Linguística Resumen 1 Parcial
Linguística Resumen 1 Parcial
Linguística Resumen 1 Parcial
Otras ciencias operan con objetos dados de antemano. No es así en la lingüística. Por ej.: en la
palabra desnudo se ven tres o cuatro cosas diferentes según la manera de considerarla. El punto
de vista es el que crea el objeto.
El lenguaje no puede ser un objeto de estudio organizado porque es multiforme (se da de varias
formas) y heteróclito (irregular, no aparece siempre igual), tiene una tradición histórica y también
actual, forma parte de lo social y lo individual, y lo ocupan tres dominios: el físico, el fisiológico y el
psíquico.
Para armar una teoría rigurosa que explique el fenómeno del lenguaje es necesario observar este
fenómeno con un principio de organización: la dicotomía.
LENGUA/HABLA:
El signo lingüístico es una entidad psíquica de dos caras. Estas dos caras o elementos están
íntimamente unidos, su unión es solidaria, y se reclaman recíprocamente. Llamamos signo a la
asociación del concepto y de la imagen acústica. El concepto puede ser denominado significado y
la imagen acústica, significante.
METODOLOGÍAS DE ESTUDIO: 1. Sincronía, para lo inmutable; 2. Diacronía, para lo mutable.
La lengua es un sistema de valores puros que a nada remite fuera de la instancia momentánea de
sus términos (definición por la negatividad).
Los signos son valores dentro de un sistema. Su valor está dado por su relación de oposición y
diferencia con los demás signos del sistema. Un signo tiene valor en el sistema al que pertenece,
fuera de él no es nada. Un signo es lo que los otros no son. Ningún signo preexiste al sistema es
del sistema de donde emergen los valores, los signos.
En la lengua no hay ni pensamiento ni sonido, sino asociaciones arbitrarias entre ellos. La lengua
nos permite organizar el pensamiento, le pone orden a la masa amorfa de pensamientos y sonidos
(sustancia). Por esto, la lengua es forma y no sustancia. La forma es lo único que le importa.
Saussure sostiene que la lengua no es una nomenclatura porque no es una lista de términos.
Arbitrariedad: implica que el lazo que une al significado y al significante es arbitrario, inmotivado,
no tiene razón lógica ni natural.
Carácter lineal del significante El significante se desenvuelve en el tiempo únicamente y tiene los
caracteres que de él toma: representa una extensión, y esa extensión es mensurable en una sola
dimensión; es una línea. Los significantes no disponen más que de la línea del tiempo. Sus
elementos se presentan uno tras otro, forman una cadena.
Inmutabilidad: nos entendemos porque tenemos los mismos signos y estos no cambian. El signo
es inmutable desde el punto de vista del hablante.
Mutabilidad: se tiene en cuenta al signo en el transcurso del tiempo en una comunidad hablante.
El signo se puede desplazar, en su significado o en su significante.
Sincronía: Los signos están en simultaneidad. Refleja el punto de vista del hablante. Es el estado de
equilibrio de la lengua. Ej.: En el diagnóstico de un paciente, es la situación actual del mismo.
Lo que el signo lingüístico une no es una cosa y no nombre, sino un concepto y una imagen
acústica.
El signo lingüístico es una entidad psíquica de dos caras. Estos elementos se reclaman
recíprocamente. Las vinculaciones consagradas por la lengua son las únicas que aparecen
conforme con la realidad.
Se ha utilizado la palabra símbolo para designar el signo lingüístico pero el símbolo tiene por
carácter no ser nunca completamente arbitrario; no está vacío: hay un vínculo natural entre el
significante y significado. Ej.: El símbolo de la justicia, una balanza, no podría reemplazarse por
otro objeto cualquiera.
Cuando se dice arbitrario se quiere decir inmotivado, arbitrario con relación al significado, con
el cual no guarda ningún lazo natural en la realidad.
Los elementos del significante se presentan uno tras otro; forman una cadena.
Saussure: El lazo que une el significante al significado es arbitrario, o sea inmotivado. No tiene
nexo con la realidad. Las expresiones varían en el tiempo y en el espacio, y en consecuencia no
tienen con aquella ninguna relación necesaria.
