Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                

El Son de La Negra Reseña

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 5

UNIVERSIDAD DEL VALLE

Programa de Licenciatura en música


Guadalajara de Buga – 23 de agosto de 2019

Curso: Historia de la música latinoamericana


Profesor: Jaime Andrés Ruiz García
Estudiantes: Miguel Annyelo Arredondo Alarcón, Ana Gabriela Valencia Varón, José
David López Vidal

El mariachi:

Para [ CITATION Car14 \l 9226 ] El mariachi es la organización musical que identifica

actualmente a una de las naciones más ricas en cuanto a tradiciones y costumbres, es una

forma de expresión artística que los mismo traspasa fronteras que unifica a través de sus

sonidos al país, sus habitantes y las emociones y sentimientos que se muestran en una

serenata o fiesta popular, está presente en todos los eventos sociales, desde el nacimiento

hasta la muerte. Incluso en los acontecimientos políticos que buscan el apoyo y la

aprobación popular.

Esta agrupación hace parte de un ámbito cultural carente de textos y documentos propios

puesto que los cronistas no tuvieron interés en este tipo de actividades musicales puesto que

no reseñaron sus actividades. Su memoria es vivencia y reside en la habilidad musical de

sus intérpretes, en la capacidad literaria de sus bailadores y en la emoción estética de

quienes asisten a los rituales en que su música es el corazón.

El son de la negra

Se compuso en el año de1926 en Tepic, Nayarit México fue compuesto por los hermanos

Fidencio y Alberto Lomelí Gutiérrez. Albina Luna Pérez “la negra” es la mujer Nayarita
que inspiro la letra y música internacional de “el son de la negra”, a sus quince años fue

cuando le compusieron el son, Fidencio Lomelí se lo escribió inspirado en el amor no

correspondido que sentía por Albina Luna Pérez, Alberto Lomelí fue quien compuso la

música para este son y la interpretaba en Nayarit con su mariachi tradicional los “Chalinas”

que fue quienes dieron a conocer este son en las regiones de nuestra entidad. Don Silvestre

Vargas en uno de sus viajes a Nayarit escucho tocar este son a los “Chalinas” y pidió a los

hermanos Fidencio y Alberto Lomelí Gutiérrez le enseñaran a interpretarlo, posteriormente

les pidió a los hermanos para interpretarlo y hacerle unos arreglos, con estos arreglos el son

tuvo aceptación entre todo el pueblo de México quien lo incluyo como parte del folklor de

nuestro país y que fue lo que lo llevo a todo el mundo y que nos identifica en todo los

países. 

Es una de las piezas de mariachi más representativas de la música mexicana, tiene sus

raíces hundidas en la cotidianidad de principios del siglo XIX, en el periodo posterior a la

independencia del país, según reveló una investigación realizada por el Instituto Nacional

de Antropología e Historia (INAH).

La búsqueda, hecha por el investigador Jesús Jáuregui, identificó la canción popular en un

momento en que no se tenía identificado al son como un género, sino como un conjunto de

ritmos que recibían distintos nombres como el catorce, el palomo y el borrego, indicó el

INAH en un comunicado.

La pieza clave para identificar la temporalidad del son fue su primera cuarteta

(verso): ¿Cuándo me traes a mi negra?, Que la quiero ver aquí, con su rebozo de seda, que

le traje de Tepic.
“Se puede sostener la hipótesis de que el arriero-ranchero (que canta) presume haber

llevado un rebozo de seda desde Tepic (Nayarit)… durante la Guerra de Independencia,

cuando funcionó en todo su esplendor la Feria de Tepic”, o durante los años inmediatos al

conflicto, entre 1821 y 1827, indicó Jáuregui.

Tras su irrupción en el México independiente, la investigación del INAH señala que el son

fue interpretado localmente por algunos grupos de mariachi del occidente del país,

principalmente en Jalisco. Luego llegó a la capital mexicana en las voces e instrumentos de

los músicos que emigraron a principios del siglo XX y se instalaron en la Plaza Garibaldi.

El tema se integró al repertorio del salón Tenampa en la década de 1930, cuando el lugar

era el escenario de inspiración y borracheras para artistas como José Alfredo Jiménez y

otros íconos del mariachi

La primera grabación del son de La Negra se remonta a 1929 y la realizó el grupo Los

Trovadores Tamaulipecos. Ocho años más tarde, el Mariachi Tapatío de Jesús Marmolejo

grabó la versión más difundida del tema, según la investigación del INAH.

El salto de la melodía a la escena internacional ocurrió en 1940, cuando el compositor Blas

Galindo la adaptó a orquesta sinfónica por encargo de su maestro, el jalisciense Carlos

Chávez. La Negra significó “la columna vertebral” de los Sones de mariachi de Galindo,

que fueron interpretados junto con guitarrón y vihuela en el Palacio de Bellas Artes de la

capital mexicana y en Nueva York, según el INAH.

La genialidad de Blas Galindo consistió en “poner en el centro” de la orquesta al mariachi

tradicional. “Así la gente de Nueva York pudo verlo dentro de un conjunto de cámara”, dijo

Jáuregui.
Actualmente, el son cuenta con versiones alternativas además de las tradicionales. Una de

ellas fue hecha a ritmo de danzón por el cubano Dámaso Pérez-Prado.

En su investigación, el INAH concluyó que La Negra desplazó al Jarabe tapatío en el

gusto del público con tanto “aire nacional”. Es una de las piezas obligadas por los grupos

de mariachi a nivel mundial y es común en cualquier banda sonora sobre México. En 2008,

fue el tema de ingreso de la delegación mexicana a los Juegos Olímpicos de Beijing,

interpretado por el Mariachi Mujer 2000 de Los Ángeles, California.

La investigación del INAH fue publicada junto con cuatro versiones de la canción, editadas

por la Fonoteca Nacional, bajo el título El son mariachero de La Negra, de gusto regional

independentista a “aire” nacional contemporáneo.

El libro-disco de dos volúmenes, parte de la colección Testimonio Musical de México,

incluye la versión sinfónica de Blas Galindo, la de conjuntos tradicionales (de cuerdas), la

de mariachis modernos (con trompetas) y algunas ejecuciones alternativas. [ CITATION

Rev13 \l 9226 ]

Análisis técnicos:

Nombre: Son de la Negra

Autores: Hermanos Fidencio y Alberto Lomelí Gutiérrez

Año: 1926

Ritmo: Son Jalisciense

Métrica: 6/8

Timbre: Violines, trompetas, vihuela, guitarrón, voces.

Tonalidad: Sol Mayor

Carácter: Alegre.
Forma: Estrofa estribillo.

Bibliografía
Cardona, B. (2014). La música de México. Convergencia.

expansión, R. (2013). Una investigación del INAH rastrea el son de 'La Negra' hasta el siglo XIX.
Vida y arte.

También podría gustarte