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Doctrina Social de La Iglesia

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EXAMEN FINAL DE ANTROPÓLOGÍA TEOLÓGICA

1. LEER EL DOCUMENTO SOBRE LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA 


2. EN GRUPOS DE TRES ESTUDIANTES MÁXIMO, RESPONDER A LAS
PREGUNTAS DE LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA  Y TRADUCIR DEL
INGLÉS AL ESPAÑOL  LAS PREGUNTAS Y RESPONDER EN ESPAÑOL LAS
PREGUNTAS. 
3. SUBIR LAS REPUESTAS DE LA ACTIVIDAD INDIVIDUALMENTE A LA
PLATAFORMA PARA SU RESPECTIVA VALORACIÓN. 
4. TRADUCIR DEL INGLÉS AL ESPAÑOL Y RESPONDER EN ESPAÑOL
PREGUNTAS SOBRE LA DIGNIDAD HUMANA.
5. EVALUAR

DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA


I. REPONDER LAS SIGUIENTES PREGUNTAS

1. ¿QUÉ ES LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA?


2. ¿Qué NO ES LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA?
3. ¿CÓMO SE ELABORA Y APLICA LA DOCTRINA SOCIAL DE LA
IGLESIA?
4. ¿DECRIBA CUÁL ES EL ORIGEN DE LA DOCTRINA SOCIAL DE LA
IGLESIA?
5. ¿CUÁLES SON LAS ENCICLICAS SOCIALLES DE LA DOCTRINA
SOCIAL DE LA IGLESIA?
6. ¿CUÁL ES EL CONTENIDO DE LA DOCTRINA SOCIAL DE LA
IGLESIA?

DESARROLLO
1. ¿QUÉ ES LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA?
Es un patrimonio de enseñanzas que se organizan sistemáticamente: es un cuerpo de
enseñanza elaborada en el seno de la Iglesia, como respuesta histórica a los problemas
económicos y sociales.
2. ¿Qué NO ES LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA?
La DSI cuando también se explicita lo que no es. A veces nos adherimos a corrientes
ideológicas sin una clara comprensión de lo que conlleva cada pensamiento y sin un
claro discernimiento de que el pensamiento cristiano tiene otra dimensión, por eso
conviene explicar la postura de la DSI porque en su aplicación el pensamiento social no
está exento de sucumbir a algunas tentaciones y riesgos.
La DSI no es una doctrina política ni una doctrina económica: La Iglesia no está
para sumir un papel de poder, sino de testimonio y servicio, le urge el anuncio del
Reino de Dios. Por eso no pone soluciones técnicas que son competencia de los estados
o de las instituciones de la sociedad civil, en las cuales si están llamados a participar los
católicos/as.
La DSI no es una ideología o corriente entre el capitalismo y el socialismo: El
socialismo y el capitalismo son igualmente responsables de graves injusticias sociales,
de métodos y consecuencias moralmente rechazables.
La DSI no se puede asimilar al programa de ningún partido político, es esencialmente
teología moral (SRS 41), su cometido es clarificar las implicaciones de los distintos
proyectos políticos y económicos, para que sean conformes a la dignidad de la persona
humana.
La DSI no es un cuerpo de doctrina estática o inmutable. Porque al proponerse
iluminar e interpretar las situaciones históricas cambiantes no puede tener la misma
validez que las afirmaciones dogmáticas. La Iglesia, dijo Pablo VI, no tiene una palabra
única que decir ante los problemas sociales; una misma fe puede llevar a soluciones
concretas distintas.
3. ¿CÓMO SE ELABORA Y APLICA LA DOCTRINA SOCIAL DE LA
IGLESIA?
se elaboran siguiendo la dinámica inductiva del VER - JUZGAR – ACTUAR
Ver se trata de percibir la realidad con sensibilidad, porque se trata de cuestiones que
afectan a la persona, es ver con preocupación la realidad que tiene rostros humanos
imborrables.
Para ver hay que percibir con la inteligencia, es informarse y comprender los
problemas, las situaciones de injusticia, sus causas, los factores que las producen, los
mecanismos y las personas que las reproducen.
Para ver hay que analizar en equipo, organizadamente, con la ayuda de las ciencias
humanas y sociales, desde distintos puntos de vista, una misma realidad social.
Juzgar: es interpretar la realidad y distinguir qué es y qué no es proyecto de Dios sobre
el hombre y el mundo en la vida concreta de las personas, colectividades y pueblos.
Es iluminar y valorar qué conduce a la justicia y a la liberación (gracia) y qué a la
injusticia, opresión y dominación (“desgracia”) Para interpretar la realidad no hay que
acomodarse a valores y tendencias sociológicas que sean mayoritariamente contrarias a
valores evangélicos, pero tampoco hay que ser neutral.
Desde la profesión de fe en Dios Padre Creador de Vida, la coherencia implica
establecer juicios de valor a favor de la vida, por toda vida, y en consecuencia en contra
de todo aquello que viola y destruye los derechos de la persona.
Actuar: es dar vida, dar existencia concreta a las elecciones y decisiones coherentes
con los valores del Reino de Dios, porque la DSI está orientada a la praxis.
Actuar es comprometerse en actuaciones concretas, es trabajar para eliminar las
barreras de desigualdades, las estructuras y los mecanismos de injusticia; es crear
condiciones, grupos, comunidades, movimientos para influir en la transformación de la
sociedad en dirección de la justicia social, la verdad, la libertad y la paz.

