Libro Neg Col III PDF
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Coordinador general
Mario L. Gambacorta
Colaboradores
Lic. Guido Arocco, Dr. Leandro Terny, Lic. Magalí Troya, Teresa Güemes
Luciana Laveglia, Marianela Martino, Ximena Guadalupe Merlo Ávila
Secretaria de Trabajo
Noemí Rial
Prólogo .................................................................................................................................................................................................................................. 9
Presentación ............................................................................................................................................................................................................. 17
Introducción . ............................................................................................................................................................................................................ 19
Programa ........................................................................................................................................................................................................................ 23
Anexo Normativo
Capítulo II. El convenio colectivo de trabajo como vía de promoción de la salud y el desarrollo
humano
n Convenio 155 OIT sobre la seguridad y salud de los trabajadores .................................................................. 121
n Ley 24.455 Prestaciones obligatorias que deberán incorporar
aquellas recipiendarias del fondo de redistribución de la Ley N°23.661................................................ 132
n Ley 24.788 - Ley Nacional de Lucha contra el Alcoholismo . ....................................................................................... 134
n Ley Nº26.687 - Regulación de la publicidad, promoción y consumo
de los productos elaborados con tabaco ................................................................................................................................................. 138
Capítulo IV. Desafíos del sindicalismo frente a las relaciones laborales del siglo XXI: el papel
de los jóvenes
n Declaración del Consejo Sindical de Asesoramiento (COSATE)
y la Confederación Sindical de Trabajadores/as de las Américas (CSA)
sobre la Juventud. 1 de Junio de 2008 ......................................................................................................................................................... 201
n Declaración León-Guanajuato de la Juventud Sindicalista
de las Américas-CSA ante la Conferencia Mundial de la Juventud.
26 de Agosto de 2010 ............................................................................................................................................................................................................. 206
La promoción del diálogo social en todos los niveles es uno de los principales
objetivos de la gestión del MTEySS. En materia laboral esto implica profundizar
el alcance de la negociación colectiva tanto en las instancias de coordinación de
políticas públicas como en las vinculadas con la representación en el lugar de
trabajo. La activación del diálogo social en empresas privadas y organismos pú-
blicos significa recrearlo en la base de las organizaciones, allí donde representan-
tes sindicales, nucleados en cuerpos de delegados y comisiones internas, esta-
blecen ámbitos de negociación con gerencias y administraciones de personal.
Esta extensión “hacia abajo” del diálogo social resulta clave, en primera ins-
tancia, como un medio de ampliar y profundizar los contenidos de la nego-
ciación colectiva. Mientras que tradicionalmente la función de los delegados
sindicales consistía básicamente en “velar” por el cumplimiento en los lugares
de trabajo de las normas del convenio definidas en el nivel de rama o activi-
dad, la articulación de la negociación colectiva en la base posibilita en cambio
multiplicar los temas de negociación.
En tercera instancia, y tal vez esto sea lo más importante, la extensión hacia abajo del diálogo
social posibilita transferir al ámbito productivo la regla democrática que preside la vida social
y política externa al trabajo, es decir, posibilita resolver aquella contradicción que Karl Polanyi
percibía a mediados del siglo pasado como un dilema de de los capitalismos avanzados que
persistían en sostener una regla despótica en las empresas.
El convenio colectivo de trabajo concebido como una vía de promoción de la salud y el desa-
rrollo humano constituye un enfoque radicalmente diferente del que llegó a prevalecer en los
’90, cuando la discusión sobre los seguros de riesgo colocaba el foco en la “tarifación” de los
daños sufridos por los trabajadores. Actualmente concebimos la salud como un bien público
y asumimos su promoción como un proceso político y social, es decir, dirigido a fortalecer las
capacidades de las personas y capacitar individuos y comunidades para aumentar su control
sobre los determinantes de la salud, introduciendo cambios positivos en los hábitos de salud,
modificando las condiciones sociales, económicas y ambientales, favoreciendo la salud públi-
ca e individual, lo cual ayuda a reducir la mortalidad y morbilidad.
La informalidad laboral constituye para los trabajadores un problema. Significa que no tie-
nen garantizados un conjunto de derechos vinculados con su vida cotidiana presente, no dis-
pondrán de sus ingresos vinculados con su futuro inmediato o mediatos, verán afectada su
estabilidad laboral, contarán con menos probabilidades de integrarse en acciones colectivas
sindicales, de beneficiarse con la cobertura de un convenio colectivo, etc. Para los empresarios
también la informalidad laboral es hoy un problema, y un llamado de atención: porque se ex-
ponen al riesgo de ser penalizados por violar la ley y, además, en última instancia, la elusión de
aportes y contribuciones a la seguridad social está reflejando los límites de su competitividad,
la imposibilidad para sostenerse en su mercado. La ganancia que puedan obtener en el corto
plazo no sirve más que para disimular el techo efectivo de su actividad: su empresa no es sus-
tentable. Para el Estado también la informalidad es un problema, porque erosiona su capaci-
dad para proveer bienes colectivos, seguridad y certidumbre sobre el futuro a los ciudadanos.
La informalidad laboral afecta a la sociedad toda.
La fuerte recuperación del empleo ocurrida en la Argentina desde el año 2003 ha involucrado
la incorporación de millones de nuevos jóvenes trabajadores en las empresas. Esta amplia-
ción y renovación de los planteles laborales no deja de ser auspiciosa. Tanto más cuanto re-
cordamos aún la preocupación creciente ante la persistencia del desempleo y la precarización
heredadas del régimen sociolaboral de los ´90, que hubiera condenado prácticamente a toda
una generación a una desconexión de la antigua cultura del trabajo prevaleciente en Argen-
tina1. Aunque este riesgo de discontinuidad cultural haya sido hoy finalmente conjurado, no
puede dejar de advertirse los enormes esfuerzos de socialización que deben realizar las em-
presas y los sindicatos tanto para canalizar como para adaptarse a estos procesos de cambio
generacional, producto de la reversión de las tendencias previas de empleo.
A estas tensiones endógenas de las organizaciones empresarias y sindicales, cabe agregar las
provenientes de problemas sociales no resueltos derivados de las transformaciones de la estruc-
tura familiar, las dificultades de acceso a la vivienda, etc., que se superponen con las que provie-
nen del plano productivo, como la fuerte rotación laboral que caracteriza el funcionamiento del
mercado de trabajo y las también fuertes oscilaciones del ciclo económico. Algunos de los pro-
blemas emergentes se vinculan con una demanda laboral creciente que por un lado incorpora al
mundo del trabajo a jóvenes insuficientemente capacitados, lo cual afecta a las empresas, y por
otro bloquea la terminalidad educativa para esos mismos jóvenes, lo cual afecta a la sociedad.
Los problemas expuestos afectan particularmente a los jóvenes que aparecen como una ca-
tegoría social vulnerable, un sujeto de las políticas sociales, lo que suscita la necesidad de
1. En aquellos años esto era como sumar a los jóvenes a una lista creciente de “condenados” entre quienes figuraban en primer lugar los que no podrían jubi-
larse o no podrían acceder a la jubilación privada, con respecto a quienes se había extendido el juico poco consolador vinculado con una supuesta “necesidad
de sacrificar una generación”.
El desarrollo económico de la Argentina no podría ser concebido hoy sin considerar la pro-
gresiva integración económica regional, que abarca ya importantes actividades industriales.
En esta perspectiva los actores de la negociación colectiva van dejando de constituir espacios
de decisión exclusivamente endógenos o moleculares y deben tener cada vez más en cuenta
planes productivos de empresas y condiciones de empleo que trascienden nuestras fronteras.
Lo que es aún más importante, esta realidad se impone a los actores de modo tal que éstos
se ven orientados a buscar o generar canales a través de los cuales incidir en la configuración
de normas -reglas y regulaciones- que cada vez más se constituyen como producto de una
negociación colectiva supranacional.
En relación con el primer escenario de negociación se describen los Acuerdos Marco Interna-
cionales de Empresa (AMI), una estrategia planteada por las federaciones sindicales interna-
cionales para concertar acuerdos con empresas multinacionales en torno a i) un núcleo de
derechos básicos vinculados con los convenios de la OIT sobre libertad de asociación, derecho
a la sindicalización y la negociación colectiva, igualdad y no discriminación, trabajo forzoso y
trabajo infantil; ii) condiciones de trabajo, por lo general vinculadas con la situación y legisla-
ciones nacionales sobre empleo, salarios y jornada de trabajo; iii) normas de seguridad e higie-
ne, capacitación y formación profesional, reestructuración productiva. Este tipo de acuerdos
está encuadrado en principios de adhesión voluntaria por parte de la empresa multinacional
de cara a los sindicatos que operan a lo largo de su red de filiales. Precisamente, la incorpora-
ción de estos acuerdos marco en la negociación colectiva posibilita abrir la posibilidad de los
sindicatos para exigir su aplicación local, a la vez que la integración en la red multinacional
abre la posibilidad de institucionalizar el diálogo social en el nivel internacional.
Carlos A. Tomada
Ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social
No son pocos los especialistas de las relaciones laborales que, aun reconociendo los avances,
suelen referirse a los “déficit” o los “límites” de la negociación colectiva al analizar las materias
que se han regulado en estos últimos años. En realidad, estos límites pueden leerse también
como la voluntad que las partes expresaron al momento de negociar y acordar. En definitiva,
los propietarios de la negociación colectiva son los actores sociales. Ellos deciden y en buena
hora que así suceda. El Estado, en todo caso, brinda un espacio, un marco institucional, tal vez
un impulso, que no es poco.
Este volumen de alguna manera cierra una etapa y, tal vez, al mismo tiempo abre una nueva.
Cierra la etapa de la recuperación y el fortalecimiento de la negociación colectiva y segura-
mente inaugure un nuevo período en el cual los protagonistas del mundo del trabajo encaren
una negociación colectiva más enriquecida, más amplia, más creativa, más ambiciosa.
Noemí Rial
Secretaria de Trabajo
En el mundo del trabajo el diálogo social adopta diversas formas, pero tiene
especial relevancia el que se expresa en la negociación colectiva.
De allí que la actividad desplegada en cada una de esas reuniones, las opiniones y discusiones
vertidas en el desarrollo de las mismas, y los ensayos formulados en cláusulas tipo para normati-
vizar cada uno de los temas propuestos, han sido volcados en los distintos volúmenes que con-
forman la “Colección sobre Negociación Colectiva y Diálogo Social” que edita la cartera laboral.
Es entonces en esta ocasión que presentamos el Volumen III de “Nuevos Contenidos de la Nego-
ciación Colectiva”, donde se tratan otros seis nuevos temas propuestos a la evaluación y adapta-
ción a las particularidades sectoriales por los actores del mundo del trabajo, respecto de los cua-
les creemos oportuno destacar la utilidad comprobada de la difusión de este tipo de material.
Los libros de esta colección son de distribución gratuita y han tenido una demanda notable del
público en general en ámbitos tales como la Feria del Libro, en las actividades vinculadas a los
festejos por el Bicentenario y en Tecnópolis. Pero también y fundamentalmente han sido obje-
to de una enorme demanda por parte del público sectorial, de sus destinatarios naturales, los
Estamos convencidos de que la divulgación de los consensos pero también de los disensos en
materia de administración de los conflictos y de la negociación como medio para superarlos,
contribuye a la cultura del diálogo social. Que este diálogo encuentra en la concertación colec-
tiva un campo fértil para fortalecer el sistema de relaciones laborales. Pero que es indispensable
recrear constantemente las alternativas que ofrece la discusión paritaria, como modo de am-
pliar las posibilidades de regulación propias de la autonomía colectiva.
Estimamos que este tercer volumen se inscribe en la mejor tradición de los aportes mancomu-
nados de todos quienes representan y se encuentran representados en la negociación, en tanto
que este libro -como también ocurriera con los dos volúmenes anteriores- consiste en una obra
colectiva fruto de las distintas miradas y perspectivas de los que participaron de la actividad
convocada en el año 2010 por la Subsecretaría de Relaciones Laborales.
Cabe esperar, entonces, que las reflexiones, debates y propuestas contenidos en esta obra reci-
ban similar reconocimiento y presten análogos servicios que los registrados en las que lo pre-
cedieran.
Alvaro D. Ruiz
Subsecretario de Relaciones Laborales
Programa
21 de octubre
Acto de Apertura
Dr. Carlos A. Tomada, ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social.
28 de octubre
Módulo IV. Desafíos del sindicalismo frente a las relaciones laborales del siglo XXI: el papel
de los jóvenes
Expositores:
Lic. Mónica Sladogna, Dirección Nacional de Orientación y Formación Profesional, Departamen-
to de Fortalecimiento Institucional del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social
Lic. Ignacio Politzer, asesor de la Subsecretaría de Relaciones Laborales del Ministerio de Trabajo,
Empleo y Seguridad Social
Acto de cierre
Dra. Noemí Rial, secretaria de Trabajo del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social
Dr. Alvaro D. Ruiz, subsecretario de Relaciones Laborales del Ministerio de Trabajo, Empleo y Se-
guridad Social
Organizacion PARTICIPANTES
1. DESARROLLO DE LA TEMATICA
1. Trajtemberg, D.; Medwid, B. y Senén González, C. (2010) Los determinantes de la negociación colectiva en la Argentina. Debates
teóricos y evidencias empíricas. Trabajo, Ocupación y Empleo - Una mirada a sectores económicos desde las relaciones laborales
y la innovación, Serie Estudios Nº9. MTEySS, Bs. As.
2. Idem anterior.
Es decir que las partes negociantes pueden establecer, por convenio colectivo de trabajo, el ni-
vel de negociación en el que se permita un régimen de articulación, lo que significa reconocer
entonces lo existencia de otras unidades, las que a su vez deben ajustarse a ciertas pautas.
La articulación podría ser entonces un beneficio que facilitaría una mejor adecuación de lo
acordado respecto de las distintas situaciones que se plantearían, aun dentro de una misma
actividad económica y empresas.
3. Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social; Subsecretaría de Programación Técnica y Estudios Laborales (2011). Comportamiento de la Negociación
Colectiva durante 2010. MTEySS, Bs. As.
Sin embargo, no podemos dejar de desconocer que esta modalidad de negociación articulada
no ha sido llevada a la práctica habitualmente, ya que nuestra experiencia, avalada también
por nuestros registros, nos lleva a concluir que los agentes negociales han estado celebrando,
en su gran mayoría, convenios colectivos de trabajo autónomos, sin proponer en ellos cláusu-
las que fomenten la articulación.
Es por ello que entendemos que la propuesta de este taller consiste entonces en dar a conocer
las ventajas que este tipo de negociación tiene, y estimular a los actores sociales a que, dentro
del ejercicio de su autonomía colectiva, utilicen esta herramienta que la legislación actual hoy
sugiere, proponiendo para ello diversos modelos de cláusulas y su posible implementación en
los futuros convenios colectivos de trabajo.
Esta articulación se encuentra regulada en la Ley Nº14.250 (t.o. 2004) en su artículo 18º que
prevé: “…Los convenios colectivos de ámbito mayor podrán establecer formas de articulación
Dichos convenios podrán determinar sus materias y hacer remisión expresa de las materias a ne-
gociar en los convenios de ámbito menor.
Los convenios de ámbito menor, en caso de existir un convenio de ámbito mayor que los com-
prenda, podrán considerar: a) Materias delegadas por el convenio de ámbito mayor, b) Materias
no tratadas por el de ámbito mayor, c) Materias propias de la organización de la empresa, y d)
Condiciones más favorables al trabajador…”.
Entonces, según el precepto legal ut supra descripto, los convenios colectivos de trabajo de
ámbito mayor podrán establecer mecanismos de articulación entre los distintos niveles de ne-
gociación, los cuales direccionan, de alguna manera, el contenido de los convenios de ámbito
menor ya sea por delegación, por omisión o bien regulando materias propias que hacen a la
organización específica de cada empresa, según la actividad que ésta desarrolle.
Creemos que la norma ha delimitado expresamente con su redacción las distintas alternativas
al momento de articular, en sus incisos a), b), c) y d), con el único propósito de intentar abarcar
las variadas alternativas que podrían presentarse al momento de negociar.
Ello debido a que la negociación colectiva es una de las herramientas más importantes que
poseen los actores sociales por la incidencia que ésta tiene en la determinación y regulación
ya sea de las condiciones de vida y del trabajo como en la fijación de condiciones salariales.
Es por ello que se observa de la lectura de este artículo, en virtud de la diversidad que la nego-
ciación puede tener, que no se ha creado un sistema improvisado; sino que la regulación pro-
puesta muestra la intención de proteger y tutelar los derechos de los trabajadores, también a
través de la articulación.
Observamos al respecto que la norma aludida hace expresa referencia a convenios colectivos
de ámbito mayor, lo que estaría indicando con certeza que esta articulación convencional que
hoy se propone se estructura sobre la base de una centralización negocial, permitiendo a su
vez que actúen otras unidades de negociación de niveles inferiores, pero ajustándose a las
directivas de ese convenio mayor, y propiciando una mejora en las condiciones de trabajo en
las unidades negociales de ámbito menor. Creando, de esta manera, un sistema de articulación
Sin embargo, esta articulación se va a implementar siempre y cuando sean los mismos sujetos
negociadores, dentro de su autonomía colectiva, los que decidan introducirla al momento de
suscripción de un acuerdo convencional.
2. CONCLUSIONES
Para ello fueron elaborados diferentes modelos de cláusulas, con la única finalidad de que los
participantes pudieran ver cómo la letra de la norma puede ser implementada en un modo
práctico.
De acuerdo con este objetivo, nuestras propuestas se vieron orientadas hacia la mejor coordi-
nación y articulación entre los distintos ámbitos, intentando diferenciar los contenidos o ma-
teria a tratar en cada uno de ellos. No obstante, se observó en un primer momento del debate
cierta resistencia a la implementación de esta modalidad.
Entendían, por el contrario, que era más viable proyectar la elaboración de un convenio de ac-
tividad, el que podría contener algunas cláusulas que podrían articularse en un futuro conve-
nio colectivo de trabajo de ámbito menor; que limitar la negociación de un convenio inferior
a lo pautado y condicionado en uno mayor.
Es por ello que, en esa línea de pensamiento, se tornaba aún mas difícil imaginarse una articu-
lación en esos términos, ya que es cierto que en una discusión salarial a nivel empresa podría
resultar más práctico no tener condicionamiento alguno, incluso cuando se tenga como base
los salarios acordados en la actividad.
A su vez, el mayor obstáculo, según los aportes de por lo menos la gran mayoría de los parti-
cipantes, era que las condiciones que el convenio de ámbito mayor podría llegar a marcar al
momento de negociar un convenio de ámbito menor, más que una ventaja, terminaba siendo
una desventaja a la hora de negociar.
Pero la verdadera finalidad de este módulo del taller y el mayor propósito que nos planteamos,
a pesar de estos aportes, fue impulsar la aplicación de esta norma, que al día de hoy se en-
cuentra prácticamente en desuso, porque confiamos y creemos que es una herramienta que
llevada a la práctica y bien utilizada puede traer logros y efectos muy positivos y satisfactorios;
permitiendo un mayor enriquecimiento y desarrollo del sistema de negociación colectiva me-
diante la coordinación y articulación de convenios de distintos ámbitos.
No obstante ello, podemos citar a modo de ejemplo y con un resultado óptimo, el convenio
colectivo de trabajo Nº312/99, referido a la industria del vidrio y ramas afines.
A través de su artículo 72º, se estableció que cuando la parte empresaria lo estime necesario y
conveniente, podría presentar a consideración de los trabajadores nuevos sistemas remunera-
torios o de premios según la base de los que ya existen en el convenio colectivo de trabajo de
la actividad, logrando así la participación de los trabajadores en la economía de la empresa.
Asimismo, la escala de premios que se establezca para una sección del establecimiento no
obliga al empleador a tener que hacerlo en otras y, a su vez, los trabajadores pueden presentar
distintos proyectos a consideración de los empleadores que impliquen incrementar los pre-
mios que perciben.
Estos opinaron, en su gran mayoría, que finalmente esta herramienta que se proponía y que
está regulada en la legislación actual, de ser bien utilizada, podría tomarse como una de las po-
sibles alternativas a la hora de negociar, haciendo hincapié en que éstas sólo podrían llevarse
a cabo con la participación del sindicato con personería gremial.
Coincidieron en que la negociación colectiva se enfrenta a la necesidad de dar respuestas a las rea-
lidades y fórmulas empresariales complejas, y remarcaron con énfasis, una vez más, que siempre la
negociación, aun cuando se tratare de acuerdos internos, debe quedar en cabeza de la organización
sindical con personería gremial quien, a su vez y de creerlo conveniente, podría también delegarla.
A su vez, reconocieron como una prerrogativa que la entidad gremial pudiera conseguir, en
ese ámbito de nivel inferior, la posibilidad de corregir desfasajes, según pautas marcadas en el
convenio ámbito mayor y de acuerdo a lo que cada empresa, establecimiento o sector necesi-
tara, teniendo en cuenta la economía y organización de la misma.
En otro orden de ideas y en lo que respecta a las opiniones vertidas por empresarios, éstos
sostenían que una negociación articulada ayudaría a cada empresa, dentro de lo que hace a
su sistema organizativo y económico, a poder alcanzar acuerdos colectivos más ajustados a su
propio contexto, teniendo en cuenta las nuevas actividades económicas que desarrollan.
Coincidieron en que esta articulación puede permitir así una mejor regulación de los derechos
de los trabajadores y una extensa cobertura de sectores dentro del establecimiento para obte-
ner ciertas mejoras, en función de mayor productividad, siendo esta negociación por estable-
cimiento una mejor alternativa al momento de acordar.
Al mismo tiempo se señaló que para alcanzar una negociación de un nivel inferior el aporte de
datos brindados por el sector empresario es necesario a la hora de negociar. Se debería brin-
dar toda la información necesaria, previa y adecuada, dado que un convenio inferior requiere
algo más que el simple proceso de negociación y posterior firma; exige de esos datos para
poder asegurar la implementación del mismo en la práctica y su posterior control, así como
también lo estipulado por la Ley Nº23.546 en su artículo 4º inc. b).
En ese sentido las características de una negociación articulada reafirman la propuesta de este
taller en cuanto a que podrían lograrse acuerdos o convenios colectivos de trabajo más espe-
cíficos y especiales según las pretensiones de cada empresa y/o establecimiento, que siempre
permitan un avance de las condiciones de trabajo y los salarios en los niveles inferiores de
negociación.
No obstante ello, esto sólo podrá alcanzarse siempre que exista voluntad y convicción por
parte de los agentes negociales de tomar este instrumento como alternativa para conseguir
una negociación adaptada según las necesidades de cada parte.
Asimismo pensamos que con la articulación de los convenios menores con sus convenios de
ámbito nacional, siempre marcando la competencia reservada a los de ámbito superior y de-
finiendo lo que queda reservado expresamente por la norma al ámbito inferior, se logrará que
esta última pueda obtener cláusulas acordes a su propia realidad socioeconómica, tecnológi-
ca y organizacional y que resulten más beneficiosas para los trabajadores.
