Huertos Urbanos
Huertos Urbanos
Huertos Urbanos
URBANOS
Autores:
2
ÍNDICE
3
CAPÍTULO 1: AGRICULTURA ECOLÓGICA Y HUERTOS URBANOS
Alberto Sanz-Cobeña (ETSIAAB, ITD-UPM, Madrid)
Más cerca en el tiempo, los espacios cerca de las murallas en las ciudades protegidas
con estas construcciones se destinaban a huertas, cuya importancia era capital en
periodos de conflicto. Con el Renacimiento surgen los jardines-huerto que llevan a los
jardines botánicos (S.XVI) con plantas exóticas de “ultramar” y en donde, aún hoy,
existe un espacio para plantas cultivadas.
4
Gráfico 1. Plano del Real Jardín Botánico de Madrid. Se destaca el espacio destinado a la producción
agrícola.
Las primeras definiciones oficiales de la agricultura urbana datan de finales del siglo
pasado. La FAO en 1999 definió agricultura urbana como aquella "practicada en
pequeñas superficies (solares, huertos, márgenes, terrazas, recipientes) situadas
dentro de una ciudad y destinadas a la producción de cultivos y la cría de ganado
menor o vacas lecheras para el consumo propio o para la venta en mercados de la
vecindad". Por su parte la agricultura periurbana según el mismo organismo
internacional implica un rango definitorio mayor, mini-agricultura intensiva y de
subsistencia a la agricultura comercial realizada en el espacio periurbano. Se trataría
de un tipo de agricultura realizada en espacio de "confrontación" o transición entre lo
urbano y lo rural.
Más allá de las definiciones oficiales, hoy podemos atender a dos expresiones
principales de producción agrícola en el ámbito urbano, caracterizadas por sus escalas
y dimensiones de cultivo, sus usuari@s y objetivos y el destino de la producción.
6
Gráfico 2. Porcentaje de familias urbanas que participan en actividades de agricultura urbana según el
país (Fuente: FAO).
7
3.- EXPRESIONES AGRÍCOLAS URBANAS HOY. ALGUNOS EJEMPLOS
8
En este marco se podría definir una tipología de huertos urbanos en base a sus
dimensiones, propiedad, participantes, y objetivos y motivaciones de los mismos. En
general, según el grupo de discusión IMIDRA-itdUPM (abril 2017) los principales
perfiles de participantes son personas políticamente activas con origen en
movimientos sociales (objetivos ligados a cambios sociales y mayor equidad e
impactos del sistema agroalimentario imperante), personas mayores con un pasado en
el ámbito rural (objetivos de ocio y esparcimiento y salud) y familias con
hij@spequeñ@s (objetivos ligados a la educación ambiental y el aprendizaje sobre los
ciclos naturales).
• Avanzar hacia un modelo de ciudad más amable que se interese por temas
como la educación ambiental, la soberanía alimentaria, los canales cortos de
distribución de productos, los grupos de consumo, la movilidad sostenible, el agro-
compostaje, etc.
Lo mismo ocurre, por ejemplo, en el ámbito andaluz: “De igual manera, debe señalarse
la obligatoriedad de la práctica de agricultura ecológica, en este contexto, entendiendo
que es beneficioso tanto para los seres humanos a través de la alimentación de
productos frescos y saludables, como para el ecosistema que componen los animales y
plantas asociados al huerto”
(http://www.juntadeandalucia.es/agriculturaypesca/portal/comun/galerias/galeriaDes
cargas/cap/produccion-ecologica/huertos_sociales-WEB.pdf).
9
Se trataría en todo caso de un enfoque de la producción agrícola que intenta
proporcionar (Gráfico 4):
• Potenciación de la biodiversidad
10
Gráfico 4. Infografía del manual de agricultura urbana del Ayuntamiento de Madrid. Fuente:
http://www.madrid.es/UnidadesDescentralizadas/Educacion_Ambiental/ContenidosBasicos/Publicacion
es/HuertoJardineria/HuertoUrbanoEcologico_Curso.pdf
11
CAPÍTULO 2: EL PROYECTO TÉCNICO DEL HUERTO URBANO
José Luis García Fernández (ETSIAAB, UPM, Madrid)
El proceso de diseño comienza con la distribución del espacio existente, entre parcelas
de cultivo, pasillos, y espacios para zonas sociales y de compostaje. En los huertos
pequeños se suelen hacer bancales alargados de anchura, aproximadamente, desde
dos metros a ocho, y longitud de cinco metros a quince, separados por pasillos de
aproximadamente un metro. En los huertos grandes se hacen rectángulos más
grandes, que pueden lindar cada uno con el siguiente, separados por pasillos de
anchura aproximadamente dos metros. No hay que olvidar diseñar un espacio para la
zona social o de reunión (de 50 a 100 m2, espacio donde puede ser práctico instalar
bancos rústicos para sentarse o una pérgola o elementos de sombreo); también un
espacio para la zona de compostaje (de 20 a 50 m2, suficiente si sólo se van a colocar
compostadores). Los pasillos suelen ser de tierra compactada, aunque en algunos
huertos se coloca una capa de zahorra para evitar la formación de barro. Los bancales
o parcelas se pueden delimitar con madera, adoquines o pletina metálica. Serán
12
necesarias pequeñas superficies para una caseta de almacenamiento
(aproximadamente 10-50 m2) que puede sustituirse por contenedores, y a veces una
zona de cartelería, que puede ser el lateral de la caseta. Se puede cerrar el perímetro
con una valla metálica o de madera (uno o dos metros de altura), cuya función a veces
es únicamente delimitar la zona y que no entren perros en el recinto.