Entiende por significado al concepto, declara que “el signo lingüístico no une una cosa y un
nombre, sino un concepto y una imagen acústica” pero luego dice que la naturaleza del signo es
arbitraria porque no tiene nexo natural en la realidad.
Benveniste: Ese razonamiento está falseado por un tercer término. Ese término es la cosa misma,
la realidad. Si se plantea en un principio que la lengua es forma, no sustancia, hay que admitir –y
Saussure lo afirma- que la lingüística es ciencia de las formas exclusivamente.
El propio Saussure dice que “psicológicamente, nuestro pensamiento no es sino una masa amorfa
e indistinta y los lingüistas han reconocido que sin el auxilio de los signos, seríamos incapaces de
distinguir dos ideas de manera clara y constante. El pensamiento es como una nebulosa en donde
nada está necesariamente delimitado. No hay ideas preestablecidas ni nada es distinto antes de la
aparición de la lengua.”
Benveniste: A la inversa, el espíritu no adopta más forma sonora que la que le sirve de soporte a
una representación identificable para él; si no, la rechaza. Entonces, el significante y el significado
son en realidad dos caras de una misma noción y se componen como incorporante e incorporado.
Saussure dice de la lengua que es también comparable a una hoja de papel: el pensamiento es el
anverso y el sonido el reverso; no se puede cortar uno sin al mismo tiempo cortar el otro. No
podría aislarse el pensamiento del sonido ni viceversa.
Benveniste: Lo que es arbitrario es que tal signo, y no tal otro, sea aplicado a tal elemento de la
realidad, y no a otro.
Saussure muestra que puede hablarse a la vez de inmutabilidad y mutabilidad del signo.
Inmutabilidad porque, siendo arbitrario, no puede ser puesto en tela de juicio en nombre de una
norma razonable; mutabilidad porque, siendo arbitrario, siempre es susceptible de alterarse.
La elección que recurre a tal segmento acústico para tal idea no es arbitraria; este segmento
acústico no existiría sin la idea correspondiente y viceversa. En realidad, por más que hable de
“idea”, Saussure piensa siempre en la representación del objeto real y en el carácter no necesario,
inmotivado, del nexo que une el signo a la cosa significada. La prueba de esa confusión está en
cuando dice que si este no fuera el caso, la noción del valor perdería algo de carácter ya que
contendría un elemento impuesto desde afuera.
Benveniste: elemento impuesto desde afuera es la realidad objetiva. Si se considera el signo en sí
mismo, y en tanto portador de un valor, la arbitrariedad queda eliminada ya que los valores
quedan enteramente “relativos”, pero se trata de saber cómo y en relación con qué. El valor es un
elemento del signo; si el signo no es arbitrario se sigue que el carácter “relativo” del valor no
puede depender de la naturaleza arbitraria del signo.
Debe considerarse el valor como un atributo de la forma y no de la sustancia. Los valores son
relativos los unos con respecto a los otros. Esta es una prueba de la necesidad. Ya no se trata del
signo aislado sino de la lengua como sistema de signos. Quien dice sistema dice ajuste y
adecuación de las parte en una estructura. La relatividad de los valores es la prueba de que
dependen estrechamente uno del otro en la sincronía de un sistema.
Los valores son de oposición y no se definen más que por su diferencia. Se mantienen en mutua
relación de necesidad. Una oposición está sostenida de necesidad.
El signo encierra un significante y un significado cuyo nexo debe ser reconocido como necesario.
Principio estructural de la lengua: El carácter absoluto del signo lingüístico así entendido rige a su
vez la necesidad dialéctica de los valores en constante oposición.
EL VALOR LINGÜÍSTICO
Psicológicamente nuestro pensamiento no es más que una masa amorfa e indistinta. Sin la
ayuda de los signos, seríamos incapaces de distinguir dos ideas. El pensamiento es como una
nebulosa donde nada está delimitado. No hay ideas preestablecidas, nada es distinto antes de
la aparición de la lengua.
La lengua es como una serie de subdivisiones contiguas marcadas sobre el plano indefinido de
las ideas y sobre el plano indeterminado de los sonidos. El papel de la lengua es el de servir de
intermediaria entre el pensamiento y el sonido.
