ISAIAS: PROFECIA CONTRA DAMASCO “TE OLVIDASTE DEL SEÑOR”

INTRODUCCIÓN
"Nuestras iglesias ya no tienen el poder de Dios para atraer a la gente. Ahora bajan a Egipto,
toman prestada su música, sus danzas y su entretenimiento, ¡esperando atraer una multitud! ¡No
hay pasión por las almas – solo el gentío! ¡Qué la iglesia crezca a cualquier precio! Fíjense en la
mayoría de los boletines de las iglesias, parecen más bien un calendario teatral. ¡La iglesia quiere
montar los rápidos caballos de Egipto! Es un hedor en la nariz de Dios."
David Wilkerson
Texto: Isaías 17
Tema: Este pasaje de Isaías; describe de forma notable, el juicio, no solo contra Damasco (Siria);
sino contra Efraín (Israel); por haberse apartado del Señor al consumar una alianza en contra del
poder asirio.

Desarrollo
Lo primero que Isaías describe es el juicio contra estas dos naciones y la segunda parte es la razón
fundamental para dicho juicio.
Examinemos esta primera parte del pasaje:

1. El Juicio del Santo de Israel. Vv. 1-8

 Aun cuando la profecía en el encabezado del texto es en contra de Damasco, claramente
Israel también está siendo juzgado.
 Es importante recordar y resaltar el hecho de que un asunto importante a tratar en estos
temas respecto a los juicios contra las naciones; es como el carácter de Dios sobresale en
su trato con las naciones y lógicamente con su pueblo.
 También es pertinente señalar que aun cuando, las profecías en contra de estas naciones
ya pasaron, es decir, son parte de la historia. Esta historia de cómo Dios trató con ellas,
sigue siendo relevante para nosotros como iglesia contemporánea con el fin de aprender
de la historia y no seguir los mismos caminos que dichas naciones siguieron. Es decir; la
infidelidad, la rebeldía, el orgullo etc.
 Damasco y Efraín aparecen juntas aquí porque las dos naciones, es decir Siria e Israel,
consumaron una alianza para luchar en contra del poder del Imperio Asirio. Su pecado
consistió esencialmente en no apoyarse en el Dios de Israel.
 Motyer en su comentario a Isaías señala: El interés que siente el Señor por su pueblo es
santo. En consecuencia el juicio divino también les afecta. El pecado concreto que les
somete a juicio es que, frente al poder asirio que se cierne sobre ellos, buscaron su
seguridad en una alianza armada con Aram. La explicación (v.10) es que esto supone un
abandono del Señor y de la seguridad que el proporciona. Por tanto, tanto ellos como la
fortaleza en que confiaron perecerán.
 Y la descripción que hace Isaías en estos versículos es evidente muestra de la destrucción
de la que serán objeto.
 Dado que Efraín no puede salvarse buscando la seguridad en Damasco, este tampoco
puede recibir ayuda del Efraín incrédulo. El pueblo de Dios no puede tener seguridad en
un poder mundano ni, cuando sea apartaron de la confianza única en el Señor, pueden ser
de bendición para el mundo. (Andamio)
 Lo que sigue en el pasaje son tres secciones encabezadas por la frase “En aquel día”. Es
importante recordar que esta frase se refiere comúnmente al día del Señor, que es un
tiempo de juicio o bendición o de ambas cosas, durante el cual Dios interviene de forma
decisiva en los asuntos de las naciones.
 Sobre la base de este panorama , el profeta atina a enfatizar que se debilitara a gloria de
Jacob y se consumirá la gordura de su cuerpo. La gloria a la que se refiere el pasaje tiene
que ver con la falsa gloria del poder y el status mundanos. Esta es una imagen que hace
evidente que la incredulidad es como un cáncer que carcome y devora, es la imagen de la
destrucción.
 La disminución de la población de Efraín o Samaria, tanto en número como en importancia
se describe en 17:4–6a; Sólo han quedado rebuscos, como cuando se dejan ignoradas
algunas espigas en el campo segado, o como cuando se dejan unas pocas olivas,
escondidas de la vista, después de que el olivo ha sido vareado. (Es decir, azotado con una
vara) Alude a castigo (Mundo Hispano).
 Esta imagen da espacio a la esperanza de un remanente, que es fundamentalmente de lo
que se habla en el v. 7 en la segunda sección referente a “En aquel día”
 La segunda sección “En aquel día” empieza en el v. 7 y se enfoca concretamente en la
