LECTURA No. 4 - Cap. 1 Cap.2 - Cap.3 PDF
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Maurizio Coletti
Juan L. Linares
(compiladores)
La inten¡ención sistémica
en los servicios sociales ante la
familia multiproblemática
PAIDOS
Barcelona
Buenos Aires
México
BIBLIOTECA UNIVERSIOAD JAVERIANA-SEC CALI
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4 0000 00107457 6
1. MoDELo srsrÉn¡rco y FAMTLTA MULTrpRoBLBuArrce
Juan L. Linares
| .4.1 . El comunicacionalismo
la no había mejorado mucho las cosas porque los padres vivían en el pi-
so contiguo y retransmitían las incidencias de su relación a través del
patio vecinal, adobadas con interpelaciones acusatorias a Brígida e ins-
tigaciones directas a Sonia y Enrique contra ella. La abuela se sentía
desbordada y había entrado en escalada simétrica con la asistente social
encargada del caso, generándose una situación muy tensa.
La terapia transcurrió con normalidad a lo largo de un año, pero lo
que interesa destacar aquÍ es la historia de Brígida, que desempeñó un
papel fundamental en.todo el proceso. Mujer enérgicá y capaz, se sentía
muy desgraciada entre la pelea con unos servicios sociales que primero
le exigían y luego la descalificaban y la impotencia ante una situación
que le mostraba a su hijo mayor como borracho casado con una enfer-
ma y padre de dos niños en los límites entre el fracaso escolar y la pre-
delincuenc'ra'n
campesino, Brígida nació y vivió durante ,r, ,.r*rr"ia en
una casa aislada, en la que sus recuerdos seleccionaban una mala rela-
ción con su madre como eje vertebrador de una experiencia triste de ni-
ña solitaria. como era frecuente en esos tiempos en el medio rural, al
hacerse mayor BrÍgida se casó con un joven .,r"ti.ro, a cuya casa se tras-
ladó a vivir. Era un movimiento aventurado que para muchas otras chi_
cas significaba un calvario de dificultades de adaptación, pero Brígida
relataba, en cambio, la maravillosa experiencia dehaber encontr.dt
la madre de su marido a una verdadera madre para ella. A diferencia de ".,
lo ocurrido con su propia madre, ahora sabía lo que era disponer de al-
guien receptivo en quien poder confiar y a quien poder abiirse plena_
mente, porque también para su suegra ella representaba una veráad"ra
hija. Las dos mujeres pasában largas horas e.riregadas a afectuosas con-
versaciones, en las que BrÍgida encontraba calor y reconocimiento, ha-
ciéndosele ligeras las tareas domésticas al poderlas compartir tan armo-
niosamente. Su marido era un buen hombre pero, ausente como estaba
todo el día, contaba poco en realidad frente.l. i.rt".rsidad de los senti-
mientos entre las dos mujeres. Tal era la situación cuando Brígida que_
dó embarazada y, tras una penosa gestación durante la cual contó con
los cuidados y la oportuna ayuda de su suegra, dio a luz asu primer hi-
jo, Leandro.
La narración de Brígida se hace aquí patética cuando rerrlemora su
fastidio ante los apremios de un niño que comía rnal, dormía peor y es-
taba siemqre enfermo, exigiendo su presencia continua junto a él e inte-
rrumpiendo constanteme.nte lo que más le interesaba en el mundo, que
eran las charlas con la suegra. o¡siempre fue así este niño, difícil, exi_
gente, insaciable. siempre me ha dado más problemas que satisfaccio_
nes!, El hermano de Leañdro, José, nacido tres años más tarde, fue, en
cambio, diferente desde el principio: tranquilo, sano y regular comiendo
y durmiendo. Aún ahora es un hombre equilibrado y que apo-
ya y gratifica a la madre. iQué había cambiado entre-ud,rro,
el nacimiento de
Leandro y el de José? BrÍgida no lo sabía exactamente. Las cosas seguían
32 LA INTERVENCIÓN SISTÉ,MICA EN LoS SERVICIoS SoCIALES
yendo bien para ella porque su suegra seguía ayudándola mucho. Su re-
lación con ella era todavía buena, aunque ya no era como antes... quizás
es que ella no la necesitaba ya tanto...