La lengua se puede comparar con una hoja de papel, el pensamiento es el anverso y el sonido
es el reverso: no se puede cortar uno sin cortar el otro. Tampoco se puede aislar al
pensamiento del sonido ni viceversa.
Constituido por 1) una cosa desemejante –diferente- susceptible de ser cambiada por otra
cosa cuyo valor está por determinar. 2) por cosas similares comparables con aquellas cuyo
valor se está por ver.
Cuando se dice que los valores corresponden a conceptos, se sobreentiende que son
puramente diferenciales, definidos no positivamente por su contenido, sino negativamente
por sus relaciones con los otros términos del sistema. Su característica es la de ser lo que los
otros no son.
Esta parte está constituida únicamente por conexiones y diferencias con los otros términos de
la lengua.
Lo que importa en la palabra no es el sonido por sí mismo, sino la diferencia que permita
distinguirla de todas las demás. Las palabras son las que llevan la significación.
Nunca podrá un fragmento de lengua estar fundado en otra cosa que en su no-coincidencia
con el resto. Arbitrario y diferencial son sus cualidades.
Es imposible que el sonido, elemento material, pertenezca por sí a la lengua. Para la lengua no
es más que una materia que pone en juego. Todos los valores convencionales presentan este
carácter de no confundirse con el elemento tangible que les sirve de soporte. (No es el
elemento de una moneda lo que fija su valor).
Pensar y hablar son dos actividades distintas por esencia, se conjugan para la necesidad
práctica de comunicación.
El lenguaje, en tanto que es hablado, es empleado para transportar lo que queremos decir.
Pero “nuestro pensamiento” o “lo que tenemos en mente” es un contenido de pensamiento
difícil de definir en sí. Este contenido recibe forma cuando es enunciado. Recibe forma de la
lengua y en ella. No puede disociarse de la lengua ni trascenderla. La lengua está organizada
como arreglo de “signos” distintos y distintivos susceptibles de descomponerse en unidades
inferiores o agruparse en unidades complejas. Esta estructura da su forma al contenido de
pensamiento. Debe ser distribuido entre morfemas de ciertas clases.
El pensamiento se reduce a algo tan indiferenciado que no tenemos medio de aprehenderlo
como “contenido” distinto de la forma que la lengua le confiere.
“ESTRUCTURA” EN LINGÜÍSTICA
El principio de la “estructura” como objeto de estudio fue enunciado poco antes de 1930, por un
grupo restringido de lingüistas que se proponían reaccionar así contra la concepción
exclusivamente histórica de la lengua, contra una lingüística que disociaba la lengua en elementos
aislados y se ocupada de seguir las transformaciones de estos.
Saussure es llamado el precursor del estructuralismo moderno. Sin embargo, jamás empleó, en
ningún sentido, la palabra “estructura”. La noción esencial para él, es de la SISTEMA. La novedad
en su doctrina es: que la lengua forma un sistema.
S: La lengua es un sistema que no conoce más que su orden propio. La lengua, sistema de signos
arbitrarios. La lengua es un sistema en el que todas las partes pueden y deben considerarse en su
solidaridad sincrónica. Sobre todo, Saussure enuncia la primacía del sistema sobre los elementos
que lo componen: “cuán ilusorio es considerar un término sencillamente como la unión de cierto
sonido con cierto concepto. Definirlo así sería aislarlo del sistema del que forma parte; sería creer
que se puede comenzar por los términos y constituir el sistema haciendo la suma, mientras que,
por el contrario, hay que partir de la totalidad solidaria para obtener por análisis los elementos
que encierra”. Esta última frase contiene en germen todo lo esencial para la concepción
“estructural”.
Si se agregan a la noción de lengua los dos principios de que la lengua es forma, no sustancia, y de
que las unidades de la lengua no pueden definirse sino por sus relaciones, se habrán indicado los
fundamentos de la doctrina que sacaría a la luz la estructura de los sistemas lingüísticos.
Bröndal Estructura: “para designar, por oposición a una simple combinación de elementos, un
todo formado por fenómenos solidarios, de tal suerte que cada uno depende de los otros y no
puede ser el que es sino en y por su relación con ellos”.