Finalmente sostenemos que a futuro, en la medida en que los miembros negociadores puedan
abrirse a nuevas prácticas, adaptándose a las alternativas que esta norma propone, se logrará
un sistema negociación colectiva que resuelva situaciones más específicas y más ampliadas;
lo que permitirá a su vez atender a nuevas problemáticas que hoy quizás, al ser resueltas de
una manera más generalizada, pierden el verdadero valor y la finalidad que tiene un convenio
colectivo de trabajo que es resguardar los derechos de los trabajadores.
Art.**. Los empresarios del sector podrán proponer a la asociación sindical con personería gre-
mial nuevos sistemas remuneratorios o de premios en vista a habilitar su articulación con el pre-
sente convenio con la finalidad de…
Art.**. Se habilita la celebración de acuerdos de fábrica para el personal que integre cada una
de las secciones del establecimiento, los que deberán ser celebrados con la asociación sindical
firmante del presente convenio y con la participación del cuerpo de delegados de personal.
Las escalas de premios y modificaciones en los componentes salariales que se fijen serán de apli-
cación para cada sección del establecimiento por la que se acordó y no obliga al empleador a
proyectarla a las restantes.
Art.**. Las partes firmantes del presente convenio podrán acordar, como alternativa de negocia-
ción la posibilidad de celebrar acuerdos salariales y/o modificaciones a las condiciones de trabajo
establecidas a nivel general, según cada sector y/o establecimiento dentro de la empresa cuando
lo crean necesario.
Estos acuerdos -de sector o por establecimiento- prevalecerán sobre cualquier otro, siempre que
sean más favorables para los trabajadores y aplicando como sistema de interpretación el conglo-
bamiento por instituciones.
En caso de que el Convenio Colectivo de Trabajo de nivel particular sea suscripto por una empresa
o grupo de empresas, deberá ser comunicada a la representación empleadora del sector signata-
ria del presente Convenio Colectivo de Trabajo de actividad y remitirle copia del acuerdo al que se
arribe.
Negociar sobre:
n Materias delegadas.
n Materias no tratadas.
n Materias propias de la organización de la empresa.
n Condiciones más favorables al trabajador.
Art.**. Las partes firmantes del presente convenio podrán acordar, como
alternativa de negociación la posibilidad de celebrar acuerdos salariales
y/o modificaciones a las condiciones de trabajo establecidas a nivel
general, según cada sector y/o establecimiento dentro de la empresa
cuando lo crean necesario.
1. DESARROLLO DE LA TEMATICA
En el mundo del trabajo y dentro del marco de la seguridad social, la salud y el desarrollo hu-
mano -concepto este último que, según el profesor Manfred Mad Neefi, “no se explica, sólo se
constata y va siempre hacia adelante”- constituyen ítems de un proceso que permite elevar
la calidad de vida, favorecer la protección y la transformación del entorno y medio ambiente
laboral centrando de este modo su enfoque en las necesidades de los trabajadores y las tra-
bajadoras.
La falta de actividad física agravada por otros hábitos nocivos del estilo de vida contem-
poráneo (sobrealimentación, adicciones, estrés, etc.) ha desatado una nueva situación epi-
demiológica en la cual se registra un marcado predominio de las enfermedades crónicas
y los problemas degenerativos. La inactividad física se asocia a un deterioro estructural y
funcional del organismo que se traduce en la aparición de diversas enfermedades, las cuales
Las ENT representan el 60% de todas las causas de muerte en la Región de las Américas, y
estas muertes afectan en igual número a hombres y mujeres. Esta amenaza creciente consti-
tuye una causa subestimada de pobreza y dificulta el desarrollo económico de muchos países
(OMS, 2005). Son causadas por factores de riesgos comunes y modificables. Entre ellos desta-
can: la alimentación poco sana, la inactividad física y el consumo de tabaco.
No obstante, el trabajo también puede causar diferentes daños a la salud de tipo psíquico,
físico o emocional, según sean las condiciones sociales y materiales donde se realice.
Desde la Psicología Laboral se propone generar espacios de intersección entre el ámbito del
psicólogo laboral, experto de la realidad de las organizaciones, y los conocimientos del profe-
sional de la actividad física, quien posee las herramientas para asesorar en el mejoramiento de
la forma física y en el desarrollo de programas cuyos objetivos principales sean la obtención
de beneficios físicos y psicológicos por parte de las personas implicadas. En este contexto las
organizaciones constituyen un lugar significativo para el desarrollo de una vida más saludable.
Abordando la temática de la actividad física, ocio y tiempo libre, según la revista MAPFRE Se-
guridad, publicada en 1984, “la mejora de la condición o forma física de los trabajadores es un
concepto que ha ido ganando aceptación durante los últimos años en los países industriales más
avanzados. El desarrollo por parte de pequeñas y grandes empresas en Europa, Estados Unidos, Ca-
nadá y Japón de programas dirigidos a mejorar la forma física y el estilo de vida de sus empleados
no se ha hecho por simples razones humanitarias, sino que los estudios de costo-beneficio realiza-
dos demuestran su buena rentabilidad, lo que justifica desde el plano empresarial su existencia”.
Es sabido que en períodos de relativa estabilidad social, las empresas de los países occidenta-
les pierden más horas de trabajo, y por lo tanto más dinero, por el ausentismo que por huelgas
y cierres patronales. Además, el cambio de empleo de directivos y ejecutivos es muchas veces
una experiencia muy costosa con la que se enfrentan muchas compañías. Es así como la satis-
facción en el trabajo se percibe como un elemento crítico de la permanencia del trabajador
en su puesto de trabajo, “el mejor predictor de la permanencia es la satisfacción en el trabajo”
(revista MAPFRE Seguridad, 1984).
En la misma línea, García Ferrando señala que “en los últimos años han ido apareciendo progra-
mas que pretenden mejorar la salud física y mental de los trabajadores, y su estado de bienestar,
con el convencimiento de que todo aquello conduce a una mayor productividad, a una reducción
Existe amplio reconocimiento de los efectos beneficiosos producidos por la actividad física
regular y el ejercicio, tanto desde el punto de vista físico como psicológico.
Prevención
Tratamiento
Las distintas ideas expuestas hasta aquí sugieren una relación positiva entre el ejercicio físico
y el bienestar psicológico. Se han propuesto varias hipótesis, tanto psicológicas como fisioló-
gicas, para explicar cómo funcionan los ejercicios físicos sobre el bienestar (Weinberg & Gould,
1996), tales como la hipótesis de la distracción, que entiende que es la distracción de eventos
estresantes, más que la propia actividad, lo que explica la mejora de sensaciones relacionadas
con el ejercicio físico; o la hipótesis de las endorfinas, la cual provee la explicación de base fi-
siológica más popular sobre las ventajas derivadas del ejercicio físico. No todos los estudios la
respaldan, pero el peso de la evidencia parece defendible. El cerebro, la hipófisis y otros tejidos
producen diversas endorfinas que pueden reducir la sensación de dolor y producir un estado
de euforia. Parece probable que la mejora en el bienestar que sigue al ejercicio físico se deba a
una combinación de mecanismos psicológicos y fisiológicos.
Desde la Ergonomía se realizan diversos aportes a esta problemática. Esta disciplina busca
que los humanos y la tecnología trabajen en completa armonía, diseñando y manteniendo
los productos, puestos de trabajo, tareas, equipos, etc., en acuerdo con las características, ne-
cesidades y limitaciones humanas. Dejar de considerar los principios de la Ergonomía llevará a
diversos efectos negativos que -en general- se expresan en lesiones, enfermedad profesional,
o deterioros de productividad y eficiencia. Analiza aquellos aspectos que abarcan al entorno
artificial construido por el hombre, relacionado directamente con los actos y gestos involucra-
dos en toda su actividad.
En ocasiones, cambios ergonómicos, por pequeños que sean, del diseño del equipo, del pues-
to de trabajo o las tareas, pueden mejorar considerablemente la comodidad, la salud, la segu-
ridad y la productividad del trabajador. A continuación figuran algunos ejemplos de cambios
ergonómicos que pueden producir mejoras significativas:
n Para labores minuciosas que exigen inspeccionar de cerca los materiales, el banco de traba-
jo debe estar más bajo que si se trata de realizar una labor pesada.
Por lo general es más eficaz examinar las condiciones laborales caso por caso al aplicar los
principios de la ergonomía para resolver o evitar problemas. Los trabajadores a los que pue-
dan afectar los cambios ergonómicos que se efectúen en el lugar de trabajo deben participar
en las discusiones antes de que se apliquen esos cambios. Sus aportes pueden ser útiles para
determinar los cambios necesarios y adecuados.
Finalidades vinculadas
a la ADMINISTRACION
n Incrementar índices de práctica deportiva en
la población Conciliación
n Facilitar el acceso a la práctica de los más VIDA PERSONAL
desfavorecidos Y VIDA LABORAL
n Impulsar la igualdad de oportunidades
entre mujeres y hombres
Tanto desde la óptica del trabajador como del empleador, existe una finalidad que es transver-
sal; ésta es la conciliación de la vida personal y la vida laboral.
2. CONCLUSIONES
“Deberé confesar que ocasionan no poco daño a los obreros ciertos oficios que desempeñan: don-
de esperaban obtener recursos para el propio mantenimiento y sostén familiar, hallan a menudo
gravísimas enfermedades y maldicen el arte al que se habían dedicado en tanto se van alejando
del mundo de los vivos” (Dr. Bernardino Ramazzini).4
Entre los determinantes sociales de la salud, el trabajo en todas sus formas adquiere trascenden-
tal relevancia por su doble posibilidad: es capaz de favorecer el crecimiento y desarrollo del indi-
viduo y su integración social o, por el contrario, de producir sufrimiento, enfermedad y muerte.
La OIT estima que más de 6.000 trabajadores y trabajadoras mueren cada día en el mundo
a causa de acciones y enfermedades relacionadas con el trabajo. En este mismo orden, es-
tadísticas válidas muestran que: a) hay más de 250 millones de accidentes de trabajo; b) se
produce como mínimo una baja laboral de al menos tres jornales; c) mueren 2,2 millones de
trabajadores anualmente; d) librado a la no intervención o las intervenciones no eficaces la
evolución natural del problema es incremental y e) el costo total vinculado con la atención
y resarcimiento económico consecuente con accidentes y enfermedades ocupacionales es
cercano al 4% del PBI Global.
En nuestro país las últimas cifras oficiales publicadas por la Superintendencia de Riesgos del
Trabajo muestran que, para el año 2008:
4. Bernardino Ramazzini (3 de noviembre de 1633 - 5 de noviembre de 1714): estudió medicina en la universidad de Parma, donde desarrolló su interés en las
enfermedades ocupacionales y los efectos en sus trabajadores (estudió más de 52 ocupaciones en su época). Todo lo que hoy se conoce como ergonomía y
seguridad laborar tuvo su origen con Ramazzini, por esto fue llamado “el padre de la medicina ocupacional”.
Estos datos, más allá de la contundencia numérica, evidencian a la clara la inadecuada relación
entre las condiciones y medio ambiente de trabajo y la vida y la salud de los trabajadores, y
a la vez permite inferir las consecuencias que devienen de esta situación en las esferas indi-
viduales, familiares, laborales y socioproductivas. El más alto grado posible de salud de los
trabajadores es un objetivo social de suma importancia que contribuirá y facilitará que los
grupos restantes de las poblaciones alcancen un nivel de salud satisfactorio y consigan sus
metas de desarrollo social.
Establecer formas de anticiparnos a los hechos dañinos y generar acciones que fortalezcan a
los individuos y a las comunidades en la protección de su salud, más allá de las derivadas de las
condiciones de trabajo, puede integrar los procesos de negociación colectiva. En este sentido,
pueden utilizarse los conceptos de promoción y prevención.
Lograr el más alto grado de salud en los trabajadores es un objetivo social de suma importancia.
Esto incidirá satisfactoriamente, a nivel social, sobre los grupos restantes de la población mejo-
rando y facilitando su desarrollo teniendo en cuenta que la salud de los trabajadores impacta
sobre su calidad de vida, la de su familia y de la comunidad. Constituye éticamente el valor
principal y la justificación social más trascendente para el desarrollo de la salud ocupacional.
Desde el punto de vista económico, la buena salud del trabajador influye directamente en la
capacidad de producción individual y nacional y adquiere especial relevancia en el marco del
progreso y desarrollo de la sociedad de la que forma parte. Más de la mitad de los habitantes
de los países dependen económicamente, en forma directa, de la población trabajadora; un
deterioro en la salud del trabajador o la trabajadora incidirá, además, negativamente sobre el
bienestar del grupo familiar.
Art.**. Las partes signatarias del presente Convenio Colectivo de Trabajo, considerando la impor-
tancia de las condiciones y medio ambiente de trabajo como determinantes de los procesos de
salud-enfermedad en la relación laboral, se comprometen a acordar pautas que aseguren la salud
y el desarrollo humano del personal que se desempeña dentro de la actividad que corresponda.
Art.**. Las partes firmantes entienden que la prevención, como método en el ámbito de la salud,
constituye el pilar fundamental en la lucha contra la enfermedad y se comprometen a desarrollar
acciones para elevar la calidad de vida de los trabajadores, adoptando medidas orientadas a pre-
venir padecimientos que produzcan deficiencias físicas, mentales y/o sensoriales.
Art.**. Las partes firmantes coinciden en la necesidad de contar con un plan metódico de estudio,
tratamiento y rehabilitación precoz que permita tratar y rehabilitar a quienes se encuentren en
situación de necesitar asistencia profesional a fin de disminuir incapacidades y salvar vidas.
Art.**. Las condiciones y medio ambiente de trabajo, en relación a lo enunciado en los artículos
anteriores, que se estipulen en este convenio colectivo de trabajo para toda la actividad, podrán
ser convenidas por separado, en cada convenio a nivel particular, según las características de los
diversos sectores de la actividad y conforme el artículo 19 inc. b) de la Ley 14.250 (t.o. 2004).
Art.**. Las partes firmantes del presente convenio podrán establecer, como alternativa de negocia-
ción, la posibilidad de celebrar acuerdos sobre condiciones y medio ambiente de trabajo que garanti-
cen la salud de los trabajadores a nivel general, o por cada sector y/o establecimiento y/o empresa.
Art.**. Las partes concuerdan en que actualmente en el ámbito del trabajo los procesos de salud en-
fermedad están sujetos al contexto económico y socio-laboral. Las condiciones generales impactan
en el colectivo y en cada trabajador poniendo de manifiesto su vulnerabilidad, por lo cual se com-
prometen a desarrollar acciones para evitar el maltrato laboral, así como prevenir el uso y abuso de
sustancias psicotrópicas y drogas, la automedicación , el estrés, el distrés y el Síndrome de Burnout.
700.000
600.000
500.000
400.000
300.000
200.000
100.000
Fuente: www.srt.gov.ar
1000
800
600
400
200
Fuente: www.srt.gov.ar
75
50
25
n Enfermedades profesionales
n Accidentes de trabajo
n Prestaciones subestandard
El contexto Condiciones
económico socio de acceso a los Pertenencia
laboral puestos de trabajo
Estrés
Situaciones
Depresión
de violencia
Síndrome Distrés
de Burnout Estrés negativo
Enfermedades
Consumo cardiovasculares Intentos
de drogas de suicidio
Promoción
Articulación Accesibilidad
1. DESARROLLO DE LA TEMATICA
5. Schleser, D. (2007). El trabajo no registrado al largo plazo. Trabajo, Ocupación y Empleo - Los retos laborales en un proceso de
crecimiento sostenido, Serie Estudios Nº7. MTEySS, Bs. As.
6. Fuente: Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del INDEC.
Según la OIT, los países que registran un alto nivel de informalidad laboral tendrán mayores di-
ficultades para salir de depresiones económicas. La economía informal se encuentra asociada
con una mayor vulnerabilidad de los países a las crisis económicas. Por añadidura, aumenta las
probabilidades de que se vean afectados por estas depresiones. La combinación de estas dos
tendencias puede dar origen a un círculo vicioso, porque debilita los resultados económicos a
largo plazo, reduce los beneficios del comercio y merma la prosperidad económica.
Este organismo entiende que la volatilidad de los resultados del desarrollo y la frecuencia de
acontecimientos económicos extremos (como períodos de rápido auge y disminución repen-
tina del crecimiento) tienden a aumentar con el tamaño de la economía informal. Los países
con sector informal superior a la media corren un riesgo casi dos veces mayor de experimentar
acontecimientos económicos extremos y repentinos que los países donde el sector informal
está menos desarrollado.
Por otro lado, los países con alta tasa de empleo en el sector informal quedan relegados a los
segmentos más bajos y vulnerables de las cadenas de producción mundiales. Las economías
del sector informal muy amplio pueden recibir determinadas corrientes de capital atraídas por
la existencia de una gran cantidad de mano de obra poco remunerada. En concreto, algunas
economías emergentes y países en desarrollo parecen utilizar el sector informal propio como
argumento para alentar a los inversionistas internacionales a aprovechar el bajo costo de la
mano de obra.
7. Campos, M. y Galín, P. (2006). La experiencia internacional sobre políticas para la regularización del empleo no registrado. Revista de Trabajo, Año 2, Nº2, Nueva
Epoca. MTEySS, Bs. As.
El descenso de la tasa de no registro a partir de 2003 debe ser resaltado, ya que se trata de la
primera reducción sistemática y generalizada en la mayoría de los sectores productivos del
índice en la historia del reciente del mercado de trabajo argentino.8 A modo de ejemplo, en el
3º trimestre de 2003 dicha tasa se encontraba en 49,1%, y fue disminuyendo progresivamente
hasta llegar al 33,7% actual. Sin embargo, el empleo no registrado continúa teniendo una alta
incidencia en el escenario sociolaboral argentino.
En nuestro país, existe trabajo informal en empresas (unidades productivas) formales, es decir,
empresas que por sus niveles de rentabilidad están en condiciones de cumplir con sus obliga-
ciones laborales. En segundo lugar, el trabajo no registrado se centra en unidades productivas
informales. Ante este supuesto, se entiende que el no cumplimiento de la normativa laboral se
explica por el subdesarrollo de la unidad productiva. En estos casos, los trabajadores pueden
ser asalariados informales o trabajadores independientes. Finalmente, hay trabajo informal
que se realiza para los hogares particulares. En este caso, el empleo (en su gran mayoría servi-
cio doméstico) es siempre asalariado.
En estos supuestos, identificamos tres causas fundamentales que generan la informalidad la-
boral: la rentabilidad, la tercerización y la especulación. Así, hay unidades que por tener baja
rentabilidad sólo pueden subsistir evadiendo el pago de sus contribuciones fiscales y/o apor-
tes provisionales; otras son el producto del desplazamiento de las actividades de baja produc-
tividad de las grandes empresas hacia unidades terceras, y por último, las empresas formales
(especuladoras) que contratan como proveedores a unidades que producen con una mano de
obra sujeta a condiciones que orillan la servidumbre.
Esta aproximación al sector informal enfatiza su ilegalidad como característica y tiende a visua-
lizarlo como un conjunto de actividades encubiertas, ocultas, o sumergidas de la economía.
Sin embargo, ni el sector informal opera absolutamente sin registro, ni su opuesto, el sector
formal, lo hace con un irrestricto apego a la legalidad.
Predominan, en cambio, las llamadas “áreas grises” que se caracterizan por el cumplimiento
parcial de ciertos requisitos legales. En estos sectores, el panorama prevaleciente en la infor-
malidad es un área intermedia en la que se cumplen con ciertos requisitos de registro, pero no
pagan las obligaciones fiscales, y se observan partes de los registros laborales, pero no todas.
Por otro lado, existe trabajo informal de simple supervivencia por cuenta propia. Este tipo de
trabajo no debe ser confundido con el anterior, aunque muchas veces en la realidad sus fron-
teras son difusas. Aquí estamos frente a un tipo de trabajo de muy baja productividad y reali-
zado por cuenta propia, fuera de toda formalidad y legalidad.
Es decir, el 85% de los asalariados no registrados trabaja en empresas con menos de 25 traba-
jadores. Sin negar que el fenómeno de la informalidad responde a una multiplicidad de facto-
res, es muy sugerente la clara asociación entre niveles de incumplimiento de las normas y las
restringidas capacidades financieras y administrativas de los pequeños empleadores.
La experiencia internacional indica que las políticas para la lucha contra esta problemática
deben girar en torno a la simplificación registral, la fiscalización, el sistema de seguridad social,
el seguro de desempleo, la responsabilidad social de los subcontratistas, la cuestión migratoria
y el incentivo a la sindicalización.
En nuestro país, en conjunto con el patrón de crecimiento económico y las mejoras en cuanto
a inclusión, extensión y condiciones de empleo del mercado de trabajo, el Estado Nacional ha
Con la experiencia de la grave crisis financiera internacional acaecida a finales del año 2008,
el Estado Argentino no ha sido indiferente al escenario mundial, y en tal sentido puso a dis-
posición de los actores sociales una serie de instrumentos cuya primordial intención fue la
de contribuir a preservar el empleo de calidad. El Gobierno, a través del Ministerio de Trabajo,
Empleo y Seguridad Social, apostó al crecimiento del empleo, al trabajo decente, a la recupe-
ración de los salarios, a la igualdad oportunidades, a la formación y capacitación profesional,
a la intermediación entre la demanda y oferta de trabajo, entre otras. En este sentido, se debe
reconocer un nuevo papel para el Estado, un rol tutelar, proactivo y protectorio al trabajo de
calidad, entendiendo al empleo formal, protegido y seguro como centro de las políticas públi-
cas y no como variable de ajuste.
Durante décadas se había ido destruyendo la inspección laboral en el país, llegando en 1996 a
la disolución de la Dirección Nacional de Policía del Trabajo. Desde 2003 en adelante el Estado
Nacional se propuso como objetivo primordial recuperar la labor inspectiva e instrumentar
diversas políticas en la lucha contra el trabajo no registrado.
El PNRT ha tenido resultados más que satisfactorios a la fecha y ha redundado en una tenden-
cia hacia el trabajo declarado. Para ello se ha validado de acciones inspectivas privilegiando
la faz educativa; así, concientizar ha devenido en propiciar la legalidad. A modo de ejemplo,
el PNRT ha fiscalizado desde 2003 a julio de 2011 un total de 905.785 establecimientos, y un
total de 2.874.777 trabajadores. Al año 2010, la tasa de detección de trabajo no registrado ha
promediado un 31,6%; y la tasa de regularización ha sido del 37,2%.
Para ambos actores el trabajo no registrado genera diversos perjuicios, entre los cuales encon-
tramos:
n La falta de aportes y contribuciones a la seguridad social, que priva a los trabajadores de
obra social y aportes jubilatorios.
n El desfinanciamiento del sistema de seguridad social que debe ser sostenido por el resto de
los trabajadores activos.
n La invisibilidad de estos colectivos, que conlleva una vulnerabilidad social y laboral que se
manifiesta en la percepción de menores remuneraciones y en la exclusión de beneficios
tales como licencias, vacaciones, aguinaldo, y la falta de cobertura de riesgos de trabajo.
n La obstaculización para sindicalizarse y acceder a los aumentos salariales pactados en el
marco de las convenciones colectivas de trabajo.
n La competencia desleal por parte de las empresas que no registran o registran de manera
deficiente a sus trabajadores y que se aprovechan de afrontar menos costos laborales como
consecuencia de ello. De esta forma, se acumula renta empresaria de manera ilegítima.
n La naturalización de prácticas que legitiman el trabajo en la economía informal y coadyu-
van a consolidar el núcleo duro de la informalidad en el mundo del trabajo; situación que
redunda en menores controles de calidad y recaudación impositiva, entre otros perjuicios.
n Las dificultades probatorias que afrontan los trabajadores ante juicios laborales.