La tierra existente en la parcela inicial suele ser de mala calidad, por lo que en los
bancales o parcelas de cultivo hay que colocar tierra vegetal (una capa de 40-50 cm) y
si se puede, previamente una capa de mantillo o estiércol bien hecho (una capa debajo
de 1-5 cm). De la calidad de estos materiales depende el buen cultivo posterior. Si se
van a colocar árboles, lo ideal es prepararles un cubo de tierra vegetal de
aproximadamente un metro de lado, lo que obliga, si esto es posible, a cavar más
profundo en las posiciones previstas de los árboles.
Un tema que influye en el diseño es si en el huerto se van a repartir parcelas entre
propietarios, o todos los elementos van a ser compartidos. Hay huertos con los dos
tipos de organización. Si se van a repartir parcelas entre propietarios, es más
importante una buena delimitación de espacios, accesos relativamente
independientes, y una definición de los elementos que se van a compartir
(generalmente la caseta, que deberá ser algo más grande en este caso para una buena
organización del material).
13
2.- LA INSTALACIÓN DE RIEGO Y DRENAJE
14
Foto 4: Instalación de ramales portagoteros.
Fuente: Huerto urbano de la Avda. Alfonso XIII (Chamartín, Madrid).
15
3.- ELEMENTOS COMPLEMENTARIOS
16
4.1 Proyecto técnico: Memoria. Ámbito y ordenación vigente.
Las obras del proyecto desarrollan la urbanización del ámbito del Plan Parcial de
Reforma Interior en el Ámbito de Planeamiento Remitido APR.05.06 “Avenida Alfonso
XIII – calle Paraguay” en Madrid (España), cuyo objeto es establecer la ordenación
pormenorizada con carácter integral del ámbito según las condiciones establecidas en
el Plan General de Ordenación Urbana (PGOUM) de 1997. Los principales parámetros
urbanísticos establecidos por el PGOUM de 1997 para el desarrollo del APR.05.06 son
los siguientes:
- Superficie del ámbito: 14.190 m2
- Superficie mínima de zonas verdes: 4.500 m2
Huerto Zona
urbano estancial
/parque
17
4.2 Proyecto técnico: plazo de ejecución y garantía.
18
4.5 Proyecto técnico: documentos que integran el proyecto.
1. MEMORIA.
2. ANEJOS A LA MEMORIA.
2. PLANOS.
Pavimentos
- Relleno, extendido y apisonado de zahorras 7.045 euros
- Soleras de hormigón 1.949 euros
- Bordillos de hormigón prefabricado 2.265 euros
Parcelas de cultivo
- Tierra vegetal, mantillo y rastrillado 6.457 euros
- Borduras de chapa galvanizada 9.101 euros
Drenaje y saneamiento
- Tubería de drenaje enterrada de PVC 4.441 euros
- Relleno de grava de 40-80 mm en zanjas de drenaje 7.201 euros
y materiales complementarios, incluida la acometida
a la red general de saneamiento
Instalaciones
- Instalación de riego por goteo 3.614 euros
- Instalación de iluminación 11.165 euros
- Vallado con tela metálica 14.831 euros
- Fuente y papeleras 1.077 euros
19
4.6 Proyecto técnico: planos del huerto urbano.
20
Plano 2: Suministro de agua e instalación de riego del huerto urbano.
Fuente: Elaboración propia.
21
Plano 3: Drenaje del huerto urbano.
Fuente: Elaboración propia.
22
Plano 4: Iluminación del huerto urbano.
Fuente: Elaboración propia.