4. ¿DECRIBA CUÁL ES EL ORIGEN DE LA DOCTRINA SOCIAL DE LA


IGLESIA?
La enseñanza social de la Iglesia nació del encuentro del mensaje evangélico y de sus
exigencias, comprendidas en el mandamiento supremo del amor a Dios y al prójimo, y
en la justicia, con los problemas que surgen en la vida de la sociedad
La DSI es algo propio de nuestra fe, que se aprende en la misma Historia de la
Salvación: en la interacción de la Palabra de Dios con la realidad humana y la respuesta
de los hombres y mujeres cristianos.
5. ¿CUÁLES SON LAS ENCICLICAS SOCIALLES DE LA DOCTRINA
SOCIAL DE LA IGLESIA?
1ª etapa: De los orígenes hasta la convocatoria del Concilio Vaticano II: Rerum
Novarum (León XIII), Cuadragésimo Anno (Pio XI), La Solemnitá (Pio XII))

2ª etapa: Del CVII a Juan Pablo II (Mater et Magistra (Juan XXIII), Pacem in Terris
(Juan XXIII), Gaudium el Spes (Concilio Vaticano II), Populorum Progressio
(Pablo VI), Octogesima Adveniens (Pablo VI), Iustitia in Mundo (Sínodo de
Obispos 1971))

3ª etapa: el periodo del pontificado de Juan Pablo II marcado por una proliferación
de documentos sociales (Laborem Excersen, Sollicitudo Rei Sociales, Centesimus
Annus)
6. ¿CUÁL ES EL CONTENIDO DE LA DOCTRINA SOCIAL DE LA
IGLESIA?
Contenidos generales: son todos aquellos elementos que poseen un valor permanente y
tienen aplicación necesaria y directa sobre los temas particulares.
Estos contenidos generales se dividen en ‚ Principios generales ‚ Criterios de Juicio ‚
Directrices para la acción
Parte Especial: son todos aquellos elementos organizados en temas particulares.
1. Principios generales de la DSI: Se denominan principios generales a todas aquellas
orientaciones que son universales, permanentes y constantes.

Estos principios, a su vez forman dos grupos: uno formado por los llamados
“principios originarios o de primer grado”, porque expresan realidades
fundamentales y constituyen la base inamovible de la DSI, y otro formado por los
llamados “principios derivados”, porque proceden de los anteriores: la solidaridad,
el bien común, la subsidiariedad, la participación, la vida social y la justicia social

a. Principios generales originarios:


Los principios originarios son cuatro: El principio teológico (CDSI 20-27)
Este principio afirma a Dios como realidad primera y suprema. Dios ha
creado el universo y la persona humana, y él es principio originario con su
acción creadora y providente. De aquí brota el origen divino de la dimensión
social de la persona en todas sus manifestaciones correctas. Dios es la causa
primera, el fundamento último y la finalidad de toda forma social.
Entrar en esta dinámica creyente supone introducirse en la experiencia de
Dios que actúa en la historia. La experiencia religiosa de Dios es a la vez
una experiencia de salvación y liberación. Dios dirige soberanamente la
historia porque la creación es obra de sus manos, su acción histórica es una
acción liberadora que culmina en la plena revelación de Dios como Padre de
todos.

