La Kabbalah - Código Seraphim Drakonian (8 Parte)
La Kabbalah - Código Seraphim Drakonian (8 Parte)
La Kabbalah - Código Seraphim Drakonian (8 Parte)
DESMANTELANDO EL SISTEMA / A LOS BUSCADORES DE LA VERDAD
LA KABBALAH ‐ CÓDIGO SERAPHIM DRAKONIAN (8ª parte)
***Éxodo 3:1314
13 Dijo Moisés a Dios: He aquí que llego yo a los hijos de Israel, y les digo: El Dios de vuestros
padres me ha enviado a vosotros. Si ellos me preguntaren: ¿Cuál es su nombre?, ¿qué les
responderé?
14 Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás a los hijos de Israel: YO
SOY me envió a vosotros***
El Demiurgo de los judíos se llama Jehová (IHVH). Cuando se busca el valor numérico del
nombre de Jehová es necesario resolver el nombre en sus letras hebreas. Se convierte en
יהוה, y se lee de derecha a izquierda. Las letras hebreas son: ה, He; ו, Vau; ה, He; י, Yod; y
cuando se invierte en el orden de izquierda a derecha, lee: YodHeVauHe (IHVH).
Los cuatro personajes de este nombre sagrado tienen el siguiente significado
numérico: “Yod” es igual a 10. “Él” es igual a 5, “Vau” es igual a 6, y la segunda “Él” es igual
a 5. Por lo tanto, 10 + 5 + 6 + 5 = 26, un sinónimo de Jehová.
Al hacer la adición cabalística en relación con los cuatro mundos de la Kabbalah, que
representa el universo entero, tenemos el valor de 72, de la siguiente manera:
*Atziluth, el mundo de los arquetipos, está representado en la letra Iod י , que es igual a 10.
*Briah, el mundo de la creación, está representado en la letra Hei ה, y es igual a 5, más el
valor de Atziluth (10) por encima de él, es igual a 15.
*Yetzirah, el mundo de la formación, está representado en la letra Vav ו, y es igual a 6 más
el valor de Atziluth (10) y Briah (5) sobre él, es igual a 21.
*Assiah, el mundo de la materia y la acción, está representado en la cuarta letra Hei ה , que
es igual a 5 más el valor de Atziluth (10), Briah (5) y Yetzirah (5), es igual a 26.
El número 26 es también la suma de los números de los sephiroth del pilar central del
Árbol de la Vida: 1 (Kether) + 6 (Tiphereth) + 9 (Yesod) + 10 (Malkuth), la duada
expandida, el TE TRA GRAM MA TON.
Y es precisamente en el versículo 26 del Génesis donde se cita la creación del hombre:
“Y Dios dijo: Hagamos a un hombre a nuestra Imagen, nuestra Semejanza, para que tenga
dominio sobre los peces del mar, y sobre las aves del cielo, y sobre todo animal que se mueve
sobre la tierra”.
El valor cabalístico del nombre “Jehova” es 72 cuya suma es 9, que es el mismo valor de
Adán y el número de la Sephirah Yesod, que es Edén, donde siempre se coloca al ser
humano o el Hombre, Adán, a la imagen de Dios.
En la palabra Adam םדא , Aleph א tiene el valor de 1, Daleth ד el valor de 4 y Mem ם el valor
de 40. Si hacemos la suma de 1 + 4 + 40 tenemos 9, que es el mismo 9 que obtenemos
relacionado con el nombre de Dios (7+2). Así es como se explica cabalísticamente que
Adán fue hecho a la imagen de Dios, es decir, por Shem Hamphorash, al interpretar el
nombre Iod–Hei–VavHei, al expandir el nombre en los Cuatro Mundos del universo
cabalístico. Así es como el nombre de Dios está escondido con el nombre de Adán o así es
como Adán fue hecho a la imagen de Dios.
El Tetragrammaton se encuentra dentro del Pentagrammaton, la estrella de cinco
puntas que es precisamente el símbolo del hombre perfecto, a la imagen de Dios. ¿Por
qué? Porque en el brazo derecho de ese pentagrama está escrito Adán, que suma nueve y
en la izquierda está Iod Hei Vav Hei, el Tetragrámaton, que, como explicamos, también
hace la suma de nueve; entonces 9 + 9 = 18, 1 + 8 = 9; ese es el Adam hecho a la imagen de
(9) Dios.