23
4.7 Proyecto técnico: anejos a la memoria.
24
Las necesidades de riego (NR) se calculan restando la ETP menos la precipitación:
Como ambos valores de demanda son inferiores a los caudales máximos disponibles
calculados en el apartado anterior, se pueden regar ambas parcelas de una sola vez,
sin necesidad de hacer sectores de riego. Los caudales obtenidos son pequeños y
permiten la utilización de tuberías de 32 mm de diámetro para la alimentación general
de cada parcela, y de tuberías de 25 mm de diámetro para las ramificaciones del
sistema de riego. Los caudales, para calcular las tuberías, se calculan para verano, con
los valores máximos, pero también se puede calcular el consumo de agua anual con los
valores de cada mes.
25
Con los datos anteriores es posible calcular el consumo anual de agua:
El consumo total es de 834 m3/año, para una superficie total de zonas verdes de
aproximadamente 4500 m2, suponen un ratio de consumo de agua de 1.850 m3/ha
año.
26
4.7.2 Estudio de soleamiento.
10 h. 12 h.
16 h.
8 h.
27
10 h. 12 h.
16 h. 8 h.
28
8 h.
10 h.
12 h.
29
14 h. 16 h.
La conclusión del estudio es que la parcela recibe a lo largo del año más del 50% de la
radiación solar directa, a la que hay que añadir el porcentaje correspondiente de
radiación difusa, más difícil de determinar. Estos niveles de radiación solar se
consideran suficientes para el cultivo de prácticamente cualquier especie vegetal, en la
época en que ese cultivo sea habitual en la zona.
30
4.7.3 Cálculos de la instalación eléctrica.
en donde:
Aplicando esta fórmula a los diferentes tramos a considerar nos darán las secciones
correspondientes a cada uno. Realizado el cálculo, dado que las parcelas son
pequeñas, es posible instalar líneas trifásicas con neutro (con cobre como conductor)
de sección 6 mm2, en todos los tramos de la instalación de alumbrado del presente
proyecto.
31
4.7.4 Cálculos de la instalación de alumbrado.
El objeto del presente anejo consiste en establecer las condiciones técnicas de diseño,
para optimizar la eficiencia y ahorro energético en la instalación de alumbrado,
además de limitar el resplandor luminoso nocturno o contaminación lumínica y reducir
la luz intrusa o molesta.
Los elementos y resultados que se determinan en este anejo se basan en las
características técnicas que se detallan a continuación, y siguen la normativa basada
en el Real Decreto 1890/2008, Reglamento de Eficiencia Energética en instalaciones de
alumbrado exterior de la legislación española. Estas características han sido
seleccionadas procurando que cumplan el cometido de funcionamiento, dentro del
sistema eléctrico que se proyecta, así como, también las prescripciones contenidas en
los reglamentos citados a continuación.
32
Nombre de la Situación de Clase de
Tipo de vía
instalación proyecto alumbrado
Los resultados luminotécnicos vienen determinados por los niveles marcados en las
tablas del Real Decreto (ITC-EA-02) de la legislación española.
La iluminancia es la cantidad de luz recibida o flujo luminoso recibido por unidad de
superficie. Se define su Valor máximo (Emax), Valor medio (Em), Valor mínimo (Emin),
Uniformidad media (Uo). La uniformidad media viene dada, porcentualmente, como el
cociente entre Emin/Em. Se han definido cuatro zonas de actuación: espacio estancial
(paseos), espacio estancial (lateral), huerto urbano (lateral-edificio), huerto urbano
(lateral-calle), tal y como se refleja en la siguiente tabla.
Todas las zonas definidas, por tanto, cumplen con el “Pliego de Condiciones del
Ayuntamiento de Madrid”: nivel medio entre 7-15 lux, con una uniformidad del 20%.
Para cada una de las áreas se ha considerado una clase de alumbrado definida como
de tipo S1, según el Real Decreto 1890/2008 de la legislación española. En la tabla
anterior se han incluido los valores medios de las diferentes áreas obtenidos a través
del programa informático DIALUX.
En cualquiera de los casos cumple con la normativa de eficiencia energética en
alumbrado exterior en cuanto a la uniformidad (ITC-EA-02).
33
Espacio estancial (paseos)
Espacio estancial (paseos)
Espacio estancial (lateral)
Espacio estancial (lateral)
Gráfico 10: Iluminación del espacio estancial/parque. Se marca con un 1 la posición de las luminarias.
Fuente: Elaboración propia.
Gráfico 11: Iluminación del huerto urbano. Se marca con un 1 la posición de las luminarias.
Fuente: Elaboración propia.
34
Luminaria utilizada: rendimiento y factor de utilización
La luminaria proyectada será del mismo modelo para toda la instalación. Se instalará
una luminaria con flujo asimétrico de 4200 lm, temperatura de color 5700 K.
