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Cuaderno de Educación Inicial 11 Gerda Veas A PDF

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11

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI
A LA EDUCACIÓN PARVULARIA
EN CHILE
[LA EVOLUCIÓN CURRICULAR]
Gerda Veas
CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI
A LA EDUCACIÓN PARVULARIA
EN CHILE
[LA EVOLUCIÓN CURRICULAR]

Gerda Veas
CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA
EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE
[LA EVOLUCIÓN CURRICULAR]

Gerda Veas

Departamento Técnico-Pedagógico
Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI)
Ministerio de Educación

Edición Marcelo Mendoza / Rosario Ferrer


Diseño y diagramación Macarena Balcells
Dibujo de portada Maite Belén Villalobos Izquierdo (4 años), del jardín infantil Los patitos, de Tarapacá

Primera edición: septiembre de 2018

Registro de Propiedad Intelectual Nº xxx.xxx


ISBN: 978-956-xxxx-xx-x

© Junta Nacional de Jardines Infantiles


Marchant Pereira 726
Santiago de Chile
www.junji.cl

Impreso en Chile por xxx

Ninguna parte de esta publicación, incluido el diseño de la portada, puede ser reproducida, transmitida
o almacenada, sea por procedimientos químicos, electrónicos o mecánicos, incluida la fotocopia, sin
permiso previo y por escrito de la Junta Nacional de Jardines Infantiles.
ÍNDICE

7 / Presentación
9 / Introducción
11 / Antecedentes
20 / Un punto de inflexión
22 / Discusión
29 / Aspectos a mantener y profundizar en el referente curricular
32 / Nuevos énfasis
36 / Políticas, dispositivos y otras medidas de apoyo al currículo
41 / Los cambios que se esperan en la práctica educativa
45 / Bibliografía
PRESENTACIÓN

El fortalecimiento del diseño y de la práctica educativa es una ocupación


constante para los equipos técnicos de la Junta Nacional de Jardines Infantiles
(JUNJI), del que deriva el interés por contar con educadoras y técnicas en
educación preparadas que sepan llevar al aula nuevos conocimientos que
permitan un mejor desarrollo para los párvulos.

La serie Cuadernos de Educación Inicial se enfoca a este propósito y, a través


de formatos interesantes y motivadores para la lectura, entrega y ahonda en
distintas temáticas ligadas a la atención a niños y niñas, a la relación con sus
familias y al fortalecimiento de toda comunidad educativa.

Esperamos que este material, así como otros elaborados por las Ediciones de
la JUNJI, contribuya a robustecer los principios pedagógicos que sustentan el
quehacer institucional y que reconocen la educación inicial como un derecho
constitucional legalmente protegido.
INTRODUCCIÓN
Entre 1990 y 2017, la Junta Nacional de Jardines Infantiles (JUNJI) ha desarrollado
una preocupación permanente por ofrecer a los niños y niñas que asisten a sus
programas una educación de calidad. Esto se ha reflejado en las orientaciones
pedagógicas que se han entregado a todos los programas durante las sucesivas
administraciones entre 1990 y 2017, previas a las nuevas Bases Curriculares
implementadas en 2018.

Con el objeto de poder comprender y explicar la actual propuesta pedagógica, el


presente libro pretende sintetizar el camino curricular recorrido por la institución,
considerando que ésta conforma en sí misma una gran y heterogénea comunidad
centrada en la educación de niños y niñas de todo Chile.

Los contenidos que se desarrollan en este libro son:

1. ANTECEDENTES: De una manera secuenciada, da cuenta de las orientaciones


pedagógicas que ha entregado la institución desde los años 90 hasta la
actualidad, vinculando sucintamente las propuestas con los contextos sociales
y políticos en los cuales se sitúan y construyen.

2. UN PUNTO DE INFLEXIÓN: Se refiere el periodo en el que el Departamento


Técnico Pedagógico inició una etapa de reflexión basada en las prácticas de
aula observadas en cometidos a regiones y en documentos de evaluación
que permitieron observar el estado de avance técnico educativo en el que se
encontraba la institución, para después orientar o reorientar, según fuera el
caso, el futuro trabajo con niños y niñas.

3. DISCUSIÓN: Se exponen los temas centrales de la discusión técnica sobre los


que se tomaron las decisiones posteriores.

4. REFERENTE CURRICULAR Y NUEVOS ÉNFASIS: Como resultado de lo expuesto


en la etapa de discusión, se ratificó la importancia del Referente Curricular
y se asumió la necesidad de profundizar y ampliar algunos de sus aspectos
especificados en un primer documento, tanto desde el punto de vista de

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 9


los antecedentes teóricos como de la relevancia que éstos adquieren a la
luz de nuevas experiencias. Se incorporaron, además, nuevos énfasis que
enriquecieron cualitativamente el Referente Curricular.

5. POLÍTICAS, DISPOSITIVOS Y OTRAS MEDIDAS DE APOYO AL CURRÍCULO:


El Departamento Técnico Pedagógico dio cuenta de los aspectos que fueron
necesarios de formular, crear o ajustar para que la propuesta institucional
conformase un todo coherente.

10 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
ANTECEDENTES
A partir de 1990, con la vuelta de la democracia en Chile y en el marco de las
demandas por mejorar la calidad de la educación, la Junta Nacional de Jardines
Infantiles (JUNJI) inició un proceso que relevó el currículo en educación parvularia
como nunca antes en su historia.

En efecto, uno de los primeros documentos institucionales oficiales, en los años


90, especificó un conjunto de criterios de calidad curricular que debía estar
presente en todos los programas: autoactividad del niño y la niña (referido a
los párvulos como constructores de sus propios aprendizajes); integralidad (en
el sentido de que todos los programas debían abarcar los diversos aspectos del
desarrollo de niños y niñas); participación de las familias en el proceso educativo
de sus hijos e hijas y pertinencia cultural (que destacó la importancia de desarrollar
un currículo impregnado de contextos locales y nacionales en los que se llevaba
a cabo el proceso educativo). Posteriormente, se agregarían los criterios de
relevancia de los aprendizajes, que se definieron como la adecuada selección de
los objetivos, actividades y procedimientos metodológicos que se desarrollasen
en función de los párvulos.1 Paralelamente a ello, se inició una serie de acciones
tendiente tanto a capacitar como a reflexionar sobre las prácticas pedagógicas
que se llevaban a cabo en los establecimientos de la JUNJI, así como a invitar
a los equipos pedagógicos a innovar su práctica en función de dichos criterios.

El enunciado sobre criterios de calidad curricular consistió en una respuesta a


la situación de atención a párvulos que la JUNJI otorgó durante los años 80,
fuertemente marcada por una visión asistencialista de la educación2 producto
de la realidad de la infancia chilena sumida en la pobreza y la desnutrición, y que
estuvo representada por un alto coeficiente de niños/adultos, material didáctico
y de enseñanza precarios (y en poca cantidad), planificaciones y actividades
pedagógicas homogéneas, entre otros.

1 María Victoria Peralta, Criterios de calidad curricular, JUNJI, Santiago, 1997.


2 Es importante recordar la realidad de niños y niñas que la JUNJI atendía en la época, que presentaba altos niveles
de pobreza y desnutrición.

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 11


Los criterios de calidad curricular se mantendrían durante toda la década del
90, con mayor o menor fuerza y énfasis en ciertos aspectos o componentes
inherentes a ellos, tales como creatividad y evaluación de aprendizajes desde
una perspectiva pedagógica. Un gran apoyo para avanzar en la calidad de la
atención educativa fue, sin duda, el proyecto MECE,3 que permitió incrementar
en algunos programas el coeficiente adulto/niño, así como mejorar y ampliar la
norma de material didáctico.

La declaración de criterios fue importante para crear, durante ese periodo, una
vasta variedad de programas en educación parvularia,4 diferente a la conocida
hasta ese momento, con lo cual se demostró que era posible concretizar un
currículo de calidad bajo distintas maneras de funcionamiento y se logró llegar
a amplios sectores de la población5 donde no existía otra forma de atender
pedagógicamente a los párvulos.

A fines de los años 90 se realiza una primera aproximación a la formulación


de un marco curricular específico para la JUNJI. Documentos de la época6 ya
reconocían a niños y niñas como sujetos de derechos, reforzaban los criterios de
calidad curricular sobre los que se venía trabajando, relevaban el rol de las familias
como portadora de conocimientos y su participación en el proceso educativo
de hijos e hijas, e incorporaban explícitamente la perspectiva de género. No
obstante, será la mirada pedagógica de organizar el currículo lo que destacaría
esta nueva impronta JUNJI al cambiar la organización tradicional,7 proveniente
de la sicología del desarrollo evolutivo, por otra de carácter pedagógico que
definió categorías o “sectores de aprendizaje”. Ello dio coherencia metodológica
al Instrumento de Evaluación de Aprendizaje (IEP).8
3
Entre 1992 y 1997 se desarrolló el Programa MECE (Mejoramiento de la Calidad Escolar) con el apoyo del Banco
Mundial. Orientado a la Educación Parvularia y Básica, amplió la entrega de textos escolares e incluyó una
cantidad de fondos para aumentar la cobertura en educación parvularia.
4
Los programas creados en la época fueron: Sala Cuna en el Hogar, Jardín Infantil a Distancia, Patio Abierto, Jardín
Familiar, Jardín Familiar Estacional, Jardín Familiar Laboral y Programa de Atención a Párvulos de Comunidades
Indígenas.
5
Se refiere a sectores rurales de poca densidad poblacional y gran dispersión geográfica, así como sectores
urbanos precarios donde la situación presupuestaria del país no permitía cubrir la demanda existente con
programas convencionales.
6
Ofelia Reveco, Algunos aportes de la Junta Nacional de Jardines Infantiles a la Reforma Curricular, JUNJI,
Santiago, 1999.
7
Desarrollo físico, socioemocional, cognitivo, intelectual o similares.
8
El Instrumento de Evaluación de Aprendizaje fue creado en 1997.