No fue difícil consensuar con Brígida una historia sobre el ejercicio
de su rnaternidad. La relación con Leandro se había roto muy pronto, o
quizá había nacido ya deteriorada, porque el niño había venido al mun-
do sin que ella estuviera preparada para ser madre, en un momento en
que todas sus energías se centraban en ser hija. Los requerimientos del
niño le habían provocado fastidio e impaciencia porque interferían con
su avidez por obtener la nutrición emocional que sentía faltarle. Lean-
dro, a su vez, nunca había estado seguro de conseguir calor y reconoci-
miento de su madre, porque sus demandas crispadas y provocadoras ob-
teníqn respuestas tergiversadas. Entre madre e hijo se había instalado
un malentendido que había dificultado seriamente la nutrición emocio-
nal de éste, impidiendo igualmente a aquélla el disfrute de una relación
gratificante con su hijo mayor. Con el menor, sin embargo, no había ha-
bido problemas porque, al nacen las aguas habían vuelto ya a su cauce y
Brígida, saciada su propia sed de madre, había podido calmar la del ni-
ño sin dificultad. La relación entre ambos, sólidamente establecida so-
bre bases seguras, había evolucionado hacia la madurez, mientras que el
tándem Brígida-Leandro, con las funciones parentales deterioradas, se
había constituido en el núcleo de una familia multiproblemática. Lean-
dro experimentaba grandes dificultades eir ser un padre para sus hijos y,
más que cuidarlos y protegerlos dándoles ternura y afecto, los utilizaba
al servicio de sus caprichos, incluyendo la necesidad de exhibir su inse-
gura prepotencia de adulto o de provocar a su madre.
Los Peinado son una pareja de aspecto zafio y descuidado que acu-
de al Servicio de Terapia Familiar expresándose del siguiente modo:
nVenimos porque estamos traumatizados. Los de Protección¡
a la Infan-
cia nos han quitado a nuestros hijos y dicen que rio nos los devolverán si
no resolvemos nuestros.problemas. Pero nosotros no tenemos más pro-
blemas que los que ellos, nos han creado. Los hemos denunciado y espe-
ramos obtener justicia, pero mientras, a lo mejor ustedes pueden ayudar
a los niños a superar el traumarr. Dicho todo ello con aire hosco y desa-
fiante. Él es un hombre'corpulento, con manchas en la cara y el cuello
de la camisa abierto hasta el ombligo. A ella le faltan varios dientes y
unos cuantos lamparones y descosidos salpican su ropa sin el menor di-
simulo' Su imagen es la antÍtesis de la respetabilidaá, pero el discurso
posee coherencia y hasta dignidad.
Los niños son tres: Libertad, la mayo4 de 15 años, clavel de 13 y
Jonathan, de 8. Llevan varios meses en una residenci a a raízde que un
34 LA INTERVENCIÓN SISTÉ,MICA EN LOS'SERVICIOS SOCIALES
de los dos. Marcela buscaba orden para calmar sus tempestades y Er-
nesto necesitaba un fuego intenso con que contrarrestar su frío interio¡,
pero el caos de ella podía con las modestas capacidades organizativas de
él y aportaba un hielo profundo en el que el frío de él se encontraba a sí
mismo. La mutua elección complementaria se había manifestado un ro-
tundo fracaso en el que Ernesto irritaba y aburría a Marcela y Marcela
espantaba a Ernesto.
La relación con Libertad habría de marcar.el completo desencuen-
tro. La niña, entrando en la adolescencia, había hallado una vía de acce-
so privilegiado a Ernesto y había intentado mediar entre éste y Marcela,
dándole a entender a la madre que comprendía a su padrastro mejor que
ella. Era más de lo que Marcela podía integrar y había bastado para que
elaborara sus fantasías'en clave delirante: entre el marido y la hija habia
sexo. La presión ejercida sobre la chica por aquella mujer tan intensa
había conseguido que T ibertad aceptara su versión. Al fin y al cabo, aun-
que el incesto no hubiera sido actuado, su fantasma revoloteaba por la
familia.