Se instalará una luminaria con rendimiento superior al 55%, tal y como se indica en la
ITC-EA-04 del Real Decreto 1890/2008. La luminaria instalada, tipo LUMA BGP625,
tiene una eficiencia del 90% (flujo luminoso de la lámpara 4200 lúmenes; flujo
luminoso de la luminaria 3780 lúmenes). Se comprueba, a partir de las características
de la luminaria, que se cumplen las condiciones expuestas en la ITC-EA-04 del Real
Decreto 1890/2008.
Según la “Instrucción Técnica Complementaria EA-04”, con excepción de las
iluminaciones navideñas y festivas, las lámparas utilizadas en instalaciones de
alumbrado exterior tendrán una eficacia luminosa superior a:
a) 40 lm/W, para alumbrados de vigilancia y seguridad nocturna y de señales y
anuncios luminosos.
b) 65 lm/W, para alumbrados vial, específico y ornamental.
Las lámparas incluidas en el proyecto tienen las siguientes características:
Em = (FU x FM x FL) / S
35
Donde:
Em = Es la iluminancia media en servicio de la instalación, considerando el
mantenimiento previsto, y se mide en lux.
FU = Es el factor de utilización (en valores por unidad)
FM = Es el factor de mantenimiento de la instalación (en valores por unidad)
FL = Es el flujo luminoso emitido por la lámpara instalada (se mide en lúmenes)
S = Es la superficie de referencia iluminada de la calzada a estudiar (se mide en metros
cuadrados)
Los valores obtenidos son:
AREA DE ESTUDIO FU
Espacio estancial (paseos) 0,95
Espacio estancial (lateral) 0,35
Huerto urbano (lateral-edificio) 0,78
Huerto urbano (lateral-calle) 0,86
FM = Eservicio / Einicial= E / Ei
36
Limitación de la contaminación luminosa: resplandor luminoso nocturno
Eficiencia energética
ε = (S x Em) / P
Siendo:
37
Resultados para la instalación proyectada:
Los resultados son satisfactorios acorde al Real Decreto español. Según la ITC-EA-01,
deben cumplirse unos niveles de eficiencia energética mínima, en base al nivel de
iluminación medio de la instalación. En este caso, para los niveles medios obtenidos
según el programa informático, para las cuatro zonas definidas, los niveles mínimos de
eficiencia energética corresponden a 5,41 lx m2/W, 5,36 lx m2/W, 6 lx m2/W y 6,9 lx
m2/W, respectivamente. Los obtenidos son superiores en los cuatro casos. Se cumplen,
por tanto, los requisitos mínimos.
Calificación energética
ICE = 1 / Iε
38
AREA DE ESTUDIO ε εR Iε ICE
Espacio estancial (paseos) 25,86 7,8 3,32 0,30
Espacio estancial (lateral) 7,45 7,8 0,96 1,04
Huerto urbano (lateral-edificio) 17,38 9,0 1,93 0,52
Huerto urbano (lateral-calle) 25,35 10,2 2,49 0,41
39
CAPÍTULO 3: TÉCNICAS DE CULTIVO SOSTENIBLES EN HUERTOS URBANOS
Pilar López de Fuentes (ETSIAAB, UPM, Madrid)
Las técnicas de cultivo consideradas sostenibles1, lo son para cualquier huerto esté
donde esté.
Los huertos urbanos (“HHUU” a partir de ahora) por estar enclavados en las ciudades,
parecen más obligados a no utilizar métodos generadores de contaminantes,
alérgenos o cualquier tipo de toxicidad.
Por lo sensible de su ubicación (que limita singularmente su capacidad de resiliencia)
localizada en un ámbito donde transcurre la actividad vital cotidiana de cientos, miles
o millones de ciudadanos, en los huertos urbanos, no deben implementarse
procedimientos culturales que provoquen efluentes líquidos o emisiones gaseosas, de
especies que entrañen riesgo de ser lesivas para la salubridad del entorno, que no es
otro que la propia urbe.
Es pues muy aconsejable, en estos casos, recurrir al empleo de técnicas de producción
que, persiguiendo la obtención de cosechas de calidad y cantidad óptimas, respeten al
máximo el hábitat en que se aplican y cumplan las condiciones siguientes:
1
Sostenibles o sustentables, porque ambas voces tienen el mismo significado.
2
La bioeconomía persigue la creación de riqueza -o la minimización del gasto- a través de la conversión
del material residual y los subproductos obtenidos en el proceso productivo, en materia prima;
promoviendo, de esta manera, un flujo de insumos circular. Este flujo circular de los factores de
consumo es la base de la “economía circular” y sus “7R” (reducir, reutilizar, renovar, repara, reciclar,
recuperar y rediseñar).
40
pueden agruparse en tres categorías, atendiendo al momento del ciclo productivo en
que se administran:
1. OPERACIONES PREVIAS
2. COSECHA Y OPERACIONES DE IMPLANTACIÓN DEL CULTIVO
3. OPERACIONES DE MANTENIMIENTO
Cuadro 1: Esquema de las técnicas de cultivo sostenibles apropiadas para aplicar a huertos urbanos.
