Colombia, febrero de 1993, pág. 96.
525
Alejandro Reyes, “La violencia y la expansión territorial del narcotráfico”, en J. Tokatlian y Bagley (compiladores),
Economía y política del narcotráfico, Bogotá, Cerec, 1990, pág. 124.
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militares y narcotraficantes526 (1981-1982). En febrero de 1983, el procurador Jiménez


Gómez, además de revelar que existían pruebas sobre la vinculación de 59 integrantes de
la Fuerza Pública al MAS, advirtió:

“La sigla con que se le denomina surgió hace apenas un año, a propósito de las peripecias
de un caso de secuestro y al servicio de un plan concreto de rescate de la secuestrada,
dentro de una idea precisa de represalia. Que haya logrado su objetivo en forma más o
menos fulminante fue lo que, en el ambiente de confusión y desconcierto en que vivía y
vive aún el país, hizo de él un modelo que terminó cundiendo aquí y allá, en cuantas
regiones y lugares, parejas circunstancias reproducían las razones y el marco de su
popularidad. Todo parece indicar que el MAS original se desvaneció casi totalmente una
vez recogida su cosecha: pero que para cuando lo hizo, ya había marcado una huella en la
desesperada vida nacional, enzarzada en todas partes dentro de unos mismos rasgos de
conflicto. La homogeneidad de estos factores originarios es lo que ha dotado a esta
mentalidad y tipo de delincuencia de una apariencia de movimiento nacional unificado, de
una imagen tersa de organización, con planes y programas, técnicas, jerarquía, directivas
e inspiración centralizadas. Pero la investigación nuestra no respalda esas apariencias,
sino solamente el diagnóstico de que ante problemas idénticos y agravados hasta el
extremos, se generalizaron una conducta y una metodología primarias también idénticas,
que unas veces apelan a la sigla de marras, como marca de habituales o transitorios
usuarios del experimento, otras simplemente parecen suponerla o se le atribuyen
espontánea y desordenadamente en vista de las características de los hechos que se
trate”527.

523. Las primeras noticias nacionales sobre la existencia y actuación de grupos


paramilitares, en Urabá, datan de 1984 y 1985528. Hasta 1990, los análisis académicos y
de prensa se refirieron a la “relación entre paramilitarismo y narcotráfico en Urabá, y de
estos con elementos de la fuerza pública, tanto en la zona bananera como en la zona
ganadera”529. En algunos casos, se aludió a “la presencia de miembros de la banda de Los
Priscos, grupo al servicio del Cartel de Medellín, que llegaban a la región a realizar lo que
ellos denominaban ‘trabajos especiales’”530. Inicialmente, la presencia de los paramilitares
fue más significativa en la subregión ganadera, justamente donde algunos
narcotraficantes ya habían comprado tierras:

“El papel de los narcotraficantes en la zona norte de Urabá se caracteriza principalmente


por las inversiones en latifundios ganaderos y por el uso del golfo para tráfico de drogas y
para contrabando de armas. Pero sus actividades ilegales van más allá, pues con su
capital han formado ejércitos privados y han sobornado a algunos miembros de los
cuerpos armados del Estado, en una dinámica que incluye persecución política a la

526
Es sabido que la circunstancia que provocó la creación del MAS fue el secuestro de Marta Nieves Ochoa a manos del M-
19. No obstante, no es claro si la creación de ese aparato fue consecuencia de una reunión convocada por los hermanos
Ochoa, en Medellín, o por Pablo Escobar, en su finca Nápoles.
527
Carta del Procurador General de la Nación, Carlos Jiménez Gómez, al Presidente de la República de Colombia, Belisario
Betancur, Bogotá, 4 de febrero de 1983, págs. 4 y 5 (negrita fuera del original).
528
En 1985, Alberto Angulo, presidente de Sintrabanano, denunció algunas acciones cometidas por bandas de justicia
privada. El 29 de septiembre de 1987 fue asesinado por grupos paramilitares. Véase Iván Osorio, Historia del sindicalismo
antioqueño (1900-1986), Medellín, Instituto Popular de Capacitación, pág. 111.
En 1984, el periódico Voz proletaria informó sobre la denuncia de 200 campesinos respecto a masacres instigadas por
ganaderos de Urabá. Véase periódico Voz proletaria, Bogotá, 10 de mayo de 1994.
CAJ-SC, ob. cit., nota 67, pág. .
529
CAJ-SC, ob. cit., nota 67, pág. 104.
530
Ibídem. CAJ-SC, ob. cit., nota 67, pág. 104.
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oposición y asesinato de reales o supuestos abigeos”531.

524. Además de Fidel Castaño, aparecen otros dos narcotraficantes –ya miembros
activos de grupos paramilitares– interesados en la región de Urabá: Gonzalo y Henry
Pérez, líderes visibles de las llamadas Autodefensas de Puerto Boyacá. Los vínculos entre
Henry Pérez y Fidel Castaño están determinados por su amistad y la pertenencia al cartel
de Medellín. En su momento, Fidel Castaño afirmó: “Al comienzo ayudé a Henry Pérez
pidiendo contribuciones para apoyar su causa, que era una auténtica autodefensa bien
organizada. Es muy costoso mantener una guerra”532.

525. Posteriormente Henry Pérez tendría una mayor influencia en las estructuras que
creó Fidel Castaño en Urabá: “Hacia 1987, Henry Pérez y su padre compraron tierras en
Urabá; luego, en 1988, asesoraron y coordinaron con Fidel Castaño la ejecución de las
primeras masacres en la zona bananera”533.

526. Las masacres de 1988: interés de Fidel Castaño en Urabá y presencia


relativamente difusa de paramilitares en la región.

527. El 4 de marzo de 1988534, en el corregimiento Currulao de Turbo (Antioquia), un


grupo de 20 hombres, vestidos de civil y portando armas de corto y largo alcance,
arribaron a la finca “Honduras”, primero, y a la finca “La Negra”, después, y asesinaron a
20 trabajadores que se encontraban en completo estado de indefensión535. Eso fue lo que

531
CAJ-SC, ob. cit., nota 67, pág. 106.
532
Entrevista dada por Fidel Castaño, citada en: REYES, Alejandro, op.cit. p. 95.
533
Grupo de Memoria Histórica de la Comisión Nacional de Reparación y Reconciliación (CNRR), La Rochela: Memorias de
un crimen contra la justicia, Bogotá, Taurus, Semana, 2010, p. 298.
534
Ver Sentencia del 17 de junio de 1991. El 30 de enero de 1992 el entonces Tribunal Superior de Orden Público confirmó
la anterior decisión. El 16 de febrero de 1994 la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia se negó a conceder el recurso
de casación contra la sentencia del Tribunal.
534
Ver “Informe n.º 2/94. Caso 10.912. Colombia. 1º de febrero de 1994”, en Comisión Interamericana de Derechos
Humanos (CIDH), Informe anual de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos 1993, Washington, D. C.,
OEA/Ser.L/V/II.85, Doc. 8 rev., 11 de febrero de 1994, Capítulo III.
534
Según la entonces Comisión Andina de Juristas-Seccional Colombiana (hoy Comisión Colombiana de Juristas), el viernes
4 de marzo de 1988 fue recordada por la población urabaense como el “viernes negro” debido al número de asesinatos que
se produjeron en varios municipios. En la vereda Guapá de Chigorodó (Antioquia), aparecieron siete personas asesinadas
en el mismo evento; en Carepa (Antioquia), se produjeron cinco ase
sinatos; y, en Apartadó (Antioquia), fue perpetrada otra masacre. Comisión Andina de Juristas-Seccional Colombiana (CAJ-
SC), Urabá, Bogotá, CAJ-SC, febrero de 1994, pág. 71. A su vez, el diario El Mundo de Medellín se refirió a 1988 como el
año de las masacres y publicó un listado de 41 eventos en los que fueron asesinadas simultáneamente entre seis y 43
personas (éste último dato correspondiente a la masacre perpetrada en Segovia (Antioquia) el 11 de noviembre de 1988).
Ver “1988 fue denominado el año de las masacres”, diario El Mundo, Medellín, 20 de enero de 1989.
535
Trabajadores asesinados en la finca “Honduras”: Enrique Guizao Giraldo (47 años de edad); Guillermo León Valencia;
Iván Darío Molina (30 años de edad);José Bienvenido González Martínez (20 años de edad); José Indovel Pine
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establecieron el entonces Juzgado 103 de Orden Público-Seccional Bogotá, en 1991536, y


la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en 1994537.

528. El 13 de marzo de 1988 estaba prevista la realización de la primera elección


popular de alcaldes en Colombia. La CIDH, con base en la información aportada por los
peticionarios y las autoridades colombianas, advirtió que antes de que se produjeran las
masacres, el Ejército participó en su preparación:

“Ocho días antes de los hechos, el 24 de febrero de 1998, una patrulla del batallón
Voltígeros del Ejército al mando del teniente del B-2 de Inteligencia Militar, PEDRO
VICENTE BERMÚDEZ LOZANO, acompañada por personas vestidas de civil, efectuaron
registros en las fincas Honduras, La Toyosa y La Agripina. Durante esos operativos
amenazaron de muerte a los trabajadores para que no votaran en los comicios (…). Dos
días antes de la masacre, el 2 de marzo, las tropas del batallón Voltígeros al mando del
capitán Luis Felipe Becerra se presentaron a la finca La Zumbadora, cercana a la de
Honduras y La Negra, en compañía de un sujeto enmascarado quien señaló a algunos
trabajadores. Allí fueron detenidos seis trabajadores a quienes el Ejército golpeó en
presencia de sus compañeros. El capitán les dijo que no los mataría personalmente, pero
que tenía quien lo hiciera, amenazándolos de nuevo para que no participaran en las
elecciones votando en favor de la Unión Patriótica” 538.

529. El Juzgado 2º de Orden Público de Bogotá concluyó que a mediados de febrero de


1988 las directivas de la Asociación de Ganaderos y Campesinos del Magdalena Medio
(ACDEGAM) trasladaron a 38 personas “con el fin de ‘limpiar’ la región de guerrilleros con
el auxilio de miembros del Ejército y de la Policía Nacional”539. El personal trasladado tuvo
acceso a la sede del Batallón Voltígeros y contaron con la anuencia de los militares para
desplazarse portando armas de corto y largo alcance. Según Eulises Barrero, uno de los
hombres que participó en la perpetración de los asesinatos, los militares ocasionalmente
colaboraban “con la organización prestándole apoyo y coordinando con la misma sus
acciones y permitiéndoles los desplazamientos, aún armados”540. Además, un
Comandante de Policía aseguró haber visto a militares adscritos al Batallón Voltígeros
“recogiendo vainillas y proyectiles del lugar de los hechos y presenciando el levantamiento
de los cadáveres”541.

530. Sobre los determinadores de las masacres, el Juzgado 2º de Orden Público de


Bogotá estableció que:

da (29 años de edad);José Francisco Blanco; José Joaquín Mendoza (30 años de edad); José Mesa Sánchez (casado);
Manuel Durango; Manuel Espitia Cogollo (44 años de edad); Nataniel Rojas Restrepo (48 años de edad); Néstor Mariño
Gálvez (45 años de edad); Omar Ochoa; Pedro Miguel González Ma
rtínez (20 años de edad); Rito Martínez Reyes (28 años de edad); Rodrigo Guzmán Espitia (35 años de edad); y Santiago
Ortiz Caudo (40 años de edad). Trabajadores asesinados en la finca “La Negra”: Adel Meneses Pineda; Alirio Rojas; y Julián
Carrillo. Ver CIDH, ob. cit., págs.. 1 y 2.
538
CIDH, ob. cit., págs. 2 y 3
539
CIDH, ob. cit., pág. 6.
540
CIDH, ob. cit., pág. 6.
541
CIDH, ob. cit., pág. 7.
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“la vinculación y responsabilidad de la ASOCIACION CAMPESINA DE GANADEROS DEL


MAGDALENA MEDIO, ACDEGAM, con sede principal en Puerto Boyacá, donde la cuadrilla
de asesinos tiene su base en la finca El Diamante, de Fidel Castaño, siendo la finca
Diamante Dos, también del mismo Fidel Castaño, donde reciben entrenamiento.
Comprobó que estas cuadrillas con armamento pesado, de uso privativo de las Fuerzas
Armadas, se desplazaron libremente por las distintas carreteras sin ser obstaculizados por
la policía o el Ejército, no obstante que en las zonas en donde está más alterado el orden
público abundan especialmente los retenes militares por los que necesariamente tuvieron
que pasar.

“Que los principales líderes son GONZALO PEREZ, HENRY PEREZ, MARCELO PEREZ, FIDEL
CASTAÑO, CESAR CURE, ALAN [sic, ADÁN] ROJAS, HERNAN GIRALDO, entre otros, pero a
quienes correspondió responsabilidad para el caso de la masacre de las fincas Honduras y
La Negra, es a GONZALO PEREZ, HENRY PEREZ y MARCELO PEREZ, quienes fueron los
que contrataron a los 8 ‘mayordomos’ con familia para desplazarse a URABA en compañía
de otros 30 hombres más, algunos de los cuales, después de perpetrados los asesinatos
en esa región, se dirigieron a Montería, Córdoba, en donde fueron recibidos por FIDEL
CASTAÑO en su finca JARAGUAY”542.

531. El 17 de junio de 1991 el entonces Juzgado 103 de Orden Público-Seccional


Bogotá, en primera instancia, condenó a los principales responsables de los homicidios
perpetrados en las fincas “Honduras” y “La Negra”543. Algunos de los determinadores de
las masacres posteriormente se convirtieron en los principales jefes de grupos
paramilitares en Colombia. La vinculación de la Fuerza Pública a grupos paramilitares,
especialmente de integrantes del Ejército Nacional544, unos años después sería decisiva en
el establecimiento y la posterior expansión de los frentes Árlex Hurtado y Turbo, en el eje
bananero, y el Bloque Elmer Cárdenas, desde Necoclí hasta el Urabá chocoano.

542
CIDH, ob. cit., pág. 7 (negrita en el original).
543
“Ricardo Rayo, 30 años de prisión por los delitos de homicidio con fines terroristas y terrorismo en concurso de hechos
punibles, pago de cincuenta salarios mínimos mensuales y pena accesoria la interdicción de derechos y funciones públicas
por un período igual al de la pena principal; Mario Zuluaga Espinal, 30 años de prisión por los delitos de homicidio con fines
terroristas y terrorismo en concurso heterogéneo de hechos punibles con el delito de terrorismo, en calidad de autor
intelectual de los punibles. Asimismo, fue multado con doscientos salarios mínimos mensuales y se le condenó a la pena
accesoria de interdicción de derechos y funciones públicas; Víctor Hugo Martínez Barragán y Mario Usuga Guez, 20 años de
prisión, multa de cincuenta salarios mínimos mensuales por la autoría material de homicidio con fines terroristas y pena
accesoria de interdicción de derechos y funciones públicas por un tiempo igual al de la pena principal; Víctor Suárez
Sánchez, 22 años de prisión y multa de cincuenta salarios mínimos mensuales, por el delito de homicidio con fines
terroristas y porte ilegal de armas y pena accesoria de interdicción de derechos y funciones públicas por un tiempo igual al
de la pena principal; Luis Alfredo Rubio Rojas, ex Alcalde de la población de Puerto Boyacá, Henry Pérez Jiménez, Marcelo
de Jesús Pérez, Gonzalo Pérez, Fidel Antonio Castaño Gil, Adán Rojas Ospino, Hernán Giraldo Serna y Reinel Rojas
condenados, cada uno de ellos, a 20 años de prisión por el delito de concierto para delinquir con las circunstancias de
agravación punitiva y pena accesoria de interdicción de derechos y funciones públicas por un tiempo igual al de la pena
principal impuesta, absolviéndoseles de la imputación de autoría material e intelectual de homicidio con fines terroristas;
Ricardo Rayo, Mario Zuluaga Espinal, Víctor Hugo Martínez Barragán, Víctor Suárez Sánchez, Luis Alfredo Rubio Rojas,
Henry Pérez Jiménez, Marcelo de Jesús Pérez, Gonzalo Pérez, Fidel Antonio Castaño Gil, Adán Rojas Ospino, Hernán Giraldo
Serna y Reinel Rojas, condenados a la indemnización por el daño material causado de dos mil gramos de oro y por daños
morales causados quinientos gramos de oro”. CIDH, ob. cit., págs. 8 y 9 (negrita y subrayas en el original).
544
La CIDH consideró “que las conclusiones a que llegan las investigaciones de la Procuraduría Delegada para las Fuerzas
Militares y que se hallan contenidas en la Resolución Nº 255 de fecha 19 de agosto de 1992 y en su confirmatoria Nº 093
de 8 de febrero de 1993, corroboran las conclusiones a las que llegó el informe del DAS y acreditan de manera indubitable
la responsabilidad del capitán Luis Felipe Becerra, teniente Pedro Vicente Bermúdez y del cabo Felipe Ochoa Ruiz del
Ejército de Colombia, ascendidos a teniente coronel, capitán y sargento, respectivamente, en el asesinato múltiple planeado
para eliminar a los trabajadores de las fincas Honduras y La Negra” (…) Que tales pruebas, no cuestionadas ni impugnadas,
establecen la responsabilidad del capitán Becerra, teniente Bermúdez y cabo Ochoa, por haber utilizado a ex miembros de
la subversión y a paramilitares para asesinar a los trabajadores de las fincas Honduras y La Negra, presuntos o efectivos
miembros del EPL, a quienes en efecto ultimaron masivamente estando desarmados y en total estado de indefensión”.
CIDH, ob. cit., págs. 17-19.
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532. Hasta comienzos de la década de 1990, la presencia y actuación de los grupos


paramilitares en Urabá es difusa. Se estima que, entre 1982 y 1986, fueron asesinados
aproximadamente 350 afiliados a SINTAGRO545. En 1987, los grupos Muerte a
Revolucionarios del Nordeste (MRN) y Muerte a Sindicalistas Revolucionarios de Urabá
fueron asociados al destierro de dirigentes sindicalistas de Urabá546. A raíz de las
masacres en las fincas “Honduras” y “La Negra”, se hace referencia general a los grupos
Muerte a Secuestradores (MAS), Muerte a Revolucionarios de Urabá (MRU) y Movimiento
Obrero Estudiantil Nacional Socialista547 (MOENS). No obstante, los paramilitares tienden
a hacer presencia y actuar como escuadrones de la muerte o “un actor sin rostro”548. En
realidad, tal como se advierte en un estudio del Observatorio para el desarrollo, la
convivencia y el fortalecimiento institucional (ODECOFI), la invasión paramilitar de Urabá
fue una “avanzada no identificada”:

“Entre 1988 y 1995 hubo una avanzada paramilitar no identificada con claridad por los
pobladores, quienes no entendían a qué venían aquellas formas de violencia poco
‘usuales’ dentro de los procederes violentos de un intenso conflicto político-laboral-armado
entre sindicalistas, partidos políticos, empresarios bananeros y guerrillas (EPL y FARC),
conflicto que también implicaba a campesinos, minorías étnicas y demás pobladores. La
nueva lógica de penetración se reveló realmente cuando, a mediados de los años noventa,
el paramilitarismo ingresó al eje bananero anunciándose con nombre propio y
proclamando el objeto de su presencia. Fue entonces cuando, comenzando por el norte
(estaban asentados en Valencia y Arboletes), los paramilitares hicieron un barrido
macabro hacia el centro, ocupado por dicho eje”549.

El Grupo de Fidel: el grupo precursor de los paramilitares en Urabá

533. Durante el juicio en contra de HÉBERT VELOZA GARCÍA, la Fiscal 17 de Justicia y


Paz estableció y documentó la existencia del Grupo de Fidel. Además de las fuentes
documentales que aportó como pruebas, presentó los testimonios de dos paramilitares

545
Véase Comisión Andina de Juristas-Seccional Colombiana (CAJ-SC), Urabá, Bogotá, serie Informes regionales de
derechos humanos, CAJ-SC (hoy Comisión Colombiana de Juristas, CCJ), febrero de 1994, pág. 67.
546
Véase Ibídem.
547
Véase Ibíd., pág. 104. En el caso del MOENS, se hace referencia a éste porque la sigla apareció pintada en las paredes
de las fincas donde fueron cometidas las masacres.
548
La expresión “un actor sin rostro” es propuesta por el Secretariado Nacional de Pastoral Social (SNPS). En un apartado
sobre la explicación relativa a esta categoría, el SNPS señala: “Ellos, los anónimos, andan por uno y otro confín de la región,
asesinando personas inermes, desapareciendo, incendiando fincas, viviendas y factorías, destruyendo sedes políticas,
realizando retenes en la vía pública y toda clase de atentados en contra de la vida y la dignidad de sus habitantes sin que
nadie los vea, los señale o los capture. (…). || Amparados en su anonimato, estos ‘escuadrones de la muerte’, como
también son conocidos, no están cobijados bajo ninguna legislación nacional o internacional que regule y controle –al
menos en el papel– la fiereza de sus actos”. Secretariado Nacional de Pastoral Social (SNPS), Urabá, Bogotá, colección
Desplazamiento forzado en Antioquia, n.º 8, SNPS, mayo de 2001, pág. 44.
549
Clara I. García y Clara I. Aramburo, Geografías de la guerra, el poder y la resistencia. Oriente y Urabá antioqueños 1990-
2008, Bogotá, CINEP-ODECOFI-INER, marzo de 2011, pág. 312.
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desmovilizados que hicieron parte de esta estructura paramilitar: Jesús Ignacio Roldán
Pérez, alias ‘Monoleche’ (postulado), y Lorenzo Córdoba Álvarez, alias ‘Barbas’550.

534. Durante el período comprendido entre 1988 y 1991, el Grupo de Fidel operó en el
norte del Urabá antioqueño y el Urabá cordobés. Su composición osciló entre los 50 y 100
hombres en armas. Inicialmente, las finalidades principales de este grupo fueron la
protección de Fidel Castaño y el cuidado de las tierras que él había comprado en la
región, después de las masacres perpetradas en las fincas “Honduras”, “La Negra” y
“Punta Coquitos”, en 1988. Respecto al segundo propósito, el investigador Mauricio
Romero advierte:

“Fidel Castaño ya era un acaudalado propietario del Alto Sinú, en el municipio de


Valencia, a finales de los años ochenta, y así lo demostró al ceder temporalmente a
campesinos cerca de 6.000 hectáreas de las mejores tierras ganaderas de Córdoba
como parte de su contribución a la desmovilización del EPL y los prospectos de paz
en este departamento”551.

Imagen 1
Detalle de titular de prensa
Diario El Tiempo, Bogotá, miércoles, 1º de agosto de 1990

535. En 1991, en Valencia (Córdoba), el Grupo de Fidel se desmovilizó. Si bien es cierto


que esta desmovilización fue parte de un proceso político que duró varios meses, de éste

550
Véase Audiencia de control de legalidad de cargos, Bogotá, 17 de mayo de 2011, minutos 00:03:34 a 02:09:00
(grabación de la audiencia). La fuente de toda la información que se cita corresponde a esta audiencia y a los materiales
entregados al Tribunal Superior de Bogotá por la fiscal 17 de Justicia y Paz.
551
Mauricio Romero, Paramilitares y autodefensas 1982-2003, Bogotá, IEPRI-Editorial Planeta, junio de 2003, pág. 203. En
ese mismo sentido, en un aparte de un documento enviado por Vicente Castaño a la FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, se
lee respecto a esa desmovilización: “En 1991, Fidel Castaño desmovilizó su grupo de autodefensas en el municipio de
Valencia, Córdoba. En concordancia con la desmovilización del EPL, organización guerrillera que había enfrentado durante
varios años. Como un aporte a la paz y sin ninguna contraprestación entregó más de 20.000 hectáreas de tierra fértil y
productiva a reinsertados de la guerrilla y desplazados del conflicto”. Vicente Castaño, Historia de las Autodefensas de
Córdoba y Urabá (ACCU), multicopiado, pág. 1 (archivo entregado por la Fiscalía al Tribunal).
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no existe memoria oficial552. El 31 de julio de 1990, justamente el día en que el entonces


ministro de Gobierno, César Gaviria, anunció la supresión de la Jefatura Militar de Urabá –
creada mediante el artículo 2º del decreto 678 del 14 de abril de 1988–, se dio a conocer
el comunicado por medio del cual Fidel Castaño ofreció desmovilizarse, en caso de que el
EPL efectivamente se reincorporara a la vida civil553.

536. En 1992, el Grupo de Fidel se rearmó. La fiscal 17 lo expuso de la siguiente


manera:

“Después de esta desmovilización hablamos entonces del rearme de Fidel y señalamos


aquí lo pudimos apreciar durante las verificaciones y las indagaciones dentro de este
proceso: que Fidel no desmovilizó (…) todas las estructuras, que mantuvo un mínimo de
número y que al año fueron reactivadas por el propio Fidel Castaño, quien (…) para ese
entonces empezó a conocerse con el alias de ‘Rambo’, tal como lo afirmó Jesús Ignacio
Roldán Pérez quien fuera su mano derecha –y, posteriormente, jefe de seguridad de
Carlos y Vicente [Castaño] –, (…) muy cercano a Fidel. Jesús Ignacio Roldán, alias
‘Monoleche’, (…) dice que Fidel no desmovilizó todos sus hombres, que dejó un grupo
entre 35 y 40 hombres para lo que llamó ‘su seguridad’. Se quedó con 35 o 40 hombres
que estaban con ellos controlando la zona y controlando lo que eran las fincas adquiridas
por Fidel para ese entonces. También refiere Jesús Ignacio Roldán Pérez que, después de
esa desmovilización del EPL, Fidel fue buscado por varios ganaderos de la zona, de la
región, que llegaron a donde Fidel a solicitarle apoyo y que les diera instrucción y los
orientara para efectos de repeler aquella disidencia del EPL y el ingreso de la FARC que
estaba ya subiendo a las zonas que había dejado expuestas el EPL”554.

GRUPO DE FIDEL CASTAÑO GIL


1988-1991

Carlos Mauricio García Fernández


Alias ‘Doblecero’
Comanante Militar
José Efraín Pérez Cardona
Alias ‘400’ Manuel Arturo Salom Becerra
Alias ‘J.L’
Instructor militar
Instructor militar

Alias ‘Salvador’
Alias ‘Aníbal’
Instructor militar

Carlos Alberto Cardona Guzmán Jaime de Jesús Ramírez Ramírez Juan Bautista Mejía Henao
Alias ‘Trato’ Alias ‘Maicol’ Alias ’04’ o ‘El Cumbia’ Alias ‘Rastrillo’ Alias ‘Estopín’
Segundo al mando Tercero al mando Comandante Militar

Jesús Emiro Pereira Rivera


Jhon Jairo Polo Tabares Jesús Ignacio Roldán Pérez Lorenzo Córdoba Álvarez Allias ‘Huevo de Pisca’
Alias ‘Bracho’ Alias ‘Monoleche’ Alias ‘Barbas’
Escolta de Fidel Castaño

Jhon Henao
Alias ‘Coco’ Alias ‘Gafitas’ Alias ‘Mono Guerrillo’
Alias ‘H”2’

Alias ‘Toronja’ Alias ‘Pico Pancho’ Alias ‘Raúl’ Alias ‘Campanito’

Alias ‘Marcos Salas’ Alias ‘Luis Ángel’ Alias ‘Pitufo’ Alias ‘Duende’

Gráfica 2
Organigrama del Grupo de Fidel555

552
Véase Oficio del jefe de la Oficina Asesora Jurídica del Ministerio de Justicia y del Derecho a la fiscal 20º Delegada ante
el Tribunal de Distrito Judicial-Unidad Nacional para la Justicia y la Paz, Bogotá, 23 de febrero de 2007, página única.
553
“Castaño ofrece desmovilización” y “Desmovilización, si la hace el EPL”, diario El Tiempo, Bogotá, miércoles, 1º de
agosto de 1990, págs. 1A y 6A (archivo entregado por la Fiscalía al Tribunal).
554
Véase Audiencia de control de legalidad de cargos, Bogotá, 17 de mayo de 2011, minutos 00:59:36 y ss. (grabación de
la audiencia).
555
Organigrama elaborado por la fiscal 17. Véase Audiencia de control de legalidad de cargos, Bogotá, 17 de mayo de
2011, materiales entregados al Tribunal.
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537. Con base en el testimonio de Jesús Ignacio Roldán Pérez, alias ‘Monoleche’, la
Fiscalía sostuvo que el grupo rearmado, en 1992, estuvo compuesto por 55 hombres al
mando de alias ‘Salvador’, un hombre designado por los ganaderos de la región, “quien
venía de Puerto Boyacá, que había trabajado con Pablo Escobar y había sido preparado
por Yair Klein”556. Desde ese año hasta diciembre de 1993, Fidel Castaño se dedicó casi
exclusivamente a librar la guerra contra Pablo Escobar, mediante el grupo “Los Pepes”
(Perseguidos por Pablo Escobar).

La estrategia de la Casa Castaño desde la segunda mitad de los noventas

538. Como se ha mencionado, en la primera mitad de los noventas, las estructuras de


la Casa Castaño fueron expandiendo y robusteciendo sus estructuras con el reclutamiento
de personas de distintos sectores sociales, incluso de miembros desmovilizados que
habían sido del EPL y que estaban siendo atacados por las FARC. En reacción, varios de
estos desmovilizados “esperanzados” conforman los llamados Comandos Populares, y
pasan a ser contraguerrillas y a apoyar con inteligencia y en operativos al grupo de
Castaño tanto en Córdoba como en Urabá.

539. En 1994, el mando de la estructura de las Autodefensas de Córdoba y Urabá


(ACCU) pasa a manos de Carlos Castaño, quien la consolida y profundiza el proceso
expansivo que venía haciendo su hermano Fidel. Este relevo de autoridad se da ante la
muerte de Fidel Castaño, quien hacia enero de 1994 fue asesinado presuntamente en
combate con una disidencia del EPL, aunque otras versiones apuntan a que fue su
hermano menor, Carlos Castaño, quien había ordenado su asesinato por uno de sus
guardaespaldas557, y otras versiones sostienen que detrás de su asesinato estuvo una
orden de Pablo Escobar (muerto semanas antes que Castaño), quien tenía hombres de
confianza infiltrados en las estructuras de seguridad de este último558.

540. Hacia 1995 surge a la luz púbica Carlos Castaño y su estructura que se conocería
como Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá -ACCU-, pero que, como se ha visto,

556
Véase Audiencia de control de legalidad de cargos, Bogotá, 17 de mayo de 2011, minutos 00:59:36 y ss. (grabación de
la audiencia).
557
Sobre la versión que el autor intelectual de la muerte de Fidel, fue su hermano Carlos Castaño se han pronunciado ex
paramilitares Iván Roberto Duque (alias “Ernesto Báez”), y uno de los sicarios principales de Pablo Escobar, John Jairo
Velásquez alias “Popeye”. Este último aseguró ante la justicia que “quien había mandado a matar a Fidel Castaño fue su
hermano Carlos porque este quería quedarse con el control del narcotráfico y del ejército de Fidel Castaño ya que había
muerto Pablo Escobar semanas antes”. Exposición presentada por la Fiscalía General de la Nación Justicia y Paz sobre el
surgimiento de la CASA CASTAÑO, 9 de diciembre de 2009.
558
En audiencia de versión libre, Jesús Ignacio Roldán, alias “Monoleche”, una de las personas cercanas a Fidel Castaño,
aseguró que quien asesinó a Castaño fue alias “Salvador”, un aliado de Pablo Escobar Gaviria. Audiencia versión libre ante
la Fiscalía Justicia y Paz, postulado Jesús Ignacio Roldán, alias “Monoleche”, septiembre 11 de 2007
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ya venían ampliándose desde 1987 cuando eran conocidos como los “Tangueros” de Fidel
Castaño.

541. Este sería el principal modelo que se expandiría en el país durante la década del
noventa, al punto de agrupar gran parte de las estructuras de carácter paramilitar
existentes ya para esa época e incluso más antiguas que ella. La causa de que este foco
de paramilitarismo fuera el de mayor auge y expansión tiene fundamento en varios
factores.

542. Entre estos se ha destacado desde diversos análisis del paramilitarismo, que el
modelo de los Castaño a diferencia del MAS y del modelo de Puerto Boyacá de Henry
Pérez en la segunda mitad de los ochenta, la casa Castaño no tuvo la dependencia de la
financiación del narcotráfico del Cartel de Medellín. De hecho gozaban de suficiente
financiación autónoma dado que Fidel Castaño había acumulado importantes tierras y
ganado, como producto de sus actividades en el narcotráfico de años atrás.

543. De esta forma, aún cuando desapareció Gonzalo Rodríguez Gacha y Pablo Escobar
(1989 y 1993, respectivamente), las autodefensas de Castaño no tuvieron mayores
dificultades para asegurar la financiación.

544. Por otro lado, cuando las autodefensas de Henry Pérez tuvieron dificultades
finalizando los ochenta por la confrontación que les hizo el Estado, y la falta de
financiación de Gonzalo Rodríguez Gacha, los hermanos Castaño no sufrieron la misma
persecución y pudieron continuar creciendo de manera paulatina y sin mayores
dificultades.

545. Rodríguez Gacha había financiado y sobornado a muchos policías y militares y


trataba de tener a su servicio a varios de sus miembros, lo que le ganó un fuerte apoyo
local momentáneamente, pero que rápidamente desapareció a finales de los ochenta en
gran parte por la percepción negativa que se generó en torno por las masacres de fines
de los ochenta y en particular, de la masacre de los operadores judiciales que
investigaban el caso de la muerte de 19 comerciantes, o lo que se conoció como la
Masacre de La Rochela.

546. Como reacción, además de una parcial confrontación militar y policial por parte de
la fuerza pública, ese mismo año, la Corte Suprema de Justicia declaró ilegales varios

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artículos que permanecían vigentes desde la ley 48 de 1968 en las que se autorizaba la
conformación de grupos de autodefensas, aspectos sobre el que se detallará en el
siguiente acápite. Desde el Ejecutivo, una medida inicial fue declarar ilegal la promoción,
financiación, entrenamiento y participación en grupos paramilitares, mediante el decreto
1194 de 1989. Igualmente, el Gobierno Nacional creó una comisión asesora para
coordinar la lucha contra el fenómeno del paramilitarismo y designó la conformación de
un cuerpo especial armado para combatirlo559.

547. Paralelamente la versión paramilitar de Fidel Castaño, pudo recoger rápidamente


adeptos y convencidos frente a la causa antiguerrilla, en una época donde cada vez se
ponía más en duda la postura contrainsurgente de las estructuras del Magdalena Medio,
del lado boyacense. La razón era que en la región se veían con frecuencia a varios líderes
de la guerrilla del M-19 en conversaciones con Pérez, lo que le trajo incluso problemas
con su propia familia (en particular, con su padre, Gonzalo de Jesús Pérez, alias
“Caruso”)560.

548. Otro proceso que favoreció la expansión de los grupos de Córdoba y Urabá al
mando de los Castaño fue el hecho de no haber entrado abiertamente en la guerra contra
Pablo Escobar. Si bien Fidel Castaño hizo parte de los PEPES (grupo de los que se
declaraban Perseguidos por Pablo Escobar) y fue uno de sus principales cabecillas, la
guerra entre carteles no fue abierta en las zonas de Córdoba y no afectaron de manera
significativa a los miembros de las estructuras de Fidel Castaño.

549. Esto mientras los grupos paramilitares de Ramón Isaza y Henry Pérez en el
Magdalena Medio tuvieron una acérrima confrontación con Pablo Escobar. En este
sentido, la guerra de carteles del narcotráfico, las disputas entre Pérez y Escobar, que
habían sido antiguos aliados, y la falta de financiación del narcotráfico a las autodefensas
del Magdalena Medio con la muerte de Rodríguez Gacha fueron disminuyendo su
capacidad de reclutamiento y frenando su consolidación561.

559
Estas medidas estaban contempladas en los Decretos 813 y 814 de 1989.
560
De acuerdo a Iván Roberto Duque y Ramón Isaza (ambos cercanos a la familia Pérez), Gonzalo Pérez, fue asesinado por
uno de los escoltas de su hijo Henry, que tenía por alias “El Policía”. Durante varios meses padre e hijo habían discutido
sobre los vínculos de sus autodefensas con el M-19, en lo que no estaba de acuerdo el padre. Hubo un altercado y se
citaron a un duelo entre Gonzalo Pérez y alias El Policía en julio de 1991” en donde murió Gonzalo. Cfr. Audiencia de
versión libre ante la Fiscalía, postulado Iván Roberto Duque Gaviria, “Ernesto Báez” o “El Doctor”, 22 marzo de 2007, sesión
tarde.
561
Véase: Sala de Justicia y Paz, Tribunal superior de Bogotá, Control de legalidad Ramón María Isaza Arango y otros, 5 de
octubre de 2012, rad. 2007-82855, M.P. Eduardo Castellanos Roso.
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550. Luego de la muerte de Fidel, sus hermanos Carlos y Vicente Castaño, generarían
una nueva dinámica en el paramilitarismo desde mediados de los años noventa, con un
proyecto expansivo y suprarregional, con una ventaja adicional, para la época en que
Carlos Castaño asume el mando de las autodefensas de Córdoba y Urabá se da la
aprobación en el Congreso de la República de la creación de grupos de seguridad privada,
las denominadas Convivir, en este elemento dada su relevancia la Sala se pronunciará con
amplitud en la decisión, debido a la estrecha conexión entre las Convivir del eje bananero
y los grupos paramilitares de Castaño. Esto ya ha sido considerado por la Sala cuando
argumentaba sobre la importancia de las Cooperativas de Vigilancia y Seguridad, ya que
“buena parte de la consolidación del accionar del Bloque Elmer Cárdenas, y del Bananero
– Bloques con influencia en la región del Urabá- se hizo, bajo la imagen de legalidad que
tenían estas organizaciones”562.

551. Alias “H.H.” también señaló que las convivir en el Urabá antioqueño, desde su
conformación estuvieron al servicio de las ACCU, siendo encargado Raúl Hasbún, quien
las creó para legalizar dineros que entraban a las autodefensas por los aportes de
sectores de la economía legal de la región. Es así, como las Convivir, fueron el motor para
el sostenimiento y crecimiento de las autodefensas563.

552. Lo anterior en un contexto donde el sector privado bananero fue uno de los
mayores beneficiados de la entrada del paramilitarismo, lo cual ha sido ampliamente
expuesto en sus versiones libres por Raúl Hasbún y también por el aquí postulado
HÉBERT VELOZA GARCÍA, quien al respecto ha manifestado que:

“los empresarios [bananeros], estos empresarios que han abusado y han explotado a la
comunidad en zona del Urabá. Y todavía lo siguen haciendo. Yo lo he denunciado
públicamente. He dicho los bananeros son tan o más responsables que nosotros en todo lo que
pasó en el Urabá. Porque fuimos de finca en finca prohibiéndoles a los trabajadores a hacer
paros armados. Uno iba uniformado y con un cuchillo en la mano, diciéndoles que el que
hiciera paro lo matábamos, ¿por qué?, por buscar los beneficios de los empresarios bananeros.
Ellos fueron los que se beneficiaron de la guerra. De ellos ninguno está pagando, ninguno está
detenido, ninguno está investigado, ninguno ha puesto un peso para la reparación y ellos
fueron los que realmente se beneficiaron”564.

553. La Sala, en su decisión de sentencia, retomará algunos elementos claves ya


expuestos sobre estas relaciones entre Convivir y grupos paramilitares, y las relaciones

562
Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá, sentencia contra postulado José Barney Veloza García, rad. 2006
80585 M.P. Uldi Teresa Jiménez López, 31 de enero 2012, parr. 237
563
Audiencia de legalización de cargos, de HÉBERT VELOZA GARCÍA alias, “H.H.”, de 27 de abril de 2011.
564
Ibíd., pág. 19.
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entre el gremio bananero y profundizará en algunos aspectos que se han expuesto en


otras decisiones o en elementos que no se han explicado de manera suficiente.

Elementos contextuales para comprender la violencia en Urabá a la entrada del


grupo paramilitar y su expansión en la segunda mitad de los noventas

554. De lo mencionado hasta el momento se deben resaltar varios elementos que serán
aprovechados o utilizados factores dinamizadores para la entrada y consolidación del
grupo paramilitar en Urabá. Estos son tres principalmente: i) la definición de límites
territoriales entre FARC y EPL en la zona de Urabá, tanto rural como urbana, producto de
las tomas de tierras o invasiones de los años ochenta. Esto generará que ciertas fincas,
veredas y barrios fueran identificados como asociados a una guerrilla u otra, un escenario
que luego va a generar altos niveles de victimización entre unos y otros bandos cuando
las FARC y la disidencia que no se desmovilizó del EPL empezaran a asesinar a sus
antiguos compañeros de guerrilla565; (ii) el segundo elemento contextual importante es
precisamente la fallida desmovilización del EPL, cuyos miembros no gozaron de ningún
tipo de protección en la región y fueron dejados a la merced de los bandos no
desmovilizados FARC y disidencia Caraballo del EPL. Varios de estos miembros, llamados
“esperanzados”, serían posteriormente informantes o miembros activos de los llamados
Comandos Populares, una forma de paramilitarismo que sería aprovechada como fuente
de información y en operaciones conjuntas primero, y posteriormente como activos
miembros, por los grupos de paramilitares que entraron desde 1994 en la región de
Urabá desde Córdoba566; (iii) finalmente hay consideraciones de orden estratégico, dados
por Carlos y Vicente Castaño, para pensar su expansión de las ACCU desde Córdoba hacia
Urabá-Chocó y crear un eje Bajo Cauca-Córdoba-Urabá-Nudo de Paramillo. Es decir, que
hay una visión geográfica de la expansión, que será también revisada desde algunas
intenciones que tenía la Casa Castaño en la región. Sobre los dos primeros elementos ya
se ha realizado mención en acápites anteriores, por lo que la Sala se dispone a
continuación a considerar el último elemento geoestratégico de la Casa Castaño.

555. El proyecto inicial que tenía la Casa Castaño en las regiones de Urabá y Chocó sólo
tomó verdadera forma a mediados de la década de los noventa, cuando al mismo tiempo
se produjo el avance de las ACCU en la región del Nudo del Paramillo, como se ha visto

565
Documentos sobre el contexto e historia del EPL en la región y la formación de los “Comandos populares”, presentado
por la Fiscal 17 delegada ante Justicia y Paz, sesión de audiencia de control de legalidad de HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias
H.H. o Carepollo, 5 al 7 de abril de 2011.
566
Ibid.
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antes, el proyecto de Fidel Castaño se concentró en la zona sur de Córdoba, protegiendo


sus propiedades y comandó esporádicas operaciones hacia otras zonas.

556. Vicente Castaño intentó una sistematización de la historia de los grupos


paramilitares vinculados a la Casa Castaño, que está contenida en el documento “Historia
567
de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU)” . Para Vicente Castaño,
los orígenes de la estructura en el norte de Urabá empezaron a operar cuando “ya existía
un pequeño grupo de campesinos que prestaban seguridad en las fincas de la región bajo
el mando de “Camilo”, cuando se creó el nuevo movimiento de Autodefensas [el de los
Castaño en la zona] este grupo de Camilo entró a formar parte de las ACCU.
Posteriormente prestarían seguridad a la escuela de capacitación “Acuarela” y luego el
frente es enviado a la escuela de capacitación del Bloque Metro donde formaría parte de
su estructura militar”568.

557. A Turbo (Antioquia), llegó un grupo desde San Pedro de Urabá, bajo el mando
militar de “Maicol” a incursionar en el municipio de Turbo donde se sufría una fuerte
presencia y dominio de la guerrilla. Manifiesta que “antes un grupo de empresarios habían
solicitado ayuda desesperadamente”. En las zonas donde operaban, afirma Vicente
Castaño que “se empieza a debilitar la estructura urbana de las guerrillas, se aumentó el
pie de fuerza y los éxitos se comentaron por toda la región.

558. La presión que sintió la guerrilla por parte de las ACCU fue desestabilizando la
estructura rural y su accionar disminuye en la zona urbana”. Las deserciones de las
guerrillas empezaron a crecer y según argumenta Castaño, “Empezaron a llegar a las
ACCU más guerrilleros con cargos muy importantes y con muy buena información sobre el
accionar de la guerrilla en otros municipios de Urabá y zonas aledañas al municipio de
Turbo. Se empezaron a hacer incursiones esporádicas y precisas al Municipio de Necoclí,
Currulao, Apartadó y Chigorodó”. Con esta información se hacían operaciones tanto
rurales como urbanas. Igualmente afirma que en estas regiones, tanto comerciantes
como ganaderos acudieron a la Comandancia de las ACCU para que dejaran grupos
permanentes en sus municipios569.

567
Ver Vicente Castaño, Historia de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU), multicopiado, 20 págs.
Documento entregado por la Fiscalía. Esta Sala no hizo ninguna modificación formal (gramatical u ortográfica) a la versión
original. El documento fue entregado por el aquí postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA alias “HH” a la Fiscalía en el proceso
de Justicia y Paz y se entiende era un escrito que estaba preparando Vicente Castaño ante lo que eventualmente sería su
comparecencia a las versiones libres en Justicia y Paz, las cuales no se dieron por su negativa a participar en el proceso y a
su posterior desaparición.
568
Ibíd., pág. 3.
569
Ibíd., págs. 3 y 4. Vicente manifestó que ‘Hernán Hernández’, que fue uno de los alias de HÉBERT VELOZA GARCÍA,
también conocido con los alias ‘Care Pollo’, ‘Don Hernán’, ‘H.H.’ o ‘Mono Veloza’ había sido un ex comandante de las FARC y
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559. Además de estos intereses estratégicos en función de la guerra, habían unos de


carácter económico, para su financiación como aparato de poder militar, pero también
como parte de la estrategia de apropiación de rentas legales e ilegales que suelen tener
estos grupos ilegales. Así por ejemplo, en la Fiscal 17 de la Unidad para la Justicia y la
Paz, durante una de las audiencias de control de legalidad de los cargos formulados
contra HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias ‘H.H.’ hace alusión al conflicto de tierras en el
Urabá antioqueño y a los intereses que tienen ciertos grupos para adquirir a muy bajos
precios inicialmente para desarrollar macro proyectos570.

560. Al respecto, HÉBERT VELOZA GARCÍA, manifestó en versión libre que: “Vicente
Castaño decía que tener un metro de tierra en el Urabá era mejor que tener una mina de
oro” y habló también de un megaproyecto que se desarrolló en la zona del Chocó, que
empezó en la zona de Bajirá (…), que fue el proyecto de la palma, como un
megaproyecto que sería –y lo decía Carlos Castaño en una de las cartas que le escribía a
su hermano que él sabía del megaproyecto de la palma– aquel en el que se iría a vivir en
el postconflicto con las 100.000 hectáreas que él tenía proyectado tener571.

561. Alias “HH” afirmó que el “proyecto de la palma afectó a las comunidades negras
del Chocó, la zona de Curvaradó, Jiguamiandó, Cacarica, que no fueron influencia del
Bloque Bananero, (…) eso tuvo que ver con el Elmer Cárdenas, pero que sí nació como
una idea de Vicente Castaño y muchas personas aliadas alrededor de él, que no eran
precisamente los patrulleros ni los comandantes ni los mandos medios, o sea, el que
estaba combatiendo con algún principio o ideal en ese momento en la zona”572.

562. Así pues las razones de la entrada a la región por parte de las ACCU son múltiples
y esto ha sido reconocido en previas investigaciones de la Fiscalía para Justicia y Paz y

que se había pasado al grupo paramilitar, no obstante, durante el proceso de aplicación de la ley 975 de 2005, el postulado
Veloza García negó que fuera cierto que hubiera pertenecido a las FARC.
570
Registro de la Audiencia de control de legalidad de los cargos formulados contra HÉBERT VELOZA GARCÍA, Bogotá, 23
de marzo de 2011, primera sesión (archivo: XXX4001_8), minutos: 1:32:15 a 1:34:21.
571
En una carta de Carlos a Vicente Castaño, el primero afirma “A propósito de Urabá le doy mi concepto respecto a su
proyecto de la Palma, aunque no me lo ha pedido, pera algo sé y debo decírselo: es un secreto a voces que es un proyecto
suyo, de alcanzarlo entrará a nivelarse con cualquier emporio de los del establecimiento, incluso promoverán su crecimiento
a una 70 o 100 mil hectáreas, como uno de los muchísimos proyectos que habrá en el posconflicto, en ese tipo de
inversiones las que se negocian en los acuerdos del fin del conflicto, y se hace con el establecimiento económico
colombiano o con el internacional, su caso será con este último, no lo dude, ya lo verá. Sólo hay que estar atento al
adecuado conducir de las AUC, pues dependiendo de ese manejo será el futuro del proyecto, menos dude esto, está sujeto
al tratamiento que nos den o nos ganemos en la negociación. Menciono este ejemplo como patrón de otros casos que
interesan a todos…” Carta de Carlos Castaño a Vicente Castaño, 12 de junio de 2002. Documento contenido en la memoria
USB entregada por HÉBERT VELOZA GARCÍA a la Fiscalía General de la Nación. Ver Registro de versión libre rendida por
HÉBERT VELOZA GARCÍA, Medellín, 9 de julio de 2008, 10:50:18 y 10:51:53 (hora). En el minuto 11:26:21 el investigador
dejó constancia de la recepción de la memoria USB, y manifiesta que se respetará la debida cadena de custodia.
572
Registro de la Audiencia de control de legalidad de los cargos formulados contra HÉBERT VELOZA GARCÍA, Bogotá, 23
de marzo de 2011, primera sesión (archivo: XXX4001_8), minutos: 1:32:15 a 1:34:21.
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reiterado por la Sala al afirmar que las estructuras que operaron en el Urabá Antioqueño y
Chocoano:

“… surgieron de una múltiple alianza entre sectores de la económica legal, algunos miembros
de la fuerza pública, facilidades y en ciertos casos, impulso, de funcionarios públicos, actores
de economías ilegales – narcotraficantes y contrabandistas- y la casa Castaño. Los hermanos
Fidel, Carlos y Vicente, como ya lo mencionamos, expandieron sus estructuras hacia el Urabá
reconociendo la importancia estratégica, geográfica y económica de la región, motivo por el
cual, reclutan y cooptan grupos de seguridad privada y delincuencia común ya existentes, y
los articula en una estructura centralizada y con proyecciones más regionales ”573.

Creación del frente Turbo y sus antecedentes inmediatos: comandos populares


y la confrontación entre guerrilleros y desmovilizados

563. La Sala, en su amplia exposición de la creación de la estructura conocida como


Elmer Cárdenas (comandado por Freddy Rendón Herrera), hizo mención de las otras
estructuras que operaron en la zona, el frente “Árlex Hurtado” (bajo el mando de Raúl
Hasbún, alias “Pedro Ponte” o “Pedro Bonito”) y el frente Turbo, propiamente el que
comandó el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA alias “HH”. Dado que con amplitud se ha
expuesto la estructura del Elmer Cárdenas y en conformidad a que estas tres estructuras
operaron con altos grados de autonomía una de la otra, acá el interés es concentrarse en
el frente operado por alias “HH”, y por ello, la Sala se limitará a la exposición solo de este
frente, con mención a algunos eventos importantes de la estructura de Raúl Hasbún o de
Freddy Rendón cuando sea pertinente.

564. En el año 1994 se hicieron algunas incursiones esporádicas por parte de las ACCU,
pero es en enero de 1995, cuando se da la entrada de las estructuras paramilitares a la
región del Urabá, en especial a los municipios del Eje Bananero, anunciado por un
comunicado público de Carlos Castaño. Esta dinámica de expansión y consolidación inicia
con la creación o cooptación por parte de la ACCU, de pequeños grupos paramilitares
preexistentes en la región de Urabá, así como de algunos miembros de las desmovilizadas
estructuras del EPL.

565. Entre los hombres reclutados y entrenados militarmente por las ACCU se
encuentra el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA alias “H.H.”, quien fue entrenado en la
escuela de la finca “La 35” con las instrucciones de Carlos Mauricio García Fernández alias
“Doblecero”, alias “Estopín” y el mismo Carlos Castaño574.

573
Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá, Sentencia en contra de Fredy Rendón Herrera, alias “El Alemán”,
rad. 2007 82701, M.P. Uldi Teresa Jiménez López, Bogotá, 16 de diciembre de 2011, Parr. 393
574
Versión Libre postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias HH, 27 octubre de 2007.
228
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566. Este conjunto de hombres reclutados y entrenados por las ACCU fue dividido en
dos grandes estructuras inicialmente: uno, el mayoritario, con presencia en áreas rurales
de los municipios del eje bananero (veredas de los municipios de Apartadó, Carepa, y
Chigorodó), mientras, que un pequeño grupo se ubicó en el casco urbano en labores de
inteligencia y acciones urbanas, con movilización a otras zonas también. Este grupo sería
conocido inicialmente como “los Escorpiones”, y estuvo bajo el mando de HÉBERT
VELOZA GARCÍA que fue asignado a los municipios del norte de Urabá575.

567. Estas estructuras fueron absorbiendo paulatinamente unas preexistentes, algunas


mencionados por los postulados fueron el grupo de alias “44”, y el de alias “Salvador” en
la zona del San Juan, hacia los Burros, en los límites entre Antioquia y Córdoba, ambos
absorbidos por las ACCU de Castaño. Igualmente, hubo otros grupos que les entregaron
las armas a los Castaño, como el que operó en la finca ‘La 21’, que realizaban acciones de
defensa y de ataque”576.

568. El crecimiento de ambos tipos de estructuras estuvo alimentado por


desmovilizados del EPL quienes, tras la dejación de armas, sufrieron la persecución de las
FARC y de sus mismos compañeros no desmovilizados, acusados de “traición”, y quienes
conformaron como reacción los Comandos Populares577.

569. Para comprender este contexto de cambios de adhesión de antiguos guerrilleros a


grupos paramilitares por parte de ex miembros del EPL es necesario remontarse a unos
años antes, en el marco de la violencia entre la disidencia del EPL y las FARC contra
desmovilizados del EPL, o “esperanzados”.

570. La violencia entre las FARC y el EPL no era un factor novedoso para dicha
época578, pero luego de la desmovilización de una parte del EPL, las FARC que delinquían
en la región habían tratado en varias ocasiones de llegar a acuerdos con los
desmovilizados del EPL para que actuaran como brazo político de las FARC desde la recién
creada ESPERANZA, PAZ Y LIBERTAD (nombre que le dieron a su movimiento político
posterior a la desmovilización). Los “esperanzados” rechazaron ese vínculo, lo que

575
Audiencia de control forma y material de cargos, HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias HH, 18 de mayo de 2011
576
Intervención de Fredy Rendón Herrera. Registro de la Audiencia de control de legalidad de los cargos contra Fredy
Rendón Herrera, Bogotá, 1º de junio de 2011, primera sesión.
577
Audiencia de control forma y material de cargos, HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias HH, 18 de mayo de 2011
578
Desde la década del setenta se dieron varios asesinatos por parte de las FARC a miembros del EPL, a desertores de las
FARC que se pasaron a las filas del EPL o de personas que eran consideradas “soplones”, véase: Audiencia de control
formal y material de cargos Freddy Rendón alias “El Alemán”, sesión de 9 de junio de 2011, intervención de Elda Neyis
Mosquera, a. “Karina”.
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ocasionaría una guerra frontal de las FARC contra los desmovilizados para apoderarse de
todas sus propiedades y zonas de influencia en la región579.

571. Entre 1992 y 1994 se dieron varios actos de violencia de las FARC y de la
disidencia no desmovilizada del EPL comandada por Caraballo y Gonzalo, que empezaron
a asesinar a desmovilizados del EPL, lo que a su vez generó reacciones igualmente
violentas por grupos que se fueron formando por parte de desmovilizados que se
denominarían “Comandos Populares”580. Unos operarían en zonas rurales y otros grupos,
serían de carácter urbano. Estos fueron, según reconstrucción de algunos postulados en
Justicia y Paz que pertenecieron para esa época a los Comandos Populares y luego harían
parte del grupo paramilitar de Turbo, los siguientes581:

Grupos comandos populares

572. Grupo 1: el de Domingo Betín, “Tayson”, Jesús Albeiro Guisao Arias (“El Tigre”),
Euclides Bejarano (Pimpino), “El Mono de Arrecifes”, Omer Anaya, alias “Chorro Maluco”,
Domingo Blanquiceth, Joaquín, “O Joaco”, “San Pedro”, “Grandulón”, Marcelo Arango.
Ubicados del río Currulao hasta carretera Nueva Colonia, municipio de Turbo, Antioquia.

573. Grupo 2: Grupo de “Cepillo”, “Alfay” y Eladio Torres, Germán De Jesús Tuberquia
Salas (“Diablito”), Abel Méndez, “Escudero”, “Papujo”, “La Marrana”, Carlos Arturo
Durango Rodríguez (“Niña Triste”), Manuel Ángel Cartagena Rojas. Comprendía la zona
de río Currulao hasta Cope de Turbo en la vía entre Turbo y Necoclí.

574. Grupo 3: de Edilberto Camacho (comandante), Cardenio Caicedo Mena (“El


Burro”), Mario Bertel Revueltas, “Care Camión”, “Corosito”, “El Negro Iván”, Manuel Javier
Galarcio Barrios (“El Purre”), Suley Antonio Guerra Castro (“Suley” o “Juancho Suley”),

579
Presentación de la Fiscal 17 delegada ante Justicia y Paz, 5 de abril de 2011, audiencia de control formal y legal de
cargos, HÉBERT VELOZA GARCÍA alias HH.
580
Versiones libres de Rafael Emilio García, para entonces desmovilizado del EPL, julio 17 de 2008 y de Elkin Casarrubia
Posada, alias “El Cura” perteneciente en ese entonces a la disidencia del EPL, enero de 2011. La conformación tuvo entre
otras causas concretas el intento de secuestro por parte la disidencia a miembros activos en el sindicalismo y en el nuevo
movimiento político de desmovilizados del EPL (secuestrados: Antonio Arboleda, Eliecer Arteaga y Euclides Bejarano Alias
Pimpino, e intento de secuestro de Rafael Emilio García Alias “El Viejo”). Las reuniones entre los dirigentes de Esperanza,
Paz y Libertad, entre ellos Mario Agudelo, Pedro Germán y Rafael García, habían tratado de llegar a acuerdos de no
agresión con la disidencia de Gonzalo y Caraballo pero a en marzo de 1992 hubo varios secuestros a “esperanzados”. García
relató que para defenderse de los ataques de las Farc y la disidencia del EPL, más 400 reinsertados fueron asesinados, se
dio inicio a una campaña de desprestigio por parte de la disidencia del EPL en contra de Esperanzados (eran constante los
mensajes de “esperanzados sapos”. En marzo de 1992, se genera un primer grupo de Comandos, conformado entre 10 y
12 hombres reinsertados dirigidos por José Domingo Betin, alias “Mataperro”, ubicándose en el sector de San Jorge, de
Apartadó. En total se conformaron 5 grupos de Comandos,
581
Reconstrucción hecha por la fiscalía 17 ante Justicia y Paz, de las versiones libres de Rafael Emilio García “El Viejo”, Raúl
Emilio Hasbún Mendoza (“Pedro Bonito”), y Cardenio Caicedo Mena, “El Burro”. García y Caicedo Mena fueron integrantes
de los Comandos Populares.
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Juan Miado, Sixto Mosquera (“Alacrán”), José Alberto García Hernández, alias “Yolanda”,
“Chilin”, y Álvaro Novoa. Operaron desde la carretera Nueva Colonia hasta Churidó,
pueblo de Apartadó.

575. Grupo 5: cuyos comandantes era Real Vale (“Alfonsito”) y Dalson López Simanca
(Mono Pecoso), miembros: “Aliño”, “Marrana Mona”, “Quimbaya”, “El Pollo”, “Gustavo”, y
el “Niño”, ubicados de Churidó Pueblo hasta Zungo Embarcadero, más concretamente por
los lados del Siete, en el municipio de Carepa, Antioquia.

576. Grupo 6, casco Urbano de Apartadó: a la cabeza de Teodoro Díaz, alias “Platón”,
miembros: “Rafagazo”, “Pepito”, “El Mompa”, “Bejuco”, “Santiago”, Rafael Aguilar (“El
Guajiro”), Agustín Díaz Misperusa, Adalberto Santamaría.

577. Entre 1992 y 1993, estos grupos sostuvieron varios combates con la disidencia de
Caraballo y Gonzalo. Ante la superioridad numérica y bélica de la disidencia del EPL, en
poco tiempo, los Comandos Populares generaron contacto con Fidel Castaño Gil, quien
empieza a financiar estos grupos, con material de intendencia y dinero, entre 1992 y
1993582.

578. Una de las acciones reconocidas por los Comandos fue la masacre que perpetraron
el 9 de diciembre de 1993 en la finca los Kativos, donde ultimaron 12 personas. El
comandante de las FARC en la región, alias Efraín Guzmán da la orden de intensificar las
acciones contra los “esperanzados”, gente que tenían vínculos directos o indirectos.

579. En este contexto se entiende la masacre del barrio La Chinita (Apartadó) con la
cual se entró en una nueva dinámica de la confrontación entre todos los bandos
presentes en la zona según se verá a continuación. Los hechos se enmarcan dentro de la
intención de las FARC de perpetrar, inicialmente una serie de asesinatos selectivos con
listas, pero que en últimas se convirtió en la llamada masacre de “La Chinita” (Apartadó)
en la que se atacaron a desmovilizados del EPL o “esperanzados”583.

582
Además de la financiación, se supo que Fidel Castaño instruyó su reentrenamiento en una de sus fincas, con Rodrigo
Doblecero como instructor. También, Doblecero comandaba ciertas acciones y daba algunas informaciones a los miembros
de los Comandos Populares sin hacer todavía una presencia orgánica en la zona, ver: Presentación de la Fiscal 17 delegada
ante Justicia y Paz sobre los Comandos Populares, 5 a 7 de abril de 2011, audiencia de control formal y legal de cargos,
HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias HH.
583
La mayoría de las ocupaciones del EPL durante los ochenta y principios de los noventas fueron rurales pero esta
organización realizó, después de la desmovilización de 1991, la invasión más notoria de un barrio urbano en Urabá, llamado
La Chinita o “Barrio obrero”. Así pues, era un lugar reconocido por pertenecer a bases sociales del EPL, militantes o
personas cercanas a su causa. Invitación de habitantes de la región de Urabá a versiones libres de Rafael Emilio García, 18
de julio de 2008, y en versión conjunta de Rafael Emilio García y Raúl Hasbún, 1° de julio de 2009
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580. El 23 de enero de 1994 se realizaba en este barrio una reunión comunitaria de sus
habitantes con el fin de recoger fondos para el año escolar de sus hijos. Un grupo de
cerca de 20 hombres camuflados con prendas militares y cubiertos con pasamontañas
(que luego se sabrían pertenecían al V frente de las FARC y a sus milicias urbanas) y
portando gran cantidad de armas, ingresaron disparando a los pobladores gritando
“Esperanzados hijos de puta”. El resultado de la masacre fue 35 muertos, decenas de
heridos y cientos de desplazados, muchos de los cuales salieron esa misma noche584.

581. El resultado fue el incremento de acciones de los Comandos Populares y cambio


de estrategia, al darse cuenta que militarmente no podían enfrentarse a ambos bandos
(FARC y disidencia EPL) deciden muchos de ellos integrar, ahora orgánicamente, los
grupos de paramilitares enviados desde Córdoba por los Castaño Gil. Como afirmó un
morador de la región entrevistado por la Fiscalía: en la zona se estaba cocinado la
incursión de las autodefensas en la zona bananera, y entonces “o se iba uno para el
monte a la guerrilla o se iba de la región o se moría”585

582. A finales de 1994 HÉBERT VELOZA GARCÍA y 13 hombres más recibieron


“entrenamiento militar en las fincas la 35 y Jaraguay”586, de ahí salió una estructura
primigenia conocida como “el grupo de los Siete”. El entrenamiento tuvo una duración
aproximada de cuatro meses y estuvo a cargo de Carlos Mauricio García Fernández, alias
‘Doble Cero’, Arturo Salom Rueda, alias ‘JL’, y alias ‘44’587. Asimismo, en 1995, los
hermanos Castaño decidieron crear un grupo de 20 personas, en Turbo, exactamente en
la vereda El Limón. Designaron como comandante del Grupo a alias “Gabriel” y como
comandante militar a alias “Estopín”; en este grupo VELOZA GARCÍA, al ser rural, era un
miembro de la tropa”588. Ese grupo operó en Turbo, Apartadó, Chigorodó y Carepa, y de
manera permanente en Monteverde589. Ese primer grupo de 20 hombres fue conocido
como “Los Escorpiones”. Por su lado, los grupos que se iban formando, tanto rurales
como urbanos, iban subsumiendo a miembros de otras estructuras preexistentes. Lo
anterior fue señalado también por el postulado:

584
Véase: versión libre de Danis Daniel Sierra Martínez Alias Samir del 26 de marzo de 2009. Sobre los hechos, hay una
amplia reconstrucción en la sentencia de la Corte Suprema de Justicia Sala penal, Radicado 19915, 20 de junio de 2005,
M.P. Álvaro Orlando Pérez Pinzón.
585
Transcripción de audiencia del 10 de marzo de 2011, págs.. 12 y 13, (1:53:52), audiencia de formulación de cargos,
HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias H.H.
586
Transcripción de audiencia del 10 de marzo de 2011, pag. 8, audiencia de formulación de cargos, HÉBERT VELOZA
GARCÍA, alias H.H
587
En la Primera escuela La 35 participaron también: En ese entrenamiento también participaron: i) Enrique Mestre Yáñez,
alias ‘Wilson’; ii) Forferinzo Flórez Ariza, alias ‘Montador’; iii) Jesús Albeiro Guisao Arias, alias ‘El Tigre’; iv) José Huber Coca
Ceballos, alias ‘Huber Coca’; v) José Ruperto García, alias ‘El Gato’; vi) Wilmer Aguado Álvarez, alias ‘Carro Loco’; vii) alias
‘Chéchere’; viii) alias ‘Escudero’; ix) alias ‘Gata Ciega’; x) alias ‘Negro Fino’; xi) alias ‘Olafo’; xii) alias ‘San Pedro’; y xiii) alias
‘Tribilín’, Documento de transcripción de la acusación, pág. 11.
588
Ibid, pág. 8.
589
Ibid, pág. 8.
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“Cuando nosotros llegamos al Urabá Antioqueño ya existían los comandos populares y


habían en el sector El Siete o Zungo un grupo liderado por alias ‘Mono Pecoso’,
‘Lázaro’ o ‘Pedro’ (Dalson López Simanca). Él tenía un grupito por ahí de 7 u 8
personas que dependían de un señor Veterina y cuando nosotros llegamos allá
entramos a vincular estos grupos a las autodefensas y este grupo queda bajo nuestro
mando” (versión libre sobre el hecho 54, aquí legalizado).

583. Absorción de los Comandos Populares por la estructura paramilitar de


Castaño: Sobre los Comandos Populares que luego pasaron a la estructura paramilitar, la
Fiscalía logró identificar que se desmovilizaron con el Bloque Bananero los siguientes
miembros: Cardenio Caideo Mena, alias El Burro; Manuel Ángel Cartagena Rojas, alias
Omar; Germán de Jesús Tuberquia Salas, alias El Diablito; Rafael Emilio García, alias El
Viejo; Euclides Bejarano, alias Pimpino; Alberto Medrano, alias Walter; Román de Jesús
Taborda Meneses, alias Escudero (Muerto); Carlos Enrique Vásquez, alias Cepillo
(Fallecido); Felipe Martínez Mondragón, alias Felipe; Carlos Arturo Durango Rodríguez,
alias Niña Triste; Suley Antonio Guerra Castro, alias El Purre, (no hizo parte de la
desmovilización); Diego Misael Zamora, alias La Marrana; José Alberto García Hernández,
alias Yolanda; Jesús Albeiro Guisao Arias, alias El Tigre, desmovilizado con El Bloque
Norte; Duarbays Enrique Urango Gómez, alias “Sancocho” Desmovilizado con El Bloque
Bananero; Dalson López Simanca, alias Mono Pecoso; Real Vale Sepúlveda Corrales, alias
Alfonsito (fallecido); Orlando Enrique Gómez Aguilar, alias Morroco (fallecido).

Otras estructuras presentes:

584. Durante el período comprendido entre 1994 y 1995, ya existían algunos grupos de
autodefensa en Urabá. En Necoclí y el eje bananero funcionaban varias Convivir, hacían
presencia los Comandos Populares y la Casa Castaño también tenía un grupo bajo el
mando de alias ‘90’590. De otra parte, existía el grupo de Pascual Rovira Peña, alias ‘Elías
44’, que hizo presencia en la ribera del río Mulatos, en territorios de jurisdicción de
Arboletes, Necoclí y San Juan de Urabá, en Antioquia, y en Canalete y Córdobas, en
Córdoba591. Ese grupo estuvo compuesto por aproximadamente diez hombres, entre
quienes se destacan alias ‘Yunda’ y alias ‘Cuñao Boyaco’, quienes ejercieron como
comandantes de escuadra, y, durante 1995, realizó algunas operaciones conjuntas con el
grupo “Los Güelengues”592.

590
Ver Registro de la Audiencia de control de legalidad de los cargos contra Fredy Rendón Herrera, Bogotá, 30 de mayo de
2011, primera sesión (archivo: XXX4002_0), minutos: 1:57:50 a 1:58:00 y 2:01:12 a 2:01:20.
591
Fuente: ob. cit., nota 46. Organigrama: “Grupos de autodefensa que hicieron presencia en Necoclí desde mayo hasta
septiembre de 1995 (Los Güelengues)” (1). Información corroborada por Fredy Rendón Herrera. Ver Registro de la
Audiencia de control de legalidad de los cargos contra Fredy Rendón Herrera, Bogotá, 30 de mayo de 2011, primera sesión
(archivo: XXX4002_0), minutos: 1:57:50 a 1:58:00.
592
Fuente: ob. cit. nota 43. Esquema: “Grupo de autodefensa ‘La 70‘ desde octubre de 1995 hasta el 20 de diciembre de
1996. Otros grupos en la zona y operaciones conjuntas con otras autodefensas” (12).
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585. Para 1995, había presencia del grupo paramilitar “Los Güelengues”, en Necoclí. El
cual se denominaría luego “La 70” (entre 1995-1996), estructura armada a la que se
vinculó Fredy Rendón Herrera a finales de 1995. Este sería el grupo que luego haría
expansión hacia Chocó con el establecimiento de un grupo paramilitar en Acandí y otro en
Unguía (febrero de 1996). Su primera incursión armada es a Riosucio (20 de diciembre de
1996), dicho grupo haría presencia en el Urabá chocoano entre el 1º enero de 1997 hasta
el 15 de agosto de 2006 (última desmovilización colectiva del BEC), que inicialmente fue
conocida con el nombre de Frente Chocó593.

586. Según Fredy Rendón Herrera, “el grupo de Pascual Rovira era de seguridad, pero
también ofensivo, porque las FARC cruzaban de Turbo a los municipios de la margen
izquierda de Córdoba; entonces, ese grupo las contrarrestó”.

587. Con base en testimonios de varios postulados del BEC, la Fiscalía estableció que el
grupo “Los Güelengues” funcionó durante el período comprendido entre mayo y
septiembre de 1995, y determinó algunas características de su funcionamiento. Ese grupo
operó en el casco urbano de Necoclí y los corregimientos El Totumo, Pueblo Nuevo y
Punta de Piedra de ese municipio. También operó en la zona de Tulapas, comprendida en
jurisdicción de Necoclí y Turbo.

588. A partir de la segunda mitad del año 1996 la estructura paramilitar liderada por
Carlos Castaño, y con la importante influencia de Raúl Emilio Hasbún, empresario
bananero de la región que había perdido varios predios a manos de invasiones del EPL,
inician su incursión en el municipio de Turbo. Surgen así, dos agrupaciones paramilitares;
el frente de Turbo bajo el mando de HÉBERT VELOZA GARCÍA y el frente “Árlex Hurtado”
comandado por Raúl Emilio Hasbún. Estas dos estructuras, confluyeron bajo un solo
mando para su desmovilización, y se denominaron Bloque Bananero,

589. Sobre el inicio general de estas estructuras paramilitares, Vicente Castaño


advirtió:

“En el norte de Urabá existía un pequeño grupo de campesinos que prestaban seguridad
en las fincas de la región bajo el mando de Camilo, cuando se cre[ó] el nuevo movimiento
de Autodefensas este grupo entr[ó] a formar parte de las ACCU. Posteriormente
prestarían seguridad a la escuela de capacitación Acuarela y luego el frente es enviado a

593
Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá, Sentencia en contra de Fredy Rendón Herrera, alias “El Alemán”,
rad. 2007 82701, M.P. Uldi Teresa Jiménez López, Bogotá, 16 de diciembre de 2011
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la escuela de capacitación del Bloque Metro donde formaría parte de su estructura


militar”594.

590. Es de recordar que ya el grupo Castaño había entrado en distintas ocasiones a


Urabá, pero no de la forma en que se desarrollaría a partir de 1994 y 1995. Se recordará
que Grupo de Fidel, asentado en Arboletes595 y San Pedro de Urabá (Antioquia), fue el
que encabezó la penetración de los grupos paramilitares en Urabá, antes de finalizar la
primera mitad de la década de 1990. En 1994, con la muerte de Fidel Castaño, sus
hermanos Vicente y Carlos heredaron este proyecto expansionista596. Para realizarlo,
contaron con una ventaja: cuando Carlos Castaño asume el mando de las Autodefensas
de Córdoba y Urabá, el Congreso de la República aprobó la creación de grupos de
seguridad privada, las denominadas Convivir597.

591. Según Veloza García, “a principios del 94 comienzan Vicente y Carlos Castaño, con
‘Doble Cero’, a proyectar la entrada de un grupo hacia la zona de Urabá”598. De acuerdo
con una versión escrita de Vicente Castaño, la incursión a Turbo fue encargada a Carlos
Alberto Cardona Guzmán, alias ‘Maicol’, quien movilizó un grupo desde San Pedro de

594
Vicente Castaño, Historia de las Autodefensas de Córdoba y Urabá (ACCU), multicopiado, pág. 3 (subrayas en el
original). Archivo entregado por la Fiscalía a esta Sala.
595
La fiscal 17 de Justicia y Paz también ilustró la presencia inicial de autodefensas en Arboletes, entre 1989 y 1990, con un
extracto de versión libre del postulado Elkin Casarrubia, alias ‘El Cura’, quien por esa época pertenecía a la guerrilla del EPL:
“se hablaba que eran las autodefensas del ‘mono’ López. […]. Se hablaba que eran varios dueños de fincas de la zona que
se habían rebelado contra la guerrilla y optaron por armarse”. Audiencia de control de legalidad de cargos, Bogotá, 17 de
mayo de 2011, minutos 00:48:48 y ss. Tal como lo explicó la Fiscalía, la referencia al ‘mono’ López corresponde al ex
gobernador de Córdoba (2001-2003), Jesús María López Gómez, quien fue condenado dos veces por la Corte Suprema de
Justicia. En febrero de 2009, lo condenó a siete años de prisión por los delitos de celebración de contrato sin cumplimiento
de los requisitos legales y peculado por apropiación. El 8 de febrero de 2012 lo condenó 90 meses de prisión como autor
responsable del delito de concierto para delinquir agravado. Ver Corte Suprema de Justicia, Proceso 35.227, Sentencia
contra Jorge Luis Feris Chadid, José María Imbeth Bermúdez y Jesús María López Gómez, Bogotá, 8 de febrero de 2012,
M.P. José Leonidas Bustos Ramírez.
596
En 1994, el mando de la estructura de las Autodefensas de Córdoba y Urabá (ACCU) pasó a manos de Carlos Castaño,
quien la consolida y profundiza el proceso expansivo que venía haciendo su hermano Fidel. Este relevo de autoridad es
consecuencia de la muerte de Fidel Castaño, en enero de 1994, quien habría sido asesinado presuntamente en combate
por un grupo no desmovilizado del EPL. Según otras versiones, habría sido su hermano menor, Carlos Castaño, quien había
ordenado perpetrar el asesinato a uno de sus guardaespaldas. “Sobre la versión que el autor intelectual de la muerte de
Fidel, fue su hermano Carlos Castaño se han pronunciado ex paramilitares Iván Roberto Duque (alias ‘Ernesto Báez’), y uno
de los sicarios principales de Pablo Escobar, John Jairo Velásquez alias ‘Popeye’. Este último aseguró ante la justicia que
«quien había mandado a matar a Fidel Castaño fue su hermano Carlos porque este quería quedarse con el control del
narcotráfico y del ejército de Fidel Castaño ya que había muerto Pablo Escobar semanas antes»”. Exposición presentada por
la Fiscalía General de la Nación Justicia y Paz sobre el surgimiento de la CASA CASTAÑO, 9 de diciembre de 2009. Otras
versiones sostienen que detrás de su asesinato estuvo una orden de Pablo Escobar (muerto semanas antes que Castaño),
quien tenía hombres de confianza infiltrados en las estructuras de seguridad de este último. En diligencia de versión libre,
Jesús Ignacio Roldán, alias ‘Monoleche’, una de las personas cercanas a Fidel Castaño, aseguró que quien asesinó a
Castaño fue alias ‘Salvador’, un aliado de Pablo Escobar Gaviria. Audiencia versión libre ante la Fiscalía Justicia y Paz,
postulado Jesús Ignacio Roldán, alias ‘Monoleche’, septiembre 11 de 2007.
597
En otra oportunidad, la Sala se pronunció sobre la importancia de las Cooperativas de Vigilancia y Seguridad: “buena
parte de la consolidación del accionar del Bloque Elmer Cárdenas, y del Bananero –Bloques con influencia en la región del
Urabá– se hizo, bajo la imagen de legalidad que tenían estas organizaciones”. Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de
Bogotá, sentencia contra postulado José Barney Veloza García, rad. 2006 80585 M.P. Uldi Teresa Jiménez López, 31 de
enero 2012, párr. 237.
598
Fiscalía 17 Delegada ante el Tribunal Superior de Justicia y Paz, Diligencia de versión libre de Hébert Veloza García,
Medellín, 29 de octubre de 2007 (pág. 9, transcripción de audio).
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Urabá como respuesta a una solicitud mucho antes formulada por empresarios del
municipio bananero599.

1994-1995: entrenamiento y establecimiento de “Los Escorpiones” en la


vereda Monteverde

592. El origen del Frente Turbo es el establecimiento en la vereda Monteverde de Turbo


de un grupo paramilitar compuesto por 22 hombres, que fue conocido como “Los
Escorpiones” (véase gráfica 3).

Gráfica 3
Organigrama inicial del Frente Turbo
1995

VICENTE CASTAÑO GIL CARLOS CASTAÑO GIL


A Alias PROFE YARUMO Alias “ALEX,CALICHE”

ESTRUCTURA AÑO 1995


GRUPO QUE INGRESO A LA ZONA DE URABA
C CARLOS MAURICIO GARCIA FERNANDEZ
Alias DOBLE CERO
COMANDANTE MILITAR

MANUEL ARTURO SALOM RUEDA


ALIAS “J.L”
INSTRUCTOR MILITAR

IVAN DARIO RAMIREZ SERNA


ALIAS ESTOPIN
ALIAS GABRIEL,IVAN ALVAREZ
Comandante Militar
Coordinador de la Zona

599
Sobre la expansión paramilitar a Turbo, Vicente Castaño señaló. “Turbo (Antioquia). “De San Pedro de Urabá se envió un
grupo bajo el mando militar de Maicol a incursionar en el municipio de Turbo donde se sufría una fuerte presencia y
dominio de la guerrilla. Antes un grupo de empresarios habían solicitado ayuda desesperadamente”. Vicente Castaño,
Historia de las Autodefensas de Córdoba y Urabá (ACCU), multicopiado, pág. 3 (archivo entregado por la Fiscalía al
Tribunal).
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593. A finales de 1994 HÉBERT VELOZA GARCÍA y 13 hombres más recibieron


“entrenamiento militar en las fincas «La 35»” (Villanueva, Córdoba) y «Jaraguay»” 600, así
como en la finca “Las Tangas”601. El entrenamiento tuvo una duración aproximada de
cuatro meses y estuvo a cargo de Carlos Mauricio García Fernández, alias ‘Doble Cero’,
Arturo Salom Rueda, alias ‘JL’, y alias ‘44’602. En ese entrenamiento también participaron:
Ángel María Jiménez Plaza, alias ‘San Pedro’; Enrique Mestre Yáñez, alias ‘Wilson’;
Forferinzo Flórez Ariza, alias ‘Montador’; Gregorio Antonio Oviedo, alias ‘Tribilín’; Jesús
Albeiro Guisao Arias, alias ‘El Tigre’; José Uber Coca Ceballos, alias ‘Uber’; José Ruperto
García, alias ‘El Gato’; Manuel María Correa Gómez, alias ‘Negro Fino’; Wilmer Aguado
Álvarez, alias ‘Carro Loco’; Román de Jesús Taborda Meneses, alias ‘Escudero’; alias
‘Chéchere’; alias ‘Gata Ciega’; y alias ‘Olafo’603.

594. Según lo advirtió el postulado VELOZA GARCÍA, el entrenamiento incluyó ejercicios


prácticos en terreno que fueron orientados por Carlos Alberto Cardona Guzmán, alias
‘Maicol’ (véase gráfica 2), y Manuel Salvador Ospina Cifuentes, alias ‘Móvil 5’. Parte de
estos ejercicios fueron la incursiones hechas a comienzos de 1995 en Matemaíz y el
corregimiento San José de Mulatos de Turbo604. El establecimiento definitivo en
Monteverde estuvo precedido de una incursión en el corregimiento El Dos de Turbo y a
éste le siguió la decisión de mantener un grupo de siete paramilitares en el casco urbano
de Turbo:

“(…) Por ahí en marzo del 95, finales de febrero o principios de marzo, somos
enviados a la zona de Urabá. Nos llevan en un camión. Primero mandan en un
camión con adobes, los fusiles, todo el material de intendencia, todo. [A] nosotros
[nos] mandan atrás en otro camión. En la vereda El Limón del municipio de Turbo,
el camión nos espera y ya nos entregan todo el armamento y todo el material de
intendencia, y quedamos a órdenes de ‘Gabriel’ y ‘Estopín’… Ya hacemos un
recorrido a pie, hacia los lados de El Dos… en El Dos… || Es un corregimiento…
Nosotros… le estoy diciendo doctora, salimos de la finca «La 35», nos llevan en
camiones hasta la vereda El Limón que pertenece al municipio de Turbo. De la
vereda El Limón nos entregan todo el armamento y el material de intendencia. De
ahí ya hacemos desplazamiento a pie, hacia la vereda El Dos, en donde hay gran
presencia del Epl y [de las] Farc, y donde viven unos milicianos, ehh… La primera

600
Escrito de sustentación, pág. 8. Para otros antecedentes de HVG, consultar las primeras versiones libres.
601
Sobre el entrenamiento recibido, Veloza García también manifestó: “De ‘Los Tangueros’ cuando recibimos
entrenamiento, cuando llegamos a las AUC, en el 94, fuimos a «Las Tangas», después a «La 35»”. Transcripción de versión
libre rendida por Hébert Veloza García, 26 de marzo de 2008, pág. 12 (minuto: 12.13).
602
Véase Escrito de acusación, pág. 11. La FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN logró la identificación de la mayoría de
participantes en ese entrenamiento después de presentado y sustentado el escrito de acusación. Véase FISCALÍA GENERAL
DE LA NACIÓN, archivo: “Estructura 1995 bb.pptx”, diapositiva 1.
603
Véase Escrito de acusación, pág. 11.
604
Matemaíz es un sitio ubicado entre San Pedro de Urabá (Antioquia) y Valencia (Córdoba). A propósito de la incursión al
corregimiento San José de Mulatos de Turbo, el postulado señaló: “Ya estando o terminado en la 35 a principios del 95,
VICENTE, da la orden de ingresar el grupo a Urabá, antes de ingresar a Urabá a principios muy… creo que en Enero… Si en
Enero creo, hicimos incursión también hacia los lados de…. San José de Mulatos, donde juntaron unos 80 o 100 hombres de
las autodefensas recogidas de toda la zona y de todas las personas que tenían presencia por allá… entramos a San José,
entramos en combates con la guerrilla del Epl y las Farc entre San José, Pueblo Nuevo”. Transcripción de versión libre
rendida por Hébert Veloza García, 29 de octubre de 2007, pág. 14.
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acción que se hace con este grupo es una incursión a El Dos, en donde se entra en
busca de dos individuos que decían ser milicianos de las Farc, que eran alias ‘El
Mocho’ y alias ‘Tachuela’. Me parece que […] entramos a El Dos y estas dos
personas no se encontraban en sus viviendas. ‘Gabriel’ da la orden de quemar sus
viviendas y una proveedora de abarrotes que tenían una de estas personas, que
tenía ahí en El Dos. Se queman creo […] que una o dos casas por el inicio de ese
incendio. Esa fue la primera acción que hicimos”605.

“(…) ya de ahí comenzamos a estar entre El Dos y Monteverde. Ya con el apoyo de


‘Walter’ [precisar] nos radicamos y montamos una base fija en el sector de
Monteverde, en donde nos instalamos y de ahí salíamos a operar. Ya se decide
sacar a unos urbanos; entre esos urbanos, salgo yo. Salimos siete urbanos: estaba
‘Carroloco’, estaba ‘Wilson’, estaba ‘El Gato’, estaban ‘Uber’, ‘San Pedro’, ‘El Tigre’ y
mi persona. Se nos encomienda la labor de hacer todo el trabajo urbano. El trabajo
urbano consiste en salir a hacer inteligencia, recopilar información y constatar
información suministrada también por personas asentadas en la zona de Urabá y
que vivían en la zona de Urabá y suministrada también por los Comandos
Populares que operaban en esta zona y ejecutar estas órdenes. […]. En ese nuevo
cargo de urbano se nos asignan dos carros, es una Hilux blanca y un Renault…
Renault café, también tuvimos un Suzuki blanco, donde hacíamos los
desplazamientos en toda la zona de Urabá hacíamos presencia en los municipios
de Turbo, Apartadó, Carepa y Chigorodó”606.

595. La razón para el surgimiento del Frente Turbo: perspectiva del postulado, su
comandante. “HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias ‘HH’, que rápidamente comandaría el grupo
urbano de Los Escorpiones manifestó en versión libre cuál era el contexto a su llegada”607:

“El Urabá necesitaba eso [la entrada del grupo] porque estaba totalmente controlada por la
guerrilla. No perseguían al sindicato o a los sindicalistas, sino a la guerrilla que se infiltró en
los sindicatos. Los sindicatos estaban controlados por la FARC y el EPL. Ese era nuestro
objetivo, combatir a la guerrilla en todas sus formas. La guerrilla utilizó la lucha justa, a la
causa de buscar una mejor forma de vida. La guerrilla se aprovechó de ese inconformismo
de los campesinos, de los trabajadores con sus patronos para liderar paros armados y para
colocar a esa población en contra de los ricos de la región 608. En contra de los empresarios,
empresarios que han abusado y han explotado a la comunidad en zona del Urabá. Y todavía
lo siguen haciendo. Yo lo he denunciado públicamente. He dicho los bananeros son tan o
más responsables que nosotros en todo lo que pasó en el Urabá. Porque fuimos de finca en
finca prohibiéndoles a los trabajadores a hacer paros armados. Uno iba uniformado y con un
cuchillo en la mano, diciéndoles que el que hiciera paro lo matábamos, ¿por qué?, por
buscar los beneficios de los empresarios bananeros. Ellos fueron los que se beneficiaron de
la guerra. Ellos ninguno está pagando, ninguno está detenido, ninguno está investigado,
ninguno ha puesto un peso para la reparación y ellos fueron los que realmente se
beneficiaron”609.

605
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 29 de octubre de 2007, pág. 14.
606
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 29 de octubre de 2007, pág. 14.
607
Decisión de control de legalidad HVG, párr. 488.
608
Transcripción de audiencia del 10 de marzo de 2011, pág. 19.
609
Transcripción de audiencia del 10 de marzo de 2011, pág. 19.
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HÉBERT VELOZA GARCÍA

Primeros Comandantes de “Los Escorpiones”:

Primer comandante: Iván Darío Ramírez Serna, alias ‘Gabriel’


Y/o ‘Iván Álvarez’ (1995)

596. Generales: Según pesquisas hechas por la Fiscalía General de la Nación, la


identidad de alias ‘Gabriel’ o ‘Iván Álvarez’ es Iván Darío Ramírez Serna, identificado con
la cédula de ciudadanía 71.975.440610. Según Veloza García, alias ‘Gabriel’ “está muerto,
murió en las autodefensas”611.

597. El postulado estableció que alias ‘Iván Álvarez’ era el mismo alias ‘Gabriel’ de la
siguiente manera:

“(…) en este hecho participaron alias ‘Caturro’, (…) hermano de ‘Iván Álvarez’ o
‘Gabriel’ que fue el primer comandante que lleg[ó] con nosotros allá, y alias
‘Orejas’. En eso particip[ó] otro personal del grupo rural que no tengo los nombres,
pero que iban ahí porque ‘Caturro’ era una de las personas que conocía la zona y
mantenía en ese sector de El Dos suministrando información de la gente, ya que
ellos vivían en una finca cerca al Dos”612.

598. En 1996, el Grupo Especial de Investigaciones del CTI se refirió a Iván Ramírez
como uno de los paramilitares de Turbo:

“IVÁN DARÍO RAMÍREZ SERNA: Alias ‘Iván Álvarez’, identificado con la cédula de
ciudadanía número 71´975.440 de Turbo y contra quien existen órdenes de
captura expedida[s] por la Fiscalía Regional de Apartadó y Seccional Turbo”613.

610
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs”. Para la fuente del nombre y del
número de documento de identidad, véase CTI, Informe de inteligencia, 9 de julio de 1996 (fila 7). La consulta realizada en
el portal de la PGN permitió confirmar que el número de la cédula corresponde al nombre citado.
611
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 29 de octubre de 2007, pág. 30.
612
FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, Escrito de sustentación, pág. 122 (extracto de versión libre del 9 de julio de 2008
citado respecto al hecho 63). Véase también FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, Organigrama: “Estructura orgánica. Antes
de marzo. Año 1995. Grupo de los 20 hombres. ‘Los Escorpiones’”, Escrito de sustentación, pág. 12. Sobre alias ‘Caturro’,
Veloza García señaló: “‘Caturro’ es hermano de Iván Álvarez es hijo de un señor Fabio Álvarez fue desaparecido en El Dos.
Él se vinculó con nosotros por medio de GABRIEL. Él creo que vive en Montería; se desmovilizó, se retiro de las
autodefensas. Yo después lo traslade a Frontino. De Frontino no sé a dónde viajó más y estuvo un tiempo en Montería
como escolta de Teresita, una señora Sor Teresa que le manejaba una fundación a los Castaño en Montería. Estuvo de
escolta de Teresita; hasta donde sé, estuvo en Montería viviendo allá. Que tenga conocimiento, no se ha desmovilizado”.
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 9 de julio de 2008, págs. 22 y 23.
613
FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN-Dirección Seccional del CTI-Grupo Especial de Investigaciones, Informe de labores
investigativas tendientes a esclarecer los homicidios de cincuenta y cuatro personas, quienes perdieron la vida en
jurisdicción del municipio de Turbo (Informe 050), Copacabana, multicopiado, 27 de diciembre de 1996, pág. 16.
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599. Trayectoria: Como ya se advirtió, alias ‘Gabriel’ hizo parte del Grupo de Fidel
(véase supra, gráfica 2). Como parte de éste fue uno de los entrenadores de ‘Los
Escorpiones’614; luego se convirtió en el primer comandante del nuevo grupo. En marzo de
1995615, fue reemplazado por HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias ‘H.H.’616:

“En ese primer grupo de los 20 hombres, se prepararon y salimos, estaba


‘Gabriel’, estaba ‘Estopín’ (…).

“No… el grupo de los 20 lo forman con un mando independiente, se inicia


‘Gabriel’ como comandante, ‘Estopín’ como comandante militar, bajo las
órdenes directas de ‘Doble Cero’ y dos hermanos Castaño, Carlos y Vicente (…).

“‘Gabriel’ iba encargado de todos los hombres, e iba encargado de la parte urbana
e iba sobre ‘Estopín’, era el coordinador de toda la zona, el que coordinaba toda la
zona, iba encargado de todas las acciones y era el responsable del grupo” 617.

600. Según HÉBERT VELOZA GARCÍA, ‘Doblecero’ fue quien decidió que él reemplazara
a ‘Gabriel’ como comandante, pues éste habría incurrido en excesos contra la población y
malos manejos:

“Después de operar varios meses, al poco tiempo de estar nosotros como urbanos,
ya comenzamos a operar y por los malos manejos internos del comandante
‘Gabriel’, el comandante ‘Doble Cero’ viajó a la zona de Urabá con ‘JL’ a pasar
revista y a informarse de cómo estábamos operando (…). ‘Gabriel’ estaba
incumpliendo y le estaba dando malos manejos a la comunidad. Entonces, ‘Gabriel’
fue a los pocos días de haber llegado, fue trasladado y fui asignado yo, como
comandante de la zona del grupo que habíamos en el Urabá, de todas maneras yo
seguí operando con estos 7 hombres urbanos, hacíamos desplazamientos e
incursiones en toda la zona de Urabá”618.

Comandante militar: Juan Bautista Mesa Henao, alias ‘Estopín’ (1995-1996)

601. Generales: Según indagaciones iniciales de la Fiscalía General de la Nación, la


identidad de alias ‘Estopín’ sería Juan Bautista Mejía Henao, identificado con la cédula de
614
Según Veloza García, “quienes nos entrenaron para ese entonces [fueron] el comandante ‘Doblecero’ (…), ‘J.L.’, y
‘Estopín’. También mencioné (…) ‘Móvil Cinco’ y ‘Harry’. Los que nos entrenaron fueron ‘Doblecero’, ‘J.L.’ y ‘Estopín’, y
fuimos bajo el mando de ‘Harry’ y ‘Móvil Cinco’ que hacía parte del grupo que estaba en Las Tangas”. Transcripción de
versión libre rendida por Hébert Veloza García, 26 de marzo de 2008, pág. 12 (minuto: 12.13). Organización
615
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, Organigrama: “Estructura orgánica. Antes de marzo. Año 1995. Grupo de los
20 hombres. ‘Los Escorpiones’”, Escrito de sustentación, pág. 12.
616
FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, Escrito de sustentación, pág. 8.
617
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 29 de octubre de 2007, pág. 13 (la negrita es nuestra).
618
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 29 de octubre de 2007, pág. 16.
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ciudadanía 4.572.769619. De acuerdo con pesquisas propias, ese número de cédula


corresponde al documento de identidad de Juan Bautista Mesa Henao620. De otra parte, la
Fiscalía estableció que esta persona fue muerta, en San Martín (Meta), en marzo de
1999621. Según VELOZA GARCÍA, alías “Estopín” se suicidó622:

“‘Estopín’, cuando salimos de La 35 hacia el Urabá antioqueño, (…) era el


comandante del grupo era el militar. ‘Estopín’ después fue enviado hacia los Llanos
Orientales, hizo parte del grupo de los Llanos Orientales y se asesinó él mismo allá
en San Martín, Meta. Le dio muerte a su mujer y después de matarla se mató él
también”623.

602. Trayectoria. Alias ‘Estopín’ fue el primer comandante militar del grupo “Los
Escorpiones”624. Se desempeñó en ese cargo hasta finales de 1996: según la Fiscalía
General de la Nación, primero como comandante militar de la zona urbana (“Grupo de los
Siete”) y después como comandante militar de todos los patrulleros, tanto los de la zona
rural como la urbana625. Según VELOZA GARCÍA, después fue trasladado a los Llanos
Orientales:

“La 35 era un campamento donde nos entrenaban, una base de entrenamiento,


allá estaba ‘JL’ y ‘Doble Cero’ y ‘Estopín’ quienes eran los encargados de dar la
instrucción militar para el fortalecimiento y la capacitación del grupo que estaba
preparando para llevar hacia la zona de Urabá. (…).

“En ese primer grupo de los 20 hombres, se prepararon (sic) y salimos, estaba
‘Gabriel’, estaba ‘Estopín’ (…).

“No… el grupo de los 20 lo forman con un mando independiente, se inicia ‘Gabriel’


como comandante, ‘Estopín’ como comandante militar, bajo las órdenes
directas de ‘Doble Cero’ y dos hermanos Castaño, Carlos y Vicente (…)” 626.

603. Crímenes: De acuerdo con la información aportada por VELOZA GARCÍA durante
las diligencias de versión libre, la Fiscalía pudo establecer la participación de alias ‘Estopín’
en el homicidio de los señores: Celso Lozano Casas y Euclides Cuesta Cuesta, hecho 28;
José Daniel Cantero Martínez e Ismael Martínez Quintero, hecho 36; Wilton Antonio
Garcés Flórez (Montaño), hecho 57; Luís Eduardo Cubides Vanegas, concejal de Turbo y
619
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs”. Para la fuente del nombre y del
número de documento de identidad, véase Fiscalía 90-Instrucción 6181, Tarjeta de radicación. Radicado 18860 (fila 8). La
consulta realizada en el portal de la PGN permitió confirmar que el número de la cédula corresponde al nombre citado.
620
La consulta realizada en el portal de la PGN permitió confirmar que el número de la cédula corresponde al mismo
nombre pero con los siguientes apellidos: Mesa Henao.
621
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs”. En particular, véase Fiscalía 90-
Instrucción 6181, Tarjeta de radicación. Radicado 18860 (fila 8). No queda claro cuál fue el día exacto de la muerte: ¿328?-
03-1999.
622
Versión libre rendida por Hébert Veloza García, 29 de octubre de 2007, pág. 30.
623
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 9 de julio de 2008, pág. 22.
624
Véase Organigrama: “Estructura orgánica. Antes de marzo. Año 1995. Grupo de los 20 hombres. ‘Los Escorpiones’”,
Escrito de sustentación, pág. 12
625
Véanse Organigramas: “Estructura orgánica. Después de marzo Año 1995”, Escrito de sustentación, pág. 13; y
“Estructura orgánica. Año 1996”, Escrito de sustentación, pág. 14.
626
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 29 de octubre de 2007, pág. 13 (la negrita es nuestra).
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militante de la Unión Patriótica (UP), hecho 63 y Luis Antonio Espitia González, hecho 69;
los cuales son objeto de condena en esta decisión.

Patrulleros:
Wilmer Aguado Álvarez, alias ‘Carroloco’

604. Generales: Según indagaciones hechas por la Fiscalía General de la Nación, la


identidad de alias ‘Carroloco’ sería Wilmer Aguado Álvarez, identificado con la cédula de
ciudadanía 71.985.608627.

605. Trayectoria: Wilmar Aguado, alias ‘Carroloco’, se vinculó a los paramilitares por
intermedio de Walberto Medrano, alias ‘Walter’, y Jesús Alberto Guisao Arias, alias ‘El
Tigre’, ambos paramilitares provenientes de los Comandos Populares628. Fue uno de los
combatientes urbanos más cercanos a Veloza García629. Según éste, alias ‘Carroloco’ fue
responsable de la comisión de numerosos crímenes, muchos de los cuales fueron
resultado de su propia iniciativa, y de extorsiones no autorizadas. Esta fue la razón para
que el comandante del Frente Turbo ordenara su asesinato630:

“Confesé que fue muerto por orden mía. Lo hizo Uber Coca. Se ordena darle
muerte a ‘Carroloco’ ya que en la guerra se presentan situaciones. En Urabá murió
mucha gente. Y lo que dije (…) habían (sic) días que matábamos a 15 o 20
personas. Se verificó que en un una sola cuadra morían 4 o 5 personas y eso era
en muchos municipios. ‘Carroloco’ se dejó controlar por esto y empezó a asesinar
personas sin orden nuestra y a pedir plata sin orden nuestra. La orden de Carlos
Castaño era no pedir plata y por esto doy la orden con el consentimiento” 631.

627
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs” (fila 13). La consulta realizada en el
portal de la PGN permitió confirmar que el número de la cédula corresponde al nombre citado.
628
Véase Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 26 de marzo de 2008, pág. 13 (minuto: 12.20).
629
Al respecto, Veloza García señaló: “También hablamos mucho acá de ‘Carroloco’ y la vez pasada hablé también de
‘Carroloco’ y siempre hemos hablado mucho porque ya que era uno de los urbanos que se mantenía conmigo”.
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 9 de julio de 2008, pág. 34.
630
La primera versión de Veloza García fue que “Carroloco’ murió en Frontino”. Transcripción de versión libre rendida por
Hébert Veloza García, 29 de octubre de 2007, pág. 31. Según el CTI, “fue muerto el 10 de enero 1996 por la misma
organización”. Informe CTI del 9 de julio de 1996, citado en FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque
Bananero.xlxs” (fila 13). La FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN estableció que “Wilmer Aguado Álvarez fue muerto en la
esquina ubicada en la carrera 14 con calle 99, aproximadamente a las 8 de la mañana, el 10 de enero de 1996”.
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 26 de noviembre de 2007, pág. 7 (minuto: 10.28 y ss.)
631
Véase Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 26 de marzo de 2008, pág. 13 (minuto: 12.20).
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606. La información aportada por el postulado coincide plenamente con la que registró
un grupo especial del CTI en un informe de 1996:

“WILLMAR NN: Alias CARROLOCO, individuo de 1,75 de estatura, contextura


mediana, tez trigueña, cabello ondulado. Corto y ojos cafés. Al parecer fue
asesinado de varios impactos de arma pistola calibre 9 mm, por sus propios
compañeros en el sector de Bomberos, en el casco urbano de Turbo (al parecer la
persona que disparó fue alias WBER [UBER]). De esta persona se dice, que asesinó
un sinnúmero de personas en el área urbana y rural de este municipio.
Posteriormente se supo que su verdadero nombre era WILMER AGUADO ALVAREZ,
hijo de PÍO MANUEL y ARACELLY, nacido en San Pedro de Urabá el 18 de junio de
1.975”632.

607. Crímenes: de los hechos que ahora ocupan la atención de la Sala, Wilmer
Aguado Álvarez, alías “Carroloco”, participó en la desaparición de los señores Ángel David
Quintero Benítez y Alcides Torres Arias, hecho 3; y en los homicidios de Gonzalo Antonio
Ríos Salinas, hecho 5; Martha Echavarría Palencia y Rubén Darío Lora, hecho 6; Jaime
Iván Holguín Oquendo, hecho 7; José Alfredo Ruiz Lever, hecho 9; Javier Enrique
Mercado Julio, hecho 10; Rubén Darío Agudelo Duque y Cerbulo de Jesús Aguirre
Chaverra, hecho 11; Oscar de Jesús Montoya Patiño y José Manuel Martínez Cárdenas,
hecho 13; Julio Hernando Rico Sánchez, hecho 15; Andrés Córdoba Castillo, Carlos Andrés
Córdoba Vélez y Mariela Padrón, hecho 16; Yirlan González Pineda, hecho 17; John Jairo
Celada David, hecho 19; Dorian Rene Montoya Orozco, Lindelia Rojas Ortiz, Beatriz Elena
Delgado Caicedo y Jaime Alberto Giraldo Jiménez, hecho 21; Jesús Antonio Pedroza y
Jorge Eliécer Guerra Vanegas, hecho 23; Luciano Torres Urango, hecho 25; José de Jesús
Gómez Giraldo, hecho 33; Pedro Pablo Bran Garcés, hecho 35; Pedro Luis Bustamante,
hecho 45; Presentado Gómez, hecho 49; Ángel Humberto Zabala Bejarano, hecho 72 y
Osvaldo Vergara Gómez y María Dolores Romero, hecho 76.

Román de Jesús Taborda Meneses, alias ‘Escudero’


(También ‘Caifás’, ‘Muelas’ o ‘Media Sombra’)

632
FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN-Dirección Seccional del CTI-Grupo Especial de Investigaciones, Informe de labores
investigativas tendientes a esclarecer los homicidios de cincuenta y cuatro personas, quienes perdieron la vida en
jurisdicción del municipio de Turbo (Informe 050), Copacabana, multicopiado, 27 de diciembre de 1996, pág. 12.
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608. Generales: Según indagaciones hechas por la Fiscalía General de la Nación, la


identidad de alias ‘Escudero’ sería Román de Jesús Taborda Meneses, identificado con la
cédula de ciudadanía 71.985.608633. Según HÉBERT VELOZA GARCÍA, “murió en el Tres;
[fue] muerto por el ejército”634, versión que coincide con otra recaudada por el CTI en
1996:

“ROMÁN DE JESÚS TABORDA MENESES: alias CAIFAS, alias ESCUDERO, alias


MEDIA SOMBRA, identificado con la cédula de ciudadanía número 71’979.789 de
Turbo, 27 años de edad, 1,80 metros de estatura aproximadamente, tez trigueña,
contextura atlética, hijo de CLAUDIO Y CAROLINA, nacido el 31 de enero de 1.968
en Turbo. Fue muerto el 19 de noviembre de 1.995, en enfrentamiento con el
Pelotón del Batallón Vélez, al mando del capitán JOSÉ ALBERTO MONROY
GARCÍA”635.

609. Crímenes: de acuerdo con los informes presentados por la Fiscal Delegada, alias
“Escudero” participó en los crímenes cometidos contra los señores: Carlos Enrique Cuesta
Cantillo, hecho 22; Celso Lozano Casas y Euclides Cuesta Cuesta, hecho 28; Gustavo
Alberto Sepúlveda Zapata y Beatriz Helena García López, hecho 29; José Daniel Cantero
Martínez e Ismael Antonio Martínez Quintero, hecho 36; José Hernando Ardila Gómez,
hecho 43 y Pedro Luis Bustamante, hecho 45.

Luis Enrique Mestra Yáñez, alias ‘Wilson’ o ‘Calidoso’

610. Generales: según indagaciones hechas por la Fiscalía General de la Nación, la


identidad de alias ‘Wilson’ sería Luis Enrique Mestra Yáñez636. Según HÉBERT VELOZA
GARCÍA, ‘Wilson’ “murió en Frontino”637.

633
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs” (fila 22). La consulta realizada en el
portal de la PGN permitió confirmar que el número de la cédula corresponde al nombre citado.
634
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 29 de octubre de 2007, pág. 31.
635
FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN-Dirección Seccional del CTI-Grupo Especial de Investigaciones, Informe de labores
investigativas tendientes a esclarecer los homicidios de cincuenta y cuatro personas, quienes perdieron la vida en
jurisdicción del municipio de Turbo (Informe 050), Copacabana, multicopiado, 27 de diciembre de 1996, pág. 17.
636
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs” (fila 15). No aparece el número de la
cédula de ciudadanía.
637
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 29 de octubre de 2007, pág. 31.
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611. Crímenes: De las pruebas aportadas por la Fiscalía y de las versiones libres
rendidas por el postulado VELOZA GARCÍA, se logró establecer que alías “Wilson”,
participó en los delitos cometidos en contra de David Quintero Benítez y Alcides Torres
Arias, hecho 3; Gonzalo Antonio Ríos Salinas, hecho 5; Martha Echavarría Palencia y
Rubén Darío Lora, hecho 6; Jaime Iván Holguín Oquendo, hecho 7; Wilson Alberto
Acevedo Pulgarín y Francisco Javier Echavarría Pérez, hecho 8; José Alfredo Ruiz Lever,
hecho 9; Javier Enrique Mercado Julio, hecho 10; Rubén Darío Agudelo Duque y Cervulo
de Jesús Aguirre Chaverra, hecho 11; Oscar de Jesús Montoya Patiño y José Manuel
Martínez Cárdenas, hecho 13; Julio Hernando Rico Sánchez, hecho 15; Andrés Córdoba
Castillo, Carlos Andrés Córdoba Vélez y Mariela Padrón, hecho 16; Yirlan González Pineda,
hecho 17; John Jairo Celada David, hecho 19; León Antonio Correa, hecho 20; Dorian
Rene Montoya Orozco, Lindelia Rojas Ortiz, Beatriz Elena Delgado Caicedo y Jaime Alberto
Giraldo Jiménez, hecho 21; Carlos Enrique Cuesta Cantillo, hecho 22; Jesús Antonio
Pedroza y Jorge Eliécer Guerra Vanegas, hecho 23; Luciano Torres Urango, hecho 25;
José de Jesús Gómez Giraldo, hecho 33; Pedro Pablo Bran Garcés, hecho 35; Masacre “El
Golazo”, hecho 37; José Francisco Vadiris Hurtado, hecho 44; Pedro Luis Bustamante,
hecho 45; Presentado Gómez, hecho 49; Leonel de Jesús Romero Montes, hecho 50; Jairo
Alberto López Manco, hecho 67; Ángel Humberto Zabala Bejarano, hecho 72 y Osvaldo
Vergara Gómez y María Dolores Romero, hecho 76.

Ángel María Jiménez Plaza, alias ‘San Pedro’

612. Generales: Según indagaciones hechas por la Fiscalía General de la Nación, la


identidad de alias ‘San Pedro’ sería Ángel María Jiménez Plaza638. Según HÉBERT VELOZA
GARCÍA, alias ‘San Pedro’ “murió en Frontino”639 y fue combatiente del EPL640.

613. Crímenes: los hechos en los que alías “San Pedro” participó fueron los siguientes:
homicidios de los señores: Vicente Zambrano, hecho 18; Samuel Antonio Jiménez Madera,
638
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs” (fila 15). No aparece el número de la
cédula de ciudadanía.
639
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 29 de octubre de 2007, pág. 31.
640
Transcripción de versión libre rendida por Hébert Veloza García, 29 de octubre de 2007, pág. 47. Véase también:
FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs” (CAPS, fila 60).
245
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hecho 27; Edilberto Cuadrado Llorente, hecho 58; Melquisedec Rentería Machado, Camilo
Solano Baltazar y Walter de Jesús Borja David, hecho 59; Humberto Pacheco Castillo,
hecho 62; Vidal Devia Ramírez, hecho 64; Luís Álvaro David Oliveros, hecho 65; Elkin de
Jesús Escobar López y Gustavo Alberto Gutiérrez López, hecho 66; Elmer Antonio Urquijo
Beltrán, hecho 68; Arcesio Gallego Lozano y Misael Antonio Moreno Córdoba, hecho 70;
Dairo Pérez Negrete, hecho 73; Iber Modesto Moreno y Elías García Díaz, hecho 74 y
Severo Mosquea Angulo, hecho 77.

José Luis Negrete Hernández, alias ‘El Caimán’

614. Generales: según indagaciones hechas por la Fiscalía General de la Nación, la


identidad de alias ‘El Caimán’ sería José Luis Negrete Hernández, identificado con la
cédula de ciudadanía 78.715.224641. En 1996, el Grupo Especial de Investigaciones del
CTI se refirió a él como uno de los paramilitares de Turbo:

“JOSÉ LUIS NEGRETE HERNÁNDEZ: Alias EL CAIMÁN. Identificada (sic) con la


cédula de ciudadanía número 78’715.224 de Montería-Córdoba, nacido el 30 de
marzo de 1.974 en Montería-Córdoba, alfabeto de 1,68 metros de estatura, hijo de
SERVULO MANUEL Y GERGINA, raza mestiza, trigueño, contextura mediana, cara
asimétrica, frente mediana, cabello crespo color negro, ojos medianos oblicuos
color café claro, nariz ancha, parche quirúrgico en el pectoral izquierdo. Fue
detenido en el Allanamiento al el (sic) Hotel La Montaña de Turbo en 1.995. Según
comentarios generalizados en el municipio de Turbo, este fue uno de los
participantes en el homicidio del escolta del alcalde”642.

615. Crímenes: según la documentación aportada por la Fiscal Delgada, alías


“Caimán”, es responsable de la comisión de los hechos en los que perdieron la vida, los
señores: Julio Hernando Rico Sánchez, hecho 15; Andrés Córdoba Castillo, Carlos Andrés
Córdoba Vélez y Mariela Padrón, hecho 16 y Luciano Torres Urango, hecho 25.

641
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs”. L Para la fuente del nombre y del
número de documento de identidad, véase Informe de inteligencia CTI 09-07-1996. Tarjeta decadactilar (fila 23).La
consulta realizada en el portal de la PGN permitió confirmar que el número de la cédula corresponde al nombre citado.
642
FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN-Dirección Seccional del CTI-Grupo Especial de Investigaciones, Informe de labores
investigativas tendientes a esclarecer los homicidios de cincuenta y cuatro personas, quienes perdieron la vida en
jurisdicción del municipio de Turbo (Informe 050), Copacabana, multicopiado, 27 de diciembre de 1996, pág. 16.
246
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Forferinzo Flórez Arizal, alias ‘Montador’


(También alias ‘El Flaco’, ‘Fredy’ o ‘Andrés’)

616. Generales: Según indagaciones hechas por la Fiscalía General de la Nación, la


identidad de alias ‘Montador’ sería Forferinzo Flórez Arizal, identificado con la cédula de
ciudadanía 78.716.098643. En 1996, el Grupo Especial de Investigaciones del CTI se refirió
a ‘Montador’ como uno de los paramilitares de Turbo:

“Forferinzo Flórez Arizal: Alias EL FLACO, alias MONTADOR, alias FREDY, alias
ANDRÉS. Identificado con la cédula de ciudadanía número 78’716.098 de Montería-
Córdoba, 23 años de edad, hijo de DIEGO Y NABORA, nacido el 16 de junio de
1.973, de raza blanca, contextura atlética, cara alargada, frente mediana, cabello
castaño, semi ondulado, abundante cejas separadas, ojos medianos, forma
alargada, labios medianos, comisura horizontal, mentón agudo, bigote semi
poblado, dentadura completa, de 1,83 metros de estatura aproximadamente,
presenta cicatriz en el dedo índice de la mano derecha, punta de la falangeta, al
igual que el anterior [José Ruperto García] fue detenido por el caso de la muerte
del escolta y además había sido detenido en un allanamiento que realizara el
UNASE de Apartadó al Hotel Las Montaña, en 1.995. Su descripción coincide en
gran forma, con la suministrada por una señora a la cual le asesinaron su hija de
cuatro años de edad en el Corregimiento de Currulao, Turbo, después de este
ilícito la señora no acudió a reiterativos llamados que le hiciera el CTI de Turbo,
para un posible reconocimiento”644.

617. Crímenes: de acuerdo con la información aportada por VELOZA GARCÍA durante
las diligencias de versión libre, la Fiscalía pudo establecer la participación de alias
“montador” en los siguientes hechos: homicidios de Oscar de Jesús Montoya Patiño y José
Manuel Martínez Cárdenas, hecho 13; John Jairo Celada David, hecho 19; León Antonio
Correa, hecho 20; Filadelfo Bertel Pérez, hecho 26; José de Jesús Gómez Giraldo, hecho
33; Pedro Pablo Bran Garcés, hecho 35; José Francisco Vadiris Hurtado, hecho 44; Pedro
Luis Bustamante, hecho 45; Presentado Gómez, hecho 49 y Leonel de Jesús Romero
Montes, hecho 50.

643
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs”. Para la fuente del nombre y del
número de documento de identidad, véase Informe de inteligencia CTI 09-07-1996. Tarjeta decadactilar (fila 23).La
consulta realizada en el portal de la PGN permitió confirmar que el número de la cédula corresponde al nombre citado.
644
FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN-Dirección Seccional del CTI-Grupo Especial de Investigaciones, Informe de labores
investigativas tendientes a esclarecer los homicidios de cincuenta y cuatro personas, quienes perdieron la vida en
jurisdicción del municipio de Turbo (Informe 050), Copacabana, multicopiado, 27 de diciembre de 1996, pág. 14.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

José Uber Coca Ceballos, alias ‘Uber’ o ‘Wber’

618. Generales: Según indagaciones hechas por la Fiscal Delegada, la identidad de


alias ‘Uber Coca’ sería José Uber Coca Ceballos, identificado con la cédula de ciudadanía
7.843.657645. De acuerdo con pesquisas propias, ese número de cédula corresponde al
documento de identidad de José Uber Coca Ceballos646. En 1996, el Grupo Especial de
Investigaciones del CTI se refirió a Uber Coca como uno de los paramilitares de Turbo:

“NN. Alias WBER. Sujeto de tez trigueña, contextura atlética, 1,80 metro de
estatura, de 30 años de edad aproximadamente, al aparecer natural de Acacías-
Meta, piel trigueña, cabello lacio, corto, ojos café oscuro, se movilizaba en un
vehículo Toyota color verde, de placas GBS390. (…)”647.

619. La consulta sobre antecedentes disciplinarios arroja que el 29 de octubre de 1996


el Juzgado Penal del Circuito de Acacías condenó a Uber Coca a 40 años de prisión por el
delito principal de homicidio agravado648. Según HÉBERT VELOZA GARCÍA, Uber Coca
“está desaparecido”649. En 1997, en los Llanos Orientales fue conocido como alias ‘Camilo’
y fungía como “comandante de los urbanos de Villavicencio, Acacías y Guamal del Bloque
Centauros”650.

620. Crímenes: los hechos por los que en la presente decisión se condena al postulado
VELOZA GARCÍA y en los que alías “Uber y/o Wber” participó son las desapariciones de
Ángel David Quintero Benítez y Alcides Torres Arias, hecho 3; los homicidios de los
señores: Ivo de Jesús Hernández Muñoz, hecho 4; Martha Echavarría Palencia y Rubén
Darío Lora, hecho 6; Jaime Iván Holguín Oquendo, hecho 7; de Wilson Alberto Acevedo
Pulgarín y Francisco Javier Echavarría Pérez, hecho 8; Rubén Darío Agudelo Duque y
Cerbulo de Jesús Aguirre Chaverra, hecho 11; Herley Alexander Márquez Ortega y Marcial

645
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs” (fila 14). La consulta realizada en el
portal de la PGN permitió confirmar que el número de la cédula corresponde al nombre citado.
646
La consulta realizada en el portal de la PGN permitió confirmar que el número de la cédula corresponde al mismo
nombre pero con los siguientes apellidos: Coca Ceballos.
647
FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN-Dirección Seccional del CTI-Grupo Especial de Investigaciones, Informe de labores
investigativas tendientes a esclarecer los homicidios de cincuenta y cuatro personas, quienes perdieron la vida en
jurisdicción del municipio de Turbo (Informe 050), Copacabana, multicopiado, 27 de diciembre de 1996, pág. 13.
648
Véase archivo almacenado con el resultado de la consulta (17 de marzo de 2013).
649
VL, HVG, 20071029, pág. 30.
650
Tribunal Superior de Bogotá-Sala de Justicia y Paz, Sentencia contra José Barney Veloza García, Proceso 2006 80585,
Bogotá, 31 de enero de 2012, pág. 4.
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HÉBERT VELOZA GARCÍA

de Jesús Bertel Ríos, hecho 12; Julio Hernando Rico Sánchez, hecho 15; Andrés Córdoba
Castillo, Carlos Andrés Córdoba Vélez y Mariela Padrón, hecho 16; Yirlan González
Pineda, hecho 17; John Jairo Celada David, hecho 19; Rene Montoya Orozco, Lindelia
Rojas Ortiz, Beatriz Elena Delgado Caicedo y Jaime Alberto Giraldo Jiménez, hecho 21;
Luciano Torres Urango, hecho 25; Gustavo Alberto Sepúlveda Zapata y Beatriz Helena
García López, hecho 29; José de Jesús Gómez Giraldo, hecho 33; Pedro Pablo Bran
Garcés, hecho 35; José Hernando Ardila Gómez, hecho 43; José Francisco Vadiris
Hurtado, hecho 44; Pedro Luis Bustamante, hecho 45; Presentado Gómez, hecho 49;
Leonel de Jesús Romero Montes, hecho 50; Jairo Alberto López Manco, hecho 67; Ángel
Humberto Zabala Bejarano, hecho 72 y Osvaldo Vergara Gómez y María Dolores Romero,
hecho 76.

Ramiro Antonio Caro Durango, alias ‘Burro Cuadrado’


(También ‘Ramiro Caro Duarte’)

621. Generales: Según indagaciones hechas por la Fiscalía General de la Nación, la


identidad de alias ‘Burro Cuadrado’ sería Ramiro Antonio Caro Durango, identificado con la
cédula de ciudadanía 71.974.640651. De acuerdo con pesquisas propias, ese número de
cédula corresponde al documento de identidad de Ramiro Antonio Caro Durango652. De
otra parte, la Fiscalía estableció que esta persona fue asesinada por sus propios
compañeros653:

“RAMIRO ANTONIO CARO DURANGO: Alias RAMIRO CARO DUARTE o BURRO


CUADRADO, identificado con la cédula de ciudadanía número 71’974.640 de Turbo,
sujeto de tez trigueña ojos castaño oscuro, cabello negro, 1,68 metros de estatura,
31 años de edad. Fue detenido en el allanamiento realizado por el UNASE de
Apartadó en el Hotel La Montaña de Turbo. En noviembre de 1.995 desertó del
grupo, lo cual motivó la persecución por parte de sus excompañeros, quienes al
parecer lo asesinaron y enterraron su cuerpo en una fosa común en un lugar no
determinado. Otra versión es que al parecer fue ultimado por los mismos

651
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs”. Para la fuente del nombre y del
número de documento de identidad, véase Fiscalía 90-Instrucción 6181, Tarjeta de radicación. Radicado 18860 (fila 24). La
consulta realizada en el portal de la PGN permitió confirmar que el número de la cédula corresponde al nombre citado.
652
La consulta realizada en el portal de la PGN permitió confirmar que el número de la cédula corresponde al mismo
nombre pero con los siguientes apellidos: Caro Durango.
653
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs”. Para la versión de la muerte, véase
Informe CTI del 9 de julio de 1996 (fila 24).
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paramilitares en el Barrio Julia Orozco de Turbo, porque se encontraba


extorsionando a varios comerciantes. Pese a esto, se encuentra como
desaparecido ya que su cadáver no ha sido hallado”654.

Gregorio Antonio Oviedo, alias ‘Tribilín’

622. Generales: Según indagaciones hechas por la Fiscalía General de la Nación, la


identidad de alias ‘Tribilín’ sería Gregorio Antonio Oviedo, identificado con la cédula de
ciudadanía 78.704.919655.

Hernán Alberto Bertel Hernández, alias ‘El Llanero’

623. Generales: Según indagaciones hechas por la Fiscalía General de la Nación, la


identidad de alias ‘El Llanero’ sería Hernán Alberto Bertel Hernández656. En 1996, el Grupo
Especial de Investigaciones del CTI se refirió a él como uno de los paramilitares de Turbo:

“HERNÁN ALBERTO BERTEL HERNÁNDEZ: Alias ‘El Llanero’, tiene como compañera
a la señora NORA ELENA ORREGO, con quien tiene un hijo de dos años llamado
HERNÁN DAVID, se le conoce entre sus primeras actividades la de servir de guía al
ejército”657.

654
FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN-Dirección Seccional del CTI-Grupo Especial de Investigaciones, Informe de labores
investigativas tendientes a esclarecer los homicidios de cincuenta y cuatro personas, quienes perdieron la vida en
jurisdicción del municipio de Turbo (Informe 050), Copacabana, multicopiado, 27 de diciembre de 1996, págs. 12 y 13.
655
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs” (fila 26). La consulta realizada en el
portal de la PGN permitió confirmar que el número de la cédula corresponde al nombre citado.
656
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs” (fila 127). No aparece el número de la
cédula de ciudadanía.
657
FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN-Dirección Seccional del CTI-Grupo Especial de Investigaciones, Informe de labores
investigativas tendientes a esclarecer los homicidios de cincuenta y cuatro personas, quienes perdieron la vida en
jurisdicción del municipio de Turbo (Informe 050), Copacabana, multicopiado, 27 de diciembre de 1996, pág. 16.
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Manuel María Correa Gómez, alias ‘Negro Fino’

624. Generales: Según indagaciones hechas por la Fiscalía General de la Nación, la


identidad de alias ‘Negro Fino’ sería Manuel María Correa Gómez658. Según HÉBERT
VELOZA GARCÍA, ‘Negro Fino’ “fue muerto en Mutatá”659.

Patrulleros: desde el principio del Frente Turbo hasta la desmovilización de las


AUC (1995-2006)

José Ruperto García Quiroga, alias ‘El Gato’

625. Generales: José Ruperto García Quiroga, alias ‘El Gato’, está identificado con la
cédula de ciudadanía 17.260.398 y se sometió a la aplicación de la ley 975 de 2005.
Durante el período comprendido entre el 16 de abril de 2008 y el 20 de enero de 2012, la
Fiscalía General de la Nación lo convocó a 92 diligencias de versión libre (26 individuales y
66 conjuntas), de las cuales se efectuaron 76.

“JOSÉ RUPERTO GARCÍA QUIROGA: Alias EL GATO: Segundo al mando hasta


principios del presente año [1996], se identifica con la cédula de ciudadanía
17.260.398 de Cubarral-Meta, 25 años de edad aproximadamente, 1,70 metros de
estatura, hijo de ALFONSO Y ROSARIO, nacido el 30 de agosto de 1.971 en Utica-
Cundinamarca. Se vio involucrado en la muerte de un escolta del alcalde de Turbo,
ya que fue detenido en posesión de la motocicleta que transportaba al funcionario,
al igual se le encontró un arma de fuego, fue puesto a órdenes de la Fiscalía y
puesto en libertad, lo último que se supo de él es que actualmente se encuentra
de tenido en una ciudad de la Costa Atlántica, aunque no se precisó cual”660.

626. Trayectoria: Según lo informó la Fiscalía, José Ruperto García Quiroga, alias ‘El
Gato’: fue uno de los participantes en el entrenamiento de 1994, en las fincas “La 35” y

658
Véase FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN, archivo: “Alias Bloque Bananero.xlxs” (fila 19). No aparece el número de la
cédula de ciudadanía.
659
VL, HVG, 20071029, pág. 30.
660
FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN-Dirección Seccional del CTI-Grupo Especial de Investigaciones, Informe de labores
investigativas tendientes a esclarecer los homicidios de cincuenta y cuatro personas, quienes perdieron la vida en
jurisdicción del municipio de Turbo (Informe 050), Copacabana, multicopiado, 27 de diciembre de 1996, pág. 13.
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“Jaraguay”661; hasta marzo de 1995, fue patrullero del grupo “Los Escorpiones”662; entre
marzo de 1995 y comienzos de 1996, fue uno de los 13 patrulleros de la zona rural 663;
durante 1996, fue patrullero664; y durante el período comprendido entre 1997 y 2000, fue
uno de los “urbanos de Turbo”665.

627. Respecto a la participación de alias ‘El Gato’ en el grupo “Los Escorpiones” y,


luego, en los urbanos de Turbo, HÉBERT VELOZA GARCÍA señaló:

“En ese primer grupo de los 20 hombres, se prepararon (sic) y salimos, estaba
‘Gabriel’, (…) estaba ‘El Gato’ (…)”666.

“Estuvo un muchacho ‘Antonio’, que fue encargado de la parte del grupo Turbo,
fue segundo mío; ‘Grandulón’ también hubo un tiempo que estuvo de segundo en
la zona. Y llegó ‘Mega’ que duró largo tiempo como segundo; también estuvo
‘Jhonsito’, estuvo ‘Chenier’, estuvo ‘El Gato’, estuvo ‘Ecuador’. Hubo una
muchacha que le decían ‘Nikita’; estuvo un muchacho que le decían ‘El Mudo’, era
mudo, ‘Casablanca’ y algunos otros que se me pasan” 667.

628. Crímenes: la Fiscal Delegada pudo documentar que alías “El Gato”, participó en
los siguientes hechos: Desapariciones de Ángel David Quintero Benítez y Alcides Torres
Arias, hecho 3; homicidios de Martha Echavarría Palencia y Rubén Darío Lora, hecho 6;
Oscar de Jesús Montoya Patiño y José Manuel Martínez Cárdenas, hecho 13; Yirlan
González Pineda, hecho 17; John Jairo Celada David, hecho 19; León Antonio Correa,
hecho 20; Dorian Rene Montoya Orozco, Lindelia Rojas Ortiz, Beatriz Elena Delgado
Caicedo y Jaime Alberto Giraldo Jiménez, hecho 21; Carlos Enrique Cuesta Cantillo, hecho
22; Luciano Torres Urango, hecho 25; Filadelfo Bertel Pérez, hecho 26; José de Jesús
Gómez Giraldo, hecho 33; Pedro Pablo Bran Garcés, hecho 35; Pedro Luis Bustamante,
hecho 45; Presentado Gómez, hecho 49 y Ángel Humberto Zabala Bejarano, hecho 72.

Lorenzo Córdoba Álvarez, alias ‘El Barbas’

661
Véanse Escrito de sustentación, pág. 8; y Escrito de acusación, pág. 11.
662
Véase Organigrama: “Estructura orgánica. Antes de marzo. Año 1995. Grupo de los 20 hombres. ‘Los Escorpiones’”,
Escrito de sustentación, pág. 12.
663
Véase Organigrama: “Estructura orgánica. Después de marzo Año 1995”, Escrito de sustentación, pág. 13.
664
Véase Organigrama: “Estructura orgánica. Año 1996”, Escrito de sustentación, pág. 14.
665
Véase Organigramas: “Estructura orgánica. Año 1997-1998” y “Estructura orgánica. Año 1999-2000”, Escrito de
sustentación, págs. 15 y 16.
666
VL, HVG, 20071029, pág. 13 (citado en Vortex, fila 12) (la negrita es nuestra).
667
VL, HVG, 20071029, pág. 43 (citado en Vortex, fila 67).
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629. Generales: Durante el período comprendido entre el 14 de noviembre de 2007 y


el 3 de mayo de 2011, la Fiscalía General de la Nación convocó a Lorenzo Córdoba
Álvarez, alias ‘El Barbas’, a 17 diligencias de versión libre individuales.