La letra Yod()י, la letra He()ה y la letra Vau ()ו, la Trinidad representada por estas 3 letras
sería la Ley que subyace a toda manifestación. La cuarta letra, que es la repetida ה, indica
el paso de un mundo a otro.
Un investigador estadounidense, el Dr. J. Hurtak, ha descubierto este patrón de 3 letras en
el código del ADN. La información genética del ARN, transmisor de la información del ADN,
se conforma por 4 bases nitrogenadas (adenina, guanina, citosina y uracilo) que
podemos asociar a las 4 letras del Tetragrámaton.
Estas 4 bases se agrupan de 3 en 3 conformando un codón. Este codón de tres bases se
corresponde a las tres letras distintas del Shem (ה ו )י que en varias combinaciones crea
las 64 celdas o codones que codifican los aminoácidos de nuestro cuerpo.
También es interesante reseñar que la doble hélice del ADN completa un giro cada 10
“escalones”, lo que nos lleva a los 10 sephiroth del Árbol de la Vida.
El alfabeto hebreo (AT) consta de 22 letras trascendentales: las tres letras madres: Aleph,
Mem y Shin; siete letras dobles y doce letras simples. Las tres letras madres y las siete
letras dobles forman el árbol de la vida de 10 sephiroth.
Las veintidós letras a través de permutaciones y transformaciones representan la
naturaleza de todo lo que era, todo lo que es y todo lo que será.
Los 231 portales del Sepher Yetzirah (junto con el Zohar, la principal fuente del esoterismo
judío y la Kabbalah), se refieren a las 231 combinaciones de dos letras de las 22 letras del
alfabeto hebreo.
Cada una de las siete letras dobles tiene dos sonidos, configura el reino de los opuestos o
dualidad. Una estructura de blando y duro, una estructura de fuerte y débil, doble, ya que
son traspuestas. La transposición de la vida es la muerte, la transpuesta de la paz es el mal,
la transpuesta de la sabiduría es locura, la transpuesta de la riqueza es la pobreza, la
transpuesta de la gracia es la fealdad, la transpuesta de la fertilidad es desolación, la
transpuesta de la dominación es sometimiento.
Las siete letras dobles son el comienzo de la creación y su culminación.
Cabalísticamente el Uno produce el Tres y el Tres produce el Siete, pero ¿Cómo entender
que el Siete produce el Doce?
El Ain Soph, que se encuentra en la parte superior
del árbol de la vida, simbólicamente se describe
como "luz no creada", que puede decirse que es
"oscura" porque no tenemos los “ojos” para verla.
Es una luz que manifiesta la existencia,
gradualmente, a través de etapas y condensación de
la materia y la energía.
El flujo del Ain Soph Aur (el Rayo de la Creación)
tiene muchos niveles. La gran mayoría no son
físicos. Cuando esa luz finalmente emerge en el
reino físico, su vehículo es la luz solar.
La Luz emanada del Ain Soph Aour forma a Kether
y éste, con la Luz que ahora emana de él forma a
Binah, pero también forma al mismo tiempo a
Chokmah.
Así se ha formado el Tres del Uno. Este Tres
Absoluto; emana de sí al Tres de la Creación.
Kether emana a Tiphereth, Chokmah y Binah
emanan a Chesed y Geburah, formando el Ternario
de la Creación, que es el polo opuesto del Ternario
Absoluto y, como quiera que los polos opuestos se
atraen, ambos ternarios se entrelazan, lo que está representado en la Estrella de David o
Sello de Salomón.
Entonces tenemos el Senario cuyo centro, el Domus Dei, viene a ser el Siete.
Este senario, a su vez, emana otro senario de polaridad opuesta y tenemos el Duodenario,
es decir el Siete emana al doce, porque el Siete es el Uno del próximo senario y, así
sucesivamente.
