Aristóteles (Clase I) UCALP
Aristóteles (Clase I) UCALP
Aristóteles (Clase I) UCALP
1.1.1. Como sucede con la gran mayoría de los grandes personajes o pensadores de la
humanidad no pueden ser entendidos sin su contexto vital y biografía. En principio,
para entender a Aristóteles es necesario comprender sus 20 años en la Academia de
Platón. Esto significa que debemos comprender sus primeros escritos desde el
punto de partida filosófico de su maestro, pensamiento que irá criticando con el
paso del tiempo, hasta desarrollar una síntesis auténticamente propia y distinta de lo
aprendido durante sus primeros años.
1.1.5. Los principios y las causas primeras que estudiará la “filosofía primera” (en tiempos
posteriores se le llamó metafísica) son lo más cognoscible para el ser humano, pero
justamente por esa condición, son lo más oscuro para el pensar humano. El
conocimiento racional tiene un valor superior a la acción, ya no es conocer para
obrar, sino principalmente conocer por conocer, como esencia del ser humano y
por lo tanto, su fin, a saber, a lo que este está llamado y es atraído. Por la
racionalidad del alma humana que es tripartita (uni-trinitaria), pero racional en su
parte más elevada, la filosofía en algún punto también goza de un carácter “divino”,
todo lo demás es parloteo o vaniloquio.
1.1.5.1. Notar como esta concepción entre conocimiento (pensar) y acción (voluntad)
ha marcado la historia de la humanidad a lo largo de los años. De hecho, en el
trasfondo del prestigio moderno-contemporáneo de las ciencias exactas por
sobre las sociales, como así también, por sobre las labores técnicas (plomería,
pintor, artista plástico, electricista, operario de fábricas, son salarialmente
desprestigiados en comparación el “científico”), incluso al nivel de sueldos o
prestigio social.
1.1.6.2. Quizás pueda ayudar a pensar la distinción con su maestro, que para Platón las
ideas seguían siendo en algún punto trascendentes a los entes materiales
(exógenas aunque no separadas del ser humano), algo así como una especie de
conocimiento colectivo que nos precede porque nos constituye (estamos
inmersos en una cultura); pero que no es patrimonio de nadie particular ni está
en la cabeza de tal o cual, de forma particular, a menos que alguien lo actualice.
Para Aristóteles, esas ideas se “inmanentizaron”, se hicieron inmanentes a los
entes como sus estructuras formales, como sus esencias que determinan sus
modos de darse (en tanto son su causa formal). En el pensamiento crítico del
último Platón existía cierta “exo-geneidad” (de exógeno) de las ideas a los entes,
mientras que en Aristóteles, lo inmanente es endógeno 100 %, las ideas están
constituyendo a los entes, son su estructura ideal, lo que a su vez, las permite
pensar; y por lo tanto decir que la verdad es lo que es, y decir mentira, decir que
lo que es, no es; o que lo que no es, es.
1.1.6.2.1. Ej. en Platón se podía predicar de tal o cual árbol por una referencia a la
idea árbol (posiblemente en algo que llamaríamos hoy, conocimiento
colectivo [admite los principios de lo uno y la díada del último Platón]-
nadie piensa en qué es un árbol para llamarlo así), y según su participación
en la completitud o parcialidad de esa idea, sería más o menos árbol (mejor
o peor modelo de árbol); mientras que en Aristóteles, cada árbol se
encuentra inherido por la causa formal (la idea árbol) en sí mismo, y esa es
la razón por la que se da a sí mismo a nosotros como árbol, y no como un
perro. En Aristóteles, la idea platónica se interiorizó en cada ente.
1.1.7.2. Se radicó en Artameo donde habitaban dos discípulos muy conocidos de Platón
que asesoraban al jerarca de la zona. En tierras que le habían sido dadas, a ellos
por sus servicios, establecieron diversas Escuelas por la zona (territoriales y en
las islas cercanas).
1.1.7.3. En 343-342 a.C., Filipo de Macedonia lo eligió como tutor de su hijo Alejandro
de 13 años, hasta el 340 a.C. donde él, asume el lugar de su padre.
2.1.1. Si de conocer se trata la vida hay que entender de qué tipo de conocimientos
hablaba Aristóteles, y cómo subdividía el campo del saber. Para él existían: las
ciencias teoréticas (las puramente contemplativas) con prioridad en la filosofía primera,
la física y la matemática; las ciencias prácticas, tales como la ética y la política; y las
ciencias poiéticas, las artes en general. La lógica no se incluye en ninguno de estos
apartado porque más que una ciencia en particular era considerada el instrumento
de pensamiento de todas las ciencia (Reale, p. 42).
2.2.1.1.1.1. Esto ya nos habla de un camino gnoseológico, del camino del pensar lo
real, del camino del conocimiento. Este empieza por los sentidos y culmina
en la razón, empieza en lo físico y culmina en lo metafísico, que en realidad
es lo primero de la realidad, lo que la constituye su mismidad.
2.2.1.3.1. Lo ente en tanto (que) ente // lo que es en tanto que es/está siendo. Para
Parménides el “es” de lo ente (lo común a todos los entes) era uno, idéntico
a sí mismo, en algún punto unívoco. Para Aristóteles hay diversos modos
de ser aunque en algo se relacionan todos esos modos, y por este motivo se
dice que lo ente se predica de muchas maneras (de forma análoga).
2.2.1.3.1.1. Lo ente se dice de muchas maneras pero en relación a algo único (no es un
término unívoco ni equívoco sino análogo). Lo ente se dice con muchos
significados, según diversos modos de ser. Habrá que estudiar luego qué es
lo que diferencia sus modos de ser (el principio de individuación o
determinación) para ser distintos modos de ser.
2.2.1.3.1.3. Lo ente expresa diversos significados pero todos ellos guardan una relación
exacta con un principio o una realidad idéntica. Esto significa que los entes
terminan expresando diversos sentidos o modos de ser ente, pero todas
ellos lo hacen en relación con el principio de unidad de ese ente, su
sustancia u ousía.
2.2.1.3.1.6. Lo ente se puede predicar como ousía y accidente (lo que acabamos de
presentar), como verdadero y falso, o como acto y potencia (cada división
tendrá subdivisiones internas).