CARNE
CARNE
CARNE
“Si, pues, coméis o bebéis, o hacéis otra cosa, hacedlo todo para la gloria de Dios” (1 Cor. 10:31).
OBJETIVOS
1. Comprender que la Reforma Pro Salud es el brazo derecho del tercer mensaje angélico.
2. Valorar el mensaje bíblico de la salud física y ponerlo en práctica.
3. Reconocer que nuestros cuerpos pertenecen a Dios y debemos cuidarlos.
4. Comprender que el consumo de carne está en contra de los principios de la iglesia del fin.
INTRODUCCIÓN
“Es necesaria la temperancia en todas las cosas para preservar la salud… Nuestro Padre celestial envía la
luz de la Reforma Pro Salud para preservar contra los males que resultan de un apetito depravado, para
que los que aman la pureza y la santidad puedan saber cómo usar con discreción las cosas buenas que
les ha provisto, y para que, ejercitando la sobriedad en la vida diaria, puedan ser santificados por la
verdad” (Conducción del Niño, 372).
“En la década de 1860 –la década de dos visiones básicas sobre la reforma pro salud (6 de junio de 1863
y el 25 de diciembre de 1865)” (Mente Carácter y Personalidad, tomo 1, 223).
“El 10 de diciembre de 1871 me fue mostrado nuevamente que la Reforma Pro Salud es un ramo de la
gran obra que ha de preparar a un pueblo para la venida del Señor. Está tan íntimamente relacionada
con el mensaje del tercer ángel como la mano lo está con el cuerpo. La ley de los Diez Mandamientos ha
sido considerada livianamente por los hombres, pero el Señor no quiso venir a castigar a los
transgresores de dicha ley sin mandarles primero un mensaje de amonestación. El tercer ángel proclama
ese mensaje. Si los hombres hubieran sido siempre obedientes al Decálogo, y hubiesen llevado a cabo
en su vida los principios de esos preceptos, la maldición de tanta enfermedad que ahora inunda al
mundo no existiría” (Consejos Sobre el Régimen Alimenticio, 81).
“La reforma pro salud se halla tan íntimamente relacionada con el mensaje del tercer ángel como el
brazo con el cuerpo; pero el brazo no puede tornar el lugar del cuerpo… Carta 57, 1896.
Para comprender lo que debemos comer dentro del marco bíblico, vale conocer las etapas alimenticias
que están inmersas entre el desarrollo de la humanidad en su paso desde el Edén al cielo.
1. Dieta Edénica. 4004 A.C. hasta la caída de la primera pareja. Una Dieta Frugívora (Frutos).
2. Dieta Antediluviana. Dieta Vegetariana.
La Dieta Antediluviana (antes del diluvio) duró desde la pérdida del paraíso hasta el diluvio. Abarca un
período de cerca de 1500 años y diez generaciones.
La Primera modificación en la Dieta. La segunda dieta ordenada por Dios aparece en Génesis 3:18,19:
"... y comerás hierbas del campo.
La Dieta Después del Diluvio. Al concluirse el diluvio, Dios quiso en su misericordia alterar la dieta del
hombre. El dijo: "Todo lo que se mueve y vive, os será para mantenimiento: así como las legumbres y
plantas verdes, os lo he dado todo. Pero carne con su vida, que es su sangre, no comeréis." Génesis
9:3,4.
Dios le concedió al hombre el permiso de comer carne de animales limpios que hubiesen sido
desangrados.
La Dieta del éxodo duró desde el éxodo de Egipto hasta la entrada en Canaán. Fue un período de 40
años.
El Regreso de la Dieta Original. El Mana* "Y Jehová dijo a Moisés: He aquí yo os haré llover pan del
cielo; y el pueblo saldrá, y recogerá diariamente la porción de un día, para que yo lo pruebe si anda
en mi ley, o no." Éxodo 16:4.
La Dieta Ritual o Ceremonial abarcó el tiempo desde la entrada en Canaán hasta la muerte de Cristo
en la cruz. Fueron casi 1500 años.