1.6. RecuRsos
BrsrrocRArfe
Plon.
Hollingshead, A. B. y Redlich, F. C. (1955), Social Class and Mental
Illness, Nueva York, Willey.
Jones,Maxwell(19ó8),SocialPsychiatryinPractice,Hardmons-
worth, Penguin Books. :
StudyinPsychosocialEpidemiologyo,ÁmericanJournaIofor-
topsychiatry, vol. 2.
Minuchin, Salvador y otros (1967), Farnilies of the Slunts: an Explo- ,
2.2.5. Legalidad
fnl conjunto de las personas que viven dentro de una cierta ca-
sa no coin;ide, pü€s, con el de la familia legalmente reconocida/lo
que plantea problemas no simples desde el punto de vista emotivo y
.o.r..ptual a profesionales que están acostumbrados a dar un valor
muy distinto a este tipo de corresPondencias'
uno o más hijos habidos de parejas con las que no se generan rela-
ciones estables,r
Se trata, a inenudo, en nuestra experiencia, de jóvenes mujeres
que provienen de largas experiencias de institucionalización y que
h.rt t.g.nizado su existencia en torno a una prostitución pobre o
a otras actividades marginales o subalternas. La importancia del
vínculo con los hijos .,o l.t aLeanza para asegurarles por sí solas
una condición de vida suficiente. Ello pone en marcha un proceso
á" á."otganización que acaba por llamar la atención del tribunal de
menores. La tarea que hay que afrontar en estos casos es extrema-
damente difícil. En efectá, h.y que proporcionarle a la madre la
ayuda que necesita sin ansias Sustitutivas, respetando sus márge-
nes de autonomía real y potencial, es decir, evitando cuidadosa-
.mente la creación de un vínculo de dependencia de los servicios
ya inicia-
f,r" d"rtrrolle y complete el proceso de desorgar'lización
áo .on graves daños para la mujer y para sus hijos'
Unllemento a tomar seriamente en consideración en estos ca-
a
sos es la posibilidad de contar con grupos familiares dispuestos
apoyar a la mujer y a sus hijos con propuestas atípicas pero, a me-
nudo, bastante eficaces.
Así ocurrió con Mario, un chico que había crecido con el hijo de
una señora a la que la madre lo había confiado poco antes de desapare-
cer, y cuyo padre, que se presentó 10 años después, ponía en crisis con
irrupciones imprevistas el equilibrio construido con tanta fatiga por dos
padres que no eran ni naturales ni adoptivos. Inalcanzable para los pro-
fesionales, el padre natural no entró nunca en terapia, la cual tuvo igual-
mente un resultado positivo.
La convocatoria
Comportamientos
delictivos I Frecuentes Esporádicos Ausentes
Toxicomanía Grave No grave Resuelta
Alcoholismo Grave No grave Resuelto
'Irastorno emocional
de tipo psiquiátrico Descompensado Compensado Resuelto
Minusvalía orgánica
invalidante No atendida Mal atendida Bien atendida
Absentismo escolar Total Dificultad seria Resuelto
Institucionalización Fija Salidas regulares Finalizada
con buena (acogimiento y
integiación vuelta a casa)
Separación Relación Conflictiva No conflictiva
gravemente
conflictiva
Tragedia familiar' Paralizante En elaboración Elaborada
Menores con carencia
de cuidados básicos Grave No grave Resuelta
Desempleo del cabeza
de familia Total Subocupación Trabajo
de Variación de
Variación
Componentes Puntuación puntuación puntuación Puntuación
Farnilla contactados (inicio) a3meses aórneses final
Tlsre 2.3. Tiempo de trabajo y personal implicado en la intervención con las trece
familias.