Fuente: Elaboración propia.
41
Rotación de cultivos: Traslación espacial y cíclica de los mismos, que obedece a un
patrón establecido. En este caso, el patrón está basado en una asociación de cultivos
prefijada3.
Asociación de cultivos: Agrupación de especies en un mismo sector de cultivo,
fundamentada en su complementariedad o en las relaciones de mutuo beneficio que
se establecen entre ellos4.
A continuación, se muestran algunos ejemplos de rotación cuatrienal asignada a dos
tipos de asociación diferente:
3
Por ejemplo, en una rotación cuyo ciclo de traslaciones dura cuatro años (cuatrienal) al quinto año los
cultivos vuelven a la situación de partida.
4
Pueden asociarse, por ejemplo, agrupando las hortalizas por familias (asociación fundamentada en los
requisitos nutricionales de las distintas familias botánicas) o, por órgano de aprovechamiento
(asociación practicada por la agricultura biodinámica y que reúne en el mismo espacio de cultivo las
especies que acumulan sustancias de reserva en el mismo órgano vegetal motivando su hipertrofia) u
otras basadas en principios de carácter mecánico o de aprovechamiento espacial o de protección
fitosanitaria, etc.
42
B) Asociación de cultivos por familias, sujeta también a una rotación cuatrienal
43
IV Relleno con sustrato de los alveolos existentes en las bandejas y colocación
de las semillas en forma apropiada6.
Y, finalmente, la operación de acabado de la actividad:
6
En función del tamaño de la semilla, se depositarán en cada alveolo una o varias (en previsión de
posibles marras), lo más distanciadas posible (para evitar futuras competitividades en el crecimiento de
las plántulas), a una profundidad más o menos de vez y media la longitud del eje mayor de la semilla y,
procurando, que el primordio caulinar quede orientado hacia la superficie y el radicular hacia el centro
de la tierra -si esto no es posible, no hay problema porque los hábitos de crecimiento intrínsecos a los
individuos (en este caso el geotropismo) serán los encargados de generar los giros necesarios en las
elongaciones de ambos órganos-.
7
El momento de la recogida de los frutos, lo expresan ciertas características organolépticas varietales y
específicas. Por ejemplo, en especies que sufren envero, se aprecia el color clásico de alcance del punto
de madurez; en otras especies, lo muestran cambios texturales u otros aspectos ligados a la
composición química como el aroma o el gusto.
44
1) TROCEADO del resto de cosecha recogida mediante picadora de residuos, para
facilitar la acción de ataque de los microorganismos encargados de degradar la materia
orgánica.
2) TARADO del residuo triturado (cuyo peso será menor que el del producto recogido
por pérdida de contenido en agua en la fase de troceado).
3) CONFECCIÓN DE UNA MEZCLA DE RESIDUOS IDÓNEA PARA EL COMPOSTAJE
incorporando al material triturado, una cantidad de residuo de origen animal (p. ej.,
cama de ganado8) calculada y proporcional al peso obtenido en la fase de tarado, de
forma que la proporción C/N esté comprendida en un rango de valores de entre 25 y
309.
4) COMPOSTAJE de la mezcla: la mezcla se introduce en un compostador (cámara de
digestión o reactor, donde se suceden los procesos químicos de transformación). El
material confinado en el compostador (digestato), va a ser sometido a una
fermentación aerobia que ocurre en diferentes fases. Según la temperatura que se
alcanza, actúan diferentes microorganismos y varían también otras características de
la etapa (por ejemplo, el carácter acido-básico del medio) hasta la estabilización del
sistema, que marca el punto final de las alteraciones con la obtención de un material
8
La procedente de cabaña de ovino, es la que más se ajusta a las necesidades de las hortalizas.
9
Para que después de los cambios que ocurren en el proceso a que va a ser sometida dicha mezcla
(compostaje) la del producto final (compost) sea del orden de 10.
45
maduro. La evolución del proceso fermentativo ha de ser vigilada y controlada. El
digestato debe tener las condiciones de humedad y aireación requeridas para que cada
fase transcurra en las condiciones más favorables hacia los microorganismos
afectados. Se regará y se darán varios volteos para favorecer la aerobiosis y controlar
la temperatura.
Gráfico 14: Evaluación de la temperatura y pH durante las diferentes etapas del compostaje.
Fuente: (Dalzell et al., 1981).
10
En este trabajo, referido a un huerto situado en Madrid (España) se considera que un año agrícola va
de septiembre del año “a” a septiembre del año “a+1”.
46
2.3 Alzado de los restos de cosecha de la campaña anterior que permanecen en el
terreno y procesado de los mismos para su aprovechamiento en la elaboración de
compost (si procede).
