Monografia Terminada
Monografia Terminada
Monografia Terminada
Lo abordaremos desde sus inicios en el año 1969 en Estados Unidos, con la aparición de las
primeras manifestaciones para lograr ser un sector visibilizado y romper con las
desigualdades de las minorías, hasta la actualidad en nuestro país.
En Argentina, se plantea desde las primeras transformaciones que se han desarrollado tanto
en los espacios públicos, privados y urbanos a partir de la década de 1970. Se interpelará el
espacio geográfico argentino a partir de las vivencias de los sujetos autodefinidos como
Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transgénero y Queer. Se hará hincapié en los derechos que se
han adquirido; como la ley de matrimonio igualitario y la ley de identidad de género, las
marchas del orgullo en donde la convocatoria ha ido creciendo con el paso del tiempo, y
como es la reacción de la comunidad ante la discriminación, ya que es una problemática
social aún muy grande.
Palabras Claves:
Introducción:
Desde siempre han existido controversias acerca de la comunidad LGBTQ+ y su
aceptación es algo que aún no logra instalarse en la totalidad de la población, ya que la
percepción social dominante aun entiende a la heterosexualidad como normal. De esta
manera, percibida la heterosexualidad como predeterminada y esperada, cualquier otra
orientación fue considerada por largo tiempo anormal, extraña, e incluso patológica.
En nuestro país a pesar de las posturas diferidas de la sociedad, en los últimos años puede
verse un progreso en la visión que tiene la sociedad sobre este tema. En el año 2010
1
Argentina fue el primer país latinoamericano (y el décimo a nivel mundial) en legalizar el
matrimonio entre personas del mismo sexo, abriendo un cambio en la concepción de esta
realidad. Por otra parte, Argentina es el primer país a nivel mundial en aprobar la Ley de
Identidad de género en 2012.
Sin embargo, a pesar de todos estos cambios acaecidos en los últimos años, aún la cuestión
de las identidades sexuales disidentes sigue siendo un tema poco estudiado y abordado por
la comunidad científica.
En lo que compete a nuestra área de conocimiento: “la geografía”, se han desarrollado en
los últimos años estudios sistemáticos, que han abordado este tema. Podemos encontrar
amplios trabajos que abordan la geografía de las sexualidades, utilizando como marco de
referencia la teoría Queer. Este nuevo enfoque se ve impulsado hacia la década de 1990,
junto a los giros en la geografía, en las ciencias sociales y a la incorporación de discusiones
teóricas a partir de posmodernismo y el poscolonialismo, las teorías fenomenológicas y
psicoanalíticas.
La geografía de género es la que se encarga de abordar las desigualdades espaciales
derivadas de las relaciones de género. Apoyada en la teoría feminista se intenta deconstruir
un espacio construido a partir de la subordinación de lo femenino a lo masculino, en donde
predomina la cultura patriarcal, y queda marginada cualquier forma de vida que no se
adapte a ella.
El contexto de desarrollo de los primeros movimientos LGTBQ+ estuvo caracterizado
principalmente por las denuncias de muchas personas que habían estado sistemáticamente
invisibilizadas por las normas de la heterosexualidad. Esto tuvo repercusión especialmente
en Estados Unidos y Europa, donde también los movimientos feministas estaban ganando
mayor difusión. Aquí se abrió un primer punto de partida para la reivindicación de otras
sexualidades que también se habían reservado para el espacio privado.
Desarrollo
Contexto histórico del movimiento LGBTQ+ en Argentina
Para realizar el análisis es necesario adentrarse en los comienzos del movimiento LGBTQ+,
haciendo un breve recorrido histórico que permitirá entender las transformaciones
posteriores.