630. Crímenes: De los hechos por los cuales se dicta sentencia en la presente
decisión, alías “barbas”, participó en el homicidio de los señores José Daniel Cantero
Martínez e Ismael Antonio Martínez Quintero, hecho 36.

Jesús Albeiro Guisao Arias, alias ‘El Tigre’ (‘El Tigre de Urabá’, ‘Brayán’,
‘Richard’, ‘Jhonatan’, ‘James’ o ‘’El amiguito’)

631. Generales: Jesús Albeiro Guisao Arias, alias ‘El Tigre’, está identificado con la
cédula de ciudadanía 70.432.699 y se sometió a la aplicación de la ley 975 de 2005, luego
de desmovilizarse como integrante del Bloque Norte de las AUC. Según HÉBERT VELOZA
GARCÍA, ‘El Tigre’ fue combatiente del EPL668. En 1996, el Grupo Especial de
Investigaciones del CTI se refirió a él como uno de los paramilitares de Turbo:

“ALBEIRO GUISAO: Alias EL TIGRE, Quien opera en el sector de La Suerte en el


Corregimiento de Nueva Colonia, en el área rural de Turbo. Es el presunto enlace o
representante de FIDEL CASTAÑO en ese municipio. Se le sindica de haber
participado activamente en la masacre del 2 de abril del año en curso [1996], de
10 personas que se encontraban congregadas en Billares El Golazo, en el sector
denominado Bernardo Jaramillo, donde confluyen los barrios Policarpa, Alfonso
López y Concejo de Apartadó-Antioquia”669.

632. Crímenes: de acuerdo con los informes de policía judicial aportados por la Fiscal
Delegada, alías “El tigre”, participó en el homicidios de los señores: Alfredo Hernando
Gómez Rico, hecho 14; Samuel Antonio Jiménez Madera, hecho 27; Arley de Jesús Caro
Zapata, hecho 30; Masacre “El Golazo”, hecho 37; Carmen Rosiris Alemán Pacheco, hecho
38; John Jairo Zapata Enamorado, hecho 46; Evangelista Antonio Pájaro Ruiz, hecho 48;
de Alejandro Valoyes Mena, hecho 56; Jaime Hernán Moreno Cossio, hecho 53; Edilberto

668
VL, HVG, 20071029, pág. 47.
669
FISCALÍA GENERAL DE LA NACIÓN-Dirección Seccional del CTI-Grupo Especial de Investigaciones, Informe de labores
investigativas tendientes a esclarecer los homicidios de cincuenta y cuatro personas, quienes perdieron la vida en
jurisdicción del municipio de Turbo (Informe 050), Copacabana, multicopiado, 27 de diciembre de 1996, pág. 16.
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Cuadrado Llorente, hecho 58; Melquisedec Rentería Machado, Camilo Solano Baltazar y
Walter de Jesús Borja David, hecho 59; Arturo Moreno López, hecho 60; Julio César
Serna, hecho 61; Humberto Pacheco Castillo, hecho 62; Vidal Devia Ramírez, hecho 64;
Luís Álvaro David Oliveros, hecho 65; Elkin de Jesús Escobar López y Gustavo Alberto
Gutiérrez López, hecho 66; Elmer Antonio Urquijo Beltrán, hecho 68; Arcesio Gallego
Lozano y Misael Antonio Moreno Córdoba, hecho 70; Rogelio Mosquera Palacios, hecho
71; Dairo Pérez Negrete, hecho 73; Iber Modesto Moreno y Elías García Díaz, hecho 74;
Rosmira Guisao Castro y Gustavo Antonio Vargas Usuga, hecho 75 y Severo Mosquea
Angulo, hecho 77.

José Barney Veloza García, alias ‘El Flaco’ o ‘Barney’

633. Desmovilizado de las Autodefensas Unidas de Colombia, en su condición de


patrullero de los Bloques Bananero, Calima y Centauros, condenado por la Sala de Justicia
y Paz del Tribunal Superior de Bogotá el 31 de enero de 2012670.

ESTRUCTURAS:

634. A continuación se detallan las principales estructuras que hicieron parte de lo que
posteriormente se llamaría Bloque Bananero, según su evolución año a año.

670
Véase Tribunal Superior de Bogotá-Sala de Justicia y Paz, Sentencia contra José Barney Veloza García, Proceso 2006
80585, Bogotá, 31 de enero de 2012, 166 páginas. M.P. Dra Uldi Teresa Jiménez López.
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Año 1995: primera estructura urbana (inicios 1995)

Carlos Castaño Gil y


Vicente Castaño Gil
Comandantes
ACCU

Carlos Mauricio García


("Doblecero")
Comandante militar
ACCU

Hebert Veloza
García ("HH")
Comandante militar ACCU en
Urabá

Grupo de los
Siete Miembros: alias Wilson, El
Tigre, San Pedro, Huber,
Escudero, Carroloco

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Año 1995: enero-marzo (grupo general urbanos y rurales)

Carlos Castaño Gil y


Vicente Castaño Gil
Comandantes
ACCU

Carlos Mauricio
García
("Doblecero")
Instructor militar
ACCU

Iván Alvarez ("Gabriel")

Comandante
general del grupo

Estopin
Segundo al mando e
instructor junto con
Doblecero

Grupo de los
Hebert Veloza "Mono Veloza" o HH, Jesús Albeiro Guisao "El Tigre"; Escorpiones
Wilmer Aguado Alvarez "Carroloco"; Huber Coca; alias "Chéchere";
Enrique Maestra "Wilson"; Alias "Olafo"; Alias "Barney"; Alias 20 escorpiones
"Tribilin"; Alias "San Pedro"; Alias "Montador"; Benito Antonio originales
Martinez ("Caimán"); alias "El Bola"; alias "Gata Ciega"; alias
"Escudero"; alias "Negro Fino"; alias "Pacheco"; Lorenzo Córdoba alias
"Barbas"

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Año 1995: posterior a la reorganización de marzo (grupo urbanos y rurales)

Carlos Castaño Gil y Vicente Castaño


Gil

Comandantes ACCU

Carlos Mauricio García


("Doblecero")

Instructor militar ACCU

Hebert Veloza "Mono Veloza",


"Carepollo", o HH

Comandante general del


grupo Escorpiones

Grupo urbano
Grupo rural
GRUPO DE LOS 7
(comandado por GRUPO DE LOS 13
"Estopin")

José Ruperto Quiroga "El gato") , "Marconis Mardonio


Martinez", Alias "Olafo"; Alias "Barney"; Alias "Tribilin";
Jesús Albeiro Guisao "El Tigre"; Wilmer Aguado Alias "Montador"; Benito Antonio Martinez ("Caimán");
alias "El Bola"; alias "Gata Ciega"; alias "Negro Fino"; alias
Alvarez "Carroloco"; Huber Coca alias "Huber"; "Pacheco"; Lorenzo Córdoba alias "Barbas"
Enrique Maestra "Wilson"; Alias "San Pedro",
alias "Escudero

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Análisis de las formas de operar y su victimización

635. La Sala se viene pronunciando en torno a la comprensión del fenómeno paramilitar


en el país. Ya en previa sentencia, esta Sala incluyó elementos analíticos para comprender
cómo los grupos armados, en cabeza de sus dirigentes, toman decisiones racionales y
cálculos estratégicos, alimentados en muchas ocasiones por intereses concretos que
pueden estar relacionados con la obtención de recursos económicos para financiar la
guerra o su propio beneficio, además de controlar zonas estratégicas, corredores
geográficos, puntos de entrada y salida de armas, contrabando y otras economías
ilegales, todo en función de un cálculo racional propio de una confrontación671.

636. Es decir, la violencia ejercida por los grupos armados ilegales, como estructuras de
poder, no suele tener un carácter irracional y desorganizado, todo lo contrario, en la
mayoría de ocasiones tienen fines e intereses que además superan los meramente
expuestos por sus dirigentes como causas originales del recurso a la violencia y lo que
desencadenó el conflicto original672.

637. En esta sentencia, la Sala busca ahondar en reflexiones para entender las distintas
formas delictivas y las estrategias de victimización a cierto tipo de poblaciones.

La afectación a civiles y personas protegidas por el Derecho Internacional


Humanitario

638. Según lo ha podido destacar Kalyvas, experto en conflictos de la Universidad de


Yale, entre más control tiene un grupo sobre una zona en particular, tiende a disminuir la
violencia sobre la población. Igualmente, cuando hay disputa y no existe un monopolio
claro de un grupo sobre la población y los recursos en una zona en particular, la violencia
tiende a aumentar y a ser indiscriminada, esto porque los grupos tratan de generar terror
en la población, buscando desincentivar la vinculación de colaboradores e informantes
hacia el grupo enemigo, y generando la percepción de que quien coopere con ellos será
declarado enemigo del grupo que quiere ingresar a la zona673.

671
Véase: “Los intereses estratégicos de los grupos en confrontación”, Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá,
Sentencia en contra de Orlando Villa Zapata, rad. 2008 83280, M.P. Dr. Eduardo Castellanos Roso, Bogotá, 16 de abril de
2012, párr 226 en adelante.
672
Ibid.
673
KALYVAS, Stathys. The Logic of Violence in Civil War, Cambridge University Press, 2006
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639. Así pues, la violencia es un recurso de los grupos en contienda y son los civiles los
que suelen sufrir directamente esta violencia. Como lo ha destacado la Sala en previa
decisión:

“el carácter racional y el cálculo económico que tienen los grupos armados ilegales, sirve como
un elemento para explicar por qué la población civil suele ser la más afectada por la disputa de
los distintos grupos en contienda, según han concluido múltiples investigadores[674].

Por otra parte, autores como Eric Lair[675] y Daniel Pécaut[676], han analizado el empleo del
terror por parte de los grupos armados desde el razonamiento estratégico, demostrando en
sus diversos estudios que las prácticas del terror por parte de los grupos armados tienen
intereses territoriales estratégicos. Igualmente, Pécaut sostiene que el terror organizado,
además de insertarse en una problemática territorial tiene finalidades políticas de control sobre
la población y del gobierno del lugar, es decir, el terror es altamente racional y altamente
político677.

640. Ahora bien, la violencia no se ejerce siempre de la misma forma y los grupos
tienen distintos momentos en los que escogen que la violencia pueda ser más selectiva o
más indiscriminada. En los orígenes, las acciones de lo que luego se llamaría Bloque
Bananero, son altamente representativos este tipo de acciones violentas sobre personas
protegidas por el DIH. A continuación se resaltan algunos hechos para poder realizar un
análisis pormenorizado del tipo de violencia ejercida.

La violencia por señalamiento y estigmatización

641. En primer lugar se puede agrupar cierto tipo de hechos, ejercicios contra uno o
dos individuos en cada hecho y con una modalidad de operación altamente selectiva de la
víctima. Así, los hechos 7, 8, 10, 17, 18 y 19, entre otros de los aquí legalizados, tienen
varios elementos en común que se quieren resaltar para ver el patrón de acción que tenía
el grupo. Veamos una forma operar de un grupo paramilitar que es recurrente, en la
descripción de la situación fáctica que a continuación se presenta:

[674]
Véase entre otros: KALDOR, Mary. Viejas y nuevas guerras: Asimetría y privatización de la violencia, 2005, Madrid, Siglo
XXI Editores y KALULAMBI, Martín (ed.), Perspectivas comparadas de mercados de violencia, Bogotá, Universidad Nacional-
Alfaomega, 2003 y KALULAMBI, M. “Guerras africanas, lógicas depredadoras y el negocio de los Kalachnikov”, 2003.
[675]
LAIR, Eric. “El terror, recurso estratégico de los actores armados: reflexiones en torno al conflicto colombiano”. En:
Revista Análisis Político. No. 37. 1999.
[676]
PÉCAUT, Daniel. Guerra contra la sociedad. Bogotá, Espasa Hoy, 2001.
677
Véase: “Los intereses estratégicos de los grupos en confrontación”, Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá,
Sentencia en contra de Orlando Villa Zapata, rad. 2008 83280, M.P. Dr. Eduardo Castellanos Roso, Bogotá, 16 de abril de
2012, párr. 226 en adelante.
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Hecho 7:

“En la vereda la Esperanza, del corregimiento “El tres”, municipio de Turbo, varios
hombres armados, ingresaron a la finca “El Prado”, el día 24 de marzo de 1995, allí
buscaron al señor Jaime Iván Holguín Oquendo, a quien señalaban de colaborar con el
EPL, y le dispararon hasta causarle la muerte.

De acuerdo con lo expuesto en diligencia de versión libre del 26 de noviembre de 2007 y 9


de julio de 2008, el hecho fue cometido por HÉBERT VELOZA GARCÍA, en compañía de
Enrique Mestra Yañez alias “Wilson”, Wilmer Aguado Álvarez alias ‘Carroloco’ y José Huber
Coca Ceballos alias “Huber Coca”.

Hecho 8:

“Los señores Wilson Alberto Acevedo Pulgarín, empleado de la Alcaldía de Turbo, y


Francisco Javier Echavarría Pérez, quien laboraba en la zona destinada por la Alcaldía para
el sacrificio de animales, se encontraban el 25 de marzo de 1995, en horas de la noche,
departiendo unas cervezas en el establecimiento público “Heladería Candilejas”, ubicado en
el sitio conocido como las Palmeras, cerca a la entrada para el Instituto de Turbo
(Antioquia), cuando fueron sorprendidos por sujetos desconocidos que les dispararon hasta
causarles la muerte.

En versión libre del 30 de octubre de 2007 y 10 de junio de 2008, HÉBERT VELOZA


GARCÍA, confesó este hecho e informó que dio la orden de asesinar a Wilson Alberto
Acevedo Pulgarín, quien era señalado de auxiliador de la guerrilla.
La muerte de estas personas fue ocasionada por Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson” y
José Huber Coca Ceballos alias “Huber Coca”.

Hecho 10:

“En horas de la noche del día 29 de abril de 1995, en el barrio Buenos Aires, del Municipio
de Turbo, al interior del Centro Comercial “Estrella del Mar”, estaba Javier Enrique Mercado
Julio, cuando fue interceptado por varios hombres armados que le dispararon hasta
causarle la muerte.

Este hecho fue confesado por el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, en diligencia de
versión libre del 29 de octubre de 2007 y 27 de marzo de 2008, en la que manifestó que
él le ordenó a Wilmer Aguado Álvarez alias “Carro loco” y a Elkin Antonio Duque Zapata
alias “El Enano”, asesinaran al señor Mercado Julio, por cuanto era señalado de ser
integrante de la guerrilla, circunstancia que de acuerdo con lo expuesto por la Señora
Fiscal Delegada no es posible afirmar, pues no se tiene prueba de ello.”

Hecho 17:

“El 9 de junio de 1995, el señor Yrlan Pineda, se encontraba laborando en un inmueble


ubicado en el sector conocido como Wafe, zona urbana del municipio de Turbo, cuando
llegaron varios sujetos armados, ingresaron violentamente al predio que se encontraba en
construcción y lo asesinaron.

De acuerdo a lo confesado por los postulados HÉBERT VELOZA GARCÍA y José Ruperto
García, alias “el gato”, en versión libre rendida en el proceso de justicia y paz, junto a ellos
participaron en el hecho Enrique Mestra Yanes alias “Wilson”, Wilmer Aguado alias “carro

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loco” y Forferinzo Flórez Arizal alias “Montador”. El móvil de su asesinato fue el


señalamiento de alias “Wilson”, de ser integrante de las FARC”.

Hecho 18:

El 12 de junio de 1995, en el municipio de Turbo, corregimiento Riogrande vía principal


que conduce a Nueva Colonia, entrada a la carretera comunal conocida como “La Suerte”,
hombres armados dispararon en repetidas ocasiones contra la humanidad del señor
Vicente Zambrano Palencia.

En versión libre del 28 de noviembre de 2007, HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó este
hecho y manifestó que por orden de él, Jesús Albeiro Guisao Arias alias “el Tigre” y alias
“Durbays” le dieron muerte al señor Zambrano, quien era señalado de ser miliciano de las
FARC.

Hecho 19:

El 19 de junio de 1995, el señor Jhon Jairo Celada David, se encontraba departiendo unos
tragos en el bar “El Kiosco”, ubicado en el corregimiento de Curruluao, municipio de Turbo,
cuando fue sorprendido por hombres que le dispararon hasta causarle la muerte.

La muerte del señor Celada David, obedeció, de acuerdo a lo manifestado por el postulado
HÉBERT VELOZA GARCÍA, a que era señalado de ser simpatizante de la subversión, razón
por la cual, él en compañía de Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”, Wilmer Aguado
Álvarez alias “Carro loco” y José Ruperto García, alias “el gato”, lo asesinaron.

642. Los hechos anteriormente detallados, entre varios otros de esta sentencia, reflejan
varios elementos comunes que, como se mencionó antes, permiten enmarcarlos dentro
de una noción de victimización selectiva, estos son:

643. En primer lugar, aparecen elementos que permiten concluir que la víctima o era
conocida por alguno de los perpetradores, o un informante la ubicó (lugar, tipo de
persona –cargo u oficio por ejemplo–, características físicas, etc.) previamente para
señalarlo al grupo que terminó por cometer el crimen. Esto es, los autores del crimen iban
directamente al lugar de la víctima, incluso en algunos casos se menciona que
irrumpieron violentamente y “buscaron a la persona” y la asesinaban sin mediar palabra
alguna (es decir, no hay un acto de confirmación de la identidad de la persona, basta con
cumplir ciertos criterios –como el encontrarse en un establecimiento determinado-). En
otros se puede destacar que fue primero objeto de seguimiento, como en una carretera,
vigilar a la persona hasta que entrara a un centro comercial o establecimiento público y
esperar el momento para asesinarlo o esperarlo en un lugar particular (como la entrada
de una propiedad o de sus viviendas). Lo anterior denota pues que había claramente la

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intención de asesinar a dicha víctima, y que no fue un acto fortuito o por encontrarse en
un “lugar equivocado”.

644. En un segundo aspecto, cabe destacar que las víctimas cumplían todas con un
criterio para el grupo: debido a su cercanía o alguna modalidad de participación o
cooperación con el bando enemigo. Así pues, se puede ver que en los hechos, los
postulados señalan que el motivo de su acción criminal en estos hechos era que la víctima
era “miliciano”, “simpatizante”, “integrante o miembro”, o “auxiliador”, como se pudo ver.

645. Esto señala uno de los elementos más representativos de este modelo de
paramilitarismo que se instauró en diversas partes del país: el de atacar a cualquier
sospechoso de ser colaborador del bando enemigo. Fue pues instaurada una modalidad
de confrontación que no involucraba el combate a campo abierto, y entre dos bandos con
capacidad de contestación de fuego, por el contrario, la modalidad más masiva era atacar
a cualquier miembro que estuviera desarmado, sin señales de distinción de pertenecer a
un grupo armado (como el uniforme o uso de algún tipo de distintivo) y en general, la
forma de violencia que imperó fue la del homicidio y desaparición de personas, incluso si
fuesen miembros del grupo contrario, miembros vestidos de civil, desarmados y en estado
de incapacidad de replicar el fuego enemigo, esto en clara infracción al Derecho
Internacional Humanitario.

646. Así pues, independientemente de si estas víctimas eran o no miembros activos,


colaboradores o simpatizantes, la forma y circunstancias en que fueron asesinados es
abiertamente un crimen de guerra como ha sido señalado por los Protocolos de Ginebra.

647. Por otro lado, debe hacerse alusión a un tercer elemento, esto es: el uso de la
información en guerras internas. Como se ve en los hechos, la selectividad en la comisión
y la forma de realizar el crimen (el punto mencionado anteriormente) está antepuesta por
una selección de la víctima. Esta selección solo puede hacerse a través de información
como quién será la víctima, cuál su condición y razones para ser señalado.

648. Para el grupo, en su lógica radical, de ideología de extrema derecha y


abiertamente antisubversiva, estos crímenes estaban enmarcados dentro de su lucha
contrainsurgente. Pero, como se verá a continuación, muchas personas ni siquiera
pertenecían o eran colaboradores de las guerrillas y cayeron víctimas por un uso

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desmedido de este tipo de información que es frágil y conveniente en muchas ocasiones a


ciertos intereses de personas locales.

649. Veamos algunas manifestaciones de varios de los postulados que soportan la idea
de esta debilidad de la información, lo que en un contexto de guerra total (todos contra
todos), y muy baja capacidad de contrastación de dicha inteligencia, terminaría
generando enormes niveles de violencia en la región, como en efecto se dio. El siguiente
hecho, objeto de esta sentencia, destaca la debilidad de la información:

Hecho 27:

“El señor Samuel Antonio Jiménez Madera, quien se desempeñaba como administrador de
la finca denominada “Villa Sonia”, se desplazaba en su vehículo, el 6 de octubre de 1995,
por la vía que conduce de la Vereda San Jorge, corregimiento de “Nueva Colonia” hacia el
Corregimiento “Rio Grande”, del municipio de Turbo, cuando fue interceptado, por
hombres armados que le dispararon en repetidas ocasiones hasta causarle la muerte, su
cuerpo fue abandonado en la vía y despojado de su vehículo.

De acuerdo con la declaración de la señora Carmenza Jiménez Pineda, su padre entró a la


finca “Villa Aide”, propiedad de su hermano y recogió a sus tres sobrinas menores de edad,
con el fin de llevarlas al Colegio de Nueva Colonia, luego, por petición de alias “Pinpino”
recogió a tres hombres que necesitaban transportarse hasta el pueblo. Cuando se
encontraban en el sitio conocido como “las partidas de Nueva Colonia”, el señor Jiménez
Madera, les informó que él necesitaba entrar a Nueva Colonia, a lo que los hombres le
dijeron que preferían quedarse en ese sitio, fue así como el señor Jiménez Madera, bajó de
su vehículo, con el fin de abrir la puerta trasera para que las personas descendieran, y fue
ahí, cuando uno de ellos le pegó un tiro en la cabeza, las menores salieron corriendo y
avisaron a sus familiares. Horas después su cuerpo fue hallado en este sitio con varios
impactos de arma de fuego.

Este hecho fue confesado por el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, en diligencia de
versión libre realizada los días 27 de marzo y 24 de septiembre de 2008, en la que
manifestó que el homicidio del señor Samuel Antonio Jiménez Madera, fue ordenada por él
y ejecutada por Jesús Albeiro Guisao Arias alias ‘el Tigre’, Durbay Enrique Durango Gómez
alias “Sancocho” y Carlos Vásquez alias “Cepillo” (fallecido) y por señalamiento que de él
hiciera alias “Pinpino” (identificado como Euclides Bejarano), quien pertenecía a los
comandos populares del EPL.

Mencionó además que alias Jesús Albeiro Guisao Arias alias ‘el Tigre’, hurtó el vehículo de
propiedad del señor Jiménez Madera, y lo dejó para trasladarse en la zona y cometer otros
delitos. Además informó que por orden de Carlos Castaño se había dado muerte a alias
“Pinpino” y a alias “Walter”, quienes hacían parte de los Comandos Populares del grupo
desmovilizado EPL, porque se comprobó que habían señalado a personas inocentes como
simpatizantes de grupos subversivos, cuando en realidad eran personas con las que tenían
diferencias personales o laborales, como fue el caso del señor Samuel Antonio Jiménez
Madera, a quien alias “Pinpino” les informó que apoyaba a grupos subversivos, lo cual no
era cierto678.

678
En la audiencia de control de legalidad, 12 de julio de 2011
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650. Aquí se expone claramente que la razón para cometer el crimen fue el
señalamiento de un miembro de los Comandos Populares (alias “Pimpino”) al señor
Samuel Antonio Jiménez, quien fue ultimado por el grupo al mando de HÉBERT VELOZA
GARCÍA, alias “HH”. Luego, el mismo Carlos Castaño se entera por fuentes que no se
conocen, de que tanto “Pimpino” como alias “Walter” señalaban a personas inocentes
como simpatizantes de grupos subversivos, pero que en realidad buscaba algún provecho
personal o solucionar alguna controversia particular.

651. Bajo esta lógica, es de pensar que muchos de los Comandos Populares, ex
miembros del EPL que luego se pasarían a los paramilitares y ex miembros de las FARC
pudieron igualmente señalar, sin mayor contrastación, a personas de ser colaboradores o
milicianos y terminar asesinando a personas que no tenían nada que ver con el conflicto,
pero que debido a que el informante tenía la condición de ser un antiguo miembro de la
guerrilla, tenía mayor peso su información y gozaba de mayor credibilidad. Esto es
ratificado por el aquí postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, cuando afirma en el hecho 35,
lo siguiente:

Hecho 35:

“El 10 de junio de 1995, hombres armados llegaron hasta el barrio Chucunate, ubicado en
el centro del casco urbano del Municipio de Turbo, y dispararon en seis oportunidades
contra el señor Pedro Pablo Bran Garcés, quien laboraba en la finca platanera conocida
como “Berlín”.

En diligencia de versión libre rendida los días 27 de noviembre de 2007 y 9 de junio y 24


de septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó este hecho y aceptó su
participación directa en el mismo, y junto a él, Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”, José
Ruperto García alias “El Gato”, Wilmer Aguado Álvarez alias “Carro loco”, José Huber Coca
Ceballos alias “Huber Coca” y Forferinzo Flórez Arizal alias “Montador”.

Frente a este hecho, el postulado refirió que al igual que en múltiples casos, “…en los que
murieron personas inocentes…”, el móvil siempre fue el mismo, el tener información de la
supuesta pertenencia a grupos subversivos.”

652. Según expuso la Fiscalía, varios postulados manifestaron que asesinaron a sus
propios compañeros de los Comandos Populares aún cuando trabajan en conjunto o eran
integrantes del mismo grupo paramilitar, por tener información débil o viciada por
intereses personales. Estos son los casos del Comando alias “Walter”, sin identificación,
quien fue ejecutado por orden de HÉBERT VELOZA GARCÍA.

653. También ejecutaron a alias “Maicol”, hombre de confianza de Vicente Castaño,


encargado de enviar los dineros para pagos y compra de vivieres; pero que con el tiempo
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el dinero que recibía se lo apropiaba, le quitaba el dinero a los trabajadores, también


porque había ordenado asesinar a otros miembros del grupo paramilitar, sin razón o por
problemas personales de dineros.

654. Otro de los asesinados por el grupo por este tipo de desinformaciones fue el ya
mencionado “Pimpino” (identificado como Euclides Bejarano) que además del hecho que
expuso anteriormente, hecho 27, fue el culpable de varios asesinatos más, incluyendo el
de Eugenio Vargas, administradores de fincas y gente que él tildaba de guerrilleros para
beneficios personales de diversa índole.

655. Así pues, los hechos expuestos se pueden enmarcar dentro de esta noción de
violencia selectiva, cuya conceptualización se hará en acápite posterior luego de exponer
otro tipo de violencia que se ejerció en la zona de Urabá, la llamada violencia
indiscriminada y violencia indiscriminada masiva. Luego de esto, se podrán hacer
reflexiones generales sobre las formas de operación del grupo y entender las relaciones y
diferencias entre los diversos tipos de violencia y ejercicio de control a la población en un
contexto de conflicto interno.

La violencia aparentemente aleatoria o violencia indiscriminada

656. El siguiente grupo de hechos, se separa de los mencionados en el primer grupo ya


expuesto por no tener un antecedente de señalamiento, donde no media inteligencia del
grupo ilegal ninguna y se ejerce por castigo o moldear a la población para los fines del
grupo armado por amedrentamiento y generación de zozobra en determinado tipo de
poblaciones.

Hecho 6:

“En horas de la noche del día 13 de marzo de 1995, los señores Rubén Darío Lora y Martha
Chavarría Palencia, se encontraban descansando en su residencia, ubicada en la calle 115
del barrio “Julia Orozco”, municipio de Turbo, cuando HÉBERT VELOZA GARCÍA (HH), junto
a Enrique Mestra Yanes alias “Wilson”, José Ruperto García alias “El Gato”, Wilmer Aguado
alias “Carroloco”, José Huber Coca Ceballos alias “Huber Coca” y Forferinzo Flórez Arizal
alias “Montador”, ingresaron a la vivienda y los asesinaron con arma corto punzante
(machete). La hija de la pareja, que para esa época contaba con 18 meses de edad fue
dejada sobre la cama, al lado de los cuerpos.

De acuerdo con lo expuesto por HÉBERT VELOZA GARCÍA, en versión libre del 27 de
noviembre de 2007, el barrio “Julia Orozco”, era una invasión en donde vivían personas
que eran señaladas de ser miembros del EPL, y está la razón para que el grupo bajo su
mando realizara diferentes incursiones y dieran de baja a sus habitantes. Por ello se van a
presentar diferentes hechos sucedidos en este barrio”.

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Hecho 12:

“Siendo las 2 de la tarde, aproximadamente, del día 25 de mayo de 1995, en la avenida


Germán Lopera, en el establecimiento público denominado “Bar Caney”, ubicado frente al
banco de Bogotá del municipio de Turbo, se encontraban los jóvenes Herley Alexander
Márquez Ortega y Marcial de Jesús Bertel Ríos, cuando fueron sorprendidos por varios
hombres armados que se les acercaron y sin mediar palabra les dispararon causándoles la
muerte.

VELOZA GARCÍA, en versión libre del 27 de marzo de 2008, manifestó que durante el año
1995, en la zona conocida como la “Calle del comercio”, se cometían entre 3 y 4
homicidios diarios a manos del grupo armado de las AUC”.

Hecho 25:

El 12 de septiembre de 1995, en el barrio “Julia Orozco” del municipio de Turbo


(Antioquia), fue retenido el señor Luciano Torres Urango y obligado a subirse a una de las
camionetas utilizadas por el grupo armado ilegal y conocida como “Camino al cielo”, al
lograr bajarse del automotor y emprender la huida, el señor Torres Urango, fue alcanzado
por sujetos que le dispararon hasta causarle la muerte.

En versión libre del 27 de noviembre de 2007 y 9 de julio de 2008, este hecho fue
confesado por el desmovilizado HÉBERT VELOZA GARCÍA, manifestando que además de él,
participaron José Ruperto García, alias “el gato”, Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”, José
Huber Coca Ceballos alias “Huber Coca”, Wilmer Aguado Álvarez alias “Carro loco” y José
Luís Negrete Hernández alias ‘Caimán’.

657. Como se puede ver en los hechos, este tipo de violencia, indiscriminada o no
selectiva, tiene la principal característica de no estar orientada a disminuir la capacidad
bélica del enemigo, generar alguna ventaja militar o cortar logística del bando enemigo.
Es decir, no se ataca a ningún miembro activo del bando contrario ni a un colaborador
directo de dicho grupo.

658. Su función en cambio es enviar un mensaje a la población de qué no pueden ser


protegidos por el bando enemigo, disminuir la potencial colaboración o desincentivar la
vinculación de personas al bando opuesto por la generación de un contexto de zozobra
permanente en que cualquiera puede ser víctima (de ahí por ejemplo la retención de
personas del barrio Julia Orozco, para luego ejecutarlas).

659. En este sentido, aquí para el grupo ilegal perpetrador no importa quién es la
víctima específica, basta con un señalamiento generalizado o estigmatización de la zona
donde vive (como en los casos anteriores, un barrio específico), el lugar donde trabaja o
los lugares que frecuenta para ser víctima en potencia (un bar, una zona comercial o calle
específica). Es por esto que HÉBERT VELOZA GARCÍA señala que eran frecuentes los

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asesinatos en determinada calle (como la del comercio) o en un barrio (Julia Orozco),


señalando una lógica perversa de estigmatización de ser de miembros o familiares de
miembros de la guerrilla.

660. En la mayoría de este tipo de hechos, el grupo ilegal y los directos autores del
crimen no sabían quién era exactamente la víctima, es decir, no hay selectividad como en
el grupo anterior de hechos. En este tipo de violencia, que no parece tener lógica por lo
indiscriminada y aparentemente arbitraria, sí existe sin embargo un raciocinio del grupo
ilegal: es el de enviar un mensaje a los demás residentes de un determinado barrio (como
los que eran conocidos por ser invasiones previas de simpatizantes de la causa del EPL o
desmovilizados de dicho grupo), trabajadores de un lugar determinado o personas con
una característica común.

661. Esto con el propósito de generar terror y zozobra, una noción generalizada era que
la población no estaba protegida por ningún bando u autoridad (oficial o ilegal) y que solo
por el hecho de vivir en una zona o frecuentar ciertos lugares, se era una víctima
potencial, sin importar su ideología, si tenía o no una colaboración real con un grupo en
particular, o si era simpatizante del grupo contrario. En el siguiente grupo de hechos, esta
violencia indiscriminada tendrá una connotación aún mayor con una de sus máximas
formas de expresión: la masacre.

La violencia masiva e indiscriminada: guerra sin cuartel y de todos contra


todos.

662. El marco dentro del que se inscribe la mayoría de los hechos por los aquí se dicta
sentencia, cometidos en los primeros años de la entrada del grupo paramilitar comandado
por HÉBERT VELOZA GARCÍA a la región de Urabá es la de masificación de la violencia en
formas de masacres. Así, entre 1993 y 1996 se cometieron en la región decenas de
masacres con cientos de víctimas, y todos los actores armados estuvieron involucrados, y
al incluirse en este marco masacres de guerrilleros contra exguerrilleros de diferente
postura, o de excompañeros contra desmovilizados de su propio grupo, o de
desmovilizados rearmados frente a uno de los grupos que los estaba atacando, además
de la presencia de paramilitares que se sumaron y aprovecharon este estado, se puede
caracterizar que fue un estado de guerra de todos contra todos.

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663. Recordemos que desde años atrás se venían dando varios hechos de violencia
múltiple en la región de Urabá. No obstante, hay una serie de hechos que empiezan a
desencadenar una nueva oleada de violencia. Una de estas acciones fue la perpetrada por
los Comandos Populares fue la masacre que cometieron el 9 de diciembre de 1993 en la
finca los Kativos. El comandante de las FARC en la región, alias Efraín Guzmán da la
orden de intensificar las acciones contra los “esperanzados”, gente que tenían vínculos
directos o indirectos. Una masacre que está conectada como forma de retaliación a las
acciones de los Comandos Populares fue la del barrio La Chinita (Apartadó) el 23 de enero
de 1994, con la cual se entró en una nueva dinámica de la confrontación entre todos los
bandos presentes en la zona según se verá a continuación.

664. Según señaló el Observatorio de Derechos humanos de la Presidencia, “Este hecho


fue el inicio de un enfrentamiento que involucró tanto a la izquierda legal representada en
partidos y sindicatos, como a la izquierda ilegal en armas […] Fue de tales dimensiones la
confrontación, que en una circular del EPL firmada por unos de sus comandantes
disidentes, Francisco Caraballo, declaraba a los “esperanzados” como “objetivos”, por ser
parte de un “grupo paramilitar”679.

665. Este contexto es también resaltado por un informe de la organización internacional


Human Rights Watch, la cual afirmaba en 1996 que:

“En 1995, la lista de enemigos de las FARC se amplió para dar cabida a las personas
sospechosas de apoyar o simplemente simpatizar con los paramilitares, que habían iniciado
una ofensiva sangrienta para expulsar a los guerrilleros de antiguos bastiones como Urabá.
En agosto y septiembre de 1995, las FARC y sus milicias urbanas llevaron a cabo al menos
cinco masacres, relacionadas con frecuencia con conocidos ex guerrilleros del EPL,
miembros del partido Esperanza o presuntos simpatizantes de la guerrilla. Sin embargo, es
probable que muchas de las víctimas no tuvieran nada que ver con la política o el conflicto.
Entre las masacres están la del 12 de agosto de seis personas en la Heladería La
Campesina; la de Churidó, que se saldó con cuatro víctimas y la de Mapaná, con cinco
víctimas, ambas el 19 de agosto; la de la Finca Los Cunas, con 15 víctimas, el 29 de
agosto; y la de Bajo el Oso, con 24 víctimas, el 20 de septiembre. Con frecuencia, las
víctimas fueron atadas y golpeadas antes de ser ejecutadas”680

666. Desde finales de 1993 hasta principios de 1996 se dieron decenas de masacres,
algunas como retaliación directa a alguna previa por parte del bando contrario. Algunas
de estas se pueden sintetizar en el siguiente esquema, que marca un contexto de
violencia generalizada, donde cada grupo se asumía como víctima y pocos como

679
Observatorio del Programa presidencial de Derechos Humanos y DIH, Dinámica reciente de la confrontación armada en
el Urabá antioqueño, 2006, p. 9.
680
Fuente: Entrevista de Human Rights Watch con el Coronel retirado Carlos Velásquez, Bogotá, 12 de mayo de 1997; y
entrevista de Human Rights Watch con el CINEP, Bogotá, 26 de junio de 1996 citados en Informe de Human Rights Watch,
Guerra sin Cuartel: Colombia y el Derecho Internacional Humanitario, octubre de 1998, p. 220.
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victimarios, pero en el fondo, eran las bases sociales, trabajadores bananeros y personas
de barrios señalados como cercanos a ideologías de izquierda los principales victimizados.

Contexto de masacres en Urabá finales 1993-principios 1996

667. En esta sentencia se condena por dos hechos relacionados como masacres en el
esquema contextual anterior, lo cual permite ver algunos elementos de los hechos que
sirven para el análisis. En los hechos de la llamada masacre del “Aracatazo” (hecho 54) y
los de hechos de la masacre del Billar “El Golazo” (Hecho 37). Dado que el detalle de los
hechos se verá en su acápite correspondiente, acá solo se limita a algunos elementos
para los propósitos analíticos sobre el tipo de violencia usada.

Masacre El Aracatazo: 12 de agosto de 1995:

668. Siendo aproximadamente las 9:30 de la noche, un grupo de personas se


encontraba departiendo en la discoteca conocida como “El Aracatazo”, ubicada en el
Barrio El Bosque del Municipio de Chigorodó (Antioquia), cuando fueron sorprendidos por
un grupo de hombres que portaban armas de corto y largo alcance, que ingresaron al
establecimiento público, ordenaron apagar la música y obligaron a las personas a
tenderse en el piso, procediendo a interrogarlos por las armas que supuestamente
portaban y a llamarlos “guerrilleros”, al no encontrar respuesta a sus reclamos,

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procedieron a disparar indiscriminadamente, resultando muertas 18 personas y otro tanto


heridas. Algunas de las víctimas pertenecían al Sindicato Nacional de Trabajadores de la
Industria Agropecuaria (Sintrainagro) y otras al Partido Comunista Colombiano681.

669. Alias “HH” mencionó que el dio la autorización al grupo preexistente comandado
por alias Mono Pecoso (Pedro) de realizar un operativo. Afirma que Mono Pecos y “Pablito
que eran representantes de este grupo, pidieron permiso para matar a tres personas en
Chigorodó y yo los autorizo y resulta que no mueren tres personas sino 18 (…) Yo era
comandante. Fue la primera masacre de Urabá y Carlos se pone bravísimo porque se
vienen las fuerzas militares y dicen que qué había pasado”.

670. Añade “HH” que Carlos Castaño le pidió montar un operativo para que los que
habían perpetrado la masacre fueran capturados por el Ejército y él se hizo cargo junto
con alias “Monoleche” de ese operativo. Luego “las personas fueron capturados no por la
masacre sino por porte de armas (…) Mono pecoso y Pablito no iban en esos carros y
Carlos los cita y los hace ir a la finca la 35, donde son amarrados por orden de Carlos y
Doblecero e iban hacer ajusticiados por haber hecho la masacre sin orden y después se
vio que no era conveniente asesinarlos y se dejan trabajando en Urabá.”682

Masacre el Golazo, barrio Policarpa (Apartadó) 3 de abril de 1996:

671. Según relató HÉBERT VELOZA GARCÍA, “Siendo aproximadamente las 7 y 30 de la


noche del miércoles Santo, 3 de abril de 1996, en el barrio Policarpa Savalarrieta683 del
Municipio de Apartadó (Antioquia), un grupo de aproximado de 20 sujetos que portaban
armas de corto y largo alcance, y que se movilizaban en una camioneta Hilux de color
blanco, tipo estacas, sin placa y dos motocicletas de alto cilindraje hicieron su arribo a
este lugar y procedieron a distribuirse estratégicamente por diferentes sitios del barrio,
tales como: el billar conocido con el nombre de “El Golazo”; La Charcutería; los
supermercados “Rambo y Comunal” y Granero “El Pino”, disparando de manera
indiscriminada contra quienes se encontraban en el establecimiento público El Golazo, al
igual que contra todo aquél que para ese momento transitaba por las calles. Está

681
En versión libre rendida los días 29, 30 de octubre, 26 de noviembre de 2007, 9 y 10 de junio de 2008, el postulado
HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó este hecho y manifestó que éste fue planificado y dirigido por Dalson López Simancas,
conocido con los alias de “mono pecoso, Pedro pecoso ó Lázaro”, quien comandó un grupo de personas que incursionó en
el barrio el bosque, entre ellos los conocidos con los alias de “Pablito”, “Mocho”, “Los Saizas”, “Cama Renga”, “el Chivo”,
“Care Camión”, “Fredy vampiro”, José Gabriel Conrado Pérez alias “Care vieja o Camilo”.
682
Ver clip de versión libre del 9 de junio de 2008.
683
El Policarpa Salavarrieta es un barrio de invasión de Apartadó que para la época de los hechos estaba habitado en su
mayoría por simpatizantes de la Unión Patriótica (UP) y el Partido Comunista. (Diario El Tiempo abril 4 de 1996)
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incursión armada arrojó como resultado la muerte de diez personas y otras heridas, de las
cuales cuatro han sido identificadas”.

672. En diligencia de versión libre rendida los días 26 de noviembre de 2007, 26 de


marzo y 24 y 25 de septiembre de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó este hecho y
narró como Dadivio Ángel López Urrego alias 'Ratón', un desmovilizado del EPL, le
informó que en el billar conocido como “El Golazo”, se reunirían algunos insurgentes para
planear acciones en Apartadó. Fue entonces cuando decidió informarle a Carlos Castaño y
a alias "Doble Cero", quienes impartieron la orden de que estas personas fueran
capturadas ó asesinadas.684

Elementos conceptuales para comprender las tipologías generales de la


violencia contra civiles

673. Los hechos anteriormente expuestos nos ponen de presente algunos elementos
característicos de los grupos armados ilegales. En un intento de síntesis y por el hecho de
ser comunes estas formas de operación de los grupos ilegales, la Sala expone algunos
elementos que pueden ayudar a entender los contextos en que se dan dichas
actuaciones.

674. En primer lugar, se puede resaltar, como se ha mencionado en previas decisiones


sobre la intencionalidad de la violencia ejercida por grupos organizados de poder, esto es:
La violencia es racional, instrumental y compleja685. Su lógica racional se da en que esta
suele estar ajustada a un plan, con una instrumentalidad y unos objetivos determinados.
La violencia no es gratuita cuando es operada por grupos armados ilegales.

675. Al ser instrumental, se refiere a que se busca con ella lograr algo, por lo general
los objetivos del grupo ilegal, pero también a veces es instrumental para conseguir
beneficios de orden personal por parte de comandantes o mandos medios en las regiones
que pueden operar su aparato de violencia para un beneficio propio, así este vaya en
contra de los objetivos de la organización.

684
Audiencia legalización de cargos, HÉBERT VELOZA GARCÍA alias “HH”, 9 de agosto de 2011.
685
Intervención del Dr. Gustavo Salazar, abogado y magister en Ciencia Política y antiguo colaborador del Observatorio
Presidencial de Derechos humanos y DIH, en calidad de experto invitado por la Sala, audiencia control legal y formas de
cargos contra Víctor Julio Díaz, Henry Ardila, Alexander Uribe, Omar Sosa y Germán Oswaldo Padilla, frente Fidel Castaño,
sesión de audiencia del 4 de septiembre de 2012
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676. La complejidad implica que los homicidios, desapariciones, torturas, etc. no se


pueden entender desde una lógica simplista de relación entre dos bandos armados
opuestos, es decir, de asumir que si un grupo ataca a una persona es porque esta
persona pertenece necesariamente al bando contrario. Una de las principales
características de toda guerra no convencional interna, como se ha afirmado, es que la
población civil es la principal victimizada por parte de los grupos armados en contienda,
sea para conseguir su apoyo, para castigarla, para buscar algún tipo de beneficio, para
ajustar cuentas por el desacato de una instrucción, y muchas veces para ajustar cuentas
personales (deudas personales, celos, envidas, resolver disputas electorales, entre otros),
en este caso, activando el aparato militar para beneficio de unos cuantos.

677. Otro de los objetivos de la violencia es control social de la población: es uno de los
propósitos del grupo como un objetivo intermedio para lograr sus objetivos principales. Lo
que el grupo armado busca es que la población se comporte de una forma específica para
el logro de sus objetivos (políticos, económicos o individuales). Posteriormente se verá
cómo son los tipos de relaciones entre la población y los grupos armados ilegales.

Violencia selectiva e indiscriminada

678. Un segundo elemento a señalar es la dicotomía que se puede dar entre formas de
violencia selectiva y formas de violencia indiscriminada. De acuerdo al experto en
violencia contra civiles en guerras de carácter no internacional, Kalyvas, estas dos formas
de violencia pueden entenderse así:

679. La violencia selectiva: su rasgo principal es estar dirigida a una persona


específica, conocida previamente por el grupo o por quien dio la información
(informante), la persona es ubicada en razón a su cargo, identidad con algún grupo o
posición social, sospecha o conocimiento de pertenecer al bando enemigo o de aportarle
información, así como por el incumplimiento de las normas impuestas por el grupo
armado.

680. Para Kalyvas, la violencia selectiva se ejercer solo si se cuenta con información, es
decir, con colaboración de parte de la población civil686 o, en otros casos, puede ser por la
información que aporta un desertor del bando enemigo.

686
Las explicaciones de estos conceptos fueron aportadas por el analista de conflictos, profesor Gustavo Salazar, quien
abarcó distintos conceptos de algunos de los teóricos de conflictos en el plano internacional más reconocidos como Stathys
Kalyvas, Mary Kaldor, entre otros, con el propósito de entender cómo se atacan a los civiles y demás personas protegidas
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681. La violencia indiscriminada, en cambio, no tiene el carácter personalizado de la


anterior, y suele ser empleada para definir o moldear el comportamiento de la población,
es decir, cambiar la adhesión, simpatía o colaboración de los civiles hacia el nuevo grupo
que irrumpe, así como desestimular su potencial colaboración mediante los
comportamientos que quiere el grupo que quiere controlar la zona.

682. Esta violencia, al ser indiscriminada, es decir, al no estar dirigida a una persona
conocida previamente, genera terror en la población y un estado de zozobra o
incertidumbre en la medida en que potencialmente cualquier persona, con el hecho de
cumplir algunas características muy simples, puede ser potencial víctima. Así pues, este
tipo de violencia se da en un contexto donde no necesariamente hay acceso a suficiente
información para detectar colaboradores del enemigo y ser, por tanto, más selectivo.687

683. El Dr. Gustavo Salazar, analista de guerras internas y quien ha profundizado en


algunas regiones del país con altos niveles de violencia, manifiesta que algunos criterios
para evaluar estos dos tipos de violencia (selectiva e indiscriminada) son el tipo de arma,
la forma de aproximarse a la persona, la presencia de listas, las amenazas previas con
nombres propios o dirigidas a un lugar particular (amenazas reiteradas a un hogar, envío
de mensajes a la oficina de una organización o un establecimiento comercial, etc.), otro
elemento de selectividad es la presencia de disparos en la cabeza en la medida que
señala personalización de la violencia, pues se requiere mayor cercanía del agresor a la
víctima, o su total dominio o puesta en estado de indefensión, además de indicar una
clara intención de quitarle la vida688.

684. Las formas de violencia: selectiva, indiscriminada e indiscriminada masiva, son


utilizadas por los grupos ilegales en contextos de guerra donde la información es débil y
depende también de la etapa de la guerra en que se encuentra en una región o zona
dada. Esto es así porque la violencia está relacionado con el grado de control que tiene un
grupo de una zona y de su población, si le es disputado por un actor contrario y de la

del DIH en contextos de guerra irregular. Véase: Audiencia de control legal y formal, Frente Fidel Castaño, Bloque Central
Bolívar, postulados XXXXXX, 4 de septiembre de 2012.
El concepto de violencia selectiva se puede encontrar en: KALYVAS, Stathys. The Logic of Violence in Civil War, Cambridge
University Press, 2006, p. 173
687
Ibid, p. 171
688
Intervención del Dr. Gustavo Salazar, abogado y magister en Ciencia Política y antiguo colaborador del Observatorio
Presidencial de Derechos humanos y DIH, en calidad de experto invitado por la Sala, audiencia control legal y formas de
cargos contra Víctor Julio Díaz, Henry Ardila, Alexander Uribe, Omar Sosa y Germán Oswaldo Padilla, sesión de audiencia
del 4 de septiembre de 2012
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decisión que toma el grupo disputado frente al que llega (replegarse, concentrarse en
zonas lejanas o resistir la entrada y contraatacar).

685. Es por esto que la violencia suele ser alta e indiscriminada cuando un grupo entra
a una zona (caso entrada de un grupo paramilitar a una zona de dominio histórico por
parte de la subversión) y suele a disminuir cuando este va logrando la hegemonía local o
genera acuerdos con el bando enemigo, como ha pasado no en pocas ocasiones en el
país.

El control de la zona por parte de los grupos ilegales

686. Para abordar la variable control territorial, se hace uso de la tipología de zonas de
control planteada por Kalyvas, con la cual es posible operacionalizar el concepto de
control territorial que este autor menciona como “gobierno” (no se hace referencia a
ninguna forma de institucionalidad, es simplemente el grupo que más poder tiene en una
región). Al hacer relación al concepto de “insurgente” no necesariamente se refiere a un
grupo guerrillero, solo lo hace para efectos ilustrativos que es el grupo que quiere quitarle
el poder al grupo “gobernante”, así pues plantea la dicotomía gobernante-insurgente.
Según dicha tipología, existen cinco tipos de zona de control:

“[…] los gobernantes ejercen plena soberanía en algunas áreas (zona 1) y aseguran el
control en otros lugares (zona 2). En tanto en la primera zona los gobernantes tienen un
monopolio casi absoluto de la violencia, en la segunda tienen que competir con una
organización clandestina insurgente, así como con incursiones poco frecuentes por parte
de los rebeldes. Por otra parte, los insurgentes conservan el control absoluto en algunos
lugares (zona 5) y aseguran el control en una zona aledaña (zona 4). En esta última y
aunque detentan el poder, no pueden evitar las incursiones ocasionales del ejército. Por
último, existe una zona intermedia (zona 3), que denominaremos área en disputa” 689.

687. Kalyvas, que ha logrado estudiar decenas de guerras internas en el mundo concibe
que la violencia suele ser baja cuando se está en zona de completo dominio (1 o 5), que
la violencia por parte del grupo disputador se acrecienta en las zonas (2 o 4) y es en
donde más suelen ser afectados los civiles para quitarle la base que controla el grupo
disputado y porque ante la disminución de su poder, el grupo disputado también ejerce
violencia sobre sus bases, desconfía de ellos y empieza a castigar cualquier forma de
cooperación con el grupo que llega.

689
KALYVAS, S. 2001. “La violencia en medio de la guerra civil: Esbozo de una teoría”. Análisis Político, No.42, en
ero-abril: 19-20
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688. Finalmente, en la zona 3 (área de disputa) hay claramente una confrontación


permanente y el poder bélico (poder de combate propiamente dicho) entre los dos grupos
suele ser privilegiado sobre el poder o violencia sobre la población, es en esta zona donde
se dan más combates directos y ya no tanta afectación a los civiles directamente, aunque
siguen siendo victimizados.

689. Así pues las masacres como forma de violencia masiva e indiscriminada se
entiende en un contexto donde i) un grupo hegemónico es confrontado por un grupo
disputador y la violencia masiva e indiscriminada se genera de parte del grupo disputador
frente a bases de apoyo o posibles informadores del grupo hegemónico (caso la entrada
de un grupo paramilitar a una zona de control de parte de las guerrillas); ii) pero también
esa violencia se genera de parte del grupo hegemónico que al ver disputado su dominio,
también genera violencia sobre cualquier posible colaborador con el grupo disputador
(que en la mayoría de los hechos vistos y del contexto de masacres de los años 1993-
1996, es evidente por el hecho que varias de las masacres perpetradas por las FARC iban
en contra de los “esperanzados” a quienes acusaban explícitamente de ser “sapos”,
“traidores” y de apoyar al grupo paramilitar).

Tipo de relaciones de la población con los grupos armados

690. Otra variable que ayuda a comprender el tipo de violencia que se ejerce sobre
civiles es las formas de relación entre los pobladores y el grupo armado hegemónico (el
que está consolidado en una zona de tiempo atrás) y las relaciones entre los pobladores y
el grupo armado que disputa el poder (el grupo entrante).

691. Para ello, se puede hacer uso de una útil tipología construida por Ortiz690. Si bien
esta refleja estados “puros” como suelen ser las tipologías, y es claro que en la población
puede haber mezcla de diversas posturas y una sola persona puede encontrarse entre
uno y otro estadio, la categorización permite apreciar cómo ven los pobladores al grupo
armado. Las relaciones pueden ser de cuatro tipos y está basado entre las posibilidades
de combinación de lo que más expresa un poblador frente al grupo: o le siente miedo, o
siente adhesión/afinidad, según estas combinatorias, las relaciones pobladores-grupo
pueden ser691:

690
Ortiz, M. 2001. “Actores armados, territorios y poblaciones”. Análisis Político, No. 42, Enero-Abril: 61-69.
691
Ibid, pp. 64 y 65.
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“Programática: el “adherente político por razones más o menos programáticas, ligadas


con intereses colectivos y con las identidades”
Utilitaria: el “adherente político por razones no programáticas sino de conveniencia o
utilidad, ligadas más con las estrategias individuales que, como en la forma anterior,
con las estrategias colectivas”
Programática-utilitaria: connivencia de intereses, donde la población instrumentaliza la
violencia del actor armado para sus intereses y los actores armados exigen
contraprestación en forma de apoyo. Esta es una relación donde la población acepta
los beneficios que le ofrece el actor armado quedando atado a los controles de dicho
actor.
Connaturalización: “actitud de pasividad que nace espontáneamente de un cálculo
implícito de los habitantes sobre la correlación de fuerza desfavorable como estrategia
de supervivencia [en] una situación pasajera que es preciso aceptar porque no se ve
posibilidades reales de trastocarla […] la connaturalización o familiaridad con el actor
armado y con la violencia generada por él no es exactamente legitimación, por lo
menos en el sentido de adhesión a ese actor armado y a sus prácticas de violencia”

692. En la decisión, se utilizarán estas categorías para explicar los distintos tipos de
relaciones generadas entre pobladores y los grupos armados, tanto guerrillas como
paramilitares, en distintos sectores: población general; organizaciones sindicales y
partidos políticos de ideología socialdemócrata, socialista o comunista; grupos económicos
(como el bananero, importante en la región) y otros grupos sociales que se vieron
beneficiados o afectados por la violencia tanto de guerrillas como de los paramilitares.

693. Todo esto será entendido dentro del llamado “modelo urabeño” del
paramilitarismo, en donde se pudo generar relaciones con sectores oficiales (como la
Brigada XVII), se atacó a las bases sociales (que como se ha visto no son solo de
colaboradores, sino de cualquier sospechoso o potencial colaborador del otro, o de
cualquier poblador para moldear, desincentivar o castigar su posible información frente al
bando enemigo). Fue un “modelo” de poca confrontación de combate entre enemigos
(aunque no se niega sí hubo) y más de carácter indiscriminado frente a la población civil y
selectivo frente a cierto tipo de poblaciones como los sindicatos o miembros de partidos
de izquierda.

694. Así pues, se podrá profundizar en este llamado modelo de Urabá, debido a la
importancia que este revistió para otras regiones en la medida que:

“El modelo aplicado en el Urabá se expandió a otras regiones, siguiendo el mismo modus
operandi, que se centraba no tanto en mantener confrontaciones abiertas con la
insurgencia, sino más bien en golpear a sus “bases de apoyo”; basta recordar los hechos
acaecidos en Mapiripán (Meta), los días 12, 13 y 14 de julio de 1997”

En el año 1997, las ACCU iniciaron una ofensiva con el fin de tomar el control del Nudo
de Paramillo, lo que se tradujo en asesinatos, masacres y desplazamientos, donde tanto
las Farc como las autodefensas, actuaron por medio de acciones que se dirigieron contra
la población, mientras que los enfrentamientos directos fueron escasos […] “Para
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comienzos de 1997, las ACCU extendieron su presencia de manera importante a los


municipios de Ituango, Dabeiba, Frontino, Toledo, Cañas gordas y Uramita, y empezaron
una dinámica de expansión hacia el Nudo de Paramillo desde las partes bajas de los ríos
San Jorge y Sinú”. Las acciones de las autodefensas se dirigieron contra el bloque
Noroccidental de las Farc y el frente de guerra Noroccidental del ELN”692.

Ubicación de la estructura paramilitar del Bloque Bananero de las ACCU en el


contexto del fenómeno nacional de autodefensas y paramilitarismo

695. Como se ha mencionado en múltiples decisiones de la Sala, el fenómeno de


autodefensas y paramilitarismo ha tenido diversas fases y puntos de quiebre, de esta
forma, no se puede afirmar de manera determinante que: (i) haya existido una relación
constante e inalterada en el tiempo entre la aceptación o promoción del Estado y de
ciertos grupos de pobladores al fenómeno paramilitar; y (ii) tampoco se puede afirmar
que pese a que han existido algunos apoyos y medidas explícitas que favorecieron a los
grupos de autodefensa, la relación entre Estado y paramilitarismo, haya sido estrecha en
todo el nivel nacional, pues su tratamiento fue cambiante y ambiguo, según el gobierno
de turno, los niveles regionales y la institucionalidad de otras ramas del poder público.

696. También se deben tener en cuenta para entender las distintas formas de
paramilitarismo en el país 4 elementos importantes. Un primer elemento es la compleja y
difícil separación entre los fenómenos de autodefensas, paramilitarismo,
narcoparamilitarismo y narcotráfico puro. No es un asunto meramente nominal, existen
algunas características propias de cada fenómeno. Si bien en Colombia se suelen
asemejar las nociones de autodefensas y paramilitarismo, y existen discursos políticos
entre el Estado y las autodefensas, cada uno defendiendo alguna tesis discursiva de cómo
deberían denominarse, debe subrayarse que los fenómenos de autodefensas y
paramilitar, en estrito sensu, no son fáciles de delimitar. Por esta razón, la Sala aportará a
esta discusión algunos elementos empíricos, teóricos y perspectiva comparada con otras
experiencias internacionales para mejorar la definición de cada fenómeno y su
temporalidad. Este factor puede verse entonces como una relación entre el fenómeno
autodefensa y paramilitarismo.

697. Segundo, se debe tener en cuenta la relación entre un orden formal institucional,
como lo es la Constitución y la normatividad, y el apoyo informal en lo local y en la
práctica. Como es bien conocido, tener la norma no basta para que en la práctica se
acate, y como se verá, en varios períodos de estas relaciones complejas, ha habido
692
Observatorio del Programa presidencial de Derechos Humanos y DIH, Dinámica reciente de la confrontación armada en
el Urabá antioqueño, 2006, p. 12
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apoyos explícitos en lo local, pese a una desaprobación o inconstitucionalidad del orden


nacional. En síntesis, se puede concebir este factor una relación entre norma formal y
apoyo informal.

698. En tercer lugar, es relevante ver su nivel de expansión en distintos puntos del país,
su crecimiento en fuerza y tamaño de hombres/armas y frentes. Esta relación da cuenta
de nivel de apoyo local y regional, capacidad de financiación y difusión en el nivel
nacional, en órdenes económicos y culturales, de la idea de autodefensa para defenderse
del avance de la guerrilla. Se manejará entonces la díada crecimiento lento o acelerado.

699. En último lugar, las relaciones entre la institucionalidad con el fenómeno de


autodefensas y paramilitar no ha sido homogéneo en el territorio nacional, han existido
períodos de mayor regionalización del fenómeno y otros de proyección de orden nacional.
Así, se debe subrayar un factor o díada entre región y nación. Así, con estos cuatro
elementos anteriores, se plantea la siguiente periodización y caracterización de las
relaciones entre el Estado y el fenómeno autodefensa-paramilitar.

700. De manera general se puede afirmar que durante varias décadas la práctica de
autodefensa fue aprobada y legal, en un contexto político internacional que incluso eran
aprobadas como parte de la confrontación propia de la Guerra Fría entre “comunistas y
demócratas”. En esta fase primera se puede afirmar que si bien no se dieron muchas
estructuras de autodefensa en gran parte porque las guerrillas no habían llegado a zonas
donde las economías se vieran afectadas, sí hubo procesos formativos y doctrinales
fuertes, dentro de los cuales jugó un importante papel la llamada “Escuela de las
Américas” y varios manuales de contrainsurgencia, los cuales han sido ampliamente
citados por la Sala. A esta fase se le podría denominar Autodefensas legales, crecimiento
lento y localizado en un contexto de fomento doctrinal (1960-1980).

701. Posteriormente, se entra en una fase donde las autodefensas van creciendo
paulatinamente y no hay una suficiente regulación alrededor de ellas, dejando a la libre
interpretación e implementación de los administradores locales (muchos de ellos alcaldes
militares, puesto que estaban en las llamadas zonas de orden público). Esta es una fase
de Autodefensas legales y desregularizadas en crecimiento local y regional (años
ochenta).

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702. A finales de los ochenta se da un giro importante en las relaciones del Estado con
este tipo de agrupaciones autodefensas donde se declara formalmente inconstitucional la
conformación de grupos de autodefensa, el uso de armas por este tipo de agrupaciones y
se declaran mediante decreto legislativo algunas medidas para combatir el
narcoterrorismo y el narco paramilitarismo. Esto en un contexto de guerra del narcotráfico
contra el Estado colombiano y la sociedad general, así como de aumento de las masacres
perpetradas por estos grupos que surgieron como autodefensas y que ahora se
convertían en enemigos de la justicia. Esta fase se conocerá aquí como Autodefensas
ilegales en transición a un fenómeno paramilitar en contexto de mediano apoyo local y
regional y crecimiento lento (1989-1994).

703. Una fase siguiente inicia hacia 1994, y durará hasta finales de los noventa, en el
cual las autodefensas aceptadas en la práctica mediante la aprobación de las cooperativas
de seguridad Convivir, que si bien fueron promovidas legalmente por el orden nacional,
sufrieron de una extrema laxitud en su regulación, de tal forma que en su implementación
se generaron desvíos hacia formas claras y abiertas de carácter paramilitar y a estructuras
que luego serían aprovechadas por el proyecto ideológico paramilitar para su expansión.
Esta fase se puede denominar como Autodefensas y seguridad privatizada de carácter
paramilitar legalizadas en un contexto de alto apoyo regional y crecimiento acelerado
(1994-1998).

704. Finalmente, desde 1998, con la sentencia de la Corte Constitucional que les
quitaba beneficios en cuanto a porte de armas largas y de restringir las Convivir emitida
en 1997, y los decretos subsiguientes del año 1998 a esta decisión de parte del gobierno,
oficialmente el paramilitarismo se ilegaliza completamente y entra en una relación
ambigua con el Estado: por un lado la política oficial ignora el paramilitarismo y lo asocia
más al narcotráfico, pero en lo local y regional, hay un apoyo explícito ante el avance de
las guerrillas, especialmente de las FARC, iniciado a mediados de los noventa. Esta fase
se puede denominar según sus factores relevantes como Fenómeno paramilitar ilegal en
acelerado proceso de expansión con apoyo regional y nacional (1997-2004).

705. Finalmente, se puede plantear una fase de desmonte gradual del paramilitarismo,
donde la Fuerza Pública recupera la autonomía y busca detentar el monopolio del uso de
las armas, que es precepto constitucional, combatiendo a las guerrillas y negociando con
los grupos paramilitares para su proceso de desarme y desmovilización. En el entretanto
se asiste de manera abierta y masiva a un viejo recurso: el apoyo de la población para

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informar y crear zonas de retaguardia y vigilancia, bajo el llamado modelo de “soldados


de mi pueblo” o “soldados campesinos”. Esta fase se puede caracterizar como
Paramilitarismo entre su desmonte y reestructuración (2004-2007).

706. Debe advertirse que aún cuando estas fases sean una propuesta de delimitación y
caracterización, no puede dejar de mencionarse que cada fase puede tener algunos
elementos de la anterior fase e incluir algunos otros de lo que será de la siguiente. Es
decir, si bien cada fase tiene su característica principal y de ahí su denominación, es
importante destacar que no son elementos puros y aislados perfectamente definibles en el
tiempo.

Influencia general de la estructura y sus principales características

707. De acuerdo a los temas abordados y al plan temático establecido inicialmente, la


Sala ha podido constatar la forma como se originó y fortaleció el Bloque Bananero, su
estructura y algunos de los patrones de conducta a través de los cuales desarrolló su
accionar criminal. De lo anterior, la Sala puede colegir que está plenamente establecido
que HÉBERT VELOZA GARCÍA, desde finales de la década de los ochenta hasta el
momento de su desmovilización participó en la estructura paramilitar de la llamada “Casa
Castaño”, en la región de Urabá.

708. La Sala también ha podido confirmar que esta organización tuvo una influencia
armada y política en la región de Urabá, realizando acciones delictivas que produjeron
graves violaciones a los derechos humanos e infracciones al DIH, sobre la población civil.
De las cuales, la Fiscalía 17 de Justicia y Paz amparada en las versiones libres de los
postulados y en el proceso investigativo, ha documentado cientos de hechos y para el
presente control de legalidad presentó un centenar, los cuales son objeto de análisis por
parte de la Sala en la presente decisión.

709. La Sala también evidenció a través de la realización del anterior capítulo, la grave
influencia que tuvo el accionar del Bloque Bananero sobre la vida social política y
económica de los pobladores de Urabá; algunas de las articulaciones y apoyos con los que
contó el grupo armado para ello y la necesidad de que en las próximas presentaciones de
la Fiscalía se complementen los hallazgos hasta ahora puestos de presente, con el fin de
lograr en las futuras decisiones integrar estos elementos para producir decisiones
judiciales que permitan entender más a fondo el fenómeno paramilitar desarrollado en la

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región a manera de “experimento” inicial y sus nefastas consecuencias para el devenir de


esta región y del país en general.

710. Finalmente, la Sala pudo comprobar que en la región de Urabá, el Bloque


Bananero llevó a cabo un proceso de estigmatización, hostigamiento, persecución y
exterminio de personas afines a ideas de izquierda, desmovilizados del EPL, miembros de
los sindicatos bananeros, y especialmente coadyuvó en el genocidio contra la Unión
Patriótica. Como en anteriores oportunidades, la Sala reitera que en desarrollo del
proceso de Justicia y Paz, se ha logrado confirmar tales acontecimientos, y que por lo
tanto, en el presente proceso se buscará el esclarecimiento de la verdad, el juzgamiento
de los victimarios, la dignificación de las víctimas y su reparación integral.

La relación entre las convivir y los paramilitares en Urabá: la continuación de


formas de guerra contrainsurgente

711. El Estado colombiano quiso para finales de la década de 1960 dotar de legalidad la
creación de grupos de autodefensa de carácter civil, como una de las formas de enfrentar
a los grupos subversivos en su momento,693 una visión que no solo pudo parecer legítima
en su momento694, sino que obedeció a algunos criterios logísticos, prácticos y necesarios,
además de representar el principio de colaboración mutua entre las autoridades militares
y la población. Así las cosas, por medio del decreto 3398 de 1965”, expedido por el
gobierno de Guillermo León Valencia, se estructuró la defensa nacional en cabeza de la
población civil (artículos 30 y 34). Esta norma adquirió carácter permanente por medio
de la ley 48 de 1968.695

712. La legislación mencionada fue el fundamento normativo con base en el cual el


Estado colombiano quiso afrontar la subversión y los problemas de orden público
persistentes desde pasada la mitad del siglo XX. No obstante, y como se definirá más
adelante, para la Sala es claro que dicha estrategia así como la legislación en que la
misma tuvo su base legal hasta finales del siglo XX no es casual, pues como lo refirió la

693
Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bogotá, auto de 23 de septiembre de 2011, radicado
110016000253200782701, legalización de cargos contra Fredy Rendón Herrera, Magistrada Ponente Uldi Teresa Jiménez
López, párrafo 108 y ss.
694
Parecer, pues aun resulta discutible si con esa implementación se desconoció el principio de distinción entre los
combatientes y la población civil, conforme el DIH y los principios y reglas de la guerra.
695
Exposición realizada por el investigador… audiencia de legalización de cargos 26 de abril de 2011, cuarta sesión, minuto
00:30:30. En este sentido indicó el coronel Carlos Alfonso Velázquez Romero en la audiencia de 25 de abril de 2011,
primera sesión, minuto 02:29:10 acerca de esta estrategia para enfrentar la subversión: “… después con el tiempo en los
60s más exactamente a partir del 65, 66, aparecen autodefensas que podríamos llamar de derecha, o en este caso del
Estado, más que de derecha del Estado, fue cuando el ejército dada la insuficiencia de pie de fuerza policial y militar, para
cubrir todos los municipios del país y dado que ya la guerrilla empezaba a operar en determinadas zona”
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Fiscalía en la audiencia de legalización de cargos al referirse a la legislación de 1965 “En


tal sentido entonces, vemos como desde 1965 ya se venía preparando el marco legal de
lo que posteriormente en los años 90 sería el decreto que reglamentaría los servicios de
vigilancia y seguridad privada.”696

713. Sin embargo, y cómo fue mencionado por el coronel Carlos Alfonso Velázquez
Romero en audiencia de legalización de cargos, la creación de autodefensas legalmente
constituidas fue una estrategia considerada en su momento como necesaria y legítima,
para mediados de los años 60, cuando el pie de fuerza militar y policial era escaso y el
actuar subversivo evidente; sin embargo, esta estrategia fue mal ejecutada y pronto, ya a
comienzos de los años ochenta, fue permeada por el dinero del narcotráfico, lo que fue
particularmente claro una vez se desplegó en la zona del magdalena medio y de ahí
desplegada en otros lugares del país. “Los campesinos se concentraban en las brigadas o
en los batallones eran entrenados en el manejo de armas pero sobre todo de escopeta, la
máxima arma que podían manejar era escopeta no había ni ametralladora ni
subametralladora nada ni fusil sino escopeta y de fisto, muchas veces, me acuerdo y
esas, retornaban a sus poblaciones como un primer anillo de seguridad en casos de
incursión de la guerrilla en poblaciones donde no había policía o donde la policía eran por
ahí dos o tres agentes, entonces, el ejército también mandaba un sargento un teniente,
un capitán de acuerdo a las necesidades, una fachada de civil allá, por ejemplo manejar
una tienda en un pueblo, (…) pero él estaba era manejando las autodefensas y cuando se
presentía que iba a llegar la guerrilla entonces con un toque de cuerno o la campana de la
iglesia, cualquier clave que hubieren acordado, entonces esta gente llegaba y se ubicaba
en sitios claves para disuadir la entrada de la guerrilla o para por lo menos dispararles y
entonces ya con eso se llamaba al ejercito o la policía más cercana y se partía de la base
que estas autodefensas contenían la guerrilla mientras que llegaba allá el grueso,
entonces se crearon y así funcionaron un buen tiempo hasta los 80s cuando se crean
autodefensas en el Magdalena medio”697

714. Y continuó el coronel (R ) a propósito del protagonismo y la influencia que sobre


esa forma de autodefensa ejerció el narcotráfico “entonces los narcos que están haciendo
eso, sus testaferros en el Magdalena medio dicen, no señor, estas autodefensas tiene es
que protegernos a nosotros porque aquí, no podemos correr el riesgo de que la guerrilla
esta envalentonada aquí nos vaya a secuestrar; y paulatinamente y el acuerdo con

696
Audiencia de legalización de cargos, 26 de abril de 2011, cuarta sesión, minuto (00:33:00)
697
Aparte de la declaración del coronel Carlos Alfonso Velázquez Romero, audiencia de legalización de cargos, 25 de abril
de 2011, primera sesión, minuto (02:29:10)
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algunos militares de los que controlaban esas autodefensas que no supieron ver o no
quisieron ver en lo que se estaban metiendo que ya era un asunto corrupto, o sea un
asunto no como se concibieron las autodefensas, empezaron estos narcos o testaferros a
meterle plata a esas autodefensas y ya no eran entonces escopetas dotadas por el
ejército sino subametralladoras y ametralladoras, revólveres o pistolas 9 milímetros
compradas por narcos, en fin… y entonces las autodefensas trasmutan con el apoyo de
algunos militares que no quisieron ver o no vieron lo que se venía encima, transmutan en
paramilitares, porque el paramilitar es ya activo, para, es, el origen de la palabra para es
como para apoyar, por eso existen los paramédicos, las enfermeras son paramédicos, los
bacteriólogos son paramédicos, en fin, para apoyar la labor del médico; paramilitares, ese
nombre fue acuñado por la izquierda y por la guerrilla claro, porque veían los
paramilitares, no por mentiras sino porque veían en la realidad que estaba sucediendo, se
estaban volviendo activos esas autodefensas para perseguir lo que oliera a apoyo a las
guerrillas.”698.

715. La ley 48 de 1968, adoptó como legislación permanente, entre otros, el decreto
3398 de 1965 “por el cual se organiza la Defensa Nacional”, conforme el cual, entre otras
disposiciones, establecía la posibilidad de amparar como de propiedad particular armas de
uso privativo de las Fuerzas Armadas con autorización del Ministerio de Defensa (artículo
33 Parágrafo 3). Tal disposición sería declarada inexequible muchos años más tarde por la
Sala Plena de la Corte Suprema de Justicia por contravenir el artículo 48 de la
Constitución Política el cual establecía el monopolio de las armas en cabeza del Gobierno
como responsable de mantener el orden público y restablecerlo donde fuere turbado. “Es
además, una fórmula que tiene sentido histórico para superar graves conflictos que
afectaron las relaciones civiles entre colombianos, y que ahora adquiere una renovada
significación ante los problemas que suscitan las diversas formas de la actual violencia”699

716. Posteriormente la Corte señaló respecto a los grupos de autodefensas y las


normas contenidas en el Decreto 48 de 1965:

“Es preciso entonces establecer una diferencia entre lo que es la Defensa Nacional y los
llamados “grupos de autodefensa” que han proliferado con la escalada de violencia en los
últimos tiempos y sobre cuyas características se genera tanta confusión en el país.
En efecto, la interpretación de estas normas ha llevado la confusión a algunos sectores de
la opinión pública que pretenden que ellas pueden ser aprovechadas como una
autorización legal para organizar grupos civiles armados. La actividad de estos grupos se
ubica al margen de la Constitución y de las leyes, pues se convierten en grupos criminales
que contribuyen con su presencia a agravar la situación del orden público, por su carácter
698
Ibídem.
699
Corte Suprema de Justicia, Sala Plena, Sentencia número 22, 25 de mayo de 1989, M.P. Fabio Morón Díaz
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retaliatorio y agresivo y su pretensión de sustituir la acción legítima del Ejército, la Policía


Nacional y de los organismos de seguridad del Estado, que son las autoridades a cuyo
cargo se encuentra la función exclusiva del restablecimiento del orden público, bajo la
dirección y mando del Presidente de la República, según las voces insoslayables de la
Constitución Nacional”.

“…”

“El llamado “grupo de autodefensa” no tiene respaldo en la reglamentación legal ni es


organizado por la autoridad pública. No guarda vinculación no ligamen con la Defensa
Nacional, ni por su origen, ni por su actividad y fines. El hecho de que sea convocado y
organizado por sus propios integrantes y su falta de autorización legal lo lleva a la violación
de las normas constitucionales y penales.

“En este sentido es preciso delimitar la órbita en que se mueve una y otra organización.
Mientras que la primera tiene origen legal y respaldo constitucional y busca servir los fines
de la normalidad institucional; la otra procede por fuera del status jurídico y degenera en
formas de delincuencia y de justicia privada que exigen el pleno repudio de la autoridad en
el Estado de Derecho.”700

717. Por otra parte, aunque la Corte declaró exequible el artículo 25 de la legislación en
comento que se refería a la utilización de todos los colombianos por el Gobierno en
actividades y trabajos para contribuir al restablecimiento de la normalidad; es preciso
mencionar que el magistrado Gustavo Gómez Velásquez manifestó que la exequibilidad
debió haber sido más amplia, y respecto el artículo 25 manifestó en su salvamento de
voto:
“Una posibilidad de ejercicio de poder como la consagrada en el artículo 25, que incluso ha
originado los llamados grupos de autodefensa o paramilitares, la creíamos exclusiva del
Presidente de la República y con contenido y alcances muy distintos. Pero no, parece que
más de una “autoridad competente” ha podido constituirlos y darles eficaces medios de
funcionamiento…”

718. Y teniendo en cuenta los considerandos del Decreto 815 de 1989 expedido con
base en el Estado de Sitio, y que suspendió el decreto 3398 de 1965, que se referían a la
confusión generada por las disposiciones de este último en cuanto a ser vistos como una
empresa legal para organizar grupos civiles armados que actúen al margen de la
Constitución y la ley; y la aclaración de que los operativos para restablecer el orden
público son de competencia exclusiva del Ejército, la Policía Nacional y los organismos de
seguridad de Estado; consideró el salvamento de voto que tales considerandos eran
suficientes para declarar la inexequibilidad de más normas del decreto que organizaba la
defensa nacional y así, señaló:

“Pero se prefirió dejarlo incólume y más bien hacer una manifestación de repudio sobre los
grupos de autodefensa o paramilitares, señalando de paso que son algo muy diferente de
la defensa nacional. Pero la norma subsiste y quién sabe qué variante, igualmente
ominosa, tendrá en el futuro. [esto] debió cortarse de raíz, con razones de tanta

700
Ibídem.
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jerarquía como las anotadas, entre ellas, el propio reconocimiento del Gobierno, aunque
dulcificado, de su abierta contradicción con la Carta…” 701(Negrillas fuera de texto)

719. Como consecuencia de lo anterior, y como se pudo observar en la presentación de


la Fiscalía, con base en el libro “El caleidoscopio de la Justicia”702 en la audiencia de
legalización de cargos, el Gobierno de turno elevó una consulta ante el Consejo de Estado
para determinar a partir de la inexequibilidad declarada por la Corte Suprema de Justicia
respecto a la legislación de los años 60 (decreto 3398 de 1965 y ley 48 de 1968) qué
hacer concretamente con las armas: “¿Las armas de uso privativo de las fuerzas militares,
amparadas con anterioridad a la expedición del decreto 3398 de 1965 y cuyos
salvoconductos se encuentren vigentes, pueden continuar siendo portadas por sus
propietarios, en caso contrario, quienes las posean qué deben hacer con tales armas?
¿Los salvoconductos que se venzan con posterioridad a la expedición del decreto 815 de
1989, pueden ser revalidados para efectos de continuar portando las referidas armas, en
caso negativo, los propietarios que harán con tales armas? La respuesta del Consejo de
Estado señaló que los salvoconductos que autorizaban a los particulares a utilizar armas
de uso privativo de las fuerzas armadas perdieron su presunción de legalidad a partir de
la sentencia de la Corte Suprema de Justicia y, por consiguiente, los mismos no podían
ser renovados con posterioridad a dicha decisión. En consecuencia, el Estado debe
recuperar las armas entregadas con base en la legislación que perdió vigencia y salió del
ordenamiento; pues tales particulares de continuar portando dicho armamento incurrirían
en el delito de porte de armas.703

720. Sin embargo, el Estado colombiano desafiando el pasado desafortunado de la


década de 1980 y desconociendo sus propias decisiones (Decreto 815 de 1989) y la
decisión de la Corte Suprema de Justicia de 1989 que en su Sala Constitucional declaró
inexequible el parágrafo 3 del artículo 33 del decreto 3398704; decidió darle vida y
amparo legal a la formación de estructuras armadas y redes de informantes de carácter
civil con permiso para el manejo de armas de uso privativo de las fuerzas armadas, con el
objetivo de restablecer el orden público turbado en algunas zonas del país, por medio del
decreto-ley 356 de 1994 “Por el cual se expide el Estatuto de Vigilancia y Seguridad
Privada” y la resolución número 368 del 27 de abril de 1995 de la Superintendencia de
Vigilancia y Seguridad Privada que les dio la denominación de “CONVIVIR”

701
Salvamento de Voto, sentencia número 22, 25 de mayo de 1965, Gustavo Gómez Velásquez.
702
Boaventura de Sousa Santos y Mauricio García Villegas “El caleidoscopio de las justicias en Colombia”, Tomo I, Siglo del
Hombre Editores y Universidad de los Andes, 2001
703
Sala de Consulta y servicio Civil, 22 de junio de 1989, radicado 295, consejero ponente Jaime Paredes Tamayo. Citada
en la audiencia de legalización de cargos, 26 de abril de 2011, primera minuto 00:36:00 y siguientes.
704
Corte Suprema de Justicia, Sentencia 022 de 25 de mayo de 1989, M.P. Fabio Morón Díaz.
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721. Las asociaciones de seguridad privadas, tanto los servicios comunitarios como los
servicios especiales de seguridad privada contemplados en el decreto-ley 356 de 1994,
creadas por particulares, especialmente entre 1995 y 1998, con el auspicio o el visto
bueno de Gobiernos departamentales, Fuerza Pública y organismos de inteligencia, y las
correspondientes autorizaciones de la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada,
se convirtieron en pieza fundamental de la estrategia de expansión de los grupos
paramilitares. Bajo dicha fachada y con amparo legal, los grupos paramilitares
consolidaron y expandieron sus redes criminales y sus nexos con sectores económicos,
políticos y estatales. Las llamadas “CONVIVIR” no fueron debidamente supervisadas ni
reguladas por el Estado durante cerca de tres años que, inexplicablemente, no ejerció
funciones de inspección y control, a pesar de los fuertes indicios de relación e inclusive
pertenencia a estas organizaciones.

722. Las CONVIVIR facilitaron a los grupos paramilitares el desarrollo de las siguientes
actividades: dotación logística (radios, uniformes, alimentos etc.); provisión de armas,
muchas de ellas con amparo legal; recolección de dinero tanto los aportes voluntarios
como los recaudos extorsivos; operaciones de inteligencia; relaciones con fuerza pública,
representantes del Estado de los niveles nacional, regional y local. Adicionalmente, una de
las mayores consecuencias de estas actividades, fue la deslegitimación del Estado al
permitir a estas organizaciones ejercer las funciones propias del Estado, como las de
Policía, en plena contradicción con los principios y deberes de un estado democrático y
social de derecho.

723. Bajo dicho esquema, se constituyeron las asociaciones de seguridad privada


denominadas “CONVIVIR”, y de las 414 creadas hasta diciembre 31 de 1997, muchas
fueron organizadas y representadas legalmente por comandantes de grupos paramilitares
tal como fue expuesto por el postulado, hoy condenado, Fredy Rendón Herrera dentro de
la audiencia de legalidad de cargos adelantada en su contra donde señaló:

“A guisa de ejemplo me permito citar los nombres de varias CONVIVIR con la relación de
personas vinculadas a las mismas, y a su vez de reconocida figuración en las
Autodefensas:
Convivir “Horizonte” y “Guaimaral”, bajo la dirección de SALVATORE MANCUSO.
Convivir “Avive”, a la cual pertenecía JOSE IGNACIO ROLDAN alias “Monoleche”.
Convivir “Nuevo Amanecer”, de la cual era integrante RODRIGO PELUFO alias “Cadena” y
FRÁNCISCO JAVIER PIEDRAHITA.
Convivir “Arrayanes”, del ex comandante JUAN FRANCISCO PRADA alias “Juancho Prada”
Convivir “Deyavan”, de la que era miembro el ex comandante RODRIGO PEREZ ALZATE,
alias “Julián Bolívar”. La licencia fue firmada por el entonces gobernador de Antioquia
ALVARO URIBE VELEZ.

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Convivir “Costa Azul”, del ex comandantes ARNOLDO VERGARA alias “Mochacabezas” o


Bola de Cacao”.
Convivir “Siete Cueros” y Convivir “Guayacanes”, del ex comandante JOSE MARÍA
BARRERA ORTÍZ alias “Chepe Barrera”.
Convivir “Papagayo”, del ex comandante ARNULFO PEÑUELA MARÍN y RAUL HASBUN
MENDOZA del eje bananero.
Convivir “Amigos por Valencia”, de MARIO PRADA, condenado por paramilitarismo.
Convivir “Esperanza”, de HECTOR JULIO ALFONSO PASTRANA, esposo de ENILCE LÓPEZ,
alias “La Gata” condenada por concierto para delinquir agravado.
Convivir “Orden y Desarrollo”, de SALOMÓN FERIS CHADID alias “08” del Bloque Norte de
las Autodefensas y JORGE LUIS ALFONSO LÓPEZ, hijo de alias “La Gata”. 705

724. La Fiscalía presentó en audiencia de legalización de cargos las resoluciones donde


se otorgó personería jurídica por parte de la Gobernación de Antioquia a las Asociaciones
Convivir relacionadas anteriormente, se aprobaron sus directores, representantes legales,
secretarios, tesoreros y revisores fiscales.

725. Dentro del proceso referido anteriormente y dentro del proceso adelantado contra
el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, la Fiscalía aportó a la Sala información en cuanto a
la constitución de las cooperativas de seguridad denominadas “CONVIVR”, sus
representantes legales e integrantes, la modificación y aprobación de sus estatutos y las
licencias de funcionamiento de tales asociaciones constituidas en el bajo Atrato y la región
de Urabá:706

726. CONVIVIR – Costa Azul con domicilio en Necoclí – Antioquia, cuyo director fue
Carlos Alberto Ardila Hoyos; secretario tesorero Adolfo Ardila Hoyos y revisor fiscal
Arnoldo Vergara Trespalacios, según acta de constitución de julio 15 de 1996707, y
mediante resolución 42233 de 23 de julio de 1996 proferida por la Gobernación de
Antioquia le fue reconocida personería jurídica, siendo gobernador Álvaro Uribe Vélez708.
Carlos Alberto Ardila alias “Carlos Correa” y Arnoldo Vergara Trespalacios alias “Bola de
cacao” o “Mochacabezas”709pertenecieron a los grupos denominados los Guelengues, la
setenta y luego al bloque Elmer Cárdenas, cuando éste adquirió su nombre.

705
Documento llamado “Breve bosquejo sobre el surgimiento del fenómeno de autodefensas en Colombia” de autoría de
Fredy Rendón Herrera que fue entregado a la magistratura y leído en la audiencia de control de legalidad de cargos del 17
de marzo de 2011, segunda sesión minuto (00:36:30)
706
Archivo “Documentos y Estatutos Convivir” al que se le dio lectura y fue entregado a la Sala en la audiencia de
legalización de cargos contra Fredy Rendón Herrera, realizada el 13 de junio de 2011, primera sesión (00:10:00). Archivo
“Resoluciones Personería Jurídica CONVIVIR”, el cual contiene la respuesta proferida por la Gobernación de Antioquia a los
oficios 1672 UNJP – F017 y 0619 UNJP-F017 de la Fiscal 17 Delegada de la Unidad Nacional de Fiscalía para la Justicia y la
Paz, mediante el cual solicitó copia de las resoluciones que reconocieron personería jurídica a varias asociaciones CONVIVIR
con el fin de “documentar el DOSSIER del Extinto Bloque Bananero de las Autodefensas Unidas de Colombia” y; copia de las
resoluciones que reconocieron personería jurídica a varias convivir, copia de la aprobación de reforma de estatutos, copia
de los conceptos favorables rendidos pro alcaldías, comandos del ejército o de la gobernación de Antioquia, entre otros,
respectivamente. Dicho documento fue entregado a la Sala en la audiencia de legalización de cargos contra HÉBERT
VELOZA GARCÍA.
707
Archivo “Documentos y Estatutos Convivir” proceso contra Fredy Rendón Herrera.
708
Archivo “Resoluciones Personería Jurídica CONVIVIR”, proceso contra HÉBERT VELOZA GARCÍA
709
Paramilitar que participó en la masacre de Mapirirpán.
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727. El señor Carlos Alberto Ardila Hoyos, actuando como representante legal de la
convivir Costa Azul, solicitó licencia de funcionamiento transitoria como servicio especial
de vigilancia y seguridad privada, la cual le fue concedida mediante resolución 3794 del
13 de septiembre de 1996 por parte de la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad
Privada del momento, cuyo superintendente para la época de los hechos era Herman
710
Arias Gaviria. La resolución en comento, en su artículo 2 estipuló:

“SEGUNDO.- Que el área comprendida en las siguientes coordenadas: L. Norte 7 52´40” y


Lng. al Oeste de G. 76´37 44” y L. Norte 8 25´39” y Lng. al Oeste de G. 76 46´58” y L.
Norte 8 05´42” y Lng. al Oeste de G 76 44´23”, en el Municipio Necoclí, Jurisdicción del
Departamento de Antioquia, es considerada un área de alto riesgo; la cual requiere, para
garantizar la paz y la tranquilidad ciudadana, un nivel de seguridad de alta capacidad.”

728. Mediante resolución 0194 de 9 de marzo de 2008 proferida por la Gobernación de


Antioquia se aprobó una reforma estatutaria en la cual se cambió la denominación de
Asociación Convivir Costa Azul, por Asociación de servicios especiales de vigilancia y
seguridad privada Costa Azul; así como se aprobó la inscripción del señor Teófilo Palencia
Negrete como su representante legal.711

729. CONVIVIR – La Palma con domicilio en el municipio de San Juan de Urabá –


Antioquia cuyo director fue Luis Carlos Mercado Gutiérrez; secretario tesorero Otoniel
Hoyos Pérez y revisor fiscal Rubén Darío Coronado Rodríguez, según acta de constitución
712
de julio 15 de 1996. Otoniel Segundo Hoyos alias “Rivera”, perteneció a los grupos
denominados los Guelengues, la setenta y llegó a ser comandante del frente Costanero
del Bloque Elmer Cárdenas.

730. El señor Luis Carlos Mercado Gutiérrez, actuando como representante legal de la
Convivir – La Palma, solicitó licencia de funcionamiento transitoria servicio especial de
vigilancia y seguridad privada, la cual fue concedida por medio de la resolución 4256 de
23 de octubre de 1996 proferida por la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad
Privada, cuyo superintendente para la época de la solicitud era Hermán Arias Gaviria.713
La resolución en comento, en su artículo 2 estipulo:

“SEGUNDO.- Que el área comprendida en las siguientes coordenadas: Lat. Norte 8 46´22”
y Long. 76 31´46”, en el municipio de San Juan de Urabá, Jurisdicción del Departamento
de Antioquia, es considerada un área de alto riesgo; la cual requiere, para garantizar la paz
y la tranquilidad ciudadana, un nivel de seguridad de alta capacidad.”

710
Archivo “Documentos y Estatutos Convivir” proceso contra Fredy Rendón Herrera p 5-6
711
Archivo “Resoluciones Personería Jurídica CONVIVIR”, proceso contra HÉBERT VELOZA GARCÍA
712
Archivo “Documentos y Estatutos Convivir” proceso contra Fredy Rendón Herrera , p. 19
713
Ibídem, p. 23-24
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731. Sobre esta convivir indicó el tercer informe de la CIDH sobre la situación de
derechos humanos en Colombia de 1999: “… un miembro de un grupo paramilitar que
cometió la masacre de 14 personas en la comunidad de La Horqueta, Municipio de
Tocaima, Departamento de Cundinamarca, el 21 de noviembre de 1997, fue dado de baja
durante el ataque. Este individuo fue identificado como Luis Carlos Mercado Gutiérrez, de
quien posteriormente se supo que era el representante legal de una CONVIVIR,
oficialmente reconocida y registrada para operar en San Juan de Urabá, Departamento de
Antioquia”. A dicha convivir le fue revocada su licencia de funcionamiento por parte de la
Superintendencia de Vigilancia y Seguridad privada mediante resolución 8244 del 9 de
febrero de 1998.

732. CONVIVIR – Covitur con domicilio en el municipio de Turbo – Antioquia cuyo


director fue Samuel Zuluaga Marín; secretario tesorero Hernando Jiménez Obando y
revisor fiscal Gerson Mejía Urrego, según acta de constitución de julio 18 de 1996714.
Mediante resolución 42373 de 15 de noviembre de 1996, proferida por la Gobernación de
Antioquia se reconoció personería jurídica a esta asociación.715

733. Mediante resolución 5033 de 27 de enero de 1997 proferida por la


Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada, se le concedió licencia transitoria de
funcionamiento cómo servicios especiales de seguridad y vigilancia privada a la convivir
Covitur, estando como superintendente el señor Hermán Arias Gaviria.716 Tal resolución
decía en su considerando segundo señalaba:

“Que el área del municipio de Turbo, jurisdicción del Departamento de Antioquia es


considerada un área de alto riesgo, la cual requiere, para garantizar la paz y la tranquilidad
ciudadana, un nivel se seguridad de alta capacidad.”

734. Finalmente, mediante resolución 0195 de 9 de marzo de 1998 proferida por la


Gobernación de Antioquia, se aprobó una reforma estatutaria y el cambio de
denominación de asociación Convivir Covitur por el de Asociación de servicios especiales
de vigilancia y seguridad privada Covitur.717

735. CONVIVIR – La Restauración con domicilio Pueblo Bello municipio de Turbo –


Antioquia cuyos fundadores fueron Pablo Antonio Díaz Valero (director); Manuel Dolores
López (secretario tesorero), Guillermo Ramón Guzmán Lagares y Luis José Torres

714
Archivo “Documentos y Estatutos Convivir” proceso contra Fredy Rendón Herrera, p. 7,
715
Archivo “Resoluciones Personería Jurídica CONVIVIR”, proceso contra HÉBERT VELOZA GARCÍA
716
Archivo “Documentos y Estatutos Convivir” proceso contra Fredy Rendón Herrera, pp. 11-12
717
Archivo “Resoluciones Personería Jurídica CONVIVIR”, proceso contra HÉBERT VELOZA GARCÍA
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HÉBERT VELOZA GARCÍA

Ballesta, quienes nombraron como revisor fiscal a Gerson Mejía Urrego, según acta de
constitución de septiembre 27 de 1996718, obteniendo el reconocimiento de personería
jurídica mediante resolución 42333 de 15 de octubre de 1996 proferida por el gobernador
de Antioquia Álvaro Uribe Vélez.

736. Mediante resolución 4185 de 17 de octubre de 1996 proferida por la


Superintendencia de vigilancia y seguridad privada, le fue concedida a la asociación
convivir la restauración, licencia transitoria de funcionamiento como servicio especial de
vigilancia y seguridad privada, cuando fungía como superintendente el señor Hermán
Arias Gaviria.719 Esta última resolución decía en su considerando segundo:

“Que el área de Pueblo Bello en el Municipio de Turbo, jurisdicción del Departamento de


Antioquia, es considerada un área de alto riesgo; la cual requiere, para garantizar la paz y
tranquilidad ciudadana, un nivel de seguridad de alta capacidad.”

737. CONVIVIR – COEMBERA con domicilio en el municipio de Mutata – Antioquia cuyos


fundadores fueron Martín Alonso Zuleta (director), Juan Bautista Ortiz Estrada (secretario
tesorero), Jailer Grajales Upegui y John Jairo Ríos Cardona; según acta de constitución de
noviembre 7 de 1996 cuya área de servicios estuvo comprendida por Pavarandó,
Pavarandocito, Caucheras, Pegado Churumando, Taparales, Bejuquillo, Bajirá720. Mediante
resolución 42375 de 15 de noviembre de 1996 proferida por la Gobernación de Antioquia
le fue reconocida la personería jurídica.721

738. Mediante resolución 4655 de 3 de diciembre de 1996 proferida por la


superintendencia de vigilancia y seguridad privada, le fue concedida licencia transitoria de
funcionamiento como servicio especial de vigilancia y seguridad privada a la asociación
convivir Coemberá. Dicha resolución en su considerando segundo decía:

“Que el área del municipio de Mutatá y los corregimientos y veredas de Pavarando,


Pavarandocito, Caucheras, Pegado, Churumando, Taparales, Bejuquillo y Bajira,
jurisdicción del departamento de Antioquia, es considerada un área de alto riesgo; la cual
requiere, para garantizar la paz y tranquilidad ciudadana, un nivel de seguridad de alta
capacidad.”

739. Finalmente, mediante resolución 0196 de 9 de marzo de 1998 proferida por la


Gobernación de Antioquia se aprueba una reforma estatutaria y el cambio de

718
Archivo “Documentos y Estatutos Convivir” proceso contra Fredy Rendón Herrera , p. 13
719
Ibidem, p. 17-18
720
Archivo “Documentos y Estatutos Convivir” proceso contra Fredy Rendón Herrera, p 25
721
Archivo “Resoluciones Personería Jurídica CONVIVIR”, proceso contra HÉBERT VELOZA GARCÍA
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denominación de Asociación Convivir Coembera, por asociación de servicios especiales de


vigilancia y seguridad privada Coembera.722

740. CONVIVIR – Asociación de campesinos de Punta de Piedra con domicilio en Turbo


–Antioquia vereda de Punta de Piedra cuyos fundadores fueron Jesús Alberto Osorio
Mejía, Alfonso Jiménez, José David Arteaga Causil y Nicolás Martínez Pacheco, la cual,
mediante resolución 42405 de 26 de noviembre de 1996 proferida por la Gobernación de
Antioquia, le fue reconocida personería jurídica, cuando fungía como gobernador Álvaro
Uribe Vélez.723

741. Asimismo, el 7 de noviembre de 1996 fue emitido concepto militar favorable


acerca de los integrantes de la Asociación campesinos de punta de piedra por parte del
comandante de la décimo séptima brigada para el momento, Rito Alejo del Rio Rojas.724

742. Finalmente, mediante resolución 5224 de (ilegible la fecha) 1997, proferida por la
Superintendencia de vigilancia y seguridad privada, le fue concedida licencia transitoria de
funcionamiento como servicios especiales de seguridad y vigilancia privada, cuando fungía
como superintendente el señor Hermán Arias Gaviria725. Dicha resolución decía en su
considerando segundo:

“Que el área de la Vereda Punta de Piedra y el municipio de Turbo, jurisdicción del


departamento de Antioquia, es considerada un área de alto riesgo; la cual requiere, para
garantizar la paz y tranquilidad ciudadana, un nivel de seguridad de alta capacidad.”

743. CONVIVIR – El Plateado con domicilio en Frontino – Antioquia cuyos fundadores


fueron Humberto Restrepo Agudelo (director), Fredy Armando Suarez Elejalde, Alejandro
Gómez Arango (secretario tesorero), Samuel Adolfo García (secretario tesorero); y estuvo
como revisor fiscal Fernando Varela Cataño, según acta de constitución de mayo 13 de
1997726

744. CONVIVIR – El Paramillo con domicilio en Dabeiba – Antioquia cuyos fundadores


fueron John Mario Rodríguez Gaviria (director), Héctor Romero (secretario tesorero),
Ramón Emilio Rivera Restrepo y Nicolás Factor Henao Henao; y estuvo como revisor fiscal
Carlos Álvarez Zapata, según acta de constitución de 13 de julio de 1997.727

722
Archivo “Documentos y Estatutos Convivir” proceso contra Fredy Rendón Herrera, p, 28-59
723
Archivo “Resoluciones Personería Jurídica CONVIVIR”, proceso contra HÉBERT VELOZA GARCÍA
724
Ibídem,
725
Archivo “Documentos y Estatutos Convivir” proceso contra Fredy Rendón Herrera, p 35-36
726
p. 38
727
“”, p. 42.
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745. CONVIVIR – Una Nueva Luz con domicilio en el municipio de Turbo en el


corregimiento de Nueva Colonia –Antioquia, cuyos fundadores fueron David de Jesús
Mejía Mejía (director) Darío Gómez (secretario tesorero), Gilberto Idalgo Lopera y
Unilfrido Ríos Mena; y estuvo como revisor fiscal Faber Londoño Londoño, según acta de
constitución de octubre 28 de 1996728, a la cual se le reconoció personería jurídica por
pate de la Gobernación de Antioquia mediante resolución 42363 de 5 de noviembre de
1996, cuyo gobernador para el momento era Álvaro Uribe Vélez.729

746. Mediante resolución 11383 de 25 de febrero de 1999, se concedió licencia


transitoria de funcionamiento por parte de la Superintendencia de vigilancia y seguridad
730
privada como servicio especial de vigilancia y seguridad privada. Finalmente, mediante
resolución 0197 de 9 de marzo de 1998 proferida por la Gobernación de Antioquia, se
aprueba una reforma a los estatutos y pasó en su denominación de Asociación Convivir
una Nueva Luz a denominarse Asociación de servicios especiales de vigilancia y seguridad
privada una Nueva Luz.731

747. CONVIVIR – La Tagua del Darién con domicilio en el municipio de Apartadó –


Antioquia, cuyo director fue Jaime Alonso Castrillón, con reconocimiento de personería
jurídica mediante resolución 42361 de 5 de noviembre de 1996 de la Gobernación de
Antioquia.

748. Mediante resolución 0192 de 9 de marzo de 1998, fue aprobada una reforma
estatutaria a dicha asociación y el cambio de denominación de Asociación convivir La
Tagua del Darien a Asociación de Servicios Especiales de Vigilancia y Seguridad Privada la
Tagua del Darien.732

749. CONVIVIR – Abibe con domicilio en San Pedro de Urabá – Antioquia, cuyo director
fue Luís Fernando Claros Guerra solicitó el reconocimiento de personería jurídica, el cual
fue reconocido por la Gobernación de Antioquia mediante la resolución 01162 de 28 de
agosto de 1997. En dicha resolución también fue reconocido el señor Claros Guerra como
representante legal y como dignatarios los señores Jesús Ignacio Roldán y Abad Antonio
Cano Marín.

728
Archivo “Documentos y Estatutos Convivir” proceso contra Fredy Rendón Herrera, p 45 - 48
729
Archivo “Resoluciones Personería Jurídica CONVIVIR”, proceso contra HÉBERT VELOZA GARCÍA
730
Archivo “Documentos y Estatutos Convivir” proceso contra Fredy Rendón Herrera, pp. 49-50
731
Archivo “Resoluciones Personería Jurídica CONVIVIR”, proceso contra HÉBERT VELOZA GARCÍA
732
Archivo “Resoluciones Personería Jurídica CONVIVIR”, proceso contra HÉBERT VELOZA GARCÍA
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750. El señor Jesús Ignacio Roldan, un confeso miembro de los grupos paramilitares en
la región de Urabá, identificado con el alias de “Monoleche” y según lo visto en sus
versiones libres, algunas de las cuales se escucharon por esta Sala, fue muy cercano a
Fidel Castaño y uno de los responsables de la muerte de Carlos Castaño.733

751. Mediante resolución 0193 de 9 de marzo de 1998 proferida por la Gobernación de


Antioquia, se aprobó una reforma estatutaria y el cambio de denominación de la
Asociación Convivir Abibe por Asociación de servicios especiales de vigilancia y seguridad
privada Abibe.734

752. CONVIVIR – Chigorodó Alegre con domicilio en el municipio de Chigorodó-


Antioquia cuyo director fue Oscar Hernán Jiménez M y como secretario tesorero fungió
Javier Orlando Giraldo, la cual obtuvo el reconocimiento de personería jurídica mediante
resolución 42366 de 1996 proferida por la Gobernación de Antioquia, cuyo gobernador era
Álvaro Uribe Vélez.735

753. Asimismo, mediante resolución 0199 de 9 de marzo de 1998 se aprobó una


reforma estatutaria y el cambio de denominación de Asociación Convivir Chigorodó Alegre
a Asociación de servicios especiales de vigilancia y seguridad privada Chigorodó Alegre,
proferida por la Gobernación de Antioquia.736

754. CONVIVIR – Coopchurido con domicilio en el municipio de Apartadó-Antioquia,


cuyo director fue José Reynaldo Ríos y secretario tesorero Luis Gregorio Pino Moreno, a la
que le fue reconocida personería jurídica mediante resolución 42363 de 5 de noviembre
de 1996 por pate de la Gobernación de Antioquia.737

755. CONVIVIR – Palma Real con domicilio en el municipio de Chigorodó-Antioquia,


cuyo director y secretario tesorero fueron Dionicio Palacios Ramírez y Piterson Mosquera
respectivamente y, mediante resolución 42365 de 3 de noviembre de 1996 proferida por
la Gobernación de Antioquia le fue reconocida personería jurídica.738

756. CONVIVIR – La Guayaba con domicilio en el municipio de Carepa-Antioquia, cuyo


director y secretario tesorero eran los señores Raúl Petro y Felipe Martínez

733
Audiencia de legalización de cargos de HH, sesión sobre Convivir
734
Archivo “Resoluciones Personería Jurídica CONVIVIR”, proceso contra HÉBERT VELOZA GARCÍA
735
Ibídem
736
Ibídem
737
Ibidem
738
Ibidem
295
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respectivamente; la cual, mediante resolución 42232 de 29 de julio de 1996 proferida por


la Gobernación de Antioquia le fue reconocida personería jurídica, cuyo gobernador para
la época era Álvaro Uribe Vélez.739 Mediante resolución 4251 de 23 de octubre de 1996 la
Superintendencia de vigilancia y seguridad privada le concedió licencia transitoria de
funcionamiento, a esta asociación, como servicio especial de vigilancia y seguridad
privada en la modalidad de vigilancia móvil; sin embargo, por no haber sido renovada,
mediante resolución 5526 de 9 de junio de 1999, la Gobernación de Antioquia canceló su
personería jurídica.740

757. El común denominador de estas CONVIVIR fue que su domicilio estuvo en el


departamento de Antioquia donde tuvieron injerencia y consolidación las agrupaciones
paramilitares Elmer Cárdenas, frente Árlex Hurtado y el frente Turbo, estos últimos
integrantes del bloque Bananero establecido para la desmovilización. Sin embargo, resulta
de importancia el caso de la CONVIVIR Costa azul, pues figuran en su acta de
constitución los señores Carlos Ardila Hoyos alias “Carlos Correa” o “Carevaca” y Arnoldo
Vergara Trespalacios alias “Bola de cacao” o “Mochacabezas” quienes fueron fundadores
del grupo paramilitar denominado los Guelengues que posteriormente se denominó la 70
y finalmente Bloque Elmer Cárdenas. Tras esta observación, puede darse certeza a lo
indicado por el mismo señor Rendón Herrera cuando manifestó acerca de la relación y
legalización y posterior ilegalización de los grupos de autodefensa y las convivir que “si
ponemos las convivires sobre el mapa de Colombia sobre la zona donde estaban las
autodefensas va a coincidir extrañamente o coincidencialmente que son los mismos
sitios”.741

758. Así, para la Sala queda demostrado que la Convivir Costa azul fungió de fachada
legal, durante su tiempo de operación, del grupo paramilitar comandado por Carlos
Correa, Fredy Rendón Herrera y Elmer Cárdenas, pues su domicilio estuvo en el municipio
de Necoclí, localidad que vio nacer dicha agrupación paramilitar donde hicieron y
mantuvieron presencia activa desde 1996 hasta su desmovilización en el año 2006.

759. Por otra parte, la Sala puede llegar a la misma conclusión acerca de la Convivir La
Palma con domicilio en San Juan de Urabá y en cuya acta de constitución aparece el
señor Otoniel Segundo Hoyos alias “Rivera”, quien perteneció al grupo los Güelengues
desde 1995 y llegó a ser comandante del Frente Costanero del Bloque Elmer Cárdenas.
739
Ibídem
740
Ibidem
741
Audiencia de legalización de cargos, contra el postulado Fredy Rendón Herrera de 17 de marzo de 2011, tercera sesión,
minuto (00:48:00).
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Asimismo y aunque según lo expuesto por la Fiscalía en el proceso contra el postulado


Fredy Rendón Herrera, dicha agrupación ilegal consolidó su presencia en tal municipio
hacia 1999, no cabe duda que desde 1996, fecha de constitución de la Convivir La Palma,
dicha cooperativa de seguridad intentó cubrir con un manto de legalidad al Bloque Elmer
Cárdenas, situación que se deduce de la pertenencia de uno de sus miembros de alto
rango al Bloque Elmer Cárdenas y quién comandó el Frente Costanero que operó en la
zona del municipio de San Juan de Urabá.

760. La CONVIVIR PAPAGAYO: Particular mención merece la denominada CONVIVIR


“Papagayo”, la cual se estructuró como una organización matriz, por medio de la cual no
solamente se filtraron recursos económicos hacia los grupos paramilitares sino que
también fue plataforma logística para la obtención de material de guerra, intendencia,
armas, vehículos etc., para los grupos armados paramilitares que operaron en la región
de Urabá.

761. Dicha CONVIVIR “Papagayo” fue constituida en octubre de 1996 por Jesús Dubán,
Marino Ortiz Palacios, Cielo Amparo Gil y Arnulfo Peñuela, este último como director y
representante legal, quién tendrá especial protagonismo en el actuar de esta convivir en
cuanto a su manejo logístico y operacional, quien además, presentó ante el gobernador
del departamento de Antioquia de la época, la solicitud de personería jurídica, la
aprobación del comité de armas del Ministerio de Defensa, y la solicitud de licencia de
funcionamiento ante la superintendencia de vigilancia y seguridad privada. Personería
jurídica que se obtuvo mediante resolución 42360 del 15 de noviembre de 1996 de la
gobernación de Antioquia, licencia transitoria de funcionamiento obtenida mediante la
resolución 4656 de 4 de diciembre de 1996 de la Superintendencia de vigilancia y
seguridad privada. La asociación Papagayo estuvo domiciliada en el municipio de Carepa y
mediante resolución 0198 de 9 de marzo de 1998, fueron modificados sus estatutos y se
cambió la denominación de Asociación Convivir Papagayo por Asociación de servicios
especiales de vigilancia y seguridad privada Papagayo.742

762. Por intermedio de esta asociación, según lo dicho por el postulado HÉBERT
VELOZA GARCÍA en versión libre, se financiaron los grupos paramilitares, dinero que
originalmente provenía de la industria del banano en Urabá. Igualmente, manifestó que

742
Se presentó a la Sala la documentación correspondiente a la Asociación Papagayo Asociación de servicios especiales de
vigilancia y seguridad privada de Urabá), solicitud de personería jurídica, acta de constitución estatutos. Documentación
presentada a la Sala en audiencia de legalización de cargos y proveniente del proceso 11775 adelantado contra el también
postulado Raúl Emilio Hasbún Mendoza y otros.
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esta asociación Papagayo funcionó cerca a la brigada XVII ubicada en el municipio de


Carepa. Así, indicó el postulado en versión libre del 29 de octubre de 2007:

“Cuando nosotros iniciamos, cuando llegamos a Urabá, fue por pedido de los bananeros
hacia Carlos y Vicente, ellos hacían un aporte voluntario, se lo hacían directamente a los
Castaño,… hasta que fuéramos a operar, pero si se hacían aportes por parte de los
bananeros, voluntarios hacia las autodefensas, [Pregunta de la fiscal] “¿Cómo operaba ese
aporte que hacían los bananeros?” R. “En un inicio fue con plata en efectivo, montos ya
acordados entre Carlos y ellos, después se implementó un sistema que era cobrar un
centavo de dólar por caja de banano que saliera exportada y ese impuesto fue subiendo
también hasta quedar en tres centavos de dólar. [Pregunta de la fiscal] “¿Cómo se pagaba,
cómo se descontaba, cómo lo pagaban y quien hacía el control de cuantas cajas salían?” R.
“Yo desde antes de llegar tenía manejo,…antes de llegar tenía manejo más directo y sabía
cómo se operaba verdaderamente en las bananeras, sé que se implementó el cobro de ese
impuesto por caja, se crea una empresa, una empresa de seguridad para poder
que se hagan los aportes legales y para que las bananeras hagan los aportes, y
por medio de la empresa de seguridad se pagaban estos dineros ya con el
manejo es interno ya los dineros se repartían entre los Castaño y…” [Pregunta de
la fiscal] “¿Cómo se llamaba esa empresa de seguridad?” R. “Si no estoy mal es papagayo
[Pregunta de la fiscal] ¿Quién la creo, quien era su representante legal, cómo funcionó?”
R. “Servicios especiales de Urabá esa empresa fue creada por, por Pedro, el representante
legal en este momento creo que es Alberto Osorio en este momento, desde el inicio ha ido
cambiando estuvo también un señor de Carepa, que fue también representante legal y en
el momento de… estaba el señor Alberto Osorio743…[Pregunta de la fiscal] “¿Dónde
funcionaba, dónde tenía su sede?” R. “E n Carepa y en este momento me acuerdo atrasito
de la brigada,…por la brigada para poder entra allá. [Pregunta de la fiscal] ¿Funcionó
cuando usted estuvo allá? “Carepa, doctora… Carepa [Pregunta de la fiscal] ¿Desde
cuándo empezó a funcionar en las instalaciones de la brigada? “No le tengo fecha, no la sé
en este momento doctora, [Pregunta de la fiscal] ¿Año 96,97? “Le mentiría si le dijera ya
una fecha precisa, pero en este momento si hace tiempo opera ahí al frente de la brigada,
[Pregunta de la fiscal] ¿Es lo que podríamos llamar lo que se conocía antes como una
convivir? “Sí, claro, era la convivir de allá… la convivir papagayo y después fue convertida
en los servicios especiales de Urabá [Pregunta de la fiscal] ¿Cuándo se convierte en
servicios especiales? “Creo que cuando las convivir dejan de existir, se comienza a llamar
servicios especiales como una empresa de seguridad privada allá.” [Pregunta de la fiscal]
“¿Pero sigue funcionando con los mismos y por cuenta de Pedro Ponte por y hacen el
mismo cobro a los bananeros, sigue lo mismo?” R. “lo mismo”.744

763. En versión libre de 26 de marzo de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA además de


referirse a la financiación de las convivir para los paramilitares, refirió que el mismo
personal de las convivir pertenecía a los grupos paramilitares, que tales asociaciones se
crearon por Raúl Hasbún, dirigidas por Arnulfo Peñuela, Alberto Osorio:

743
“…sobre el proyecto de palma, el versionado Hasbún Mendoza comentó que la idea del desarrollo de la palma aceitera
salió de Vicente Castaño ‘y efectivamente el desarrollo de la palma y la estrategia o la idea si sale del señor Vicente
Castaño; cuando yo digo que no era exclusivo de las autodefensas y aclaro, es en el sentido de que no todos los que
participamos ahí, no era exclusivamente un proyecto de autodefensas; también compraron civiles, pero si obedecía o si el
que entrara a la zona y compraba un metro de tierra en el sector sabía que era, que había detrás de todo eso; de pronto no
eran socios o participaban o accionistas directos pero si tenían conocimiento de que era, quien estaba detrás, impulsando
todo el proyecto macro en general.
Refiere el ex comandante, que en Belén de Bajirá, debido a las quejas que se estaban presentando por la compra de
tierras, se montó una oficina en el año 2001, denominada “Proyecto social comunitario del Urabá Antioqueño y Chocoano”,
en la que se empezaron a canalizar las quejas derivadas de la compra de tierras en el sector, funcionó por seis (6) meses y
fue manejada por Alberto Osorio” (negrilla fuera del texto). Ver sentencia proferida por el Juzgado Adjunto al Juzgado
Quinto Penal del Circuito Especializado de Medellín, el 30 de julio de 2013, en contra de Luís Fernando Zea Medina y Héctor
Duque Echeverry, radicado 2012-2015.
744
Versión libre presentada en la audiencia de legalización de cargos, 27 de abril de 2011, tercera sesión, minuto 01:02:25
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“…sobre la financiación de las autodefensas en el Urabá, y no sé, creo que yo no había


explicado todavía acá, pero sí hablamos de que se cobraba un impuesto o se cobraba un
porcentaje por caja de banano que se exportara, al menos unos centavos de dólar, donde
tanto el comandante alemán, el ex comandante alemán, el ex comandante Mancuso,
también han manifestado de que estos cobros y estos pagos los hacían las empresas por
medio de las convivir; convivir que fueron creadas por las autodefensas, convivir que
hacían parte de las autodefensas, que fueron creadas para poder recaudar estos dineros
legalmente;… por medio de las convivir les cobrábamos el impuesto a las bananeras, las
convivir fueron creadas por el señor Raúl Hasbún quien hacía parte de las autodefensas, y
fueron creadas para qué, para cobrar esos, esos, esos impuestos o ese dinero que nos
pagaban a nosotros las bananeras para poder seguir operando en la zona de Urabá,
entonces, al ser creadas por un miembro de las autodefensas, al ser creadas para recaudar
los dineros que nos pagaron las empresas para que nosotros los… allá en Urabá, al ser
creadas las autodefensas para… recibir para poder legalizar esos dineros que entraron de
las empresas, esas convivir, si las crearon las autodefensas, ¿de quién eran?, de las
autodefensas…”745

764. Y continuó el postulado:

““Las autodefensas que se crearon cuando estaba el señor Peñuela, era una parte, una de
las alas financieras de la autodefensa, porque si se crearon pa recoger esos fondos que
nos daban los bananeros a nosotros y esos dineros se utilizaron para la guerra, entonces
ahora, como nosotros no vamos a tener la responsabilidad de decir que las convivir fueron
creadas por nosotros y que hacían parte de las autodefensas, eran una parte legal… las
convivir fueron creadas legalmente y nosotros las utilizamos para nuestros fines ilegales,
pero las convivir fueron creadas legalmente como un fin legal, que nosotros en nuestro
accionar como lo hemos hechos con muchas otras cosas legales, las utilizamos para un fin
de beneficio de la organización de las autodefensas; que era recaudar unos fondos de
forma legal para que esas empresas no tuvieron problemas jurídicos, para que esas
empresas pudieran sacar de sus, de sus, de sus cuentas o de sus… fuera legal, la salida de
esos dineros hacia esas convivir. Entonces, como lo dije yo, esas convivir hacían parte de
las autodefensas, por eso en muchas oportunidades me han preguntado sobre
coordinación con la autoridad, esa explicación la pueden dar los que han sido los dirigentes
de las convivir, que han sido los que han manejado esa relación por muchos años en el
Urabá, quienes han sido los que han coordinado con la autoridad, quienes han sido los que
han manejado esa relación, que nos servían de aporte a nosotros para poder coordinar con
esas autoridades, no sé si esa autoridades tenían conocimiento de que lo hacían para
nosotros, para nosotros si nos llegaba la coordinación por parte de ellos… el señor
Peñuela, el señor Alberto Osorio deben de ser responsables y asumir y saber de que Pedro
Hasbún fue el que montó las convivir y Pedro era el comandante de las autodefensas y de
que esas convivir se crearon fue para recaudar fondos para las autodefensas y que esa
convivir nos servían a nosotros de enlace con la autoridad.”746

765. Ya en cuanto a la destinación en concreto del dinero obtenido de las convivir,


indicó HÉBERT VELOZA en versión libre del 10 de junio de 2008:

“eso eran impuestos legalizados para las arcas de las autodefensas para financiar las
autodefensas como me preguntaban a mí en mis versiones, en mi declaración de los
senadores americanos, que si con esos dineros habíamos matado sindicalistas, que si con
esos dineros habíamos matado personas vinculadas a las empresas bananeras del Urabá;
claro que sí, a nosotros no nos dieron el dinero vaya mate a tal sindicalista vaya…de la

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finca no, pero ese dinero se utilizó para comprar armas, ese dinero se utilizó para comprar
munición, se utilizó para pagar el sueldo de los muchachos, la bonificación que les daba, se
utilizó para comprar comida, uniformes, material de intendencia, entonces desde luego que
ese dinero sirvió para matar gente en la zona de Urabá. No es que yo esté diciendo como
lo están creyendo… en San Pedro de Urabá, que yo dije que los bananeros me pagaban
para matar a los sindicalistas de Urabá, no he dicho eso; lo que he dicho es que con ese
dinero si se mató a personas del Urabá y mucha gente en el Urabá, mucha.” 747

766. En la creación y funcionamiento de las Convivir y en especial de la convivir


Papagayo, tuvo especial protagonismo el también postulado Raúl Hasbún, comandante
del frente Árlex Hurtado y conocido con los alias de “Pedro Bonito” o “Pedro Ponte”. Así,
esta Sala conoció en audiencia de legalización de cargos que el señor Hasbún concertó el
impuesto de 3 centavos de dólar con las empresas bananeras Chiquita Brands, Dole,
Banacol, Uniband, Proban y Delmonti, a título de impuesto por la prestación del servicio
de seguridad.748 Asimismo, en versión libre de 20 de agosto de 2008, el postulado Raúl
Hasbún indicó que de los recursos obtenidos de las convivir en Urabá se financiaron no
solo las autodefensas sino también las fuerzas militares y que se quiso implementar con
el acuerdo de los bananeros, la creación de las figuras de las convivir del Urabá en la
costa norte, puntualmente en el departamento del Magdalena, donde también hay
industria bananera:

“[Pregunta la fiscal] Con ese dinero recaudado en el Urabá antioqueño, cómo estaba
pensada esa economía en su distribución a través de la convivir. “En el inicio, la idea era
exclusivamente el tema de finanzas, no teníamos ninguna otra, ningún otro objetivo,
doctora, a medida que fuimos montando el tema y lo fuimos, lo fuimos socializando con los
bananeros y con toda la gente de Urabá y siendo una figura totalmente legal que como le
dije, venía promovida por la gobernación de Antioquia por todo el mundo venía eso como
poniéndose de moda, nos dimos cuenta y también como le había dicho una de las
filosofías de los Castaño y mía personal, era lograr hacer que las autodefensas en Urabá
tuviéramos un éxito muy bueno para la posible expansión a otras zonas de Colombia del
proyecto paramilitar. Nunca, por lo pequeño del frente Árlex Hurtado, nunca se logró,
nunca se necesitó doctora, ampliar o agrandar el grupo, más bien los recursos y esto fue
una decisión que se fue tomando a medida que se fue construyendo todo eso, que fuimos
inventándonos todo ese cuento, que, dijimos vea, con esos recursos apoyemos a la policía,
apoyemos al Estado, a todo lo que tenga que ver con la operatividad legal, no ensuciemos
esa empresa que viene funcionando muy bien, dejémosla tal cual, los mismos bananeros la
están montando, el mismo ejército, la brigada XVII… era un apoyo total a eso, no la
toquemos pa nada malo que eso nos puede servir más adelante para lo que necesitemos.
Eso era lo que acordábamos, como lo dije también, entre el comandante Carlos Castaño, el
señor Vicente Castaño, Michael en su época y yo personalmente.” 749

747
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748
Versión libre rendida por el postulado Salvatore Mancuso, presentada en audiencia de legalización de cargos, 27 de abril
de 2011, tercera sesión, minuto 01:35:32. Asimismo esto se verifica en la exposición de la investigadora acerca del análisis
de las contabilidades de las convivir presentada por la Fiscalía en la legalización de cargos de 28 de abril de 2011, única
sesión, minuto 04:45:58
749
Versión libre rendida por el postulado Raúl Hasbún el 20 de agosto de 2008, presentada en audiencia de legalización de
cargos, 27 de abril de 2011, tercera sesión, minuto 01:42:35
300
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
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767. En cuanto al apoyo y la entrega de recursos a las fuerzas militares, de policía, y el


DAS por parte de las convivir, el postulado Raúl Hasbún, en las versiones libres de 3 de
junio de 2010 y 25 de enero de 2011, señaló:

“Una de las formas de financiar, yo nunca les, o no fue estrategia sobornar o darles plata
para que nos dejaran operar o algo, siempre se les dio apoyo en todo lo logístico que
necesitaran, transporte, comunicaciones, viáticos, todo lo que fuera necesario a través de
las convivir, dentro de la contabilidad de las convivir aparece, señora fiscal, toda la ayuda
en estos, en estos rubros, o en estos sentidos que se le daban a todo tipo de miembros de
la seguridad en la zona de Urabá, nunca en efectivo o con el ánimo de chantajear o
sobornar, siempre era más un apoyo en el tema de logística para que también cumplieran
con su responsabilidad dentro del área de sacar a los grupos de guerrilla que operaban en
la zona.” [Pregunta la fiscal] En relación con los aportes, se hacían aportes a las fuerzas
armadas para temas logísticos, combustible, llantas alguna cosa que dijo en alguna
oportunidad, esto como se entregaba, en efectivo, iba a una cuenta del batallón o la
brigada, se le entregaba a un oficial, ¿Cómo se canalizaba este dinero? “Normalmente o
como a principios, doctora, a principios yo siempre era, no le entreguemos plata a los
militares ni a nadie de esos, si necesitan radios de comunicación, si necesitan vehículos
para transportarse, si necesitan llantas, combustible, todo lo que fuera, computadores,
medios de comunicación, celulares, todo lo que tuviera que ver para que la policía, el
ejército, la fiscalía, el DAS, la SIJIN, todo lo que tuviera en Urabá injerencia sobre los
grupos armados, tuvieran como operar doctora.” [Pregunta la fiscal]Pero ¿Se entregaba?
“En especie “…” ellos mandaban y dentro de las contabilidades o la papelería de las
convivir aparecen cartas de todo el mundo pidiendo, mire unas llantas para el carro del
coronel, una batería para no sé qué cosa, la fiesta del policía por decir algo a ver si alguien
nos pueden dar, una inundación en Urabá, entonces acudían a las convivir, las juntas de
acciones comunales.”750

768. En cuanto al funcionamiento de las convivir, 14 se aglutinaron para efectos


administrativos en una sola denominada Papagayo, sin embargo, todas operaban en toda
la zona de Urabá. La Sala pudo establecer con base en el trabajo realizado por la fiscalía a
partir de informes de policía judicial751, presentación de estudios contables752 y
declaraciones del postulado Raúl Hasbún753, que las convivir se organizaron en
departamentos y la administración estuvo a cargo de Arnulfo Peñuela y las relaciones
públicas bajo el mando de Alberto Osorio. Así, se indicó por parte del Ente Investigador
acerca de lo mencionado por Raúl Hasbún: “Tenía el director administrativo Alberto
Peñuela, tenía un departamento de suministros, departamento de transporte,
departamento de comunicaciones, departamento de información que llamaba así Centro
de información; departamento de relaciones públicas donde vemos al señor Alberto

750
Declaraciones de Raúl Hasbún presentadas en la legalización de cargos de 28 de abril de 2011, única sesión, minuto
00:41:38 y 00:44:10
751
Informe de policía judicial 106 de 26 de febrero de 2009 en el que se realizó inspección al proceso adelantado contra
Raúl Hasbún por la Fiscalía 29 especializada de Medellín y se obtuvieron las resoluciones de personería jurídica, las licencias
de funcionamiento, los estatutos y las reformas de los estatutos de la convivir Papagayo. Informe de policía judicial de 19
de abril de 2011 donde se presentaron fotografía de la sede de la convivir Papagayo en la parte de atrás de la brigada XVII
del municipio de Carepa departamento de Antioquia.
752
En la audiencia de legalización de cargos de 16 de mayo de 2011, única sesión, presentaron un informe acerca de la
valoración de la información contable de las Convivir las investigadoras Ángela María Jaramillo y Victoria Andrea Londoño
Quintero
753
Se presentaron las sesiones de versión libre de Raúl Hasbún pertinente en cuanto al tema de las convivir de fechas 20
de agosto de 2008, 24 de febrero de 2009, 3 de junio 2010, 1 de julio de 2010, 25 de enero 2011 y 5 de mayo de 2011.
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Osorio y un departamento de inversión social. Y aquí fue como él graficó las estructuras
de las convivir en Urabá-Antioquia, la convivir Costa azul y menciona a cada uno de los
directores que las tenían, esas convivir que ya he hecho mención acá en la diligencia.”754

769. De igual forma se pudo establecer en este proceso que los registros contables de
las asociaciones de vigilancia denominadas convivir, no cumplían con las normas
pertinentes para su ejercicio, las operaciones de adquisición de bienes, ingresos de
dinero, monto de gastos, costos, etc., no figuraban debidamente reportadas conforme las
normas contables colombianas.755

770. La Fiscalía presentó ante esta Sala el comunicado enviado por la asociación
Papagayo a la compañía C.I. BANACOL donde informan retener la suma de 3 centavos de
dólar y consignarlos en una cuenta cuyo titular era la convivir Papagayo. La carta decía:

“Como es conocido por ustedes y de gran interés para cada uno de los productores, el
proceso de creación de nuestra empresa de vigilancia CONVIVIR para la seguridad y
vigilancia de la región de Urabá informamos que esta ha sido aprobada para el municipio
de Carepa y más exactamente para el sector de Zungo, carretera, comunal 10, el siete y
cuatro y sector del Caribe. La convivir Papagayo por decreto 2150 del 95 y resolución
número 42365 de noviembre de 1996. Adjunto copia donde autorizamos a la
comercializadora C.I. BANACOL para que a partir de la semana 17 del año en curso se
sirva retener la suma de US 0.03 CVS y la consignen en la cuenta número 6040-11472-1
del banco granahorrar a nombre de convivir papagayo.”756

771. De lo descrito hasta el momento y lo observado a lo largo de la audiencia de


legalización de cargos contra HÉBERT VELOZA GARCÍA junto a lo presentado en otros
procesos adelantados bajo la ley 975 de 2005, la Sala puede establecer las siguientes
conclusiones acerca de la creación y operación de las denominadas CONVIVIR:

772. De lo demostrado en audiencia y con base en el material probatorio allegado por


la Fiscalía se pudo establecer claramente que “Las convivir hicieron presencia en 24
departamentos del territorio nacional, existen estimativos que contempla hasta 529
grupos y 15378 miembros representantes de las convivir en Colombia.”757

773. Su creación, o mejor, su re organización en la década de los 90 fue realizada con


el objetivo de apoyar a los grupos de paramilitares, aunque con visos de legalidad solo en
el papel. Lo anterior es completamente claro en la zona de Urabá, afirmación que se

754
Audiencia de legalización de cargos, 27 de abril de 2011, tercera sesión, minuto 01:56:02. Presentación de power point
elaborada por la fiscalía a partir de lo mencionado por Raúl Hasbún en la versión libre de 20 de agosto de 2008.
755
audiencia de legalización de cargos de 16 de mayo de 2011, única sesión.
756
Audiencia de legalización de cargos, 27 de abril de 2011, tercera sesión, minuto 00:52:38
757
Audiencia de legalización de cargos, 27 de abril, 2011, minuto 00:45:50
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fundamenta no sólo en declaraciones de postulados como Fredy Rendón Herrera al


relacionar estas asociaciones con la consolidación de diversos bloques de autodefensas en
el país758, sino en los análisis hechos por la Fiscalía y presentados a esta Sala, situación
que surge de lo manifestado por uno de los investigadores del Bloque cuando a una
pregunta de la Fiscalía señala en audiencia: “Nos pudiera referir entonces o aclarar señor
investigador, frente a las convivir, según el trabajo y análisis que se hizo de las versiones
de los postulados con la información legalmente obtenida, documentación que
efectivamente las convivir fueron parte entonces de las autodefensas, un brazo legal
activo de las autodefensas? R. “Sí señora Fiscal”.759

774. Asimismo manifestó la señora Fiscal: “Entonces, en este caso y para el tema de
Urabá antioqueño no hay la menor duda para la fiscalía que desde que nacieron las doce
Convivir se crearon y nacieron ya con una, con una proyección netamente para hacer
aquella por medio de la cual se iban a captar los dineros con los cuales se iban a financiar
las autodefensas en la zona, que inicialmente tuvieron una autofinanciación, pero cuando
los Castaño ya dijeron que esto no se podía y los bananeros iban a ser muy visibles,
decidieron que la iban a hacer a través de las convivires”760 y finalizó la fiscal “Lo vamos a
poner en unos términos, surgieron como una empresa fachada, así como se utiliza el
narcotráfico empresas fachada, o sea usted las busca y están totalmente legales,
escrituras, conformación; pero surgen con un propósito ilegal, podríamos decir que en el
Urabá antioqueño las que se crearon, nacieron no migraron y terminaron siendo
cooptadas, utilizadas sino surgieron como una fachada y desde un comienzo ilegales.” 761

775. Lo anterior se confirma con la utilización por parte de los grupos paramilitares del
armamento, material de intendencia, automóviles, antenas repetidoras etc. asignados a
las convivir por parte de los miembros de las autodefensas, lo que se verifica por medio
de la financiación referida con anterioridad, la utilización de las antenas repetidoras
ubicadas en puntos estratégicos indistintamente por las autodefensas y las convivir.762

776. Los grupos de paramilitares fueron apoyados por las empresas bananeras y
existen probabilidades de que el gremio ganadero también haya apoyado a estos grupos

758
El postulado Fredy Rendón Herrera dijo en la audiencia de legalización de cargos de 17 de marzo de 2011, segunda
sesión, minuto 00:34:40 “las convivir constituyeron la cimiente de poderosas estructuras de autodefensas, es decir, las
convivir no fueron más que un mecanismo para revivir la base legal de las autodefensa de la cual las había privado el
decreto 180 de 1989”.
759
Audiencia de legalización de cargos, 28 de abril de 2011, única sesión, minuto 01:02:10
760
Audiencia de legalización de cargos, 28 de abril de 2011, única sesión, minuto 01:15:00
761
Ibidem, minuto (01:47:06)
762
Ibidem, minuto (01:53:12) sobre la utilización se las antenas repetidoras ubicadas en el batallón ubicado en Carepa, en
el kilómetro 40, en Filo cuchillo, en la finca la 35 de loa Castaño, en Cerro Azul, en el municipio de Turbo y en el de San
Pedro de Urabá.
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ilegales, por intermedio del aporte entregado a las asociaciones denominadas Convivir.
Esto se confirma a partir de la Carta a la que se hizo mención con anterioridad acerca del
aporte a las convivir por parte de las empresas bananeras correspondiente a 3 centavos
de dólar, información que se encontró en los registros contables de las convivir y que fue
verificado en audiencia.763 Por parte de los ganaderos el aporte se materializaba por
medio de SUGANAR al momento de pagar lo concerniente a la vacuna de la aftosa
realizaban aportes a las convivir.764

777. En el aparte correspondiente, el tercer informe de la situación de derechos


humanos en Colombia proferido por la CIDH en 1999, indica que aquella comisión recibió
varias quejas, que el accionar de las CONVIVIR ha servido a los intereses de los grupos
paramilitares para dar un tinte de legalidad a las acciones violatorias de los derechos
humanos de la población. Lo anterior, sin perjuicio del aseguramiento de la impunidad de
dichas acciones. Así, indicó el referido informe:

“327. La Comisión también ha recibido numerosas quejas que indican que la figura legal de
las CONVIVIR ha sido utilizada por los grupos paramilitares como escudo en contra de sus
actividades violentas. La Comisión considera que mediante la creación de las CONVIVIR sin
un mecanismo para su adecuado control por parte de una autoridad supervisora, el Estado
ha creado las condiciones que permiten este tipo de abusos.” 765

778. El número de miembros de los diferentes grupos paramilitares, miembros a su vez


de las convivir, confirma la percepción de la Sala acerca de la fachada que las convivir
representaron para el paramilitarismo en Colombia.766 Esto se confirma en la zona de

763
Señaló la investigadora Ángela María Jaramillo en audiencia de legalización de 28 de abril de 2011, única sesión, minuto
04:45:58 “En los registros contables no se registra porcentaje alguno producto de las exportaciones de banano procedentes
de las fincas o comercializadoras pero se encontró una relación de traslados realizados por las bananeras a la asociación de
servicios especiales como se detalla en este cuadro, o sea, contablemente nunca aparecían las bananeras ni los 3 centavos
de dólar, los 3 centavos de dólar causalmente estaban ahí en unos registros y los pudimos consolidar, pero aquí ya
encontramos que las comercializadoras que aportaban dinero a esta asociación son CEI BANADEX. CEI SUNISA, CEI
CONSERVA, CEI TROPICAL, CEI UNIBAN, CEI BANACOL, CEI PROBAN, CEI BANARUTS, CEI BAGATELA y Agrícola
RIOVERTI.”
764
Esto se observa de la declaración del postulado Veloza García en la audiencia de legalización de cargos de 28 de abril de
2011, única sesión, minuto 02:31:47
765
Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Tercer informe de la situación de derechos humanos en
Colombia, OEA/Ser.L/V/II.102, Doc. 9 rev. 1, 26 febrero 1999.
766
Conforme la información presentada por la Fiscalía por intermedio del investigador Nelson Llanos los miembros de las
convivir que fueron miembros de grupos paramilitares que se desmovilizaron corresponde conforma la investigación: “La
búsqueda de miembros de las convivir y desmovilizados colectivos y postulados por bloque registró “Bloque bananeros 8
personas, bloque Catatumbo 1, bloque centauros 2, bloque Cundinamarca 2, bloque Elmer Cárdenas 1, héroes de Tolová 1,
Nordesde antioqueño 1, Puerto Boyacá 3, Tayrona 12, Casa Castaño 1, Héroes del llano y Guaviare 5, Julio Peinado Becerra
6, Magdalena medio 4, Meta y Vichada 2, bloque mineros 1, Montes de María 4, bloque norte 2, suroeste antioqueño 2 y
vencedores de Arauca 1 para un total de 59 desmovilizados colectivos y postulados por bloque”. Respecto a los
desmovilizados colectivos por bloque que fueron miembros de las convivir arrojó lo siguiente: “El resultado fueron 126
desmovilizados por bloque que se disgregan de la siguiente manera, del bloque bananero son 5, bloque Cacique Nutibara 3,
calima 2, Catatumbo 1, centauros 8, sur de bolívar 5, córdoba 5, Cundinamarca 2, Elmer Cárdenas 3, héroes de granada 5,
héroes de tolová 2, héroes del llano y Guaviare 3, julio peinado becerra 13, libertadores del sur 1, Magdalena medio 8,
mineros 6, montes de maría 4, nordeste antioqueño 6, noroccidente antioqueño 2, norte 8, bloque héroes del chocó 1,
próceres del Caguán 1, puerto Boyacá 19, sur del magdalena 5, sur del putumayo 1 y Tayrona 7.” Respecto a los
postulados que fueron miembros de las convivir: “En cuanto a los postulados por bloque en el cruce de información, el
resultado fue “Del bloque Héctor julio peinado becerra 3, bloque Tayrona 1, bloque Córdoba 2, bloque sur de bolívar 2 para
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Urabá al establecerse que Raúl Hasbún fue un representante del gremio de los bananeros
y a su vez, fue comandante paramilitar y utilizó esta doble condición para conformar todo
el sistema en que se constituyeron las convivir en el Urabá767 y por supuesto siempre al
servicio de las autodefensas.768 Así, la fiscalía destacó en la audiencia de legalización de
cargos:

“Y en cuanto a los comandantes, ese mismo del bloque bananero, es el mismo Raúl
Hasbún a quien nosotros sí consideramos que fue un comandante o una parte
administrativa fundamental en las convivires y que fue comandante de frente. Dijo Hasbún
en una de sus intervenciones en versión libre que después de varias charlas sobre el tema
con Vicente Castaño, acordamos que valiendo de mi condición de empresario, trabajara en
el montaje de las convivir con el fin de convertirlas en un apéndice de las autodefensa, lo
que finalmente ocurrió en la zona del Urabá antioqueño, es decir, él se consideraba
aunque no aparecía en ningún documento, la parte administrativa, gerencial, la cabeza de
esas convivires y todos obedecían y atendían las disposiciones que Raúl Hasbún hacía
frente a las convivires… y podemos decir en el caso del Urabá antioqueño que Raúl
Hasbún, Raúl Emilio Hasbún Mendoza fue un comandante paramilitar que tenían mando
dirección administrativa y gerenciaba paralelamente todas las convivires que ya explicará
ahora seguidamente el investigador así como también todo el tema de financiamiento que
se movió a través de las convivires que se crearon para, con ese propósito, con ese único
propósito.”769

779. De igual forma, se reafirma el estrecho vínculo y en algunos casos de adscripción


y pertenencia de las asociaciones de seguridad Convivir con las autodefensas mediante
las declaraciones de varios postulados a la ley de justicia y paz, como por ejemplo lo
expresado por un postulado del denominado bloque metro que operó en Antioquia
cuando frente a las preguntas formuladas por la fiscalía en su versión libre señaló:

“[Las convivir]entonces ellos trabajaban siempre la seguridad de toda la zona, habían


mochas, habían armas amparadas, habían sueldos porque ellos estaban en nómina como si
eso fuera una empresa, cierto, pero de todos modos ellos siempre trabajaban también en
el empalme con las autodefensas porque eso se prestaban las mochas y los carros y todo,
eso era normal… [Pregunta el fiscal] “Había alguna diferenciación entre las convivir y los
paramilitares o eran los mismo”. R. “doctor de un tiempo para acá fue lo mismo. [Pregunta
el fiscal] “De un tiempo, pero entonces hubo una época en que no fue así”. R. “Al principio,
es que toda esa… de los de las convivir han sido paracos doctor… [Pregunta el fiscal]
“¿Usted estuvo en las convivir?” R. “Yo no, titular no, pero yo si andaba mucho por allá,
por allá con todos ellos… [Pregunta el fiscal] ¿Cual era la función de las convivir? R. “era la
misma de nosotros, prestar seguridad en la región. [Pregunta el fiscal] Las convivir en esa
época que estuvo involucrada, estuvo involucrada en ilícitos como secuestros, homicidios,
hurtos.” R. “Doctor es que eso era por parejo, por ejemplo yo no le puedo decir a usted
mataron a fulano de tal y a fulano de tal, pero yo espero que me entienda, eso todo el

un total de 8 postulados por bloque”. Audiencia de legalización de cargos, abril 27 de 20011, segunda sesión, minuto
00:03:12; 00:04:16; 00:05:19.
767
Notas 33 y 37
768
Confirmado en audiencia con las declaraciones de HÉBERT VELOZA GARCÍA: “…en especial las convivir en el Urabá
antioqueño, desde su nacimiento, su conformación fue para el servicio de las autodefensas en el Urabá antioqueño,
especialmente para las ACCU, el encargado de conformar las convivir en el Urabá fue el señor Raúl Hasbún, antes de crear
las convivir Raúl Hasbún ya hacía parte de las autodefensas y en versión conjunta que hizo la señora fiscal del bloque
bananero, él presente, confrontábamos las versiones mías con las del señor Hasbún y él era el encargado de recaudar los
dineros que daban los bananeros para terciar el grupo de autodefensas en el Urabá antioqueño…”
769
Audiencia de legalización de cargos, abril 27 de 2011, segunda sesión, minuto 00:53:09
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mundo eso era lo mismo, doctor, los de la convivir y los de las autodefensas allá eso era lo
mismo, eso era la misma revoltura.”770

780. Y así continuó la diligencia de versión libre con el postulado:

“[Pregunta el fiscal] “¿Que personal tenían las convivir allá? R. “Es que yo no le sé decir a
usted si sí habían 10 o 15 porque es que eso era revuelto por todos lados, a si una
persona no tuviera papeles cogía los revólveres de la convivir, si me entiende, eso era una
revoltura de todo, eso era más que todo como un símbolo de legalización digámoslo así,
como decir las convivir legales aquí, cierto, eso era más que todo como un símbolo de
legalización allá pa la seguridad de todo el mundo pa todo lo que se movía allá.” 771

781. Los controles que fueron creados para el funcionamiento de estas asociaciones
denominadas convivir se quedaron en letra muerta en la legislación de creación y
regulación de las mismas, desde el punto de vista operativo y sustancial en cuanto a las
acciones de defensa para lo que fueron formalmente constituidas y las acciones de ataque
y casi que remplazo de la fuerza pública y participación en graves hechos considerados
violaciones de los derechos humanos772; como los controles propios que el ordenamiento
jurídico establece para las asociaciones sin ánimo de lucro y los controles contables que
las autoridades competentes establecen para las personas jurídicas. Esta afirmación se
sustenta en lo observado en la audiencia de legalización de cargos y el análisis
presentado por la Fiscalía a la Sala acerca de que desde el principio se sabía que no iba a
ser efectivo control alguno, la contabilidad no se llevó por contador público a pesar del
moto de dinero manejado, no existió control por parte de la superintendencia de
vigilancia y seguridad privada ni del Ministerio de Defensa en cuanto al armamento
entregado, y lo que es más grave, con posterioridad al informe de la CIDH y la sentencia
de la Corte Constitucional que decretó la inexequibilidad del precepto que permitía la
utilización de armas de uso privativo de las fuerzas militares por particulares, no se
tomaron los correctivos del caso por parte de las autoridades pertinentes, y menos,
cuando como lo indicó la fiscal, los funcionarios encargados de esos controles locales o
regionales pudieron ser incluidos dentro del fenómeno de la denominada parapolítica.773

770
Declaración en versión libre del postulado… alias “El rosco” presentado en audiencia de legalización de cargos, abril 27
de 2011, primera sesión, minuto 00:37:42
771
Ibídem, minuto 00:42:25
772
En este aspecto, indicó el Tercer informe sobre la situación de derechos humanos en Colombia OEA/Ser.L/V/II.102, Doc.
9 rev. 1, 26 febrero 1999. “328. La Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada ha afirmado abiertamente que no
tiene los suficientes fondos ni personal para supervisar adecuadamente a las numerosas CONVIVIR que han sido creadas.
Hasta hace poco, esta oficina ni siquiera tenía las estadísticas con el número de grupos de CONVIVIR en existencia.” Y
continuó el mismo informe “330. En otras ocasiones, grupos ilegales de paramilitares se autodenominan como CONVIVIR
sin que tengan autorización oficial para actuar como tales. Sin embargo, la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad
Privada no mantiene, o no tiene a la mano, un registro claro u otra información relacionada con la existencia oficial de
grupos CONVIVIR y no investiga supuestos casos de abusos al nombre legal de las mismas. Estos grupos al margen de la
ley pueden hacer uso ilegítimo del nombre y de la autoridad que el nombre invoca para llevar a cabo actos ilegales y
violentos.”
773
Cfr. Declaración de la fiscal… audiencia de legalización de cargos, abril 27 de 201, segunda sesión, minuto 01:22:00
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782. Y tal como fue establecido en el pluricitado informe de la CIDH de 1999, la falta de
controles posibilitó mas allá de la connivencia, fuertes nexos entre las asociaciones de
seguridad convivir y los paramilitares:

“329. Esta falta de control permite que miembros de grupos paramilitares ingresen o
formen grupos legales de CONVIVIR para llevar a cabo sus actividades. Nexos de esta
naturaleza entre miembros de los grupos paramilitares y las CONVIVIR han sido dejados al
descubierto en varias ocasiones.”