Lo que queda en los tablares de cultivo hecha la recolección, hay que retirarlo para que
puedan recibir las nuevas plantas. Se utilizarán para compostaje, tanto los restos de
cosecha, como aquellas especies de crecimiento espontáneo y no deseado, surgidas en
el bancal (se permite la proliferación de estas plantas adventicias, siempre que no
comprometan la producción) mientras no presenten flores ni fruto; lo demás, se
desecha y se aparta del huerto.
LABORES VERTICALES
PROFUNDIDAD PROFUNDIDAD
DE HERRAMIENTA DE TRABAJO
LABOR TRABAJO (cm)
-Escarda
Binadora 0-10
-Mullido
-Mullido
Grada de púas 15-20
Superficial -Nivelación
-Trituración restos
Motoazada 15-20
cosecha
Motocultor 15-30 -Rotura suela labor
47
Además, hay unas herramientas específicas para horticultura ecológica, que son la
azada de rueda y la horca de doble mango.
La azada de rueda incorpora cinco aperos intercambiables que desempeñan diferentes
funciones:
Arado Labor monograda. Volteo muy superficial. Abre y tapa surcos.
Surcador Labor doble grada. Volteo muy superficial. Abre y cierra surcos.
Bina Labor de escarda. Corta la maleza.
Cultivador Rompe costras y ablanda el terreno. Puede trabajar con piedra pequeña.
Rodillo de estrellas Pulveriza.
La horca de doble mango sirve para airear el terreno.
Tras las labores, el suelo debe quedar sin compactación, pulverizado, suelto y bien
aireado. En buenas condiciones para recibir la siembra o las plántulas procedentes del
semillero. En el primer caso debe tener buena aptitud para facilitar la emergencia y en
ambos, para facilitar el crecimiento y anclaje del sistema radicular.
2.5 Fertilización.
El fundamento de la fertilización es la restitución al suelo de su nivel nutricional,
incorporando los nutrientes que han sido extraídos por la plantación previa, durante su
ciclo productivo.
La dosis necesaria de fertilizante se puede aportar en una o dos veces.
Si se hace una sola aportación (añadiendo al suelo de una única vez, todo el volumen
de fertilizante necesario para compensar las extracciones realizadas por los cultivos
48
anteriores, devolviéndole enteramente su capacidad trófica) se aprovechará el
momento en que se efectúan las labores preparatorias, al comienzo del año agrícola
(septiembre), de manera que la adición quede integrada en el terreno con los trabajos
de preparación y acondicionamiento.
Si se hacen dos aportaciones, con cada una, se cubrirán la mitad de las necesidades
totales de restitución. La segunda dosis, que repondrá lo gastado por la campaña de
otoño/invierno (la primera campaña del año agrícola) se suministra al comenzar la
segunda campaña (la de primavera/verano), en marzo.
El tipo de fertilizante que parece más conveniente para un huerto urbano, es el
compost (por su origen natural y por ser un producto estable).
49
También pueden emplearse otro tipo de fertilizantes como vermicompost (o “humus
de lombriz”) que es el resultado de la digestión de la ingesta de las lombrices. Es
estable y muy parecido al humus. Posee un gran poder de retención de minerales y
según confirman varios autores11, contiene fitohormonas como AIA, giberelinas, etc.
Otra forma de fertilizar el huerto (de manera indirecta12) puede ser la micorrización13
pese a que es un método que presenta limitaciones porque algunas hortalizas, como
por ejemplo las brasicáceas, no lo admiten.
El procedimiento de este sistema de enriquecimiento y sus ventajas se exponen a
continuación:
Comienza inoculando el suelo con propágulos (esporas o porciones de hifa) de hongo
micorrizante, que ha de entrar en simbiosis con el sistema radicular del cultivo para
que se establezca la micorriza y luego hay que esperar a que la micorrización se
extienda. Los beneficios son numerosos porque además de mejorar la estructura del
suelo, se comprueba el aumento de:
Absorción de agua y nutrientes (sobre todo N y P).
Resistencia a la sequía, la salinidad, y a enfermedades criptogámicas.
Crecimiento y desarrollo del sistema radicular.
11
Está referido a científicos del Soil Ecology Laboratory, The Ohio State University, Columbus, OH, USA.
Fuente: http://compostadores.com/descubre-el-compostaje/la-sostenibilidad-del-compostaje/187-la-
conversion-de-residuos-organicos-en-vermicompost-y-te-de-vermicompost-que-favorecen-el-
crecimento-de-las-plantas-y-evita-el-uso-de-pesticidas-y-de-enfermedades.html. (Página consultada el
20/10/2017 a las 22:11)
12
No es una fertilización propiamente dicha, pero se consiguen unas mejoras en el suelo cuyos
resultados le equivalen.