El importante papel que juegan las asociaciones sindicales en su lucha por formalizar las rela-
ciones del trabajo a través de su actividad gremial y la negociación colectiva, se torna en una
herramienta primordial para corregir la tendencia a la informalidad del empleo y aumentar la
cultura del cumplimiento de las obligaciones laborales por parte de los empleadores.
Asimismo, desde la negociación colectiva, herramienta principal para canalizar y resolver pro-
blemáticas laborales desde los actores sociales, se han pactado en algunos convenios colecti-
vos cláusulas relativas a la lucha contra el trabajo no registrado.
Consideramos que la lucha contra el empleo no registrado debe realizarse de manera integral,
contando con los esfuerzos y compromisos conjuntos de las asociaciones sindicales, los em-
pleadores y el Estado. La negociación colectiva se torna entonces pieza principal en este es-
quema, ya que presenta un canal sumamente efectivo para aunar estrategias y políticas desde
los actores de las relaciones del trabajo en vistas a erradicar el trabajo no registrado.
2. CONCLUSIONES
A partir del debate en este módulo del 3º Taller de Nuevos Contenidos de la Negociación Co-
lectiva, se pudieron destacar los perjuicios y dificultades que conlleva la economía informal y
el trabajo no registrado, tanto para los trabajadores y sus asociaciones sindicales, como para
las empresas y para el Estado.
En consecuencia, se prosiguió a analizar los diversos ejes en los cuales las asociaciones sin-
dicales y las empresas o cámaras empresarias pueden trabajar conjuntamente, mediante la
negociación colectiva, para luchar contra el trabajo no registrado.
Art.**. Con el propósito indicado en el artículo anterior acuerdan reunirse de manera trimestral en
una Comisión Técnica instituida a tales fines, a efectos de analizar los casos que pudieran presen-
tar situaciones de riesgo en la materia.
Art.**. Los delegados gremiales de los establecimientos velarán para que el trabajo en los mismos
respete la debida registración y fiscalizarán el cumplimiento de las metas acordadas en el marco
de la Comisión Paritaria. Para ello, el sector empresario se compromete a prestar toda la colabora-
ción necesaria y facilitar la información y documentación que corresponda.
Art.**. Verificados por la Comisión Paritaria específica la total registración de los trabajadores de
la actividad en todas las fases de la cadena de producción, expedirá una certificación que dé cuen-
ta de tal situación, con el objeto de facilitar su acceso a los programas o regímenes de promoción
vigentes.
PRINCIPALES PERJUICIOS
n La falta de aportes y contribuciones a la seguridad social que
privan a los trabajadores de Obra Social y aportes jubilatorios,
también desfinancia el sistema de seguridad social que debe ser
sostenido por el resto de los trabajadores activos.
1. DESARROLLO DE LA TEMATICA
9. Miranda, Ana (2008), Los jóvenes, la educación secundaria y el empleo a principios del siglo XXI, en Revista de Trabajo, año 4,
número 6. Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social. Buenos Aires.
Teniendo en cuenta los datos anteriores podemos decir que dentro del ámbito laboral son
cada vez más los jóvenes que buscan incorporarse al mercado de trabajo, muchos de ellos con
dificultades que sólo la intervención de políticas públicas puede contribuir a superar. Siguien-
do a Capelletti y Byk (2008),“…Las características del mercado de trabajo juvenil son producto
de una estructura económica que no es capaz de generar los puestos necesarios para dar
cabida a los nuevos ingresantes. Durante los ciclos económicos recesivos, los jóvenes son más
perjudicados por los despidos que la población adulta; en las fases expansivas de la economía
el mercado de trabajo no facilita la incorporación de los jóvenes porque, como primera medi-
da, las empresas contratan a los desempleados adultos para aprovechar las competencias por
ellos adquiridas. Sin dudas la población juvenil constituye un colectivo altamente segmenta-
do. Los más favorecidos en función de su origen social y del nivel y calidad de la educación
alcanzada, tienen mayores oportunidades de acceso a puestos más calificados. Los jóvenes de
hogares pobres, con bajos niveles educativos y escaso capital social serán asignados trabajos
informales e inestables de menores calificaciones y pobres remuneraciones. Es, precisamente,
este último grupo de jóvenes el que sufre de modo más inmediato las consecuencias desfavo-
rables del ciclo económico”.11
Entonces, como observamos ante la dificultad que se expresa en la incorporación de los jó-
venes al mundo del trabajo, también podemos visualizar que esta incorporación no tiene un
correlato en el nivel de representación sindical.
Son numerosos los informes y estudios realizados que dan cuenta del carácter marginal que
tiene la presencia de los jóvenes en lo que hace a la práctica sindical siendo estos los principa-
les sujetos de la precarización laboral o de los despidos selectivos cuando las empresas entran
en períodos de crisis.
10. Cappelleti, Beatriz y Byk, Edith (2008), Juventud y trabajo en la Argentina: diagnóstico y visión de los actores, en revista de Trabajo, año 4, número 6. Ministerio
de Trabajo, Empleo y Seguridad Social. Buenos Aires.
11. Idem anterior.
La propuesta apunta a considerar modelos de cláusulas para este sector específico necesitado
de derecho como también a potenciar la mirada de la juventud sobre algunas temáticas, que
generalmente los excluyen, pero los tienen como protagonistas por ejemplo: los escalafones
salariales, la capacitación laboral, la problemática de las adicciones y su contención y preven-
ción, la actividad recreativa.
En el mundo sindical se han atravesado diferentes períodos en donde los jóvenes han ido
cambiando su participación. En la actualidad surge de nuevo la voz de este sector social que
representa el presente y el futuro de una sociedad. Pero su desarrollo generalmente se ve obs-
taculizado por diferentes limitaciones que los transforman en una población frágil con respec-
to al trabajo. Problemáticas tales como las expresadas por las elevadas tasas de desocupación
para el sector; tanto como ser protagonistas excluyentes del fenómeno de la precarización
laboral.
Por otro lado, el sindicalismo argentino se viene fortaleciendo dentro del régimen del empleo
comenzado en 2003. Si tomamos como indicador la densidad sindical, medida a través tasa
de afiliación -cantidad de trabajadores afiliados sobre el total de los registrados- vemos que
se ubica actualmente en el 37% para el sector privado, según mediciones de la cartera laboral.
Asimismo, los sindicalizados sobre el total de asalariados han crecido del 19% al 24% desde
2003. Este escenario presenta nuevas oportunidades y desafíos para la problemática del sec-
tor joven en el mercado de trabajo y su participación en las asociaciones sindicales.
De esta manera se hace necesario entonces establecer principios de igualdad para el acceso
a la representación de este sector en el plano sindical de acuerdo al nivel organizativo que ha
venido demostrando.
Asimismo en los momentos de crisis se verifica que los primeros en perder el trabajo son los
jóvenes generalmente con el argumento de su falta de experiencia, cuando la mayoría de las
veces no hay planes de capacitación, o formación de las empresas para con aquellos.
Del mismo modo los complementos salariales afectan diferencialmente por edades dentro de
las empresas. Por lo tanto se podría considerar la aplicación de plus salariales para la estimulación
de los jóvenes en lo que hace a su propia práctica natural, es decir el estudio, el deporte, etc.
Las conversaciones que se desarrollaron en el marco de la presentación del bloque “Desafíos del
sindicalismo frente a las relaciones laborales del siglo XXI: el papel de los jóvenes” pusieron el
eje fundamentalmente en la capacitación y la formación de los y las trabajadores/as jóvenes.
Las apreciaciones relacionadas con la instrucción de los jóvenes fueron fundamentadas en los
trabajos que señalan que a partir de 2003 y con el desarrollo del actual modelo económico, se
ha producido un crecimiento del empleo en este sector social, pero también se produjo una
deserción escolar equivalente que hace reflexionar en torno al rol del trabajo para los jóvenes
en edad de tránsito de la escolaridad. Se estima que si bien el ingreso al mercado de trabajo
no es la única, sería una de las principales razones del abandono escolar.12
Desde el sector gremial también plantearon sus dudas respecto a que los convenios colecti-
vos pudieran otorgar derechos a una franja etárea de la sociedad. Y dejaron planteado que el
acercamiento de la juventud al sindicalismo aún no es masivo.
10. Filmus, Daniel (2010), La educación y el trabajo para la inclusión social de los jóvenes, en Revista de Trabajo, año 6, número 8. Ministerio de Trabajo, Empleo
y Seguridad Social. Buenos Aires.
Esta temática fue abordada tomando en cuenta los estudios que señalan que las mayores po-
sibilidades de acceder a nuevos puestos de trabajo las obtienen los trabajadores con estudios
superiores (completos o incompletos).13
De esta manera la representación juvenil dentro del sindicalismo, como la participación en parita-
rias, se trató menos profundamente que la formación de los trabajadores. A raíz de esto creemos
que es pertinente hacer el foco en la protección de este sector de cara a las negociaciones veni-
deras en materia de convenios laborales y continuar profundizando a futuro en esta temática.
Art.**. Las empresas comprendidas en el ámbito de aplicación del presente CCT que tengan tra-
bajadores menores de 25 años que no hayan completado su escolaridad primaria o secundaria,
abonarán a los mismos una suma no remunerativa en concepto de “estímulo a la terminalidad
educativa” de PESOS …………. ($ …..) los meses de marzo y julio de cada año.
Art.**. Los trabajadores que se encuentren desarrollando cursos de capacitación y/o formación
vinculados a las tareas que realicen habitualmente en la empresa tendrán derecho, durante el
tiempo de duración del curso, a las mismos días de licencia por estudio que los trabajadores que se
encuentren insertos en la educación formal.
Art.**. Los trabajadores comprendidos en el ámbito de aplicación del presente CCT gozarán de
tres (3) días corridos por examen, con un máximo de veinte (20) días por año calendario, para
rendir examen en la enseñanza primaria, media o universitaria.
Art.**. Las partes acuerdan a promover la integración de jóvenes a las distintas comisiones pari-
tarias, y en el caso de actividades (ramas/sectores/profesiones/categorías/empresas) que cuenten
con una proporción preponderante de trabajadores comprendidos en la franja etárea consignada
en la cláusula precedente, dicho mínimo se elevará a ……. .
JOVENES Y EMPLEO
Situación de los jóvenes en relación a sus posibilidades en el mercado
de trabajo:
n Nivel de desempleo
n Cupo en la dirección
n Capacitación sindical
1. DESARROLLO DE LA TEMATICA
Por otro lado, y a los fines de garantizar una efectiva utilización de este nuevo recurso, se han
formulado otras características y formas de articulación a tener en cuenta, tales como:
n la creación de órganos consultivos, integrados por asistentes técnicos de la materia que se tra-
te, los cuales deberán ser aceptados por los actores sociales que participan de la negociación.
n el dictado de opiniones de expertos, a los que se les podrá solicitar informes específicos
(por ej., en materia de Seguridad e Higiene, se podrían evaluar temas como el grado de si-
niestrabilidad anual entre otros), que en determinados supuestos podrá ser acompañado a
la información que intercambien las partes o que deba ser elaborada por disposición legal
como es el balance social.
En cuanto a los sujetos facilitadores de la asistencia técnica, la misma podrá estar conformada
por profesionales, asesores, analistas (contadores, abogados, psicólogos, médicos, economis-
tas, lic. en Seguridad e Higiene), Organismos Públicos, ONGs, Organizaciones sociales, Univer-
sidades públicas, entre otros.
Por otro lado, la Ley 23.546 sobre el Procedimiento para la negociación colectiva en su artículo
7º alude a que las partes podrán de común acuerdo someterse a la intervención de un servicio
de mediación, conciliación y arbitraje, además de aplicarse la Ley 14.786 para aquellos diferen-
dos que se susciten durante las negociaciones, y aun cuando no se logren avenir las partes, la
autoridad de aplicación podrá proponer una fórmula conciliatoria, o bien realizar investigacio-
nes, recabar asesoramiento de las reparticiones públicas o instituciones privadas y en general
cualquier medida que tienda al más amplio conocimiento de la cuestión que se ventila.
La asistencia técnica que se propone trata de ir más allá de estas instancias y valerse de diver-
sos ámbitos y enfoques interdisciplinarios.
Algunos antecedentes próximos a tener en cuenta entre los cuales se ha utilizado la Asistencia
Técnica, incluyen como casos concretos las situaciones en las que la Comisión Nacional de
Trabajo Agrario (CNTA), órgano normativo tripartito conformado por representantes de los
sectores estatal, empresarial y sindical que negocian salarios y condiciones de trabajo para
todos los trabajadores rurales del país, y en ocasión de regular y dictar resoluciones tendien-
tes a mejorar las condiciones de vida de los trabajadores agrarios, ha requerido un informe
específico a la Superintendencia de Servicios de Salud, sobre estudios estadísticos sobre la
incidencia de las enfermedades vinculadas a las próstata en la población agraria masculina,
diferenciando rangos de edades; así como también se ha solicitado a la Superintendencia de
Riesgos del Trabajo (SRT) su intervención y asistencia mediante un estudio de campo sobre
alojamientos móviles y fijos, ventilación e iluminación y en general todas las condiciones de
vida de los trabajadores agrarios en diferentes actividades, tales como la actividad aranda-
nera, siendo éstos organismos gubernamentales, se destaca entonces que dichas consultas,
informes, estudios y observaciones sobre la materia que se investiga, son tenidos en cuenta al
momento de elaborar la norma definitiva en este órgano tripartito.
2. CONCLUSIONES
Con relación a la vinculación que existe entre la negociación colectiva y este nuevo instru-
mento que se desarrolla durante en el presente taller, se ha detectado que la utilización de la
asistencia técnica podría generar temor respecto a las opiniones que se reciban de los exper-
tos en la materia que se consulte; por ello se debe tener en cuenta en especial el carácter no
vinculante que revestirían estos informes.
Asimismo, se presentaron inquietudes como, por ejemplo, en los casos de renovar cláusulas de
aquellos convenios colectivos que se encontrasen muy desactualizados, ya que la tecnología,
las tareas y las categorías laborales han cambiado con el paso del tiempo. A través de la utili-
zación de este método y el apoyo de un equipo multidisciplinario la asistencia técnica puede
resultar un claro mecanismo para la renovación convencional.
Y somos concientes que la continuidad de ocho años de negociación colectiva desde 2003 ge-
neró un cambio en la confianza, y la posibilidad de poder profundizar temas que se hallaban
postergados o no considerados.
Con la presentación de este nuevo contenido, nos encontramos ante la clara situación de que
en la cultura de las relaciones laborales de la Argentina la asistencia técnica siempre ha sido
realizada casi exclusivamente por abogados, y mediante esta nueva herramienta lo que se
busca es incorporar distintas opciones que hagan a la utilización de otro tipo de conocimien-
tos científicos y técnicos específicos en la materia que se solicite.
Con relación a la exposición de cada una de las cláusulas convencionales que se proponen en
el presente módulo, es menester destacar que se consiguió alcanzar interesantes intervencio-
nes y enriquecedoras propuestas, entre las cuales mencionaremos algunas de ellas:
n Se propone que se establezcan normas que regularicen la aplicación de la asistencia técni-
ca, es decir, un procedimiento específico que prevea situaciones: cuándo y cómo y para qué
casos podrá ser solicitada esta herramienta.
Todo ello, sin perjuicio de toda otra cuestión que las partes consideren relevante para su estudio
y análisis.
n Ley 14.786 - art. 3º: M.T. puede proponer una fórmula conciliatoria
y a tal fin, realizar investigaciones, recabar asesoramiento de las
reparticiones públicas o instituciones privadas, ordenar medidas que
tiendan al mejor conocimiento de la cuestión.
ANTECEDENTES PROXIMOS
n Procedimiento de insalubridad. Resolución MTEYSS N° 434/02 y su
modificatoria.
n Caso Garrahan.
Cláusula A
Art.**. Compromiso de Asistencia Técnica.
a) Las partes signatarias de la presente CCT se comprometen a solicitar la
asistencia técnica de profesionales idóneos en la materia que se pretenda
dilucidar, cuando la coyuntura de la negociación así lo amerite, con miras
a favorecer una mejor composición de los intereses que pudieran estar
contrapuestos y/o a fin de sustentar las decisiones y los acuerdos que se
adopten, con fundamento en sólidas bases técnicas.
b) Los sujetos proveedores de la asistencia técnica podrán ser profesionales
abogados, contadores, economistas, médicos, sociólogos, psicólogos
y/o cualquier otro profesional, analista, perito o técnico que demuestre
adecuada solvencia en el área que se trate. Asimismo, y a los mismos fines,
podrá solicitarse la intervención de organismos públicos, instituciones
educativas públicas o privadas, entre otras.
c) Las partes podrán organizar la asistencia técnica mediante la creación
de un listado de expertos y profesionales en ciencias jurídicas, sociales
y económicas y/o cualquier otra disciplina que esta comisión considere
relevante; este listado será conformado de manera tal que sólo podrá
ser utilizado a los fines de conformar la asistencia técnica y abocarse a
resolver las cuestiones que se traten.
Cláusula B
Art.**. Alcance de la Asistencia Técnica.
Las partes podrán utilizar mecanismos de Asistencia Técnica respecto de la
totalidad del contenido del presente Convenio. Asimismo, se comprometen
Todo ello, sin perjuicio de toda otra cuestión que las partes consideren relevante
para su estudio y análisis.
Cláusula C
Art.**. Carácter de la Asistencia Técnica.
a) La Asistencia Técnica estará articulada a partir de la creación de órganos
consultivos y/o equipos de trabajo, la emisión de opiniones de expertos y/o
el requerimiento de dictámenes o informes a organizaciones públicas o
privadas.
b) Las opiniones emitidas en la materia que se trate deberán ser consideradas
por las partes que participan de la negociación, sin que ello implique que
las conclusiones emanadas de tal asistencia tengan efecto vinculante, ya
que sólo tendrán carácter consultivo.
Cláusula D
Art.**. Procedimiento de consulta de parte.
En caso que los signatarios del presente Convenio no pudieran acordar
la designación de un sujeto único como emisor de la Asistencia Técnica
comprometida, podrán recabar la opinión consultiva de expertos de parte,
quedando obligados a compartir la información producida y a considerarla
con anticipación suficiente al momento de definir la materia que es objeto de
evaluación.
1. DESARROLLO DE LA TEMATICA
Asimismo, toman particular relevancia los espacios internacionales de diálogo social, tales
como la Organización Internacional del Trabajo (OIT), los bloques regionales (MERCOSUR,
Unasur, Unión Europea) y sus órganos especializados en materia social, laboral y económica.
En este contexto la negociación colectiva supranacional adquiere particular trascendencia a
tenor de la tendencia a la internacionalización de los factores de la producción, como herra-
mienta para mejorar cualitativa y cuantitativamente las condiciones de trabajo.
Precisamente este taller pretende abordar estas realidades, pero no con un objetivo sólo lineal
y descriptivo sino también aportar y explorar caminos para recrear en todo momento, en las
nuevas situaciones, el objetivo de la Justicia Social.
A partir de los ‘90 comienzan a expandirse, encuadrados en las estrategias sindicales de dis-
cutir Códigos de Conducta junto a las multinacionales, y profundamente influenciados por la
política de Responsabilidad Social Empresaria de las compañías.
Hasta finales de los ‘90 los sindicatos globales hablaron de Códigos de Conducta, pero reem-
plazaron desde entonces esos términos por la expresión Acuerdo Marco Internacional (Global
Framework Agreement). De esta manera, se distancian considerablemente de los Códigos de
Conducta unilaterales y permiten un avance sobre el tema de la Responsabilidad Social Em-
presaria, al hacerla bilateral y consensuada entre los actores de las relaciones del trabajo.
Hasta el año 2009 se han concertado setenta y dos AMI, la mayoría con multinacionales de
sede europea, aunque comienzan a extenderse a multinacionales de otras zonas, incluso Lati-
noamérica (en 2008 UNI concierta dos AMI con multinacionales brasileras).
Las materias de estos acuerdos difieren según las estrategias de cada federación sindical in-
ternacional, las circunstancias y propensión a negociar de cada multinacional y las tradiciones
de las relaciones del trabajo de cada empresa. Sin embargo, podemos identificar tres ejes prin-
cipales de contenidos.
El segundo eje regulado por los AMI es lo relativo a las condiciones de trabajo, fundamental-
mente empleo, salarios y jornada de trabajo. En esta temática, los AMI tienden a referir a la
aceptación de legislaciones nacionales.
Un tercer aspecto normado por los AMI se vincula con la seguridad e higiene, capacitación y
formación profesional, y reestructuración productiva.
Logrado y consensuado el acuerdo, las partes pueden solicitarle al Consejo Europeo su incor-
poración en la regulación comunitaria, dándole eficacia jurídica vía Directivas del Consejo. A
modo de ejemplo, se han dado en la práctica con este mecanismo el Acuerdo Marco sobre
regulación del permiso parental en 1996, el correspondiente al trabajo a tiempo parcial en
1997 y aquél sobre contratos de duración determinados en 1999.
La tercera variante europea de negociación colectiva regional se vincula con el Diálogo So-
cial Sectorial, el cual fue reforzado a partir de la Decisión de la Comisión Europea de 1998
por la cual se crean Comités de Diálogo Social Sectorial a escala europea. Estos espacios se
encuentran coordinados por las Federaciones de Industria Europeas, permitiendo abordar
problemáticas específicas para cada actividad económica (como por ejemplo, la formación
profesional, condiciones de trabajo, el desarrollo sustentable y la libertad de circulación de los
trabajadores).
Por otro lado, si bien no encuadran específicamente en el concepto de negociación colectiva re-
gional, en la Unión Europea hay otros canales de diálogo social que resulta interesante destacar:
n El Comité Económico y Social, órgano comunitario, en el cual se expresan los intereses de
empresarios y trabajadores de los países miembros de la comunidad, y posee también re-
presentación de otros sectores tales como consumidores y usuarios, autónomos y profesio-
nes liberales.
Este modelo de integración comunitaria con importante componente social puede propor-
cionar ciertos elementos y experiencias válidas a considerar para encarar una progresiva inte-
gración y extensión del diálogo social a nivel latinoamericano y, en particular, del MERCOSUR.
En lo que respecta a la negociación colectiva regional, puede destacarse las regulaciones específicas
de los artículos 10º y 13º que tratan, respectivamente, la negociación colectiva y el diálogo social.
El artículo 20º prevé la creación de una Comisión Sociolaboral, como órgano auxiliar del Grupo
Mercado Común y de integración tripartita, cuya misión es fomentar y acompañar la aplica-
ción de la Declaración.
Esta Comisión puede constituirse en un espacio propicio para fomentar la negociación colec-
tiva regional del MERCOSUR mediante la recepción de acuerdos laborales regionales con el
objetivo de ser integrados a su sistema de seguimiento.