783. Aunque no es completamente claro, las armas amparadas con salvoconductos


proferidos con base en los decretos y las resoluciones de la década del 90 que prohijó la
creación de las convivir, no estuvieron en poder del Bloque Bananero, pues las armas
entregadas por este bloque al momento de la desmovilización, ninguna era legal; sin
embargo, es posible que con tales salvoconductos se hubieran cubierto de forma
fraudulenta más de un arma y así, haberse beneficiado el armamento de dicho bloque774;
por ello, la Sala insta a la Fiscalía se aclare esta situación en posteriores sesiones de
audiencia ante la Sala de Justicia y Paz.

784. Finalmente, para el año de 1997, la Corte constitucional expide la sentencia C-572
que declara la inexequibilidad del parágrafo del artículo 39 del decreto 356 de 1994 que
autorizaba a los civiles organizados en estas cooperativas de seguridad a utilizar armas de
uso privativo de las fuerzas militares, pues más allá del derecho a la legítima defensa, el
monopolio de las armas y la estrategia y ejecución de enfrentar las organizaciones
criminales y la forma de hacer frente al conflicto armado y al terrorismo debe estar en
cabeza del Estado legítimamente constituido y con los límites establecidos en el
ordenamiento jurídico775.

785. Conforme la información con que cuenta la Sala en virtud de este y de otros
procesos de justicia y paz en cuanto a las asociaciones CONVIVIR, la Sala hace hincapié
en que aseveraciones como la hecha por la Fiscalía en el escrito de acusación contra el
postulado Fredy Rendón Herrera776 y presentada en aquella audiencia de legalización de
cargos, es inadmisible. El Estado tenía conocimiento y por lo tanto responsabilidad directa
en el desarrollo de la violencia en Colombia por la aplicación de esta estrategia de
conformación de grupos de personas civiles como decidió enfrentar el conflicto armado,
pues unos años atrás, se estableció la inconveniencia jurídica y social de permitir la

774
Ibídem minuto 1:24:35
775
Cfr. Corte Constitucional, Sentencia C-572 de 1997
776
Fiscalía General de la Nación, escrito de acusación p. 5 “De esta manera, el Estado indolente y sectario, trataba de
aniquilar al “Kraken” que había parido años antes, sin darse cuenta que con ello lo estaba robusteciendo. Así, sin quererlo,
el Estado impulso la creación de los “grupos de autodefensa” entre la población civil.”
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creación abierta y con meros controles administrativos, que resultaron algo más que
inexistentes, de grupos de autodefensa aparentemente legítimos que se constituyeron a
la postre en pequeños ejércitos privados que fueron cooptando instituciones locales,
regionales y nacionales. No obstante, el Estado permitió nuevamente el surgimiento de
grupos civiles armados con armas de ataque y destrucción propias de las fuerzas militares
promoviendo así la profundización y agravación del conflicto para la década de 1990,
hasta el año de 1997 cuando con sentencia C-572 de la Corte Constitucional se declaró
inexequible, nuevamente, la legislación que amparó la conformación de dichas
asociaciones de seguridad privada.

D. Calificación jurídico penal de los hechos.

786. En el presente apartado, la Sala se encargará del análisis de los hechos


presentados por la Fiscalía 17 de Justicia y Paz. Para tal fin es necesario considerar el
escenario normativo y Jurídico Penal que se utilizará para analizar las conductas delictivas
llevadas a cabo por el Bloque Bananero y especialmente por HÉBERT VELOZA GARCÍA. A
continuación se presentarán los siguiente temas: (i) características del conflicto armado
colombiano (guerra irregular, combatientes y no combatientes, población civil, métodos
en la guerra irregular, los “objetivos militares”, protección de personas y bienes), entre
otros; y (ii) análisis de las conductas delictivas legalizadas a HÉBERT VELOZA en el marco
normativo descrito anteriormente.

Características del conflicto armado colombiano

787. Para la Sala ha resultado muy importante utilizar como instrumento de análisis la
jurisprudencia nacional e internacional, pues ésta le ha permitido identificar descripciones,
interpretaciones y aplicaciones de tipificaciones penales o de fenómenos delictivos que
permiten la construcción o la aclaración de fenómenos propios del fenómeno violento
desarrollado en Colombia. Así por ejemplo, la Corte Constitucional y la Corte Suprema de
Justicia han sido prolijas en producir decisiones judiciales que se refieren al conflicto
armado interno en Colombia777. La Corte Constitucional, siguiendo lo señalado por el
Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoeslavia, expresó que778:

777
Ver: Sentencias: C-251 de 2002; C-802 de 2002; C-203 de 2005; y, C-291 de 2007. Ver: Corte Suprema de Justicia, Sala
de Casación Penal, Sentencia 29753 del 27 de enero del 2010, M.P. José Leónidas Bustos Martínez.
778
Corte Constitucional, Sentencia C-291 de 2007, M.P. Manuel José Cepeda, 25 de abril de 2007.
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

“El Tribunal Internacional para la Antigua Yugoslavia ha explicado en este sentido: ‘Bajo
este test, al establecer la existencia de un conflicto armado de carácter interno la Sala
debe apreciar dos criterios: (i) la intensidad del conflicto y (ii) la organización de las
partes [ver sentencia del caso Tadic, par. 562]. Estos criterios se utilizan ‘solamente
para el propósito, como mínimo, de distinguir un conflicto armado de actos de
delincuencia, insurrecciones desorganizadas y de corta duración, o actividades
terroristas, que no están sujetas al Derecho Internacional Humanitario’. (…). En
consecuencia, un cierto grado de organización de las partes será suficiente para
establecer la existencia de un conflicto armado (…). Esta posición es consistente con
otros comentarios autorizados sobre el tema.

788. La jurisprudencia del Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia


(TPIY) incluye la noción de conflicto armado internacional cuando menciona el uso de la
fuerza armada por parte de dos o más Estados, así como la de conflicto armado no
internacional en dos claros eventos: (i) cuando las fuerzas del orden de un Estado lleven
un extenso periodo de lucha contra grupos armados irregulares organizados; y (ii) cuando
dentro de un mismo Estado esa clase de grupos se enfrenten entre sí779. En referencia a
un conflicto armado interno, ha dicho el Tribunal:

“(…) existe un conflicto armado siempre que se recurra a la fuerza armada entre los Estados
o violencia armada prolongada entre las autoridades gubernamentales y grupos armados
organizados, o entre tales grupos de un Estado. El derecho internacional humanitario se
aplica desde el inicio de tales conflictos armados y se extiende más allá de la cesación de
hostilidades hasta que se celebra un tratado de paz; o en el caso de conflictos internos, se
alcanza un acuerdo pacífico” 780.

789. Según esto, para determinar la existencia de un conflicto armado interno es


necesario analizar si se cumplen diversos hechos verificables, por ejemplo: (i) que se
presente un enfrentamiento bélico o situación de violencia armada sostenida en el tiempo
aunque no de forma permanente, que esta sea generalizada e incontrolable, y se
presente entre fuerzas del Estado y los grupos armados irregulares, o entre estos
mismos; (ii) que los grupos armados irregulares estén dotados de una identidad y un
mando responsable (estructura), (iii) que tengan un dominio territorial permanente (no
exclusivo o ilimitado); y, (iv) que los grupos armados irregulares realicen acciones
armadas contra las fuerzas del Estado o entre ellos781.

779
SÁNCHEZ S., Raúl E. Formación Especializada en Investigación, Juzgamiento y Sanción de Violaciones a los Derechos
Humanos e Infracciones al Derecho Internacional Humanitario. Módulo “Derecho Penal Internacional”, pág. 43.
780
Tribunal Penal Internacional de la antigua Yugoslavia, caso Tadic, decisión del 2 de octubre de 1995, segunda instancia,
párr.70. Traducción no oficial de Rafael Prieto Sanjuán, “Tadic: internacionalización de conflictos internos y responsabilidad
individual”, Pontificia Universidad Javeriana, Biblioteca Jurídica Diké, Bogotá, 2005, Pág. 126.
781
Ver: APONTE C., Alejandro, La guerra y el derecho: Dinámica cotidiana del poder de definición, Revista de Derecho
Público, No. 21, Universidad de los Andes, Bogotá, 2007 (circa). Una visión crítica desde la filosofía del Derecho en: G. M.
GALLEGO GARCÍA y N. FERNÁNDEZ SOLA. Guerra y desaparición forzada en Colombia, Estudios de Derecho, Universidad de
Antioquia, Medellín, año LXIV -segunda época-, vol. LXI, No. 138, junio de 2004. “En Colombia, la característica
fundamental de un derecho penal de enemigo, es la existencia de grandes conflictos sociales y políticos. (…) No se trata de
una guerra civil convencional, en la que están definidos con claridad los actores o enemigos; se trata, al contrario, de un
conflicto armado degradado, oscuro y difuso, en el cual se mezclan muchos actores, guerrillas, paramilitares,
narcotraficantes, entre tantos. Es un conflicto armado despolitizado, desideologizado, pero que se vive como confrontación
armada por apropiaciones territoriales. No son simples acciones terroristas, éstas también acompañan al conflicto
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790. Ante el escenario anterior y habiendo tamizado el tipo ideal teórico escogido por la
Sala versus las características del conflicto armado Colombiano, este Tribunal ha podido
constatar que los hechos criminales objeto de control de legalidad están vinculados con
un conflicto armado de orden interno y que fueron cometidos con ocasión y durante este;
empero, tal afirmación necesita ser explicitada de una forma más completa, para lo cual
la Sala profundizará en el análisis jurídico sobre los rasgos propios del conflicto armado en
Colombia, y, particularmente, en la región o regiones donde tuvo presencia el Bloque
Bananero al mando de HÉBERT VELOZA GARCÍA782.

791. Algunas causas explicativas sobre el origen, la evolución y el accionar de los


grupos de autodefensa y paramilitares, en la región de Urabá, son las siguientes: (i)
precaria, ineficiente o insuficiente presencia del Estado y sus instituciones; (ii) logro de
fines o metas particulares; entre las cuales se destaca la venganza, la confrontación
ideológica y “expulsión” o “extinción” de contradictores políticos (especialmente de
izquierda), (iii) la protección de intereses económicos privados, el ataque militar contra
grupos armados insurgentes, especialmente las guerrillas de las FARC, el EPL y el ELN; y
(iv) el control de economías legales e ilegales, como forma de financiamiento que
permitiera el posicionamiento y la expansión territorial, política y militar783.

colombiano; son verdaderos enfrentamientos militares con actores que buscan mantener presencia territorial en territorios
apartados de las grandes capitales y que, por tradición, han sido abandonados por el Estado.”
782
Desde la perspectiva de los teóricos de las “guerras post-nacionales”, los “pluralismos violentos” y las “nuevas guerras”,
puede entenderse que las guerras o los conflictos armados actuales se diferencian de las “viejas guerras”, entre otros
asuntos, por la desideologización de sus actores; la preeminencia de los intereses particulares sobre los proyectos políticos;
el protagonismo de redes transnacionales de delincuencia armada organizada, el uso excesivo de la violencia contra la
población civil y el quiebre factual del monopolio estatal de la coerción. Al caracterizar las “nuevas guerras”, los “mercados
de la coerción” y/o los “mercados del crimen”, algunos autores han señalado que más que un interés político, lo que mueve
a los actores que protagonizan este tipo de conflictos es su carácter predatorio, la búsqueda de intereses económicos y/o la
competencia por el control de las demandas insatisfechas de un mercado ilegal de productos y servicios; algunos de ellos,
coinciden también al afirmar que los “empresarios de la coerción” compiten por el poder en el “mercado de la violencia” y
que, dada su gran variedad y su presencia global, representan un reto tanto para los Estados “débiles”, “precarios” o
“colapsados” y, por supuesto, para los Estados del llamado primer mundo. Mary Kaldor ha estudiado las “guerras
contemporáneas” y ha puesto de manifiesto que dichas confrontaciones evidencian el nuevo rostro de la violencia
organizada; en su opinión, las “nuevas guerras” difieren de las “viejas guerras” en cuanto a sus actores, sus métodos de
guerra, sus objetivos, y sus modos de financiación. La investigadora considera que las “nuevas guerras” se caracterizan por:
a) protagonistas que no se distinguen claramente de la sociedad civil y envuelven una gran diversidad de grupos (unidades
paramilitares, señores de la guerra, facciones criminales, grupos mercenarios y unidades disidentes de la policía y el
ejército); b) sus acciones que mezclan características de guerra (regular e irregular), crimen organizado y violación masiva
de los derechos humanos y; c) consolidar una economía criminal de carácter predatorio que se lucra de negocios como el
narcotráfico y la venta de armas. Ver en: COLLIER, Paul (2001). Causas económicas de las guerras civiles. Revista El
Malpensante No. 30. Bogotá. 13 y ÁVILA, Ariel y PÉREZ, Bernardo (2011). Mercados de criminalidad en Bogotá. Taller de
Edición Roca y Corporación Nuevo Arco Iris. Bogotá, Pág. 102. GONZÁLEZ, Fernán, Bolívar, Ingrid y Vásquez, Teófilo
(2007). Violencia política en Colombia. De la nación fragmentada a la construcción del Estado. Ediciones CINEP, Bogotá.
DÚNCAN, Gustavo (2009). Los señores de la guerra. De paramilitares, mafiosos y autodefensas en Colombia. Editorial
Planeta. Bogotá. VELÁSQUEZ, Elkin (2008). Libro blanco de la seguridad ciudadana y la convivencia de Bogotá. Corporación
Nuevo Arco Iris. Bogotá. ÁVILA, Ariel y NÚÑEZ, Magda Paola (2009). El cerco de Bogotá. Neoparamilitarismo y Bandas. En:
¿El declive de la Seguridad Democrática? Edición especial Revista Arcanos. Ediciones Corporación Nuevo Arco Iris. Bogotá.
CORPORACIÓN NUEVO ARCO IRIS (2007). Parapolítica. La ruta de la expansión paramilitar y los acuerdos políticos.
Intermedio Editores. Bogotá.
783
Sánchez, F., Las cuentas de la violencia: ensayos económicos sobre el conflicto y el crimen en Colombia. Editorial Norma,
Bogotá, 2007.
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792. La Sala, en el capítulo dedicado al contexto, pudo comprobar que la región de


Urabá en la que actuó el Bloque Bananero, se caracteriza principalmente por: (i) el
desarrollo histórico de una economía agrícola de enclave (bananera principalmente), en la
cual el conflicto obrero patronal ha estado presente desde comienzos del siglo XX; (ii) una
organización obrera representada en sindicatos; (iii) el avance de la izquierda política,
especialmente por la presencia histórica del Partido Comunista y la consolidación electoral
de la Unión Patriótica a mediados de los ochenta; (iv) presencia de grupos guerrilleros
desde finales de la década de los sesenta (FARC y EPL especialmente); (v) consolidarse
como un corredor geoestratégico que facilita la movilidad económica lícita e ilícita
(narcotráfico y lavado de activos) y militar (tráfico de armas); y (vi) el diseño, desarrollo y
aplicación de una estrategia sistemática y generalizada de exterminio sobre las
manifestaciones de ideología política de izquierda, que incluyeron el genocidio de la Unión
Patriótica.

793. Tal como ha quedado expuesto por la amplia información contextual y a partir de
los diversos análisis socio-políticos y económicos que se realizaron por parte de la Sala, en
conjunto con la presentación de la Fiscalía, se pudo verificar que el conflicto armado
interno en Colombia, y especialmente en la región de Urabá en la que actuaron los
hombres del Bloque Bananero comandados por HÉBERT VELOZA GARCÍA, presenta
características de irregular. En consecuencia, la Sala estudió en el aparte dedicado al
contexto, el accionar del postulado como perteneciente a un grupo armado irregular,
especialmente en: su incursión, consolidación y expansión geográfica, económica, militar
y política; su estrategia militar de tipo irregular regional y local, que implicó ataques
indiscriminados contra la población civil (que incluyó la aplicación de la llamada “guerra
sucia”); los alcances y consecuencias de su permanencia en la región; y, la estructura
económica de orden ilícito que los financió784.

794. La Corte Constitucional en reciente jurisprudencia recordó cuáles son los


elementos que deben tenerse en cuenta para comprender la conceptualización del
conflicto armado colombiano, al respecto manifestó que:

“En esa sentencia la Corte se planteó el problema sobre la definición de “conflicto armado”
para efectos de la aplicación del Derecho Internacional Humanitario. Dijo la Corte que “[l]a
naturaleza voluble de los conflictos armados actuales785 ha llevado a la jurisprudencia
internacional a definirlos como ‘el recurso a la fuerza armada entre Estados, o la violencia
armada prolongada entre las autoridades gubernamentales y grupos armados organizados,

784
Ver: SÁNCHEZ, Gonzalo et al, editor. Nuestra guerra sin nombre, IEPRI, Universidad Nacional de Colombia, Bogotá,
2006, introducción, pág. 25.
785
Tribunal Penal para la Antigua Yugoslavia, caso del Fiscal vs. Aleksovsky, sentencia del 25 de junio de 1999.
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o entre tales grupos, dentro de un Estado’786”. Agregó que “[e]n el caso de los conflictos
armados internos, el adjetivo ‘prolongada’787 busca excluir de esta definición los casos de
meros disturbios civiles, revueltas esporádicas o actos terroristas aislados. 788” Destacó la
Corte que esa definición se refleja en lo dispuesto en el artículo 1 del Protocolo Adicional II
a los Convenios de Ginebra de 1949 sobre su “ámbito de aplicación material”, en el cual se
dispone:

“1. El presente Protocolo, que desarrolla y completa el artículo 3 Común a los Convenios de
Ginebra del 12 de agosto de 1949, sin modificar sus actuales condiciones de aplicación, se
aplicará a todos los conflictos armados que no estén cubiertos por el artículo 1 del
Protocolo adicional a los Convenios de Ginebra del 12 de agosto de 1949 relativo a la
protección de las víctimas de los conflictos armados internacionales (Protocolo I) y que se
desarrollen en el territorio de una Alta Parte contratante entre sus fuerzas armadas y
fuerzas armadas disidentes o grupos armados organizados que, bajo la dirección de un
mando responsable, ejerzan sobre una parte de dicho territorio un control tal que les
permita realizar operaciones militares sostenidas y concertadas y aplicar el presente
protocolo.

2. El presente protocolo no se aplicará a las situaciones de tensiones internas y de


disturbios interiores, tales como los motines, los actos esporádicos y aislados de violencia y
otros actos análogos, que no son conflictos armados.”

Dijo la Corte que en el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional es posible


encontrar un test similar para la determinación de la existencia de un conflicto armado no
internacional, a efectos de determinar la ocurrencia de crímenes de guerra, cuya definición
se aplica “(…) a los conflictos armados que tienen lugar en el territorio de un Estado
cuando existe un conflicto armado prolongado entre las autoridades gubernamentales y
grupos armados organizados o entre tales grupos”.789 Agregó que la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos ha explicado que para efectos de la aplicación del
Derecho Internacional Humanitario, específicamente de las garantías provistas por el
Artículo 3 común, es necesario que la situación en cuestión haya trascendido la magnitud
de un mero disturbio interior o tensión interna 790, para constituir un conflicto armado de

786
Traducción informal: “a resort to armed force between States or protracted armed violence between governmental
authorities and organised armed groups or between such groups within a State”. Caso del Fiscal v. Dusko Tadic, No. IT-94-
1-AR72, decisión de la Sala de Apelaciones sobre su propia jurisdicción, 2 de octubre de 1995, par. 70. Esta regla ha sido
reiterada en numerosas decisiones del Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia, entre las cuales se cuentan
los casos de Fiscal vs. Aleksovsky, sentencia del 25 de junio de 1999; Fiscal vs. Blagojevic y Jokic, sentencia del 17 de
enero de 2005; Fiscal vs. Tihomir Blaskic, sentencia del 3 de marzo del 2000; Fiscal vs. Radoslav Brdjanin, sentencia del 1º
de septiembre de 2004; Fiscal vs. Anto Furundzija, sentencia del 10 de diciembre de 1998; Fiscal vs. Stanislav Galic,
sentencia del 5 de diciembre de 2003; Fiscal vs. Enver Hadzihasanovic y Amir Kubura, sentencia del 15 de marzo de 2006;
Fiscal vs. Dario Kordic y Mario Cerkez, sentencia del 26 de febrero de 2001; Fiscal vs. Sefer Halilovic, sentencia del 16 de
noviembre de 2005; Fiscal vs. Dragoljub Kunarac y otros, sentencia de la Sala de Apelaciones 12 de junio de 2002; Fiscal
vs. Momcilo Krajisnik, sentencia del 27 de septiembre de 2006.
787
El Tribunal Penal para la Antigua Yugoslavia usa el término “protracted”, en la versión inglesa de las sentencias.
788
Tribunal Penal para la Antigua Yugoslavia, casos del Fiscal vs. Dario Kordic y Mario Cerkez, sentencia de la Sala de
Apelaciones del 17 de diciembre de 2004; Fiscal vs. Sefer Halilovic, sentencia del 16 de noviembre de 2005; y Fiscal vs.
Dragoljub Kunarac y otros, sentencia de la sala de apelaciones del 12 de junio de 2002.
789
Artículo 8(2)(f) del tratado.
790
Explica la Comisión Interamericana: “Las normas legales que rigen un conflicto armado interno difieren significativamente de
las que se aplican a situaciones de disturbios interiores o tensiones internas (…)”. Estos son ejemplificados por la Comisión
siguiendo un estudio elaborado por el Comité Internacional de la Cruz Roja, con los siguientes casos no taxativos: “motines,
vale decir, todos los disturbios que desde su comienzo no están dirigidos por un líder y que no tienen una intención
concertada; actos de violencia aislados y esporádicos, a diferencia de operaciones militares realizadas por las fuerzas armadas
o grupos armados organizados; otros actos de naturaleza similar que entrañen, en particular, arrestos en masa de personas
por su comportamiento u opinión política”. En este orden de ideas, la Comisión señala que “el rasgo principal que distingue las
situaciones de tensión grave de los disturbios interiores es el nivel de violencia que comportan. Si bien las tensiones pueden
ser la secuela de un conflicto armado o de disturbios interiores, estos últimos son ‘...situaciones en las cuales no existe un
conflicto armado sin carácter internacional como tal, pero se produce una confrontación dentro de un país, que se caracteriza
por cierta gravedad o duración y que trae aparejados actos de violencia...En esas situaciones que no conducen necesariamente
a la lucha abierta, las autoridades en el poder emplazan fuerzas policiales numerosas, o incluso fuerzas armadas, para
restablecer el orden interno’ . // El derecho internacional humanitario excluye expresamente de su ámbito de aplicación a las
situaciones de disturbios interiores y tensiones internas, por no considerarlas como conflictos armados. Éstas se encuentran
regidas por normas de derecho interno y por las normas pertinentes del derecho internacional de los derechos humanos”.
Comisión Interamericana de Derechos Humanos, caso “La Tablada” – Informe No. 55/97, Caso No. 11.137 - Juan Carlos
Abella vs. Argentina, 18 de noviembre de 1997.
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carácter no internacional.

Puntualizó la Corte que “(…) la determinación de la existencia de un conflicto armado debe


realizarse no en abstracto, sino en atención a las características de cada caso particular 791
y señaló que para efectos de establecer en casos concretos si un determinado conflicto ha
trascendido el umbral de gravedad necesario para ser clasificado como un conflicto armado
interno, la jurisprudencia internacional ha recurrido principalmente a dos criterios: (i) la
intensidad del conflicto, y (ii) el nivel de organización de las partes. 792” Añadió que, “(…) al
apreciar la intensidad de un determinado conflicto, las Cortes internacionales han aplicado,
por ejemplo, factores tales como la seriedad de los ataques y si ha habido un incremento
en las confrontaciones armadas793, la extensión de las hostilidades a lo largo de un
territorio y de un período de tiempo794, el aumento en las fuerzas armadas estatales y en
su movilización, así como la movilidad y distribución de armas de las distintas partes
enfrentadas795. En cuanto a la organización de los grupos enfrentados, las cortes
internacionales la han apreciado de conformidad con criterios tales como la existencia de
cuarteles, zonas designadas de operación, y la capacidad de procurar, transportar y
distribuir armas.796”

Fue clara la Corte en señalar que “(…) para efectos de la aplicación del Derecho
Internacional Humanitario, la existencia de un conflicto armado se determina jurídicamente
con base en factores objetivos, independientemente de la denominación o calificación que
le den los Estados, Gobiernos o grupos armados en él implicados. 797”798

791
Así, el Tribunal Penal Internacional para Ruanda ha explicado que “la definición de un conflicto armado per se se formula
en abstracto; el que una situación pueda o no ser descrita como un “conflicto armado” que satisface los criterios del Artículo
3 Común, ha de decidirse en cada caso concreto”. [Traducción informal: “The definition of an armed conflict per se is
termed in the abstract, and whether or not a situation can be described as an "armed conflict", meeting the criteria of
Common Article 3, is to be decided upon on a case-by-case basis.”] Tribunal Penal Internacional para Ruanda, caso del
Fiscal vs. Rutaganda, sentencia del 6 de diciembre de 1999.
792
El Tribunal Internacional para la Antigua Yugoslavia ha explicado en este sentido: “Bajo este test, al establecer la
existencia de un conflicto armado de carácter interno la Sala debe apreciar dos criterios: (i) la intensidad del conflicto y (ii)
la organización de las partes [ver sentencia del caso Tadic, par. 562]. Estos criterios se utilizan ‘solamente para el
propósito, como mínimo, de distinguir un conflicto armado de actos de delincuencia, insurrecciones desorganizadas y de
corta duración, o actividades terroristas, que no están sujetas al Derecho Internacional Humanitario’ [sentencia del caso
Tadic, par. 562]. (…) En consecuencia, un cierto grado de organización de las partes será suficiente para establecer la
existencia de un conflicto armado. (…) Esta posición es consistente con otros comentarios autorizados sobre el tema. Un
estudio por el CICR sometido como documento de referencia a la Comisión Preparatoria para el establecimiento de los
Elementos de los Crímenes para la CPI notó que: ‘La determinación de si existe un conflicto armado no internacional no
depende del juicio subjetivo de las partes a ese conflicto; debe ser determinado con base en criterios objetivos; el término
‘conflicto armado’ presupone la existencia de hostilidades entre fuerzas armadas organizadas en mayor o menor medida;
debe haber oposición por las fuerzas armadas, y una cierta intensidad de los combates.(…)’”. [Traducción informal: “Under
this test, in establishing the existence of an armed conflict of an internal character the Chamber must assess two criteria: (i)
the intensity of the conflict and (ii) the organisation of the parties.[See Tadic Trial Judgement, para 562. ]These criteria are
used “solely for the purpose, as a minimum, of distinguishing an armed conflict from banditry, unorganized and short-lived
insurrections, or terrorist activities, which are not subject to international humanitarian law.” [Tadic Trial Judgement, para
562.] (…) Therefore, some degree of organisation by the parties will suffice to establish the existence of an armed conflict.
(…)This position is consistent with other persuasive commentaries on the matter. A study by the ICRC submitted as a
reference document to the Preparatory Commission for the establishment of the elements of crimes for the ICC noted that:
The ascertainment whether there is a non-international armed conflict does not depend on the subjective judgment of the
parties to the conflict; it must be determined on the basis of objective criteria; the term ‘armed conflict’ presupposes the
existence of hostilities between armed forces organised to a greater or lesser extent; there must be the opposition of armed
forces and a certain intensity of the fighting.(…)”]. Tribunal Internacional para la Antigua Yugoslavia, caso del Fiscal vs.
Fatmir Limaj y otros, sentencia del 30 de noviembre de 2005.
793
Ver, entre otros, los casos Fiscal v. Dusko Tadic, No. IT-94-1-AR72, decisión de la Sala de Apelaciones sobre su propia
jurisdicción, 2 de octubre de 1995; Fiscal vs. Fatmir Limaj y otros, sentencia del 30 de noviembre de 2005; Fiscal vs. Zejnil
Delalic y otros (caso Celebici), sentencia del 16 de noviembre de 1998.
794
Ver, entre otros, los casos Fiscal v. Dusko Tadic, No. IT-94-1-AR72, decisión de la Sala de Apelaciones sobre su propia
jurisdicción, 2 de octubre de 1995; Fiscal vs. Fatmir Limaj y otros, sentencia del 30 de noviembre de 2005
795
Ver, entre otros, los casos Fiscal vs. Fatmir Limaj y otros, sentencia del 30 de noviembre de 2005; Fiscal vs. Zejnil
Delalic y otros (caso Celebici), sentencia del 16 de noviembre de 1998.
796
Ver, entre otros, el caso Fiscal vs. Fatmir Limaj y otros, sentencia del 30 de noviembre de 2005.
797
“Un estudio por el CICR sometido como documento de referencia a la Comisión Preparatoria para el establecimiento de
los Elementos de los Crímenes para la CPI notó que: ‘La determinación de si existe un conflicto armado no internacional no
depende del juicio subjetivo de las partes a ese conflicto; debe ser determinado con base en criterios objetivos (…)’”.
[Traducción informal: “A study by the ICRC submitted as a reference document to the Preparatory Commission for the
establishment of the elements of crimes for the ICC noted that: The ascertainment whether there is a non-international
armed conflict does not depend on the subjective judgment of the parties to the conflict; it must be determined on the
basis of objective criteria (…)”]. Tribunal Internacional para la Antigua Yugoslavia, caso del Fiscal vs. Fatmir Limaj y otros,
sentencia del 30 de noviembre de 2005.
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795. Por otra parte, en esa sentencia la Corte también se refirió a los criterios
materiales determinantes para establecer si se está ante una conducta que deba
entenderse cobijada por las normas que regulan los conflictos armados, que resultan
particularmente relevantes para el problema que se ha planteado en esta oportunidad.
Puntualizó la Corte que:

“[e]n términos materiales, para que un determinado hecho o situación que ha ocurrido en
un lugar en el que no se han desarrollado los combates armados quede cubierto bajo el
ámbito de aplicación del Derecho Internacional Humanitario, es necesario que tal hecho o
situación guarde una relación cercana y suficiente con el desarrollo del conflicto 799. Así, no
todos los hechos ilícitos que ocurren durante un conflicto armado se someten al derecho
internacional humanitario; “solo aquellos actos suficientemente relacionados con el
desarrollo de las hostilidades están sujetos a la aplicación de este derecho. (…) Es
necesario concluir que el acto, que bien podría ser cometido en ausencia de un conflicto,
fue perpetrado contra la víctima o víctimas afectadas por razón del conflicto en
cuestión”.800 La jurisprudencia internacional ha proporcionado distintos criterios para
determinar la existencia de un nexo cercano entre un determinado hecho o situación y el
conflicto armado internacional o interno en el que ha tenido lugar; así, ha señalado que tal
relación cercana existe “en la medida en que el crimen sea moldeado por o dependiente
del ambiente en el que se ha cometido –v.g. el conflicto armado-”801. Al determinar la
existencia de dicha relación las cortes internacionales han tomado en cuenta factores tales
como la calidad de combatiente del perpetrador, la calidad de no combatiente de la
víctima, el hecho de que la víctima sea miembro del bando opuesto, el hecho de que el
acto pueda ser visto como un medio para lograr los fines últimos de una campaña militar,
o el hecho de que el acto haya sido cometido como parte de los deberes oficiales del
perpetrador, o en el contexto de dichos deberes802. También ha precisado la

798
Sentencia C-291 de 2007
799
El Tribunal Penal para la Antigua Yugoslavia ha considerado que la “relación requerida” se satisface cuandoquiera que
los crímenes denunciados están “relacionados de cerca con las hostilidades” [“closely related to the hostilities”; Caso del
Fiscal v. Dusko Tadic, No. IT-94-1-AR72, decisión de la Sala de Apelaciones sobre su propia jurisdicción, 2 de octubre de
1995], cuando existe un “vínculo obvio” entre ellos [“an obvious link”; caso del Fiscal vs. Zejnil Delalic y otros (caso
Celebici), sentencia del 16 de noviembre de 1998], un “nexo claro” entre los mismos [“a clear nexus”; id.]; o un “nexo
evidente entre los crímenes alegados y el conflicto armado como un todo” [“evident nexus between the alleged crimes and
the armed conflict as a whole”; caso del Fiscal vs. Tihomir Blaskic, sentencia del 3 de marzo del 2000].
800
Traducción informal: “Not all unlawful acts occurring during an armed conflict are subject to international humanitarian
law. Only those acts sufficiently connected with the waging of hostilities are subject to the application of this law. (…) It is
necessary to conclude that the act, which could well be committed in the absence of a conflict, was perpetrated against the
victim(s) concerned because of the conflict at issue.” Tribunal Penal para la Antigua Yugoslavia, caso del Fiscal vs.
Aleksovsky, sentencia del 25 de junio de 1999.
801
Traducción informal: “Such a relation exists as long as the crime is ‘shaped by or dependent upon the environment –
the armed conflict – in which it is committed.’” Tribunal Penal para la Antigua Yugoslavia, caso del Fiscal vs. Blagojevic y
Jokic, sentencia del 17 de enero de 2005. En igual sentido ha explicado este tribunal que “lo que distingue en últimas a un
crimen de guerra de un delito puramente doméstico, es que el crimen de guerra es moldeado por o dependiente del
ambiente en el cual se ha cometido –el conflicto armado-” [Traducción informal: “What ultimately distinguishes a war crime
from a purely domestic offence is that a war crime is shaped by or dependent upon the environment – the armed conflict –
in which it is committed”. Tribunal Penal para la Antigua Yugoslavia, caso del Fiscal vs. Dragoljub Kunarac y otros, sentencia
de la Sala de Apelaciones del 12 de junio de 2002].
802
Traducción informal: “59. In determining whether or not the act in question is sufficiently related to the armed conflict,
the Trial Chamber may take into account, inter alia, the following factors: the fact that the perpetrator is a combatant; the
fact that the victim is a non-combatant; the fact that the victim is a member of the opposing party; the fact that the act
may be said to serve the ultimate goal of a military campaign; and the fact that the crime is committed as part of or in the
context of the perpetrator’s official duties.” Tribunal Penal para la Antigua Yugoslavia, caso del Fiscal vs. Dragoljub Kunarac
y otros, sentencia de la sala de apelaciones del 12 de junio de 2002. En igual sentido afirmó este Tribunal que “al
determinar si dicho nexo existe, la Sala puede tomar en consideración, entre otros, el hecho de que el perpetrador sea un
combatiente, el que la victima sea un no-combatiente, el que la víctima sea miembro de la parte contraria, el que pueda
decirse que el acto haya contribuido a la meta última de la campaña militar, o el que el crimen se haya cometido como
parte o en el contexto de los deberes oficiales del perpetrador” [Traducción informal: “In determining whether such nexus
exists the Chamber may take into account, inter alia, whether the perpetrator is a combatant, whether the victim is a non-
combatant, whether the victim is a member of the opposing party, whether the act may be said to serve the ultimate goal
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jurisprudencia, en casos de comisión de crímenes de guerra, que es suficiente establecer


que “el perpetrador actuó en desarrollo o bajo la apariencia del conflicto armado” 803, y que
“el conflicto no debe necesariamente haber sido la causa de la comisión del crimen, sino
que la existencia del conflicto debe haber jugado, como mínimo, una parte sustancial en la
capacidad del perpetrador para cometerlo, en su decisión de cometerlo, en la manera en
que fue cometido o en el objetivo para el que se cometió” 804.”805

796. En consecuencia, el conflicto armado en Colombia está caracterizado por ser un


fenómeno de violencia prolongado en el tiempo, entre las fuerzas armadas del Estado y
grupos organizados al margen de la ley, o entre estos mismos, que pueden tener como
consecuencia la realización de violaciones a los derechos humanos, infracciones contra el
DIH o “crímenes de guerra”806. Empero, el conflicto armado desarrollado en el país tiene
la particularidad de contener elementos que lo caracterizan como un conflicto armado
irregular, tema que se desarrollará a continuación.

Conflicto armado irregular.

797. Según la doctrina internacional, un conflicto irregular se caracteriza por: (i) la


dificultad en la distinción de las calidades de los agentes armados y los no armados; (ii) la
desproporción en la utilización de los métodos y los medios para desarrollar los ataques;
y, (iii) no limitar los objetivos, produciendo daños de forma indiscriminada807.

798. Combatientes y no combatientes. En cuanto al término de “combatientes”, la


Corte Constitucional ha manifestado que:

“El término “combatientes” en Derecho Internacional Humanitario tiene un sentido


genérico, y un sentido específico. En su sentido genérico, el término “combatientes” hace
referencia a las personas que, por formar parte de las fuerzas armadas y los grupos
of a military campaign, and whether the crime is committed as part of or in the context of the perpetrator’s official duties.”
Tribunal Penal para la Antigua Yugoslavia, caso del Fiscal vs. Fatmir Limaj y otros, sentencia del 30 de noviembre de 2005].
803
Traducción informal: “the perpetrator acted in furtherance of or under the guise of the armed conflict”. Tribunal Penal
para la Antigua Yugoslavia, caso del Fiscal vs. Dragoljub Kunarac y otros, sentencia de la sala de apelaciones del 12 de
junio de 2002.
804
Traducción informal: “the armed conflict need not have been causal to the commission of the crime, but that the
existence of an armed conflict must, at a minimum, have played a substantial part in the perpetrator’s ability to commit it,
his decision to commit it, the manner in which it was committed or the purpose for which it was committed”. Tribunal Penal
para la Antigua Yugoslavia, casos de Fiscal vs. Enver Hadzihasanovic y Amir Kubura, sentencia del 15 de marzo de 2006, y
Fiscal vs. Sefer Halilovic, sentencia del 16 de noviembre de 2005 –ambos reiterando lo decidido en el caso del Fiscal vs.
Dragoljub Kunarac y otros, sentencia de la sala de apelaciones del 12 de junio de 2002-. Ver en igual sentido el
pronunciamiento de este Tribunal en el caso Limaj: “No es necesario que el conflicto armado haya sido la causa de la
commission del crimen que se acusa, pero sí debe haber jugado un rol sustancial en la capacidad del perpetrador para
cometerlo” [Traducción informal: “The armed conflict need not have been causal to the commission of the crime charged,
but it must have played a substantial part in the perpetrator’s ability to commit that crime.” Tribunal Penal para la Antigua
Yugoslavia, caso del Fiscal vs. Fatmir Limaj y otros, sentencia del 30 de noviembre de 2005].
805
Ver: Corte Constitucional, Sentencia C-253A de 2012.
806
Documento contentivo de problemáticas en torno a la aplicación de principios y normas del DIH y DPI en el caso del
conflicto armado colombiano, Clínica de Derecho Internacional Penal y Derecho Internacional Humanitario, Universidad del
Rosario, diciembre de 2011, director Héctor Olásolo Alonso, (material digital e impreso entregado a la Sala como apoyo a la
interpretación de normas en el contexto de l conflicto armado colombiano).
807
VARGAS, Alejo, Las fuerzas armadas en el conflicto colombiano. Antecedentes y perspectivas, Intermedio editores,
Bogotá, 2002, pág., 46.
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armados irregulares, o tomar parte en las hostilidades, no gozan de las protecciones contra
los ataques asignadas a los civiles. En su sentido específico, el término “combatientes” se
utiliza únicamente en el ámbito de los conflictos armados internacionales para hacer
referencia a un status especial, el “status de combatiente”, que implica no solamente el
derecho a tomar parte en las hostilidades y la posibilidad de ser considerado como un
objetivo militar legítimo, sino también la facultad de enfrentar a otros combatientes o
individuos que participan en las hostilidades, y el derecho a recibir trato especial cuando ha
sido puesto fuera de combate por rendición, captura o lesión - en particular el status
conexo o secundario de “prisionero de guerra”. Precisa la Corte que para los efectos del
principio de distinción en su aplicación a los conflictos armados internos, y de las distintas
reglas que lo componen en particular, el Derecho Internacional Humanitario utiliza el
término “combatientes” en su sentido genérico. Está fuera de duda que el término
“combatientes” en sentido específico, y las categorías jurídicas adjuntas como “status de
prisionero de guerra”, no son aplicables a los conflictos armados internos.” 808

799. Entonces, siguiendo la explicación anteriormente referenciada, la Sala en


determinados momentos utilizará el término “combatiente” de manera genérica, sin
desconocer que esta categoría es propia de los conflictos armados de carácter
internacional. Es decir, para facilitar la lectura e interpretación del texto, se usará en
algunas oportunidades el término “combatiente” o “agentes armados” para referirse a
miembros de las fuerzas armadas del Estado colombiano, e igualmente para identificar a
miembros de los Grupos Organizados al Margen de la Ley que participan en el conflicto
armado colombiano, verbigracia miembros de las llamadas “guerrillas de izquierda”, de los
“grupos de autodefensa o paramilitares” o “de las llamadas Bandas Criminales
Emergentes o Bacrim”809.

800. En Colombia ha sido recurrente que los grupos armados organizados al margen de
la ley no respeten el principio de distinción y utilicen como escudo o se camuflen dentro
de la población civil; esto lo hacen para obtener ventajas estratégicas de agrupación,
dispersión, reagrupación, inteligencia militar y consecución de recursos. Los agentes
armados se “integran” a la población civil por medio del uso de la fuerza o utilizando
prácticas de “complicidad” y “sentimientos de simpatía”, haciendo que la población civil
sea blanco de ataques de alguna de las otras partes del conflicto. En un conflicto irregular
la población civil termina siendo victimizada, no diferenciada de los combatientes y
visibilizada como sospechosa o enemiga810.

801. Que se trate de un conflicto armado interno con características de irregular no


significa que no deban aplicarse las normas del DIH, por el contrario, se hace necesario
recordar que resulta prioritaria su aplicación, al respecto, la Corte Constitucional ha

808
Ver: Corte Constitucional, Sentencia C-291 de 2007.
809
Ver: Corte Constitucional, Sentencia C-253A de 2012.
810
Persona civil, en el marco de los conflictos armados internos, es toda persona que no es miembro de las fuerzas
armadas estatales o de los grupos organizados de una parte en conflicto, por tanto tienen protección contra ataques
directos. En: http://www.icrc.org/spa/assets/files/other/icrc_003_0990.pdf, consultada el 23 de septiembre de 2012.
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manifestado que: “El derecho humanitario en manera alguna legitima la guerra. Lo que
busca es garantizar que las partes en contienda adopten las medidas para proteger a la
persona humana. Las normas humanitarias, lejos de legitimar la guerra, aparecen como
una proyección de la búsqueda de la paz, que es en el constitucionalismo colombiano un
derecho y un deber de obligatorio cumplimiento, lo cual confiere nuevas bases
constitucionales al Protocolo II. Esto obviamente no significa, como bien lo destaca el
Ministerio Público, que las normas humanitarias sólo se puedan y deban aplicar en
escenarios de una eventual negociación, pues ellas son obligatorias per se para las partes
en un conflicto armado. Además, la aplicación del derecho internacional humanitario no
menoscaba la responsabilidad del gobierno de mantener o restablecer el orden público,
como lo precisa el artículo 3º del Protocolo II.”811

802. Población civil. En el marco del derecho internacional humanitario (DIH), para
que una persona sea considerada parte de la población civil debe reunir las siguientes
características: (i) no pertenecer a ninguno de los grupos armados en conflicto, sin
importar que en el pasado haya estado vinculado al mismo; y, (ii) no participar directa o
indirectamente, bajo ninguna circunstancia en las hostilidades del conflicto. Al respecto la
Corte Constitucional ha manifestado que:

“28- Uno de las reglas esenciales del derecho internacional humanitario es el principio de
distinción, según el cual las partes en conflicto deben diferenciar entre combatientes y no
combatientes, puesto que estos últimos no pueden ser nunca un objetivo de la acción
bélica. Y esto tiene una razón elemental de ser: si la guerra busca debilitar militarmente al
enemigo, no tiene por qué afectar a quienes no combaten, ya sea porque nunca han
empuñado las armas (población civil), ya sea porque han dejado de combatir (enemigos
desarmados), puesto que ellos no constituyen potencial militar. Por ello, el derecho de los
conflictos armados considera que los ataques militares contra esas poblaciones son
ilegítimos, tal y como lo señala el artículo 48 del protocolo I, aplicable en este aspecto a los
conflictos internos, cuando establece que las partes "en conflicto harán distinción en todo
momento entre población civil y combatientes, y entre bienes de carácter civil y objetivos
militares y, en consecuencia, dirigirán sus operaciones únicamente contra objetivos
militares".

El artículo 4º del tratado bajo revisión recoge esa regla, esencial para la efectiva
humanización de cualquier conflicto armado, puesto que establece que los no combatientes,
estén o no privados de libertad, tienen derecho a ser tratados con humanidad y a que se
respeten su persona, su honor, sus convicciones y sus prácticas religiosas.

29- Este artículo 4º también adelanta criterios objetivos para la aplicación del principio de
distinción, ya que las partes en conflicto no pueden definir a su arbitrio quien es o no es
combatiente, y por ende quien puede ser o no objetivo militar legítimo. En efecto,
conforme a este artículo 4º, el cual debe ser interpretado en armonía con los artículos 50
y 43 del protocolo I, los combatientes son quienes participan directamente en la hosti-
lidades, por ser miembros operativos de las fuerzas armadas o de un organismo armado
incorporado a estas fuerzas armadas. Por ello este artículo 4º protege, como no
combatientes, a "todas las personas que no participen directamente en las hostilidades, o
811
Ver: Corte Constitucional, Sentencia C-225 de 1995.
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que hayan dejado de participar en ellas". Además, como lo señala el artículo 50 del
Protocolo I, en caso de duda acerca de la condición de una persona, se la considerará
como civil. Ella no podrá ser entonces objetivo militar. Es más, el propio artículo 50 agrega
que "la presencia entre la población civil de personas cuya condición no responda a la
definición de persona civil no priva a esa población de su calidad de civil". En efecto, tal y
como lo señala el numeral 3º del artículo 13 del tratado bajo revisión, las personas civiles
sólo pierden esta calidad, y pueden ser entonces objetivo militar, únicamente "si participan
directamente en las hostilidades y mientras dure tal participación."

(…)

32- La protección humanitaria se extiende, sin discriminación alguna, a los heridos,


enfermos y náufragos, hayan o no tomado parte en las hostilidades. Para tal efecto, el
Protocolo II ordena que se tomen todas las medidas posibles para buscar y recoger a los
heridos, enfermos y náufragos a fin de protegerlos y asegurarles la asistencia necesaria
(art. 8º). Deberán entonces ser tratados humanamente y recibir, en toda la medida de lo
posible y en el plazo más breve, los cuidados médicos que exija su situación (art. 7º).

Estas normas de asistencia humanitaria a los heridos, enfermos y náufragos implican


obviamente la concesión de garantías e inmunidades a las personas encargadas de llevar a
cabo tales tareas, razón por la cual el Protocolo II protege al personal sanitario y religioso
(art. 9º), así como a la actividad médica (art. 10) y a las unidades y medios de transporte
sanitario (arts 11 y 12), los cuales deberán ser respetados en todo momento por las partes
enfrentadas.

33- La Corte Constitucional considera que las anteriores normas destinadas a proteger a la
población civil, a los combatientes desarmados, así como a los heridos, enfermos y
náufragos, armonizan plenamente con la Constitución, y en particular con la protección de
la vida, la dignidad y la libertad de las personas (CP arts 1º, 2º y 11º), valores que
aparecen como uno de los fundamentos esenciales del Estado colombiano. Ya esta
Corporación había establecido que "independientemente de la situación jurídica de
normalidad o anormalidad política, la sociedad civil víctima de la confrontación armada debe
ser protegida por parte del Estado."[30].

803. Por tanto, quienes no participan en las hostilidades o el conflicto armado hacen
parte de la población civil y deben ser protegidos sus derechos. Bajo ninguna
circunstancia pueden desconocerse los principios de protección y garantía del Estado
hacia los ciudadanos que no hacen parte de los grupos organizados al margen de la ley,
quienes en últimas resultan afectados por las acciones y los hechos delictivos
desencadenados en el marco del conflicto.

804. Métodos y medios en el conflicto irregular. Los agentes armados en una


conflicto interno irregular pueden encontrarse en situaciones de combate directo, sin
embargo, generalmente lo evitan; prefieren diseñar estrategias que les permitan ataques
sorpresivos tales como las emboscadas, los asaltos o los actos con fines terroristas, los
homicidios selectivos (homicidios en persona protegida) o las masacres. En la
presentación de los hechos victimizantes realizada por la Fiscalía y según las versiones de
los mismos postulados, la Sala ha podido confirmar que tales prácticas bélicas irregulares

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fueron implementadas por el Bloque Bananero en la región de Urabá812 y


desafortunadamente su accionar ilícito tuvo como fin a personas de la sociedad civil que
no tenían relación con el accionar del conflicto armado.

805. Generalmente en los conflictos irregulares los agentes armados actúan sobre
territorios difusos, definen demarcaciones invisibles sobre la geografía de una región y
ejercen un control parcial o total sobre éste, que comúnmente es de tipo intermitente o
no permanente. Los combatientes o agentes armados construyen nichos locales y
regionales en los que insertan sus maniobras de cooptación de la población civil, cuando
no optan por desplazar a la población original y repoblar el territorio con “su gente” para
construir apoyo de base. De otra parte, la confrontación entre los agentes armados no es
constante y sostenida, sino que la ejercen a través de actos de guerra puntuales,
seguidos por periodos de normalidad o baja tensión bélica.

806. En los conflictos irregulares los medios o métodos de violencia son especialmente
crueles e indiscriminados, generalmente debido a las vinculaciones emocionales y los
intereses diversos que son propios a la actividad armada. Es recurrente en un conflicto
irregular encontrar motivaciones como la venganza, la disuasión, la ejemplarización y la
crueldad como medios para generar actos de terrorismo y, por tanto, “obediencia” de la
población civil813. La Sala encontró que un número importante de los hechos punibles que
son materia de la presente sentencia, están relacionados con el exterminio y ataque a los
miembros de los sindicatos y de la Unión Patriótica, que puede ser entendida como una
forma de “control social”, así como en otros casos se ha encontrado que los paramilitares
realizaban la mal llamada “limpieza social”, cuando ejecutaban homicidios en personas
que presuntamente eran consumidores o expendedores de sustancias psicoactivas o de
presuntos delincuentes.

807. Los “objetivos militares” en un conflicto irregular. Otra dificultad que se


encara a la hora de analizar conflictos armados de tipo irregular es la definición de los
llamados objetivos militares. Los objetivos militares, para ser determinados como tal
deben contribuir eficazmente a la acción militar; tanto por su naturaleza, ubicación, y por
su uso actual o futuro. El artículo 52(1) y (3) del Protocolo Adicional I establece que los
bienes de carácter civil, que no son objetivos militares de acuerdo con el artículo 52 (2)
del mismo Protocolo, no serán objeto de ataques y represalias, y que se presumirá su

812
Cfr. González, Fernán y otros. Violencia política en Colombia. De la nación fragmentada a la construcción del Estado.
CINEP. Mayo, 2002.
813
Cfr. VARGAS, Alejo, Las fuerzas armadas en el conflicto colombiano. Antecedentes y perspectivas, Intermedio editores,
Bogotá, 002.
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condición civil en caso de duda cuando se considere que contribuyen eficazmente a la


acción militar. El artículo 8(2)(b) del Estatuto de Roma tipifica el crimen de dirigir
intencionalmente ataques contra bienes civiles, es decir, bienes que no son objetivos
militares814.

808. Como se vio, el artículo 52 del Protocolo I adicional a los Convenios de Ginebra
crea la presunción de que bienes generalmente utilizados con fines civiles, tales como
lugares de culto, viviendas o escuelas, no son empleados para contribuir efectivamente a
la acción militar. Esta presunción sólo puede predicarse de bienes que normalmente no
tienen uso o propósito militar. Dichos bienes satisfacen necesidades de la población civil y
también contribuyen efectivamente a las acciones militares del adversario.

809. La definición del concepto "objetivo militar" en el Protocolo I se aplica


deductivamente al uso de dicho concepto en el Protocolo II. El artículo 52(2) del Protocolo
I define objetivos militares únicamente en referencia a bienes o blancos, y no en
referencia a personal. Para que se constituya un objetivo militar legítimo, el bien o blanco
seleccionado, por su naturaleza, localización, propósito o uso, debe contribuir
efectivamente a la capacidad o actividad militar del enemigo, y su destrucción total o
parcial o su neutralización debe ofrecer una ventaja militar definida bajo las circunstancias
imperantes en ese momento815.

810. Un bien generalmente utilizado con propósitos civiles como una vivienda, un
autobús, una flota de taxis o las instalaciones de un aeropuerto o ferrocarril civiles,
pueden convertirse en objetivos militares si su localización o uso cae bajo los dos grupos
de criterios del artículo 52. Por ejemplo, una parte al defenderse puede organizar a toda
una ciudad o pueblo como parte de su posición de defensa, convirtiéndola así en una
"localidad defendida". La ciudad o pueblo constituye entonces un objetivo legítimo. Sin
embargo, las personas civiles que permanezcan en la localidad retienen los beneficios que
les otorga la regla de proporcionalidad tal como se aplica a víctimas civiles colaterales816.

811. Para que un ataque sea permisible, el objetivo militar no solamente tiene que
contribuir a la acción militar del enemigo, sino que su destrucción, neutralización o

814
Cfr. Olásolo Alonso, Héctor, Ataques contra personas o bienes civiles y ataques desproporcionados, Cruz Roja Española,
Valencia, 2007.
815
Ibídem.
816
Ver: Protocolo I, artículo 52(2); Comentario del CICR, pág 635 (los dos elementos de definición deben estar presentes
simultáneamente para que exista objetivo militar), en: Tercer informe sobre la situación de Derechos Humanos en
Colombia, Comisión IDH, febrero de 1999, en: http://www.cidh.oas.org/countryrep/colom99sp/capitulo-4a.htm, consultada
el 3 de octubre de 2013.
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captura debe ofrecer una "ventaja militar definida" a la parte atacante en las
"circunstancias del caso". El concepto de "una ventaja militar definida en las
circunstancias del caso" significa que "no es legítimo lanzar un ataque que sólo ofrece
ventajas potenciales o indeterminadas". La "ventaja militar definida" requerida por la
definición debe estar presente "en las circunstancias del caso". Este elemento en la
definición efectivamente impide a los comandantes militares basarse exclusivamente en
categorizaciones abstractas al determinar si objetos específicos constituyen objetivos
militares ("un puente es un objetivo militar; un bien localizado en la zona de combate es
un objetivo militar," etc.). En su lugar, ellos tendrán que determinar si, por ejemplo, la
destrucción de un determinado puente, que habría sido militarmente relevante ayer,
todavía ofrece, en las circunstancias de hoy, una "ventaja militar definida": si no es así, el
puente deja de ser un objetivo militar, y, en consecuencia, no puede ser destruido817.

Protección de personas y bienes civiles contra ataques indiscriminados en


hostilidades internas

812. La Sala reitera que en materia de protección de personas civiles, el Tribunal de


Yugoslavia en la decisión de su Sala de Apelaciones en el Caso Tadic señaló que el núcleo
esencial de los principios y preceptos básicos que regulan los medios y métodos de guerra
en hostilidades internacionales se han hecho aplicables a conflictos armados internos en
virtud de la práctica de los Estados. La Corte específicamente consideró que estas reglas
incluyen materias tales como la protección de personas civiles en las hostilidades, en
particular al ataque indiscriminado, protección de bienes civiles, en especial propiedad
cultural, protección a todos aquellos que no son o ya no son parte de las hostilidades, así
como prohibiciones sobre medios de guerra proscritos en conflictos armados
internacionales y prohibición de ciertos métodos de conducción de las hostilidades. En
relación a este último punto, el Tribunal en el caso Tadic señaló que:

“En efecto, es absurdo que, bajo consideraciones elementales de humanidad y de sentido


común, el uso por parte de Estados de armas prohibidas en conflictos armados entre ellos
sea permitido cuando los Estados buscan sofocar una rebelión de sus propios nacionales
en su territorio. Lo que es inhumano y por lo tanto proscrito en guerras internacionales no
puede ser nada diferente a inhumano e inadmisible en guerras civiles”. 818

813. Como se puede observar, la aplicación del ciertas disposiciones del Protocolo I
pueden ser extendidas para proteger personas civiles y bienes civiles de ataques

817
Ibídem.
818
Caso del Fiscal v. Dusko Tadic, No. IT-94-1-AR72, decisión de la Sala de Apelaciones sobre su propia jurisdicción, 2 de
octubre de 1995].
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indiscriminados o desproporcionados, en casos de conflictos armados de orden


interno, es decir que son fuentes autorizadas para interpretar el alcance de protecciones
similares para personas y bienes en todo conflicto armado interno. Por ejemplo, el artículo
51(4) del Protocolo I expresamente protege a la población civil de ataques
indiscriminados o desproporcionados. Este artículo prohíbe ataques que no estén dirigidos
contra objetivos militares o que empleen métodos o medios de combate que la parte no
puede dirigir exclusivamente contra un objetivo militar. En consecuencia, el artículo
prohíbe a las partes atacar objetivos militares y a personas o bienes civiles sin distinción.

814. La regla de proporcionalidad. Ahora bien, la legitimidad de un blanco militar no


proporciona una licencia ilimitada para atacarlo. La regla de proporcionalidad prohíbe
"[u]n ataque que puede esperarse que produzca incidentalmente la muerte de civiles,
lesiones a civiles, daño a bienes civiles o una combinación de ellas, que sería excesiva en
relación a la ventaja militar concreta y directa prevista".819

815. Actos y prácticas prohibidos en hostilidades internas. En ese orden de


ideas existen actos y prácticas prohibidas durante el desarrollo de un conflicto armado
interno. Al respecto la Comisión IDH ha manifestado que: “Aunque puede no ser un
listado exhaustivo, los siguientes tipos de ataques, prácticas, órdenes o acciones están
prohibidos en la conducción de dichas hostilidades: (i) ataques directos contra la
población civil como tal, o contra personas civiles individuales; (ii) ataques indiscriminados
que afecten a la población civil o a bienes civiles a sabiendas de que dichos ataques
causarán pérdida de vidas, lesiones a personas civiles o daños a bienes civiles que sean
excesivos; (iii) ataques contra una persona a sabiendas de que está fuera de combate;
(iv) violencia contra la vida, salud y bienestar físico y mental de las personas, en especial,
homicidio, asesinato o desaparición forzada; (v) tortura, incluida la violación sexual, y
otros tratos crueles y degradantes, ultraje a la dignidad personal, incluyendo el trato
humillante y degradante, tal como la prostitución forzada y otros actos de violencia sexual
de gravedad similar; (vi) la toma de rehenes; (vi) la ejecución de personas civiles o
combatientes sin un juicio previo y apropiado ante tribunales independientes e imparciales
que ofrezcan todas las garantías del debido proceso generalmente aceptadas; (vii)
castigos colectivos; (viii) pillaje; (ix) actos de perfidia, tales como el asesinato o lesión de
personas civiles o combatientes a traición; o el uso pérfido del emblema distintivo de la
Cruz Roja o de la Media Luna Roja o de otros signos y señales de protección reconocidos
por el derecho internacional humanitario; (x) órdenes para que no haya sobrevivientes;

819
Ibídem.
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(xi) hacer padecer hambre a los civiles como método de combate, específicamente
ataques cuyo propósito sea destruir, remover, inutilizar objetos indispensables para la
supervivencia de la población civil, tales como víveres, sembradíos, ganado e instalaciones
de agua potable; (xii) el reclutamiento de niños menores de 15 años en el conflicto
armado, o permitir que ellos participen en las hostilidades; (xiii) el uso de personas civiles
y/o de bienes civiles para escudar objetivos militares de ataques; (xiv) ordenar el
desplazamiento de la población civil, a menos que la seguridad de los civiles o razones
militares imperativas así lo requieran; (xv) ataques contra monumentos históricos, obras
de arte o lugares de culto que constituyan el legado cultural o espiritual de las gentes;
(xvi) ataques contra edificios, materiales, unidades y transportes médicos y personal con
derecho a portar el emblema distintivo de la Cruz Roja o de la Media Luna Roja; (xvii)
emplear armas, proyectiles o materiales diseñados para causar sufrimiento innecesario;
(xviii) ataques y amenazas de ataques, que sean lanzados o anunciados con la intención
de aterrorizar a la población civil. En la medida en que los ataques son lanzados o
anunciados única o principalmente con fines políticos, son ilegales y violan los principios
de inmunidad civil, humanidad y proporcionalidad; (xix) el uso de cualquier mina
detonada a control remoto que no esté debidamente marcada o que no tenga un
mecanismo de destrucción o neutralización automático o a control remoto una vez se ha
cumplido el propósito militar de la mina; (xx) el uso de minas de mano, tales como las del
tipo Claymore, y trampas caza-bobos en, o cerca de, zonas civiles en las que hayan
objetivos militares, si dichos artefactos son empleados sin precauciones, marcas, u otras
alertas o no se autodestruyan o no sean retirados una vez han cumplido su propósito
militar.”820

816. Desafortunadamente en el conflicto irregular colombiano, tal como lo ha


presentado la Fiscalía 17 de Justicia y Paz y lo ha podido confirmar la Sala, los
paramilitares han incorporado indebidamente en sus hostilidades o ataques a “objetivos”
no militares. En otras palabras, el Bloque Bananero no se limitó a atacar bases,
guarniciones, tropas y edificaciones enemigas, sino que vulneraron bienes y personas
protegidas. En el conflicto colombiano, resultó frecuente que los paramilitares obtuvieran
recursos de economías ilegales como el narcotráfico o el robo de gasolina, controlaran las
rutas de suministro de todo tipo de provisiones para mantener los ejércitos y se insertaran
en actividades económicas legales para financiar sus actividades como por ejemplo la
administración de dineros provenientes de comerciantes a través de las convivir; así

820
Tercer informe sobre la situación de Derechos Humanos en Colombia, Comisión IDH, febrero de 1999, en:
http://www.cidh.oas.org/countryrep/colom99sp/capitulo-4a.htm, consultada el 3 de octubre de 2013.

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mismo, cooptaron políticos y autoridades locales y regionales a través de los cuales


canalizaron recursos para financiar la guerra821.

817. Como se ha mencionado, en Colombia el conflicto armado interno posee las


características de conflicto irregular, cuyas consecuencias institucionales, sociales,
políticas y humanitarias son gravísimas; especialmente en la zona de Urabá, región en la
que tuvo presencia y operó el Bloque Bananero. La crisis humanitaria resultante del
accionar de este Bloque en Urabá se caracterizó por un conjunto amplio de conductas
delictivas que son violatorias del derecho internacional de los derechos humanos y del
DIH, que finalmente desconocen los principios y valores del Estado Social de Derecho
colombiano.

818. En el momento de realizar el análisis jurídico penal singular de las conductas


imputadas al postulado HÉBERT VELOZA, la Sala procederá a revisar la normativa
nacional e internacional resultante de la aplicación de la figura del bloque de
constitucionalidad en Colombia822, en materia de violaciones a los derechos humanos e
infracciones al DIH.

E. Análisis de los cargos

819. Antes de entrar a considerar de forma concreta cada uno de los hechos, la Sala
estudiará diversas figuras de responsabilidad penal, las cuales resultaron aplicables al
caso concreto de HÉBERT VELOZA.

821
El Derecho Internacional Humanitario y los retos de los conflictos armados contemporáneos, Informe preparado por el
Comité Internacional de la Cruz Roja, Ginebra, diciembre de 2003, en:
http://cde.usal.es/arc/doc_curso_derechos_hum/DHI_conflic_arm_contemp.pdf, consultada el 3 de agosto de 2012.
822
“Para que el bloque de constitucionalidad tenga realmente eficacia normativa, es necesario que el juez penal, ya sea que
se desempeñe como juez de garantías, ya sea que presida el juicio oral, tenga en cuenta las normas que integran dicho
bloque de constitucionalidad para determinar el alcance de las garantías en el proceso penal, para que de esa manera
pueda proteger adecuadamente los derechos fundamentales en el proceso penal, que es una de sus funciones esenciales.
Ahora bien, para realizar adecuadamente esa labor, el funcionario judicial debe tener en cuenta al menos los siguientes
aspectos: (i) debe tener claro cuáles son las normas constitucionales y de derechos humanos convencionales más
importantes en relación con el proceso penal; (ii) debe tener claro cómo optar entre disposiciones que puedan tener
tensiones o contradicciones en este aspecto; (iii) debe saber usar la doctrina y la jurisprudencia internacionales de derechos
humanos en este campo; y (iv) debe además tener claro el valor que pueden tener ciertos documentos internacionales de
derechos humanos, que no son tratados ni jurisprudencia, pero pueden ser relevantes, (…)”. UPRIMY, Rodrigo, Bloque de
constitucionalidad, derechos humanos y nuevo procedimiento penal, en:
http://www.dejusticia.org/index.php?modo=interna&tema=&publicacion=73, consultada el 3 de agosto de 2012.
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De la responsabilidad del postulado823.

820. Según la presentación de la Fiscalía, los hechos delictivos cometidos por HÉBERT
VELOZA GARCÍA son graves violaciones a los derechos humanos e infracciones al DIH.
Perpetrados no sólo de manera individual, sino obedeciendo a la lógica de una
organización armada ilegal, el cual tuvo una estructura jerárquica, respondía a una
división de funciones, a políticas y a órdenes superiores. Por tanto, se está en presencia
de crímenes cometidos por estructuras criminales, aparatos organizados de poder o
criminalidad organizada.

821. En la presentación de la Fiscalía se comprobó, que la estructura armada al mando


de HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias “HH”, el Bloque Bananero, y sus mandos medios o
patrulleros, no actuaban de forma independiente y según sus derroteros individuales, sino
que respondían a unas políticas y órdenes que devenían de sus superiores jerárquicos.
Esto no quiere decir que todos los hechos delictivos cometidos por hombres del Bloque
Bananero respondieran a esa lógica colectiva de la estructura armada, y por ello en cada
caso, la Sala en la decisión de control de legalidad y de acuerdo con el material probatorio
presentado por el Ente Investigador, indicó el grado de responsabilidad del postulado en
cada uno de los delitos formulados en su contra y que ahora serán objeto de sentencia.

822. De lo expuesto por la Fiscal 17 Delegada, a lo largo de este proceso, la Sala


considera que el Bloque Bananero es una manifestación de criminalidad organizada que
se caracteriza por: (i) la existencia de una estructura jerarquizada, y (ii) una forma de
acción colectiva o aparato de poder. Lo anterior está fundamentado en que a lo largo del
proceso de Justicia y Paz la Fiscalía ha demostrado que en el referido Bloque, se pueden
identificar claramente las siguientes características: “un número plural de personas, de
carácter piramidal y de estructura jerárquica, dentro de la cual los órganos que toman las
decisiones no son los mismos que las ejecutan; es más, los agentes encargados de
realizar el delito –que suelen ser plurales y sólo conocen parcialmente el plan- no
participan de modo alguno en la estructuración del plan delictivo”824. Por tanto, no se
está en presencia de un grupo organizado de delincuencia común o una “banda de

823
Este apartado recoge algunas de las ideas y conceptos expuestos por el investigador Camilo Ernesto Bernal Sarmiento,
en el documento: Problemas en la imputación de la responsabilidad a los comandantes de grupos armados ilegales en
Justicia y Paz (versión preliminar). Camilo Bernal es Abogado de la Universidad Nacional de Colombia, Máster Europeo
―Sistema Penal y Problemas Sociales, Máster oficial en ―Criminología y Sociología Jurídico-Penal y doctorando en
criminología de la Universidad de Barcelona, España.
824
PROYECTO PROFIS (s/f): La concurrencia de personas en el delito y los aparatos organizados de poder. A propósito de
los crímenes realizados por las estructuras criminales de los paramilitares colombianos. Bogotá: PROYECTO PROFIS, GTZ.
Disponible en: http://www.profis.com.co/modulos/contenido/default.asp?idmodulo=161, consultada el 12 de agosto de
2012.
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delincuentes” que simplemente actúa de forma esporádica con el único y exclusivo


objetivo de lucrarse económicamente con su accionar delictivo825.

823. De acuerdo a las presentaciones realizadas por la Fiscalía, se ha podido comprobar


que en términos generales la estructura jerárquica de los grupos paramilitares (bloques,
frentes urbanos y rurales, columnas y comandos) está compuesta por varios niveles de
mando: (i) los “hombres de atrás”, que orientaban y dirigían la actuación política y militar
de los bloques, frentes, columnas y comandos, aquí se ubican los comandantes generales
(Vicente Castaño, entre otros, en el caso del Bloque Bananero), algunos de los miembros
representantes que hicieron parte de la mesa de negociación de Santa fe de Ralito, y
algunos civiles y servidores públicos (parapolíticos, militares o policías); (ii) los
comandantes, que establecieron los planes de actuación de las estructuras armadas y
emitieron las órdenes relacionadas con la ejecución de los delitos, encontrándose bajo
esta categoría los comandantes político, militar y de finanzas del Bloque Bananero, es
decir HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias “HH”; (iii) los mandos medios que ejecutaron los
planes y dieron las órdenes a sus subordinados para desarrollarlos, representados en los
comandantes de columnas y de escuadras826, y (iv) los subordinados, es decir, los
patrulleros o soldados rasos, que ejecutaron materialmente las órdenes impartidas y
realizaron de forma directa la mayoría de los injustos penales827.

824. Al confirmar la existencia de este tipo de organizaciones criminales, la Fiscalía


también ha podido establecer y presentar los hechos delictivos cometidos por ellos, que
en muchos de los casos han sido caracterizados como crímenes de sistema, los cuales se

825
Para la Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, los elementos de aparatos organizados de poder que se
cumplen en las AUC o paramilitares son los siguientes: “1). Existencia de una organización integrada por una pluralidad de
personas sustituibles antes o durante el evento criminal las cuales mantienen una relación jerárquica con sus superiores.
Aquellas personas pueden o no tener cierta predisposición a la comisión de delitos; 2). Control (dominio) de la organización
por parte del hombre de atrás y a través de ella de sus integrantes sustituibles. Dicho control puede manifestarse bajo
distintas modalidades: a través de la creación de la organización, el no control del mismo pudiendo hacerlo dada su posición
o a través del impulso sostenido de la misma con medidas dirigidas a autorizar sus actuaciones ilícitas. En todos estos
supuestos se evidencia, por parte del hombre de atrás, un dominio del riesgo (que es el aparato de poder) de producción
de actos ilícitos; y, 3). Conocimiento de la organización o aparato de poder y decisión de que sus miembros ejecuten o
continúen ejecutando hechos ilícitos penales.
Producto de este ejercicio, la Corte concluyó que el político mencionado, que había obrado a favor de los grupos
paramilitares haciendo uso de sus funciones debía “responder penalmente por el conjunto de crímenes que se le atribuyen
a los comandantes o jefes de los bloques, frentes o unidades que hacían parte de la asociación criminal”. Si bien el alto
tribunal no sugirió ninguna forma específica de imputación de la responsabilidad, si abrió la posibilidad -a la luz de los casos
argentinos, chileno y peruano y de la incipiente jurisprudencia de la CPI, para que pudiera utilizarse la “autoría mediata con
instrumento fungible pero responsable”. Sentencia del 3 de diciembre de 2009., radicado 32672.
826
La Sala de Conocimiento de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bogotá ha establecido que ―antes de 1997
difícilmente se va a marcar la estructura del bloque en frentes, columnas y comandos. (…) a partir de 1997 se produce la
progresiva estructuración del bloque en frentes rurales, frentes urbanos, columnas y comandos. Estas estructuras incluirían
en algunos casos la existencia de ―otras formas de organización tales como celdas, redes, parches, combos, etc. Al
respecto véase el Protocolo de presentación de prueba en la audiencia de control de legalidad. Bogotá. Pág. 6, nota al pie
21 y pág. 7.
827
PROYECTO PROFIS (s/f): La concurrencia de personas en el delito y los aparatos organizados de poder. A propósito de
los crímenes realizados por las estructuras criminales de los paramilitares colombianos. Bogotá: PROYECTO PROFIS, GTZ.
Disponible en: http://www.profis.com.co/modulos/contenido/default.asp?idmodulo=161, consultada el 12 de agosto de
2012.
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identifican por: (i) una división de labores entre los planificadores y los ejecutores,
además de arreglos en cuanto a la estructura y la implementación, lo que hace difícil
establecer las articulaciones entre los dos niveles; (ii) son perpetrados generalmente por
grupos en los que intervienen personas que eran o son políticamente poderosas (Vicente
Castaño, en el caso el Bloque Bananero y las ACCU); (iii) generalmente afectan a un gran
número de víctimas, y estos asuntos de escala y contexto hacen que las investigaciones
sean más difíciles en términos logísticos y de reconstrucción y formulación (fáctica y
jurídica)828.

825. La anterior descripción facilita el esclarecimiento de los crímenes cometidos por el


Bloque Bananero, esto es evidente si se tiene en cuenta la experiencia de Tribunales
Internacionales como el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia y la Corte
Especial para Sierra Leona, que han mostrado la conveniencia de esta estrategia:
“focalizarse en aquellos que tienen el más alto grado de responsabilidad también encaja
con el objetivo central de los procesos y responde a la naturaleza de los crímenes de
sistema. Los autores intentan justificar con frecuencia sus crímenes en términos
ideológicos; de este modo, condenar su conducta y persuadirles de su naturaleza
inaceptable será más eficaz si los esfuerzos se dirigen a los responsables de la
formulación de las políticas y las estrategias que dieron lugar a los crímenes”829.

826. En desarrollo de las audiencias ante esta Sala, se ha podido comprobar que a
pesar de la capacidad de mando y control que tenía y ejercía HÉBERT VELOZA GARCÍA,
alias “HH”, no contaba con toda la información acerca de las circunstancias materiales en
las cuales ocurrieron los hechos que se le imputaban, sin embargo, pudo identificar con
claridad las estructuras internas que eran responsables de tales hechos.

827. Lo anterior significa que para delimitar el grado de responsabilidad de HÉBERT


VELOZA GARCÍA, alias “HH” y su imputación como responsable, resulta necesario que se
demuestre: (i) la existencia de una estructura jerárquica; (ii) que la estructura fue
instrumental para la realización del delito en relación con sus políticas u órdenes; y (iii)

828
OFICINA DEL ALTO COMISIONADO DE LAS NACIONES UNIDAS PARA LOS DERECHOS HUMANOS OACNUDH (2008):
Iniciativas de persecución penal. En: Reed Hurtado, Michael (Editor) Judicialización de crímenes de sistema. Estudios de
caso y análisis comparado. Bogotá: Centro Internacional para la Justicia Transicional (ICTJ), Fondo global para la Paz y la
Seguridad del Ministerio de Relaciones Exteriores y Comercio Internacional de Canadá. Pág. 32. (Traducción no oficial del
documento original: Office of the United Nations High Commissioner for Human Rights, Rule-of-Law Tools for Post-Conflict
States, Prosecution Initiatives, HR/PUB/06/4).
829
Oficina en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (2004): Informe de la Alta
Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos sobre la situación de los derechos humanos en Colombia.
E/CN.4/2005/10, 28 de febrero de 2005; y los Informes Trimestrales del Secretario General de la OEA que ha presentado
desde 2004 al Consejo Permanente sobre la Misión de Apoyo al Proceso de Paz en Colombia (MAPP/OEA), disponibles en:
http://www.mapp-oea.net/index.php?option=com_content&view=article&id=51&Itemid=82, consultada el 12 de agosto de
2012.
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que el líder en cuestión tenía un control efectivo o una influencia sobre la estructura en el
período de tiempo y el área territorial en la que ocurrieron los hechos830.

828. Aplicando la técnica jurídica anteriormente descrita, la Sala está en capacidad de


afirmar que los comandantes pueden ser procesados como los máximos responsables,
con independencia de su situación jerárquica, si se demuestra que efectivamente llevaron
a un segmento importante de los autores directos o indirectos a la realización del hecho
punible. En ausencia de estos requisitos, suponer la responsabilidad de los líderes
principales de las estructuras puede convertirse en un impedimento para identificar a los
individuos que en verdad tuvieron el máximo nivel de responsabilidad en los hechos831.

829. Ahora bien, el acto de imputación es el proceso fáctico y jurídico de atribuir


responsabilidad penal a un acusado por sus acciones u omisiones punibles. En el caso que
nos ocupa se trata de imputar la responsabilidad penal individual que se deriva de la
actuación criminal colectiva del Bloque Bananero. Es por ello, que en el marco de Justicia
y Paz se deberá determinar, en cada caso concreto, si el desmovilizado responde a título
de autor o participe en relación con la conducta punible que se investiga, siguiendo las
reglas establecidas en los artículos 29 y 30 del Código Penal de la Ley 599 de 2000 (o las
que correspondan según la fecha de ocurrencia de los hechos).

830. Para ello la Sala revisó algunas de las figuras de la responsabilidad como la
autoría, la coautoría, la determinación y la autoría mediata, en la decisión de control de
legalidad, a fin de considerar las características propias de cada tipo y se realizó el análisis
pertinente en cada caso presentado. Argumentos que se retoman a efectos de proferir
sentencia.

831. Autoría. Es autor quien realiza por sí mismo el hecho punible832. Es autor la
persona que realiza la conducta punible, por sí mismo o utilizando a otro como
instrumento. También es autor quien actúa como miembro u órgano de representación
autorizado o de hecho de una persona jurídica, de un ente colectivo sin tal atributo, o de
una persona natural cuya representación voluntaria se detente, y realiza la conducta
punible, aunque los elementos especiales que fundamentan la penalidad de la figura

830
AGUIRRE ARANBURU, Xabier. Prosecuting the most responsible for international crimes: dilemmas of definition and
prosecutorial discretion‖. En: González, Joaquín (ed.) Protección Internacional de Derechos Humanos y Estado de Derecho.
Bogotá: Grupo Editorial Ibáñez. Pág. 400 (Traducción no oficial del investigador Camilo Ernesto Bernal Sarmiento).
831
Ibídem.
832
PÉREZ, Luís Carlos, Tratado de Derecho Penal, Tomo II, Editorial Temis, pág. 346 y ss. Para el tratadista es autor el que
ejecuta solo, sin ayuda de nadie, la infracción. Coautor es el que la ejecuta asociado con otro u otros agentes, interviniendo
directa y personalmente. Todos son materializadores del resultado criminoso, todos enderezan su conducta para realizarlo y
efectivamente, lo realizan. El delito producido o tentado es propio en todas y cada uno de ellos.
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punible respectiva no concurran en él, pero si en la persona o ente colectivo


representado833.

832. En la teoría del dominio de la acción, el autor es quien realiza todos los elementos
del tipo objetivo. ROXIN precisando su planteamiento afirma:

(…) quien sin estar coaccionado y sin depender de otro más allá de lo que socialmente es
habitual realiza de propia mano todos los elementos del tipo es autor. Tiene en todos los
casos imaginables el dominio del hecho. Se trata aquí del prototipo de la autoría, de la
expresión más patente de la figura central (…) No se puede determinar un hecho de forma
más clara que cuando uno mismo lo hace, no se puede tener las manos nada de una
forma más libre que a través de la actuación de propia mano. El legislador al describir los
diferentes tipos penales caracteriza al autor individual, de ésta manera sólo quien cumple
todos los presupuestos del injusto allí establecidos es autor y lo es sin excepciones cuando
los realiza834.

833. En la determinación de la autoría: para el hecho, tal como aparece en la forma de


acción, el que ejecuta por completo libremente y de propia mano, sigue siendo la figura
central dominante. Ahí reside el contenido de verdad imperecedero de la teoría objetivo-
formal: Por eso, el concepto de dominio del hecho sólo puede formularse de manera que
comprenda estos casos en cualquier forma imaginable835.

834. Coautoría. La doctrina ha considerado que el coautor no tiene por sí solo el


dominio total del hecho, pero tampoco ejerce sólo un dominio parcial, sino que el dominio
completo reside en las manos de varios, de tal manera que estos sólo pueden actuar
conjuntamente, teniendo así cada de ellos (sic) en sus manos el destino del hecho
global836.

835. El inciso 2º del artículo 29 de la Ley 599 de 2000, establece que la autoría es
aquella figura en la que los sujetos activos de la conducta, “mediando un acuerdo común,
actúan con división del trabajo criminal atendiendo la importancia del aporte”.
Tradicionalmente se han contemplado dos figuras, la primera la coautoría propia, que se
presenta cuando convergen varios sujetos en la ejecución del tipo, pero se considera que
cada una de las acciones individuales fue suficiente para producir por sí sola el resultado:

“Son coautores aquellos autores materiales o intelectuales que conjuntamente realizan un


mismo hecho punible, ya sea porque cada uno de ellos ejecuta simultáneamente con los

833
ARBOLEDA Vallejo, Mario, Manual de Derecho Penal, partes general y especial, Editorial Leyer, págs. 168 y ss.
834
MÁRQUEZ, Álvaro Enrique. La autoría mediata en el derecho penal, Formas de instrumentalización, Ediciones Doctrina y
Ley, Bogotá, 2009, página 128.
835
ROXIN, Claus. Autoría y dominio del hecho, Madrid, Editorial Marcial Pons, 1998, página 150.
836
ROXIN, Claus. Autoría y dominio del hecho en derecho penal. Pág. 305 y ss, citado en SUÁREZ SÁNCHEZ Alberto.
Autoría. 3ª edición, Ed. Externado de Colombia, Bogotá, Colombia, 2007. Pág. 190
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otros o con inmediata sucesividad idéntica conducta típica (Pedro, Juan y Diego hacen
sendos disparos de revólver sobre Juan y lo matan)” 837.

836. La segunda, es la coautoría impropia, que resulta cuando concurren los siguientes
elementos: (i) una decisión común al hecho, (ii) una división o repartición de funciones; y
(iii) una contribución trascendente en la fase ejecutiva del injusto.

837. Una de las diferencias radica en que la coautoría propia es predicable del principio
de necesidad, propio de las teorías de la participación de corte objetivo-material, según la
cual es autor (o, en el evento de una pluralidad de sujetos agentes, coautor) quien realiza
una aportación imprescindible y causal al resultado típico, sin la que éste jamás se
hubiera podido concretar838.

838. Respecto de la coautoría impropia o funcional, lo que impera es el principio de la


imputación recíproca, según el cual:

“[…] cuando existe una resolución común al hecho, lo que haga cada uno de los coautores
es extensible a todos los demás, sin perjuicio de que las otras contribuciones
individualmente consideradas sean o no por sí solas constitutivas de delito” 839.

839. En la figura del inciso 2º del artículo 29 del Código Penal, para la Corte, no es
posible aplicar el principio de necesidad de la aportación causal, en la medida en que cada
uno de los coautores necesita la intervención de los demás en aras de la obtención del fin
común. En otras palabras, el dominio del hecho es conjunto, porque existe una
interdependencia funcional entre los partícipes. Además, la valoración acerca de la
importancia del aporte individual al hecho la debe realizar el funcionario mediante un
juicio ex ante, es decir, teniendo que retrotraerse al momento de la acción y examinando
si según las condiciones de un observador inteligente situado en la posición del autor el
aporte sería relevante para alcanzar el objetivo en común. Al respecto ha manifestado la
Sala Penal que:

“Entonces, para efectos de establecer la trascendencia de la acción individual, es


improcedente todo juicio de verificación ex post que implique el reconocimiento, ya sea
explícito o tácito, del principio de necesidad de la aportación casual o, lo que es lo mismo,
que parta de la idea de que conforme a las circunstancias a la postre conocidas el
resultado debió haber dependido en concreto del aporte del partícipe, como ocurriría, por

837
Sentencia de 24 de abril de 2003, radicación 17618, citando a la decisión de 9 de septiembre de 1980. En el mismo
sentido, sentencias de 8 de septiembre de 2007, radicación 25974, 8 de noviembre de 2007, radicación 17618, 23 de marzo
de 2009, radicación 29418, y 8 de julio de 2009, radicación 31085, entre otras.
838
Cf. Roxin, Claus, Autoría y dominio del hecho en materia penal, Marcial Pons, Madrid, 2000, pp. 58-61.
839
Sentencia de 2 de julio de 2008, radicación 23438. En el mismo sentido, sentencia de 18 de marzo de 2009, radicación
26631.
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ejemplo, si se fundara la coautoría del vigilante o ‘campanero’ tan solo por el hecho de
que, ante el peligro de ser descubiertos, tuvo que actuar avisándole a los demás840.

El juicio ex ante, por el contrario, se sustenta en que la contribución ya es significativa


cuando la función que de acuerdo con el plan común se le atribuye a la persona
representaría una intervención inevitable en el evento de producirse las circunstancias
oportunas. En el ejemplo dado, entonces, la importancia de la función no podría ser
estimada en razón de la materialización de un determinado acto o no, sino en virtud de
qué tan relevante era para la empresa criminal la labor de vigilancia en el caso de haber
sido necesaria, sin perjuicio de que al final la participación tan solo se haya quedado en el
plano del apoyo psíquico o moral”841.

840. Por lo expuesto, la Sala en la decisión de control de legalidad concluyó que en los
hechos 3, 6, 7, 9, 11, 13, 16, 17, 19, 20, 23, 25, 35, 39, 43, 44, 45, 56, 67, 72 y 76,
HÉBERT VELOZA GARCÍA, debe responder como COAUTOR, tal como lo indicó la señora
Fiscal, pues se encuentra demostrada intervención del postulado en la ejecución de las
conductas criminales, junto a otros integrantes del grupo armado ilegal.

841. Determinación. Como ya se ha venido explicando una de las posibilidades para


imputar el comportamiento del comandante de una organización sobre la conducta de sus
subordinados es la de partícipe. El principal argumento para la utilización de esta hipótesis
se desprende del principio de responsabilidad, según el cual no es posible castigar
penalmente a una persona por algo que otro ha hecho de manera responsable.

842. De acuerdo con este principio, y frente a la realización de una conducta punible
por parte de un subordinado del grupo armado, sobre el cual no ha mediado ningún tipo
de coacción, error o dominio de la voluntad, no sería posible hablar de un dominio del
hecho por parte del “hombre de atrás”, sino tan solo de una posible forma de instigación
o determinación ejercida sobre el autor material del hecho.

843. Según se establece en el artículo 30 del Código Penal de 2000, determinador es


aquel que determina o instiga a otro a realizar la conducta punible concreta, sin que
tenga el dominio del hecho. En la instigación “se establece una relación persona a
persona a partir de una orden, consejo, acuerdo de voluntades, mandato o coacción
superable entre el determinador y el determinado (autor material), dado que ambos
conocen de la tipicidad, antijuridicidad y culpabilidad del comportamiento realizado, pero
sólo éste tiene dominio del hecho, motivo por el cual, también ambos responden

840
Roxin, Op. cit., p. 314.
841
Ver sentencia CSJ, radicado 26266, del 14 de octubre de 2009, M.P.Dr. Julio Enrique Socha Salamanca.
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penalmente de la conducta hasta la fase en que se haya cometido”842. Para que una
conducta punible pueda ser imputable bajo esta forma de participación criminal se
requiere satisfacer cinco requisitos843: (i) es necesario que exista un vínculo entre el
hecho principal y la acción del inductor, es decir, la realización del delito debe ser
consecuencia directa de la acción del inductor; (ii) el inductor debe actuar con dolo; (iii) la
acción del inductor debe ocasionar la resolución de cometer el hecho en el autor principal
(no se puede determinar a quien ya está decidido a cometer el delito); (iv) el hecho al
que se induce debe consumarse o alcanzar, al menos, el grado de tentativa punible; y (v)
el instigador debe carecer del dominio del hecho.

844. Cuando se hace referencia a la determinación se habla de un agente que tiene la


capacidad para proferir una orden vinculante, como recuerda ROXIN, “el inductor debe
tomar contacto con el potencial autor; captarlo para su plan y, dado el caso, vencer sus
resistencias; el que da órdenes en la jerarquía de un aparato de poder se evita todo
eso”844.

845. La Sala legalizó los hechos 4845, 8846, 10847, 12848, 14849, 15850, 18851, 21852, 22853,
27854, 29855, 30856, 31857, 32858, 33859, 34860, 37861 y 47862 en los que la Fiscal Delegada

842
Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, Sentencia del nueve (9) de marzo de dos mil seis. Magistrado
Ponente: Sigifredo Espinoza Pérez. Proceso 22327. En el mismo sentido véase: Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación
Penal. Sentencia del siete (7) de marzo de dos mil siete. Magistrado Ponente: Javier Zapata Ortiz. Casación 23825.
843
VELÁSQUEZ VELÁZQUEZ, Fernando. (2007). Manual de derecho penal, parte general. 3era Edición. Bogotá: Comlibros.
Pág. 443 y ss.
844
ROXIN, Claus (1998b): ―Problemas de autoría y participación en la criminalidad organizada‖. En: Revista penal, Nº 2.
Madrid: La ley. (Trad. Enrique Anarte) Pág. 64.
845
VELOZA GARCÍA, de acuerdo a lo manifestado en versión libre realizada los días 27 de noviembre de 2007 y 27 de
marzo de 2008, y lo expuesto en audiencia de control de legalidad del 11 de junio de 2011, el postulado le ordenó de
manera directa a José Huber Coca Ceballos alias “Huber Coca” y Enrique Mestra Yanes alias “Wilson”, asesinar al señor Ivo
de Jesús Hernández Muñoz
846
La Sala considera que VELOZA GARCÍA deberá responder como determinador de los hechos en que resultaron muertos
los señores Wilson Alberto Acevedo Pulgarín y Francisco Javier Echavarría Pérez, quienes fueron asesinados por orden
directa que el postulado le dio a Enrique Maestra Yanes, alias “Wilson” y José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca”.
847
De lo informado por la Fiscal Delegada y de la versión libre del postulado, se concluye que HÉBERT VELOZA GARCÍA
deberá responder como determinador en el cargo 10, formulado por el homicidio del señor Javier Enrique Mercado Julio,
pues fue el mismo postulado quien le ordenó a Wilmer Aguado Álvarez, alias “Carro loco” y a Elkin Antonio Duque Zapata,
alias “El Enano”, asesinar al señor Mercado Julio, por su presunto señalamiento de ser integrante de la guerrilla.
848
De acuerdo con las pruebas aportadas por la Fiscalía, VELOZA GARCÍA ordenó a José Huber Coca Ceballos, alias “Huber
Coca” y José Ruperto García, alias “El Gato”, darle muerte a los señores Herley Alexander Márquez Ortega y Marcial de
Jesús Bertel Ríos.
849
En versión libre realizada el 26 de 2007, HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó el hecho y manifestó haber dado la orden a
Durbay Enrique Durango Gómez, alias “Sancocho” y a Jesús Albeiro Guisao Arias, alias “el Tigre”, darle muerte al señor
Alfredo Hernando Gómez Rico, por cuanto tenían información de su supuesta pertenecía a grupos guerrilleros.
850
En diligencia de versión libre del 27 de noviembre de 2007, HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó el hecho y manifestó
haber dado la orden, a Forferinzo Flórez Arizal alías “Montador”, de asesinar al señor Julio Hernando Rico Sánchez.
851
En versión libre del 28 de noviembre de 2007, HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó que por orden de él, Jesús Albeiro
Guisao Arias, alias “el Tigre” y alias “Durbays” le dieron muerte al señor Vicente Zambrano, quien era señalado de ser
supuesto miliciano de las FARC.
852
Según lo confesado por VELOZA GARCÍA, participaron Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”, Wilmer Aguado Álvarez,
alias “Carro loco”, José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca”, José Ruperto García, alias “El Gato”, y alias “El Chavo”,
por orden directa de él. Ver diligencia de versión libre del 27 de noviembre de 2007.
853
La muerte del señor Carlos Enrique Cuesta Cantillo, según lo manifestado por HÉBERT VELOZA, en versión libre del 27
de noviembre de 2007, fue ordenada por él, y el hecho fue cometido por José Ruperto García, alias “El Gato”, Elkin Antonio
Duque Zapata, alias “El Enano” y Rubén de Jesús Taborda Meneses, alias ”Escudero”.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

formuló cargos contra VELOZA GARCÍA en calidad de DETERMINADOR, teniendo en


cuenta que en cada uno de ellos el postulado dio en forma concreta la orden para que
tales hechos se cometieran, órdenes vinculantes para sus subordinados dada su condición
de comandante del frente Turbo.

Autoría mediata

846. La doctrina asevera que “autor mediato es quien se sirve de otro como
“instrumento” para la ejecución de la acción típica.”863 En ese sentido, para que pueda
predicarse la existencia de esta figura, el instrumento debe ser “irresponsable del hecho
que ejecuta”864 y “actuar en una causal de atipicidad o de justificación y,
excepcionalmente, de inculpabilidad”865. Ello se desprende del “principio de
responsabilidad”, según el cual si el ordenamiento jurídico permite la condena del

854
Fue confesado por el postulado HÉBERT VELOZA, en diligencia de versión libre realizada los días 27 de marzo y 24 de
septiembre de 2008, en la que manifestó que el homicidio del señor Samuel Antonio Jiménez Madera, fue ordenada por él y
ejecutada por Jesús Albeiro Guisao Arias alias ‘El Tigre’, Durbay Enrique Durango Gómez, alias “Sancocho” y Carlos
Vásquez, alias “Cepillo”, dado el señalamiento de presuntamente pertenecer a los comandos populares del EPL.
855
En diligencia de versión libre del 26 de noviembre de 2007, HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó el hecho 29, y afirmó
haber dado la orden de asesinar a los señores Gustavo Alberto Sepúlveda Zapata y Beatriz Helena García López, quien eran
considerados auxiliadores de la guerrilla. Manifestó además que la orden fue cumplida por José Huber Coca Ceballos, alias
“Huber Coca” y Rubén de Jesús Taborda Meneses, alias Escudero”.
856
En diligencia de versión libre los días 27 y 28 de noviembre de 2007, y 10 de julio de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA,
aceptó su responsabilidad por el hecho 30, manifestó que le ordenó a Jesús Albeiro Guisao Arias alias “El Tigre”, darle
muerte al señor Arley de Jesús Caro Zapata, luego del señalamiento que sobre él se hiciera de ser auxiliador de la guerrilla.
857
HÉBERT VELOZA, en versión libre del 27 de marzo de 2008, confesó que ordenó la muerte del señor Famir Eduardo
Machado Murillo (hecho 31), pues tuvo información fue el encargado de transportar a los guerrilleros que incursionado en la
Finca denominada “Mapaná”, en donde asesinaron a varias personas. Según su misma declaración la orden fue dada a
Durbay Enrique Durango Gómez, alias “Sancocho”, Diego Manuel Gómez, alias “Guajiro” y alias “Hanober”.
858
Fue confesado por el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, en diligencia de versión libre del 26 de noviembre de 2007 y 9
de julio de 2008, en la que manifestó que en la muerte del señor Ever David Zapata Palacio participaron Enrique Mestra
Yanes, alias “Wilson”, José Huber Coca Ceballos, alias “Huber Coca” y Forferinzo Flórez Arizal, alias “Montador”. En la
audiencia de formulación de cargos ante el Magistrado de Control de Garantías del Tribunal Superior de Medellín, HÉBERT
VELOZA GARCÍA, manifestó que él dio la orden directa, pero que no participó en el hecho, y hace la aclaración por cuanto
en la audiencia se le formuló el cargo como coautor propio.
859
En versión libre del 27 de marzo de 2008, HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó el hecho 33 y manifestó que éste fue
cometido por Enrique Mestra Yanes, alias “Wilson”, José Huber Coca Ceballos alias “Huber Coca”, José Ruperto García, alias
“el gato”, Wilmer Aguado Álvarez alias “Carro loco” y Forferinzo Flórez Arizal alias “Montador”, por orden dada por él, pues
la información que tenía era que el señor José Jesús Gómez Giraldo tenía vínculos con un grupo guerrillero.
860
HÉBERT VELOZA, en diligencia de versión libre llevada a cabo los días 26 de noviembre de 2007 y 9 de julio de 2008,
manifestó que de acuerdo con la información que le fue suministrada, el señor Eleuterio Zambrano Palencia (hecho 34),
dada su actividad de electricista, se desplazaba por diferentes fincas del sector, con el fin de ubicar los sitios en donde se
encontraban radicados miembros de las autodefensas, para luego informarle a la guerrilla, y fue ésta la razón por la que le
ordenó a Durbay Enrique Durango Gómez alias “sancocho”, y a alias “Espitia y Cheche”, que lo retuvieran y asesinaran.
861
Por los hechos sucedidos en la denominada “Masacre el Golazo” (Hecho 37), HÉBERT VELOZA GARCÍA, en diligencia de
versión libre rendida los días 26 de noviembre de 2007, 26 de marzo y 24 y 25 de septiembre de 2008, narró como Dadivio
Ángel López Urrego, alias “Ratón”, un desmovilizado del EPL, le informó que en el billar conocido como “El Golazo”, se
reunirían algunos insurgentes para planear acciones en Apartadó. Fue entonces cuando HÉBERT VELOZA, le informó a
Carlos Castaño y a alias "Rodrigo Doble Cero", quienes impartieron la orden para capturar o asesinar a quienes se reunían
en “El Golazo”. HH le ordenó, entonces a Jesús Albeiro Guisao Arias, alias ‘El Tigre’, que preparara la incursión paramilitar al
barrio Policarpa Salavarrieta, con los resultados ya descritos.
862
En diligencia de versión libre llevada a cabo los días 26 de noviembre de 2007, 26 y 27 de marzo y 9 de julio de 2008,
HÉBERT VELOZA, manifestó que por orden directa de él, hombres bajo su mando fueron los encargados de asesinar al
señor Franklin Isaías Poveda Molina (hecho 47), quien al parecer transportaba en su vehículo a integrantes de grupos
subversivos.
863
SUÁREZ SÁNCHEZ Alberto. Autoría. 3ª edición, Ed. Externado de Colombia, Bogotá, Colombia, 2007. Pág. 275
864
ROXIN, Claus. Autoría y dominio del hecho en derecho penal. Pág. 170, citado en SUÁREZ SÁNCHEZ Alberto. Autoría. 3ª
edición, Ed. Externado de Colombia, Bogotá, Colombia, 2007. Pág. 278. (Negrilla y subrayado fuera de texto)
865
VELÁSQUEZ Velásquez, Fernando. Manual de Derecho Penal, Parte General. Ed. Librería Jurídica COMLIBROS, Medellín,
Colombia, 2007. Pág. 440 (Negrilla y subrayado fuera de texto)
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supuesto “instrumento” por la conducta cometida, entonces el presunto hombre de atrás


en realidad es un determinador de la conducta, mientras que si el “instrumento” es
absuelto por el ordenamiento, por considerarse que no es responsable del delito
perpetrado, el presunto hombre de atrás sí lo es, pues se comprueba que era “titular del
dominio de la voluntad” al momento de la comisión del acto y sólo será condenado éste
en calidad de autor mediato866.

847. La modalidad de autoría mediata por dominio de la voluntad en virtud de un


aparato organizado de poder, también denominada como “dominio por organización”
nació en el contexto de la segunda postguerra mundial, tratando de dar una respuesta a
los crímenes de guerra cometidos por organizaciones criminales, algunas de ellas
estatales, frente a las cuales las herramientas de la dogmática penal individual (autoría,
complicidad, determinación) parecían haberse agotado.

848. Claus ROXIN desarrolló en 1963 esta teoría conforme a la cual se calificaban como
autores mediatos a aquellos que “sin haber intervenido directamente en la ejecución de
tan horribles hechos, dominaban su realización sirviéndose de todo un aparato de poder
de organización estatal que funcionaba como una máquina perfecta, desde la cúpula
donde se daban las órdenes criminales, hasta los meros ejecutores materiales de las
mismas, pasando por las personas intermedias que organizaban y controlaban el
cumplimiento de estas órdenes”867.

849. En esta forma de autoría el dominio del hecho requiere que todo el proceso se
desenvuelva como obra de la voluntad rectora de un “hombre de atrás”, que gracias a su
influjo, debe tener en sus manos al intermediario (dominio de la voluntad). Este dominio
de la voluntad puede tener cuatro manifestaciones: a) dominio de la voluntad por
coacción (utilización de un agente no libre), b) dominio de la voluntad por error
(sirviéndose de quien sufre un error), c) dominio de la voluntad por utilización de
inimputables o menores y d) dominio de la voluntad en virtud de un aparato organizado
de poder (dominio por organización). En los tres primeros casos, usualmente, el
instrumento actúa bajo una causal de justificación del hecho y excepcionalmente de
inculpabilidad y por tanto no es penalmente responsable, mientras que en el último caso
tanto el hombre de atrás como el instrumento son sujetos de responsabilidad penal.

866
ROXIN, Claus. Autoría y dominio del hecho en derecho penal. Pág. 170, citado en SUÁREZ SÁNCHEZ Alberto. Autoría. 3ª
edición, Ed. Externado de Colombia, Bogotá, Colombia, 2007. Pág. 278. (Negrilla y subrayado fuera de texto)
867
ROXIN, Claus, Problemas de autoría y participación en la criminalidad organizada, en: Revista penal, Nº 2. Madrid: La
ley. (Trad. Enrique Anarte) Pág. 64.
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850. En su planteamiento original ROXIN entendió que ésta forma de autoría se


aplicaba tanto a aparatos organizados de poder de carácter estatal como a movimientos
clandestinos, organizaciones secretas y grupos semejantes (para nuestro caso se aplica a
grupos organizados al margen de la ley como los paramilitares o las guerrillas). Estas
estructuras fueron caracterizadas por la Sala de Cuestiones Preliminares de la Corte Penal
Internacional en los siguientes términos:

“…Varios aspectos del aparato de poder que constituye una organización permiten que aquel
sirva al objetivo y fin consistente en colocar al autor de atrás, en condiciones de cometer los
crímenes por intermedio de sus subordinados. Según la Sala, la organización debe
encontrarse basada sobre unas relaciones jerárquicas entre superiores y subordinados.
Además, estos últimos deben ser suficientemente numerosos para que las órdenes sean
ejecutadas, sea por un subordinado o por otro. Estos criterios apuntan a garantizar que las
órdenes dadas por los jefes reconocidos sean generalmente ejecutadas por sus subalternos.

Según la opinión de la Sala, es esencial que el jefe, o el dirigente, ejerzan una autoridad y
un control sobre el aparato, y que esa autoridad y ese control sean manifiestos en la
ejecución de esas órdenes por sus subordinados. Para ejercer ese control puede vincular a
sus subordinados, formarlos, imponerles una disciplina y suministrarle unos medios.

El jefe debe utilizar el control sobre el aparato para ejecutar los crímenes, lo cual significa
que en tanto que “hombre de atrás”, explote su autoridad y su poder en el seno de la
organización para asegurar la ejecución de las órdenes que da. La ejecución de tales
órdenes debe incluir la comisión de cualquiera de los crímenes de competencia de la
Corte…” 868

851. Como se observa, es el aparato organizado de poder el que sirve de instrumento


para la realización de la conducta punible, ya que el ejecutor individual juega un rol
menor en el accionar delictivo de la organización, en la medida en que éste tiene a su
disposición muchos ejecutores obedientes. Esto es así en la medida que se presentan
sobre un mismo hecho punible dos formas simultáneas de dominio: de un lado, el
“dominio de la acción” que está relacionado con la propia ejecución del acto, y de otro, el
“dominio de la organización” que hace referencia a la posibilidad de ejercer influencia
para que, a través del aparato de poder del cual dispone, el “hombre de atrás” se asegure
la producción del resultado sin que tenga que ejecutar de propia mano el hecho punible.

852. De acuerdo con la teoría del Roxin869 son cuatro los presupuestos que deben
probarse para calificar un comportamiento delictivo como realizado a través de la autoría
mediata por dominio de la organización:

868
ICC-01/04-01/07, Corte Penal Internacional, Sala de Cuestiones Preliminares I, asunto ―Fiscal vs. Germain Katanga y
Mathieu Ngudjolo Chui‖, providencia del 30 de septiembre de 2008. La traducción ha sido tomada de: RAMELLI ARTEAGA,
Alejandro et al (2011): Jurisprudencia penal internacional aplicable en Colombia. Bogotá: Universidad de los Andes,
Facultad de Derecho, Agencia de Cooperación Internacional Alemana; Ediciones Uniandes. Págs. 470 y 471.
869
ROXIN, Claus, Problemas de autoría y participación en la criminalidad organizada‖. En: Revista penal, Nº 2. Madrid: La
ley. (Trad. Enrique Anarte) Pág. 64.
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(i) Poder de mando o dominio de la organización por parte de los


hombres de atrás, es decir, que el aparato de poder este comandado por una jerarquía
que esté en capacidad de dirigir la actividad delictiva, planificarla, determinar la utilización
de los medios y la escogencia del lugar y modo de operar todo ello a través de órdenes.
En estos casos los autores mediatos conservan el dominio del hecho en la medida en que
una orden es determinante para la realización del delito (dominio positivo), y una
contraorden puede paralizar la ejecución del mismo (dominio negativo);

(ii) Apartamiento del derecho del aparato organizado de poder. Es


imprescindible que todo el aparato funcione al margen de la ley nacional e internacional,
ya que de lo contrario, si su funcionamiento se apega a la ley, la superioridad normativa
de los mandatos legales exigiría a los miembros de la organización no obedecer las
órdenes antijurídicas, con lo cual se excluiría la voluntad de poder de los hombres de
atrás. Dicho apartamiento se debe materializar en relación con los tipos penales que
realiza el aparato;

(iii) Fungibilidad o sustituibilidad de los ejecutores directos. Este es el


factor decisivo para determinar el dominio de la voluntad en virtud de un aparato
organizado de poder. Se refiere a la posibilidad de sustituir al ejecutor de la orden
delictiva, y si éste decide no cumplirla esto no impediría la realización del curso causal
delictivo, sino tan sólo se sustraería su contribución personal al mismo. Como recuerda
ROXIN “(…) el ejecutor, si bien no puede ser desbancado de su dominio de la acción, sin
embargo es al mismo tiempo un engranaje – sustituible en cualquier momento- en la
maquinaria del poder, y esta doble perspectiva impulsa al sujeto de detrás, junto con él,
al centro del acontecer”870. Este factor le confiere un funcionamiento automático al
aparato organizado de poder, sin que importe la persona individual del autor: “(…) el
instrumento lo es no apenas por actuar sin voluntad o error, sino además porque en una
estructura de poder organizado todos sus integrantes son apenas piezas intercambiables
(fungibles), de tal suerte que es el propio hombre de atrás el que le ha quitado su
condición de persona digna por mucho que el ejecutor obre con responsabilidad”871; y

(iv) La considerablemente elevada disponibilidad al hecho del


ejecutor. Este requisito que constituye un refinamiento de la teoría del dominio por
organización advierte acerca de la predisposición específica del autor a la realización de la
empresa delictiva, que lo hace “más preparado para el hecho” que otros potenciales
870
Ibídem.
871
Ibídem.
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delincuentes y que, vistas en conjunto, incrementan la probabilidad de éxito de una orden


y contribuyen al dominio del hecho por parte de los hombres de atrás.

853. Según lo expuesto por Roxin, en el caso de estructuras organizadas de poder que
cuentan con varios niveles de mando, todo aquel que en el marco de la jerarquía
transmite la orden específica o genérica de perpetrar el delito con mando autónomo debe
ser considerado como autor mediato. De este modo, puede afirmarse que existe una
escala gradual de dominio que permite ampliar el círculo de autores mediatos más allá de
quien da originalmente la orden, pudiendo presentarse distintas formas de autoría, una
detrás de la otra. En el mismo sentido, y es uno de los aspectos más relevantes de la
teoría, el alejamiento del hecho se compensa por la medida del dominio organizativo de
los hombres de atrás, que va aumentando según se asciende en la escala jerárquica del
aparato872.

854. La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia ha precisado que cuando se trata de
delitos cometidos por grupos paramilitares, la responsabilidad de sus mandos superiores
se podrá determinar de acuerdo con la prueba y podrá declararse a título de autor873 o de
partícipe874 según las particularidades de cada caso875, supuestos que en todo caso no
impiden la imputación del concierto para delinquir y los delitos ejecutados en desarrollo
de lo acordado.

872
Véase sentencia contra ALBERTO FUJIMORI donde: (i) para atribuir la realización de un hecho delictivo por dominio de
organización no se necesita probar el dominio del hecho concreto, esto es, el control del curso causal del delito cometido
(por ejemplo el control directo sobre el desplazamiento o desaparición forzada de personas), sino demostrar el control de la
fuente del riesgo, es decir, el aparato de poder; (ii) no se necesita probar la orden directa de cometer los delitos concretos,
dado que quien está en la cabeza de la cadena también puede ser imputado por la omisión de controlar el aparato de poder
pudiendo y debiendo hacerlo. Y, (iii) tampoco se necesita probar que el hombre de atrás quiso que los actos ilícitos se
realizaran, porque basta con demostrar que el dirigente conocía el aparato de poder organizado y sus actividades ilícitas y
decidió que continuara con ellas (Véase Corte Suprema de la República de Perú, Sala Penal Especial, expediente N° AV 19-
2001, sentencia de 7 de abril de 2009, hechos de Barrios Altos, La Cantuta y sótanos SIE). Los anteriores fundamentos
fueron confirmados en el fallo de segunda instancia (Ver Corte Suprema de la República de Perú, Sala Primera Penal
Transitoria, expediente N° AV 19-01-2009, sentencia de 30 de diciembre de 2009).
873
En el proceso adelantado contra los miembros de las Juntas Militares que gobernaron a Argentina (1976-1983), el fiscal
TRASSERA y la Cámara Federal imputaron autoría mediata con instrumento fungible pero responsable (Teoría de ROXIN y
BACIGALUPO), pero la Corte Suprema de la Nación condenó por coautoría (Teoría de JAKOBS). En Chile, se aplicó la primera
teoría contra los militares y los Directores de la DINA, y contra PINOCHET el encausamiento fue por comisión por omisión al
tener calidad de garante. Y en Perú, se aplicó por primera vez la propuesta de ROXIN en la causa adelantada contra la
cúpula de Sendero Luminoso por los hechos de la masacre de Lucanamarca y más adelante -como ya se anotó- en la
sentencia dictada contra el expresidente ALBERTO FUJIMORI.
874
En la doctrina desarrollada por GIMBERNAT se considera que en los crímenes cometidos por una banda serán inductores
quienes dan las órdenes, autores los ejecutores del hecho y cómplices los que transmiten el mandato.
875
FERNANDO VELÁSQUEZ VELÁSQUEZ, «La concurrencia de personas en el delito y los aparatos organizados de poder. A
propósito de los crímenes realizados por las estructuras criminales de los paramilitares colombianos», fotocopias, sin fecha,
p. 35. Es posible que respecto de los miembros de la autoridad se edifique responsabilidad penal a partir de la denominada
omisión impropia, como ocurrió en las masacres de Tibú (Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, sentencia de
casación de 14 de noviembre de 2007, radicación 28017) y Mapiripán (Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal,
sentencia de casación de 26 de abril de 2007, radicación 25889 y Corte Constitucional, sentencia SU-1184/01),
oportunidades en las que se consideró que los miembros de la Fuerza Pública tenían posición de garante respecto de los
bienes jurídicos de la población civil y, con ello, responsabilidad penal en la modalidad de comisión por omisión.
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855. Para la Corte Suprema, la autoría mediata sólo se presenta cuando una persona,
sin que exista pacto tácito o expreso, utiliza a otra como simple instrumento para que
realice el hecho objetivamente típico. El fenómeno ocurre, entonces, cuando el “hombre
de atrás” es el único responsable, porque el instrumentalizado no realiza conducta, o
despliega una conducta que no es típica, u obra en concurrencia de una causal de no
responsabilidad -excluyente de antijuridicidad o de subjetividad- o es inimputable876.