Tiphereth, es el Centro del Equilibrio del Árbol por su posición en el medio del pilar
central. Es el punto de transmutación entre los planos de la fuerza y los de la forma. Los
Seis Sephirot, cuyo centro lo constituye Tiphareth, a veces son llamados Adam Kadmon,
el Hombre Arquetípico, y como veremos más adelante, también se le considera la “semilla
del demonio”.
Para todo fin práctico, estas seis Esferas son las que constituyen el reino arquetípico que
se extiende tras el reino de las formas concretadas en Malkuth.
En Tiphareth hallamos los conceptos arquetípicos que se cristalizan y se convierten en
ideas arquetípicas, y recordemos que se encuentra relacionado con el órgano Corazón.
Según se manifiesta en el Sepher Yetzirah:
“Hay veintidós letras por las cuales YO SOY, YAH, el Señor de las Huestes, Todopoderoso y
Eterno, designó formó, creó, por tres Serafines, todo el universo, y formó por ellos criaturas
y todo aquello que será formado en los tiempos por venir.”
***Comentario: Los tres serafines del código Seraphim Drakonian, las tres letras madres:
AlephMemShin, que forman el mantra OM**
“Las Tres Letras Madres: Aleph, Mem y Shin, ocultan y sellan en seis anillos un gran y
maravilloso secreto, y de ellas emanan el Aire, el Agua y el Fuego; de ellas han nacido los
Padres, y los Padres han engendrado hijos.”
“Él grabó, talló, permutó, pesó y transformó a las Tres Letras Madres: Aleph, Mem y Shin.
Mediante ellas formó Tres Madres AMSh en el Universo, Tres Madres AMSh en el Año y Tres
Madres AMSh en el Alma, masculina y femenina.”
***Comentario: Recordemos, el Ser manifestado dispone de dos almas, el alma divina
integrada por la tríada de control que representa el mundo arquetípico, y el alma terrenal
creada por Tiphereth y representada por el órgano Corazón.***
“Él hizo la letra Aleph reinar sobre el Aliento. La coronó y la combinó con todas las demás, y
con ellas formó el Aire en el Universo, lo templado en el año y el pecho en el Alma: el
masculino con AMSh y el femenino con AShM.”
“Las siete Letras Dobles: BGDKPRT, se gobiernan a sí mismas por medio de sonidos: Bet
Bhet; GimelGhimel; DaletDaleth; KaphKhaph; PePhe; ReshRhesh; TauThau.”
***Comentario: Recordemos que las palabras han sido conectadas a símbolos de
frecuencia de sonido, así como a ecuaciones matemáticas para apoyar y ayudar al
desarrollo y la manifestación del sistema conciencia de la mente.
La frecuencia de sonido específica de cada palabra; las connotaciones emocionales y
sentimentales de cada palabra; la imagen o definición aceptada conectada a cada palabra; el
símbolo específico asignado a cada palabra; y la ecuación matemática de la cual consiste
cada una. Todo esto es de lo que se componen y el cómo están diseñadas todas y cada una de
las palabras.
Toda la humanidad colectivamente esta ‘programada’ y ‘codificada’ en los 22 “puntos’/
símbolos” (alfabeto hebreo), que he mencionado anteriormente***
“De las Tres Madres, AMSh, emanan Tres Primeros Padres: Aire, Agua y Fuego. De los cuales
emanaron tres Padres descendientes y su progenie que son los siete planetas y sus ejércitos, y
los doce puntos diagonales. Los testimonios que lo demuestran son el Universo, el Año, el
Alma y una ley de doce, de siete y de tres que fueron establecidos por Él en el Dragón
Celeste, en la Esfera y en el Corazón del hombre.”
“Hay tres que se mantienen por sí mismas: una defiende, otra acusa y otra las equilibra.”
“De las siete, tres están contra las otras tres y la otra las mantiene en equilibrio. Hay doce
que están en guerra: tres aman, tres odian, tres conceden la vida y tres matan. Hay tres que
aman: el corazón, los oídos y la boca. Hay tres que odian: el hígado, la vesícula biliar y la
lengua. Hay tres que conceden la vida: las dos fosas nasales y el órgano reproductor. Hay tres
que matan: los dos orificios del cuerpo y la boca.”
“Y Dios el Rey fiel, gobierna sobre todos ellos desde su Santa morada por toda la eternidad.