Además, la Comisión podría elevar proyectos normativos al Grupo Mercado Común con base
en este tipo de acuerdos, a fin de que mediante el procedimiento vigente se logre la incorpo-
ración de la normativa regional en los ordenamientos jurídicos internos de los Estados Partes.
La negociación colectiva brinda un espacio para plantearse las problemáticas derivadas del
proceso de internacionalización de las relaciones laborales como también sus posibles solu-
ciones, atendiendo especialmente al proceso de integración regional.
En el caso del MERCOSUR, el cual aún no ha adquirido una fortaleza institucional como la de la
UNION EUROPEA, esta herramienta aporta un importante campo de acción para la generación
de normas laborales autónomas.
Atendiendo a los cambios que se están produciendo en el mundo, el MERCOSUR puede re-
flexionar sobre la dimensión social de su proceso de integración: ¿Qué definición regional
dará al Trabajo Decente? ¿Qué derechos laborales quedan entonces comprendidos en este
concepto? ¿Qué modelo de relaciones laborales regionales puede proponerse para nuestros
países? ¿Qué contenidos y formas adquirirá el diálogo social?
Las partes podrán incorporar al convenio colectivo de trabajo otros Acuerdos Marco Internaciona-
les que en el futuro sean concertados.
2. Ambito de aplicación
n Definición de empresa y filiales.
n Aplicación en distintas divisiones productivas de la empresa.
4. Condiciones de Trabajo
n Remuneración.
n Jornada de trabajo.
n Formas de contratación.
n Licencia anual ordinaria.
n Seguridad e Higiene. Condiciones y Medio Ambiente del Trabajo.
n Formación y capacitación profesional.
n Reestructuración productiva.
5. Desarrollo
n Prácticas medioambientales. Sustentabilidad.
n Relación con comunidad y desarrollo humano.
n Responsabilidad Social Empresaria (Global Compact).
7. Relaciones laborales
n Respeto de la libertad sindical.
n Impulso de la negociación colectiva local.
n Derechos información y consulta.
Señor
Delegado Regional
Comisión Sociolaboral del MERCOSUR
Presidencia Pro Tempore (indicar país bajo su ejercicio)
Señor
Delegado Regional
Comisión Sociolaboral del MERCOSUR
Presidencia Pro Tempore (indicar país bajo su ejercicio)
2. Ambito de aplicación
n Definición de empresa y filiales.
n Aplicación en distintas divisiones productivas de la empresa.
4. Condiciones de Trabajo
n Remuneración.
n Jornada de trabajo.
5. Desarrollo
n Prácticas medioambientales. Sustentabilidad.
n Relación con comunidad y desarrollo humano.
n Responsabilidad Social Empresaria (Global Compact).
7. Relaciones laborales
n Respeto de la libertad sindical.
n Impulso de la negociación colectiva local.
n Derechos información y consulta.
Señor
Delegado Regional
Comisión Sociolaboral del MERCOSUR
Presidencia Pro Tempore (indicar país bajo su ejercicio)
Señor
Delegado Regional
Comisión Sociolaboral del MERCOSUR
Presidencia Pro Tempore (indicar país bajo su ejercicio)
CAPITULO IV
3. Todo Miembro que ratifique el presente Convenio deberá enumerar, en la primera memoria
sobre la aplicación del Convenio que someta en virtud del artículo 22 de la Constitución
de la Organización Internacional del Trabajo, las ramas de actividad que hubieren sido ex-
cluidas en virtud del párrafo 2 de este artículo, explicando los motivos de dicha exclusión y
describiendo las medidas tomadas para asegurar suficiente protección a los trabajadores
en las ramas excluidas, y deberá indicar en las memorias subsiguientes todo progreso reali-
zado hacia una aplicación más amplia.
Artículo 2
1. El presente Convenio se aplica a todos los trabajadores de las ramas de actividad económi-
ca abarcadas.
2. Todo Miembro que ratifique el presente Convenio podrá, previa consulta, tan pronto como
sea posible, con las organizaciones representativas de empleadores y de trabajadores inte-
resadas, excluir parcial o totalmente de su aplicación a categorías limitadas de trabajadores
respecto de las cuales se presenten problemas particulares de aplicación.
3. Todo Miembro que ratifique el presente Convenio deberá enumerar, en la primera memoria
sobre la aplicación del Convenio que someta en virtud del artículo 22 de la Constitución
de la Organización Internacional del Trabajo, las categorías limitadas de trabajadores que
hubiesen sido excluidas en virtud del párrafo 2 de este artículo, explicando los motivos de
dicha exclusión, y deberá indicar en las memorias subsiguientes todo progreso realizado
hacia una aplicación más amplia.
Artículo 3
a) a expresión ramas de actividad económica abarca todas las ramas en que hay trabajadores
empleados, incluida la administración pública;
Anexo normativo
c) la expresión lugar de trabajo abarca todos los sitios donde los trabajadores deben perma-
necer o a donde tienen que acudir por razón de su trabajo, y que se hallan bajo el control
directo o indirecto del empleador;
d) el término reglamentos abarca todas las disposiciones a las que la autoridad o autoridades
competentes han conferido fuerza de ley;
e) el término salud, en relación con el trabajo, abarca no solamente la ausencia de afecciones
o de enfermedad, sino también los elementos físicos y mentales que afectan a la salud y
están directamente relacionados con la seguridad e higiene en el trabajo.
1. Todo Miembro deberá, en consulta con las organizaciones más representativas de emplea-
dores y de trabajadores interesadas y habida cuenta de las condiciones y práctica naciona-
les, formular, poner en práctica y reexaminar periódicamente una política nacional coheren-
te en materia de seguridad y salud de los trabajadores y medio ambiente de trabajo.
2. Esta política tendrá por objeto prevenir los accidentes y los daños para la salud que sean
consecuencia del trabajo, guarden relación con la actividad laboral o sobrevengan durante
el trabajo, reduciendo al mínimo, en la medida en que sea razonable y factible, las causas de
los riesgos inherentes al medio ambiente de trabajo.
Artículo 5
La política a que se hace referencia en el artículo 4 del presente Convenio deberá tener en
cuenta las grandes esferas de acción siguientes, en la medida en que afecten la seguridad y la
salud de los trabajadores y el medio ambiente de trabajo:
e) la protección de los trabajadores y de sus representantes contra toda medida disciplinaria
resultante de acciones emprendidas justificadamente por ellos de acuerdo con la política a
que se refiere el artículo 4 del presente Convenio.
Artículo 6
La formulación de la política a que se refiere el artículo 4 del presente Convenio debería pre-
cisar las funciones y responsabilidades respectivas, en materia de seguridad y salud de los
trabajadores y medio ambiente de trabajo, de las autoridades públicas, los empleadores, los
trabajadores y otras personas interesadas, teniendo en cuenta el carácter complementario de
tales responsabilidades, así como las condiciones y la práctica nacionales.
Artículo 7
Todo Miembro deberá adoptar, por vía legislativa o reglamentaria o por cualquier otro méto-
do conforme a las condiciones y a la práctica nacionales, y en consulta con las organizaciones
Anexo normativo
dar efecto al artículo 4 del presente Convenio.
Artículo 9
1. El control de la aplicación de las leyes y de los reglamentos relativos a la seguridad, la higie-
ne y el medio ambiente de trabajo deberá estar asegurado por un sistema de inspección
apropiado y suficiente.
2. El sistema de control deberá prever sanciones adecuadas en caso de infracción de las leyes
o de los reglamentos.
Artículo 10
Deberán tomarse medidas para orientar a los empleadores y a los trabajadores con objeto de
ayudarles a cumplir con sus obligaciones legales.
Artículo 11
A fin de dar efecto a la política a que se refiere el artículo 4 del presente Convenio, la autoridad o au-
toridades competentes deberán garantizar la realización progresiva de las siguientes funciones:
a) la determinación, cuando la naturaleza y el grado de los riesgos así lo requieran, de las con-
diciones que rigen la concepción, la construcción y el acondicionamiento de las empresas,
su puesta en explotación, las transformaciones más importantes que requieran y toda mo-
dificación de sus fines iniciales, así como la seguridad del equipo técnico utilizado en el
trabajo y la aplicación de procedimientos definidos por las autoridades competentes;
b) la determinación de las operaciones y procesos que estarán prohibidos, limitados o sujetos
a la autorización o al control de la autoridad o autoridades competentes, así como la deter-
minación de las sustancias y agentes a los que la exposición en el trabajo estará prohibida,
limitada o sujeta a la autorización o al control de la autoridad o autoridades competentes;
deberán tomarse en consideración los riesgos para la salud causados por la exposición si-
multánea a varias sustancias o agentes;
d) la realización de encuestas cada vez que un accidente del trabajo, un caso de enfermedad
profesional o cualquier otro daño para la salud acaecido durante el trabajo o en relación
con éste parezca revelar una situación grave;
e) la publicación anual de informaciones sobre las medidas tomadas en aplicación de la políti-
ca a que se refiere el artículo 4 del presente Convenio y sobre los accidentes del trabajo, los
casos de enfermedades profesionales y otros daños para la salud acaecidos durante el tra-
bajo o en relación con éste; f ) habida cuenta de las condiciones y posibilidades nacionales,
la introducción o desarrollo de sistemas de investigación de los agentes químicos, físicos o
biológicos en lo que respecta a los riesgos que entrañaran para la salud de los trabajadores.
Artículo 12
Deberán tomarse medidas conformes a la legislación y práctica nacionales a fin de velar por
que las personas que diseñan, fabrican, importan, suministran o ceden a cualquier título ma-
quinaria, equipos o sustancias para uso profesional:
a) se aseguren, en la medida en que sea razonable y factible, de que la maquinaria, los equipos
o las sustancias en cuestión no impliquen ningún peligro para la seguridad y la salud de las
personas que hagan uso correcto de ellos;
Anexo normativo
De conformidad con la práctica y las condiciones nacionales, deberá protegerse de conse-
cuencias injustificadas a todo trabajador que juzgue necesario interrumpir una situación de
trabajo por creer, por motivos razonables, que ésta entraña un peligro inminente y grave para
su vida o su salud.
Artículo 14
Artículo 15
1. A fin de asegurar la coherencia de la política a que se refiere el artículo 4 del presente Con-
venio y de las medidas tomadas para aplicarla, todo Miembro deberá tomar, previa consulta
tan pronto como sea posible con las organizaciones más representativas de empleadores y
de trabajadores y, cuando sea apropiado, con otros organismos, disposiciones conformes a
las condiciones y a la práctica nacionales a fin de lograr la necesaria coordinación entre las
diversas autoridades y los diversos organismos encargados de dar efecto a las partes II y III
del presente Convenio.
1. Deberá exigirse a los empleadores que, en la medida en que sea razonable y factible, garan-
ticen que los lugares de trabajo, la maquinaria, el equipo y las operaciones y procesos que
estén bajo su control son seguros y no entrañan riesgo alguno para la seguridad y la salud
de los trabajadores.
3. Cuando sea necesario, los empleadores deberán suministrar ropas y equipos de protección
apropiados a fin de prevenir, en la medida en que sea razonable y factible, los riesgos de
accidentes o de efectos perjudiciales para la salud.
Artículo 17
Siempre que dos o más empresas desarrollen simultáneamente actividades en un mismo lu-
gar de trabajo tendrán el deber de colaborar en la aplicación de las medidas previstas en el
presente Convenio.
Artículo 18
Los empleadores deberán prever, cuando sea necesario, medidas para hacer frente a situacio-
nes de urgencia y a accidentes, incluidos medios adecuados para la administración de prime-
ros auxilios.
Artículo 19
Anexo normativo
en la empresa estén habilitados, de conformidad con la legislación y la práctica nacionales,
para examinar todos los aspectos de la seguridad y la salud relacionados con su trabajo, y
sean consultados a este respecto por el empleador; con tal objeto, y de común acuerdo,
podrá recurrirse a consejeros técnicos ajenos a la empresa;
Artículo 20
Artículo 21
Las medidas de seguridad e higiene del trabajo no deberán implicar ninguna carga financiera
para los trabajadores.
Artículo 23
Las ratificaciones formales del presente Convenio serán comunicadas, para su registro, al Di-
rector General de la Oficina Internacional del Trabajo.
2. Entrará en vigor doce meses después de la fecha en que las ratificaciones de dos Miembros
hayan sido registradas por el Director General.
3. Desde dicho momento, este Convenio entrará en vigor, para cada Miembro, doce meses
después de la fecha en que haya sido registrada su ratificación.
Artículo 25
1. Todo Miembro que haya ratificado este Convenio podrá denunciarlo a la expiración de un
período de diez años, a partir de la fecha en que se haya puesto inicialmente en vigor, me-
diante un acta comunicada, para su registro, al Director General de la Oficina Internacional
del Trabajo. La denuncia no surtirá efecto hasta un año después de la fecha en que se haya
registrado.
2. Todo Miembro que haya ratificado este Convenio y que, en el plazo de un año después de
la expiración del período de diez años mencionado en el párrafo precedente, no haga uso
del derecho de denuncia previsto en este artículo quedará obligado durante un nuevo pe-
ríodo de diez años, y en lo sucesivo podrá denunciar este Convenio a la expiración de cada
período de diez años, en las condiciones previstas en este artículo.
Artículo 26
1. El Director General de la Oficina Internacional del Trabajo notificará a todos los Miembros
de la Organización Internacional del Trabajo el registro de cuantas ratificaciones, declara-
ciones y denuncias le comuniquen los Miembros de la Organización.
Anexo normativo
El Director General de la Oficina Internacional del Trabajo comunicará al Secretario General de
las Naciones Unidas, a los efectos del registro y de conformidad con el artículo 102 de la Carta
de las Naciones Unidas, una información completa sobre todas las ratificaciones, declaraciones
y actas de denuncia que haya registrado de acuerdo con los artículos precedentes.
Artículo 28
Cada vez que lo estime necesario, el Consejo de Administración de la Oficina Internacional del
Trabajo presentará a la Conferencia una memoria sobre la aplicación del Convenio, y conside-
rará la conveniencia de incluir en el orden del día de la Conferencia la cuestión de su revisión
total o parcial.
Artículo 29
1. En caso de que la Conferencia adopte un nuevo convenio que implique una revisión total o
parcial del presente, y a menos que el nuevo convenio contenga disposiciones en contrario:
a) la ratificación, por un Miembro, del nuevo convenio revisor implicará, ipso jure, la denun-
cia inmediata de este Convenio, no obstante las disposiciones contenidas en el artículo
25, siempre que el nuevo convenio revisor haya entrado en vigor;
b) a partir de la fecha en que entre en vigor el nuevo convenio revisor, el presente Convenio
cesará de estar abierto a la ratificación por los Miembros.
2. Este Convenio continuará en vigor en todo caso, en su forma y contenido actuales, para los
Miembros que lo hayan ratificado y no ratifiquen el convenio revisor.
Artículo 30
Las versiones inglesa y francesa del texto de este Convenio son igualmente auténticas.
Artículo 1° - Todas las Obras Sociales y Asociaciones de Obras Sociales del Sistema Nacional
incluidas en la Ley 23.660, recipiendarias del fondo de redistribución de la Ley 23.661, deberán
incorporar como prestaciones obligatorias:
a) La cobertura para los tratamientos médicos, psicológicos y farmacológicos de las personas
infectadas por algunos de los retrovirus humanos y los que padecen el síndrome de inmu-
nodeficiencia adquirida (SIDA) y/o las enfermedades intercurrentes;
b) La cobertura para los tratamientos médicos, psicológicos y farmacológicos de las personas
que dependan física o psíquicamente del uso de estupefacientes;
Artículo 3° - Las obras sociales, junto con el Ministerio de Salud y Acción Social elaborarán
los programas destinados a cubrir las contingencias previstas en el artículos 1 de la presente.
Estos deberán ser presentados a la ANSSAL para su aprobación y financiación, rigiendo su
obligatoriedad a partir de ellas.
La no presentación en tiempo y forma de los programas previstos generará las sanciones que
prevén las leyes 23.660 y 23.661.
Anexo normativo
sente se efectuará por intermedio del Ministerio de Salud y Acción Social de la Nación.
Artículo 6° - La presente ley deberá ser reglamentada dentro de los sesenta días de su pro-
mulgación.
DADA EN LA SALA DE SESIONES DEL CONGRESO ARGENTINO, EN BUENOS AIRES, A LOS OCHO
DIAS DEL MES DE FEBRERO DEL AÑO MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y CINCO.
Artículo 1° - Queda prohibido en todo el territorio nacional, el expendio de todo tipo de bebi-
das alcohólicas a menores de dieciocho años de edad.
Artículo 3° - A los efectos de esta ley, se considerarán bebidas alcohólicas aquellas que con-
tengan alcohol cualquiera sea su graduación.
Artículo 5° - Las bebidas alcohólicas que se comercialicen en el país, deberán llevar en sus
envases, con caracteres destacables y en un lugar visible, la graduación alcohólica correspon-
diente a su contenido. También se consignarán las siguientes leyendas: “Beber con modera-
ción”.“Prohibida su venta a menores de 18 años”.
Artículo 6° - Queda prohibida toda publicidad o incentivo de consumo de bebidas alcohólicas, que:
Anexo normativo
de las personas;
e) No incluya en letra y lugar visible las leyendas “Beber con moderación”.“Prohibida su venta
a menores de 18 años”.
Artículo 9° - El Consejo Federal de Cultura y Educación acordará los aspectos educativos del
Programa Nacional de Prevención y Lucha contra el Consumo Excesivo de Alcohol, debiendo
incluir en los contenidos curriculares de todos los niveles, ciclos y modalidades temas vincula-
dos al consumo excesivo de alcohol.
Artículo 11. - El Programa Nacional de Prevención y Lucha contra el Consumo Excesivo de Alcohol,
contará con un consejo asesor que estará integrado por representantes de instituciones públicas
y/o privadas cuyos fines se relacionen con los objetivos del programa y serán designados por el Mi-
nisterio de Salud y Acción Social de la Nación y el Ministerio de Cultura y Educación de la Nación y la
Secretaría de Programación para la Prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico.
Artículo 12. - Las obras sociales y asociaciones de obras sociales, incluidas en la Ley 23.660, re-
cipiendarias del Fondo de Redistribución de la Ley 23.661, y las entidades de medicina prepaga,
Artículo 13. - Las obras sociales elaborarán los programas destinados a cubrir las contingen-
cias previstas en el artículo precedente que deberán ser presentados ante la ANSSAL para
su aprobación y financiamiento, previa existencia en el presupuesto general de la Nación de
partidas específicas destinadas a tal fin.
La no presentación en tiempo y forma de los programas previstos generará las sanciones es-
tablecidas en las leyes 23.660 y 23.661 con relación a las infracciones.
En caso de reincidencia la multa podrá elevarse hasta mil pesos en su mínimo y cincuenta mil
pesos en su máximo, y la clausura del local o establecimiento hasta ciento ochenta días.
Artículo 15. - El que infrinja lo dispuesto en el artículo 7°, será reprimido con prisión de seis
meses a dos años y con una multa de dos mil a veinte mil pesos. Además se impondrá la clau-
sura del local donde se realizaren los hechos, por un término de hasta treinta días.
Si a consecuencia del hecho resultare la muerte de alguna persona, la pena será de dos a cinco
años de prisión, y si resultaren lesiones la pena será de uno a cuatro años de prisión.
Si la víctima del hecho resultare un menor de dieciocho años de edad la pena máxima se ele-
vará en un tercio.
Artículo 16. - En caso de producirse las consecuencias a que se refieren el tercero y cuarto
párrafo del artículo anterior, la clausura del local será definitiva.
Artículo 17. - Sustitúyese el texto del inciso a) del artículo 48, de la Ley 24.449 por el siguiente:
Anexo normativo
cial correspondiente, habiendo consumido estupefacientes o medicamentos que disminuyan
la aptitud para conducir. Conducir cualquier tipo de vehículos con una alcoholemia superior a
500 miligramos por litro de sangre. Para quienes conduzcan motocicletas o ciclomotores queda
prohibido hacerlo con una alcoholemia superior a 200 miligramos por litro de sangre. Para ve-
hículos destinados al transporte de pasajeros de menores y de carga, queda prohibido hacerlo
cualquiera sea la concentración por litro de sangre. La autoridad competente realizará el res-
pectivo control mediante el método adecuado aprobado a tal fin por el organismo sanitario.”
Artículo 18. - La violación a lo previsto en los artículos 5° y 6° será sancionada con multa de
cinco mil a cien mil pesos. La sanción por la infracción al artículo 6° se aplicará tanto al anun-
ciante como a la empresa publicitaria.
Artículo 19. - La aplicación de las sanciones previstas en esta ley en el ámbito de Capital Fede-
ral, será competencia de la Justicia en lo Correccional; con excepción de las establecidas en los
artículos 15 y 16 que será competencia de los tribunales en lo criminal.
Artículo 20. - Las multas que se recauden por aplicación de la presente ley serán destinadas:
b) Un sesenta por ciento (60%) a las jurisdicciones en las que fueran percibidas para ser apli-
cadas a los programas previstos en los artículos 9° y 10.
Artículo 21. - Los contratos relacionados con la publicidad de bebidas alcohólicas respecto de
los cuales la autoridad competente tenga acreditado que fueron celebrados con anterioridad
la vigencia de la presente ley, podrán ser ejecutados sin atenerse a sus preceptos por el plazo
de seis (6) meses contados a partir de la fecha de la firma de los mismos.
Artículo 22. - La presente ley tendrá vigencia en todo el territorio nacional, con la excepción
del artículo 17, en el que regirá la adhesión de las provincias y la ciudad de Buenos Aires con-
forme al artículo 91 de la Ley 24.449.
DADA EN LA SALA DE SESIONES DEL CONGRESO ARGENTINO, EN BUENOS AIRES, LOS CINCO
DIAS DEL MES DE: MARZO DEL AÑO MIL NOVECIENTOS NOVENTA Y SIETE
ALBERTO R. PIERRI. - EDUARDO MENEM. - Juan Estrada. - Edgardo Piuzzi.
El Senado y Cámara de Diputados reunidos en Congreso, etc. sancionan con fuerza de Ley:
Capítulo I
Disposiciones generales
b) Reducir al mínimo la exposición de las personas a los efectos nocivos del humo de produc-
tos elaborados con tabaco;
Artículo 3º - Quedan comprendidos en los alcances de esta ley todos los productos elabora-
dos con tabaco, y los que sin serlo puedan identificarse con marcas o asociarse con ellos, de
origen nacional o importados.