856. En febrero de 2010 cuando se juzgaba la responsabilidad del ex senador Álvaro


Alfonso García Romero por la masacre de Macayepo y el desplazamiento de varios
habitantes de distintos corregimientos de los Montes de María, la Corte manifestó que
dado “el debate doctrinal y los desarrollos de la jurisprudencia foránea, unidos a la mejor
solución político-criminal del problema jurídico era necesario “variar su jurisprudencia en
punto a que la autoría mediata” solo era posible en aquellos casos donde el instrumento
no era responsable, ante lo cual manifestó que:

“Ciertamente, cuando se está ante el fenómeno delincuencial derivado de estructuras o


aparatos de poder organizados, los delitos ejecutados son imputables tanto a sus
dirigentes -gestores, patrocinadores, comandantes- a título de autores mediatos, a sus
coordinadores en cuanto dominan la función encargada -comandantes, jefes de grupo- a
título de coautores; y a los directos ejecutores o subordinados -soldados, tropa,
patrulleros, guerrilleros o milicianos-, pues toda la cadena actúa con verdadero
conocimiento y dominio del hecho y mal podrían ser amparados algunos de ellos con una
posición conceptual que conlleve la impunidad”877.

857. La conclusión a la que se ha llegado actualmente, por parte de la Sala Penal de la


Corte Suprema de Justicia878, es que los comandantes que no participan directamente en
la ejecución material del delito no son coautores ni inductores, sino autores mediatos,
debido al control o influencia que tuvieron sobre la organización criminal, de modo que los
ejecutores sólo realizaron directamente la acción punible sin necesidad de conocer a
quienes ordenaron el crimen879.

858. Esta posición ha sido ratificada por la Corte Suprema, al decidir en segunda
instancia el control de legalidad de los cargos formulados en contra del postulado José
876
Por ejemplo, Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, sentencia de única instancia de 29 de septiembre de
2003, radicación 19734, reiterada en auto de única instancia de 10 de junio de 2008, radicación 29268.
877
Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal (2010). Sentencia del veintitrés (23) de febrero de dos mil diez.
Radicado 32805. Única instancia contra el ex senador Álvaro Alfonso García Romero Págs. 77 y 78.
878
Ibídem.
879
OLÁSOLO, Héctor, Reflexiones sobre la doctrina de la empresa criminal común en derecho penal internacional,
Barcelona, Indret -Revista para el Análisis del Derecho, Universidad Pompeu Fabra, julio de 2009, quien advierte que la
primera jurisprudencia de la Corte Penal Internacional en los casos LUBANGA-KATANGA y NGUDJOLO, el artículo 25 (3) del
Estatuto de Roma (ER): (i) acoge la teoría del dominio del hecho como criterio básico de distinción entre autoría y
participación; y (ii) configura la forma de responsabilidad individual que más parece asemejarse a la doctrina de la empresa
criminal conjunta (ECC) de las recogidas en el art. 25 del ER (aquella prevista en el párrafo (3)(d) del art. 25 del ER) como
una forma residual de complicidad. Véase también, SILVANA BACIGALUPO SAGGESE, La responsabilidad penal de las personas
jurídicas, Barcelona, Editorial Bosch, 1998, p. 35 y ss.
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Gregorio Mangones Lugo, Comandante del Frente “William Rivas Hernández” del Bloque
Norte de las Autodefensas Unidas de Colombia, AUC-.

“... [e]n materia de justicia transicional, para el caso colombiano, es viable la aplicación de la
teoría de “la concurrencia de personas en el delito y los aparatos organizados de poder”,
“autoría mediata en aparatos organizados de poder con instrumento fungible pero
responsable” o “autor detrás del autor”. Afirmó la Sala que el fenómeno de intervención
plural de personas articuladas de manera jerárquica y subordinada a una organización
criminal, que mediante división de tareas realizan conductas punibles, debe comprenderse a
través de la metáfora de la cadena:

En este instrumento el que se constituye en un todo enlazado, los protagonistas que


transmiten el mandato de principio a fin se relacionan a la manera de los eslabones de
aquella. En esa medida, puede ocurrir que entre el dirigente máximo quien dio la orden
inicial y quien finalmente la ejecuta no se conozcan.

Así como se presenta en la cadeneta, el primer anillo o cabeza de mando principal se


constituye en el hombre de atrás, y su designio delictuoso lo termina realizando a través de
un autor material que se halla articulado como subordinado (con jerarquía media o sin ella)
a la organización que aquél dirige.

Dada la ausencia de contacto físico, verbal y de conocimiento entre el primer cabo


ordenador y el último que consuma la conducta punible, sucede que el mandato o propósito
se traslada de manera secuencial y descendente a través de otros dependientes. Estos como
eslabones articulados conocen de manera inmediata a la persona antecedente de quien
escucharon la orden y de forma subsiguiente a quien se la trasmiten. Todos se convierten en
anillos de una cadena en condiciones de plural coautoría.
Esta forma de intervención y concurrencia colectiva en conductas punibles es característica
en organizaciones criminales claramente identificadas que consuman el delito de concierto
para delinquir con fines especiales de que trata el artículo 340 inciso 2º de la ley 599 de
2000 o como puede ocurrir en grupos armados ilegales, independientemente de los
postulados ideológicos que los convoquen pues en eventos incluso pueden carecer de
ellos…”880.

859. Como pudo advertirse a lo largo de este apartado, la Sala resalta que el análisis de
la imputación y la responsabilidad de los mandos paramilitares, por su participación
delictiva en los delitos perpetrados por sus subalternos permite insistir en la utilización de
la autoría mediata por dominio de la voluntad en virtud de un aparato organizado de
poder, la cual se aproxima de manera más precisa a los presupuestos fácticos verificables
de actuación delictiva de los “hombres de atrás” de los grupos paramilitares. Esta opción
se ajusta, de acuerdo con la Corte Suprema de Justicia, al marco jurídico establecido en el
Código Penal (art. 29), cuenta con un reconocimiento creciente en la doctrina y en la
jurisprudencia nacional e internacional, y permitiría solucionar las dificultades que en
materia probatoria se presentan con respecto a la prueba de la aportación efectiva de los

880
Ver entre otras decisiones de la Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal. Sentencia de 21 de septiembre de
2009. Rad. 32022. M.P. Dr. Sigifredo Espinosa Pérez, y segunda instancia 38250 del 26 de septiembre de 2012, M.P. Dr.
Luís Guillermo Salazar Otero.
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“hombres de atrás” de una organización armada al margen de la ley, en la fase ejecutiva


de las conductas punibles cometidas por sus subalternos.

860. Su aplicación permitirá avanzar en la identificación de los patrones de actuación


conjunta de todas las personas que de diversas formas participaron en los hechos
punibles de su competencia, así como sus correspondientes responsabilidades, incluyendo
a los servidores públicos y a otros colaboradores particulares que pueden haber
participado en la realización de los hechos punibles investigados. Para ello es necesario
que desde el comienzo de las labores de indagación e investigación se estructure la
recolección de todos los elementos materiales probatorios y evidencia física que permitan
una imputación fáctica y jurídica que conduzca a la determinación de los elementos del
dominio por organización.

861. Finalmente, la Sala considera que la aplicación de esta teoría en casos concretos
proporcionaría los elementos necesarios para la determinación de la responsabilidad de
los bloques, frentes o grupos paramilitares, así como de los servidores públicos y de los
particulares involucrados, como lo ha hecho la Sala de Casación Penal de la Corte
Suprema de Justicia en los casos de la llamada “parapolítica”, en la medida en que su
accionar delictivo común está determinado por el cumplimiento de los lineamientos, las
órdenes y las políticas de actuación de sus “hombres de atrás” y comandantes, más allá
de las conductas individuales.

862. Bajo estos parámetros HÉBERT VELOZA GARCÍA deberá responder como AUTOR
MEDIATO, en los hechos 26, 28, 36, 38, 40, 41, 42, 46, 48, 49, 50, 51, 52, 53, 54, 55,
57, 59, 60, 64, 65, 66, 68, 69, 70, 71, 73, 74, 75 y 77.

863. Ahora bien, la Sala al momento de decidir sobre la legalidad de los cargos
formulados en contra de HÉBERT VELOZA GARCÍA, realizó un análisis pormenorizado de
los delitos de: (i) concierto para delinquir agravado; (ii) fabricación, tráfico y porte de
armas y municiones de uso privativo de las fuerzas armadas; (iii) utilización ilegal de
uniformes e insignias, (iv) reclutamiento ilícito de menores; (v) homicidio en persona
protegida; (vi) secuestro; (vii) desaparición forzada; (viii) tortura en persona protegida;
(ix) hurto calificado y agravado; (x) actos de terrorismo; y, (xi) actos de barbarie, los
cuales han sido enunciados, reconocidos y confesados por el postulado HÉBERT VELOZA
GARCÍA, pero que no son los únicos, toda vez que se adelantan otras investigaciones en

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contra de VELOZA GARCÍA, en su condición de ex comandante del Bloque Bananero;


análisis que se retoma ahora para dictar sentencia.

Del análisis concreto de los hechos

864. A través del escrito de formulación de cargos, la Fiscal 17 Delegada ante la Unidad
de Justicia y Paz, presentó: (i) las situaciones fácticas de los hechos imputados al
postulado, (ii) los elementos materiales de prueba, (iii) la identificación de las víctimas;
(iv) explicó las razones por las cuales las situaciones fácticas se reputan cometidos
durante y con ocasión de la militancia del desmovilizado en el Bloque Bananero, y (v) la
ocurrencia de hechos que respondieron al exterminio o genocidio de miembros de la
Unión Patriótica o sindicalistas.

865. Los hechos constitutivos de sentencia parcial, fueron aceptados libre y


voluntariamente por HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias “HH” según los registros
correspondientes a las audiencias adelantadas ante el Magistrado de Control de Garantías
del Tribunal Superior de Medellín. Además, durante la audiencia de legalización de cargos
fueron indagados sobre el mismo punto, confirmando que cada uno de los cargos fue
aceptado con total apego a las garantías procesales establecidas, y sobre ellos la Sala
realizó el correspondiente control formal y material de cada una de las conductas.

La adecuación típica de hechos ocurridos con ocasión o durante el conflicto


armado interno colombiano

866. La adecuación típica de hechos, ocurridos durante y con ocasión el conflicto


armado interno colombiano, según la postura de la Sala, debe hacerse con criterios
objetivos para dictar sentencia. Es decir, que se considerará si la situación fáctica de los
hechos presentados por la Fiscalía se dieron con ocasión o en desarrollo del conflicto
armado881.

881
Ver: Corte Constitucional, C-225 de 1995, C-291 de 2007, entre otras; Corte Suprema de Justicia, Sentencia 29753 del
27 de enero del 2010 (M.P. José Leónidas Bustos Martínez); Consejo de Estado, Sala de lo contencioso administrativo,
Sección Segunda, sub sección “a”, Consejero ponente: Luis Rafael Vergara Quintero, Bogotá D.C., veinticuatro (24) de
septiembre de dos mil diez (2010), entre otros.
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Tipos de delitos que se pueden presentar durante o con ocasión de un conflicto


armado interno.

867. De acuerdo a lo establecido por la Sala882 respecto a la existencia de un conflicto


armado en Colombia, por el acervo probatorio recopilado y presentado por parte de la
Fiscalía, es claro que en la región de Urabá donde tuvo influencia el Bloque Bananero, se
materializaron los elementos necesarios para considerar que existió, al menos durante el
accionar de la estructura irregular referida, un conflicto armado en el que también
estuvieron involucrados miembros y estructuras de las FARC-EP y desmovilizados del EPL,
así como las fuerzas armadas del Estado Colombiano, durante el periodo comprendido
entre finales de los años ochenta y el 2006.

868. Antes de entrar a considerar en forma singular los presupuestos materiales y


probatorios allegados al presente caso por parte de la Fiscal 17 de Justicia y Paz, con el
fin de dictar sentencia, la Sala pasará a analizar brevemente la noción de Derecho
Internacional Humanitario, a fin de determinar si los hechos delictivos cometidos por el
Bloque Bananero se encuadran en dichos parámetros normativos.

Concepto de derecho internacional humanitario (DIH)

869. El derecho internacional humanitario (DIH), puede ser entendido como el conjunto
de costumbres, normas y principios, que tiene un reconocimiento consuetudinario o
convencional (ius cogens), aplicables en casos de conflictos armados internacionales y no
internacionales883; se trata de un marco de legalidad o un conjunto de normas
humanitarias que pretende civilizar o mitigar los perjuicios de las confrontaciones armadas
ocasionadas a quienes no participan directamente en las hostilidades, y para quienes
habiendo participado ya no lo hacen. El derecho internacional humanitario se aplica desde
el inicio de un conflicto armado, y se extiende más allá de la cesación de las hostilidades,
hasta la obtención de un acuerdo pacífico.

882
En esta materia, el Tribunal se ha pronunciado en los siguientes procesos: Rad. No. 2008-80786; Rad. No. 2006-81366;
Rad. No. 200682285; Rad. No. 200680281.
883
Ver: Corte Constitucional, Sentencia C-148-05, M.P. Álvaro Tafur Galvis, 22 de febrero. En esta decisión la Corte precisó
que: “El derecho internacional humanitario comprende aquellas normas que tienen como objeto la humanización de los
conflictos armados, procurando la protección de la población civil ajena a la confrontación y estableciendo límites a los
procedimientos bélicos. Estas normas de derecho internacional han sido caracterizadas por la Carta Política como
prevalentes al orden jurídico interno (Art. 93 y 214-2), lo que implica su obligatorio cumplimiento en cualquier situación.
Esta perspectiva de obligatoriedad, además, se ve reforzada por la condición de ius cogens que tienen la casi totalidad de
las normas del derecho internacional humanitario, esto es, de postulados comúnmente aceptados y que no pueden ser
desconocidos en un instrumento internacional posterior. El respeto de las reglas del derecho internacional humanitario es
un imperativo para la efectiva protección de los derechos y garantías consagrados en la Carta, a la vez que constituye un
presupuesto para la realización de la dignidad de los individuos que son afectados por el conflicto armado. Estos elementos
cobran especial relevancia en la situación actual del país, que exige un reforzamiento de los procedimientos que estén
dirigidos a la salvaguarda de la población civil.”
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870. El derecho humanitario tiene como propósito minimizar las consecuencias de los
conflictos armados, especialmente sobre la población civil y sus bienes, y aplicar un trato
humanitario a los actores armados, heridos o prisioneros. La aplicación de este tipo de
normas no implica la sustitución de medios para llegar a la paz, ni mucho menos la
legalización de la guerra, su prolongación o el reconocimiento del estatus de beligerancia
legítima a los grupos armados irregulares. La Corte constitucional ha señalado al
respecto:

“(…) la doctrina nacional e internacional han señalado que las normas humanitarias no
se limitan a reducir los estragos de la guerra sino que tienen una finalidad tácita que
puede ser, en ocasiones, mucho más preciosa: esta normatividad puede también
facilitar la reconciliación entre las partes enfrentadas, porque evita crueldades
innecesarias en las operaciones de guerra”.884

Convenios de Ginebra

871. Para la Sala, los cuatro Convenios de Ginebra de 1949885, son una fuente para
interpretar las conductas criminales cometidas por el Bloque Bananero y HÉBERT VELOZA
GARCÍA. Colombia aprobó los cuatro Convenios mediante la Ley 5 de 1960, vigente desde
el 8 de mayo de 1962. Los Convenios de Ginebra de 1949 fueron adicionados con dos
Protocolos en 1977886, especialmente se debe tener en cuenta el artículo 3º común a los
Protocolos de 1977, por ser la primera norma internacional aplicable a los conflictos
armados no internacionales887.

La ampliación de la aplicación del concepto de crímenes de guerra a los


conflictos armados irregulares

872. Como ya se ha explicado, una interpretación sistemática de la normativa


internacional permite aplicar a situaciones similares o análogas figuras de tipificación del
derecho internacional humanitario (DIH) relativas a conflictos internacionales a conflictos
armados internos. Por tanto, los contenidos de los llamados crímenes de guerra, pueden

884
Corte Constitucional, sentencia C-225 de 1995, revisión constitucional del Protocolo II adicional a los Convenios de
Ginebra de 1949, M.P. Alejandro Martínez Caballero, 18 de mayo de 1995.
885
Los cuatro convenios son: el primero para proteger los heridos y enfermos de las fuerzas armadas en campaña
(Convenio I); el segundo para proteger los heridos, enfermos y los náufragos de las fuerzas en el mar (Convenio II); el
tercero protege a los prisioneros de guerra (Convenio III); y el cuarto sobre la protección a las personas civiles en el tiempo
de guerra (Convenio IV).
886
El Protocolo I protege a las víctimas de los conflictos armados internacionales; fue aprobado por Colombia en virtud de la
Ley 11 de 1992 y entró en vigor el 1 de marzo de 1994886. El Protocolo II protege a las víctimas de los conflictos armados
no internacionales; fue aprobado mediante la Ley 171 de 1994 y entró en vigor el 15 de febrero de 1996.
887
Según ha precisado la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), las garantías mínimas establecidas en el
artículo 3º común se aplican, en el contexto de los conflictos armados internos, a quienes no toman parte directa o activa
en las hostilidades, incluida la población civil y las personas puestas fuera de combate por rendición, captura u otras
causas.
En: http://www.cidh.org/annualrep/97span/Colombia11.142b.htm, consultada el 10 de julio de 2012.
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ser replicados en situaciones en las cuales se vulneren normas sobre conducción del
conflicto armado interno, en el cual se tengas en cuenta “las leyes y costumbres de la
guerra”, que atentan contra principios jurídico-humanitarios como: el principio de
humanidad o de respeto a la persona y su conservación; el principio de proporcionalidad;
el principio de prohibición de males superfluos; o, el principio de limitación de los medios
para herir o hacer daño al enemigo888.

873. En tal sentido, el artículo 8 del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional
bajo rúbrica “Crímenes de guerra” abarca las dos variedades conocidas de conflicto
armado, remitiendo, en ambos casos, a las “leyes y usos de la guerra”, en clara referencia
a los Convenios de La Haya de 1899 y de 1907, a los Convenios de Ginebra de 1949, a
sus Protocolos Adicionales de 1977, a otros tratados internacionales que prohíben el
empleo de determinado armamento (vgr, minas antipersonales ), así como a las normas
consuetudinarias del DIH.

874. A decir verdad, la Sala al revisar el catálogo de crímenes de guerra que trae el
Estatuto de Roma encontró similitudes entre aquellos que pueden ser cometidos en el
marco de un conflicto armado interno o internacional. Especialmente confirmó que se
trata de aquellos que la costumbre internacional ha catalogado como los más graves, en
esencia se trata de actos que realizan los “agentes armados” y que están encaminados
a destruir intencionalmente bienes protegidos o civiles, el empleo de medios y métodos
de combate ilícitos, a violaciones al principio de proporcionalidad que orienta la relación
entre ventaja militar y consideraciones de humanidad, así como a ultrajes flagrantes a la
dignidad humana de los miembros de la población civil.

875. En los conflictos armados internos, los que pueden asimilarse a los “crímenes de
guerra” son aquellos cometidos contra bienes protegidos o contra personas que no
participan directamente en las hostilidades, incluidos los miembros de las fuerzas armadas
que hayan depuesto las armas y los que hayan quedado fuera de combate por
enfermedad, lesiones, detención o cualquier otra causa, encontrándose asimismo
presente la intencionalidad y, en algunos casos, la ausencia de responsabilidad debido a
la presencia de “necesidades militares imperativas”.

888
La Sala recuerda que el literal c, del artículo 8 del Estatuto de Roma, al momento de referirse a los crímenes de guerra,
los califica en términos de violaciones graves del artículo 3 común a los cuatro Convenios de Ginebra de 1949. Así mismo, el
artículo 85 del Protocolo I de Ginebra de 1977 califica de graves algunas violaciones a sus disposiciones
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876. Así las cosas, la noción de “crimen de guerra” utilizado en para los conflictos
internacionales, guarda una estrecha relación con los medios y métodos de combate, vale
decir, con las armas elegidas por los agentes armados en un conflicto armado interno, así
como la manera en que éstas se emplean y contra quiénes se hace, las tácticas y
estrategias seleccionadas para atacar al “enemigo” o a quienes se consideran sus
“simpatizantes” o “colaboradores”. De allí que los autores, coautores o demás “sujetos
activos” que estas atrocidades sean considerados como sujetos de acción judicial por
parte del Estado. En ese orden de ideas, las víctimas, en la mayoría de los casos, serán
entonces los miembros de la población civil, aunque, se insiste, la noción de “crimen de
guerra” abarca a los combatientes como sujetos pasivos, en determinadas y precisas
circunstancias. Conviene de igual manera señalar que el concepto de autor de un crimen
de guerra comprende asimismo a los superiores jerárquicos, bien sea porque
directamente ordenaron la comisión del acto o debido a que gracias a su omisión de
control y vigilancia, sus subalternos pudieron perpetrar el delito.

877. Los llamados “crímenes de guerra” pueden ser violaciones a las normas sobre
conducción de las hostilidades, a las leyes y costumbres de la guerra, inspiradas, en
palabras de Mangas Martín: “en los principios jurídico-humanitarios como el principio de
humanidad o de respeto a la persona humana y su conservación, el principio de
proporcionalidad, el principio de prohibición de males superfluos o el principio de
limitación de los medios para herir al enemigo”.

878. Aunado a lo anterior, recuérdese que el literal c) del artículo 8 del Estatuto de
Roma, al momento de referirse a los crímenes de guerra, los califica en términos
de violaciones graves del artículo 3 común a los cuatro Convenios de Ginebra de 1949. Así
mismo, el artículo 85 del Protocolo I de Ginebra de 1977 califica de graves algunas
violaciones a sus disposiciones:

“Represión de las infracciones del presente Protocolo. Las disposiciones de los Convenios
relativas a la represión de las infracciones y de las infracciones graves, completadas por la
presente Sección, son aplicables a la represión de las infracciones y de las infracciones
graves del presente Protocolo”889.

879. Vistas las consideraciones anteriores, la Sala concluye que el derecho internacional
humanitario es un imperativo constitucional de obligatorio cumplimiento en Colombia,
cuya aplicación o alcance se entiende más allá del tiempo y lugar de los combates y/o las
hostilidades; la Corte Constitucional ha dicho al respecto que: La obligación constitucional

889
Ver: Corte Constitucional C-225 de 1995.
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de respetar en los estados de guerra y de conmoción interior (art.214 numeral 2) el


derecho internacional humanitario, deriva en el deber del Estado colombiano de asegurar
que, en todo conflicto bélico o interno, tales normas se apliquen.890

Del delito de concierto para delinquir, porte ilegal de armas y utilización ilegal
de uniformes e insignias (hechos 1 y 2)

880. El delito de concierto para delinquir consiste en:

“Artículo 340. Modificado por el art. 8, Ley 733 de 2002, Modificado por el art. 19, Ley
1121 de 2006. Concierto para delinquir. Cuando varias personas se concierten con el fin de
cometer delitos, cada una de ellas será penada, por esa sola conducta, con prisión de tres
(3) a seis (6) años.

Cuando el concierto sea para cometer delitos de genocidio, desaparición forzada de


personas, tortura, desplazamiento forzado, homicidio, terrorismo, narcotráfico, secuestro
extorsivo, extorsión o para organizar, promover, armar o financiar grupos armados al
margen de la ley, la pena será de prisión de seis (6) a doce (12) años y multa de dos mil
(2.000) hasta veinte mil (20.000) salarios mínimos mensuales legales vigentes.

La pena privativa de la libertad se aumentará en la mitad para quienes organicen,


fomenten, promuevan, dirijan, encabecen, constituyan o financien el concierto o la
asociación para delinquir”.

881. El artículo 19 de la Ley 1121 de 2006, “por la cual se dictan normas para la
prevención, detección, investigación y sanción de la financiación del terrorismo y otras
disposiciones”, aumentó la pena de que trata el inciso segundo del art. 340 así:

“…Cuando el concierto sea para cometer delitos de genocidio, desaparición forzada de


personas, tortura, desplazamiento forzado, homicidio, terrorismo, tráfico de drogas tóxicas,
estupefacientes o sustancias sicotrópicas, secuestro, secuestro extorsivo, extorsión,
enriquecimiento ilícito, lavado de activos o testaferrato y conexos, o Financiamiento del
Terrorismo y administración de recursos relacionados con actividades terroristas, la pena
será de prisión de ocho (8) a dieciocho (18) años y multa de dos mil setecientos
(2700) hasta treinta mil (30000) salarios mínimos legales mensuales vigentes.”
(Negrilla fuera del texto)

882. Por el material probatorio presentado y teniendo en cuenta los hechos notorios
evidenciados a lo largo de los procesos adelantados en el marco de la Ley 975 de 2005,
esta Sala ha podido verificar la existencia de grupos paramilitares en el territorio nacional.
Así mismo, ha identificado específicamente los antecedentes, estructura y acciones
delictivas del denominado Bloque Bananero perteneciente a las Autodefensas Unidas de
Colombia. Estructura que realizó actividades criminales e incursiones armadas en la zona

890
Corte Constitucional, sentencia C-328 de 2000, M.P. Eduardo Cifuentes Muñoz, fundamento 10.
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del Urabá Antioqueño, siguiendo órdenes de los hermanos Carlos y Vicente Castaño, bajo
lo que se conocía como las denominadas Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá.

883. A finales del año 1994, HÉBERT VELOZA GARCÍA, conocido con los alías de “Mono
Veloza”, “Care Pollo” y “HH”, ingresó al grupo como patrullero, bajo las órdenes de Carlos
Mauricio García alías “Rodrigo o Doble cero”, haciendo parte del grupo denominado “Los
Escorpiones”, que delinquía en el casco urbano de varios municipios de la zona bananera,
entre ellos Turbo, Apartadó, Chigorodó y Carepa.

884. Como integrante del grupo “Los Escorpiones”, incursionaron en fincas, zonas y
barrios, en los que según ellos, vivían personas que presuntamente colaboraban o
simpatizaban con grupos subversivos, tal como sucedió con los barrios Policarpa
Savalarrieta del municipio de Apartadó; el barrio Julia Orozco, Barrio Obrero, La calle del
comercio, los corregimientos El Tres y Nueva Colonia del municipio de Turbo, diferentes
fincas bananeras de los municipios de Apartadó y Turbo, en los cuales planificó, ordenó y
participó en el asesinato selectivo de múltiples personas. En el primer semestre del año
1996, VELOZA GARCÍA, fue designado por Vicente Castaño como comandante del “Frente
Turbo”, hasta convertirse en comandante del Bloque Bananero, posición que ocupó hasta
su desmovilización el 25 de noviembre de 2004.

885. La vinculación y permanencia de VELOZA GARCÍA en el grupo paramilitar, tal y


como consta en su versión libre y en Audiencia de Control de Legalidad, fue voluntaria y a
sabiendas de las actividades al margen de la ley que se realizaban en el grupo ilícito,
pues desde que se reunió por primera vez con Carlos Castaño, -año 1994- recibió la
propuesta de pertenecer a las autodefensas, que para ese entonces operaban en el
Departamento de Córdoba, época desde la cual mantuvo sus vínculos con las
Autodefensas de Córdoba y Urabá ACCU hasta su desmovilización.

886. A los grupos comandados por HÉBERT VELOZA, se le atribuyen la comisión de más
de 9000 hechos, pues libraron combates en diferentes zonas del país, dieron muerte a
personas tildadas de milicianos o auxiliadores de la subversión; cometieron delitos como
desaparición forzada de personas, desplazamiento forzado, tortura, homicidios agravados,
homicidios en persona protegida, extorsiones, secuestros, reclutamiento ilícito de NNA,
además usaron el narcotráfico como forma de financiación, entre otros delitos.

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887. Respecto al delito de concierto para delinquir, la Sala de Casación Penal de la


Corte Suprema de Justicia, ha sido consistente en establecer que la pertenencia a un
grupo armado al margen de la ley, es suficiente para satisfacer el elemento típico de este
punible891 y además que:

“… a) La sentencia que dentro de un proceso de justicia y paz se profiera debe identificar


la actuación del desmovilizado al interior del grupo armado y del frente al que pertenecía,
sus actividades, la estructura de poder interna, el modelo delictivo de ese grupo, las
órdenes impartidas y los planes criminales trazados, para contextualizar los delitos por los
que se condena dentro del ataque generalizado y sistemático a la población civil, tal como
se precisará al momento de analizar la normativa aplicable a esta materia.

b) No es posible dictar sentencia sin que al postulado se le hayan formulado


cargos por el delito de concierto para delinquir, pues aquella debe proferirse en
primer lugar por esta conducta, en tanto que las demás son consecuencia de
ésta.”892 (Negrilla fuera de texto)

888. Se entiende entonces que es deber de la Fiscalía General de la Nación imputar y


formular cargos por el delito de concierto para delinquir, el cual se considera “…vital y
893
esencial dentro el proceso de justicia y paz…” , así como es deber del funcionario
judicial declarar en el fallo que ponga fin a la actuación, la pertenencia del postulado al
grupo armado ilegal, porque los delitos por los que se investiga y sanciona en este
trámite, “resultan colaterales”, en cuanto se derivan de la existencia del grupo armado
ilegal, “…son su consecuencia y, por tanto, solo pueden ser cobijados en la sentencia
proferida al amparo de la ley 975 de 2005, si, y solo si, previamente obra condena por
concierto, pues aquéllos depende de éste.” 894

889. En este caso se trata de un concierto para delinquir en cabeza de un comandante


de bloque que impartía órdenes directas a los hombres bajo su mando para cometer
violaciones a los derechos humanos e infracciones al Derecho Internacional Humanitario.
La Fiscalía ha probado ampliamente, que el grupo comandando por alías “HH”, atacó la
población civil, y cometieron delitos de desaparición forzada de personas, torturas,
homicidios, secuestros, entre otros delitos, razón por la que se trata de un concierto para
delinquir agravado, conforme al inciso 2 del artículo 340 del Código Penal895.

890. Con suficiencia ha quedado demostrado que HÉBERT VELOZA GARCÍA,


voluntariamente se concertó con los comandantes de las ACCU, inicialmente como
patrullero y posteriormente dado su ascenso en la organización, encaminó su actuar a
891
Ver entre otras decisiones de la Corte Suprema de Justicia, la Sentencia del 28 de mayo de 2008, radicado 27.004, M.P.
Dr. Augusto J. Ibáñez Guzmán.
892
CSJ, Sentencia de segunda instancia del 31 de julio de 2009, rad. 31539, M.P. Dr. Augusto J. Ibáñez Guzmán.
893
CSJ, Segunda instancia 31539 del 31 de julio de 2009, M.P. Dr. Augusto J. Ibáñez Guzmán.
894
Ibídem.
895
Corte Suprema de Justicia, Sentencia del 14 de diciembre de 2009, radicado número 32575.
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organizar, fomentar, promover, dirigir, encabezar, y constituir una estructura criminal, a


sabiendas que ello implicaba la comisión de diversos delitos, como los que ahora fueron
objeto de control de legalidad y ahora de sentencia por parte de la Sala, así como de
actividades tendientes al reclutamiento y entrenamiento del personal que conformaría el
grupo, la consecución de armamento, uniformes y dinero para la financiación y
sostenimiento de las tropas, todo ello con el objetivo de incursionar primero en la zona
del Urabá Antioqueño a través del Bloque Bananero, y luego en el departamento del Valle
de Cauca con el Bloque Calima, comportamiento que se adecúa a lo previsto en el inciso 3
del artículo 340 del Código Penal.

891. Pues bien, teniendo en cuenta que en el caso de HÉBERT VELOZA GARCÍA, éste
ejecutó la acción de forma directa, se concertó para realizar acciones delictivas como
integrante de las Autodefensas Unidas de Colombia y posteriormente como comandante
del Bloque Bananero, el delito de concierto para delinquir agravado conforme a los
numerales 2 y 3 del artículo 340 del Código Penal, se legalizó a título de AUTOR.

892. Entonces, como el 24 de abril de 2008, el Juzgado Segundo Penal del Circuito
Especializado de Descongestión (OIT) de la ciudad de Bogotá, condenó anticipadamente a
VELOZA GARCÍA, “…a la pena principal de trescientos nueve meses de prisión y multa de
cinco mil ochocientos ochenta salarios mínimos legales mensuales, como determinador de
los delitos de homicidio agravado en concurso heterogéneo con secuestro agravado y
concierto para delinquir agravado…”, por el período comprendido entre el 29 de junio de
2000, fecha de los hechos objeto de sentencia, hasta el 25 de noviembre de 2004, fecha
de la desmovilización, la Sala legalizó el periodo comprendido desde el momento de su
vinculación a las AUC, esto es, desde el mes de octubre de 1994 hasta el 28 de junio de
2000.

893. Así que siguiendo los lineamientos de la Corte Suprema de Justicia, en los cuales
afirma que el delito de concierto para delinquir agravado (art. 340 inciso 2), subsume las
conductas de fabricación tráfico y porte de armas de fuego o municiones artículos 365 y
366 del Código Penal. La Sala procedió a seguir las directrices de la Sala de Casación
Penal y aplicó la figura de la subsunción896.

896
El concierto para delinquir cargado en contra de los postulados al trámite y beneficios de la Ley 975 del 2004, (sic) parte
del presupuesto necesario de la conformación o pertenencia a grupos armados ilegales.
Los delitos contra personas y bienes protegidos por el DIH, tienen como elemento estructurante indispensable que las
conductas se realicen “con ocasión y en desarrollo de conflicto armado”.
En esas condiciones, no admite discusión que la persona se encuentra vinculada al trámite de justicia y paz, en razón de
que necesariamente hizo parte de un grupo armado ilegal. Por tanto, el empleo de armas de fuego se convierte en un
elemento de los tipos penales imputables, desde donde surge que tal conducta no puede ser cargada de manera
independiente, pues ella se subsume dentro de aquellas que hicieron viable la vinculación al procedimiento de la Ley 975
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HÉBERT VELOZA GARCÍA

894. En cuanto al tipo penal del artículo 346 del Código Penal, que consiste en
importar, fabricar, transportar, almacenar, distribuir, comprar, vender, suministrar,
sustraer, portar o utilizar prendas, uniformes, insignias o medios de identificación reales,
similares o semejantes a los de uso privativo de la Fuerza Pública o de los organismos de
seguridad del Estado, sin permiso de la autoridad competente, comportamiento en el que
incurrió VELOZA GARCÍA, y que fue probado con suficiencia por la Fiscal Delegada, pues
varias fueron las acciones cometidas por miembros paramilitares en las cuales fingieron
ser integrantes de la Fuerza Pública e incursionaron en pueblos, caseríos y corregimientos
del Urabá Antioqueño, actividad que cumplieron usando ilegalmente uniformes e insignias
de uso privativo de las Fuerzas Armadas.

895. Por lo anterior, la Sala legalizó el delito de utilización ilegal de uniformes e


insignias, art. 346, por el que deberá responder VELOZA GARCÍA en calidad de AUTOR.

Del delito de homicidio agravado y homicidio en persona protegida

896. Habiendo establecido que las conductas realizadas por el Bloque Bananero y sus
hombres, incluidos alias “HH”, fueron cometidas en el marco de un conflicto armado de
carácter irregular, se pudo establecer que en los siguientes casos se cometieron
homicidios agravados y homicidios en persona protegida.

897. Todos los cargos que por el delito de homicidio se le formularon a HÉBERT
VELOZA GARCÍA, excepto el cargo 55, fueron por hechos sucedidos en vigencia del
Decreto-Ley 100 de 1980, que consagra en su artículo 323:

“Homicidio: El que matare a otro incurrirá en prisión de veinticinco (25) a cuarenta (40)
años.”

898. Y el artículo 324 establece las circunstancias de agravación punitiva así:

“Artículo 324. La pena será de cuarenta (40) a sesenta (60) años de prisión, si el hecho
descrito en el artículo anterior se cometiere:
(…)
7. Colocando a la víctima en situación de indefensión o inferioridad o aprovechándose de esta
situación.
8. Con fines terroristas, en desarrollo de actividades terroristas…”

del 2005.”. Ver Segunda instancia rad. 36563 del 3 de agosto de 2011, M.P. Dr. José Luís Barceló Camacho. Posición fue
ratificada por el alto Tribunal en decisión el 31 de agosto de 2011, rad. 36125 M.P. Dr. Sigifredo Espinosa Pérez.
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HÉBERT VELOZA GARCÍA

899. Conductas que fueron recogidas por la Ley 599 de 2000, en sus artículos 103 y
104, con una pena inferior, razón por la cual y atendiendo los principios de legalidad y
favorabilidad, la Fiscal Delegada le formuló cargos a HÉBERT VELOZA GARCÍA,
atendiendo ésta normatividad.

900. A lo largo de la audiencia de control de legalidad, la Fiscal Delegada demostró con


suficiencia que los crímenes cometidos por los integrantes del grupo armado ilegal
comandado por VELOZA GARCÍA, fueron el resultado de una estrategia para tomar el
control de una región influenciada por las guerrillas de las FARC y el EPL. La Sala reitera,
como quedó evidenciado en el contexto presentado en la presente decisión, que estos
hechos ocurrieron con el objetivo de controlar la región, realizar control social sobre la
población y obtener el dominio sobre las bases sociales a través de homicidios que se
cometieron en contra de personas pertenecientes a la población civil.

901. Con la creación del grupo denominado “Los Escorpiones”, en el cual alias “HH”
empezó como sicario, se dio inicio a una organización que obedecía los parámetros de
una política diseñada por Carlos y Vicente Castaño Gil, dirigida a asesinar a todo aquél
que fuera tildado o señalado de ser miliciano, guerrillero, auxiliador o colaborador de la
guerrilla.

902. Pero además estos grupos pretendían suplantar al Estado, se mostraban


“protectores” de la población civil; hacían justicia por propia mano, imponían penas de
muerte sin formula de juicio, declaraban “objetivo militar” a quienes eran señalados de
violadores, ladrones, consumidores y/o vendedores de estupefacientes, etc. Las políticas
de muerte se replicaron en los diferentes municipios del Urabá Antioqueño. Los fines de la
expansión paramilitar en la zona de Urabá se pueden sintetizar en: (i) lucha
antisubversiva, por el predominio que en la región tuvieron desde finales de la década de
los 60 las guerrillas de izquierda como las FARC y el EPL; (ii) desarrollo económico de la
industria bananera, lo que implicó alianzas entre algunos empresarios bananeros como
Raúl Hasbún, para recuperación de tierras (en contra de invasiones del EPL) y lucha
contra la subversión que los tenía sometidos a pago de extorsiones; (iii) posicionarse en
una zona con salida al mar para consolidar, entre otros, el contrabando de armas y el
narcotráfico; lo anterior está explicitado en el acápite de contexto de la presente decisión.

903. Las circunstancias y situaciones fácticas en las que fueron asesinas las víctimas de
los hechos que se analizaron en la decisión de control de legalidad y ahora en la decisión

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de sentencia, le permiten a la Sala llegar a la conclusión que se trató del delito de


homicidio en persona protegida, conducta reprochada por los Convenios de Ginebra,
artículo 3 común, y por el Protocolo II adicional a estos Convenios, que prohíben “…los
atentados contra la vida, la salud y la integridad física o mental de las personas en
particular el homicidio y los tratos crueles tales como la tortura y las mutilaciones o toda
forma de pena corporal…”.

904. El artículo 135 del Código Penal –Ley 599 de 2000-, consagra el homicidio en
persona protegida como:

“El que, con ocasión y en desarrollo de conflicto armado, ocasione la muerte de persona
protegida conforme a los Convenios Internacionales sobre Derecho Humanitario ratificados
por Colombia, incurrirá en prisión de treinta (30) a cuarenta (40) años, multa de dos mil
(2.000) a cinco mil (5.000) salarios mínimos legales mensuales vigentes, e inhabilitación
para el ejercicio de derechos y funciones públicas de quince (15) a veinte (20) años.

Parágrafo. Para los efectos de este artículo y las demás normas del presente título se
entiende por personas protegidas conforme al derecho internacional humanitario:

1. Los integrantes de la población civil.


2. Las personas que no participan en hostilidades y los civiles en poder de la parte
adversa.
3. Los heridos, enfermos o náufragos puestos fuera de combate.
4. El personal sanitario o religioso.
5. Los periodistas en misión o corresponsales de guerra acreditados.
6. Los combatientes que hayan depuesto las armas por captura, rendición u otra causa
análoga.
7. Quienes antes del comienzo de las hostilidades fueren considerados como apátridas o
refugiados.
8. Cualquier otra persona que tenga aquella condición en virtud de los Convenios I, II, III
y IV de Ginebra de 1949 y los Protocolos Adicionales I y II de 1977 y otros que llegaren a
ratificarse.”.

905. La Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia, al analizar los


elementos del tipo penal del artículo 135 del Código Penal, indicó que:

“…incurre en el delito de homicidio en persona protegida “[e]l que, con ocasión y en


desarrollo de conflicto armado, ocasione la muerte de persona protegida conforme a los
convenios internacionales sobre Derecho Humanitario ratificados por Colombia…”.

Y para efectos de ese artículo el legislador determinó que se entiende por personas
protegidas, entre otros, “1. Los integrantes de la población” 897.

No hay duda que la aplicación del Derecho Internacional Humanitario y, por ende, del tipo
penal descrito, está en estrecha conexión con el concepto de conflicto armado, pues de no
existir éste es evidente que no es válido acudir a aquél.

Para esos fines debe tenerse presente, obviamente, lo dispuesto en los diversos
instrumentos internacionales sobre la materia. Así, el artículo 3 común a los Convenios de
Ginebra consagra:

897
Parágrafo del artículo 135 del Código Penal.
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“En caso de conflicto armado que no sea de índole internacional y que surja en el territorio
de una de las Altas Partes Contratantes cada una de las Partes en conflicto tendrá la
obligación de aplicar, como mínimo, las siguientes disposiciones: 1) Las personas que no
participen directamente en las hostilidades, incluidos los miembros de las fuerzas armadas
que hayan depuesto las armas y las personas puestas fuera de combate por enfermedad,
herida, detención o por cualquier otra causa, serán, en todas las circunstancias, tratadas
con humanidad, sin distinción alguna de índole desfavorable basada en la raza, el color, la
religión o la creencia, el sexo, el nacimiento o la fortuna o cualquier otro criterio análogo.

A este respecto, se prohíben, en cualquier tiempo y lugar, por lo que atañe a las personas
arriba mencionadas: a) los atentados contra la vida y la integridad corporal, especialmente
el homicidio en todas sus formas, las mutilaciones, los tratos crueles, la tortura y los
suplicios; b) la toma de rehenes; c) los atentados contra la dignidad personal,
especialmente los tratos humillantes y degradantes; d) las condenas dictadas y las
ejecuciones sin previo juicio ante un tribunal legítimamente constituido, con garantías
judiciales reconocidas como indispensables por los pueblos civilizados.

2) Los heridos y los enfermos serán recogidos y asistidos. Un organismo humanitario


imparcial, tal como el Comité Internacional de la Cruz Roja, podrá ofrecer sus servicios a
las Partes en conflicto. Además, las Partes en conflicto harán lo posible por poner en vigor,
mediante acuerdos especiales, la totalidad o parte de las otras disposiciones del presente
Convenio. La aplicación de las anteriores disposiciones no surtirá efectos sobre el estatuto
jurídico de las Partes en conflicto”.

El Protocolo II Adicional a los Convenios de Ginebra en su artículo 1 dispone:

“1. El presente Protocolo, que desarrolla y completa el artículo 3 común a los Convenios de
Ginebra del 12 de agosto de 1949, sin modificar sus actuales condiciones de aplicación, se
aplicará a todos los conflictos armados que no estén cubiertos por el artículo 1 del
Protocolo adicional a los Convenios de Ginebra del 12 de agosto de 1949 relativo a la
protección de las víctimas de los conflictos armados internacionales (Protocolo I) y que se
desarrollen en el territorio de una Alta Parte contratante entre sus fuerzas armadas y
fuerzas armadas disidentes o grupos armados organizados que, bajo la dirección de un
mando responsable, ejerzan sobre una parte de dicho territorio un control tal que les
permita realizar operaciones militares sostenidas y concertadas y aplicar el presente
Protocolo.

2. El presente Protocolo no se aplicará a las situaciones de tensiones internas y de


disturbios interiores, tales como los motines, los actos esporádicos y aislados de violencia y
otros actos análogos, que no son conflictos armados.”

Por su parte, el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional en su artículo 8(2)(f) 898-
establece:

“El párrafo 2 e) del presente artículo se aplica a los conflictos armados que no son de
índole internacional, y, por consiguiente, no se aplica a situaciones de disturbios y
tensiones internas, como motines, actos aislados y esporádicos de violencia u otros actos
de carácter similar. Se aplica a los conflictos armados que tienen lugar en el territorio de
un Estado cuando existe un conflicto armado prolongado entre las autoridades
gubernamentales y grupos armados organizados o entre tales grupos”.

Dado que en el artículo 3 común a los Convenios de Ginebra no se definió el conflicto


armado no internacional -como si lo referenciaron los protocolos adicionales-, sí existen
criterios, establecidos a partir de las negociaciones de dicho artículo, que permiten
distinguir entre esa clase de conflictos de un simple acto de disturbio o bandidaje y por lo
tanto de corta duración. Sin embargo, tan solo constituyen criterios básicos de
aproximación pues la expresión misma tiene un vasto ámbito de aplicación. Un listado de

898
Define como crímenes de guerra las violaciones graves de las leyes y usos aplicables a conflictos armados no
internacionales.
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esas condiciones se halla en la publicación del Comentario al Protocolo II y del artículo 3


de los Convenios, en principio se dijo899:

“1. Que la parte en rebelión contra el Gobierno legítimo posea una fuerza militar
organizada, una autoridad responsable de sus actos, que actúe sobre un territorio
determinado y tenga los medios para respetar y hacer respetar el Convenio.
2. Que el Gobierno legítimo esté obligado a recurrir al ejército regular para combatir a los
insurrectos, que han de estar organizados militarmente y disponer de una parte del
territorio nacional.
3. a) Que el Gobierno legal haya reconocido a los insurrectos la condición de beligerantes;
o bien
b) que haya reivindicado para sí mismo la condición de beligerante; o bien
c) que haya reconocido a los insurrectos la condición de beligerantes exclusivamente con
miras a la aplicación del Convenio; o bien
d) que el conflicto se haya incluido en el orden del día del Consejo de Seguridad de la
Asamblea General de las Naciones Unidas como constitutivo de una amenaza contra la paz
internacional, una ruptura de la paz o un acto de agresión.
4. a) Que los insurrectos tengan un régimen que presente las características de un Estado.
b) Que las autoridades civiles de los insurrectos ejerzan el poder de facto sobre la
población de una fracción determinada del territorio nacional.
c) Que las fuerzas armadas estén a las órdenes de una autoridad organizada y estén
dispuestas a conformarse a las leyes y costumbre de la guerra.
d) Que las autoridades civiles de los insurrectos reconozcan que están obligadas por las
disposiciones del Convenio.”900

Aunque esos criterios son útiles -dice el Comentario- no implican que de no cumplirse
alguno de ellos sea inaplicable el artículo 3:

“Pensamos, al contrario, que este artículo debe tener un ámbito de aplicación tan vasto
como sea posible. De ello no puede surgir inconveniente alguno, pues, al fin y al cabo, es
muy reducido y, contrariamente a lo que se ha podido pensar, no limita en nada el
derecho de represión del Estado, ni proporciona ningún aumento de poder al partido
rebelde. ¿Qué pide este artículo si no es el respeto de algunas normas que, mucho antes
de que el Convenio fuese firmado, se reconocían como esenciales en todos los países
civilizados y estaban ya prescritas por las leyes internas de esos Estados? ¿Qué Gobierno
se atrevería a pretender ante el mundo -en caso de disturbios internos que él calificara,
con justo motivo, de simples actos de bandidaje- que, dado que el artículo 3 no es
aplicable, él tiene derecho a dejar a los heridos sin asistencia, a infligir torturas o
mutilaciones y a tomar rehenes? Por útiles que sean, pues, las diversas condiciones antes
enunciadas, no son indispensables, ya que ningún Gobierno puede sentirse molesto por
respetar, en la confrontación con sus adversarios internos y sea cual fuere la denominación
del conflicto que lo opone a ellos, un mínimo de normas que respeta de hecho todos los
días, en virtud de sus propias leyes, e incluso en el trato de vulgares criminales de derecho
común.

De manera general, hay que admitir que los conflictos a los que se refiere el artículo 3 son
conflictos armados caracterizados por hostilidades en las que se enfrentan fuerzas
armadas. En suma, nos encontramos ante un conflicto que presenta muchos de los
aspectos de una guerra internacional, pero que se libra en el interior de un mismo Estado.
En muchos casos, cada una de las dos partes está en posesión de una parte del territorio
internacional y, a menudo, existe alguna forma de frente.”901

De manera pues que no es necesario que el Estado declare formalmente la existencia de


un conflicto armado interno. Así, en criterio de Jean Pictec, en el artículo 3

899
Comité Internacional de la Cruz Roja, Plaza & Janes Editores Colombia S.A. Texto original en francés, traducción primera
edición en noviembre de 1998.
900
Pág. 336 y 337.
901
Pág. 338.
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“Se habla de un conflicto armado que tiene lugar entre las fuerzas gubernamentales y
fuerzas armadas disidentes o grupos armados organizados que, bajo la dirección de un
mando responsable, ejercen sobre una parte del territorio un control tal que les permite
llevar a cabo operaciones militares continuas y concertadas y aplicar el Protocolo. Se tomó
también la precaución de excluir expresamente los simples disturbios interiores, motines,
tensiones y actos aislados de violencia.”902

De lo expuesto se colige que aunque la conceptualización de conflicto no internacional es


compleja y los gobiernos tienden a no aceptar su existencia; se está ante uno de esa
naturaleza cuando los rasgos de un conflicto internacional se presentan en el territorio de
un Estado al verificarse elementos tales como: (i) enfrentamiento entre partes, ya sea
fuerzas armadas gubernamentales y disidentes, o las primeras frente a insurrectos
organizados; (ii) un mando responsable, sin que implique una organización ‘tradicional’
militar sino una suficiente para llevar a cabo operaciones militares calificadas, y con la
posibilidad de imponer una disciplina; (iii) un control del territorio, sin que sea relevante la
porción o permanencia, solo un control ‘tal’ que le permita servir el Protocolo y realizar las
operaciones; (iv) el carácter sostenido y concertado de las operaciones militares está lejos
de coincidir con lo permanente –duración- o esporádico pero, eso sí, unido a la forma de
ser organizado, ordenado y preparado; y (v) capacidad de aplicar el Protocolo, lo que no
indica que en efecto ello sea constante, sino que se tenga la capacidad, ya que se posee la
estructura para hacerlo.

La realidad colombiana es evidente, existe un conflicto no internacional, y para ello no se


requiere la manifestación expresa del Gobierno, pues el conflicto es un hecho y no una
declaración903”904.

906. De acuerdo con el artículo 13 y ss del Protocolo II Adicional a los Convenios de


Ginebra, se concluye que cada una de estas víctimas de homicidio, objeto del control de
legalidad y ahora de sentencia, hacían parte de la población civil protegida por el DIH,
toda vez que no participaban directa, ni indirectamente en las hostilidades, por lo que no
estaban catalogados en la categoría de agentes armados.

907. El citado artículo protocolar declara que la población civil gozará de protección
general de los peligros procedentes de operaciones militares o de acciones armadas de
grupos disidentes. Para hacer efectiva esta protección, se observarán en todas las
circunstancias las siguientes normas:905

 “No serán objeto de ataque la población civil como tal, ni las personas civiles. Quedan
prohibidos los actos o amenazas de violencia cuya finalidad principal sea aterrorizar a la
población civil.

 Las personas civiles gozarán de la protección que confiere este título, salvo si participan
directamente en las hostilidades y mientras dure tal participación”.

902
PICTEC Jean, Desarrollo y Principios del Derecho Internacional Humanitario, TM Editores, Instituto Henry Dunant,
Comité Internacional de la Cruz Roja, 1998, pág. 57.
903
El término conflicto armado interno o no internacional, ha sido utilizado en diversas oportunidades por esta Corporación.
Véase, por citar solo algunas, sentencias del 21 de julio de 2004 (radicado 14.538), 15 de febrero de 2006 (radicado
21.330), 12 de septiembre de 2007 (radicado 24.448), 27 de enero de 2010 (radicado 29.753) y noviembre 24 de 2010
(radicado 34.482); autos del 15 de julio de 2009 (radicado 32.040), 21 de septiembre de 2009 (radicado 32.022) y 30 de
septiembre de 2009 (radicado 32.553).
904
Sentencia del 23 de marzo de 2011, radicado 35.099, M.P. Dr. Augusto J. Ibáñez Guzmán.
905
Artículo 13, Protocolo II Adicional a los Convenios de Ginebra.
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908. De acuerdo con lo expuesto por la Corte Constitucional:

“Una población se considera como “población civil” si su naturaleza es predominantemente


civil. La noción de “población civil” comprende a todas las personas civiles individualmente
consideradas. La presencia entre la población civil de miembros de las fuerzas armadas o
de grupos armados irregulares, de personas puestas fuera de combate, de personas
activamente involucradas en el conflicto o de cualquier otra persona que no quede
amparada por la definición de “civil”, no altera el carácter civil de dicha población. No es
necesario que todos y cada uno de los miembros de esa población sean civiles – es
suficiente con que sea de naturaleza predominantemente civil, y puede incluir, por
ejemplo, individuos puestos fuera de combate”906

909. Para los efectos del principio de distinción en su aplicación a los conflictos armados
internos, el término “civil” se refiere a las personas que reúnen dos condiciones:

(i) De no ser miembros de las fuerzas armadas u organizaciones armadas irregulares


enfrentadas, y
(ii) De no tomar parte en las hostilidades, sea de manera individual como “personas
civiles” o “individuos civiles” o de manera colectiva en tanto “población civil ”907.

910. En los casos objeto de análisis por parte de la Sala, es claro que las víctimas de
estos hechos no eran miembros de las Fuerzas Armadas o grupos armados irregulares, ni
tomaban parte en las hostilidades. Se trataba, por el contrario, de personas civiles que
habían sido declaradas “objetivo militar” por parte del grupo armado ilegal, al ser
señaladas de simpatizantes, colaboradores, auxiliadores, informantes, financieros o
militantes de la subversión o simplemente tildados de causar un perjuicio para la
sociedad.

911. Es claro para la Sala que las conductas desarrollas por el postulado constituyen
verdaderos atentados contra la población civil en el marco de un conflicto armado. Para la
fecha de ocurrencia de estos hechos, el nuevo Código Penal, Ley 599 de 2000 y más
concretamente su Título II de la parte especial, “Delitos contra personas y bienes
protegidos por el Derecho Internacional Humanitario”, aún no había entrado a regir, pues
el Decreto Ley 100 de 1980 estuvo vigente hasta el 24 de julio de 2001, no obstante, los
cargos fueron legalizados como homicidios en persona protegida, pero para los efectos
punitivos, en esta sentencia se les aplicará la pena prevista en los artículos 103 y 104 de
la Ley 599 de 2000.

912. Bajo este entendido, esto es, que los delitos cometidos por los miembros del grupo
armado ilegal se cometieron con ocasión y en desarrollo de un conflicto armado, todos los

906
Sentencia C-291 de 2007 Corte Constitucional.
907
Ibídem.
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delitos de homicidios imputados en los cargos 4, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 12, 13, 14, 15, 16, 17,
18, 19, 20, 21, 22, 23, 25, 26, 27, 28, 29, 30, 31, 32, 33, 35, 36, 37, 38, 41, 42, 43, 44,
45, 46, 47, 48, 49, 50, 51, 52, 53, 54, 56, 57, 60, 64, 65, 66, 67, 68, 69, 70, 71, 72, 73,
74, 75, 76 y 77 fueron legalizados como homicidio en persona protegida art. 135
parágrafo numeral 1, pero para los efectos punitivos, se les aplicará la pena prevista en
los artículos 103 y 104 de la Ley 599 de 2000.

913. Situación diferente sucede en el hecho 55, que de acuerdo con la situación fáctica
presentada por la Fiscal Delegada, las circunstancias de tiempo, modo y lugar en las que
perdió la vida el señor Jenry Jameth Velasco Cuesta, sucedieron en vigencia de la Ley 599
de 2000, razón por la cual el cargo fue legalizado como homicidio en persona protegida
art. 135 parágrafo numeral 1, y la pena a imponer será la contemplada en este mismo
artículo.

Del delito de tentativa de homicidio

914. La tentativa, como dispositivo amplificador del tipo, se encuentra regulada en el


artículo 22 del Decreto Ley 100 de 1980, en los siguientes términos:

“Artículo 22. Tentativa. El que iniciare la ejecución del hecho punible, mediante actos
idóneos e inequívocamente dirigidos a su consumación y ésta no se produjere por
circunstancias ajenas a su voluntad, incurrirá en pena no menor de la mitad del mínimo, ni
mayor a las tres cuartas partes del máximo de la señalada para el delito consumado.”

915. La tentativa, entonces, supone un comportamiento doloso que ha superado las


fases del iter criminis correspondientes a la ideación y a la preparación para alcanzar el
comienzo de la ejecución del delito, sin conseguir la última etapa del mismo, que es su
consumación y agotamiento, por circunstancias ajenas a la voluntad del actor908.

916. Bajo este entendido la Sala encuentra probada la ocurrencia del delito de
homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo numeral 1, en la modalidad de
tentativa del que fueron víctimas Luz Dary Viloria Arrieta, Sandy Didson Arrieta, Iván
Darío Londoño y Javier Vergara Marín (hecho 37) y José Luís Ciro Galeano (hecho 54).

908
Corte Suprema de Justicia, Sentencia del 8 de agosto de 2007, radicado 25974, M.P. Dra. María del Rosario González de
Lemos.
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Del delito de secuestro simple

917. Este delito consiste en la privación de la libertad mediante alguna de las formas
que describe la disposición que lo tipifica, esto es, arrebatar, sustraer, retener u ocultar a
la víctima; verbos empleados por el legislador para describir el tipo básico de la conducta
y en los que va implícito el concepto de violencia contra la libertad individual, objeto de la
tutela jurídica que consagra este precepto, así:

“Artículo 168. Secuestro simple. Modificado por el art. 1, Ley 733 de 2002. El que con
propósitos distintos a los previstos en el artículo siguiente, arrebate, sustraiga, retenga u
oculte a una persona, incurrirá en prisión de diez (10) a veinte (20) años y en multa de
seiscientos (600) a mil (1.000) salarios mínimos legales mensuales vigentes.”

918. De acuerdo con la jurisprudencia de la Corte Suprema de Justicia, tanto en el


delito de secuestro extorsivo, como en el de secuestro simple, se requiere de una
finalidad concreta:

“en el punible de secuestro extorsivo la dirección finalística de la voluntad del agente


se dirige hacia la obtención de alguno de los propósitos con el hecho que en el tipo
penal se han señalado. Esto es, que a cambio de la liberación se hace una exigencia.
Dicha exigencia está expresamente enunciada en el tipo penal a través de diversas
alternativas y variables, en tanto que en el secuestro simple no es precisado el
objeto que motiva la realización de la conducta, pues no se enuncia coerción
particular y concreta alguna como finalidad destacada, dejando abierta la misma a
la dirección de la voluntad hacia propósitos diversos de aquellos
delimitados para el modelo extorsivo del secuestro, sin que ello signifique
que dicho atentado a la libertad carezca de una finalidad, sino que obedece
a un cometido diferente909. (Negrilla fuera del texto).

919. De la situación fáctica y las pruebas documentales y testimoniales presentadas por


la Fiscalía, de las versiones libres rendidas por el postulado y varios integrantes del grupo
armado ilegal que ahora se encuentran desmovilizados y hacen parte del proceso de
justicia y paz, la Sala encontró que los hechos a los que se refieren los cargos 11, 14, 20,
29910, 32, 38, 43, 44, 45, 46, 51, 57, 58, 67, 69 y 75, corresponde a la tipicidad del delito
de secuestro simple, tal como se indicó en la decisión de legalización de cargos.

909
Sentencia del 11 de marzo de 2009, rad. 28.563, M.P. Dr. Alfredo Gómez Quintero.
910
No se legalizó el agravante de que trata el numeral 1º del artículo 170 de la Ley 599 de 2000, por cuanto para el
momento de los hechos la víctima contaba con 21 años de edad, y no con 17 años como se dijo en la audiencia de control
de legalidad.
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

De los delitos de Homicidio en persona protegida en concurso con Desaparición


forzada

920. La Fiscalía tipificó como homicidio agravado en concurso con desaparición forzada
artículo 165 de la Ley 599 de 2000, los hechos 34, 39 y 40. Delitos que fueron analizados
en la decisión de control de legalidad, argumentos que se retoman en esta sentencia.

921. El artículo 165 de la Ley 599 de 2000 describe el delito de desaparición forzada
así:

“Artículo 165. El particular que someta a otra persona a privación de su libertad cualquiera
sea la forma, seguida de su ocultamiento y de la negativa a reconocer dicha privación o de
dar información sobre su paradero, sustrayéndola del amparo de la ley, incurrirá en prisión de
veinte (20) a treinta (30) años, multa de mil (1.000) a tres mil (3.000) salarios mínimos
legales mensuales vigentes y en interdicción de derechos y funciones públicas de diez (10) a
veinte (20) años.

A la misma pena quedará sometido, el servidor público, o el particular que actúe bajo la
determinación o la aquiescencia de aquél, y realice la conducta descrita en el inciso anterior.”

922. La Sala coincide con lo expresado por los instrumentos internacionales911, la


jurisprudencia912 y la doctrina internacionales sobre la desaparición forzada, como ilícito
penal y como grave violación de derechos humanos, en el sentido de ser una conducta
compleja, que implica la unidad de dos comportamientos: (i) la privación de libertad por
parte de agentes estatales o particulares actuando con autorización, apoyo o aquiescencia
de estos; y, (ii) la negativa a reconocer esa privación de libertad o el ocultamiento de la
suerte o el paradero del desaparecido913.

923. El Estatuto de Roma incorporó dos elementos adicionales a la conducta compleja


de la desaparición forzada: un elemento subjetivo, “con la intención de dejarlas fuera del
amparo de la ley”; y un elemento temporal, “por un período prolongado”. Los Estados
parte decidieron incorporar estos dos elementos al Estatuto de Roma, con el propósito de
precisar dos criterios que distinguen el crimen de desaparición forzada de otras formas de
privación de libertad: la incomunicación y las formas de detención arbitraria.

911
Resolución No. 47/133 de la Asamblea General, adoptada el 12 de febrero de 1993, tercer párrafo del preámbulo.
Convención Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas, artículo II. Convención Internacional para la
protección de todas las personas contra las desapariciones forzadas, artículo 2.
912
Ver, entre otros: Corte Interamericana de Derechos Humanos, Caso Gómez Palomino, doc. cit., párrafo 94 y siguientes;
y Comité de Derechos Humanos, Caso Norma Yurich c. Chile, doc. cit., párrafo 6.3.
913
Cfr. Informe del Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias, documento de las Naciones Unidas
E/CN.4/1988/19, párrafo 17. Informe del Grupo de Trabajo sobre la Desaparición Forzada o Involuntaria de Personas,
Comentarios Generales a la Declaración sobre la protección de todas las personas contra las desapariciones forzadas de 15
de enero de 1996”, Documento de Naciones Unidas E/CN. 4/1996/38, párrafo 55.
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924. La Sala estima importante confirmar lo expresado en la Convención


Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas, que en el artículo 3º, precisa
que el delito de desaparición forzada “será considerado como continuado o permanente
mientras no se establezca el destino o paradero de la víctima”. Al revisar los trabajos
preparatorios de la Convención, se puede inferir que este delito puede entenderse como
que se prolonga durante todo el período en que la víctima del delito se encuentre
desaparecida: “es permanente por cuanto se consuma no en forma instantánea sino
permanente y se prolonga durante todo el tiempo en que la persona permanece
desaparecida” 914.

925. La Corte Interamericana de Derechos Humanos entiende que, por el carácter


continuado de la desaparición forzada, se trata de un delito vigente mientras no se
establezca el destino o paradero de la persona desaparecida, lo que genera la obligación
del Estado de investigar la suerte del desaparecido mientras se prolongue esa situación
de incertidumbre. En este sentido, la Corte ha precisado que:

“La desaparición forzada de seres humanos constituye una violación múltiple y continuada
de numerosos derechos reconocidos en la Convención y que los Estados Partes están
obligados a respetar y garantizar. […] El deber de investigar hechos de este género
subsiste mientras se mantenga la incertidumbre sobre la suerte final de la persona
desaparecida. Incluso en el supuesto de que circunstancias legítimas del orden jurídico
interno no permitieran aplicar las sanciones correspondientes a quienes sean
individualmente responsables de delitos de esta naturaleza, el derecho de los familiares de
la víctima de conocer cuál fue el destino de ésta y, en su caso, dónde se encuentran sus
restos, representa una justa expectativa que el Estado debe satisfacer con los medios a su
alcance.” 915

926. La Sala considera que en los hechos que fueron materia de control de legalidad y
ahora de sentencia concurren los delitos de desaparición forzada y el homicidio en
persona protegida por las siguientes razones: (i) los hechos criminales guardan unidad de
acción; (ii) la consumación de la desaparición forzada se dio con el homicidio de las
víctimas; (iii) la desaparición forzada se consumó como hecho criminal autónomo con el
homicidio de la víctima. Sobre la concurrencia de aquellos delitos, la Corte Suprema ha
dicho que:

“Si la persona es privada de su libertad de locomoción, luego de lo cual se le causa la


muerte, no genera incertidumbre la comisión de dos conductas diferenciables que, por
tanto, concurren, en tanto se presentan dos momentos, uno de retención y otro de
muerte, pero es evidente que la primera deja de consumarse cuando se causa el

914
OEA/CP-CAJP, Informe del Presidente del Grupo de Trabajo Encargado de Analizar el Proyecto de Convención
Interamericana sobre Desaparición Forzada de Personas, documento de las Organización de los Estados Americanos
OEA/Ser.G/CP/CAJP-925/93 rev.1, de 25.01.1994, p. 10. Texto citado por la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos en su informe anual 1987-1988 y por la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el Caso Blake vs.
Guatemala, Doc. Cit.
915
Corte Interamericana de Derechos Humanos, Caso Velásquez Rodríguez vs. Honduras, doc. cit., párrafos 155 y 181.
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homicidio. Pero la fijación de un momento cierto en el cual termina la consumación no


descarta la existencia de la desaparición.”916

927. Por lo expuesto, la Sala encontró probado el delito de homicidio en persona


protegida art. 135 parágrafo numeral 1, en concurso con desaparición forzada artículo
165 de la Ley 599 de 2000, formulado en los hechos 3, 34, 39 y 40.

Del delito de tortura en persona protegida

928. Respecto del delito de tortura en persona protegida el Estatuto Penal establece:

“Artículo 137. Tortura en persona protegida. El que, con ocasión y en desarrollo de


conflicto armado, inflija a una persona dolores o sufrimientos graves, físicos o síquicos,
con el fin de obtener de ella o de un tercero información o confesión, de castigarla por
un acto por ella cometido o que se sospeche que ha cometido, o de intimidarla o
coaccionarla por cualquier razón que comporte algún tipo de discriminación, incurrirá
en prisión de diez (10) a veinte (20) años, multa de quinientos (500) a mil (1000)
salarios mínimos legales mensuales vigentes, e inhabilitación para el ejercicio de
derechos y funciones públicas de diez (10) a veinte (20) años”. El texto subrayado
fue declarado INEXEQUIBLE por la Corte Constitucional mediante Sentencia C-
148 de 2005.

929. El artículo 12 de nuestra Constitución Política establece la prohibición de infligir a


cualquier persona tratos crueles, inhumanos ó degradantes y prescribe toda forma de
tortura.

930. Ha dicho la Sala en anteriores decisiones que el delito de tortura exige unos
elementos especiales; entre otros: (i) que se cometa con la finalidad de obtener de la
víctima o de un tercero información o confesión; (ii) castigar a la víctima por un acto por
ella cometido o que se sospeche que ha cometido; (iii) intimidar a la víctima o
coaccionarla por cualquier razón que comporte algún tipo de discriminación; (iv) que se
cometa con ocasión y en desarrollo de conflicto armado.

931. La Sala encontró que los elementos constitutivos del delito de tortura en persona
protegida art. 137 de la Ley 599 de 2000, se presentaron en los hechos 3 y 63917.

916
Ver: Corte suprema de Justicia, M.P. José Luis Barceló Camacho, Proceso No. 36563, del 3 de agosto de 2011.
917
De lo narrado por el señor Luís Antonio Cubides Ramírez y del acta de necropsia del señor Luís Eduardo Cubides
Vanegas, puede inferirse razonadamente que la víctima fue sometida a dolores y sufrimientos físicos y síquicos, y que dada
su condición de ex concejal del Municipio de Turbo, puede deducirse sin mayor esfuerzo, que fue con el fin de obtener de él
alguna información o de castigarlo por un acto por él cometido y que no fue del agrado de los integrantes del grupo
armado ilegal.
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Del delito de hurto calificado y agravado

932. Los artículos 350 y 351 del Decreto Ley 100 de 1980 disponen:

“Artículo 350. HURTO CALIFICADO: La pena será de prisión de dos (2) a ocho (8) años, si
el hurto se cometiere:
(…)
2) Colocando a la víctima es condiciones de indefensión o inferioridad o aprovechándose
de tales condiciones (…)”

“Artículo 351. CIRCUNSTANCIA DE AGRAVACIÓN PUNITIVA: La pena imponible de acuerdo


con los artículos anteriores, se aumentará de una sexta parte a la mitad sí el hecho se
cometiere:
(…)
6) Sobre vehículo automotor, unidad montada sobre ruedas o sus partes importantes o
sobre objeto que se lleve en ellos;
(…)
9) De noche, o en lugar despoblado o solitario…

933. De acuerdo con las pruebas allegadas al proceso por la Fiscal Delegada, y de la
propia versión del postulado VELOZA GARCÍA, se sabe que el señor Samuel Antonio
Jiménez Madera (hecho 27), se desplazaba en su vehículo por el municipio de Turbo,
cuando fue interceptado por miembros del grupo armado ilegal, que le causaron la
muerte y lo despojaron del automotor, al cual le cambiaron las placas y lo llevaron al
municipio de Necoclí, con el fin de trasladarse por la zona y cometer otros delitos.

934. Igual situación se presentó en el hecho 28, en el que se logró establecer que luego
de asesinar a los señores Celso Lozano Casas y Euclides Cuesta Cuesta, fueron
despojados del vehículo tipo campero, marca Toyota Land Cruiser, de placas LHE 270 de
Itagüí, el cual según dijo el mismo HÉBERT VELOZA GARCÍA918, lo dedicaron a la
movilización de miembros de las AUC, le quitaron la puerta trasera, “…para poder meter
la gente ahí”, se trataba del vehículo que luego fue conocido con el nombre de “camino al
cielo”.

935. En el hecho 31, le fue hurtado al señor Famir Eduardo Machado Murillo, el vehículo
Susuki, tipo campero, modelo 1987, luego de abandonar su cuerpo en la vía que conduce
a la finca “Santa Marta Ltda”, ubicada en el corregimiento de Riogrande, municipio de
Turbo, así lo demostró la Fiscalía con las pruebas allegadas al proceso.

936. Por lo anterior la Sala encontró probado el delito de hurto calificado y agravado
que fue formulado por la Fiscalía en los hechos 27, 28 y 31.

918
Diligencia de versión libre del 26 y 27 de noviembre de 2007 y del 27 de marzo de 2008
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Del delito de actos de terrorismo

937. El artículo 144 de la Ley 599 de 2000, tipifica el delito de actos de terrorismo así:

“Artículo 144. El que, con ocasión y en desarrollo de conflicto armado, realice u ordene
llevar a cabo ataques indiscriminados o excesivos o haga objeto a la población civil de
ataques, represalias, actos o amenazas de violencia, cuya finalidad principal sea
aterrorizarla, incurrirá por esa sola conducta en prisión de quince (15) a veinticinco (25)
años, multa de dos mil (2000) a cuarenta mil (40.000) salarios mínimos legales mensuales
vigentes, e inhabilitación para el ejercicio de derechos y funciones públicas de quince (15)
a veinte (20) años.”

938. Al examinar el tipo penal del artículo 144, la Sala decidió legalizar el delito de actos
de terrorismo por cuanto los hechos sucedidos en el establecimiento “El Golazo”,
corresponden con la descripción típica que trae esta norma, pues es claro que los ataques
se cometieron con ocasión y en desarrollo del conflicto armado, además dichos ataques
fueron indiscriminados y excesivos, no se tuvieron en cuenta los principios de distinción y
de proporcionalidad919. Además, la norma contiene otros actos de terrorismo, como hacer
objeto a la población civil de ataques, represalias, actos o amenazas de violencia, siempre
y cuando se ejecuten con el fin de aterrorizarla.

939. En efecto, de acuerdo con la situación fáctica y las pruebas aportadas por la Fiscal
Delegada, se tiene que en la noche del miércoles Santo de 1996, un grupo aproximado de
20 hombres portando armas de corto y largo alcance, a bordo de una camioneta y dos
motocicletas, arribaron al barrio Policarpa Salavarrieta, -un barrio estigmatizado por el
grupo armado ilegal, pues las personas que allí habitaban, en su mayoría, simpatizaban
con el partido de la Unión Patriótica (UP) y el Partido Comunista-, se distribuyeron
estratégicamente en la charcutería del barrio, dos supermercados y una tienda, y
empezaron a disparar de manera indiscriminada contra quienes se encontraban
departiendo en el billar “El Golazo”, acto que produjo la muerte de 10 personas y otro
tanto heridas.

940. Por estas razones la Sala encontró probado los elementos del delito de actos de
terrorismo artículo 144 de la Ley 599 de 2000, en el hecho 37.

919
En virtud del principio de distinción las partes en conflicto deben distinguir en todo momento entre la población y los
combatientes. Los ataques deben ser dirigidos únicamente en contra de los combatientes y no en contra de la población
civil. Se hará también distinción entre los bienes civiles y los objetivos militares. Los ataques no pueden ser dirigidos contra
los bienes civiles. El principio de limitación señala que no es ilimitado el derecho de las partes en conflicto a elegir los
medios y modos de combatir contra la parte adversa. De manera que existen medios (armas) lícitos e ilícitos y formas de
emplearlos (modos) permitidos o contrarios al DIH. Mediante el principio de proporcionalidad se prohíben las armas y los
métodos que causen a las personas civiles y a sus bienes daños excesivos con respecto a la ventaja militar concreta y
directa prevista. Así, se prohíbe lanzar ataques cuando sea de prever que causarán incidentalmente muertos y heridos entre
la población civil o daños a bienes de carácter civil, o ambas cosas, que serían excesivos en relación con la ventaja militar
prevista. Ver: http://www.cruzroja.es/portal/page?_pageid=878,12647079&_dad=portal30&_schema=PORTAL30.
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Del delito de actos de barbarie:

941. El delito de actos de barbarie está regulado por la Ley 599 de 2000 así:

“Artículo 145. El que, con ocasión y en desarrollo de conflicto armado y fuera de los
casos especialmente previstos como delitos y sancionados con pena mayor, realice
actos de no dar cuartel, atacar a persona fuera de combate, de abandonar a heridos
o enfermos u otro tipo de actos de barbarie dirigidos a no dejar sobrevivientes o a
rematar a los heridos y enfermos u otro tipo de actos de barbarie prohibidos en
tratados internacionales ratificados por Colombia incurrirá, por esa sola conducta, en
prisión de diez (10) a quince (15) años, multa de doscientos (200) a quinientos (500)
salarios mínimos legales mensuales vigentes, e inhabilitación para el ejercicio de
derechos y funciones públicas de diez (10) a quince (15) años.”

942. Un acto de barbarie, con ocasión y en desarrollo de un conflicto armado, denota la


aplicación de crueldad innecesaria en el procedimiento y en los medios utilizados, o
conlleva hostilidad, padecimientos, atemorización y exposición a daños innecesarios a la
población civil920. En los casos en concreto, el procedimiento utilizado después del
homicidio de las personas protegidas, la decapitación y desmembramiento de los cuerpos,
llevó implícito el resultado de demostrar crueldad e inhumanidad.

943. Efectivamente, de las pruebas aportadas por la Fiscalía se tiene que el señor
Edilberto Cuadrado Llorente (hecho 58), miembro de la Unión Patriótica y del Comité
Obrero de la finca la “Apartada”, se dirigía a su sitio de trabajo en la finca, cuando el
vehículo en el que se movilizaba fue detenido en un retén paramilitar. Allí, lista en mano,
los paramilitares lo identificaron y lo llevaron hasta una de las bananeras de la zona, en
donde lo ultimaron con arma de fuego, luego de lo cual fue decapitado. Su cabeza fue
abandonada en la vía pública, en donde fue encontrada por transeúntes y su cuerpo fue
enterrado en predios de la finca “La niña de mis ojos” del municipio de Carepa
(Antioquia), donde fue hallado días después.

944. De acuerdo con lo manifestado por HÉBERT VELOZA, en versión libre del 9 de julio
de 2008, este tipo de actos correspondía al modus operandi del grupo y de los hombres
bajo su mando, con lo que se pretendía generar terror en la población, las personas eran
decapitadas para que la comunidad se sintiera intimidada ante los paramilitares, al
respecto dijo:

“…como lo he explicado, este es un caso también de principios del año 95, mayo, lo he
explicado en varias de las versiones acá. Lamentablemente muchos de los errores que
cometimos en ese afán y esa inexperiencia que teníamos en la vida y órdenes que recibíamos

920
Ver: Corte Suprema de Justicia, M.P. Jorge Aníbal Gómez Gallego, Radicado 12051 de 25 de septiembre de 1996.
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de Doble Cero y el entrenamiento que nos dieron, una de las formas de ganar la guerra era
generar terror, una de las formas de combatir al enemigo era generar terror ante las
comunidades, para que esas comunidades no le sirvan al enemigo, una forma de generar
terror era esa: decapitando gente para generar terror ante la comunidad, por eso se
presentaban estas situaciones…”921.

945. Similar situación de crueldad y barbarie, sucedió en el hecho en el que perdió la


vida el señor Luís Eduardo Cubides Vanegas (hecho 63), pues de acuerdo con las pruebas
aportadas por la Fiscalía y la situación fáctica presentada en la audiencia de control de
legalidad, el cadáver del señor Cubides Vanegas, fue encontrado por su hijo Luís Antonio
Cubides Ramírez, en predios de la finca “Coiba”, en “…un potrero enrastrojado, y estaba
cubierto con ramas de un árbol…”, en avanzado estado de descomposición, y “…amarrado
con las manos atrás, con heridas causadas con arma blanca, torturado porque a él le
cortaron las orejas, el rostro chuzado como con un cuchillo, el abdomen totalmente
abierto, las tetillas con cortadas, por último le cortaron fue la cabeza como con una
peinilla de las denominadas Rula, porque su cabeza le quedo medio pegada al tronco. (…)
lo llevamos en una hamaca para la parcela de nosotros, allí lo preparamos con licor y
permaneció como dos días en la finca, mientras lo podíamos sacar porque los
paramilitares no nos lo dejaban mover, ya que ellos estaban pendientes de la sacada de
mi papá para el municipio de Turbo; a los dos días lo logramos sacar en horas de la
noche… ”922.

946. Razón por la cual la Sala encontró probado el delito de actos de barbarie en los
hechos 58 y 63.

Del reclutamiento ilícito de Niños, Niñas y Adolescentes.

947. En la decisión de control de legalidad, la Sala legalizó el delito de reclutamiento


ilícito, artículo 162 de la Ley 599 de 2000, en el hecho 88, en el cual se incorporaron a 7
personas menores de edad, quienes resultaron como víctimas de esta conducta ilícita, por
parte del Bloque Bananero.

“ARTICULO 162. Reclutamiento ilícito. El que, con ocasión y en desarrollo de conflicto


armado, reclute menores de dieciocho (18) años o los obligue a participar directa o
indirectamente en las hostilidades o en acciones armadas, incurrirá en prisión de seis (6) a
diez (10) años y multa de seiscientos (600) a mil (1000) salarios mínimos legales
mensuales vigentes.”

921
Ver CD que contiene el clip de la versión libre rendida el 9 de julio de 2008, relacionado en el hecho 58.
922
Entrevista realizada al señor Luís Antonio Cubides Ramírez, hijo del occiso, el 18 de marzo de 2009.
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948. Frente al delito de reclutamiento ilícito de NNA, la Sala de Casación Penal de la


Corte Suprema de Justicia ha manifestado que:

“La participación de menores de edad en los conflictos armados es una de las mayores
vergüenzas de la humanidad en tanto en ella se aprecia la trasgresión del principio ético
del hombre como auto fin en sí mismo, y se proyecta como en ningún otro caso con tanta
intensidad, la utilización del hombre como medio al servicio de los intereses de otros; con
la gravedad de que se usa a personas que aún no han alcanzado el desarrollo necesario
para poder decidir con la madurez y juicio reflexivo aconsejables en la determinación de
vincularse a un grupo armado.

(…)

“Los menores de dieciocho (18) años de edad no serán incorporados a filas para la
prestación del servicio militar. A los estudiantes de undécimo grado, menores de edad
que, conforme a la Ley 48 de 1993, resultaren elegidos para prestar dicho servicio, se les
aplazará su incorporación a las filas hasta el cumplimiento de la referida edad.”

Los menores de dieciocho años ciertamente no pueden hacer parte del conflicto armado
porque tal situación constituye un atentado contra el menor, contra la institución de la
familia, contra la cultura, contra la sociedad, por no mencionar lo más evidente, contra la
libertad y la vida.

Su reclutamiento conduce a la desaparición de los futuros agricultores y al nacimiento de


guerreros baratos, apasionados y no deliberantes, para quienes la única normalidad es la
obediencia y la guerra; pero además, interrumpe la evolución cultural y económica del
entorno social, sustituye la esperanza del bienestar colectivo por la convicción de que la
intervención violenta facilita el cumplimiento de objetivos estratégicos de la máquina de
muerte a la que sirven, también alienta la opción de la guerra como alternativa laboral
posible para otros niños que enfrentan su evolución psicológica a la rebeldía de su orden,
sustituye la inocencia por la sed de muerte, les roba sus sueños, acalla al campo, a la
familia y a la sociedad en un mismo silencio, ya que la alegría y la felicidad huyen del
tableteo de metralla.”923

949. La Fiscalía formuló cargos por este delito porque pudo demostrar que el Bloque
Bananero de las AUC, al mando de HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias “HH”, efectuó y
ordenó el reclutamiento de NNA para incorporarlos a las filas de la organización armada
ilegal. En versión libre, el postulado narró que el reclutamiento de NNA fue una práctica
generalizada en las Autodefensas, la cual nunca fue prohibida por la Casa Castaño;
manifestó igualmente que en los cursos de instrucción militar y políticos que recibió, no se
le informó que el reclutamiento ilícito de personas menores de edad fuera una conducta
considerada como un crimen de guerra o una infracción al DIH, lo que queda confirmado
si se revisan las estadísticas de los bloques paramilitares, respecto a los NNA que fueron
incorporados a las estructuras paramilitares. HÉBERT VELOZA GARCÍA manifestó además
que los niños reclutados eran:

923
Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, sentencia del 24 de febrero de 2010, M.P. José Leonidas Bustos,
radicado 32889.
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“… muchachos de las veredas donde había asentamiento de las autodefensas, entonces


por situaciones de pobreza o la forma cómo vivían, buscaban un apoyo del grupo armado y
se les permitía el ingreso. Nunca el reclutamiento fue obligado, siempre fue voluntario.
Luego se les daba un entrenamiento y se asignaban por lo general a los grupos rurales y
en las zonas donde eran oriundos por su facilidad de desplazarse y realizar labores de
inteligencia. Pasaban por el curso básico de cualquier miembro de las autodefensas e iban
a la escuela de entrenamiento…”924

950. El postulado le informó a la Fiscalía, que los NNA reclutados por el grupo armado
ilegal, eran tratados como cualquier otro integrante de la organización, no se les tenía
ninguna consideración especial por tener la condición de minoría de edad; se les
enseñaba sobre el manejo de armas; cómo maniobrar un radio; cómo debían reaccionar
frente al enemigo; cómo debían informar sobre la presencia de la guerrilla o de la fuerza
pública.

951. La Fiscalía 17 de Justicia y Paz, documentó como durante la existencia del bloque
Bananero, quien fue su comandante incorporó o permitió que se incorporaran a sus filas,
niños y niñas menores de 18 años; conducta ilícita que quedó plenamente establecida a
través de la certificación que el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar remitió a la
Fiscalía General de la Nación, mediante oficio 1400-037748 del 10 de julio de 2008, en el
cual se indica el nombre y apellido del niño o niña desvinculado, edad, fecha de ingreso al
programa del ICBF, departamento y municipio de la desvinculación, grupo armado al
margen de la ley al que perteneció, especificando el bloque o frente y la forma de
desvinculación.

952. El 25 de noviembre de 2004, fecha en la que se desmovilizó el bloque bananero, y


conforme lo certificó el ICBF, HÉBERT VELOZA GARCÍA, en su condición de comandante,
le entregó por medio del Alto Comisionado para la Paz, siete (7) NNA, los cuales se
relacionan a continuación: Deicy Navales Durango; Héctor Eduardo Velásquez Canchila;
José Ignacio Madera Flórez; José Luís Murillo Mosquera; Luz Amanda Chanci Mazo; Rafael
Enrique Valderrama Hoyos y Yeison Yey Zurita Ramos.

953. La Sala encuentra probada la situación fáctica descrita en torno al cargo de


reclutamiento ilícito formulado al postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, de acuerdo con la
presentación realizada por la Fiscalía 17 Delegada de Justicia y Paz.

924
Versión libre del 29 de mayo de 2008.
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Acercamiento a la noción de crimen de lesa humanidad

954. Respecto al tema de la implementación y aplicación del concepto de crímenes de


“lesa humanidad” o crímenes contra la humanidad, sea lo primero advertir que estos
fueron reconocidos por primera vez, en términos generales, en los Principios de Derecho
Internacional del Estatuto y por las Sentencias del Tribunal de Núremberg de 1950925. En
ellos se distinguen principalmente dos categorías de actos punibles: (i) asesinato,
exterminio, esclavitud, deportación y otros actos inhumanos cometidos contra la
población civil; y (ii) persecución por motivos raciales, políticos o religiosos.

955. El concepto de crímenes contra la humanidad ha tenido una evolución que se ha


reflejado, principalmente en los Estatutos y en algunas decisiones de los tribunales
penales internacionales926, en los cuales se han resaltado los siguientes elementos: i) el
carácter y la naturaleza de los hechos ilícitos como actos inhumanos; ii) la no taxatividad
de los actos, para atender fundamentalmente el carácter dinámico del Derecho, que
busca correspondencia entre las situaciones fácticas concretas de los conflictos y su
naturaleza de inhumanidad; y iii) la visibilización de los ataques contra la población civil,
en los cuales se han preponderado los elementos sustanciales de generalidad o
sistematicidad de los actos ilícitos.

956. Igualmente es importante tener presente que antes de la adopción de los


Estatutos de los Tribunales Penales Internacionales para la Ex Yugoslavia y para Ruanda,
y del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, se adoptaron, en el seno de las
Naciones Unidas, Convenciones que calificaron expresamente varios actos como delitos
conforme al derecho internacional927 o delitos contra la humanidad928 o que establecieron
la obligación de tratarlos como delitos en los derechos internos.929 Estos actos fueron
recogidos expresamente, junto a otros, en los Estatutos de los tribunales penales
internacionales y mixtos, como actos que, dadas determinadas condiciones, constituyen

925
Principios de Derecho Internacional reconocidos por el Estatuto y por las Sentencias del Tribunal de Nüremberg.
Aprobado por la Comisión de Derecho Internacional de la Organización de las Naciones Unidas y presentados a la Asamblea
General, 31 de diciembre de 1950.
926
Sobre esta situación, puede verse lo dicho por el ICTY, en el caso Prosecutor vs. Dusko Tadic, cit, párr. 622; y lo dicho
por la Corte IDH, en el caso Caso Almonacid Arellano y otros Vs. Chile, cit, párr. 99
927
La Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio, adoptada el 9 de diciembre de 1948 y en vigor el
12 de enero de 1951, califica, en su Artículo I, el genocidio como “delito de derecho internacional”.
928
La Convención Internacional sobre la Represión y el Castigo del Crimen de Apartheid, aprobada el 30 de noviembre de
1973 y en vigor el 18 de julio de 1976, califica, en su Artículo I, el apartheid como “crimen de lesa humanidad” y los actos
inhumanos que resultan de las políticas y prácticas de apartheid y las políticas y prácticas análogas de segregación y
discriminación racial que se definen en el artículo II de la Convención como “crímenes que violan los principios del derecho
internacional, en particular los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas, y que constituyen una amenaza
seria para la paz y la seguridad internacionales.
929
Convención contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes, adoptada el 10 de diciembre
de 1984 y en vigor el 26 de junio de 1987.
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delitos contra la humanidad. Así, el Estatuto del Tribunal Penal Internacional para la Ex
Yugoslavia930, considera como crímenes contra la humanidad, en el ámbito de la
competencia del Tribunal, los siguientes crímenes cuando éstos han sido cometidos en el
curso de un conflicto armado, de carácter internacional o interno, y dirigidos contra
cualquier población civil: a) Asesinato; b) Exterminación; c) Reducción a la servidumbre;
d) Deportación; e) Encarcelamiento;) Tortura; g) Violaciones; h) Persecuciones por
motivos políticos, raciales o religiosos; i) Otros actos inhumanos. Sin embargo, aunque
este tipo de crímenes pueden ocurrir en el marco de un conflicto armado, también
pueden ser reconocidos de forma independiente.

957. En el contexto regional, la Corte Interamericana de Derechos Humanos, para el


Caso La Cantuta, se refirió nuevamente a los crímenes de lesa humanidad, al considerar
que “[l]a ejecución extrajudicial y desaparición forzada de las presuntas víctimas fueron
perpetradas en un contexto de ataque generalizado y sistemático contra sectores de la
población civil.”931

958. La jurisprudencia de la Corte Interamericana recoge, así, los elementos del crimen
contra la humanidad que se señalaron en el punto anterior. Esto es, se está ante un
crimen contra la humanidad según la Corte Interamericana cuando: i) se comete un acto
inhumano en su naturaleza y carácter; ii) cuando ese acto se comete como parte de un
ataque sistemático o generalizado; iii) cuando este ataque responde a una política que no
necesariamente debe haber sido adoptada de manera formal; y iv) cuando el ataque está
dirigido contra población civil. Adicionalmente, la Corte Interamericana ha sido expresa al
señalar que a partir del Estatuto del Tribunal de Núremberg de 1945 quedó estructurada
la noción de crimen contra la humanidad y que la prohibición de cometer tales crímenes,
como una norma de ius cogens, quedó también recogida ya en este Estatuto. La
existencia de un ataque sistemático o generalizado y de una política de Estado. De
acuerdo con la definición de sistemático como un ataque organizado que sigue un patrón
regular o un plan metódico932, y de generalizado como un ataque masivo, en larga escala,
dirigido contra una multiplicidad de víctimas933.

959. Los crímenes de lesa humanidad pueden configuran claramente la existencia de un


accionar que fue tanto sistemático, por la existencia de un plan organizado de

930
ONU, Updated Statute of the International Criminal Tribunal for the Former Yugoslavia, February 2006.
931
Corte IDH, Caso La Cantuta Vs. Perú, Sentencia de 29 de noviembre de 2006, Serie C No. 162, párr. 95.
932
Al respecto, ICTR, The Prosecutor v. Jean- Paul Akayesu, cit,, párr. 580; ICTY, Prosecutor v. Dusko Tadic, cit. párr. 648.
933
Al respecto, ICTR, Prosecutor v. Jean- Paul Akayesu, cit,, párr. 580; ICTY, Prosecutor v. Dusko Tadic, cit. párr. 648
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persecución y de represión934, como generalizado porque ese plan se dirigió contra una
multiplicidad de víctimas y, en este sentido, está presente uno de los elementos
esenciales del crimen contra la humanidad.

960. Conviene, en todo caso, precisar dos cuestiones. En primer lugar, que si bien los
hechos constitutivos de graves violaciones de derechos humanos tienen la característica
de ser, a la vez, sistemáticos y generalizados, la configuración de actos inhumanos como
crímenes contra la humanidad no requiere que se den las dos condiciones. Basta con que
se dé la existencia de una de las dos, esto es, o de un ataque sistemático o de un ataque
generalizado935. Y en segundo lugar, que la condición de ser un ataque sistemático o
generalizado se refiera al contexto en el que se realizan o ejecutan los distintos actos, y
no a la realización, por cada perpetrador, de un ataque de ese tipo. Un sólo acto
inhumano –asesinato, tortura, desaparición forzada, violación, deportación, persecución u
otro- si se produce en el contexto de un ataque sistemático o generalizado configura un
crimen contra la humanidad de forma automática e independiente936.

961. En relación con el otro elemento del crimen contra la humanidad, esto es, la
existencia de una política de un Estado o de un grupo organizado al margen de la ley, en
la que se inscribe o en función de la cual se lleva a cabo el ataque sistemático o el ataque
generalizado, en la sentencia en el Caso Dusko Tadic, el ICTY recordó, al respecto, el
vínculo conceptual que se establece entre el ataque generalizado o sistemático, como
elemento esencial del crimen contra la humanidad, y la existencia de una política
orientada a la realización de los actos inhumanos que integran el crimen.

Del genocidio político a la Unión Patriótica

962. La Sala considera importante recordar que uno de los elementos fundamentales
del proceso de Justicia y Paz es el análisis jurídico político de fenómenos de
macrocriminalidad, contexto en el cual se cometieron delitos de lesa humanidad, los
cuales fueron organizados de forma sistemática y cometidos de forma generalizada contra
grupos poblacionales con características específicas. La reconstrucción del contexto de
creación, consolidación y proceso de desmovilización del Bloque Bananero permitió a la

934
Al respecto, Brasil, Direito à Memória e à Verdade, pág. 22-30, entre otras. El informe de la Comissão Especial sobre
Mortos e Desaparecidos Políticos hace referencia, entre otros actos, a la suspensión de los derechos políticos, a las
destituciones de funcionarios públicos, a la censura de prensa, a las muertes de dirigentes políticos y a las torturas seguidas
de muerte.
935
Al respecto, ICTY, Prosecutor v. Dusko Tadic, cit, párr. 647-649; SCSL, Prosecutor Against Alex Tamba Brima, Brima
Bazzy Kamara, Santigie Borbor Kanu, cit, párr. 215. Estatuto de Roma, Artículo 7.1.
936
Al respecto, ICTY, Prosecutor v. Dusko Tadic, cit, párr. 649
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Fiscalía y a la Sala encontrar elementos suficientes para considerar que los hechos
criminales cometidos en contra de simpatizantes, miembros y representantes políticos de
la Unión Patriótica en la región de Urabá hicieron parte de una estrategia global de
exterminio de las AUC en contra de este grupo político, que sufrió ataques por parte de
estructuras o bloques pertenecientes a las AUC en regiones del país en la cuales tuvieron
representación política importante937.

963. Sin embargo, para realizar el análisis particular objeto de la presente decisión la
Sala recurrió a herramientas de la sociología y la criminología jurídica938 para analizar y
concluir que los ataques criminales contra éste partido político fueron planeados, dirigidos
y organizados desde diferentes frentes, pues los perpetradores hacían parte de distintos
grupos armados, entre otros de carteles de narcotráfico, la extrema izquierda y por
supuesto la extrema derecha, en algunos casos con colaboración y en connivencia con
agentes del Estado939 o representantes políticos940. Teniendo en cuenta que el marco de
referencia con el que se trabaja desde la jurisdicción de Justicia y Paz tiene que ver con la
responsabilidad de este tipo de crímenes por parte de los grupos organizados al margen
de la ley desmovilizados a través del proceso de la Ley 975 de 2005, el presente análisis
se centrará en los elementos que llevan a la Sala a considerar cual fue el accionar de los
grupos paramilitares o de autodefensa, más exactamente de las estructuras que
componían las AUC, entre ellos el Bloque Bananero, cuyo nefasto accionar contra la

937
SUÁREZ Andrés Fernando, Identidades Políticas y Exterminio Recíproco. Masacres y guerra en Urabá 1991-2001. IEPRI y
La Carreta Editores, Bogotá, 2007. URIBE María Victoria y Vásquez, Teófi lo. Enterrar y Callar. Las mascares en Colombia
1980-1993, Volumen 1, Bogotá, Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos, Fundation Terre des
Hommes, 1995.
938
Ver: Fein, Helen, Genocide: A Sociological Perspective, Sage Publications Ltd, London, 1993. Sobre las dificultades y los
desafíos del genocidio para los estudios criminológicos ver: Brannigan; Criminology and the Holocaust, Crime &
Delinquency, 257-276, quien explica las limitaciones de la criminología tradicional para la investigación del genocidio y
propone más estudios criminológicos con base histórica; en igual sentido sugiere Jamieson, R., Towards a Criminology of
War in Europe, en: V. Ruggiero/ N. Smith/ I. Taylor (eds.), The: New European Criminology, London: Routledge, 480- 506.
Jamieson, R. (1999), Genocide and the Social Production of Immorality, Theoretical Criminology 3(2), 131-146, en los que
sostiene que: «we need a criminology that can problematize the relationship between moral and immoral acts and social
order in conditions of peace and war.» [«necesitamos una criminología que pueda problematizar la relación entre actos
morales e inmorales y el orden social en condiciones de paz y de guerra.»]. Ver también: Yacoubian, G.S. (Jr.), The
(in)significance of genocidal behavior to the discipline of criminology, Crime, Law & Social Change 34, 7-19., quien explica
las posibilidades limitadas de la criminología tradicional y sugiere mayor intercambio entre la criminología y el derecho penal
internacional. Ver en igual sentido: Woolford, A. (2006), Making Genocide Unthinkable: Three Guidelines for a Critical
Criminology of Genocide, Critical Criminology 14 (1), 87-106, quien boga por una criminología del genocidio que sea (1)
reflexiva y no redentora, (2) indisciplinada y crítica, y (3) responsable. Véase también: Day, L.E./ M. Vandiver (2000),
Criminology and genocide studies: Notes on what might have been and what still could be, Crime, Law & Social Change 34,
43-59. Véase en general sobre los problemas de una interpretación reduccionista del concepto «delito» («crime»), en:
Jäger, H. (1967), Verbrechen unter totalitärer Herrschaft, Olten/Freiburg i.Br.: Walter-Verlag. Jäger, H. (1985), Individuelle
Zurechnung kollektiven Verhaltens, Zur strafrechtlich-kriminologischen Bedeutung der Gruppendynamik, Frankfurt a.M.:
Alfred Metzner; Jäger, H. (1989), Makrokriminalität, Studien zur Kriminologie kollektiver Gewalt, Frankfurt a.M.: Suhrkamp.
939
El Departamento Administrativo Nacional de Estadística –DANE- recopiló información que da cuenta de que agentes
estatales, principalmente miembros del Ejército y la policía, son los perpetradores que ocupan el segundo lugar entre los
responsables de la violencia contra la Unión Patriótica, ver: Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE),
“Base de datos sobre conflicto y violencia política”
940
Corte Suprema de Justicia, Sala Penal, Sentencia del 15 de mayo de 2013, única instancia 33118, I., Cesar Pérez García.
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democracia se presentó en todo el país, pero que tuvo unos desarrollos desastrosos en la
región de Urabá941.

964. Respecto a esto último, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos


recopiló amplia información, y pudo concluir que: (i) los crímenes cometidos contra la
Unión Patriótica tuvieron la intención de atacar y eliminar a sus miembros y
simpatizantes; (ii) que estos hechos se enmarcan en un patrón sistemático de violencia942;
y que, (iii) gran parte de ellos, fueron perpetrados mediante la supuesta coordinación
operativa entre miembros del Ejército y grupos paramilitares, a través del llamado “Plan
golpe de gracia”; asimismo, (iv) que dicha ejecución criminal refleja la situación de los
miembros de la Unión Patriótica, los actos de hostigamientos, persecución y atentados en
su contra, y la impunidad en que se mantienen tales hechos; y (v) por tales razones se
constituye en un crimen contra la humanidad943.

965. La Sala también tuvo en cuenta a la hora de proferir la presente sentencia, que el
Programa Presidencial de Derechos Humanos de la Vicepresidencia de la República
elaboró un informe en 2008 en el que estableció que durante el período de 1984 a 1993,
540 homicidios fueron cometidos en contra de los miembros de la Unión Patriótica, un
hecho significativo si se tiene en cuenta que las víctimas de este partido político
representan el 40% del total de la violencia política; aunque, de forma crítica para los
años 1986 y 1987 aquellos crímenes llegaron a representar casi el 60% del total de
víctimas944.

966. Ahora bien, elementos como los anteriores han llevado a este Tribunal a revisar si
la violencia contra la Unión Patriótica puede ser caracterizada como sistemática, masiva y
generalizada, para ello se ha valido del análisis de la realidad Colombiana, especialmente
de la región del Urabá, así como de la revisión de informes, estudios y documentos

941
Ver: Informe del Defensor del Pueblo titulado “Estudio de casos de homicidio de miembros de la Unión Patriótica y
Esperanza, Paz y Libertad”.
942
En julio de 2009 el señor Mario Iguarán, entonces Fiscal General de la Nación, sostuvo en una entrevista que “tanto en
el caso de Luis Carlos Galán como en el de Manuel Cepeda, se advierte un ataque sistemático, generalizado y subjetivo
contra el Nuevo Liberalismo y la Unión Patriótica, respectivamente, lo cual permite predicar un exterminio, en consecuencia
un delito de lesa humanidad y, en tal virtud, la no prescripción de la acción penal”. Cfr. nota de prensa aparecida en el
diario “El Tiempo” el 4 de julio de 2009, titulada “Intervención de la Procuraduría ha sido mínima en muchos casos, afirma
fiscal Mario Iguarán”.
943
CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS. CASO MANUEL CEPEDA VARGAS VS. COLOMBIA. Sentencia de 26
de mayo de 2010. (Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas).
944
Ver: Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), “Base de datos sobre conflicto y violencia política”,
Datos DANE procesados por CERAC, Bogotá, 31 de enero de 2008. En el mismo sentido, el perito Eduardo Cifuentes
sostuvo en la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, en el caso Manuel Cepeda Vargas vs. Colombia que “de
conformidad con las cifras registradas, la magnitud de victimización de la UP en relación con la totalidad de casos
reportados de violencia política en el país en el período entre 1984 y 1994, (que incluye a todos los partidos y movimientos
políticos reconocidos legalmente, y a los sectores sociales azotados por la violencia) es del 40%, sin embargo, en 1986 y
1987 llegó a ser del 60%”. Dictamen rendido ante fedatario público (affidávit) por el perito Eduardo Cifuentes Muñoz el 7
de enero de 2010.
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preparados y presentados por organismos o entidades tanto nacionales como


internacionales, en los cuales se pudo establecer que la violencia ejercida contra la UP
estuvo asociada principalmente a que los perpetradores “identificaban” o relacionaban a
sus miembros con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC-EP), esto
pese a los distintos intentos de los dirigentes del partido por deslindarse de aquel grupo
insurgente y su accionar armado. Unida a esta equivocada percepción, la Sala también
pudo encontrar que durante 1987 y 1993 numerosos funcionarios públicos afirmaron
públicamente que la UP y el PCC tenían un vínculo directo con el accionar armado de las
FARC, lo que en últimas repercutió y estimuló acciones de segregación, discriminación y
estigmatización sobre los miembros, simpatizantes y representantes de aquellos partidos
políticos945.

967. Uno de los ejemplos de este tipo “etiquetamiento” insurgente hacia los miembros
de la UP está presentado en el Primer Informe de Memoria Histórica, Trujillo, una tragedia
que no cesa, en el cual se señaló que: “[e]ste exterminio [de la UP], iniciado desde 1986,
partía de la premisa de que la Unión Patriótica era el brazo político de las FARC para
justificar la legitimidad de una acción contrainsurgente que fuera más allá de los
combatientes y se extendiera hacia los partidos y movimientos políticos que se
consideraran como afines a las guerrillas”946. Asimismo, la Corte Constitucional encontró
que: “[l]a vinculación formal o simplemente de palabra con la Unión Patriótica, en el
contexto de la persecución política e ideológica desatada contra sus miembros o
simpatizantes, es un factor determinante en el caso”947.

968. Así mismo, la Sala encontró que están documentados tanto en procesos judiciales
como en informes o investigaciones académicas, que debido a las denuncias de los
miembros de la UP se descubrieron ante la opinión pública cinco planes en contra de los
miembros de este movimiento político, a saber: “Operación Cóndor” (1985), “Baile Rojo”
(1986), “Esmeralda” (1988), “Golpe de Gracia” (1992), y “Retorno” (1993)948. En el caso
del llamado plan “operación golpe de gracia”, los señores Manuel Cepeda Vargas, Hernán
Motta Motta, Ovidio Marulanda y Octavio Sarmiento denunciaron este hecho, en agosto
de 1993, durante una reunión con el entonces Ministro de Defensa, señor Rafael Pardo
Rueda. El Estado negó la existencia de tal plan de exterminio, considerando que las
pruebas de tal denuncia sólo se sustentaban en declaraciones de representantes de la

945
Ver: CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS. CASO MANUEL CEPEDA VARGAS VS. COLOMBIA. Sentencia
de 26 de mayo de 2010. (Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas); Parr. 83 y ss.
946
SANCHÉZ, Gonzalo y otros, Trujillo, una tragedia que no cesa, Primer informe del Grupo de Memoria Histórica de la
CNRR, Editorial Taurus. Semana. 2008.
947
Corte Constitucional, Sentencia T-439 de 1992, M.P. Eduardo Cifuentes Muñóz.
948
Ver: Campos Zornosa, Yezid, Memorias de los Silenciados. Editorial CEICOS. Bogotá. 2003.
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Unión Patriótica y el Partido Comunista Colombiano (PCC). Sin embargo, frente a la


negación del Estado sobre la supuesta existencia de un plan exterminador contra la Unión
Patriótica y el Partido Comunista Colombiano (PCC), algunas autoridades estatales
probaron el comportamiento omisivo del mismo Estado frente a sus obligaciones de
proteger y prevenir violaciones de derechos contra los miembros de esos partidos949.

969. En ese orden de ideas y ante la gravedad de los hechos expuestos por la Fiscalía
17 de Justicia y Paz, en los cuales se han presentado delitos cometidos en contra de
simpatizantes, miembros o militantes del partido político Unión Patriótica (UP), en el
presente apartado la Sala se ocupará de estudiar tal situación. Para el desarrollo de la
presente decisión se analizaron factores jurídicos, sociales, políticos y criminales presentes
en el fenómeno de estigmatización, hostigamiento, persecución y exterminio de miembros
o simpatizantes de la UP.

970. Para lograr el cometido enunciado anteriormente, la Sala ha realizado un


acercamiento al desarrollo histórico y político de la Unión Patriótica, así como un análisis
del proceso de violencia al cual fue sometida la UP para evitar su ejercicio político,
contextualizado en un fenómeno de macrocriminalidad de las AUC y de su Bloque
Bananero (ver contexto). Una vez revisados algunos de los elementos claves del punto
anterior, fundamentalmente la violación a los derechos fundamentales y políticos de la UP
como minoría política, la Sala se centrará en analizar, con un tamiz jurídico penal, si los
hechos presentados por la Fiscalía 17 de Justicia y Paz, hacen parte de una estrategia de
exterminio de la UP y por ende de un ejercicio criminal que puede ser definido como
genocidio, en este caso para buscar la eliminación de un grupo político.

Unión Patriótica: búsqueda de la paz, participación política y violencia socio-


política950

971. El gobierno del presidente Belisario Betancur (1982-1986) impulsó un proceso de


paz que implicó entre otros aspectos: beneficios para los desmovilizados como la amnistía
o el indulto, propuesta de ley de partidos, proyectos de reforma agraria y planes de
rehabilitación social951. Se trató de un nuevo camino en la búsqueda de la pacificación del

949
Ver: resolución emitida por la Procuraduría Segunda Distrital de Santa Fé de Bogotá en el expediente No. 143-6444/96,
en 1999 y sentencia emitida por la Sección Tercera Sala de Decisión del Tribunal Administrativo de Descongestión de
Bogotá en el expediente No. 12680 el 8 de febrero de 2001.
950
Este término es desarrollado en Gonzáles, Fernando, Bolívar, Ingrid, y Vázquez, Teófilo, Violencia Política en Colombia.
De la Nación Fragmentada a la Construcción del Estado, Cinep, Bogotá, 2003.
951
Ver: http://www.ideaspaz.org/secciones/publicaciones/download_papers_fip/mirada_atras_web.pdf, consultada el 13 de
julio de 2013.
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país, el cual desafortunadamente no contaba con respaldo de algunos sectores de los


partidos tradicionales (liberal y conservador), de miembros del Ejército, asociados del
gremio ganadero y del sector agrario, algunas guerrillas y sectores de izquierda, entre
otros. Debido a este rechazo parcial, algunos estudios académicos consideran que: “(…)
el proceso de paz chocó desde un comienzo con ‘enemigos de paz’ agazapados en todos
los rincones del Estado”952. Algunos voceros de las Fuerzas Militares argumentaron que tal
proceso se convertía para ellas en un instrumento de intromisión del poder civil en su
tradicional autonomía para la conducción del orden público. Al respecto, el Ministro de
Defensa Landazábal escribió, a finales de 1982 que: “cuando se ha estado a punto de
obtener la victoria militar definitiva sobre los alzados en armas, la acción de las
autoridades políticas interviene transformado sus derrotas en victorias de gran resonancia
(…) esperamos que esta sea la última amnistía”953.

972. Obviamente este proceso de paz impactaría en algunas regiones del país, como es
el caso de Urabá. Una de las consecuencias del proceso fue el fortalecimiento del
movimiento sindical en la zona bananera, lo que propició avances en los procesos de
reivindicación de derechos laborales individuales y colectivos. Algo novedoso en una
región en la que históricamente se presentaron enfrentamientos y fuertes polarizaciones
entre obreros y patronos, generando episodios de violencia en medio del proceso de
conformación de los sindicatos954. Otra de las consecuencias o impactos fue que los
sindicatos afianzaron sus vínculos o filiaciones con proyectos políticos regionales y
nacionales955. Así mismo, los sindicatos tomaron como bandera de sus proyectos la
promoción y el ejercicio de las libertades sindicales, la legalidad de los paros, el derecho a
la huelga y la presentación de pliegos de peticiones. Por tanto, estas reivindicaciones
permearon a los obreros, a las asociaciones de campesinos, quienes impulsados por los
sindicatos llevaron su labor a las fincas bananeras, quienes tuvieron que aplicar las
normas laborales relacionadas con el salario mínimo, la jornada legal de trabajo, el
régimen de horas extras y la contratación colectiva, entre otros956. Frente a este tipo de

952
Socorro Ramírez, en: Medina, Medófilo y Sánchez, Efraín. Tiempos de paz, acuerdos en Colombia, 1902-1994. El
proceso de paz de Belisario Betancur. Alcaldía Mayor de Bogotá. Abril de 2003. Pág. 277.
953
Ramírez, Socorro y Restrepo, Luís Alberto. Actores en conflicto por la paz. Bogotá, Siglo XXI editores. 1991. Pág. 115.
954
CORREA, Guillermo y otros, Imperceptiblemente nos enterraron: exclusión del sindicalismo y lógicas de la violencia
antisindical en Colombia (1979-2010), Comisión Colombiana de Juristas y Escuela Nacional Sindical, Giro Ediciones Ltda.,
Bogotá D.C., 2012, p. 100 y ss.
955
Las principales filiaciones de esos y de otros sindicatos eran: Sindicato de Braceros, Sindebras, (CTC); Sindicato de
Trabajadores y Agricultores de Urabá (CTC); Sintrabanano (FEDETA, PCC); Sintrainagro (fundado por la UTC con
orientación del PC-ML); Sintraifru (CTC); Sintraexpoban (UTC); Sintrauniban; Sindejornaleros (MOIR); Utriban (MOIR,
sindicalismo independiente); Sindicato de Colonos y Asalariados (PCC) y Sintrainagro (unificación de Sintrabanano y
Sintrainagro), entre otros. Por tendencias, la CTC insinúa el partido liberal; UTC, las fuerzas conservadoras; FEDETA al
partido comunista; Sintrainagro o al PC-ML y el EPL y; Sintrabanano, al PCC y a las FARC. Ver: VILLEGAS, Lucelly. La
politización de la vida en Urabá. Serie Papeles de Trabajo, Iner, 1995.
956
Revista Semana, No. 315, 17-23 de mayo de 1988, p. 32. Ver también Gerard Martin, "Desarrollo Económico...", pp. 58-
68.
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acciones, la extrema derecha, a través de su brazo armado (autodefensas y paramilitares)


reaccionaron de forma violenta, haciendo circular amenazas a través de panfletos en
primer lugar y luego llevando hombres armados a las fincas para amenazar y amedrentar
a quienes apoyaran las iniciativas mencionadas en materia laboral; posteriormente lo que
ocurrió fue la incursión armada a través de masacres, homicidios selectivos,
desplazamientos y desapariciones forzadas, despojo de tierras, torturas y en general actos
violatorios de los derechos humanos957.

973. Por su parte, los grupos insurgentes de izquierda o guerrillas de corte comunista y
socialista, no respondieron de la misma manera respecto de la amnistía propuesta por el
presidente Betancur. Los grupos con menos combatientes se mostraron totalmente ajenos
u hostiles a la propuesta. Las FARC, a través de Jacobo Arenas, aseguraron que la
amnistía era tan importante que lucharían por transformarla en un instrumento de
movilización de opinión y de amplios grupos sociales para avanzar en la apertura
democrática y la reforma de la Constitución. Por último, el actor y destinatario
fundamental de la amnistía, el M-19, respondió a través de Jaime Bateman que: “la
amnistía era un acto unilateral del Gobierno y que no había sido pactado con la guerrilla”
958
y que “no se acogería a la amnistía pues significaba un acto de traición.” Sobre esa
perspectiva, el Gobierno decidió suspender las conversaciones con el grupo M-19 y
realizarlas directamente con la FARC. En consecuencia, el 30 de enero de 1983, en el
municipio de Colombia (Huila), representantes de las FARC se reunieron con los miembros
de la Comisión de Paz, y expresaron su acuerdo con la decisión del Presidente de crear
condiciones para una amnistía que consolidara y prolongara la paz entre los colombianos.
Finalmente, el 28 de marzo de 1984, en la Uribe (Meta), la Comisión de Paz y las FARC
firmaron el primer acuerdo.

974. Una vez firmados los acuerdos se puso en marcha el proceso de proselitismo de
algunos movimientos políticos en Urabá, por ejemplo el Partido Comunista Marxista
Leninista y el Frente Popular, cercanos al Ejército Popular de Liberación (EPL). De igual
manera, ante la oportunidad de reivindicaciones laborales, aumentaron las cifras de
afiliación a los sindicatos y el número de negociaciones colectivas. En esta región es
evidente la relación directa entre el auge de los sindicatos y los partidos políticos de

957
Ver: http://www.acnur.org/t3/uploads/media/COI_675.pdf?view=1, visitada el 15 de julio de 2013.
958
Revista Semana No. 30 noviembre-diciembre de 1982.
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izquierda, fortalecidas luego de las negociaciones políticas entre el gobierno nacional del
Presidente Betancur y las guerrillas del EPL y las FARC959.

975. Al estudiar los dos objetivos fundamentales que tuvo el presidente Betancur al
conformar la Comisión y poner en marcha el proceso de paz, se encuentra que el primer
objetivo fue adelantar diálogos con los diversos sectores sociales del país (sindicatos,
grupos económicos, partidos y movimientos políticos, organizaciones sociales), y el
segundo objetivo fue formular y presentar al gobierno nacional sugerencias y propuestas
sobre temas de interés nacional como: la incorporación de sectores divergentes y
excluidos a procesos democráticos para que participaran de la vida social, política y
económica del país; la recuperación y desarrollo de regiones que requerían de estrategias
especiales del Estado; y el mejoramiento de la justicia y la seguridad de los ciudadanos,
entre otros960.

976. Como producto de la revisión del contexto de la región de Urabá, la Sala pudo
constatar la presencia histórica de grupos insurgentes o guerrillas de izquierda como el
Ejército Popular de Liberación (EPL), el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y las FARC-
EP. Resulta importante destacar que el EPL surgió a mediados de los años sesenta como
propuesta de algunos miembros del Partido Comunista Marxista-Leninista (PC-ML), el cual
tenía fines revolucionarios, los cuales desarrollarían un componente de lucha armada
principalmente en el campo, para lo cual escogió las partes altas de los ríos Sinú y San
Jorge, en el departamento de Córdoba y allí implantar su proyecto político-militar961. A
mediados de los años sesenta este proyecto fue replicado y apareció en las montañas del
Urabá Antioqueño y en otras zonas del gran Urabá, lugar de las históricas guerrillas
Liberales. En 1982 el EPL centró su presencia militar y política en el eje bananero; su
accionar se dio en las zonas rurales, en territorios urbanos, y suburbanos. Dentro del
accionar de este grupo insurgente, luego de revisar documentación sobre su proceso de
desmovilización, varias entrevistas e informes dan cuenta de que promovió invasiones de
tierra y realizó trabajo ideológico entre campesinos y sindicalistas de la región; entre ellos
a algunos miembros de SINTAGRO, organización sindical que hacia 1984, afrontó un
fuerte proceso de violencia que redujo a sus afiliados a sólo 200 sindicalistas962.

959
CORREA, Guillermo y otros, Imperceptiblemente nos enterraron: exclusión del sindicalismo y lógicas de la violencia
antisindical en Colombia (1979-2010), Comisión Colombiana de Juristas y Escuela Nacional Sindical, Giro Ediciones Ltda.,
Bogotá D.C., 2012, p. 100 y ss. En la década de los 60, se fundaron y establecieron en Urabá dos grupos guerrilleros que
impulsaron la reivindicación y la lucha por la tierra: el EPL hacia el norte y oriente de la región, y las FARC en el sur.
960
Afanador, Miguel Ángel. Amnistías e indultos, la historia reciente. Bogotá, ESAP, noviembre de 1993. Pág. 90
961
Ver: http://pdba.georgetown.edu/CLAS%20RESEARCH/Library%20and%20Documents/Peace%20Processes/1990-
1994/1991%20Feb_EPL_Acuerdo.pdf, consultada el 12 de agosto de 2013.
962
Ver: Ramírez Tobón, William. Urabá. Los inciertos confines de una crisis. Planeta. 1997. Pág. 87 y ss.
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977. La Sala pudo constatar que en la zona de Urabá se ejerció una fuerte influencia
por parte del EPL y las FARC principalmente. Sumado a lo anterior, también se pudo
documentar963, la penetración del narcotráfico en la región, a través de la compra y el
despojo de tierras, teniendo como base de su apropiación territorial, el uso y utilización
escalonada de diferentes formas de violencia. Los narcotraficantes, sus testaferros, brazos
armados y políticos, fueron generando un proceso de concentración de la tierra. Un
ejemplo de ello es que durante 1983 y 1984, la Casa Castaño, representada por Fidel y
Carlos Castaño inició un proceso de acaparamiento de grandes extensiones de tierra en
Córdoba y Urabá, se trató de un proceso de expansión para fortalecer la capacidad
ofensiva de su grupo armado, en el cual la estrategia consistió en acaparar y hacerse a
grandes haciendas para copar espacio territorial en el cual tenía influencia la guerrilla, se
trataba de “cuidar” la propiedad de empresas y ganaderos, pero al mismo tiempo obtener
corredores geográficos para el cultivo, procesamiento y tráfico de la droga.

978. El proceso de contrarreforma agraria en el Urabá964, estuvo acompañado de


ejercicio de violencia sistemática contra militantes, dirigentes y simpatizantes de
organizaciones de izquierda965. Paulatinamente, en la región se fueron consolidando
diversos grupos paramilitares o "escuadrones de la muerte", financiados y entrenados
gracias al apoyo económico de algunos sectores de empresarios del banano966, ganaderos
y narco propietarios de la tierra, quienes participaron del proceso paramilitar para
enfrentar lo que ellos percibían como un enemigo común: la alianza guerrilla,
trabajadores, sindicatos bananeros y grupos políticos de izquierda como la UP967.

979. Es en este periodo que la presencia del narcotráfico y sus expresiones armadas
ilegales, junto a la de los grupos subversivos autodenominados de izquierda, generaron
en la región la intensificación de diversas formas de violencia las cuales tuvieron como
consecuencia la ocurrencia de graves violaciones a los derechos humanos e infracciones al
DIH. Inicialmente, los grupos armados de derecha se identificaron como “Muerte a
Revolucionarios del Nordeste” y “Muerte a Sindicalistas Revolucionarios de Urabá”; sólo

963
Ver contexto construido para la presente sentencia
964
Ver: http://antioquia.gov.co/catastro/Uraba_entre_la_abundancia_y_la_disputa_territorial.pdf, visitada el 12 de julio de
2013.
965
Para una descripción completa de los planes de exterminio contra la UP véase Quiroga, Jahel, “La Unión Patriótica: El
Exterminio de una Esperanza” en Memorias: Seminario Taller. Grupo de Trabajo que Propende por la Búsqueda de una
Solución Amistosa en el Caso de la Unión Patriótica que se Adelanta ante la Comisión Interamericana de Derechos
Humanos, Procuraduría General de la Nación - Embajada de Suiza, Bogotá, 2003, pp. 137-138.
966
Hasbún
967
De los 140 grupos paramilitares identificados para la época y cuya existencia fue reconocida por el gobierno en 1987,
actuarían en Urabá los siguientes: la Juventud Anticomunista de Colombia (JACOC), de cobertura nacional; Muerte a
Revolucionarios del Nordeste (MRN), cuyo radio de acción es Antioquia; y, Muerte a Revolucionarios de Urabá (MUR), con
sede en la región. Ver: El Espectador, 1 de octubre de 1987, pp. 1A y 13A. Por ejemplo, la masacre ocurrida el 4 de marzo
de 1988 en el corregimiento de Currulao, municipio de Turbo, fue reivindicada por el Movimiento Obrero Estudiantil
Nacional Socialista, MOENS. Ver: Semana, edición No. 305, 8-14 de marzo de 1988, pp. 22-23.
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hasta los años noventa se autodenominarían y harían reconocer como grupos de


Autodefensas, encabezando su propio proyecto de control territorial. Los Castaño
publicitaron sus acciones violentas como una acción de “autodefensa campesina”, que
según ellos era una forma de respuesta a las acciones violentas de los grupos subversivos
que con permanentes extorsiones, boleteos, abigeatos y secuestros, tenían amenazados a
los grandes propietarios en la región. Al mismo tiempo, algunos sectores de ganaderos y
terratenientes de Urabá se aprovecharon de estos grupos de “autodefensas” para
impulsar un proceso de concentración de la propiedad de la tierra en la región.
Posteriormente, las autodefensas de los Castaño ocuparon, mediante acciones armadas,
los municipios de Arboletes, San Juán y San Pedro de Urabá.

980. En mayo de 1984 el EPL pactó el cese al fuego con el gobierno de Belisario
Betancur; a partir del pacto, se dedicó a fortalecer su trabajo político de apoyo al
movimiento sindical y campesino. En ese mismo año se evidenció en el crecimiento de los
afiliados a SINTAGRO, que pasó de 200 a 4.500 miembros; tal fortalecimiento les llevó a
presentar el primer pliego de peticiones y a organizar un paro que movilizó a 1.500
trabajadores de 18 fincas bananeras968.

981. En 1985 comenzó el enfrentamiento entre el Partido Comunista Colombiano (PCC)


y el PC-ML por alcanzar el control de los sindicatos de la región de Urabá; se destaca, la
confrontación entre SINTRAINAGRO, presuntamente apoyado por el EPL (PC-ML) y
SINTRABANANO, supuestamente apoyado por las FARC (PCC). Una de las consecuencias
de la movilización política del EPL fue el enfrentamiento directo con las FARC, además de
la resistencia de los empresarios del banano y de los terratenientes ganaderos. Por su
parte y por la misma época, las FARC se propusieron fortalecer en Urabá sus bases
sociales de apoyo y tomar fuerza política, implementando la estrategia de incidir en el
movimiento sindical, especialmente a través de SINTRABANANO. Al comienzo, su accionar
se centró en hacer presencia en centros poblados y fincas para realizar trabajo ideológico
en la población civil. Este proceso de consolidación política de los diversos grupos
insurgentes en Urabá generó disputas entre estos por el dominio político de la región, a
tal intensidad que segmentaron la región, especialmente el municipio de Apartadó969. En
ese sentido las FARC continuaron apoyando la parcelación de fincas, que había sido
liderada por el Partido Comunista de Colombia desde la década de los sesenta, y
promoviendo la invasión de zonas suburbanas como el barrio Policarpa en el municipio de

968
Ver: Ramírez Tobón, William. Urabá. Los inciertos confines de una crisis. Planeta. 1997. Pág. 90.
969
Las FARC dominaban el corregimiento de San José y la comuna 1 del casco urbano de Apartadó, en tanto que el EPL
dominaba el occidente del municipio más relacionado con la economía bananera. Ver: Suárez, A. Masacres, guerras e
identidades. Tesis sin publicar. Universidad Nacional de Colombia. 2006. Pág. 184.
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Apartadó; como parte de su accionar militar, iniciaron el asesinato selectivo y sistemático


de “informantes”, incrementaron la toma de centros poblados y recibieron golpes
militares, por ejemplo, en Las Cañas, municipio de Turbo, murieron 22 guerrilleros de las
FARC en una acción militar del Ejército colombiano970.

982. Los acuerdos de paz, vigentes durante mayo de 1984 y finales de 1985,
permitieron la consolidación de la izquierda en Urabá. Luego de la aprobación por parte
del Congreso de la elección popular de alcaldes a finales de diciembre de 1985. Como
resultado de lo anterior, la Unión Patriótica y el Frente Popular, como organizaciones
políticas de izquierda, obtuvieron con rapidez partidarios en Urabá y consolidaron vínculos
con los trabajadores bananeros. En 1985, el EPL rompió la tregua pactada con el
Gobierno Nacional y comenzaron los asesinatos contra miembros y simpatizantes de la
Unión Patriótica y el Frente Popular971.

983. Del fortalecimiento organizativo de los sindicatos y los movimientos políticos de


izquierda, resultó un inconformismo reactivo por parte de algunos empresarios y grandes
propietarios de la tierra en Urabá. Para unos, se proyectaba como una amenaza contra
sus intereses económicos, mientras que para los otros se generaba un riesgo sobre la
propiedad de la tierra y una pérdida de la hegemonía del partido liberal. Muestra de ello
es que: “Según el presidente de SINTRABANANO en 1985, la conquista de 52
convenciones colectivas y la movilización de los obreros indispusieron a un sector de
empresarios resentidos que colaboraron en la organización de grupos paramilitares y
violaron las convenciones colectivas”. 972 La apertura política y laboral que se obtuvo en
Urabá durante la tregua empezó a retroceder con el deterioro del proceso de paz. El
reinicio de las hostilidades entre los grupos armados irregulares y las fuerzas del Estado
en esta región no favorecieron las negociaciones entre patrones y sindicatos, y también
propició la negación de espacios políticos a nuevas fuerzas. El EPL y las FARC retornaron
a su condición de movimientos clandestinos y reanudaron el enfrentamiento con las
Fuerzas Armadas.

984. En este contexto de negociación con el gobierno, de aparición pública con fines
políticos, de ruptura del proceso de paz es que se genera la imagen de identificación
entre guerrillas como las FARC y el EPL, con los sindicatos bananeros y agrupaciones

970
Este tema fue presentado por la Fiscal Delegada en la audiencia de control de legalidad del 10 de marzo de 2011, y en
declaración del señor Freddy Alberto Medina Hoyos.
971
Ver: Bejarano, Ana María, La violencia regional y sus protagonistas: el caso de Urabá. En: Análisis Político No. 4 de mayo
a agosto de 1988.
972
Aramburo Siegert, Clara Inés, Región y orden. El lugar de la política en los órdenes regionales de Urabá. Universidad de
Antioquia. Instituto de Estudios Políticos. Medellín, 2003. Pág. 140
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políticas de izquierda, lo que a la postre resultó ser uno de los factores que desencadenó
la violencia desde 1985 contra trabajadores agremiados, líderes sindicales y militantes
políticos de izquierda en Urabá. Así mismo, se generó una dinámica en la cual: “Por la
desprotección del trabajador, las respuestas militares de parte del gobierno y las
desvinculaciones laborales, los grupos guerrilleros vieron en los sindicatos una fuente
importante para mediar en los conflictos obrero patronales. Por tal razón, unos sindicatos
tuvieron incidencia ideológica del Ejército Popular de Liberación, EPL y otros, de las FARC.
Estos vínculos ideológicos fueron los causantes de que las dos fuerzas insurgentes se
enfrentaran a muerte en el escenario laboral, ocasionando una fusión difícil de entender y
poco beneficiosa en la vida regional, entre las contradicciones laborales, políticas,
económicas y sociales” 973.