12 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
Lo anterior constituyó un avance para cuando en 2001 se formularon las Bases
Curriculares de la Educación Parvularia (BCEP) en el Ministerio de Educación
–el mayor hito en la historia contemporánea de la educación inicial del país–
que enfocó el nuevo currículo en torno al aprendizaje, pero con categorías
distintas a las propuestas por la JUNJI. La institución desarrolló, entonces,
un plan para la implementación de estas bases a través del proyecto JIAC,9
experiencia piloto que permitió definir los elementos para construir en 2009
el primer Marco Curricular Institucional, a través del cual se orientó a cada
profesional y técnica encargada de establecimiento para construir su propio
Proyecto Educativo, manteniendo por un lado la impronta institucional y, por
otro, el sello particular de cada establecimiento. Dicho Marco Curricular reflejó
la urgencia por responder a una nueva realidad mundial, marcada por dos
hechos que transformarían violentamente el modo de vivir y de relacionarse
tal cual se conocía hasta entonces: la tecnología y la globalización, hechos que
necesariamente impactarían el mercado laboral y al cual el sistema educativo
respondería enfocando los esfuerzos formativos hacia la eficiencia y la eficacia,10
como demanda emergente de esta nueva sociedad. En esa lógica, el currículo
de educación parvularia, en sintonía con la reacción de todo el sector educativo,
se orientó hacia aprendizajes que se consideraron más útiles para esta nueva
sociedad que emergía: los esfuerzos se enfocaron hacia aquellos aprendizajes
que tenían bajos resultados en evaluaciones nacionales del sistema educativo,
tales como Lenguaje y Matemáticas.11 De esa época data también, y bajo la
misma lógica, la orientación respecto del Proyecto Educativo Institucional, que
debía formularse en cada establecimiento con un determinado “sello”, lo que
daba cuenta de una lógica curricular fragmentada, propia de la enseñanza básica
y en contraposición con los principios fundantes de la educación parvularia.

En el Marco Curricular, la JUNJI declaró que la institución optaba por


implementar las Bases Curriculares bajo una perspectiva crítica constructivista,
que “se levantaba a partir de la realidad que lo particulariza, con el aporte y

9
JIAC: Jardines Infantiles de Anticipación Curricular, considerados modelos de referencia para introducir los
cambios curriculares definidos en las Bases Curriculares del Ministerio de Educación.
10
Es necesario señalar otro hecho relevante para la institución durante ese periodo que impactó en el currículo: la
orientación hacia la eficiencia en la gestión, que se tradujo en la creación del Modelo de Acreditación de Calidad
de Jardines Infantiles, inédito en América Latina.
11
JUNJI, Marco Curricular, Departamento Técnico Pedagógico, Santiago, 2005, p. 6.

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 13


participación activa y protagónica de los propios sujetos sociales parte del
proyecto educativo y que constituían una comunidad educativa”,12 e instaba a
los educadores a investigar y a problematizar la realidad. Para ello, identificó dos
pilares clave: la construcción curricular colectiva y la formación continua, ambos
coherentes con la idea de una pedagogía crítica y, a la vez, complementarios
entre sí. El primero, como base de apoyo a los contextos para el aprendizaje,
y el segundo, como dispositivo dialógico apropiado a la reflexión de la práctica
pedagógica. Por otro lado, el Marco Curricular focalizaba con mayor énfasis la
atención educativa del Primer Ciclo: esto reflejó el impacto de las neurociencias
en educación, por cuanto la evidencia científica reveló la importancia de los tres
primeros años de vida del ser humano en el proceso de aprendizaje. Finalmente,
destacó las interacciones de calidad como elemento esencial para construir
aprendizajes de calidad.13

Al alero del apoyo de las políticas públicas de apoyo a la primera infancia,


entre los años 2005 y 2009, cuando la JUNJI tuvo un significativo incremento
de presupuesto destinado a aumentar su cobertura y mejorar la calidad, el
Departamento Técnico Pedagógico de la institución desarrolló un amplio trabajo
de análisis, reflexión y revisión del Marco Curricular y de su implementación, que
incluyó no sólo a los profesionales de dicho departamento sino también a diversos
actores y agentes educativos de todos los programas y tipos de administración a
nivel nacional. El mismo trabajo se realizó respecto a documentos y orientaciones
educativas elaborados e implementados por la JUNJI en ese periodo, donde
se plasmó, a partir de necesidades institucionales y/o de distintos servicios
o ministerios, énfasis o enfoques14 que se estimaron necesarios de incluir en
el currículo bajo las políticas centrales del Programa de Mejoramiento de la
Gestión (PMG): Género, Buen Trato, Necesidades Educativas Especiales (NEE),
Trabajo con Familias, Interculturalidad, Enfoque Territorial, las que se fueron
incorporando desde una perspectiva curricular fragmentada, pensando que
ello haría más eficaces los resultados.15 La sistematización de los procesos
mencionados concluyó en la necesidad de reformular el Marco Curricular y para

12
JUNJI, op. cit., p. 7.
13
De los educadores como mediadores, de los niños y niñas entre sí, y entre los adultos.
14
En su mayoría llamados, de acuerdo a la época, “temas transversales”.
15
No obstante, claramente la práctica pedagógica, obligada a mostrar resultados cuantitativos de cómo se
implementaban, empezó a perder el carácter holístico, propio de la educación parvularia.

14 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
ello se conformó un equipo de trabajo del Departamento Técnico Pedagógico
encargado de elaborar una nueva propuesta. En dicha creación, coherente
con el pilar de la construcción curricular colectiva, participaron más de 1.600
personas que logran integrar y dar sentido, en un solo documento, un texto con
el sello distintivo de la pedagogía que se esperaba desarrollar en la JUNJI, con sus
propósitos, fundamentos, principios, enfoques y ejes metodológicos, así como
una mayor especificación de algunos componentes de las Bases Curriculares
de la Educación Parvularia. El resultado final de este trabajo fue el Referente
Curricular, documento institucional que se editó en enero de 2010, no obstante,
al ser construido de forma colectiva, fue implementándose paulatinamente
desde antes.

El Referente Curricular asumió la educación inclusiva como el sello principal del


enfoque de calidad, es decir, se estableció que "una comunidad educativa es
la que acoge y se dispone para incluir a todos los niños y niñas, independiente
de sus características y condiciones individuales, evitando la exclusión y
discriminación".16 Esta declaración, aparentemente simple, implicó revisar
y hacer accesible a todos los agentes educativos institucionales de todos los
programas y estamentos la propuesta curricular institucional. Muy importante
y complejo fue dotar de sentido cada uno de los componentes del currículo y la
forma en que éste se desarrollaría en la práctica pedagógica del aula, para lo que
fue necesario apoyarse en los tres principios fundamentales de la propuesta:
educación inclusiva, equidad en las oportunidades e igualdad de logros y
flexibilidad curricular, los cuales se potenciaron entre sí para orientar a los
equipos técnicos respecto de una atención pedagógica socialmente actualizada
y pertinente a niños y niñas miembros de una generación en un contexto de
cambios socioculturales veloces y profundos.

En correspondencia con los principios mencionados, la JUNJI propone un


enfoque técnico pedagógico que: a) promueve las interacciones positivas entre
los propios niños y niñas y entre ellos y los adultos, y con las familias, porque un
ambiente afectivamente nutrido motiva y dispone favorablemente a los párvulos
al aprendizaje, permitiendo experiencias que dan sentido a la vida, al tiempo
que fomenta las relaciones basadas en el respeto y en la mutua consideración

JUNJI, Referente Curricular, Departamento Técnico Pedagógico, Santiago, 2010, p. 7.


16

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 15


de grupo, independiente de la condición de género, social, cultural, discapacidad
u otra; b) potencia el protagonismo de niños y niñas, en cuanto reconoce la
capacidad de pensar, actuar, reflexionar, decidir, resolver conflictos, crear,
aprender y ser parte activa de la construcción de su identidad, tanto individual
como social;17 c) define el rol de educadoras, técnicas y agentes educativos como
mediadores del aprendizaje (y no meramente transmisores de conocimiento,
como aún se observa en algunas prácticas), donde los adultos responsables
de niños y niñas tienen un rol de guías, atentos al proceso que los párvulos
están vivenciando para estimularlos a ampliar, profundizar, diversificar, recrear
y replantearse lo que descubren, apoyándolos en sus descubrimientos para que
por sí mismos puedan extender sus aprendizajes y compartirlos, aprendiendo
–al mismo tiempo– a escuchar a otros. Así se produce una construcción propia
y compartida de aprendizajes donde el adulto acompaña el proceso de conocer
y guía para expandir los aprendizajes en el contexto de las teorías vigotskyanas
aplicadas a la pedagogía.

El documento incluyó orientaciones para la estructura curricular de acuerdo


a los ciclos definidos por las Bases Curriculares de la Educación Parvularia,
incluyendo las relacionadas con las diversas transiciones que experimentan niños
y niñas, e incorporando nuevas categorías de aprendizaje como complemento
técnico de la JUNJI a un vacío que presentaban las bases. Asimismo, precisó
lo que la institución esperaba respecto de los contextos para el aprendizaje,
imprimiéndole un sello particularmente humanizante. Así, se orientó respecto
de acoger los entornos sociales y culturales y sus particularidades para que las
prácticas pedagógicas respondiesen al respecto por ellos, haciendo del centro
infantil un espacio para que sus actores se relacionaran desde la diferencia
para ofrecer una plataforma sólida y consistente al proyecto educativo, en un
territorio donde comparten y convergen espacios públicos, servicios, ambientes
naturales y culturales que les otorga y sobre el cual los niños construyen su
identidad.