Anexo normativo
a) Consumo de productos elaborados con tabaco: El acto de inhalar, exhalar, masticar, chupar o
sostener encendido un producto elaborado con tabaco;
b) Productos elaborados con tabaco: Los preparados que utilizan total o parcialmente como
materia prima tabaco y son destinados a ser fumados, chupados, masticados, aspirados,
inhalados o utilizados como rapé;
e) Control de productos elaborados con tabaco: Las diversas estrategias de reducción de la de-
manda y los daños asociados al consumo de productos elaborados con tabaco, con el obje-
to de mejorar la salud de la población;
f) Patrocinio de marca de productos elaborados con tabaco: Toda forma de contribución a cual-
quier acto, actividad, persona física o jurídica, pública o privada, con el fin, o a los efectos de
promover la marca de un producto elaborado con tabaco;
g) Empaquetado de productos elaborados con tabaco: Se aplica a todo envase, paquete, envol-
torio, caja, lata o cualquier otro dispositivo que envuelva o contenga productos elaborados
con tabaco en su formato de venta al consumidor final;
h) Lugar cerrado de acceso público: Todo espacio destinado al acceso público, tanto del ámbito
público como privado, cubierto por un techo y confinado por paredes, independientemen-
te de que la estructura sea permanente o temporal;
i) L ugar de trabajo cerrado: Toda área o sector cerrado dentro de un edificio o establecimiento,
fijo o móvil, en donde se desempeñan o desarrollan actividades laborales;
j) M
edios de transporte público de pasajeros: Todo tipo de vehículo que circule por tierra, aire o
agua utilizado para transportar pasajeros, con fines comerciales;
l) I ngredientes: Cualquier sustancia o cualquier componente distinto de las hojas y otras partes
naturales o no procesadas de la planta de tabaco que se use en la fabricación o preparación
de un producto elaborado con tabaco y que siga estando presente en el producto termina-
do, aunque sea en forma modificada, incluidos el papel, el filtro, las tintas y los adhesivos;
m) Comunicación directa: Aquella que no es visible o accesible al público en general, y que está
dirigida al público mayor de edad, identificado por el documento de identidad de cada uno
de los que hayan aceptado en forma fehaciente recibir tal información.
Capítulo II
Publicidad, promoción y patrocinio
a) En el interior de los lugares de venta o expendio de productos elaborados con tabaco, con-
forme a lo que determine la reglamentación de la presente ley;
c) A través de comunicaciones directas a mayores de dieciocho (18) años, siempre que se haya
obtenido su consentimiento previo y se haya verificado su edad.
Artículo 7º - En todos los casos la publicidad o promoción deberá incluir uno de los siguientes
mensajes sanitarios, cuyo texto estará impreso, escrito en forma legible, prominente y propor-
cional dentro de un rectángulo de fondo blanco con letras negras, que deberá ocupar el veinte
por ciento (20%) de la superficie total del material objeto de publicidad o promoción:
Anexo normativo
b) Fumar causa enfisema pulmonar;
En todos los casos se incluirá un pictograma de advertencia sobre el daño que produce el
hábito de fumar, el que será establecido para cada mensaje por la autoridad de aplicación de
esta ley.
Artículo 10. - Los empaquetados y envases de productos elaborados con tabaco llevarán in-
sertos una imagen y un mensaje sanitario que describa los efectos nocivos del consumo de
productos elaborados con tabaco, de conformidad con el listado expuesto en el artículo 7º
de la presente, que será actualizado por la autoridad de aplicación con una periodicidad no
superior a dos (2) años ni inferior a un (1) año.
Artículo 11. - Cada mensaje sanitario y su correspondiente imagen serán consignados en cada
paquete y envase individual de venta al público de los productos elaborados con tabaco.
El mensaje sanitario estará escrito en un (1) rectángulo negro, sobre fondo blanco con letras
negras, y ocupará el cincuenta por ciento (50%) inferior de una (1) de las superficies principa-
les expuestas. La imagen ocupará el cincuenta por ciento (50%) inferior de la otra superficie
principal.
Las empresas industrializadoras de productos elaborados con tabaco lanzarán sus unidades
al mercado, garantizando la distribución homogénea y simultánea de las diferentes imágenes
y mensajes sanitarios, en la variedad que hubiere dispuesto la autoridad de aplicación para
cada período.
Artículo 12. - Los paquetes y envases de productos elaborados con tabaco deberán incluir
además, en uno (1) de sus laterales, información sobre el servicio gratuito para dejar de fumar
que suministre el Ministerio de Salud.
Artículo 13. - En los paquetes y envases de productos elaborados con tabaco no podrán utilizarse
expresiones tales como “Light”;“Suave”,“Milds”,“Bajo en contenido de nicotina y alquitrán”, o térmi-
nos similares, así como elementos descriptivos, marcas de fábrica o de comercio, signos figurativos
o frases, que tengan el efecto directo o indirecto, de crear la falsa, equívoca o engañosa impresión
de que un determinado producto elaborado con tabaco es menos nocivo que otro o que pueda
inducir a error con respecto a sus características, efectos para la salud, riesgos o emisiones.
Artículo 15. - La composición de los productos elaborados con tabaco que sean cigarrillos
o cigarritos destinados al comercio en el mercado nacional, deben ajustarse a los estánda-
res prescriptos por esta ley. A estos fines los productos mencionados deben emanar como
máximo:
a) once miligramos (11 mg) de alquitrán por cigarrillo o cigarrito, a partir del primer año de
vigencia de la presente ley, y diez miligramos (10 mg) de alquitrán por cigarrillo o cigarrito,
a partir del segundo año de vigencia de la misma;
b) un miligramo con un décimo de miligramo (1,1 mg) de nicotina por cigarrillo o cigarrito, a
partir del primer año de vigencia de la presente ley, y un miligramo (1 mg) de nicotina por
cigarrillo o cigarrito, a partir del segundo año de vigencia de la misma;
c) once miligramos (11 mg) de monóxido de carbono por cigarrillo o cigarrito, a partir del pri-
mer año de vigencia de la presente ley, y diez miligramos (10 mg) de monóxido de carbono
por cigarrillo o cigarrito, a partir del segundo año de vigencia de la misma.
Los laboratorios que realicen las mediciones deberán poseer acreditación bajo la norma ISO
17.025, o las que en el futuro se dicten, para cada uno de los análisis contemplados en las nor-
mas anteriormente mencionadas.
c) La prohibición del uso de determinados ingredientes siempre que se demuestre de acuer-
do a criterios científicos objetivos y estándares internacionales, que los mismos incremen-
tan la toxicidad total inherente de los productos bajo análisis.
Capítulo V
Venta y distribución
Artículo 17. - Queda prohibida la venta, exhibición, distribución y promoción por cualquier
título, de productos elaborados con tabaco en los siguientes lugares:
e) Sedes de museos o clubes y salas de espectáculos públicos como cines, teatros y estadios.
Artículo 18. - Se prohíbe la venta, distribución, promoción, y entrega por cualquier título, de
productos elaborados con tabaco a menores de dieciocho (18) años para su consumo o para
el de terceros. A tales fines, el vendedor o expendedor deberá verificar la edad del comprador,
debiendo exigir la exhibición del documento que la acredite.
Artículo 19. - El responsable de la venta, distribución, promoción y entrega por cualquier títu-
lo, de productos elaborados con tabaco, tendrá la obligación de hacer cumplir las disposicio-
nes establecidas en los artículos 17 y 18 según corresponda a su actividad.
Artículo 20. - En el interior de los lugares de expendio de productos elaborados con tabaco, así
como en los puntos de venta, distribución y entrega por cualquier título, deberá exhibirse en
lugar visible un (1) cartel con la siguiente leyenda “Prohibida la venta, distribución, promoción
Anexo normativo
y el número de la presente ley.
Artículo 21. - Se prohíbe la venta, ofrecimiento, distribución, promoción y/o entrega, por cual-
quier título de productos elaborados con tabaco:
a) En paquetes abiertos;
Artículo 22. - Se prohíbe la venta, distribución, publicidad, promoción y entrega por cualquier
título, de artículos y productos, de uso y consumo corriente que aun no siendo productos
elaborados con tabaco, puedan identificarse o asociarse con ellos a través de la utilización de
logotipos, emblemas o nombres de marcas de productos elaborados con tabaco.
Capítulo VI
Protección ambiental contra el humo de productos elaborados con tabaco
a) Lugares de trabajo cerrados protegidos por la ley 19.587 de Higiene y Seguridad del Trabajo;
e) Museos y bibliotecas;
i) Areas en que el consumo de productos elaborados con tabaco generen un alto riesgo de
combustión por la presencia de materiales inflamables, estaciones de expendio de com-
bustibles, sitios de almacenamiento de los mismos o materiales explosivos o similares;
j) C
ualquier otro espacio cerrado destinado al acceso de público, en forma libre o restringida,
paga o gratuita, no incluido en los incisos precedentes.
a) Los patios, terrazas, balcones y demás áreas al aire libre de los espacios destinados al acceso
de público en forma libre o restringida, paga o gratuita, mientras no se trate de estableci-
mientos de atención de la salud o de enseñanza, excluidos los del ámbito universitario;
b) Los lugares de trabajo cerrados privados sin atención al público y sin empleados que cum-
plan funciones en esa misma dependencia;
c) Los clubes de fumadores de productos elaborados con tabaco o tabaquerías con áreas es-
peciales habilitadas por autoridad competente.
Artículo 25. - En los lugares en que rija la prohibición de fumar, deberán colocarse carteles
que indiquen dicha prohibición. La respectiva leyenda deberá estar escrita en forma legible y
prominente, en letreros de un tamaño no inferior a treinta (30) centímetros de lado colocados
en un lugar visible, en letras negras sobre fondo blanco, con las demás características que
establezca la reglamentación.
Artículo 26. - La autoridad de aplicación, con la finalidad de facilitar las denuncias por in-
cumplimiento de las disposiciones de la presente ley, habilitará como mínimo un (1) número
Anexo normativo
venta de los productos elaborados con tabaco y en aquellos donde se prohíba su consumo.
Capítulo VII
Autoridad de aplicación
Las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires actuarán como autoridades locales de
aplicación, ejerciendo el control y vigilancia sobre el cumplimiento de la presente ley y sus
normas reglamentarias. A ese fin determinarán los organismos que cumplirán tales funciones,
pudiendo los gobiernos provinciales delegar sus atribuciones en los gobiernos municipales.
Capítulo VIII
Educación para la prevención
Artículo 30. - Las carreras profesionales relacionadas con la salud deberán incluir en sus con-
tenidos curriculares el estudio e investigación de las patologías vinculadas con el tabaquismo,
su prevención y tratamiento.
Asimismo se pondrá especial énfasis en el peligro que significa el tabaquismo tanto para la
mujer embarazada y la madre lactante, como para la salud de su hijo.
Capítulo IX
Sanciones
Artículo 32. - Las infracciones a las disposiciones de la presente ley serán pasibles de las si-
guientes sanciones, las que se aplicarán con independencia de la responsabilidad civil o penal
que pudiere corresponder:
a) Multa en moneda de curso legal, equivalente al valor al consumidor final de entre doscien-
tos cincuenta (250) y un mil (1000) paquetes de veinte (20) cigarrillos de los de mayor precio
comercializados en el país en caso de incumplimiento cuando se incumpliere lo normado
en los Capítulos V y VI. En caso de reincidencia dicha multa podrá alcanzar un valor de hasta
dos mil quinientos (2500) paquetes con las mismas características;
b) Multa en pesos equivalente al valor de venta al consumidor final de diez mil (10.000) a cien
mil (100.000) paquetes de veinte (20) cigarrillos del mayor valor comercializado en el país,
en caso de violación de lo dispuesto en los Capítulos II, III y IV. En caso de reincidencia, la
multa se puede elevar hasta el valor equivalente a un millón (1.000.000) de paquetes de
los antes enunciados;
Artículo 33. - Las infracciones a las disposiciones de la presente ley serán juzgadas y ejecuta-
das por las jurisdicciones locales.
Anexo normativo
gastos que demande el cumplimiento de la presente ley. Las sanciones establecidas en el artí-
culo precedente podrán acumularse y se graduarán con arreglo a su gravedad o reiteración.
Artículo 34. - Las sanciones que se establecen por la presente ley serán aplicadas, previo su-
mario que garantice el derecho de defensa, a través de las autoridades sanitarias o de co-
mercio, nacionales o locales, cuando correspondiere, sin perjuicio de la competencia de otros
organismos en la materia.
Artículo 35. - El Ministerio de Salud creará un registro nacional de infractores de esta ley, y lo
mantendrá actualizado coordinando sus acciones con las demás jurisdicciones involucradas
en el cumplimiento de esta ley.
Capítulo X
Disposiciones finales
Artículo 36. - El gasto que demande el cumplimiento de la presente ley se financiará con los
recursos provenientes de:
Artículo 37. - La presente ley entrará en vigencia a partir del día siguiente al de su publica-
ción, con excepción de lo dispuesto por los artículos 10, 11, 12 y 13, que lo harán un (1) año
después.
Artículo 38. - La instrumentación de los artículos 5º, 6º, 7º y 8º empezará a regir a partir de los
ciento ochenta (180) días de la publicación de la presente ley.
Artículo 39. - Invítase a las provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a sancionar,
para el ámbito de su exclusiva competencia, normas de similar naturaleza a las dispuestas por
la presente para el ámbito nacional.
DADA EN LA SALA DE SESIONES DEL CONGRESO ARGENTINO, EN BUENOS AIRES, EL DIA PRI-
MERO DE JUNIO DEL AÑO DOS MIL ONCE.
JOSE J. B. PAMPURO. - EDUARDO A. FELLNER. - Enrique Hidalgo. - Juan H. Estrada.
adopta, con fecha once de julio de mil novecientos cuarenta y siete, el si-
guiente Convenio, que podrá ser citado como el Convenio sobre la inspec-
ción del trabajo, 1947:
1. El sistema de inspección del trabajo en los establecimientos industriales se aplicará a todos
los establecimientos a cuyo respecto los inspectores del trabajo estén encargados de velar
por el cumplimiento de las disposiciones legales relativas a las condiciones de trabajo y a la
protección de los trabajadores en el ejercicio de su profesión.
2. La legislación nacional podrá exceptuar de la aplicación del presente Convenio a las empre-
sas mineras y de transporte, o a partes de dichas empresas.
Artículo 3
a) velar por el cumplimiento de las disposiciones legales relativas a las condiciones de tra-
bajo y a la protección de los trabajadores en el ejercicio de su profesión, tales como las
disposiciones sobre horas de trabajo, salarios, seguridad, higiene y bienestar, empleo de
menores y demás disposiciones afines, en la medida en que los inspectores del trabajo
estén encargados de velar por el cumplimiento de dichas disposiciones;
2. Ninguna otra función que se encomiende a los inspectores del trabajo deberá entorpecer
el cumplimiento efectivo de sus funciones principales o perjudicar, en manera alguna, la
autoridad e imparcialidad que los inspectores necesitan en sus relaciones con los emplea-
dores y los trabajadores.
Artículo 4
1. Siempre que sea compatible con la práctica administrativa del Miembro, la inspección del
trabajo deberá estar bajo la vigilancia y control de una autoridad central.
Artículo 5
a) la cooperación efectiva de los servicios de inspección con otros servicios gubernamentales
y con instituciones, públicas o privadas, que ejerzan actividades similares;
Artículo 6
Artículo 7
1. A reserva de las condiciones a las que la legislación nacional sujete la contratación de fun-
cionarios públicos, los inspectores del trabajo serán contratados tomándose únicamente
en cuenta las aptitudes del candidato para el desempeño de sus funciones.
3. Los inspectores del trabajo deberán recibir formación adecuada para el desempeño de sus
funciones.
Artículo 8
Las mujeres y los hombres serán igualmente elegibles para formar parte del personal de ins-
pección, y, cuando fuere necesario, se asignarán funciones especiales a los inspectores y a las
inspectoras, respectivamente.
Todo Miembro dictará las medidas necesarias para garantizar la colaboración de peritos y téc-
nicos debidamente calificados, entre los que figurarán especialistas en medicina, ingeniería,
electricidad y química, en el servicio de inspección, de acuerdo con los métodos que se consi-
deren más apropiados a las condiciones nacionales, a fin de velar por el cumplimiento de las
disposiciones legales relativas a la protección de la salud y seguridad de los trabajadores en
el ejercicio de su profesión, e investigar los efectos de los procedimientos empleados, de los
materiales utilizados y de los métodos de trabajo en la salud y seguridad de los trabajadores.
Artículo 10
El número de inspectores del trabajo será suficiente para garantizar el desempeño efectivo de
las funciones del servicio de inspección, y se determinará teniendo debidamente en cuenta:
a) la importancia de las funciones que tengan que desempeñar los inspectores, particularmente:
iii) el número y complejidad de las disposiciones legales por cuya aplicación deba velarse;
c) las condiciones prácticas en que deberán realizarse las visitas de inspección para que sean eficaces.
Artículo 11
1. La autoridad competente deberá adoptar las medidas necesarias para proporcionar a los
inspectores del trabajo:
a) oficinas locales debidamente equipadas, habida cuenta de las necesidades del servicio, y
accesibles a todas las personas interesadas;
Anexo normativo
no existan medios públicos apropiados.
2. La autoridad competente deberá adoptar las medidas necesarias para reembolsar a los ins-
pectores del trabajo todo gasto imprevisto y cualquier gasto de transporte que pudiere ser
necesario para el desempeño de sus funciones.
Artículo 12
1. Los inspectores del trabajo que acrediten debidamente su identidad estarán autorizados:
a) para entrar libremente y sin previa notificación, a cualquier hora del día o de la noche, en
todo establecimiento sujeto a inspección;
b) para entrar de día en cualquier lugar, cuando tengan un motivo razonable para suponer
que está sujeto a inspección; y
c) para proceder a cualquier prueba, investigación o examen que consideren necesario para
cerciorarse de que las disposiciones legales se observan estrictamente y, en particular:
i) p
ara interrogar, solos o ante testigos, al empleador o al personal de la empresa sobre
cualquier asunto relativo a la aplicación de las disposiciones legales;
ii) para exigir la presentación de libros, registros u otros documentos que la legislación
nacional relativa a las condiciones de trabajo ordene llevar, a fin de comprobar que
están de conformidad con las disposiciones legales, y para obtener copias o extractos
de los mismos;
iii) para requerir la colocación de los avisos que exijan las disposiciones legales;
Artículo 13
1. Los inspectores del trabajo estarán facultados para tomar medidas a fin de que se eliminen los
defectos observados en la instalación, en el montaje o en los métodos de trabajo que, según
ellos, constituyan razonablemente un peligro para la salud o seguridad de los trabajadores.
2. A fin de permitir la adopción de dichas medidas, los inspectores del trabajo estarán faculta-
dos, a reserva de cualquier recurso judicial o administrativo que pueda prescribir la legisla-
ción nacional, a ordenar o hacer ordenar:
Artículo 14
Deberán notificarse a la inspección del trabajo, en los casos y en la forma que determine la
legislación nacional, los accidentes del trabajo y los casos de enfermedad profesional.
Artículo 15
a) se prohibirá que los inspectores del trabajo tengan cualquier interés directo o indirecto en
las empresas que estén bajo su vigilancia;
Anexo normativo
ciplinarias apropiadas, a no revelar, aun después de haber dejado el servicio, los secretos
comerciales o de fabricación o los métodos de producción de que puedan haber tenido
conocimiento en el desempeño de sus funciones;
Artículo 16
Los establecimientos se deberán inspeccionar con la frecuencia y el esmero que sean necesa-
rios para garantizar la efectiva aplicación de las disposiciones legales pertinentes.
Artículo 17
1. Las personas que violen las disposiciones legales por cuyo cumplimiento velen los inspec-
tores del trabajo, o aquellas que muestren negligencia en la observancia de las mismas,
deberán ser sometidas inmediatamente, sin aviso previo, a un procedimiento judicial. Sin
embargo, la legislación nacional podrá establecer excepciones, para los casos en que deba
darse un aviso previo, a fin de remediar la situación o tomar disposiciones preventivas.
Artículo 18
La legislación nacional deberá prescribir sanciones adecuadas, que habrán de ser efectiva-
mente aplicadas en los casos de violación de las disposiciones legales por cuyo cumplimiento
velen los inspectores del trabajo, y en aquellos en que se obstruya a los inspectores del trabajo
en el desempeño de sus funciones.
Artículo 19
1. Los inspectores del trabajo o las oficinas locales de inspección, según sea el caso, estarán
obligados a presentar a la autoridad central de inspección informes periódicos sobre los
resultados de sus actividades.
Artículo 20
1. La autoridad central de inspección publicará un informe anual, de carácter general, sobre la
labor de los servicios de inspección que estén bajo su control.
2. Estos informes se publicarán dentro de un plazo razonable, que en ningún caso podrá exce-
der en doce meses de la terminación del año a que se refieran.
3. Se remitirán copias de los informes anuales al Director General de la Oficina Internacional
del Trabajo dentro de un período razonable después de su publicación, que en ningún caso
podrá exceder de tres meses.
Artículo 21
El informe anual que publique la autoridad central de inspección tratará de las siguientes
cuestiones, así como de cualesquiera otras que competan a dicha autoridad:
Todo Miembro de la Organización Internacional del Trabajo para el que esté en vigor el pre-
sente Convenio deberá mantener un sistema de inspección del trabajo en los establecimien-
tos comerciales.
Artículo 23
Artículo 24
El sistema de inspección del trabajo en establecimientos comerciales observará las disposicio-
nes de los artículos 3 a 21 del presente Convenio, en los casos en que puedan aplicarse.
1. Todo Miembro de la Organización Internacional del Trabajo que ratifique este Convenio
podrá, mediante una declaración anexa a su ratificación, excluir la parte II de su aceptación
del Convenio.
2. Todo Miembro que haya formulado una declaración de esta índole podrá anularla, en cual-
quier momento, mediante una declaración posterior.
3. Todo Miembro para el que esté en vigor una declaración formulada de conformidad con
el párrafo 1 de este artículo deberá indicar, en las memorias anuales subsiguientes sobre la
aplicación del presente Convenio, la situación de su legislación y de su práctica respecto
a las disposiciones de la parte II de este Convenio, y la medida en que se haya puesto o se
proponga poner en ejecución dichas disposiciones.
En los casos en que existan dudas sobre si este Convenio es aplicable a un establecimiento o
a una parte o a un servicio de un establecimiento, la cuestión será resuelta por la autoridad
competente.
Artículo 27
Artículo 28
Las memorias anuales que habrán de presentarse en virtud del artículo 22 de la Constitución
de la Organización Internacional del Trabajo contendrán toda la información referente a la
legislación que dé efecto a las disposiciones de este Convenio.
Artículo 29
2. Todo Miembro deberá indicar en la primera memoria anual sobre la aplicación del presente
Convenio, que habrá de presentar en virtud del artículo 22 de la Constitución de la Orga-
nización Internacional del Trabajo, toda región respecto de la cual se proponga invocar las
disposiciones del presente artículo, y deberá expresar los motivos que lo induzcan a aco-
gerse a dichas disposiciones. Ningún Miembro podrá invocar ulteriormente las disposicio-
nes de este artículo, salvo con respecto a las regiones así indicadas.
3. Todo Miembro que invoque las disposiciones del presente artículo deberá indicar, en las
memorias anuales posteriores, las regiones respecto de las cuales renuncie al derecho a
invocar dichas disposiciones.