985. Sin embargo, para la Sala está claro que de lo anterior no se puede concluir que
los sindicatos y los movimientos políticos de izquierda en Urabá hubieran estado
orgánicamente vinculados a los grupos insurgentes, ni que sus miembros fueran
miembros o combatientes de los mismos. Así como lo ha resaltado la Corte IDH; “En este
caso no corresponde a la Corte determinar si existían o no vínculos entre el Senador
Cepeda y las FARC y menos aún de este grupo con el PCC o la UP. Si los funcionarios
públicos poseían información fidedigna que relacionaba al Senador Cepeda y a los demás
miembros de la UP con actividades ilegales, podían poner esta información en
conocimiento de las autoridades judiciales correspondientes.”974

986. En ese contexto y específicamente en 1985 se reiniciaron las violaciones a los


derechos humanos y la violencia antisindical en Urabá. Por ejemplo, la sede de
SINTRAINAGRO fue bombardeada y comenzó el asesinato sistemático de sindicalistas975.
El recrudecimiento de la violencia, entre otras razones, llevó al EPL a romper los diálogos
con el gobierno y por ende poner fin a su participación en el proceso de paz de 1985,
posteriormente, en el gobierno del presidente Barco (1986-1990) se declaró a Urabá
como zona de emergencia y, como consecuencia de ello, se instauró una Jefatura
Militar976, la cual operó desde abril de 1988 hasta agosto de 1990.

973
Aramburo Siegert, Clara Inés, Región y orden. El lugar de la política en los órdenes regionales de Urabá. Universidad de
Antioquia. Instituto de Estudios Políticos. Medellín, 2003. Pág. 139
974
Ver: CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS. CASO MANUEL CEPEDA VARGAS VS. COLOMBIA. Sentencia
de 26 de mayo de 2010. (Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas); Parr. 83 y ss. Cfr., en similar sentido,
Caso Tristán Donoso Vs. Panamá. Excepción Preliminar, Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 27 de enero de 2009.
Serie C No. 193, párr. 81.
975
Semana, ejemplar 315, p. 32.
976
García, C. I., Urabá ¿cruce o articulación de conflictos? En: Iepri- Fescol (Eds.), Conflictos regionales: Atlántico y Pacífico.
Bogotá: Editorial Cerec. 1999. Pág. 97.
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987. Durante el año 1986 se produjeron en Urabá hechos ilícitos como homicidios en
contra de la población civil, desapariciones forzadas, amenazas y detenciones arbitrarias,
los cuales afectaron a líderes cívicos, miembros del Partido Liberal, militantes y dirigentes
de la Unión Patriótica y del PCC, trabajadores de haciendas bananeras y ganaderas,
campesinos y sindicalistas977. Numerosos informes de derechos humanos visibilizaron tal
situación:

“Apartadó, ya en 1986 había ocupado el primer lugar en la lista de municipios


extremadamente violentos: 2.64 por mil en 1988, mientras Bogotá tenía 2.5 por mil.
El 75.05% de los muertos fueron civiles, guerrilleros el 17.05%, miembros de la
fuerza pública el 8.48%. La mayor parte de los muertos eran obreros agrícolas y
campesinos. La distribución de la violencia por municipios concentraba en Turbo y
Apartadó el 61.7% de la violencia, siendo su participación en la población de la
región del 46%. Si se agrega Chigorodó, tres municipios del eje bananero
concentraban el 69% de las muertes violentas ocurridas entre 1985 y 1990,
demostrando concentración de la violencia en el corazón económico de la región.978”

988. La Unión Patriótica, como movimiento y proyecto político, surgió el 28 de mayo de


1985; nació de una convergencia entre militantes del Partido Comunista de Colombia
(PCC), dirigentes de sectores liberales independientes y guerrilleros desmovilizados de las
FARC. Si bien, en su inicio, aquel movimiento estuvo vinculado ideológicamente con las
FARC, como un mecanismo político para su futura desmovilización, fue adquiriendo
autonomía y resonancia propia en el poder local y regional del país; la Unión Patriótica no
se ideó como partido político en el sentido estricto de la noción sino que se percibió como
una alternativa política en relación a los partidos tradicionales, para canalizar, entre otras,
las distintas expresiones de protesta e inconformismo social del país.
Desafortunadamente, solo en el primer año de su vida legal, la Unión Patriótica registró
300 militantes asesinados979. Para el periodo electoral de marzo de 1986 a 1988, la Unión
Patriótica obtuvo la más alta votación de izquierda en la historia republicana del país; sin
embargo, el éxito electoral se vio afectado por el incremento en el número de homicidios
contra sus militantes980. Para la Defensoría del Pueblo, el incremento en los homicidios
contra miembros de la Unión Patriótica se dio porque:

“(…) existe una relación directa entre el apreciable éxito electoral obtenido y la respuesta
violenta de organizaciones de extrema derecha, delincuencia organizada, grupos
paramilitares, narcotráfico y en algunos casos agentes del Estado, que ven menoscabados
sus intereses políticos y económicos.981”
977
Comité Permanente por la Defensa de los Derechos Humanos, "Itinerario de la represión y la violencia
institucionalizadas. Colombia 1986", Bogotá, C.P.D.H., 1987. De igual manera, el tema fue tratado por la Fiscal Delegada
en la audiencia de control de legalidad del 10 de marzo de 2011, y en declaración del señor Freddy Alberto Medina Hoyos.
978
Comisión andina de Juristas. Urabá. Serie Informes regionales de Derechos Humanos. Bogotá, 1994. Pág. 76.
979
Ramírez Socorro y Restrepo, Luis Alberto. Actores en conflicto por la paz. Bogotá. Editorial Presencia, 1988. Pág. 266
980
Defensoría del Pueblo, Informe del Defensor del Pueblo para el gobierno, el congreso y el Procurador general de la
Nación. Estudio de casos de homicidio de miembros de la Unión Patriótica y Esperanza, Paz y Libertad. 1992. Pág. 65
981
Ídem
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989. En el gobierno del presidente Barco (1986-1990) hubo un cambio en la estrategia


de la negociación de la paz. El objetivo principal del nuevo gobierno fue la desmovilización
y desarme de los grupos insurgentes. La propuesta de reinserción a la legalidad no tuvo
una respuesta favorable por parte de los grupos insurgentes, especialmente en las FARC,
quienes decidieron fortalecerse militarmente. En un contexto de violencia indiscriminada
en el cual participaron actores como el narcotráfico, los paramilitares, las guerrillas de
izquierda, el saldo de víctimas de todos los sectores políticos se acentuó. En 1987, luego
de la ruptura del proceso de paz con el gobierno de turno, algunos grupos insurgentes de
izquierda conformaron la Coordinadora Nacional Guerrillera, “Simón Bolívar”. Entre tanto,
en Urabá se dio un proceso de generalización de la violencia, que afectó en un alto
porcentaje a los partidos políticos de izquierda, pero también aquejó a los partidos
políticos tradicionales.

990. La respuesta del gobierno frente al fenómeno de la violencia generalizada fue


retornar al discurso de la “política de la guerra”. Entre otras situaciones, se canceló la
personería jurídica a varios sindicatos en Urabá. Tal situación propició un acercamiento de
los sindicatos “ilegalizados” alrededor de SINTRAINAGRO, la Unión Patriótica y el Frente
Popular. A la postre esto repercutiría en los resultados de las elecciones presidenciales de
1986, los cuales fueron favorables a la Unión Patriótica e iniciaron un cambio en el orden
del poder local y regional en Urabá. Tal favorabilidad política aumentó en 1988 con la
primera elección popular de alcaldes, pues la Unión Patriótica obtuvo un resultado
importante que confirmó así su ventaja política en numerosas regiones del país; en la
región de Urabá, ganó las alcaldías de Apartadó y Mutatá. Con la institucionalización de la
elección popular de Alcaldes cambió el mapa político en Colombia; la región de Urabá
pasó de ser un fortín tradicional del partido liberal a ser una fuerza electoral de los
partidos de izquierda. La disputa por el poder político local se convirtió en una
polarización violenta en la que proporcionalmente las violaciones de derechos humanos
aumentaron con el mayor apoyo electoral a la Unión Patriótica. De tal manera que:

“Esta puja alcanzó niveles nunca vistos en las regiones de conflicto donde la polarización
social tiene expresiones políticas definidas. Tal es el caso de Urabá, donde los empresarios
del banano enfrentaron a los sindicatos de sus trabajadores, y donde, como en los aciagos
tiempos de la violencia se llegó al genocidio para modificar la realidad política de la región
(…) Es el contrasentido de la democracia colombiana por lo que resulta incompleta y de
dudosa credibilidad.”982

991. Junto al fortalecimiento de la representación política, el proceso de reivindicación


de derechos de los campesinos y los obreros vino acompañado de acciones como las

982
CIEN DÍAS VISTOS POR CINEP, Camilo Castellanos. “Todo iba a cambiar pero…”. Enero a marzo de 1988. Págs. 8 y 9.
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invasiones urbanas en el eje bananero, apoyado por miembros de la UP, lo que llevó
consecuentemente al enfrentamiento entre grupos políticos de la región, al
encarcelamiento y asesinato de varios de sus líderes e incluso, a la perpetración de
masacres recurrentes. Durante el periodo de 1985 a 1990 se promovieron invasiones de
tierras en haciendas como Coldesa, Honduras, La Negra, Punta Coquitos y Puerto César.
El resultado desafortunado, la ocurrencia de masacres en tres de aquellas invasiones,
realizadas por presuntos paramilitares, creados entre 1984 y 1988 para asesinar a
campesinos y obreros agrícolas activistas de la recuperación de tierras. Igualmente,
fueron de público conocimiento las invasiones realizadas en haciendas del norte de la
región de Urabá; por ejemplo: 16 de mayo y San Antonio (municipio de San Pedro de
Urabá), Las Delicias, Las Marías y El Minuto de Dios (Arboletes) y 2 de Abril (San Juán de
Urabá)983. Entre septiembre de 1986 y junio de 1988 se desarrollaron 42 marchas
campesinas, que en un 70% estaban lideradas por organizaciones campesinas, un 18%
por organizaciones políticas y un 12% presuntamente por grupos insurgentes984.

992. Las movilizaciones sociales registradas en Urabá, entre agosto de 1983 y 1990,
tuvieron un impacto social y político alto. Durante ese periodo, se registraron 14 tomas a
oficinas públicas y movilizaciones campesinas985. Las organizaciones sociales, sindicales y
grupos de izquierda se movilizaron para dar una respuesta social a las acciones violentas
contra la población civil, los asesinatos y los desplazamientos forzados ocasionados por
los actores armados enfrentados986. Tales movilizaciones implicaron señalamientos contra
líderes de organizaciones comunitarias, militantes de grupos de izquierda y
representantes de organizaciones sindicales, que derivaron en asesinatos y amenazas. En
1987, el EPL firmó el pacto nacional con las FARC y se sumaron a la puesta en marcha de
la Coordinadora Guerrillera Simón Bolívar conjuntamente con las FARC, el ELN, el M19, el
Partido Revolucionario de los Trabajadores y el Quintín Lame. Durante el mismo año, en
Urabá aumentó considerablemente el número de personas asesinadas987.

993. Según el Centro de Investigación y Educación Popular (CINEP), durante 1988 se


produjeron más de 60 masacres, de las cuales 10 se presentaron en Antioquia, 10 en
Santander y 6 en Córdoba988. Algunas de ellas tuvieron gran impacto nacional por la

983
Villegas, Lucelly. La politización de la vida en Urabá. Serie Papeles de Trabajo, INER, 1995. Pág. 8
984
Revista Semana, Junio 27 de 1988.
985
García Sánchez, Miguel. Violencia y ciudadanía. El conflicto político en Colombia como un enfrentamiento de proyectos
ciudadanos. En: Estudios Políticos. Instituto de Estudios Políticos, Universidad de Antioquia, No. 17 (Jul. – Dic. 2000);
Medellín, p.73-88
986
Silva Vargas, Pedro Alexander. Políticas públicas sobre desplazamiento forzado en Colombia. Análisis desde una visión
compleja de los derechos humanos. Tesina de grado. Master y doctorado europeo: Derechos Humanos y Desarrollo.
Universidad Pablo de Olavide. Facultad de Derecho. Departamento de Filosofía del Derecho. Sevilla, España. 2004.
987
Amnistía Internacional, "Colombia: una crisis de derechos humanos", 1988, p. 14.
988
Ver: Periódico El Espectador, 18 de febrero de 2012, p. 23.
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sevicia y la violencia con las que se cometieron, por ejemplo las masacres en las hacienda
bananeras Honduras y La Negra, ocurridas el 4 de marzo en Turbo, que dejaron como
saldo la muerte de 20 trabajadores, junto a miembros de la Unión Patriótica; la de la
Mejor Esquina, sucedida en el departamento de Córdoba el 4 de abril de 1988, durante la
cual los paramilitares asesinaron 27 campesinos, y la de Punta Coquitos, donde
asesinaron a 42 campesinos en Turbo el 11 de abril. Según las informaciones oficiales,
todas las masacres fueron cometidas por los paramilitares bajo las órdenes de los
hermanos Castaño.

994. Para culminar el trágico año de 1988, el 11 de noviembre, un grupo de


paramilitares, con la aquiescencia de miembros de la fuerza pública, cometieron la
llamada “Masacre de Segovia”, en la cual se asesinó a medio centenar de personas; como
resultado de las investigaciones judiciales se pudo establecer que el móvil de la masacre
fue de carácter político, como un castigo a la población, porque la Unión Patriótica obtuvo
la alcaldía del municipio de Segovia y con ello afectó los intereses políticos del
Representante Liberal a la Cámara, César Pérez García quien resultó condenado como
determinador del crimen. La Corte Suprema manifestó al respecto que:

“En el nordeste del departamento de Antioquia, de marcada tradición liberal claramente


definida alrededor del liderazgo político de CÉSAR PÉREZ GARCÍA, el nuevo partido político
(Unión Patriótica) encontró un fuerte respaldo en los municipios de Segovia y Remedios
que vino a consolidarse en el año 1988 con la primera elección de alcaldes y el resultado
de esa puja electoral fue la obtención de la alcaldía y la conformación mayoritaria del
concejo municipal con miembros de la Unión Patriótica.”

“Si antes de esos hechos ya habían ocurrido en Segovia y su área rural manifestaciones
graves de persecución, desaparición de personas, masacres y otros tantos vejámenes, fue
a partir de las elecciones del año 1988 que las amenazas contra los miembros de la Unión
Patriótica y sus representantes elegidos se recrudecieron a través de anónimos, marcas en
la paredes de la población, entrega de panfletos amenazantes y actos de hostigamiento.”

“Adelantada la investigación, declarantes se refirieron a los posibles móviles de la masacre,


entre ellos, que Segovia era una población con marcada tendencia liberal y que a partir de la
elección de RITA IVONNE TOBÓN AREIZA como primera alcaldesa y representante de la
Unión Patriótica y de la mayoría de concejales de ese mismo partido político, se trataba de
un castigo a la población.”989

995. Sobre los homicidios perpetrados en la masacre de Segovia contra miembros y


simpatizantes de la Unión Patriótica, la Corte Suprema ha manifestado que son
constitutivos de crímenes de lesa humanidad, persecución política y genocidio:

“Posteriormente, remitido el expediente por competencia a la Corte Suprema de Justicia con


respaldo en la jurisprudencia vigente a partir del 1° de septiembre de 2009, la Corte estimó

989
Corte Suprema de Justicia. Proceso No. 33118. M.P. 14 de marzo de 2011 y 15 de mayo de 2013.
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que la conducta cometida por el sindicado CÉSAR PÉREZ GARCÍA, esto es, la “Masacre de
Segovia”, con fundamento en los Instrumentos Internacionales, la Jurisprudencia de las
Cortes Constitucional y Suprema de Justicia de Colombia y de la Corte Interamericana de
Derechos Humanos y particularmente los homicidios perpetrados en el Municipio de Segovia
(Antioquia) en el año 1988, son constitutivos de “Crímenes de Macrovulneración” (Lesa
Humanidad, Persecución Política y Genocidio).” (Subrayas y negrillas originales en el texto)

“Igualmente, no puede perderse de vista que se debe investigar y juzgar, no sólo a los
autores y partícipes de la conducta constitutiva de un crimen de Lesa Humanidad, sino
también y en igual medida a quien ha acordado tomar parte de una conducta o actividad
dirigida a ese fin, como sucede con el Concierto para Delinquir.”

“Finalmente, se hizo breve referencia a lo decidido por la Corte Interamericana de Derechos


Humanos, como precedente internacional, dentro de la sentencia del 26 de mayo de 2010,
en el caso de Manuel Cepeda Vargas Vs. Colombia, en la que se expuso que los crímenes,
atentados, persecución y vejámenes contra los miembros del Partido Político U.P. han sido
calificados como “Violencia Sistemática”, lo que se constituye en un elemento para la
concreción del delito de Genocidio, el cual es definido como la destrucción total o parcial del
grupo político a través de actos tales como matanza, asesinato o lesión grave de los
miembros de dicho grupo.”

“En este orden de ideas, se determinó que tal concepto adquiere total solidez y se
constituye en ley del proceso, incontrovertible e irrefutable, para estimar, que se trata de un
crimen de “Lesa Humanidad”. A más de que existió un contexto de violencia sistemática
contra los miembros de la Unión Patriótica –U.P-.”

“Como viene de verse, de conformidad con lo dispuesto por la Corte Interamericana de


Derechos Humanos y, en perfecta armonía con lo expuesto por la Corte Constitucional y
Suprema de Justicia Colombianas, los homicidios y persecuciones a los miembros y
simpatizantes del Partido Político “Unión Patriótica” estuvieron enmarcados dentro de un
plan sistemático, organizado y generalizado de exterminio, lo que claramente nos permite
colegir que se trató de conductas gravemente atentatorias de los Derechos Humanos, en
especial de la dignidad humana, constitutivas de crímenes de Lesa Humanidad y, en
específico, de Genocidio, pues, si se observa cuidadosamente lo afirmado por la Corte
Interamericana de Derechos Humanos, se cumplen a cabalidad los elementos estructurales
básicos de tal conducta punible descritos no solo en la Convención para la Prevención y
Sanción del Genocidio de 1948, sino también en los Tratados, Estatutos Ad-hoc y
jurisprudencia nacional e internacional posteriores, por lo menos, en lo relacionado con la
persecución al grupo político denominado UP.” 990

996. Según estadísticas oficiales, durante enero de 1986 hasta enero de 1988, se
cometieron en Urabá 55 asesinatos políticos: 51 contra simpatizantes, seguidores e
integrantes de la Unión Patriótica y 4 contra miembros del Partido Liberal991. En razón a la
persecución, en abril de 1987, Bernardo Jaramillo, dirigente de la Unión Patriótica, declaró
que las FARC se habían mantenido en su camino de la lucha armada, mientras que la
Unión Patriótica había iniciado un camino propio, de autonomía e independencia
política992. Entre marzo y abril de 1988, se impuso la modalidad del asesinato colectivo o
masacre, cometida contra grupos de trabajadores agrícolas sindicalizados993. Para el

990
Ibídem.
991
Oficina del Consejero Presidencial para la Rehabilitación, la Normalización y la Reconciliación, 1988.
992
Harnecker, Martha. Entrevista con la nueva izquierda. Centro de Documentación y Ediciones Latinoamericanas. México.
1988. Pág. 12.
993
La primera masacre ocurrió el 4 de marzo de 1988 en las fincas "Honduras" y "La Negra", en el corregimiento de
Currulao, municipio de Turbo. En ella murieron 28 trabajadores agrícolas, afiliados a SINTRAINAGRO y supuestos militantes
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proceso electoral de 1988, la Unión Patriótica tuvo una considerable disminución de su


caudal electoral, en parte debido al exterminio sistematizado contra sus dirigentes y
militantes994. Para 1988, la Unión Patriótica había perdido 550 militantes en masacres,
asesinatos y desapariciones, incluido su candidato presidencial, Jaime Pardo Leal, dos
senadores, dos parlamentarios, dos representantes, cinco diputados y 45 entre alcaldes y
concejales995.

997. Durante el periodo de 1988 a 1995 los grupos armados ilegales desplegaron en
Urabá la guerra por el control territorial. En dicho periodo se documentaron cientos de
asesinatos individuales, 130 masacres en el eje bananero y norte de Urabá, y el
desplazamiento forzado de campesinos996. Los grupos paramilitares se propusieron
desterrar a los grupos insurgentes y desaparecer cualquier vestigio de reivindicación
social o política de “izquierda”, presuntamente apoyar al Estado, defender la empresa
privada y la tenencia de tierra de los grandes propietarios, por todos los medios del
ejercicio de la violencia ya utilizados por la guerrilla: control armado, político, social,
militar, psicológico, judicial y fiscal. En esta guerra fueron asesinados sindicalistas,
desplazados urbanos y rurales, militantes del movimiento Esperanza Paz y Libertad, de la
Unión Patriótica y de otros grupos políticos, comerciantes, administradores de fincas,
técnicos agrícolas, dirigentes populares, jueces y abogados. Fueron asesinados por ser
considerados enemigos y abanderados de proyectos políticos de izquierda, no
tradicionales y antagónicos a los partidos tradicionales.

998. En 1989 el EPL inició un proceso de desmovilización que culminó en el gobierno


del presidente Gaviria (1990-1994). Después de 1988, los partidos políticos tradicionales
(liberal y conservador) comenzaron a ceder terreno frente al ascenso de grupos políticos
de izquierda como la Unión Patriótica; Esperanza, Paz y Libertad; Alianza Democrática M-
19, etc.

999. En las elecciones de 1990, la Unión Patriótica, a pesar de la violencia ejercida


contra sus militantes, obtuvo las alcaldías de Apartadó, Chigorodó y Mutatá, mientras que
las de Turbo y Carepa fueron para el partido liberal. Entre junio de 1990 a septiembre de
1992 fueron documentados 74 casos de homicidio contra miembros de la Unión

del Frente Popular. La segunda ocurrió en abril, en el corregimiento de Coquitos del mismo municipio. En ella murieron 27
trabajadores, supuestos invasores de haciendas bananeras. Ver: Semana, No. 305..., p. 22 y No. 311, 19-25 de abril de
1988, pp. 28-29.
994
Ver: Mondragón Héctor. “La UP y los resultados electorales”. Revista Margen Izquierda. No. 24-25. Pág. 3. El Espectador.
Análisis del 13”. Diferentes autores. 20 de marzo de 1988. Pág. 12A.
995
Giraldo, Fernando. Democracia y discurso político en la Unión Patriótica. Bogotá. CEJA, 2001, Pág. 24.
996
Ver: Instituto de Estudios Regionales, ISA. Diagnóstico sociopolítico del conflicto en las líneas de transmisión San Carlos-
Sabanalarga y Cerromatoso-Urabá. Medellín. Universidad de Antioquia. 1998.
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Patriótica997. En marzo de 1991, el EPL y un grupo disidente del ELN (Corriente de


Renovación Socialista) acuerdan con el gobierno nacional el desarme y la desmovilización
de la mayoría de sus combatientes. Por ello, las FARC deciden ocupar los espacios
geográficos y políticos dejados por aquellos grupos insurgentes y convertirse en el poder
insurgente con hegemonía en la región de Urabá. Los desmovilizados del EPL decidieron
conformar un movimiento político, conocido como Esperanza, Paz y Libertad, con
presencia activa en los municipios del norte de la región, es decir, en Necoclí, Arboletes,
San Juan, San Pedro de Urabá y los demás municipios del eje bananero. Como
movimiento político, Esperanza, Paz y Libertad continuó apoyando las reivindicaciones de
los derechos sindicales y la restitución de la tierra para los campesinos, pero sobre todo,
decidieron participar activamente en el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Industria
Agropecuaria, SINTRAINAGRO998. En los años siguientes a la consolidación del
movimiento político Esperanza, Paz y Libertad, éste fue objeto de ataques de ex
compañeros de su grupo que no se desmovilizaron, de las Milicias Bolivarianas de las
FARC y de grupos armados irregulares de derecha. Durante 1991 fueron asesinados 25
desmovilizados del EPL en la región de Urabá, presuntamente por comandos urbanos al
servicio de los militantes del EPL que no se desmovilizaron999.

1000. En 1992, la Unión Patriótica, sin perder las alcaldías ganadas en anteriores
elecciones, amplió su victoria electoral a las de Turbo, Chigorodó y Murindó1000. La disputa
por el poder político en la región de Urabá generó enfrentamientos entre militantes del
partido liberal y los de los partidos de izquierda, que fueron objeto de campañas de
desprestigio, señalados de ser parte de la guerrilla y del Partido Comunista, así como
acusados de malversar recursos públicos. La Comisión Andina de Juristas consideró que
para el año de 1992 el eje bananero era la zona más crítica de la región por el
enfrentamiento armado entre guerrilleros desmovilizados y combatientes del EPL1001.

1001. El Defensor del Pueblo de Colombia, Jaime Córdoba Triviño, evidenció en 1992 la
situación de violaciones de derechos humanos contra militantes de la Unión Patriótica en
el documento titulado Informe para el Gobierno, el Congreso y el Procurador General de

997
Defensoría del Pueblo, Informe del Defensor del Pueblo para el gobierno, el congreso y el Procurador general de la
Nación. Estudio de casos de homicidio de miembros de la Unión Patriótica y Esperanza, Paz y Libertad. 1992. Pág. 69.
998
En 1992 apareció como fuerza disidente el frente militar Bernardo Franco, no con el objetivo de reconstruir el EPL como
grupo subversivo a nivel regional o nacional, sino de participar en la Coordinadora Guerrillera Simón Bolívar y de apoyar a
las FARC. A manera de ejemplo, el movimiento político Esperanza, Paz y Libertad se consolidó en el barrio Obrero en el
municipio de Apartadó, (invasión “La Chinita”) con más de 4.700 familias en 1995.
999
Ver: El Tiempo, julio de 1992. Pág. 4A.
1000
García Sánchez, Miguel. Violencia y ciudadanía. El conflicto político en Colombia como un enfrentamiento de proyectos
ciudadanos. En: Estudios Políticos. Instituto de Estudios Políticos, Universidad de Antioquia, No. 17 (Jul. – Dic. 2000);
Medellín, p. 73-88
1001
Comisión andina de Juristas. Urabá. Serie Informes regionales de Derechos Humanos. Bogotá, 1994. p. 106
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la Nación: Estudio de caso de homicidio de miembros de la Unión Patriótica y Esperanza


Paz y Libertad. Según el Informe del Defensor, se verificó que: (i) durante 1985 a
septiembre de 1992, fueron asesinados 717 militantes de la Unión Patriótica y 113 de
Esperanza, Paz y Libertad; (ii) los seis departamentos que agruparon el 68% de todos los
casos de homicidio contra dirigentes, militantes, simpatizantes y activistas de la Unión
Patriótica corresponden a: Antioquia (21%), Meta (17.85%), Santander (11.71%),
Cundinamarca (8.08%), Huila (4.6%) y Tolima (4.46%)1002; (iii) la mayor parte de las
violaciones de los derechos humanos a la Unión Patriótica se cometieron en las zonas en
que logró el mayor respaldo electoral; (iv) la violencia se dirigió especialmente contra los
miembros que fueron elegidos para desempeñar cargos públicos; (v) la mayoría de las
acciones violentas ocurrieron durante periodos de actividad electoral1003. La Defensoría del
Pueblo precisó en su informe que:

“Se destaca en el análisis de los casos de la Unión Patriótica que el principal actor de
violencia señalado en los casos son los Grupos Paramilitares, observándose el énfasis de
este factor en las siguientes regiones: META, ANTIOQUIA, SANTANDER, MAGDALENA.
(Cuadros 35 a 58)” (…) “También son significativos los casos en que las denuncias hacen
referencia a la presunta responsabilidad de Sicarios, Desconocidos y miembros de
organismos de seguridad del Estado. (Cuadro 35)” (…) En cuanto a los casos de Esperanza,
Paz y Libertad el principal agente de violencia ha sido la Disidencia del EPL encabezada por
Caraballo y las Milicias Bolivarianas“.1004

1002. La Corte Constitucional constató la persecución política implementada contra la


Unión Patriótica y Esperanza, Paz y Libertad, especialmente entre los años 1985 a 1992,
así:

“El surgimiento de grupos, movimientos y partidos políticos minoritarios a raíz de la


desmovilización de antiguos integrantes de la guerrilla requiere de especial protección y
apoyo por parte del Estado. La institucionalización del conflicto, la dejación de las armas y
su sustitución por el ejercicio activo de la participación político-democrática y la renuncia de
la violencia como método para alcanzar el cambio social, son alternativas que deben ser
garantizadas por todas las autoridades para evitar que la llamada "guerra sucia" acabe
cerrando la posibilidad de llegar a un consenso que reúna a todos los sectores de la
población y permita la convivencia pacífica.”

(…)

“La situación de amenaza aducida es inescindible del contexto vivido por esta agrupación
política y su eliminación progresiva. Las simples cifras de muertes y desapariciones de sus
militantes o simpatizantes durante los años 1985 a 1992, suministradas por la Unión
Patriótica a esta Corte, muestran de manera fehaciente la dimensión objetiva de la
persecución política contra ella desatada, sin que por parte del Estado se hubieran tomado
las medidas suficientes para garantizar su protección especial como partido político
1002
Defensoría del Pueblo, Informe del Defensor del Pueblo para el gobierno, el congreso y el Procurador general de la
Nación. Estudio de casos de homicidio de miembros de la Unión Patriótica y Esperanza, Paz y Libertad. 1992. Págs. 99 y
100.
1003
Defensoría del Pueblo, Informe del Defensor del Pueblo para el gobierno, el congreso y el Procurador general de la
Nación. Estudio de casos de homicidio de miembros de la Unión Patriótica y Esperanza, Paz y Libertad. Págs. 38, 109-110
1004
Ibídem. Pág. 104.
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minoritario, sistemáticamente diezmado a pesar de su reconocimiento oficial (Resolución No.


37 del 20 de agosto de 1986, Registraduría Nacional del Estado Civil).” 1005

1003. La Comisión IDH, en su Segundo Informe sobre la situación de los derechos


humanos en Colombia publicado en 1993, hizo referencia al “asesinato masivo y
sistemático del grupo político denominado la Unión Patriótica”, calificando estos hechos
como un genocidio1006. También, la Comisión manifestó en su informe sobre los grupos
paramilitares y sus actos criminales contra aquel partido político, que:

“En los cinco primeros años de existencia (1985-1989), la violencia se caracteriza entonces
por ser selectiva y relativamente concentrada en las regiones de mayor éxito político y
electoral. En primer lugar, la mayor cantidad de violaciones coincide con los años
electorales, 1986 con 159 y 1988 con 212 casos, respectivamente. En segundo lugar,
Antioquia con 140, Meta con 112 y Santander con 91 casos son los departamentos de más
alto nivel de violencia, y, al mismo tiempo, las regiones de mejor resultado electoral para la
UP, tanto en 1986 como en 1988. Finalmente, son los dirigentes políticos y sindicales, 193 y
120 casos respectivamente, los núcleos más victimizados. Se destaca también que la
modalidad de violencia preferencial es el homicidio con 614 casos, o sea el 83,20 % del total
de las víctimas que se registraron hasta el 31 de diciembre de 1989. De los líderes elegidos
a corporaciones públicas en 1986 y 1988 fueron objeto de la violencia dos senadores, tres
representantes a la cámara, seis diputados departamentales, 89 concejales, dos
exconcejales, nueve alcaldes, un ex alcalde, tres candidatos a consejos y tres candidatos a
alcaldías, que representan para el mismo período el 16% de las víctimas de la UP. De
acuerdo con diversos organismos de derechos humanos, la autoría de tales hechos
correspondería tanto a los agentes estatales (Fuerzas militares, de policía y DAS) como a los
grupos paramilitares a quienes correspondería la mayor cuota de responsabilidad en la
violencia contra la UP, el 73.84%, o sea 544 casos. Los sicarios, personajes relacionados con
el bajo mundo y reiterativamente utilizados como instrumento auxiliar de la violencia
política, aparecen vinculados a 155 casos, el 21%.”

“Entre 1985 y 1989 se constituyeron decenas de grupos de justicia privada que recibieron el
nombre de "paramilitares", como agentes de grupos de narcotraficantes propietarios de
grandes áreas rurales en zonas de conflicto guerrillero. Al lado de estos grupos se crearon en
forma legal unos pocos grupos denominados de "autodefensa", sobre la base de normas que
permitían su constitución. Estos grupos se fueron asimilando a los grupos de justicia privada,
que realizaron acciones orientadas a aterrorizar a la población civil y a ejecutar presuntos
simpatizantes y agentes de las guerrillas, además de ajustes de cuentas privados. Además del
apoyo legal a los grupos de autodefensa, hubo indicios en varios casos de apoyo y tolerancia de
miembros de la fuerza pública a actos ilegales y violentos cometidos por estos grupos, incluso
después de 1989 cuando fue declarada ilegal la formación de cualquier forma de grupos de
autodefensa. Todavía en 1992, dos oficiales del Ejército fueron retirados por sospechas de
apoyo a grupos de autodefensa.”

“De la misma manera, en este lapso de tres años la Coordinadora Guerrillera Simón Bolívar ha
realizado 1.352 actos terroristas indiscriminados y ha cometido 1.560 asesinatos de civiles
denunciados a la justicia, cifra que se debe incrementar en no menos de 80%, pues muchos
crímenes son reportados como realizados por la "delincuencia común", gracias a intimidaciones
a los familiares y a la no credibilidad en el castigo para los autores”.1007

1005
Corte constitucional, Sentencia T-439 de 1992, M.P. Eduardo Cifuentes Muñoz.
1006
CIDH, Segundo Informe sobre la situación de los derechos humanos en Colombia OEA/Ser.L/V/II.84 Doc.39 rev.14
octubre 1993, Capítulo VII.
1007
CIDH, Segundo Informe sobre la situación de los derechos humanos en Colombia OEA/Ser.L/V/II.84 Doc.39 rev.14
octubre 1993, Capítulo VII.
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1004. En 1995, y desde los cuatro municipios de la zona norte de la región de Urabá, los
hermanos Castaño decidieron, y comunicaron públicamente que penetrarían el eje
bananero ahora autodenominándose como Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá
(ACCU). Según la base de datos del Instituto Popular de Capacitación (IPC), en 1996 la
región de Urabá tenía el 56% del desplazamiento del departamento de Antioquia. En
1997 el desplazamiento forzado creció en un 30% en Antioquia, mientras que en la región
de Urabá descendió en un 26% aproximadamente. En 1998 hubo el mayor número de
desplazados en Antioquia, contrario a lo sucedido en Urabá que representó solo el 5.9%
del total departamental1008. En el mismo periodo de tiempo se consolidó en Urabá el
poder paramilitar que había desplazado en 1996 a todos aquellos que no simpatizaran con
su proyecto militar y político1009.

1005. La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Mary
Robinson, constató en un informe ante la Comisión de Derechos Humanos de la ONU que:
“la actividad política colombiana se caracteriza por el alto grado de intolerancia frente a
los partidos y movimientos de oposición. El ejemplo más dramático es el caso de la Unión
Patriótica, cuyos militantes han sido víctimas de ejecuciones sistemáticas. Más de 1.500
miembros de este partido han sido asesinados desde la fundación del mismo en 1985,
incluyendo autoridades electas y la casi totalidad de sus representantes al Congreso.
Otros han tenido que exilarse y abandonar sus cargos políticos.”1010

La participación política de las minorías y la negación de sus derechos1011

1006. La Sala, ante la necesidad de analizar el fenómeno de genocidio en contra de la


Unión Patriótica, quiere resaltar el tema de la participación política de las minorías y

1008
Instituto popular de Capacitación (IPC), Documento de Estadísticas del Banco de Datos de Violencia, Derecho
Humanitario y Paz en Antioquia, 1998, en:
http://www.cinep.org.co/index.php?option=com_content&view=section&layout=blog&id=7&Itemid=32&lang=es,
consultada el 25 de octubre de 2013.
1009
Entre 1992 y 1994, la disidencia del EPL comandado por alias “Gonzalo”, comienza a atacar las bases del movimiento
político del EPL creado en razón a la desmovilización de 1991, llamado “Esperanza Paz y Libertad” o comúnmente conocidos
como “Esperanzados”, la reacción de varios de estos fue formar los Comandos Populares, es atacar a los miembros de la
UP, el Partido Comunista y a todos los que consideraban apoyos de las Farc. Transcripción escrito de acusación de la
Fiscalía 17 allegado al proceso, p. 37, presentado en audiencia de legalización como “Documentos sobre el contexto e
historia del EPL en la región y la formación de los Comandos populares”, presentado por la Fiscal 17 delegada ante Justicia
y Paz, sesión de audiencia de control de legalidad de HÉBERT Veloza García, alias H.H. o Carepollo, 5 al 7 de abril de 2011.
1010
Informe de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, presentado ante la Comisión de
Derechos Humanos el 54º período de sesiones el 9 de marzo de 1998 E/CN. 4/1998/16, párr. 58.
1011
“De hecho, el genocidio se encuentra a lo largo de la humanidad en diferentes y numerosos episodios que se remontan
varios siglos antes de Cristo. Sólo, a manera de ejemplo, merece mención la persecución de los judíos por parte de los
reyes asirios en el siglo VII antes de Cristo, momento en el cual se destruyó Samaria, extinguiendo así a diez tribus
israelitas, y las famosas caserías de brujas que tuvieron lugar en Europa en los años 1450-1750, que consistieron en la
persecución de mujeres, hecho que se comprueba en que tres cuartos de las víctimas de esa persecución fueron ellas.
También conviene recordar el genocidio de armenios a manos de los turcos en 1915-1916, que consistió en el exterminio
sistemático de hombres y el traslado forzoso de mujeres, niños y ancianos, entre otros”. Rafael Prieto Sanjuán, et.al.,
“Akayesu. El primer juicio internacional por genocidio”. Bogotá, Universidad Javeriana – Biblioteca Jurídica Dike, 2006, p.
88.
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especialmente de la Unión Patriótica (UP), realizado por la Corte Constitucional en la


Sentencia T-439 de 19921012, en la cual manifestó que:

“Derechos de participación política y problemática de la U.P., del E.P.L. y de


grupos y movimientos políticos en condiciones similares

10. Finalmente, es necesario sentar un criterio general para impedir la negación de los
derechos políticos de los partidos minoritarios, en especial, aquellos cuyo origen se
remonta a la desmovilización y reinserción de antiguos combatientes guerrilleros. El país
debe marchar por el camino del pluralismo político y la tolerancia, desterrando radicalismos
o actitudes políticas fundamentalistas que tanta violencia han generado en el pasado y en
el presente para nuestra población.

Mediante la protección individual de los derechos fundamentales del solicitante se pretende


advertir a la fuerza pública que actos de esta naturaleza no pueden volver a ocurrir. La
Corte reafirma la legitimidad de las Fuerzas Militares y de Policía para recuperar la totalidad
del territorio nacional, mediante el uso privativo de las armas y el derecho a capturar y
conducir ante la justicia a las personas que con sus actos beligerantes pretendan
desconocer el orden constitucional vigente. Pero también defiende de manera categórica
los derechos fundamentales de las personas civiles, víctimas de la confrontación armada y
del accionar de los grupos en pugna. En particular, agrupaciones políticas que finalmente
han optado por la vía democrática, abandonando los medios violentos de lucha, tienen un
derecho al apoyo institucional necesario para el ejercicio pleno de sus derechos de
participación política, así como, para garantizar su seguridad y la de sus miembros, el
acceso a los medios y mecanismos estatales indispensables para desarrollar su acción
política y poder crecer como alternativa de poder. No obstante, cabe advertir que "la
combinación de las formas de lucha como método para llegar al poder" es contraria al
orden constitucional democrático, participativo y pluralista, y su utilización manifiesta y
sostenida puede conllevar a la extinción de la personería jurídica del partido o movimiento
político que recurra a ella (CP art. 95), como quiera que ello significa el desconocimiento
del Estado social de derecho y de los fines esenciales del mismo - servir a la comunidad,
promover la prosperidad general y garantizar la efectividad de los principios, derechos y
deberes consagrados en la Constitución -, los cuales deben ser defendidos y respetados,
sin excepción, por todos los colombianos.

El país requiere que las investigaciones sobre la eliminación progresiva de los miembros y
simpatizantes de la Unión Patriótica, del movimiento político Esperanza, Paz y Libertad
(E.P.L) y de otros movimientos o partidos en condiciones semejantes, lleguen a su
culminación, por razones de justicia y porque así lo demanda la profundización del proceso
democrático y participativo consagrado en la Constitución. Correspondiéndole al Defensor
del Pueblo velar por la protección de los derechos humanos, se procederá a solicitarle su
intervención en este caso, dentro del ámbito de sus atribuciones constitucionales.”

1007. En ese mismo sentido, respecto a la participación política y la noción de partido


político, el Consejo de Estado manifestó en el caso de la Unión Patriótica que:

“4.- Sobre la noción de partido político y acerca de su función de canalizador del


derecho ciudadano de participación en el ejercicio del poder

En los sistemas de gobierno democráticos los partidos políticos se constituyen como


organizaciones que libremente conforman los ciudadanos con el propósito de canalizar su
participación en el ejercicio del poder del Estado, a partir de afiliarse a ese colectivo, a fin
de traducir y desarrollar el ideario y los programas de gobierno que se acuerdan a título

1012
Corte Constitucional, Sentencia T-439 del 2 de julio de 1992, M.P.: Eduardo Cifuentes Muñoz.
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institucional. El artículo 107 Superior determina que se garantiza a todos los ciudadanos el
derecho a fundar organizaciones y a desarrollar partidos y movimientos políticos, y la
libertad de afiliarse a ellos.

(…)

El artículo 40 ibídem reconoce a todos los ciudadanos el derecho a participar en la


conformación, ejercicio y control del poder político a través de las siguientes actuaciones:
elegir y ser elegido; tomar parte en elecciones, plebiscitos, referendos, consultas populares
y otras formas de participación ciudadana; constituir partidos, movimientos y agrupaciones
políticas sin limitación alguna, formar parte de ellos libremente y difundir sus ideas y
programas, así como también, acceder al desempeño de funciones y cargos públicos.

La Ley 130 de 1994 “Por la cual se dicta el Estatuto Básico de los partidos y movimientos
políticos, se dictan normas sobre su financiación y la de las campañas electorales y se
dictan otras disposiciones”, define los partidos y movimientos políticos en el artículo 2°,
así:

“ARTICULO 2°. DEFINICION. Los partidos son instituciones permanentes que


reflejan el pluralismo político, promueven y encauzan la participación de los
ciudadanos y contribuyen a la formación y manifestación de la voluntad popular,
con el objeto de acceder al poder, a los cargos de elección popular y de influir en
las decisiones políticas y democráticas de la Nación.

Los movimientos políticos son asociaciones de ciudadanos constituidas libremente


para influir en la formación de la voluntad política o para participar en las
elecciones.

Los partidos y movimientos políticos constituidos con el lleno de todos los


requisitos constitucionales y legales tendrán personería jurídica”.

La Corte Constitucional ha reiterado el carácter de fundamental de los derechos políticos.

En la sentencia C-329 analizó el marco participativo y democrático del Estado Social del
Derecho y sostuvo entre otras consideraciones que:

“(…) De conformidad con Preámbulo y con el artículo 1º de la Constitución,


Colombia es un Estado social de derecho, organizado en forma de república
unitaria, democrática, participativa y pluralista, fundada en el respeto a la dignidad
humana. Tales conceptos no constituyen, ha dicho la Corte, meros postulados
filosóficos, sino que deben ser realizados por una actuación del Estado dirigida al
cumplimiento de, entre otros fines esenciales, garantizar la efectividad de los
principios, derechos y deberes consagrados en la Constitución y a facilitar la
participación de todos en las decisiones que los afectan y en la vida económica,
política, administrativa y cultural de la nación.

La participación se establece en el ordenamiento constitucional colombiano como


principio y fin del Estado, influyendo no solamente dogmática, sino prácticamente,
la relación que al interior del mismo, existe entre las autoridades y los ciudadanos,
en sus diversas órbitas como la económica, política o administrativa. En atención a
dichos postulados, el Constituyente, dentro del Título de los derechos
fundamentales en la Constitución, dedicó a los derechos políticos un artículo
especial, tornándose así expresa la relevancia que en el marco
institucional tiene la participación política de los ciudadanos.

En efecto, el artículo 40 Superior establece que todo ciudadano tiene derecho a


participar en la conformación, ejercicio y control del poder político y que, en ese
orden de ideas, puede elegir y ser elegido, tomar parte en elecciones, plebiscitos,
referendos, consultas populares y otras formas de participación democrática,
constituir partidos, movimientos y agrupaciones políticas sin limitación alguna y
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formar parte de ellos libremente y difundir sus ideas y programas, revocar el


mandato de los elegidos en los casos y en la forma que establecen la Constitución
y la ley, tener iniciativa en las corporaciones públicas, interponer acciones públicas
en defensa de la Constitución y la ley y acceder al desempeño de funciones y
cargos públicos. Es decir, a la par que estableció el derecho de participación en el
poder político, estableció una serie de prerrogativas a favor de los ciudadanos
tendientes a garantizar su realización, en perfecta armonía con las disposiciones
internacionales ratificadas por Colombia en la materia”1013.

El partido político se caracteriza por su vocación de organización estable y permanente.


Proyecta su ideología a través de la construcción de programas de gobierno que traduzcan
su ideario sobre los fines del ejercicio del poder, y a partir de las orientaciones que
transmiten a sus avalados para que atienden a la filosofía que funda su existencia, en la
realización de los objetivos que la identifican. Su razón de ser es la conquista y el ejercicio
de las potestades públicas, para lo cual debe tener un apoyo popular significativo. Este
solo lo obtiene si goza de garantías plenas para su existencia y operatividad, incluida la
más importante: la posibilidad de participación político-electoral.

De conformidad con el artículo 2º de la Ley 130 de 1994, los partidos y movimientos


políticos constituidos con el cumplimiento de todos los requisitos legales y constitucionales,
tendrán personería jurídica1014.

1008. Entonces, si de lo que se trata en el contexto de un Estado Social de Derecho es


de garantizar y proteger derechos colectivos como el de elegir y ser elegido, el de
participar activamente en política sin ningún tipo de discriminación y en un entorno
democrático, las acciones de violencia ejercidas en contra de la UP atentaron y atentan de
manera injustificada contra los principios del marco constitucional colombiano.

1009. En ese orden de ideas, está claro para esta Sala que frente a los casos en los
cuales se cometieron acciones criminales en contra de los miembros o simpatizantes de la
Unión Patriótica, es deber de Estado proveer lo necesario para ofrecer a las víctimas
garantías en torno a la satisfacción de sus derechos a la verdad, a la justicia y a la
reparación; especialmente en un fenómeno que significó el exterminio de una fuerza
política que llegó a constituirse en la tercera del país en los comicios electorales de
19881015, y que para mediados de la década de los noventa se encontraba gravemente
disminuida, casi hasta su desaparición física de sus integrantes y jurídica del movimiento
político, afectando de forma grave el régimen democrático colombiano.

1013
Corte Constitucional, sentencia C-329 del 29 de abril de 2003, M.P.: Álvaro Tafur Galvis.
1014
Sobre el particular, el artículo 108 de la Constitución Política, modificado por el artículo 2º del Acto Legislativo 01 de
2009, que a su vez modificó el Acto Legislativo 01 de 2003, prevé que “El Consejo Nacional Electoral reconocerá Personería
Jurídica a los partidos, movimientos políticos y grupos significativos de ciudadanos. Estos podrán obtenerlas con votación no
inferior al tres por ciento (3%) de los votos emitidos válidamente en el territorio nacional en elecciones de Cámara de
Representantes o Senado. Las perderán si no consiguen ese porcentaje en las elecciones de las mismas Corporaciones
Públicas. Se exceptúa el régimen excepcional que se estatuya en la ley para las circunscripciones de minorías étnicas y
políticas, en las cuales bastará haber obtenido representación en el Congreso”.
1015
Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, Sentencia del 14 de marzo de 2011 en contra de Cesar Pérez García,
M.P. Javier Zapata Ortiz, Radicado No. 31118, pág., 9.
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1010. Por ende, entiende la Sala, que situaciones como la descrita deben evitarse a
través de decisiones que garanticen la socialización de fenómenos delictivos en los cuales
se presentó el exterminio de grupos poblacionales diferenciales como la UP, procurar la
realización de la justicia y por ende evitar la impunidad de los perpetradores y reparar de
forma integral los daños causados, para que un fenómeno de violencia como el que vivió
la UP no vuelva a repetirse jamás en el país, en contra de ninguna minoría política,
sexual, etárea, de género, con diferencias en sus preferencias y decisiones sexuales o de
cualquier otro tipo.

Genocidio: un delito internacional en construcción

1011. Aunque el genocidio está en proceso de construcción desde mediados de la


década de los años 40 del siglo pasado, su interpretación y aplicación no ha sido pacífica,
pues aunque representa un hecho ilícito que busca la protección de grupos poblacionales
contra su exterminio y desaparición, sólo hasta finales de los años 80 algunos
especialistas se han dedicado a dialogar en torno a la ampliación del tipo penal hacia
minorías de género, de identidad sexual, discapacidad u otras1016.

1012. El delito de genocidio ha tenido un recorrido histórico importante, que empieza


con la introducción que del fenómeno hiciera el tratadista Rafael Lemkin1017, en 1933, en
la Quinta Conferencia Internacional para la Unificación de la Ley Penal (bajo los auspicios
del Quinto Comité de la Liga de las Naciones), sin que se tuviera en cuenta a la hora de
producir el articulado. Sin embargo en la Declaración de la ONU del 11 de diciembre de
1946, se incluyó en la descripción del Genocidio como sujetos pasivos a grupos raciales,
religiosos o políticos. Finalmente en la Convención del 48 englobó a las colectividades
humanas que podían ser sujeto pasivo de este crimen, en grupos ―nacionales, étnicos,
raciales y religiosos (art. 2).

1013. El Acuerdo de Londres de 1945, suscrito entre Francia, Estados Unidos, el Reino
Unido y la Unión Soviética, adoptó el Estatuto del Tribunal Militar Internacional para
juzgar a los líderes del régimen nazi por los crímenes contra la paz, los crímenes de
guerra y los crímenes contra la humanidad, que sirvió de base para llevar a cabo los

1016
Véase SEMELIN, Jacques; Puri!er et détruire, Usages politiques des massacres et génocides, Paris: Seouil, 2005; ver
también: HARFF, Barbara and GURR, Ted; “Toward empirical theory of genocides and politicides,” International Studies
Quarterly 37, 3, 1988.
1017
Ver: http://www.preventgenocide.org/es/lemkin/escolar-americanos1946.htm, consultada el 12 de agosto de 2012.
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juicios de Núremberg y de Tokio1018. Para la Corte Constitucional: “aún cuando en el


Estatuto [del Tribunal Militar Internacional] no se emplea la expresión genocidio, ni
ninguno de los criminales nazis fue condenado en Núremberg por genocidio, la definición
de crímenes contra la humanidad que se utiliza en el artículo 6 (c) del mismo, cobija
varios de los actos que hoy en día hacen parte de la definición legal de genocidio”1019.

1014. Luego de que el Tribunal Militar Internacional de Núremberg dictó sus primeros
fallos, la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Resolución 96 del 11 de
diciembre de 1946 y declaró al genocidio como un “crimen del derecho internacional que
el mundo civilizado condena y por el cual los autores y sus cómplices, deberán ser
castigados”, en tanto supone “una negación del derecho a la existencia de grupos
humanos enteros, de la misma manera que el homicidio es la negación a un individuo
humano del derecho a vivir”. Desde entonces el Genocidio además de pertenecer a la
categoría de crímenes contra la humanidad adquirió contenido como categoría propia1020.

1015. La Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio, adoptada


por la Asamblea General de la Naciones Unidas mediante la Resolución 260ª del 9 de
diciembre de 1948 y en vigor desde el 12 de enero de 1951, aprobada en Colombia
mediante la Ley 28 de 1959, dispone en el artículo I que las partes contratantes
“confirman que el genocidio, ya sea cometido en tiempo de paz o en tiempo de guerra, es
un delito de derecho internacional que ellas se comprometen a prevenir y a sancionar”; el
artículo II consagra la primera definición normativa de genocidio; el artículo V estipula el
deber de los estados partes de castigar penalmente a los responsables de genocidio o de
cualquier otro de los actos allí consagrados; y el artículo VII prevé el juzgamiento por
cada Estado “o ante la Corte Penal Internacional que sea competente respecto a aquellas
de las Partes contratantes que hayan reconocido su jurisdicción”.

1016. La Corte Internacional de Justicia de la Haya en la Opinión Consultiva sobre las


Reservas a esa Convención (1951), declaró que la prohibición del genocidio constituye
una norma consuetudinaria o de ius cogens que vincula a los Estados al margen de
cualquier vínculo formal1021.

1018
“El Tribunal de Nuremberg culminó con la acusación formal a 19 criminales nazi, 12 de los cuales fueron condenados a
pena de muerte por crímenes contra la paz, crímenes de guerra y crímenes contra la humanidad. El Tribunal de Tokio sólo
juzgó crímenes de guerra, y condenó a 25 personas a prisión, pero ninguna cumplió la totalidad de su condena y la mayoría
fue liberada hacia finales de la década de los años 50”. Corte Constitucional, Sentencia C-578 de 2002.
1019
Sentencia C-578 de 2002.
1020
Cfr., Kai Ambos, “Temas de Derecho Penal Internacional y Europeo” (Trad. Martha Donís). Madrid, Marcial Pons, 2006,
p.271.
1021
CIJ, Opinión Consultiva del 28 de mayo de 1951, p.21. Esta posición fue reafirmada en la Sentencia del 11 de julio de
1996, en el asunto de la aplicación de la Convención para la Prevención y el Castigo del Crimen de Genocidio en el caso
Bosnia-Herzegovina c/ Yugoslavia). El texto integral de la Opinión Consultiva se puede consultar en la página oficial de
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1017. En el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional1022, su artículo 5º, asignó


competencia a la Corte para enjuiciar “los crímenes más graves de trascendencia para la
comunidad internacional en su conjunto”, mientras el artículo 6º tipificó expresamente el
delito de genocidio.

1018. Por tanto, el genocidio1023, representa una aleve afrenta a la vida y la integridad
física de los miembros de un grupo, pues niega la existencia misma de la humanidad. En
cuanto a su tipificación internacional, la Convención para la Prevención y la Sanción del
Genocidio lo configuró en los siguientes términos:

“Artículo II.- En la presente Convención, se entiende por genocidio cualquiera de los actos
mencionados a continuación, perpetrados con la intención de destruir, total o
parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso, como tal:

a) Matanza de miembros del grupo;


b) Lesión grave a la integridad física o mental de los miembros del grupo;
c) Sometimiento intencional del grupo a condiciones de existencia que hayan de acarrear
su destrucción física, total o parcial;
d) Medidas destinadas a impedir los nacimientos en el seno del grupo;
e) Traslado por fuerza de niños del grupo a otro grupo”.

1019. Sin embargo, para el análisis del caso concreto de los ataques contra la UP, la Sala
considera importante destacar la interpretación que hace sobre el elemento decisivo del
genocidio el Relator Especial para el Proyecto de Código de Crímenes contra la Paz y la
Seguridad de la Humanidad, en su IV Informe, de marzo de 1986, en el cual se destacó
que: “aparece indudable que la intención de los autores tanto de la Convención sobre el
Genocidio como del Proyecto de Código era la de reconocer como consumado el
Genocidio aún en el caso en que el acto (homicidio, etc.) hubiere sido cometido respecto
de un solo miembro de un grupo determinado, con la intención de destruirlo ―total o
parcialmente”. A su juicio, ―lo decisivo para la noción de Genocidio es la intención1024.

1020. En el mismo sentido se pronunció el Secretario General de la ONU en su carta al


Presidente del Consejo de Seguridad del 24 de mayo de 1994: “Lo que hace que los
crímenes de asesinatos en masa y los crímenes de lesa humanidad constituyan Genocidio
es el elemento de la intención de destruir total o parcialmente a un grupo determinado.
Para constituir Genocidio conforme a las disposiciones de la Convención, los crímenes

Internet de la Corte Internacional de Justicia: http://www.icj-


cij.org/docket/index.php?p1=3&p2=4&k=90&case=12&code=ppcg&p3=4
1022
El Estatuto de la Corte Penal Internacional fue adoptado por la Conferencia de Plenipotenciarios de la Naciones Unidas,
en la ciudad de Roma, el 17 de julio de 1998.
1023
Schabas, William, “Genocide in International Law”. Cambridge University Press, Cambridge, 2000, p. 345.
1024
Ver: http://www.oas.org/es/cidh/decisiones/corte/12.573FondoEsp.pdf, en el que se cita el Doc. A/CN.4/398, 11 de
marzo de 1986, consultada el 4 de septiembre de 2012.
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contra un número de personas deben estar dirigidos a su colectividad o a esas personas


en su carácter o capacidad colectiva. Ello puede deducirse de las palabras ―como tal que
aparecen en el artículo II de la Convención.”1025

1021. El Relator Especial para el Proyecto de Código de Crímenes contra la Paz y la


Seguridad de la Humanidad, en el mismo IV Informe ya citado, afirmó: “Es claro que
estos conceptos, aunque convergentes hasta cierto punto, no coincidan exactamente (...)
Un grupo nacional abarca con frecuencia diversos grupos étnicos (...) El concepto de
nación no coincide con el grupo étnico y se caracteriza por la voluntad de vivir en común,
un ideal común, un objetivo común e inspiraciones comunes (...) El vínculo étnico posee
en mayor grado un carácter cultural, se funda en los valores de la civilización, y se
caracteriza por un estilo de vida, un modo de pensar, una concepción común de la vida y
de las cosas; el grupo étnico se basa más profundamente en una cosmogonía. (...) Por el
contrario, el elemento racial se refiere más típicamente a características físicas
comunes”1026

1022. En el caso de los tribunales nacionales se destaca, por ejemplo, el juicio seguido
en Israel contra Adolph Eichman por sus actos durante la segunda guerra mundial, quien
en 1961 fue condenado a muerte por el genocidio contra el pueblo judío bajo la idea de
que “aquellos crímenes cuya comisión afecta a toda la humanidad y ofende la conciencia
y el derecho de todas las naciones constituyen delicta iuris gentium”1027.

1023. También se destaca que el Tribunal Penal Internacional para Ruanda1028, creado
por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para enjuiciar a los responsables del
genocidio y de otras violaciones de similar naturaleza durante el conflicto entre las etnias
Hutu y Tutsi en África, fue la instancia judicial que profirió la primera condena por el
crimen de genocidio1029.

1024. En cuanto al Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia1030, creado


por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas para juzgar las graves violaciones del

1025
Doc. S/1994/674, mayo 27 de 1994 parr. 97.
1026
o.c. parr. 58.
1027
Cfr., Corte Constitucional, Sentencia C-578 de 2002.
1028
El Tribunal Penal Internacional para Ruanda fue creado por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas mediante la
Resolución 955 del 8 de noviembre de 1994. Posteriormente, mediante la Resolución 977 del 22 de febrero de 1995, el
Consejo de Seguridad designó la ciudad de Arusha (República Unida de Tanzania) como sede oficial del Tribunal.
1029
ICTR-96-4-T, Prosecutor vs. Akayesu. Sentencia de Primera instancia del 2 de septiembre de 1998.
1030
El Tribunal Internacional encargado de juzgar las personas responsables de graves violaciones del Derecho
Internacional Humanitario en el territorio de la antigua Yugoslavia fue creado por el Consejo de Seguridad de las Naciones
Unidas mediante la Resolución 808 del 22 de febrero de 1993. El Estatuto del Tribunal fue adoptado por medio de la
Resolución 827 del 25 de mayo de 1993.
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derecho internacional humanitario cometidas en el territorio de los Balcanes desde 1991,


en particular los ataques Serbios contra Musulmanes Bosnios. En este caso se consideró
que se había comprobado la persecución y exterminio de un grupo por razones étnicas.

1025. Por su parte, la Corte Interamericana de Derechos Humanos en Sentencia de 25


de noviembre de 2006, Caso Miguel Castro Castro Vs. Perú, realizó precisiones sobre el
genocidio político al tratar el delito de genocidio de acuerdo a las leyes peruanas en
contra del grupo de prisioneros de los pabellones 1A y 4B acusados de pertenecer al
Partido Comunista del Perú1031. Igualmente, en la Sentencia de 29 de abril de 2004, Caso
Masacre Plan de Sánchez Vs. Guatemala, manifestó que los crímenes cometidos en
ejecución de la política de tierra arrasada, incluyendo la masacre de Plan de Sánchez,
constituyen genocidio contra el pueblo indígena-maya de Guatemala a la luz del tipo
penal de genocidio1032.

1026. Por su parte, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (Comisión IDH),


admitió el caso colectivo No. 11.227, que presentaron la dirección nacional de la UP, la
Corporación Reiniciar y la Comisión Colombiana de Juristas. En su informe de admisión1033
la Comisión IDH señaló: “Los hechos alegados por los peticionarios exponen una situación
que comparte muchas características con el fenómeno de genocidio y se podría entender
que sí lo constituyen, interpretando este término de conformidad con su uso corriente”
(…) “los peticionarios han presentado argumentos que procuran establecer una práctica
de asesinatos políticos en masa y la persecución extrema de los miembros de la Unión
Patriótica con la intención de eliminar físicamente al partido y de diluir su fuerza política.
Los peticionarios anexaron a su petición una lista de 1.163 miembros de la Unión
Patriótica que fueron ejecutados extrajudicialmente entre 1985 y 1993. Presentaron,
asimismo, una lista de 123 personas que fueron desaparecidas por la fuerza, otra de 43
personas que sobrevivieron atentados de asesinato y de 225 personas que recibieron
amenazas durante el mismo período” (parágrafos 24 y 25).

1027. Igualmente, en febrero de 1994, la Comisión Interamericana elaboró su informe


final en el caso No. 10.473 por el homicidio contra el alcalde de la UP en el municipio de

1031
Ver: Caso del Penal Miguel Castro Castro Vs. Perú. Fondo, Reparaciones y Costas. Sentencia de 25 de noviembre de
2006. Serie C No. 160, párrs. 183 y 184.
1032
La Comisión para el Esclarecimiento Histórico consideró "pertinente distinguir entre política genocida y actos de
genocidio. Existe una política genocida cuando el objetivo final de las acciones es el exterminio de un grupo, en todo o en
parte. Existen actos genocidas cuando el objetivo final no es el exterminio del grupo sino otros fines políticos, económicos,
militares o de cualquier otra índole, pero los medios que se utilizan para alcanzar ese objetivo final contemplan el
exterminio total o parcial del grupo". Comisión para el Esclarecimiento Histórico, Guatemala - Memoria del Silencio, tomo
III, Guatemala, CEH, 1999, pp. 316-318.
1033
No. 5 del 12 de marzo de 1997.
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Sabana de Torres, Álvaro Garcés Parra. En dicho informe se declaró que Colombia no
cumplió con obligaciones contenidas en la Convención Americana sobre Derechos
Humanos, tales como salvaguardar el derecho a la vida, y brindar garantías y protección
judiciales1034.

1028. Al estudiar los antecedentes legislativos del artículo 48 de la Ley 734 de 2002, se
puede inferir que el legislador amplió el alcance protección de los instrumentos
internacionales de derechos humanos sobre genocidio, en concreto, la Convención para la
Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio, del 9 de diciembre de 1948, al incorporar
el genocidio por razones políticas y sociales. Así, el Congreso de Colombia admitió la
posibilidad de consagrar el exterminio contra miembros y simpatizantes de la Unión
Patriótica como un genocidio al señalar que:

“Se agregaron los grupos políticos y los sociales, que no forman parte del texto de los
instrumentos internacionales citados. Se consideró necesario incluir estas dos
categorías, teniendo en cuenta, en primer lugar, que el derecho internacional de los
derechos humanos es un sistema normativo que brinda una protección mínima que
puede ser ampliada por los Estados. Es decir, no hay ningún obstáculo jurídico para
proteger otros grupos con la consagración del genocidio, como falta disciplinaria
gravísima. Además, en nuestro país, los grupos políticos y los sociales, más que las
otras categorías protegidas ( raciales, étnicos, religiosos ), han sido objeto de ataques
continuados que tienden a su destrucción, como el caso de la Unión Patriótica, los
ataques contra defensores de derechos humanos o las mal llamadas brigadas de
limpieza social; al punto que se podría afirmar que, dadas las características de la
situación colombiana, la consagración del genocidio como falta disciplinaria o como
delito, se justifica en la medida en que los grupos sociales y políticos sean
incluidos”.1035

1029. Respecto de la sistematicidad de los crímenes contra la Unión Patriótica, la Corte


Interamericana de Derechos Humanos en la sentencia emitida para el caso del Senador
MANUEL CEPEDA, expresó que:

“81. La violencia contra la UP ha sido caracterizada como sistemática, tanto por


organismos nacionales como internacionales, dada la intención de atacar y eliminar a
sus representantes, miembros e incluso simpatizantes. La Alta Comisionada de las
Naciones Unidas para los Derechos Humanos se refirió a las ejecuciones de los
militantes de la UP como “sistemáticas”; el Defensor del Pueblo calificó a la violencia
contra los dirigentes y militantes de ese partido como “exterminio sistematizado”; la
Corte Constitucional de Colombia como “eliminación progresiva”; la Comisión
Interamericana como “asesinato masivo y sistemático”; la Procuraduría General de la
Nación se refiere a “exterminio sistemático” y la Comisión Nacional de Reparación y
Reconciliación como “exterminio”.1036

1034
Comisión Interamericana de Derechos Humanos, Informe Caso 10473.
1035
Gaceta del Congreso No. 291 del 27 de julio de 2000, Senado de la República, Proyecto de Ley Número 19 de 2000, p.
24.
1036
Ver: CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS. CASO MANUEL CEPEDA VARGAS VS. COLOMBIA. Sentencia
de 26 de mayo de 2010. (Excepciones Preliminares, Fondo, Reparaciones y Costas);
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1030. La Corte Constitucional de Colombia, en lo que hace referencia específica al delito


de genocidio, en la Sentencia C-177 de 2001, precisó que se trata de un tipo penal que
debe leerse en consonancia con los tratados sobre derechos humanos y derecho
internacional humanitario adoptados por Colombia que forman parte del ius cogens, los
cuales constituyen un “parámetro mínimo de protección” que en todo caso puede ser
ampliado por la legislación interna. En palabras de este Tribunal:

“Así, pues, de lo que hasta aquí se ha expuesto, resulta que el tipo penal sobre
genocidio que consagró el artículo 322ª. de la Ley 589 del 2000, debe ser interpretado
a la luz de los Pactos y Convenios Internacionales sobre Derechos Humanos ratificados
por Colombia, de conformidad con el artículo 93 de la Constitución y de acuerdo con
los principios y preceptos del Derecho Internacional Humanitario y del Derecho
Internacional de los Derechos Humanos que forman parte del “ius cogens.” (Resaltado
fuera de texto).

1031. En la misma providencia, la Corte reafirmó la postura según la cual, la tipificación


del genocidio en la legislación interna busca proteger a los miembros de un grupo
nacional, étnico, racial, religioso o político. En ese sentido amplió la protección amparada
bajo este tipo penal, respecto de la comisión masiva de homicidios con el propósito de
exterminio de un colectivo, por razones políticas, para lo cual sostuvo que:

“En efecto, constata esta Corte que, lejos de adoptar las medidas de adecuación
legislativa consonantes con las obligaciones internacionales que el Estado Colombiano
contrajo, en particular, al suscribir la Convención de las Naciones Unidas para la
Prevención y Sanción del Delito de Genocidio, que según quedó ya expuesto, el Estado
Colombiano aprobó mediante la Ley 28 de 1959, las que le exigían tipificar como delito
y sancionar severamente las conductas consideradas como crímenes de lesa
humanidad, desvirtuó el propósito que con su consagración normativa se perseguía,
pues restringió la protección de los derechos a la vida, a la integridad personal y a la
libertad de las personas, al concederla únicamente en tanto y siempre y cuando la
conducta atentatoria recaiga sobre un miembro de un grupo nacional, étnico, racial,
religioso o político “que actúe dentro de margen de la Ley,” con lo que sacrificó la
plena vigencia y la irrestricta protección que, a los señalados derechos, reconocen
tanto el Derecho Internacional Humanitario, como el Derecho Internacional de los
Derechos Humanos y los Tratados y Convenios Internacionales que lo codifican”.

1032. Igualmente, en la Sentencia C-578 de 2002, que como ya se mencionó analizó la


constitucionalidad del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, se reiteró la
obligación de armonizar la legislación interna con los estándares internacionales mínimos
de protección en materia de derechos humanos y derecho internacional humanitario para
definir sanciones y procedimientos penales de graves crímenes como el genocidio, al
respecto dijo:

“Según lo que establece el Estatuto de Roma, la soberanía de los Estados es limitada


de varias formas. En primer lugar, porque es la Corte Penal Internacional –y no cada
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Estado Parte– quien decide cuándo un Estado no está dispuesto o no ha sido capaz de
ejercer su jurisdicción. En segundo lugar, porque el análisis de la existencia de una
causal de incapacidad o de indisposición de un Estado, supone que la Corte examinará
las condiciones bajo las cuales el Estado ha ejercido o ejerce su jurisdicción. En tercer
lugar, porque el ejercicio de las competencias soberanas de los Estados para definir las
sanciones y procedimientos penales de graves violaciones a los derechos humanos
tales como el genocidio, los crímenes de lesa humanidad o los crímenes de guerra,
deberá hacerse de tal forma que resulte compatible con el derecho internacional de los
derechos humanos, el derecho internacional humanitario y con los fines de lucha
contra la impunidad que resalta el Estatuto de Roma. En cuarto lugar, porque cuando
la Corte Penal Internacional admite un asunto, la jurisdicción nacional pierde
competencia sobre el mismo. Por lo anterior, es necesario examinar dichas
limitaciones”. (Resaltado fuera de texto).

Caracterización del genocidio

1033. Frente a la estructura de delito, internacionalmente la doctrina1037 y la


jurisprudencia1038 han señalado que presenta unas características específicas, como el
elemento objetivo (actus reus), consistente en la comisión de alguno de los actos
prohibidos descritos en la norma, a saber: matanza de miembros del grupo; lesión grave
a la integridad física o mental de los miembros del grupo; sometimiento intencional del
grupo a condiciones de existencia que hayan de acarrear su destrucción física, total o
parcial; medidas destinadas a impedir nacimientos en el seno del grupo; traslado por la
fuerza de niños del grupo a otro grupo. En el caso colombiano el Legislador amplió el
ámbito de protección a los grupos políticos y así lo ha avalado la jurisprudencia
constitucional1039.

1034. La regulación del tipo no exige un número mínimo de muertes o agresiones a los
miembros del grupo, como tampoco es necesaria la extinción definitiva del mismo, de
manera que incluso un solo ataque podría dar lugar a la configuración del crimen, por
supuesto si se reúnen los demás elementos constitutivos el tipo penal.

1035. El elemento subjetivo (mens rea), que comprende tanto el dolo en general como la
intención especial de destrucción del grupo protegido (dolus specialis), lo que guarda
relación directa con el ataque a las víctimas por razón de su pertenencia al mismo. En
este sentido, siempre se ha considerado que el ataque a los miembros del grupo se hace
“por el sólo hecho de pertenecer al grupo” y con la intención de su destrucción total o
parcial, pues: “El objetivo de tal plan [sistemático de destrucción] debe ser la

1037
Para una revisión general, cfr. Kai Ambos, “Temas de Derecho Penal Internacional y Europeo” (Trad. Martha Donís).
Madrid, Marcial Pons, 2006, p. 271 y ss.
1038
Según los lineamientos trazados por la Corte Internacional de Justicia de la Haya, en consonancia con la jurisprudencia
del Tribunal Penal Internacional para Ruanda y el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia.
1039
Cfr., Corte Constitucional, Sentencia C-177 de 2001.
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desintegración de las instituciones políticas y sociales, la cultura, el lenguaje, los


sentimientos nacionales, la religión y la subsistencia económica de grupos nacionales, así
como la destrucción de la seguridad personal, la libertad, la salud, la dignidad e incluso la
vida de los miembros de dichos grupos nacionales. El genocidio se dirige contra el grupo
nacional como tal, y las acciones ejecutadas contra los individuos de dicho grupo se hacen
por el solo hecho de pertenecer a dicho grupo nacional”1040.

1036. Por tanto, para que se tipifique el delito de genocidio es necesario que la
afectación a las víctimas se haga con la intención de la destrucción del grupo como tal, lo
que implica que el ataque se efectúe por razón de su pertenencia al grupo protegido,
pues ello constituye un elemento esencial en la configuración del tipo penal de genocidio.

1037. Sociológicamente hablando, en el concepto original de Lemkin, la realización del


genocidio procura o busca la destrucción parcial o total de una nación o de un grupo
humano con características particulares1041. Se encuentra que uno de sus elementos
fundamentales es la destrucción de un grupo, no sólo ni fundamentalmente de los
individuos que lo conforman, por tanto su objetivo está en la destrucción de la identidad
del grupo, logrando entre otros objetivos imponer la identidad del opresor en su
reemplazo.

1038. En ese orden de ideas, puede entenderse entonces que genocidio es la aplicación
de una tecnología o mecanismo de poder1042 cuyo objetivo último radica en eliminar o
hacer desaparecer a los miembros de un grupo determinado, pero para hacer
desaparecer a ese grupo y no sólo a sus individuos, como forma de erradicar sus
características o elementos de identidad particulares1043.

1039. Por ejemplo, se busca erradicar a un grupo político democrático o a una minoría
sexual por su ideología y sus manifestaciones a favor de la diversidad y la inclusión de
todos dentro de un Estado Social de Derecho. Por tanto la destrucción física, el

1040
Raphaël Lemkin, “Axis Rule in Occupied Europe 79” (1944), citado por Ratner, Steven R y Abrams, Jason.
“Accountability for Human Rights Atrocities in International Law”. Beyond the Nuremberg Legacy. Clarendon Press, 1997,
páginas 24 y 25. Cfr. Sentencia C-578 de 2002.
1041
Raphael Lemkin; Axis Rule in Occupied Europe, Carnegie Endowment for International Peace, Washington DC, 1944,
p.79 (versión castellana en Raphael Lemkin; El dominio del Eje en la Europa ocupada, Buenos Aires, Prometeo, 2009).
1042
FOUCAULT, Michel. Tecnologías del yo y otros textos afines”. Ed. Paidós. Barcelona, 1990. Ver también:
L’Herméneutique du sujet. 1981-82. Dossier electrònic; en: http://www.michel-foucault.com/, consultada el 12 de agosto
de 2013.
1043
Algunas interpretaciones del genocidio han tenido más fuerza que otras, entre ellas destacan las de Chalk y Jonassohn,
Helen Fein, Israel Charny, Vahakn Dadrian o Irving Louis Horowitz. Se buscó dualizar el concepto (el caso de Leo Kuper,
que mantiene la definición de la Convención y trabaja a la par con el concepto de “masacres genocidas” para los casos que
quedarían fuera de la misma, pese a ser igualmente crítico con la exclusión de los grupos políticos). De un modo u otro, el
único consenso radicó en la crítica al artículo 2 de la Convención y a su definición de una práctica social que se basaba en
las víctimas que la sufrían.
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exterminio, la persecución y estigmatización hacen parte de un plan sistemático para


atacar su ideología y elementos de identidad comunes.

1040. Si se revisa el principio universalista de la igualdad ante la ley, está plenamente


claro que el genocidio obedece a una acción sistemática en contra de un grupo de
personas que han construido, profesan o predican un determinado conjunto de principios
y valores dirigido a reivindicar una ideología o identidad propia, ya sea alrededor de un
ideal político, preferencias sexuales, características de género, etáreas, etc.

1041. Para aclarar un poco la forma de interpretación del tipo internacional de genocidio,
la Sala tomará en consideración las siguientes premisas: (i) la tipificación del delito de
genocidio en su sentido sistemático y universalista no puede incluir a algunos sujetos o
grupos y excluir a otros. La aceptación de que la redacción de la Convención excluya a los
grupos políticos, de género, identidad sexual, discapacidad, económicos, sociales,
lingüísticos o cualquier otro es una puerta abierta a las tendencias crecientes de la
instalación de un derecho penal del enemigo, a través de la aceptación de que los delitos
pueden ser diferenciales en función de las víctimas a las que afectan, vulnerando el
principio normativo fundamental de la igualdad ante la ley1044; (ii) no resulta razonable en
un proceso de justicia transicional como el colombiano, el tratar de excluir de análisis y
estudio un genocidio como el de la Unión Patriótica, pues de lo que se trata es de
reconstruir la memoria histórica y buscar la verdad de los crímenes cometidos en el marco
del conflicto armado colombiano a fin de procurar mecanismos de no repetición de tales
hechos; (iii) en aras de aclarar y complementar la figura de los crímenes de lesa
humanidad, que por su carácter de sistemáticos y/o generalizados redundan en su
importancia sociológica e histórica para el análisis del conflicto armado colombiano,
resulta necesario resaltar figuras como la del genocidio por razones políticas, en un país
caracterizado por un régimen democrático cerrado que vivió a la sombra del bipartidismo
y del llamado “Frente Nacional”, en el cual no se permitió la participación política de
minorías sino hasta la entrada en vigencia de la constitución de 1991.

1042. El delito de genocidio fue consagrado en Colombia por la Ley 589 de 20001045. Esta
ley adicionó el artículo 322ª al Código Penal anterior (Decreto Ley 100 de 1980), cuyo

1044
Matthias Bjornlund, Eric Markusen y Martin Mennecke, “¿Qué es el genocidio? En la búsqueda de un denominador
común entre definiciones jurídicas y definiciones no jurídicas”, en Daniel Feierstein (ed.), El genocidio: problemas teóricos y
metodológicos, Buenos Aires, Eduntref, 2005. Trabajo presentado originalmente en inglés al Primer Encuentro Internacional
“Análisis de las Prácticas Sociales Genocidas”, Facultad de Derecho, UBA, 11 al 15 de noviembre de 2003.
1045
“Por medio de la cual se tipifica el genocidio, la desaparición forzada, el desplazamiento forzado y la tortura; y se dictan
otras disposiciones”.
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contenido fue reproducido en el artículo 101 del nuevo Código Penal (Ley 599 de 2000).
En consecuencia, la norma que tipifica el crimen de genocidio es la siguiente:

Artículo 101. Genocidio. <Penas aumentadas por el artículo 14 de la Ley 890 de


2004, a partir del 1o. de enero de 2005. El texto con las penas aumentadas es el
siguiente:> El que con el propósito de destruir total o parcialmente un grupo
nacional, étnico, racial, religioso o político [que actúe dentro del marco de la ley1046],
por razón de su pertenencia al mismo, ocasionare la muerte de sus miembros,
incurrirá en prisión de cuatrocientos ochenta meses (480) a seiscientos meses (600);
en multa de dos mil seiscientos sesenta y seis mil punto sesenta y seis (2.666,66) a
quince mil (15.000) salarios mínimos mensuales legales vigentes y en interdicción de
derechos y funciones públicas de doscientos cuarenta (240) a trescientos sesenta
(360) meses.

La pena será de prisión de ciento sesenta (160) a cuatrocientos cincuenta (450)


meses, la multa de mil trescientos treinta y tres punto treinta tres (1.333.33) a quince
mil (15.000) salarios mínimos legales vigentes y la interdicción de derechos y
funciones públicas de ochenta (80) a doscientos setenta (270) meses cuando con el
mismo propósito se cometiere cualquiera de los siguientes actos:
1. Lesión grave1047 a la integridad física o mental de miembros del grupo.
2. Embarazo forzado.
3. Sometimiento de miembros del grupo a condiciones de existencia que hayan de
acarrear su destrucción física, total o parcial.
4. Tomar medidas destinadas a impedir nacimientos en el seno del grupo.
5. Traslado por la fuerza de niños del grupo a otro grupo”.

1043. La Ley 589 de 2000, mediante la cual se tipificó por primera vez en Colombia el
delito de genocidio, tuvo como propósito central ajustar la legislación interna a la
normativa internacional. Así, en la exposición de motivos de esa Ley se dejó en claro la
intención de acoger lo dispuesto en la Convención para la Prevención y Sanción del delito
de genocidio:

“La tipificación del delito de genocidio tiene como fin hacer explícita aún más la acogida
a lo dispuesto en el Derecho Internacional de los Derechos Humanos desde los
comienzos mismos de la Organización de las Naciones Unidas y de desarrollar lo
aprobado mediante la Ley 28 de 1959 aprobatoria de la Convención de Naciones
Unidas para la Prevención y Sanción del Delito de Genocidio.

Esta Convención establece en su artículo V la obligación para las altas partes


contratantes de adoptar, de acuerdo con las Constituciones respectivas, las medidas
legislativas necesarias para asegurar el cumplimiento de las disposiciones de la
Convención, especialmente, las que tienden a establecer las sanciones penales eficaces
para sancionar a las personas culpables de genocidio, de cualquier otro acto o actos
enumerados en el artículo 3º de la misma”1048.

1046
Aparte declarado inexequible en la Sentencia C-177 de 2001.
1047
Aparte declarado exequible en la Sentencia C-148 de 2005.
1048
Gaceta del Congreso 126 del 22 de julio de 1998, p.26.
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1044. También es preciso señalar que el Legislador colombiano incluyó a los grupos
políticos, de modo que en este punto amplió el ámbito de protección respecto de lo
acogido por la comunidad internacional, lo que fue avalado por la Corte Constitucional en
la Sentencia C-177 de 2001. En la misma providencia la Corte constató que la tipificación
del genocidio para incluir solamente al grupo nacional, étnico, racial, religioso o político
“que actúe dentro del margen de la Ley”, restringía el ámbito de protección frente a los
estándares internacionales, por lo que declaró inexequible dicha frase1049.

1045. Si se tiene en cuenta que, uno de los elementos estructurales del tipo penal de
genocidio es la existencia de un dolo especial (dolus specialis). Ese dolo especial supone
que la afectación de las víctimas se haga con la intención de destrucción del grupo como
tal, esto es, que ello ocurra precisamente “por razón de su pertenencia al mismo”.1050

1046. Al respecto se pronunció la Corte Internacional de Justicia de la Haya, en el caso


de Bosnia y Herzegovina contra Serbia y Montenegro, allí se constató la existencia de
actos de un genocidio ante la intención de destruir a miembros de un grupo religioso y
étnico debido a su pertenencia al mismo. Al examinar los elementos constitutivos del
delito, el alto Tribunal explicó que es necesaria la intención de destrucción del grupo en
todo o en parte y el hecho de que los miembros del grupo sean atacados por pertenecer
al mismo, a saber:

“187. Adicionalmente a aquellos elementos mentales, el artículo II requiere un


elemento adicional. Requiere el establecimiento de la "intención de destruir, en todo o
en parte... el grupo [protegido], como tal". No basta establecer, por ejemplo en
términos del párrafo (a), que las ejecuciones ilegales deliberadas de los miembros del
grupo hubieren ocurrido. La intención adicional también debe ser establecida, la cual es
definida muy precisamente. Es a menudo mencionada como la intención específica o
dolus specialis; usualmente será referida en la presente Sentencia, como la “intención
específica (dolus specialis)". No es suficiente [pero es necesario] que los miembros del
grupo sean el blanco por pertenecer a dicho grupo, es decir, porque el autor tiene una
intención discriminatoria. Se requiere algo más. Los actos enumerados en el artículo II
deben cometerse con la intención de destruir al grupo como tal en su totalidad o en
parte. Las palabras "como tal" enfatizan esa intención de destruir el grupo protegido.

(…)

370. A la luz de la revisión de la evidencia existente anteriormente y con respecto de


las atrocidades cometidas en Bosnia y Herzegovina en el lapso de tiempo comprendido
entre 1991 – 1995, la Corte ha concluido que, a excepción de los eventos de Julio de
1995 en Srebrenica, la intención necesaria requerida para que se constituya el
1049
Corte Constitucional, Sentencia C-177 de 2001, M.P. Fabio Morón Díaz.
1050
“De conformidad con el Estatuto de Roma, así como con la Convención contra el Genocidio, éste crimen requiere un
dolo especial, que lo distingue de otros crímenes contra la humanidad. Deberá demostrarse que la persona actuó con la
intención de destruir un grupo “en su totalidad o en parte”, lo cual lleva, por ejemplo, a que un acto aislado de violencia
racista no constituya genocidio, por ausencia de ese elemento intencional especial. De otro lado, no es necesario que se
logre la destrucción completa del grupo, puesto que lo relevante es la intención de obtener ese resultado. Por la misma
razón, tampoco se requiere que se realicen acciones de manera sistemática”. Corte Constitucional, Sentencia C-578 de
2002.
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genocidio no ha sido demostrada de forma concluyente en relación con cada incidente


específico. Sin embargo, el Demandante se basa en la supuesta existencia de un plan
para cometer genocidio, indicado por un patrón de actos genocidas o potencialmente
genocidas cometidos a lo largo y ancho de todo el territorio, contra las personas
identificadas en todo el mundo y en cada caso sobre la base de su pertenencia a un
determinado grupo”1051. (Resaltado fuera de texto).

1047. Otro caso importante para tener en cuenta es el del Tribunal Penal Internacional
para Ruanda, cuando en 1998 condenó a Jean Paul Akayesu como responsable de
genocidio y crímenes contra la humanidad, debido a sus ataques contra la etnia Tutsi en
su condición de alcalde de la ciudad ruandesa de Taba. De acuerdo con ese alto Tribunal:

“520. Con respecto al crimen de genocidio, el autor es culpable sólo cuando ha


perpetrado uno de los actos comprendidos en el artículo 2(2) del Estatuto, con la clara
intención de destruir, en todo o en parte, un grupo particular. El autor es culpable
porque sabía o debía haber sabido que el acto en cuestión destruiría, en todo o en
parte, al grupo.

521. Más precisamente, para que cualquiera de los actos del artículo 2(2) del Estatuto
sea elemento constitutivo de genocidio, debe haberse cometido contra uno o varios
individuos, porque éste o estos individuos eran miembros de un grupo específico, y
debido a su pertenencia al grupo. Por lo tanto, la víctima no es escogida por su
identidad individual, sino a causa de su pertenencia a un grupo nacional, étnico, racial
o religioso. La víctima del acto es un miembro del grupo, elegido como tal, lo que
significa finalmente que la víctima del crimen de genocidio es el propio grupo y no
solamente el individuo1052”.1053

1048. En la misma dirección, el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia


se ha pronunciado en varias oportunidades frente a los ataques contra musulmanes y
croatas bosnios, insistiendo en que la pertenencia al grupo es uno de los rasgos
característicos y esenciales para la tipificación del genocidio. En el caso Jelisic, el Tribunal
sostuvo que la intención específica que caracteriza el genocidio es la selección de las
víctimas en cuanto sean parte del grupo cuya destrucción se pretende, de modo que la
pertenencia del individuo al grupo es el criterio decisivo para determinar las víctimas
inmediatas del crimen de genocidio, al respecto se dijo entonces que:

“67. La intención especial que caracteriza al genocidio supone que el presunto autor
del crimen selecciona a sus víctimas porque son parte de un grupo que él está
buscando destruir. En caso de que el objetivo del autor o autores del delito sea destruir
el grupo en su totalidad o en parte, la “pertenencia del individuo a un grupo particular

1051
ICJ, Asunto relativo a la aplicación de la Convención para prevenir y sancionar el crimen de Genocidio (Bosnia and
Herzegovina v. Serbia and Montenegro), febrero 26 de 2007 (Traducción Libre).
1052
Al respecto, ver Nehemiah Robinson, “The Genocide Convention. Its Origins as Interpretation”, p. 15, que declaró que
las víctimas como individuos “son importantes no per se, aunque si como miembros del grupo al que pertenecen”.
1053
ICTR-96-4-T, Prosecutor vs. Akayesu. Sentencia de Primera Instancia del 2 de septiembre de 1998. Traducción de
Rafael Prieto Sanjuán, et.al., “Akayesu. El primer juicio internacional por Genocidio”. Bogotá, Universidad Javeriana –
Biblioteca Jurídica Dike, 2006. El texto integral de la Sentencia puede consultarse en la página oficial de Internet del
Tribunal: http://www.ictr.org/default.htm
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es el criterio decisivo para determinar las víctimas inmediatas del crimen de genocidio
más que la identidad de la persona1054”.1055

1049. El mismo criterio fue acogido en el caso Krstic (2001) con la primera condena de
ese Tribunal por genocidio:

“561. En este caso, la Fiscalía y la Defensa, concuerdan en la creencia que las víctimas
de genocidio deben ser el blanco en razón de su pertenencia a un grupo determinado.
Ésta es la única interpretación que coincide con la intención que caracteriza el crimen
del genocidio. La intención de destruir a un grupo como tal, en todo o en parte,
presupone que las víctimas fueron escogidas en razón de su pertenencia al grupo cuya
destrucción se solicitó.
El mero conocimiento por parte de los perpetradores, de la pertenencia de las víctimas
a un grupo distinto, no es suficiente para establecer la intención de destruir al grupo
como tal”1056.

1050. Una vez revisada la casuística expuesta anteriormente, la Sala concluye que uno
de los elementos estructurales del tipo penal de genocidio es la existencia de un dolo
especial (dolus specialis), que consiste en la intención específica que tiene el victimario de
destruir total o parcialmente al grupo como tal1057, en el caso de la Unión Patriótica a un
grupo político. Es decir, que el dolo especial del genocidio se configura cuando el sujeto
activo tiene el propósito principal de destrucción o exterminio del grupo, de manera tal
que el ataque o eliminación, ocurre precisamente porque la víctima pertenece a un grupo
determinado con unas características comunes, en el caso de Colombia, con este tipo
penal se busca proteger a las personas que sufran ataques debido a que pertenecen a
determinado grupo político.

1051. En 1985, el informe del relator especial para la cuestión del genocidio, B.
Whitaker, reconoció la necesidad de que otros grupos (sociales, sexuales, políticos) fueran
incluidos a través de la ampliación de la definición que otorga la Convención contra el
genocidio. En noviembre de 1998, la Audiencia Nacional española al revisar su
competencia para juzgar a miembros de la Junta Militar argentina, en una decisión
unánime, se declaró habilitada para procesar a los militares por el delito de genocidio al
intentar eliminar a un grupo en razón de sus convicciones políticas. En dicha sentencia, la
Audiencia Nacional acepta que junto a prácticas criminales masivas y sistemáticas, la

1054
ILC Draft Articles, p. 88; the same comment was made by Pieter N. Drost, based on the preparatory works of the
Convention, in The Crime of State, Genocide, A.W. Sythoff, Leyden, 1959, p. 124.
1055
TPIY, Case No. IT-95-10-T, Sentencia del 14 de diciembre de 1999 (Traducción libre).
1056
TPIY, Case No. IT-98-33-T, Sentencia del 2 de agosto de 2001 (Traducción libre).
1057
“El genocidio se distingue de otros crímenes, puesto que implica especificidad del dolo o dolus specialis. El dolo
específico de un crimen es la intención especial, requerida como elemento constitutivo del crimen, que exige que el criminal
haya pretendido causar el resultado imputado. Por lo tanto, el dolo específico del crimen de genocidio reside en “la
intención de destruir, total o parcialmente, un grupo nacional, étnico, racial o religioso, como tal”. ICTR-96-4-T, Prosecutor
vs. Akayesu. Sentencia de Primera instancia del 2 de septiembre de 1998, párr. 498.
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estrategia de la dictadura militar argentina, entre los años 1976 y 1983, incluyó la
eliminación de una o varias colectividades políticas de oposición. La sentencia señala que
“lo que caracteriza el genocidio es el exterminio de un grupo por razones raciales,
religiosas, políticas u otras”.1058 Y añade que en el presente caso se hizo un intento de
“depuración ideológica” de quienes “no cabían en el proyecto de reorganización
nacional”.1059

1052. En el marco del Sistema Interamericano de Derechos Humanos, la defensa jurídica


del Estado colombiano argumentó que el caso de la UP no podía ser recibido por la
Comisión Interamericana, pues se trataba de hechos inconexos de violencia. Por su parte,
la Comisión IDH señaló en el informe 5/97 sobre la admisibilidad de este caso que “los
peticionarios han presentado argumentos que procuran establecer una práctica de
asesinatos políticos en masa y la persecución extrema de los miembros de la Unión
Patriótica con la intención de eliminar físicamente al partido y de diluir su fuerza política”.

1053. La Sala es consciente que la concepción del tipo penal de Genocidio


internacionalmente considerado no se ha extendido de manera clara y contundente hacia
la protección de los grupos políticos, empero los códigos penales locales de varios países
latinoamericanos como Panamá, Paraguay y Costa Rica han incluido la protección de los
grupos políticos en la tipificación del genocidio.

1054. Es importante mencionar que Perú y Bolivia fueron un peldaño más allá, pues el
código penal del primer país expresa su protección a favor de los grupos sociales en
general, lo cual conlleva a un ámbito de aplicación más amplio que el de los grupos
políticos. En el caso de Bolivia el artículo 138 del código penal después de definir el
crimen de Genocidio y de determinar cómo grupos de especial protección a los grupos
nacionales, étnicos y religiosos establece un segundo párrafo que expresa textualmente:
en la misma sanción (a la del genocidio) incurrirán el o los autores, u otros culpables
directos o indirectos de masacres sangrientas en el país. En este párrafo no se establece
la categoría o el tipo de grupo protegido para el término “masacre sangrienta” por lo que
se considera que la protección se encuentra dirigida a cualquier individuo víctima de la

1058
Véanse, por ejemplo, entre la doctrina internacionalista española, las observaciones de J.A. TOMÁS ORTIZ DE LA
TORRE, “Competencia judicial penal internacional de los tribunales españoles para conocer de ciertos delitos cometidos
contra españoles en Iberoamérica”, Anurario IHLADI, vol. 13 (1997), pp. 7 y ss.; J.A. GONZÁLEZ VEGA, “La Audiencia
Nacional contra la impunidad: los ‘desaparecidos’ españoles y los juicios a los militares argentinos y chilenos”, REDI , vol. 49
(1997), pp. 285 y ss., en p. 289; M. ABAD CASTELOS, “La actuación de la Audiencia Nacional española respecto de los
crímenes contra la humanidad cometidos en Argentina y en Chile: un paso adelante desandando la impunidad”, Anuario da
Facultade de Dereito da Universidade da Coruña (1998), pp. 33 y ss., en pp. 58-59; o J. FERRER LLORET, “Impunity in
Cases of Serious Human Rights Violations: Argentina and Chile”, SPYBIL, vol. 3 (1993-1994), pp. 3 y ss., en pp. 20-29.
1059
Ver: http://www.derechos.org/nizkor/colombia/doc/genocidio.html, El genocidio contra la Unión Patriótica, Iván Cepeda
Castro, consultada el 13 de septiembre de 2012.
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masacre sin distinción de su militancia o participación en un determinado grupo. Lo que


se sanciona en esta parte de la norma es la acción u omisión por la cual directa o
indirectamente se ha producido la masacre. Este artículo bajo el nomen juris de Genocidio
omite aclarar la separación de un nuevo tipo penal o la reformulación del crimen de
Genocidio pero en medio de esta confusión claramente amplía su ámbito de
protección1060.

1055. Por su parte el sociólogo Israel Charny expresa que el genocidio en su sentido
genérico es la matanza en masa de un número sustancial de seres humanos cuando estos
no se encuentran preparados para enfrentar fuerzas militares declaradas enemigas, por lo
que las víctimas de esta agresión están bajo condiciones de indefensión y desamparo.
Como contra respuesta a esta definición sociológica el jurista Horacio Phills comenta que
para que exista Genocidio no siempre es necesario una destrucción en masa ya que el
Genocidio es un crimen doloso cuyo mens reus establece el intento específico de realizar
la matanza del grupo específicamente determinado en la ley. Si por razones ajenas a la
voluntad del actor solo se ha producido la muerte de una persona, el crimen no dejaría de
ser genocidio.

1056. Con respecto al estado de indefensión y desamparo es importante notar que si


bien estas condiciones podrían limitar el ámbito de aplicación del crimen por un Estado o
condición durante el ataque, este ámbito no afecta al tipo o clase de grupo por lo que
todo individuo víctima del ataque estaría implícitamente incluido y protegido por esta
definición. Los profesores Bárbara Harff and Ted R Gurr en su estudio Hacia una Teoría
Empírica del Genocidio y del Politicidio1061 afirman que el Genocidio y el Politicidio son la
promoción y la ejecución de las políticas de un estado o sus agentes (o por un grupo
organizado al margen de la ley) por las cuales resulta la muerte de un grupo sustancial de
personas. La diferencia entre el Genocidio y el Politicidio está en las características en las
que los miembros del grupo están identificados por el Estado. En el Genocidio los grupos
victimizados están definidos primariamente por sus características comunes. Por Ejemplo,
etnicidad, religión o nacionalidad. En los politicidios las víctimas se encuentran definidas
principalmente por su identificación ideológica en torno a valores y principios de acción
política comunes.

1060
Morton, Jeffrey S. The International Legal Adjudication of the Crime of Genocide. ILSA Journal of International and
Comparative Law Spring, 2001.
1061
Harff, Barbara (2005) “¿No se aprendieron las lecciones del Holocausto?. Evaluando los riesgos de genocidio y matanzas
políticas desde 1955”, en Feierstein, D. (comp.) Genocidio: la administración de la muerte en la modernidad. EDUNTREF.
Caseros.
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1057. Para la Sala, si lo que caracteriza a un grupo nacional son ideales, objetivos e
inspiraciones comunes que desarrollan una voluntad de vivir conjuntamente, hay que
preguntarse en qué ámbito se definen estas características, no cabe duda que en un
régimen democrático como el colombiano éste ámbito es el político-jurídico, es decir
desarrollando derechos fundamentales como la libre asociación, la elección a través de
elecciones o comicios electorales y la participación política y social. En el caso del
genocidio político se puede identificar un elemento fundamental que configura la
especificidad de esta persecución sistemática, la intencionalidad de los autores de la
cadena de acciones criminales de exterminar al grupo político, o al menos de expulsar de
la vida pública democrática a sus miembros o simpatizantes (forzarlos al exilio, una
manera de salvaguardar la vida).

1058. Otra característica es que ese proceso de eliminación física y moral de la fuerza
política, se realice a través de modalidades de persecución ilegales como la guerra
sucia1062, que incluye operaciones encubiertas, campañas de estigmatización, acción
paramilitar en connivencia o con aquiescencia de servidores o con la participación de
funcionarios del Estado, etc. Finalmente, una característica importante a la hora de
estudiar la presencia del fenómeno del genocidio político es que los graves hechos de
hostigamiento y eliminación se han llevado a cabo durante un prolongado período de
tiempo, en el caso de la Unión Patriótica se trata de por lo menos dos décadas de
persecución, lo que a la postre ha tenido unas consecuencias gravísimas para la
subsistencia de los miembros del grupo y por ende para la colectividad política que
conformaban y a la cual pertenecían.

1059. Para algunos especialistas, y en un sentido general, un partido político tiene


variadas acepciones, sin embargo se puede afirmar de forma general que es una
asociación de individuos unidos por una ideología común, que persiguen como meta
alcanzar el control del gobierno para administrar el Estado o parte de él, para aplicar su
ideología en la construcción de ese Estado. Los partidos políticos también participan en la
organización de la labor legislativa, articulan y agregan nuevos intereses y preferencias de
los ciudadanos, generalmente obedecen a líneas programáticas en los cuales enmarcan
sus intereses socioeconómicos y políticos1063.

1062
Uprimny Rodrigo y Vargas Alfredo, "La palabra y la sangre: Violencia, legalidad y guerra sucia en Colombia", en
Germán Palacio (Compilador), La irrupción del paraestado. Ensayos sobre la crisis colombiana, Bogotá, ILSA-CEREC, 1990,
pp. 105-166.
1063
PAYNE, J Mark. La política importa: democracia y desarrollo en América Latina. Banco Interamericano de Desarrollo.
2005, p. 165
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1060. La Corte Constitucional Colombiana, ha reiterado que el derecho a constituir


partidos y movimientos políticos, formar parte de ellos y difundir sus ideas y programas
tiene la naturaleza de un derecho fundamental de origen constitucional, atribuido a todo
ciudadano colombiano, con miras a que pueda participar en la conformación, ejercicio y
control del poder político. Este derecho es una manifestación activa del status de
ciudadano, el cual comprende un conjunto de derechos y deberes que, en su conjunto,
dan cuerpo y califican la relación de los nacionales con el poder político y describen una
faceta de las personas como partícipes actuales o potenciales de la organización del
Estado1064.

1061. Al respecto la Corte Constitucional, teniendo en cuenta el artículo 40 de la


Constitución política, ha confirmado que se consagra el derecho a participar en la
conformación, ejercicio y control del poder político, no sólo mediante la facultad de elegir
y ser elegido sino también a través del ejercicio de mecanismos de participación directa,
votaciones, plebiscitos, referendos, consultas populares, cabildos abiertos, iniciativa
legislativa y revocatoria del mandato. Por otra parte, se asegura la participación de
partidos y movimientos minoritarios en las mesas directivas de los cuerpos colegiados y se
permite la participación de los partidos o movimientos políticos que no hacen parte del
gobierno en los organismos electorales. En ese sentido manifestó que:

“El principio democrático que la Carta prohíja es a la vez universal y expansivo. Se dice que
es universal en la medida en que compromete variados escenarios, procesos y lugares
tanto públicos como privados y también porque la noción de política que lo sustenta se
nutre de todo lo que vitalmente pueda interesar a la persona, a la comunidad y al Estado y
sea por tanto susceptible de afectar la distribución, control y asignación del poder social.
El principio democrático es expansivo pues su dinámica lejos de ignorar el conflicto social,
lo encauza a partir del respeto y constante reivindicación de un mínimo de democracia
política y social que, de conformidad con su ideario, ha de ampliarse progresivamente
conquistando nuevos ámbitos y profundizando permanentemente su vigencia, lo que
demanda por parte de los principales actores públicos y privados un denodado esfuerzo
para su efectiva construcción. La interpretación constitucional encuentra en el principio
democrático una pauta inapreciable para resolver dudas o colmar lagunas que puedan
surgir al examinar o aplicar un precepto. En efecto, a la luz de la Constitución la
interpretación que ha de privar será siempre la que realice más cabalmente el principio
democrático, ya sea exigiendo el respeto a un mínimo de democracia o bien extendiendo
su imperio a un nuevo ámbito.”1065

1062. Luego de un largo proceso de cabildeo parlamentario realizado por los familiares
de las víctimas y los sobrevivientes de la Unión Patriótica, además de un fenómeno
político de presión al Estado por parte de organismos de derechos humanos de carácter
internacional, el legislador colombiano incluyó en la Ley 599 de 2000 la figura de

1064
Corte Constitucional, Sentencia C-089 de 1994, M.P. Eduardo Cifuentes Muñoz.
1065
Ibídem.
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genocidio por móviles políticos; crimen atroz que el Código Penal Colombiano define como
aquel genocidio en el cual se busca destruir total o parcialmente a un grupo humano por
razones políticas, y ocasionar la muerte a sus miembros por ―razón de su pertenencia al
mismo.

1063. En ese mismo sentido, el Consejo de Estado pudo corroborar que la Unión
Patriótica fue objeto de persecución, hostigamiento y ataques a sus miembros, cuyo fin
último representó su exterminio y genocidio. Al respecto manifestó que:

“Porque lo que le ocurrió a la UP fue que no contó con las condiciones de garantía
indispensables para vincularse a la contienda electoral al Congreso del año 2002 con una
pluralidad de candidatos avalados y en un escenario de normalidad participativa 1066.
Consecuencia de ello, por obvias razones estaba en imposibilidad de obtener cincuenta mil
(50.000) votos, o de conservar al menos una curul en esa Corporación de elección
popular.
Estas fueron las verdaderas razones, de carácter de fuerza mayor, que le impidieron, en
igualdad de condiciones a los demás partidos, y con garantía de libertad, poder ejercer
este derecho político, derecho que es de naturaleza fundamental.

En efecto, en el expediente obra prueba documental sobre la situación de exterminio del


que venían siendo objeto los militantes y simpatizantes de la UP. En especial ello se
evidencia del análisis del estudio titulado “Informe del Defensor del Pueblo para el
Gobierno, el Congreso y el Procurador General de la Nación” de octubre de 1992, donde
se dan a conocer las conclusiones del “Estudio de casos de homicidio de miembros de la
Unión Patriótica y del movimiento político Esperanza Paz y Libertad”. Este documento
preexistía a la fecha en la que se expidieron los actos acusados.

Tal informe tuvo origen en la orden que al respecto impartió a la Defensoría del Pueblo la
Corte Constitucional en la sentencia T-439 de julio 2 de 1992, cuando amparó los
derechos a la libertad personal, la vida, la integridad, la igualdad, la intimidad, la libertad
de conciencia y la participación política del señor Luis Humberto Rolón Maldonado
(sobreviviente de la UP), así como los derechos de su familia a la armonía y unidad, y los
derechos fundamentales de los niños a gozar de una familia y a no ser separados de la
misma. Ordenó a las autoridades darle protección al accionante y a su familia, y en el
numeral cuarto de la parte resolutiva, dispuso lo siguiente:

“CUARTO.- SOLICITAR al señor Defensor del Pueblo que, dentro de la órbita de


sus competencias y para los fines indicados en el artículo 282 de la Constitución,
elabore, en el término de tres (3) meses un informe con destino al Congreso
Nacional, al Gobierno y al Procurador General de la Nación, sobre el estado en que
se encuentran las investigaciones penales y disciplinarias que se adelantan como
consecuencia de las muertes de miembros del partido político Unión Patriótica y
del movimiento político Esperanza, Paz y Libertad, así como promover ante las
autoridades judiciales competentes las acciones necesarias para el definitivo y
total esclarecimiento de estos hechos”.

El estudio se anexó en copia auténtica a este proceso (c. pruebas N° 1), y contiene la
siguiente reseña histórica sobre el surgimiento de este partido político:

“(…) La Unión Patriótica UP surge como organización política el 28 de mayo de


1066
Al proceso se aportó certificación del Director de Gestión Electoral del CNE en el sentido que la UP presentó un único
candidato a la Cámara de Representantes por el Departamento de Arauca, para las elecciones del 10 de marzo de 2002. En
cuanto al Senado, se certificó que “no hubo inscritos” (fl. 391 c. ppal.). No obstante las Resoluciones del CNE que se
demandan no aducen ni se refieren a esta circunstancia que por lo tanto careció de relevancia.

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1985 siendo un resultado del proceso de paz entre el Secretariado Nacional de las
Guerrillas de las FARC-EP, y el gobierno del presidente Belisario Betancur Cuartas.

El proceso que se adelantaba en 1985 implicaba a las luces del acuerdo inicial el cese
bilateral del fuego y según lo establecido se concretaría con el efectivo desarrollo de las
reformas políticas, económicas y sociales que darían respuesta a los compromisos
adquiridos por el Gobierno Nacional en el acuerdo de prórroga del 2 de marzo de 1986.
Dicha obligación se consagraba en los siguientes términos: “El Gobierno, de acuerdo con
lo establecido por la Constitución y las Leyes, otorgará a la Unión Patriótica y a sus
dirigentes las garantías y seguridades indispensables para que puedan desarrollar, en
forma idéntica a las demás agrupaciones políticas, su acción tanto proselitista como
electoral (…)” (pág. 63 y 64 del Informe)

En otro capítulo hace referencia a los resultados electorales de la UP y a los actos de violencia
vinculados a aquellos, en los siguientes términos:

“- Período electoral marzo de 1986 a marzo de 1988:

En 1986 primer año de participación electoral de este naciente partido, se constituye la UP


como el “fenómeno político electoral” obteniendo la más alta votación de la izquierda
reflejada en el apoyo de 320.000 electores y la elección de 5 Senadores, 9 Representantes a
la Cámara, 14 Diputados departamentales, 351 Concejales y el nombramiento de 23 alcaldes
municipales.
(…)

Indagando sobre las posibles causas de la multiplicidad de violaciones, encontramos que


existe una relación directa entre el apreciable éxito electoral obtenido y la respuesta violenta
de organizaciones de extrema derecha, delincuencia organizada, grupos paramilitares,
narcotráfico y en algunos casos agentes del Estado, que ven menoscabados sus intereses
políticos y económicos.

(…)

De las estadísticas electorales y de violación a los Derechos Humanos contra la Unión


Patriótica en este período, se establece:

1.- La violencia contra la Unión Patriótica se dirige especialmente contra los miembros
elegidos a corporaciones públicas; así en estos dos primeros años se asesina al máximo
dirigente y candidato a la presidencia JAIME PARDO LEAL, el 11 de noviembre de 1987, a
2 senadores, 2 representantes a la Cámara, 5 diputados regionales, 45 concejales y 4
alcaldes municipales.

2.- Las mayores violaciones a Derechos Humanos contra la Unión Patriótica coinciden
regionalmente con aquellos territorios en los que se logró un mayor apoyo electoral. (…)

- Período electoral abril de 1988 a mayo de 1990:

La Unión Patriótica se presenta a los comicios electorales del 13 de marzo de 1988 con un
antecedente sombrío, 396 víctimas de la violencia entre 1985 y 1988, preludio de violencia e
intolerancia que llega a su punto más álgido en este período preelectoral, causándole la
muerte a 9 candidatos a Concejos Municipales, 5 candidatos a alcaldías y 1 a Asamblea.
A pesar de esta oleada violenta que deja entrever evidentes síntomas de intolerancia política,
ausencia de garantías electorales y exterminio sistematizado contra los dirigentes y militantes
de la UP se eligen 15 alcaldes y 13 diputados.

Comparando la jornada electoral de 1986 y 1988, podemos evidenciar que la Unión Patriótica
para esta justa electoral tuvo una considerable disminución en su caudal electoral (…),
consecuencia directa de la ausencia de garantías electorales y del proceso intimidatorio de sus
dirigentes y militantes. (…).

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- Período electoral junio de 1990 a septiembre de 1992:

Para las elecciones al Congreso en 1990 la Unión Patriótica arroja los siguientes
resultados: Un (1) Senador con su suplente y cuatro (4) Representantes a la Cámara con
sus suplentes; en las elecciones de Asamblea Nacional Constituyente en 1990 logra dos
constituyentes, uno propio (Aida Abella Esquivel) y otro de convergencia (Alfredo Vásquez
Carrizosa).

En los comicios electorales del 27 de octubre de 1991 elige un (1) Senador y tres (3)
Representantes a la Cámara” (pág. 65 a 68).

En otros apartes indica que lo que está en juego a raíz de la intolerancia “no es la
supervivencia de un grupo político, sino la de la democracia colombiana” (pág. 71), y analiza
la visión de las organizaciones internacionales sobre la Unión Patriótica, donde cita el siguiente
segmento que hace parte del Informe de Amnistía Internacional de 1989:

“(…) Tanto el Partido Comunista Colombiano como la Unión Patriótica (UP), han sido
blanco especial de los asesinatos y desapariciones por motivos políticos de los últimos
años. Desde su creación en 1985, más de 750 miembros de la UP, incluyendo activistas de
base, concejales municipales elegidos en los comicios de marzo de 1988, diputados y
líderes nacionales han sido víctimas de lo que parecen ser asesinatos por motivos
políticos. Muchos dirigentes de la UP han recibido escoltas del DAS como consecuencia de
las persistentes amenazas de muerte formuladas contra ellos y sus familias. Sin embargo,
en varios casos documentados por Amnistía Internacional, activistas de la UP que estaban
recibiendo protección estatal fueron asesinados en momentos en que los escoltas no
estaban presentes” (pág. 55 del informe).

También alude al informe del Relator Oficial de la ONU que por invitación del gobierno de
Colombia realizó visita a este país entre el 11 y el 20 de octubre de 1989, y en el cual se
condensa el número de víctimas de asesinatos de miembros de la Unión Patriótica hasta
ese momento, en la siguiente tabla:

1985 1986 1987 1988 1989 TOTAL


99 144 77 183 72 575

Algunas de las conclusiones del Informe de la Defensoría indican que “El homicidio de los
dirigentes y militantes de la Unión Patriótica, ha sido un factor determinante en la pérdida
de apoyo político en zonas en que tradicionalmente se consideraba mayoría” (pág. 215 del
Informe).

En apreciación de la Sala, este estudio evidencia que habiendo surgido la Unión Patriótica
como alternativa política de aceptación popular y con reconocimiento oficial en el territorio
nacional, simultáneamente fue objeto de acciones en su contra provenientes de fuerzas
oscuras dirigidas a asesinar selectivamente a muchos de sus miembros, varios de los
cuales habían sido elegidos en cargos de elección popular en alcaldías y en corporaciones
públicas, en las diferentes elecciones en las que el Partido Político pudo participar, antes
de las del año 2002.

En comunicación de fecha 23 de octubre de 1992 el Presidente de la Comisión


Interamericana de Derechos Humanos le expresa a la señora Ministra de Relaciones
Exteriores de Colombia que dicha Organización “(…) ha seguido desde hace muchos años
con verdadera preocupación la situación del grupo político colombiano denominado Unión
Patriótica (UP) surgido como resultado de las negociaciones de paz promovidas con las
FARC-EP por el expresidente Belisario Betancur Cuartas. Si bien la Comisión no cuenta con
datos precisos sobre el número de miembros de esta organización política que han sido
asesinados desde el 28 de mayo de 1985, (…) es de conocimiento público que el número
de víctimas que la violencia ha registrado entre ellos es de aproximadamente un millar de
muertos” (fl. 190 c. pr. 3).

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Estas y otras acreditaciones sobre la eliminación sistemática de militantes de la UP le


fueron puestas en conocimiento del CNE por el representante legal de la Unión Patriótica
cuando interpuso el recurso de reposición contra la Resolución N° 5659 de 2002 “Por la
cual se determinan los Partidos y Movimientos Políticos, que no cumplir con los requisitos
establecidos en la Ley 130 de 1994, pierden su personería jurídica”, entre ellos la UP (fls.
138 a 143 c. ppal.), pero no fueron consideradas como circunstancias excepcionales y de
fuerza mayor al decidir la impugnación.

Tan grave situación indiscutiblemente afectó la libertad de la UP para continuar actuando


como partido político.

El señor expresidente de la República doctor Andrés Pastrana Arango en declaración por


certificación (fls. 472 a 474 c. ppal.), señaló que como ciudadano, expresidente de
Colombia y periodista tuvo la oportunidad de conocer varios de los acontecimientos que
sustentan los hechos de esta demanda, así como tener acceso a varios documentos
públicos y literarios en los que se relata la ocurrencia de varios de estos eventos. Que “el
asesinato de muchos de los miembros de la Unión Patriótica en Colombia a manos de
miembros de bandas criminales vinculadas al narcotráfico y al paramilitarismo es un hecho
notorio y público que ha sido divulgado ampliamente por medio de la prensa y de textos
políticos e históricos”.

Agregó el testigo que la obra literaria [de su autoría] denominada “La palabra bajo fuego”
tiene como fundamento los hechos ocurridos dentro del territorio nacional en un
determinado período de nuestra historia. Que la muerte de varios de los integrantes de la
Unión Patriótica fue un hecho ampliamente informado a la opinión pública, y que este
conocimiento hace parte de la historia del país y “corresponde a hechos que ojalá no
hubiesen sucedido jamás”.

Concluyó su declaración expresando que:

“(…) En mi calidad de autor del libro, y con el propósito de hacer un relato propio
de lo acontecido con este partido político y los efectos que esos asesinatos
tuvieron sobre las perspectivas de paz en los años siguientes, se utilizó la
expresión “Genocidio” de acuerdo con la definición del Diccionario de la Real
Academia Española de la Lengua, el cual define la palabra genocidio de la
siguiente manera:

“Genocidio:

m. Exterminio o eliminación sistemática de un grupo social por motivo de raza, de


etnia, de religión, de política o de nacionalidad”

Considerando los argumentos anteriores, DECLARO Y CERTIFICO que la expresión


“genocidio político” utilizada en el libro “LA PALABRA DE FUEGO” quiso contextualizar el
homicidio sistemático de los miembros de un grupo político, ocurrido en nuestro país en
un momento histórico, para que fuera comprensible para cualquier lector en cualquier
época, aclarando que esta publicación solo tiene un carácter literario e histórico” (fl. 529 c.
ppal, negrillas fuera del texto original).

Entonces los integrantes del partido Unión Patriótica fueron víctimas de persecución por
razones políticas acaecidas en el país, cuando manos desconocidas decidieron exterminar
a sus militantes y afiliados con el claro propósito de deshacer el partido a fin de impedirle
su participación democrática en la gobernabilidad del país. Así, se trató entonces de un
verdadero atentado contra el pluralismo y la democracia.

La Corporación Reiniciar y la Comisión Colombiana de Juristas presentaron en el año 1993


demanda ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA por estos
hechos delincuenciales contra la UP (caso 11.227). El Organismo internacional en auto del

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12 de marzo de 1997 declaró la admisibilidad del caso 1067. Luego, la propia Comisión
Interamericana de Derechos Humanos, el 14 de noviembre de 2008, desglosó del caso
11.227 lo concerniente a la muerte del Senador por la UP señor Manuel Cepeda Vargas,
originando el caso 12.531, que se decidió por la Corte Interamericana de Derechos
Humanos el 26 de mayo de 2010, sentencia en la que se condenó al Estado Colombiano.

En la actualidad el caso 11.227 se encuentra a la espera de que sea resuelto por la


CIDH.”1068

1064. Así las cosas y ante la situación fáctica presentada por la Fiscalía 17 de Justicia y
Paz en cada uno de los casos legalizados por la Sala1069, así como por el análisis realizado
por los documentos y sentencias, tanto de la Corte Constitucional, la Corte Suprema de
Justicia y el Consejo de Estado, se pudo evidenciar que la persecución y ataques sufridos
por los miembros o simpatizantes de la Unión Patriótica, tienen las características de un
genocidio de tipo político, pero como quiera que esta conducta no se encontraba
tipificada para la época de estos hechos, éstos se legalizaron como homicidios en persona
protegida.

1065. La Sala pudo establecer, para fines de la presente sentencia, que el fenómeno de
exterminio y genocidio de la Unión Patriótica fue de orden nacional, que en Urabá se
presentaron un número importante de hechos que atentaron contra la integridad de los
simpatizantes o miembros de la UP, sin embargo por el proceso de priorización realizado
por la Fiscalía, se presentaron sólo algunos hechos que se quieren resaltar de forma
singular, para que dignifique a las víctimas, se les restituyan sus derechos individuales y
colectivos y se incluyan en el procesos de atención y reparación integral. Las víctimas
directas cuyos casos fueron analizados en la presente decisión son: Alejandro Valoyes
Mena, Wilton Antonio Garcés Montaño, Edilberto Cuadrado Llorente, Melquisedec Rentería
Machado, Camilo Solano Baltazar, Walter De Jesús Borja David, Arturo Moreno López,

1067
http://www.cidh.oas.org, Informe N° 5/97
1068
Ver: Consejo de Estado, Sección Quinta, consejera ponente, Susana Buitrago Valencia, 4 de julio de 2013, Radicación
número: 11001-03-28-000-2010-00027-00.
1069
En sesión de formulación de cargos del 14 de julio de 2011, ante Justicia y Paz, la Fiscalía 17, presentó al investigador,
Ricardo García Cortés, de la Unidad de Derechos Humanos, quien es el encargado de investigar y analizar los crímenes
cometidos contra los integrantes de la UP. El investigador manifestó a la Sala “…que actualmente la Unidad tiene destinado
el conocimiento especial, los casos cometidos contra miembros de la UP, sindicalistas, homicidios de periodistas, indígenas
más o menos 18 temáticas. En el caso de la UP, a partir de la solicitud que en 1993 hicieron víctimas ante el Sistema
Interamericano, fueron remitidos 1.163 casos. Para su investigación se creó una unidad de fiscales y unas subunidades con
jurisdicción; se identificaron los casos y las víctimas y desde el 2008 se concentraron los casos. Actualmente en la Unidad
de Derechos Humanos hay 9 fiscales en el tema de la UP, hasta hoy se venían recogiendo de las 1.163 víctimas que
aportaron, la Fiscalía encontró 825 investigaciones que concentran varias víctimas. Estos ya están identificados y radicados
en derechos humanos; estos casos comprenden 1.316 víctimas por que en varios de ellos hay varias víctimas, pero no
todos son de la UP, hay eventos en donde los homicidios no corresponden a miembros de la UP no obstante aparecen
registrados en la comisión. De esos casos, 526 están en preliminares, 157 en instrucción, informados 16 en juicio, con
sentencia condenatoria 103 casos con 191 condenados. La unidad de justicia y paz ha aportado información, según el
registro estadístico es de 10 casos en el caso de HH y sus aportes, donde ha habido condena. Están pendientes de recibir
noticias de la formulación de cargos, en donde no se sabe si hay sentencia o no. Muchas de las investigaciones se abrieron
por la información de los postulados en sus versiones. De las 825 investigaciones que se sigue por homicidios de la UP, en
152 investigaciones han sido vinculados hasta la fecha, miembros de las autodefensas…”
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Julio César Serna, Humberto Pacheco Castillo, Luís Eduardo Cubides Vanegas y Vidal
Devia Ramírez.

F. De la dosificación punitiva

1066. Terminadas las intervenciones y presentaciones del incidente de identificación de


las afectaciones causadas, la Sala corrió traslado1070 para que las partes presentaran sus
alegatos respecto de la pena principal y alternativa en torno a los delitos legalizados en
contra del postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA1071.

1067. La Fiscalía 17 de Justicia y Paz, las defensoras de las víctimas y el Representante


del Ministerio Público coincidieron en sus argumentos y resaltaron que teniendo en cuenta
la gravedad de las conductas cometidas por el Bloque Bananero y por su comandante
HÉBERT VELOZA GARCÍA, el Tribunal debe imponerle las penas más altas contempladas
en el ordenamiento Penal Colombiano.

1068. Por su parte, el defensor del postulado argumentó, que teniendo en cuenta que
HÉBERT VELOZA GARCÍA, confesó su participación en cada uno de los hechos objeto de
sentencia, al momento de tasar las penas ordinarias se debe tener en cuenta lo
establecido en el artículo 283 de la Ley 600 de 2000 y en aplicación al principio de
favorabilidad, se le concedan las rebajas correspondientes por cuanto el fundamento de
esta sentencia es precisamente la confesión.

1069. Al momento de dictar sentencia condenatoria en el marco del proceso de Justicia y


Paz, le corresponde a la Sala fijar dos clases de sanción, la ordinaria y la pena alternativa,
la cual entra a reemplazar la privativa de la libertad impuesta en la primera y que será la
que debe cumplir el desmovilizado una vez satisfaga las condiciones referidas en la Ley
975 de 2005.

1070. De acuerdo con lo establecido en los artículos 24 de la Ley 1592 de 2012 y 29 de


la Ley 975 de 2005, la pena ordinaria se fija de acuerdo con los criterios previstos en el
Código Penal. Ello quiere decir, que la Sala debe considerar las sanciones establecidas
para cada delito, incluidos los fundamentos modificadores de los extremos punitivos, al
igual que los parámetros dosimétricos previstos en el Estatuto Penal, como son las

1070
Artículo 447 de la ley 906 de 2004, conforme a la jurisprudencia de la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de
Justicia, (Segunda instancia 36.563 del 3 de agosto de 2011. M.P. Dr. José Luís Barceló Camacho).
1071
Audiencia de incidente de identificación de las afectaciones causadas a las víctimas, sesión de la tarde del 26 de abril de
2013.
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circunstancias de mayor y menor punibilidad destinadas a fijar el cuarto de dosificación,


ámbito dentro del cual habrá luego de determinar la sanción de acuerdo con los criterios
contemplados en el artículo 61, procedimiento que la Sala realizará en este capítulo.

1071. Varios han sido los pronunciamientos de esta Sala, así como de la Honorable Corte
Suprema de Justicia, en los que se ha indicado que el proceso de Justicia y Paz
corresponde a un cuerpo normativo sui generis, encauzado hacia la obtención de la paz
nacional, para lo cual se sacrifican caros principios reconocidos por el derecho penal de
corte democrático, como los de proporcionalidad e igualdad, por cuanto se termina por
otorgar a quienes se acojan a ella, una pena alternativa significativamente inferior a la
contemplada para las demás conductas delictivas cometidas por personas no
pertenecientes a un grupo armado al margen de la ley, aunque, como contrapartida, se
hace especial énfasis en los derechos de las víctimas a acceder a la verdad de lo
sucedido, a que se haga justicia y a que se les brinde reparación efectiva, propendiendo
además porque se les aseguren las garantías de preservación de la memoria colectiva de
los hechos que los condujeron a esa condición y de no repetición, como de manera prolija
lo ilustra la Corte Constitucional a través de la sentencia C-370 de 20061072.

1072. Entre la legislación penal ordinaria y la transicional se destacan varias diferencias,


que han sido identificadas por la jurisprudencia de la Sala de Casación Penal de la Corte
Suprema de Justicia de la siguiente manera:

“(i) Con relación a sus destinatarios: porque mientras el régimen penal ordinario
está dirigido a los ciudadanos del común que eventualmente pudieran ser, en el futuro,
responsables de una conducta delictiva, la normatividad concebida para buscar la
reconciliación y la conquista de la paz se aplica a personas que hacen parte de grupos
organizados al margen de la ley, dedicados en el pasado a sembrar el terror y a quienes el
Estado busca ahora atraer a la institucionalidad.

(ii) En cuanto a la expectativa de su aplicación: por cuanto mientras el marco de


la regulación ordinaria asegura garantías al justiciable, el ordenamiento previsto en la Ley
975 de 2005 le ofrece a los desmovilizados significativas ventajas punitivas, que de otra
manera serían imposibles de alcanzar.

(iii) Frente a los derechos de que son titulares cada uno de los dos
procesados en las distintas legislaciones: pues mientras el de la justicia ordinaria
tiene derecho a exigir que se le investigue dentro de un plazo razonable, amparado entre
otros, por el derecho a la no autoincriminación, el desmovilizado somete su poder al del
Estado (entregándole sus armas y cesando todo accionar violento), renunciando a la
garantía constitucional contenida en el artículo 33 superior, para confesar voluntariamente
sus crímenes, ofrecer toda la información suficiente para que se constate su confesión y
esperar a cambio de dicha actitud las ventajosas consecuencias punitivas que consagra la
ley a cuyo favor se acoge.

1072
Ver entre otras decisiones, sentencia del 27 de abril de 2011, radicado 34547, MP. Dra. María del Rosario González
Muñoz.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

(iv) Respecto de la actitud asumida por el sujeto pasivo de la acción: porque al


paso que el procesado por la justicia y con la legislación ordinaria está enfrentado con el
Estado, en términos de combativa exigencia, producto del ejercicio pleno de sus garantías
procesales, el justiciable desmovilizado se encuentra sometido, doblegado voluntariamente
ante el Estado en busca de la indulgencia ofrecida por la alternatividad penal prevista en la
Ley.

(v) En lo concerniente al objetivo buscado con la pena: en tanto en la


legislación ordinaria el anuncio general de la sanción tiene una función preventiva, frente a
la legislación de Justicia y Paz el anuncio de una pena tan benigna busca efectos
seductores, si se quiere, de invitación a la reconciliación sin mayor retribución, a la otra
oportunidad, al ejercicio de la alternativa por una vida alejada de la violencia, a la
restauración de las heridas causadas con su accionar delincuencial, a la transición hacia
una paz sostenible, posibilitando la desmovilización armada y la reinserción a la vida civil
de los integrantes de aquellos grupos violentos.

(vi) Finalmente, en lo correspondiente al sujeto protagonista del proceso penal:


mientras la modernidad lo construyó para rodear de garantías y derechos al sindicado, la
legislación de Justicia y Paz colocó como eje central de su accionar a la víctima, para quien
hay que reconstruir la verdad de todo lo acontecido, respecto de lo cual hasta ahora sólo
ha percibido el dolor de la muerte, el desplazamiento, la violencia sexual y la desesperanza
producida por la soledad en la que la abandonó el Estado.”1073

1073. Lo anterior quiere decir, que la aceptación de cargos, la confesión y la


colaboración con la justicia regulados en la Ley 975 de 2005, se estructura sobe bases
distintas a las establecidas en las Leyes 600 de 2000 y 906 de 2004. Además que el
principio de complementariedad al que hace referencia la Ley de Justicia y Paz, no implica
per se, que el postulado tenga derecho a obtener rebaja por razón de mecanismos
posdelictuales previstos en la legislación ordinaria. Sobre el particular, la Corte Suprema
ha señalado que:

“… es necesario tener en cuenta que el acceso a la justicia transicional reviste carácter


voluntario, en el sentido de que a sus trámites solamente ingresan quienes, haciendo parte
de grupos armados al margen de la ley, así lo manifiestan. Pero una vez allí, su
permanencia depende de que confiesen integralmente sus delitos, colaboren eficazmente
con la justicia y acepten los cargos. Si no lo hacen saldrán de inmediato de dicho marco y
serán procesados por la justicia ordinaria.

En cambio, los procedimientos ordinarios están diseñados para ser aplicados a todo aquel
que es sindicado de cometer un delito, sin importar el querer del sujeto pasivo de la
acción, de manera que una vez puesta la noticia criminal o verificada la legitimidad de
quien la da a conocer en los casos de delitos querellables, es obligación para el Estado
adelantar el correspondiente procedimiento, salvo si se aplica, en la sistemática de la Ley
906 de 2004, el principio de oportunidad, pero aún en ese evento, ello no dependerá de la
decisión del investigado, sino de la Fiscalía con el aval del respectivo juez de garantías si se
dan los presupuestos establecidos en la ley para el efecto.