2
El movimiento tiene sus orígenes en el Frente de Liberación Homosexual (FLH) creado en
1971, y dentro del mismo se halla la agrupación denominada Nuestro Mundo, surgida en
1967, a la que dio un gran impulso Héctor Anabitarte, un joven militante comunista a quien
el partido arrojó de sus filas por su condición de homosexual. Unos años más tarde surgió
en Buenos Aires en FLH (Simonetto Patricio, 2017)
El Frente de Liberación Homosexual fue un colectivo político que reunió a sujetos con
identidades disidentes a la norma heterosexual y que intentó entrelazar el imaginario de la
revolución social y sexual. En su seno coexistieron marxistas, filo peronistas, cristianos,
anarquistas, trabajadores e intelectuales organizados bajo principios anticapitalistas, anti
patriarcales y antiimperialistas.
El 2 de Julio de 1992 se celebró la 1 Marcha de Orgullo que es ese entonces solo llevaba el
nombre de “Gay-Lésbico”. Asistieron alrededor de unas 300 personas, la mayoría de los
que participaron tenían sus caras cubiertas por máscaras de cartón, para atenuar el nivel de
exposición. Todos aquellos homosexuales, lesbianas y disidentes sexuales que participaron
en estas primeras marchas vivían de manera descarnada la opresión sexual impartida por
sus patronales y la “homolestransfobia” que era garantizada por los edictos policiales y
3
códigos contravencionales. Estas legislaciones represivas se encontraban intactas desde la
dictadura; el escrache contra políticos homofóbicos y comisarios o las campañas contra el
arzobispo Quarracino y la Iglesia Católica fueron parte de la agenda del movimiento
LGTBI durante estos años. (Simonetto Patricio, 2017)
El espacio público como escenario de las opresiones vividas por las disidencias
sexuales
El espacio no es neutro, sino que está atravesado por prácticas sociales y culturales, las
cuales se construyen en el tiempo. Visto de esta manera, se puede afirmar que el género es
una construcción que se fue moldeando en una cultura patriarcal, con predominio de una
masculinidad hegemónica. “El concepto de hegemonía hace referencia a la dominación
cultural en la sociedad como un todo. Dentro de esa configuración, existen relaciones
específicas de dominación y subordinación entre masculinidades. Connell pone como
ejemplo, el caso de. dominación de los varones heterosexuales por sobre los
homosexuales, donde los últimos se encuentran subordinados por un conjunto de prácticas
genéricas (la exclusión política y cultural, la violencia legal, la violencia callejera, la
discriminación económica, etc.). La homosexualidad en la mayoría de las masculinidades
4
hegemónicas occidentales simboliza todo aquello que es expulsado de ellas por ser
asimiladas con la femineidad”1
En este apartado se busca hacer hincapié en las experiencias reales que viven los miembros
de esta comunidad en el espacio público en la actualidad, tomando como principal
referencia espacial la Ciudad y Provincia de Buenos Aires.
1
Geografía, el desafío de construir territorios de inclusión / Ana María Fernández Equiza; compilado por Ana
María Fernández Equiza. - 1a ed. - Tandil: Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires,
2014.
https://igehcs.conicet.gov.ar/wp-content/uploads/sites/104/2019/03/El-desaf%C3%ADo-de-construir-
territorios.pdf
2
Universidad Nacional de Quilmes/Cuestiones criminales/Laboratorio de Estudios Sociales y Culturales
sobre Violencias Urbanas Director: Mg. Esteban Rodríguez Alzueta/ ISSN: 2618-2424
https://www.lesyc.com/cuestionescriminales
5
trans y travestis. Sus cuerpos son concebidos como objetos de transacciones comerciales,
tanto de tipo sexual como vinculado a la venta de estupefacientes, dimensiones que retoman
hacia el colectivo a través de un reclutamiento de mecanismos represivos y su virtual
expulsión del espacio público. Asimismo “las normas que penalizan la oferta y demanda
de sexo en la vía pública históricamente han tenido una importante presencia en la
actividad contravencional de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con un marcado
alcance en travestis y mujeres transexuales de condición migrante. Y Si bien los datos
oficiales de los últimos años registran un descenso en el total de actas ingresadas por el
artículo 81 del código contravencional, su incidencia geográfica continúa anclada en
ciertas comunas y barrios específicos. En 2015, cerca de la mitad de las actas
contravencionales se labraban en el barrio de Constitución y la distribución sexo/género
permite aventurar que alcanzaron principalmente a travestis de nacionalidad extranjera.