Esta fe en Dios como padre de todos desencadena una corriente de


fraternidad, de ahí que el compromiso por la justicia, la paz, el bien
común…no es mera sociología sino expresión concreta de la fe en Dios.
Crear un mundo de hermanos supone un compromiso serio para el/la
creyente

 El principio cristológico:
Jesucristo, rostro humano de Dios, al entrar en la historia de la humanidad
ha redimido definitivamente a la persona humana. La fe en la primacía de
Cristo nos lleva a la convicción de que todo lo comunitario, y toda la historia
tiene su fundamento y origen en la misión salvífica y liberadora de
Jesucristo.

Él es la revelación plena del padre, y el Reino la expresión de su voluntad.


Jesús y Reino son puntos obligados de referencia en toda mentalidad que
quiera ser cristiana y la proclamación de la Buena Noticia a los pobres, la
liberación de los oprimidos es referencia obligada en la tarea
evangelizadora.

 El principio antropológico:

Afirma la primacía total, de la persona por encima de todo el orden material


y en todas las formas y ámbitos de la convivencia humana. La dignidad de la
persona humana, “creada a imagen de Dios” implica también un uso
responsable de todos los bienes de la creación, y una administración
solidaria de los mismos, para lograr un auténtico humanismo y una justa
convivencia social.

 El principio del derecho natural:

Que afirma la existencia de un orden en la naturaleza, de la ley natural, y de


su origen divino. De este principio se deriva el tema básico del destino
universal de todos los bienes materiales creados para todas las personas y
para todos los pueblos. Estos cuatro principios originarios: DIOS,
JESUCRISTO, PERSONA HUMANA, NATURALEZA,

b. Principios generales derivados


LA PRIMACÍA DE LA PERSONA HUMANA

La dignidad de la persona es el principio sobre el cual se organiza toda la


DSI. Ninguna persona es más digna que otra, y no hay ningún proyecto
político, económico, cultural o social Doctrina Social de la Iglesia 18 válido
si no tiene como base ética común el principio de la dignidad de la persona

Afirmar la primacía de la persona es afirmar que las estructuras sociales y


las instituciones sólo tienen razón de ser en la medida que se orientan a la
promoción y desarrollo integral y solidario de la persona humana. Todos los
bienes de la tierra deben ordenarse en función de la persona humana, centro
y cima de todos bienes

No se trata de la persona en abstracto, sino del hombre y mujer concreto e


histórico: se trata de cada hombre y mujer, porque a cada uno/a le llega el
misterio de la redención y con cada uno/a se ha unido Cristo para siempre.
De ahí se sigue que la Iglesia no puede abandonar a la persona humana, y
que éste es el primer camino que la Iglesia debe recorrer en el cumplimiento
de su misión

Los derechos fundamentales de cada persona no son concesión de los


Estados. Son de cada hombre y mujer en virtud de su dignidad de persona,
son universales, de todos/as. Renunciar a ellos, negarlos o restringirlos
constituyen una violación a la dignidad humana, Los Estados deben
garantizar, promover y defender el conocimiento y ejercicio efectivo de los
derechos de todos los ciudadanos

En toda convivencia humana bien ordenada hay que establecer como


fundamento el principio de que todo hombre y mujer es persona, esto es
naturaleza dotada de inteligencia, de libre albedrío y que por tanto tiene por
sí mismo derechos y deberes que dimanan directamente de su propia
naturaleza. Estos derechos y deberes son por tanto universales e inviolables,
y no pueden renunciarse por ningún concepto

EL PRINCIPIO DE SOLIDARIDAD

La práctica de la solidaridad para con los pobres y de los pobres entre si es la


forma de vencer los mecanismos perversos que mantiene las sociedades
insolidarias. La solidaridad es una virtud personal y social capaz de crear
energías y condiciones para la justicia social, esta virtud es la firme
determinación de cada uno/a de introducir en la organización social, política
y económica la lógica de la solidaridad frente a la lógica del individualismo,
la competitividad, los beneficios de unos pocos a consta de la mayoría.

EL PRINCIPIO DE SUBSIDIARIEDAD

Según el principio de subsidiariedad una estructura social de orden superior


no debe inferir en la vida interna de un grupo social de orden inferior,
privándola de sus competencias, sino que más bien debe sostenerla en caso
de necesidad y ayudarla a coordinar su acción con la de los demás
componentes sociales, con miras al bien común.