A su vez, iniciado el procedimiento penal, opera para el procesado la garantía de no auto


incriminación, de manera que para la continuidad del trámite el indiciado, imputado o
acusado no está en la obligación de aceptar los cargos, confesar o colaborar con la justicia.
Si lo hace, se hará acreedor a descuentos punitivos o a la eventual aplicación del principio

1073
Sentencia del 27 de abril de 2011, radicado 34547, MP. Dra. María del Rosario González Muñoz.
420
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

de oportunidad, si se trata de colaboración con la justicia dentro del marco de la Ley 906
de 2004. En caso contrario, el proceso penal seguirá tramitándose hasta culminar con la
respectiva sentencia, sin que entonces el hecho de no optarse por algunos de esos
mecanismos procesales dé lugar a la terminación del diligenciamiento.

Como se observa, la confesión, aceptación de cargos y colaboración con la justicia son de


la esencia del esquema diseñado en la Ley 975 de 2005, de manera que sin su presencia
no habrá lugar a la aplicación de sus trámites. En cambio, en los procedimientos penales
ordinarios tales mecanismos son eventuales, en forma que de su concurrencia no depende
la continuación del trámite.

Si lo anterior es así, resulta improcedente que dentro de la determinación de la pena


ordinaria que se impone en el marco de la Ley 975 de 2000, se pretenda la aplicación de
beneficios propios de las Leyes 600 de 2000 y 906 de 2004. Para que esto ocurra, será
necesario que el procesado haya sido investigado y juzgado conforme a los trámites
regulados en dichas codificaciones…”1074

1074. Así las cosas, la Sala procederá a tasar la correspondiente pena por los cargos que
fueron legalizados en contra de HÉBERT VELOZA GARCÍA, y no dará aplicación a la
rebaja de pena que consagra el artículo 283 de la Ley 600 de 2000, por las
razones que acaban de exponerse.

1075. Como ya se mencionó, la Sala legalizó en contra de HÉBERT VELOZA GARCÍA


comandante del Bloque Bananero, los delitos de: (i) concierto para delinquir agravado; (ii)
utilización ilegal de uniformes e insignias, (iii) reclutamiento ilícito de menores; (iv)
homicidio en persona protegida; (v) homicidio en persona protegida en la modalidad de
tentativa; (vi) secuestro simple; (vii) desaparición forzada; (viii) tortura en persona
protegida; (ix) hurto calificado y agravado; (x) actos de terrorismo; y, (xi) actos de
barbarie.

1076. Por tanto, en el presente apartado de la decisión, la Sala se encargará de tasar la


pena correspondiente para estos cargos, teniendo en cuenta que por aplicación estricta
del principio de legalidad y pese a que se logró determinar que las conductas
desarrolladas por VELOZA GARCÍA constituyen crímenes de guerra, delitos de lesa
humanidad y genocidio, se realizará con fundamento en la denominación jurídica del tipo
penal vigente al momento de la comisión del hecho y la pena allí consagrada. Para tal
efecto, el Tribunal acudirá a los presupuestos determinados por los artículos 601075 y

1074
Ibídem.
1075
En este sentido, según lo dispuesto por el artículo 60 de la ley 599 el punto de partida es la determinación del ámbito
punitivo de movilidad determinando los límites mínimos y máximos señalados para el delito correspondiente, considerando
las circunstancias que los modifican, como las que se vinculan directamente con la pena prevista para la respectiva
conducta punible al atenuarla o agravarla pudiendo ser de carácter específico, las que se relacionan con los dispositivos
amplificadores del tipo, las que inciden en el grado de responsabilidad y las que se refieren a determinadas condiciones del
autor, normalmente presentes antes o concomitantes con la comisión del hecho. Corte Suprema de Justicia, radicado 22478
del 28 de febrero de 2006.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

611076 de la Ley 599 de 2000. La misma operación se realizará para determinar la multa
señalada en cada uno de los tipos penales que la contemplan como parte de la pena
principal.

1077. Así las cosas, el ámbito de movilidad se cifra entonces en meses, que resulta de
restar el mínimo del máximo, el que a su vez se divide en cuartos resultando el factor en
meses, que se incrementa de manera progresiva a partir de la pena mínima, en
cumplimiento de lo dispuesto en el inciso primero del artículo 61 de la Ley 599 de 2000.

Del delito de concierto para delinquir agravado

1078. Según lo estipulado por el artículo 340 de la Ley 599 de 2000, el concierto para
delinquir tiene prevista una pena que oscila entre tres (3) y seis (6) años de prisión. Como
la conducta fue desarrollada para cometer delitos de genocidio, desaparición forzada de
personas, tortura, desplazamiento forzado, homicidio, terrorismo, secuestro extorsivo,
organizar, promover, armar o financiar grupos armados al margen de la ley, la pena de
prisión es de seis (6) a doce (12) años; y multa de dos mil (2000) hasta veinte mil
(20.000) salarios mínimos legales mensuales vigentes. La pena privativa de la libertad se
aumentará en la mitad para quienes organicen, fomenten promuevan, dirijan, encabecen,
constituyan o financien el concierto o la asociación para delinquir, calidad que está
demostrado ostentaba HÉBERT VELOZA GARCÍA, es decir, que conforme al numeral 1º
del artículo 601077, la pena definitiva quedará de 9 a 18 años y multa de tres mil (3000)
hasta treinta mil (30.000) salarios mínimos legales mensuales vigentes.

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

108 m a 135 m 135 m a 162 m 162 m a 189 m 189 m a 216 m

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

3000 a 9750 smlmv 9750 a 16500 smlmv 16500 a 23250 smlmv 23250 a 30000 smlmv

1076
Una vez delimitado el ámbito punitivo de movilidad se procede a dividirlo en cuartos, pudiendo moverse en el cuarto
mínimo en ausencia de atenuantes o agravantes o concurrencia de circunstancias de atenuación punitiva; en los cuartos
medios cuando concurran circunstancias de atenuación y agravación punitiva; y en el cuarto máximo cuando únicamente
confluyan de agravación de la sanción penal. Las circunstancias que permiten ubicarse dentro de uno de los cuartos en que
se divide el ámbito punitivo de movilidad, son únicamente las que indican una menor o mayor punibilidad prevista en los
artículos 55 y 58, siempre que no hayan sido previstas de otra manera pues a ellas es a las que se refiere de manera
concreta el artículo 61 de la ley 599 de 2000. La misma operación se realiza para determinar la multa señalada en cada uno
de los tipos penales que la contemplan como parte de la pena principal.
1077
“Si la pena se aumenta o disminuye en una proporción determinada, ésta se aplicará al mínimo y al máximo de la
infracción básica”.
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1079. Al aplicar los criterios enunciados en los delitos a examinar, esto es la gravedad de
la conducta, el daño real o potencial creado, la intensidad del dolo, la necesidad de la
pena y la función que ella ha de cumplir en el caso concreto, y como quiera que no se
acreditó la existencia de alguna de las circunstancias de mayor o menor punibilidad de
acuerdo a lo dispuesto por los artículos 55 y 58 del Código Penal, la pena a imponer
por el delito de concierto para delinquir agravado será de 135 meses de prisión
y multa de nueve mil setecientos cincuenta (9750) salarios mínimos legales
mensuales vigentes.

Del delito de utilización ilegal de uniformes e insignias

1080. El artículo 346 de la Ley 599 de 2000, tiene prevista para el delito de utilización
ilegal de uniformes e insignias una pena de prisión delimitada entre tres (3) y seis (6)
años de prisión y multa de cincuenta (50) a mil (1000) salarios mínimos legales
mensuales vigentes.

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

36 m a 45 m 45 m a 54 m 54 m a 63 m 63 m a 72 m

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

50 a 287,5 smlmv 287,5 a 525 smlmv 525 a 762,5 smlmv 762,5 a 1000 smlmv

1081. Con fundamento en los criterios aplicados anteriormente, la pena a imponer por
este delito sería de cuarenta y cinco (45) meses de prisión y multa de
doscientos ochenta y siete (287) salarios mínimos legales mensuales vigentes.

Del delito de homicidio agravado

1082. Tal como se indicó en la parte considerativa de esta decisión1078, todos los cargos
que por el delito de homicidio agravado se le formularon a HÉBERT VELOZA GARCÍA,
excepto el cargo 55, fueron por hechos sucedidos en vigencia del Decreto Ley 100 de
1980, modificado por la Ley 40 de 1993, que tenía prevista una pena que oscilaba entre
cuarenta (40) y sesenta (60) años de prisión1079.

1078
Ver capítulo “Análisis de los cargos”.
1079
Artículo 324 Decreto Ley 100 de 1980.
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1083. Por tanto en virtud del principio de favorabilidad, para efectos de determinar el
quantum punitivo, es procedente aplicar lo dispuesto por el artículo 104 de la Ley 599 de
2000, que señala una pena de prisión que fluctúa entre veinticinco (25) y cuarenta (40)
años.

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

300 m a 345 m 345 m a 390 m 390 m a 435 m 435 m a 480 m

1084. Como quiera que la Fiscal Delegada no imputó ninguna de las causales genéricas
de atenuación y agravación de la conducta punible, consagradas en los artículos 55 y 58
del Código Penal, debe la Sala ubicarse en el primer cuarto, pero dada la gravedad de la
conducta, el daño real causado a cada una de las víctimas, a sus familias y a la
comunidad en general, sumado a la necesidad de la pena y la función resocializadora que
ha de cumplirse en el caso concreto, por tratarse de un crimen de guerra y en algunos
casos de delitos de lesa humanidad, posibilita que la Sala seleccione el máximo del cuarto
seleccionado e imponga una pena de trescientos cuarenta y cinco (345) meses de prisión.

1085. Ahora bien, como se trata de un concurso homogéneo y sucesivo, por cuanto el
postulado vulneró en repetidas ocasiones el bien jurídico tutelado de la vida, la pena ha
de incrementarse hasta en otro tanto, sin que fuere superior a la suma aritmética de las
que correspondan a las respectivas conductas punibles, debidamente dosificadas cada
una de ellas1080, pero como en el presente asunto HÉBERT VELOZA GARCÍA, debe
responder por el delito de homicidio agravado que le fue formulado en 69 hechos en los
que perdieron la vida casi un centenar de personas, la pena a imponer será la máxima
fijada para el delito de homicidio, esto es, de 480 meses de prisión o lo que es lo mismo
de 40 años, quantum que resulta inferior a lo que representa cada uno de estos
comportamientos debidamente dosificados.

1086. En consecuencia, por el delito de homicidio agravado, la pena a imponer es de


cuatrocientos ochenta (480) meses de prisión.

Del delito de homicidio en persona protegida

1087. La Sala legalizó el delito de homicidio en persona protegida, que la Fiscalía le


formuló al postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, por hechos ocurridos el 22 de abril de
1080
Artículo 31 de la ley 599 de 2000.
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2002, en los que perdió la vida el señor Jenry Jameth Velasco Cuesta, y de acuerdo con al
artículo 135 de la Ley 599 de 2000, la pena prevista para este delito es de treinta (30) a
cuarenta (40) años de prisión, multa de dos mil (2000) a cinco mil (5000) salarios
mínimos legales mensuales vigentes, e inhabilidad para el ejercicio de derechos y
funciones públicas de quince (15) a veinte (20) años.

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

360 m a 390 m 390 m a 420 m 420 m a 450 m 450 m a 480 m

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

2000 a 2750 smlmv 2750 a 3500 smlmv 3500 a 4250 smlmv 4250 a 5000 smlmv

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

180 m a 195 m 195 m a 210 m 210 m a 225 m 225 m a 240 m

1088. En el presente caso, tampoco se acreditó la existencia de alguna de las


circunstancias de mayor punibilidad de acuerdo con lo dispuesto por los artículo 55 y 58
del Código Penal, pero la gravedad del comportamiento, la intensidad del dolo, la
necesidad de la pena en el caso concreto, toda vez que el postulado requiere tratamiento
penitenciario para alcanzar la resocialización, obliga a la Sala de ubicarse en el máximo
del primer cuarto, e imponerle una pena de trescientos noventa (390) meses de
prisión, multa de mil setecientos cincuenta (2750) salarios mínimos legales
mensuales vigentes, e inhabilidad para el ejercicio de derechos y funciones
públicas por un periodo de tiempo equivalente a ciento noventa y cinco (195)
meses, por el delito de homicidio en persona protegida art. 135 parágrafo 1, de la Ley
599 de 2000.

Del delito de homicidio agravado en la modalidad de tentativa:

1089. El artículo 22 del Decreto Ley 100 de 1980, vigente para el momento de la
comisión de los hechos que fueron legalizados por la Sala, establece:

“Artículo 22. Tentativa. El que iniciare la ejecución del hecho punible, mediante actos
idóneos e inequívocamente dirigidos a su consumación y ésta no se produjere por
circunstancias ajenas a su voluntad, incurrirá en pena no menor de la mitad del mínimo, ni
mayor a las tres cuartas partes del máximo de la señalada para el delito consumado.”

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1090. El artículo 104 de la Ley 599 de 2000, que en virtud del principio de legalidad
establece una pena de prisión que fluctúa entre trescientos (300) y cuatrocientos ochenta
(480) meses de prisión, pero teniendo en cuenta lo establecido para la tentativa, se tiene
que la pena oscila entre ciento cincuenta (150) y trescientos sesenta (360) meses de
prisión.

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

150 m a 202.5 m 202.5 m a 255 m 255 m a 307.5 m 307.5 m a 360 m

1091. Como quiera que no se formularon causales genéricas de atenuación y agravación


de la conducta punible, la Sala se ubicará en el primer cuarto, pero dado el daño real y
potencial ocasionado a las víctimas y a sus familiares, se impondrá el máximo del cuarto
seleccionado, esto es, de doscientos dos (202) meses de prisión.

1092. Ahora bien, como en el presente asunto se trata de un concurso homogéneo y


sucesivo, pues fueron varias las que personas contra las que VELOZA GARCÍA, atentó
contra su vida, de conformidad con lo establecido en el artículo 31 de la Ley 599 de 2000,
la pena ha de incrementarse hasta en otro tanto, sin que fuere superior a las suma
aritmética de las que correspondan a las respectivas conductas punibles, debidamente
dosificadas cada una de ellas. Por tratarse de cuatro víctimas del delito de tentativa de
homicidio la pena se incrementará en treinta (30) meses, quantum que resulta inferior a
lo que representa cada uno de estos comportamiento debidamente dosificados. En
consecuencia, por este delito, se debe imponer una pena de doscientos treinta y dos
(232) meses de prisión.

Del delito de secuestro simple

1093. En la decisión de control de legalidad, la Sala legalizó el delito de secuestro simple


que se encuentra tipificado en el artículo 168 de la Ley 599 de 2000, así:

“Artículo 168. Secuestro simple. El que con propósitos distintos a los previstos en el
artículo siguiente, arrebate, sustraiga, retenga u oculte a una persona, incurrirá en prisión
de diez (10) a veinte (20) años y en multa de seiscientos (600) a mil (1.000) salarios
mínimos legales mensuales vigentes.”

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1094. Pero como quiera que las conductas cometidas por el postulado VELOZA GARCÍA,
fueron en vigencia del Decreto Ley 100 de 1980, para los efectos punitivos, y atención a
los principios de legalidad y favorabilidad, debe aplicarse el artículo 269 que establece
para el delito de secuestro simple, una pena de prisión de seis (6) a veinticinco años (25)
y una multa de cien (100) a doscientos (200) salarios mínimos legales mensuales.

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

72 m a 129 m 129 m a 186 m 186 m a 243 m 243 m a 300 m

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

100 a 125 smlmv 125 a 150 smlmv 150 a 175 smlmv 175 200 smlmv

1095. En este caso, tampoco se formularon las causales genéricas de atenuación y


agravación de la conducta punible, razón por la cual la Sala se ubicará en el primer
cuarto, pero dada la gravedad de la conducta, el daño y sufrimiento que se le ocasiona a
las víctimas y a sus familias, la Sala se ubicará en el máximo del primer cuarto, para
imponer una pena de ciento veintinueve (129) meses de prisión y multa de ciento
veinticinco (125) salarios mínimos legales mensuales vigentes.

1096. Pero como se trata de un concurso homogéneo y sucesivo, pues fueron varias las
personas víctimas de secuestro por parte del grupo armado ilegal comandado por VELOZA
GARCÍA, razón por la cual la Sala, de conformidad con lo establecido en el artículo 31 de
la Ley 599 de 2000, la pena ha de incrementarse hasta en otro tanto, sin que fuere
superior a las suma aritmética de las que correspondan a las respectivas conductas
punibles, debidamente dosificadas cada una de ellas. En consecuencia, por este delito, se
impondrá la pena de doscientos uno (201) meses de prisión, y doscientos veinticinco
(225) salarios mínimos legales mensuales vigentes.

Del delito de desaparición forzada

1097. La desaparición forzada constituye un delito de ejecución permanente1081, que en


los casos 3, 34, 39 y 40, empezó a ejecutarse en vigencia del artículo 268 A del Decreto

1081
“Este delito debe considerarse como de ejecución continuada o permanente hasta que no se conozca el paradero de la
víctima. Esta obligación resulta razonable si se tiene en cuenta que la falta de información acerca de la persona
desaparecida impide a la víctima y a sus familiares el ejercicio de las garantías judiciales necesarias para la protección de
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Ley 100 de 1980, introducido por el artículo 1º de la Ley 589 de 2000; y terminó de
ejecutarse luego de promulgada la Ley 599 de 2000, razón por la cual y de acuerdo con lo
señalado por la jurisprudencia de la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de
Justicia1082, no es necesario analizar si una u otra norma le es o no más favorable al
acusado, pues lo que corresponde en los delitos de ejecución permanente, es aplicar la
sanción contenida en la última norma, así ésta sea más grave, aunque este no es el caso.

1098. Por tanto, para efectos de determinar el quantum punitivo, es procedente aplicar
lo dispuesto por el artículo 165 de la Ley 599 de 2000, que tiene prevista una pena de
prisión que oscila entre veinte (20) años y treinta (30) años, multa de mil (1000) a tres
mil (3000) salarios mínimos legales mensuales vigentes y en interdicción de derechos y
funciones públicas de diez (10) a veinte (20) años.

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

240 m a 270 m 270 m a 300 m 300 m a 330 m 330 m a 360 m

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

1000 a 1500 smlmv 1500 a 2000 smlmv 2000 a 2500 smlmv 2500 a 3000 smlmv

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

120 m a 150 m 150 m a 180 m 180 m a 210 m 210 a 240 m

1099. Como quiera que la Fiscalía no imputó ni formuló ninguna de las causales
genéricas de atenuación y agravación de la conducta punible, la Sala se ubicará en el
primer cuarto, pero dada la gravedad de la conducta, el daño y sufrimiento que se le
ocasiona a las víctimas y a sus familias por conocer el paradero de sus seres queridos,
sumado a la función resocializadora de la pena, la Sala se ubicará en el máximo del
primer cuarto, para imponer una pena de doscientos setenta (270) meses de prisión;
multa de mil quinientos (1500) salarios mínimos legales mensuales vigentes y la

sus derechos y para el esclarecimiento de la verdad: la persona sigue desaparecida. Esta situación implica que la lesión de
los bienes protegidos se prolonga en el tiempo, y por tanto, la conducta sigue siendo típica y antijurídica hasta que el
conocimiento que se tenga acerca del paradero de la persona permita el ejercicio de tales garantías judiciales. En esa
medida, la conducta de desaparición forzada se realiza durante el tiempo en que se prolongue la privación de la libertad y
no se tenga información acerca de la persona o personas que se encuentren en tal circunstancia.” Ver sentencia Corte
Constitucional c-580 del 31 de julio de 2002. M.P. Dr. Rodrigo Escobar Gil.
1082
CSJ, Sala Penal, Sentencias radicado 23538 del 20 de mayo de 2008; 31401 del 24 de junio de 2009 y 31307 del 25 de
agosto de 2010.
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interdicción de derechos y funciones públicas por el término de ciento cincuenta (150)


meses.

1100. Ahora bien, como se trata de un concurso homogéneo y sucesivo, pues fueron
varias las personas víctimas del delito de desplazamiento forzado por parte del grupo
armado ilegal comandado por VELOZA GARCÍA, la Sala, de conformidad con lo establecido
en el artículo 31 de la Ley 599 de 2000, incrementará la pena hasta en otro tanto, sin que
fuere superior a la suma aritmética de las que correspondan a las respectivas conductas
punibles, debidamente dosificadas cada una de ellas.

1101. En consecuencia, por este delito, se impondrá la pena de trescientos meses


(300) meses de prisión, multa de dos mil (2000) salarios mínimos legales
mensuales vigentes y la interdicción de derechos y funciones públicas por el
término de ciento ochenta (180) meses.

Del delito de tortura en persona protegida:

1102. En la decisión de control de legalidad la Sala legalizó el delito de tortura en


persona protegida en los hechos 3 y 63, dadas las circunstancias y situaciones fácticas en
las que se presentaron los hechos, conducta punible que se encuentra penalizada en el
artículo 137 de la Ley 599 de 2000, con una pena de prisión de prisión de diez (10) a
veinte (20) años, multa de quinientos (500) a mil (1000) salarios mínimos legales
mensuales vigentes, e inhabilitación para el ejercicio de derechos y funciones públicas de
diez (10) a veinte (20) años.

1103. Pero para efectos de determinar el quantum punitivo, es procedente aplicar lo


dispuesto por el artículo 279 del Decreto Ley 100 de 1980, modificado por el artículo 24
del Decreto 180 de 1988, norma que se encontraba vigente para el momento en que se
cometieron los hechos, y que tenía prevista una pena de prisión que oscilaba entre cinco
(5) a diez (10) años.

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

60 m a 75 m 75 m a 90 m 90 m a 105 m 105 m a 120 m

1104. Al igual que en los casos anteriores, como la Fiscalía no imputó ni formuló ninguna
de las causales genéricas de atenuación y agravación de la conducta punible, la Sala se
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ubicará en el primer cuarto, pero dada la gravedad de la conducta, el daño y sufrimiento


que se le ocasionó a las víctimas, sumado a la función resocializadora de la pena, la Sala
se ubicará en el máximo del primer cuarto, para imponer una pena de setenta y cinco
(75) meses de prisión por el delito de tortura.

1105. Pero como quiera que se trata de un concurso homogéneo y sucesivo, la Sala, de
conformidad con lo establecido en el artículo 31 de la Ley 599 de 2000, incrementará la
pena hasta en otro tanto, sin que fuere superior a la suma aritmética de las que
correspondan a las respectivas conductas punibles, debidamente dosificadas cada una de
ellas.

1106. En consecuencia, por este delito de tortura por el que HÉBERT VELOZA GARCÍA
debe responder, se le impondrá la pena de noventa (90) meses de prisión.

Del delito de hurto calificado y agravado

1107. Los artículos 350 y 351 del Decreto Ley 100 de 1980 disponen:

“Artículo 350. HURTO CALIFICADO: La pena será de prisión de dos (2) a ocho (8) años, si
el hurto se cometiere:
(…)
2) Colocando a la víctima es condiciones de indefensión o inferioridad o aprovechándose
de tales condiciones (…)”

“Artículo 351. CIRCUNSTANCIA DE AGRAVACIÓN PUNITIVA: La pena imponible de acuerdo


con los artículos anteriores, se aumentará de una sexta parte a la mitad sí el hecho se
cometiere:
(…)
6) Sobre vehículo automotor, unidad montada sobre ruedas o sus partes importantes o
sobre objeto que se lleve en ellos;
(…)
9) De noche, o en lugar despoblado o solitario…

1108. De acuerdo con lo establecido en el numeral 4º del artículo 60, si la pena se


aumenta en dos proporciones, la menor se aplicará al mínimo y la mayor al máximo de la
infracción básica, quedando entonces una pena definitiva de 28 a 144 meses de prisión.

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

28 m a 57 m 57 m a 86 m 86 m a 115 m 115 a 144 m

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1109. Ahora bien, teniendo en cuenta que no se imputó ni formuló ninguna de las
causales genéricas de atenuación y agravación de la conducta punible, la Sala se ubicará
en el primer cuarto, pero dada la gravedad de la conducta, si se tiene en cuenta que uno
de los vehículos que fue hurtado y que luego fue conocido como “camino al cielo”, fue
destinado para el transporte de cientos de personas que luego fueron asesinadas,
desaparecidas, torturadas, secuestradas, tal como lo demostró la señora Fiscal a lo largo
de la audiencia de control de legalidad, razón por la cual la Sala se ubicará en el máximo
del primer cuarto, para imponer una pena de cincuenta y siete (57) meses de prisión.

1110. Tal como se ha venido indicando, cuando se trata de un concurso homogéneo y


sucesivo, como sucede en este caso, la Sala, de conformidad con lo establecido en el
artículo 31 de la Ley 599 de 2000, la Sala debe incrementar la pena hasta en otro tanto,
sin que fuere superior a la suma aritmética de las que correspondan a las respectivas
conductas punibles, debidamente dosificadas cada una de ellas, razón por la que se
impondrá una pena de ochenta y seis (86) meses de prisión, por el delito de
hurto calificado y agravado.

Del delito de actos de terrorismo

1111. Este delito se encuentra tipificado en el artículo 144 de la Ley 599 de 2000, y
establece una pena de prisión de prisión de quince (15) a veinticinco (25) años, multa de
dos mil (2000) a cuarenta mil (40.000) salarios mínimos legales mensuales vigentes, e
inhabilitación para el ejercicio de derechos y funciones públicas de quince (15) a veinte
(20) años.

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

180 m a 210 m 210 m a 240 m 240 m a 270 m 270 m a 300 m

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

2000 a 11500 11500 a 21000 21000 a 30500 30500 a 40000 smlmv


smlmv smlmv smlmv

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

180 m a 195 m 195 m a 210 m 210 m a 225 m 225 m a 240 m

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1112. Este delito fue legalizado en el hecho 37, que corresponde a los hechos conocidos
como la masacre “El Golazo”, hechos en los que la Fiscalía no imputó ni formuló ninguna
de las causales genéricas de atenuación y agravación de la conducta punible, razón por la
cual, la Sala se ubicará en el primer cuarto, pero dada la gravedad de la conducta, pues
se trató de un ataque planeado por un gran número de hombres fuertemente armados,
que se distribuyeron estratégicamente con el fin de sorprender a la población mientras
departían en un establecimiento público, realizado en horas de la noche, aprovechándose
del estado de indefensión de la población civil, la Sala se ubicará en el máximo del primer
cuarto. En consecuencia, por este delito, se impondrá la pena de doscientos diez
(210) meses de prisión, multa de once mil quinientos (11500) salarios mínimos
legales mensuales vigentes y la interdicción de derechos y funciones públicas
por el término de ciento noventa y cinco (195) meses.

Del delito de actos de barbarie

1113. El artículo 145 de la Ley 599 de 2000, establece para este delito una pena de
prisión de diez (10) a quince (15) años, multa de doscientos (200) a quinientos (500)
salarios mínimos legales mensuales vigentes, e inhabilitación para el ejercicio de derechos
y funciones públicas de diez (10) a quince (15) años.

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

120 m a 135 m 135 m a 150 m 150 m a 165 m 165 m a 180 m

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

200 a 275 smlmv 275 a 350 smlmv 350 a 425 smlmv 425 a 500 smlmv

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

120 m a 135 m 135 m a 150 m 150 m a 165 m 165 m a 180 m

1114. Este delito fue legalizado en los cargos 58 y 63, hechos en los que la Fiscalía no
imputó ni formuló ninguna de las causales genéricas de atenuación y agravación de la
conducta punible, razón por la cual, la Sala se ubicará en el primer cuarto, pero dada la
gravedad de la conducta y la crueldad en la que perdieron las vida los señores Edilberto
Cuadrado Llorente1083 y Luís Eduardo Cubides Venegas1084, la Sala se ubicará en el

1083
Hecho 58.
1084
Hecho 63.
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máximo del primer cuarto. En consecuencia, por este delito, se impondrá la pena de
ciento treinta y cinco (135) meses de prisión, multa de doscientos setenta y cinco (275)
salarios mínimos legales mensuales vigentes y la interdicción de derechos y funciones
públicas por el término de ciento treinta y cinco (135) meses.

1115. Pero, como se trata de un concurso homogéneo y sucesivo, deberá tenerse en


cuenta lo dispuesto en el artículo 31 de la Ley 599 de 2000, esto es, se aumentará le
pena hasta en otro tanto, sin que ésta sea superior a la suma aritmética de las que
correspondan a las conductas punitivas debidamente dosificadas cada una de ellas, razón
por la que se impondrá una pena definitiva de ciento cincuenta (150) meses de
prisión, multa de trescientos cincuenta (350) salarios mínimos legales
mensuales vigentes e inhabilidad para el ejercicio de derechos y funciones
públicas por el término de ciento cincuenta (150) meses, quantum que resulta
inferior a lo que representa cada uno de esos comportamientos debidamente
dosificados.

Del reclutamiento ilícito

1116. El delito de reclutamiento ilícito, conforme a lo previsto por el artículo 162 de la


Ley 599 de 2000, tiene señalada una pena que oscila entre seis (6) y diez (10) años de
prisión y multa de seiscientos (600) a mil (1000) salarios mínimos legales mensuales
vigentes.

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

72 m a 84 m 84 m a 96 m 96 m a 108 m 108 m a 120 m

Cuarto mínimo Cuartos Medios Cuarto máximo

600 a 700 smlmv 700 a 800 smlmv 800 a 900 smlmv 900 a 1000 smlmv

1117. En el presente caso, tampoco se acreditó la existencia de alguna de las


circunstancias de mayor o menor punibilidad de acuerdo a lo dispuesto por los artículos
55 y 58 del Código Penal, pero la gravedad del comportamiento desarrollado de manera
generalizada y sistemática, las falsas promesas de trabajo, el uso de la fuerza y la
violencia sobre los menores o contra los miembros de sus familias, el aprovecharse de las
particulares circunstancias de las víctimas, como la falta de oportunidades laborales y el

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impacto que genera el rompimiento del proceso que va de la niñez a la adolescencia y la


adultez de las víctimas de reclutamiento, impone la obligación de señalar el máximo del
primer cuarto, esto es una pena de ochenta y cuatro (84) meses de prisión y
multa de setecientos (700) salarios mínimos legales mensuales vigentes.

1118. Pero, como se trata de un concurso homogéneo y sucesivo, deberá tenerse en


cuenta lo dispuesto en el artículo 31 de la Ley 599 de 2000, esto es, se aumentará le
pena hasta en otro tanto, sin que ésta sea superior a la suma aritmética de las que
correspondan a las conductas punitivas debidamente dosificadas cada una de ellas, lo que
implica que por tratarse de 7 reclutamientos ilegales, la pena puede incrementarse hasta
en ochenta y cuatro (84) meses y setecientos (700) salarios mínimos legales mensuales
vigentes, quantum que resulta inferior a lo que representa cada uno de esos
comportamientos debidamente dosificados.

1119. Significa lo anterior, que por el delito de reclutamiento ilícito, se impondrá una
pena de ciento sesenta y ocho (168) meses de prisión y multa de mil
cuatrocientos (1400) salarios mínimos legales mensuales vigentes.

1120. Ahora bien, como en este caso, se trata de un concurso heterogéneo de delitos,
para efectos de establecer el quantum punitivo que en definitiva se aplicará al postulado
HÉBERT VELOZA GARCÍA, la dosificación de la sanción operará tomando como base la
pena a imponer por cuenta de la conducta más grave según su naturaleza, aumentada
hasta en otro tanto, sin que fuere superior a la suma aritmética de las que correspondan
a las respectivas conductas punibles debidamente dosificadas cada una de ellas, tal como
lo dispone el artículo 31 de la Ley 599 de 2000, sin exceder los cuarenta (40) años de
prisión, procedimiento que se acaba de hacer en párrafos anteriores.

1121. Para el caso concreto, se tiene que la pena más grave es la señalada para el delito
de homicidio agravado, que fue de cuatrocientos ochenta (480) meses de prisión,
quantum punitivo que por alcanzar el máximo permitido por la norma antes mencionada
no será incrementado.

1122. Pues bien, como el delito de homicidio agravado, solo cuenta con la pena de
prisión, será necesario establecer el delito que tiene la sanción más grave para la pena
de multa y la pena privativa de otros derechos, que para el caso concreto resulta ser la
señalada para el delito de actos de terrorismo, que fue de once mil quinientos (11.500)

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salarios mínimos legales mensuales vigentes, incrementada en tres mil (3000) salarios por
el delito de concierto para delinquir agravado, doscientos (200) salarios por el delito de
utilización ilegal de uniformes e insignias, mil trescientos (1300) por el delito de homicidio
en persona protegida, cien (100) salarios por el delito de secuestro, mil (1000) salarios
por el delito de desaparición forzada, ciento cincuenta (150) salarios por el delito de actos
de barbarie y setecientos (700) salarios por el delito de reclutamiento ilícito, montos que
no superan lo establecido en el artículo 39 de la Ley 599 de 2000.

1123. Frente a la inhabilidad para el ejercicio de derechos y funciones públicas, se partirá


de la sanción más alta, sin superar los veinte (20) años previstos por el artículo 51 de la
Ley 599 de 2000. Para tal fin, se tiene que la sanción más severa es la señalada para el
delito de homicidio en persona protegida, de ciento noventa y cinco (195) meses,
incrementada en quince (15) meses por el delito de desaparición forzada, veinte (20)
meses por el delito de actos de terrorismo y diez (10) meses por el delito de actos de
barbarie.

1124. Con fundamento en los anteriores argumentos, el postulado HÉBERT VELOZA


GARCÍA quedará sometido en definitiva a una pena de CUATROCIENTOS OCHENTA
(480) meses de prisión y multa de DIECISIETE MIL NOVECIENTOS CINCUENTA
(17950) salarios mínimos legales mensuales vigentes, monto que no sobrepasa
lo previsto por el artículo 31 de la Ley 599 de 2000.

1125. Como la pena accesoria debe ir acompañada de la de prisión se le impondrá al


sentenciado de conformidad con el artículo 44 del C.P., la inhabilitación para el
ejercicio de derechos y funciones públicas, por un lapso de veinte (20) años. Así
mismo la inhabilidad para la tenencia y porte de armas por el término de 15 años, de
conformidad con lo establecido en el artículo 51 del Código Penal.

G. De la pena alternativa

1126. La alternatividad, es un beneficio que incorpora una rebaja punitiva


significativa, a la cual pueden acceder los miembros de un grupo armado organizado al
margen de la ley que se sometan a un proceso de reincorporación a la vida civil, y que
hayan sido autores o partícipes de hechos delictivos cometidos durante y con ocasión de
la pertenencia a esos grupos; su concesión está condicionada al cumplimiento de unos

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requisitos, orientados a satisfacer a cabalidad los derechos de las víctimas a la verdad, la


justicia, la reparación y la no repetición1085.

1127. La Corte Constitucional dispuso que “la alternatividad penal es un beneficio


consistente en suspender la ejecución de la pena ordinaria aplicable en virtud de las
reglas generales del Código Penal, para que en lugar de cumplir esta pena ordinaria, el
condenado cumpla una pena alternativa menor, de un mínimo de 5 años y de un máximo
de 8 años. En la sentencia condenatoria, primero se fija la pena ordinaria (la principal y la
accesoria) – labor ya desarrollada por la Sala – y, segundo, se reemplaza dicha pena,
cuya ejecución es suspendida por ministerio de la ley, por la pena alternativa de 5 a 8
años, entre otras determinaciones que han de tomarse en la sentencia. En el concepto de
alternatividad penal adoptado en la ley 975 de 2005 la pena ordinaria no desaparece, sino
que es fijada en la sentencia. Lo que sucede es que el condenado que reúna los requisitos
establecidos en dicha ley se beneficia con una pena alternativa inferior que también ha de
ser fijada en la sentencia. Es esta pena alternativa la que efectivamente debe cumplir el
condenado”1086.

1128. De acuerdo con las disposiciones transcritas el instituto de la alternatividad es


concebido por el legislador como un beneficio jurídico en el que concurren los siguientes
elementos:

i. “El beneficio comporta la suspensión de la pena determinada en la respectiva


sentencia. Esta pena es la que correspondería de conformidad con las reglas generales del
Código Penal, es decir, la pena ordinaria (la principal y las accesorias) (Art.3°).

ii. Su reemplazo por una pena alternativa que se concede por la contribución del
beneficiario a la consecución de la paz nacional, la colaboración con la justicia, la
reparación a las víctimas, y su adecuada resocialización. (Art. 3°) ” 1087

1129. De acuerdo con dichas consideraciones, la sanción de la pena de prisión ordinaria


se reemplaza por la privativa de la libertad de 5 a 8 años de prisión, que entonces adopta
la denominación de pena alternativa.

1130. El artículo 8 inciso 2 del decreto 4760 de 2005, señala que de conformidad con los
artículos 3, 24, 29 y 44 de la Ley 975 de 2005, el beneficio jurídico de suspensión de la
ejecución de la pena determinada en la respectiva sentencia reemplazándola por una

1085
Corte Constitucional C-370 del 18 de mayo de 2006.
1086
Corte Constitucional C-370 de 2006
1087
Ibídem.

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pena alternativa consistente en la privación de la libertad por un período mínimo de cinco


años y no superior a ocho, tasada de acuerdo con la gravedad de los delitos y la
colaboración efectiva en el esclarecimiento de los mismos, únicamente podrá concederse
en la sentencia si se encuentra acreditada la contribución del beneficiario a la consecución
de la paz nacional, la colaboración con la justicia, la reparación a las víctimas, su
adecuada resocialización y el cumplimiento de los requisitos establecidos en la Ley 975 de
2005, incluyendo los previstos en los artículos 10 y 11 de la misma, según sea del caso.

1131. Las anteriores exigencias, sobre todo relativas a la elegibilidad, ya fueron objeto
de decisión dentro de la sentencia, aceptándose que HÉBERT VELOZA GARCÍA contribuyó
con su desmovilización a la paz nacional y, además, colaboró con la justicia confesando
en versión libre sus crímenes y posteriormente aceptando los cargos formulados por la
Fiscalía. Además, aportó bienes que contribuirán a la indemnización de los perjuicios
causados, su actitud y disposición para participar en el proceso bajo los parámetros de la
Ley 975 de 2005, facilitó que las víctimas pudieran reclamar los perjuicios sufridos, por lo
que se predica el cumplimiento de las condiciones para conceder la alternatividad.

1132. En el caso del señor HÉBERT VELOZA GARCÍA, la pena ordinaria fue
individualizada con fundamento en lo previsto en el artículo 31 del Código Penal que para
los casos de concurso de conductas punibles, como sucede en este caso, quedó sometida
a la más grave, según su naturaleza aumentada hasta en otro tanto. De esta manera, el
monto determinado alcanzó el máximo previsto por el inciso 2º de dicho artículo. Por lo
que podría decirse que la Sala debería sustituirla por el máximo de la pena alternativa de
ocho (8) años.

1133. Además porque HÉBERT VELOZA GARCÍA, en su condición de comandante del


Bloque Bananero, impartió órdenes directas a los hombres bajo su mando para cometer
graves violaciones a los derechos humanos e infracciones al Derecho Internacional
Humanitario. A lo largo de este proceso quedó probado que el grupo comandado por
VELOZA GARCÍA, atacó la población civil, para cometer los delitos de genocidio,
homicidios, secuestros, desaparición forzada, tortura, reclutamiento ilícito de menores,
entre otros delitos, que ahora son objeto de sentencia, incluso en muchos de ellos el
desmovilizado participó de forma directa.

1134. El inciso segundo del artículo 29 de la Ley 975 de 2005, establece que “En caso
que el condenado haya cumplido las condiciones previstas en esta ley, la Sala le impondrá

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una pena alternativa que consiste en privación de la libertad por un periodo mínimo de
cinco (5) años y no superior a ocho (8) años, tasada de acuerdo con la gravedad de
los delitos y su colaboración efectiva en el esclarecimiento de los mismos”
(negrillas fuera del texto).

1135. Como se ha indicado a lo largo de esta decisión, es indiscutible la gravedad que


revisten los delitos cometidos por HÉBERT VELOZA GARCÍA, en su condición de ex
comandante del bloque bananero, debe entonces la Sala analizar si su colaboración ha
sido efectiva en el esclarecimiento de los hechos.

1136. Lo primero que debe advertirse es que uno de los pilares fundamentales del
proceso de Justicia y Paz, es la verdad, que en palabras de la Corte Suprema de Justicia,
tiene el siguiente alcance:

“El derecho a la verdad, del cual son titulares tanto la víctima como la sociedad, apunta a
que se determine de manera precisa y exacta la forma como tuvieron ocurrencia los
hechos en general, lo cual comprende a sus autores, sus motivos, las prácticas utilizadas,
los métodos de financiación, las colaboraciones internacionales, estatales o particulares
recibidas, a fin de que salga a la luz pública ese acontecer oscuro que debe servir a la
comunidad para implementar los correctivos orientados a que no vuelvan a ocurrir tales
sucesos, así como establecer dónde se encuentran los secuestrados y los desparecidos por
la fuerza, amén de integrar lo más fidedignamente posible la memoria histórica, y en tal
medida asegurar que semejantes conductas no sucedan de nuevo.

Para tal propósito es necesario individualizar tanto a los determinadores como a los
autores materiales y cómplices de los delitos, también llamados “agentes de la primera
zona”1088; igualmente, a quienes los financiaron, seleccionaron las víctimas o se
beneficiaron con la comisión de tales conductas, es decir, “los agentes de la segunda
zona”, e inclusive, a los ciudadanos pasivos que por miedo o simpatía con tales
comportamientos se plegaron a los perpetradores y cuyo testimonio resulta importante
para arribar a la verdad, esto es, los “agentes de la tercera zona”.

Todo lo anterior, sin perjuicio de que esa verdad judicial se complemente con otros medios
no judiciales orientados a reconstruirla (inciso 3º del artículo 7º de la Ley 975 de 2005),
como puede ser el caso del trabajo de historiadores, periodistas, investigaciones
sociológicas de campo y las comisiones de la verdad, en cuyos procedimientos no median
las exigencias formales y sustanciales, que sí gobiernan la práctica y aducción de pruebas
en el diligenciamiento judicial, además de que los resultados de aquellas actividades
siempre pueden ser aumentados o rehechos, lo cual no ocurre con las decisiones judiciales
en virtud del principio de cosa juzgada, y que, por tanto, pueden dentro de su
informalidad brindar aportes invaluables en el rescate de la verdad…” 1089

1137. De acuerdo con los planteamientos de la Fiscalía, HÉBERT VELOZA GARCÍA, ha


colaborado de manera eficaz en la reconstrucción de esta verdad judicial, en el
esclarecimiento no solo de los hechos que le son atribuibles como comandante de los

1088
PAUL RICOEUR. La memoria, la historia, el olvido, México, Fondo de Cultura Económica, 2004. p. 606.
1089
CSJ Sentencia del 27 de abril de 2007, radicado 34547, M.P. Dra. María del Rosario González de Lemos.
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bloques Bananero y Calima, sino que tal como lo expuso la Fiscal Delegada en las
diferentes audiencias que se han adelantado ante esta Sala, VELOZA GARCÍA en sus
versiones libres ha contribuido con información para la investigación y juzgamiento de
quienes tenían vínculos con grupos paramilitares, fue así como la Sala de Casación Penal
de la Corte Suprema de Justicia, condenó a los Senadores de la República: Ramón
Antonio Valencia1090, Rubén Darío Quintero Villada1091, Humberto de Jesús Builes
Correa1092 y Juan Carlos Martínez Sinisterra1093; se encuentra investigando a los
Representantes a la Cámara: Estanislao Ortiz Lara, Jesús Enrique Doval Urango, Manuel
Darío Ávila Peralta y César Augusto Andrade; y a los Gobernadores: Juan Carlos Chaux y
Oscar de Jesús López Cadavid1094. Así mismo, la Fiscalía General de la Nación, ha
compulsado 25 copias para que se investigue y juzgue a empresarios bananeros, a
miembros de la fuerza pública, servidores públicos, entre otros.

1138. Quiere decir lo anterior, que la colaboración de HÉBERT VELOZA GARCÍA, ha sido
efectiva en el esclarecimiento de innumerables hechos de los que no se tenía noticia,
además ha mostrado una actitud de enmienda y rectificación, camino a su reincorporación
a la sociedad1095.

1139. Además y de acuerdo con la exposición de la Fiscal Delegada, se tiene que el


universo de delitos atribuibles a HÉBERT VELOZA GARCÍA, en su condición de
comandante del bloque bananero, es de 1650 hechos que se encuentran en imputación
de cargos y 2805 registros de hechos atribuibles, que se encuentran en proceso de
verificación por parte de la Fiscalía, sin contar los hechos por los que deberá responder
como comandante del bloque Calima.

1090
Sentencia condenatoria del 14 de diciembre de 2010, rad. 30126.
1091
Sentencia condenatoria del 27 de septiembre de 2010, rad. 34653.
1092
Sentencia condenatoria del 17 de agosto de 2010, rad. 26585.
1093
Calificación del sumario el 9 de diciembre de 2009, rad. 30097.
1094
Sentencia condenatoria del 19 de enero de 2011, rad. 33260.
1095
“En necesario diferenciar el manejo que debe darse a quienes insisten en la vía de las armas, del que debe darse a
quienes, no obstante haber causado el mismo dolor, optan por el abandono de éstas y ofrecen soluciones de reconciliación.
Se trata de encontrar una adecuada relación, un equilibrio entre justicia y paz, que nos permita satisfacer los intereses de la
primera, al tiempo que se avanza de manera audaz y efectiva en la superación de los problemas de violencia que tanto
sufrimiento le han causado al país.
La no repetición de los hechos, finalidad última de los modelos contemporáneos de justicia penal, busca asegurar la
comparecencia del responsable ante los jueces y la fijación de su condena…”.
“Pero también es lógico que satisfechas las condiciones de verdad, justicia y reparación, sea indispensable ofrecer a las
personas que muestren propósito de enmienda y actitud de rectificación, un camino para su reincorporación a la sociedad,
gozando de un beneficio jurídico compatible con su colaboración para la recuperación institucional y la consolidación de la
paz. De manera general, dicho beneficio consiste en la posibilidad de gozar de la suspensión condicional de la pena una vez
purgado un periodo básico de privación efectiva de la libertad, y haber cumplido los compromisos impuestos por los jueces
en términos de reparación, buen comportamiento y penas accesorias” (subrayas fuera de texto). Exposición de motivos con
la cual el Gobierno Nacional presentó en su momento en el Congreso Nacional el proyecto que se convirtió posteriormente
en la Ley 975 de 2005.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

1140. La decisión que ahora ocupa la atención de la Sala, corresponde a 77 hechos por
los que la Fiscalía le formuló cargos a VELOZA GARCÍA, en su condición de comandante
del Bloque Bananero, que frente al universo de delitos que se encuentran para imputación
de cargos corresponde al 4.7% y frente al universo de hechos atribuibles que se
encuentran en proceso de verificación, corresponde al 2.8% aproximadamente.

1141. Es decir, que en el marco del proceso de Justicia y Paz, esta sentencia parcial, no
será la única que se profiera en contra de HÉBERT VELOZA GARCÍA, pues será necesario
que responda por el 96% de hechos que se encuentran para imputación de cargos, en su
condición de comandante del Bloque Bananero, sin contar, como ya se dijo, los hechos
por los que deberá responder como ex comandante del bloque calima; y todas la
sentencias parciales que se profieran en contra del desmovilizado, las que deberán ser
acumuladas tal como lo establece el artículo 20 de la Ley 975 de 2005.

1142. Por lo expuesto, se suspenderá la ejecución de la pena ordinaria determinada en


esta sentencia y se reemplazará por una alternativa consistente en la privación
de la libertad por un periodo de ochenta y cuatro (84) meses, o lo que es lo
mismo de 7 años.

1143. La pena alternativa que se le impone a HÉBERT VELOZA GARCÍA obedece a que la
Sala reconoce que se trata de una sentencia parcial, pues aún están pendientes de
legalizar delitos de suma gravedad en contra del postulado, como son homicidios en
persona protegida, masacres, desapariciones forzadas, desplazamiento forzado de la
población civil, torturas en persona protegida y los demás que está documentando la
Fiscalía 17 de Justicia y Paz. Por tanto, la Sala aclara que la no imposición de los 8 años,
pena máxima prevista por la Ley 975 de 2005, no obedece al reconocimiento de ningún
beneficio adicional al postulado VELOZA GARCÍA.

1144. Para tal efecto, el postulado deberá suscribir acta en que se comprometa a
contribuir con su resocialización a través del trabajo, estudio o enseñanza durante todo el
tiempo que permanezca privado de la libertad, y a promover actividades orientadas a la
desmovilización del grupo armado al margen de la ley, tal como lo dispone el inciso
segundo del artículo 8° del Decreto 4760 de 2005, so pena de revocar el beneficio
concedido.

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HÉBERT VELOZA GARCÍA

1145. Si con posterioridad a la presente sentencia y hasta el término de la condena


ordinaria aquí señalada, la autoridad judicial competente determina que HÉBERT VELOZA
GARCÍA no entregó, no ofreció o no denunció todos los bienes adquiridos por él o por el
grupo armado organizado al margen de la ley durante y con ocasión de su pertenencia al
mismo, de forma directa o por interpuesta persona, perderá el beneficio de la pena
alternativa, tal como lo establece el inciso 2º del artículo 26 de la ley 1592 de 2012, que
modificó el artículo 25 de la ley 975 de 2005.

1146. De otra parte, se le impondrá a HÉBERT VELOZA GARCÍA la obligación de tomar


no menos de 500 horas de estudio y formación en derechos humanos y el deber de
someterse a valoración y tratamiento psicológico que conduzca a su plena readaptación y
resocialización.

1147. Así mismo, se le hará saber, que el incumplimiento de cualquiera de las


obligaciones impuestas dentro de la presente sentencia, ocasionará la revocatoria de la
pena alternativa concedida.

Del cumplimiento de la pena en el exterior.

1148. Durante el traslado del artículo 447 del Código de Procedimiento Penal, HÉBERT
VELOZA GARCÍA y su defensor, solicitaron que al fijar el momento a partir del cual ha de
entenderse el cumplimiento de la sanción impuesta al postulado, se tenga en cuenta el
tiempo que lleva privado de la libertad en los Estados Unidos de Norteamérica, en
aplicación del artículo 30 de la Ley 975 de 2005, que establece que la pena podrá
cumplirse en el exterior. Al respecto la Sala se pronunciara negativamente por las
siguientes razones:

1149. La Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia, conceptúo


favorablemente a la extradición del postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, quien fue
requerido por el Gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica.

1150. En la Resolución de Acusación No. S1 07 Cr. 274 GEL, dictada el 23 de abril de


2007 por la Corte Distrital de los Estados Unidos del Distrito Sur de Nueva York, se le
imputaron los siguientes cargos:

“-- Cargo Uno: Concierto (1) para importar a los Estados Unidos, desde un lugar fuera de
los Estados Unidos cinco kilogramos, o más, de una sustancia controlada (cocaína); y (2)
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para distribuir cinco kilogramos o más de una sustancia controlada (cocaína), con el
conocimiento y la intención de que dicha sustancia sería importada ilegalmente a los
Estados Unidos, lo cual es en contra del Título 21, Secciones 952 (a) y 959(a) del Código
de los Estados Unidos, en violación del Título 21, Secciones 812, 960(b) (1) (B) (ii) y 963
del Código de los Estados Unidos; y,

“-- Cargo Dos: Distribución de cinco kilogramos, o más, de una sustancia controlada
(cocaína), con el conocimiento y la intención que dicha sustancia sería ilegalmente
importada a los Estados Unidos, en violación del Título 21, Secciones 959(a), 960(b) (1)
(B) (ii) y 812 del Código de los Estados Unidos.

La acusación también incluye la pena de decomiso de conformidad con el Título 21,


Sección 853 del Código de los Estados Unidos, la cual busca el decomiso de todos los
bienes que se hayan derivado de ingresos obtenidos como resultado de la comisión de los
anteriores delitos.” 1096

1151. Al analizar los antecedentes y el trámite en el Congreso de la República de la Ley


975 de 2005, se tiene que fue voluntad del legislador, excluir del proceso de justicia
transicional delitos comunes que no tengan ninguna relación con el contexto de violencia
socio-política que vive el país, y que uno de sus principales objetivos era el de sancionar
conductas de lesa humanidad y crímenes de guerra.

1152. En el informe de ponencia positiva para el primer debate de los varios proyectos
acumulados de ley que llevaron a la promulgación de la Ley 975 de 2005, se dijo:

“Propósito del Proyecto:

(…)

“Como es de conocimiento general, muchos de los integrantes de grupos subversivos y de


autodefensa, con los cuales se han llevado a cabo acuerdos políticos o se realizaran en el
futuro, han tenido relación con delitos de lesa humanidad y crímenes de guerra, razón por
la cual se hace necesario encontrar un marco jurídico político que permita avanzar en la
obtención de la convivencia pacífica, de tal manera que una vez se hayan cumplido las
exigencias de verdad, justicia, y reparación como la manifestación de las circunstancias en
las que cometió el delito, la entrega de bienes adquiridos ilícitamente, la cesación de toda
interferencia al libre ejercicio de los derechos político y la desmovilización y
desmantelamiento, puedan esas personas acceder a un beneficio jurídico de acuerdo con
los esfuerzos y colaboración que hayan realizado….”1097

(…)

“…la dimensión del fenómeno paramilitar en Colombia como responsable de un gran


porcentaje de las más graves violaciones de Derechos Humanos así como las cometidas
por los grupos guerrilleros, hace evidente la urgencia que se manifiesta entre víctimas y
diversos sectores de la sociedad colombiana, de alcanzar acuerdos que permitan silenciar
las armas de los grupos armados (…) Sin embargo, el objetivo de alcanzar la paz requiere
un marco jurídico equilibrado, claro, integral y conforme a las normas establecidas en los
tratados internacionales de derechos humanos y derecho internacional humanitarios, que
permita la realización de un proceso respetuoso de los derechos de las víctimas y de la
sociedad, y lo suficiente estable y seguro para que los miembros de los grupos
1096
CSJ, concepto de extradición 28503, del 31 de julio de 2008. M.P. Dr. Javier Zapata Ortiz.
1097
Gaceta del Congreso No. 74 del 4 de marzo de 2005.
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desmovilizados. En el ámbito internacional, a partir de las diferentes experiencias de países


que como Colombia se han visto avocados a propiciar procesos de acercamiento con
grupos armados, se da el nombre de justicia transicional a la aplicación de normatividades
especiales y excepcionales que usualmente implican una flexibilización de la justicia penal y
que permiten viabilizar los acuerdos con grupos armados.

La aplicación de este tipo de justicia es particularmente importante en aquellos casos en


los cuales, como consecuencia de sus acciones armadas, los grupos han cometido
crímenes atroces. Hechos tales como la toma de poblaciones seguidas de señalamientos
colectivos, torturas por medio de laceraciones, abusos sexuales, desmembramientos,
decapitaciones, desplazamiento forzoso, y la ejecución masiva de personas, entre otros,
representan uno de los obstáculos mayores para realizar procesos que prevean esquemas
de negociación basados en el perdón. Por tal razón, en el marco de la justicia transicional
existe una aceptación generalizada de la comunidad internacional en el sentido de que
aquellos procesos deben acompañarse de tres principios básicos que sirven como ejes para
garantizar la reconciliación nacional: La verdad, La justicia y la reparación”1098.

1153. A continuación se destacarán algunas de las intervenciones parlamentarias sobre


el proyecto de la Ley 975 de 2005, y que motivaron la inclusión de varios artículos, entre
ellos, los requisitos de elegibilidad.

Senador Mario Uribe: “…si algún abogado recomendó que se elevara a la categoría de
sediciosa la militancia de esos grupos armados y que posteriormente se buscara la
conexidad de ese delito político, con el narcotráfico, pues creo que no lo han logrado y no
lo van a lograr doctor Rivera, no lo van a lograr por lo que dice este proyecto, por todas
las cautelas que le hemos introducido, porque nadie tiene interés en que se convierta el
delito de narcotráfico como conexo del delito político para que ellos por extensión o por
conexidad se le pueda ser objeto de los beneficios. Doctor Rivera, yo quiero anunciarle lo
siguiente; en algún momento de la discusión, voy a proponer que se incluya en el artículo,
en el lugar que encontremos más adecuado para su tranquilidad y la de todos los
colombianos una norma igual o parecida a esta, diría la producción y tráfico de
estupefacientes o sus precursores son delitos comunes, tipificados en el Código Penal y los
tratados internacionales suscritos por Colombia y no constituyen delitos políticos, no tiene
conexidad ni son asimilables a estos. Los delitos cometidos antes de pertenecer al grupo
armado al margen de la ley no podrán ser objeto de pena alternativa, la producción y
tráfico de estupefacientes o sus precursores no puede ser considerados como delitos
conexos a los delitos políticos y sus autores no podrán recibir los beneficios jurídicos
consagrados para estos delitos, ni los beneficios de la ley 782, una norma parecida a esa
que la hemos venido discutiendo desde esta mañana con el senador Vargas Lleras quien
con toda la razón tiene fundadas preocupaciones sobre el tema.

Interpela el honorable Senador Vargas Lleras: Esta mañana estuvimos trabajando en


relación con este tema senador Rivera, usted y yo que hemos conversado en algunas
oportunidades y nos asiste la misma preocupación. Creo que coincidimos en la importancia
de blindar en todas formas este proyecto, la norma que le fue entregada hace un minuto,
parece ser una norma adecuada para evitar cualquier suspicacia que se haya presentado,
en igual forma sería complementaria de la que le ha sido entregada, de suerte que
reiteramos aquí que no deben ser elegibles, como beneficiarios de las penas
alternativas que prevé este proyecto, aquellas personas que tengan
sindicaciones de haber estado vinculadas al narcotráfico con anterioridad a su
vinculación a las organizaciones armadas, o al margen de la ley, tampoco deben
ser beneficiarias, aquellas personas que bien con anterioridad o aun con
posterioridad haciendo parte de estas organizaciones y en virtud de actividades
en el narcotráfico hayan logrado un incremento de sus propios patrimonios. Uno
puede aceptar en aras de avanzar en ese proceso que actividades del narcotráfico hayan

1098
Gaceta del Congreso No. 221 del 29 de abril de 2005.
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estado vinculadas al conflicto y recursos provenientes de esa fuente hayan financiado el


conflicto. Supongamos que sí, pero lo que no es aceptable es que esos recursos se hayan
desviado para incrementar el patrimonio personal de nadie, ni tampoco como aquí se ha
dicho para lavar conductas que tuvieron lugar antes de la vinculación de estas personas a
dichas organizaciones. En otras palabras evitar lo que aquí se ha dicho, el lavado a través
del proceso. (negrillas fuera del texto).

Creemos Senador Rivera, que con la norma que ha sido entregada y de ser susceptible de
algún ajuste sería mejor, y una complementaría que hemos puesto a disposición del señor
viceministro de Justicia que usted, si bien me lo permite, podría yo leerla y que diría algo
así Senador Rivera, agregar no solo a los artículos 10 y 11 que establecen las condiciones
de elegibilidad en las desmovilizaciones individuales y colectivas, sino agregar también al
artículo 20, que creo que es objeto del mismo tratamiento. Algo que diga, los delitos por
los cuales se solicita los beneficios tengan conexión necesaria con los propósitos de la
organización armado al margen de la ley y se hayan realizado durante y con ocasión de la
pertenencia de la persona al grupo armado”1099

1154. Al analizar las intervenciones de los Congresistas Ponentes, se puede advertir


fácilmente que el tema de la inclusión o no del delito de narcotráfico, fue objeto de
amplios debates, varias fueron las sesiones ordinarias en las que se discutieron los
requisitos de elegibilidad, y se dejo claramente establecido que la Ley 975 está prevista
para el juzgamiento de graves violaciones a los derechos humanos y delitos conexos,
ocurridas en el contexto de un conflicto armado.

1155. Se tiene entonces que el delito de narcotráfico no es compatible con los objetivos
y filosofía de la “justicia transicional”, por lo que no podría la Sala aceptar que el tiempo
que lleva el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA detenido en los Estados Unidos,
respondiendo por el delito de narcotráfico, le sea tenido en cuenta para cumplir una pena
alternativa en un proceso de especiales características y en el que es llamado a juicio por
delitos de lesa humanidad y crímenes de guerra.

1156. Cuando el inciso 3º del artículo 30 de la Ley 975 de 2005, establece que “la pena
podrá cumplirse en el exterior”, hace referencia a que una vez se imponga la pena
ordinaria y alternativa, puede la Sala autorizar que el desmovilizado purgue la pena en el
exterior, situación bien diferente a la planteada por VELOZA GARCÍA y su defensor.

1157. Y si bien la ley permite el pago de penas en el exterior, es necesario que se


adelante un trámite especial, luego de surtido y finalizado el proceso de justicia y paz,
teniendo en cuenta los acuerdos suscritos por Colombia sobre cooperación internacional.

1099
Gaceta del Congreso No. 357 del 13 de junio de 2005.
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H. De la Acumulación Jurídica de Penas

1158. El artículo 20 de la Ley 975 de 20051100 y el artículo 10 del Decreto 3391 de


20061101, permiten la acumulación jurídica de penas, siempre que los delitos por cuales
fueron dictadas se hayan cometido durante y con ocasión de la pertenencia del
desmovilizado a un grupo armado organizado al margen de la ley, evento en el cual se
aplicará lo dispuesto por el Código de Procedimiento Penal1102.

1159. Por su parte el artículo 25 de la Ley 1592 de 2012 que modificó el artículo 24 de la
Ley 975 de 2005, establece que la acumulación jurídica de penas, debe hacerse al
momento de proferir sentencia1103, razón por la cual, la Sala teniendo en cuenta estos
parámetros y lo dispuesto por la Corte Constitucional1104, procede a la redosificación
punitiva de las sentencias proferidas en contra de VELOZA GARCÍA.

1160. De acuerdo a la información suministrada por la Fiscalía 17 adscrita a la Unidad de


Justicia y Paz, HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias “HH”, tiene seis (6) sentencias
condenatorias, proferidas en distintos despachos judiciales del país, por hechos que
fueron cometidos durante y con ocasión de su pertenencia al Bloque Bananero, y por los
cuales el Ente Investigador formuló cargos en contra del postulado, pero que no fueron
legalizados por la Sala, para no vulnerar el principio del non bis in ídem1105.

1100
“..Por último, ese mismo artículo 20 de la Ley 975 de 2005, permite la acumulación de penas, en los casos en los cuales
ya la justicia ordinaria condenó al postulado por conductas ejecutadas en curso y por ocasión de la pertenencia de éste al
grupo armado al margen de la ley…” (Corte Suprema de Justicia, Sala de Casación Penal, segunda instancia 33124 del 11
de febrero de 2010, M.P. María del Rosario González de Lemos)
1101
“…Habiéndose acogido el desmovilizado a la ley 975 de 2005, de existir condenas previas en los términos del inciso 2
del artículo 20 de la misma, para la fijación de la pena ordinaria en la sentencia que profiera la Sala competente del tribunal
Superior de Distrito Judicial se tendrá en cuenta lo dispuesto en el Código Penal sobre acumulación jurídica de penas, de
forma que aquellas se acumularán jurídicamente a la nueva condena que se llegare a imponer…”
1102
Artículo 460 del Código de Procedimiento Penal.
1103
Artículo 24. Contenido de la sentencia. De acuerdo con los criterios establecidos en la ley, en la sentencia condenatoria
se fijarán la pena principal y las accesorias. Adicionalmente se incluirán la pena alternativa prevista en la presente ley; la
declaratoria de extinción del derecho de dominio (…) la acumulación jurídica de penas…”
1104
“La acumulación jurídica de penas constituye una metodología para la medición judicial de la pena cuando concurre el
fenómeno del concurso de delitos, según la cual, una vez establecida la pena imponible a cada delito se aplica aquella
correspondiente al delito más grave, aumentada en una determinada proporción. Esta institución es propia de los sistemas
punitivos que se oponen a las penas perpetuas y fue adoptada por el legislador colombiano
(…)
El legislador concibió la figura de la acumulación jurídica de penas bajo los siguientes criterios fundamentales: (i) Con un
criterio de garantía y limitación de la punibilidad en eventos de pluralidad de condenas; (ii) bajo el criterio de la conexidad,
que incorpora el derecho a la unidad del proceso, de donde se deriva que en tales eventos procede la acumulación jurídica
de penas en cualquier tiempo, por tratarse de procesos que debieron ser juzgados conjuntamente; y (iii) bajo el criterio de
la prevención en virtud del cual se excluyen del beneficio de la acumulación jurídica de penas aquellos eventos en que el
condenado continúa delinquiendo, es decir, cuando incurre en conductas delictivas luego de proferida la primera sentencia
o hallándose en prisión.”Ver: Corte Constitucional, Sentencia C-1086 de 2008.
1105
Al respecto la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia ha señalado que: “…En efecto, frente a la
garantía de la cosa juzgada es necesario ponderar el desconocimiento de los derechos que le asisten a las víctimas y a la
sociedad a que se haga justicia y se conozca la verdad, pues en tales eventos los hechos podrían quedar en la
impunidad1105 absoluta, fenómeno que la Corte Interamericana de Derechos Humanos ha entendido como la falta en su
conjunto de investigación, persecución, captura, enjuiciamiento y condena de los responsables de las violaciones de los
derechos protegidos por la Convención Americana.
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1161. Las decisiones proferidas en contra de HÉBERT VELOZA GARCÍA, alias “HH” y que
se encuentran ejecutoriadas son las siguientes:

(i) Juzgado Primero Penal del Circuito Especializado de Antioquia (rad 1010-
00065), condenado a la pena de 150 meses de prisión por el delito de
homicidio agravado, víctima Gonzalo Antonio Ríos Salinas. (Hecho 5).
(ii) Juzgado Segundo Penal del Circuito Especializado de Antioquia (rad. 2008-
0078), condenado el 6 de febrero de 2009, por los delitos de homicidio simple,
fabricación, tráfico o porte de armas de fuego o municiones, a la pena de 6
años y 8 meses de prisión, víctima Edilberto Cuadrado Llorente. (Hecho 58)
(iii) Juzgado Segundo Penal del Circuito Especializado de Antioquia (rad. 2008-
0072), condenado el 5 de febrero de 2009, por los delitos de homicidio simple
y fabricación tráfico o porte de armas de fuego o municiones, a la pena de 6
años y 8 meses de prisión, víctima Julio César Serna. (Hecho 61)
(iv) El Juzgado Segundo Penal del Circuito Especializado de Antioquia (rad. 2008-
0071), lo condenó el 11 de noviembre de 2008, a la pena de 6 años y 3 meses
de prisión, por el delito de homicidio simple, víctima Humberto Pacheco Castillo
(Hecho 62).
(v) Juzgado Segundo Penal del Circuito Especializado de Antioquia (rad. 2008-
0057), condenado el 24 de octubre de 2008, a la pena de 14 años y 3 meses
de prisión, por el delito de homicidio agravado. Segunda instancia Tribunal
Superior de Antioquia, el 19 de diciembre de 2008, confirmó la decisión de
primera instancia y adicionó la circunstancia de agravación punitiva contenida

En este sentido, es pertinente señalar que la jurisprudencia de la Sala de Casación Penal 1105 ha recordado que la Corte
Constitucional1105 incorporó al derecho interno colombiano el estándar internacional referido al acceso a la justicia de las
víctimas de violaciones de derechos humanos y la obligación para el Estado de investigar, juzgar y castigar a sus
perpetradores. Precisó que, en los casos de impunidad de violaciones a los derechos humanos o al derecho internacional
humanitario, la búsqueda de un orden justo y los derechos de las víctimas desplazan la protección de la seguridad jurídica y
la garantía del non bis in ídem.
Estos mandatos indican que las autoridades competentes para investigar, juzgar y sancionar graves infracciones a los
derechos humanos y al derecho internacional humanitario debe agotar un mínimo de parámetros que procuren la
satisfacción del derecho de las víctimas a la verdad.
Tanto el derecho internacional como la jurisprudencia de la Corte Constitucional han señalado que los principios de la cosa
juzgada y non bis in ídem, pueden ser objeto de limitaciones cuando se trata de la investigación y el juzgamiento de
personas a quienes se acusa de haber violado de manera grave los derechos humanos o el derecho internacional
humanitario.
Así, el artículo 20-3 del Estatuto de Roma consagra, al igual que lo establecieron en su momento los estatutos de los
tribunales penales internacionales de Ruanda y la ex Yogoeslavia, que la Corte Penal Internacional no podrá juzgar a una
persona ya enjuiciada por una corte doméstica, a menos que el proceso surtido en el tribunal local obedeciera al propósito
de sustraer al acusado de su responsabilidad penal por crímenes de la competencia de la Corte, o no hubiere sido instruido
en forma independiente o imparcial, de conformidad con las debidas garantías procesales reconocidas por el derecho
internacional o lo hubiere sido de alguna manera que, en las circunstancias del caso, fuere incompatible con la intención de
someter a la persona a la acción de la justicia….” (CSJ, sentencia 39261 del 26 de septiembre de 2012, M.P. Dr. José Luís
Barceló Camacho).

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en el artículo 104 numeral 8. Víctima Luís Eduardo Cubides Vanegas (Hecho


63).
(vi) Juzgado Penal del Circuito Especializado de Sincelejo (radicado 2009-00013-
00), condenado el 17 de septiembre de 2009, por los delitos de homicidio
agravado y secuestro extorsivo a 234 meses y 10 días de prisión, víctimas
Ernesto Romero Hernández y Rudoll Reinaldo Martin Paffen Durier (Hecho 87).

1162. Así las cosas, encuentra la Sala que se tienen todos y cada uno de los
presupuestos necesarios para que se resuelva sobre la acumulación jurídica de las penas
impuestas, que de acuerdo con lo establecido en el artículo 25 de la Ley 1592 de 2012
que modificó el artículo 24 de la Ley 975 de 2005.

1163. Por tanto, se dosificarán las sanciones impuestas a HÉBERT VELOZA GARCÍA
teniendo en cuenta los parámetros previstos en el artículo 31 del Código Penal, cuando se
trata de concurso de conductas punibles, que faculta al juez para imponer como sanción
la que establezca la pena más grave, aumentada hasta en otro tanto, siempre y cuando
su monto no supere la suma aritmética de las que correspondan a las respectivas
conductas punibles debidamente dosificadas cada una de ellas.

1164. Al momento de tasar la pena ordinaria, se indicó que HÉBERT VELOZA GARCÍA
quedará sometido a una pena de cuatrocientos ochenta (480) meses o lo que es igual a
cuarenta (40) años de prisión, pena que no podrá ser incrementada por expresa
disposición del inciso 2º del artículo 31 del Código Penal que señala que “En ningún caso
la pena privativa de la libertad podrá exceder de cuarenta (40) años”.

1165. En conclusión, procede la acumulación de las penas impuestas a HÉBERT VELOZA


GARCÍA, en las sentencias proferidas por los Juzgados Primero Penal del Circuito
Especializado de Antioquia, radicado 1010-00065; Segundo Penal del Circuito
Especializado de Antioquia, radicados 2008-0071, 2008-0072, 2008-0078 y 2008-0057; y
Penal del Circuito Especializado de Sincelejo rad. 2009-00013-00, en las que el postulado
fue condenado por los delitos de homicidio agravado, homicidio simple y fabricación,
tráfico o porte de armas de fuego o municiones, para imponerle una pena final acumulada
de 40 años de prisión.

1166. Respecto a la pena de multa, el postulado VELOZA GARCÍA, fue condenado en la


jurisdicción ordinaria a cancelar la suma de mil setecientos cincuenta (1750) salarios

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mínimos legales mensuales vigentes, y en esta jurisdicción la Sala le está imponiendo una
pena de diecisiete mil novecientos cincuenta (17950) salarios mínimos legales mensuales
vigentes.

1167. Se tiene entonces que la pena más grave es la señalada por la Sala de Justicia y
Paz, que será incrementada en otro tanto, para una pena de multa acumulada definitiva
de dieciocho mil ochocientos (18800) salarios mínimos legales mensuales vigentes, monto
que no supera el máximo establecido en el numeral 1º del artículo 39 del Código Penal,
de cincuenta mil (50.000) salarios mínimos legales mensuales vigentes.

1168. Finalmente, la pena accesoria que se le impuso al postulado tanto en la


jurisdicción ordinaria como en la de Justicia y Paz, fue de veinte años (20) años de
inhabilidad para el ejercicio de derechos y funciones públicas, máximo establecido en el
artículo 51 del Código Penal, razón por la cual no podrá ser objeto de un incremento
adicional.

I. De la Extinción de Dominio

1169. El artículo 24 de la Ley 1592 de 2012, que modificó el artículo 24 de la Ley 975 de
2005, establece que la sentencia condenatoria proferida en el marco del proceso de
Justicia y paz, deberá incluir “…la declaratoria de extinción del derecho de dominio sobre
los derechos principales y accesorios que recaigan sobre los bienes destinados para la
reparación, así como sobre sus frutos y rendimientos…”.

1170. En el desarrollo de la audiencia de incidente de identificación de las afectaciones


causadas a las víctimas, la doctora Liliana Patricia Donado Sierra, Fiscal 25 de la Unidad
de la Sub Unidad Élite de persecución de bienes para la reparación de las víctimas, de la
Unidad de Justicia y Paz de la Fiscalía General de la Nación, presentó un informe
relacionado con los bienes que fueron denunciados y entregados por el postulado HÉBERT
VELOZA GARCÍA, al momento de la desmovilización, en su condición de ex comandante
del Bloque Bananero; así como de los bienes enunciados y entregados por el postulado
Raúl Emilio Hasbún Mendoza, alias “Pedro Bonito”, para la reparación de las víctimas.

1171. La Sala se abstendrá de pronunciarse respecto de los bienes que fueron


entregados por el postulado Raúl Emilio Hasbún Mendoza, por dos razones
fundamentales: (i) porque no se cuenta con la documentación necesaria para verificar la

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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

titularidad de los bienes, su dominio y el registro de las medidas cautelares, y (ii) porque
las diligencias que se adelantan en su contra son de competencia de la Sala de Justicia y
Paz del Tribunal Superior de Medellín, y aunque la responsabilidad civil dentro de los
procesos de Justicia y Paz, es solidaria con los demás integrantes del bloque y/o frente,
tal como lo señaló la Corte Constitucional al examinar la exequibilidad de la Ley 975 de
20051106, se debe cumplir con unos requisitos mínimos para su procedencia1107.

1172. Ahora bien, los bienes que fueron relacionados por la Fiscalía General de la Nación
como bienes ofrecidos por HÉBERT VELOZA GARCÍA, y de los cuales la Fiscal 25 de la Sub
Unidad Élite de persecución de bienes para la reparación de las víctimas, de la Unidad de
Justicia y Paz de la Fiscalía General de la Nación, solicitó se declarara la extinción del
derecho de dominio, son los siguientes:

NO. PREDIO MATRICULA UBICACIÓN MEDIDA ACTA ENTREGA


INMOBILIARIA CAUTELAR FRV

Vereda el Bosque, 20 de agosto de 15 de septiembre


Corregimiento Sevilla, 2008 de 2009
1 HICOTEA 029-0000663
Municipio Ebéjico -
Antioquia

Vereda el Bosque, 20 de Agosto de 15 de septiembre


Corregimiento Sevilla, 2008 de 2009
2 SALADITO 029-0000664
Municipio Ebéjico -
Antioquia

Vereda el Bosque, 20 de Agosto de 15 de septiembre


3 EL DIAMANTE 029-0000665
Corregimiento Sevilla, 2008 de 2009
Municipio Ebéjico –

1106
“Lo anterior conduce a señalar que para la ley bajo examen resulta particularmente relevante la causalidad existente
entre los hechos punibles judicializados y la actividad de los grupos armados específicos que después de haberse
organizado para cometer delitos decidan desmovilizarse. Esta relación entre la actividad de los individuos que se
desmovilizan y su pertenencia al grupo específico dentro del cual delinquieron, genera un nexo de causalidad entre la
actividad del grupo específico y los daños ocasionados individual o colectivamente por ese grupo específico dentro del cual
realizaron las actividades delictivas. Si bien la responsabilidad penal continúa siendo individual, la responsabilidad civil
derivada del hecho punible admite el elemento de la solidaridad, no solamente entre los penalmente responsables sino
respecto de quienes por decisión judicial hayan sido calificados como miembros del grupo armado específico, entendido
como el frente o bloque al que se impute causalmente el hecho constitutivo del daño, en virtud de la relación de causalidad
que se estructura entre las conductas delictivas que generan el daño y la actividad en concreto de ese grupo específico que
actúa al margen de la ley al cual pertenecieron los desmovilizados.
“Todos los hechos punibles sometidos al ámbito de la Ley 975/05 exigen que su perpetración se produzca durante y con
ocasión de la pertenencia de los individuos desmovilizados a los grupos armados, lo que fundamenta la responsabilidad civil
del grupo específico al amparo del cual se cometieron los delitos juzgados por parte de miembros de un grupo armado
determinado, calificados como tales judicialmente…” (subrayas fuera de texto). Corte Constitucional C-370 del 18 de mayo
de 2006.
1107
Ver entre otras decisiones de la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia: sentencia contra Jorge Iván
Laverde Zapata, rad. 35637 del 6 de junio de 2012, M.P. Dr. Luís Guillermo Salazar Otero: “Revisadas las carpetas
correspondientes dentro del Paquete No. 10, se concluye que los bienes antes reseñados, esto es, Las Palmas, Hacienda
Pollo Fiao, Hacienda Cumbia 3, Villa Rosa y El Cortijo y las sociedades L’enoteca Atlántico e Incusol cumplen con la totalidad
de requisitos, esto es, aparecen bajo la titularidad de Salvatore Mancuso, fueron entregados a la agencia de Acción Social y
pesa sobre ellos medida cautelar de embargo. Por lo anterior, procede la Sala a decretar la extinción de dominio de estos
bienes con los fines y propósitos ya expuestos”. (negrillas fuera del texto)

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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

NO. PREDIO MATRICULA UBICACIÓN MEDIDA ACTA ENTREGA


INMOBILIARIA CAUTELAR FRV

Antioquia.

Vereda el Bosque, 20 de Agosto de 15 de septiembre


LOTE DE Corregimiento Sevilla, 2008 de 2009
4 029-0000666
TERRENO Municipio Ebéjico -
Antioquia

Vereda el Bosque, 20 de Agosto de 15 de septiembre


LOTE Corregimiento Sevilla, 2008 de 2009
5 029-0006152
POCUNA Municipio Ebéjico -
Antioquia

Vereda el Bosque, 20 de Agosto de 15 de septiembre


Corregimiento Sevilla, 2008 de 2009
6 PEÑA LISA 029-0005400
Municipio Ebéjico -
Antioquia

Vereda el Bosque, 20 de Agosto de 15 de septiembre


Corregimiento Sevilla, 2008 de 2009
7 SAN MARINO 029-0000662
Municipio Ebéjico -
Antioquia

LA Vereda Salinas, Municipio 20 de Agosto de 15 de septiembre


8 001-195279
MARGARITA Caldas - Antioquia. 2008 de 2009

Vereda Salinas, Municipio 20 de Agosto de 15 de septiembre


9 EL SILENCIO 001-79344
Caldas - Antioquia. 2008 de 2009

HATO Vereda Salinas, Municipio 20 de Agosto de 15 de septiembre


10 001-775837
GRANDE Caldas - Antioquia. 2008 de 2009

Carrera 20, Turbo - 20 de Agosto de 01 de diciembre


11 EDIFICIO 034-7047
Antioquia 2008 de 2009

Calle 36 A No. 20 Sur 91 20 de Agosto de 01 de diciembre


12 CASA 001-356136
Envigado - Antioquia 2008 de 2009

1173. Al analizar la situación jurídica de cada uno de estos inmuebles, se tiene que el 4
de septiembre de 2012, la Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bogotá, profirió
sentencia condenatoria en contra de Gian Carlo Gutiérrez Suárez, alías “El Tuerto”, “El
Pirata”, “Luís” o “Antonio”, ex integrante del Bloque Calima, la cual se encuentra
ejecutoriada.

1174. En esta decisión el Tribunal ordenó la extinción del derecho de dominio de los
bienes a los que se ha hecho alusión en esta decisión y que en su oportunidad fue
solicitada por la Sub Unidad de Bienes de la Fiscalía General de la Nación y por la Unidad

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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

de Atención y Reparación Integral a las Víctimas, entidad encargada de la administración


de los bienes que entregan los postulados para la reparación de las víctimas, pero para
sorpresa de la Sala, la Unidad no tenía conocimiento de esta situación.

1175. Así las cosas y como quiera que los bienes ofrecidos por el postulado HÉBERT
VELOZA GARCÍA, a los que se ha hecho alusión en esta decisión ya que fueron objeto de
la orden de extinción del derecho de dominio, estese a lo resuelto en la sentencia
proferida el 4 de septiembre de 2012, en contra de Gian Carlo Gutiérrez Suárez, alías “El
Tuerto”, “El Pirata”, “Luís” o “Antonio”, ex integrante del bloque Calima.

J. Del Incidente de Identificación de las Afectaciones

Causadas a las Víctimas

De la Nulidad Legal y Constitucional

1176. El doctor Fredy Edison Largo Suárez ampara su acción en contra del proceso por
considerar que el incidente de identificación de las afectaciones causadas a las víctimas
(art. 23 Ley 975 de 2005) incumple los postulados propios de la Justicia Transicional, en
torno a la verdad, a la justicia y a la reparación integral de las víctimas, y que por tanto es
necesario declarar la nulidad del proceso para adelantar el otrora incidente de reparación
integral.

1177. Frente a la solicitud de nulidad presentada, es necesario reiterar lo que ha venido


sosteniendo la Sala al resolver peticiones similares1108. Al respecto se ha señalado que:

1178. Uno de los principios que rige el sistema democrático colombiano es que se
cumpla con la voluntad del legislador en materia normativa, y que este puede ejercer la
libertad legislativa bajo ciertos parámetros, sobre el tema la Corte Constitucional ha
indicado que:

“En oportunidades anteriores la Corte ha examinado la razón de ser de la libertad de


configuración política del Congreso y de los límites de la misma. Al respecto, ha indicado
que en principio la sujeción y subordinación de la ley a la Constitución debe permitir cierto
margen de acción en la labor de desarrollo de las normas superiores, de manera tal que
las diversas alternativas se adopten dentro del marco del principio democrático y pluralista
que orienta nuestro sistema constitucional. Las distintas corrientes de pensamiento y

1108
Ver: Tribunal Superior de Bogotá, Sala de Justicia y Paz, Sentencia en contra de Rodrigo Pérez Alzate, M.P. Uldi Teresa
Jiménez López, 30 de agosto de 2013.
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opinión representadas en el órgano legislativo, deben participar en el desarrollo e


implementación de la Constitución, optando por las diferentes posibilidades dentro del
principio de las mayorías. Este margen de acción o libertad de configuración política,
admite una gradación que depende a su vez del grado de precisión con el que el
constituyente perfila una institución jurídica, y del propio desarrollo constitucional de la
misma. Así, podría decirse que la libertad de configuración del legislador es inversamente
proporcional a la precisión y amplitud con la que la Constitución regula una institución
jurídica. A mayor precisión de las nociones constitucionales, menor libertad de acción para
el legislador. A mayor desarrollo constitucional de la normatividad superior, menor espacio
de acción para la ley. A su vez, el grado de la libertad de configuración, determina la
intensidad del control constitucional.”1109

1179. Siguiendo la misma línea argumentativa también ha manifestado la Corte que en


materia de legislación procesal y procedimental, goza el legislador de la facultad de
establecer tales mecanismos y tiene las siguientes facultades:

“i) Fijar las etapas de los diferentes procesos y establecer los términos y las formalidades
que deben cumplir. ii) Definir las competencias cuando no se han establecido por la
Constitución de manera explícita entre los distintos entes u órganos del Estado. iii) La
regulación de los medios de prueba, ingrediente consustancial al debido proceso y al
derecho de defensa (…) ”iv) Definir los deberes, obligaciones y cargas procesales de las
partes, los poderes y deberes del juez y aún las exigencias de la participación de terceros
intervinientes, “ya sea para asegurar la celeridad y eficacia del trámite procesal, proteger
a las mismas partes e intervinientes o bien para prevenir situaciones que impliquen daño o
perjuicio injustificado a todos o algunos de ellos”. (…) “Es la ley, no la Constitución, la que
señala si determinado recurso -reposición, apelación, u otro- tiene o no cabida respecto de
cierta decisión, y es la ley, por tanto, la encargada de diseñar en todos sus pormenores las
reglas dentro de las cuales tal recurso puede ser interpuesto, ante quién, en qué
oportunidad, cuándo no es procedente y cuáles son los requisitos -positivos y negativos-
que deben darse para su ejercicio”. (…) De tal suerte, “si el legislador decide consagrar un
recurso en relación con ciertas decisiones y excluye del mismo otras, puede hacerlo según
su evaluación acerca de la necesidad y conveniencia de plasmar tal distinción, pues ello
corresponde a la función que ejerce, siempre que no rompa o desconozca principios
constitucionales de obligatoria observancia. Más todavía, puede, con la misma limitación,
suprimir los recursos que haya venido consagrando sin que, por el sólo hecho de hacerlo,
vulnere la Constitución Política”. Y por último, también hace parte del poder de
configuración legislativa en materia procesal, con relación a los recursos contra las
decisiones judiciales, precisamente el no consagrarlos. Incluso en materia penal, donde la
doble instancia es de especial trascendencia, la jurisprudencia ha dicho que no es forzosa
para todos los asuntos que son materia de decisión judicial, “pues el legislador, dentro de
la facultad que tiene de regular su trámite, bien puede decidir en cuáles procede la
segunda instancia y en cuáles no, siempre y cuando con esa determinación no vulnere
normas constitucionales, especialmente, las que consagran derechos fundamentales de las
partes procesales”.1110

1180. Para complementar el argumento en torno al principio de libertad legislativa del


Congreso, la Sala recuerda al recurrente que las leyes procesales son de aplicación
inmediata, al respecto la Corte Constitucional ha manifestado que: “Dado que el proceso

1109
Ver: Corte Constitucional, Sentencia C-404 de 2001.
1110
Ver: Corte Constitucional, C-203 de 2011.
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es una situación jurídica en curso, las leyes sobre ritualidad de los procedimientos son de
aplicación general inmediata. Al respecto debe tenerse en cuenta que todo proceso debe
ser considerado como una serie de actos procesales concatenados cuyo objetivo final es
la definición de una situación jurídica a través de una sentencia. Por ello, en sí mismo no
se erige como una situación consolidada sino como una situación en curso. Por lo tanto,
las nuevas disposiciones instrumentales se aplican a los procesos en trámite tan pronto
entran en vigencia, sin perjuicio de que aquellos actos procesales que ya se han cumplido
de conformidad con la ley antigua, sean respetados y queden en firme.”1111

1181. Ahora bien, la Sala al revisar la exposición de motivos en la cual se discutió la


reforma de la Ley 975 de 2005, a través de la Ley 1592 de 2012, encontró que la
“transformación” del incidente de reparación integral en un incidente de identificación de
las afectaciones causadas (artículo 23 del proyecto y 23 de la Ley 975) se sustentó entre
otras razones en: (i) homologar el sistema de reparación judicial que venía funcionando a
través del incidente de reparación integral, y el sistema de reparación administrativa que
se consagró a través de la Ley de Víctimas; (ii) además, los bienes entregados por los
postulados no son suficientes para pagar las reparaciones ordenadas en derecho por los
Tribunales (…) es claro que no hay suficientes bienes, y que existe una situación de
desigualdad entre las víctimas); (iii) la experiencia internacional muestra que todos los
países que han enfrentado violaciones masivas a los Derechos Humanos por un amplio
período de tiempo se ven abocados a implementar programas administrativos de
reparación masiva en marcos de justicia transicional, en los cuales la reparación integral
entendida en términos judiciales, encuentra ciertos límites; (iv) la falta de una adecuada
articulación entre las decisiones de justicia y paz y los programas de reparación
administrativa ha generado que la reparación integral ordenada penalmente se esté
concentrando exclusivamente en el componente indemnizatorio. Se suma a lo anterior
que en las sentencias proferidas por los tribunales de justicia y paz se exhorta a
diferentes entidades estatales a cumplir con diversas medidas presentadas como
reparatorias, pero que en la práctica suponen el diseño de políticas públicas
desarticuladas para cada sentencia1112.

1182. En el mismo sentido concluyó el legislador que: “el proyecto de ley propone una
remisión expresa del componente de reparación integral a la Ley 1448 de 2011. Con ello
se busca garantizar que el proceso de justicia y paz se concentre en esclarecer los
1111
Ver: Corte Constitucional, C-200 de 2002.
1112
Ver: Gaceta del Congreso, disponible en:
http://servoaspr.imprenta.gov.co:7778/gacetap/gaceta.mostrar_documento?p_tipo=05&p_numero=096&p_consec=30282,
consultada el 13 de octubre de 2013.
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patrones de macrocriminalidad y las afectaciones causadas a las víctimas, y que remita al


programa administrativo de reparación de víctimas para que estas sean reparadas de
manera preferente y a través de las distintas medidas que garantizan la integralidad de la
reparación.”1113

1183. Teniendo en cuenta los argumentos anteriormente presentados, la Sala encuentra


que el cambio advertido, además de responder al amplio margen de configuración
normativa que el Congreso tiene previsto en lo que respecta al diseño de procedimientos
judiciales con base en los numerales 1º y 2º del artículo 150 de la Constitución Política, se
fundamenta en la necesidad de adelantar el proceso de Justicia y Paz bajo los principios
de celeridad y economía procesal, con la finalidad de obtener mayores resultados en
tiempos más cortos y de esta manera agilizar la respuesta a las expectativas de justicia
que provienen tanto del ámbito nacional como internacional. Por lo tanto, no se declarará
la nulidad del proceso desde el momento en que se ordena la realización de la audiencia
de identificación de afectaciones y por tanto se continuará con el trámite procesal
respectivo.

Del control constitucional por vía de excepción1114

1184. La doctora Ruby Stella Castaño Sánchez, en representación de las Defensoras


Públicas que actúan en el presente asunto solicitó la inaplicación de los artículos 23 y 25
de la Ley 1592 de 2012, por encontrarla violatoria de los derechos constitucionales a la
igualdad en la reparación integral, conforme a los Convenios y Tratados internacionales.
En el mismo sentido se pronunciaron las representantes de las víctimas que actúan a
través de la Red de Iniciativas de Mujeres por la Paz (IMP). La Sala entrará a estudiar de
forma concreta esta petición y a responder los cuestionamientos planteados.

1185. Ante la solicitud realizada, la Sala, en primer lugar estudiará la viabilidad de la


aplicación de la figura de la constitucionalidad por vía de excepción, ejercicio de la
autoridad o del operador jurídico que está inmerso en el contexto hermenéutico del

1113
Ibídem.
1114
Dentro de los mecanismos con los que cuenta el sistema constitucional para verificar la constitucionalidad de normas se
encuentran: “i) el control de constitucionalidad dirigido a que esta Corporación excluya del ordenamiento las leyes
contrarias a sus dictados, previo el ejercicio ciudadano de la acción pública prevista para tal fin (Arts. 241 a 244), ii) la
acción de nulidad por inconstitucional confiada al Consejo de Estado, en virtud de igual ejercicio y con igual objetivo, pero
respecto de los decretos dictados por el Gobierno Nacional, cuyo control no ha sido confiado a esta Corte (Art. 237), iii) el
control automático de los decretos legislativos dictados en ejercicio de las facultades conferidas por los artículos 212, 213 y
214, iv) la revisión previa de los tratados internacionales y las leyes que los aprueben, v) la inaplicación por parte de todas
las autoridades, sin el requisito de previa solicitud, de las leyes o normas que la contrarían (Art. 4º), vi) la observancia de
sus preceptos a todos los campos mediante el imperativo reconocimiento del orden jurídico constitucional en todas las
cuestiones de la vida nacional (Art.s 83 a 94) y vii) la inclusión de la Constitución como fuente primaria de las decisiones
judiciales (Art. 230)”. Corte Constitucional, sentencia C-739 del 11 de julio de 2001, M. P. Álvaro Tafur Galvis.
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artículo 4º de la Constitución Política que establece que, cuando existen normas


contrarias a la Constitución, las autoridades colombianas, incluidos los jueces de la
República, aplicarán el control de constitucionalidad a fin de constatar el apego de la
norma en cuestión a la Carta Política1115.

1186. La doctrina jurisprudencial ha ido construyendo un concepto a través del cual ha


definido que: “la excepción de inconstitucionalidad es una facultad o posibilidad (o si se
quiere, una herramienta) de los operadores jurídicos, en tanto no tiene que ser alegada o
interpuesta como una acción; pero se configura igualmente como un deber en tanto las
autoridades no pueden dejar de hacer uso de ella en los eventos en que detecten una
clara contradicción entre la disposición aplicable a un caso concreto y las normas
constitucionales”1116.

1187. En ese orden de ideas la Sala ha podido interpretar que en cuanto al carácter
facultativo u obligatorio de la excepción de inconstitucionalidad, la Constitución señala
que “en todo caso de incompatibilidad entre la Constitución y la ley u otra norma jurídica,
se aplicarán las disposiciones constitucionales” (Art.4º). Con base en ello, se puede
afirmar que es deber de los funcionarios administrativos y judiciales aplicar directamente
la norma constitucional si frente a un caso concreto encuentran una clara evidencia de
que está siendo violentada o modificada por disposiciones de inferior jerarquía, cuya
inaplicación se impone por mandato constitucional.

1188. En ese mismo sentido la Corte Constitucional ha señalado que si: “lo que se tiene
es una disposición, legal o de otro orden, que de manera ostensible, clara e indudable -
prima facie- viola la Constitución, el precepto subalterno cede y se ha de inaplicar, no
porque lo quiera el funcionario respectivo sino en cuanto lo manda el Constituyente, y a
cambio de su dictado deben hacerse valer las normas de la Constitución con las cuales la
regla subalterna colige”.

1189. También encuentra la Sala que al aplicar este instrumento de interpretación se


busca proteger, en un caso concreto y con efecto inter partes, los derechos
fundamentales que se vean en riesgo por la aplicación de una norma de inferior jerarquía
y que, de forma clara y evidente, contraría las normas contenidas dentro de la

1115
Artículo 4o. de la Constitución Política. “La Constitución es norma de normas. En todo caso de incompatibilidad entre la
Constitución y la ley u otra norma jurídica, se aplicarán las disposiciones constitucionales.
Es deber de los nacionales y de los extranjeros en Colombia acatar la Constitución y las leyes, y respetar y obedecer a las
autoridades.”
1116
Ver: Corte Constitucional, Sentencia T-389 de 2009.
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Constitución Política.1117 Es decir que el funcionario debe aplicar la figura de la excepción


de inconstitucionalidad cuando se están vulnerando o poniendo en riesgo derechos,
principios o valores constitucionales; por tanto, los jueces no pueden basar sus fallos en
una norma que no es válida en el ordenamiento colombiano.

1190. Siempre que un juez se encuentra ante una norma que contraría lo estipulado por
la Constitución1118, éste tiene el deber de inaplicar dicha norma bajo la excepción de
inconstitucionalidad realizando un trabajo argumentativo e interpretativo en el cual se
debe determinar el contenido y alcance normativo en el caso concreto1119. Ahora bien,
esto no significa que la acción singular del juez determine la constitucionalidad ipso facto
de la norma, pues quien se encarga de la derogación de la norma es el órgano de cierre
de control constitucional. Los jueces hacen ineficaz la norma para la aplicación de ésta en
un caso concreto, pero la Corte Constitucional declara su invalidez de forma general y
abstracta. Debe entonces el funcionario judicial esperar, si se ha solicitado, la decisión
definitiva por parte del juez supremo constitucional, entretanto podrá dar una
interpretación propia a la constitucionalidad o no de la norma1120. Al respecto, la Sala
Penal de la Corte Suprema de Justicia, ha manifestado que:

“De lo anterior se sigue que todos los Jueces, sin importar su especialidad, en primer lugar
son Jueces constitucionales, en tanto deben concurrir a la preservación de la integridad de
la Carta en sus actuaciones, pero además, les corresponde armonizar sus decisiones con la
doctrina del Tribunal en cita y acatar sus precedentes en los casos que sean sometidos a
su consideración1121.

Así las cosas, de entrada, a los Jueces les corresponde someterse a los principios
constitucionales y por antonomasia a los penales en especial al de legalidad en todas sus
manifestaciones.1122 Por lo tanto, deben emplear sus facultades en orden a dar estricto
cumplimiento a los mismos, ya que su prevalencia no está en discusión en relación con las
normas del ordenamiento jurídico de menor rango, conforme lo preceptúa el artículo 4º de
la Carta Política.”1123

1191. Sin embargo, también ha sido clara la Corte Constitucional en manifestar que:
“con relación a las condiciones que se exigen para la aplicación de la excepción de
constitucionalidad (…) la Corte ha señalado que la contradicción entre las normas
constitucional y legal debe ser clara y evidente, y debe estar precedida de argumentos
suficientes en los cuales se soporte la decisión. Una decisión de esta naturaleza debe

1117
Ver: Corte Constitucional, Sentencia C-122 de 2011.
1118
El concepto de violación directa a la constitución puede verse en Sentencias como la T-551 de 2010, T-1028 de 2010,
SU-195 de 2012, entre otras.
1119
Véase en la sentencia T-049 de 2002.
1120
Ver: Corte Constitucional, Sentencia T-614 de 1992 y C-600 de 1998.
1121
Ibídem.
1122
FERRAJOLI, Luigi, Derecho y Razón, Teoría del Garantismo Penal, Editorial Trotta, S.A., Madrid, 1995, Capítulos 7 a 9.
1123
Sala de Casación Penal, CSJ, Sentencia del 14 de agosto de 2013, M.P. Luís Guillermo Salazar Otero, decisión en contra
de RAMÓN MARÍA ISAZA ARANGO.
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tener en cuenta la jurisprudencia proferida por el intérprete autorizado de la Carta. Ello,


en particular, dada la especial estructura de las normas constitucionales y las dificultades
especiales de interpretación que dicha estructura ofrece. De no respetarse las reglas
anteriores, las personas quedarían libradas a la voluntad y libre valoración de cada
operador jurídico, en contravía de la presunción de constitucionalidad que acompaña a las
disposiciones legales y de los principios de igualdad y confianza en la administración de
justicia (seguridad jurídica) cuya protección exige la Constitución.”1124

1192. Siguiendo esa línea argumentativa, la Sala entiende que discernir sobre el tema de
la aplicación o no del artículo 23 de la Ley 1592 de 2012 implica realizar un ejercicio de
hermenéutica constitucional y legal que necesita de argumentación consolidada a través
de decisiones al respecto. Sobre el particular la Corte Constitucional ha manifestado: “que
si no hay un precedente constitucional en la materia o una oposición evidente con los
mandatos de la Carta, habrá de estarse a lo que disponen las disposiciones de inferior
jerarquía (presunción de constitucionalidad), pues “la norma jurídica, independientemente
de su jerarquía, obliga a sus destinatarios y es deber de las autoridades públicas, en el
ámbito de las atribuciones que a cada una de ellas corresponda, hacerla efectiva”1125.

1193. Esta Sala ha manifestado al respecto de la aplicación de la excepción de


inconstitucionalidad que esta:

“no ocasiona consecuencias en abstracto, ni puede significar la pérdida de vigencia o


efectividad de la disposición sobre la cual recae, ni tampoco se constituye, dentro de
nuestro sistema jurídico, en precedente forzoso para decidir otros casos que, bajo distintas
circunstancias, también estén gobernados por aquélla.

Ahora bien, para que la aplicación de la ley y demás disposiciones integrantes del
ordenamiento jurídico no quede librada a la voluntad, el deseo o la conveniencia del
funcionario a quien compete hacerlo, debe preservarse el principio que establece una
presunción de constitucionalidad. Esta, desde luego, es desvirtuable por vía general
mediante el ejercicio de las aludidas competencias de control constitucional y, en el caso
concreto, merced a lo dispuesto en el artículo 4º de la Constitución, haciendo prevalecer
los preceptos fundamentales mediante la inaplicación de las normas inferiores que con
ellos resultan incompatibles. Así las cosas, mientras en los procesos de constitucionalidad
el objeto mismo de la tarea confiada a los jueces es el análisis de la norma, ya sea en su
contenido o en la forma en que se tramitó su expedición, frente a los principios y
mandatos constitucionales, con la denominada excepción de inconstitucionalidad viene a
solucionarse con base en la prevalencia de la constitución el caso particular, evitando que
en contra del ciudadano tenga realización y eficacia una regla que pugna con ella.

1124
Sentencia T-614 de 1992. M.P. José Gregorio Hernández Galindo. En el mismo sentido, Sentencia C-600 de 1998.
1125
Sentencia C-600 de 1998, M..P. José Gregorio Hernández. “En el caso presente, la norma general –de rango
constitucional- es el principio de obligatoriedad del ordenamiento jurídico, el cual es consubstancial a la noción misma de
Estado de Derecho, pues justamente lo que distingue las normas jurídicas de los demás sistemas normativos, es esta
característica de ser de imperativa observación por parte de sus destinatarios (…) Siendo entonces que todo el soporte de
la eficacia del ordenamiento jurídico radica en el principio de obligatoriedad del mismo, los casos excepcionales en los
cuales los particulares o las autoridades pueden inaplicar las normas o las disposiciones de las autoridades, no pueden ser
deducidos analógicamente.”
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

Cuando se inaplica la norma inferior por ser incompatible con la Carta Política, la situación
concreta queda resuelta conforme a disposiciones fundamentales del orden jurídico, lo cual
no se refleja en la pérdida de vigencia del precepto inaplicado, que subsiste en el mundo
jurídico y sigue imperando mientras no se produzca su derogación por el órgano
competente o la declaración expresa, definitiva y general de su inconstitucionalidad. En
otras palabras, la autoridad que inaplica la norma en cuestión no se pronuncia sobre su
validez, lo que no le corresponde y está reservado al órgano de control constitucional, pero
reconoce su ostensible oposición al Ordenamiento Fundamental, mirada la circunstancia
del caso concreto.

Como lo tiene dicho la doctrina y la jurisprudencia, la incompatibilidad de la disposición con


los preceptos superiores no es otra cosa que una palmaria inconstitucionalidad, pues si
entre los dos mandatos – el superior y el inferior – existe tal desavenencia que no puede
gobernar al tiempo la misma situación objeto de regulación jurídica – en eso consiste la
incompatibilidad –, no de otra manera puede calificarse el fenómeno, con la consecuencia
cierta de la inaplicación en el caso del precepto inferior, con lo cual se enervan posibles
efectos inconstitucionales irremediables. Como allí termina la competencia del funcionario
u operador jurídico, lo que sigue es aguardar la resolución definitiva del juez de
constitucionalidad si ante él se plantea, por vía general, la colisión normativa.”1126

1194. Habiendo presentado los anteriores elementos, la Sala reitera su posición


jurisprudencial, considerando que en el presente caso es menester aguardar la decisión
de la Corte Constitucional en torno a la constitucionalidad o no de los artículos 23 y 25 de
la Ley 1592 de 2012, pues no encuentra que la contradicción entre estas normas y el
articulado constitucional y legal sea clara y evidente; mucho más teniendo en cuenta
que no existen precedentes jurisprudenciales y doctrinales que permitan argumentar de
forma suficiente una decisión al respecto, porque una decisión de esta naturaleza debe
tener en cuenta la jurisprudencia proferida por el intérprete autorizado de la Carta.

Los derechos de las víctimas en el proceso de Justicia y Paz

1195. Teniendo en cuenta la presentación realizada por las partes en la audiencia de


identificación y reconocimiento de afectaciones, la Sala considera fundamental realizar
una revisión de conceptos claves en torno a los cambios procesales introducidos por la
Ley 1592 de 2012 y la reiteración de la realización de los derechos de las víctimas en
materia de verdad, justicia y reparación integral, para ello se valió de la interpretación
sistemática de la reforma ya mencionada, así como de la Ley 1448 de 2011 y sus decretos
reglamentarios.

1126
Tribunal Superior de Bogotá, Sala de Justicia y Paz, Sentencia en contra de Rodrigo Pérez Alzate, M.P. Uldi Teresa
Jiménez López, 30 de agosto de 2013.
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¿Quién es víctima en el marco de la Ley 975 de 2005?

1196. En primer lugar la Sala examinará el conjunto de personas afectadas que pueden
ser incluidas en el marco de Justicia y Paz y por tanto tienen vocación reparadora. Para
ello la Sala revisó la normativa y jurisprudencia producida en torno al tema y encontró
que al interpretar el contenido de la reforma propuesta por la Ley 1592 de 2012 y lo
preceptuado por la Ley 1448 de 2011, las víctimas del proceso de justicia y paz son
aquellas personas consideradas individual o colectivamente que: (i) fueron víctimas de
hechos ocasionados en el marco o con ocasión del conflicto armado colombiano que
representaron violaciones a sus derechos humanos o les generaron infracciones al DIH;
(ii) los cuales debieron ser perpetrados por grupos o miembros de grupos organizados al
margen de la ley (GAOML) que se hayan desmovilizado de forma individual o colectiva, y
hayan cumplido con los requisitos exigidos por la ley de justicia y paz; (iii) que además
hayan sido registradas y reconocidas en el sistema de justicia y paz; (iv) para que
pudieran participar en las diferentes etapas del proceso y especialmente en el Incidente
de identificación de las afectaciones causadas a la víctima; y (v) las cuales, una vez
reconocidas sus afectaciones, serán remitidas al SNARIV para que sean atendidas y
reparadas en forma integral1127.

1197. Además de la caracterización realizada anteriormente, la Sala recuerda que el


artículo 5º de la Ley 975 de 2005, dictamina que también serán consideradas víctimas
para el proceso de Justicia y Paz el(a) cónyuge, el(a) compañero(a) permanente, y los
familiares en primer grado de consanguinidad, primero civil de la víctima directa, cuando
a esta se le hubiere dado muerte o estuviere desaparecida1128. Si se analiza el texto de la
norma, lo que significa es que estos familiares han sido incluidos de forma directa y
automática para acceder al proceso, participar en él y obtener los beneficios que en
materia de atención y reparación les correspondan. Como se explicará más adelante, las
demás personas que consideren que han sufrido una afectación o daño deberán probarlo
y cumplir una serie de requisitos adicionales para su reconocimiento, pero esto no

1127
Ver: Corte Constitucional, Sentencia SU-254 de 2013, en la cual: “la Corte se refirió al alcance de la Ley 1448 de 2011,
afirmando que consagra un amparo integral de las víctimas, y abarca mecanismos de asistencia, atención, prevención,
protección, reparación integral con enfoque diferencial, acceso a la justicia y conocimiento de la verdad, ofreciendo
herramientas para que aquellas reivindiquen su dignidad y desarrollen su modelo de vida. Así mismo afirmó que esta ley se
inscribe dentro del conjunto de instrumentos normativos que se han expedido con el fin de hacer frente a la situación de
conflicto armado y que pueden articularse conceptualmente en torno a la idea de un modelo de justicia transicional que
responda a las peculiaridades de la situación del país. Menciona que la ley parte del reconocimiento de la dignidad de todas
las personas que han sufrido las consecuencias del conflicto armado interno y, en función de ello, consagra los principios de
la buena fe, igualdad de todas las víctimas y enfoque diferencial, así como los principios de progresividad, gradualidad y
sostenibilidad.”
1128
Ver: Artículo 5º de la Ley 975 de 2005.
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significa que no puedan hacer valer su situación o condición en el marco del presente
proceso.

Otras víctimas que pueden participar en el proceso de Justicia y Paz.

1198. Ahora bien, el proceso de Justicia Transicional en Colombia no reduce o limita el


que las víctimas puedan ejercer y exigir la realización de sus derechos a la verdad, a la
justicia y a la reparación. En ese sentido, la Sala considera necesario interpretar de forma
sistemática la normatividad que en materia de justicia transicional ha expedido el Estado
colombiano, por tanto, siguiendo lo preceptuado por el artículo 3º de la Ley 1448 de
2012, también pueden ser reconocidas como víctimas en el marco de la Ley 975 de 2005,
las siguientes personas: las parejas del mismo sexo, los familiares en primer grado de
consanguinidad, primero civil de la víctima directa, cuando a esta se le hubiere dado
muerte o estuviere desaparecida1129. A falta de estas, lo serán los que se encuentren en el
segundo grado de consanguinidad ascendente. De la misma forma, se consideran
víctimas las personas que hayan sufrido un daño al intervenir para asistir a la víctima en
peligro o para prevenir la victimización.

1199. La calidad de víctima es una situación de hecho. La Sala encuentra


particularmente útil precisar que la calidad de víctima es una situación de hecho que
surge de una circunstancia objetiva, es decir la existencia de un daño ocurrido como
consecuencia de unos hechos ilícitos, así lo ha interpretado la Corte Constitucional en las
sentencias C-253 A de 2012 y C-781 de 20121130. Específicamente en la sentencia C-715
de 2012, señaló que: “esta Corporación reitera su jurisprudencia en cuanto a la
diferenciación entre la condición de víctima y los requisitos formales y exigencias de
trámite para el acceso a los beneficios previstos por las leyes dirigidas a consagrar,
reconocer y otorgar beneficios de protección para el goce efectivo de sus derechos. Sobre
este tema, esta Corporación ha sostenido que la condición de víctima es un hecho fáctico,
que no depende de declaración o de reconocimiento administrativo alguno. En este
sentido, ha consolidado una concepción material de la condición de víctima del conflicto

1129
Ver: Sentencia C-370 de 2006: “6.2.4.2.16. En consecuencia, la Corte procederá a declarar exequibles, por los cargos
examinados, los incisos segundo y quinto del artículo 5º, en el entendido que la presunción allí establecida no excluye como
víctima a otros familiares que hubieren sufrido un daño como consecuencia de cualquier otra conducta violatoria de la ley
penal cometida por miembros de grupos armados al margen de la ley. Adicionalmente, procederá a declarar exequible la
expresión “en primer grado de consaguinidad de conformidad con el Presupuesto del Fondo para la reparación de las
víctimas”, contenida en el artículo 47, sin perjuicio de analizar otro cargo sobre este mismo artículo con posterioridad
(aparte 6.2.4.3.3.), en el entendido que no excluye como víctima a otros familiares que hubieren sufrido un daño como
consecuencia de cualquier otra conducta violatoria de la ley penal cometida por miembros de grupos armados al margen de
la ley. Finalmente, declarará la exequibilidad de la expresión “en primer grado de consaguinidad” del numeral 49.3, en el
entendido que no excluye como víctima a otros familiares que hubieren sufrido un daño como consecuencia de cualquier
otra conducta violatoria de la ley penal cometido por miembros de grupos armados al margen de la ley.”
1130
Ver: Corte Constitucional, Sentencias C-253 A de 2012, C-781 de 2012, C-715 de 2012 y C-099 de 2013.
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armado, entre ellos especialmente del desplazado forzado por la violencia interna, de tal
manera que ha precisado que “siempre que frente a una persona determinada, concurran
las circunstancias [fácticas] descritas, ésta tiene derecho a recibir especial protección por
parte del Estado, y a ser beneficiaria de las políticas públicas diseñadas para atender el
problema humanitario que representa el desplazamiento de personas por causa del
conflicto armado.”1131

1200. Como complemento de la presente disertación, la Sala recuerda que en Colombia,


toda persona que haya sido víctima de un delito, y en particular, aquellas que hayan
sufrido un daño como consecuencia de infracciones al Derecho Internacional Humanitario
o de violaciones graves y manifiestas a las normas internacionales de Derechos Humanos,
ocurridas con ocasión del conflicto armado interno, puede acudir a los mecanismos
ordinarios que el ordenamiento jurídico ha previsto para garantizar los derechos a la
verdad la justicia y la reparación, y, por otro, que conservan plena vigencia las
prescripciones de DIH y de DIDH que buscan prevenir las violaciones de derechos y que
brindan protección a todas las personas en el marco de los conflictos armados
internos1132.

1201. La Sala considera que si de lo que se trata es de armonizar la normativa producida


en torno a la implementación de un proceso de Justicia Transicional, se debe interpretar
de forma sistemática la Ley 975 de 2005 (reformada por la Ley 1592 de 2012) en
concordancia con la Ley 1448 de 2011. Es decir, que si la Constitución Nacional tiene un
núcleo fuerte, a través del cual se busca la protección de los derechos fundamentales, los
derechos de las víctimas se corresponden con los postulados de prevención y protección
fundamentales, por tanto el legislador y el operador judicial deben interpretar la norma de
forma tal que permita el ejercicio y la exigibilidad de los derechos de los afectados por el
conflicto armado colombiano1133.

1202. A la luz de tal interpretación, la Sala entiende que el propósito de la reforma de la


Ley 1592 de 2012 y su artículo 2º, es delimitar de forma concreta el concepto de víctima,
entendiendo que su “condición responde a una realidad objetiva”1134. La ley identifica y
determina de manera específica a aquellas víctimas que serán destinatarias de medidas

1131
Sentencia T-042 de 2009, M.P. Jaime Córdoba Triviño.
1132
Ver: Corte Constitucional, Sentencias C-253A de 2012
1133
Ver: Sentencias SU-047 de 1999, C-227 de 2002, C-730 de 2005, C-145 de 2010. Ver también: UPRIMNY, Rodrigo,
Bloque de constitucionalidad, Derechos Humanos y Sistema Penal Acusatorio, en:
http://www.wcl.american.edu/humright/hracademy/documents/Clase1-Lectura3BloquedeConstitucionalidad.pdf, consultada
el 23 de agosto de 2013.
1134
Corte constitucional, sentencia C-253 A del 29 de marzo de 2012.
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especiales de protección. Cuando una norma hace uso de la expresión: “Para los efectos
de la presente ley (…)”, se está haciendo uso de una definición operativa, es decir que se
está realizando un “giro que implica que se reconoce la existencia de víctimas distintas de
aquellas que se consideran tales para los efectos de esta ley en particular, o, en sentido
inverso, que, a partir del conjunto total de las víctimas, se identifican algunas que serán
las destinatarias de las medidas especiales contenidas en la ley”1135.

1203. Por ejemplo, la Ley 975 de 2005, en aras de esclarecer sus alcances en materia de
cobertura de beneficios para las víctimas acude al criterio del parentesco hasta el “primer
grado de consanguinidad, primero civil de la víctima directa” y requirieron que “a esta se
le hubiere dado muerte o estuviere desaparecida”. De tal figura legal no se debe
interpretar que quienes no encajen en los criterios allí señalados dejan de ser reconocidos
como víctimas. Pues como lo ha reiterado en párrafos anteriores la Sala, es víctima quien
ha sufrido un daño como consecuencia de acciones en el marco del conflicto armado,
realizadas por miembros del GAOML. Sin embargo, no todas las víctimas acceden de
manera prioritaria (discriminación positiva), a las medidas especiales de atención,
protección y reparación previstas por el SNARIV, a través del proceso de Justicia y Paz; en
últimas, el legislador buscó una forma de implementar alivios en la carga probatoria de
ciertos familiares de víctimas directas estableciendo presunciones como lo hizo en los
incisos 2º y 5º del artículo 5º de la Ley 975 de 20051136.

1204. En un caso similar, la Corte Constitucional estudio la exequibilidad del otrora art.
5º de la Ley 975 de 2005 y manifestó al respecto que: “si bien, las exclusiones son
constitucionalmente inadmisibles, no dista para que el legislador alivie la carga probatoria
de ciertos familiares de víctimas directas estableciendo presunciones como lo hizo en los
incisos 2º y 5º del artículo 5º de la Ley 975 de 2005, en consecuencia, “declaró
exequibles los incisos segundo y quinto del artículo 5º, en el entendido que la presunción
allí establecida no excluye como víctima a otros familiares que hubieren sufrido un daño
como consecuencia de cualquier otra conducta violatoria de la ley penal cometida por
miembros de grupos armados al margen de la ley”1137.

1205. Como conclusión, la Sala considera que a través de la aplicación del artículo 2º de
la Ley 1592 de 2012, las personas que resultaron afectadas material, moral y socialmente

1135
Ibídem.
1136
Por ejemplo, la Corte Constitucional en la sentencia C-370 de 2006 en la que se pronunció sobre la exequibilidad de
varias disposiciones de la ley 975 de 2005 y que resultaría relevante en el caso concreto en cuanto en ella se declaró
condicionalmente exequible el inciso 2º del artículo 5º de esa preceptiva, de contenido similar al del inciso 2º del artículo 2º
de la Ley 1592 de 2012.
1137
Corte Constitucional, sentencia C-370 de 2006
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por el accionar de los grupos armados organizados al margen de la ley, no pierden su


condición (situación fáctica), lo que sucede es que el legislador alivió la carga probatoria
de quienes acrediten situaciones o relaciones particulares, como el ser cónyuge,
compañero o compañera permanente y familiar “en primer grado de consanguinidad,
primero civil de la víctima directa, cuando a ésta se le hubiere dado muerte o estuviere
desaparecida”1138.

1206. En consecuencia, el universo de víctimas que puede aplicar al reconocimiento de


sus afectaciones a través del proceso de Justicia y Paz no se ha reducido ni modificado,
sino que se han establecido unas presunciones que benefician a determinadas personas
como los cónyuges o compañeros permanentes, los no indexados deberán desarrollar una
actividad probatoria más amplia, en aras de acreditar las afectaciones con elementos de
juicio diferentes a las meras presunciones legales.

1207. El reconocimiento de la calidad de víctima. Ahora bien, el sistema normativo


transicional en Colombia que busca proteger, atender y reparar a las víctimas del conflicto
armado, incluido el procedimiento de Justicia y Paz, ha dispuesto unos mecanismos o
instrumentos procedimentales para poder identificar claramente a las víctimas, y
permitirles participar activamente en el proceso transicional a fin de obtener asistencia y
reparación integral.

1208. La fase judicial del proceso de justicia y paz, está integrada por dos etapas, una
pre procesal -constituida por un ciclo preliminar y otro investigativo-, a cargo de la Fiscalía
General de la Nación y otra procesal de competencia de las Salas de Justicia y Paz. Dentro
de la etapa previa, le corresponde a la Fiscalía Delegada ante la Unidad de Justicia y Paz,
adelantar las actividades investigativas necesarias para establecer la verdad material,
determinar los autores intelectuales, materiales y partícipes, esclarecer las conductas
punibles cometidas, identificar los bienes, fuentes de financiación y armamento de los
respectivos grupos armados al margen de la ley, realizar los cruces de información y las
demás diligencias encaminadas a cumplir lo dispuesto por los artículos 15 y 16 de la Ley
975 de 20051139.

1209. Cumplida esta etapa, se continúa con la versión libre, al inicio de la cual el Fiscal
Delegado interrogará al postulado por su voluntad expresa de acogerse al procedimiento

1138
Artículo 5º de la Ley 975 de 2005.
1139
Decisión de la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia, rad. 27873 del 27 de agosto de 2007, M .P. Dr.
Julio Enrique Socha Salamanca.
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y beneficios de esta ley, requiriéndose tal manifestación para que la versión libre pueda
ser recibida y se surtan las demás etapas del proceso judicial1140. En esta instancia le
corresponde al Ente Fiscal velar por la participación activa de las víctimas en el proceso,
momento procesal en el cual las personas afectadas podrán realizar preguntas y plantear
solicitudes concretas a los postulados. Para ello, la Fiscalía realiza una acreditación
amparada en una prueba sumaria, que le permite a las personas intervenir en la diligencia
judicial ya mencionada.

1210. Posteriormente, una vez activada la fase judicial, el artículo 23 de la reforma (Ley
1592 de 2012), dispone que los Magistrados, en la misma audiencia en la que se declare
la legalidad de la aceptación total o parcial de los cargos, reconocerá la calidad de
víctimas, permitirá la intervención directa de las mismas, de su representante legal o
abogado de oficio, para que exponga las afectaciones causadas con la conducta criminal.

1211. La participación o intervención de las víctimas, directamente o a través de


apoderado, tiene por objeto que se enuncien los hechos ilícitos y se presenten las
correspondientes afectaciones o daños causados por éstos. La Sala analizará la versión de
la víctima y la rechazará si comprueba que quien la promueve no es víctima, es decir si se
trata de alguien que no cumple con los requisitos específicos para intervenir en el proceso
de Justicia y Paz, esta decisión podrá ser objeto de impugnación en los términos de esta
ley1141.

1212. Una vez la Sala ha aceptado y reconocido la versión de la víctima e identificado las
afectaciones, se las pondrá de presente al postulado o postulados y si este o estos no
presentan ningún reparo a lo expuesto, se procederá a incorporar las declaraciones de las
víctimas en la sentencia, junto con la identificación de las afectaciones, las cuales en
ningún caso serán tasadas por el Tribunal.

1213. Si el postulado o postulados y/o sus representantes no aceptan la versión de la


víctima y se oponen a la misma, la Sala ordenará la práctica de pruebas, que en este caso
estarán a cargo del postulado y su defensa (inversión de la carga probatoria a favor de la
víctima). Es decir, puesto que la víctima es considerada la parte “débil” en el proceso
judicial, quien debe correr con la obligación de demostrar que lo que las víctimas han
manifestado no es verdad, son los postulados.

1140
Artículo 1º Decreto 2898 de 2006.
1141
Ley 975 de 2005, modificada por la Ley 1592 de 2011, artículo 23.
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1214. En ese orden de ideas, una vez presentadas las pruebas, la Sala estudiará
el fundamento de las versiones de los postulados y de las víctimas, y en el mismo
momento de la audiencia fallará al respecto. Esto significa que los postulados y
sus representantes deben estar en capacidad de responder procesal y
probatoriamente ante la necesidad de demostrar que las víctimas faltan a la
verdad o si consideran que su versión no corresponde con la realidad de los
hechos por los cuales se están alegando unas determinadas afectaciones en
cabeza de los postulados y/o el frente o bloque que se esté procesando.

1215. Cuando se ha decidido sobre la aceptación de las afectaciones por parte de los
postulados, la Sala procederá a incorporar en el fallo lo que las víctimas han manifestado,
esto con el fin de complementar la contextualización y caracterización de las siguientes
materias: (i) los diferentes patrones de “macrocriminalidad” que ejecutaron los grupos
armados organizados al margen de la ley, procesados a través del proceso de Justicia y
Paz; (ii) los contextos en los cuales se desarrollaron los hechos ilícitos que vulneraron los
derechos de las víctimas; y (iii) las posibles causas y/o motivos que generaron la
victimización.

1216. Finalmente, la Sala remitirá el expediente a la Unidad Administrativa Especial para


la Atención y Reparación Integral a las Víctimas (UARIV) y/o a la Unidad Administrativa
Especial de Gestión de Restitución de Tierras Despojadas (UAEGRT) para que las víctimas
y sus afectaciones sean incluidas de forma automática en los registros correspondientes,
con el fin de que accedan a los programas de asistencia, atención, ayuda humanitaria,
reparación integral, restitución de tierras, etc., que desarrolla la Ley 1448 de 2011
(artículo 23 de la Ley 975 de 2005).

1217. En conclusión, la Sala se encargará de verificar que quien acude al procedimiento


especial de Justicia y Paz efectivamente es víctima y que sus afectaciones están
acreditadas de forma sumaria. El expediente será remitido al SNARIV, específicamente a
la Unidad de Atención y Reparación a las Víctimas (UARIV), para que sean incluidas en el
Registro Único de Víctimas y así obtengan los beneficios contemplados en la Ley 1448 de
20111142.

1142
Similar procedimiento sucede en materia de restitución de tierras, pues una vez se declare la extinción de dominio de
los bienes presentados por los postulados y haya lugar al derecho a la restitución de tierras y territorios en cabeza de
víctimas de Justicia y Paz, se remitirá tal información a la Unidad de Restitución de Tierras y al Fondo de Reparación a
víctimas.
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1218. La participación de las víctimas en el proceso de Justicia y Paz. La víctima


reconocida en el proceso, de forma directa o a través de su apoderado podrá asistir y
participar activamente en el mismo. Específicamente en materia de reparación integral,
como ya se ha dicho, una de las particularidades del incidente de reconocimiento de
afectaciones es que las víctimas presenten sus versiones y afectaciones, para lo cual
harán una manifestación expresa de las mismas en esta instancia judicial.

La Reparación Integral de las Víctimas

1219. Teniendo en cuenta que esta Sala ha venido desarrollando decisiones en la cuales
ha resaltado la importancia de que las víctimas conozcan sus derechos, los exijan y
puedan ejercerlos, es importante reafirmar la postura del Tribunal en torno a los derechos
de las víctimas a la verdad, a la justicia y a la reparación, y la relación sistémica entre la
Ley 975 de 2005 y la Ley 1448 de 2011. A continuación se realizará un resumen de
algunos de los postulados generales en torno a tales derechos de las personas afectadas
por el conflicto armado, y se enunciara cómo se articula el nuevo sistema de atención y
reparación a víctimas en el país.

Derechos de las víctimas a la verdad, a la justicia y a la reparación1143

1220. El Estado colombiano ha implementado en las últimas décadas procesos políticos,


administrativos y judiciales que buscan responder a las necesidades de las víctimas del
conflicto armado, es decir que se han diseñado y puesto en marcha instrumentos o
mecanismos de Justicia transicional. Colombia ha venido desarrollando un corpus iuris de
carácter transicional1144, como ya se ha dicho, con la expedición de la Ley 1448 de 2011,
se diseño e implementó un proceso de política pública, que incluye un proceso de
reparación integral a través de un mecanismo extrajudicial y masivo de reparaciones por
vía administrativa. Adicionalmente, la Ley 1448 contempla como derechos de las víctimas
los siguientes:

ARTÍCULO 28. DERECHOS DE LAS VÍCTIMAS. Las víctimas de las violaciones contempladas
en el artículo 3° de la presente Ley, tendrán entre otros los siguientes derechos en el
marco de la normatividad vigente:
1. Derecho a la verdad, justicia y reparación.

1143
Cap VII No. 11 de los Principios y directrices básicos sobre el derecho de las víctimas de violaciones manifiestas de las
normas internacionales de derechos humanos y de violaciones graves del derecho internacional humanitario a interponer
recursos y obtener reparaciones. Resolución 60/147. Aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas y adoptada
el 16 de diciembre de 2007.
1144
Ley 1448 de 2011 "por la cual se dictan medidas de atención, asistencia y reparación integral a las víctimas del
conflicto" artículo 3.
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2. Derecho a acudir a escenarios de diálogo institucional y comunitario.


3. Derecho a ser beneficiario de las acciones afirmativas adelantadas por el Estado para
proteger y garantizar el derecho a la vida en condiciones de dignidad.
4. Derecho a solicitar y recibir atención humanitaria.
5. Derecho a participar en la formulación, implementación y seguimiento de la política
pública de prevención, atención y reparación integral.
6. Derecho a que la política pública de que trata la presente ley, tenga enfoque diferencial.
7. Derecho a la reunificación familiar cuando por razón de su tipo de victimización se haya
dividido el núcleo familiar.
8. Derecho a retornar a su lugar de origen o reubicarse en condiciones de voluntariedad,
seguridad y dignidad, en el marco de la política de seguridad nacional.
9. Derecho a la restitución de la tierra si hubiere sido despojado de ella, en los términos
establecidos en la presente Ley.
10. Derecho a la información sobre las rutas y los medios de acceso a las medidas que se
establecen en la presente Ley.
11. Derecho a conocer el estado de procesos judiciales y administrativos que se estén
adelantando, en los que tengan un interés como parte o intervinientes.
12. Derecho de las mujeres a vivir libres de violencia

1221. Con la reforma a la Ley 975 de 2005, los Magistrados de Justicia y Paz, han sido
investidos de la facultad de impulsar el proceso de reparación integral y la realización de
los derechos de las víctimas de la Ley 1448 de 2011; a través de la remisión de sus
decisiones judiciales al SNARIV, sistema encargado de ejecutar las medidas de atención y
reparación a todas las víctimas que están en capacidad de acudir a él.

1222. Para la Sala está claro que los jueces de justicia transicional en el país y
especialmente los Magistrados de Justicia y Paz, adquirieron unos deberes frente a la
realización de los derechos de las víctimas, por ende, tienen la capacidad de hacer
seguimiento al cumplimiento de las decisiones emanadas de sus jurisdicciones. Sin
desconocer que son las entidades del SNARIV, así como las autoridades del nivel regional
y local, quienes deben poner en funcionamiento y aplicar todas las medidas tendientes a
proporcionar efectividad en la atención y la reparación integral de las víctimas del
conflicto armado colombiano.

1223. Por lo anterior no está de más recordar que los derechos de las víctimas de graves
violaciones a los derechos humanos, están reconocidos por el Derecho Internacional, y
tienen relevancia constitucional porque: (i) según el artículo 93 de la C.N., tales derechos
contenidos en tratados y convenios internacionales, ratificados por el Congreso, hacen
parte del sistema constitucional colombiano, (ii) los derechos constitucionales deben ser
interpretados de conformidad con los tratados de derechos humanos ratificados por
Colombia, y (iii) la Corte Constitucional ha reconocido el carácter prevalente de las
normas de Derecho Internacional Humanitario y del Derecho Internacional de los
Derechos Humanos, y los derechos fundamentales de las víctimas del conflicto armado.