Situaciones similares tienen lugar en otros puntos del país”3 Norma Gilardi que en la
actualidad es secretaria y cofundadora de la Asociación de Lucha por la Identidad Travesti
y Transexual, recuerda en una entrevista que muchas veces fue arrestada desde que tenía 16
años, tanto por prostitución como por ser travesti independientemente donde la encontrara
la policía o lo que estuviera haciendo. A pesar de todos los avances en materia de derechos
hacia la comunidad LGBTQ+, la comunidad transgénero y travesti sigue sufriendo abusos y
violación de derechos por parte de la policía, según un informe del observatorio de
Violencia de Género de la Defensoría del Pueblo de La Provincia de Buenos Aires. Nos es
casualidad que la mayoría de mujeres transgénero o travestis sean trabajadoras sexuales,
dice Alba Rueda, militante de Mujeres Trans Argentina “la prostitución sigue siendo la
única opción cuando la familia y los amigos te dan la espalda” dice Rueda. “La escuela es
profundamente expulsiva, la familia también y no queda otra que prostituirse. Nadie quiere
emplear una persona trans”4
3
Travestis, mujeres transexuales y tribunales: hacer justicia en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires;
coordinadores: Blas Radi y Mario Pecheny/ Editorial jusbaires 2018
https://consejo.jusbaires.gob.ar/acceso/genero/publicaciones/56B54E5DCEA657FD53980FE889520F28
4
https://globalpressjournal.com/americas/argentina/seeking-justice-argentinas-cross-dressers-press-
government-reparations/es/
6
El 79 por ciento de las personas trans de las áreas de la Buenos Aires, Mar del Plata y el
Conurbano Bonaerense recurren a la prostitución como medio de vida, a pesar de que la
mayoría de ellas elegirían otro modo para ganarse la vida si pudieran según un estudio de
2005 citado por la Organización Internacional del Trabajo. De ahí su vulnerabilidad a
varios tipos de abusos y enfermedades tales como el VIH.
El siguiente gráfico representa una encuesta realizada por la fundación Huésped en el año
2013 en siete regiones del país: Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), Conurbano
bonaerense, Región Pampeana, Noreste argentino (NOA), Noroeste argentino (NEA), Cuyo
y Patagonia.
Fuente: https://www.huesped.org.ar/wp-content/uploads/2014/05/OSI-informe-FINAL.pdf
7
de puestos de trabajo a ser exclusivamente ocupados por ellas, con el fin de promover la
igualdad real de oportunidades en el empleo público”.
Diana Sacayán, una de sus principales impulsoras, fue asesinada un mes después de la
sanción. El proyecto que dio origen a la ley fue presentado por la diputada Karina Nazabal,
del Frente para la Victoria. El reclamo por su implementación urgente continúa.
Fuente: http://agenciapresentes.org/2018/04/30/mapa-asi-esta-el-cupo-laboral-trans-en-el-pais/
FALGBT:
8
La ley de Matrimonio igualitario (26.618):
Aprobada el 15 de julio de 2010, que permite el acceso al pleno matrimonio por parte de
todas las parejas, incluidas las conformadas por personas del mismo sexo, y garantiza el
derecho a la adopción conjunta por todos los matrimonios.
Dentro de los proyectos a futuro que tiene la FALGBT se encuentran; una nueva ley de
actos discriminatorios, la donación de sangre sin discriminación, la prevención de
discriminación, acoso y hostigamiento escolar y la protección social e inclusión laboral
para el colectivo trans.