Hjelmslev “se entiende por lingüística estructural un conjunto de investigaciones sustentadas por
una hipótesis según la cual es científicamente legítimo describir el lenguaje como, esencialmente,
una entidad autónoma de dependencias internas, o en una palabra, una estructura… El análisis de
esta entidad permite deslindar constantemente partes que se condicionan recíprocamente y cada
una de las cuales depende de ciertas otras y no sería concebible ni definible sin estas otras partes.
Reduce su objeto a red de dependencias, considerando los hechos lingüísticos en razón el uno del
otro.
El principio fundamental es que la lengua constituye un sistema, cuyas partes todas están unidas
por una relación de solidaridad y de dependencia. Este sistema organiza unidades – los signos
articulados – que se diferencian y se delimitan mutuamente. La doctrina estructuralista enseña el
predominio del sistema sobre los elementos, aspira a deslindar la estructura del sistema a través
de las relaciones de los elementos, tanto en la cadena hablada como en los paradigmas formales,
y muestra el carácter orgánico de los cambios a los cuales la lengua está sometida.
ESTRUCTURALISMO EN LINGÜÍSTICA (FICHA CONDITO V.)
El análisis estructural consiste en mostrar que existe un orden (el sistema) cuyo principio
explicativo se encuentra en la estructura que lo define en su singularidad y su variabilidad.
Saussure: Toma el sistema como totalidad y la unidad como diferencia.
Estructura: entidad autónoma de dependencias internas. Designa por oposición a una simple
combinación de elementos, un todo formado por fenómenos solidarios que cada uno depende de
los otros y sólo puede ser lo que es en y por su relación con ellos. (Teoría de las formas)
Adoptar el punto de vista estructuralista es considerar la lengua como un sistema organizado por
una estructura por revelar y describir.
La noción de nivel nos parece esencial en la determinación del procedimiento de análisis. Sólo ella
puede permitirnos en la complejidad de las formas, dar con la arquitectura singular de las partes
del todo.
La lengua como sistema de orgánico de signos lingüísticos. Este análisis consiste en dos
operaciones que se gobiernan una a otra y de las que dependen todas las demás: 1) Segmentación
y 2) Sustitución.
Método de distribución: consiste en definir cada elemento por el conjunto en que se presenta y
por medio de una doble relación 1) relación del elemento con los demás elementos
simultáneamente presentes (relación sintagmática) y 2) relación del elemento con los demás
elementos mutuamente sustituibles (relación paradigmática-asociativa).
Primero tenemos al nivel que Benveniste denomina merismático. Tiene una unidad de análisis que
es el merisma. El merisma será el rasgo distintivo del fonema. El merisma es una unidad que no se
puede segmentar.
En segundo lugar, vamos a tener al nivel fonemático. Como unidad de análisis vamos a tener al
fonema, que es una entidad segmentable mínima.
En tercer lugar, tenemos el nivel sígnico o nivel de la palabra en el cual vamos a tener como unidad
de análisis a la palabra en forma libre o forma conjunta.
Por último, vamos a tener el nivel categoremático o también nivel de la frase, cuya unidad es la
frase que no constituye unidades distintivas.
Este es el primer planteamiento del análisis lingüístico. El nivel y sus unidades. Luego
continuaremos viendo las relaciones y operaciones entre estos niveles.
EL CARÁCTER DOBLE DEL LENGUAJE (JAKOBSON)
Hablar selecciona determinadas entidades lingüísticas y las combina en unidades de un nivel de
complejidad más elevado. Selecciona palabras y las combina formando frases de acuerdo con el
sistema del lenguaje que emplea. El hablante no es libre en su elección, tiene que elegir las que
tiene en común con la persona a quien se dirige.
El emisor da un mensaje verbal, elige de las “posibilidades preconcebidas” y el receptor supone
una elección idéntica a partir del mismo conjunto de posibilidades. Hablar requiere un código en
común.
Las características se combinan en un haz de rasgos distintivos y forman el fonema. El fonema no
puede aparecer fuera de un contexto. El repertorio de posibles combinaciones se halla limitado
por el código del lenguaje que se trate.
Todo signo lingüístico se dispone según dos modos.
