VENTOSAS

Karen Cano
Ventosas

Primera edición,noviembre 2017

Colección:

Cronología del espejo

Diseño, edición y diagramación

Sara Montaño, Edwin Paredes y Cinthya

Anguinsaca

Portada:

Ashley Curay, Loja-Ecuador

Editorial:

Editorial Despertar, Loja-Ecuador

Contactos:

editorialdespertar2017@gmail.com

Tiraje:

200 ejemplares
"La dama es una cosa sumisa hecha de agua y
muerte. La moda la viste con sobriedad y usa su
mente para coserle la bastilla."

Elise Cowen

"Ya no le temo a la muerte pues sentado junto a

ella hoy ya no tengo la culpa de sentirme sola"

Maria Emilia Cornejo

"Matamos lo que amamos, lo demás no ha estado

vivo nunca"

Rosario Castellanos.
Ventosas

Karen cano
Editorial Despertar

Una tarde,

tus dedos sembraron

una semilla en medio de mis muslos.

Alguien te contó el secreto

que para llegarme al corazón

la vía más rápida estaba allá abajo.

Meses después

vi las hojas creciendo entre vello púbico,

le hice caso a la prudencia

y arranqué las raíces desde el fondo.

Un par de tallos muertos,

se rieron entre mis manos.

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 Ventosas

II

No soy bonita

nunca me preguntaron por mi

flor favorita

fueron más las fiestas que pasé sobre la mesa

no tengo buena cara

sólo problemas

algunos versos ácidos pegados al paladar

un par de cigarrillos en la bolsa

un vientre cómodo sobre el cual dormir

dos esmeraldas por ojos

brillan acuosas por la noche.

No soy bonita

si lo fuera seguro iría a buscarte

te tomaría de la mano
Editorial Despertar

la engancharía a mis tripas

te pediría que me hicieras canción

como si de mi pubis saliera música

y no lágrimas.

No soy bonita

pero hundida en tus pupilas

estás cosas no importaban

en otro lugar, con otra gente

no estás pensando en mí

si lo hicieras sería dichosa

la dueña del mundo

la más bella de todas.

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 Ventosas

III

Quisiera ser de huesos evidentes

y de piel firme incorruptible

al rechazo de nadie

un cuerpo níveo

idílico

marcado por el deseo.

Cuando yo muera quiero

que digan que me cogí a todos

los poetas de mi generación

y que no lloré por ninguno

ni siquiera por el mejor.

Editorial Despertar

IV

No bastaba con la transferencia

del labial rojo sobre en el mentolado,

ni con la de los tres hilos de saliva

que quedaban en el envase vacío.

Algo se quedaba frustrado, suspendido

en partículas de polvo descubiertas al solsticio.

Busqué siempre caber en ti,

pasarme por el diastema en tu boca,

pero nunca supe

cuánto había que estirar la carne,

para que los besos en la cara

se te pintaran indelebles.

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 Ventosas

Es famélico tu pulso genital entre las manos,

suave como dulce de leche al gusto,
dulce como los clavos de tu rostro
agitado en una esquina
de un lugar que no te pertenece,
cálido como un cachorro sin dientes,
rico, amoroso, tierno.

Una lengua y dos labios

voraces y románticos a medio metro del suelo,
no bastan para quererte
como te quiero, vacío,
y en mí, muy dentro.

Me hacen falta más cuerpos,

más vidas, más versos,

diez sentidos, dos sexos,

te quiero, te quiero.
Editorial Despertar

VI

¿Quieres una foto mía?

Estoy jodida bebé.

Ya apagué la luz

pero me describiré.

Tengo la lengua suelta

y hasta el vientre

porque me suicidé ayer.

Un hombre me dijo que mi cintura

era muy ancha para sus manos

y tiene razón, soy en general

muy grande para él.

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 Ventosas

En mis mejillas hay huellas

unicornios negros y apesadumbrados

cabalgaron hasta mis pechos

están pequeños

son dos uvas que sobraron

del martes de oferta.

Mi estómago es flácido

como la verga de los tipos

que me amaban, que me amaron

con los párpados cerrados

en la luz, hay un puente

en mis encías

por ahí calo el filtro

de mis pall mal.

Editorial Despertar

Fumo cuando me siento triste

y cuando me duele la garganta

desearía dejar de fumar.

Otra cosa,

¡Seguro!

Tengo las nalgas planas

porque escribo mil cosas al día

y escribo mucho

sobre ti y sobre los otros

y espero mucho

a que las cosas sean distintas

cuando me levante.

¿Para qué quieres una foto mía?

Estoy jodida bebé

y sola

jodidamente sola.