Uno sobre tres, tres sobre siete, siete sobre doce, y todos ellos se encuentran ligados el uno
con el otro.”
“Cuando nuestro padre Abraham, la paz sea con él, miró, vio, comprendió, escrutó, grabó y
talló todas estas cosas, tal y como está escrito "Y las almas que ellos hicieron Harán", el Señor
Supremo se le reveló, Bendito sea su Nombre por siempre, y le puso en su seno, y le besó en la
cabeza, y le llamó "Abraham mi amigo". ÉL hizo un pacto con él y con su descendencia por
siempre, como está escrito.”
Las tres letras Aleph, Mem, Shin, no sólo son los tres "madres" de la que se forman las
otras letras del alfabeto, sino también son figuras simbólicas de los tres elementos
primordiales, la substancia que mantiene toda la existencia, el soplo de vida (aire o viento)
א, el agua מ y el fuego ש.
De acuerdo con el Sepher Yetzirah, la primera emanación de Dios era el ruaj (aire), que
produce agua, lo que, a su vez, formaron la génesis de fuego. Al principio, sin embargo,
estas tres sustancias sólo tenían una existencia potencial, y entró en vigor sólo por medio
de las tres letras Aleph, Mem Shin.
Según viene reflejado en “El Libro de Panfredo”:
“El código que instruye la Matriz a la Unidad se ejecuta mediante la triada en base dual y se
manifiesta en racimos o secuencias en palindromías y anagramías coherentes siempre, en
términos de 3 y de cada 3, se manifiesta el 2, sea como potencia, sea como divisor o sea como
producto, todo esto, bajo la supervisión del parámetro tetragramático, de la instrucción
denominada por la Matriz como la duada expandida.
El código son 3 letras, las cuales contiene las 3 palabras de los 3 elementos madres de
manifestación del Supramundo, del Mundo y del Inframundo;
ALP, MIM, ShIN.
Aire, Agua y Fuego,
Oxigeno, Hidrogeno y Nitrógeno.”
En el artículo “EL CÓDIGO IHVH (1ª parte) – EL LOGOS METATRÓNICO”, se indica lo siguiente:
https://www.facebook.com/groups/M24javier/permalink/1013613938782475/
***La trinidad elemental y existencial compilada en la palabra BRA, primera de la Torah y
de la Biblia. Los códigos elementales de la Matriz, o las 3 letras Madre; el 1 y el 0, más su
conjunto y singularidad, el Aleph.
Estos tres códigos se manifiestan en la secuencia 231.
La llave es 231 = 6, la cual es la suma de los 22 arcanos.
La cifra 231 en código binario es 1 1 1 0 0 1 1 1 (triada, duada, triada, duada), el cual se
divide en dos espejos; el 1110 y el 0111.
Este imán biunívoco está constituido de 2 pentagramas binarios e inversos, las variables 0
y 1, de ellos nos resulta el 26***
En el artículo “EL CÓDIGO IHVH (2ª parte) – I A O Abraxas Sabaoth”, se indica lo siguiente:
https://www.facebook.com/groups/M24javier/permalink/1014265602050642/
***Dentro del diafragma del Aliento del Gran Dragón se encuentra la Matriz Ontológica. El
orden en este umbral de la secuencia 231, siempre compuesto de tres elementos indivisibles
funcionalmente, era la instrucción IAO.
De la instrucción IAO, se sintetizó; primero, el lugar virtual, el cual era el medio o espacio y a
su vez, el tiempo.
La I es la unidad decimal y su duada, es la simetría y su inversa, este código devela al mellizo.
Este se estructuró como el serafín binario.
Las instrucciones funcionales, se ejecutan en apenas 22 arcanos mayores o Dispositivos
formativos mitocondriales, además de 3 Códigos Padre o cardinales binarios.
En tres potencias se desenvuelve el todo, y su antipartícula; compilando así, la duada
elemental.