En los puntos referidos a planificación, implementación de las estrategias


pedagógicas desarrolladas y evaluación de los aprendizajes, se planteó un
camino desde el diagnóstico, cuya ruta fuese flexible y enriquecida en la medida

Ibíd., p. 18.
17

16 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
que niños y niñas ampliaran sus aprendizajes como resultado de una acción
pedagógica donde la intencionalidad estuviese centrada en recuperar intereses,
ideas y proyectos de los párvulos. En ello la mediación juega un rol fundamental.
Estos procesos necesitaron ser acompañados por una variedad de estrategias
de evaluación para contar con la mayor información posible, de toda índole,
que permitiese a los equipos pedagógicos orientar acciones futuras. Desde
un enfoque más integral y holístico del proceso, se eliminaron los énfasis en
Matemáticas y Lenguaje por responder a necesidades de la gestión y no a
principios de la pedagogía parvularia.

Finalmente, el Referente Curricular incorporó las dos estrategias clave ya


enunciadas en el Marco Curricular: construcción curricular colectiva y formación
continua, que en lo esencial mantuvieron los fundamentos, enunciados y
metodologías sugeridas, ampliando y detallando las estrategias para los distintos
programas de la JUNJI.

Esta revisión histórica curricular de la JUNJI permite concluir algunas ideas:

• La JUNJI es una institución que está constantemente evaluando, revisando


y reflexionando sus propias propuestas, replanteándose cuando ha sido
necesario y realizando un esfuerzo permanente de actualización, al mismo
tiempo que innova de acuerdo a nuevos conocimientos en áreas como
educación, sicología, neurociencias, pediatría, nutrición, sociología y otras
disciplinas afines, trabajando interdisciplinariamente para optimizar la
atención educativa de los niños y niñas que atiende.

• Su centro de acción pedagógica siempre han sido los niños y niñas que asisten
a los distintos programas.

• Ha realizado un gran esfuerzo por mantener los principios fundantes de la


educación parvularia, donde su bandera de lucha ha sido la calidad curricular.

• El rasgo más importante de la JUNJI es que ha sido coherente y consistente


en su discurso, pues ha mantenido un hilo conductor sostenido en los
principios de la educación parvularia, interpretadas, en menor o mayor

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 17


grado, de distintas maneras en la práctica pedagógica, ampliándolos,
profundizándolos, integrándolos o articulándolos con nuevas concepciones.
Ello ha dado fuerza y potencia a la postura institucional, porque denota que
ésta avanza y es coherente con lo que propone a los equipos pedagógicos y
refleja gradualmente en todos los niveles.

Para ilustrar lo anterior, considerando los primeros criterios de calidad curricular


adoptados por la JUNJI a principios de los años 90 y su análisis en relación a
conceptos institucionales más recientes, se puede observar lo siguiente:

• El criterio de autoactividad ha sido reconceptualizado en el concepto de niño


como protagonista de su aprendizaje.

• El criterio de pertinencia cultural se asume en los contextos para el


aprendizaje, donde se imprime el de respeto por acoger los entornos sociales
y culturales y sus particularidades.

• El criterio de integralidad ha sido recuperado y fortalecido a través de


orientaciones claras respecto del concepto de niños y niñas que aprenden
holísticamente, de un modo imposible de fragmentar.

• El criterio de relevancia de los aprendizajes ha sido reinterpretado dándole


especial importancia a los contextos desafiantes y provocadores del
aprendizaje y al rol del adulto como mediador. Mantiene la idea de que
el aprendizaje es lo más importante en educación parvularia, pero bajo el
concepto de que éste no se produce desde la imposición del adulto, que
actúa como facilitador y donde su rol consiste en la observación atenta y con
propósito.

Durante 2010-2014 no hubo mayores modificaciones en lo estrictamente


curricular, pues las autoridades del periodo consideraron que el Referente
Curricular respetaba los principios fundamentales de la educación parvularia,
en especial respecto de la centralidad de niños y niñas en la acción pedagógica
y las condiciones para que el aprendizaje ocurra. Así, se continuó y reforzó
su implementación. Desde ese punto de vista, la fiscalización y la gestión

18 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
técnica/administrativa, bajo el enfoque de procesos estandarizados y
asimilables a las normas ISO, adquirieron gran relevancia y conformaron un
conjunto estratégico para la puesta en marcha del Referente Curricular.

El apoyo a los jardines infantiles y programas se realizó a través de la Asesoría


Técnica Educativa (ATE), entendida como la actividad que realizan los
profesionales del Equipo Técnico Regional (ETR) para contribuir a la calidad de
la gestión educativa al implementar el currículo, mejorando progresivamente
la práctica pedagógica y relevando el logro de aprendizajes, el juego y la
participación de niños y niñas en la cotidianidad de la acción educativa.

Dicha asesoría se definió desde dos perspectivas, que estuvieron claramente


diferenciadas en las Pautas de Asesoría:

• Asesoría pedagógica: Dirigida a la educadora de párvulos y/o técnica en


atención a cargo de un grupo de niños y niñas, fue realizada por la educadora
supervisora del Equipo Técnico Regional, focalizada en la práctica pedagógica
y en los contextos para el aprendizaje.

• Asesoría interdisciplinaria: Realizada por los profesionales del Equipo Técnico


Regional, incluida la educadora de párvulos, focalizada en el abordaje
interdisciplinario de la práctica pedagógica y dirigida a la comunidad.18
Estas pautas fueron construidas de manera conjunta entre profesionales
del Departamento Técnico Pedagógico y los responsables del Sistema de
Gestión de Calidad Institucional y apuntó a diferenciar y relevar el rol de
las educadoras de párvulos supervisoras como acompañantes clave para la
mejora de la acción pedagógica del centro.

18
JUNJI, Procedimiento para la Asesoría Técnica Educativa en los Programas de Administración Directa-Sistema de
Gestión de Calidad, Departamento Técnico Pedagógico, Santiago, 2013.

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 19


UN PUNTO DE INFLEXIÓN
A partir de 2014, al interior del Departamento Técnico Pedagógico se desarrollaron
jornadas de reflexión y análisis teniendo como preocupación central las prácticas
pedagógicas, pues, no obstante las orientaciones y documentos enviados a los
establecimientos, los cometidos técnicos realizados a regiones permitieron
observar que en gran parte de ellos continuaban desarrollándose prácticas
caracterizadas por la disminución del juego espontáneo como actividad sustancial
e inherente a la infancia, fuente y oportunidad de aprendizajes. También había
un excesivo protagonismo de los adultos en desmedro del de niños y niñas;
planificaciones fragmentadas, escolarizantes, centradas más en transmisión
de la enseñanza que en el aprendizaje por descubrimiento; y planificaciones
y evaluaciones más cerca de la homogenización (estandarización) que de la
riqueza de la diversidad. Por su parte, las educadoras declaraban que los espacios
físicos y de horarios para compartir, reflexionar y construir colectivamente eran
insuficientes respecto de la participación de las familias y había dificultades para
encontrar los modos de hacer efectiva esta participación en una sociedad que
dejaba poco espacio para que las familias asumieran este derecho de manera
efectiva. Junto a ello, aunque con menor incidencia, también se encontraban
equipos que se cuestionaban, innovaban, estudiaban y se atrevían a cambiar
sus prácticas pedagógicas para transformar la educación y, a través de ella, la
realidad, iniciativas que se estimó necesarias de apoyar, abriendo los espacios
para compartir, construir y aprender.
Por otro lado, pasados algunos años desde la publicación e implementación del
Referente Curricular, la JUNJI estimó necesaria su revisión, considerando tanto la
necesidad de actualizar e incorporar nuevos énfasis y orientaciones en políticas
públicas como la de profundizar y ampliar algunos aspectos, manteniendo el
sello institucional. Para ello, junto con la reflexión de los equipos técnicos de
los diferentes niveles, se buscó referentes nacionales e internacionales que
enriquecieran la labor educativa con niños, niñas y familias.

Esto se vio facilitado, por un lado, por la reconocida velocidad con que esta
sociedad construye y accede al conocimiento a través de las distintas plataformas
tecnológicas, lo que permite estar al tanto de las discusiones pedagógicas que
se dan a nivel internacional en el ámbito de la educación parvularia y/o de la

20 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
infancia en general, gracias a la globalización. En paralelo, en los últimos años,
donde la infancia ha ocupado un lugar de privilegio en la discusión socioeducativa
y política, hay mayor accesibilidad a seminarios nacionales e internacionales, así
como a capacitaciones y diversas pasantías, que contribuyen a participar directa
y presencialmente en experiencias en centros parvularios de reconocida calidad
en primera infancia.

Reconociendo y valorando el aporte que ha significado el Referente Curricular,19


tanto en contenido como en forma,20 el documento amplió contenidos y
profundizó e incorporó nuevos, considerados necesarios por las políticas
públicas y en la agenda internacional.21 Al mismo tiempo, expuso e hizo explícita
la coherencia entre la propuesta pedagógica y otras políticas, documentos y
dispositivos destinados a los equipos profesionales de los distintos niveles,
elementos cuyos objetivos y contenidos fueron cuidadosamente elaborados con
el fin de entregar a niños y niñas una atención que los considere en lo que ellos
son. En otras palabras, que los haga visibles como personas con características,
necesidades e intereses propios y pertenecientes a una comunidad que los
identifica, reconocidos como ciudadanos en el más amplio sentido de la palabra:
aquél que alude a la posibilidad de proponer y a que su opinión sea tomada en
cuenta en los temas que les conciernen, para lo que se requiere contar y ofrecer
las condiciones humanas, materiales y de contexto pedagógico que permita
esa formación desde la más temprana edad. Así respondió la JUNJI a la tensión
paradigmática respecto del tipo de ser humano que pretende formar: libre,
consciente, reflexivo, seguro de sí mismo y de las decisiones que toma, porque
se ha ejercitado en cómo hacerlo desde muy pequeño.

De manera sintética, a continuación se desarrolla la discusión sobre la propuesta


institucional y las políticas, documentos y dispositivos que conforman un cuerpo
articulado que da continuidad y coherencia al trabajo educativo de la JUNJI.