cuestión de la confianza. El ojo de la expectación y la confianza se fijara solamente en el
Señor, excluyendo todo otro posible objeto de devoción religiosa. (Motyer)
 En aquel día ese reamente del que se habla en el v. 6, los sobrevivientes tanto de Israel
como de Siria, tomando en cuenta que cuando Isaías se refiere al “hombre” sugiere no
solo el pueblo no solo de Efraín (Israel) sino, de Siria (Damasco); según el v. 3.
 Fijar la mirada en el Santo de Israel, es en esencia mantener la vista en el Señor como
único objeto de confianza. La palabra Hacedor, es usada por el profeta como un contraste
deliberado con los “dioses hechos con los dedos o con las manos del v.8.
 En última instancia el Dios Creador es el único Dios. El remanente universal del que habla
Isaías, reconocerá al único Dios verdadero por encima de cualquier otra deidad en la que
haya puesto su confianza.
 Para Israel, Hacedor significaba algo más que Creador originario; indicaba al Dios que creo
a Israel como pueblo de su elección, cubriéndolo con su cuidado redentor y providencial
(Motyer).
 Estamos como iglesia en medio de una sociedad que como he dicho en otras ocasiones se
precia de ser “cristiana” pero que ha cedido a las normas, principios y estilos del mundo
que la rodea.
 La sociedad “cristiana” a la que hago referencia dejo de poner su mirada en Dios como
único objeto de confianza, adoración y devoción. La iglesia en muchos de sus frentes
habla más de lo que le interesa a la gente que de lo que le interesa a Dios. Hemos
fabricado muchos ídolos a nuestro alrededor. Sin embargo, creo que la mayor idolatría de
nuestra sociedad actual tiene que ver con el altar que le hemos fabricado al hombre
mismo. El hombre se sentó en el trono de Dios y una gran mayoría de cosas giran en torno
al hombre como objeto de adoración. Las ideologías del consumismo, género y el
relativismo, han desembocado en un sinnúmero de desviaciones morales y aberraciones
 de todo tipo. Es hora de mirar de nuevo al Santo de Israel, un Dios que demanda santidad
de su iglesia, devoción y adoración, al Único Dios verdadero.
 Creo que somos parte de ese pequeño remanente que quiere adorar a Dios y solo a Él. Sin
embargo, si es así, necesitamos más que simple y llanamente conformarnos con ser
miembros de una congregación. Las membrecías no van a la vida eterna. Necesitamos ser
hombre y mujeres que viven su cristianismo con la mirada puesta en Dios para conocerlo
y darlo a conocer. No podemos ser como Efraín, que hizo alianzas con poderes paganos
para combatir otros poderes paganos. Nuestra confianza debe estar puesta en Dios, para
rebatir todas las pretensiones y argumentos que amenazan la santidad de la iglesia.
 Porque como lo señala Motyer: Toda falsa religión, toda religión basada en obras es en
última instancia un ejemplo de autosuficiencia. Esto quedara completamente erradicado
en aquel día, junto con su sistema de apoyo constituido por altares, símbolos de Aserá e
imágenes del Sol.
La segunda parte tiene que ver con la razón de Dios, contenida en la última sección de “En
aquel día”
2. La Razón del Santo de Israel. Vv. 9-14
 Esta segunda parte tiene que ver con la razón de porque el pueblo de Dios, Efraín (Israel)
fue incapaz de mantener su mente y mirada fija en Dios.
 El profeta comienza esta segunda parte haciendo énfasis en que las ciudades fortificadas o
las ciudades de su fortaleza que fueron abandonadas por causa del pueblo de Israel, serán
como lugares abandonados. Todo será desolación dice Isaías.
 Esas ciudades no sirven de nada a un pueblo que ha olvidado a la roca de su refugio. Una
prueba constante del pueblo de Dios es si están dispuestos o no a encontrar su fuerza solo
en El. ¿Sera una “ciudad fortificada” o “una roca de refugio”?
 Con respecto a estas ciudades un poco de contexto histórico es importante. En los buenos
días de Josué, la confianza en el Señor demostró ser más fuerte que la depositada en
aquella seguridad hecha por la mano del hombre. Pero entonces el pueblo de Dios se
aparto de la fe confiada comenzando a construir y a confiar en lo que una vez destruyeron.
Sin embargo en aquel día, se revelara de nuevo la necedad de semejante seguridad.
(Motyer)