Las instrucciones básicas radican en tres principios: eje, opuesto y producto: I A O
Estas formas elementales son 3 cromosomas, estas definen o instruyen las secuencias de
expansión de cualquier ser***
En el artículo “EL CÓDIGO IHVH (3ª parte) – BABEL, EL CÓDIGO GENÉTICO”, se especifica
lo siguiente:
https://www.facebook.com/groups/M24javier/permalink/1017059295104606/
***Se constituye el árbol de la vida en dígitos y signos que encierran el principio de la
existencia, su manifestación y posterior destino. La energía contenida en el agujero
primordial del Dragón, es expulsada en su proceso de acción y contracción.
Son 10 las frecuencias de onda observables por el ADM (Adam Kadmon), son 10 los templos
del árbol,
La molécula de DNA consistirá de 2 hebras arrolladas helicoidalmente, cuya expansión es el
número de oro el 0.618, la división de la triada 123 y la raíz del cinco o mandato, más la
unidad dividida en dos. Una alrededor de la otra como escaleras que giran sobre un eje, cuyos
lados son hechos de azúcar y fosfato, las cuales se conectan por uniones de nitrógeno
llamadas bases***
La molécula del ADN tiene la simetría del dodecaedro pues al tener 12 pentágonos
incorpora naturalmente la proporción áurea y esto permite comprimir ondas desde el
exterior hacia el interior. Esta simetría cuando está superpuesta en una retícula o red en el
planeta se conjuga con el dodecaedro representado por las 12 casas del Zodiaco.
Geométricamente, primero se crea la succión de espirales, el tubo toro o toroide,
representado por la Pentaflor (que es un toroide visto desde arriba) y después se crea el
patrón de la Flor de la Vida.
La Pentaflor es la imagen de la molécula del ADN, y está creada por 10 espirales áureas
contra‐rotatorias, cinco en un sentido y cinco en el otro sentido. Es la vista en 2D de un
toroide. Sirve para crea un punto cero, un movimiento de implosión y explosión de la
energía para crear la materia.
Recordemos lo que se decía de la partícula básica tridimensional que presentaba un giro
alrededor de su eje vertical, secundado, por otro movimiento cíclico estructurado, de tal
manera que, al desplazarse en la malla geométrica que lo contiene, está integrado por diez
posiciones o “instantáneas” que conforman la estructura del espacio‐tiempo. Esto es
coincidente con las 10 espirales áureas de la molécula de ADN que configura la pentaflor.
En el código IHVH la primera instrucción es la clonación, son solo 3 los arcanos que se
duplican en su palabra, sean la H y la V, o sea la letra H es la palabra HH, Heh, al igual que
la V, es VV, Vau, sus valores son H=5 o 10, V=6 o 12, definiendo numeraticamente 5 + 10 +
6 + 12, al 33, como centro Alephito del sistema, o código universal, por medio de la
reducción numerológica de 5+5+6+6, resulta el valor 22, número de las secuencias de los
nucleótidos en un sistema cerrado y numero de los arcanos mayores y letras de Babel.
El segundo código o instrucción, es la repetición del valor pero sin duplicar su letra.
El tercer código es el tronco medio o lingam, el cual es el eje de simetría o eje de acreción,
la I, codificado como la letra del Padre. De acuerdo a los cabalistas con la I creó Dios
nuestro mundo, con la H el resto. De aquí que este monograma IH, sea una de las primeras
expresiones del concepto de Dios, su valor es la secuencia, 15, 30, 45, 60, 75, 90, o sea la
tripleta 6_3_9.
Así que tenemos las 3 instrucciones y las 4 letras de valores duplicados, IHVS, de esta
palabra resulta el 36, número del centro materializado, del Sol o del centro, también se
convertiría en la secuencia de la tripleta original, la triada de triadas, el 666,
numerológicamente, IH=15=6, V=6 y S=60=15=6, de aquí se determina las 3 filas de 15
columnas del diseño del Templo de Salomón, sin embargo la S, la serpiente tradicional
será revocada quedando oculta en el monograma de la Matriz del proyecto como el noveno
como la sinistrorsa, o código oculto de la expansión, esta instrucción produce la
palindromía o anagrama , lo que significa lo inverso, el espejo, ésta será sustituida por la
repetición H. Resumiéndose, estos tres códigos más su repetición en el nombre de IHVH,
la Duada Expandida o el Tetragrammaton autorizado.