Anexo normativo
1. Respecto de los territorios mencionados en el artículo 35 de la Constitución de la Organiza-
ción Internacional del Trabajo enmendada por el Instrumento de enmienda a la Constitu-
ción de la Organización Internacional del Trabajo, 1946, excepción hecha de los territorios
a que se refieren los párrafos 4 y 5 de dicho artículo, tal como quedó enmendado, todo
Miembro de la Organización que ratifique el presente Convenio deberá comunicar al Direc-
tor General de la Oficina Internacional del Trabajo, en el plazo más breve posible después
de su ratificación, una declaración en la que manifieste:
a) los territorios respecto de los cuales se obliga a que las disposiciones del Convenio sean
aplicadas sin modificaciones;
b) los territorios respecto de los cuales se obliga a que las disposiciones del Convenio sean
aplicadas con modificaciones, junto con los detalles de dichas modificaciones;
c) los territorios respecto de los cuales es inaplicable el Convenio y los motivos por los que
es inaplicable;
2. Las obligaciones a que se refieren los apartados a) y b) del párrafo 1 de este artículo se con-
siderarán parte integrante de la ratificación y producirán sus mismos efectos.
3. Todo Miembro podrá renunciar, total o parcialmente, por medio de una nueva declaración,
a cualquier reserva formulada en su primera declaración en virtud de los apartados b), c) o
d) del párrafo 1 de este artículo.
4. Durante los períodos en que este Convenio pueda ser denunciado, de conformidad con
las disposiciones del artículo 34, todo Miembro podrá comunicar al Director General una
declaración por la que modifique, en cualquier otro respecto, los términos de cualquier de-
claración anterior y en la que indique la situación en territorios determinados.
Artículo 31
2. Podrán comunicar al Director General de la Oficina Internacional del Trabajo una declara-
ción por la que se acepten las obligaciones de este Convenio:
a) dos o más Miembros de la Organización, respecto de cualquier territorio que esté bajo su
autoridad común; o
4. El Miembro, los Miembros o la autoridad internacional interesados podrán renunciar, total o
parcialmente, por medio de una declaración ulterior, al derecho a invocar una modificación
indicada en cualquier otra declaración anterior.
5. Durante los períodos en que este Convenio pueda ser denunciado de conformidad con las
disposiciones del artículo 34, el Miembro, los Miembros o la autoridad internacional inte-
resados podrán comunicar al Director General una declaración por la que modifiquen, en
cualquier otro respecto, los términos de cualquier declaración anterior y en la que indiquen
la situación en lo que se refiere a la aplicación del Convenio.
Las ratificaciones formales del presente Convenio serán comunicadas, para su registro, al Di-
rector General de la Oficina Internacional del Trabajo.
Anexo normativo
1. Este Convenio obligará únicamente a aquellos Miembros de la Organización Internacional
del Trabajo cuyas ratificaciones haya registrado el Director General.
2. Entrará en vigor doce meses después de la fecha en que las ratificaciones de dos Miembros
hayan sido registradas por el Director General.
3. Desde dicho momento, este Convenio entrará en vigor, para cada Miembro, doce meses
después de la fecha en que haya sido registrada su ratificación.
Artículo 34
1. Todo Miembro que haya ratificado este Convenio podrá denunciarlo a la expiración de un
período de diez años, a partir de la fecha en que se haya puesto inicialmente en vigor, me-
diante un acta comunicada, para su registro, al Director General de la Oficina Internacional
del Trabajo. La denuncia no surtirá efecto hasta un año después de la fecha en que se haya
registrado.
2. Todo Miembro que haya ratificado este Convenio y que, en el plazo de un año después de
la expiración del período de diez años mencionado en el párrafo precedente, no haga uso
del derecho de denuncia previsto en este artículo quedará obligado durante un nuevo pe-
ríodo de diez años, y en lo sucesivo podrá denunciar este Convenio a la expiración de cada
período de diez años, en las condiciones previstas en este artículo.
Artículo 35
1. El Director General de la Oficina Internacional del Trabajo notificará a todos los Miembros
de la Organización Internacional del Trabajo el registro de cuantas ratificaciones, declara-
ciones y denuncias le comuniquen los Miembros de la Organización.
Artículo 37
Cada vez que lo estime necesario, el Consejo de Administración de la Oficina Internacional del
Trabajo presentará a la Conferencia General una memoria sobre la aplicación del Convenio y
considerará la conveniencia de incluir en el orden del día de la Conferencia la cuestión de su
revisión total o parcial.
Artículo 38
1. En caso de que la Conferencia adopte un nuevo convenio que implique una revisión total o
parcial del presente, y a menos que el nuevo convenio contenga disposiciones en contrario:
a) la ratificación, por un Miembro, del nuevo convenio revisor implicará, ipso jure, la denun-
cia inmediata de este Convenio, no obstante las disposiciones contenidas en el artículo
34, siempre que el nuevo convenio revisor haya entrado en vigor;
b) a partir de la fecha en que entre en vigor el nuevo convenio revisor, el presente Convenio
cesará de estar abierto a la ratificación por los Miembros.
2. Este Convenio continuará en vigor en todo caso, en su forma y contenido actuales, para los
Miembros que lo hayan ratificado y no ratifiquen el convenio revisor.
Artículo 39
Las versiones inglesa y francesa del texto de este Convenio son igualmente auténticas.
Anexo normativo
La Conferencia General de la Organización Internacional del Trabajo:
Tomando nota de las disposiciones de los convenios internacionales del trabajo existentes so-
bre la inspección del trabajo, como el Convenio sobre la inspección del trabajo, 1947, aplicable
a la industria y al comercio, y el Convenio sobre las plantaciones, 1958, que cubre una categoría
limitada de empresas agrícolas;
Considerando que sería útil adoptar normas internacionales generales sobre la inspección del
trabajo en la agricultura;
Después de haber decidido adoptar diversas proposiciones relativas a la inspección del traba-
jo en la agricultura, cuestión que constituye el cuarto punto del orden del día de la reunión, y
Después de haber decidido que dichas proposiciones revistan la forma de un convenio inter-
nacional,
adopta, con fecha veinticinco de junio de mil novecientos sesenta y nueve, el siguiente Con-
venio, que podrá ser citado como el Convenio sobre la inspección del trabajo (agricultura),
1969:
Artículo 1
1. A los fines del presente Convenio, la expresión empresa agrícola significa las empresas
o partes de empresas que se dedican a cultivos, cría de ganado, silvicultura, horticultura,
transformación primaria de productos agrícolas por el mismo productor o cualquier otra
forma de actividad agrícola.
2. Cuando sea necesario, la autoridad competente, previa consulta con las organizaciones más
representativas de empleadores y de trabajadores interesadas, cuando existan, determina-
rá la línea de demarcación entre la agricultura, por una parte, y la industria y el comercio, por
otra, en forma tal que ninguna empresa agrícola quede al margen del sistema nacional de
inspección del trabajo.
Artículo 2
Artículo 3
Todo Miembro de la Organización Internacional del Trabajo para el que esté en vigor el pre-
sente Convenio deberá mantener un sistema de inspección del trabajo en la agricultura.
Artículo 4
El sistema de inspección del trabajo en la agricultura se aplicará a las empresas agrícolas que
ocupen trabajadores asalariados o aprendices, cualesquiera que sean la forma de su remune-
ración y la índole, forma o duración de su contrato de trabajo.
Artículo 5
1. Todo Miembro que ratifique el presente Convenio podrá obligarse también, en una decla-
ración adjunta a su ratificación, a extender la inspección del trabajo en la agricultura a una
o más de las siguientes categorías de personas que trabajen en empresas agrícolas:
b) personas que participen en una empresa económica colectiva, como los miembros de
cooperativas;
2. Todo Miembro que haya ratificado el presente Convenio podrá comunicar ulteriormente al
Director General de la Oficina Internacional del Trabajo una declaración por la que se com-
prometa a extender la inspección a una o más categorías de personas mencionadas en el
párrafo precedente, no comprendidas ya en virtud de una declaración anterior.
Anexo normativo
que someta en virtud del artículo 22 de la Constitución de la Organización Internacional del
Trabajo, en qué medida ha dado o se propone dar efecto a las disposiciones del Convenio
respecto de las categorías de personas a que se refiere el párrafo 1 del presente artículo que
aún no hayan sido comprendidas en una declaración.
Artículo 6
1. El sistema de inspección del trabajo en la agricultura estará encargado de: a) velar por
el cumplimiento de las disposiciones legales relativas a las condiciones de trabajo y a la
protección de los trabajadores en el ejercicio de su profesión, tales como las disposicio-
nes sobre horas de trabajo, salarios, descanso semanal y vacaciones; seguridad, higiene y
bienestar; empleo de mujeres y menores, y demás disposiciones afines, en la medida en
que los inspectores del trabajo estén encargados de velar por el cumplimiento de dichas
disposiciones;
2. La legislación nacional puede confiar a los inspectores del trabajo en la agricultura fun-
ciones de asesoramiento o de control del cumplimiento de las disposiciones legales sobre
condiciones de vida de los trabajadores y de sus familias.
3. Ninguna otra función que se encomiende a los inspectores del trabajo en la agricultura
deberá entorpecer el cumplimiento efectivo de sus funciones principales o menoscabar, en
manera alguna, la autoridad e imparcialidad que los inspectores necesitan en sus relaciones
con los empleadores y los trabajadores.
Artículo 7
1. En la medida en que sea compatible con la práctica administrativa del Miembro, la inspec-
ción del trabajo en la agricultura deberá estar bajo la vigilancia y control de un organismo
central.
3. La inspección del trabajo en la agricultura podría ser realizada, por ejemplo:
a) por un órgano único de inspección del trabajo que tendría la responsabilidad de todos
los sectores de actividad económica;
b) por un órgano único de inspección del trabajo, que organizaría en su seno una especia-
lización funcional mediante la adecuada formación de los inspectores encargados de
ejercer sus funciones en la agricultura;
c) por un órgano único de inspección del trabajo, que organizaría en su seno una especia-
lización institucional por medio de la creación de un servicio técnicamente calificado,
cuyos agentes ejercerían sus funciones en la agricultura; o
Artículo 8
1. El personal de la inspección del trabajo en la agricultura deberá estar compuesto de funcio-
narios públicos cuya situación jurídica y condiciones de servicio les garanticen estabilidad
en el empleo e independencia de los cambios de gobierno y de cualquier influencia exter-
na indebida.
2. Cuando sea conforme a la legislación o a la práctica nacional, los Miembros pueden incluir
en su sistema de inspección del trabajo en la agricultura a agentes o representantes de las
organizaciones profesionales, cuya acción completaría la de los funcionarios públicos. Di-
chos agentes y representantes deberán gozar de garantías de estabilidad en sus funciones
y estar a cubierto de toda influencia externa indebida.
Anexo normativo
1. A reserva de las condiciones de contratación que la legislación nacional establezca para
los funcionarios públicos, en la contratación de inspectores del trabajo en la agricultura se
deberán tener en cuenta únicamente las aptitudes del candidato para el desempeño de sus
funciones.
3. Los inspectores del trabajo en la agricultura deberán recibir formación adecuada para el
desempeño de sus funciones, y se deberán tomar medidas para proporcionarles formación
complementaria apropiada en el curso de su trabajo.
Artículo 10
Las mujeres y los hombres deberán ser igualmente elegibles para formar parte del personal
de la inspección del trabajo en la agricultura, y, cuando fuere necesario, se asignarán funciones
especiales a los inspectores y a las inspectoras.
Artículo 11
Todo Miembro deberá adoptar las medidas necesarias para asegurar que expertos y técni-
cos debidamente calificados y que puedan contribuir a la solución de problemas que re-
quieran conocimientos técnicos colaboren, de acuerdo con los métodos que se consideren
más apropiados a las condiciones nacionales, en el servicio de inspección del trabajo en la
agricultura.
Artículo 12
1. La autoridad competente deberá adoptar medidas apropiadas para promover una coope-
ración eficaz entre los servicios de inspección del trabajo en la agricultura y los servicios
gubernamentales e instituciones públicas o reconocidas que puedan ser llamados a ejercer
actividades análogas.
Artículo 13
Artículo 14
Deberán tomarse medidas a fin de asegurar que el número de inspectores del trabajo en la
agricultura sea suficiente para asegurar el cumplimiento efectivo de las funciones del servicio
de inspección, y sea determinado teniendo debidamente en cuenta:
a) la importancia de las funciones que tengan que desempeñar los inspectores, particularmente:
i) el número, naturaleza, importancia y situación de las empresas agrícolas sujetas a inspección;
ii) el número y categorías de las personas que trabajen en tales empresas; y
iii) el número y complejidad de las disposiciones legales por cuya aplicación deba velarse;
c) las condiciones prácticas en que deberán realizarse las visitas de inspección para que sean
eficaces.
Artículo 15
1. La autoridad competente deberá adoptar las medidas necesarias para proporcionar a los
inspectores del trabajo en la agricultura:
a) oficinas locales situadas habida cuenta de la situación geográfica de las empresas agrí-
colas y de las vías de comunicación que existan, que estén equipadas de acuerdo con
Anexo normativo
personas interesadas;
2. La autoridad competente deberá adoptar las medidas necesarias para reembolsar a los
inspectores del trabajo en la agricultura todo gasto imprevisto y cualquier gasto de viaje
requeridos para el cumplimiento de sus obligaciones.
Artículo 16
1. Los inspectores del trabajo en la agricultura provistos de las credenciales pertinentes esta-
rán autorizados:
a) para entrar libremente y sin previa notificación, a cualquier hora del día o de la noche, en
todo sitio de trabajo sujeto a inspección;
b) para entrar de día en cualquier lugar respecto del cual tengan motivo razonable para
suponer que está sujeto a inspección; y
c) para proceder a cualquier prueba, investigación o examen que consideren necesario a fin
de cerciorarse de que las disposiciones legales se observan estrictamente, y en particular:
i) p
ara interrogar, solos o ante testigos, al empleador, al personal de la empresa o a cual-
quier otra persona que allí se encuentre sobre cualquier asunto relativo a la aplicación
de las disposiciones legales;
ii) para exigir, en la forma prescrita por la legislación nacional, la presentación de libros,
registros u otros documentos que la legislación nacional relativa a las condiciones de
vida y de trabajo ordene llevar, para comprobar su conformidad con las disposiciones
legales y para obtener copias o extractos de los mismos;
iii) para tomar o sacar muestras de productos, substancias y materiales utilizados o mani-
pulados en la empresa agrícola, con el propósito de analizarlos, siempre que se notifique
al empleador o a su representante que los productos, muestras o substancias han sido
tomados o sacados con dicho propósito.
3. Al efectuar una visita de inspección, el inspector deberá notificar su presencia al empleador
o a su representante y a los trabajadores o a sus representantes, a menos que considere que
dicha notificación puede perjudicar el cumplimiento de sus funciones.
Artículo 17
Los servicios de inspección del trabajo en la agricultura deberán participar, en los casos y en la
forma que la autoridad competente determine, en el control preventivo de nuevas instalacio-
nes, materias o substancias y de nuevos procedimientos de manipulación o transformación de
productos que puedan constituir un peligro para la salud o la seguridad.
Artículo 18
1. Los inspectores del trabajo en la agricultura estarán facultados para tomar medidas a fin de
que se eliminen los defectos observados en la instalación, montaje o métodos de trabajo en
las empresas agrícolas, incluido el uso de materias o substancias peligrosas, cuando tengan
motivo razonable para creer que constituyen un peligro para la salud o seguridad.
2. A fin de permitirles que adopten dichas medidas, los inspectores estarán facultados, a reser-
va de cualquier recurso legal o administrativo que pueda prescribir la legislación nacional,
para ordenar o hacer ordenar:
a) que, dentro de un plazo determinado, se hagan las modificaciones que sean necesa-
rias en la instalación, planta, locales, herramientas, equipo o maquinaria para asegurar el
cumplimiento de las disposiciones legales relativas a la salud o seguridad; o
b) que se adopten medidas de aplicación inmediata, que pueden consistir hasta en el cese
del trabajo, en caso de peligro inminente para la salud o seguridad.
Anexo normativo
ordenadas de conformidad con el párrafo 2, o solicitadas de conformidad con el párrafo 3,
deberán ser puestos inmediatamente en conocimiento del empleador y de los represen-
tantes de los trabajadores.
Artículo 19
2. En la medida de los posible, los inspectores del trabajo participarán en toda investigación,
en el lugar en donde hayan ocurrido, sobre las causas de los accidentes del trabajo y de
los casos de enfermedad profesional más graves, y particularmente de aquellos que hayan
tenido consecuencias mortales u ocasionado varias víctimas.
Artículo 20
a) se prohibirá que los inspectores del trabajo en la agricultura tengan cualquier interés direc-
to o indirecto en las empresas que estén bajo su vigilancia;
b) los inspectores del trabajo en la agricultura estarán obligados, so pena de sanciones o me-
didas disciplinarias apropiadas, a no revelar, ni aun después de haber dejado el servicio, los
secretos comerciales o de fabricación o los métodos de producción de que puedan haber
tenido conocimiento en el desempeño de sus funciones; y
c) los inspectores del trabajo en la agricultura deberán considerar como absolutamente confi-
dencial el origen de cualquier queja que les dé a conocer un defecto, un peligro en los méto-
dos de trabajo o una infracción de las disposiciones legales, y no deberán revelar al empleador
o a su representante que la visita de inspección se efectúa por haberse recibido dicha queja.
Artículo 21
Las empresas agrícolas deberán ser inspeccionadas con la frecuencia y el esmero necesarios
para garantizar la aplicación efectiva de las disposiciones legales pertinentes.
1. Las personas que violen o descuiden la observancia de las disposiciones legales por cuyo
cumplimiento velan los inspectores del trabajo en la agricultura deberán ser sometidas in-
mediatamente, sin aviso previo, a un procedimiento judicial o administrativo. Sin embargo,
la legislación nacional podrá establecer excepciones, en los casos en que deba darse un
aviso previo, a fin de solucionar la situación o tomar disposiciones preventivas.
2. Los inspectores del trabajo tendrán la facultad de advertir y de aconsejar, en vez de iniciar o
recomendar el procedimiento correspondiente.
Artículo 23
Si los inspectores del trabajo en la agricultura no pueden ellos mismos iniciar el procedimien-
to, deberán estar facultados para transmitir directamente a la autoridad competente los infor-
mes sobre violación de las disposiciones legales.
Artículo 24
La legislación nacional deberá prescribir sanciones adecuadas, que deberán ser efectivamen-
te aplicadas, para los casos de violación de las disposiciones legales por cuyo cumplimiento
velen los inspectores del trabajo en la agricultura y para los casos en que se obstaculice a los
inspectores del trabajo el desempeño de sus funciones.
Artículo 25
1. Los inspectores del trabajo o las oficinas locales de inspección, según sea el caso, deberán
presentar a la autoridad central de inspección informes periódicos sobre los resultados de
sus actividades en la agricultura.
Anexo normativo
1. La autoridad central de inspección publicará, como informe separado o como parte de su
informe anual general, un informe anual sobre la labor de los servicios de inspección en la
agricultura.
2. Estos informes anuales serán publicados dentro de un plazo razonable, que en ningún caso
podrá exceder de doce meses desde la terminación del año a que se refieran.
3. Dentro de los tres meses siguientes a su publicación se remitirán copias de los informes
anuales al Director General de la Oficina Internacional del Trabajo.
Artículo 27
El informe anual que publique la autoridad central de inspección tratará en particular de las
siguientes cuestiones, en la medida en que se encuentren bajo el control de dicha autoridad:
c) estadísticas de las empresas agrícolas sujetas a inspección y número de personas que tra-
bajen en ellas;
Artículo 28
Las ratificaciones formales del presente Convenio serán comunicadas, para su registro, al Di-
rector General de la Oficina Internacional del Trabajo.
2. Entrará en vigor doce meses después de la fecha en que las ratificaciones de dos Miembros
hayan sido registradas por el Director General.
3. Desde dicho momento, este Convenio entrará en vigor, para cada Miembro, doce meses
después de la fecha en que haya sido registrada su ratificación.
Artículo 30
1. Todo Miembro que haya ratificado este Convenio podrá denunciarlo a la expiración de un
período de diez años, a partir de la fecha en que se haya puesto inicialmente en vigor, me-
diante un acta comunicada, para su registro, al Director General de la Oficina Internacional
del Trabajo. La denuncia no surtirá efecto hasta un año después de la fecha en que se haya
registrado.
2. Todo Miembro que haya ratificado este Convenio y que, en el plazo de un año después de
la expiración del período de diez años mencionado en el párrafo precedente, no haga uso
del derecho de denuncia previsto en este artículo quedará obligado durante un nuevo pe-
ríodo de diez años, y en lo sucesivo podrá denunciar este Convenio a la expiración de cada
período de diez años, en las condiciones previstas en este artículo.
Artículo 31
1. El Director General de la Oficina Internacional del Trabajo notificará a todos los Miembros
de la Organización Internacional del Trabajo el registro de cuantas ratificaciones, declara-
ciones y denuncias le comuniquen los Miembros de la Organización.
2. Al notificar a los Miembros de la Organización el registro de la segunda ratificación que le
haya sido comunicada, el Director General llamará la atención de los Miembros de la Orga-
nización sobre la fecha en que entrará en vigor el presente Convenio.
Anexo normativo
El Director General de la Oficina Internacional del Trabajo comunicará al Secretario General de
las Naciones Unidas, a los efectos del registro y de conformidad con el artículo 102 de la Carta
de las Naciones Unidas, una información completa sobre todas las ratificaciones, declaraciones
y actas de denuncia que haya registrado de acuerdo con los artículos precedentes.
Artículo 33
Cada vez que lo estime necesario, el Consejo de Administración de la Oficina Internacional del
Trabajo presentará a la Conferencia una memoria sobre la aplicación del Convenio y conside-
rará la conveniencia de incluir en el orden del día de la Conferencia la cuestión de su revisión
total o parcial.
Artículo 34
1. En caso de que la Conferencia adopte un nuevo convenio que implique una revisión total o
parcial del presente, y a menos que el nuevo convenio contenga disposiciones en contrario:
a) la ratificación, por un Miembro, del nuevo convenio revisor implicará, ipso jure, la denun-
cia inmediata de este Convenio, no obstante las disposiciones contenidas en el artículo
30, siempre que el nuevo convenio revisor haya entrado en vigor;
b) a partir de la fecha en que entre en vigor el nuevo convenio revisor, el presente Convenio
cesará de estar abierto a la ratificación por los Miembros.
2. Este Convenio continuará en vigor en todo caso, en su forma y contenido actuales, para los
Miembros que lo hayan ratificado y no ratifiquen el convenio revisor.
Artículo 35
Las versiones inglesa y francesa del texto de este Convenio son igualmente auténticas.
VISTO
CONSIDERANDO:
Que en los Estados Partes se constata la existencia de empleo no registrado, con el conse-
cuente efecto perturbador para la constitución del MERCOSUR;
Artículo 1ro. - Instruir a los organismos competentes de cada Estado Parte que instrumenten
las medidas necesarias para evitar el empleo no registrado.
Anexo normativo
de Trabajo del MERCOSUR
VISTO: El Tratado de Asunción, el Protocolo de Ouro Preto, las Decisiones N°32/06 y 33/06 del
Consejo del Mercado Común y la Resolución N°36/06 del Grupo Mercado Común.
CONSIDERANDO:
Que la inspección del trabajo es una herramienta fundamental que poseen los Estados para
verificar las condiciones de trabajo y hacer efectiva la normativa que rige las relaciones labo-
rales en su territorio.