9
latinoamericanos que criminalizan o protegen a la población por orientación sexual
10
fuente: https://ilga.org/es/mapas-legislacion-sobre-orientacion-sexual
GÉNERO Y LAICISMO:
11
Los y las activistas de la Federación Argentina LGBT entienden que la discriminación que
enfrentan no es esencialmente distinta a la que sufren otros grupos vulnerados. Y en
particular, tienen muy en claro que la discriminación y la violencia de género que sufren las
mujeres es la misma y tiene las mismas raíces que la que afecta a lesbianas, gays,
bisexuales y trans. Por eso creen que no es posible la igualdad jurídica para los y las LGBT
si no se avanza contra el patriarcado y las concepciones machistas tan arraigadas en
nuestras sociedades.
Es por eso que desde la FALGBT se hacen propias las banderas y las consignas del
movimiento de mujeres y de quienes promueven la plena vigencia de un Estado laico en
nuestro país; porque sin acabar con el machismo, mientras las mujeres —y los hombres
trans— no puedan decidir libremente sobre sus cuerpos y mientras las religiones tengan la
capacidad de incidir sobre las decisiones de gobierno, no será posible alcanzar la igualdad
real ni para los y las LGBT, ni en cuestiones de género.
DISCRIMINACIÓN
12
libremente su orientación sexual e identidad de género. El objetivo de todas estas acciones
de sensibilización, denuncia y reivindicación de la lucha contra la discriminación por
orientación sexual e identidad de género es promover que ese día sea declarado Día Internacional
por parte de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
Esa fecha fue elegida para conmemorar el Día contra la Homofobia y la Transfobia, porque
un 17 de mayo de 1990 la Organización Mundial de la Salud (OMS) decidió retirar la
homosexualidad de su lista de desórdenes mentales y reconocerla oficialmente como una
variación natural de la sexualidad humana. Este importante avance fue un gran paso
adelante hacia la consideración de la orientación sexual y la identidad de género como un
derecho humano fundamental. Desde entonces, la comunidad científica internacional se
opone a todos los enfoques que consideran la homosexualidad como una enfermedad que
debe ser curada.
Se trata de una serie de prácticas, caracterizadas por una actitud hostil hacia la diversidad
sexual, que concibe y marca las sexualidades no dominantes como contrarias, inferiores, no
deseables o anormales, produciendo así un estigma sobre las personas LGTBQ+ al
representarlas como pecadoras, enfermas, peligrosas, delincuentes, criminales o
desequilibradas. En la construcción y difusión de estos estereotipos se llega incluso a
despojarlas de su condición de seres humanos. La discriminación se expresa en diferentes
formas activas de violencia física y verbal, y en el rechazo silencioso e institucionalizado
hacia las personas LGTBQ+ o percibidas como tales. Estas prácticas pueden constituirse en
actos discriminatorios cuando limitan, obstruyen o niegan el acceso a derechos, espacios,
reconocimiento, prestigio o poder. Estas prácticas discriminatorias intensas y cotidianas,
por su constante reproducción, llegan a ser internalizadas y naturalizadas como parte de la
dinámica de las relaciones sociales. En sus distintas manifestaciones, la discriminación por
orientación sexual e identidad de género anula o perjudica el reconocimiento, el goce o el
ejercicio en pie de igualdad de derechos humanos y libertades fundamentales en los
ámbitos económico, social y cultural, o en cualquier otro ámbito de la vida. Se manifiesta
de diversas maneras, como la invisibilización de las sexualidades diferentes de la
heterosexualidad, o la violencia verbal, física o simbólica que deriva en la exclusión y la
13
subordinación de personas lesbianas, gays, trans, bisexuales e intersex. Se mantiene y
reproduce a partir de la naturalización en nuestra sociedad de la heterosexualidad como
paradigma de la normalidad. Esta afirmación es conceptual, pero refiere principalmente una
realidad arraigada en la cotidianidad, una vivencia tangible y concreta. La heterosexualidad
tiene una gran cantidad de espacios legítimos en los que expresarse y vivirse, mientras que
las sexualidades que no se corresponden con este paradigma son usualmente condenadas al
espacio privado y a la esfera íntima, lo cual instituye la invisibilización y la desigualdad. la
heterosexualidad está situada en el nivel más alto de la valoración social, mientras que las
sexualidades que no se adecuan a este paradigma ocupan un lugar subalterno. Así, la
heterosexualidad se presenta como un mandato ineludible, y quienes se apartan de él se ven
expuestos/as a ser señalados/as y percibidos/as como anormales o amorales. El mandato
heterosexual enmarca situaciones de exclusión, discriminación, violencia o malestar en los
distintos ámbitos de socialización de quienes no se identifican con él, empezando por el
núcleo familiar y pasando por los ámbitos educativos, laborales, deportivos y sanitarios,
entre otros, con el pretexto de su orientación sexual y su identidad de género.