A 26 t6 I 2
B 5ó 10 2 4
C 64,30 15 2 4
D 48 8 2 l0
E 64 28 3 9
F 46 46 I 0
G t4 t6 4 3
H 50 I2 3 5
I 54,30 t4 2 5
L 53,30 10 2 5
M 90 t4 3 3
N 90 4 2 6
o t52 6 4 5
Total 798 199
Media 61,4 015,3
2.7. CoNcLUSToNES
BrsuocRepfe
rr
Contexto Contexto de Contexto Contexto-tle Contexto de Contexto
Características asistencial consulta terapéutico evaluación control in-formativo z
H
Palabra clave Ayuda (a los Toma de Acomparlamiento Reclamación Denuncia Formación
damnificados) decisiones enunprocesode interna por.
incorporación
z
creaciónde C)
Crecer
o
Objetivo Justicia social Las personas Vivir de otra Legislativo Legislativo
deben decidir forma (incorporar) @
su propio
0
futuro o
r'
Responsabilidad Profesional Cliente Sistema Profesional Profesional Sistema a
terapéutico in-formativo
Cu¡ono 3. 1. (Continuación.)
Principales Delegaciónde
a
Aumento de la Banalidad de la Recetas o
inconvenientes "Normalización, "Culpa.bilización,
responsabiüdades confusión por intervención Desconfianza universales z
ycroniñcación exceso de datos propuesta Fl
en recursos
propios o
Fl
U)
\o
92 LA INTERVENcIÓN SISTE,MICA EN LOS SERVICIOS SOCIALES
o
Fj
Grado de libertad Baja Media AIta Baja Baja Alta a
del profesional
pfestar sus .
serwicios
\o
(,
\o
Cueono 3.2. (Continuación.) 5
z
t-
@
U)
L¡¡
o
a
a
o
-rÍ
a
Lo-s.pRIMERos coNTAcros 95
ferentemente en contextos asistenciales; con cierta frecuencia, en
contextos de consulta; alguña vez er:, contextos dé control; raras ve-
ces en in-formativos; rarísimas en evaluación y terapia. Ejemplos:
psiquiatra en hospital psiquiátrico; trabajador social en servicios
so-
ciales; psicólogo en hospital general tratajando con enfermos rer-
minales; profesionales diversos en equipos de drogodependencias...
o Ir. Profesional que trabaja en un
metacontexto de consulta,
de titularidad privada o pública. se supone que debe escuchar
a sus
clientes pero puede rechazar prestar sus servicios (en otras pala-
bras, se puede declarar incompetente). Los clientes acuden volun-
tariamente. Va a desarrollar su vida profesional preferentemente
en
contextos de consulta; muy frecuentemente en contextos in-forma-
tivos, de terapia o asistenciales. Rarísimas veces en contextos de
control y evaluación. Ejemplos: profesionales en servicios psicope-
dagógicos (E.A.P. en Cataluña), frofesionales en servicios preventi-
vos que traten crisis de crecimiento.
o rrr. Profesional que trabaja
en tln metacontexto de terapia,
titularidad privada- Acepta clientes en condiciones que fija desde de
el
inicio y aquéllos_ acuden voluntariamente. Va a desarrollar su vida
profesional preferentemente en contextos de terapia; fre",r".,t.-
mente en contextos de consulta; en ocasiones, en contextos
in_for_
mativos; alguna vez, trabajaráen contextos asistenciales; rarísimas
veces en contextos de control y evaluación. Ejemplos: profesionales
que desarrollan su actividad en un centro prir.do.de
o rv. Profes_ional que trabaja en isicoterapia.
un *.tr.orrtexto i. de
titularidad púb'lica. Está obligado a intervenir por l"y y los "orrrrol,
clientes
acuden forzadamente. va á desarrollar su vida profesional pre_
ferentemente en contextos de control; frecuentemente, en contextos
asistenciales, rarísimas veces, en contextos de consulta; difícilmen-
te en contextos de terapia e in-formativos. Ejemplos: profesionales
que trabajan en Protección del Menor y en Justicia Juvenil.
'V. Profesio-n_al que trabaja en un metacontexto de evaluación,
de titularidad pública. Está obligado a intervenir por ley y
los clien_
tes acuden voluntariamente. Va a desarrollar su vida-profesional
preferentemente en contextos de evaluación; con frecuencia
en
contextos in-formativos; ocasionalmente, en contextos de consulta;
rarÍsimas veces en contextos asistenciales; difícilmente en contex-
tos de terapia y de control. Ejemplos: profesionales q".1r"tá:an
en
servicios de adopciones y acogimientos familiares.