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1224. En un reciente fallo, más exactamente la Sentencia SU-254 de 2013, la Corte


Constitucional recordó algunos de los deberes y de las obligaciones que le corresponden
al Estado a favor de las víctimas de violaciones a los derechos humanos e infracciones al
DIH, los cuales se concretaron de la siguiente manera:

1225. El derecho a la justicia implica: (i) la obligación de prevenir los atentados y


violaciones de los derechos humanos e infracciones al DIH, (ii) la garantía de acceso a un
recurso judicial sencillo y eficaz por parte de las víctimas, lo cual supone a su vez, (iii) la
obligación de los Estados partes de investigar y esclarecer los hechos ocurridos, (iv) la
obligación de perseguir y sancionar a los responsables, (v) este procedimiento debe
desarrollarse de manera oficiosa, pronta, efectiva, seria, imparcial y responsable por parte
de los Estados, (vi) el respeto al debido proceso, (vii) dentro de un plazo razonable, y
(viii) que se tenga en cuenta que figuras jurídicas como la prescripción penal, la exclusión
de la pena o las amnistías son incompatibles e inaplicables en casos de graves violaciones
de los derechos humanos.

1226. El derecho a la verdad corresponde a: (i) el derecho de las víctimas y de sus


familiares a conocer la verdad real sobre lo sucedido, (ii) a saber quiénes fueron los
responsables de los atentados y violaciones de los derechos humanos, (iii) a que se
investigue y divulgue públicamente la verdad sobre los hechos, (iv) en el caso de violación
del derecho a la vida, el derecho a la verdad implica que los familiares de las víctimas
deben poder conocer el paradero de los restos de sus familiares, (v) existe un doble
carácter del derecho a la verdad, el que se predica respecto de las víctimas y sus
familiares, y el que tiene como fin lograr la recuperación de la memoria histórica para la
sociedad, y (vi) existe una conexidad intrínseca entre el derecho a la verdad, el derecho a
la justicia y a la reparación integral.

1227. El derecho a la reparación integral implica que: (i) las reparaciones tienen
que ser integrales y plenas, de tal manera que en lo posible se garantice restitutio in
integrum, esto es, la restitución de las víctimas al estado anterior al hecho vulneratorio, y
que (ii) de no ser posible la restitución integral y plena, se deben adoptar medidas tales
como indemnizaciones compensatorias, (iii) la reparación debe ser justa y proporcional al
daño sufrido, (iv) se deben reparar tanto los daños materiales como inmateriales, (v) que
la reparación del daño material incluye tanto el daño emergente como el lucro cesante,
así como medidas de rehabilitación, y (vi) que la reparación debe tener un carácter tanto

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individual como colectivo, este último referido entre otras a medidas reparatorias de
carácter simbólico.

1228. En cuanto a este derecho, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos 1145


ha manifestado que: (i) las víctimas de graves violaciones de los derechos humanos, del
derecho internacional humanitario o de crímenes de lesa humanidad tienen derecho a ser
reparadas de manera adecuada, proporcional, integral y eficaz respecto del daño sufrido;
(ii) la reparación se concreta a través de la restitución íntegra o plena, pero también a
través de la indemnización, de la rehabilitación, de la satisfacción de alcance colectivo, y
de la garantía de no repetición; (iii) la reparación a las víctimas por el daño ocasionado se
refiere tanto a los daños materiales como a los inmateriales, (iv) la reparación se concreta
a través de medidas tanto individuales como colectivas, y (v) estas medidas se
encuentran encaminadas a restablecer a la víctima en su dignidad por el grave daño
ocasionado.1146

1229. El reconocimiento expreso del derecho a la reparación del daño causado que le
asiste a las personas que han sido objeto de violaciones de derechos humanos, y que por
tanto éste es un derecho internacional y constitucional de las víctimas. El derecho a la
reparación integral y las medidas que este derecho incluye se encuentran regulados por el
derecho internacional en todos sus aspectos: alcance, naturaleza, modalidades y la
determinación de los beneficiarios, aspectos que no pueden ser desconocidos y deben ser
respetados por los Estados obligados.

1230. El derecho a la reparación de las víctimas es integral, en la medida en que se


deben adoptar distintas medidas determinadas no solo por la justicia distributiva sino

1145
Reviste especial relevancia para este estudio el “Informe sobre el proceso de desmovilización en Colombia” del 13 de
diciembre de 2004. Ver sentencia C-370 de 2006.
1146
Sobre estándares aceptables en materia de reparación la Comisión afirmó:
“Los estándares aplicables establecen que las medidas de alcance individual deben ser suficientes, efectivas, rápidas y
proporcionales a la gravedad del crimen y a la entidad del daño sufrido y estar destinadas a restablecer la situación en que
se encontraba la víctima antes de verse afectada. Estas medidas pueden consistir en el restablecimiento de derechos tales
como el de la libertad personal, en el caso de los detenidos o secuestrados; y el retorno al lugar de residencia, en el caso
de los desplazados. Asimismo, las víctimas que han sido despojadas de sus tierras o propiedades por medio de la violencia
ejercida por los actores del conflicto armado tienen derecho a medidas de restitución.
“45. En el caso de crímenes que, por sus características, no admiten la restitutio in integrum los responsables deben
compensar a la víctima o sus familiares por los perjuicios resultantes del crimen. El Estado deberá esforzarse por resarcir a
la víctima cuando el responsable de la conducta ilícita no haya podido o no haya querido cumplir sus obligaciones.
Asimismo, la situación de la víctima puede requerir de la adopción de medidas de rehabilitación tales como atención médica
y psicológica, servicios jurídicos y sociales de apoyo.
“46. Las garantías generales de satisfacción requieren de medidas tendientes a remediar el agravio padecido por víctima,
incluyendo la cesación de violaciones continuadas; la verificación de los hechos constitutivos de crímenes internacionales; la
difusión pública y completa de los resultados de las investigaciones destinadas a establecer la verdad de lo sucedido, sin
generar riesgos innecesarios para la seguridad de víctimas y testigos; la búsqueda de los restos de los muertos o
desaparecidos; la emisión de declaraciones oficiales o de decisiones judiciales para restablecer la dignidad, la reputación y
los derechos de las víctimas y de las personas a ellas vinculadas; el reconocimiento público de los sucesos y de las
responsabilidades; la recuperación de la memoria de las víctimas; y la enseñanza de la verdad histórica.”
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también por la justicia restaurativa, en cuanto se trata de la dignificación y restauración


plena del goce efectivo de los derechos fundamentales de las víctimas.

1231. Además, las obligaciones de reparación incluyen, en principio y de manera


preferente, la restitución plena (restitutio in integrum), que hace referencia al
restablecimiento de la víctima a la situación anterior al hecho de la violación, entendida
ésta como una situación de garantía de sus derechos fundamentales, y dentro de estas
medidas se incluye la restitución de las tierras usurpadas o despojadas a las víctimas; de
no ser posible tal restablecimiento pleno es procedente la compensación a través de
medidas como la indemnización pecuniaria por el daño causado.

1232. La reparación integral incluye además de la restitución y de la compensación, una


serie de medidas tales como la rehabilitación, la satisfacción y garantías de no repetición.
Así, el derecho a la reparación integral supone el derecho a la restitución de los derechos
y bienes jurídicos y materiales de los cuales ha sido despojada la víctima; la
indemnización de los perjuicios; la rehabilitación por el daño causado; medidas simbólicas
destinadas a la reivindicación de la memoria y de la dignidad de las víctimas; así como
medidas de no repetición para garantizar que las organizaciones que perpetraron los
crímenes investigados sean desmontadas y las estructuras que permitieron su comisión
removidas, a fin de evitar que las vulneraciones continuas, masivas y sistemáticas de
derechos se repitan.

1233. La reparación integral a las víctimas de graves violaciones a los derechos humanos
tiene tanto una dimensión individual como colectiva. En su dimensión individual la
reparación incluye medidas tales como la restitución, la indemnización y la readaptación o
rehabilitación. En su dimensión colectiva la reparación se obtiene también a través de
medidas de satisfacción y carácter simbólico o de medidas que se proyecten a la
comunidad.

1234. Una medida importante de reparación integral es el reconocimiento público del


crimen cometido y el reproche de tal actuación. En efecto, como ya lo ha reconocido la
Corte Constitucional, la víctima tiene derecho a que los actos criminales sean reconocidos
y a que su dignidad sea restaurada a partir del reproche público de dichos actos. Por
consiguiente, una manera de vulnerar de nuevo sus derechos, es la actitud dirigida a
desconocer, ocultar, mentir, minimizar o justificar los crímenes cometidos.

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1235. El derecho a la reparación desborda el campo de la reparación económica, e


incluye además de las medidas ya mencionadas, el derecho a la verdad y a que se haga
justicia. En este sentido, el derecho a la reparación incluye tanto medidas destinadas a la
satisfacción de la verdad y de la memoria histórica, como medidas destinadas a que se
haga justicia, se investigue y sancione a los responsables. Por tanto, la Corte ha
evidenciado el derecho a la reparación como un derecho complejo, en cuanto se
encuentra en una relación de conexidad e interdependencia con los derechos a la verdad
y a la justicia, de manera que no es posible garantizar la reparación sin verdad y sin
justicia.

1236. La reparación integral a las víctimas debe diferenciarse de la asistencia y servicios


sociales y de la ayuda humanitaria brindada por parte del Estado, de manera que éstos no
pueden confundirse entre sí, en razón a que difieren en su naturaleza, carácter y
finalidad. Mientras que los servicios sociales tienen su título en derechos sociales y se
prestan de manera ordinaria con el fin de garantizar dichos derechos sociales,
prestacionales o políticas públicas relativas a derechos de vivienda, educación y salud, y
mientras la asistencia humanitaria la ofrece el Estado en caso de desastres; la reparación
en cambio, tiene como título la comisión de un ilícito, la ocurrencia de un daño antijurídico
y la grave vulneración de los derechos humanos, razón por la cual no se puede sustituirlas
o asimilarlas, aunque una misma entidad pública sea responsable de cumplir con esas
funciones, so pena de vulnerar el derecho a la reparación.

1237. La necesaria articulación y complementariedad de las distintas políticas públicas,


pese a la clara diferenciación que debe existir entre los servicios sociales del Estado, las
acciones de atención humanitaria y las medidas de reparación integral. De esta manera,
el Estado debe garantizar todas las medidas, tanto de atención como de reparación a la
población desplazada, hasta el restablecimiento total y goce efectivo de sus derechos.

1238. En conclusión, el derecho a la reparación integral es aquel que tienen las víctimas
de violaciones a los derechos humanos e infracciones al derecho internacional
humanitario a reclamar un resarcimiento, restitución o compensación por los daños
sufridos. Implica un deber del Estado de reparar y de hacer cesar las consecuencias de la
violación1147. La reparación tiene el propósito de hacer justicia mediante la eliminación o

1147
Convención Americana de Derechos Humanos, artículo 63, numeral 1.
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corrección, en lo posible, de las consecuencias de los actos ilícitos y la adopción de


medidas preventivas y disuasorias respecto de las violaciones1148.

1239. Los estándares internacionales han establecido que toda reparación debe ser
integral, es decir, que se debe reparar el daño material e inmaterial que se ha causado de
una manera adecuada, efectiva, rápida y proporcional a la gravedad de las violaciones y
al daño sufrido1149. Así mismo, deberá implementar de forma complementaria medidas
iindividuales como la restitución, indemnización y rehabilitación; y colectivas como la
satisfacción y las garantías de no repetición1150.

1240. El daño material “supone la pérdida o detrimento de los ingresos de la víctima, los
gastos efectuados con motivo de los hechos y las consecuencias de carácter pecuniario
que tengan un nexo causal con los hechos del caso subjudice”1151. Este comprende a su
vez la pérdida de ingreso (lucro cesante) y el daño emergente. El primero, está referido a
los ingresos que la víctima ha dejado de recibir o la ganancia dejada de obtener y que
hubiera recibido de no haberse producido el daño. Por su parte, el daño emergente es
aquel que se sufre como resultado de haber realizado una prestación o inversión
colateral.

1241. El daño inmaterial o moral es concebido por la Corte Interamericana de Derechos


Humanos como aquel que puede comprender tanto los sufrimientos y las aflicciones
causados a las víctimas directas y a sus allegados, y el menoscabo de valores muy
significativos para las personas, como las alteraciones de carácter no pecuniario en las
condiciones de existencia de la víctima o su familia. La Corte ha asociado el daño moral
con el padecimiento de miedo, sufrimiento, ansiedad, humillación, degradación, y la
inculcación de sentimientos de inferioridad, inseguridad, frustración, e impotencia1152.

1148
Principio 3 del Proyecto de Principios y Directrices Básicos (1993): Anexo del Informe definitivo presentado por el
Relator Especial Sr. Theo van Boven, acerca del derecho de restitución, indemnización y rehabilitación a las víctimas de
violaciones flagrantes de los derechos humanos y las libertades fundamentales. Presentado a la Comisión de Derechos
Humanos, Subcomisión de Prevención de Discriminaciones y Protección de las Minorías, 45° período de sesiones. 2 de julio
de 1993. E/CN.4/Sub.2/1993/8. CIDH Sentencia Caesar vs. Trinidad y Tobago, de 11 de marzo de 2005, párrafo 123
1149
Principios 15, 16, 17 y 18 de los Principios y Directrices Básicos Sobre el Derecho de las Víctimas de Violaciones
Manifiestas de las Normas Internacionales de Derechos Humanos y de Violaciones Graves del Derecho Internacional
Humanitario a Interponer Recursos y Obtener Reparaciones (2005).
1150
Principio 34 del Conjunto de principios actualizado para la protección y la promoción de los derechos humanos mediante
la lucha contra la impunidad (2005).
1151
Corte IDH. Sentencia Hermanas Serrano Cruz vs. El Salvador, párrafo 150
1152
Corte DH Sentencia Caesar vs. Trinidad y Tobago, de 11 de marzo de 2005, párrafo 125.
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Medidas de reparación de carácter individual

1242. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha señalado que “los


estándares aplicables establecen que las medidas de alcance individual deben ser
suficientes, efectivas, rápidas y proporcionales a la gravedad del crimen y a la entidad del
daño sufrido y estar destinadas a restablecer la situación en que se encontraba la víctima
antes de verse afectada. Estas medidas pueden consistir en el restablecimiento de
derechos tales como el de la libertad personal, en el caso de los detenidos o
secuestrados; y el retorno al lugar de residencia, en el caso de los desplazados. Asimismo,
las víctimas que han sido despojadas de sus tierras o propiedades por medio de la
violencia ejercida por los actores del conflicto armado tienen derecho a medidas de
restitución”1153.

1243. La restitución implica procurar las condiciones para que la víctima pueda ejercer
sus derechos de una forma similar o mejor a como lo venía haciendo antes de
presentarse la vulneración a estos. Implica entonces el restablecimiento de derechos
como la libertad, el trabajo, la vivienda, la familia, la seguridad social, la salud, el buen
nombre, el retorno a su lugar de residencia y la devolución de sus propiedades.

1244. Al respecto, de acuerdo con la Corte Interamericana de Derechos Humanos: “La


reparación del daño ocasionado por la infracción de una obligación internacional requiere,
siempre que sea posible, la plena restitución (restitutio in integrum), la cual consiste en el
restablecimiento de la situación anterior a la violación. De no ser esto posible, como en el
presente caso, cabe al tribunal internacional determinar una serie de medidas para que,
además de garantizar el respeto de los derechos conculcados, se reparen las
consecuencias que produjeron las infracciones y se establezca el pago de una
indemnización como compensación por los daños ocasionados”1154.

1245. La indemnización implica el reconocimiento de todo perjuicio evaluable


económicamente, tales como: (i) el daño físico o mental, incluido el dolor, el sufrimiento y
la angustia; (ii) la pérdida de oportunidades, incluidas las de educación; (iii) los daños
materiales y la pérdida de ingresos, incluido el lucro cesante; (iv) el daño a la reputación
o a la dignidad; y (v) los gastos de asistencia jurídica o de expertos, medicinas y servicios
médicos, psicológicos y sociales.

1153
Comisión Interamericana de Derechos Humanos “Informe sobre el proceso de desmovilización en Colombia”, proferido
el 13 de diciembre de 2004.
1154
Corte IDH Sentencia Caesar vs. Trinidad y Tobago, de 11 de marzo de 2005, párrafo 122.
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1246. En cuanto a la indemnización por daño moral, la Corte Interamericana de


Derechos Humanos ha señalado que: “No siendo posible asignar al daño inmaterial un
preciso equivalente monetario, sólo puede, para los fines de la reparación integral a las
víctimas, ser objeto de compensación, y ello de dos maneras. En primer lugar, mediante
el pago de una cantidad de dinero o la entrega de bienes o servicios apreciables en
dinero, que el Tribunal determine en aplicación razonable del arbitrio judicial y en
términos de equidad”1155.

1247. Por su parte, la Comisión Interamericana de derechos Humanos ha advertido que


“en el caso de crímenes que, por sus características, no admiten la restitutio in integrum
los responsables deben compensar a la víctima o sus familiares por los perjuicios
resultantes del crimen. El Estado deberá esforzarse por resarcir a la víctima cuando el
responsable de la conducta ilícita no haya podido o no haya querido cumplir sus
obligaciones. Asimismo, la situación de la víctima puede requerir de la adopción de
medidas de rehabilitación tales como atención médica y psicológica, servicios jurídicos y
sociales de apoyo”1156.

1248. La Rehabilitación debe entenderse en el siguiente contexto, si el ser humano


comprende al menos tres dimensiones: (i) la física, (ii) la mental o psicológica, y (iii) la
psicosocial y estas se ven afectadas por hechos violatorios a los derechos humanos,
entonces dentro de las medidas de rehabilitación se debe propender por la atención
médica y psicológica o psiquiátrica y de servicios sociales, jurídicos y de cualquier otra
índole, que le permitan a la víctima restablecer su integridad física, mental y
psicosocial1157.

Medidas de reparación de carácter colectivo

1249. En su dimensión colectiva, el derecho a la reparación determina la adopción de


medidas dirigidas a restaurar, indemnizar o compensar los derechos de las colectividades
o comunidades directamente afectadas por violaciones graves a los Derechos Humanos y
al Derecho Internacional Humanitario, incluyendo medidas de carácter simbólico.

1155
Corte IDH Sentencia Caesar vs. Trinidad y Tobago, de 11 de marzo de 2005, párrafo 125
1156
Comisión Interamericana de Derechos Humanos “Informe sobre el proceso de desmovilización en Colombia”, proferido
el 13 de diciembre de 2004.
1157
PINEDA, Hugo, Atención psicojurídica a víctimas: experiencia de Organizaciones No Gubernamentales en la Ley 975 de
2005, Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales, Universidad Nacional de Colombia, Sede Bogotá, Tesis de Maestría
en Derecho, énfasis investigativo, 2012, disponible en: http://www.sinab.unal.edu.co/?q=node/11.
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1250. Medidas de satisfacción: la Comisión Interamericana de Derechos Humanos ha


expresado que “las garantías generales de satisfacción requieren de medidas tendientes a
remediar el agravio padecido por la víctima”1158. Son medidas de satisfacción entre otras
las siguientes: (i) medidas eficaces para conseguir la cesación de las violaciones
continuadas; (ii) la verificación de los hechos y la revelación pública y completa de la
verdad, en la medida en que esa revelación no provoque más daños o amenace la
seguridad y los intereses de la víctima, de sus familiares, de los testigos o de personas
que han intervenido para ayudar a la víctima o impedir que se produzcan nuevas
violaciones; (iii) la búsqueda de las personas desaparecidas, de las identidades de los
niños secuestrados y de los cadáveres de las personas asesinadas, y la ayuda para
recuperarlos, identificarlos y volver a inhumarlos según el deseo explícito o presunto de la
víctima o las prácticas culturales de su familia y comunidad; (iv) una declaración oficial o
decisión judicial que restablezca la dignidad, la reputación y los derechos de la víctima y
de las personas estrechamente vinculadas a ella; (v) una disculpa pública que incluya el
reconocimiento de los hechos y la aceptación de responsabilidades; (vi) la aplicación de
sanciones judiciales o administrativas a los responsables de las violaciones; (vii)
conmemoraciones y homenajes a las víctimas; (viii) la inclusión de una exposición precisa
de las violaciones ocurridas en la enseñanza de las normas internacionales de derechos
humanos y del derecho internacional humanitario, así como en el material didáctico a
todos los niveles.

1251. Tal como señaló la Corte Interamericana de Derechos Humanos, el daño inmaterial
puede ser compensado “mediante la realización de actos u obras de alcance o repercusión
públicos, tales como la transmisión de un mensaje de reprobación oficial a las violaciones
de los derechos humanos de que se trata y de compromiso con los esfuerzos tendientes a
que no vuelvan a ocurrir y que tengan como efecto, entre otros, el reconocimiento de la
dignidad de la víctima”1159.

1252. Garantías de no repetición: estas medidas se dirigen, principalmente, a la


prevención de nuevas violaciones a los derechos humanos1160. Constituyen garantías de
no repetición, entre otras, las siguientes: (i) los grupos armados organizados al margen
de la ley serán desmovilizados y desmantelados. Se deberán investigar a fondo y
reconstituir su organigrama, identificando a los ejecutores, a fin de poner de manifiesto,
llegado el caso, su función en la Administración, en particular en el ejército y en la policía,

1158
Comisión Interamericana de Derechos Humanos “Informe sobre el proceso de desmovilización en Colombia”, proferido
el 13 de diciembre de 2004.
1159
CIDH, Sentencia Caesar vs. Trinidad y Tobago, de 11 de marzo de 2005, párrafo 125
1160
Sentencia C 370 de 2006, numeral 7.7.3.3.
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y además determinando las conexiones ocultas que hayan mantenido con sus
mandatarios activos o pasivos, en particular los pertenecientes a los servicios de
información y de seguridad o, en su caso, a grupos de presión. Las informaciones
obtenidas por este conducto se harán públicas; (ii) los niños que hayan sido reclutados o
utilizados en las hostilidades serán desmovilizados o separados del servicio. Cuando
proceda, los Estados prestarán a esos niños toda la asistencia apropiada para su
recuperación física y psicológica y su integración social; (iii) el ejercicio de un control
efectivo de las autoridades civiles sobre las fuerzas armadas y de seguridad; (iv) la
garantía de que todos los procedimientos civiles y militares se ajustan a las normas
internacionales relativas a las garantías procesales, la equidad y la imparcialidad; (v) el
fortalecimiento de la independencia del poder judicial; (vi) la protección de los
profesionales del derecho, la salud y la asistencia sanitaria, la información y otros sectores
conexos, así como de los defensores de los derechos humanos; (vii) la educación, de
modo prioritario y permanente, de todos los sectores de la sociedad respecto de los
derechos humanos y del derecho internacional humanitario y la capacitación en esta
materia de los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley, así como de las fuerzas
armadas y de seguridad; (viii) la promoción de la observancia de los códigos de conducta
y de las normas éticas, en particular las normas internacionales, por los funcionarios
públicos, inclusive el personal de las fuerzas de seguridad, los establecimientos
penitenciarios, los medios de información, la salud, la psicología, los servicios sociales y
las fuerzas armadas, además del personal de empresas comerciales; (ix) la promoción de
mecanismos destinados a prevenir y vigilar los conflictos sociales; (x) la revisión y reforma
de las leyes que contribuyan a las violaciones manifiestas de las normas internacionales
de derechos humanos y a las violaciones graves del derecho humanitario o las permitan.

1253. En conclusión, para la Sala, el derecho a la reparación es aquel que tienen las
víctimas para buscar la restitución o el restablecimiento de sus derechos, a través de
medidas como la compensación o las medidas de satisfacción, entre otras. Implica el
deber del Estado de reparar, el cual debe abarcar y contener todos los daños y perjuicios
sufridos por la víctima. Este derecho tiene una dimensión individual y una colectiva, y en
ese sentido la reparación debe ser adecuada, efectiva, rápida y proporcional a la
gravedad de las violaciones y al daño sufrido. Además debe ser integral, es decir, reparar
el daño material e inmaterial1161.

1161
CIDH, Sentencia Caesar vs. Trinidad y Tobago, de 11 de marzo de 2005, párrafo 125
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1254. Una vez revisado el marco general en torno a los derechos de las víctimas y
especialmente lo concerniente a la reparación integral, la Sala no encuentra fundamento
para declarar la inconstitucionalidad de las normas demandadas, es decir el art. 23 y 25
de la Ley 1592 de 2012, por el contrario reafirma su posición en torno a la necesidad de
concretar a través de sus decisiones judiciales el Sistema Nacional de Atención y
Reparación a Víctimas (SNARIV), para que se otorguen los beneficios correspondientes a
través de éste a las víctimas del proceso de Justicia y Paz. Una vez establecido esto, la
Sala revisará lo concerniente a las solicitudes elevadas por las representantes de las
víctimas en el incidente de identificación de las afectaciones del presente caso.

De la reparación integral de los afectados en el presente caso1162

1255. Según la Ley 1592 de 2012 (art. 23), el contenido de la versión de la víctima se
incorporará a la decisión que falla el incidente, junto con la identificación de las
afectaciones causadas a la víctima. Por considerarlo imprescindible para dimensionar el
daño causado por el accionar del Bloque Bananero en la región de Urabá, además para
que las entidades del SNARIV puedan releer las condiciones y situaciones en las cuales se
encuentran algunas de las víctimas de los paramilitares que estuvieron al mando de
HÉBERT VELOZA GARCÍA alias “HH”, a fin de que promuevan planes y programas de tipo
individual y colectivo que busquen la reparación integral de las víctimas, a continuación se
expondrán algunos testimonios presentados en las sesiones de audiencia de identificación
de las afectaciones realizadas en el municipio de Apartadó y en la ciudad de Bogotá:

 Enilda Luz Jiménez Pineda1163

“Buenos días y muchas gracias a todos los presentes. El señor Magistrado les ha dicho mi
nombre… Enilda Luz Jiménez Pineda, soy hija del señor S.A.J.P., asesinado por el señor
H.H. Yo empecé este proceso de Justicia y Paz desde el año 2006 con la doctora Nubia
Estela, aquí presente, y todo el equipo de Justicia y Paz. Para nosotros ha sido un proceso
muy largo, muy duro, muy pesado… nos ha costado muchísimo trabajo pasar por este
proceso. Nosotros somos una familia de 20 hermanos muy grande, una familia extensa y
perdimos a mi papá… y también las tierras… aunque el señor “HH” ha dicho que él no
estuvo en ese proceso. El señor Hasbún es quien ha estado o quien todavía está en este
proceso con nosotros de restitución de tierras.

Ni el proceso de restitución de tierras, ni el proceso de reparación ha sido un proceso…


además del cansancio tan impresionante y el sufrimiento que nos ha generado, no nos ha

1162
Por parte de la Defensoría del Pueblo, como representantes judiciales de las víctimas, acudieron las doctoras Elvira
Hernández Sánchez, Lucila Torres de Arango, Ruby Stella Castaño Sánchez y Claudia Liliana Guzmán Sánchez, quienes
durante la audiencia de incidente de identificación de las afectaciones causadas a las víctimas presentaron las siguientes
peticiones comunes para cada uno de ellos.
1163
Sesión de audiencia de incidente de identificación de afectaciones, realizada en la ciudad de Bogotá, el
25 de abril de 2013, record: 01:07:35.

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traído algo mínimo ni de justicia ni de verdad y tampoco de reparación, porque quiero


recordarle aquí al señor Juez, y eso es un asunto por el cual vamos a presentar esta
solicitud de nulidad legal de este proceso, porque tiene que ver con una cosa muy
importante para nosotros… y es que durante todos estos años han pasado tres
modificaciones de este proceso desde que pasó la Ley de Justicia Paz… luego pasó la Ley
1592… Pa que nos mandaran para la 1448 y han venido haciendo un montón de
transformaciones que al final uno siente que están resolviendo problemas administrativos,
problemas financieros, problemas operativos, problemas de resultado del Estado…

Pero yo nunca he sentido que estén interesados en resolver problemas de las víctimas, o
por lo menos no he recibido ningún tipo de respuesta en ese sentido… cuando mi papá
murió lo que se hizo en el aspecto administrativo de indemnización, que en ese tiempo se
hacía en Justicia y Paz, fue asignarnos 20 millones de pesos de los cuales 10 millones se le
entregaron a mi mamá, no quisieron reconocer la segunda compañera de mi papá porque
somos una familia extensa, que reconoce su condición de familia extensa entonces solo le
dieron a la compañera principal de mi papá que era mi mamá, mi mamá se murió en el
proceso de reclamación, los 10 millones nunca llegaron siguen estando atrapados por allá
en la burocracia de la Ley de Justicia y Paz pero adicionalmente a los 20 hermanos nos
tocaron 500 mil pesos de reparación administrativa eso es absolutamente grosero y
absolutamente atropellador para la gente, a mi no me pueden decir que la reparación
administrativa de la muerte de mi papá significa que yo reciba 500 mil pesos en el Banco
Agrario un día que me toco ir hacer una cola de un día entero en Acción Social en Medellín
para que me dieran 500 mil pesos…

Nosotros hemos tenido toda la voluntad del mundo de usar las vías institucionales, yo
trabajo en el mundo humanitario ayudo a personas desplazadas en este país desde que
tengo 18 años y trabajo en un organismo que protege las víctimas de este país… para mí
la tarea más dura de mi trabajo y de mi profesión no ha sido proteger a los desplazados
que hay en Puerto Colombia… ha sido convencer a mi familia que vive en Apartadó en
medio de la guerra de que hay que creer en el Estado de que hay que esperar a que la
justicia funcione a que las leyes lleguen a que las instituciones respondan… porque saben
que pasa en Apartadó, en un lugar como Urabá en donde ha gobernado todo el mundo
menos el Estado… en donde finalmente allá todos los tiranos han podido gobernar excepto
el Gobierno…

Convencer a la gente de que crea en el Estado es la cosa más titánica del mundo en donde
hemos aprendido estando debajo de guerra y guerra a que la ley se toma por mano
propia, a nosotros nos ha tocado aguantarnos durante todos estos años de este proceso…
el señor “HH” nos conoce mucho, él nos ha visto hasta el cansancio, pero durante todo
este proceso nos ha tocado precisamente estar en esta situación… sobre todo para mí ha
sido muy compleja, pues me ha tocado convencer a mis hermanos de que hay que creer
en las instituciones, de que las leyes son posibles, de que hay que insistir y hemos tenido
muchísima paciencia…

Pero la verdad es que hoy después de todos los subes y bajas, de todos los cambios… que
sí, que no, que ya no la ley 975, que ya no hay reparación administrativa, que ya no hay
incidente de reparación… entonces es un asunto para mí y para todos en mi familia y creo
que para todas la victimas en Colombia muy lamentable muy triste… es una sensación de
atropello, de revictimización…

Esto que la ley dice que no se puede hacer que no debemos tener hechos que nos
revictimicen, pues eso nunca se cumple porque al final yo me acuerdo estando sentada en
las audiencias, delante de las audiencias de H.H. y las audiencias con Hasbún, era una
cosa aterradora porque lo primero que uno sentía cuando asistía a las audiencias era que
era una ley que servía para resolver los problemas judiciales y penales de los señores
victimarios, era una ley muy particular, yo decía pero cómo es posible… Hasbún tuvo el
descaro de amenazarnos en una audiencia… de decir que él iba a volver a Urabá… que él
era un gran líder…

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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

En fin han pasado cosas que son completamente absurdas, en un proceso que se supone
tiene que poner en el centro de la discusión a las victimas entonces… haciendo, retrayendo
aquí esos elementos contándole a usted lo difícil… lo inaceptable… lo inapropiado…

Esto no tiene ningún alcance en términos de satisfacción para mí como víctima, ni para mi
familia, ni para una región como en la que yo crecí… esto definitivamente lo que hace es
ahondar en el sufrimiento, en las heridas y en las ganas de que las personas sigan
desestimando el papel de las instituciones y del Estado… esto implica que la gente siga
pensando que el Estado es el enemigo, que no sirve, que no ayuda, que nunca llega, y es
una cosa catastrófica porque puede ser que sea mi caso en particular y que no pase
nada… pero que en un país como el que estamos intentando construir se mantenga una
situación que deje en la gente la sensación de mayor no credibilidad en el Estado es un
hecho completamente catastrófico, completamente doloroso desde el punto de vista de los
ciudadanos que intentamos y que queremos creer que el Estado algún día en serio…. en
serio de que somos sujetos de derechos… de que fuimos completamente atropellados y de
que debe reparar el daño que produjo su falta de gobierno, su falta de papel, en una
sociedad como la que yo tuve que crecer, entonces señor Magistrado yo invoco su papel
como custodio de la ley, de la justicia en este país a una cosa en particular, nosotros
vamos a pedir la nulidad de este proceso por varias razones, pero sobre todo quisiera que
esta sensación de frustración de repetición de la victimización de todo lo que le acabo de
decir pueda resolverse de una manera distinta…

Pase lo que pase, así sea que definitivamente usted decida que simplemente nos reconoce
y nos manda para allá, para la Unidad de Victimas… para que nos den lo que ellos
consideren… porque además eso tampoco está claro…

Quiero que sepa que a mi familia la han llamado ahora las personas que hacen la
caracterización, usted sabe que ahorita la unidad de victimas tiene un sistema de personas
que lo llama a usted y le hacen una caracterización… construyen su perfil, le preguntan
hasta de que se va a morir, y entre otras cosas cuando uno pregunta bueno y entonces
que va a pasar con la reparación mire estamos pendientes de que nos digan si finalmente
nos van a reparar o no, en este nuevo marco de la 1448, que parece ser que nos va a
reconocer como individuos y que va a tener un reconocimiento mejor, que se va
obviamente a complementar por los quinientos mil pesitos que nos dieron el otro día…. y la
gente nos dice ah… no…, a usted como ya la repararon en ese aspecto de Justicia y Paz…
a usted yo la estoy llamando únicamente por la parte psicológica, además está la parte
simbólica y todos esos otros elementos… pero usted dese por atendida, con lo que ya le
entregaron a su familia…

Le voy a decir una cosa señor Juez, señor Magistrado, eso no puede ser cierto,
sinceramente yo quisiera que usted entendiera lo que le estoy diciendo y que de aquí no
solamente salga una orden para la Unidad de Victima… que la Unidad diga… venga
páseme a estas víctimas de “HH” por Justicia y Paz… yo quisiera que también haya un
elemento de valoración y de justicia sobre ese asunto de la reparación… porque antes
teníamos, antes la ley decía que teníamos que tener un incidente de reparación… que
había un peritaje del daño, que teníamos que valorar lo que había pasado y lo que nos
habían dañado, lo que nos habían quitado, nosotros quedamos hace 16 años sin papá, sin
tierras, sin bienes y hemos tenido que hacernos solos y tratar de creer en el Estado…

El asunto aquí finalmente es que usted no solamente nos dé traslado, a la Unidad de


Víctimas… Es que usted también establezca para la Unidad de Víctimas el trato que le debe
dar no solamente a nosotros porque estamos aquí en este proceso de Justicia y Paz, sino a
las víctimas en general… no puede salir ahorita en dos mes, en tres meses, en medio año
la Unidad de Víctimas diciendo… oiga no mire lo que pasa es que el Ministerio de Hacienda
dice que no hay platica y eso va a quedar así, y eso va a quedar como asa… hay que
aclarar si van a reparar por el núcleo familiar o van a reparar por individuo, debe haber un
estándar mínimo… y lo mas garantista posible y estamos diciendo…

Mire yo estoy completamente convencida de que podemos acordar un marco de reparación


como lo que venía diciendo la Ley 1448 en este país, para la reparación y poner unos
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

topes individuales… hagan que la gente reciba entonces los 40 Salarios Mínimos por cada
persona que es víctima directa… ¿estamos de acuerdo? Listo, entonces no vamos a decirle
al Estado que lo voy a desangrar financieramente… yo puedo comprender eso, yo lo puedo
comprender como víctima, pero lo que yo no puedo comprender es esta manera tan
irrespetuosa de tratarnos…

Yo el otro día que escuchaba lo que pasó en Apartadó cuando el señor “HH” hablaba y
decía… aquí están los bienes vea… yo si entregue unos bienes… el Estado tiene que saber
que aquí hay unos bienes, a veces le da a uno una la impresión cuando mi hermana estaba
en este debate en Apartadó, decía oiga parecía más interesado “HH” en que le llegue algo
a las víctimas que el mismo Gobierno, y que el mismo Estado colombiano, eso es terrible,
eso es lamentable, eso duele mucho… eso hiere, eso es como si su papá a usted no lo
reconoce, lo desprecia, y no solamente lo desprecia, lo pisotea, eso daña a los seres
humanos más de lo que ya nos dañó la guerra, más de los que ya nos dañó esta situación
de ser víctimas de este conflicto, entonces yo quisiera presentar esta situación de nulidad
para este proceso… sobre todo porque igual no tenemos nada, mire igual en términos de
lo que venimos a buscar a este proceso yo no me llevo nada cierto, yo no me estoy
llevando la verdad porque no hemos podido esclarecer los hechos de quien mató a mi
papá y porque tampoco me llevo justicia… porque yo no he sentido es decir, yo entiendo
muy bien que a los victimarios se les condonen sus penas porque a las víctimas se nos
repara, pero que un victimario se le negocie todas sus penas pero a las victimas lo que
hacemos es seguir llevando del arrume pues eso a mí no me parece sensato, yo no lo veo
desde ningún punto de vista cercano a la justicia,

Entonces para mí si es muy importante ya que no hay nada aquí cierto, ya que yo me
siento completamente asaltada en mi buena fe creyendo en el Estado y que yo no siento
ninguna satisfacción en este proceso ni lo que trajo la Ley de Justicia y Paz, ni lo que trajo
ahora esta negociación entre la ley 1295 y la 1448… yo lo que siento es que esto es un
enredo todo el tiempo que nadie quiere dar un paso delante de en serio garantizar que la
gente sienta satisfacción en su reparación, pues ¿pa’ qué? cierto, ¿pa’ qué?

1164
 Ángela Salazar

“Buenas tardes a todos y a todas, mi nombre es Ángela Salazar, hay una inquietud muy
grande desde las víctimas y es que todavía hay muchas formas de reparar, una de ellas es
la atención psicosocial, pero no se ha iniciado, nosotras las defensoras de derechos
humanos, hemos asumido esa parte pero todos sabemos que todavía falta, y hemos
insistido en que en Urabá es necesaria una unidad de psicología, porque las afectaciones
desde la parte sicológica son muchas y vemos mujeres, hombres pero sobretodo los
jóvenes y las mujeres que sus afectaciones son muy profundas y no hay como hacerles el
seguimiento de la atención psicosocial, el personal que tienen las instituciones es muy
poco para la magnitud de la problemática.

Otra situación es en el tema de reparación, la 975 con todos los defectos que tenga ha
sido sumamente importante en el tema de verdad, a veces se nos dice no… es que esos
tipos que están allá están hablando más de la cuenta entonces es mentira porque les dan
unos beneficios, pero la victima cuando escucha a los versionados y ata cabos dice, si es
verdad, si, lo que él está diciendo ocurrió, a mí no me ocurrió pero le ocurrió a fulana de
tal y le ocurrió a… esta es una de las grandes ventajas que tiene la 975…

Con esta reforma como fue con la 975 no se tuvo en cuenta la voz de las víctimas, que
querían decir las victimas frente a la construcción colectiva de la nueva reforma a la 975 y
era sumamente importante porque somos las directamente afectadas, el compañero que
me precedió dijo… el Estado tiene mucho de culpa en el conflicto armado que hemos
vivido, por primera vez las victimas nos hacemos visibles, empezamos a hablar… pero hay
una cosa sumamente importante, no queremos callarnos, más queremos seguir diciendo lo

1164
Sesión de audiencia de incidente de identificación de afectaciones, realizda en el municipio de Apartadó,
el 13 de marzo de 2013, record: 01:21:50.
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HÉBERT VELOZA GARCÍA

que nos pasó, como lo vivimos, que es lo que sentimos y que seguimos sintiendo, y es
sumamente difícil para la victima porque todavía estamos en el conflicto armado, que ha
bajado la intensidad, sí, pero todavía vivimos en conflicto armado.

En Urabá estamos viviendo en este momento el tema de reclutamiento forzado a menores


y se hace invisible ese fenómeno, porque en ninguna de las estadísticas aparece, pero
nosotros los del común, los de andar a pie… que lo vivimos… que los sentimos… que lo
vemos, lo denunciamos.

El magistrado nos dice que él viene a hacer un acto para el tema de reparación a las
víctimas, que se han reconocido, y que ya se le está haciendo imputación de cargos
parcial, y que son también muchos los otros casos, es sumamente importante este
momento histórico que vivimos, no solamente en Urabá sino en Colombia, es sumamente
importante porque el conflicto ha sido tantos años, tantas décadas y por primera vez se
hace un acto de estos, y hay que fortalecer el tema de la reparación?

Sí, que hay que exigir una reparación verdaderamente integral? Sí, que hay que exigir que
no solamente es dinero, hay víctimas que solamente quieren el tema judicial, hay víctimas
que quieren solamente el tema de verdad, pero que el dinero es necesario? Si. Que el
tema de vivienda, no solamente es vivienda, porque como decía la compañera la vivienda
que se está dando en este momento falta mucho a la verdad de vivienda digna, y que ese
componente de vivienda tiene que estar acompañado de muchas otras cosas, es como
reconstruir el tejido social de esa familia, y que la reparación debe ser para el núcleo
familiar, no para la persona solamente mujer e hijos, yo estoy de acuerdo con la
compañera que dice, y la mamá ¿qué? Cierto

Es el núcleo familiar, y que esa reparación debe ser con enfoque diferencial, ese enfoque
diferencial debe estar basado en: lo étnico, lo generacional, género, pero también lo
territorial y la condición social, no es lo mismo una persona que tenía unas condiciones de
vida de estrato 4 al que la tenia de estrato 1, no es lo mismo, y no es lo mismo la persona
que vive en el campo a la persona que vive en la zona urbana, pero tampoco es lo mismo
una persona que es un indígena a un mestizo, el campesino no es lo mismo que el que
vive en la ciudad, entonces debe ser ese enfoque diferencial, y nosotras estamos diciendo
que desde el momento de la atención, desde el momento que yo llego por primera a vez a
documentar mi caso queremos que estemos acompañados por una psicóloga o psicólogo,
porque es sumamente importante que en el momento de volver a vivir, a contar, a
redactar nuestro caso las afectaciones afloran, y no tenemos ese acompañamiento porque
la Defensoría del Pueblo aquí en Apartado que es regional no tiene sino una sola psicóloga,
entonces no podemos culpar al funcionario sino al sistema, porque nosotros decimos que si
el sistema está bien planeado, bien organizado, el funcionario o el servidor público trabaja
o trabaja y se le ve el impacto del trabajo, entonces es el sistema…

Ya para acabar, es sumamente importante en el tema de la verdad histórica, nosotras


decimos que ya se ha hablado del conflicto desde la academia y desde ciertos sectores de
poder, falta la verdad de nosotras, como lo vivimos, como lo sentimos, que nos pasó, y se
ha visto también últimamente la verdad de los versionados, de los victimarios, falta la de
nosotras las víctimas, y es sumamente importante buscar estrategias de atención para
niños, niñas, jóvenes porque estamos viendo las afectaciones y las secuelas son las
pandillas, qué hacer con nuestros hijos jóvenes que están en las pandillas y los
adolescentes, que hacer por parte del Estado en esta población, como se va a vivir esa
elaboración de duelos de los niños y las niñas que en su momento eran, pero que ahora
son jóvenes, no se está trabajando lo suficiente con ellos, y el Estado no le está dando
oportunidades al joven ni a la joven para trabajar productivamente ese espacio de tiempo
libre, entonces es sumamente importante trabajar este tema y que la deserción escolar nos
hemos preguntado cuales son las causas, pero también cuales son las consecuencias.
Muchas gracias.”

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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

1165
 Luis Eduardo Naranjo :

“Bueno, muy buenas tardes, señores magistrados, abogados, señor procurador, demás
víctimas, mi nombre es Luís Eduardo Naranjo, soy trabajador actualmente en una finca…
soy víctima de la masacre de “El Golazo”, según pues las investigaciones se dice que el
autor de este hecho fue el señor “HH”, esa masacre fue el 3 de Abril de 1996, en la cual fui
víctima, perdí una vista, quede con secuelas muy graves en las fosas nasales, una bala me
quebró el maxilar derecho, soy padre de 6 hijos, en ese entonces era dirigente sindical,
tenía un buen salario, devengaba un buen sueldo, mi expectativa era darle una buena
educación a mis hijos, darle una mejor oportunidades a mi esposa, ya hace 17 años no los
puedo consolar, esos buenos proyectos, esas buenas iniciativas, porque este hecho cambio
la historia de mi vida y la de mi familia; me desplace para Montería, allá me afilie a la red
de Solidaridad Social, dicha entidad me ayudo, me dio una ayuda humanitaria a través del
Estado de 5´900.000, hoy en día Acción Social por vía administrativa me negó ese
derecho; pero actualmente vemos la ley 1295, me dice que ya económicamente no me
puede reparar, únicamente en la afectación de ayuda psicológica si lo necesito y si lo
necesita mi familia, yo pregunto y hoy en día trabajo en finca y estoy limitado a hacer
ciertas labores porque sufro de presión arterial, soy diabético y con una discapacidad de
una vista estoy limitado a hacer ciertas labores, mi salario son de $250.000 pesos
quincenal y 500 mensual… dígame usted si por esa desmejoración, económica, física y
social, tendré derecho a más… o tendré derecho a lo que hoy en día la ley de justicia y paz
dice, que no tengo derecho a una reparación, que los 5´900.000 que me dieron con eso
debo estar tranquilo y estar mi familia en paz; yo pienso que no señor Magistrado, pienso
que a través de usted y de las entidades que en día velan por nuestros derechos, pienso
que debe ser una versión más útil y más eficaz para aquellas victimas que como en el caso
mío, tengamos una esperanza mejor para nuestras familias. Gracias.”

 María Elubina Jiménez1166 :

“Buenas tardes, mi nombre es María Elubina Jiménez, yo quiero hacerle una petición
formal pues a todas las personas que están encargadas de ésta nueva ley que salió a
reemplazar la anterior donde trabajaba, pues donde actuaba Acción Social, nosotros somos
19 hermanos, a nosotros nos repararon hace 2 años y medio, 20 millones de pesos, 10 le
correspondían a mi mama, $564.000 pesos a cada uno de nosotros, de los 10 millones que
les correspondían a mi mama, ella, a raíz de todo ese sufrimiento, estaba en ese momento
terminal de cáncer, ella falleció y hasta el momento por procesos legales aún no han sido
asignados; yo le hago una pregunta a las entidades que hoy nos quieren ayudar, que dicen
que van a venir a repararnos, que nos van a ayudar, será que es posible nosotros como
familia poder hacer un proyecto de vida productivo con $564.000 pesos? Yo no les estoy
diciendo que el Gobierno tiene que venir acá a decir que nos va a dar infinidades de cosas,
pero me parece que ahora con este nuevo cambio de ley ni siquiera uniendo todos
nuestros beneficios podríamos haber hecho algo, mis hermanos todos como hemos podido
hemos estudiado, pero no poseemos pues una vivienda y a veces porque de pronto
tenemos un salario o estamos en una EPS, pues por todas esas condiciones que por luchas
propias se han conseguido, dicen, no aplica para el beneficio de un subsidio, a mí me
gustaría que replantearan esa ley, porque quizás la esperanza no es el dinero como tal, es
decir, no es que necesitamos 100 millones de pesos o tanto, pero sí que al momento de
asignar un beneficio económico o ayuda o restitución, pues seamos coherentes con que si
funcione, mire el Gobierno se está ganando un montón de sensaciones como de repudio
porque nuestra situación a veces parece que fuéramos personas que no importáramos, o
sea, si yo le digo a cualquiera de las personas que hoy nos defiende, usted que haría con
$564.000 pesos, o con 10 millones, no sé, que proyecto de vida puede usted tratar de
montar con eso, pues, una cosa real, que podamos ser las personas que seguro queríamos
si esta situación no nos hubiera arrastrado, nos hubiera dañado, es decir, seamos
coherentes, somos gente buena, porque hemos sufrido las inclemencias de la violencia en

1165
Sesión de audiencia de incidente de identificación de afectaciones, realizada en el municipio de
Apartadó, el 13 de marzo de 2013, record: 01:29:33.
1166
Sesión de audiencia de incidente de identificación de afectaciones, realizada en el municipio de
Apartadó, el 13 de marzo de 2013, record: 02:12:07.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

tantas formas y aun creemos en el Estado, aun no somos delincuentes, quizás muchos nos
han dicho, venga, acá puede hacer dinero fácil, pero nosotros tenemos a Dios y creemos
en este Estado que a veces nos ha defraudado, no quiero decir que Colombia y el Estado
no nos ha funcionado, ellos pueden tener buenas intenciones, pero en la forma, en la
manera como ha aplicado la ley nos ha dejado como personas poco interesantes para
ellos, vea yo quizás tuve la posibilidad de haber estudiado un poco, pero me duele cuando
hago las filas porque igual no, eso no cambia en nada… ver personas que no son capaz de
expresarse, y que si yo doy vueltas, se imagina cuantas vueltas dan ellos?

Entonces es decirle, no sé si son 2 o 3 unidades más de víctimas o como quieran llamarle a


esa oficina, mire la Fiscalía dice que ya hizo la tarea, ténganos en cuenta como personas
que somos, como seres honorables que somos, y respétenos ese derecho a que cuando
solicitamos las cosas y cumplimos las normas que el Gobierno nos pide, la respuesta sea
certera, mi mamá que se murió esperando ver justicia, y como mi mama yo sé que hay
muchos, muchos casos, no esperen a que nosotros nos muramos y sean nuestros hijos las
victimas que ustedes tengan que radicar sus nombres, yo les agradezco esta intención que
es valedera, que es rescatable y que es buena, y les sugiero que si las personas que hoy
están en esas entidades no tienen el sentido de pertenencia que deben tener,
replantéenlo, no queriendo decir que tienen que ir a acabar con entidades, pero sí que
miren que somos seres humanos con necesidades infinitas, de que nos miren con dignidad,
nosotros no fuimos los victimarios, fuimos las víctimas. Muchas gracias.”
1167
 Ángela María Álvarez Correa :

“Buenas tardes, mi nombre es Ángela maría Álvarez Correa, compañera de L.F.P.C., fue
fallecido el 12 de agosto de 1995 en la discoteca “El Aracatazo”, en el “Barrio Alto” de
Chigorodo… El día 12 de agosto a las 10 de la noche, en esa discoteca “El Aracatazo”, una
discoteca que era de pobres, era hecha de zinc, de ladrillo y tenía pues carpado de tabla,
estaba ubicado en el barrio “El Bosque”, una invasión de 30 cuadras donde habitaban 700
familias, en su mayoría emigrantes de Córdoba, Choco y el interior de Antioquia, llegaron
15 hombres armados, iban pidiendo papeles, y a los que estaban por ahí cerca del sector
del Aracatazo, ellos estaban armados y les ordenaban irse a sus casas decían testigos de
este sector…

Dentro del negocio se escuchaba música a todo volumen, este grupo armado entro a este
bailadero y por un momento sonaron los disparos… los atacantes eran hombres de las
autodefensas, del Bloque de María, eso estaba planeado, estaba planeado, ni siquiera
había impactos en las paredes, o sea que sabían a quienes iban a asesinar, les hicieron
poner en el piso, les dispararon y otros que salieron vivos los esperaron afuera y los
asesinaron en la vecindad, este fue un caso en el que la población civil resulto afectada
directamente por el conflicto armado… esa una era una de las zonas donde se habían
polarizado, no quiero hacer sentir mal a las compañeras, ellas también son víctimas del
Aracatazo, ellas no quieren que siga relatando este hecho, para nosotras ha sido muy
duro, relatar y recordar este hecho, fueron momentos muy difíciles para nosotros haber
sufrido todo este ellas se trasladaron de Chigorodó acá conmigo y pues es muy triste tener
que relatar, cada rato tenemos que estar recordando esto, es muy triste y doloroso para
nosotros porque fue algo que marco nuestras vidas y ha sido muy duro. Muchísimas
gracias.”

1168
 Luis Antonio Cubides Ramírez . (Record: 00:11:15)

 “Muy buenos días para todos aquí en este lugar, muy buenos días señor Hebert Veloza, mi
nombre es Luís Antonio Cubides Ramírez, creo que al señor le debe sonar este apellido,
porque a mi padre siempre lo llamaban por el apellido, Cubides, él era muy nombrado en

1167
Sesión de audiencia de incidente de identificación de afectaciones, realizada en el municipio de
Apartadó, el 13 de marzo de 2013, record: 02:27:05.
1168
Sesión de audiencia de incidente de identificación de afectaciones, realizada en el municipio de
Apartadó, el 14 de marzo de 2013, record: 00:11:15.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

la región de Urabá, era un buen líder político, fue Concejal de la Unión Patriótica, creo que
esto fue lo que lo llevo a la muerte. Mi pregunta para el señor Hebert Veloza es ¿porque
para él todos los que pertenecían a la UP o al partido de la UP, para él eran guerrilleros?
¿Porque a mi padre a según lo mataron porque era guerrillero y solamente el hecho de ser
Concejal de la Unión Patriótica, mi padre, a pesar de que en el diario andábamos juntos
nunca lo vimos reunido con la guerrilla, nunca lo vimos en cosas que no debía de ser,
siempre reunidos con la gente de la Unión Patriótica, de ese partido, de esa política que él
decidió llevar, la cual lo llevo a la muerte, y así como yo sufrí, no tuve derecho a un
estudio porque el señor Hebert Veloza nos quitó esa oportunidad quitándonos a nuestro
padre, así fueron muchas las personas que tuvieron este mismo hecho por quitarles sus
padres, su familia, también no tuvieron acceso a estudio, no tuvieron acceso a los bienes
que teníamos, porque mi tierra, la tierra de mi padre, tuvimos que venderla por una
propiedad que no cubría ni una tercera parte de lo que la nuestra estaba avaluada, y ahora
nos vienen a nosotros con once millones de pesos, sabiendo de que la tierra de mi padre
estaba avaluada en cuarenta y siete millones de pesos, y nos dan por medio de Acción
Social once millones de pesos, y todas las cosas quedan así, el señor Hebert Veloza en
unas fechas del 2005 si no estoy mal fue cometido el caso de mi padre, de L.E.C.V., el
reconoció en una audiencia, y todo esto se hizo realidad y se iba a hacer una
indemnización, la cual por ahora lo que nos dieron fue once millones de pesos, y yo creo,
ninguna suma de dinero por más alta que nos den, nos va a traer a mi padre, no nos lo va
a volver a traer, ni nos va a devolver los sufrimientos que tuvimos, pero si yo, le pido
grandemente a este señor, que se coloque la mano en el corazón, que ponga de parte de
él y con todo este grupo de trabajo que hay, que esta persona se coloque en nuestros
zapatos, se coloque en nuestro lugar, y mire como hubiese sido el si le hubiera pasado
esto, la realidad yo tuve sed de venganza contra él, no sé, él se debe acordar cuando
trabajábamos en una empresa que era de él, llamada Abordansos yo me nacía por
acercármele a él pero llegaba con muchas personas las cuales no permitían que uno se
arrimara a él, de corazón no espere tanto el perdón de los que hemos sido víctimas de
usted, le pido de corazón que le pida el perdón a Jesucristo, que Jesucristo es el único que
puede perdonar, nosotros perdonamos, yo no tengo nada contra usted, a raíz de toda esa
amargura Jesucristo llego a mi corazón y me la quito y no tengo nada contra usted, pero si
quisiera que esta reparación que dicen que nos van a dar no se quede en apenas once
millones de pesos porque eso no cubre nada de lo que nosotros perdimos, no cubre ni aun
el estudio para nuestros hijos, nosotros desde ahí quedamos desamparados, no tenemos
una finca, no tenemos nada, los ganados que mi padre tenía se los llevaron, las bestias
que tenia se las llevaron, la casa nos la quemaron, todo esto porque era orden por el señor
HH. Gracias.”

1169
 Luz Mary Sánchez Mosquera :

“Buenos días, mi nombre es Luz Mary Sánchez Mosquera, hija de una víctima del
Aracatazo, el 12 de agosto de 1995 tenía yo 5 años, estuve presente en el lugar de los
hechos, vi como cada uno de sus trabajadores acribillaban a todos, me dijeron que si no
me iba me daban de baja, palabras que nunca puedo olvidar y gracias a todo eso yo no lo
puedo brindar el amor que mi hijo necesito, y así como no se lo puedo brindar, no me da
felicidad lo que a usted le sucede pero ninguno de sus hijos está creciendo con el amor
que se le puede dar como padre, y todo esto le pasa no solamente porque el destino lo
quiso sino porque es la vida que usted labro para usted, quizás sus hijos lo ven a usted y
no se sentirán orgullosos de la clase de persona que es, yo no le tengo rabia ni tampoco lo
quiero, pero lo único que le puedo decir es, hoy tengo 23 años, no he podido superar la
muerte de mi padre, ninguno de mis hermanos lo han podido hacer, mi mama tiene vejez
prematura, es diabética, hipertensa, y la incapacidad de mi mama no le llego porque ella
quiso sino porque se sintió sola, todo este tiempo, han pasado 18 años y no hemos podido
superar esto, le doy gracias a Dios, he podido salir adelante sin él, en este momento estoy
en la Universidad, estudio atención integral a la primera infancia, simplemente porque en
el momento que yo la necesite el Estado no me la brindo, eran 5 años que tenía cuando

1169
Sesión de audiencia de incidente de identificación de afectaciones, realizada en el municipio de
Apartadó, el 14 de marzo de 2013, record: 01:29:27.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

me vi con un arma en mi cabeza diciendo que si no me iba yo también iba a ser acribillada
igual que las personas que estaba ahí y no le tengo miedo a nadie, y el que quiera acabar
con mi vida que lo haga si lo estoy diciendo, eso a mí no me da miedo, eran 5 años que yo
tenía cuando viví ese momento. Muchas gracias.”

907. En cuanto al daño material, las defensoras solicitaron se fije una reparación
económica tasada en 40 salarios mínimos legales mensuales vigentes, monto máximo
fijado en la Ley 1448 de 2011 para cada uno de los integrantes de los núcleos familiares
que ellas representan.

1256. Al respecto la Sala se ceñirá a los establecido por el artículo 23 de la Ley 1592 de
2012, en el cual se prescribe que la Magistratura no podrá tasar las indemnizaciones a
que haya lugar, por tanto se abstendrá de dictaminar u ordenar montos específicos a
favor de las víctimas reconocidas como afectadas por el accionar del Bloque Bananero y el
postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA.

1257. Sin embargo, entendiendo la necesidad de que las representantes de las víctimas
tengan claridad en torno al punto, ésta Sala se permitirá referirse al contenido de la Ley
1448 de 2011 (en este caso específico al Decreto 4800 de 2011), en la cual se dispone
que será la Unidad Administrativa Especial para la Atención y Reparación Integral a las
Víctimas (UARIV), quien administrará los recursos destinados a la indemnización por vía
administrativa (art. 146), además realizará la estimación del monto de la indemnización
teniendo en cuenta los siguientes criterios: (i) la naturaleza y el impacto del hecho
victimizante, (ii) el daño causado y (iii) el estado de vulnerabilidad actual de la víctima,
desde un enfoque diferencial (art. 148).

1258. En cuanto a la tasación de los montos, el artículo 149 dispuso unos montos
determinados, teniendo en cuenta unas conductas delictivas determinadas:

“1. Por homicidio, desaparición forzada y secuestro, hasta cuarenta (40) salarios mínimos
mensuales legales.
2. Por lesiones que produzcan incapacidad permanente, hasta cuarenta (40) salarios
mínimos mensuales legales.
3. Por lesiones que no causen incapacidad permanente, hasta treinta (30) salarios mínimos
mensuales legales.
4. Por tortura o tratos inhumanos y degradantes, hasta treinta (30) salarios mínimos
mensuales legales.
5. Por delitos contra la libertad e integridad sexual, hasta treinta (30) salarios mínimos
mensuales legales.
6. Por reclutamiento forzado de menores, hasta treinta (30) salarios mínimos mensuales
legales.
7. Por desplazamiento forzado, hasta diecisiete (17) salarios mínimos mensuales legales.”

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1259. Según el decreto referenciado, los montos de indemnización podrán ser otorgados
a todas las víctimas que tengan derecho a esta medida de reparación, los cuales se
reconocerán en salarios mínimos mensuales legales vigentes al momento del pago.
Igualmente dispone la norma que por cada víctima se adelantará sólo un trámite de
indemnización por vía administrativa al cual se acumularán todas las solicitudes
presentadas respecto de la misma.

1260. Según el parágrafo 2º del artículo 149 del Decreto 4800 de 2011, si respecto de
una misma víctima concurre más de una violación de aquellas establecidas en el artículo
3° de la Ley 1448 de 2011, tendrá derecho a que el monto de la indemnización
administrativa se acumule hasta un monto de cuarenta (40) salarios mínimos legales
mensuales. En caso que una persona pueda solicitar indemnización por varias víctimas,
tendrá derecho a la indemnización administrativa por cada una de ellas (parágrafo 3º).

1261. Además, en los casos en los cuales se presenten hechos victimizantes por: (i)
lesiones que produzcan incapacidad permanente, (ii) lesiones que no se causen
incapacidad permanente, (iii) casos de tortura, tratos inhumanos y degradantes, y (iv)
violencia sexual; cuando éstos sean cometidos en personas en las cuales deba tenerse en
cuenta la condición etaria, de género o étnica, el monto de la indemnización podrá ser
hasta de cuarenta (40) salarios mínimos legales mensuales.

1262. En cuanto a la indemnización de los niños, niñas y adolescentes (NNA) reconocidos


y declarados como víctimas en los términos del parágrafo del artículo 181 de la Ley 1448
de 2011, esta será reconocida hasta por treinta (30) salarios mínimos legales mensuales,
por ejemplo en casos en los cuales se presente reclutamiento ilícito de NNA.

1263. Ahora bien, en cuanto a la distribución de la indemnización (art. 150), en caso de


concurrir varias personas con derecho a la indemnización por la muerte o desaparición de
la víctima, de conformidad con el inciso 2° del artículo 3° de la Ley 1448 de 2011, el
monto se distribuirá así:

“1. Una suma equivalente al cincuenta por ciento (50%) del monto estimado de la
indemnización será entregada al cónyuge, compañero o compañera permanente o pareja
del mismo sexo y el otro cincuenta por ciento (50%) se distribuirá entre los hijos

2. A falta de cónyuge, o compañero o compañera permanente o pareja del mismo sexo, el


cincuenta por ciento (50%) del monto estimado de la indemnización será distribuido entre
los hijos, y el otro cincuenta por ciento (50%) entre los padres supérstites.

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3. A falta de hijos, el cincuenta por ciento (50%) del monto estimado de la indemnización
será pagado al o a la cónyuge, o compañero o compañera permanente o pareja del mismo
sexo, y el otro cincuenta por ciento (50%) se distribuirá entre los padres supérstites.

4. En el evento en que falten los padres para los casos mencionados en los numerales 2 y
3 anteriores, el total del monto estimado de la indemnización será entregado al cónyuge, o
compañero o compañera permanente o pareja del mismo sexo o distribuido entre los hijos,
según sea el caso.

5. A falta de cónyuge, o compañero o compañera permanente o pareja del mismo sexo,


hijos y padres, el total del monto estimado de la indemnización será entregado a los
abuelos supérstites.

6. A falta de todos los familiares mencionados en los numerales anteriores, la Unidad


Administrativa Especial para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas reconocerá
una indemnización de manera simbólica y pública.

Parágrafo 1°. Para el pago de la indemnización a los niños, niñas y adolescentes, se estará
a lo dispuesto en el artículo 160 y siguientes del presente decreto.

Parágrafo 2°. En el evento en que la víctima, al momento de su fallecimiento o


desaparición, tuviese una relación conyugal vigente y una relación de convivencia con un o
una compañero o compañera permanente o pareja del mismo sexo, el monto de la
indemnización que les correspondería en calidad de cónyuge, compañero o compañera
permanente o pareja del mismo sexo, se repartirá por partes iguales.”

1264. El artículo 151 del decreto objeto de análisis se refiere al Procedimiento para la
solicitud de indemnización, en tal sentido manifiesta que las personas con vocación
reparadora deberán llenar un formulario, para solicitar la inclusión en el Registro Único de
Víctimas. Sin embargo, cuando se trata de víctimas cuyas afectaciones han sido
reconocidas por la Sala de Justicia y Paz, la Unidad recibirá el expediente, en el cual se ha
identificado a la víctima y su afectación, para ello el Tribunal ha producido una lista en la
cual se incluye el nombre completo, el número de identificación de ciudadanía, el tipo de
víctima -directa o indirecta-, el parentesco o relación con la víctima directa, el hecho
delictivo que causó el daño o la afectación y los documentos aportados para soportar las
afectaciones.

1265. Una vez la UARIV recibe el expediente de Justicia y Paz verificará si las personas
enlistadas ya están inscritas en el Registro Único. Si se encuentran incluidas, la Unidad
constatará si lo fueron por los mismos hechos ilícitos por los cuáles se les reconocieron
afectaciones en el marco de Justicia y Paz y procederá a determinar si hay lugar o no a la
indemnización y deberá reafirmar si tienen vocación para que se les concedan otras
medidas de reparación (de carácter material o inmaterial). Si no están incluidas, la Unidad
de forma automática las registrará e iniciará el proceso para que se les otorguen las
respectivas indemnizaciones y las demás medidas de reparación que les correspondan. La

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Unidad entregará la indemnización administrativa en pagos parciales o en un solo pago


total atendiendo los criterios de vulnerabilidad y priorización.

1266. Para el pago de la indemnización administrativa la UARIV no deberá sujetarse al


orden en que sea formulada la solicitud de entrega, sino que tendrá en cuenta los
criterios contemplados en desarrollo de los principios de progresividad y gradualidad para
una reparación efectiva y eficaz, de conformidad con lo establecido en el artículo 8 del
decreto 4800 de 2011.

1267. Para la Sala resulta importante recordar a las partes que cuando haya niños, niñas
y adolescentes (NNA) reconocidos como víctimas, deberá haber acompañamiento
permanente del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), y que en los demás
casos, habrá un acompañamiento y asesoría por parte del Ministerio Público. En ese
mismo sentido el parágrafo 2° (artículo 151) establece que la UARIV deberá orientar a los
destinatarios de la indemnización sobre la opción de entrega de la indemnización que se
adecue a sus necesidades, teniendo en cuenta el grado de vulnerabilidad de la víctima y
las alternativas de inversión adecuada de los recursos en los términos del artículo 134 de
la Ley 1448 de 2011. La víctima podrá acogerse al programa de acompañamiento para la
inversión adecuada de la indemnización por vía administrativa independientemente del
esquema de pago por el que se decida, sin perjuicio de que se vincule al programa los
demás recursos que perciba por concepto de otras medidas de reparación.

1268. En cuanto a la deducción de los montos pagados con anterioridad, la UARIV


podrá, dependiendo de cada caso, descontar del monto a pagar por concepto de
indemnización por vía administrativa, sólo los montos pagados por el Estado a título de
indemnización y por concepto de condenas judiciales en subsidiariedad por insolvencia,
imposibilidad o falta de recursos de parte del victimario o del grupo armado organizado al
margen de la ley al que este perteneció.

1269. Tal como lo ha manifestado la Corte Constitucional1170: “debe diferenciarse la


reparación de la atención y de la asistencia social, y por tanto, de los diferentes subsidios
-de vivienda, de tierras, etc.- que se le entreguen a la población desplazada atendiendo
dicha asistencia social. De esta manera, el monto de la indemnización administrativa de
que trata el artículo 5º del Decreto 1290 de 2008, en aplicación del régimen de transición
que prevé el artículo 155 del Decreto 4800 de 2011, debe pagarse en forma adicional y

1170
Ver: Sentencia SU-253 de 2013.
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no acumularse o descontarse del subsidio de vivienda previsto por el artículo 5º del


Decreto 1290 de 2008.”

1270. La Sala quiere recordar que el Gobierno Nacional ha expresado clara y


expresamente que en atención a lo consagrado por la Ley 1448 de 2011 y el artículo 149
del Decreto 4800 de 2011, que prescribe el monto para la indemnización vía
administrativa, debe interpretarse haciendo clara diferenciación entre esta indemnización
administrativa, como un componente de reparación integral y la atención y asistencia
social, de manera que el monto de la indemnización es adicional y no descontables de los
subsidios otorgados por el Estado. Lo contrario, esto es, el confundir la atención o
asistencia social con la indemnización administrativa como parte de la reparación integral,
es decir, considerar que las medidas que se enmarcan en la política social del Estado,
destinadas a satisfacer necesidades materiales básicas mínimas de población en situación
de pobreza, exclusión e inequidad, -como los subsidios- pueden tenerse como medidas
de reparación frente a graves violaciones de derechos humanos y DIH como el
desplazamiento forzado, resultaría inadmisible y abiertamente inconstitucional1171.

1271. Adicionalmente, esta Sala considera necesario retomar lo establecido en esta


materia por parte de la Corte Constitucional, en torno a la temática de los descuentos
sobre los montos otorgados por indemnización administrativa, en la cual se manifestó
que:

“En punto a este tema, la Sala debe insistir en que la indemnización por vía administrativa
no es una medida ni exclusiva, ni suficiente, para asegurar el goce efectivo del derecho a
la reparación integral de las víctimas de desplazamiento, sino que constituye tan solo uno
de los mecanismos dirigidos a lograr tal fin. De esta forma, la indemnización por vía
administrativa de que tratan los artículos 132 a 134 de la Ley 1448 de 2011, y los artículos
146 a 162 del Decreto 4800 de 2011, constituye tan solo un componente de la reparación
integral para las víctimas de desplazamiento, cuyo otorgamiento se protegerá en todo caso
mediante esta decisión, sin menoscabo, ni exclusión, de otras medidas de reparación
integral contenidas en la Ley 1448 de 2011.

(…)

“Aclarado lo anterior, la Sala concluye, en primer lugar, que la indemnización


administrativa a pagar a los demandantes dentro de los presentes procesos de tutela que
se revisan, en calidad de víctimas del desplazamiento forzado y aplicando el régimen de
transición previsto por el artículo 155 del Decreto 4800 de 2011, el cual remite a su vez al
artículo 5º del Decreto 1290 de 2011, será de veintisiete (27) salarios mínimos mensuales
legales, suma que se pagará de manera adicional, y no se descontará del subsidio de
vivienda de que trata el mismo artículo 5º del Decreto 1290 de 2011. Esta interpretación
se aplicará con efectos inter comunis para las solicitudes que fueron hechas con base en el
Decreto 1290 de 2011 y a las cuales se les aplique el régimen de transición de que trata el

1171
Ver: Corte Constitucional: Sentencia C-253A-12.
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artículo 155 del Decreto 4800 de 2011, en armonía con el artículo 132 de la Ley 1448 de
2011.

(iv) En segundo lugar, la Corte concluye que las demás solicitudes de indemnización
administrativa, realizadas con posterioridad a la Ley 1448 de 2011, a las cuales se les
aplicará el artículo 132 de la Ley 1448 de 2011 y el artículo 149 del Decreto 4800 de 2011,
deberán igualmente decidirse y pagarse de forma adicional y no descontable de los
subsidios de vivienda y de tierras previstos por el artículo 132 de la Ley 1448 de 2011 y de
los demás mecanismos que prevé dicha normativa relativos a permuta de predios,
adquisición y adjudicación de tierras, adjudicación y titulación de baldíos para población
desplazada. En consecuencia, esta interpretación constitucional es válida también para los
casos de las solicitudes de indemnización administrativa presentadas en el marco de la
nueva normatividad consagrada en la Ley 1448 de 2011 y Decreto 4800 de 2001, de
conformidad con los principios de diferencialidad, con los principios de favorabilidad y
progresividad antes mencionados y de acuerdo con la interpretación que hace el propio
Gobierno respecto de estas normas.

En síntesis, a juicio de la Sala la interpretación que debe realizarse en relación con el


monto de indemnización administrativa como reparación, es que ésta es adicional a los
subsidios que se conceden como asistencia social, de conformidad con los mismos
principios fijados por el artículo 25 de la Ley 1448 de 2011, el artículo 154 del Decreto
4800 de 2011 y de conformidad con la interpretación que ha dado al monto de la
indemnización administrativa el propio Gobierno Nacional, según la cual el monto de
indemnización administrativa no es el mismo ni descontable del subsidio de vivienda para
población desplazada, sino que es un monto adicional y acumulable al mismo.

(…)

(viii) En síntesis, (a) respecto de las solicitudes presentadas con anterioridad a la Ley 1448
de 2011, que fueron negadas y respecto de las cuales se interpuso acción de tutela, se
aplicará el régimen de transición previsto en el artículo 155 del Decreto 4800 de 2011 y
por tanto, el artículo 5º del Decreto 1290 de 2008, casos que quedan cobijados por los
efectos inter comunis de esta sentencia, de conformidad con los criterios señalados
anteriormente; (b) en relación con las solicitudes presentadas con anterioridad a la Ley
1448 de 2011, que todavía no se han resuelto y respecto de las cuales no se interpuso
acción de tutela, se aplicará el régimen de transición y se seguirán los trámites y
procedimientos previstos por el Decreto 4800 de 2011 para determinar el monto de
indemnización administrativa a pagar por parte de la Unidad Administrativa Especial de
Atención y Reparación Integral a las Victimas; y (c) respecto a las solicitudes de
indemnización administrativa y reparación integral que se presenten con posterioridad a la
entrada en vigencia de la Ley 1448 de 2011, tal como lo señala esa normativa, deberán
seguirse los procedimientos allí establecidos, en concordancia con lo estipulado en el
Decreto Reglamentario 4800 de 2011.

En relación con los otros componentes o mecanismos necesarios que hacen parte de la
reparación integral a víctimas de desplazamiento forzado, que contemplan la Ley 1448 y el
Decreto 4800 de 2011 (como restitución, rehabilitación, satisfacción y garantías de no
repetición,) estas medidas deberán garantizarse a las víctimas de desplazamiento forzado,
tanto a las que hayan solicitado la indemnización administrativa en virtud del Decreto 1290
de 2008 -a las cuales se les aplica el régimen de transición- como a las que lo hayan
solicitado una vez entrada en vigencia la Ley 1448 de 2011. ”
(…)

1272. Adicionalmente, la misma Corte Constitucional declaró la constitucionalidad


condicionada del llamado contrato de transacción (art. 132 de la Ley 1448 de 2011), y
dejó en claro que las víctimas que consideren que la reparación (indemnización
administrativa) otorgada no es congruente con los daños o afectaciones causados, podrán

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acudir a instancias judiciales para reclamar el respectivo complemento a fin de recibir


integralidad en las medidas reparadoras (siempre y cuando tenga en cuenta que debe
probar la responsabilidad del Estado). En ese sentido resulta imperioso presentar la
manifestación del Alto Tribunal en la cual se pronunció al respecto (Sentencia C-099 de
2013)1172:

“En esos casos, a pesar de que su reparación puede implicar un esfuerzo fiscal importante,
cuando tales conductas sean imputables al Estado, no sólo no se está en presencia de una
situación imposible de reparar, sino que no hacerlo de manera adecuada pone en riesgo el
propósito de pacificación que inspiró la Ley 1448 de 2011 y contraría los fines mismos que
justifican la justicia transicional. A pesar de que existen formas de reparación simbólica que
contribuyen a restituir y reconocer la dignidad de las víctimas, tales medidas resultan
insuficientes en estos casos, especialmente porque no garantizan adecuadamente la no
repetición de los hechos.

Lo anterior muestra que la utilización del argumento del alto volumen de víctimas a reparar
como justificación para que se acepten montos de reparación inferiores a los ordinarios,
cobija situaciones distintas que no pueden ser tratadas de manera idéntica, ni siquiera en
el contexto de la justicia transicional. Las mismas cifras presentadas por el gobierno,
indican que no en todos los casos cobijados por la Ley 1448 de 2011 en que se esté ante
un daño antijurídico que sea imputable al Estado, se trata de una situación que sea
imposible de reparar, ni en todos los casos, especialmente en aquellos donde las
víctimas han sufrido daños como consecuencia de dos o más violaciones graves
a los derechos humanos o al derecho internacional humanitario, ocasionadas
por acciones u omisiones atroces, atribuibles a agentes del Estado se está ante
una reparación justa. (Negrilla fuera de texto)

En esos casos, especialmente cuando concurren crímenes de lesa humanidad, la


indemnización administrativa máxima ofrecida por la ley resulta manifiestamente
desproporcionada a la luz del daño antijurídico que deberán soportar las víctimas.

Estas dos características de la limitación que impone el aparte demandado del artículo 132
al acceso a la justicia – el estímulo económico que induce a víctimas que se encuentran en
estado de necesidad a firmar el contrato de transacción y la imposibilidad de que las
víctimas que han sufrido los mayores daños como consecuencia de crímenes de lesa
humanidad que sean imputables al Estado y que firmen el contrato de transacción puedan
recibir una indemnización adecuada, complementaria a la recibida como reparación
administrativa – confirman que la afectación de los derechos a la verdad, a la reparación y
a las garantías de no repetición de las víctimas por parte de la norma estudiada es grave, y
solo podría estar justificada ante una finalidad legítima, importante y hasta imperiosa.
Asunto que pasa a examinar la Corte.

6.2.4. En cuanto a las finalidades de la medida, la firma del contrato de transacción está
dirigida, tal como lo señala expresamente esa disposición “a precaver procesos judiciales o
terminar un litigio pendiente,” en aquellos eventos en los que la víctima acepta que ha
recibido la indemnización administrativa por todos los hechos de victimización que se le
deban reconocer. También es finalidad de esta medida de reparación administrativa y
firma del contrato de transacción “lograr la reconciliación nacional y la paz duradera y
sostenible, a la luz de lo que establece el artículo 8 de la Ley 1448 de 2011. Estos dos fines
son legítimos e importantes, según lo que establecen los artículos 1, 2, 29, 45, 116 y 129
de la Carta.

Pero, también señala la ley, que esta medida está orientada a evitar que el Estado pague
por concepto de reparación por hechos atribuibles a sus agentes, sumas adicionales a las

1172
Ver: Corte Constitucional, Sentencia C- 09 de 2013.
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que haya reconocido como reparación administrativa, tal como lo confirma el texto del
artículo 133 de la misma ley, que solo prevé la posibilidad de descontar lo pagado, en el
evento en que la víctima no haya aceptado el contrato de transacción.

Si bien esa medida, en principio no sería contraria al artículo 90 de la Constitución, como


quiera que cuando las víctimas no celebren el contrato de transacción, pueden acudir a la
acción de reparación directa1173 para buscar formas de reparación, en el caso de los daños
causados por crímenes de lesa humanidad, tales como tortura, genocidio, desaparición
forzada, ejecuciones extrajudiciales, y violaciones, o cuando concurran en una misma
víctima varios de estos hechos y sean atribuibles a agentes del Estado, el cerrar toda
posibilidad de reparación pecuniaria adicional, por el simple hecho de haber suscrito el
contrato de transacción, resulta contrario al derecho de las víctimas a ser reparadas
integralmente, pues por esta vía se les impondría el deber de soportar un daño antijurídico
exorbitante que resulta desproporcionado a la luz de lo que establece el artículo 90 de la
Constitución.

En circunstancias tan graves como las señaladas, 1174 dada la atrocidad de las conductas,
sería grave que el Estado pudiera exonerarse de su responsabilidad frente a daños
exorbitantes causados por crímenes de lesa humanidad,1175 o cuando concurran en una
misma víctima varios de estos hechos y los mismos sean atribuibles a agentes del Estado,
la finalidad de precaver litigios futuros se torna en una fuente de impunidad, que está
prohibida a la luz de lo que establecen los artículos 1, 2, 29, 45, 90, 116 y 129 de la Carta,
y que es además contradictoria con las finalidades y principios que inspiraron la Ley 1448
de 2011.

En los eventos mencionados, también sería conculcado el derecho de las víctimas a recibir
garantías de no repetición, pues la reparación integral de las víctimas por parte del Estado
se convierte en el verdadero estímulo para que éste adopte todos los correctivos que sean
necesarios para sancionar a los responsables. Dada la visión gubernamental según la cual
se da mayor relevancia a los costos de la reparación que a la efectividad de los derechos,
por una supuesta afectación de la sostenibilidad fiscal, los riesgos de repetición de tales
hechos podrían aumentar, así quepan medidas simbólicas de reparación.

En estos eventos, resulta ilegítimo anteponer los costos de una eventual reparación
imputable al Estado, para sacrificar casi totalmente el contenido de derechos
fundamentales e impedir que el fin de pacificación que busca la ley se logre. En esas
circunstancias, la finalidad buscada por la norma es ilegítima y prohibida
constitucionalmente.

Por todo lo anterior, como quiera que las limitaciones que impone la medida estudiada a
los derechos de las víctimas a la verdad, a la justicia, a la reparación y a las garantías de
no repetición, 1176 son excesivamente gravosas y no existe una finalidad legítima e

1173
Artículo 140 de la Ley 1437 de 2011.
1174
La Corte en otras oportunidades ha considerado que el establecimiento de regímenes más favorables propios de la
justicia transicional en los que quedan cobijadas crímenes de lesa humanidad y las más atroces violaciones del derecho
internacional de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario. Así, en la sentencia C-936 de 2010 (MP.
Luis Ernesto Vargas Silva, SV: Mauricio González Cuervo, Juan Carlos Henao Pérez y Jorge Ignacio Pretelt Chaljub; SPV:
Humberto Antonio Sierra Porto), al declarar inexequible la posibilidad de aplicar el principio de oportunidad frente a las más
graves violaciones de derechos humanos y del derecho internacional humanitario. Ver también las sentencias C-290 de
2012 (MP: Humberto Antonio Sierra Porto); C-578 de 2002 (MP. Manuel José Cepeda Espinosa, AV: Rodrigo Escobar Gil); C-
317 de 2002 (MP. Clara Inés Vargas Hernández); C-358 de 1997 (MP. Eduardo Cifuentes Muñoz, SPV. Jorge Arango Mejía,
Hernando Herrera Vergara y José Gregorio Hernández Galindo)
1175
Ver entre muchas otras las siguientes sentencias del Consejo de Estado: Sala de lo Contencioso Administrativo, Sección
Tercera: Subsección B, CP: Stella Conto Díaz Del Castillo, 14 de abril de 2011, Proceso número: 05001-23-31-000-1996-
00237-01(20145), sobre ejecuciones extrajudiciales; Sala de lo Contencioso Administrativo, Sección Tercera, CP: Ramiro
Saavedra Becerra, 12 de octubre de 2006 , Radicación número: 20001-23-31-000-1998-03648-01(21417); Sección Tercera
, Subsección A , CP: Mauricio Fajardo Gómez, 21 de febrero de 2011 , Radicación número: 25000-23-26-000-1995-01692-
01(20046); Sección Tercera , Subsección C, Consejero ponente: Jaime Orlando Santofimio Gamboa, 21) de febrero dos mil
once 2011, Radicación número: 50001-23-31-000-2001-00171-01(31093); Sección Tercera; CP: Mauricio Fajardo Gómez,
15 de agosto de 2007, Radicación número: 190012331000200300385-01; Sección Tercera, CP: Julio Cesar Uribe Acosta, 25
de abril de 1991, Radicación número: 6220
1176
En la sentencia C-775 de 2003 (M. P. Jaime Araújo Rentería), la Corte resalto que “Esta corporación ha resaltado
además la cercanía y mutua dependencia existente entre estos tres conceptos, al señalar: “… la verdad, la justicia y la
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importante que los justifique, en tales circunstancias no puede entenderse que el monto
recibido como indemnización administrativa cobije todas las sumas que la víctima debe
recibir por concepto de su victimización.

Constata la Corte que otras disposiciones de la Ley 1448 de 2011 confirman que no fue la
intención del legislador exonerar de responsabilidad al Estado, cuando así sea demostrado
en un proceso judicial. Por el contrario, varios artículos insisten que la Ley 1448 de 2011
como un todo está orientada a la garantía efectiva de los derechos de las víctimas a la
verdad, a la justicia, a la reparación y a las garantías de no repetición.

En efecto, los artículos 1, 5, 8, 9, 10, 11, 12, 20, 21, 22, 24, 25, 27, 28, 34, 69, 132 y 133
de la Ley 1448 de 2011, reiteran el carácter complementario de las medidas de reparación
previstas en ella, y reafirman el deber estatal de reparar daños antijurídicos, advierten que
el reconocimiento del carácter de víctima no supone una aceptación de responsabilidad del
Estado a la luz del artículo 90 Superior, recalcan que tales medidas no exoneran al
victimario de su responsabilidad de reparar y aseguran los derechos a la verdad, a la
justicia y a la reparación.

En esa medida, resulta contrario a los derechos de las víctimas, al espíritu de pacificación
de la Ley 1448 de 2011 y a los compromisos internacionales de Colombia en materia de
derechos humanos, que se mantenga dentro de nuestro ordenamiento una norma que
permite imponer una carga desproporcionada a las víctimas de las más graves violaciones
de derechos humanos y de derecho internacional humanitario, y que esa posibilidad pueda
llegar a beneficiar a quienes siendo agentes del Estado, traicionan su deber de garantía y
protección de los derechos de todos los habitantes del territorio colombiano y
comprometen la responsabilidad del Estado, cercenando incluso la posibilidad de
establecer garantías adecuadas de no repetición y transformando en inocua la posibilidad
de repetición en caso de condenas al Estado, por la acción o la omisión de sus agentes.

No duda la Corte que en muchos de los casos de reparación cobijados por la Ley 1448 de
2011 la reparación administrativa puede resultar adecuada. Sin embargo, en los eventos
en que se trata de daños antijurídicos causados por crímenes de lesa humanidad, tales
como tortura, genocidio, desaparición forzada, ejecuciones extrajudiciales, y violaciones,
entre otros, o cuando concurran en una misma víctima varios de estos hechos y éstos sean
atribuibles a agentes del Estado, la imposibilidad de acudir a la justicia para obtener una
reparación pecuniaria complementaria resulta manifiestamente desproporcionada, para los
derechos de las víctimas y para el deber constitucional del Estado establecido en el artículo
90 Superior.

Por ello, la Corte condicionará la exequibilidad de los incisos 2º y 3º y del parágrafo 1º del
artículo 132, a que se entienda que en los eventos de daños causados por crímenes de
lesa humanidad que sean atribuibles a agentes del Estado, no podrá entenderse que
la indemnización administrativa se produce en el marco de un contrato de transacción,
pudiéndose descontar de la reparación que se reconozca por vía judicial a cargo del
Estado, los valores pagados por concepto de reparación administrativa.(Negrilla fuera de
texto)”

1273. Ante la situación anteriormente descrita, la Sala exhortará a la UARIV y a las


demás entidades que componen el SNARIV, para que en el término de seis (6) meses
contados a partir de la ejecutoria de esta sentencia y en la medida de lo posible otorguen
los montos máximos correspondientes a la indemnización administrativa, según el tipo de
delito cometido. Además, teniendo en cuenta que los casos procesados por Justicia y Paz

reparación se erigen como bienes cardinales de toda sociedad que se funde en un orden justo y de pacífica convivencia,
entre los cuales median relaciones de conexidad e interdependencia, de manera tal que: No es posible lograr la justicia sin
la verdad. No es posible llegar a la reparación sin la justicia.”
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
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corresponden a graves violaciones a los derechos humanos como crímenes de lesa


humanidad, crímenes de guerra y/o infracciones al DIH; la Sala exhortará a la Unidad
para que se implementen medidas de forma complementaria a la indemnización
administrativa, como medidas de restitución de derechos, rehabilitación médica, física y
psicosocial; satisfacción y no repetición1177.

1274. Si bien es cierto que en Colombia no pueden existir víctimas de primera o segunda
categoría, por cuanto esto vulneraría el derecho a la igualdad y la garantía del acceso al
sistema judicial o administrativo para obtener medidas de reparación integral, esta Sala
considera necesario aplicar planes especiales para las víctimas de Justicia y Paz que
tengan la característica particular de haber sido afectadas por Graves Violaciones a los
Derechos Humanos, esto con el fin de que obtengan en el corto y mediano plazo la
satisfacción de sus derechos. Debido a: (i) la gravedad de los delitos o hechos ilícitos de
los que fueron objeto, (ii) que el proceso de la Ley 975 de 2005 proporciona de manera
inmediata en la sentencia a la UARIV los datos específicos de la víctima, la identificación
de los hechos ilícitos que los afectaron, la caracterización de patrones de criminalidad que
los afectaron, y la identificación de las afectaciones que deben ser reparadas.

Otras medidas de reparación

1275. Rehabilitación. En esta materia, las representantes de las víctimas solicitaron


para cada una de ellas atención médica y psicológica. Como ya se ha dicho, para que se
realice la reparación integral, es necesario que el Estado implemente mecanismos a través
de los cuales brinde acompañamiento, atención y tratamiento médico, físico, psicológico y
psicosocial a las víctimas del conflicto armado, al respecto la Corte Constitucional
manifestó que:

“De conformidad con reiterada jurisprudencia de esta Corporación, las entidades públicas
encargadas de garantizar la prestación de los servicios de salud, deben preocuparse no
sólo por cumplir los cuatro elementos esenciales e interrelacionados del derecho a la salud,
a saber, disponibilidad, accesibilidad, aceptabilidad y calidad, sino que además deben
contemplar las circunstancias particulares que se desprenden del hecho de ser víctimas del
conflicto armando y del desplazamiento forzado, tales como la dificultad de acceder a los
servicios de salud, el incremento de riesgo para contraer enfermedades que surge a partir
de las condiciones deplorables a las que son sometidas las personas en situación de
desplazamiento, las circunstancias de extrema de vulnerabilidad agudizada cuando los

1177
Para lograr lo anterior, la Unidad para las Víctimas ha diseñado un Modelo Único de Atención, Asistencia y Reparación
(MAARIV), el cual cuenta con un importante instrumento denominado Plan de Atención, Asistencia y Reparación Integral
(PAARI), ese documento es construido por componentes con la participación activa de las víctimas y a través del mismo se
pueden identificar sus necesidades, capacidades y solicitudes relacionadas con las medidas contempladas en la Ley de
Víctimas y Restitución de Tierras, lo cual permite establecer una priorización para el acceso acorde con su situación
particular.
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actos de violencia se ejercen contra las mujeres, las precarias condiciones económicas de
las víctimas y de sus núcleos familiares y la inestabilidad emocional.” 1178

1276. Al respecto la Sala considera necesario recordar a las partes que el Estado
colombiano, a través del SNARIV, de la UARIV y del Ministerio de Salud, ha puesto en
marcha el diseño e implementación del Programa de Atención Psicosocial y Salud Integral
a las Víctimas del Conflicto Armado (PAPSIVI), el cual se describe brevemente a
continuación1179.

1277. El PAPSIVI forma parte de las medidas de asistencia y rehabilitación emanadas en


la Ley 1448 de 2011, las cuales buscan garantizar del derecho a la atención en salud
física, mental y psicosocial y el restablecimiento de las condiciones físicas, mentales y
psicosociales de la población víctima, dentro de unos marcos éticos que permitan la
dignificación y la recuperación de los efectos ocasionados a nivel individual, familiar y
comunitario como consecuencia de las Graves Violaciones a los Derechos Humanos e
Infracciones al Derecho Internacional Humanitario en el marco del conflicto armado en
Colombia.

1278. Este Programa parte del principio de reconocer a las víctimas del conflicto armado
como sujetos de derecho, es decir, protagonistas de su proceso de reparación y
rehabilitación; por tanto requiere que el Ministerio de Salud y Protección Social, como
titular del deber de garantizar el derecho a la salud integral de las víctimas, proporcione
las condiciones para la participación efectiva de las víctimas, sus organizaciones, la
sociedad civil y las diferentes entidades del Estado en la construcción del Programa. En tal
sentido se está adelantando un proceso de construcción conjunta, el cual debe
proporcionar un diseño que permita implementar una propuesta transformadora de la
realidad de las víctimas y, emprender una adecuación institucional que haga posible la
garantía de sus derechos en el marco de la reparación, con enfoque psicosocial y
diferencial. En este marco de forma específica se propone: mitigar el impacto y daño a la
integridad psicológica y moral, al proyecto de vida y a la vida en relación que los hechos
de violencia generaron en las víctimas del conflicto armado, a partir de procesos de
atención psicosocial individual, familiar, grupal y comunitario.

1178
Ver: Corte Constitucional, Sentencia T-045 de 2010.
1179
Ver: Corte Constitucional, Sentencia T-045 de 2010, en la cual se manifestó por parte del Tribunal lo siguiente: La
prestación de los servicios de salud a las víctimas del conflicto armado interno que además ostentan la calidad de
desplazados no puede limitarse únicamente a los planes básicos que se contemplan en cada uno de los regimenes, es decir,
en el Régimen Contributivo y en el Subsidiado, debido a que en el diseño de estos programas no se contemplaron las
especificidades que se derivan de la condición de víctima del conflicto interno. Como lo señaló el Ministerio de la protección
Social en su intervención, estos planes no contemplan, entre otras cosas, atención psicológica y psiquiátrica de mediana y
alta complejidad así como la implementación efectiva de un enfoque psicosocial, elementos necesarios para la prestación de
los servicios de salud a las víctimas integralmente.

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1279. Se busca, así mismo, que los entes territoriales desarrollen los mecanismos que
permitan garantizar a las víctimas del conflicto armado la asistencia integral en salud con
enfoque psicosocial, en el marco del Sistema General de Seguridad Social en Salud, de
manera tal que se contribuya al restablecimiento de las condiciones físicas, mentales y
psicosociales de las víctimas.

1280. El PAPSIVI consta de dos grandes componentes específicos: (i) la atención


psicosocial y (ii) la atención integral en salud para las víctimas del conflicto armado. El
primero se centra en el daño psicosocial y el segundo en la salud física y mental, en sus
momentos de promoción, prevención, tratamiento y rehabilitación general. Estos
componentes se articulan a través de estrategias simultáneas y transversales de
coordinación entre los diferentes Entes Territoriales, articulación entre los diferentes
sectores, construcción conjunta con la participación de todos los actores responsables de
su implementación y con las víctimas y sus organizaciones, la formación del talento
humano y, el seguimiento, monitoreo y retroalimentación.

1281. La Sala encuentra especialmente importante resaltar que según los objetivos del
Programa en el componente de atención psicosocial, el centro de atención no es la
enfermedad o el trastorno mental, es el impacto en la integridad psicológica y moral, el
daño al proyecto de vida, a la vida de relación, causados por las violaciones graves a los
derechos humanos e infracciones al derecho internacional humanitario. En este sentido
las acciones deben partir de reconocer el daño ocasionado a las víctimas, contextualizar
los hechos y recuperar la memoria histórica como parte del camino a la verdad, a la
justicia y a la reparación. Lo cual implica un importante reto para los profesionales de la
salud mental en tanto conlleva a ampliar su mirada y establecer conexiones entre el
sufrimiento emocional y la vulneración de los derechos.

1282. Igualmente resulta significativo para la Sala que se entienda que todo proceso
psicosocial con víctimas del conflicto armado, debe comenzar por recuperar la confianza y
la seguridad, la acción de control sobre sus propias vidas y la posibilidad de decidir sobre
el futuro de ellos y ellas mismas, de sus familias y de sus comunidades. Este proceso
debe basarse en las diferencias generacionales, ciclo de vida, étnicas, culturales, sociales,
territoriales, políticas, género, sexuales, discapacidad, y de las implicaciones que tiene
acompañar los impactos derivados de los diferentes hechos victimizantes.

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1283. Ahora bien, el Ministerio de Salud ha resaltado que en materia de atención


psicosocial, este debe ser brindado por equipos interdisciplinarios de profesionales con
entrenamiento y experiencia en atención psicosocial y comunitaria con víctimas o
población vulnerable (psicología, trabajo social, enfermería, sociología, antropología,
promotores psicosociales de la comunidad, líderes y lideresas locales).

1284. Dentro del Programa se ha diseñado una Ruta de atención psicosocial, que
incluye: (i) búsqueda activa de las victimas en zonas geográficas dispersas (población
retornada o reubicada); (ii) caracterización psicosocial: daño, sufrimiento, recursos y
potencialidades ; (iii) construcción del plan de atención psicosocial individual, familiar y
comunitario con las personas afectadas; (iv) atención psicosocial individual, familiar y
comunitaria por equipos interdisciplinarios según caracterización del daño; (v) remisión
cuando sea necesario a otras instituciones del Sistema General de Seguridad Social en
Salud u otros sectores; (vi) registro de las actividades realizadas; (vii) monitoreo y
seguimiento.

1285. En cuanto al componente de atención integral en salud, la operación del proceso a


víctimas estará a cargo del Sistema General de Seguridad Social en Salud, como
responsable de garantizar el acceso real, con enfoque psicosocial efectivo y digno a los
servicios requeridos para la recuperación física y mental de la población víctima del
conflicto armado, y como tal deberá ajustar sus procedimientos para permitir el desarrollo
ágil y oportuno de los mecanismos dispuestos para su atención, definiendo actores,
responsables y procedimientos, en aras de cumplir con los lineamientos y parámetros de
la Ley y de esa manera incorporar efectivamente el enfoque psicosocial y el enfoque
diferencial.

Atención Integral en Salud

1286. Ahora bien, todas la medidas que busquen la rehabilitación de las víctimas deben
estar enmarcadas dentro del concepto de atención integral en salud, el cual integra: todas
las actividades esenciales para satisfacer las necesidades de salud de la población víctima,
administradas por las Entidades Promotoras de Salud – EPS y prestada por Instituciones
Prestadoras de Servicios de Salud (IPS) e incluye la totalidad de las actividades,
intervenciones y procedimientos en sus componentes de promoción, prevención,
tratamiento y rehabilitación, que permitirá a la población afectada recuperar o mejorar su
integridad física, emocional y psicológica. Esta atención integral comprende: (i) la

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promoción y prevención (ii) la asistencia en salud y; (iii) la rehabilitación en salud mental


y física.

1287. La atención integral en salud, debe actuar sobre los daños físicos, psicológicos y
psiquiátricos de la víctima y su entorno familiar, de manera que se ofrezca la posibilidad
de reducir los padecimientos, sufrimientos y angustias resultantes de los hechos de los
que fueron víctimas y en esa medida a reconstruir su proyecto de vida. La atención
integral en salud, involucra y desarrolla acciones de promoción y prevención.

1288. Así mismo, los profesionales encargados de este proceso, deben reconocer y tener
en cuenta para el diagnóstico de los daños y la construcción de los planes de atención en
salud integral a las víctimas, que los impactos sobre la salud física y mental son diferentes
de acuerdo a los hechos de violencia que han padecido y, de acuerdo a las
particularidades de ciclo vital, género, orientación sexual, etnia, situación de discapacidad,
situación de vulnerabilidad, situación geográfica, etc., de manera que la atención en salud
a las víctimas debe adecuarse a las particularidades del daño y de la persona que lo
presenta y, para el caso de la atención psicológica se: “(…) deben considerar las
circunstancias y necesidades particulares de cada persona, de manera que se les brinden
tratamientos colectivos, familiares e individuales según lo que se acuerde con cada uno
de ellos y después de una evaluación individual”1180.

1289. La ruta de atención integral en salud del PAPSIVI incluye: (i) valoración integral y
diagnóstico de la situación psicosocial y de salud física y mental. Las personas víctimas
serán valoradas por un grupo de profesionales, quienes establecerán un diagnóstico que
indique cuál es el curso de acción y el tratamiento a seguir en cada caso particular; (ii) la
atención propiamente dicha, sea ambulatoria o no; (iii) el grupo de profesionales deberá
hacer seguimiento continuo al estado de salud física y metal de las víctimas; (iv)
determinación del lugar de atención y tratamiento especializado. Se deberá tener en
cuenta la cercanía con el sitio de vivienda y las necesidades de tratamiento específico que
resulten de la valoración que se les haga.

1290. La Atención Integral en Salud y la Atención Psicosocial se deben integrar a los


planes que se construyan con las víctimas, a partir de las rutas de reparación individual y
colectiva, incluyendo los planes de retorno y reubicación, según la focalización geográfica
que se determine y, las acciones, planes y programas de reparación integral que diseñen

1180
Martin-Berestein, C. 2005. “Evaluación del impacto psicosocial. Caso Pueblo Bello”
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y ejecuten las entidades del Estado con competencias y responsabilidades frente a las
víctimas y teniendo en cuenta los hechos victimizantes. En tal sentido el PAPSIVI propone
la línea técnica atendiendo a lo establecido en la estrategia de Atención Primaria en Salud
–APS la cual se materializará mediante el Plan Decenal de Salud Pública (Ley 1448 de
2011).

1291. Teniendo en cuenta lo anterior, la Sala exhortará al Ministerio de Salud, a la UARIV


para que para que procuren el diseño, la construcción y puesta en marcha de planes
específicos para las víctimas de Justicia y Paz, en los cuales se consideren las
características propias de la población, incluyendo el enfoque diferencial y se establezcan
medidas especiales si se trata de víctimas de lesa humanidad, crímenes de guerra o
infracciones al DIH; las cuales requieren de un proceso particular de asistencia. De
manera particular, por las afectaciones causadas por el accionar de las estructuras
paramilitares en el país, en este caso se recomendará la inclusión de planes especiales
para la región de Urabá y las víctimas del Bloque Bananero de las AUC1181.

1292. Medidas de satisfacción: en cuanto a este tipo de medidas, las defensoras


solicitaron que se rindan disculpas públicas y se pida perdón por parte del postulado
HÉBERT VELOZA GARCÍA, a través de las cuales exprese que las personas afectadas por
el delito de homicidio no eran colaboradores o auxiliadores de la guerrilla, que no hacían
parte de grupos de delincuencia común alguno, sino que eran miembros de una
comunidad en la cual no tenían rechazo alguno, que eran hombres y mujeres
trabajadores(as), provenientes de familias honestas. Estas disculpas deberán ser
publicadas en un diario de amplia circulación nacional y local; además que se le ordene al
postulado llevar a cabo actos de contribución a la reparación integral, como son el
reconocimiento público de responsabilidad y la declaración pública de arrepentimiento y el
compromiso de no repetición.

1293. Lo primero que debe advertir la Sala, es que, es el Estado quien tiene la obligación
de restablecer la dignidad de las víctimas y difundir la verdad sobre lo sucedido, a través
de actos conmemorativos, reconocimientos y homenajes públicos, búsqueda de los
desaparecidos, difusión de las disculpas públicas, investigación, juzgamiento y sanción de
los responsables de los hechos victimizantes. Es a través de las decisiones judiciales,

1181
Ver: Documento CONPES No. 2712 del 1º de diciembre de 2011. Además se debe tener en cuenta, el documento
CONPES No. 3726 de mayo de 2012, sobre Lineamientos, plan de ejecución de metas, presupuesto y mecanismo de
seguimiento para el plan nacional de atención y reparación integral a víctimas. Ver también: Decreto1725 de 2012, a través
del cual se adopta el Plan Nacional para la Atención y la Reparación Integral a Víctimas.
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entendidas estas como una medida de reparación, que se restablece la dignidad,


reputación y derechos de las víctimas y de sus parientes.

1294. Así mismo, solicitaron se cree una cátedra de Derechos Humanos y/o democracia
en las escuelas y colegios de la región de Urabá, con un programa en el cual se
incorporen contenidos de memoria histórica, en el cual se le de relevancia al proceso de
origen, exterminio físico y político de integrantes de la Unión Patriótica, como forma de
garantizar la reproducción de la memoria histórica a las próximas generaciones. Además
que de acuerdo con lo establecido en el artículo 56 de la Ley 1592 de 2012, se organice,
sistematice y conserve los archivos de los hechos y circunstancias relacionadas con las
conductas de las personas objeto de este incidente, con miras a garantizar sus derechos a
la verdad y preservar la memoria judicial.

1295. En este caso la Sala debe ceñirse nuevamente a lo establecido por la Ley 1448 de
2011 (Decreto 4800 de 2011, artículo 170 y ss). En ese sentido se recuerda que la
reparación simbólica comprende la realización de actos u obras de alcance o repercusión
pública dirigidas a la construcción y recuperación de la memoria histórica, el
reconocimiento de la dignidad de las víctimas y la reconstrucción del tejido social. Las
decisiones judiciales podrán tener en cuenta las medidas de satisfacción otorgadas en el
marco de la Ley 1448 de 2011, sin perjuicio de las medidas de satisfacción que se
presenten en otras instancias (Artículo 173).

1296. El Gobierno Nacional, a través de la Unidad para las Víctimas debe brindar a los
Comités Territoriales de Justicia Transicional (CTJT), la asistencia técnica necesaria para
la elaboración de criterios que deban tener las medidas de satisfacción que se ejecutarán
dentro del territorio, según el contexto y tradiciones de cada población. Adicionalmente,
los CTJT deberán hacer seguimiento a la implementación de las medidas de satisfacción
en su municipio o departamento.

1297. La Unidad para las Víctimas concertará previamente con las víctimas el tipo de
medidas de satisfacción solicitadas y el lugar en el cual éstas se deben ejecutar de
conformidad con los criterios que para el efecto definan los Comités de Justicia
Transicional. Las medidas de satisfacción establecidas en el Plan Integral Único (PIU)
serán incorporadas en los planes de acción en los términos previstos por la ley.

1298. Las medidas de satisfacción establecidas en los Planes Integrales Únicos (PIU)
serán incorporadas a los planes de acción, en los términos previstos por este artículo. Los
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planes de acción deberán contener medidas de satisfacción genéricas y no


individualizables a favor de las víctimas por hechos ocurridos antes del 1° de enero de
1985. Los planes de acción adoptados por los Comités Territoriales de Justicia
Transicional deberán incorporar mecanismos de articulación con otras entidades
territoriales a efectos de cumplir medidas de satisfacción a favor de víctimas ubicadas en
un sitio diferente a su jurisdicción. Para todos los efectos, la inscripción en el registro
único de víctimas, acompañada del mensaje estatal de reconocimiento de dicha condición
y exaltación de la dignidad, nombre y honor de la persona ante la comunidad y el
ofensor, se entiende como medida de satisfacción y de reparación simbólica.

1299. El Gobierno Nacional, a través de la Unidad Administrativa Especial de Atención y


Reparación Integral a las Víctimas, brindará a los Comités Territoriales de Justicia
Transicional la asistencia técnica necesaria para la elaboración de criterios que deben
tener las medidas de satisfacción que se ejecutarán dentro de su territorio, según el
contexto y tradiciones de cada población (Artículo 172). La difusión y socialización podrá
ser en sí misma una medida de satisfacción y serán concertadas con las víctimas en estos
casos. Las entidades territoriales se encargarán de la difusión y socialización del
otorgamiento de las medidas de satisfacción, a través de los mecanismos que para tal fin
se dispongan (artículo 174).

1300. Teniendo en cuenta las disposiciones del Decreto 4800 de 2011, la Sala informará
a la UARIV sobre las solicitudes en materia de satisfacción para las víctimas, exhortará a
que se incluyan en los respectivos programas o planes, según corresponda y realizará el
seguimiento de la realización de las mismas.

1301. Ante la solicitud de las representantes de las víctimas para que se suspenda en
algunos(as) jóvenes la obligación de prestar el servicio militar, se informará a la UARIV,
para que esta adopte las medidas necesarias para suministrar la información a las
autoridades de reclutamiento. Se exhortará a la Unidad a que informe al Tribunal sobre
las decisiones que tome el Ministerio de Defensa Nacional sobre la expedición y entrega
de la libreta militar a las víctimas exentas de prestar el servicio militar. La libreta militar
entregada a las víctimas será de reservista de segunda clase en virtud de lo previsto por
el artículo 51 de la Ley 1448 de 1993.

1302. En cuanto a la solicitud de aceptaciones públicas de los hechos y solicitudes de


perdón público, la Sala informará de la solicitud a la UARIV, quien deberá gestionar que el

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Comité Ejecutivo para la Atención y Reparación a las Víctimas coordine la realización de


actos conmemorativos en los que se acepte, reconozca y repudie las conductas que
involucren graves y manifiestas violaciones de los Derechos Humanos o infracciones al
Derecho Internacional Humanitario, y los postulados de Justicia y Paz pidan perdón
público a las víctimas. En los casos en los que se trate del reconocimiento y repudio, y
solicitudes de perdón público de las conductas que victimizaron a niños, niñas y
adolescentes se omitirá revelar el nombre de estos y todo acto que atente contra su
protección integral (artículo 184).

1303. La Sala exhortará a la Unidad para que los actos de desagravio se realicen en un
municipio de Urabá, donde se encuentre un alto porcentaje de las víctimas afectadas por
los hechos que se reconocen o en el lugar reconocido por las mismas víctimas como
escenario de vulneración a sus derechos. Además deberá tenerse en cuenta que en
aquellos actos donde se reconozca, acepte y repudie las graves y manifiestas violaciones
a las normas internacionales de Derechos Humanos o infracciones al Derecho
Internacional Humanitario a los niños, niñas y adolescentes, el Instituto Colombiano de
Bienestar Familiar realizará el acompañamiento previo y posterior a los mismos, que
propicie una acción sin daño, teniendo en cuenta sus entornos significativos. Así mismo,
se dará un tratamiento especial a los actos de violencia sexual y violencia basada en
género.

1304. Teniendo en cuenta que la memoria histórica es patrimonio público. La Sala


exhortará a la UARIV y al Centro de Memoria Histórica, para que de manera participativa,
contribuya en el acopio, sistematización y difusión de iniciativas públicas y privadas que
autónoma e independientemente aporten a su reconstrucción en perspectiva de
consolidación de garantías de no repetición y de reconciliación y de sostenibilidad del
legado de los emprendimientos sociales de las víctimas, en la región de Urabá. En ese
mismo sentido se exhortará al CMH para que incluya dentro del proceso de
territorialización del museo de la memoria material histórico que permita la exaltación de
la dignidad de las víctimas de la región de Urabá.

1305. Teniendo en cuenta que el Programa de Derechos Humanos y Memoria Histórica


contempla dentro de sus componentes: la investigación para la reconstrucción de la
Memoria Histórica. Se exhortará al CMH para que realice esta tarea en la región de Urabá
y para tal fin tenga en cuenta a las víctimas, las organizaciones de víctimas, los testigos
de los hechos victimizantes, así como los insumos provenientes de los Acuerdos de

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Contribución a la Verdad a que se refiere la Ley 1424 de 2010, respetando la dignidad de


todos y atendiendo la diversidad y pluralidad de voces.

1306. En atención a la solicitud de la creación de que se incluya en los planes educativos


de la región un programa en el cual se rememore a las víctimas de la Unión Patriótica, la
Sala exhortará a la UARIV y al Centro de Memoria Histórica para que desarrolle
actividades de pedagogía, las cuales deben estar en concordancia con el Plan Nacional de
Educación en Derechos Humanos, en el cual son corresponsables los Ministerios de
Educación Nacional y Cultura, con el Programa Presidencial para la Protección y vigilancia
de los Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario y el Departamento
Administrativo de la Ciencia, Tecnología e Innovación, Alta Consejería para la Equidad de
la Mujer, entre otras entidades, para crear y cimentar una cultura de conocimiento y
comprensión de la historia política y social de Colombia en el marco del conflicto armado
interno, especialmente sobre la región de Urabá.

1307. Asentamiento de los certificados de defunción de personas


desaparecidas: Ante la solicitud de las defensoras de las víctimas en cuanto al
asentamiento de los certificados de defunción de las personas desaparecidas en concurso
con el delito de homicidio en persona protegida. La Sala ordenará lo pertinente a la
Superintendencia de Notariado y Registro, para que realice las remisiones y anotaciones
correspondientes para las víctimas que así lo han requerido, siempre y cuando concurran
los delitos de desaparición forzada y homicidio, teniendo en cuenta la postura de la Sala
de Casación Penal de la Corte Suprema de Justicia, que a continuación se reseña:

“Al realizar una interpretación teleológica de la norma transcrita, es menester concluir que
el espíritu e intención del legislador al momento de implantar el procedimiento y
condiciones para la declaratoria de muerte por desaparecimiento, consistía en agotar todos
los medios posibles (publicaciones en el periódico oficial, recepción de testimonios, amplios
lapsos entre los emplazamientos) para encontrar a quien es reportado como desaparecido
logrando así un convencimiento al juez de la probable muerte del individuo. En otros
términos, lo pretendido con el proceso ante la jurisdicción voluntaria es acopiar suficientes
medios probatorios de donde se colija la muerte de quien se ignora el paradero.

De otra parte se debe tener en cuenta que el ordenamiento civil ha dispuesto diferencias
en cuanto al desaparecimiento ordinario y aquel producido por circunstancias
excepcionales y que comportan una alta probabilidad sobre la muerte del desaparecido tal
y como se prevé en el numeral 7 del artículo 97 ya citado en donde se señala que el
interesado debe presentar la demanda luego de 4 años del desaparecimiento, y el día
fijado será el mismo día en que ocurrió la desaparición.

Así mismo la Corte Constitucional ha admitido que en ciertas condiciones particulares, se


adopten decisiones en contra del procedimiento establecido por el Estatuto Civil, esto es el
trámite ante la jurisdicción voluntaria, especialmente al tratarse de sucesos donde la

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probabilidad de la muerte es muy alta.1182 De allí que la decisión del juez penal en que
ordena la inscripción del registro de defunción no comporta una vulneración a los
principios constitucionales del debido proceso.

(…)

Es obligación del Estado y de los funcionarios judiciales procurar mecanismos legales


ágiles, eficaces y efectivos para garantizar la reparación a las víctimas de los grupos
armados al margen de la ley en el trámite de la Ley 975 de 2005, herramientas que deben
dirigirse a devolver a la víctima, en lo posible, al estado en que se encontraba antes de la
vulneración de sus derechos. Bajo esta premisa es necesario deducir que el sometimiento
de la víctima a un proceso que puede demorar más de 2 años y que genera altos costos en
su trámite (publicaciones, transporte), no sólo incumple la obligación estatal de facilitar el
acceso a la administración de justicia sino que genera aun más obstáculos para la
reparación integral y efectiva de los afectados.

Contrario sensu, la orden de asentamiento del registro civil de defunción por parte del
Magistrado de control de garantías, ofrece un trámite ágil y expedito a una situación
compleja y dispendiosa para quien ha sido objeto de las conductas delictivas imputadas.

Las dificultades en el registro civil de quienes ostentan la calidad de víctimas directas e


indirectas, afecta de manera grave la memoria histórica que debe acompañar todo proceso
transicional. Al respecto se ha pronunciado esta Corporación en los siguientes términos,

“La Corte Suprema de Justicia, recogiendo experiencias y estándares internacionales, ha


fijado parámetros encaminados a establecer la verdad, bajo particularidades del proceso
de desmovilización y reconciliación. Respecto del tema de la verdad y las pruebas que la
sustentan en el decurso de la Ley de Justicia y Paz, dijo que “en el proceso de justicia
transicional no solo se construye a partir de lo confesado por el postulado en la diligencia
de versión libre, sino también de las actividades investigativas adelantadas por la Fiscalía
General de la Nación y el aporte de las víctimas (…) En este evento, debe hacerse una
interpretación flexible sobre el concepto de verdad, a partir de lo aportado por el
desmovilizado en su versión libre, dado que, como lo sostuvo la Corte Constitucional en la
citada Sentencia C-370 de 2006 (apartado 6.2.2.1.7.20), no puede perderse de vista que la
Ley 975 está diseñada para ser aplicada a personas que han cometido múltiples y graves
delitos, en desarrollo de los cuales apelaron a toda clase de maniobras para esconder su
real dimensión y las pruebas de los mismos, lo cual necesariamente dificulta la labor
investigativa”1183.

También la Sala, en el auto antes citado, reconoció que” la complejidad de la


reconstrucción de los hechos por virtud de la degradación del conflicto y la barbarie de los
métodos utilizados en la ejecución de las conductas (descuartizamiento, fosas comunes),
sumado a las dificultades de huella histórica de muchos hechos, por deficiencias en el
registro civil (nacimientos, defunciones), en los registros notariales y mercantiles, por los
permanentes movimientos de las comunidades desplazadas, entre otras y tantas
dificultades, obliga a exámenes de contexto y a la flexibilización de los umbrales
probatorios, no solo respecto de la comprobación del relato del postulado, sino, sobre
todo, del daño causado, el que deberá acreditarse con medios propios de la justicia
transicional”, agregando que “resulta desproporcionado, como aquí se pretende, que se
exija del desmovilizado, quien ha relatado genéricamente unos hechos ocurridos hace
varios años y confesado la comisión de múltiples conductas punibles, que especifique
todas las circunstancias de tiempo, modo y lugar que rodearon la ejecución de cada una
de ellas” (Resaltado añadido)1184

1182
Corte Constitucional. Sentencia C-217 de 1999. En esta decisión se estudia el procedimiento para declarar la muerte de
quienes desaparecieron a raíz del terremoto ocurrido el 25 de enero de 1999, y en referencia al Decreto 3822 de 1985
sobre los desaparecidos a raíz de la Toma del Palacio de Justicia de Bogotá y la actividad volcánica del Nevado del Ruiz
ocurridos en el año de 1985.
1183
Providencia del 21 de septiembre de 2009, radicado 32022, Caso Gian Carlo Gutiérrez.
1184
Corte Suprema de Justicia. Sala de Casación Penal. Decisión de 8 de agosto de 2010. Radicado 26585.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

La verdad es una garantía y obligación transversal en el trámite de la Ley de Justicia y Paz


ya que constituye un elemento de reparación a las víctimas y sustancial para la memoria
histórica necesaria en todo proceso de paz, siendo vinculante concluir que las dificultades
provocadas por la falta de definición en el registro civil de las personas provocan enormes
obstáculos a los fines de la justicia transicional. Ante evidencias contundentes sobre la
muerte de una persona determinada, conservar su situación jurídica como desaparecida no
es otra cosa que faltar a la verdad histórica.

(…)

Por otra parte, y contrario a lo sostenido por el agente del Ministerio Público dentro de su
argumentación, el registro civil hace parte integrante del derecho fundamental a la
personalidad jurídica y en tanto, al derecho de igualdad, razón suficiente para indicar que
la necesidad que tienen las víctimas para definir el registro de defunción de sus relativos
comporta una garantía constitucional que compete al Magistrado de control de garantías
de conformidad con el artículo 13, numeral 7 de la Ley 975. Así lo ha contemplado la
Corte Constitucional en sentencia C-476 de 2005:

“Conforme a lo dispuesto por el artículo 14 de la Constitución Política toda persona tiene


derecho al reconocimiento de su personalidad jurídica, lo cual se hace indispensable para
que pueda actuar como sujeto de derechos y de obligaciones, norma que guarda estrecha
relación con el derecho a la igualdad que reconoce el artículo 13 de la Carta pues, no
serían libres e iguales ante la ley todas las personas, si algunas no se les reconociera
personalidad jurídica, como ocurría durante la época en que existió la esclavitud. De la
existencia de la igualdad ante la ley y del reconocimiento constitucional a la personalidad
jurídica, el Derecho tiene establecido que surgen los atributos de la personalidad y, entre
ellos, el del estado civil de las personas. Este, como se sabe, determina la situación de
una persona en la familia y en la sociedad y de él se derivan derechos y obligaciones que
se regulan por la ley civil”.

A manera de conclusión es forzoso deducir que en aquellos casos en donde los fines de la
norma prevista para la declaratoria de muerte presunta se encuentran satisfechos y las
formalidades legales se encuentran en colisión con los derechos fundamentales y
prevalentes de las víctimas, deben preponderar estos últimos y en consecuencia se debe
confirmar la decisión adoptada por el juez de primera instancia.

Así las cosas es definitivo diferenciar entre la imputación únicamente por el


delito de desaparición forzada y aquella imputación en donde se presentan en
concurso la desaparición forzada y el homicidio. (negrilla fuera del texto)

Es claro para esta Sala, y así fue reiterado en una cita anterior, que el sustento probatorio
principal en el trámite de Justicia y Paz lo constituyen las versiones libres prestadas por los
postulados, razón por la cual si la fiscalía a partir de éstas y de la investigación
complementaria que haya logrado adelantar, concluye que en un determinado caso se
presenta el delito de desaparición forzada en concurso con homicidio y así lo imputa, es
porque tiene el convencimiento absoluto de la muerte de quien fue víctima directa del acto
delictivo. Si por el contrario, en el momento de la imputación los cargos se limitaron al
delito de desaparición forzada es porque el fiscal duda sobre la muerte del afectado directo
y en tal evento mal podría la Corte autorizar el respectivo asentamiento en el registro de
defunción.

Con base en lo anterior esta Corporación confirmará la orden de asentamiento del registro
civil de defunción en aquellos casos donde la fiscalía haya imputado el delito de
desaparición forzada en concurso con el homicidio, pero revocará la misma decisión en los
cuales la imputación hubiera versado únicamente sobre el delito de desaparición forzada
siendo necesario acudir al trámite dispuesto por el Código de Procedimiento Civil.

Valga añadir que el Código Civil en su artículo 97 dispone una diferencia en cuanto a la
fecha de la muerte presunta cuando se realiza el trámite ordinario ante la jurisdicción
voluntaria y el presente caso en donde las circunstancias excepcionales de la confesión
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ofrecen una prueba fundamental de la efectiva muerte del sujeto. Así las cosas el numeral
7 del citado artículo indica que la fecha de la muerte será la del día en que ocurrió el
evento catastrófico, en distinción a lo dispuesto en el numeral 5 en donde se señala que la
fecha será la del último día del primer bienio contado a partir del último día en que se
tuvieron noticias. Debido a lo anterior es necesario indicar que la fecha de muerte en los
hechos por los cuales aquí se ordenará su registro debe ser la misma del día en que
ocurrió la desaparición o la muerte según la narración de los postulados, en clara
concordancia con la norma mencionada.”1185

1308. Vivienda. En ese sentido, se solicitó el otorgamiento de subsidios para la


construcción o el mejoramiento de vivienda de acuerdo con las características de la
región. Al respecto la Sala exhortará a la UARIV para que procure la inclusión de las
víctimas remitidas por el Tribunal en los planes o programas que se adelanten en la
región de Urabá o en el lugar donde se encuentren residiendo actualmente.

1309. Educación y capacitación. En cuanto a este tipo de medidas se solicitó que a


través del SENA se procure el acceso a la oferta educativa para aprendices,
adicionalmente con apoyo económico para el sostenimiento mientras participan en los
cursos. Se solicitó que se tengan en cuenta las condiciones de alfabetización y las
características específicas de la región (actividades económicas y culturales que allí se
desarrollan) para promover la capacidad de emprendimiento y productividad dentro de los
programas laborales de acuerdo al perfil socio-económico de los beneficiarios. Que de
acuerdo con el artículo 130 de la Ley 1448 de 2011, se diseñen programas y proyectos
especiales de generación de empleo rural a cargo del Ministerio del Trabajo, para
asegurar el sostenimiento de las víctimas, de acuerdo al perfil socioeconómico de las
mismas y de la región, y para su implementación se incluya en el Plan Nacional para la
Atención y Reparación Integral de las Víctimas.

1310. La Sala quiere enfatizar en que el derecho a la educación debe ser preservado o
restituido en cualquiera de las fases de la atención a la población víctima del conflicto
armado, y que para garantizar este derecho, el Ministerio de Educación Nacional (MEN) y
las Secretarías de Educación departamentales, distritales y de municipios certificadas,
deben procurar el cubrimiento de las necesidades educativas a través de sus instituciones
educativas.

1311. Igualmente la Sala, teniendo en cuenta el contenido del Plan Nacional de Atención
a las Víctimas, exhortará a la UARIV para que en la región de Urabá se procure la
atención integral a la primera infancia a través de la Estrategia “De Cero A Siempre”, se

1185
Providencia del 21 de septiembre de 2009, radicado 32022, Caso Gian Carlo Gutiérrez.
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mejore la calidad educativa, disminuyan las brechas de inequidad, innovación y


pertinencia, y fortalecer la gestión educativa. En educación superior, se solicitará la
inclusión de las víctimas reconocidas en la presente sentencia en el Programa Centros
Regionales de Educación Superior (CERES), que es una estrategia que permite reducir las
brechas de acceso y permanencia a la educación superior con un énfasis en la atención a
población víctima.

1312. Para tal fin, la Sala recuerda que las víctimas lograrán un acceso preferente al
sistema educativo a través del proceso de articulación interinstitucional en el que los
Centros Regionales remitirán la información directamente a las Secretarías de Educación
certificadas. De acuerdo con lo establecido por el MEN, los niños, niñas y adolescentes
víctimas tienen un acceso preferencial, representado en un cupo y la vinculación al
sistema educativo independientemente del momento del año escolar en que se presenten
y no estará condicionado por los documentos de identidad o certificados que presenten.
En el caso de no tener certificados, deberán presentar exámenes para determinar el nivel
escolar en el que se encuentran. Además, no se les puede exigir el pago de matrícula ni
uniformes. Cada caso debe ser analizado para asegurar la vinculación al sistema
educativo regular o con una metodología flexible, la institución debe ser cercana al lugar
de residencia y no se le deben exigir documentos para la matrícula.

1313. En el caso de acceso a la educación superior (técnica, tecnológica y profesional


universitaria), éste se da a través de instituciones de educación superior públicas, el MEN
o el ICETEX cuando se requiera financiación. Para la Sala resulta importante destacar que
la educación a este nivel trasciende la atención y asistencia y tiene un carácter reparador.
Algunas secretarías de educación cuentan con estrategias de acceso a educación superior,
por lo que se pueden convertir también en un referente en el tema. Para las víctimas
pertenecientes a grupos étnicos se deben aplicar procesos de selección, admisión y
matricula que les permitan acceso prioritario y preferencial a los programas académicos
ofrecidos por las instituciones.

1314. La Sala solicitará información a la UARIV para establecer si el ICETEX, el MEN y la


Unidad han puesto en marcha la alianza estratégica que permite fomentar el acceso de la
población víctima a educación superior a través de la línea de crédito ACCES, para otorgar
subsidios a la matrícula para educación superior1186.

1186
La UARIV ha suscrito con el MEN y el ICETEX un convenio para conformar el Fondo de reparación para el acceso,
permanencia y graduación en educación superior para la población víctima del conflicto armado.
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1315. En cuanto a medidas de capacitación, la Sala exhortará a la Unidad, para que se


incluya a las víctimas reconocidas en la presente sentencia en el Programa de Servicio
Público de Empleo, ofrecido por el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) en el cual se
incluye el desarrollo de talleres ocupacionales que permiten identificar los intereses,
habilidades y competencias de la población y así direccionarlos de acuerdo con su perfil
laboral a la oferta educativa SENA: Formación Titulada (Ayudantes, Operarios, Auxiliares,
Técnicos, Especializaciones Técnicas, Tecnólogos, Especializaciones Tecnológicas, Técnico
profesional) ya sea en los Centros de Formación del SENA y/o convenios de Ampliación de
Cobertura - Formación complementaria, certificación de competencias laborales,
formación a la medida, emprendimiento y empresarismo, Programas especiales como:
Jóvenes Rurales Emprendedoras, utilizando diferentes estrategias como integración con la
media, flexibilidad en ambientes de aprendizaje, horarios y calendario.

1316. Igualmente, la Sala solicitará la inclusión de las víctimas reconocidas en la


presente decisión, mediante la aplicación de la Resolución 582 de 2012, para darle un
acceso preferencial a la formación titulada de la población víctima a través de los Centros
de Formación.

1317. Por considerarlo necesario, la Sala solicitará a la Unidad que remita a las víctimas
de Justicia y Paz a los planes y programas desarrollados por el Ministerio de Trabajo,
teniendo en cuenta lo consagrado en el Decreto 4108 de 2011, en el cual se establecen
como funciones del Ministerio del Trabajo formular, dirigir y evaluar la política de
generación de empleo e incremento del nivel de empleabilidad de la población,
especialmente la población en condición de vulnerabilidad, en coordinación con otras
entidades competentes. Así como también debe reformular, dirigir y evaluar las políticas
que fomenten la estabilidad del empleo, a la reducción de la informalidad, y a establecer
fuentes de protección integral a los desempleados y formular, dirigir y evaluar las políticas
y lineamientos de formación para el trabajo, la normalización y certificación de
competencias laborales y su articulación con las políticas de formación del capital
humano, en coordinación con otras entidades competentes. En este sentido, el Ministerio,
como cabeza de sector debe diseñar, coordinar y hacerle seguimiento a los programas y
proyectos especiales para la generación de empleo rural y urbano.

1318. En ese mismo sentido y por considerarlo de interés para las partes intervinientes
en el presente proceso y especialmente para las víctimas de la región de Urabá, la Sala
quiere enunciar como ha sido concebida la Ruta de Generación de empleo rural y urbano,

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en el Plan Nacional de Atención y Reparación a Víctimas. A continuación se explicarán las


acciones específicas que se adelantarán para el desarrollo de la ruta de generación de
empleo como medida de reparación a las víctimas, en el que se incluye lo establecido en
la Ley 1448 de 2011 con respecto programas de formación, capacitación técnica y
generación de empleo. Cabe recordar que el Gobierno Nacional cuenta con una Política de
Generación de Ingresos diseñada para atender a la población que ha sido víctima del
desplazamiento forzado por la violencia, la cual busca la estabilización socioeconómica de
esta población, dada su condición manifiesta de vulnerabilidad. Igualmente, estas
acciones de atención y asistencia deberán articularse con las establecidas para el tema de
reparación, en la medida en que se crea una política integral en donde se logre restituir
las capacidades y aptitudes de las víctimas para que entren a competir en el mercado
laboral de manera justa.