13
Fuente: http://www.ecoagricultor.com/las-micorrizas-los-biofertilizadores-naturales-del-suelo/(Página
consultada el 20/10/2017 a las 22:46)
50
Fotos 7, 8 y 9: Siembra directa de semilla, siembra de órgano vegetativo y siembra en semilleros.
Fuente: Huerto ecológico ETSIAAB.
14
Los riegos localizados, especialmente indicados cuando cabe esperar problemas de déficit hídrico, son
muy recomendables porque evitan la proliferación de hongos (por exceso de humedad), los daños por
quemadura (por “efecto lupa” sobre los tejidos), las derivas por viento y las pérdidas por escorrentía, los
encharcamientos, y otros inconvenientes que reducen la productividad.
15
El momento adecuado es el de menor calor.
51
La caracterización del agua destinada al riego del huerto, en la fase de proyecto, es una
medida necesaria e importante para conocer su aptitud para el riego16.
16
Para mejorar las condiciones del agua de riego existen métodos naturales como las “flowforms” (su
configuración geométrica obliga al desplazamiento del agua en régimen turbulento y con formación de
vórtices, describiendo la vena líquida en su trayectoria, una lemniscata. En los remolinos que se forman,
es donde el agua se oxigena desinfectándose y, donde por acción mecánica sobre el propio dinamismo
del flujo, sedimentan las partículas flotantes, limpiándose). Otros métodos como los filtros formados por
especies acumuladoras (que absorben los contaminantes del agua para su propio alimento) son también
eficaces.
17
Por efecto de sombreo.
18
Por interrupción de la vía de escape.
19
Por interposición de un elemento de separación entre la atmósfera del suelo y la de la superficie.
20
Zona del tallo más próxima a la tierra cuyo tejido es el más sensible a los daños por bajas
temperaturas.
21
La propia cubierta representa un elemento protector frente a la acción de fenómenos productores de
erosión como el viento, la escorrentía, la precipitación violenta, etc.
52
vegetales, etc. Cada uno de ellos, se adapta mejor a unas circunstancias y unos cultivos
determinados, tiene su momento de colocación óptimo y presenta ventajas e
inconvenientes particulares.
2.9 Replanteo
Sobre los bancales, hay que distribuir el terreno que se vaya a asignar a cada cultivo,
teniendo en cuenta cuál será su modo de implantación (trasplante, siembra a voleo o
siembra a chorrillo). Después, en función de la modalidad de instalación y del marco de
plantación elegido, se identificará sobre el propio suelo, el lugar correspondiente a las
unidades de plantación (golpes de siembra, individuos unitarios, unidades de
asociación, etc.) señalando su ubicación de forma inequívoca y haciendo una marca si
es preciso.22,23
Los marcos de plantación y las densidades de siembra que se impongan, dependerán
de lo intensivamente que se desee aprovechar el terreno, el rango de biodiversidad
que quiera establecerse, la fertilidad y profundidad que posea el suelo y las
asociaciones que se haya previsto fundar; y, sobre todo, dependerán de las especies
que vayan a cultivarse: de su talla, de su hábito de crecimiento, del manejo y de los
tratamientos que vayan a recibir.
El lugar que ocupará el cultivo en el bancal, dependerá fundamentalmente, de los
cuidados posteriores a la plantación que vaya a precisar.
22
Es muy cómodo, para marcar las líneas de cultivo (o hacer los surcos y/o caballones) ayudarse con
cuerdas atadas a piquetas, situadas en los extremos del bancal y contar con una cinta métrica para
establecer las distancias entre plantas consecutivas, en la línea y la distancia entre líneas.
23
Algunas formas de referenciar la ubicación correspondiente a las plantas en el terreno pueden ser
marcando el sitio exacto con una señal pintada en el suelo o clavando un palito u otras formas que el
ingenio descubra.
53
2.10 Siembras y repicado de plántulas procedentes de los semilleros.
Una vez conocido el lugar que debe ocupar cada cultivo y, más concretamente cada
unidad en el espacio a plantar, es el momento del establecimiento de los individuos en
el terreno de asiento.
En el caso de haber hecho semilleros, es el momento de repicar las plántulas en las
eras de destino.
24
Con el agua de este riego se consigue un efecto mecánico de desmenuzamiento del suelo que
comprende la cama de siembra/plantación, que va a favorecer un contacto más íntimo entre el cepellón
y el sustrato (en la labor de repicado) o entre la semilla y su corteza envolvente (en caso de siembra).
54
3.- OPERACIONES DE MANTENIMIENTO
Se realizan durante todo el ciclo de producción25, pero aquí se van a contemplar las
que se realizan desde la implantación de los cultivos en el terreno de asiento, hasta el
momento de la cosecha, al final del ciclo de producción.