1: La combinación: Signo formado de otros signos constitutivos y/o aparece en combinación con
otros signos. Toda unidad lingüística sirve como contexto para las unidades más simples y/o
encuentra su propio contexto en una unidad lingüística más compleja.
Combinación y contextura son dos caras de la misma operación
2: La selección: La opción entre dos posibilidades implica que se puede sustituir una por la otra,
equivalente a la primera. Selección y sustitución son dos caras de la misma operación.
LOS POLOS METAFÓRICO Y METONÍMICO
Afasia: trastorno del lenguaje que se caracteriza por la pérdida total o parcial de la capacidad de
hablar y se debe a lesiones cerebrales.
Metafórico: Relaciones asociativas (paradigmáticas) Se produce una selección y sustitución.
Metonimia: Expresión que achica el significado. Relaciones sintagmáticas Contigüidad y
desplazamiento.
El trastorno afásico consiste en una alteración de la facultad de selección y sustitución o de la
facultad de combinación y contextura.
El primer tipo (selección y sustitución) suprime la relación de semejanza; El segundo (combinación
y contextura), de la contigüidad. La metáfora es ajena al trastorno de la semejanza y la metonimia
al de la de contigüidad.
En la conducta verbal ambos procesos operan continuamente. Se suele conceder a uno
preferencia sobre el otro por influjo de los sistemas culturales, la personalidad y el estilo verbal.
Test psicológico: Muestra que existen dos predilecciones lingüísticas opuestas: Un sustituto
(sustitutiva) y un complemento de estímulo(predicativa). En el segundo caso, el estímulo y la
respuesta forman una frase.
Algo distinto de cualquier otra cosa, con la que puede intercambiarse, y cuyo valor debe
determinarse.
Cosas similares a aquella cuyo valor se va a determinar.
Valor en su aspecto conceptual (significado): el valor de todo término está determinado por lo que
lo rodea. Los va-lores corresponden a conceptos ya que son referenciales, es decir, que están
definidos por sus relaciones con los otros términos del sistema, teniendo como rasgo esencial ser
lo que los otros no son. Un concepto simboliza la significación que sin los valores determinados
por sus diferencias fónicas, que debido a su arbitrariedad y diferenciación, permiten distinguir
esos signos de todos los demás, ya que poseen significación.
Valor en su aspecto material (significante): lo que importa en la palabra son las diferencias fónicas,
que debido a su arbitrariedad y diferenciación, permiten distinguir esos signos de todos los demás,
ya que poseen la significación.
El signo no es una nomenclatura, es decir, no supone ideas preexistentes a las palabras, ya que la
nomenclatura no nos dice si el nombre es de naturaleza vocal o psíquica, ni tampoco muestra que
el significado y el significante tienen una relación muy complejo.
Principios de la lengua
EDUCATINA
Se considera que algo es Arbitrario cuando es hecho por convención, algo que esta inmotivado.
El signo lingüístico es arbitrario: el significante y el significado tienen un lazo, el cual es arbitrario e
inmotivado, porque no guarda relación natural entre concepto (Significado) y la imagen acústica
(signifícate). Por ejemplo: llamar lápiz a lo que utilizamos para escribir es algo inmotivado.
La linealidad del signo
El significante, es decir la imagen acústica o huella psíquica, es lineal. El significante, por ser de
naturaleza auditiva, se desenvuelve en el tiempo únicamente y tiene los caracteres que toma del
tiempo: a) representa una extensión, y b) esa extensión es mensurable en una sola dimensión; es
una línea.
Los significantes acústicos no disponen más que de la línea del tiempo; sus elementos se
presentan uno tras otro; forman una cadena. Este carácter se destaca inmediatamente cuando los
representamos por medio de la escritura, en donde la sucesión en el tiempo es sustituida por la
línea espacial de los signos gráficos.
Saussure explica el concepto de “Signo Lingüístico”, quien comprende dos términos psíquicos, que
a su vez se encuentra asociados y unidos en nuestro cerebro. El signo lingüístico es una entidad
psíquica que une dos términos: un concepto (significado) y una imagen acústica (significante).
-Concepto: Comprende lo abstracto del signo. El significado de la palabra niño sería el concepto de
niño, es decir, el conjunto de características comunes a todos los niños que permite agruparlos
como clase.
