Caso Sergio Urrego
Caso Sergio Urrego
Caso Sergio Urrego
Sergio David Urrego Reyes era un joven de 17 años de edad que se encontraba inscrito en el
colegio Gimnasio Castillo Campestre, como estudiante de grado once. Sergio sostenía una
relación sentimental con un compañero de su curso, sin que los padres de ambos adolescentes
lo supieran.
En mayo de 2014, una compañera de clase les tomó una foto mientras se daban un beso. Así
mismo, la foto fue encontrada por un profesor que enteró del caso al consejo directivo de la
institución, quien, una vez analizado el caso, consideró que los jóvenes habían incurrido en una
falta grave de conformidad con el manual de convivencia del colegio, así:
A partir de ese momento los dos jóvenes fueron citados varias veces por la Psicóloga para que
“explicaran su relación de pareja”. En una de esas reuniones, donde además de la Psicóloga
asistió también la coordinadora académica y cuatro docentes más, Sergio fue informado que
sus padres serían llamados a una reunión para ponerlos al tanto de la situación.
Desde ese momento, las directivas se hicieron cargo del asunto, tratando esta relación entre
dos jóvenes como un problema psicológico. La orientación religiosa del psicólogo y de los
directivos tratantes entraron en conflicto con la conducta homosexual del paciente, cosa que
generó varias fallas en el procedimiento a seguir, lo que terminó por constituirse en una forma
de acoso escolar y discriminación contra el joven por su orientación sexual, razones que
incidieron en la decisión de acabar con su vida el 4 de agosto de 2014.
La psicóloga, una vez analizado el caso, aceptó los cargos de discriminación agravada y falsa
denuncia contra persona determinada, por lo cual pagará 35 meses de cárcel.
Análisis
2. Dejarse guiar por sus prejuicios frente a la diversidad sexual a su vez guiándose por las
políticas del colegio.
1
Manual de convivencia del Colegio Gimnasio Castillo Campestre (folio 33; cuaderno de primera
instancia).
Psicología:
Bioética y Deontología
Evalúe las elecciones y decisiones del psicólogo del nivel y determine los puntos que
considera éticamente dudosos y las elecciones profesionales que considera de riesgo.
(Pregunta a los participantes)
Para tomar una buena decisión en un caso como estos te invito a leer los siguientes artículos
del código del psicólogo:
Artículo 10. Deberes y obligaciones del psicólogo. Son deberes y obligaciones del
psicólogo:
h) Respetar los principios y valores que sustentan las normas de ética vigentes para el ejercicio
de su profesión y el respeto por los derechos humanos.
Artículo 36. Deberes del psicólogo con las personas objeto de su ejercicio profesional.
El psicólogo en relación con las personas objeto de su ejercicio profesional tendrá,
además, las siguientes obligaciones:
En este caso la psicóloga trabajo en conjunto con las directivas de colegio en contra de los
derechos que tiene la población diversa, con el fin de que Sergio Urrego no permaneciera más
tiempo dentro de la institución educativa.
La psicóloga no tuvo ética profesional, ya que tomo la decisión de dejarse llevar por los
prejuicios, en lugar de atender y dar una correcta intervención psicológica a Sergio Urrego
sabiendo por la situación que estaba enfrentando este joven de 16 años
Frente a este caso falto rigurosidad por parte de la psicóloga, proporcionar a su paciente rutas
de atención adecuadas para que el pudiera dar solución a su malestar y un trabajo conjunto
con la institución educativa para dar frente a la situación de discriminación por su orientación
sexual por medio de programas de promoción y prevención sobre este tema.
Como psicólogos debemos tener presente que no trabajamos solos, sino que hay un trabajo
interdisciplinar y multidisciplinar con el fin de que el paciente pueda encontrar las soluciones
Psicología:
Bioética y Deontología
por medio de la guía que le podamos proporcionar siempre desde la confidencialidad y ética
profesional que no podemos romper.
Segundo caso
Psicología:
Bioética y Deontología
En 2015 una menor de 12 años con discapacidad intelectual empezó a tener problemas en la
escuela. Sus maestras intervinieron, hablaron con ella y convocaron a la madre para trabajar
de manera articulada. Así descubrieron que la chica había sido violada y que estaba
embarazada. La nena señaló a su padrastro como el violador. La situación había ocurrido varias
veces.
La mamá y la menor pidieron que se hiciera un aborto de acuerdo al artículo 86 del Código
Penal que lo habilita. La gestación era producto de una violación a una niña con discapacidad y
ponía en riesgo su salud en los términos que la define la OMS.
Los médicos decidieron ingresarla en el área de maternidad pero al tiempo tuvieron que
cambiarla de sector porque la chica se desesperaba, lloraba y gritaba cada vez que escuchaba a
un bebé. La trasladaron a Pediatría mientras el equipo interdisciplinario evaluaba los pasos a
seguir en función de que la gestación estaba muy avanzada y su interrupción implicaba riesgos
que debían considerarse.
Ante la situación descrita, la psicóloga María Belén, quien no trabajaba en el hospital pero
quien milita para la ONG Grávida, vinculada a la Iglesia católica y que se opone al aborto.
Durante el fin de semana entró a su habitación, comenzó a jugar con la menor y a charlar con
la madre. Así las convenció de no seguir adelante con el procedimiento, de que firmen el alta
voluntaria para continuar el embarazo y dar el bebé en adopción.
Pese a que el embarazo infantil forzado se considera tortura, los mismos integrantes de
Grávida relataron que acompañaron a la nena hasta que la gestación llegó a término y que el
bebé fue dado en adopción.
Durante el tiempo en que estuvo internada, la menor dijo en varias oportunidades que si tenía
al bebé “lo iba a tirar por las escaleras” y cada vez que escuchaba hablar del tema se
autolesionaba. Por eso, las psicólogas que integran el equipo interdisciplinario del hospital
consideraron que el actuar de su colega había sido errado y la denunciaron al Tribunal de Ética
y Disciplina del Colegio de Psicólogos.
Ante el caso, el colegio de psicólogos, se concluyó: "La licenciada Catalano, motivada por
razones personales y religiosas, en su accionar vulnera la dignidad de la niña, violando sus
derechos a la intimidad, al consentimiento informado y a la posibilidad de la interrupción legal
del embarazo, obligándola a una maternidad forzada".
Evalúe las elecciones y decisiones del psicólogo del nivel y determine los puntos que
considera éticamente dudosos y las elecciones profesionales que considera de riesgo.
Psicología:
Bioética y Deontología
Análisis
Había intervenido en un caso que estaba a cargo de otras profesionales, había impuesto sus
creencias religiosas por encima del bienestar de una niña violada y, para eso, había utilizado
“procedimientos del quehacer profesional”.
Psicología:
Bioética y Deontología