DERECHO-DEBER A LA PARTICIPACION DEMOCRATICA

La participación se fundamenta en la igualdad fundamental de todos los


hombres. La democracia es el sistema político que mejor garantiza la
participación económica, política, cultural. Religiosa, recreativa,
legislativa…de todos los ciudadanos. No puede existir verdadera sociedad
que parta sólo de arriba, creada por la imposición o la manipulación de un
Estado, padre o benefactor, que todo lo prevé lo planifica y dirige.

EL BIEN COMUN, LIGADO A LA CUESTION ECOLÓGICA

El bien común es “el conjunto de condiciones de la vida social que hacen


posible a las asociaciones y cada uno de sus miembros el logro más pleno y
más fácil de la propia perfección

LA PRIMACÍA DEL TRABAJO SOBRE LOS BENEFICIOS DEL


CAPITAL

El trabajo de la persona hace que esta sea creadora y legítima consumidora


de los bienes producidos; es intrínsicamente perverso explotar a los
trabajadores/as en beneficio del capital. El trabajo es la clave de la correcta
interpretación del problema social. Los cristianos/as deben ponerse al frente
de la defensa de los derechos de los trabajadores/as y de sus familias: salario
justo, descanso, garantías sociales, seguridad social, empleo digno, etc.

DESTINO UNIVERSAL DE LOS BIENES

Todos los bienes del universo son de todas las personas, porque son creación
y don del Creador y padre común de todos los hombres. El derecho a la
propiedad privada no es un derecho absoluto, está subordinado al destino
universal de los bienes. Cuando se utiliza para concentrar bienes en las
manos de unos pocos/as, crea injusticias y viola el derecho fundamental de
todos los hombres a una vida digna

LA DEFENSA DE LA VIDA

Para que todos tengan vida y vida en abundancia el Padre nos dio a su Hijo,
sin embargo hay estructuras que no son cristianas porque avocan a la
muerte:

Al inicio de la vida: el aborto; el desamparo de menores que conduce a la


mortalidad infantil; la desprotección de la mujer gestante ‚ durante la vida:
el hambre y todo tipo de agresiones a la vida y a la salud ‚ al final de la
vida: el abandono de las personas ancianas; la eutanasia.

LA OPCION PREFERENCIAL POR LOS POBRES


En la protección de los derechos individuales se habrá de mirar
principalmente por los débiles y los pobres. La gente rica, protegida por sus
propios recursos, necesita menos de la tutela pública; la clase humilde, por el
contrario, carente de todo recurso, se confía principalmente al patrocinio del
Estado. Este deberá, por consiguiente, rodear de singulares cuidados y
providencia a los asalariados, que se cuentan entre la muchedumbre
desvalida

LA LUCHA POR LA JUSTICIA


Los cristianos/as no pueden cruzarse de brazos esperando que la justicia
caiga, por encanto, de las manos de Dios. No es una lucha “Contra alguien”
sino a favor de la mayoría de los pobres y sencillos del pueblo. Dios ilumina
y fortalece a quienes se comprometen y dan la cara, a quienes tienen hambre
y sed de justicia.

El EJERCICIO DE LA LIBERTAD Y LA LIBERACION DE LAS


ESTRUCTURAS DE PECADO

La libertad no es algo dado sin más, la libertad se construye y crece. Hay


que superar el concepto individualista de libertad, somos libres cuando las
libertades son compartidas por todos/as. La construcción de la libertad es un
proceso solidario de liberación: liberación del egoísmo sociopolítico,
económico, cultural… Liberación del pecado individual y social y de las
consecuencias del pecado en las personas y las estructuras de la sociedad

LA PAZ FRUTO DE LA JUSTICIA

La paz es la base de la convivencia social y política. Pero la paz de una


sociedad, reconciliada y fraterna, no existe sin justicia. La injusticia es la
gran fuerza destructora de la paz. La paz y la justicia caminan junta
abrazadas.

c. Criterios de juicio
Son las normas, siempre válidas, para juzgar sistemas, estructuras,
instituciones y situaciones sociales concretas. De este juicio se pretende un
discernimiento recto de las situaciones sociales y de las realidades
temporales a la luz del evangelio. Los criterios de juicio nos han de ayudar a
encontrar caminos para transformar las realidades que atentan contra la
persona humana y su dignidad.