14
fuente: http://www.inadi.gob.ar/mapa-discriminacion/documentos/mapa-de-la-
discriminacion-segunda-edicion.pdf
15
escuela y el mismo porcentaje recibió maltrato de maestros o profesores, un 21,6 % se
sintió rechazado por el personal no docente; y lo más significativo es que el 58,2 % fue
discriminado por sus propios compañeros de curso o de grado. Lo más grave respecto a las
experiencias en el ámbito educativo fue que el 44,5 % declaró que tuvo que dejar la escuela
a causa de la discriminación sufrida. Solo el 47,6 % pudo llegar al secundario, mientras que
el 37 % accedió hasta al ciclo primario y el 8,7 % al EGB, únicamente el 4,8 % llegó al
nivel superior no universitario o a la universidad y solo una persona de un total de 209
encuestadas alcanzó el nivel de posgrado. Finalmente, en las entrevistas se determinó que el
47,1 % pudo completar el nivel de enseñanza alcanzado, mientras que el 52,9 % no pudo
hacerlo. Estos datos confirman que tanto en los ámbitos escolares, educativos y recreativos
como en la sociedad en general, las niñas, niños y adolescentes trans se han visto expuestos
a numerosos casos de expulsión explícita o implícita; en particular, habla de un sistema
educativo que no ha incluido a las personas trans de un modo respetuoso, ya sea por una
mirada pedagógica normalizadora funcional al orden binario o por prácticas
discriminatorias ejercidas por pares, padres, madres, docentes o autoridades. Por lo tanto,
incorporar el 17 de mayo al calendario escolar constituirá un aporte central al desarrollo de
una pedagogía emancipatoria que contemple el concepto de igualdad y no discriminación,
propiciando ámbitos educativos donde todos y todas estén incluidos, donde todas las
identidades sexuales y de género sean visibles, valoradas y respetadas. La escuela cumple
un rol central en la educación y en la socialización de las personas; desde la primera
infancia es un espacio fundamental para la conformación de la propia identidad y la
construcción de vínculos entre pares. Por eso resulta esencial el efectivo cumplimiento de la
Ley N.º 26.150 de Educación Sexual Integral, ya que todo niño, niña y adolescente tiene
derecho a recibir información sobre aspectos biológicos, fisiológicos, genéticos,
psicológicos, éticos, jurídicos y pedagógicos en relación con su sexualidad, siendo
responsabilidad de la escuela promover la comprensión y el acompañamiento en la
maduración afectiva del niño, niña y adolescente, ayudándolo a formar su sexualidad y
preparándolo para entablar relaciones interpersonales positivas. El cumplimiento del
derecho a la educación de las personas LGBTI es un derecho inalienable de la totalidad de
niños, niñas y adolescentes que solo podrá ser garantizado a través del reconocimiento y el
respeto de su identidad y expresión de género en todas las instituciones y niveles del
16
sistema educativo. Como contraparte, se requieren docentes y equipos interdisciplinarios
capacitados que efectivicen la inclusión en el aula y comprendan la especificidad de su
realidad. A su vez, la presencia de las diversas identidades en los contenidos curriculares y
materiales didácticos contribuirá a ver la propia identidad representada y visibilizada. Si
entendemos a la sexualidad como un derecho, como dimensión de la subjetividad y aspecto
central del ejercicio de la ciudadanía, es fundamental que la escuela promueva el respeto
hacia las diversas formas de vivirla. El cambio hacia una escuela inclusiva en reemplazo de
la escuela integradora implica que todos y todas somos diferentes, y plantea a la institución
el desafío de poner en marcha objetivos, contenidos, sistemas de enseñanza y de
evaluación, asumiendo esa diversidad. Garantizar la educación inclusiva no solo permite el
ejercicio del derecho a la educación sin discriminación, sino que resulta el fundamento de
sociedades más justas y democráticas, por cuanto empodera a los jóvenes para que
participen activamente de los procesos de transformación social en pos de una sociedad
más igualitaria.