19
La institución inició este trabajo en 2016 con los Lineamientos Técnicos (Marco Técnico Pedagógico para la
Mejora de la Calidad de las Prácticas Educativas), que declaran: “Viene a continuar en la senda de lo señalado en
el Referente Curricular”.
20
Un único documento para referirse a diversos temas como: niños y niñas como sujetos de derechos, buen trato
e inclusión.
21
OMEP, por ejemplo.

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 21


DISCUSIÓN
La misión de la JUNJI consistía en otorgar educación parvularia pública, gratuita
y de calidad, y bienestar integral a niños y niñas preferentemente menores de 4
años, priorizando en aquellos que provienen de familias que requieren mayores
aportes del Estado, tendiendo a la universalización, a través de diversos
programas educativos con una perspectiva de territorialidad; desde una visión
de sociedad inclusiva y de niños y niñas como sujetos de derechos que reconoce
las potencialidades educativas de sus contextos familiares, sociales y culturales
incorporándolas para dar mayor pertinencia a sus aprendizajes.

Al hacerse cargo de la calidad, la JUNJI adquirió automáticamente la


responsabilidad de definir este concepto, que ha sido debatido, actualizado y
re-significado por estar ligado a factores que involucran el tipo de sociedad que
se desea construir y las personas que se desean formar para ella, por lo tanto,
no es neutro ni estático, porque es cultural y contextualizado, de la misma
manera que la sociedad es cambiante. En ese sentido, la institución hace suyas
las palabras del filósofo Fernando Savater: “La humanidad nos la damos unos
a otros y la recibimos unos de otros. (…) Nadie se hace humano solo. Sólo el
contacto, el contagio de otros seres humanos, nos hace humanos”.22

En la actualidad, organismos como Unesco y Unicef consideran que una


educación de calidad es aquella que promueve el desarrollo integral de las
personas y el respeto de sus derechos, y que da respuesta a exigencias sociales,
tanto de nivel mundial como local. Al adscribir a la Convención Internacional de
los Derechos del Niño y la Niña, el Estado de Chile se comprometió a otorgar a
los niños pequeños la calidad de sujetos de dichos derechos.

La responsabilidad que atañe a la JUNJI, como ente del Estado, es garantizar


que dichos derechos se cumplan, otorgando educación de calidad, integral,
oportuna y pertinente. Por estar en contacto directo con los niños y niñas, cada
educadora y técnica, es garante de sus derechos, y de manera extendida, esta
responsabilidad también recae en cada funcionario de la institución.

Fernando Savater, “Fabricar humanidad”. En Revista PRELAC, N° 2, “Los sentidos de la educación”, febrero
22

de 2006.

22
Asumiendo dicho mandato, la JUNJI revisa permanentemente, y de manera
crítica, sus propuestas educativas, con el fin de que éstas respondan a una
educación de calidad efectiva, que haga realidad la idea expresada en la Reforma
Educacional que considera la educación como la base estructural generadora
de transformaciones para la conformación de una sociedad más equitativa e
inclusiva, menos segregada, con mayores oportunidades para todos, más justa
y democrática. Por lo tanto, se hace necesario reflexionar en torno a los valores
y principios que interesa transmitir y conservar y en una sociedad consciente de
qué tipo de niños y niñas se requiere formar.

Lo anterior explica las reflexiones institucionales que están en la base de las


decisiones curriculares y que provocaron discusiones técnicas que se centraron
en los temas que se desarrollan a continuación.

• El primer tema consistió en plantearse la importancia de comprender


los paradigmas en los que se basan los distintos currículos en educación
parvularia.

Tal como se expone en las primeras páginas, esta nueva propuesta curricular
de la JUNJI no comenzó con una hoja en blanco, sino que fue producto de una
construcción curricular institucional adecuada a los tiempos. `

Respecto de los cambios necesarios, David Rose, académico de la Escuela de


Educación de la Universidad de Harvard, señala: “Tenemos el mismo cerebro,
pero lo que se espera que aprendamos es distinto. (…) Lo que necesitamos
actualmente es que las personas sean los mejores aprendices, porque vamos a
tener que seguir aprendiendo constantemente”.23

Si bien ésta es una condición que remite a la condición de permanentes


aprendices, no visibiliza el dilema de los paradigmas por los que se transita,
en un país cuya historia reciente demuestra que, de vuelta a la democracia, el
Estado asumió al mismo tiempo las necesidades de democratización y equidad
social y un modelo de economía de mercado, que se plasmaron en políticas

Entrevista a David Rose, en Revista de Educación, Ministerio de Educación, N° 378, 2017.


23

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 23


no siempre coincidentes.24 En efecto, el país, inmerso en el fenómeno de la
globalización,25 ha impulsado macro políticas que privilegian la objetividad,
el control, la uniformidad en los comportamientos, la segmentación de los
procesos, los resultados, las regulaciones. Es decir, una lógica lineal, mecánica,
que apunta a la estandarización y que es propia de procesos productivos o
industriales.26 No obstante, han sido llevadas al sistema educativo, afectándolo
integralmente, pues “lo hacen parecer lógico y sencillo, ocultando su
complejidad”.27 Es lo que se conoce como el paradigma de la simplicidad y cuya
lógica, al ser adoptada por gran parte del Estado, impacta a la educación en
su conjunto, y obviamente a todo el sistema de educación parvularia. En este
último ámbito se manifiesta en exigencias de eficacia que tienen un marcado
acento en la gestión y en un currículo que adopta contenidos y lógicas escolares
de fragmentación curricular,28 bajo cuyo sello se pierden principios fundantes
de la educación parvularia: considerar a niños y niñas en su integralidad que
aprenden holísticamente, al tiempo que se aleja el principio del juego como su
actividad central. También se desdibuja el concepto de niño que habita un lugar
y un contexto social y cultural, que lo afecta y lo transforma.

Dicho modelo, alejado de las personas, de sus contextos y de sus intereses,


tiene una respuesta crítica con el paradigma de la complejidad, propuesto
inicialmente por el filósofo Edgar Morin, y al que adhirieron muchos estudiosos
e investigadores de la educación, levantando incluso otros paradigmas similares
o complementarios.29 Dicho paradigma plantea, entre otras cosas, que nada de
lo que existe en el mundo está aislado porque todo permanece en constante

24
Cynthia Adlerstein, “La política pública de la educación parvularia chilena: Una mirada desde la historia y su
actualidad”, Revista Docencia, N° 48, año XVIII, Santiago, 2012.
25
Globalización: “Proceso en virtud del cual los estados nacionales soberanos se entremezclan e imbrican mediante
actores y transnacionales y sus respectivas probabilidades de poder, orientaciones, identidades y entramados
varios. Implica un desencuentro del ser con su propia identidad, porque lo afecta la pérdida de fronteras del
quehacer cotidiano en las distintas dimensiones de la economía, la información, la ecología, la técnica, los
conflictos transculturales y la sociedad civil que modifica a todas luces con perceptible violencia la vida cotidiana
y que fuerza a todos a adaptarse y a responder”. En Ulrich Beck, ¿Qué es la globalización?, Ediciones Paidós
Ibérica, Barcelona, 1998, p. 29.
26
Esta lógica es la misma que se explica en el tema sobre “interés técnico”, descrito en Currículo con enfoque
integrado en Educación Parvularia, Serie Hojas para el Jardín, cuadernillo N° 8, Ediciones de la JUNJI, p. 11, 2016.
27
Cynthia Adlerstein, op. cit.
28
Un ejemplo de ellos son las planificaciones organizadas por “materia” o “temas”, por ejemplo: Matemáticas,
Lenguaje, Género, Buen Trato.
29
Tales como el paradigma de la “posmodernidad”.

24 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
interacción con otros elementos de un sistema que, a su vez, forma parte de
un sistema mayor. Desde este punto de vista, las comunidades educativas de
los jardines infantiles (compuestas por párvulos, equipo del establecimiento y
familias, que en sí conforman un sistema), están inmersas en múltiples relaciones
e interacciones entre sí, vinculadas con el ambiente y relacionadas con redes de
todo tipo: familiares, afectivas, sociales, económicas, históricas, etcétera. Sólo
comprendiendo estas interacciones y el modo en que funcionan, es posible
que los seres humanos puedan desarrollarse como tales y asumir el rol que les
compete en esta sociedad y en el mundo. Bajo esta idea, el rol de los educadores
respecto del conocimiento, por ejemplo, debería ser “la necesidad de desarrollar
la aptitud de las personas para ubicar el conocimiento y la información en un
contexto y dentro de un conjunto, dando paso a una educación que enseñe
los métodos que permitan aprehender las relaciones mutuas y las influencias
recíprocas entre las partes y el todo de un mundo complejo”.30

El paradigma de la complejidad también es parte del paradigma sociocrítico,


más amplio, comprendido como un conjunto de ideas, planteamientos y teorías
que reaccionan contra la corriente del positivismo y que plantean la necesidad
de promover una autonomía racional y liberadora para los seres humanos.
En ese sentido, la JUNJI asume esta postura, apostando por una formación
humana, donde los procesos pedagógicos promuevan efectos transformadores
de la sociedad.

• Una segunda discusión se centró en despejar la importancia de relevar el


concepto aprendizaje respecto del de enseñanza.

Existe consenso en afirmar que la sociedad, impulsada por la globalización y las


tecnologías de la información, está en un proceso de cambios acelerados y de
desarrollo del conocimiento. Este último, como nunca antes en la historia de la
humanidad. Por lo anterior, también hay consenso en que es necesario cambiar
la forma en que tradicionalmente se transmitió y se generó el conocimiento al
interior de las instituciones educativas, en gran parte de manera transmisiva y

José Miguel Pereira Chaves, “Consideraciones básicas del pensamiento complejo de Edgar Morin en la educación”.
30

En: Revista Electrónic@ Educare, Vol. XIV, N° 1, [67-75], Universidad Nacional de Heredia, San José de Costa Rica,
enero-junio de 2010.