Pueden señalarse como principales criterios de juicio:

El conocimiento cierto del objeto o situación social que se pretende


enjuiciar. Para llegar a este conocimiento es preciso tener en cuenta y
conocer la identidad cultural de cada comunidad, pueblo o agrupación social
que es objeto de nuestro estudio o juicio. Instrumento necesario para llegar a
este conocimiento es la capacidad personal de observación objetiva y la
ayuda de las ciencias humanas y sociales.

La capacitación profesional y la experiencia correspondiente para juzgar con


serio conocimiento la materia respectiva: Esta capacitación se requiere
principalmente en los agentes de evangelización o sujetos activos de las
realidades que se tratan.

Formación correcta de la conciencia social a la luz del Evangelio, de los


documentos del magisterio y el cultivo serio de una sensibilidad social
cristiana: La responsabilidad de la formación es de todo cristiano, pero en
este sentido hay una responsabilidad mayor sobre los pastores y
responsables de grupos, familias cristianas y asociaciones que pretenden
estar presentes en el campo de la actuación social.

Vigilancia, cautela e inventiva: con ello lo que se requiere es evitar que en el


proceso de formación de criterios se introduzcan elementos contrarios a la
razón y a la fe, y a la vez creatividad para inventar o abrir nuevas vías de
solución o proyectos nuevos de vida social. Aquí es importante no cerrarse
al apego inmovilista del pasado ni a una ciega pasión por lo nuevo.

d. Directrices para la acción


Son las orientaciones prácticas que nos ayudan a aplicar los principios de
reflexión para vivir la fe en la vida diaria. Al ir encaminadas a determinar las
pautas para la acción, constituyen también el cuerpo de la DSI. Por su
universalidad son aplicables a todos los sectores de la vida en sociedad:

El respeto a la persona: a toda persona sin discriminaciones y sin


reduccionismos deformadores y unilaterales. En cualquier medio o situación.
Este respeto no se limita a adoptar una actitud meramente pasiva inoperante,
sino que incluye un esfuerzo personal diario para promover la total dignidad
del prójimo, sea individuo o colectividad

El ejercicio del dialogo: que debe caracterizarse por el respeto y la


coherencia, la lealtad y el realismo, y ha de darse “intra” y “extra”
eclesialmente. En este diálogo hay que tener la capacidad de captar cuando
sistemas, instituciones e ideologías utilizan un léxico común con el
pensamiento cristiano, pero con términos de significación totalmente
contraria. En el ejercicio de este diálogo debe distinguirse siempre entre el
error y el sujeto que lo profesa. También hay que distinguir los sistemas
ideológicos en su estadio inicial puro y los movimientos históricos nacidos
de estas ideologías que pueden no tener la rigidez de aquellos (MM 205-297;
PT 158-159). El cristiano en todo caso debe saber combinar la dialéctica de
la asimilación de los valores positivos del interlocutor y el rechazo de
aquello contrario a sus principios
La lucha por la justicia: Aquí se trata de la lucha noble y razonada por la
justicia social y la solidaridad, lo que exige una ascética a la luz de la razón
y sobretodo de la fe para superar dos tentaciones: la cobardía y en su polo
opuesto el impulso desordenado

La experiencia de la vida: esta es válida, en todo orden de cosas, cuando es


producto de la vida diaria conscientemente llevada. En el caso de la DSI se
obtiene por dos vías:

La experiencia profesional o el saber práctico adquirido y aquilatado con los


años que una persona logra en una realidad temporal determinada.

La experiencia religiosa, que también es necesidad práctica en la acción


social cristiana

El compromiso cristiano: es una obligación de la persona creyente hacer


presente la fe en el ámbito social y político, lo que implica disponer de ideas
claras y tener en cuenta que la fe no debe eliminar ni reducir la autonomía de
las realidades temporales.

Principios generales, criterios de juicio y directrices para la acción son base


para promover un humanismo integral y solidario. Difundir esta DSI
constituye, por tanto, una prioridad pastoral, para que las personas,
iluminadas por ella, sean capaces reinterpretar la realidad de hoy y de buscar
caminos apropiados para la acción: La enseñanza y difusión de esta doctrina
social forma parte de la misión evangelizadora de la Iglesia

II. TRADUCIR DEL INGLÉS AL ESPAÑOL Y RESPONSER EN ESPAÑOL


LAS SIGUIENTES PREGUNTAS SOBRE LA DIGNIDAD HUMANA
QUESTIONS FOR REFLECTION AND DISCUSSION:
1.) WHAT CHALLENGES AND REALITIES PRESENT IN THE WORLD
TODAY POSE THE MOST SERIOUS THREAT TO HUMAN DIGNITY?