'
'VI. Profesional que trabaja en un metacontexto in-formativo,
de titularidad generalmente privada;.Acepta clientes en condicio-
nes que fija desde el inicio, y aquéllos acuáen voluntariamente.
Va
96 LA INTERVENCIÓN SISTE,MICA EN LOS SERVICIOS SOCIALES
SINCRÓNICOS DIACRÓNICO t-
Características Colaboración Con-sulta Formación Supenisión Derivación
z
H
Denominación de Profesionales de la Consultory Didactav alumno Supervisor y Derivante y
los participantes salud que trabajan consultante supervisado receptor
en red l¡¡
z
o
Relación Simétrica o Complementaria Complementaria Complementaria Complementaria o
complementaria no jerárquica jerárquica jerárquica alterna z
U)
Ejemplo no 1.
Acto l"
En un centro de servicios sociales de base se presenta una señora
de 24 años de edad para óolicitar una beca de comeáor para
su primogé_
nito, que este curso inicia su escolaridad.
El trabajador social que le atiende le explica que para concederle la
ayuda económica debe cumplir ciertos ."qtri"ito" y, en ese caso, rellenar
un formulario. La señora se muestra de acuerdo con el procedimiento.
El profesional, que debe determinar los ingresos económicos de la
familia, se interesa por la situación laboral del
fadre: está en activo, pe-
ro con un sueldo muy bajo, mientras que la madre se cuida del manteni-
miento del hoga¡, sin ninguna formación académlca (se declara con di-
ficultades para leer'y'escribir) ni experiencia laboral. En cuanto a la
edad de los hijos, el maycrr tiene_ó aRos y la pequeñ,a 2. paralelamenre,
y
mientras toma sus notas,.el profesional muestra su comprensión por la
difÍcil situación económica de la familia.
La madre, que ha contestado concisamente a ras preguntas, agra-
dece la actitud del profesional comentándole que lo peor ña p.sado, y.
que ahora han podido alquilar una modesta caia en la qrr., pá,
fin, pue-
den vivir solos. Ante el interés demostrado por el profesiorraial escuchar
atentamente su relato, la señora sigue su narración, explicando cómo
los inicios del matrimonio estuvieron marcados por la imposibilidad
económica de tener una residencia propia y, po;""rr"ig,riárrr., d.b..
convivir con su familia de origen.
El técnico se interesa por saber si en la actualidad recibe apoyo de
su propia familia o de la familia de su marido, a lo que la seRora contes-
ta que esta última está lejana geográficamente y distante emocional-
ro2 LA INTERVENCIÓN SISTÉ,MICA EN LOS SERVICIOS SOCIALES
Acto 2"
Al concluir la entrevista, el profesional decide que hay una serie de
incógnitas en el caso que él no alcanza a comprender y lo comenta con
Lrn compañero de trabajo.
Surge de la conversación una hipótesis tentativa: quizá la mujer se
quedó embarazada muy joven para conseguir una confirmación como
persona, para encontrar una vía de salida de su propia familia, o, inclu-
so, quizá para protegerse. Puede que aún siga esperando ser aceptada y
confirmada por su propia familia. En su familia de procreación, parece
que la señora tenga dudas sobre el estado de sus hijos, que quizás al-
juien podría juzgar como inapropiado, acusándola a ella misma de
,,mala madren.
Se plante arealizaruna intervención en donde el profesional pueda
hacerle una oferta más amplia que la ayuda económica solicitada, con el
objetivo de consolidar la relación profesional-cliente. Una parte de la
ofé.ta estará dirigida al hijo, consistiendo en un centro en donde el chi-
co pase parte de la tarde jugando y realizando sus tareas escolares, y en
donde los fines de semana se practican aétividades lúdicas. Asimismo, el
centro organiza encuentros periódicos con los padres para hablar de te-
mas referidos a la educación de los chicos. La propuesta se completa
conrun curso de alfabetizaciónpara adultos.
