Este documento analiza el sistema político y el gobierno actual de Venezuela. Argumenta que aunque el país nunca ha tenido una democracia plena, el gobierno actual ha llevado al país más lejos de la democracia al suprimir las garantías democráticas y concentrar todo el poder en el ejecutivo. El autor concluye que el gobierno actual es en realidad una dictadura disfrazada de democracia, o lo que él llama "la falacia roja".
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Este documento analiza el sistema político y el gobierno actual de Venezuela. Argumenta que aunque el país nunca ha tenido una democracia plena, el gobierno actual ha llevado al país más lejos de la democracia al suprimir las garantías democráticas y concentrar todo el poder en el ejecutivo. El autor concluye que el gobierno actual es en realidad una dictadura disfrazada de democracia, o lo que él llama "la falacia roja".
Descripción original:
Ensayo breve sobre la democracia del gobierno actual de Venezuela.
Este documento analiza el sistema político y el gobierno actual de Venezuela. Argumenta que aunque el país nunca ha tenido una democracia plena, el gobierno actual ha llevado al país más lejos de la democracia al suprimir las garantías democráticas y concentrar todo el poder en el ejecutivo. El autor concluye que el gobierno actual es en realidad una dictadura disfrazada de democracia, o lo que él llama "la falacia roja".
Este documento analiza el sistema político y el gobierno actual de Venezuela. Argumenta que aunque el país nunca ha tenido una democracia plena, el gobierno actual ha llevado al país más lejos de la democracia al suprimir las garantías democráticas y concentrar todo el poder en el ejecutivo. El autor concluye que el gobierno actual es en realidad una dictadura disfrazada de democracia, o lo que él llama "la falacia roja".
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UNIVERSIDAD DE CARABOBO
FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS Y SOCIALES
ESCUELA DE ADMINISTRACIÓN COMERCIAL Y CONTADURIA PÚBLICA CAMPUS LA MORITA
LA FALACIA ROJA
Profesor: Autor: Leonardo Ramírez José Gregorio Cordero C.I.- 26.148.637.
La Morita, abril de 2020.
LA FALACIA ROJA
¿A qué nivel se encuentra la mentira? El mundo entero posee formas de organización
políticas, las cuales son necesarias para mantener el orden y el bienestar de cada una de las naciones. De esa manera, cada país ejecuta un sistema político que determina, entre otras cosas, de qué manera serán elegidos los gobernantes, y cuál será el grado de participación del pueblo en relación a estos. Así, para dar más protagonismo a los ciudadanos sobre las decisiones de un Estado, nace la democracia como la opción más popular, y desde entonces muchos países han puesto en práctica ese sistema. Por eso, daré paso a la “democracia” del país más polémico de Latinoamérica en la actualidad: Venezuela.
La democracia es una forma de sistema político que defiende la soberanía del pueblo, es decir, lucha por el derecho de este a elegir y controlar a sus gobernantes. Es así como para el escritor e investigador italiano de las ciencias políticas, Giovanni Sartori, este sistema además de ser el más viable, es: “Un sistema político, en donde el poder del pueblo se ejerce sobre el pueblo”. En efecto, constituye un procedimiento donde el poder que reside en los ciudadanos es delegado a los gobernantes que estos eligen, y así trabajan en función y bajo las necesidades de quien los eligió; o al menos así debería funcionar en teoría.
En ese mismo orden de ideas, Venezuela se basa en una democracia representativa, la cual es un sistema político donde los ciudadanos ejercen el poder político a través de sus representantes elegidos mediante el voto en elecciones transparentes y periódicas. Sin embargo, el actual Presidente del país señala que se desempeña en realidad una democracia participativa, la cual otorga a los ciudadanos una mayor, más activa y más directa capacidad de intervención e influencia en la toma de decisiones de carácter público, en lugar de sólo limitarlos al acto del sufragio. Pero, ¿Qué tan democrático es en realidad el sistema del país? Y ¿Cuán democrático es el gobierno actual?
En un sentido general, ¿Qué tan democrático es el sistema del país? Aunque la oposición actual de Venezuela exprese lo contrario, voy a transigir por un segundo con gobierno actual al afirmar que los problemas democráticos de la nación no comenzaron con el actual gobierno, sino que se remonta al sistema bipartidista del siglo pasado de Acción Democrática y COPEI, donde no existía pluralidad política, y el poder sólo se alternaba entre esos dos partidos periódicamente. No obstante, es evidente que el debacle más grande ocurrió con el gobierno actual, el cual suprimió cualquier garantía democrática mediante la violación de los derechos humanos, la censura de los medios de comunicación, la corrupción del sistema electoral, la inhabilitación política, entre muchos otros factores, los cuales violaban principios democráticos como la igualdad, la participación, y la pluralidad. Por lo tanto, cabe destacar que el sistema venezolano nunca ha sido plenamente democrático, y hoy, se encuentra mucho más lejos serlo. Entonces, ¿Cuán democrático es el gobierno actual? A pesar de las presunciones del actual Presidente sobre poseer un gobierno democrático, un verdadero gobierno democrático es aquel que, además de haber sido electo por el pueblo mediante el voto, respeta las libertades de sus ciudadanos, y se dedica a subordinarse a las necesidades y exigencias que su nación presenta. En cambio, el gobierno actual se autoproclamó mediante un proceso electoral corrupto, con la observación internacional de los aliados de estos, y convocado por una Asamblea Nacional Constituyente sin competencias constitucionales para ello. Además, desde su inicio, en lugar de hacer frente a los verdaderos problemas como el hambre, la hiperinflación, la delincuencia, la falta de producción, la crisis salarial, entre otros, se abrió paso a intensificar más la represión contra los ciudadanos y las instituciones, instaurando por completo una dictadura, vendida al mundo en envoltura de democracia, o como lo llamo yo, una falacia roja.
Sobre la base de lo antes expuesto, muchos expertos en el área de las ciencias políticas, señalan que la democracia es una utopía. No obstante, no considero que el sistema se base en una idealización irrealizable, sino que al igual que el resto de las cosas buenas y positivas que tiene el mundo, no se puede alcanzar en plenitud. De tal manera, aunque Venezuela se encuentre muy lejos de presenciar ese sistema, en el resto del mundo sí existen países con avances democráticos, pero el que tengan desperfectos no significa que no exista democracia.
Por lo tanto, ¿A qué nivel se encuentra la mentira? Si basamos la respuesta sobre la idea que los gobernantes actuales intentan vender al mundo, entonces parece que el único problema real que enfrentan los venezolanos es decidirse por cuál marca de azúcar comprar en el supermercado; cuando ni azúcar hay. Sin embargo, el problema es mucho mayor, puesto que se trata en realidad de una dictadura que se intenta barnizar de democracia ante los ojos de la comunidad internacional, dado que todos los poderes del Estado se concentran en el Ejecutivo Nacional, quien gobierna con poder total, sin someterse a ningún tipo de limitaciones y con la facultad de promulgar y modificar leyes a su voluntad.
Por esa razón, sólo me queda decir que en toda sociedad civil donde la democracia sea el fundamento político por el cual se rigen las actuaciones de los poderes públicos, es de suma importancia recordar a cada ciudadano que eso llamado “democracia” no termina con una elección transparente de los administradores del Poder Público, sino que el pueblo debe desempeñar diariamente su función de Poder Originario, y levantar su voz y acciones para trabajar en conjunto de los gobernantes transitorios y dirigir el rumbo de cada una de las naciones que conforman el mundo.
UNIDAD 2: LA DEMOCRACIA (Democracia representativa, democracia participativa,