La siguiente encuesta fue llevada a cabo por la Fundación Huésped en el marco de una
investigación realizada a personas trans de la Argentina durante el año 2013, cuyo
propósito fue contribuir a conocer las consecuencias de la implementación de la Ley de
Identidad de Género en las condiciones de vida de las personas trans, enfocándose en la
salud, la educación, el trabajo, la vivienda, y derechos políticos y civiles.
18
Entrevista a Ariel Velázquez- Fundador de GAPEF y secretario de deportes de
FALGBT
¿Hace cuánto se creó la organización y con qué fines?
GAPEF se creó con la necesidad de generar un espacio deportivo. Puntualmente, al
principio dedicado a fútbol, y que sea un ambiente cálido en donde las personas que no
respondan a la heteronorma puedan practicar el deporte libremente sin ningún tipo de
prejuicio ni discriminación. Crear el espacio, encontrar gente dispuesta a participar de esto
llevó bastante tiempo, casi un año y finalmente se pudo concretar el 17 de julio de 2010 con
el nombre de GAPEF (Gays Apasionados Por El Fútbol) que es su sigla. Este nombre fue
elegido en su momento por una cuestión de identidad y de querer mostrar a donde se
apuntaba desde el mismo nombre. Más allá que en el transcurso de los años se fueron
agregando otros deportes, no se limitó sólo al fútbol y tampoco nunca fue un espacio
excluyente, ya que además de personas gays, es abierto a cualquier orientación, incluso a
personas heterosexuales. Uno de los fines principales que tiene esta asociación es demostrar
que para la práctica deportiva nada tiene que ver la orientación sexual y hay que visibilizar
la convivencia de las diversidades.
¿Cómo ha sido la respuesta de la comunidad LGTBQ+ ante la creación de esta
organización?
La respuesta de la comunidad LGTBQ+ ha pasado por diversos estadios. Al principio era
extraño ver cómo era posible que personas gays jugaran al fútbol. Por supuesto, esto
responde a la norma del patriarcado en donde se dice que es “el hombre macho”, el
heterosexual, el que puede jugar, y uno mismo muchas veces, inclusive siendo parte de la
comunidad, tiene todavía estas apreciaciones adquiridas sin darse cuenta. También existe
“eso de la cargada” en la comunidad LGTBQ+- “eso no es para nosotros”. En sus
comienzos se notaba mucho esto, ya que muchos gays respondían “¿cómo voy a jugar a la
pelota?”, pero poco a poco esto comenzó a cambiar y sigue cambiando ese pensamiento.
Son cada vez más las personas que se vuelcan a practicar un deporte o que comparten la
lucha, incluso no jugando ni practicando, pero sí promoviendo la diversidad en el ámbito
deportivo. Hablar de diversidad en el deporte todavía sigue siendo un tabú. Ariel sostiene
que “en esta época se avanzó muchísimo en materia de derechos, en visibilidad, en poner
19
ejes temáticos LGTBQ+ en el centro de discusión de la sociedad civil, pero el deporte aún
sigue relegado, y la lucha aún continúa”.
¿Qué actividades se realizan allí?
En el año 2010 se comenzó con fútbol y a partir del 2013 se agregaron más disciplinas para
generar nuevos espacios para ampliar la participación de la comunidad. En este caso, para
personas que no les guste el fútbol y sí algún otro deporte. Arrancamos-dice Ariel- con
vóley, y actualmente tienen también paddle, tenis, natación, se está armando un grupo de
básquet y está en planes hacer algo con hockey.