Estos códigos se manifiestan en la estructura genética del humano, en el genoma del
Adam Kadmon, su ADN se encuentra en forma serpenteada y en la forma del 8, está
organizado según el principio de la “Sección Áurea” o bajo la tutela del Número de Oro, así
por ejemplo, el paso de la espiral del ADN es de 34Å, mientras su diámetro es de 21Å, por
lo que se establece el 0,61 o número de oro, PhI, Φ, como la relación entre el diámetro
respecto al paso de la espiral.
Por lo que la estructura del ADN, se manifiesta al igual que la Serie de Fibonacci, 1 2 3 5 8
13 21, ‐nótese que su suma digital de los 7 primeros números es 26‐, en la que el tercer
número de una serie resulta de la suma de de sus dos antecesores y que la razón entre el
primero de la serie y el segundo es el número PhI, 61, número que significa el AIN o la
Nada, insinuando el sistema, que todo Hoyo Negro guarda en su naturaleza este código de
diseminación entrópica.
Todas las cosas se constituyen a partir de 4 contrarios, de esta forma se manifiesta el
Tetragrammaton, el temible 4, y los 4 elementos de la Magia, el pentáculo, el cayado, la
copa y la espada.
El Tetragramaton se constituye de 4 letras, IHVH, Jehová, y suman 26, estas letras se
componen de 3 signos activos, IHV, padre, madre e hijo, elementos básicos del 21, la
existencia.
Al ser 32 elementos los que incluye el árbol de la vida (10 sephiroth + 22 senderos) a los
sabios de la antigüedad se les ocurrió que debían existir 4 elementos faltantes.
Estos serían, un número más a las sephiroth y 3 a los senderos.
De esta forma nace DOTh, el conocimiento, la onceaba sephirah, e ingeniosamente las 3
letras padre o Letras perdidas, que son las que unen a esta semisephira a la trinidad
elemental. Así todo suma 36 y de acuerdo a la primera ley de la expansión, n2‐n/2+n=
666.
***Las letras perdidas para reiniciar el sistema***
Como se indicó en otros artículos: “El Sephirat Daath formará el cuarto diente de la letra
Shin del mundo del devenir, Atziluth; en otras palabras, la letra Shin, el fuego de las tres
fuerzas primarias, es la Trinidad indivisible, un fuego que no puede ser dividido. Con el fin de
que dicho fuego pueda ser divisible, tiene que ser transformado en cuatro.
Las tres puntas de la letra Shin pueden desplegarse en las cuatro puntas de la letra Shin del
mundo del devenir cuando se encienden los tres átomos de fuego en la cabeza
(correspondiente a la ubicada en la raíz magnética de la nariz, la pituitaria y pineal)
provocado por el fuego del Kundalini, traído de los genitales a la cabeza; por lo tanto,
finalmente יהיה expresa su poder a través de la garganta (Daath).”
Adjunto a continuación fragmentos de diversos artículos que podéis relacionar con lo que
se ha expuesto en este artículo.
En el artículo “DUPLICADOS Y DESDOBLADOS”, se especifica lo siguiente:
https://www.facebook.com/groups/M24javier/permalink/1186403114836889/
***Esta plantilla B forma parte de una experiencia de separación de la Fuente. Pero una de
las características de esta experiencia de separación es el desdoblamiento, por ende, tenemos
B1 (positivo, eléctrico), y B2 (negativo, magnético).
Este desdoblamiento de la plantilla B crea polarización en seres SAS (Servicio a sí mismos) y
SAD (Servicio a los demás).
Qué significa DESDOBLAMIENTO? Qué significa PROYECCIÓN EN UN ESPEJO?
Cuando miras algo en un espejo, lo ves “invertido”.
Es decir, se ha invertido la letra de derecha a izquierda pero no de arriba a abajo. ¿Por qué?
La respuesta, aunque suene rara, es que no se ha invertido nada a derechaizquierda ni
arribaabajo.
El espejo no invierte las direcciones, simplemente muestra la imagen de lo que tienes delante
cuando los rayos procedentes del objeto se reflejan en él, tal cual la ve un observador que
mira hacia el espejo.