1319. Para el desarrollo de las rutas mencionadas en el marco de la restitución,


inicialmente se creará una submesa de generación de empleo rural y urbano, en el que se
definirán lineamientos para el diseño, coordinación y seguimiento de los programas a
favor de la generación de empleo de las víctimas. La submesa hará parte de la Mesa de
Empleo, a cargo del Ministerio del Trabajo y deberá articularse con los Subcomités de
Asistencia y Atención, de Restitución y de Indemnización de Víctimas en lo que sea
pertinente. La Submesa será liderada por el Ministerio del Trabajo, de acuerdo con lo
establecido en el artículo 66 del Decreto 4800 de 2011, y contará con la participación del
SENA, el Departamento Nacional de Planeación, Departamento Administrativo para la
Prosperidad Social, Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, Ministerio de Educación
Nacional, Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, Instituto Colombiano de Desarrollo
Rural, Banco Agrario, Bancoldex, Fondo para la Financiación del Sector Agropecuario y las
demás entidades competentes en la materia, como por ejemplo la Unidad para la
Atención y Reparación Integral a las Víctimas, así como con la asesoría permanente de la
Mesa Técnica de Generación de Ingresos.

1320. Una vez identificada la institucionalidad de la ruta, se requiere caracterizar a las


víctimas y construir su perfil socio-laboral. Para ello se establecen las siguientes acciones:

i. Diseñar un instrumento de caracterización que recolecte la información relevante


sobre las condiciones, habilidades y competencias de la población. La construcción
del instrumento de caracterización utilizara los registros administrativos de las

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víctimas generados a partir de diferentes programas, con el objeto de diseñar un


instrumento acorde a las necesidades y perfiles específicos de las víctimas.

ii. Una vez diseñado el instrumento se realizará un cruce de bases de datos oficiales
de víctimas con el fin de identificar a las que se les debe aplicar el instrumento de
caracterización. Finalmente se realizará en territorio la caracterización de las
víctimas con el instrumento de caracterización. La caracterización de esta
población con el instrumento adecuado para establecer los perfiles laborales, se
dará en la medida en que se ubiquen a las víctimas, ya sea dentro de los Centros
Regionales de Atención y Reparación de Víctimas, del que habla el artículo 122 del
decreto 4800 de 2011, o de tener la ubicación geográfica y/o domicilio de las
víctimas a partir de las bases de datos existentes.

iii. Posteriormente se deberá direccionar a las víctimas hacia la oferta institucional, de


acuerdo con la línea de acción a la que se adecua el perfil socio-laboral,
empleabilidad o autoempleo. Para este direccionamiento se requerirá ajustar la
oferta de programas existentes para diseñar una oferta apta cuando la existente
no responda a las necesidades de las víctimas.

1321. En cuanto a empleabilidad Urbana. El Plan define que es competencia del


Gobierno construir y diseñar políticas públicas que incentiven la generación y oferta de
empleos por parte de los sectores públicos y privados, organizar la estructura de
empleabilidad de manera tal que tanto la oferta y la demanda laboral coincidan, y brindar
las herramientas necesarias para que las víctimas puedan entrar a competir en el
mercado laboral en igualdad de condiciones. El Ministerio del Trabajo, será el encargado
de dar los lineamientos de política en materia laboral para fomentar el acceso a
oportunidades de autoempleo o empleo dependiente para las víctimas, en un contexto de
reparación1187.

1322. La metodología de recolección de información para realizar la caracterización


socio-laboral será probada y analizada a partir de pilotos que se realizaran a través de
distintos programas que tiene el Gobierno nacional que atiende la misma población

1187
Si bien es cierto, existen diferentes mecanismos de caracterización socio-laboral, es necesario elaborar formatos
completos y adecuados para realizar un diagnóstico de las necesidades y realidades de las víctimas en materia de empleo
urbano. Estos deben incluir elementos propios que establezcan la posibilidad de redicreccionar a las víctimas ya sea a la
ruta de autoempleo o empleabilidad.

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objetivo. Dicha metodología deberá suministrar la información que permita identificar las
necesidades de educación y formación para el trabajo de las víctimas a nivel individual.

1323. Ahora bien, en lo referente a las rutas de autoempleo, en esta colaboran el


Departamento para la Prosperidad Social (DPS), el Departamento Nacional de Planeación,
la Unidad para las Víctimas y el Ministerio de Comercio Exterior, quienes deberán generar
una estrategia articulada que contemple las diferentes modalidades de emprendimiento,
fortalecimiento, servicios de desarrollo empresarial y asociatividad. Se buscará garantizar
proyectos productivos sostenibles en el tiempo, estableciendo oportunidades reales de
mercadeo y promoviendo la asociatividad.

1324. El Ministerio del Trabajo como cabeza de este programa será el encargado de
articular la estructura de las rutas de empleabilidad y el autoempleo rural para las
víctimas del conflicto armado; sin embargo, la definición de rutas, perfiles, oferta
programática e instrumentos de caracterización para el sector rural, serán definidas y
construidas, en conjunto entre el Ministerio del Trabajo y el Ministerio de Agricultura y
Desarrollo Rural y el INCODER. Con el fin de buscar la sostenibilidad de la restitución una
vez se ha restablecido el goce material de las tierras y territorios, las entidades vienen
avanzando en la articulación de esta política con la Política de Restitución de Tierras.

1325. Medias de reparación de orden pecuniario: las representantes de las víctimas


solicitan para cada uno de los núcleos familiares que representan, el reconocimiento
económico por concepto de daño emergente, lucro cesante, daño moral y daño al
proyecto de vida, que deberán ser proporcionados y adecuados a la gravedad de las
violaciones y al daño sufrido, de conformidad con lo establecido en la jurisprudencia del
Consejo de Estado.

1326. Como la Sala ya lo ha mencionado, dentro de sus funciones no está contemplado


el otorgar el reconocimiento de montos indemnizatorios como los solicitados por las
representantes de las víctimas, empero, la Sala exhorta a la UARIV que tenga en cuenta
las características particulares de cada caso y en la medida de lo posible otorgue lo que
corresponda debido a la gravedad de las conductas ilícitas que generaron el daño o la
afectación que se pretende reparar de forma integral.

1327. Así mismo, las defensoras, solicitaron a la Sala se dé una interpretación amplía e
incluyente al concepto de víctima, que según lo establece la jurisprudencia de la Corte

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Interamericana de Derechos Humanos y de la Corte Constitucional Colombiana,


específicamente en la sentencia C-052 de 2012, se ha entendido que son víctimas o
perjudicados entre otros, las víctimas directas y sus familiares, sin distinguir, al menos
para reconocer su condición de víctimas del delito, el grado de relación o parentesco, por
ello, piden que se reconozca a los hermanos de las víctimas su condición de tal, y se les
asigne como daño moral una cantidad económica acorde con el daño sufrido.

1328. Como en el caso anterior, la Sala recuerda que sobre este punto ya se ha
pronunciado y que ha definido claramente el universo de víctimas que puede acudir al
proceso de Justicia y Paz, cumpliendo los estándares internacionales en la materia,
estableciendo que en caso de ser necesario, las víctimas podrán acudir al SNARIV o
presentar demandas que busquen aclarar la presunta responsabilidad del Estado en cada
caso ante la jurisdicción de lo contencioso administrativo.

1329. Medidas Especiales: la Sala solicitará que en los casos en los que corresponda,
la Unidad Administrativa Especial para la Atención y Reparación Integral a la Víctimas
(UARIV), constituya un fideicomiso en una entidad bancaria autorizada por la
Superintendencia Bancaria a nombre de las víctimas que correspondan a niños, niñas y
adolescentes que se presentaron en este incidente.

1330. A continuación la Sala presenta una tabla en la cual se resumen los tipos de
medidas que se pueden solicitar, las particularidades de cada una y la entidad
responsable para su cumplimiento a favor de las víctimas.

Tipo de medida Medida específica Entidad responsable


Indemnización Indemnización Unidad para las Víctimas
Programa de Acompañamiento Unidad para las Víctimas
para la inversión de los
recursos
Satisfacción Dignificación de la condición de Unidad para las Víctimas
víctima en toda la ruta.
Exención del servicio militar Ministerio de Defensa
obligatorio
Restitución Retorno o reubicación Unidad para las Víctimas y
Departamento para la
Prosperidad Social
Tierras Unidad de Restitución de
Tierras
Vivienda Ministerio de Vivienda /
Ministerio de Agricultura y
Desarrollo Rural
Empleo Rural y Urbano Ministerio de Trabajo y
Ministerio de Agricultura y
Desarrollo Rural
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Tipo de medida Medida específica Entidad responsable


Créditos y Pasivos Bancoldex, Finagro, Fondo
Nacional de Garantías,
Superintendencia Financiera,
Entidades Territoriales
Preferencia en carrera Comisión Nacional del Servicio
Administrativa en caso de Civil
empate
Rehabilitación Psicológica - Física (Programa Ministerio de Salud y
de Atención Psicosocial y Salud
Integral a las Víctimas)
Garantías de no repetición Programas de Protección Unidad de Protección

1331. Teniendo en cuenta el artículo 23 de la Ley 1592 de 2013, la Sala presenta a


continuación el listado de víctimas reconocidas para que la UARIV realice las gestiones
necesarias para su inclusión en el SNARIV a fin de que obtengan las medidas que
permitan su reparación integral.

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
ALCIDES TORRES
ARIAS Consuelo Rodríguez Compañera
32288777 Declaraciones extrajuicio
Peña permanente
Delitos Legalizados:

3 Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Dianelly Torres
Desaparición forzada 1028001413 Hija Registro Civil
Rodríguez
art. 165.
Tortura en persona
protegida art. 137.
ÁNGEL DAVID Declaración extrajuicio.
Blanca Yanet
QUINTERO BENITEZ 43143414 Compañera Juramento estimatorio de
Graciano Acevedo
afectaciones.
Delitos Legalizados:
Luz Enith Quintero Registro civil.
1045493318 Hija
3 Homicidio en persona Serna Declaración extrajuicio.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Desaparición forzada Isneisa Quintero Registro civil.
art. 165. 1040368289 Hija
Graciano Declaración extrajuicio.
Tortura en persona
protegida art. 137.
Registro civil.
Farley Alberto
98665097 Hijo Juramento estimatorio de
IVO DE JESÚS Hernández Lopera
afectaciones.
HERNÁNDEZ MUÑOZ Registro civil.
Linda María
43871506 Hija Partida de Bautismo.
4 Delitos Legalizados: Hernández Lopera
Declaraciones extrajuicio.
Danney Gicela Registro civil.
Homicidio en persona 43733520 Hija
Hernández Lopera Declaración extrajuicio.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Registro civil.
Ivonne Arleth
43748223 Hija Juramento estimatorio de
Hernández Lopera
afectaciones.
GONZALO ANTONIO
RIOS SALINAS
Registro civil de
5 Ana del Carmen
Condena proferida por 22197884 Cónyuge matrimonio. Declaraciones
García Blandon
el Juzgado Primero extrajuicio.
Penal del Circuito
Especializado de

1188
Los nombres de las víctimas se han escrito como aparecen en las cédulas de ciudadanía.
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VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
Antioquia.
RUBEN DARIO LORA
DÍAZ y MARTHA LUZ
CHAVARRIA
PALENCIA
Carmen Elena Lora Madre de Rubén Registro civil.
6 22154753
Delitos Legalizados: Díaz Darío Lora Declaración extrajuicio.

Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1
Registro civil hijo.
JAIME IVÁN Declaración extrajuicio que
HOLGUÍN OQUENDO María del Carmen no tenía unión marital y
21508195 Madre
Oquendo de Holguín que vivía con sus padres.
7 Delitos Legalizados: Juramento estimatorio de
afectaciones.
Homicidio en persona Registro civil hijo.
protegida art. 135 Jaime de Jesús Declaración extrajuicio que
3393297 Padre
parágrafo numeral 1 Holguín Sierra no tenía unión marital que
vivía con sus padres.
Registro Civil Hijo.
Declaraciones extrajuicio.
WILSON ALBERTO
Nubia del Carmen Partida de Matrimonio con
ACEVEDO PULGARÍN 21154414 Madre
Pulgarín Monsalve Héctor de Jesús Acevedo.
Juramento estimatorio de
8 Delitos Legalizados:
afectaciones.
Registro civil hijo.
Homicidio en persona
Declaraciones extrajuicio.
protegida art. 135 Héctor de Jesús
639909 Padre Partida matrimonio con
parágrafo numeral 1 Acevedo
Nubia del Carmen Pulgarín
Monsalve.
FRANCISCO JAVIER Registro civil.
Adriana Echavarría
ECHAVARRIA PÉREZ 1027942794 Hija Juramento estimatorio de
Correa
afectaciones.
8 Delitos Legalizados: Juan Carlos
1128276834 Hijo Registro civil
Echavarría Villa
Homicidio en persona
Gustavo Adolfo
protegida art. 135 71785877 Hijo Registro civil
Echavarría Villa
parágrafo numeral 1
RUBEN DARIO Declaración Extrajuicio.
Yuddi Elena Morales
AGUDELO DUQUE 33991830 Compañera Juramento estimatorio de
Carmona
afectaciones.
Delitos Legalizados: Rubén Antonio
11 687831 Padre Partida de Matrimonio
Agudelo Agudelo
Homicidio en persona
protegida art. 135 Doralba Duque de
22153782 Madre Partida de Matrimonio
parágrafo numeral 1 Agudelo
Secuestro simple art. Natalia Andrea
1028004084 Hija Registro civil.
168. Agudelo Morales
CERBULO DE JESÚS
AGUIRRE CHAVERRA

Delitos Legalizados:
11 Gloria Aguirre
39300980 Hija Registro civil.
Homicidio en persona Quintero
protegida art. 135
parágrafo numeral 1
Secuestro simple art.
168.
HERLEY ALEXANDER Apolinar del Cristo
MARQUEZ ORTEGA 15368601 Padre Registro civil hijo.
Márquez Velásquez
12 Delitos Legalizados: Registro civil.
Valoración Psicológica
Diana María Márquez
Homicidio en persona 39423580 Hermana Forense, en el que se
Ortega
protegida art. 135 concluye que padece una
parágrafo numeral 1. depresión moderada.

514
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
MARCIAL DE JESÚS
BERTEL RIOS Registro civil hijo.
Delitos Legalizados: Declaración juramentada.
12 Luzely Ríos Nobles 39155797 Madre Facturas gastos funerarios.
Homicidio en persona Juramento estimatorio de
protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1.
OSCAR DE JESÚS Mauricio Alexander
98617692 Hijo Registro civil.
MONTOYA PATIÑO Montoya López
Luz Olivia López
13 Delitos Legalizados: Granada 21617899 Cónyuge Partida de Matrimonio
(FALLECIDA)
Homicidio en persona Registro civil.
Johanna María
protegida art. 135 43145596 Hija Juramento estimatorio de
Montoya López
parágrafo numeral 1. afectaciones.
JOSÉ MANUEL
MARTÍNEZ
CÁRDENAS Registro civil hijo.
Partida de matrimonio.
13 María Lucelly
Delitos Legalizados: 21618507 Madre Declaraciones extrajuicio.
Cárdenas de Martínez
Juramento estimatorio de
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
ALFREDO Registro Matrimonio.
HERNANDO GÓMEZ María Eugenia Marín Declaraciones extrajuicio.
39405790 Cónyuge
RICO Góez Juramento estimatorio de
afectaciones.
Delitos Legalizados:
14
Homicidio en persona Registro civil.
María Carolina Gómez
protegida art. 135 1128273543 Hija Juramento estimatorio de
Marín
parágrafo numeral 1. afectaciones.
Secuestro simple art.
168.
Partida de Matrimonio.
María Gloria García Declaraciones extrajuicio.
21576938 Cónyuge
Agudelo Juramento estimatorio de
afectaciones.
JULIO HERNANDO Julio Alberto Rico
RICO SÁNCHEZ 70420118 Hijo Registro civil.
García
Delitos Legalizados: Alba Luz Rico García 43491327 Hija Registro civil.
15
Natalia Andrea Rico
Homicidio en persona 32135690 Hija Registro civil.
García
protegida art. 135
César Augusto Rico
parágrafo numeral 1. 70419541 Hijo Registro civil.
García
Juan Guillermo Rico
70421427 Hijo Registro civil.
García
Patricia Rico García 43490198 Hija Registro civil.
ANDRÉS CORDOBA
CASTILLO
Declaración Extrajuicio.
16 Delitos Legalizados: Marina Socorro Compañera
39297516 Juramento estimatorio de
Taborda Gómez permanente
afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
VICENTE ZAMBRANO Hermilas de Jesús
39417230 Compañera Declaración extrajuicio
Romero Mendoza
Delitos Legalizados: Luís Vicente 1028015370
Hijo Registros civiles.
18 Zambrano Romero FALTA COPIA
Homicidio en persona
Catalina Zambrano
protegida art. 135 22164630 Madre Registro Civil hijo.
Durango
parágrafo numeral 1.
LEÓN ANTONIO
CORREA
Gloria Cecilia Giraldo
20 Delitos Legalizados: 24435211 Compañera Declaración Extrajuicio
González
Homicidio en persona
protegida art. 135

515
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
parágrafo numeral 1.

DORIAN RENE
MONTOYA OROZCO

Delitos Legalizados: Olivia Orozco de Registro civil hijo.


21 21685951 Madre
Montoya Declaraciones extrajuicio
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
LINDELIA ROJAS
ORTIZ

Delitos Legalizados: María Consuelo Ortiz


21 39401033 Madre Registro civil hija.
Usuga
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
BEATRIZ ELENA
DELGADO CAICEDO
Registro Civil, Partida de
Delitos Legalizados: Aura Nelly Caicedo Bautismo hija.
21 39409560 Madre
Sánchez Juramento estimatorio de
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
JAIME ALBERTO Amparo del Socorro Registro civil hijo.
GIRALDO JIMENEZ 22158341 Madre
Jiménez de Giraldo Declaración extrajuicio
Delitos Legalizados:
21
Homicidio en persona Jaime de Jesús
8278870 Padre Registro civil hijo
protegida art. 135 Giraldo Cardona
parágrafo numeral 1.
CARLOS ENRIQUE
CUESTA CANTILLO
Registro civil hijo.
22 Delitos Legalizados: Iván Gregorio Cuesta
773169 Padre Partida de Bautismo.
Durán
Declaración Extrajuicio.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Declaración Extrajuicio
JESÚS ANTONIO Liliana Hurtado Mejía 39410394 Compañera Juramento estimatorio de
PEDROZA afectaciones.
Juan Esteban Pedroza
Delitos Legalizados: FALTA COPIA Hijo Registro civil
23 Hurtado

Homicidio en persona Jesús Alejandro Registro civil, Declaración


1028010373 Hijo
protegida art. 135 Pedroza Hurtado extrajuicio.
parágrafo numeral 1. Cristian Camilo Registro civil, declaración
1130643365 Hijo
Predoza Hurtado extrajuicio.
JORGE ELIÉCER
GUERRA VANEGAS
Registro civil hijo y Partida
Delitos Legalizados: María Caridad de Bautismo hijo.
23 21672039 Madre
Vanegas de Guerra Juramento estimatorio de
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
LUCIANO TORRES
URANGO

25 Delitos Legalizados: Rufina Urango de Registro Civil Hijo, partida


22161812 Madre
Torres de Matrimonio.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.

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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS

FILADELFO BERTEL
PÉREZ
Marciana Rosa Pérez
Delitos Legalizados: Rosales
26 23174613 Madre Registro civil hijo.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Margarita del Carmen
39308157 Hija Registro civil
Jiménez Argel
Almida Claret Pineda
Compañera
Galindo FALLECIDA NA
permanente
Carmenza Jiménez
39306737 Hija Registro Civil
Pineda
Jorge Iván Jiménez
1027950250 Hijo Registro civil
Pineda
Jaime Antonio
71938575 Hijo Registro civil
Jiménez Pineda
Nellyda Rosa Jiménez
39407640 Hija Registro civil
Pineda
Arisnel Jiménez Argel 71989800 Hijo Registro civil

SAMUEL ANTONIO Marco Antonio


71937762 Hijo Registro civil
JIMÉNEZ MADERA Jiménez Pineda
Fanny Ester Jiménez
39408482 Hija Registro civil
Delitos Legalizados: Pineda
27 María Elubina
Homicidio en persona 39416257 Hija Registro civil
Jiménez Pineda
protegida art. 135 Enilda Luz Jiménez
parágrafo numeral 1. 39420503 Hija Registro civil
Pineda
Hurto calificado y Sandra Milena
agravado art. 350 y 351 39421666 Hija Registro civil
Jiménez Pineda
Josefa María Jiménez
39300349 Hija Registro civil
Ballesteros
Yeny Elisa Jiménez
1027998583 Hija Registro civil
Argel
Carlos Mario Jiménez
8323682 Hijo Registro civil
Pineda
Luis Eduardo Jiménez
71938353 Hijo Registro civil
Argel
Magali del Carmen Compañera
39303530 Declaración extrajuicio
Argel Montes permanente
Jairo Jiménez Argel 71351916 Hijo Registro civil
Miguel Enrique
71943087 Hijo Registro civil
Jiménez Argel
Albeiro de Jesús
71240472 Hijo Registro civil
Jiménez Argel
EUCLIDES CUESTA
Rosalía Hernández
CUESTA 39299024 Compañera Declaración extrajuicio.
Mena
Delitos Legalizados:
28
Homicidio en persona
Cristhian Alexander FALTA CEDULA.
protegida art. 135
Cuesta (Nació Hijo Registro civil
parágrafo numeral 1.
Hurto calificado y 15/Sep/93)
agravado art. 350 y
351.
GUSTAVO ALBERTO
SEPÚLVEDA ZAPATA Sol María Jiménez
29 42090041 Compañera Declaración Extrajuicio
Bertel
Delitos Legalizados:

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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS

Homicidio en persona
protegida art. 135 Johana Sepúlveda Registro Civil.
1045676239 Hija
parágrafo numeral 1. Jiménez Partida de Bautismo
Secuestro simple art.
168.
Declaración extrajuicio
Nelly Morales Compañera
39409127 Escrito de identificación de
Chaverra permanente
las afectaciones.
Registro Civil.
ARLEY DE JESÚS Arnel de Jesús Caro Declaración extrajuicio.
CARO ZAPATA 1052392119 Hijo
Morales Escrito de identificación de
las afectaciones.
Delitos Legalizados: Nació
30 Registro Civil.
26/Abril/95.
Homicidio en persona Jheison Anderson Declaración extrajuicio.
FALTA COPIA Hijo
protegida art. 135 Caro Morales Escrito de identificación de
CEDULA.
parágrafo numeral 1. las afectaciones

Registro Civil.
Katerine Esneda Caro Declaración extrajuicio
1052400904 Hija
Morales Escrito de identificación de
las afectaciones
FAMIR EDUARDO
MACHADO MURILLO Declaraciones extrajuicio.
Compañera
Delitos Legalizados: Aimara Mina Julio1189 39412782 Juramento estimatorio de
permanente
afectaciones.
Homicidio en persona
31
protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Maira Alejandra Registro civil y
Hurto calificado y 1152447717 Hija
Machado Mina declaraciones extrajuicio
agravado art. 350 y
351.
EVER DAVID ZAPATA Registro Civil hijo.
PALACIO Heroína Palacio Declaración extrajuicio.
21508314 Madre
Zapata1190 Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.
Declaración extrajuicio.
32 Compañera
Homicidio en persona Ennis Mira Pérez 39413679 Juramento estimatorio de
permanente
protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Iván Darío Zapata
Secuestro simple art. 1067924543 Hijo Registro civil
Mira1191
168.
Alba Nury Zambrano
39417458 Hija Registro civil
Arango
ELEUTERIO Luis Alfonso
71946581 Hijo Registro civil
ZAMBRANO Zambrano Arango1192
PALENCIA Eusebio Zambrano
773085 Padre Registro civil hijo
Duran
Delitos Legalizados: Declaraciones extrajuicio.
Flor Emilse Sosa Compañera
34 43415823 Juramento estimatorio de
Duarte1193 permanente
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135 Yurfari Zambrano
parágrafo numeral 1. 1027965857 Hija Registro civil
Sosa
Desaparición forzada Yurledis Zambrano
art. 165. 1028010673 Hija Registro civil
Sosa
Dani Esteduar
1028018418 Hijo Registro civil
Zambrano Sosa1194

1189
Recibió de Acción Social $21.600.000.
1190
Recibió de Acción Social $19.800.000.
1191
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
1192
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
1193
Recibió de Acción Social $825.000.
1194
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
518
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
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VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
PEDRO PABLO BRAN
GARCES
Registro civil hijo.
Delitos Legalizados: Rosa Elena Bran Declaraciones extrajuicio.
35 21302187 Madre
Holguín1195 Juramento estimatorio de
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
ISMAEL ANTONIO
Emilda Rosa Urango Compañera
MARTÍNEZ 26215740 Declaración extrajuicio
Bravo permanente
QUINTERO
Eglis Martínez
36 Delitos Legalizados: 1073991919 Hija Registro civil
Urango1196
Homicidio en persona
Ismael Antonio
protegida art. 135 1073998881 Hijo Registro civil
Martínez Urango1197
parágrafo numeral 1.
JOSÉ DANIEL Registro Civil hijo.
CANTERO Declaración extrajuicio.
Evangelina Isabel
MARTÍNEZ 32250533 Madre Juramento estimatorio de
Martínez Ramos
afectaciones.
36 Delitos Legalizados:

Homicidio en persona Edinson Cantero Nació


Hijo menor Registro Civil.
protegida art. 135 Vanegas 29/MAYO/1995
parágrafo numeral 1. FALTA COPIA
WILLINTON
RESTREPO José Uriel Restrepo
15480127 Padre Registro civil hijo
SEPULVEDA Durango

37 Delitos Legalizados:
Registro civil hijo.
Homicidio en persona Luz Melida Sepúlveda Declaración extrajuicio.
22173141 Madre
protegida art. 135 Ramírez Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1. afectaciones.
JOSÉ ANTONIO
ZAPATA BORJA

Delitos Legalizados:

Homicidio en persona
Registro civil hijo.
protegida art. 135
Antonio de Jesús Declaración extrajuicio.
37 parágrafo numeral 1. 3481627 Padre
Zapata Castañeda1198 Juramento estimatorio de
Homicidio en persona
afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1,
en la modalidad de
tentativa.
Actos de terrorismo art.
144.
MARLENY DE JESÚS
Edgar de Jesús
BORJA QUINTERO 8412120 Cónyuge Registro de Matrimonio
Arango Manco
Delitos Legalizados: Registro civil.
Juramento estimatorio de
Aidenia Arango Borja 43974920 Hija
Homicidio en persona afectaciones. Informe
protegida art. 135 pericial.
37
parágrafo numeral 1. Registro civil
Homicidio en persona Yudi Andrea Arango Juramento estimatorio de
1020410744 Hija
protegida art. 135 Borja afectaciones. Informe
parágrafo numeral 1, pericial.
en la modalidad de Registro civil.
tentativa. Edinson Arango Borja 71799558 Hijo Juramento estimatorio de
Actos de terrorismo art. afectaciones.

1195
Recibió de Acción Social $20.600.000.
1196
Recibió de Acción Social $20.000.000.
1197
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
1198
Recibió de Acción Social $21.000.000.
519
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
144.

JAIME LUIS MORA


ESTRADA

Delitos Legalizados:

Homicidio en persona
Registro civil hijo.
protegida art. 135
Jovita de la Cruz Declaraciones extrajuicio.
37 parágrafo numeral 1. 39410699 Madre
Estrada Castillo1199 Juramento estimatorio de
Homicidio en persona
afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1,
en la modalidad de
tentativa.
Actos de terrorismo art.
144.
JAVIER ORLANDO Declaraciones extrajuicio.
Blanca Nelly Compañera
DE JESÚS OCAMPO 22158365 Juramento estimatorio de
Graciano1200 permanente
ARIAS afectaciones.
Carlos Mario Ocampo
71947029 Hijo Registro civil
Delitos Legalizados: Graciano
María Piedad Ocampo
Homicidio en persona 39419878 Hija Registro civil
Graciano
protegida art. 135
37
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona
protegida art. 135
Huber Humberto
parágrafo numeral 1, 8323337 Hijo Registro civil
Ocampo Graciano
en la modalidad de
tentativa.
Actos de terrorismo art.
144.
RAÚL ANTONIO Declaraciones extrajuicio.
USUGA DUARTE Luz Dary David Compañera
39409831 Juramento estimatorio de
Terán1201 permanente
afectaciones
Delitos Legalizados:

Homicidio en persona Sandra Milena Usuga


protegida art. 135 1027962746 Hija Registro civil
David
37 parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1,
en la modalidad de Eliana Andrea Usuga
1028008381 Hija Registro civil
tentativa. David
Actos de terrorismo art.
144.
LISANDRO OVIEDO
MENDOZA Elsy del Carmen
39408043 Hija Registro Civil
Oviedo Algarín1202
Delitos Legalizados:
Cecilia Inés Oviedo
Homicidio en persona 52071327 Hija Registro civil
Algarín
protegida art. 135
Partida de Matrimonio.
37 parágrafo numeral 1. Consuelo del Carmen
24705686 Cónyuge Juramento estimatorio de
Homicidio en persona Algarín de Oviedo
afectaciones
protegida art. 135
parágrafo numeral 1, Hernán Enrique
71941770 Hijo Registro civil
en la modalidad de Oviedo Algarín
tentativa.
Actos de terrorismo art. Marles Jhoana Oviedo
1027950483 Hija Registro civil
144. Algarín

1199
Recibió de Acción Social $15.667.000.
1200
Recibió de Acción Social $19.000.000.
1201
Recibió de Acción Social $19.000.000.
1202
Recibió de Acción Social $9.000.000.
520
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
GABRIEL AREIZA Registro civil hijo.
ORTIZ María del Carmen Declaración extrajuicio.
22157379 Madre
Ortiz de Areiza1203 Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.
Compañera
Liliana María Aguirre 39410039 Declaración extrajuicio
Homicidio en persona permanente
protegida art. 135
37 parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona
protegida art. 135
Carlos Humberto
parágrafo numeral 1, 1073684829 Hijo Registro civil
Areiza Aguirre
en la modalidad de
tentativa.
Actos de terrorismo art.
144.
NAYIBIS ESTER
ARSIA BELTRÁN

Delitos Legalizados:
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Sara María Arsia
37 39411689 Madre Registro civil hija.
Homicidio en persona Beltrán1204
protegida art. 135
parágrafo numeral 1,
en la modalidad de
tentativa.
Actos de terrorismo art.
144.
ABEL ANTONIO Declaración extrajuicio.
Compañera
AREIZA ZAPATA Aurora David 39407448 Juramento estimatorio de
permanente
afectaciones.
Delitos Legalizados: Yadier Andrés Areiza
1038334430 Hijo Registro civil
David
Homicidio en persona Registro civil.
protegida art. 135 Kelly Cecilia Areiza Nació
Hija Juramento estimatorio de
37 parágrafo numeral 1. David 21/Mar/95
afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1, Registro civil.
Jaiber Jair Areiza
en la modalidad de 8085733 Hijo Juramento estimatorio de
David
tentativa. afectaciones
Actos de terrorismo art.
144.
LUZ DARY VILORIA
ARRIETA

Delitos Legalizados: Historia clínica.


Informe técnico médico
Homicidio en persona Luz Dary Viloria legal. Declaración
37 39414532 Víctima directa
protegida art. 135 Arrieta1205 extrajuicio.
parágrafo numeral 1, Juramento estimatorio de
en la modalidad de afectaciones.
tentativa.
Actos de terrorismo art.
144.
SANDY DIDSON
ARRIETA (NATALIA
PAOLA ARIAS Historia clínica.
DIDSON) Dictamen médico legal.
Sandy Didson Declaraciones extrajuicio.
37 Delitos Legalizados: Arrieta1206 (Natalia 20767997 victima directa Juramento estimatorio de
Paola Arias Didson). afectaciones. Informe de
Homicidio en persona entrevista de afectaciones
protegida art. 135 psicológicas y psicosociales.
parágrafo numeral 1,
en la modalidad de

1203
Recibió de Acción Social $22.000.000.
1204
Recibió de Acción Social $23.000.000.
1205
Recibió de Acción Social $12.800.000.
1206
Recibió de Acción Social $21.000.000.
521
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
tentativa.
Actos de terrorismo art.
144.

LUÍS EDUARDO Registro civil.


NARANJO JIMÉNEZ Juramento estimatorio de
Luis Eduardo Naranjo
8173706 Víctima directa afectaciones.
Jiménez1207
Delitos Legalizados: Informe médico técnico-
legal de lesiones no fatales.
Homicidio en persona Jader Eduardo
1027948560 Hijo Registro civil
protegida art. 135 Naranjo Valencia
37 parágrafo numeral 1. Diana Katerine
Homicidio en persona 1022387083 Hija Registro civil.
Naranjo Valencia
protegida art. 135 Erika Yazmin Naranjo
parágrafo numeral 1, 1027962277 Hija Registro civil
Valencia
en la modalidad de
tentativa. Gilma Victoria
Actos de terrorismo art. 43141043 Hija Registro civil
Valencia
144.
CARMEN ROSIRIS
ALEMÁN PACHECO

Delitos Legalizados: Registro civil. Declaración


Sandra Patricia extrajuicio.
38 39421038 Hija
Homicidio en persona Carvajal Alemán1208 Juramento estimatorio de
protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Secuestro simple art.
168.
Declaración extrajuicio.
Juramento estimatorio de
LEÓNIDAS DE JESÚS Gilma Dorys Jiménez Compañera
39301334 afectaciones. Informe de
GÓMEZ Guerrero permanente
entrevista de afectaciones
psicológicas y psicosociales.
Delitos Legalizados:
Registro Civil.
39 Ángela January Informe de entrevista de
Homicidio en persona 43186010 Hija
Gómez Jiménez afectaciones psicológicas y
protegida art. 135
psicosociales.
parágrafo numeral 1.
Registro Civil.
Desaparición forzada
Leonela Gómez Informe de entrevista de
art. 165. 1036627259 Hija
Jiménez afectaciones psicológicas y
psicosociales.
VICTOR DAVID
VALDES DUARTE

Delitos Legalizados: Registro civil hijo.


Elizabeth Duarte Juramento estimatorio de
40 43012881 Madre
Homicidio en persona Velásquez afectaciones.
protegida art. 135 Informe Pericial.
parágrafo numeral 1.
Desaparición forzada
art. 165.
ALBERTO GUISAO Registro civil hijo.
Aura Guisao
ABDON 21689519 Madre Declaración extrajuicio.
Celada1209
Informe pericial.
Delitos Legalizados: Luisa Fernanda
1037595421 Hija Registro civil
Guisao Guerra
40
Homicidio en persona Juan Felipe Guisao
protegida art. 135 1036631452 Hijo Registro civil
Guerra
parágrafo numeral 1.
Yeraldin Guisao
Desaparición forzada 1017197629 Hija Registro civil
Guerra
art. 165.

1207
Recibió de Acción Social $5.900.000.
1208
Recibió de Acción Social $21.400.000
1209
Recibió de Acción Social $20.000.000.
522
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
Registro Civil Hijo.
ÁLVARO DE JESÚS María Lilian Álzate de Informe pericial.
29445992 Madre
GÓMEZ ALZATE Gómez1210 Juramento estimatorio de
afectaciones.
Delitos Legalizados:
Edgar Gómez Alzate 71717470 Hijo Partida de Bautismo.
40
Homicidio en persona Gilberto Gómez Alzate 71608258 Hijo Registro civil.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Jhon Jairo Gómez
71658490 Hijo Registro civil.
Desaparición forzada Alzate
art. 165. Eucaris de Jesús
43029702 Hija Registro civil.
Gómez Alzate
JUAN BAUTISTA Registro Civil Hijo.
DURANGO GUERRA Gilma Rosa Guerra Informe pericial.
21691284 Madre
Higuita1211 Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.
40 Compañera
Digna María López 43156295 Declaración extrajuicio.
Homicidio en persona permanente
protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Juan Esteban Nació Registro civil hijo.
Hijo menor
Desaparición forzada Durango López 23/03/1997 Declaración extrajuicio
art. 165.
OSWAR ALEXIS María Irene Valencia Registro civil hijo.
42974782 Madre
URREGO VALENCIA García1212 Declaración extrajuicio.
Arelis Patricia Zapata Compañera
43636537 Declaración extrajuicio
Delitos Legalizados: Morales permanente
40 Mario Andrés Urrego Nació
Homicidio en persona Hijo menor Registro Civil
Zapata 23/12/1999
protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Angie Valentina Nació
Hija menor Registro Civil
Desaparición forzada Urrego Zapata 25/08/1998
art. 165.
OMAR ALBEIRO
Registro civil hijo.
CUESTA MONTERO
Partida de Bautismo.
Delitos Legalizados: Edith María Montero
41 39298584 Madre Declaración extrajuicio.
Homicidio en persona Cerda
Juramento estimatorio de
protegida art. 135
afectaciones.
parágrafo numeral 1.
WALTER ARLEY
BECERRA
MOSQUERA Registro civil hijo. Registro
de defunción. Declaración
Ana Julia Mosquera
42 Delitos Legalizados: 26263219 Madre extrajuicio
Moreno
Juramento estimatorio de
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
JORGE HERNANDO
ARDILA GÓMEZ

Delitos Legalizados: Registro civil.


Juliana Ardila
43 Homicidio en persona 1036603589 Hija Juramento estimatorio de
Restrepo1213
protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Secuestro simple art.
168.
MANUEL FRANCISCO Declaraciones extrajuicio.
Teresa de Jesús Valle Compañera
VALDIRIS HURTADO 39304073 Juramento estimatorio de
Tuberquia permanente
afectaciones.
44 Delitos Legalizados: Rosa Aida Valle Registro Civil.
39319937 Hija
Tuberquia1214 Partida de Bautismo.
Homicidio en persona Oscar William Valle Registro Civil.
1045503224 Hijo
protegida art. 135 Tuberquia1215 Partida de Bautismo.

1210
Recibió de Acción Social $9.000.000.
1211
Recibió de Acción Social $9.000.000.
1212
Recibió de Acción Social $20.000.000.
1213
Recibió de Acción Social $11.000.000.
1214
Recibió de Acción Social $20.000.000.
1215
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
523
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
parágrafo numeral 1. Miguel Antonio Valle Registro Civil.
1045509827 Hijo
Secuestro simple art. Tuberquia1216 Partida de Bautismo.
168. Francisco Emilio Valle Registro Civil, Partida de
1045503225 Hijo
Tuberquia1217 Bautismo.
JOHN JAIRO ZAPATA
ENAMORADO

Delitos Legalizados:
Catalina Enamorado
46 21160073 Madre Registro civil
Homicidio en persona Álvarez
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Secuestro simple art.
168.
FRANKLIN ISAÍAS Partida de Matrimonio y
Rosa Angélica Moreno
POVEDA MOLINA 32285628 Esposa registro.
Muñoz
Declaración extrajuicio.
47 Delitos Legalizados:
Claudia Viviana
Homicidio en persona 43972562 Hija Registro civil
Poveda Moreno
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
EVANGELISTA
ANTONIO PÁJARO
RUIZ
Declaración extrajuicio.
María Idelisa Rivas Compañera
48 Delitos Legalizados: 26334781 Juramento estimatorio de
Murillo1218 permanente
afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Declaraciones extrajuicio.
Fabia Hinestroza Compañera
39302230 Juramento estimatorio de
Guaris permanente
afectaciones.
Luz Bernarda Compañera
26377336 Declaraciones extrajuicio.
Quejada Caicedo permanente
PRESENTADO
Yuliana Gómez
GÓMEZ 1045510060 Hija Registro civil
Quejada
Yusepi Gómez
Delitos Legalizados: 1045509066 Hijo Registro civil
49 Quejada
Glenis Johana Gómez
Homicidio en persona 1045507746 Hija Registro Civil
Hinestroza
protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Jhon Andrés Gómez
1045510021 Hijo Registro Civil
Hinestroza1219
Gladis Matilde Gómez
1045498795 Hija Registro Civil
Hinestroza
Gloria Amparo Gómez
1045498794 Hija Registro Civil
Hinestroza
JESÚS ERNELIO Declaraciones extrajuicio.
Geanet María Díaz Compañera
ANDRADE BECERRA 39401472 Juramento estimatorio de
Quintana1220 permanente
afectaciones.
Delitos Legalizados: Jesús Ernelio Andrade
51 1028008143 Hijo Registro civil
Díaz
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Andrés David
1040372107 Hijo Registro civil
Secuestro simple art. Andrade Díaz
168.

1216
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
1217
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
1218
Recibió de Acción Social $10.000.000.
1219
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
1220
Recibió de Acción Social $20.000.000.
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HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
LUÍS EDUARDO
PALACIO NÚÑEZ
Partida de Bautismo hijo.
52 Delitos Legalizados: Egla Belén Núñez Declaración extrajuicio.
22153942 Madre
Urango Juramento estimatorio de
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Partida de matrimonio.
Blanca Nelly David de
22157897 Cónyuge Juramento estimatorio de
Moreno
afectaciones.
Registro Civil Declaración
Martha Elena Moreno extrajuicio.
40098792 Hija
Cabezas1221 Juramento estimatorio de
afectaciones.
Registro civil.
Aydee Moreno David 43802447 Hija Juramento estimatorio de
afectaciones.
Registro civil.
Astrid Milena Moreno
43279678 Hija Juramento estimatorio de
JAIME HERNÁN David
afectaciones.
MORENO COSSIO
Registro civil.
Oscar Jhovanny
71712959 Hijo Juramento estimatorio de
53 Delitos Legalizados: Moreno David
afectaciones.
Registro civil.
Homicidio en persona Erika Yirley Moreno
1037601609 Hija Juramento estimatorio de
protegida art. 135 David
afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Registro civil.
Yoni Alesander
8175068 Hijo Juramento estimatorio de
Moreno David
afectaciones.
Registro civil.
Edwin Yulian Moreno
71799206 Hijo Juramento estimatorio de
David
afectaciones.
Registro civil.
Jaime Hernán Moreno
98501192 Hijo Juramento estimatorio de
David
afectaciones.
Registro civil.
Deison Alexis Moreno
1036602362 Hijo Juramento estimatorio de
David1222
afectaciones.
LUÍS ALBERTO
GUISAO RÍOS
José Aldemar Guisao
637753 Padre Registro civil hijo
Delitos Legalizados: David1223

Homicidio en persona
54 protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona Registro civil hijo.
Rosana Ríos de
protegida art. 135 21692205 Madre Juramento estimatorio de
Guisao
parágrafo numeral 1, afectaciones.
en la modalidad de
tentativa.
ANTONIO MARINO
MORENO ASPRILLA Registro civil hijo.
Inés Catalina Ramírez 26354405 Madre
Declaración extrajuicio
Delitos Legalizados:

Homicidio en persona
54 protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Declaraciones extrajuicio.
Emilse del Carmen Compañera
Homicidio en persona 22160856 Juramento estimatorio de
Galindo Flórez permanente
protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1,
en la modalidad de
tentativa.

1221
Recibió de Acción Social $20.000.000.
1222
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
1223
Recibió de Acción Social $44.000.000.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
JULIO ALFONSO Declaración extrajuicio.
Glenis María Licona Compañera
DÍAZ PETRO 32286912 Juramento estimatorio de
López permanente
afectaciones.
Delitos Legalizados:
Iván Darío Díaz Nació
Hijo menor Registro civil
Homicidio en persona Licona 9/05/1995
54 protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona Declaración extrajuicio.
protegida art. 135 Yerly María Cortes Compañera
32292320 Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1, Hernández permanente
afectaciones.
en la modalidad de
tentativa.
HÉCTOR ALONSO
TASCÓN DUQUE y
WILLINGTON DE
JESÚS TASCÓN
DUQUE
(HERMANOS)
Registro civil hijos.
Declaraciones extrajuicio.
Delitos Legalizados:
54 Ana Joaquina Duque Informe de entrevista de
32285981 Madre
de Rúa afectaciones psicosociales.
Homicidio en persona
Informe pericial. Juramento
protegida art. 135
estimatorio de afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1,
en la modalidad de
tentativa.
RODOLFO RAMIRO
RAMOS RUÍZ Yanis Ramos Usuga 1041262545 Hija Registro Civil

Registro civil de
Delitos Legalizados: matrimonio.
Pedro Manuel Ramos
6573678 Padre Registros civiles.
Homicidio en persona Fabra
Juramento estimatorio de
54 protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona
protegida art. 135 Registro civil hijo.
Ruth Rebeca Ruiz
parágrafo numeral 1, 34905458 Madre Juramento estimatorio de
Romero
en la modalidad de afectaciones.
tentativa.

LEONARDO MINOTA Declaración extrajuicio.


MOSQUERA Mercedes Matute Compañera
39301941 Juramento estimatorio de
Asprilla permanente
afectaciones.
Delitos Legalizados:
Registro civil. Declaración
Homicidio en persona Yesica Paola Minota extrajuicio.
54 1028004789 Hija
protegida art. 135 Matute1224 Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1.
afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135 Leonardo Minota Ruiz 1147934485 Hijo Registros civiles.
parágrafo numeral 1,
en la modalidad de Registros civiles. Factura
María Neiva
tentativa. 26257336 Madre exequias. Declaraciones
Mosquera Mena
extrajuicio.
JORGE IVÁN ZÚÑIGA
BECERRA

Delitos Legalizados:
Registro civil hijo.
Homicidio en persona Informe pericial.
54 Elvia María Becerra 32286844 Madre
protegida art. 135 Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1. afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1,
en la modalidad de

1224
Recibió de Acción Social $4.600.000.
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VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
tentativa.

MISLEIDA PÉREZ
MÁRQUEZ
Hernando Abad Compañero Declaración extrajuicio.
Delitos Legalizados: 71184523
García Delgado permanente Registro civil del hijo.

Homicidio en persona
54 protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona
protegida art. 135 Anderson Berney
1038806432 Hijo Registro civil
parágrafo numeral 1, García Pérez
en la modalidad de
tentativa.
JULIO CÉSAR Declaración extrajuicio.
OVIEDO GUEVARA María Marfelina Compañera
50911355 Juramento estimatorio de
Mulasco Causil permanente
afectaciones.
Delitos Legalizados:
Registro civil.
Homicidio en persona Iris Esther Oviedo
54 1067897970 Hija Juramento estimatorio de
protegida art. 135 Mulasco
afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona
protegida art. 135 Registro civil.
Saudith María Oviedo
parágrafo numeral 1, 1067887213 Hija Juramento estimatorio de
Mulasco
en la modalidad de afectaciones.
tentativa.
Registro civil. Declaración
extrajuicio.
Martha Cecilia Usuga
LIBIA USUGA USUGA 43159245 Hija Informe pericial.
Usuga
Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.
Registro civil.
Arleiber de Jesús
Homicidio en persona 1028280409 Hijo Juramento estimatorio de
Barrientos Usuga
54 protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1. Registro civil.
Jorge Andrés
Homicidio en persona 1038802889 Hijo Juramento estimatorio de
Barrientos Usuga
protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1, Registro civil.
Adolfo Enrique
en la modalidad de 1038807906 Hijo Juramento estimatorio de
Gómez Usuga
tentativa. afectaciones.
Daniel José Gómez
1040370638 Hijo Registro civil
Usuga

Luz Mary Sánchez Registro civil


LUÍS AURELIO 1038804644 Hija
Mosquera Informe pericial.
SÁNCHEZ CUESTA
Declaraciones extrajuicio.
Delitos Legalizados: María Griselda Compañera
26314614 Juramento estimatorio de
Mosquera Ramírez permanente
afectaciones.
Homicidio en persona Jhorfan Andrés
54 protegida art. 135 1038814599 Hijo Registro civil
Sánchez Mosquera
parágrafo numeral 1.
Lucelly Sánchez
Homicidio en persona 1038801220 Hija Registro civil
Valencia
protegida art. 135
parágrafo numeral 1, José Luis Sánchez
1038809438 Hijo Registro civil
en la modalidad de Mosquera
tentativa. Estivinson Sánchez
1038801088 Hijo Registro civil
Mosquera
FRANCISCO Declaración extrajuicio.
Ángela María Álvarez Compañera
LEONARDO PANESO 32289762 Informe pericial. Juramento
Correa permanente
CASTAÑEDA estimatorio de afectaciones.
Registro civil.
Luis Alfredo Paneso
54 Delitos Legalizados: 1152199325 Hijo Juramento estimatorio de
Hernández
afectaciones.
Homicidio en persona Francisco Leonardo
1038802572 Hijo Registro civil
protegida art. 135 Paneso Álvarez
parágrafo numeral 1. Juan Guillermo
Homicidio en persona 1038806450 Hijo Registro civil
Paneso Álvarez

527
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
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VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
protegida art. 135
parágrafo numeral 1, Camilo Andrés
1038809435 Hijo Registro civil
en la modalidad de Panezo Álvarez
tentativa.
JORGE LUÍS JULIO
Declaración extrajuicio.
CÁRDENAS
Ana Rita Amaya Compañera Informe pericial.
43845189
Zapata permanente Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados:
afectaciones.
Homicidio en persona
54 protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona Ana Paola Julio Nació
Hija menor Registro civil
protegida art. 135 Amaya 15/06/1995
parágrafo numeral 1,
en la modalidad de
tentativa.
MELIDA MARÍA Registro civil.
JIMÉNEZ BORJA Rosa Margarita Borja Registro matrimonio.
21690421 Madre
de Jiménez Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.
Registro civil.
Erika Yesenia Molina
Homicidio en persona 1108932097 Hija Juramento estimatorio de
Jiménez1225
54 protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1. Registro civil.
Sebastián Antonio
Homicidio en persona 128479684 Hijo Juramento estimatorio de
Molina Jiménez
protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1, Registro civil.
en la modalidad de Verónica Cristina
1152203780 Hija Juramento estimatorio de
tentativa. Jiménez Borja
afectaciones.
JORGE GONZÁLEZ
LÓPEZ

Delitos Legalizados:
Registro civil hijo.
Homicidio en persona
54 María Rosalba López Informe pericial.
protegida art. 135 21686245 Madre
López1226 Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1.
afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1,
en la modalidad de
tentativa.
MANUEL DEL Acta matrimonio civil.
CRISTO BALLESTA Registro civil de
ÁLVAREZ Yamile Morris Gil 26286230 Cónyuge matrimonio.
Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.

54 Homicidio en persona Jover Fernando


128415104 Hijo Registro civil
protegida art. 135 Ballesta Morris
parágrafo numeral 1.
Homicidio en persona
protegida art. 135 Marlon Ballestas
parágrafo numeral 1, 1128473135 Hijo Registro civil
Morris
en la modalidad de
tentativa.

JOSÉ LUÍS CIRO Registro civil.


GALEANO Historia clínica.
Declaraciones extrajuicio.
José Luis Ciro
Delitos Legalizados: 70351286 Víctima directa Concepto de medicina
Galeano
54 legal.
Homicidio en persona Informe pericial. Juramento
protegida art. 135 estimatorio de afectaciones.
parágrafo numeral 1,
Registro matrimonio.
en la modalidad de María Belisa
43450969 Cónyuge Juramento estimatorio de
tentativa. Castañeda Guarín
afectaciones.

1225
Recibió de Acción Social $8.700.000.
1226
Recibió de Acción Social $5.300.000.
528
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
Luís Estiven Ciro
1037973479 Hijo Registro civil
Castañeda
Yeferson Ciro
1037974798 Hijo Registro civil
Castañeda
Jeison Fernando Ciro
1036924924 Hijo Registro Civil
Castañeda
JENRY JAMETH
VELASCO CUESTA
Registro civil hijo.
Delitos Legalizados: Ana Josefa Cuesta Declaración extrajuicio.
55 39299035 Madre
Palacios Juramento estimatorio de
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Declaración extrajuicio.
ALEJANDRO Marina Edith Compañera
54259007 Juramento estimatorio de
VALOYES MENA Mosquera Mena1227 permanente
afectaciones.
Delitos Legalizados: Ledinson Valoyes
56 1038804160 Hijo Registro Civil
Mosquera
Homicidio en persona Elys Johana Valoyes
1040363848 Hija Registro Civil
protegida art. 135 Mosquera
parágrafo numeral 1. Cristhian Alejandro
1040368940 Hijo Registro Civil
Valoyes Mosquera
WILTON ANTONIO
GARCÉS FLORÉZ
(MONTAÑO)1228

Delitos Legalizados: Declaración extrajuicio.


Adriana Patricia Arias Compañera
57 39415960 Juramento estimatorio de
Arias1229 permanente
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Secuestro simple art.
168.
EDILBERTO Compañera
Rosa Cuadrado Fabra 32242334 Declaración extrajuicio
CUADRADO permanente
LLORENTE Julia Llorente Vergara 22155978 Madre Partida de Bautismo hijo
Teanis Yolima Compañera Declaración extrajuicio.
58 Sentencia Condenatoria 43142244
Hernández Morales permanente Escrito de afectaciones.
por el Juzgado Segundo
Registro civil.
Penal del Circuito Adriana Cuadrado
1038806893 Hija Declaración extrajuicio.
Especializado de Hernández
Escrito de afectaciones.
Antioquia.
Declaración extrajuicio.
CAMILO SOLANO Fabiola de Jesús Compañera
21522805 Juramento estimatorio de
BALTAZAR Meneses Cataño permanente
afectaciones
Registro civil.
Delitos Legalizados: Deysy Johana Solano
59 32355499 Hija Juramento estimatorio de
Meneses
afectaciones.
Homicidio en persona
Registro civil.
protegida art. 135 Claudia Liliana Solano
32294171 Hija Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1. Meneses
afectaciones
Yorlanis Patricia Borja
WALTER DE JESÚS 1017145061 Hija Registro civil
Perlaza
BORJA DAVID
Ana Lucia Perlaza Compañera
Delitos Legalizados: 32286800 Declaración extrajuicio
Jiménez permanente
59
Registro civil.
Homicidio en persona Ayda Mabel Borja
43971601 Hija Juramento estimatorio de
protegida art. 135 Perlaza1230
afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Walter de Jesús Borja 8321263 Hijo Registro civil.

1227
Recibió de Acción Social $2.000.000.
1228
De acuerdo con la información aportada por la Fiscal Delegada, al realizar la búsqueda en la Registraduría Nacional del
Estado Civil, aparece que la víctima se identificaba con la cédula de ciudadanía número 71940177, cupo numérico que
corresponde al nombre de WILTON GARCES FLORES; sin embargo, en el registro civil de nacimiento y en la partida de
bautismo aparece como WILTON ANTONIO GARCES MONTAÑO, hijo de Manuel Elías Garces y Idelisa Montaño. Así mismo
se anexa declaración extrajuicio de la señora Ana Margarita Montaño Duque, hermana del señor Wilton Antonio, quien
manifestó que existía un error en el segundo apellido de su hermano en la cédula de ciudadanía.
1229
Recibió de Acción Social $10.712.000.
1230
Recibió de Acción Social $2.000.000.
529
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
Pulgarín1231 Juramento estimatorio de
afectaciones.
Edwin Duban Borja
71241662 Hijo Registro civil
Pulgarín
MELQUISEDEC Ángela Beatriz Compañera
RENTERIA 39407191 Declaraciones extrajuicio
Saldarriaga Martínez permanente
MACHADO

59 Delitos Legalizados: Registro civil.


Elkin Andrés Rentería Dictamen del Seguro Social,
1038806943 Hijo (discapacitado)
Homicidio en persona Saldarriaga1232 sobre pérdida de la
protegida art. 135 capacidad de laboral.
parágrafo numeral 1.
ARTURO MORENO Registro civil.
Sandra Bibiana
LÓPEZ 43202475 Hija Juramento estimatorio de
Moreno Fernández
Delitos Legalizados: afectaciones.
60
Registro civil
Homicidio en persona Mary Luz Moreno
39312959 Hija Juramento estimatorio de
protegida art. 135 Fernández
afectaciones.
parágrafo numeral 1.
JULIO CÉSAR SERNA

Sentencia Condenatoria
Luz Zorela Rodríguez Compañera
61 por el Juzgado Segundo 39414529 Declaración extrajuicio
Agudelo permanente
Penal del Circuito
Especializado de
Antioquia.
HUMBERTO Margarita Rosa Compañera
39311743 Declaraciones extrajuicio
PACHECO CASTILLO Barraza Payares permanente
Yeison Humberto Registro civil.
Sentencia Condenatoria 1045507487 Hijo
62 Barraza Payares Declaración extrajuicio.
por el Juzgado Segundo
Penal del Circuito
Especializado de Angie Lorena Barraza Registro civil.
1045513558 Hija
Medellín. Payares Declaración extrajuicio.
LUÍS EDUARDO
CUBIDES VANEGAS Luís Antonio Cubides
71983698 Hijo Registro civil
Ramírez
Sentencia Condenatoria
63
por el Juzgado Segundo
Penal del Circuito María de los Ángeles
39307894 Hija Registro civil
Especializado de Cubides Ramírez
Antioquia.
VIDAL DEVIA
RAMÍREZ
Delitos Legalizados:
Herminda Ramírez de
64 39401627 Madre Registro civil hijo
Devila
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
María Consuelo David
43662792 Hija Registro civil
Higuita1233
LUÍS ÁLVARO DAVID
OLIVEROS Declaración extrajuicio.
María Ernestina Compañera
39410606 Juramento estimatorio de
Rivera Usuga1234 permanente
Delitos Legalizados: afectaciones.
65
Jhon Jairo David
1028020438 Hijo Registro civil
Homicidio en persona Rivera
protegida art. 135 Ana Orlinda David
1027951388 Hija Registro civil
parágrafo numeral 1. Rivera
Luis Fernando David
1027963489 Hijo Registro civil
Rivera

1231
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
1232
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Salud se efectué el trámite para que la victima reciba de forma continua y gratuita
pañales, dada su discapacidad.
1233
Recibió de Acción Social $1.250.000.
1234
Recibió de Acción Social $11.000.000.
530
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
Luis Álvaro David
71251675 Hijo Registro civil
Higuita1235
Gloria Cecilia David
39414113 Hija Registro civil.
Higuita1236
Luz Elena David Registro civil.
39424013 Hija
Higuita1237 Declaración extrajuicio.
Dora Alba David
39417993 Hija Registro civil
Higuita1238
ELKIN DE JESÚS Registro civil matrimonio,
ESCOBAR LÓPEZ Ana Milbia Durango Partida de matrimonio.
21744011 Cónyuge
Durango1239 Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: afectaciones.
66
Yuliana Escobar
1040361026 Hija Registro civil
Homicidio en persona Durango
protegida art. 135 Delby Andrés Escobar
1028004675 Hijo Registro civil
parágrafo numeral 1. Durango
Partida de Matrimonio.
Rosmira Durango
32275209 Cónyuge Juramento estimatorio de
Álvarez1240
afectaciones.
Registro Civil.
Carlos Alberto
1028005274 Hijo Juramento estimatorio de
GUSTAVO ALBERTO Gutiérrez Durango1241
afectaciones.
GUTIÉRREZ LÓPEZ
Registro Civil.
Eli Johana Gutiérrez
1027951424 Hija Juramento estimatorio de
Delitos Legalizados: Durango
66 afectaciones.
Registro Civil.
Homicidio en persona Gustavo Alfonso
1028013902 Hijo Juramento estimatorio de
protegida art. 135 Gutiérrez Durango
afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Bibiana María
39427071 Hija Registro Civil
Gutiérrez Castaño
Registro Civil.
Rodrigo de Jesús
1028017180 Hijo Juramento estimatorio de
Gutiérrez Durango1242
afectaciones.

Patricia Sanmartín Compañera


43757528 Declaración extrajuicio
Arango permanente

JAIRO ALBERTO María Camila López Nació Registro civil, Declaración


Hija
LÓPEZ MANCO Sanmartín 21/julio/1996 extrajuicio

Delitos Legalizados: Registro Civil de Jairo


Alberto López Manco,
67
Homicidio en persona Registro de Defunción de la
protegida art. 135 señora Ana Francisca
parágrafo numeral 1. Manco Suarez, madre de la
Secuestro simple art. María Eneida Tía y madre de víctima, declaración
39400010
168. Suárez1243 crianza. extrajuicio en el que se
testifica que la señora María
Eneida Suárez fue la
encargada de la crianza del
joven Jairo Alberto López
Manco.

1235
Recibió de Acción Social $1.250.000.
1236
Recibió de Acción Social $1.250.000.
1237
Recibió de Acción Social $1.250.000.
1238
Recibió de Acción Social $1.250.000.
1239
Recibió de Acción Social $19.000.000.
1240
Recibió de Acción Social $18.000.000.
1241
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
1242
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
1243
Recibió de Acción Social $21.000.000.
531
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
ELMER ANTONIO
URQUIJO BELTRÁN
Declaración extrajuicio.
Delitos Legalizados: Piedad Patricia León Compañera
68 43707070 Juramento estimatorio de
Muriel1244 permanente
afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
LUÍS ANTONIO
ESPITIA GONZÁLEZ

Delitos Legalizados:
Sixta Tulia González Registro Civil Hijo.
69 39302197 Madre
Homicidio en persona Yanes Declaración extrajuicio.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Secuestro simple art.
168.
Declaraciones extrajuicio,
MISAEL ANTONIO
en el que se testifica que la
MORENO CÓRDOBA
señora Ana Felisa Lloreda
de Machado, fue la
Delitos Legalizados: Ana Felisa Lloreda de Tía y madre de
70 26289808 encargada de la crianza del
Machado1245 crianza
señor Misael Antonio
Homicidio en persona
Moreno Córdoba.
protegida art. 135
Juramento estimatorio de
parágrafo numeral 1.
afectaciones.
Declaración extrajuicio.
Luz María Mosquera Compañera
39401091 Juramento estimatorio de
ARCESIO GALLEGO Fernández1246 permanente
afectaciones.
LOZANO
Viviana Gallego
39429509 Hija Registro civil
Mosquera
Delitos Legalizados:
70 Yurilsa Gallego
39425825 Hija Registro civil
Mosquera
Homicidio en persona
Carmen Emilia
protegida art. 135 39424271 Hija Registro civil
Gallego Mosquera
parágrafo numeral 1.
Yessica Paola Gallego
1040363845 Hija Registro civil
Mosquera
ROGELIO
MOSQUERA
PALACIOS
Declaraciones extrajuicio.
Delitos Legalizados: Flor Alba Ospina Compañera
71 43775875 Juramento estimatorio de
Ruiz1247 permanente
afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1.
Declaraciones extrajuicio.
Primitiva González Compañera
39298163 Juramento estimatorio de
Arrieta1248 permanente
afectaciones.
ÁNGEL HUMBERTO
Marlon Yecid Zabala
ZABALA BEJARANO 6135587 Hijo Registro civil
Moreno
Maim Humberto
Delitos Legalizados: 71987124 Hijo Registro civil
72 Zabala Moreno
Henry Alberto Zabala
Homicidio en persona 71351885 Hijo Registro civil
González1249
protegida art. 135
Carlos Humberto
parágrafo numeral 1. 71986755 Hijo Registro civil
Zabala González
Ella Cecilia Zabala
39310199 Hija Registro civil
Moreno
DAIRO PÉREZ Carmen María
73 32270366 Madre Registro civil hijo
NEGRETE Negrete Flórez

1244
Recibió de Acción Social $9.800.000.
1245
Recibió de Acción Social $5.000.000.
1246
Recibió de Acción Social $20.600.000.
1247
Recibió de Acción Social $20.000.000.
1248
Recibió de Acción Social $20.000.000.
1249
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
532
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
Declaración extrajuicio.
Compañera
Delitos Legalizados: Arelis Guillín Barón1250 39309580 Juramento estimatorio de
permanente
afectaciones.
Homicidio en persona Dayner Andrés Pérez Nació 21-
protegida art. 135 Hijo menor Registro civil
Guillin agosto-1995
parágrafo numeral 1.
Fabricio Manuel Pérez
2821973 Padre Registro civil hijo
Galindo
IBER MODESTO
ROJAS MORENO
Declaraciones extrajuicio.
Delitos Legalizados: Epifanía Díaz Compañera
74 39295071 Juramento estimatorio de
Cuadrado permanente
afectaciones.
Homicidio en persona
protegida art. 135
parágrafo numeral 1
ELÍAS GARCÍA DÍAZ

Delitos Legalizados: Registro civil hijo.


Epifanía Díaz
74 39295071 Madre Juramento estimatorio de
Cuadrado
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1
GUSTAVO ANTONIO
Rosa Ema Martínez Compañera
VARGAS USUGA 39411800 Declaración extrajuicio
Posso1251 permanente
Delitos Legalizados: Registro civil.
Mariel Janeth Vargas
1027965159 Hija Juramento estimatorio de
75 Martínez
Homicidio en persona afectaciones.
protegida art. 135
parágrafo numeral 1. Edwin Alexis Vargas
1028014079 Hijo Registro civil
Secuestro simple art. Martínez1252
168.
ROSMIRA DEL Lisbeth Audrey Registro civil.
SOCORRO GUISAO 39416608 Hija
Vásquez Guisao Declaración extrajuicio.
CASTRO Darío de Jesús Partida de matrimonio.
70430938 Cónyuge
Aguirre Usuga Declaración extrajuicio.
Delitos Legalizados:
Edwin Arbey Aguirre Registro civil.
75 1020396534 Hijo
Guisao Declaración extrajuicio.
Homicidio en persona
Robinson Darío Registro civil.
protegida art. 135 71383255 Hijo
Aguirre Guisao Declaración extrajuicio.
parágrafo numeral 1.
Secuestro simple art. José Willington
1035302835 Hijo Registro civil
168. Aguirre Guisao1253
Registro civil.
Osvaldo Vergara
71975856 Hijo Juramento estimatorio de
Guzmán1254
afectaciones.
Johny Vergara
71985972 Hijo Registro civil
Ramírez
OSVALDO VERGARA
Jenis Vergara
GÓMEZ 43750598 Hija Registro civil
Ramírez
Jhonatan Vergara
Delitos Legalizados: 71240784 Hijo Registro civil
76 Ramírez
Declaración extrajuicio.
Homicidio en persona Gloria Patricia Compañera
39298323 Juramento estimatorio de
protegida art. 135 Ramírez permanente
afectaciones.
parágrafo numeral 1.
Millerlandi Vergara
39308502 Hija Registro civil
Guzmán
Partida matrimonio.
Nancy Guzmán de
22154714 Cónyuge Juramento estimatorio de
Vergara
afectaciones.

1250
Recibió de Acción Social $ 19.750.000
1251
Recibió de Acción Social $21.000.000
1252
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
1253
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
1254
Recibió de Acción Social $ 2.050.000
533
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

VICTIMAS DOCUMENTOS
HECHO VICTIMA DIRECTA CEDULA PARESTESCO
INDIRECTAS1188 APORTADOS
Osdman Vergara
71977726 Hijo Registro civil
Guzmán
Tatiana Vergara
39316187 Hija Registro civil
Ramírez
Gilmar Osvaldo
1045507257 Hijo Registro civil
Vergara Romero
Cándida Rosa Moreno
MARÍA DOLORES 22164621 Madre Registro civil hija.
Perea1255
ROMERO PEREA
Juan Romero Registro civil hija,
772580 Padre
Rodríguez declaración extrajuicio
Delitos Legalizados:
76 Registro civil.
Willy Vergara
Homicidio en persona 1045513539 Hijo Juramento estimatorio de
Romero1256
protegida art. 135 afectaciones.
parágrafo numeral 1. Gilmar Osvaldo
1045507257 Hijo Registro civil
Vergara Romero1257
SEVERO MOSQUERA Henry Mosquera
1126338084 Hijo Registro civil
ANGULO Duarte
Severo Mosquera
1085302323 Hijo Registro civil
Delitos Legalizados: Duarte
77 Pía Irene Angulo
Homicidio en persona 26308523 Madre Registro civil hijo
Salas
protegida art. 135
Compañera
parágrafo numeral 1. Alicia Duarte 39301900 Declaración extrajuicio
permanente
RUDOLF REINALDO María Angélica Compañera
50966515 Declaración extrajuicio.
MARTIN PAFFEN Esquivel Lora permanente
DURIER Claudia del Socorro
25845618 Cónyuge Partida de Matrimonio.
García García
Condenada proferida María Camila Paffen Nació
87 Hija menor Registro civil.
por el Juzgado Penal Esquivel 2/09/1995
del Circuito Rudolf Paffen García 1064977541 Hijo Registro civil
Especializado de
Sincelejo. María Claudia Paffen
52690066 Hija Registro civil
García

908. La Sala al estudiar el reconocimiento de calidad de víctimas con vocación


reparadora encontró que algunas de ellas no presentaron medios probatorios idóneos
para establecer su grado de consanguinidad, filiación o parentesco con las víctimas
directas, ellas son:

Hecho Víctima directa Víctima indirecta Cédula Parentesco


presentado
54 Julio Alfonso Díaz Petro Rosa María Cortéz Hernández Nació 20/09/1995 No Presunta Hija
aportaron soporte
54 Francisco Leonardo Kelly Johana Álvarez Correo 1038816065 Presunta Hija
Paneso Castañeda
58 Edilberto Cuadrado Yudy Esther Cuadrado Nació 20/06/1995 No Presunta Hija
Lorente Cuadrado aportaron soporte
61 Julio Cesar Serna Daniel Alexander Rodríguez Nació 26/01/1996 No Presunto Hijo
Agudelo aportaron soporte
68 Elmer Antonio Urquijo Paola Andrea León Murial Nació 14/12/1995 No Presunta Hija
Beltrán aportaron soporte

1332. Teniendo en cuenta la necesidad de que las víctimas puedan aclarar su situación
filial o de consanguinidad, la Sala exhortará a la UARIV para que a través de su gestión y
1255
Recibió de Acción Social $ 19.000.000
1256
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
1257
Además de las solicitudes que se presentaron comunes para todas las víctimas, en este caso la Representante solicitó
que por intermedio del Ministerio de Defensa se efectué el trámite para la obtención de la libreta militar, sin costo para la
víctima.
534
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

con el acompañamiento de las entidades pertinentes, en especial el ICBF (cuando se trate


de niños, niñas y adolescentes), se solicite al Instituto Nacional de Medicina Legal realice
las pruebas sanguíneas o de ADN, o la que sea más efectiva para determinar el grado de
parentesco entre la víctima directa y las indirectas, relacionadas anteriormente1258.

De la reparación colectiva

1333. Ante el pronunciamiento del doctor Víctor Andrés Salcedo Fuentes, Procurador II
Delegado en lo Penal, respecto a que es notorio el daño colectivo en cabeza de los
miembros de la Unión Patriótica de la región de Urabá, por lo que solicitó que se dé
traslado de este caso a la Unidad de Victimas, como sujeto colectivo objeto de reparación.
La Sala al respecto considera adecuada recordar que la reparación colectiva es un
componente de la reparación integral y se refiere al conjunto de medidas de restitución,
indemnización, rehabilitación, satisfacción y garantía de no repetición, a que tienen
derecho las comunidades y las organizaciones o grupos sociales y políticos, en términos
políticos, materiales y simbólicos1259.

1334. En los términos de la ley 1448 de 2011 y del Decreto 4800 de 2011 son sujetos de
reparación colectiva: las comunidades, las organizaciones sociales y políticas, los grupos
sociales y políticos (cuando se trate de comunidades étnicas el proceso la reparación
colectiva se rige por los decretos ley 4633, 4635 y 4635 de 2011). Este tipo de colectivos
deben ser considerados específicamente por la UARIV para que participen activamente en
la propuesta y diseño de las medidas de reparación que le corresponden.

1335. En cuanto a las situaciones dan lugar a reparación colectiva, la Ley 1448 de 2011
expresa que quedarán cobijados para implementación de programas las personas que
hayan sufrido: (i) violaciones a los derechos colectivos, (ii) violaciones graves y
manifiestas de los derechos individuales de miembros de los colectivos; (iii) impacto
colectivo debido a la violación de derechos individuales; y (iv) acciones o hechos con
afectaciones colectivas ocurridas con ocasión del conflicto armado, desde el 1 de enero de
1985.

1258
Ver: Corte Constitucional, sentencias C-476-05, C-807-02 y C-808-02.
1259
Ver: http://www.unidadvictimas.gov.co/index.php/en/conozca-sus-derechos/reparacion-integral, consultada el 3 de
octubre de 2013. En ese sentido, la Sala conoce que la UARIV ha propiciado un proceso de acercamiento institucional entre
la UP y entidades del Gobierno Nacional, de acuerdo con el artículo 222 del Decreto 4800 de 2012 y del Decreto 2096 de
2012 “Por el cual se unifica el Programa Eespecial de Protección Integral para dirigentes, miembros y sobrevivientes de la
Unión Patriótica y el Partido Comunista Colombiano y se dictan otras disposiciones.”
535
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

1336. ¿Qué es el daño colectivo? Éste Puede ser considerado como las transformaciones
negativas en el contexto social, comunitario y cultural, asociadas a la percepción que
del sufrimiento, la pérdida, la transformación negativa de sus formas de vida, el
menoscabo de los recursos para afrontar el futuro o para construir el proyecto que se
tenía en perspectiva antes de los hechos violentos, tienen las comunidades, grupos y
organizaciones. Así, no se refiere a la sumatoria de daños individuales.

1337. ¿Qué es el Programa de Reparación Colectiva? (Decreto 4800 de 2011) Es un


conjunto de acciones de diferentes entidades del Estado orientadas a tender los puentes
entre las medidas de rehabilitación, restitución, compensación, justicia, satisfacción y de
construcción de memoria histórica y verdad, y las políticas estatales relacionadas con las
reformas institucionales para fortalecer el Estado Social de Derecho, la participación y la
focalización de la política y de la inversión, para el goce efectivo de derechos
fundamentales.

1338. El Programa se implementa a través de Planes de Reparación Colectiva siguiendo


los pasos de una ruta que ha sido definida para ello. Inicia con el registro del sujeto
colectivo, hasta la formulación por parte de las víctimas, y la implementación por parte de
las entidades del SNARIV, de un plan de reparación, que es aprobado por el respectivo
Comité Territorial de Justicia Transicional. El Plan, en función del diagnóstico del daño que
se realice, puede contener medidas de satisfacción, restitución, rehabilitación y garantía
de no repetición.

1339. El Programa de Reparación Colectiva se implementa de manera gradual y


progresiva. Eso quiere decir que los sujetos de reparación colectiva van a ir siendo
atendidos de manera escalonada y por fases a lo largo del tiempo, en función de su grado
de vulnerabilidad y de la capacidad del estado para atenderlos de manera integral.

1340. Enfoque Psicosocial. Consiste en la incorporación de los elementos que


permitan dotar de sentido el proceso de asistencia, atención y reparación integral que
realiza la Unidad. A través del enfoque psicosocial se busca que la reparación a las
víctimas atienda las formas de interpretación que ellos y ellas, y las comunidades a las
que pertenecen, dan a lo que les sucedió, desde su experiencia emocional, cognitiva y
relacional, y al significado que dan a la reparación y al restablecimiento de sus derechos.

536
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

1341. Reconstrucción del Tejido Social. La reconstrucción del tejido social es la


estrategia que busca el restablecimiento de las relaciones sociales, comunitarias e
institucionales que rompió el conflicto armado. Se denomina Entrelazando, será
implementada por tejedores y tejedoras comunitarios, y desarrolló cinco líneas de trabajo:
recuperación de prácticas sociales, duelos colectivos, memoria, pedagogía social e
imaginarios colectivos.

1342. Estrategia de Reparaciones Focalizadas Territorialmente. Esta es una


estrategia de intervención que conlleva a la generación de mecanismos y sinergias para la
efectiva articulación de las entidades responsables de la reparación integral. Esta
estrategia implica la coordinación de diferentes instituciones, focalizando la oferta de
retornos, restitución de tierras y procesos de reparación individual y colectiva (cuando se
identifique un sujeto de reparación colectiva) en un territorio previamente identificado.

1343. Consonantes con el análisis contextual que ha hecho la Sala en esta providencia,
en la cual se han precisado elementos jurídicos y de variado orden para calificar que los
graves atentados de que fueron víctimas activistas y dirigentes del partido político Unión
Patriótica constituyen delito de genocidio, pero, además, teniendo en cuenta que
representantes de la Corporación Reiniciar presentaron en audiencia de identificación de
afectaciones una sustentación amplia y detallada de los daños colectivos ocasionados por
la violencia indiscriminada contra los militantes ese movimiento político, y que de igual
modo propusieron diversas iniciativas camino a una reparación colectiva, el Tribunal en
cumplimiento del parágrafo 4 del artículo 23 de la ley 1592 remitirá a la Unidad de
Atención y Reparación Integral de Víctimas parte de la actuación para que en el lapso de
de seis (6) meses, contados a partir de la ejecutoria de la presente decisión, concerte con
las víctimas, diseñe y ponga en marcha un proceso de reparación colectiva de
afectaciones, donde tenga en cuenta, entre otras, las peticiones de la organización
Reiniciar, que a continuación se enuncian:

537
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

DAÑOS PSICOSOCIALES

CONTEXTO PUNTO DE PARTIDA: Para conocer o determinar el daño se requiere un


procedimiento, una METODOLOGÍA, que indague las experiencias humanas de dolor, las
experiencia de las víctimas, frente a las distintas pérdidas y perjuicios ocasionados en el marco
de la persecución y laConsideraciones
violencia contra la UP.
metodológicas iniciales

Dado que los daños tienen que ver con Dado que se trata del genocidio de un sujeto
situaciones sociales y emocionalmente difíciles político colectivo (el movimiento de la UP) se
(de sufrimiento, de duelo, de temor), se requiere una metodología que permita
requiere una metodología que permita caracterizarlo como grupo para conocer su
conocer la experiencia de las víctimas al ritmo estructura, ideología, prácticas, recursos y
de sus necesidades de cuidado y protección proyectos, y para conocer las relaciones que
de su integridad y su salud. Una metodología guardaba con sus integrantes. Una
que facilite la participación de las víctimas y la metodología que indague el daño ocasionado al
comunicación de los daños causados en sus colectivo UP, así como a sus integrantes, en el
vidas. (Enfoque psicosocial y acción sin daño). marco de la persecución y el genocidio.

 Cuidado de la Salud Caracterización del sujeto colectivo y de


 Seguridad -Protección - sus integrantes (historias y proyecto de
Confianza vida alrededor de la UP). Perspectiva
 Acceso – manutención sistémica.
 Participación – expresión –
retroalimentación

538
Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

Contexto y motivos de la
violencia.
Marco Histórico.

Acciones violentas .
Violaciones y crímenes.
Estrategias de destrucción
Características de la total o parcial del grupo UP.
violencia ejercida Violencia, impunidad y
con la UP- contexto exclusión.
de violencia en el
que se enmarca el Sujetos y sectores de la UP
genocidio. afectados por los hechos
violentos. Víctimas. Sujetos
individuales y colectivos.

DETERMINAR LOS
DAÑOS CAUSADOS A LA Sujetos y sectores
UNIÓN PATRIOTICA (AL perpretradores de los
COLECTIVO Y A SUS hechos violentos
(victimarios, autores
INTEGRANTES) EN EL materiales y
MARCO DEL GENOCIDIO determinadores).

DAÑOS DE TIPO
INDIVIDUAL Y
COLECTIVO
CONSECUENCIAS DE LA
VIOLENCIA EJERCIDA
CONTRA LA UP
DAÑOS DE TIPO
MATERIAL Y
PSICOSOCIAL.

1344. De otra parte, tal como en el caso anterior, ha quedado evidente que los graves
atentados en materia de derechos humanos contra miembros de los sindicatos de la zona
de Urabá no quedaron sólo en daños a la individualidad sino que también ocasionaron
una afectación colectiva a la organización sindical, el Tribunal dispondrá que en
cumplimiento del parágrafo 4 del artículo 23 de la ley 1592, se envíe parte de lo actuado
a la Unidad de Atención y Reparación Integral de Víctimas. Respecto a la situación de
vulneración de los sindicalistas, la Directora de la UARIV, doctora Paula Gaviria
Betancourt, ha manifestado que:

“Los daños al movimiento sindical colombiano ocurridos con ocasión de graves y


manifiestas violaciones a derechos humanos y de infracciones en el marco del conflicto
armado son de una gravedad inadmisible para la democracia. Estas afectaciones han
causado daños individuales, familiares y daños colectivos a las libertades sindicales que
involucran el derecho de asociación, la negociación colectiva y el derecho de huelga, así
como la libertad de expresión, el ejercicio de defensa de los derechos humanos
económicos y sociales.

Por eso, como Gobierno tenemos el deber de reparar al sindicalismo desde una perspectiva
colectiva. Es un deber legal establecido por la ley 1448, pero es también un deber político
y ético. En Colombia no podemos hablar de paz sin reconocer y garantizar efectivamente
los derechos de las víctimas, y especialmente del sindicalismo.

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Tribunal Superior De Bogotá
Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

Coincido con lo que me informaron que se dijo esta mañana por varias personas,
especialmente por los presidentes de las centrales: este proceso lo debemos hacer, como
Gobierno, con la sociedad civil y como país en memoria de todos las y los sindicalistas que
han sido asesinados, desaparecidos forzadamente, amenazados, desplazados o exiliados,
por las mujeres sindicalistas que han sufrido violencia sexual, entre otros graves
vejámenes. Como recordaba Miguel Morantes la reparación colectiva debe ser un ejercicio
de dignificación de las personas ausentes, de restablecimiento de su buen nombre y la
justa causa que liberaban, de todas las organizaciones sindicales que han dejado de
existir.”1260

1345. La UARIV deberá adelantar dentro del término de 6 meses, contados a partir de la
ejecutoria de este fallo, un proceso de reparación colectiva concertado del movimiento
sindical colombiano (Reparar para transformar), que tenga en cuenta de forma singular y
específica el colectivo de víctimas del sindicalismo de la región de Urabá, con el objeto de
que sean restituidos sus derechos y se trabaje en pro de la realización de planes y
proyectos que permitan: (i) la reconstrucción de la memoria histórica; (ii) la
caracterización del daño colectivo, (iii) la identificación de expectativas y propuestas de
reparación colectiva del movimiento sindical, (iv) el análisis de la política pública para las
víctimas del conflicto y particularmente del movimiento sindical, (v) la construcción del
Plan para la complementariedad de la reparación individual y colectiva; y (vi) la
identificación colectiva y particular de víctimas del movimiento sindical para aplicación del
enfoque diferencial.

K. Otras Determinaciones

A. Copias para Investigaciones Penales.

1346. (i) Investigación a los comerciantes, ganaderos y bananeros de Urabá que


presuntamente resultaron implicados con la financiación, colaboración o máximos
beneficiarios con el accionar del Bloque Bananero de las Autodefensas Campesinas de
Córdoba y Urabá (ACCU), según versiones libres rendidas por HÉBERT VELOZA GARCÍA y
Raúl Emilio Hasbún Mendoza, y los informes presentados por la Fiscalía General de la
Nación en sesiones de legalización de cargos de los días 26, 27, 28 de abril y 19 de mayo
de 2011, relacionados con el tema de las CONVIVIR y el financiamiento de la agrupación
paramilitar.

1260
Intervención de Paula Gaviria Betancur, directora de la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas,
con ocasión del ‘Encuentro Nacional de Reparación Colectiva al Movimiento Sindical Colombiano’, Paipa (Boyacá), 8 de
mayo de 2013, en: http://www.unidadvictimas.gov.co/images/docs/sindicato/Intervencion_Directora_Paula_Gaviria.pdf,
consultada el 13 de octubre de 2013.
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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

1347. (ii) La Sala pudo comprobar que existieron vínculos directos de algunas empresas
bananeras y las cooperativas de seguridad privada denominadas CONVIVIR, las cuales
tuvieron vínculos con estructuras paramilitares, en este caso con el Bloque Bananero de
las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU), teniendo en cuenta esta
situación, la Sala ordenará que se investigue penalmente a las autoridades civiles,
militares y de policía encargadas de la vigilancia y control de las actividades de las cerca
de 15 Cooperativas de Seguridad Privada “CONVIVIR”1261 que operaron en Urabá, y que
estuvieron ligadas directamente con el accionar el Bloque Bananero, en el entendido que
hubo total omisión y negligencia en el cumplimiento de las funciones, según se expuso en
las sesiones de los días 26, 27, 28 de abril y 19 de mayo de 2011 en audiencia de
legalización de cargos.

1348. (iii) Que se investigue penalmente a todos los directivos de las cerca de 15
Cooperativas de Seguridad Privada “Convivir”1262, que funcionaron en Urabá, las cuales
estuvieron ligadas directamente con el movimiento paramilitar, Bloque Bananero de las
Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU), según se expuso en sesiones de
audiencia de legalización de cargos los días 26, 27, 28 de abril y 19 de mayo de 2011,
cuyos nombres fueron explicitados en el capítulo “Relaciones entre las Convivir y los
paramilitares en Urabá” de esta decisión.

1349. (iv) La Sala no puede pasar por alto la situación expuesta por el doctor Luís
Alberto Donoso Rincón, Representante la Unidad para la Atención y Reparación Integral a
las Víctimas, sobre el estado actual de algunos de los bienes entregados por el postulado
HÉBERT VELOZA GARCÍA, y tiene que ver con el notable deterioro y el desmantelamiento
de los bienes durante el tiempo que estuvieron bajo la administración de la Unidad, que a
su vez celebró un convenio interadministrativo con la Sociedad de Activos Especiales
(SAE), es inamisible, por decir lo menos, que bienes que fueron entregados en perfecto
estado y así permanecieron durante el tiempo que estuvieron en poder de la Fiscalía
General de la Nación, ahora se encuentren en una situación de abandono, dejadez y
desidia, situación que finalmente se verá reflejado en un detrimento del valor comercial
de los bienes y a su vez en un menoscabo en los ingresos del fondo para la reparación
de las víctimas.

1350. Solo a manera de ejemplo, esta es la situación actual del bien inmueble ubicado
en el municipio de Turbo (Antioquia), sobre el cual se indicó que:
1261
Diligencia de allanimiento y registro del 30 de abril de 1998, proceso radicado 34986.
1262
Superintendencia de la vigilancia privada.
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Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

“El inmueble se encuentra en estado de abandono, se han realizado requerimientos por


parte del Fondo de Reparación a las Víctimas a la Sociedad de Activos especiales para
llegar a un acuerdo sobre el pago de los perjuicios ocasionados por la falta de cuidado y
diligencia con este inmueble por parte de esta entidad quienes tuvieron el bien bajo su
responsabilidad desde el 2 de febrero de 2010 hasta el 30 de abril de 2011, tiempo
durante el cual la propiedad sufrió un deterioro notable al punto de que en la actualidad se
encuentra desmantelada. En el marco de la liquidación del convenio interadministrativo con
la Sociedad de Activos Especiales se insistirá en reclamar esta prestación y de llegar a ser
necesario se acudirá a presentar las acciones judiciales correspondientes tendientes a
obtener el pago de estos perjuicios.”

1351. Y como si lo anterior fuera poco, cuando los bienes se entregaban en


arrendamiento, se encuentra con que los arrendatarios no cancelaban los cánones de
arrendamiento, como es caso del predio Hato Grande y El Silencio:

“Se trata de predios con amplias áreas que pueden ser destinadas a la ganadería. En la
actualidad los predios que comprenden la Hacienda Hato Grande se encuentran bajo el
cuidado del señor Amado de Jesús Quinchía Betancur, quien ejercía como administrador de
los predios cuando estaban arrendados por el señor Jesús Alberto López Villegas quien
tomara los predios en arriendo durante la administración de la SAE. Sin embargo, nunca se
canceló canon de arrendamiento al Fondo de Reparación a las víctimas…”

1352. Es tal la falta de vigilancia y cuidado sobre los bienes entregados por el
desmovilizado que incluso se han hurtado los enseres, como sucedió con el motor de una
sala de ordeño del predio Hato Grande, por el cual, según se dijo, se presentó la
respectiva denuncia por parte del Fondo.

1353. Lo anterior demuestra la negligencia por parte de la entidad encargada de la


administración de los bienes, y lo que más llama a la atención de la Sala es que a pesar
de la pésima administración de éstos por parte de la Sociedad de Activos Especiales
(SAE), la Unidad continúo entregándole bienes para su custodia y administración.

1354. Y tal como lo señaló la señora Fiscal durante la audiencia, este no es el único caso
en que se ha expuesto el abandono en el que se encuentran los bienes entregados por los
postulados al proceso de Justicia y Paz, igual situación ha ocurrido en los casos de los
desmovilizados José Germán Serna Pico, Jorge Iván Laverde Zapata, Edgar Ignacio Fierro
y Salvatore Mancuso, solo por mencionar algunos.

1355. Y es que es inadmisible que el Estado cancele unas sumas elevadas de dinero para
el sostenimiento y administración de los bienes entregados por los postulados y al
momento de rendir cuentas, se encuentre con que los bienes no sólo están deteriorados y
han disminuido su valor comercial, sino que además, han perdido sus rendimientos, los

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HÉBERT VELOZA GARCÍA

han desmantelado, no se han cancelado los impuestos prediales, algunos están invadidos
u ocupados por personas a las que ahora hay que pagarles para que los devuelvan, se
han arrendado por cifras irrisorias, están siendo usufructuadas por terceros que no
reportan a ninguna entidad sus frutos, en algunos casos están siendo utilizados para
cultivos ilícitos, etc., es decir, pareciera que se tratara de bienes que no le importaran al
Estado, cuando por el contrario, deberían ser aprovechados al máximo, en pro de la
reparación que bebe dársele a las víctimas.

1356. Por estas razones la Sala ordenará que por la Secretaría, se compulsen copias ante
la Fiscalía General de la Nación, del informe presentado por la Unidad para la Atención y
Reparación Integral a las Víctimas, y de la sesión de audiencia pública del 11 de marzo de
2013, en el que se da cuenta del estado actual de los bienes entregados por el postulado
HÉBERT VELOZA GARCÍA, a fin de que se investigue a los funcionarios encargados de la
administración de los bienes a los que se ha hecho alusión en esta decisión, por el posible
detrimento patrimonial en el que se pudo haber incurrido.

B. Exhortaciones.

1357. (i) Como la Sala pudo comprobar el proceso de estigmatización y exterminio al que
fueron sometidos algunos sindicatos en la región, así como también la violencia ejercida
en contra de la población civil sindicalizada, acusada por las estructuras paramilitares de
ser colaboradores o miembros orgánicos de grupos subversivos o guerrilleros en la región
de Urabá, donde operó la estructura del Bloque Bananero; la Sala exhortará a la Fiscalía
General de la Nación, para que dentro de sus estrategias de priorización en las Unidades
Delegadas para la Justicia y la Paz y en la Unidad de Análisis y Contexto, incluya procesos
de investigación sobre estas afectaciones, esto con el fin de que se den a conocer el
número de víctimas de la violencia generalizada que sufrió la población de trabajadores
organizados, en particular de los sectores bananeros de la región.

1358. (ii) Debido a los ataques que produjeron asesinatos, desapariciones forzadas,
torturas y otros crímenes cometidos contra miembros, simpatizantes, candidatos y
funcionarios de elección popular pertenecientes a la Unión Patriótica, los cuales
produjeron su genocidio de tipo político, la Sala exhortará a la Fiscalía General de la
Nación, para que dentro de sus estrategias de priorización en las Unidades Delegadas
para la Justicia y la Paz y en la Unidad de Análisis y Contexto, se generen investigaciones
y actividades para develar los patrones de macrocriminalidad, se avance en la

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Sala de Justicia y Paz
Rad. 11-001-60-00 253-2006 810099 Rad. Interno 1432
HÉBERT VELOZA GARCÍA

identificación de los componentes políticos y económicos del paramilitarismo, se


reconstruya la verdad judicial de estos hechos, se investigue, juzgue y condene a los
responsables.

1359. (iii) La Sala entiende que las copias que se ordenan librar con motivo de las
versiones libres que rinden los postulados, las declaraciones de las víctimas donde se
hacen señalamientos y las demás actividades investigativas, no obstante tener como
destinatarios a Fiscales de la justicia ordinaria, hacen parte del proceso de Justicia y Paz
por su interés para la verdad y la justicia en que están interesadas las víctimas y la
sociedad en general, por lo tanto, se exhortará a la Fiscalía General de la Nación para que
cree una Unidad Especial dedicada a su trámite e investigación, la cual podrá estar
apoyada por la Unidad de Análisis y Contexto.

1360. De otra parte, entiende el Tribunal que las investigaciones penales que se
ordenarán no están afectadas por fenómenos como la prescripción, por cuanto están
ligadas a la comisión de graves violaciones de derechos humanos, crímenes de guerra y
delitos de lesa humanidad cometidos por estructuras criminales, los cuales tienen el
carácter de imprescriptibles.

1361. Con base en lo anterior, para efectos de las audiencias de cumplimiento del fallo,
la Fiscalía Delegada de Justicia y Paz deberá rendir informe sobre el avance de las
investigaciones de este tipo de casos, específicamente en la región de Urabá.

1362. (iv) Exhortar a la Procuraduría General de la Nación para que destine un grupo de
Procuradores que ejerzan las funciones inherentes al Ministerio Público, entre ellas vigilar
y evaluar el desarrollo de las investigaciones que se originen en las copias a que se refiere
el apartado anterior.

1363. (v) La sentencia C-572 del 7 de noviembre de 1997, proferida por la Honorable
Corte Constitucional, en la que se estudió la constitucionalidad de algunos artículos del
Decreto 356 del 11 de febrero de 1994, “Por el cual se expide el Estatuto de Vigilancia y
Seguridad Privada”, decisión que declaró la inexequibilidad del parágrafo del artículo 39,
ordenó que las armas de uso restringido que fueron autorizadas a los Servicios Especiales
de Vigilancia y Seguridad Privada, deberían ser devueltas al Comando General de las
Fuerzas Militares dentro de los seis (6) días hábiles siguientes a la notificación de la
sentencia, con los correspondientes permisos para proceder a su anulación; por tanto la

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Sala exhortará a la Fiscalía General de la Nación, para que se indague si en efecto las
armas a las que se hizo alusión en esta decisión de la Corte Constitucional, fueron
devueltas al Comando General de las Fuerzas Militares, y cuál fue su suerte final.

1364. La Sala reitera lo ordenado en la sentencia proferida en contra de Edwar Cobos


Téllez, alias “Diego Vecino” y Uber Enrique Banquez Martínez, alias “Juancho Dique”,
comandantes del bloque Montes de María y Frente Canal del Dique respectivamente1263,
en cuanto a la responsabilidad civil del grupo por las conductas punibles cometidas y que
supone que todos su miembros deben responder solidariamente:

“…el concepto de responsabilidad civil del grupo, tal y como ha sido definido por la Corte
Constitucional en su sentencia C-370, supone que todas aquellas personas condenadas,
conforme al artículo 340, inciso segundo o tercero por concierto para delinquir, a los
efectos de organizar, promover, armar o financiar grupos armados paramilitares a los que
se refiere la Ley 975, responden solidariamente por todos los hechos punibles sometidos al
ámbito de ley 975 cometidos por integrantes del grupo durante y con ocasión de su
pertenencia al mismo.

La Corte Suprema de Justicia en sus sentencias de condena por para política ha dicho que
quien “participó, inclusive valiéndose de su función, también debe responder
penalmente por el conjunto de crímenes que se le atribuyen a los comandantes
o jefes de los bloques, frentes o unidades que hacían parte de la asociación
criminal…” Igualmente ordena “compulsar copias para que se investigue la
ocurrencia de hechos que en ejercicio del plan criminal de la organización a la
cual pertenecía….., éste efectuó y se establezca su eventual grado de
responsabilidad que, de acuerdo con la prueba de la casuística y en el grado
reclamado por el legislador, podría ser a título de autor, o de partícipe según las
particularidades de cada caso…” 1264

Esto significa que todos los bienes de aquellas personas condenadas por concierto para
delinquir bien por la Sala de Casación Penal de la Corte Suprema, bien por otra autoridad
de la justicia ordinaria, quedan afectos por la presente sentencia al pago de las
reparaciones dictadas por este tribunal en aplicación de la Ley 975. Por esta razón, la Sala
considera que la Unidad de Justicia y Paz de la Fiscalía debe comenzar, luego de la
ejecutoria de esta decisión, en coordinación con las unidades de la Fiscalía que hayan
seguido los respectivos procesos, a la identificación de los bienes lícitos e ilícitos y la
solicitud inmediata de medidas cautelares ante los Magistrados de Garantías de la Ley 975
para que esos puedan ser recibidos por el Fondo de Reparaciones para las Víctimas.

En relación con todas la personas objeto de investigación en este momento por el tipo de
concierto para delinquir referido en los párrafos anteriores - o que pudieran estarlo como
consecuencia de la compulsa de copias para su investigación a raíz de su nombramiento en
las versiones libres o documentos aportados por los desmovilizados postulados - la Sala
considera que la Unidad de Fiscalía de Justicia y Paz, en coordinación con la unidad de la
Fiscalía que adelante la correspondiente investigación, procederá a la identificación de sus
bienes y a la solicitud ante los Magistrados de Garantías establecidos por la Ley 975 a
efecto de, que en caso de ser condenados, los mismos puedan ser eventualmente
recibidos por el Fondo de Reparaciones para las Víctimas.

1263
Ver Sentencia Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá, del 29 de junio de 2010, rad. 2006 80077, M.P. Dra.
Uldi Teresa Jimenéz López.
1264
Corte Suprema de Justicia, Única Instancia, radicado 32.672. Para política.
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Por último, y teniendo en cuenta que, algunos de los más importantes líderes de los
grupos armados paramilitares a que se refiere la Ley 975, como es el caso de los
hermanos Carlos y Vicente Castaño, entre otros, fallecieron antes de que pudieran
proceder a su desmovilización y al ofrecimiento de sus bienes en el marco de la aplicación
de la Ley 975, siempre que hayan sido condenados por concierto para delinquir agravado y
que, dada su posición de liderazgo, y su responsabilidad patrimonial solidaria por todos los
hechos punibles cometidos por los integrantes de sus respectivos grupos armados durante
y con ocasión de su pertenencia a los mismos, la Unidad de Justicia y Paz de la Fiscalía, en
coordinación con las unidades competentes de esa Entidad, deberán proceder a ejercitar la
correspondiente acción de responsabilidad civil frente a sus herederos respecto de los
bienes lícitos, a fin de poder afectar eventualmente los bienes que estos pudieron haber
recibido de aquellos al pago de las reparaciones dictadas en aplicación de la Ley 975. Para
garantizar la disponibilidad de estos bienes, la Fiscalía deberá solicitar tan pronto como los
mismos sean identificados la adopción de medidas cautelares ante los Magistrados de
Garantías.

Finalmente, la Sala considera necesario que la Unidad de Justicia y Paz de la Fiscalía


presente cada dos meses un informe consolidado en el que se recojan los esfuerzos de
identificación, solicitud y adopción de medidas cautelares e integración en el Fondo de
Reparación a las Víctimas de los bienes a los que se refiere la presente sección.”1265

1365. Por lo anterior, se exhorta a la Fiscalía General de la Nación para que investigue y
persiga los bienes de los demás integrantes del Bloque Bananero, con el objeto de que
sean destinados al Fondo de Reparación de las Víctimas, así mismo, para que tal como se
dijo en la sentencia proferida por esta Sala en contra de Edwar Cobos Téllez, Uber
Enrique Banquéz Martínez y Orlando Villa Zapata, se identifiquen los bienes
pertenecientes a los ex congresistas que están siendo procesados por la Sala de Casación
Penal de la Corte Suprema de Justicia por parapolítica y solicitar las medidas cautelares
pertinentes ante el Magistrado de Control de Garantías, para posibilitar su ingreso al
Fondo Nacional de Reparación. El mismo procedimiento se seguirá con los bienes de los
investigados no aforados, que actualmente se tramitan ante la justicia ordinaria.

1366. (vi) La Sala ha adelantado varias visitas a los pabellones de Justicia y Paz en
centros carcelarios de todo el país, donde ha podido palpar no sólo las precarias
condiciones en que se encuentran los postulados desde el punto de vista humanitario,
sino la carencia casi absoluta de programas de resocialización y preparación para la
reinserción a la vida civil. En este mismo sentido, varios postulados, incluido HÉBERT
VELOZA GARCÍA, alias “HH”, han exteriorizado su preocupación sobre estos temas camino
a su rehabilitación, en clara contradicción con las normas que rigen el proceso de justicia
y paz y, sobre todo, con lo que dispone la Ley 1592 de 2012:

“ARTÍCULO 35. Modifíquese el artículo 66 de la Ley 975 de 2005, el cual quedará así:

1265
Ver Sentencia Sala de Justicia y Paz, Tribunal Superior de Bogotá, del 29 de junio de 2010, rad. 2006 80077, M.P. Dra.
Uldi Teresa Jimenéz López.
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Artículo 66. Resocialización y reintegración de postulados en detención


preventiva y de condenados a la pena alternativa. El Gobierno nacional velará por la
resocialización de los postulados mientras permanezcan privados de la libertad, y por la
reintegración de aquellos que sean dejados en libertad por cumplimiento de la pena
alternativa privativa de la libertad o por efecto de sustitución de la medida de
aseguramiento.

El Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario diseñará y ejecutará un programa especial


para la resocialización de los postulados que se encuentren privados de la libertad en
establecimientos penitenciarios o carcelarios. En estos casos, la finalidad de la detención
preventiva incluirá la resocialización de los desmovilizados que hayan sido postulados por
el Gobierno nacional al proceso penal de que trata la presente ley y que se encuentren
activos en el mismo. El programa de resocialización deberá incluir un componente de
atención psicosocial que les permita a los postulados participar de manera efectiva en los
procesos penales especiales de justicia y paz.

La Agencia Colombiana para la Reintegración de Personas y Grupos Alzados en armas,


diseñará e implementará en el marco de la política nacional de reintegración social y
económica de personas y grupos alzados en armas, un proceso de reintegración particular
y diferenciado para los desmovilizados postulados a la presente ley que sean dejados en
libertad, el cual tendrá como objetivo la contribución de estos postulados a la reconciliación
nacional. Este programa de reintegración no estará supeditado a la prohibición establecida
en el artículo 50 de la Ley 418 de 1997, y deberá incluir un componente de atención
psicosocial. Este programa en ningún caso podrá incluir la financiación de proyectos
productivos.

El proceso de reintegración será de carácter obligatorio para los desmovilizados postulados


al proceso de la presente ley.

Para el desarrollo e implementación de la política nacional de reintegración de personas y


grupos alzados en armas, el fortalecimiento institucional y en general para el cumplimiento
de sus funciones, la Agencia Colombiana para la Reintegración de Personas y Grupos
Alzados en Armas, podrá adelantar alianzas, suscribir convenios y celebrar contratos con
entidades públicas o privadas, nacionales o extranjeras.

El Gobierno nacional, a través de las entidades competentes, determinará y adoptará las


medidas de protección para los postulados a la presente ley que quedaren en libertad por
cumplimiento de la pena alternativa privativa de la libertad o por efecto de sustitución de
la medida de aseguramiento, previo estudio del nivel de riesgo y de conformidad con la
reglamentación que para el efecto expida el Gobierno Nacional, con el fin de garantizar su
proceso de reintegración.

PARÁGRAFO. Para efectos de las disposiciones contenidas en el presente artículo, el


Gobierno nacional realizará los ajustes y las apropiaciones presupuestales necesarias
durante las respectivas vigencias fiscales.”

1367. Por lo anterior la Sala, reiterando la posición expresada en anteriores decisiones,


solicita al Instituto Nacional Penitenciario (INPEC), que informe sobre cuáles son los
programas destinados a los desmovilizados y postulados en el proceso de Justicia y Paz,
encaminados a obtener su resocialización, cuáles son los tratamientos sicológicos a los
que se ha sometido a los postulados y demás medidas encaminadas a fortalecer el
proceso de resocialización y rehabilitación.

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1368. Contra la presente decisión procede el recurso de apelación ante la Sala de


Casación Penal de la Honorable Corte Suprema de Justicia.

1369. En mérito de lo expuesto, la Sala de Justicia y Paz del Tribunal Superior de Bogotá,
administrando justicia en nombre de la República de Colombia y por autoridad de la ley,

IX. RESUELVE:

PRIMERO: DECLARAR que el señor HÉBERT VELOZA GARCÍA, identificado con la


cédula de ciudadanía 7.843.301 de Cubarral (Meta), conocido con el alias de “Don
Hernán”, “Mono Veloza”, “Care Pollo”, “Hernán Hernández” y/o “HH”, ex comandante del
Bloque Bananero de las Autodefensas Unidas de Córdoba y Urabá ACCU, es hasta el
presente momento, elegible para acceder a los beneficios contemplados en la Ley de
Justicia y Paz, tal y como se expuso en la parte motiva de esta decisión.

SEGUNDO: DECLARAR que el Bloque Bananero de las Autodefensas Unidas de Córdoba


y Urabá ACCU, es responsable de los hechos por los que ahora se condena a HÉBERT
VELOZA GARCÍA, quien fungió como comandante de de dicho bloque.

TERCERO: DECLARAR que los hechos que motivaron la formulación de cargos en


contra de HÉBERT VELOZA GARCÍA, y ahora su condena, fueron cometidos durante y con
ocasión de su pertenencia a las Autodefensas Unidas de Córdoba y Urabá ACCU.

CUARTO: CONDENAR a HÉBERT VELOZA GARCÍA, identificado con la cédula de


ciudadanía 7.843.301 de Cubarral (Meta), conocido con el alias de “Don Hernán”, “Mono
Veloza”, “Care Pollo”, “Hernán Hernández” y/o “HH”, ex comandante del Bloque Bananero
de las Autodefensas Unidas de Córdoba y Urabá ACCU, a la pena de CUATROCIENTOS
OCHENTA (480) meses de prisión y multa de DIECISIETE MIL NOVECIENTOS
CINCUENTA (17950) salarios mínimos legales mensuales vigentes, monto que
no sobrepasa lo previsto por el artículo 31 de la Ley 599 de 2000, luego de haber sido
hallado responsable de los delitos de: (i) concierto para delinquir agravado, a título de
autor; (ii) utilización ilegal de uniformes e insignias, a título de autor; (iii) reclutamiento
ilícito de menores, a título de coautor; (iv) homicidio en persona protegida; (v) homicidio
en persona protegida en la modalidad de tentativa; (vi) secuestro simple; (vii)
desaparición forzada; (viii) tortura en persona protegida; (ix) hurto calificado y agravado;
(x) actos de terrorismo; y, (xi) actos de barbarie, conductas constitutivas de graves

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HÉBERT VELOZA GARCÍA

infracciones al Derecho Internacional Humanitario, así como de graves atentados contra


los Derechos Humanos, conforme a lo expuesto en la parte motiva de esta decisión.

QUINTO: CONDENAR a HÉBERT VELOZA GARCÍA, identificado con la cédula de


ciudadanía 7.843.301 de Cubarral (Meta), conocido con el alias de “Don Hernán”, “Mono
Veloza”, “Care Pollo”, “Hernán Hernández” y/o “HH, a la pena accesoria de inhabilidad
para el ejercicio de derechos y funciones públicas por un lapso de 20 años, de
conformidad con lo dispuesto en el artículo 44 del Código Penal; e inhabilidad para la
tenencia y porte de arma por el término de 15 años, de conformidad con lo establecido
en el artículo 51 del Código Penal.

SEXTO: CONCEDER al postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, identificado con la cédula de


ciudadanía 7.843.301 de Cubarral (Meta), conocido con el alias de “Don Hernán”, “Mono
Veloza”, “Care Pollo”, “Hernán Hernández” y/o “HH, el beneficio de pena alternativa, por
un período de ochenta y cuatro (84) meses, de privación de la libertad, bajo las
condiciones impuestas en la parte motiva de esta providencia. Consecuencia del
otorgamiento al señor VELOZA GARCÍA del beneficio de la pena alternativa se suspende
el cumplimiento de la pena ordinaria dispuesta en esta sentencia, en los términos del
artículo 8º del Decreto 4760 de 2005.

SÉPTIMO: HÉBERT VELOZA GARCÍA, suscribirá un acta en la que se comprometa a


contribuir con su resocialización a través del trabajo, estudio o enseñanza durante el
tiempo que permanezca privado de la libertad y a promover la desmovilización de los
grupos armados al margen de la ley, tal como lo dispone el inciso segundo del artículo 8°
del Decreto 4760 de 2005, inciso segundo.

OCTAVO: Si con posterioridad a la presente sentencia y hasta el término de la condena


ordinaria aquí señalada, la autoridad judicial competente determina que HÉBERT VELOZA
GARCÍA no entregó, no ofreció o no denunció todos los bienes adquiridos por él o por el
grupo armado organizado al margen de la ley durante y con ocasión de su pertenencia al
mismo, de forma directa o por interpuesta persona, perderá el beneficio de la pena
alternativa, tal como lo establece el inciso 2º del artículo 26 de la ley 1592 de 2012, que
modificó el artículo 25 de la ley 975 de 2005.

NOVENO: NEGAR la petición presentada por el defensor del postulado para que el
tiempo que lleva HÉBERT VELOZA GARCÍA detenido en los Estados Unidos, respondiendo

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por el delito de narcotráfico, le sea tenido en cuenta para cumplir una pena alternativa en
el proceso de Justicia y Paz, por las razones expuesta en la parte considerativa de esta
decisión.

DÉCIMO: IMPONER a HÉBERT VELOZA GARCÍA la obligación de tomar no menos de


500 horas de estudio y formación en derechos humanos, para lo cual el INPEC y la
Defensoría del Pueblo dispondrán lo pertinente. El condenado deberá someterse a
valoración y tratamiento psicológico que conduzca a su plena readaptación y
resocialización, tal como se indicó en la parte motiva de esta decisión. Adicionalmente se
oficiará al INPEC, para que envíe con destino a la Sala, un informe sobre las políticas de
resocialización y rehabilitación que se han adelantado para la rehabilitación y
reintegración a la vida civil de los postulados al proceso de Justicia y Paz, en especial del
postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, así mismo, deberá informar sobre cuál ha sido el
programa y tratamiento psicológico que se ha implementado para los ex militantes de las
AUC.

DÉCIMO PRIMERO: ORDENAR la acumulación jurídica de penas en los términos y


condiciones consignados en la parte considerativa de esta sentencia.

DÉCIMO SEGUNDO: NO DECRETAR las medidas de extinción de dominio de los bienes


entregados por HÉBERT VELOZA GARCÍA, como quiera que esta medida ya fue ordenada
por esta Sala en sentencia proferida el 4 de septiembre de 2012, en contra de Gian Carlo
Gutiérrez Suárez, alías “El Tuerto, El Pirata, Luís y/o Antonio”, ex integrante del bloque
Calima.

DÉCIMO TERCERO: NEGAR la solicitud de nulidad presentada, por las razones


expuestas en la parte motiva de esta decisión.

DÉCIMO CUARTO: Realizado el control constitucional por vía de excepción, se dispone


la aplicación de los artículos 23 y 25 de la Ley 1592 de 2012, puesto que no se vulneran
los derechos fundamentales de las víctimas ni la Constitución Nacional, tal como se indicó
en la parte considerativa de esta decisión.

DÉCIMO QUINTO: RECONOCER que las personas relacionadas en el acápite del


incidente de identificación de las afectaciones causadas, quienes además de acreditar su
condición de víctimas, probaron las afectaciones causadas, por esta razón y una vez en

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firme la presente decisión, se remitirá la actuación ante la Unidad Administrativa Especial


para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas, para que con fundamento en lo
dispuesto en la Ley 1448 de 2011 y el Decreto 4800 del mismo año, realice las gestiones
pertinentes, encaminadas al pago de la reparación integral.

DÉCIMO SEXTO: EXHORTAR a la Unidad Administrativa Especial para la Atención y


Reparación Integral a las Víctimas UARIV y a las demás entidades que componen el
SNARIV, para que en el término de seis (6) meses contados a partir de la ejecutoria de
esta decisión y en la medida de lo posible otorguen los montos máximos correspondientes
a la indemnización administrativa, según el tipo de delito cometido.

DÉCIMO SÉPTIMO: EXHORTAR a la Unidad Administrativa Especial para la Atención y


Reparación Integral a las Víctimas –UARIV-, para que teniendo en cuenta que los casos
procesados por Justicia y Paz corresponden a graves violaciones a los derechos humanos
como crímenes de lesa humanidad, crímenes de guerra y/o infracciones al DIH; se
implementen medidas de forma complementaria a la indemnización administrativa, como
medidas de restitución de derechos, rehabilitación médica, física y psicosocial; satisfacción
y no repetición, tal como se indicó en la parte considerativa de este decisión.

DÉCIMO OCTAVO: EXHORTAR al Ministerio de Salud y a la Unidad Administrativa


Especial para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas –UARIV-, para que para que
procuren el diseño, la construcción y puesta en marcha de planes específicos para las
víctimas de Justicia y Paz, en los cuales se consideren las características propias de la
población, incluyendo el enfoque diferencial y se establezcan medidas especiales si se
trata de víctimas de lesa humanidad, crímenes de guerra o infracciones al DIH; las cuales
requieren de un proceso particular de asistencia. De manera particular, por las
afectaciones causadas por el accionar de las estructuras paramilitares en el país, en este
caso se recomienda la inclusión de planes especiales para la región de Urabá y las
víctimas del Bloque Bananero de las AUC.

DÉCIMO NOVENO: EXHORTAR a la Unidad Administrativa Especial para la Atención y


Reparación Integral a las Víctimas –UARIV-, para que se adopten las medidas necesarias
ante el Ministerio de Defensa Nacional para la expedición y entrega de la libreta militar a
las víctimas exentas de prestar el servicio militar, a las que se hizo referencia en la parte
considerativa de esta decisión. La libreta militar entregada a las víctimas deberá ser la de

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reservista de segunda clase en virtud de lo previsto por el artículo 51 de la Ley 1448 de


1993.

VIGÉSIMO: EXHORTAR a la Unidad Administrativa Especial para la Atención y


Reparación Integral a las Víctimas –UARIV-, para que los actos de desagravio se realicen
en la región del Urabá, donde se encuentre un alto porcentaje de las víctimas afectadas
por los hechos que se reconocen o en el lugar reconocido por las mismas víctimas como
escenario de vulneración a sus derechos. Para ello deberá tenerse en cuenta que en
aquellos actos donde se reconozca, acepte y repudie las graves y manifiestas violaciones a
las normas internacionales de Derechos Humanos o infracciones al Derecho Internacional
Humanitario a los niños, niñas y adolescentes, el Instituto Colombiano de Bienestar
Familiar debe realizar el acompañamiento previo y posterior a los mismos, que propicie
una acción sin daño, teniendo en cuenta sus entornos significativos. Así mismo, se deberá
dar un tratamiento especial a los actos de violencia sexual y violencia basada en género.

VIGÉSIMO PRIMERO: EXHORTAR a la Unidad Administrativa Especial para la Atención


y Reparación Integral a las Víctimas –UARIV- y al Centro de Memoria Histórica, para que
de manera participativa, contribuya en el acopio, sistematización y difusión de iniciativas
públicas y privadas que autónoma e independientemente aporten a su reconstrucción en
perspectiva de consolidación de garantías de no repetición y de reconciliación y de
sostenibilidad del legado de los emprendimientos sociales de las víctimas, en la región de
Urabá. Así mismo se exhortará al Centro de Memoria Histórica para que incluya dentro del
proceso de territorialización del museo de la memoria material histórico que permita la
exaltación de la dignidad de las víctimas de la región de Urabá.

VIGÉSIMO SEGUNDO: EXHORTAR al Centro de Memoria Histórica, para que teniendo


en cuenta el Programa de Derechos Humanos y Memoria Histórica, se adelante la
investigación para la reconstrucción de la memoria histórica en la región de Urabá y para
tal fin se deberá tener en cuenta a las víctimas, las organizaciones de víctimas, los testigos
de los hechos victimizantes, así como los insumos provenientes de los Acuerdos de
Contribución a la Verdad a que se refiere la Ley 1424 de 2010, respetando la dignidad de
todos y atendiendo la diversidad y pluralidad de voces.

VIGÉSIMO TERCERO: EXHORTAR a la Unidad Administrativa Especial para la Atención


y Reparación Integral a las Víctimas –UARIV- y al Centro de Memoria Histórica, para que
desarrollen actividades de pedagogía, las cuales deben estar en concordancia con el Plan

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Nacional de Educación en Derechos Humanos, en el cual son corresponsables los


Ministerios de Educación Nacional y Cultura, con el Programa Presidencial para la
Protección y vigilancia de los Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario y el
Departamento Administrativo de la Ciencia, Tecnología e Innovación, Alta Consejería para
la Equidad de la Mujer, entre otras entidades, para crear y cimentar una cultura de
conocimiento y comprensión de la historia política y social de Colombia en el marco del
conflicto armado interno, especialmente sobre la región de Urabá.

VIGÉSIMO CUARTO: EXHORTAR a la Unidad Administrativa Especial para la Atención y


Reparación Integral a las Víctimas –UARIV- para que procure la inclusión de las víctimas
remitidas por el Tribunal en los planes o programas de vivienda que se adelanten en la
región de Urabá o en el lugar donde se encuentren residiendo actualmente.

VIGÉSIMO QUINTO: EXHORTAR a la Unidad Administrativa Especial para la Atención y


Reparación Integral a las Víctimas –UARIV- para que en la región de Urabá se procure la
atención integral a la primera infancia a través de la Estrategia “De Cero A Siempre”, se
mejore la calidad educativa, disminuyan las brechas de inequidad, innovación y
pertinencia, y fortalecer la gestión educativa. En educación superior, se le exhorta para la
inclusión de las víctimas reconocidas en la presente sentencia en el Programa Centros
Regionales de Educación Superior (CERES), que es una estrategia que permite reducir las
brechas de acceso y permanencia a la educación superior con un énfasis en la atención a
población víctima.

VIGÉSIMO SEXTO: SOLICITAR a la Unidad Administrativa Especial para la Atención y


Reparación Integral a las Víctimas –UARIV-, informe a la Sala si el ICETEX, el Ministerio de
Educación y la Unidad han puesto en marcha la alianza estratégica que permite fomentar
el acceso de la población víctima a educación superior a través de la línea de crédito
ACCES, para otorgar subsidios a la matrícula para educación superior, de ser así, se le
exhorta para que se incluya a las víctimas reconocidas en esta sentencia.

VIGÉSIMO SÉPTIMO: EXHORTAR a la Unidad Administrativa Especial para la Atención


y Reparación Integral a las Víctimas –UARIV- para que se incluya a las víctimas
reconocidas en la presente sentencia en el Programa de Servicio Público de Empleo,
ofrecido por el Servicio Nacional de Aprendizaje (SENA) en el cual se incluye el desarrollo
de talleres ocupacionales que permiten identificar los intereses, habilidades y
competencias de la población y así direccionarlos de acuerdo con su perfil laboral a la

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oferta educativa SENA: Formación Titulada (Ayudantes, Operarios, Auxiliares, Técnicos,


Especializaciones Técnicas, Tecnólogos, Especializaciones Tecnológicas, Técnico
profesional) ya sea en los Centros de Formación del SENA y/o convenios de Ampliación de
Cobertura - Formación complementaria, certificación de competencias laborales, formación
a la medida, emprendimiento y empresarismo, Programas especiales como: Jóvenes
Rurales Emprendedoras, utilizando diferentes estrategias como integración con la media,
flexibilidad en ambientes de aprendizaje, horarios y calendario.

VIGÉSIMO OCTAVO: EXHORTAR a la Unidad Administrativa Especial para la Atención y


Reparación Integral a las Víctimas –UARIV- para que remita a las víctimas reconocidas en
esta sentencia a los planes y programas desarrollados por el Ministerio de Trabajo,
teniendo en cuenta lo consagrado en el Decreto 4108 de 2011, en el cual se establecen
como funciones del Ministerio del Trabajo formular, dirigir y evaluar la política de
generación de empleo e incremento del nivel de empleabilidad de la población,
especialmente la población en condición de vulnerabilidad, en coordinación con otras
entidades competentes. Así como también deberá reformular, dirigir y evaluar las políticas
que fomenten la estabilidad del empleo, a la reducción de la informalidad, y a establecer
fuentes de protección integral a los desempleados y formular, dirigir y evaluar las políticas
y lineamientos de formación para el trabajo, la normalización y certificación de
competencias laborales y su articulación con las políticas de formación del capital humano,
en coordinación con otras entidades competentes. En este sentido, el Ministerio, como
cabeza de sector deberá diseñar, coordinar y hacerle seguimiento a los programas y
proyectos especiales para la generación de empleo rural y urbano.

VIGÉSIMO NOVENO: SOLICITAR a la Unidad Administrativa Especial para la Atención


y Reparación Integral a las Víctimas –UARIV-, que en los casos en los que corresponda, se
constituya un fideicomiso en una entidad bancaria autorizada por la Superintendencia
Bancaria a nombre de las víctimas que correspondan a niños, niñas y adolescentes que
fueron reconocidos en la presente decisión.

TRIGÉSIMO: ORDENAR a la Superintendencia de Notariado y Registro, para que realice


el asentamiento de los certificados de defunción de las víctimas de los delitos de homicidio
en persona protegida en concurso con desaparición forzada, para tal fin, por la Secretaría
de la Sala, se libraran los oficios correspondientes una vez ejecutoriada la presente
decisión.

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TRIGÉSIMO PRIMERO: EXHORTAR a la Unidad Administrativa Especial para la


Atención y Reparación Integral a las Víctimas –UARIV- para que a través de su gestión y
con el acompañamiento de las entidades pertinentes, en especial el ICBF, se solicite al
Instituto Nacional de Medicina Legal realice las pruebas sanguíneas o de ADN, o la que
sea más efectiva para determinar el grado de parentesco de Rosa María Cortéz
Hernández, Kelly Johana Álvarez Correo, Yudy Esther Cuadrado Cuadrado, Daniel
Alexander Rodríguez Agudelo y Paola Andrea León Murial con las víctimas directas de los
hechos 54, 58, 61 y 68, respectivamente, tal como se indicó en la parte motiva de esta
decisión.

TRIGÉSIMO SEGUNDO: Para efectos del cumplimiento de las medidas de satisfacción y


reparación simbólicas HÉBERT VELOZA GARCÍA, deberá suscribir una comunicación, en la
cual haga reconocimiento público de su responsabilidad en los hechos, ofrezca disculpas
por su conducta y se comprometa a no repetirlas.

TRIGÉSIMO TERCERO: EXHORTAR a la Unidad Administrativa Especial para la


Atención y Reparación Integral a las Víctimas –UARIV- para que en el término de seis (6)
meses contados a partir de la ejecutoria de la presente decisión y una vez remitido el
expediente realice las gestiones necesarias e indispensables para poner en marcha un
proceso colectivo de reparación a favor de las víctimas (directas o indirectas)
pertenecientes o simpatizantes de la Unión Patriótica y para ello se tenga en cuenta lo
expuesto en la parte considerativa de esta decisión.

TRIGÉSIMO CUARTO: EXHORTAR a la Unidad Administrativa Especial para la Atención


y Reparación Integral a las Víctimas –UARIV- para que en el proceso de construcción del
proceso de reparación colectiva del movimiento sindical colombiano (Reparar para
transformar), sea tenido en cuenta de forma singular y específica el colectivo de víctimas
del sindicalismo de la región de Urabá, con los objetivos y los fines expuestos en la parte
considerativa de esta decisión. Para tal fin, la UARIV contará con un término de seis (6)
meses contados a partir de la ejecutoria de esta sentencia.

TRIGÉSIMO QUINTO: ORDENAR la investigación penal a los comerciantes, ganaderos


y bananeros de Urabá que presuntamente resultaron implicados con la financiación,
colaboración o máximos beneficiarios con el accionar del Bloque Bananero de las
Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU), según versiones libres rendidas
por HÉBERT VELOZA GARCÍA y Raúl Emilio Hasbún Mendoza, y los informes presentados

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por la Fiscalía General de la Nación en sesiones de legalización de cargos de los días 26,
27, 28 de abril y 19 de mayo de 2011, relacionados con el tema de las CONVIVIR y el
financiamiento de la agrupación paramilitar.

TRIGÉSIMO SEXTO: ORDENAR la investigación penal a las autoridades civiles,


militares y de policía encargadas de la vigilancia y control de las actividades de las cerca
de 15 Cooperativas de Seguridad Privada “CONVIVIR” que operaron en Urabá, y que
estuvieron ligadas directamente con el accionar el Bloque Bananero de las Autodefensas
Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU), en el entendido que hubo total omisión y
negligencia en el cumplimiento de las funciones, según se expuso en las sesiones de los
días 26, 27, 28 de abril y 19 de mayo de 2011 en audiencia de legalización de cargos.

TRIGÉSIMO SÉPTIMO: ORDENAR que se investigue penalmente a todos los directivos


de las cerca de 15 Cooperativas de Seguridad Privada “Convivir”, que funcionaron en
Urabá, las cuales estuvieron ligadas directamente con el movimiento paramilitar, Bloque
Bananero de las Autodefensas Campesinas de Córdoba y Urabá (ACCU), según se expuso
en sesiones de audiencia de legalización de cargos los días 26, 27, 28 de abril y 19 de
mayo de 2011, cuyos nombres fueron explicitados en el capítulo “Relaciones entre las
Convivir y los paramilitares en Urabá” de esta decisión.

TRIGÉSIMO OCTAVO: ORDENAR que por la Secretaría de la Sala, se compulsen copias


ante la Fiscalía General de la Nación, del informe presentado por la Unidad para la
Atención y Reparación Integral a las Víctimas, y de la sesión de audiencia pública del 11
de marzo de 2013, en el que se da cuenta del estado actual de los bienes entregados por
el postulado HÉBERT VELOZA GARCÍA, a fin de que se investigue a los funcionarios
encargados de la administración de los bienes a los que se ha hecho alusión en esta
decisión, por el posible detrimento patrimonial en el que se pudo haber incurrido, tal
como se indicó en la parte considerativa de la presente decisión.

TRIGÉSIMO NOVENO: EXHORTAR a la Fiscalía General de la Nación, para que dentro


de sus estrategias de priorización en las Unidades Delegadas para la Justicia y la Paz y en
la Unidad de Análisis y Contexto incluya procesos de investigación sobre estas
afectaciones, esto con el fin de que se den a conocer el número de víctimas de la
violencia generalizada que sufrió la población de trabajadores organizados, en particular
de los sectores bananeros de la región.

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CUADRÁGESIMO: EXHORTAR a la Fiscalía General de la Nación, para que dentro de


sus estrategias de priorización en las Unidades Delegadas para la Justicia y la Paz y en la
Unidad de Análisis y Contexto, se generen investigaciones y actividades para develar los
patrones de macrominalidad, se avance en la identificación de los componentes políticos y
económicos del paramilitarismo, se reconstruya la verdad judicial de estos hechos, se
investigue, juzgue y condene a los responsables.

CUADRÁGESIMO PRIMERO: EXHORTAR a la Fiscalía General de la Nación para que


cree una Unidad Especial dedicada al trámite e investigación de las copias que se ordenan
librar con motivo de las versiones libres que rinden los postulados, las declaraciones de
las víctimas donde se hacen señalamientos y las demás actividades investigativas, tal
como se indicó en la parte considerativa de esta decisión.

CUADRÁGESIMO SEGUNDO: EXHORTAR a la Procuraduría General de la Nación para


que destine un grupo de Procuradores que ejerzan las funciones inherentes al Ministerio
Público, entre ellas vigilar y evaluar el desarrollo de las investigaciones que se originen en
las copias ordenadas por la Sala.

CUADRÁGESIMO TERCERO: EXHORTAR a la Fiscalía General de la Nación, para que


se indague si en efecto las armas a las que se hizo alusión en esta decisión de la Corte
Constitucional C-572 del 7 de noviembre de 1997, fueron devueltas al Comando General
de las Fuerzas Militares, tal como se indicó en la parte considerativa de esta decisión.

CUADRÁGESIMO CUARTO: EXHORTAR a la Fiscalía General de la Nación para que


investigue y persiga los bienes de los demás integrantes del Bloque Bananero, con el
objeto de que sean destinados al Fondo de Reparación de las Víctimas, así mismo, para
que tal como se dijo en la sentencia proferida por esta Sala en contra de Edwar Cobos
Téllez, Uber Enrique Banquéz Martínez y Orlando Villa Zapata, se identifiquen los bienes
pertenecientes a los ex congresistas que están siendo procesados por la Sala de Casación
Penal de la Corte Suprema de Justicia por parapolítica y soliciten las medidas cautelares
pertinentes ante el Magistrado de Control de Garantías, para posibilitar su ingreso al
Fondo Nacional de Reparación. El mismo procedimiento se deberá seguir con los bienes
de los investigados no aforados, que actualmente se tramitan ante la justicia ordinaria.

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CUADRÁGESIMO QUINTO: Contra la presente decisión procede de manera exclusiva el


recurso de apelación, que se surtirá ante la Sala de Casación Penal de la Honorable Corte
Suprema de Justicia.

CUADRÁGESIMO SEXTO: En firme esta decisión, expídanse copias ante las autoridades
correspondientes.

CÓPIESE, NOTIFÍQUESE Y CÚMPLASE

EDUARDO CASTELLANOS ROSO

LESTER MARÍA GONZÁLEZ ROMERO ULDI TERESA JIMÉNEZ LÓPEZ


Salvamento parcial de voto

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