¿Qué cargo ocupó/ocupa allí y a que se dedicaba?
Gapef en el año 2013/2014, cuando tuvo un gran crecimiento en cuanto a la cantidad de
personas, se empezó a plantear la necesidad de no ser simplemente un grupo informal en la
práctica deportiva sino volcarse a entrar dentro del marco legal, se empezó a tramitar la
personalidad jurídica que fue presentada en el 2015 con su correspondiente estatuto y desde
ese año-dice Ariel- Yo fui el presidente en los dos primeros periodos: 2015-2017/2017-
2019.
¿Reciben alguna ayuda del Estado?
Periódicamente y económicamente no, si muchas veces se ha trabajado a la par con el
estado en algunos eventos particulares que se han organizado. También en el año 2014,
cuando se realizó un torneo internacional en donde fueron invitados equipos de Chile y de
Uruguay se comenzó a trabajar con el estado para que les otorgue ayuda para conseguir
alguna cancha, o en algunos casos consiguiendo algunos premios o diplomas para entregar.
La manera que se trabaja desde GAPEF con el estado es a través del planteo de algún
evento determinado que se esté programando y ver de qué manera pueden aportar algo que
sume al proyecto. Por ejemplo, en noviembre del año 2018 se realizó el Torneo Nacional
por la Inclusión desde GAPEF y desde la FALGBT, un evento multideportivo en donde el
estado colaboró con ambas organizaciones. Participaron alrededor de 750 personas, entre
ellas gente de Buenos Aires, de varias provincias argentinas y también equipos invitados de
Chile, Uruguay y de Brasil. Desde el estado colaboraron para que se puedan utilizar las
canchas del SENAR para realizar allí el torneo.
¿Qué rol desempeña en la FALGBT?
20
Dentro de la secretaría de deportes Ariel es el coordinador, trabaja con las diversas
agrupaciones que realizan prácticas y torneos deportivos.
Glosario:
Arcoíris: desde fines de los años 1970, es el principal símbolo del orgullo LGBT en todo el
mundo. Los colores representan la diversidad.
Bisexual: persona que siente atracción por personas de su mismo género o de diferente
género, y/o que mantiene relaciones afectivas y/o sexuales con ellas.
Cisgénero: la identidad de género de la persona corresponde con el sexo que se le asignó al
nacer. El prefijo “cis” es antónimo del prefijo “trans”. Cisgénero es lo opuesto a
transgénero.
Clóset / armario: se acuñó la frase “Salir del closet”, para hacer referencia al momento en
que una persona lesbiana, gay o bisexual manifiesta a otros su orientación sexual y/o
identidad de género.
Gay: varón que siente atracción afectiva y/o sexual hacia otros varones.
Género: según la Real Academia Española: “grupo al que pertenecen los seres humanos de
cada sexo, entendido este desde un punto de vista sociocultural en lugar de exclusivamente
biológico”. Este término comenzó a utilizarse en la década de 1970 para establecer que la
sexualidad no es solamente un hecho biológico, sino una construcción social.
Heterosexual: persona que siente atracción por personas del género consideradas
convencionalmente su opuesto.
Heteronormatividad: asocia lo “normal”, lo que “está bien” con el comportamiento
heterosexual.
Intersex / Intersexual: persona cuyas características sexuales (cromosomas, gónadas,
órganos reproductivos y/o genitales) no encuadran dentro de los estándares sexuales
masculinos o femeninos.
Lesbiana: mujer que siente atracción por otras mujeres.
LGBTIQ: acrónimo de Lesbiana, Gay, Bisexual, Trans, Intersex y Queer.
Queer: (del inglés, se pronuncia “cuir”) personas que no se identifican con un género en
particular.