-Imagen Acústica: llamada huella psíquica, es el conjunto de elementos fónicos (No es el sonido en
sí, sino el recuerdo del mismo). El significante de la palabra niño sería n + i + ñ + o.
Ambas “Concepto” e “Imagen acústica” se relacionan de manera recíproca
Inmutabilidad (Que no cambia) en la sincronía (Sin tiempo). El Último termino, refiere a una línea
constante, la cual no está atravesada por el tiempo, transcurre sin cambios, es el tiempo real, lo
que sucede ahora (por ejemplo: un siglo).
Se dice que el signo es inmutable en la sincronía. La sociedad está atada a la lengua, no acepta la
innovación lingüística como tampoco la modificación de un signo, ya que existen los conceptos
asociados a todas las imágenes acústicas.
Es muy difícil que cambie el signo durante la sincronía. Lo arbitrario del signo nos permitiría
modificar la lengua, pero existen innumerables cantidad de signos para poder modificarlos.
Mutabilidad (que cambia) en la diacronía (Atraves del tiempo, intercepta a lo sincrónico).
Saussure asegura la continuidad de la lengua en el tiempo, los signos sufren una alteración en el
marco de un proceso de continuidad.
Con el tiempo, la lengua y sus signos, cambian. Aparecen así, lentamente, modificaciones en los
vínculos entre significantes y significados. Los significados antiguos se especifican, se agregan
nuevos o se clasifican de modo diferente. Por ejemplo la palabra "televisión", cuando hablamos de
Plasma o de LCD, también lo asociamos con la primer palabra. Otro ejemplo la palabra "ratón"
adquiere un significado distinto en relación a las computadoras, en este caso, dos vínculos entre
significado y significante coexisten simultáneamente.
Definición de lengua: en primer lugar es una totalidad. A su vez la misma es adquirida y es
convencional, es decir, que no hay lazo natural completamente distinto al lenguaje, ya que este es
considerado una facultad natural.
También se la considera como un producto social de la facultad del lenguaje
- Es un sistema de signos lingüísticos, que corresponden a ideas distintas, con valores puros
interpretados como formas. A su vez este sistema nos ayuda a comprender, porque la lengua es
homogénea, donde es esencial la unión del concepto y la imagen acústica.
- Es un conjunto de convenciones necesarias adoptadas por la sociedad.
- El sujeto social es pasivo en relación a la lengua, es decir, que la adopta pero no la modifica
Características de la lengua:
- Es social, porque no está en el individuo, sino que está en el conjunto de la comunidad hablante.
- Es una abstracción mental, es decir, que la tenemos almacenada como un producto.
- Está codificada e institucionalizada.
-Conforma un código, ya que tiene el potencial para ser un instrumento de comunicación.
-Constituye una norma de las manifestaciones del lenguaje.
-Es una institución social y es un principio de clasificación.
-Se la define de manera autónoma, por sus relaciones formales internas.
Son las bases que sienta Saussure para definir y caracterizar a la lengua.
Estudio del lenguaje, tiene dos variantes, una de ellas es la que tiene por objeto a la LENGUA, lo
cual va a ser un estudio psíquico y social independiente del individuo. Por otro lado tenemos al
HABLA, incluye a la parte individual del lenguaje, va a ser psicofísica y va a incluir a la fonación.
El lenguaje en general, es multiforme, psíquico, físico y fisiológico, pertenece tanto al dominio
social como al dominio individual.
Además, es una facultad natural y no es clasificable, porque no conocemos la unidad.
LA LENGUA: Es necesaria para que el habla, sea inteligible y produzca sus efectos. Es un objeto
homogéneo, proceso psíquico. Es un hecho social, el sujeto la registra pasivamente. La lengua es
un código.
EL HABLA: es necesaria para que la lengua se establezca. Es un objeto heterogéneo y comprende
un proceso psíquico, fisiológico y físico. Es un hecho individual, el sujeto tienen la voluntad de
hablar. El habla es un uso individual de ese código
Ambas son interdependientes, es decir que dependen una de la otra. También están ligadas y
superpuestas recíprocamente.
Dos puntos de vistas de aparición.
Punto de vista teórico: la lengua precede, ya que para hablar se necesita un sistema.