La Dieta de la Ley Ritual Resumida: Carnes Limpias. En Levítico 11 y Deuteronomio 14, hallamos las
leyes de "kashruth," es decir, las leyes dietéticas del período ritual que definen cuales carnes son
limpias y cuales son inmundas o sucias.
El período de la Dieta Gentil o de los Gentiles abarca el tiempo desde la muerte de Cristo en la cruz
hasta el fin de la profecía de los 2,300 tardes y mañanas.
La Dieta Tolerada Por Dios Para Gentiles. Al morir Cristo en la cruz, el pronunció las sagradas
palabras: "Consumado es. Y habiendo inclinado la cabeza, entrego el espíritu." Juan 19:30. Con esas
palabras de "consumado es". Jesús estaba diciendo que la ley ceremonial o ritual y todas sus
especificaciones de comidas y bebidas quedaba abolida. Dicha ley había prefigurado al Mesías. Jesús
era el Mesías y él había cumplido todas las promesas, profecías y símbolos de la ley ceremonial.
La Dieta Laodicea data desde el fin de las 2300 tardes y mañanas hasta la segunda venida de Cristo.
Tiene como principio de doctrina, la Reforma Pro Salud.
La Dieta Para El Período de Laodicea, consiste en: "El ayuno verdadero, que debiera recomendarse a
todos, es abstinencia de todo estimulante, y el debido consumo de alimentos sencillos que Dios ha
provisto en abundancia." Consejos Sobre Régimen Alimenticio, 223.
8. Dieta Celestial. Desde la Segunda Venida de Cristo hasta la Eternidad* Frugívora. Una Dieta acorde al
Edén restaurado.
El Regreso a la Dieta Original y Santa: Tanto los profetas del Antiguo Testamento como Ezequiel y
Zacarías como los del Nuevo Testamento como Juan nos relatan que del trono de Dios emana un río
de agua de vida. De dicho río, podrán los santos beber hasta saciarse. Así como los Israelitas bebían
del agua del río que emanaba de la peña o roca que los seguía, los hijos de Dios beberán del río que
procede de la Roca Eterna de los Siglos y comerán los frutos de los árboles como fue en el Edén.
PRINCIPIOS BÍBLICOS
Y dijo Dios: He aquí que os he dado toda planta que da semilla, que está sobre toda la tierra, y todo
árbol en que hay fruto y que da semilla; os serán para comer. Gén. 1:29. MC. 227-228.
Ella producirá espinos y cardos para ti y comerás las hierbas del campo. Gén. 3:18.
Alimento para un mundo post diluviano ¿Qué los llevó a comer carne?
Todo lo que se mueve y vive, os será para mantenimiento: así como las legumbres y plantas verdes, os lo
he dado todo. Pero carne con su vida, que es su sangre, no comeréis. Gén. 9:3-4.
En el principio Dios dijo que la fruta era “buena para comer”. El permiso otorgado para comer carne fue
un resultado de la caída. El hombre recibió permiso para comer carne de animales solamente después
del diluvio. ¿Por qué, entonces, necesitamos comer carne? Pocos de los que comen carne saben cuán
llena de enfermedad está ésta. La carne nunca fue el mejor alimento y ahora está maldita por la
enfermedad. {Ev 481.4}.
“Con todo, podrás matar y comer carne en todas tus poblaciones conforme a tu deseo, según la
bendición que Jehová tu Dios te haya dado; el inmundo y el limpio la podrá comer, como la de gacela o
de ciervo.” Deuteronomio 12:15. RVR1960.
Esta cita es usada por muchos para enseñar que se puede comer animales limpios como inmundos,
pero el contexto no está hablando de animales limpios e inmundos, el inmundo y limpio aquí son
personas que podían comer y matar animales, solo cuando Dios había permitido, lo único prohibido era
no consumir la sangre. Los inmundos eran personas que no se habían purificado ceremonialmente,
según la ley judía.