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 Ventosas

VII

Pier- nas

la palabra dividida en dos

que llevaba en medio tu cabeza

y esa expresión funesta

de cuervo malherido

aprehensado entre esas letras

sostenido entre mis palmas

acorralado en medio de paredes

pálidas y sin depilar

favoritas

de tu vientre

que a veces eran boas

y buscaban triturarte

en un abrazo violento y pegajoso

hubiera querido destruirte partirte en dos

Editorial Despertar

miserables

mitades

de suicida

y verte gemir en el suelo

mientras fumara satisfecha

pero después de liberarte

te vi saltando feliz frente al espejo,

y deseé que no volvieras.

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 Ventosas

VIII

Para la piel que te sobra más abajo del cuello

te regalaré la boca con la que pronunció los días

los alientos que empañan las ventanas

en las mañanas grises en las que pienso que me

imaginas

sentada en el picaporte y vestida de mujer

esperando que llegues para beber-te

Editorial Despertar

IX

A esta hora me he casado

con quien no me abandona

con las manos tersas

que distinguen con sus diez ojos de seda

la luz de mis ganas y la oscuridad de mi

inapetencia

con la almohada más pequeña

que igual me acomoda la cabeza

o me cierra la vista hacia la lámpara

o me deja dormir sin cuestionarme nada

o se coloca en las paredes de mi entrepierna

y me relaja el sexo abierto como herida nueva y

supurante.

Estoy caliente y embelesada

con la vista de los pies que me sostienen

con el baile de gusanos rosas

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 Ventosas

que me visten a modo de cicatrices

que se retuercen al ritmo del arroyo de mi sangre.

Imágenes de días pasados

se clavaron en las retinas como retratos.

En la boca abierta

el mundo se hace viento

y me reseca el pecho.

Esta noche dormiré tranquila.

Editorial Despertar

Tengo un montón de libretas

he acumulado garabatos

que ya no puedo descifrar.

En los lugares que habito

rondan vestigios de los días,

y las imágenes.

Nombres a los que no les puedo poner rostro

versos incorregibles

la muerte de la voluntad de la memoria

que se da de tiros en la cabeza

porque a nadie le importa.

En algunas páginas hay manchas

ya no pertenecen a ninguna sustancia

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 Ventosas

intentos infructuosos de mis dedos

a los que no le salen trazos firmes

nunca aprendí a dibujar.

Olvido sin querer para ser funcional

y cada que veo algunas iniciales

comienzo a cantar canciones que nunca me

gustaron

percibo aromas que me hacen sentir a salvo

de peligros inexistentes.

Como una rokola vieja

hoy he sacado el disco que me recuerda

unos dientes chuecos, apenas sonriendo

mando un mensaje del que nunca tendré

respuesta.
Editorial Despertar

XI

Quieta y en silencio como la luz que entra

entre las manos cerradas los amantes

que tejen holanes de emociones inconexas

y reflejan su mundo en constelaciones azarosas

Con líneas de colores se unen los granos

de arena de todas las playas

develan las figuras que se anhelan un domingo

cualquiera.

Paredes de viento,

hogares imaginados,

hijos que no nacieron.

dónde nunca llegó la primavera

regresan y se me pegan al pecho como ventosas

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 Ventosas

XII

Cuando te veo

las niñas verdes que viven bajo mi frente

acampan en la selva que llevas por abrigo

sin palabras te dicen lo que sienten

y luego se ocultan bajo sus sábanas de cuero.

Mi mariposa con alas de tabaco

marchita amorosa en tus dientes delanteros

me cuenta una mentira

y luego se soba adolorida en la humedad de tu

lengua.
Editorial Despertar

La única razón de que construya primaveras en el

invierno es para entregártelas y verlas morir en tu

vientre bajo el techo sin estrellas de cualquier

cuarto de renta.

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 Ventosas

XIII

Con el último de los abrigos

En medio del salón los testigos se vuelven de sal

los adioses se repiten porque salen mal

las ganas de seguir fingiendo

un baile de mariposas en la ciudad

 Datos de la Autora

Karen Cano(Juárez-
México,1990)

Estudió Ciencias de
la Comunicación en
la Universidad
Autónoma de
Chihuahua.

Ha publicado en las antologías: Poetas Parricidas,

Generación Entre Siglos- Cuadrivio Ediciones
(2014), Extática, muestra de poesía femenina-
Ediciones Salto Mortal (2015), y en la antología de
relato erótico El Éxtasis Viene Contigo, de Pukiyari
Ediciones (2016).

Sus poemas están publicados en revistas

electrónicas como: Círculo de Poesía, Golfa,
Monolito, Buenos Aires Poetry, y otras. Participa
también en la revista electrónica México Kafkiano.
Recientemente ganó el primer lugar del Premio
Nacional de Poesía Joven Jorge Lara (México
2017).
 Karen Cano

Alguien te contó el secreto

que para llegarme al corazón

la vía más rápida estaba allá abajo.

Cuando te veo

las niñas verdes que viven bajo mi frente

acampan en la selva que llevas por abrigo.