Punto de vista práctico: el habla precede, ya que hace evolucionar a la lengua, debido a que el
hablante da testimonio del sistema, que es la lengua.
La lengua de la misma manera no es función del hablante, ya que la registra pasivamente, pero el
habla sí.
Se supone que cuando oímos se produce una modificación de los hábitos lingüísticos que
conforman el sistema.
Primeramente debemos entender que el “el valor lingüístico en su aspecto conceptual”, es un
elemento de la significación.
Saussure dice, que la noción de valor resulta de la presencia simultánea de otros signos.
¿Qué ocurre dentro un sistema? Hay palabras y estas pueden tener ciertos conceptos o ideas
vecinas, se limitan recíprocamente
La constitución del valor lingüístico en su aspecto conceptual
1) Una cosa, desemejante, susceptible de ser trocada, por otra, cuyo valor, está por determinar
2) Cosas similares, comparables con aquella, cuyo valor se está por ver.
EJ: Si yo quiero determinar el valor de una moneda de $1. Puedo trocarla (UNO) por una cosa
diferente, 1 caramelo.
EJ: Si yo quiero determinar el valor de una moneda de 1 Peso, y quiero determinar el valor que se
está por ver, puedo trocar y decir 1 Euro.
En el caso de la palabra puedo cambiar o trocarla por una idea o si la comparo puedo usar otra
palabra.
Si tenemos en español la palabra “carnero” y en ingles la palabra “sheep”, ambos tienen igual
significación pero distinto valor, porque “sheep” tiene junto un segundo término asociado
En primer lugar ¿qué son las relaciones?: Están fundadas en el carácter lineal de la lengua.
Este carácter lineal (cualidad del significante) excluye la posibilidad de pronunciar dos elementos a
la vez.
Saussure en el curso de lingüística general propone dos tipos de relación:
-Relaciones Sintagmáticas: son combinaciones apoyadas en la extensión, lo cual denominamos,
SINTAGMAS. Estas relaciones se van a llamar también IN PRESENCIA (Relaciones apoyadas en dos
o más unidades consecutivas que es lo que determina ese Sintagma).
También son términos presentes en una serie y que tienen características de extensión y sucesión.
-Relaciones Paradigmáticas: en este caso vamos a tener palabras con algo en común, las cuales
están asociadas en la memoria.
A diferencia del anterior vamos a tener relación IN ABSENTIA (Serie mnemónica virtual que
funciona en el cerebro).
Dos tipos de asociaciones:
-Analogía del concepto (Del Significado) Ej.: Entre educación y enseñanza, cuando piense en un
término pienso en la otra también, ya que están asociadas en nuestra memoria.
-Comunidad de la imagen acústica (del significante) Ej.: entre en enseñanza, templanza.
Cuando nos referimos a valor lingüístico, hablamos de término abstracto. Supongamos que
tenemos un eje de simétrica con 4 puntos cardinales, al horizontal lo llamaremos AB y al vertical lo
llamaremos CD. Ahora teniendo esto claro, diremos que el eje AB, es el “eje” de lo simultáneo,
donde hay una relación entre los elementos existentes sin intervención del tiempo (Sincronía). A
su vez el “eje” CD, es aquel encargado de las sucesiones, en él se encuentran los elementos de AB
pero con sus respectivos cambios, quienes se consideran uno por vez.
El valor lingüístico va a funcionar dentro de un sistema de signos lingüísticos, quien abarca un
conjunto de formas relacionadas opositoramente.
Conclusión, el valor lingüístico, es aquello que un elemento particular adquiere dentro de un
sistema determinado en función a la relación con otros elementos.
Características:
*Es relativo al sistema.
*Un signo es lo que otros no son (lo que le da valor a un signo Lingüístico es lo que los demás no
son, Lunes es lo que no es Martes, ni miércoles etc…Al igual que mesa es lo que los demás
muebles de la casa no son). El valor de signo se define por la negativa, es lo que otros no son.
*En la lengua no hay más que diferencias sin términos positivos.
*El valor de un término “x” puede modificarse por la modificación de un término “y” vecino (los
elementos particulares de un sistema en particular, quienes están en continua relación, por el eso
el valor del signo es relativo).