Que la inspección del trabajo tiene un rol indelegable en la garantía de los principios y dere-
chos fundamentales en el trabajo, esenciales para mantener el vínculo entre progreso social y
crecimiento económico, en los términos de la Declaración de la Organización Internacional del
Trabajo (OIT) relativa a los principios y derechos fundamentales en el trabajo.
Que los Estados Partes han ratificado el Convenio N°81 sobre la Inspección del Trabajo de la OIT.
Que el primer objetivo que establece el Tratado de Asunción en sus considerandos es alcanzar el
desarrollo económico con justicia social;
RESUELVE:
Art. 1 - Aprobar el “Plan Regional de Inspección del Trabajo del MERCOSUR”, que consta como
Anexo y forma parte de la presente Resolución.
Asimismo es necesario que el PRITM sea considerado en forma articulada con los objetivos,
funcionamiento y campos de aplicación del Plan Regional de Prevención y Erradicación del
Trabajo Infantil en el MERCOSUR aprobado por Resolución GMC Nº36/06 y el objetivo de la
facilitación de la circulación de los trabajadores en el MERCOSUR.
Dimensiones:
a) Acción Fiscalizadora:
Anexo normativo
piloto de coordinación regional en materia de inspección del trabajo, donde los servicios de
inspección puedan establecer canales de comunicación e información con los servicios fiscali-
zadores vecinos y puedan coordinar acciones conjuntas en temas sensibles.
Cada Estado Parte deberá presentar al menos una zona geográfica de frontera donde comen-
zará a construir las articulaciones necesarias para alcanzar un AGCEF, identificando interlocu-
tores a nivel regional, nacional y local de cada lado de la frontera.
Los próximos operativos de fiscalización conjunta a realizarse en el marco del PRITM, deberán
ser realizados de forma coordinada y simultánea entre los Estados Partes, respetando el fun-
cionamiento habitual de los servicios de inspección de trabajo de cada Estado Parte, sin los
contratiempos e incompatibilidades que pueden generarse por la presencia de observadores
de los otros Estados Partes. Esto implica que los Operativos serán consensuados entre las ins-
pecciones del trabajo de cada Estado Parte; se llevarán a cabo de forma simultánea y paralela
y se realizará una jornada conjunta final de balance y conclusiones propositivas.
4) Estadísticas
Cada Estado Parte presentará a la Comisión Operativa Coordinadora las Planillas con infor-
mación estadística anual sobre la actividad de inspección, tomando como base el informe de
inspección del trabajo que cada Estado Parte debe presentar a la Organización Internacional
del Trabajo (OIT), de acuerdo al Convenio N°81 sobre inspección del trabajo. Estos informes
pueden compilarse en una publicación en formato electrónico que dé cuenta de la actividad
de inspección del conjunto. El Observatorio del Mercado de Trabajo del MERCOSUR (OMTM)
colaborará con la implementación de este punto.
5) Documentos
La Comisión Operativa Coordinadora elaborará y difundirá documentos sobre temas de inte-
rés específicos de la inspección del trabajo en el marco del Proceso de Integración Regional y
6) Encuestas
La Comisión Operativa Coordinadora podrá realizar encuestas específicas sobre temas de in-
terés de la inspección del trabajo es un insumo importante para el desempeño del mismo.
Teniendo en cuenta que la realización de encuestas no es una función específica de las áreas
de fiscalización laboral per se, se pretende, identificar contrapartes, ya sea en los propios Minis-
terios de Trabajo o en las áreas de estadísticas y encuestas de cada Estado Parte, para orientar
la obtención de datos sobre temas de interés para los servicios de inspección. Estos temas de
interés deberán ser consensuados por los Estados Partes para poder darle un marco regional
a la obtención de los datos. Para la implementación de este punto, colaborará, dentro de sus
funciones, el Observatorio del Mercado de Trabajo del MERCOSUR (OMTM).
En este sentido se tomará en consideración los compromisos asumidos por Brasil en cuanto
a compartir y difundir sus experiencias en formación de los inspectores, teniendo en cuenta
los avances realizados en la materia, así como en coordinar la elaboración de una propuesta
regional de Plan de Formación del Inspector del Trabajo, en el marco del PRITM.
Asimismo apoyar los esfuerzos dirigidos a trabajar en la construcción de una plataforma vir-
tual para la capacitación y formación de los inspectores del trabajo que pueda ser concebida
como la base para la creación en el mediano plazo de un Centro Virtual de Formación y Capa-
citación Regional para los Inspectores del Trabajo.
Anexo normativo
del procedimiento de inspeccion
VISTO: El Tratado de Asunción, el Protocolo de Ouro Preto y la Decisión Nº19/02 del Consejo
del Mercado Común.
CONSIDERANDO:
Que en sucesivas reuniones del SGT Nº10 se acordaron los requisitos que los Estados Partes
deberán tener en cuenta como pautas mínimas para las inspecciones de trabajo a realizarse
en los Estados Partes.
Que resulta necesario adoptar a nivel regional procedimientos inspectivos homogéneos que
aseguren un eficaz control de las normas laborales nacionales vigentes en los cuatro Estados
Partes.
Que los Estados Partes han ratificado el Convenio Internacional de Trabajo (OIT) Nº81 (Inspec-
ción del Trabajo en la Industria y el Comercio) y han adoptado la Declaración Sociolaboral del
MERCOSUR, previéndose el compromiso de velar por el cumplimiento efectivo de las normas
laborales que aseguran condiciones adecuadas de trabajo.
RECOMIENDA:
Art. 1 - En las inspecciones de trabajo que realice la autoridad competente a todo empleador
los Estados Partes deberán, siempre que sea compatible con sus prácticas administrativas y
con la actividad inspeccionada, verificar, como mínimo, las cuestiones que a título enunciativo,
a continuación se indican:
Anexo normativo
TITULO II
De la regularización del empleo no registrado
Capítulo 1
Empleo no registrado
a) En el libro especial del artículo 52 de la Ley de Contrato de Trabajo (t.o. 1976) o en la documen-
tación laboral que haga sus veces, según lo previsto en los regímenes jurídicos particulares;
Las relaciones laborales que no cumplieren con los requisitos fijados en los incisos preceden-
tes se considerarán no registradas.
Artículo 8° - El empleador que no registrare una relación laboral abonará al trabajador afec-
tado una indemnización equivalente a una cuarta parte de las remuneraciones devengadas
desde el comienzo de la vinculación, computadas a valores reajustados de acuerdo a la nor-
mativa vigente.
En ningún caso esta indemnización podrá ser inferior a tres veces el importe mensual del sala-
rio que resulte de la aplicación del artículo 245 de la Ley de Contrato de Trabajo (t.o. 1976).
a. intime al empleador a fin de que proceda a la inscripción, establezca la fecha real de ingreso
o el verdadero monto de las remuneraciones, y b. proceda de inmediato y, en todo caso, no
después de las 24 horas hábiles siguientes, a remitir a la Administración Federal de Ingresos
Públicos copia del requerimiento previsto en el inciso anterior.
Con la intimación el trabajador deberá indicar la real fecha de ingreso y las circunstancias
verídicas que permitan calificar a la inscripción como defectuosa. Si el empleador contestare y
diere total cumplimiento a la intimación dentro del plazo de los treinta días, quedará eximido
del pago de las indemnizaciones antes indicadas.
A los efectos de lo dispuesto en los artículos 8°, 9° y 10 de esta ley, solo se computarán remune-
raciones devengadas hasta los dos años anteriores a la fecha de su entrada en vigencia.
Artículo 15. - Si el empleador despidiere sin causa justificada al trabajador dentro de los dos
años desde que se le hubiere cursado de modo justificado la intimación prevista en el artículo
11, el trabajador despedido tendrá derecho a percibir el doble de las indemnizaciones que le
hubieren correspondido como consecuencia del despido. Si el empleador otorgare efectiva-
mente el preaviso, su plazo también se duplicará.
Anexo normativo
Sancionada: Setiembre 13 de 2000.
Artículo 1° - Las indemnizaciones previstas por las Leyes 20.744 (texto ordenado en 1976),
artículo 245 y 25.013, artículo 7°, o las que en el futuro las reemplacen, serán incrementadas al
doble cuando se trate de una relación laboral que al momento del despido no esté registrada
o lo esté de modo deficiente.
Para las relaciones iniciadas con anterioridad a la entrada en vigencia de la presente ley, los
empleadores gozarán de un plazo de treinta días contados a partir de dicha oportunidad para
regularizar la situación de sus trabajadores, vencido el cual le será de plena aplicación el incre-
mento dispuesto en el párrafo anterior.
Si hubieran existido causas que justificaren la conducta del empleador, los jueces, mediante
resolución fundada, podrán reducir prudencialmente el incremento indemnizatorio dispuesto
por el presente artículo hasta la eximición de su pago.
CAPITULO VIII
Artículo 43. - Agrégase como artículo 132 bis de la Ley 20.744 (t.o. por decreto 390/76) el
siguiente:
Artículo 132 bis: Si el empleador hubiere retenido aportes del trabajador con destino a los or-
ganismos de la seguridad social, o cuotas, aportes periódicos o contribuciones a que estuvie-
sen obligados los trabajadores en virtud de normas legales o provenientes de las convenciones
colectivas de trabajo, o que resulten de su carácter de afiliados a asociaciones profesionales
de trabajadores con personería gremial, o de miembros de sociedades mutuales o coopera-
tivas, o por servicios y demás prestaciones que otorguen dichas entidades, y al momento de
producirse la extinción del contrato de trabajo por cualquier causa no hubiere ingresado total
o parcialmente esos importes a favor de los organismos, entidades o instituciones a los que
estuvieren destinados, deberá a partir de ese momento pagar al trabajador afectado una san-
ción conminatoria mensual equivalente a la remuneración que se devengaba mensualmente
a favor de este último al momento de operarse la extinción del contrato de trabajo, importe
que se devengará con igual periodicidad a la del salario hasta que el empleador acreditare de
modo fehaciente haber hecho efectivo el ingreso de los fondos retenidos. La imposición de la
sanción conminatoria prevista en este artículo no enerva la aplicación de las penas que proce-
dieren en la hipótesis de que hubiere quedado configurado un delito del derecho penal.
Artículo 44. - Agrégase como segundo párrafo del artículo 15 de la Ley de Contrato de Traba-
jo, el siguiente texto:
Sin perjuicio de ello, si una o ambas partes pretendieren que no se encuentran alcanzadas
por las normas que establecen la obligación de pagar o retener los aportes con destino a los
organismos de la seguridad social, o si de las constancias disponibles surgieren indicios de que
el trabajador afectado no se encuentra regularmente registrado o de que ha sido registrado
tardíamente o con indicación de una remuneración inferior a la realmente percibida o de que
no se han ingresado parcial o totalmente aquellos aportes y contribuciones, la autoridad ad-
ministrativa o judicial interviniente deberá remitir las actuaciones a la Administración Federal
de Ingresos Públicos con el objeto de que la misma establezca si existen obligaciones omiti-
das y proceda en su consecuencia.
Anexo normativo
ma quedará incursa en grave incumplimiento de sus deberes como funcionario y será, en con-
secuencia, pasible de las sanciones y penalidades previstas para tales casos.
Artículo 45. -Agrégase como último párrafo del artículo 80 de la Ley de Contrato de Trabajo
(t.o. por decreto 390/76), el que sigue:
Artículo 46. - Agrégase como último párrafo del artículo 132 de la Ley 18.345 (t.o. por decreto
106/98) el que sigue:
El secretario que omitiere actuar del modo establecido en esta norma quedará incurso en
grave incumplimiento de sus deberes como funcionario y será, en consecuencia, pasible de las
sanciones y penalidades previstas para tales casos.
Artículo 47. - Modifícase el artículo 11 de la Ley 24.013, el que tendrá en lo sucesivo el siguien-
te texto:
a. intime al empleador a fin de que proceda a la inscripción, establezca la fecha real de ingreso
o el verdadero monto de las remuneraciones, y b. proceda de inmediato y, en todo caso, no
después de las 24 horas hábiles siguientes, a remitir a la Administración Federal de Ingresos
Públicos copia del requerimiento previsto en el inciso anterior.
Con la intimación el trabajador deberá indicar la real fecha de ingreso y las circunstancias
verídicas que permitan calificar a la inscripción como defectuosa. Si el empleador contestare y
diere total cumplimiento a la intimación dentro del plazo de los treinta días, quedará eximido
del pago de las indemnizaciones antes indicadas.
A los efectos de lo dispuesto en los artículos 8°, 9° y 10 de esta ley, solo se computarán remune-
raciones devengadas hasta los dos años anteriores a la fecha de su entrada en vigencia.
Artículo 48. - Agrégase al artículo 2° de la Ley 23.789 un nuevo inciso, cuyo texto es el que
sigue:
d) El trabajador dependiente o la asociación sindical que lo represente, para enviar a la Admi-
nistración Federal de Ingresos Públicos copia del requerimiento enviado a su empleador en
los términos del inciso b) del artículo 11 de la Ley 24.013.
Anexo normativo
TITULO III
ADMINISTRACION DEL TRABAJO
Capítulo I
Inspección del Trabajo
Artículo 28. - Créase el Sistema Integral de Inspección del Trabajo y de la Seguridad Social (SI-
DITYSS), destinado al control y fiscalización del cumplimiento de las normas del trabajo y de la
seguridad social en todo el territorio nacional, a fin de garantizar los derechos de los trabajado-
res previstos en el artículo 14 bis de la Constitución Nacional, y en los Convenios Internaciona-
les ratificados por la República Argentina, eliminar el empleo no registrado y las demás distor-
siones que el incumplimiento de la normativa laboral y de la seguridad social provoquen.
A tal efecto se celebrarán convenios y ejecutarán acciones con las provincias y la Ciudad Autóno-
ma de Buenos Aires, para alcanzar los fines y objetivos descriptos en los párrafos precedentes.
Los convenios celebrados por el Estado nacional con las Provincias y la Ciudad Autónoma de
Buenos Aires, con anterioridad a la sanción de la presente ley, mantendrán su vigencia hasta
tanto no sean modificados.
Invítase a las provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, a dictar normas similares a
las del presente capítulo en sus respectivas jurisdicciones.
a) Velar para que los distintos servicios del sistema cumplan con las normas que los regulan y,
en especial, con las exigencias de los Convenios 81 y 129 de la Organización Internacional
del Trabajo.
c) Ejercer las demás funciones que a la autoridad central asignan los Convenios 81 y 129 de la
Organización Internacional del Trabajo, sus recomendaciones complementarias y aquellas
otras que contribuyan al mejor desempeño de los servicios.
Artículo 30. - Cuando un servicio local de inspección del trabajo no cumpla con las exigen-
cias de los Convenios 81 y 129 de la Organización Internacional del Trabajo o con las que se
deriven de este capítulo, el MINISTERIO DE TRABAJO, EMPLEO Y SEGURIDAD SOCIAL previa
intervención del Consejo Federal del Trabajo, ejercerá coordinadamente con éste y con las
jurisdicciones provinciales las correspondientes facultades.
Artículo 32. - Los inspectores actuarán de oficio o por denuncia, recogerán en actas el resulta-
do de sus actuaciones y, en su caso, iniciarán el procedimiento para la aplicación de sanciones.
En el ejercicio de sus funciones y dentro de su jurisdicción, los inspectores están facultados para:
a) Entrar en los lugares sujetos a inspección, sin necesidad de notificación previa ni de orden
judicial de allanamiento.
Anexo normativo
da la identificación de las personas que se encuentren en el lugar de trabajo inspeccionado.
c) Solicitar los documentos y datos que estimen necesarios para el ejercicio de sus funciones,
intimar el cumplimiento de las normas y hacer comparecer a los responsables de su cum-
plimiento.
d) Clausurar los lugares de trabajo en los supuestos legalmente previstos y ordenar la suspen-
sión inmediata de tareas que -a juicio de la autoridad de aplicación- impliquen un riesgo
grave e inminente para la salud y la seguridad de los trabajadores.
En todos los casos los inspectores labrarán un acta circunstanciada del procedimiento que
firmarán junto al o los sujetos responsables. Los responsables del cumplimiento de la norma-
tiva del trabajo y la seguridad social, están obligados a colaborar con el inspector, así como a
facilitarle la información y documentación necesarias para el desarrollo de sus competencias.
La fuerza pública deberá prestar el auxilio que requiera el inspector en ejercicio de sus funciones.
Artículo 33. - Comprobada la infracción a las normas laborales que impliquen, de alguna for-
ma, una evasión tributaria o a la Seguridad Social, el hecho deberá ser denunciado formalmen-
te a la Administración Federal de Ingresos Públicos y/o a los otros organismos de control fiscal.
Ello sin perjuicio, en el caso que corresponda, de la notificación fehaciente a las autoridades de
control migratorio a los fines de la aplicación de la Ley Nº25.871.
Artículo 35. - Sin perjuicio de las facultades propias en materia de inspección del trabajo de los
Gobiernos Provinciales y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el MINISTERIO DE TRABAJO,
EMPLEO Y SEGURIDAD SOCIAL realizará en todo el territorio nacional acciones coordinadas
con las respectivas jurisdicciones de fiscalización para la erradicación del trabajo infantil.
Las actuaciones labradas por dicho Ministerio en las que se verifiquen incumplimientos, debe-
rán ser remitidas a dichas administraciones locales, las que continuarán con el procedimiento
para la aplicación de las sanciones correspondientes.
Anexo normativo
TITULO II
Régimen especial de regularización del empleo no registrado y promoción y protección del
empleo registrado
Capítulo I
Regularización del empleo no registrado
Artículo 11. - La registración en los términos del artículo 7º de la Ley 24.013, la rectificación de
la real remuneración o de la real fecha de inicio de las relaciones laborales existentes a la fecha
de entrada en vigencia de la presente ley, producirá los siguientes efectos jurídicos:
2. Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados, Ley 19.032 y sus
modificaciones.
Los meses regularizados serán considerados respecto de la prestación adicional por permanen-
cia, y no se computarán para el cálculo del haber de la misma ni de la prestación compensatoria.
Artículo 12. - A partir del trabajador número once (11), inclusive, que se regularice, para la
procedencia de los beneficios establecidos en los incisos a), c) y d) del artículo precedente se
deberá cancelar, sólo por dichos empleados, las obligaciones adeudadas -capital e intereses-
en concepto de aportes y contribuciones, con destino a los subsistemas de la seguridad social
indicados en los puntos 1 a 7 del inciso b) del artículo 11 del presente capítulo.
Para el pago de estas obligaciones se deberá observar la forma, plazos y demás condiciones
que establecerá la Administración Federal de Ingresos Públicos, entidad autárquica en el ám-
bito del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, la cual implementará un plan de facilida-
des de pago con las siguientes características:
a) El interés de consolidación de cada una de las deudas que se incluya no podrá superar el
veinte por ciento (20%) del respectivo capital;
Anexo normativo
cada cuota del plan de pago;
c) Un pago a cuenta equivalente al seis por ciento (6%) de la deuda, y el saldo resultante en
hasta ciento veinte (120) cuotas mensuales.
Artículo 14. - La regularización de las relaciones laborales deberá efectivizarse dentro de los
ciento ochenta (180) días corridos, contados a partir de la fecha de entrada en vigencia de la
reglamentación del presente título.
Invítase a las provincias, a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y a los municipios a adherir
a este régimen, adoptando en el ámbito de sus respectivas jurisdicciones la misma medida
prevista en este artículo con relación a sus impuestos y tasas.
Capítulo II
Promoción y protección del empleo registrado
Artículo 16. - Los empleadores, por el término de veinticuatro (24) meses contados a partir
del mes de inicio de una nueva relación laboral o de la regularización de una preexistente con
b) Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados, Ley 19.032 y su modi-
ficaciones;
El beneficio consistirá en que durante los primeros doce (12) meses sólo se ingresará el cin-
cuenta por ciento (50%) de las citadas contribuciones y por los segundos doce (12) meses se
pagará el setenta y cinco por ciento (75%) de las mismas.
No se encuentran comprendidas dentro del beneficio dispuesto en este artículo las contri-
buciones con destino al Sistema de Seguro de Salud previstas en las Leyes 23.660 y 23.661 y
sus respectivas modificaciones, como tampoco las cuotas destinadas a las administradoras de
Riesgos del Trabajo, Ley 24.557 y sus modificaciones.
Artículo 17. - El régimen del presente capítulo resulta de aplicación respecto de los emplea-
dores inscriptos ante la Administración Federal de Ingresos Públicos o que se inscriban en el
marco esta ley.
Artículo 18. - El empleador gozará de este beneficio por cada nuevo dependiente que regu-
larice o incorpore a su planta de personal, siempre que no resulte alcanzado por lo dispuesto
en los artículos 19 y 20 de este capítulo.
Anexo normativo
relación a los siguientes trabajadores:
a) Los que hayan sido declarados en el régimen general de la seguridad social hasta la fecha
en que las disposiciones de esta ley tengan efecto y continúen trabajando para el mismo
empleador, con posterioridad a dicha fecha;
b) Los que hayan sido declarados en el régimen general de la seguridad social y luego de
producido el distracto laboral, cualquiera fuese su causa, sean reincorporados por el mismo
empleador dentro de los doce (12) meses, contados a partir de la fecha de desvinculación;
c) El nuevo dependiente que se contrate dentro de los doce (12) meses contados a partir de la
extinción incausada de la relación laboral de un trabajador que haya estado comprendido
en el régimen general de la seguridad social.
Artículo 20. - Quedan excluidos de pleno derecho del beneficio dispuesto en el artículo 16 los
empleadores, cuando:
a) Se le constate personal no registrado por períodos anteriores a la fecha en que las disposi-
ciones de esta ley tengan efecto, o posteriores a dicha fecha y hasta dos (2) años de finaliza-
da la vigencia del régimen establecido en el presente capítulo;
La exclusión se producirá en forma automática desde el mismo momento en que ocurrió cual-
quiera de las causales indicadas en el párrafo anterior.
Artículo 22. - Los aportes previsionales de los trabajadores comprendidos en este régimen se
realizarán al Sistema Integrado Previsional Argentino.
Las disposiciones previstas en el título II de la presente ley no afectarán los derechos de los
trabajadores consagrados en la normativa vigente.
n mejorar la calidad y cobertura de los sectores sociales dirigidos a los/as jóvenes, así como
programas de prevención integral.
n incorporar los temas relacionados con la juventud como un eje transversal en las accio-
nes y políticas públicas sectoriales.
En el campo del trabajo y la producción, la Declaración impulsa una capacitación que atien-
da especialmente a la población más vulnerable, para alcanzar la incorporación al mercado
laboral, de forma de atender a la demanda de oportunidades de ocupaciones productivas,
lo que requiere políticas generadoras de empleo, formación en competencias empresaria-
les y capacitación técnica.