Esto es importante entenderlo, cuando se habla de opuestos y dualidad, en realidad es
desdoblamiento de la imagen inicial.
La realidad virtual se basa en la proyección de un holograma desde una superficie
bidimensional desdoblada en espejos cóncavoconvexos.
El Kybalion nos indica que Todo es doble, todo tiene dos polos; todo su par de opuestos: los
semejantes y los antagónicos son lo mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza, pero
diferentes en grado.
La Gran Mente Universal se manifiesta con sus RESPIRACIONES que consisten en la
polarización de lo que es llamado PARTIKI, hacia PARTIKA o antipartículas y PARTICUM o
partículas.
El Partika son emanaciones tonales proyectadas desde una fuente central como un pulso de
expansión y forman las transmisiones eléctricas de base sobre las cuales el Universo está
perpetuamente alimentado de energía en la forma de impulso eléctrico.
El Particum es también un impulso tonal de la fuente pero lleva un pulso de contracción a
través del cual la energía del Partika es devuelta a la fuente aproximadamente a la mitad de
la velocidad que es proyectada hacia afuera por el Partika.
El proceso de expansión de la energía desde el punto central del campo de origen es la tasa
de oscilación. El proceso de contracción de la energía de vuelta hacia su punto central de
origen es la tasa de vibración***
En el artículo “ORDO AB CHAO” se especifica lo siguiente:
https://www.facebook.com/groups/M24javier/permalink/1218421954968338/
***La plantilla original de manifestación se compone de 12 centros de Conciencia que no
forman pares (no es dual).
Dicha plantilla se duplicó, creando la dualidad compuesta por una plantilla de premateria y
una plantilla de materia, esta última posteriormente es desdoblada (partículas /
antipartículas) mediante la aplicación del sistema de chakras (forma de conos).
Esta duplicación de la plantilla original crea 7 densidades para la experiencia de separación
(dualidad).
El primer nivel de arriba hacia abajo (densidad 7) contiene 3 campos primarios de sonido, el
segundo nivel (densidad 6) contiene 3 campos primarios de luz (considerados colectivamente
como la Santísima Trinidad) y el tercer nivel (densidad 5) contiene 3 campos de luz líquida
hidroplasmática.
Estas 7 densidades han sido consideradas los 7 cielos del reino de Dios / Gran Mente
Universal dentro de la experiencia de separación.
Partiendo de la plantilla premateria, surge la antimateria, y desde la misma, produciéndose
el desdoblamiento, surge la materia, el mundo dual de los opuestos.
La Gran Mente Universal o “Logos Universal”, ejecuta su programación desde las dimensiones
D13 (Mente Particum), D14 (Mente Partiki) y D15 (Mente Partika).
Como resumen, el Partiki representa las unidades de la sustancia morfogenética cristalina de
la cual emergen las partículas y las antipartículas. Son las unidades primarias que forman
toda materia, antimateria y premateria.
Las estructuras pueden perder su encriptación original a través de la expresión opuesta del
libre albedrío, como es el caso del código metatrónico, basados en árboles de la vida con
diferentes programaciones y menos sephiroth (centros de conciencia), producto de las razas
caídas.
La Trinidad es un núcleo energético formado por dos mitades. Una es Yin y otra es Yang. Una
tiene una aleación positiva y otra una aleación negativa. Una es opuesta a la otra, y por lo
tanto, se complementan.
Al principio esas dos mitades formaban un núcleo. Ese núcleo se desdobló, formando dos
núcleos. Cada uno de ellos es un duplicado exacto del primero.
Cada mitad con la otra media formarán una unidad que, mediante la fusión, creará una
aleación nueva. Esa aleación es lo que se entiende por la Trinidad. La fusión del Padre
(Núcleo de Origen), Hijo (Duplicado) y Espíritu Santo (fusión de nueva aleación)***
En el artículo “DESDOBLANDO EL NÚCLEO (1º parte)”, se especifica lo siguiente:
https://www.facebook.com/groups/M24javier/permalink/1270862556390944/
***El "pensamiento" no es un producto de nuestra mente, sino una sustancia en la cual
todos los seres están sumergidos.