Acto 3o
A la siguiente entrevista acude ella sola y se le comenta que la ayu-
da le ha sido concedida. También se le plantean las otras dos ofertas.
. Laposibilidad de ir a la escuela de adultos le parece pertinente,máspe-
ro la descarta porque et hijo menor todavla está en casa' "Quizá
adelanter,, afirma. En cambio, la posibilidad de que el primogénito acu-
da a un centro le interesa vivamente. El profesional le pide permiso para
presentarle al responsable del centro, eu€ le explica detalladamente el
funcionamiento. Acuerdan verse en el propio centro, con la familia al
completo, para cumplimentar los trámites necesarios.
Todos acudirán, integrándose plenamente en la dinámica del cen-
tro.
LOS PRIMEROS CONTACTOS 103
Ejemplo n" 2
Acto 1"
El responsable político del barrio llama personalmente a servicios
sociales para informar de una situación problemática: el dla antes por la
tarde, a la salida de un colegio, un joven en estado de embriaguez mos-
tró sus genitales a padres y maestros, que reaccionaron muy violenta-
mente contra é1. Rescatado de un linchamiento por la policía, por el mo-
mento permanece detenido, pero obtendrá su libertad en las pr:óximas
horas. Cuando salga de comisaría debe haber un plan de actuación para
evitar una situación explosiva en la calle.
El responsable técnico de servicios sociales le transmite la conver-
sación a nuestro ya conocido trabajador sócial y, ofreciéndole toda su
ayuda, le ordena que se ponga en marcha. También le informa del nom-
bre del chico (Antonio P.M.) y de su dirección.
Acto 2"
El profesional decide buscar un poco,fnás de información a partir
de dos pistas que le aporta el nombre. La primera se refiere a la.ioven del
ejemplo n" l, que resulta ser la hermana menor. La segunda pista es la
de otro hermano al que conoce, ya que trabaja eventualmente en las bri-
gadas municipales, que ofrecen un contrato con el objetivo de la inte-
gración social.
El trabajador social habla con el responsable de esas brigadas y se
entera de que el hermano que trabaja allí,'Manuel, tiene problemas de
alcohglismo y pre3enta cierto retraso mental. El responsable de las bri-
gadas hace un comentario interesante: ha observado que cuando uno de
los hermanos está bien, el otro está mal. Y añade más datos de interés.
Cuando el hermano mayo4 Antonio, está mal, acude a buscar a Manuel
para pedirle dinero con que poder seguir bebiendo, mientras que si es
Manuel el que atraviesa un período en que bebe más, Antonio acude a
buscarlo para llevarlo a casa. El responsable de la brigada también sabe
que ambos han frecuentado el Dispensario de Alcoholismo del barrio.
Nuestro profesional acude al Dispensario de Alcoholismo y Dro-
godependencias, donde le informan de que conocen a ambos hermanos,
así como a un tercero, Carlos, que murió de sobredosis de heroina hace
4 años. FIan mantenido contactos frecuentes con la madre, que solicita
LOS PRIMEROS CONTACTOS 109
Acto 3'
El profesional ordena toda la información, realizando un genogra-
ma e intentando construir una hipótesis. La hipótesis habla de una ma-
dre situada en el centro de la familia y un padre periférico, con tres hijos
varones que presentan prbblemas de adicción. La hija (Ejemplo n"l) pa-
rece que consiguió salir de casa casándose a muy temprana edad. Entre
los varones parece que el que más problemas presentó es y era el prefe-
rido de la madre, y que los dos que actualmente viven se turnan en su
afán de llegar al corazón de ésta. Se trataría de una familia multiproble-
mática en donde la individuación de sus miembros es muy baja, lo que
dificultaría la emancipación de los hijos. Asimismo parece que los pla-
nes a largo plazo no se le den muy bien a esta familia y que su vivencia
del tiempo sea la de los acontecimientos (Ausloos, 1981).
Estudia los posibles recursos de la comunidad y selecciona dos: un
ingreso en la institución psiquiátrica o un ingreso en un centro de des-
habituación de alcohólicos y drogodependientes, dirigido por ex adictos.