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 25


con poca o nula participación de los alumnos. Frente a esta realidad, hoy todos
los sistemas educativos, en todos los niveles, se están planteando cambios
importantes. Al respecto, un artículo publicado en la revista de la Organización
de Estados Iberoamericanos (OEI) señala:

Los conocimientos se convierten en obsoletos en muy breve periodo (…) Hay que
crear un entorno de aprendizaje continuo alrededor de los estudiantes que les
capacite para seguir aprendiendo a lo largo de toda la vida, y que les permita
permanecer receptivos a los cambios conceptuales, científicos y tecnológicos que
vayan apareciendo durante su actividad laboral. Hay que pasar de un modelo
basado en la acumulación de conocimientos a otro fundamentado en una actitud
permanente y activa de aprendizaje. Dado que la transmisión de conocimientos
no puede continuar siendo el único objetivo del proceso educativo, el modelo
pedagógico sustentado en el profesor como transmisor de conocimientos debe
ser sustituido por otro en el que el alumno se convierta en el agente activo del
proceso de aprendizaje, que deberá seguir manteniendo durante toda su vida.31

En este sentido, la actual propuesta curricular de la JUNJI, que recupera los


principios fundantes, los sentidos y las metodologías más adecuadas para el
nivel, y que pone a niños y niñas como protagonistas de sus aprendizajes, es
coincidente con la mirada que ofrece la OEI en el párrafo precedente, y le otorga
mayor consistencia, por cuanto concede valor a la idea de un sujeto que es capaz
de aprender autónomamente, que no sólo será capaz de orientar sus intereses
a aprendizajes de tipo cognitivo o cultural, sino también a aquellos de índole
valórica y moral.

31
José Ginés Mora, “La necesidad del cambio educativo para la sociedad del conocimiento”, Revista Iberoamericana
de Educación, OEI, N° 35, mayo-agosto de 2004. Ver: http://rieoei.org/rie35a01.htm.

26 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
• La tercera discusión consistió en identificar y profundizar en las
transformaciones culturales y sociales de la posmodernidad que inciden
en el trabajo pedagógico.32

En las últimas décadas, el contexto chileno y global ha cambiado rápidamente


vinculado a la posmodernidad, época donde se incrementa la velocidad de los
intercambios sociales, sus valores y significados culturales. En este contexto,
la diversidad comienza a aparecer como una característica intrínseca de la
realidad actual. Como consecuencia de ello, emergen grupos sociales que han
sido invisibilizados históricamente y que levantan sus discursos y demandas de
reconocimiento en la sociedad, en temas de género, pueblos originarios, clase,
diversidad sexual, entre muchos otros, y que reclaman derechos y validación
por parte de la sociedad como un imperativo de justicia social y equidad.

Esta situación ha generado un desafío en materia de política pública y, por lo


tanto, también en educación parvularia. En su Referente Curricular, la JUNJI da
respuesta a estos desafíos a través del sello de educación inclusiva en todos
sus programas educativos, implementando estrategias y acciones encaminadas
a desarrollar prácticas pedagógicas inclusivas y pertinentes desde lo cultural,
asumiendo como tarea principal proponer un nuevo sentido de comunidad, en
el que todos sean representados y valorados en la diferencia.

Los espacios donde se llevan a cabo los procesos educativos son comprendidos
como espacios reproductores y socializadores de la cultura y, por lo tanto,
susceptibles de reproducir las desigualdades y las inequidades sociales
existentes en una sociedad. Pero también son espacios privilegiados para
apoyar procesos transformativos: el sello de educación inclusiva que conlleva el
Referente Curricular permite abrirse a la riqueza de la diferencia entre niños y
niñas, basados en un concepto de educación que lleva a la transformación social
y a una sociedad más democrática, acogedora, solidaria y respetuosa.

Posmodernidad: es un concepto cultural filosófico que surge en los años 70. Entre muchas otras características,
32

critica al racionalismo y la uniformidad; cuestiona las “verdades absolutas”, está a favor de la diversidad
y el pluralismo. Se identifica, por ejemplo, con las necesidades de aquellos individuos o grupos que han sido
históricamente marginados como consecuencia de las ideologías del modernismo y las estructuras sociales y
políticas que les sirvieron de apoyo.

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 27


Es importante señalar que en lo concerniente a la diversidad cultural, ésta
comienza a ser tomada en cuenta en la JUNJI a inicio de los años 90, con la
creación de los Jardines Alternativos de Atención en Comunidades Indígenas,
en donde se incorporan otras formas de leer la realidad, como insumos que
contextualizan y enriquecen las prácticas pedagógicas, considerando no sólo la
cosmogonía y las pautas de crianza, sino que también la experiencia sensible de
los espacios inmediatos, que permite a niños y niñas maravillarse con el universo
cotidiano y comenzar a otorgar sentido a su mundo.

Con ello se recogió en parte uno de los requerimientos de los pueblos


originarios, el que se profundizó a través de convenios con la Corporación
Nacional Indígena (Conadi) a nivel nacional, orientados a la creación de Jardines
Infantiles Interculturales y luego a promover la revitalización de la lengua y la
cultura de pueblos originarios, la profundización del patrimonio inmaterial y la
valoración de su espacio de pertenencia desde los primeros años, ya que es
en este periodo cuando niños y niñas comienzan a construir y reafirmar una
identidad cultural positiva.

En la misma línea de lo anterior, se ha tratado de dar respuesta a las diferentes


realidades cotidianas que se viven en las unidades educativas de la JUNJI. Una
de estas realidades es la mayor participación de niños y familias en situación
de inmigrantes, donde se ha orientado a trabajar desde una perspectiva
intercultural y de derechos humanos, que exige repensar los diferentes procesos
institucionales, como la focalización social, el trabajo con familias y la práctica
pedagógica.

Con relación a equidad de género, y siempre en coherencia con la política pública,


desde los años 90 la institución ha realizado un sinnúmero de acciones enfocadas
a dicho objetivo, tales como extensión horaria, prioridad de ingreso a hijos de
mujeres trabajadoras o estudiantes e incorporación del enfoque de género al
currículo. Éstas se han ido ampliando en la medida en que la emergencia de
nuevos grupos sociales las hacen visibles, obligando a considerar y dar nuevas
miradas sobre el tema, como la existencia de diversos tipos de familias y niños:
familias homoparentales, monoparentales, jefaturas femeninas, niños y niñas
trans, etcétera. Esta situación demanda formular nuevas categorías sociales

28 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
del tipo de familias y sujetos, que obliga a reflexionar sobre concepciones
tradicionales en torno a los prejuicios en la sociedad, con el fin de acoger e
incluir a todos los niños, niñas y familias de la comunidad educativa.

Con una ciudadanía más empoderada en torno a sus derechos, que se organiza
y exige una mejor calidad de educación para sus hijos e hijas, se requieren
individuos que participen o incidan en los procesos educativos, que contribuyan
a la construcción de un nuevo sentido de comunidad, que trasciendan los
estereotipos y se vinculen en un marco de sentidos de convivencia respetuosa
con el otro.

Estas discusiones despejaron aquellos aspectos que necesariamente debían


incorporarse a la propuesta pedagógica institucional, y la incorporación de
nuevos énfasis, manteniendo el Referente Curricular como documento base.

ASPECTOS A MANTENER Y PROFUNDIZAR


EN EL REFERENTE CURRICULAR
Como se dijo antes, la propuesta pedagógica actual de la JUNJI es fruto de
una construcción desarrollada colectivamente en base a la constante reflexión
y profundización teórica de las prácticas pedagógicas. “Reflexión y acción
como unidad indisoluble, como par constitutivo de la misma y, por lo tanto,
imprescindible. La negación de uno de los elementos del par desvirtúa la praxis,
transformándola en activismo o un subjetivismo, siendo cualquiera de los dos una
forma errónea de captar la realidad. La tensión entre este par dialéctico es una
cuestión que constantemente se repite en toda práctica social”.33 Consecuente
con ello, las prácticas pedagógicas y la reflexión al interior de la institución
están dadas por el conjunto de personas que la conforman, y que actúan
orgánicamente como un todo, dentro de sus funciones, retroalimentándose
continuamente. No obstante, el núcleo de esta reflexión es lo que se debe dar
al interior de cada centro y/o programa de atención y es lo que nutre al resto de

Ana Masi, “El concepto de praxis en Paulo Freire”. En: Paulo Freire. Contribuciones para la pedagogía, CLACSO,
33

Buenos Aires, 2008.

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 29


los profesionales involucrados, tanto a los supervisores de los equipos técnicos
regionales como al equipo técnico nacional.

De acuerdo a ello, el Referente Curricular continúa siendo el documento base


de la actual propuesta, enriquecido con referentes teóricos actualizados de la
educación parvularia, profundizando o ampliando algunos de los fundamentos
y propósitos del mismo e incorporando nuevos énfasis.

Es así como:

• El Artículo 26 de la Declaración de los Derechos Humanos, además del


Artículo 4 de la Convención de los Derechos del Niño y la Niña, señalan el
derecho a la educación. En coherencia, la educación inclusiva se mantiene y
refuerza como el sello principal del enfoque de calidad, entendiéndose por
tal “eliminar la exclusión social como consecuencia de actitudes y respuestas
a la diversidad en términos de clase social, origen étnico, religión, género
y aptitudes”.34 La JUNJI tiene el convencimiento de que la diversidad y la
inclusión enriquecen los contextos de aprendizaje.

• La educación parvularia tiene sentido en sí misma, porque ya no existen


dudas acerca de la importancia de esta etapa: hay evidencia científica de la
ductilidad neuronal, en la que es relevante el ambiente que rodea a los niños,
pues la interacción promueve patrones distintivos de desarrollo y, por lo
tanto, de los aprendizajes producto de dicha interacción. La mediación, como
acto intencionado, otorga especial importancia a la calidad de la educación
que se le ofrezca en este nivel. Estas mediaciones –sociales y educativas–
son reflejo del desarrollo del conjunto de una sociedad o país, y por ello es
una educación que debe armonizar el trabajo institucional, de la familia y de
la comunidad. Valores, aspiraciones, expectativas y prácticas pedagógicas y
de crianza se transmiten desde la primera infancia.

