Sembrando La Palabra
Sembrando La Palabra
Sembrando La Palabra
Lucas 8:5…El sembrador salió a sembrar su semilla… No la de otro, era su semilla. Recuerde
que usted y yo no podemos dar lo que no tenemos, él tenía semilla por eso salió a sembrarla.
Si la semilla es la palabra de Dios como Jesús luego lo explica, entonces lo que la biblia nos
indica es que la palabra que nos ha sido dada (la semilla), no es solo para comérnosla, sino
también para sembrarla.
He escuchado a personas que dicen, que nadie les ha dado la oportunidad para predicar, para
sembrar la palabra, y se quedan en su casa esperando que alguien los llame para darles una
oportunidad, pero eso no fue lo que hizo el sembrador, la biblia dice que el sembrador
“SALIÓ” a sembrar su semilla.
Cuando se habla de predicar algunos lo primero que piensan es en un pulpito, pero quiero
decirte que es afuera donde hay una cosecha que no se ha recogido, es afuera donde las
personas están con hambre de una palabra de fe, es afuera donde muchos quisieran un poco
de las migajas que dejas caer de la mesa.
¿Cuántos quieren que Dios les de mas palabra para sus vidas?, si las quieres te doy dos
consejos, el primero Dios no te va a dar más palabra hasta que pongas en práctica la que ya te
ha dado, y dos, Dios no te va a dar más palabra hasta que compartas la que ya te ha dado,
hasta que salgas y comiences a sembrarla.
Algunos están esperando una orden especial para salir a sembrar, pero la orden ya fue dada
en Marcos 16:16…Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. Para que dejen
de ser criaturas de Dios y se conviertan en hijos de Dios, Juan 1:12.
¿Y por donde comienzo? Hechos 1:8… En Jerusalén (Casa), Judea (Barrio), Samaria (Ciudad)… Y
hasta lo último de la tierra. Comienza a predicar en tu casa, a tus hijos, tu esposa, tu esposo,
tus hermanos, después a tus amigos en tu barrio, tu ciudad y si hay un llamamiento especifico
de parte de Dios ha otro lugar de la tierra en su tiempo el te llevara después que hayas dado
fruto en el lugar que Dios te ha puesto, tu iglesia local.
Ahora aquí viene la parte en la que muchos se desaniman, porque después de sembrar la
semilla no siempre ven el resultado que quieren, pero esto no nos debe desanimar porque por
más que la tierra sea dura, tenga espinos, o pedregales, hay una promesa en la biblia que dice
que El puede sanar la tierra, y que El puede convertir corazones de piedra en corazones de
carne, nuestra responsabilidad es salir y sembrar.
Mateo13:19…Cuando alguno oye la palabra del reino y no la entiende… ¿Qué podemos hacer
para esto? Orar Efesios 1:18…Que sea alumbrado los ojos de su entendimiento. Luego dice
que viene el diablo y arrebata lo que fue sembrado… El diablo vino a robar, matar y destruir…
Bueno pero Jesús vino a darnos vida, y la palabra de vida dice que el diablo tendrá que restituir
todo lo que ha robado, entonces es hora de levantarnos y tomar a Dios por su palabra y
ejercer la autoridad que tenemos y ordenarle al diablo que quite sus manos de lo que no le
pertenece.
Lucas 8:12…La manera que el diablo roba la palabra es a través de la duda, porque él sabe que
si conoces la verdad y la aceptas la crees, la confiesas y la vives entonces serás libre, por eso el
se va a encargar de poner dudad en tu mente “pero si será verdad lo que dice el pastor” LEE
LA BIBLIA, SI ESTA AHÍ CRÉELO ,SI NO NO LO CREAS, PERO NO TOMES DECISIONES PORQUE
VINO DUDA A TU MENTE TOMA DECISIONES POR LO QUE ESTA ESCRITO EN LA PALABRA.
Algunos han estado viviendo su vida cristiana junto al camino, andan cuestionando todo, todo
lo quiere razonar, no se deciden por que tienen dudas y mientras están en esas el diablo les
sigue robando la bendición. Sal de junto al camino y deja que tu corazón sea buena tierra
donde la semilla de la palabra de mucho fruto.
Mateo 13:20-21…Reciben la palabra con gozo, pero la aflicción, la prueba, la persecución hace
que se aparten de la palabra.
Este es el que se emociona con una predica de sanidad, de fe, de prosperidad, pero no toma
esa palabra y la mastica despacio en su casa, no ora sobre esa palabra, no la confiesa, no la
práctica, es el cristiano que espera hasta el siguiente culto para abrir de nuevo la biblia, por
eso no puede echar raíces y por lo mismo no puede dar fruto. Se convierte en la casa
construida sobre la arena, que cuando viene el viento la tumba.
¿Qué debo hacer para no seguir siendo un cristiano emocional? Bueno toma control sobre tus
emociones, ¿Pero cómo?, Pues viviendo la vida del espíritu, creciendo en la palabra, Romanos
8:14…Los que son guiados por el espíritu… estos son hijos maduros… ¿Que hace madurar a un
creyente?, el conocer cada día mas a Dios, a través de su palabra, orando en el secreto,
adorándole, es ahí donde las raíces crecen y se hacen profundas hasta encontrar esas
corrientes de aguas. (Mateo 13:5…Las raíces no tenían profundidad)
Lucas 8:13…Creen por algún tiempo… Algo más para dejar de ser un creyente emocional, es
no cansarse de creer, no importa lo que tus ojos vean o tu corazón sienta, sigue creyendo que
si crees veras la gloria de Dios.
Lucas 8:14…Afanes y placeres de la vida… Muchos viven más afanados por cumplir sus sueños,
que el sueño de Dios, otros por un minuto de placer venden la primogenitura.
La solución para no ser un terreno lleno de espinos es Mateo 6:33…Mas buscad primeramente
el reino de Dios y su justicia….
Lucas 8:15…Esta es la que más me gusta… Son los que con corazón bueno, un corazón
enseñable, dispuesto a recibir… Retienen la palabra “NO LA SUELTAN” NO TE SUELTES DE LA
PALABRA, ELLA ES TU VIDA, TU ROCA, TU SALIDA, TU SEGURO DE VIDA. JOSUÉ 1:8…NUNCA SE
APARTARA DE TU BOCA…
….Y dan fruto con perseverancia… El fruto está reservado para los que no sueltan la espada,
para los que perseveran, los héroes no son por su valentía si no por su perseverancia, la biblia
dice que el que persevere hasta el fin…
Creo en mi corazón que aquí se está levantando un ejército de corazones como buena tierra,
que perseveran en medio de las tormentas, en medio de la duda que quiere traer el enemigo,
en medio del desanimo, para esos corazones Dios está preparando una cosecha que jamás
habían visto sus ojos, porque cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido en el corazón de
ningún hombre es lo que Dios ha reservado a los que le aman, los que aman su palabra y su
presencia.