“Sin embargo, podrán matar y comer carne en sus poblaciones en cualquier momento, según los bienes
que el Señor su Dios les haya dado. La podrán comer todos ustedes, estén o no ritualmente puros, como
si fuera carne de gacela o de ciervo.” Deuteronomio 12:15. DHH.
“Sin embargo, podrás matar y comer carne dentro de todas tus puertas, conforme a tu deseo, según la
bendición que el SEÑOR tu Dios te ha dado; el inmundo y el limpio podrán comerla, como si fuera de
gacela o de ciervo.” Deuteronomio 12:15.LBLA
Para este periodo, los inmundos y limpios podían comer los animales permitidos por Dios, inclusive se
menciona la gacela o de ciervo, el contexto lo dice todo. Deut. 14:4-5.
Por otro lado aquí solo explicamos el verdadero significado del texto, en ningún momento Dios estuvo
de acuerdo con matar animales para el consumo humano, el plan de Dios un régimen estricto de frutas y
semillas (Genesis 1:29), después del diluvio es que se permitió comer carne, pero se hizo un menú
(Levítico 11) además es una clasificación universal y no solamente para judíos, en la época que estamos
viviendo la carne debería ser eliminada del consumo humano, son los mejores vehículos de muchas
enfermedades prematuras, la misma ciencia lo ha comprobado.
Isaías 22:13-14. Y he aquí gozo y alegría, matando vacas y degollando ovejas, comiendo carne y
bebiendo vino, diciendo: Comamos y bebamos, porque mañana moriremos. Esto fue revelado a mis
oídos de parte de Jehová de los ejércitos: Que este pecado no os será perdonado hasta que muráis, dice
el Señor, Jehová de los ejércitos.
El Señor no puede salvarnos mientras persistamos en la transgresión de sus mandamientos. Matar
vacas, degollar ovejas, comer carne y beber vino; constituye una violación abierta del sexto
mandamiento y por ende una violación de los diez mandamientos. Stgo. 2:10.
Romanos 14:20. No destruyas la obra de Dios por causa de la comida. Todas las cosas a la verdad son
limpias; pero es malo que el hombre haga tropezar a otros con lo que come.
Romanos 14:21. Bueno es no comer carne, ni beber vino, ni nada en que tú hermano tropiece, o se
ofenda, o se debilite.
Otra versión:
No destruyas la obra de Dios por un trozo de carne. Recuerda, lo malo no es la carne; lo malo es
comerla, si con ello alguien tropieza. Lo mejor que uno puede hacer es dejar de comer carne, beber vino
o cualquier cosa que pueda ofender al hermano o inducirlo a pecar. (NT. Biblia al día).
Proverbios 23:20. No estés con los bebedores de vino, Ni con los comedores de carne; (RV1960).
No te juntes con los que beben vino ni con los que se atiborran de carne, (Biblia hispano americána).
No seas hallado entre los bebedores de vino, ni entre los gulosos comedores de carne; (V. Moderna).
Acerca de nuestra confianza
Elena de White habló directamente a los dirigentes de la iglesia respecto al consumo de carne: Nadie
debiera ser un “maestro del pueblo mientras su propia enseñanza o ejemplo contradiga” los principios
de la reforma pro salud. No debemos confiar en absoluto en aquellos seres humanos que comen carne.
“Los médicos que usan carne y la prescriben para sus pacientes, no deben ser empleados en nuestras
instituciones”… {Mensajera del Señor 323}.
Los ministros que comen carne presentan “un ejemplo malo” y hacen que a otros les resulte difícil tener
“confianza” en ellos. {Mensajera del Señor 323}.
“¿Es posible que podamos tener confianza en ministros, quienes al sentarse ante las mesas donde se
sirve carne, se unen a los demás al comerla?” Consejos sobre el régimen alimenticio, 481.
Reconocer y aceptar que nos ha tocado vivir en el período de Laodicea, por ello debemos tener una
alimentación netamente vegetariana, para desarrollar plenamente la santificación corporal, como parte
de la santificación integral. 1Tes. 5:23.
Nuestra conducta
''Os decimos, amados hermanos y hermanas, que la conducta más segura consiste en dejar la carne''.