• La flexibilidad curricular permite la construcción participativa de proyectos


educativos con identidad comunitaria y territorial. Esto otorga sentido de
pertinencia, así como la generación de proyectos innovadores, respetando
34
JUNJI, Referente Curricular, op. cit., p. 13.

30 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
forma de relación, de participación e historia que le da su sello único e
irrepetible. También permite la implementación de diferentes modalidades
o propuestas pedagógicas, en tanto respeten principios fundamentales de la
pedagogía institucional, tales como el protagonismo de niños y niñas en la
construcción de sus aprendizajes, la participación de la familia, entre otros.

• La convicción de que niños y niñas son protagonistas de sus aprendizajes


respondiendo a la pregunta del tipo de hombre/mujer que se quiere
formar: un ser autónomo, libre, solidario, respetuoso, tolerante, flexible,
sensible, confiado en sí mismo y “en sus propias competencias para pensar
y elaborar estrategias para la resolución de problemas y conflictos”,35 en
su capacidad de asumir su vida y de transformar su entorno y la sociedad.
Un ser que sienta que puede incidir en la sociedad, a partir de la lectura
crítica que hace de ella, un ser autónomo y al mismo tiempo solidario en
pensamiento y acción, que asume desafíos y que asume las consecuencias de
sus actos como parte de su propios aprendizajes de vida. Para ello requiere
de un entorno social que le haga sentir que es respetado desde que nace,
distinguiendo todas sus etapas, acompañándolo durante todo su desarrollo,
generando a su alrededor condiciones para ser escuchado y reconocido como
un sujeto social, singular, tal como es –cualquiera sea su edad, diferencia o
discapacidad– que puede y debe contribuir a la sociedad porque es “portador
de percepciones, producciones, juicios y acciones, en razón de lo que viven
y sienten”,36 entorno en el que los educadores juegan un rol clave no sólo
para ofrecer dichas condiciones sino también para conversar con las familias
acerca de ello.

35
Myrtha H. Chokler, Los organizadores de desarrollo. Un enfoque desde la neuropsicosociología para la comprensión
transdisciplinaria del desarrollo infantil, Instituto per la Formazione e la Ricerca Applicata (IFRA), Bologna, 2013.
Ver: http://www.ifra.it/idee.php?id=11&titolo=Los%20Organizadores%20del%20Desarrollo&autore=Dra.%20
Myrtha%20H.%20Chokler.
36
Érika Alfageme, Raquel Cantos, Marta Martínez, De la participación al protagonismo infantil, Edición Plataforma
de Organizaciones de Infancia, Madrid, 2003.

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 31


NUEVOS ÉNFASIS
a) Juego y creatividad como ejes del proceso educativo:37
El juego y la creatividad son inherentes y necesarios en la infancia, de tal manera
que se han plasmado como derechos en la Convención sobre los Derechos del
Niño, (Artículo 31).

Los procesos críticos desarrollados en la institución, dieron cuenta de prácticas


pedagógicas que dejaban poco espacio al juego libre,38 no obstante tener la
convicción que ésta es la actividad natural propia de niños y niñas. La actual
propuesta recupera la importancia del juego y de manera asociada la creatividad,
presente en todas las acciones del juego libre infantil. Las investigaciones sobre
el tema dan cuenta de que a través del juego los niños y niñas desarrollan su
personalidad, las habilidades sociales, exploran cómo funciona el mundo, construyen
conocimientos, se preguntan y buscan respuestas, negocian con sus pares, expresan
y aprenden a controlar sus sentimientos y emociones. “Jugar funciona como un factor
de cohesión en sus vínculos e interacciones sociales y culturales y es un importante
medio para su particular proceso de constituirse como persona”.39

La creatividad es la capacidad de generar nuevas ideas, de construir mentalmente


asociaciones de conceptos conocidos y de obtener soluciones originales y
únicas. Es propia del ser humano y es uno de los factores que ha permitido que
la humanidad avance en conocimientos e inventos de todo tipo.

Juego y creatividad funcionan holísticamente, de manera espontánea en los


niños y niñas, y es el motivo por el que los ambientes de aprendizaje, materiales
y humanos, juegan un rol clave: desde el punto de vista material, la generación
de espacios y elementos de distinta índole y características despiertan el interés
y la curiosidad de niños y niñas. Inclusive, la posibilidad de generar alternativas
de espacios de austeridad en los materiales, es aliciente para fomentarla. Desde
lo humano, deben ofrecerse ambientes motivantes, libres de presiones, cálidos,
37
María Cristina Ponce, Juego, libertad y educación, Cuadernos de Educación Inicial, Ediciones de la JUNJI, Santiago,
2014.
38
Probablemente por las exigencias de cumplir algunas metas.
39
María Cristina Ponce, op. cit.

32 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
alegres, donde exista la posibilidad de tener tiempo de observar, experimentar
y pensar, de relacionarse con otros niños y niñas y otras personas, de aprender a
escuchar, de romper o cambiar rutinas para enfrentarse a otras situaciones. Todo ello
ayuda a preparar a niños y niñas a insertarse proactivamente a una sociedad incierta.

b) Concepto, importancia y sentido de la “lugaridad”


en el aprendizaje:40
Bajo este concepto, se otorga una nueva mirada a los contextos para el
aprendizaje, pues se releva la relación, el vínculo afectivo que desarrollan los
niños y niñas con el espacio en que viven y transitan, que les otorga la sensación
de seguridad, confianza, pertenencia, de sentirse cobijados. Por ello también se
relaciona con el concepto de “apego espacial”, porque cada persona necesita
tener “su” lugar, donde se sienta cómodo y lo sienta suyo. Si se miran con ese
sentido, poniendo al centro al niño y estas nuevas propuestas de experiencias
de aprendizaje, los equipos pedagógicos podrán realizar cambios que permitan
transformar el espacio y los ambientes.

Algunas sugerencias que propician esta condición son los espacios despejados
que facilitan la circulación cómoda y autónoma de niños y niñas; la calidad y
cantidad de elementos visuales en los muros que permiten centrar el aprendizaje;
el espacio que debe posibilitar que los párvulos puedan permanecer en distintas
posturas o reflexionar sobre los conceptos de decoración y estética, esto último
como parte de la formación acerca de lo bello en el arte y en la naturaleza.

c) Planificación
Parte importante de los profesionales que trabajan en la JUNJI pertenecen a
las generaciones formadas bajo el paradigma positivista de la planificación,
que primó durante muchos años. Bajo este modelo, la planificación es
planteada como un ejercicio lineal, con objetivos, desarrollo y final previstos,
estandarizados y eventualmente únicos. La propuesta actual requiere un
cambio radical, ya que considera a cada niño y niña como seres singulares, con
características particulares y distintos modos de ver y comprender el mundo. Tal

40
Myriam Pilowsky, Apego espacial: la lugaridad en el aprendizaje, Cuadernos de Educación Inicial, Ediciones de la
JUNJI, Santiago, 2014.

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 33


como se explica en el capítulo dedicado a la discusión, una práctica pedagógica
actualizada, acorde a las investigaciones sobre el modo de aprender de los seres
humanos, rescata y releva el concepto de aprendizaje por sobre el de enseñanza:
el aprendizaje se construye al interior de cada persona. Por lo tanto, es propio
de esa persona y ante una misma experiencia planificada puede ser distinto,
porque las personas son distintas.

Una educación parvularia de calidad considera y respeta el proceso de cada


niño como ser único, singular, que tendrá diversas experiencias y aprendizajes
previos y distintos intereses. Ante escenarios dispuestos, y probablemente
pensados por el equipo para provocar ciertos aprendizajes, pueden emerger
experiencias pedagógicas muy distintas, pues serán resultado de construcciones
mentales previas y del sinnúmero de relaciones y conexiones mentales que cada
niño o niña experimentará y que puede enriquecerse con las interrelaciones
con otros párvulos o adultos, los que a su vez traen y aportan sus propias
experiencias. De ahí que, si bien es necesario fijarse metas u objetivos amplios
a cumplir con el objeto de guiar el proceso pedagógico, el acento requiere estar
puesto en el cómo y por qué alcanzarlos.41 En ese sentido, puesto en función de
los niños y niñas, es necesario un plan abierto, una ruta a seguir, con proyectos
propuestos y conversados con y por ellos, a veces originados en la manipulación
u observación de los elementos y materiales dispuestos por el equipo o surgidos
de exploraciones realizadas en la comunidad u otras instancias enriquecedoras.
Dichos proyectos pueden modificarse en tiempo y contenido, cuando el equipo
pedagógico haya escuchado, registrado y acompañado el pensamiento de niños
y niñas. Este tipo de planificación está inspirado en las ideas de Reggio Emilia,
un modelo de pedagogía respetuosa para la primera infancia. La idea que prima
es que “no hay una separación entre el tiempo de vivir y el tiempo de aprender.
Las situaciones informales, las distintas formas de convivencia, el juego, la
experimentación, los proyectos y planes propios, el tiempo personal, las propias
decisiones y acciones, son fundamentales”.42

d) Aprendizaje como resultado de los intereses de cada niño


Niños y niñas son activos participantes de sus propios aprendizajes, lo que

María Victoria Peralta, Innovaciones curriculares en educación infantil, Editorial Trillas, México, 2016, p. 154.
41

Gimeno Sacristán, José et al, Saberes e incertidumbres del currículo, Ediciones Morata, Madrid, 2010, p. 553.
42

34 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
refleja el interés humano por explorar y conocer el ambiente a partir de sus
experiencias. Para que eso se transforme en una construcción de avance en
sus conocimientos, requieren un entorno planificado que les ofrezca una gran
variedad de experiencias que les permitan ir observando, probando, explorando,
ensayando, no sólo en términos naturales, físicos o materiales: también implica
las experiencias sociales. Dicho entorno debe ser enriquecido con todo tipo
de recursos; especial importancia adquieren los materiales naturales y los de
reciclaje, elementos que contribuyen no sólo a la creatividad, sino también a
asimilar desde pequeños la idea del cuidado del medioambiente.