 La razón expresa una realidad dramática del pueblo de Dios. El Señor dejo de ser su
fortaleza porque: Te olvidaste del Dios de tu salvación, no te acordaste de la Roca de tu
fortaleza!!
 Es una frase que denota un panorama de apostasía absolutamente dramático y desolador.
Literalmente Israel se había olvidado del Dios de su salvación. Aquí la salvación no se
presenta como un acto ocasional, sino como un atributo de Dios: El es un Dios Salvador. Y
de la Roca de su fortaleza. De la misma forma roca no se refiere solo a un símbolo amplio
de fortaleza divina o de durabilidad. Evidentemente está conectada a la salvación. El Señor
como Roca es su manifestación en sus actos confiables y salvadores, que aquí ofrecen una
fortaleza que su pueblo necesita en medio de un mundo amenazador.
 Ahora bien, a pesar de gozar de una fortaleza real, decidieron más bien poner su confianza
en la falsa religión y en las alianzas políticas y militares que a la larga resultaron
inconstantes y fútiles. Podían haber gozado de la seguridad del Dios salvador y de la Roca,
y les vemos recogiendo migajas, inmiscuyéndose en cultos y alianzas extranjeras.
 Pero esta es una situación a la que la iglesia no es ajena. El apóstol Pablo lo advierte de
forma categórica en 1 Timoteo 4:1-5 El Espíritu dice claramente que, en los últimos
tiempos, algunos abandonarán la fe para seguir a inspiraciones engañosas y doctrinas
 diabólicas.  2  Tales enseñanzas provienen de embusteros hipócritas, que tienen la
conciencia encallecida.[a]  3  Prohíben el matrimonio y no permiten comer ciertos alimentos
que Dios ha creado para que los creyentes, [b]  conocedores de la verdad, los coman con
acción de gracias.  4  Todo lo que Dios ha creado es bueno, y nada es despreciable si se
recibe con acción de gracias,  5  porque la palabra de Dios y la oración lo santifican.
 2 Timoteo 3:1-5 Pero debes saber[a]  esto: que en los últimos días  vendrán tiempos
difíciles.  2  Porque los hombres serán amadores de sí mismos, avaros, jactanciosos,
soberbios, blasfemos, desobedientes a los padres, ingratos, irreverentes,  3  sin amor,
implacables, calumniadores, desenfrenados[b], salvajes[c], aborrecedores de lo
bueno,  4  traidores, impetuosos[d], envanecidos, amadores de los placeres en vez de
amadores de Dios;  5  teniendo apariencia de piedad[e], pero habiendo negado  su poder; a
los tales evita.
 2 Timoteo 4: 1-4 Te encargo solemnemente, en la presencia de Dios y de Cristo Jesús, que
ha de juzgar a los vivos y a los muertos, por su manifestación y por su reino:  2  Predica la
palabra; insiste a tiempo  y  fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con
mucha[a]  paciencia e instrucción.  3  Porque vendrá tiempo  cuando no soportarán la sana
doctrina, sino que teniendo comezón de oídos, acumularán para sí maestros conforme a
sus propios deseos;  4  y apartarán sus oídos de la verdad, y se volverán a mitos [b].
 Como podemos observar en estos pasajes, la iglesia contemporánea no esta exenta de
apartarse del que es el Dios de su Salvación y la Roca de su fortaleza.
 Luego el profeta pasa a considerar el abatimiento de los ejércitos de Senaquerib, que
ocurriría en el año 701 a. de J.C., por intervención divina (17:12–14). En el v. 14 dice: Al
atardecer he aquí el terror repentino, y antes del amanecer ya no existirán. Estas palabras
parecen un eco lejano en el pasado, del relato histórico de 2 Reyes 19:35: Aconteció que
aquella misma noche salió el ángel de Jehovah e hirió a 185.000 en el campamento de los
asirios. Se levantaron por la mañana, y he aquí que todos ellos eran cadáveres. (Mundo
Hispano)

CONCLUSIÓN
Aun cuando puede ser un pasaje difícil de entender a causa del todo el entramado literario
que lo conforma. El pasaje hace claro dos hechos particularmente fundamentales. (1) Como
pueblo de Dios como su iglesia, debemos tener cuidado y hacer nuestra la convicción de que el
Señor debe ser y continuar siendo El Dios de nuestra Salvación y la Roca de nuestra fortaleza.
Que a pesar del cuidado providencial que él nos otorga, no estamos exentos de la apostasía (2)
Que debemos mantener la actitud propia del remanente descrito en el pasaje “Buscar a
nuestro Hacedor y mantener nuestra mirada puesta en el Santo de Israel.