2TI, 59.
“Ni una onza de carne debiera entrar en nuestro estómago. El consumo de carne es antinatural. Hemos
de regresar al propósito original que Dios tenía en la creación del hombre.” CSRA. 454.
“Las hortalizas, las legumbres, las frutas y los cereales deben constituir nuestro régimen alimenticio. Ni
un gramo de carne debiera entrar en nuestro estómago. El consumo de carne es antinatural. Hemos de
regresar al propósito original que Dios tenía en la creación del hombre” CSRA. 454.
“Muchos que están hoy solamente medio convertidos con respecto al consumo de la carne
abandonarán al pueblo de Dios para no andar más con él.... Mejor renunciar al nombre de cristiano
que hacer profesión y al mismo tiempo satisfacer apetitos que fortalecen las pasiones no santificadas...
Dios nos llama a una reforma decidida.” Counselson Health (CSS), 575-579. CSRA. 456.
''El pueblo que se está preparando para ser santo, puro y refinado, y ser introducido en la compañía de
los ángeles celestiales, ¿habrá de continuar quitando la vida de los seres creados por Dios para
sustentarse con su carne y considerarla como un lujo? … Los que se sustentan mayormente con carne
no pueden evitar comer la de animales que en mayor o menor grado están enfermos. … El comer carne
trastorna el organismo, anubla el intelecto y embota las sensibilidades morales. Os decimos, amados
hermanos y hermanas, que la conducta más segura consiste en dejar la carne''. 2TI. 59.
Entre los que esperan la venida del Señor, el comer carne finalmente se abandonará; la carne dejará de
ser parte de su alimentacíón. Siempre debiéramos tener eso en vista y esforzarnos para trabajar
constantemente hacia ese fin. No puedo pensar que al comer carne estemos en armonía con la luz que a
Dios le plugo darnos.—Counsels on Diet and Foods, 380, 381. {CN 359.4}.
CONCLUSIÓN
¿Qué alimentos servirá Jesús en la nueva Jerusalén, sobre una mesa de kilómetros?
Pronto oímos su amable voz que decía: “Venid, pueblo mío; habéis salido de una gran tribulación y
hecho mi voluntad. Sufristeis por mí. Venid a la cena, que yo me ceñiré para serviros.” Nosotros
exclamamos: “¡Aleluya! ¡Gloria!” y entramos en la ciudad. Vi una mesa de plata pura, de muchos
kilómetros de longitud, y sin embargo nuestra vista la abarcaba toda. Vi el fruto del árbol de la vida, el
maná, almendras, higos, granadas, uvas y muchas otras especies de frutas… {PE 19.1} EUD 243.5.
Isaías 7:14-15. Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un
hijo, y llamará su nombre Emanuel. Comerá mantequilla y miel, hasta que sepa desechar lo malo y
escoger lo bueno.
En sus primeros años de vida comerá leche cuajada y miel. (Dios Habla Hoy).
La profeta no menciona el tipo de alimento que comía Jesús, sin embargo da a conocer las reuniones
donde comía con publicanos y pecadores.
Los fariseos no querían considerar que Jesús comía con los publicanos y los pecadores para llevar la luz
del cielo a aquellos que moraban en tinieblas. No querían ver que cada palabra pronunciada por el
divino Maestro era una simiente viva que iba a germinar y llevar fruto para gloria de Dios. Habían
resuelto no aceptar la luz; y aunque se habían opuesto a la misión del Bautista, estaban ahora listos para
cortejar la amistad de sus discípulos, esperando obtener su cooperación contra Jesús. Sostuvieron que
Jesús anulaba las antiguas tradiciones; y pusieron en contraste la austera piedad del Bautista con la
conducta de Jesús al comer con publicanos y pecadores. {DTG 241.4}.
¿Con qué propósito Jesús en dos oportunidades comió pescado asado después de su resurrección?
1. Lucas 24:42-43. Entonces ellos le presentaron parte de un pescado asado, y un panal de miel. Y
tomólo, y comió delante de ellos. (RV 1989).