Lo anterior posibilita que cada niño o niña, de acuerdo a sus diferencias


individuales, pueda vivenciar experiencias a su ritmo e interés y construir sus
aprendizajes con la mediación fina y oportuna del equipo pedagógico, que
requiere en primer lugar, escuchar a los niños y niñas con el fin de proveer las
oportunidades y el apoyo más adecuado para la exploración y experimentación,
y estar atentos a sus interacciones con el objeto de ampliar, renovar o modificar
los entornos para que los párvulos avancen, a través de sus juegos, de manera
natural y como respuesta a dichas interacciones. En segundo lugar, el equipo
pedagógico requiere interpretar y reinterpretar observaciones, registros,
conversaciones, gestos y reacciones de los niños para guiar adecuadamente
sus aprendizajes.

e) Evaluación
En el contexto de un currículo respetuoso, cada niño es un ser único y la
propuesta consiste en una planificación abierta y flexible, pero con un claro
rumbo pedagógico acerca de las grandes metas a lograr. La evaluación gira hacia
la comprensión del proceso que experimenta cada párvulo y al seguimiento
riguroso de sus avances. Ello implica contar con una gran variedad de registros
documentados: fotos, videos de actividades, registros escritos, grabaciones de
audio, etcétera. Estos registros, de índole cualitativo, no son al azar, sino que
deben tener una intencionalidad: ¿para qué registro?, ¿qué voy a observar?,
¿cómo voy a registrar? La interpretación de estos registros debiese contar tanto
con la propia autoevaluación de los niños como con la interpretación y análisis
profesional respecto de los avances que realicen los profesionales responsables.

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 35


POLÍTICAS, DISPOSITIVOS Y OTRAS
MEDIDAS DE APOYO AL CURRÍCULO
En el convencimiento de que el currículo puede ser construido y desarrollado
de acuerdo a orientaciones y que los equipos pedagógicos requieren que todas
las condiciones de contexto institucional favorezcan dicha construcción, el
Departamento Técnico Pedagógico de la JUNJI revisó, elaboró y ajustó (cuando
fue necesario) todas las políticas, dispositivos y aquellas otras medidas técnicas
existentes, de manera de que fueran coherentes entre sí, con el Referente Curricular
y con los nuevos énfasis, para así facilitar su concreción en la práctica de aula.

A continuación, se detallan las nuevas medidas y modificaciones realizadas a


otras ya existentes. La mayoría de estos documentos ha sido posible de publicar
gracias a la labor de Ediciones de la JUNJI, área de publicaciones creada en 2014
y que ha sido clave para el trabajo del Departamento Técnico Pedagógico.

POLÍTICAS

• Políticas Regionales de Reconocimiento y Participación de las Familias


En coherencia con el enfoque inclusivo de la misión institucional, este libro
es un referente institucional que busca orientar la elaboración colectiva e
implementación de políticas regionales de reconocimiento y participación de
las familias, en pos de avanzar hacia la descentralización de la gestión educativa.
Este propósito requiere una mirada técnico pedagógica e interdisciplinaria.
La importancia de este documento radica en que es primera vez que se
elabora una política pública descentralizada, ya que cada Dirección Regional
de la JUNJI construyó participativamente la suya sobre la base de un “marco
de sentidos”, que relevó el reconocimiento de la diversidad de las familias
en beneficio de procesos educativos que favorecieran, integralmente, el
desarrollo de niñas y niños como sujetos de derechos.

Esta política tiene como sus principales fundamentos: a) el reconocimiento


de las familias en su diversidad, erradicando el mito de que ellas no participan
de la educación de niñas y niños, lo que permitirá generar una red vincular

36 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
libre de prejuicios sancionadores; b) la valoración del enfoque comunitario
para transitar desde una comunidad educativa jerarquizada hacia una
comunidad educativa compuesta por redes, en la que se reconocen los
individuos y las redes vinculares que los relacionan; c) relevar la profundidad
de las relaciones que se establecen en las redes vinculares por sobre la
mirada tradicionalmente puesta en los niveles de participación; y d) situar la
reflexión y la toma de decisiones en el bienestar y aprendizajes integrales de
niños y niñas, compartiendo los sentidos de la educación parvularia.

• Política de Supervisión
La supervisión en la JUNJI se comprende como un proceso de asesoría
técnica a las comunidades educativas de los distintos programas y constituye
un dispositivo de soporte clave para el resguardo de la calidad del servicio
educativo. La actual Política de Supervisión data de 2015 y se define como
un “proceso de asesoría, seguimiento, control y evaluación que realizan los
equipos técnicos territoriales para promover la calidad educativa integral de
los distintos programas de la administración directa y vía transferencia de
fondos”.43

De acuerdo con esto, los supervisores son agentes relevantes que apoyan
la gestión integral de los establecimientos, acompañando y nutriendo
los procesos de análisis y reflexión del propio quehacer, aportando con
herramientas conceptuales y didácticas para el fortalecimiento de las
competencias técnicas de los distintos agentes educativos involucrados. Este
acompañamiento técnico se realiza con una mirada interdisciplinaria y con
una perspectiva territorial, que considera los contextos geográficos, sociales
y culturales en los que los programas educativos institucionales se insertan
a lo largo del país.

Compartiendo los principios generales de la anterior Política de Supervisión,


y con el objeto de otorgar mayor coherencia con las opciones curriculares
institucionales, la actual política incluye un instrumento que permite el
registro, análisis y evaluación de las prácticas pedagógicas en el contexto del
proceso de supervisión en las unidades educativas y que se ha denominado

JUNJI, Política de Supervisión, Departamento Técnico Pedagógico, Ediciones de la JUNJI, Santiago, 2015, p. 15.
43

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 37


Bitácora de Supervisión. Su propósito es otorgar a los equipos pedagógicos
una visión sistémica de aspectos esenciales que permitan asegurar una
educación parvularia de calidad. Así también, se espera desarrollar y
fortalecer competencias de las educadoras de párvulos y técnicas, y de
otros agentes educativos, a partir de un diálogo permanente y horizontal
que motive procesos de análisis crítico-reflexivos de la práctica educativa,
con el objeto de generar condiciones para el reconocimiento de fortalezas y
aspectos a mejorar.

DISPOSITIVOS

• Trayectoria de Aprendizajes de la Niña y el Niño


Documento que busca registrar participativamente (entre el jardín infantil
y las familias) los aprendizajes construidos por sus hijos e hijas y compartir
las visiones respecto de sus avances y logros. También pueden participar,
cuando es posible, los niños y niñas.

• Bitácora de Supervisión
Instrumento que permite el registro, análisis y evaluación de las prácticas
pedagógicas en el contexto del proceso de supervisión compartido en las
unidades educativas. Su propósito es otorgar a los equipos pedagógicos
una visión sistémica de aspectos esenciales que permitan asegurar una
educación parvularia de calidad. Los criterios de evaluación que se estipulan
en este instrumento constituyen referentes de calidad para la mejora
continua del proceso educativo. La Bitácora de Supervisión permanece en
el establecimiento, pues constituye un relato-guía de la historia pedagógica
del mismo, que apoya los procesos de reflexión del equipo para transformar
sus prácticas.

• Propuesta Pedagógica para el Primer Ciclo de Educación Parvularia


Documento que sugiere la pedagogía a desarrollar en este nivel y
que se aborda desde los fundamentos esenciales y los énfasis en la
pedagogía, incluyendo los principios que orientan la planificación y la
evaluación. Ofrece también un conjunto de estrategias centrales para
su implementación.

38 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
• Serie de Hojas para el Jardín
Colección de dos cajas de cuadernillos (la primera con 11; la segunda con 7)
que contienen temas pedagógicos de apoyo a la reflexión pedagógica de las
Comunidades de Aprendizaje de las Unidades Educativas (CAUE).

• Serie Cuadernos de Educación Inicial


Edición de libros dirigidos a educadoras y técnicas en educación que
profundizan distintas temáticas relacionadas con la atención de niños y
niñas, la relación con las familias y el fortalecimiento de toda la comunidad
educativa.44

OTRAS MEDIDAS DE APOYO

• Plataforma CAUE
Sitio informático de apoyo al trabajo de reflexión de la práctica pedagógica y
de generación y democratización del conocimiento de los establecimientos,
en el contexto de la formación continua. Esto permite mantener sistematizada
y organizada la información, dar a conocer el aprendizaje construido en las
unidades educativas y aprender de otros y con otros.

El sitio contiene una versión digital de los cuadernillos de la Serie de Hojas


para el Jardín, asociados a los énfasis pedagógicos institucionales; cápsulas
(videos asociados a las temáticas); presentaciones en power point; foros de
discusión; calendario de eventos; y un blog para acopiar relatos realizados
por las CAUES.

Para que esta plataforma logre sus objetivos requiere de una infraestructura
informática de apoyo, para lo cual en la actualidad el 98% de los jardines
infantiles clásicos cuenta con computador y conexión a internet y pronto
será el 100%. En el resto de los programas se ha ido avanzando de manera
que todos los establecimientos puedan contar en el corto plazo con internet,
soporte y datacenter.

Editada por Ediciones de la JUNJI, hasta agosto de 2018 había publicados 11 Cuadernos de Educación Inicial. Ver
44

nómina de títulos en www.junji.cl.

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 39


• Estilos de vida saludable
En el marco de una educación respetuosa de las necesidades de niños y
niñas (y, por tanto, de sus requerimientos nutricionales, su pertenencia
cultural, sus hábitos alimentarios, de la estacionalidad de los alimentos, de
las alteraciones del estado nutricional y patologías alimentarias), en todos
los programas educativos se entrega alimentación correspondiente a un
programa nutricional de calidad que asume las características señaladas.