Trans: expresión genérica que agrupa a travestis, transexuales y transgéneros. El
significado de estas categorías puede cambiar según el país, incluso entre hispanohablantes
21
Transgénero: “persona cuya identidad y/o expresión de género no se corresponde
necesariamente con el sexo asignado al nacer, sin que esto implique la necesidad de
cirugías de reasignación u otras intervenciones de modificación corporal. En algunos casos,
no se identifican con ninguno de los géneros convencionales (masculino y femenino)”.
Referencia.
Travesti: “en general, persona a la cual le fue asignada una identificación sexual masculina
al nacer, pero que construye su identidad de género según diferentes expresiones de
femineidad incluyendo en muchos casos modificaciones corporales a partir de prótesis,
hormonas, siliconas, etc., aunque, en general, sin una correspondencia femenina en lo
genital”
Conclusión
Se puede afirmar que el movimiento LGBT en Argentina ha crecido en los últimos años y
también adquiriendo gran relevancia. Desde sus inicios hasta hoy, se puede evidenciar un
gran avance en materia de derechos, a través de todas las leyes creadas hasta la actualidad.
Sin embargo, es necesario reconocer que la igualdad real no se lleva cabo como debería ni
cómo se esperaría por parte de la comunidad LGTBQ+, ya que aún continúan siendo
víctimas de numerosas y graves violaciones de los derechos fundamentales. Ante esta
situación, es de extrema urgencia que los avances normativos vengan acompañados de un
cambio cultural, y este es el que se torna mucho más complejo, ya que no se consigue con
la mera sanción de una ley. La discriminación y el estigma siguen existiendo, y se
manifiestan en todos los ámbitos. Es por eso que desde la geografía se intentan abordar
estas problemáticas a través de la geografía de género y de las sexualidades, las cuales se
encargan de cuestionar las relaciones de poder derivadas de los roles de género en una
sociedad predominantemente patriarcal, en donde las sexualidades no heteronormativas son
excluidas del espacio público. Estos cuestionamientos tienen que ver con sacar a la luz la
relación que hay entre las divisiones de género y las divisiones espaciales para descubrir
cómo se construyen mutuamente. Asimismo, tienen en cuenta la heterogeneidad de la
población, lo cual indica que la producción y el consumo del espacio se explica través de
factores socioculturales.
La imagen de la portada de la monografía fue sacada de este blog:
http://mydava.blogspot.com/2017/05/si-aceptan-al-senor-y-tienen-buena.html
22
Bibliografía
Ana María Fernández Equiza (2014) Geografía, el desafío de construir territorios de inclusión/ 1a
ed. - Tandil: Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires/ ISBN 978-
950-658-346-0/ https://igehcs.conicet.gov.ar/wp-content/uploads/sites/104/2019/03/El-
desaf%C3%ADo-de-construir-territorios.pdf
Blas Radi y Mario Pecheny (2018) Travestis, mujeres transexuales y tribunales: hacer justicia en la
Ciudad Autónoma de Buenos Aires / Editorial Jusbaires/
https://consejo.jusbaires.gob.ar/acceso/genero/publicaciones/56B54E5DCEA657FD53980
FE889520F28
Fernández Equiza, Ana María (2014) Geografía, el desafío de construir territorios de inclusión. 1a
ed. - Tandil: Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires.
https://igehcs.conicet.gov.ar/wp-content/uploads/sites/104/2019/03/El-desaf%C3%ADo-
de-construir-territorios.pdf
Fundación Huésped (2013) presidente: Dr. Pedro Cahn Peluffo 3932 – C 1202 ABB Ciudad de
Buenos Aires, Argentina/ https://www.huesped.org.ar/wp-content/uploads/2014/05/OSI-
informe-FINAL.pdf
23
The International Lesbian, Gay, Bisexual, Trans and Intersex Association (ILGA) (2017)
https://ilga.org/es/mapas-legislacion-sobre-orientacion-sexual
http://blogs.lanacion.com.ar/boquitas-pintadas/agenda/30-anos-de-democracia-y-10-conquistas-
de-la-comunidad-gay-y-trans/
https://www.facebook.com/gapefar
24