CBA. Comió sin duda para convencer a sus discípulos de que era todavía un ser corpóreo y real.
El contexto de análisis está en Lucas 24:36-41. Jesús come pescado y miel para demostrar que había
resucitado de manera corporal, con carne y huesos, es decir humano, debido a que sus discípulos no
creían que él había resucitado tal como era antes. Para ellos su resurrección debería ser en espíritu.
Por lo tanto deducimos que esos alimentos no eran propios de su alimentación, si no que los usó para
demostrar su cuerpo físico resucitado.
2. Juan 21:13. Vino, pues, Jesús, y tomó el pan y les dio, y asimismo del pescado.
Estaban demasiado asombrados para preguntar de dónde venían el fuego y la comida. “Díceles Jesús:
Traed de los peces que cogisteis ahora.” Pedro corrió hacia la red, que él había echado y ayudado a sus
hermanos a arrastrar hacia la orilla. Después de terminado el trabajo y hechos los preparativos, Jesús
invitó a los discípulos a venir y comer. Partió el alimento y lo dividió entre ellos, y fue conocido y
reconocido por los siete. Recordaron entonces el milagro de cómo habían sido alimentadas las cinco mil
personas en la ladera del monte; pero los dominaba una misteriosa reverencia, y en silencio miraban al
Salvador resucitado. {DTG 750.3}.
(Aparentemente pareciera que Jesús dio el alimento a sus discípulos, más él no comió, pero el siguiente
párrafo lo confirma).
Mientras Cristo y los discípulos estaban comiendo juntos a orillas del mar, el Salvador dijo a Pedro,
refiriéndose a sus hermanos: “Simón, hijo de Jonás, ¿me amas más que éstos?”… {DTG 751.3}.
El contexto que explica el motivo de este reencuentro a desayunar juntos; está en: Juan 21:1, 3-12. DTG.
750.4. Esta vez Jesús va a demostrar que: “Aunque habían de quedar privados de su compañía personal
y de los medios de sostén que les proporcionara su empleo anterior, el Salvador resucitado seguiría
cuidando de ellos. Mientras estuviesen haciendo su obra, proveería a sus necesidades”.
Entonces, sí Jesús comió pescado asado junto con sus discípulos, no significa que aquello era su tipo de
alimentación, sino una demostración de quien era en verdad él y el propósito que tenía su obra
salvadora.
Y en los demás milagros anteriormente hechos, también demuestra que utilizó los elementos en ese
momento existentes; para demostrar la misión para la cual le había enviado su Padre, hacer bien a la
humanidad a partir del estilo de vida y alimentación de cada necesitado, para luego transformarlos con
un estilo de vida nuevo y alimentación saludable.
Confiando plenamente en Dios, Jesús tomó la pequeña provisión de panes; y aunque constituía una
pequeña porción para su propia familia de discípulos, no los invitó a ellos a comer, sino que empezó a
distribuirles el alimento, ordenándoles que sirviesen a la gente. El alimento se multiplicaba en sus manos;
y las de los discípulos no estaban nunca vacías al extenderse hacia Cristo, que es él mismo el pan de vida.
La pequeña provisión bastó para todos. Después que las necesidades de la gente quedaron suplidas, los
fragmentos fueron recogidos, y Cristo y sus discípulos comieron juntos el alimento precioso
proporcionado por el Cielo. {DTG 337.3}.
El organismo humano es hechura de Dios. Los órganos empleados en todas las diferentes funciones del cuerpo
fueron hechos por él. El Señor nos da alimento y bebida para satisfacer las necesidades del cuerpo. Él ha dado
diferentes propiedades a la tierra aptas para el crecimiento del alimento para sus hijos… El hombre debe ayudar
diligentemente a guardarse a sí mismo en armonía con las leyes de la naturaleza. El que coopera con Dios en la
obra de guardar en orden la maravillosa maquinaria, el que consagra a Dios sus facultades... permanece en su
virilidad dada por Dios y está registrado en los libros del cielo como un hombre salvo. {ELC. 159.2}.