Desde sus inicios, la JUNJI ha establecido en todos sus jardines infantiles


prácticas de vida saludable, comprendiendo que con ello contribuye a la
calidad de vida presente y futura de los párvulos, sus familias y la comunidad.
En consecuencia, esto es parte importante del currículo, de la misma manera
como lo es la incorporación de las políticas públicas referidas al tema, tales
como el apoyo a la lactancia materna y la educación para el desarrollo
sustentable.

Asumiendo el concepto de integralidad educativa, los momentos de


alimentación son considerados espacios de aprendizaje en ambientes
afectivos, respetuosos e inclusivos, en donde una de las últimas medidas de
mejora ha sido la utilización de pocillos y platos, reemplazando la bandeja de
cuatro compartimientos, utilizada por más de 40 años en la institución.

• Material de enseñanza
En coherencia con la idea de democratizar la propuesta educativa, haciéndola
más pertinente y acorde a las necesidades regionales, la institución definió
una nueva “Norma Técnica de Material de Enseñanza” que, a diferencia
de la anterior, propone tipos de elementos genéricos organizados por
intencionalidades pedagógicas, que surgen de las Bases Curriculares de la
Educación Parvularia. Esta nueva norma dispone una selección de materiales
fungibles y no fungibles que pretende profundizar un enfoque pedagógico
que releva criterios como la materialidad y criterios pedagógicos que invitan
a mirar integralmente a niñas y niños, enfatizando el juego, el aprendizaje, la
convivencia y la creatividad.45

El concepto de "material de enseñanza" reemplaza al de "material didáctico". De acuerdo a la ley, este concepto
45

permite adquirir bajo un solo ítem una mayor variedad de dispositivos.

40 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
Lo anterior tiene el propósito de transitar hacia una pedagogía consciente, que
potencie el lugar donde habitan los niños y adultos, en el espacio educativo,
donde todos los elementos que coexisten, e incluso las interacciones que
provocan, formen un todo, un estar en la cotidianeidad, y que sean al mismo
tiempo “territorios auténticos de aprendizaje y vida”.46

El proceso requiere generar instancias reflexivas con los equipos pedagógicos


respecto del diseño de ambientes y elementos físicos de aprendizaje,
teniendo como centro el protagonismo de niñas y niños y una pedagogía
humanizante, que releva las relaciones vinculantes y la valoración de la
cotidianeidad en el aula, como proyección de la vida que ocurre en el hogar.
Así, la conformación de los espacios físicos de aprendizaje no se concibe
como gestora de productos, sino más bien como procesos en constante
transformación, que responden a la observación y admiración profunda
hacia los párvulos respecto de cómo se relacionan, cómo exploran, cómo
aprenden, cuáles son sus fortalezas, sus gustos y sus formas cotidianas de
ser y estar en la vida.47

LOS CAMBIOS QUE SE ESPERAN EN LA


PRÁCTICA EDUCATIVA
Lo expuesto en este texto pretende dar cuenta de la idea de una educación
parvularia acorde a la realidad actual, en una sociedad que está frente a cambios
muchas veces inesperados y donde, como consecuencia de la globalización, son
acelerados al igual que el conocimiento (y al alcance de un click), lo que conlleva
a no poder anticipar cómo será la sociedad en la que se insertarán como adultos
los niños y niñas que hoy asisten a los jardines infantiles y a otros programas
educativos institucionales.

En ese contexto, se posee la certeza de que la etapa entre los 0 y 6 años es la

Doreen Massey, For Space, Sage, London, 2005.


46

Paula Delaveau y Gloria Herrera, Ambientes físicos de aprendizaje: recreando la cotidianidad para niños y niñas,
47

JUNJI, Santiago, 2017.

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 41


más importante del ser humano, en términos de fortalecer su autoestima, de
aprender a vivir en un clima de respeto y solidaridad, de formar actitudes de
curiosidad, de aprender a pensar y expresar lo que se piensa sin temor a ser
censurado, entre muchos otros aprendizajes.

Una de las educadoras más importantes en la historia de la educación parvularia,


María Montessori, declaraba que "el niño, guiado por un maestro interior, trabaja
infatigablemente con alegría para construir al hombre. Nosotros, educadores,
sólo podemos ayudar (...) Así daremos testimonio del nacimiento del hombre
nuevo”.

La práctica que hoy se espera que se desarrolle en los establecimientos debería


tener como telón de fondo las ideas que aquí se han expuesto, y que van en
la línea del respeto profundo por los niños y niñas. No obstante, los equipos
pedagógicos tienen el deber ético de asumir que la formación humana, como
muy bien lo expresa la académica María Victoria Peralta, “requiere de los
mejores estudios, reflexiones y esfuerzos explícitos de lo que se está definiendo,
implementando y evaluando”.48

Un jardín infantil debería mantener:

• Una práctica constante de tiempos y espacios para escuchar a los niños,


intentando comprender no sólo aquello que hablan sino también aquello que
no dicen y que se devela cuando se les observa con atención permanente;

• Una relación natural entre los niños y entre adultos y niños, lo que implica
que conversen de la misma manera: el lenguaje, en todas sus formas (verbal,
gestual, actitudinal) se aprende en las interacciones y los adultos son
referentes en el modo de expresarse y comunicarse para niños y niñas;

• Ambientes de libertad y respeto para sus creaciones, reflexiones y preguntas;

• Limpieza y sobriedad espacial, acústica y visual: “menos es más”;

María Victoria Peralta, op. cit., p. 254.


48

42 CUADERNOS DE
EDUCACIÓN INICIAL
• Respeto y valoración por los contextos culturales y familiares de cada niño o
niña;

• Una planificación abierta a la posibilidad de cambiar, flexible, lo que no


significa laissez faire, sino muy por el contrario, significa estar atento al
rumbo que va tomando la actividad e interés de los niños con el objeto de ir
apoyando sus aprendizajes y planificando cuidadosamente los materiales y la
disposición con que se ofrecen.

Para los equipos pedagógicos implica:

• Reflexionar permanentemente y que esta reflexión se nutra de las


observaciones y registros que se llevan de los niños y que apunten a
conocer sus pensamientos, ideas, dudas, confusiones, emociones, intereses,
motivaciones;

• Enriquecerse profesionalmente leyendo y releyendo documentos teóricos


y otras experiencias para poder comprender en profundidad los procesos
educativos que se producen en los niños y niñas, lo que implica estudiar,
indagar, preguntarse y preguntar a otros, cuestionarse, comprometerse con
la idea que la educación tiene el objetivo de transformar la realidad;
• Recuperar los sentidos más profundos de la educación parvularia, revisando
las ideas fundantes de los precursores y su trascendencia en las prácticas
pedagógicas actuales;

• Interrogarse sobre los desafíos que implican los contextos sociales y culturales
en los que se inserta el establecimiento y su impacto en los niños y niñas.

CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 43


BIBLIOGRAFÍA
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mirada desde la historia y su actualidad”, Revista Docencia, N° 48, año XVIII,
Santiago, 2012.

Érika Alfageme, Raquel Cantos, Marta Martínez, De la participación al


protagonismo infantil, Edición Plataforma de Organizaciones de Infancia,
Madrid, 2003.

Myrtha H. Chokler, Los organizadores de desarrollo. Un enfoque desde la


neuropsicosociología para la comprensión transdisciplinaria del desarrollo
infantil, Instituto per la Formazione e la Ricerca Applicata (IFRA), Bologna,
2013. Ver: http://www.ifra.it/idee.php?id=11&titolo=Los%20Organizadores%20
del%20Desarrollo&autore=Dra.%20Myrtha%20H.%20Chokler.

Paula Delaveau y Gloria Herrera, Ambientes físicos de aprendizaje: recreando la


cotidianidad para niños y niñas, JUNJI, Santiago, 2017.

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conocimiento”, Revista Iberoamericana de Educación, OEI, N° 35, mayo-agosto
de 2004. Ver: http://rieoei.org/rie35a01.htm.

JUNJI, Bitácora de Supervisión, Departamento Técnico Pedagógico, Ediciones de


la JUNJI, Santiago, 2017.

JUNJI, Cuadernos de Educación Inicial (serie de 11 libros), Departamento Técnico


Pedagógico, Ediciones de la JUNJI, Santiago, (2014 a 2018).

JUNJI, Marco Curricular, Departamento Técnico Pedagógico, Santiago, 2005.

JUNJI, Políticas Regionales de Reconocimienyo y Participación de las Familias,


Departamento Técnico Pedagógico, Ediciones de la JUNJI, Santiago, 2018.

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JUNJI, Política de supervisión, Departamento Técnico Pedagógico, Ediciones de
la JUNI, Santiago, 2015.

JUNJI, Procedimiento para la Asesoría Técnica Educativa en los Programas de


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Pedagógico, Santiago, 2013.

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Departamento Técnico Pedagógico, Ediciones de la JUNJI, Santiago, 2017.

JUNJI, Referente Curricular, Departamento Técnico Pedagógico, Santiago, 2010.

JUNJI, Serie Hojas para el Jardín, Departamento Técnico Pedagógico, Ediciones


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JUNJI, Trayectoria de Aprendizajes de la Niña y el Niño, Departamento Técnico


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Myriam Pilowsky, Apego espacial: la lugaridad en el aprendizaje, Cuadernos de


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CONTRIBUCIÓN DE LA JUNJI A LA EDUCACIÓN PARVULARIA EN CHILE 47


Este libro fue editado por Ediciones de la Junji
y se terminó de imprimir en octubre de 2018
en los talleres de xxxx.

Se utilizó la familia tipográfica Calibri para textos


y títulos. En el interior se utilizó papel bond
ahuesado de 80 grs., impreso a 2 tintas, y para las
tapas, papel kraft de 300 grs. impreso a 4 tintas.

Dirección editorial Marcelo Mendoza


Edición Rosario Ferrer
Diseño Fernando Hermosilla / Macarena Balcells
Producción Pilar Araya

Ediciones de la Junji es fruto del compromiso de la Junta Nacional de Jardines Infantiles por generar
conocimiento, creatividad e innovación en educación e infancia, y promover así nuevos medios para
el aprendizaje y debate constructivo.

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