Duda entre convocar a la familia o presentarse en la casa directa-
mente, previo anuncio telefónico, y se decide por esta última opción. El
objetivo será conseguir vencer las reticencias de la familia, hacerla par-
ticipar en algún tipo de decisión y conseguir establecer una relación a
medio plazo que permita trabajar con ella.
Informa de su plan de actuación al responsable del departamento,
el cual se muestra de acuerdo en todo
El profesional decide que es la hora de llamar a casa de la familia.
No las tiene todas consigo, no sabe quién responderá ni de qué forma.
Un poco nervioso ante lo imprevisible de la situación, opta por repasar
la información recogida y fantasea un poco con las respuestas que podrá
encontrar y con sus posibles reacciones. Decide estructurar la llamada
de esta forma:
110 LA INTERVENCIÓN SISTE,MIcA EN LoS SERVIcIoS SocIALES
I
Ejemplo n'3
Acto 1"
Una señora acude a servicios sociales, visiblemente agitada, solici-
tandó hablar con nuestpo conocido trabajador sócial. Se le propone una
cita para un día pqsterioq, sugerencia que no acepta argumentando que
es de la máxima importancia que hable con él ahgra, añadiendo que no
se moverá de las dependencias hasta que consiga su objetivo. La perso-
na encargada de atender al público habla con el trabajador social y am-
bos acuerdan que mejor será atenderla un momento para salvaguardar
la integridad del servicio.
Acto 2"
El profesional hace pasar a la señora a una sala. Esta, sin ni siquie-
ra tomar asiento, empieza su exposición:
"SoY Consuelo, hermana de Antonio. Sé que usted ha hablado con
mi madre sobre el asunto de la vuelta a casa de mi hermano. Vengo a
contarle lo malo que es mi hermano: es un borracho irrecuperable, le sa-
ca el dinero a mi madre o a mi hermano pequeño. Si no le dan dinero
para seguir bebiendo nos da una paliza. Mi marido ha querido ponerle
en cintura. Se han pegado varias veces, pero mi madre interviene para
separarlos y después nos dice que somos nosotros los que nos debería-
mos ir de casa y dejarlos erpaz. Creo que si mi.hermano vuelve a casa
va a producirse un asesinato. Además, creo que mi hermano se acerca
demasiado a mi hija y lava a violarn.
El profesional se muestra comprensivo con la angustia de la seño-
ra e intenta calmarla, informándole de que él mismo está preocupado
por la situación e inteniando confeccionar un plan de actuación que sea
aceptable y beneficioso para todos. Para concluir, solicita la ayuda de la
señora para completar la información, porque ya no tiene muy claro el
genograma familiar...
La señora se calma lo suficiente como para responder arlas pregun-
tas del profesional, aportando la siguiente información,
l14 LA TNTERVENcTóN srsrÉ,MrcA EN Los sERvrcros socrALES
GnÁnco 3.4.
Acto 3o
Después de una narración de tal cúmulo de desgracias, el profesio-
nal se siente aturdido y desanimado. La sola idea de tener que realizar la
entrevista de esa noche en el domicilio familiar le produce abatimiento.
Fantasea con la posibilidad de declararse enfermo. Finalmente, decide
, solicitar una sesión urgente con el consultor exte¡no del servicio.
Ejemplo n" 4
3.5. Co¡lcrusróN
BrsLrocRAF'Ía
and Crisis, Nuev. York, W. W. Norton & Co. (trad. cast.: Mo-
mentos decisivos, Barcelona, Paidós, 1990).
Ramos, R. (1996), r,Concurrencia y discurso: dos niveles conver-
gentes en la entrevista sistémicarr. Redes, Do 1, pá9. 60-75.
Selvini, M. (1989), Cronica di una ricerca. L'evoluzione della terapia
familiare nelle ope(e d'i Mara Sehtini-Palazzoli, Roma, Nuova
Italia Scientifica (trad. cast.: Crónica de una,investigación. La
de la terapia familiar en la obra de Mara Selvini-Palaz-
' evolución
zoli, Barcelona, Paidós, 1990).
Sluzki, C. E. (1996), La red social: frontera de Ia práctica sistémica.