2.) THINK ABOUT THE NEWS STORIES YOU HAVE READ AND/OR
HEARD ABOUT OVER THE LAST WEEK OR TWO. BASED ON THESE
NEWS STORIES, WHAT THREATS CAN YOU IDENTIFY THAT POSE
SERIOUS HARM TO THE DIGNITY OF HUMAN PERSONS. WERE THE
EVENTS ON THE LOCAL, NATIONAL OR GLOBAL LEVEL?

3.) WHY IS HUMAN DIGNITY SUCH A CENTRAL PRINCIPLE UPON


WHICH ALL THE OTHER SOCIAL PRINCIPLES DEPEND? WHAT IS ITS
IMPORTANCE FOR BUILDING UP THE COMMUNITY OF FAITH?

4.) WHY IS HUMAN DIGNITY SUCH A CENTRAL PRINCIPLE UPON


WHICH ALL THE OTHER SOCIAL PRINCIPLES DEPEND? WHAT IS ITS
IMPORTANCE FOR BUILDING UP THE COMMUNITY OF FAITH?

DEVELOP
PREGUNTAS PARA REFLEXIÓN Y DISCUSIÓN:
1. ¿qué desafíos y realidades presentes en el mundo hoy presentan la amenaza más grave a
la dignidad humana?

2. piense en las historias de noticias que ha leído y / o escuchado sobre la última semana o
dos. basados en estas historias de noticias, qué amenazas puedes identificar que
posicionan un daño grave a la dignidad de las personas humanas. ¿fueron los eventos a
nivel local, nacional o global?

3. ¿por qué la dignidad humana es tan principio central del que dependen los otros
principios sociales? ¿cuál es su importancia para construir la comunidad de fe?

4. ¿por qué la dignidad humana es un principio central del que dependen los otros
principios sociales? ¿cuál es su importancia para construir la comunidad de fe?

DESARROLLO
1. Toda amenaza a la dignidad humana y a la vida del hombre repercute en el corazón
mismo de la iglesia, afecta la fe. Unas de las más graves amenazas contra la
dignidad humana y que se opone a la vida son :
a. Los homicidios de cualquier género
b. El aborto
c. La eutanasia
d. El suicidio
Lo que viola la dignidad humana: las mutilaciones, las torturas corporales y mentales
Lo que ofende la dignidad humana: las condiciones infrahumanas vida , los
encarcelamientos, la prostitución
2. En la actualidad y durante más que nada esta pandemia COVID2109, nos hemos
dado cuenta como la dignidad humana de los prestadores de salud como: médicos,
enfermeros, etc, se ve afectada por la misma gente de la comunidad pisoteándolos a
tal grado que les hagan discriminación, cuando en realidad se debería estar
agradecidos con ellos quienes son los que más exponen sus vidas por salvar la de
otros, esto no solo se ha visto a nivel nacional , si no global, donde la ignoracia de
una persona prevalece más que el agradecimiento

La magnitud y la gravedad de la pandemia del COVID-19 claramente asciende al


nivel de una amenaza a la salud pública que podría justificar restricciones a ciertos
derechos, como los que resultan de la imposición de la cuarentena o el aislamiento y
que limitan la libertad de movimiento. Al mismo tiempo, una cuidadosa atención a
derechos humanos como la no discriminación y principios de los derechos humanos
como la transparencia y el respeto a la dignidad humana, puede fomentar una
respuesta efectiva en medio de la agitación y los trastornos que inevitablemente
resultan en tiempos de crisis, así como limitar los daños que puedan provenir de la
imposición de medidas demasiado generales que no cumplen con los criterios
anteriores.

3. La dignidad humana es el principio central de otros principios sociales debido a que


si cada uno tiene valor de su dignidad propia, de su esencia y de su ser de cierto
modo va a tener que respetar y valorar la dignidad humana del prójimo, por ende es
el principio central de otros principios partiendo en si del valor como tal a la vida

La fe puesta en Dios permite al ser humano establecer con él una relación sana que
nos proporciona tranquilidad, confianza y seguridad. Esa fe en él nos hace vencer el
temor que nos produce ver tantos acontecimientos negativos que suceden a diario en
el mundo en que vivimos.

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