Por ello, nosotros, así como todos los otros seres en diferentes niveles, no producimos ningún
pensamiento, sino que solamente procesamos esta sustanciamatriz. Este valor agregado,
que permite que exista el universo, es el resultado final del pensamiento global.
En el momento en el que cada uno de nosotros presume pensar (o mejor procesar y dar una
forma de frecuencia a la sustancia del pensamiento), realmente está solo recordando una
dinámica que ya ha ocurrido***
En el artículo “DESDOBLANDO EL NÚCLEO (2º parte)” se especifica lo siguiente:
https://www.facebook.com/groups/M24javier/permalink/1272989282844938/
***Los seres verdaderos tienen una “identidad” que se encuentra fuera de todas las
dimensiones de tiempo / espacio. Esta identidad se llama "la semilla de la conciencia", el
punto de origen manifestado en el átomo permanente.
La Identidad se conecta a la plantilla a través de la 8ª Dimensión (llamada Mónada). El
campo morfogenético tonal que contiene los “Códigos de Ascensión” es conectado a la
“identidad” dentro de su núcleo.
Las estructuras de control creadas por las formas de pensamiento de los seres que iniciaron
esta rama de la Creación que supone una experiencia de separación de la Fuente son:
Dos triángulos invertidos que giran en direcciones opuestas creando un par de espirales
contrapuestas.
Un cubo que constituye una matriz autocontenida.
Dos esferas constituidas por pequeños dodecaedros.
Estas estructuras crean el desdoblamiento del núcleo, crean la dualidad, la experiencia de
separación.
Cuando a una plantilla se la somete a estas estructuras TODO se dobla y curva en su interior,
algo que el Kybalion describe perfectamente***
En el artículo “DESDOBLANDO EL NÚCLEO (3º parte)”, se especifica lo siguiente:
https://www.facebook.com/groups/M24javier/permalink/1276591015818098/
***La expresión viva de la identidad de la Mente Universal es la conocida como la Fuerza
ManU que se compone de unidades Partiki con carga positiva/negativa/neutral (Tripolar).
El Partiki opera como un autogenerador de “generadores de fusiónfisión”, y fabrica dos
subunidades intrínsecas de sustancia morfogenética cristalina, que sirven como plantillas
para los ritmos de pulsación a través de los cuales las partículas y antipartículas se
manifiestan. Las subunidades de Partiki que pulsan más rápido se llaman Partika y se
agruparán para formar las “antipartículas”.
Las subunidades de Partiki que pulsan más lentamente, y aparecen en conjunción con el
Partika, se llaman Particum y se agruparán para formar las “partículas” que son un reflejo
pulsante más lento de las antipartículas.
En el principio era el Vacío (ManU) y dentro del Vacío, Dios creó la Palabra (vibración pre
sonido: EirA) y de la Palabra vino la Luz (oscilación preluz: ManA) y de la Luz vino toda
esta Creación.
Las unidades Partiki (ManU) están compuestas por neutrones, de estas unidades surge la
polarización en Partika (EirA) compuestas por electrones y Particum (ManA) compuestas
por protones.
Con el código metatrónico, el núcleo de las tres luces (Trinidad) ha sido volteado, torcido y
convertido en una estructura de seis semillas llamada la Semilla del Demonio.
Las siete letras dobles, los siete días de la creación, los siete niveles del átomo en el
organismo, los siete pasos en la octava musical…..esto es conocido como la Ley del Siete.
El uno (1) contiene en sí mismo las siete (7) notas o partes de la octava (do, re, mi. fa, sol, la,
si). Si dividimos a la unidad por las partes que la componen que son siete, tendremos el
siguiente resultado: 1÷7 = 0,142857142857…
Si observamos un eneagrama, el número 9 es el nodo, el eje vertical central y representa a la
Mente, mientras que los números 3 y 6 representan al Yin y el Yang en forma de magnetismo.
El número 9 representa, en un nivel numérico, a las Unidades Partiki que en sí mismas son
tripolares y se dividen en dos unidades con cargas opuestas: Partika y Partikum
(antipartículas y partículas).
Es interesante resaltar que en todas las grandes religiones del mundo el gran Nombre de
Dios es igual al número 9, y describían al 9 como el número omnipotente***