3. Como miembros del Sistema Interamericano de Trabajo, hemos registrado diversos antece-
dentes surgidos de las Conferencias Interamericanas de Ministros de Trabajo (CIMT) de la
OEA sobre esta misma temática, insuficientemente retomados por la nueva Declaración:
Anexo normativo
comprometer políticas de empleo especialmente preocupadas por atender la exigencia
fundamental de incorporar a los que buscan empleo (XI CIMT, Santiago, 1998); el desarro-
llo de planes de acción nacionales sobre el trabajo decente con la asistencia de la OIT, la
promoción de la inserción laboral en ocupaciones dignas y productivas, y la generación de
ambientes y condiciones de trabajo saludables y seguros (XIII CIMT, Bahía, 2003); el impulso
a la coordinación de políticas de igualdad de oportunidades, contra toda forma de discri-
minación en el empleo y por un acceso equitativo a las oportunidades de trabajo decente
para todos los segmentos de nuestras poblaciones” (XIV CIMT, México, 2005).
B) Durante la XV CIMT, celebrada en Puerto España (2007) se introdujo una expresiva refe-
rencia sobre los/as jóvenes: “reconocemos que el futuro de nuestros pueblos recae en las
manos de nuestra juventud y que existe una ventana de oportunidad para que esta po-
blación contribuya al desarrollo de nuestras sociedades. Observamos con preocupación la
magnitud del desempleo juvenil, el alto número de jóvenes que no estudian ni trabajan y
la precariedad de sus trabajos. Por ello, promoveremos programas y proyectos que mejoren
la empleabilidad, la igualdad de oportunidades, la capacidad emprendedora y la creación
de empleo para los/as jóvenes, incluyendo a través de la educación, el desarrollo humano
integral, la capacitación y formación a lo largo de la vida que atiendan los requisitos del
mercado de trabajo. Asimismo, redoblaremos nuestros esfuerzos para lograr el compromi-
so de la Cuarta Cumbre de las Américas de reducir el desempleo juvenil y disminuir signifi-
cativamente el porcentaje de jóvenes que no estudian ni trabajan”.
En la Plataforma Laboral de las Américas, presentada a la IV Cumbre de las Américas (Mar del
Plata, noviembre 2005) hay un punto específico referido a “Empleo para jóvenes”, que acom-
paña el enfoque de la OEA, al plantear que “deben ponerse en marcha programas de Empleo
Juvenil que garanticen y contemplen todos los derechos para los/as jóvenes. Estas políticas
deben asegurar la eliminación de prácticas de rotación laboral juvenil, precarización de las
relaciones laborales y/o sustitución de adultos por jóvenes en los puestos de trabajo existen-
tes. Estas medidas específicas deben propender a la inserción en el mundo de trabajo de las
nuevas generaciones, asegurar las oportunidades de calificación social y profesional de los/as
jóvenes, y la participación social para el ejercicio de los derechos humanos, políticos, sociales
y sindicales”.
Por tanto, la CSA se compromete a empoderar a la Juventud Trabajadora como sujeto social y
sindical, que tenga pleno ejercicio de sus derechos políticos, laborales y sociales. En este senti-
do, el movimiento sindical y la juventud trabajadora se necesitan mutuamente: para potenciar
sus capacidades reivindicativas y el sindicalismo para fortalecerse y responder desde una cul-
tura organizativa que refleje las necesidades de toda la clase trabajadora actual”.
n En los párrafos referidos al respeto de los derechos humanos, desarrollar el tema de los de-
rechos sindicales y laborales fundamentales, en especial al ejercicio a la libertad sindical y
Anexo normativo
los/as jóvenes al movimiento sindical, como protagonistas claves de los procesos democrá-
ticos de nuestros países, y en la reivindicación de sus derechos como trabajadores/as.
Considerando:
1. Que la Asamblea General de las Naciones Unidas decidió por unanimidad que el período de
agosto 2010 - agosto 2011, fuera declarado como Año Internacional de la Juventud.
2. Que la CSA es la más grande Confederación Sindical de las Américas y representa en la región
a más de 50 millones de trabajadores y trabajadoras, con un importante posicionamiento y
compromiso en la participación y defensa de derechos laborales de la juventud trabajadora
3. Que las personas jóvenes siguen siendo el grupo poblacional más afectado en el mundo
del trabajo, con tasas de desempleo mayor a las de las personas adultas, altos índices de tra-
bajo informal y precariedad, como consecuencia de la crisis económica que ha impactado
de manera negativa los empleos, siendo excluidos permanentemente de los regímenes de
protección social.
4. Que existe una creciente cantidad de jóvenes que no logran colocarse de manera exitosa en
el mercado de trabajo, generando un déficit significativo entre la relación de oferta de empleo
y demanda del mismo, que impide el desarrollo de la juventud en condiciones plenas para su
propio desarrollo y de la sociedad por medio de su inserción social, económica y política.
5. Que las personas jóvenes en busca de sus primeros empleos, encuentran múltiples obstá-
culos para acceder a ellos, tales la reducida oferta de empleo en condiciones dignas y de
acuerdo a su formación, y la exigencia de experiencia suficiente.
6. Que la violación a la libertad sindical y negociación colectiva por parte de gobiernos y em-
pleadores es un factor que ha obstaculizado la afiliación y participación plena de la juven-
tud en los sindicatos.
Anexo normativo
co y económico que establecen los Estados para garantizar a todo ciudadano el ingreso
para vivir y su derecho a la salud.
9. Que existe una tendencia en los gobiernos de nuestros países a no integrar en las po-
líticas públicas relativas a la juventud, aspectos como la educación y la formación para
el empleo, creando estructuras que no responden de manera integral a la problemática
existente.
10. Q
ue las mujeres jóvenes trabajadoras enfrentan la mayor tasa de discriminación labo-
ral, no sólo por los bajos salarios y empleos deshumanos a los que son expuestas, sino
también porque sobre ellas recae la mayor tasa de desempleo y vulnerabilidad, visible
claramente en la situación que enfrentan las trabajadoras domésticas.
11. L as políticas de promoción del empleo juvenil en nuestros países han fracasado por la
poca voluntad de nuestros gobernantes y empresarios por asumir de manera responsa-
ble el tema, dado a que se oculta la realidad estructural del desempleo juvenil y plantean
la flexibilidad laboral, emprendimiento y la informalidad en la contratación, como la so-
lución a la problemática de la desocupación juvenil.
La CSA, comprometida con empoderar a la Juventud Trabajadora como sujeto social y sindi-
cal, reconoce que la juventud trabajadora en el movimiento sindical necesitan potenciar sus
capacidades reivindicativas para fortalecerse y responder desde una cultura organizativa que
refleje las necesidades de toda la clase trabajadora actual.
Por todo lo anterior, solicitamos muy respetuosamente que en la Declaración a ser adoptada
por los gobiernos presentes en la Conferencia Internacional de Juventud, sean considerados
los siguientes planteamientos:
1. Urgimos al compromiso claro y contundente de los gobiernos del mundo con la promoción
del Trabajo Decente para la Juventud, como una de las grandes tareas de esta Conferencia.
5. Exigimos que los Estados garanticen la protección social integral, el acceso gratuito, servi-
cios de calidad e igualitaria para la juventud trabajadora.
Anexo normativo
su incidencia en todos los espacios de toma de decisiones y la construcción de Políticas
Públicas en consenso con este sector.
Finalmente, los participantes de este encuentro, hombres y mujeres jóvenes sindicalistas, ma-
nifestamos que este documento es el reflejo del pensamiento de la juventud trabajadora, pero
encontramos que la falta de representatividad del movimiento sindical juvenil en este esce-
nario mundial debido al proceso de selección, implicará una ausencia real y estratégica en el
debate y aprobación de las resoluciones, así como del posicionamiento respecto a temas de
importancia como el modelo de desarrollo de nuestros países.
Habiendo considerado el cuarto punto del orden del día de la reunión, titula-
do “Establecimiento de mecanismos tripartitos para promover la aplicación
de las normas internacionales del trabajo”, y habiendo decidido adoptar cier-
tas propuestas relativas a consultas tripartitas para promover la aplicación
de las normas internacionales del trabajo, y
adopta, con fecha veintiuno de junio de mil novecientos setenta y seis, el presente Convenio,
que podrá ser citado como el Convenio sobre la consulta tripartita (normas internacionales
del trabajo), 1976:
Artículo 1
Artículo 2
1. Todo Miembro de la Organización Internacional del Trabajo que ratifique el presente Con-
venio se compromete a poner en práctica procedimientos que aseguren consultas efecti-
vas, entre los representantes del gobierno, de los empleadores y de los trabajadores, sobre
los asuntos relacionados con las actividades de la Organización Internacional del Trabajo a
que se refiere el artículo 5, párrafo 1, más adelante.
2. La naturaleza y la forma de los procedimientos a que se refiere el párrafo 1 de este artículo
deberán determinarse en cada país de acuerdo con la práctica nacional, después de haber
consultado a las organizaciones representativas, siempre que tales organizaciones existan
y donde tales procedimientos aún no hayan sido establecidos.
Artículo 3
Artículo 4
1. La autoridad competente será responsable de los servicios administrativos de apoyo a los
procedimientos previstos en el presente Convenio.
Anexo normativo
representativas, siempre que tales organizaciones existan, para financiar la formación que
puedan necesitar los participantes en estos procedimientos.
Artículo 5
1. El objeto de los procedimientos previstos en el presente Convenio será el de celebrar con-
sultas sobre:
a) las respuestas de los gobiernos a los cuestionarios relativos a los puntos incluidos en el
orden del día de la Conferencia Internacional del Trabajo y los comentarios de los gobier-
nos sobre los proyectos de texto que deba discutir la Conferencia;
d) las cuestiones que puedan plantear las memorias que hayan de comunicarse a la Oficina
Internacional del Trabajo en virtud del artículo 22 de la Constitución de la Organización
Internacional del Trabajo;
Artículo 6
Cuando se considere apropiado, tras haber consultado con las organizaciones representati-
vas, siempre que tales organizaciones existan, la autoridad competente presentará un informe
anual sobre el funcionamiento de los procedimientos previstos en el presente Convenio.
Las ratificaciones formales del presente Convenio serán comunicadas, para su registro, al Di-
rector General de la Oficina Internacional del Trabajo.
Artículo 8
Artículo 9
1. Todo Miembro que haya ratificado este Convenio podrá denunciarlo a la expiración de un
período de diez años, a partir de la fecha en que se haya puesto inicialmente en vigor, me-
diante un acta comunicada, para su registro, al Director General de la Oficina Internacional
del Trabajo. La denuncia no surtirá efecto hasta un año después de la fecha en que se haya
registrado.
2. Todo Miembro que haya ratificado este Convenio y que, en el plazo de un año después de
la expiración del período de diez años mencionado en el párrafo precedente, no haga uso
del derecho de denuncia previsto en este artículo quedará obligado durante un nuevo pe-
ríodo de diez años, y en lo sucesivo podrá denunciar este Convenio a la expiración de cada
período de diez años, en las condiciones previstas en este artículo.
Artículo 10
1. El Director General de la Oficina Internacional del Trabajo notificará a todos los Miembros
de la Organización Internacional del Trabajo el registro de cuantas ratificaciones, declara-
ciones y denuncias le comuniquen los Miembros de la Organización.
Anexo normativo
El Director General de la Oficina Internacional del Trabajo comunicará al Secretario General de
las Naciones Unidas, a los efectos del registro y de conformidad con el artículo 102 de la Carta
de las Naciones Unidas, una información completa sobre todas las ratificaciones, declaraciones
y actas de denuncia que haya registrado de acuerdo con los artículos precedentes.
Artículo 12
Cada vez que lo estime necesario, el Consejo de Administración de la Oficina Internacional del
Trabajo presentará a la Conferencia una memoria sobre la aplicación del Convenio, y conside-
rará la conveniencia de incluir en el orden del día de la Conferencia la cuestión de su revisión
total o parcial.
Artículo 13
1. En caso de que la Conferencia adopte un nuevo convenio que implique una revisión total o
parcial del presente, y a menos que el nuevo convenio contenga disposiciones en contrario;
a) la ratificación, por un Miembro, del nuevo convenio revisor implicará, ipso jure, la denun-
cia inmediata de este Convenio, no obstante las disposiciones contenidas en el artículo
9, siempre que el nuevo convenio revisor haya entrado en vigor;
b) a partir de la fecha en que entre en vigor el nuevo convenio revisor, el presente Convenio
cesará de estar abierto a la ratificación por los Miembros.
2. Este Convenio continuará en vigor en todo caso, en su forma y contenido actuales, para los
Miembros que lo hayan ratificado y no ratifiquen el convenio revisor.
Artículo 14
Las versiones inglesa y francesa del texto de este Convenio son igualmente auténticas.
CAPITULO VI
Artículo 21. - Con relación a los convenios colectivos de trabajo que se encontraren vigentes
por ultraactividad, el MINISTERIO DE TRABAJO, EMPLEO Y SEGURIDAD SOCIAL establecerá un
mecanismo voluntario de mediación, conciliación y arbitraje, destinado a superar la falta de
acuerdo entre las partes para la renovación de dichos convenios.
Anexo normativo
Artículo 3º - La autoridad de aplicación estará facultada para disponer la celebración de las
audiencias que considere necesarias para lograr un acuerdo. Cuando no logre avenir a las par-
tes, podrá proponer una fórmula conciliatoria, y a tal fin estará autorizada para realizar inves-
tigaciones, recabar asesoramiento de las reparticiones públicas o instituciones privadas y, en
general, ordenar cualquier medida que tienda al más amplio conocimiento de la cuestión que
se ventile.
Artículo 4º. - En el plazo de QUINCE (15) días a contar desde la recepción de la notificación del
artículo 2º de esta Ley, se constituirá la comisión negociadora con representantes sindicales,
la que deberá integrarse respetando lo establecido en la Ley Nº25.674, y la representación de
los empleadores. Las partes podrán concurrir a las negociaciones con asesores técnicos con
voz pero sin voto.
(…)
Artículo 7º. - En los diferendos que se susciten en el curso de las negociaciones se aplicará la
Ley Nº14.786. Sin perjuicio de ello las partes podrán, de común acuerdo, someterse a la inter-
vención de un servicio de mediación, conciliación y arbitraje que funcionará en el ámbito del
MINISTERIO DE TRABAJO, EMPLEO Y SEGURIDAD SOCIAL.
LOS JEFES DE ESTADO DE LOS ESTADOS PARTES DEL MERCADO COMUN DEL
SUR, REUNIDOS EN LA CIUDAD DE BRASILIA, A LOS 10 DIAS DEL MES DE DI-
CIEMBRE DE 1998,
Considerando que los Estados Partes del MERCOSUR reconocen, en los térmi-
nos del Tratado de Asunción (1991), que la ampliación de las actuales dimen-
siones de sus mercados nacionales, por medio de la integración, constituyó
condición fundamental para acelerar los procesos de desarrollo económico
con justicia social;
Considerando que la adhesión de los Estados Partes a los principios de la democracia política
y del Estado de Derecho, y del respeto irrestricto a los derechos civiles y políticos de la persona
humana constituye base irrenunciable del proyecto de integración;
Considerando que los Ministros de Trabajo del MERCOSUR han manifestado en sus reuniones,
que la integración regional no puede circunscribirse a la esfera comercial y económica, y debe
abarcar la temática social, tanto en lo que respecta a la adecuación de los marcos regulatorios
laborales a las nuevas realidades configuradas por esa misma integración y por el proceso de
globalización de la economía, en lo referente al reconocimiento de una plataforma mínima de
derechos de los trabajadores en el ámbito del MERCOSUR, correspondiente a las convencio-
nes fundamentales de la OIT;
Anexo normativo
RADO O VENGA A INSTAURAR:
DERECHOS INDIVIDUALES
No discriminación
Art. 1°. - Todo trabajador tiene garantizada la igualdad efectiva de derechos, tratamiento y
oportunidad en el empleo y ocupación, sin distinción o exclusión por motivo de raza, origen
nacional, color, sexo u orientación sexual, edad, credo, opinión política o sindical, ideológica,
posición económica o cualquier otra condición social o familiar, en conformidad con la dispo-
siciones legales vigentes.
Los Estados Partes se comprometen a garantizar la vigencia de este principio de no discrimi-
nación. En particular, se comprometen a realizar acciones destinadas a eliminar la discrimina-
ción en lo que refiere a los grupos en situación desventajosa en el mercado de trabajo.
Promoción de la igualdad
Art. 2°. - Las personas portadoras de necesidades especiales serán tratadas de forma digna y
no discriminatoria, favoreciéndose su inserción social y en el mercado de trabajo.
Los Estados Partes se comprometen a adoptar medidas efectivas, especialmente en lo que se
refiere a la educación, formación, readaptación y reorientación profesional, la adecuación de
los ambientes de trabajo y al acceso de los bienes y servicios colectivos, con el fin de asegurar
que las personas portadoras de necesidades especiales tengan la posibilidad de desempeñar
una actividad productiva.
Art. 3°. - Los Estados Partes se comprometen a garantizar, mediante legislación y prácticas la-
borales, la igualdad de tratamiento oportunidad entre mujeres y hombres.
Los Estados Partes se comprometen a eliminar toda forma de trabajo o servicio exigido a un
individuo bajo amenaza de una pena cualquiera y para lo cual dicho individuo no se ofrezca
voluntariamente.
De modo especial, se suprime toda forma de trabajo forzado u obligatorio que pueda utilizarse:
a) como medio de coerción o dedicación política o como castigo por no tener o expresar
determinadas opiniones políticas, o por manifestar oposición ideológica de orden política,
social o económica establecida;
b) como método de movilización y utilización de mano de obra con fines de fomento económico;
c) como medida de disciplina en el trabajo;
d) como castigo por haber participado en huelgas;
e) como medida de discriminación racial, social, nacional o religiosa.
Los Estados Partes se comprometen a adoptar políticas y acciones que conduzcan a la aboli-
ción del trabajo infantil y la elevación progresiva de la edad mínima para ingresar al mercado
de trabajo.
Anexo normativo
mente en lo que concierne a la edad mínima para el ingreso en el mercado de trabajo y otras
medidas que posibiliten su pleno desarrollo físico, intelectual, profesional y moral.
La jornada de trabajo para esos menores, limitada conforme a las legislaciones nacionales, no
admitirá su extensión mediante la realización de horas extras ni en horarios nocturnos.
El trabajo de los menores no deberá realizarse en un ambiente insalubre, peligroso o inmoral,
que pueda afectar pleno desarrollo de sus facultades físicas, mentales y morales.
La edad de admisión a un trabajo con alguna de las características antes señaladas no podrá
ser interior a 18 años.
DERECHOS COLECTIVOS
Libertad de asociación
Art. 8°. - Todos los empleadores y trabajadores tienen el derecho de constituir las organizacio-
nes que consideren convenientes, así como de afiliarse a esas organizaciones, en conformidad
con las legislaciones nacionales vigentes.
Libertad sindical
Art. 9°. - Los trabajadores deberán gozar de adecuada protección contra todo acto de discri-
minación tendiente a menoscabar la libertad sindical con relación a su empleo.
a) La libertad de afiliación, de no afiliación y desafiliación, sin que esto comprometa el ingreso
en un empleo o su continuidad en el mismo;
Negociación colectiva
Art. 10°. - Los empleadores o sus organizaciones y las organizaciones o representaciones de
trabajadores tienen derecho de negociar y celebrar convenios y acuerdos colectivos para re-
gular las condiciones de trabajo, en conformidad con las legislaciones y prácticas nacionales.
Huelga
Art. 11°. - Todos los trabajadores y las organizaciones sindicales tienen garantizado el ejercicio
del derecho de huelga, conforme a las disposiciones nacionales vigentes. Los mecanismos de
prevención o solución de conflictos o la regulación de este derecho no podrán impedir su
ejercicio o desvirtuar su finalidad.
Diálogo social
Art. 13°. - Los Estados Partes se comprometen a fomentar el diálogo social en los ámbitos na-
cional y regional, instituyendo mecanismos efectivos de consulta permanente entre represen-
tantes de los gobiernos, de los empleadores y de los trabajadores, a fin de garantizar, mediante
el consenso social, condiciones favorables al crecimiento económico sustentable y con justicia
social de la región y la mejora de las condiciones de vida de sus pueblos.
Los Estados Partes se comprometen a instituir, con las entidades involucradas que voluntaria-
mente así lo deseen, servicios y programas de formación u orientación profesional continua y
permanente, de manera de permitir a los trabajadores obtener las calificaciones exigidas para
el desempeño de una actividad productiva, perfeccionar y reciclar los conocimientos y habili-
dades, considerando fundamentalmente las modificaciones resultantes del progreso técnico.
Los Estados Partes se obligan además a adoptar medidas destinadas a promover la articula-
ción entre los programas y servicios de orientación y formación profesional, por un lado, y los
servicios públicos de empleo y de protección de los desempleados, por otro, con el objetivo
de mejorar las condiciones de inserción laboral de los trabajadores.
Los Estados Partes se comprometen a garantizar la efectiva información sobre los mercados
de trabajo y su difusión tanto a nivel nacional como regional.
Seguridad Social
Art. 19°. - Los trabajadores del MERCOSUR tienen derecho a la seguridad social, en los niveles
y condiciones previstos en las respectivas legislaciones nacionales.
Los Estados Partes se comprometen a garantizar una red mínima de amparo social que pro-
teja sus habitantes frente a la contingencia de riesgos sociales, enfermedades, vejez, invalidez
y muerte, buscando coordinar las políticas en el área social, de forma de suprimir eventuales
discriminaciones derivadas del origen nacional de los beneficiarios.
APLICACION Y SEGUIMIENTO
Art. 20°. - Los Estados Partes se comprometen a respetar los derechos fundamentales inscritos
en esta Declaración y a promover su aplicación en conformidad con la legislación y las prác-
ticas nacionales y los convenios y acuerdos colectivos. Para esto, recomiendan instituir, como
parte integrante de esta Declaración, una Comisión Socio-Laboral, órgano tripartito, auxiliar
del Grupo Mercado Común, que tendrá carácter promocional y no sancionador, dotado de
instancias nacionales y regional, con el objetivo de fomentar y acompañar la aplicación del
instrumento. La Comisión Socio-Laboral Regional se manifestará por consenso de los tres sec-
tores, y tendrá las siguientes atribuciones y responsabilidades:
Anexo normativo
de los compromisos de esta Declaración;
Las formas y mecanismos de encaminar los asuntos a ser examinados en conformidad con los
ítems c) y d) serán definidos por la Comisión Socio-Laboral Regional.
Art. 21°. - La Comisión Socio-Laboral Regional deberá reunirse al menos una vez al año para
analizar las memorias ofrecidas por los Estados Partes y preparar documentos dirigidos al Gru-
po Mercado Común.
Art. 22°. - La Comisión Socio-Laboral Regional redactará, por consenso en el plazo de seis
meses, a contar desde la fecha de su institución, su propio reglamento y el de las comisiones
nacionales, debiendo someterse al Grupo Mercado Común para aprobación.
Art. 23°. - Los Estados Partes deberán elaborar, por intermedio de sus Ministros de Trabajo y
en consulta a las organizaciones más representativas de empleadores y de trabajadores, me-
morias anuales, conteniendo:
b) la reseña de los avances realizados en la promoción de esta Declaración y de las dificultades
enfrentadas en su aplicación.
Art. 25°. - Los Estados Partes resaltan que esta Declaración y su mecanismo de seguimiento
no podrán ser invocados ni utilizados para otros fines que los previstos en ella, vedada, en
particular, su aplicación a cuestiones comerciales, económicas y financieras.