Fotos 17 y 18: Diferentes sistemas de apoyo y conducción adaptados a los distintos hábitos de
crecimiento.
Fuente: Huerto ecológico ETSIAAB.
25
Durante la fase de semillero de los cultivos, y tras su ejecución, es necesario hacer un seguimiento
riguroso de los planteles y supervisar que tengan la humedad, temperatura y luz adecuadas y que no
estén bajo amenaza de ningún daño mecánico o sanitario.
55
3.4 Operaciones especiales inductoras de mejora de aprovechamiento.
Como las de aporcado o encordelado para conseguir menos cantidad de superficie
verde en la hortaliza que la hará más fácil de digerir.
56
Foto 21: Escarda mediante quemador de adventicias.
Fuente: Huerto ecológico ETSIAAB.
26
Por ejemplo: Salvia officinalis y Artemisia ssp. producen terpenoides, inhibidores de crecimiento y
generadores de alelopatía, pero al mismo tiempo, la salvia repele la mariposa blanca de la col, la mosca
de la zanahoria y los caracoles; y, algunas plantas del género Artemisia, producen efectos antiaficida y
anticriptogámico, beneficiosos para las plantas cultivadas.
57
3.6.3 Control del estado sanitario
Para su control es necesario establecer mecanismos de defensa contra las plagas y
enfermedades que atacan a los cultivos, sin embargo, se permitirá la presencia de
enemigos productores de estos daños, mientras el perjuicio que produzcan no
comprometa el rendimiento de los cultivos.
Hay dos tipos de estrategias para el control del estado sanitario: de prevención (con
métodos directos e indirectos) y de curación (mediante la aplicación de tratamientos
localizados en zonas afectadas y/o haciendo uso de la lucha biológica).
etc.).
Aplicar técnicas de manejo que favorezcan, estimulen y promuevan los mecanismos
o Eliminar restos de cosecha para eliminar alimento y cobijo para los enemigos de los
cultivos.
Establecer barreras y setos circundantes vegetales, preferiblemente de configuración
27
Por atraer insectos polinizadores y/o también a los que sean antagonistas de los enemigos de las
plantas cultivadas.
58
Cuadro 5: Especies que conforman el seto circundante del huerto ecológico de la ESIAAB.
Fuente: Elaboración propia.
B) Métodos directos
Partir de material vegetal apropiado y en perfecto estado sanitario y mantenerlo.
Fotos 22 y 23: Elementos disuasorios por figura humana y emisor de sonido y vibración.
Fuente: Huerto ecológico ETSIAAB.
28
Según la teoría de la “Trofobiosis” (Chaboussou, F. 1969) una planta en equilibrio (aquella en que la
tasa de proteosíntesis está equilibrada con la de proteolisis) no poseerá radicales aminoácido en su
torrente de jugos vegetales y por ello no será elemento de atracción para establecimiento de plagas ni
representará fácil objetivo para el ataque de enfermedades.
59
3.6.3.2 Estrategias para la cura:
A) Aplicación de tratamientos localizados en zonas afectadas
Líquidos:
29
La cola de caballo (fungicida de amplio espectro) y la ortiga (rutina: flavonoide repelente por su sabor
y también protector de la intensidad de luz UV) ambas se utilizan para defensa contra pulgón y araña
roja. El ajo (aliínaalicina: propiedades antibióticas -bactericida y fungicida- y antioxidantes, también es
aficida. Neem (azadirachtina: insecticida sistémico y de contacto). Jabón de potasa: contra áfidos, ácaros
y orugas.
30
El jabón de potasa se usa contra áfidos, ácaros y orugas: reblandece la capa de quitina del
exoesqueleto de los insectos -cutícula-, alterando la función respiratoria y produciendo asfixia. El aceite
de parafina también produce asfixia porque se adhiere a la cutícula de los insectos.
60
Sólidos:
B) Lucha biológica
Control por suelta de enemigos naturales. La relación antagónica puede ser de
31
S: Inactiva enzimas del metabolismo. Si: Forma un depósito epidérmico que imposibilita la
penetración y desarrollo de hifas. Cu: Cataliza la formación de fungicidas por el sistema inmunitario del
vegetal.
32
Chrysoperla carnea: depredador polífago. Aphidius colemani: parasitoide de pulgón. Phytoseiulus
persimilis y Ambliseyus californicus: depredadores de araña roja. Apanteles glomeratus: parasitoide de
la mariposa de la col.
61
El presente documento se ha generado dentro del
proyecto de innovación educativa Nº IE1617.2001,
de título "Aprendizaje/Servicio en huertos
urbanos", financiado por la Universidad Politécnica
de Madrid.
62