Dios Habla Con Elias Por Susurro
Dios Habla Con Elias Por Susurro
Dios Habla Con Elias Por Susurro
En ese momento Dios pasó por ahí, y de inmediato sopló un viento fuerte
territorio de Judá. Dejó a su ayudante en Jezreel 4 y anduvo por un día en el
que estremeció la montaña, y las piedras se hicieron pedazos. Pero Dios no
desierto. Después se sentó debajo de un arbusto, y estaba tan triste que se
estaba en el viento. Después del viento hubo un terremoto. Pero Dios
quería morir. Le decía a Dios: «¡Dios, ya no aguanto más! Quítame la vida,
tampoco estaba en el terremoto. 12 Después del terremoto hubo un fuego.
pues no soy mejor que mis antepasados».
Pero Dios tampoco estaba en el fuego. Después del fuego se oyó un
Después se acostó debajo del arbusto y se quedó dormido. Al rato un
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susurro delicado y suave. 13 Cuando Elías lo escuchó, se tapó la cara con su
ángel lo tocó y le dijo: «Levántate y come». capa, salió y se quedó a la entrada de la cueva. En ese momento Elías
Elías miró y encontró cerca de su cabeza un pan recién horneado, y una
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jarra de agua. Así que comió, bebió y se acostó de nuevo.
—¿Qué estás haciendo aquí, Elías?
El ángel de Dios fue por segunda vez, tocó a Elías y le dijo: «Levántate y
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Él contestó:
come, pues el viaje será largo y pesado».
Entonces Elías se levantó, comió y bebió. Esa comida le dio fuerzas para
8 —Yo me he esforzado mucho por obedecerte, pues tú eres el Dios
viajar durante cuarenta días y cuarenta noches, hasta que llegó al monte todopoderoso. El pueblo de Israel ha abandonado el pacto que tiene
Horeb, que es el monte de Dios. 9 Allí encontró una cueva y se quedó a contigo, ha destruido tus altares y ha matado a tus profetas. Sólo yo estoy
pasar la noche. Pero Dios le habló de nuevo y le preguntó: vivo, pero me están buscando para matarme.
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Él contestó: —Anda, regresa por el mismo camino hasta el desierto de Damasco.
Cuando llegues, nombra a Hazael como rey de Siria, 16 y a Jehú hijo de
—Yo me he preocupado mucho por obedecerte, pues tú eres el Dios Nimsí, como rey de Israel. También nombra como profeta, en lugar tuyo, a
todopoderoso. El pueblo de Israel ha abandonado el pacto que tiene Eliseo hijo de Safat, del pueblo de Abel-meholá. 17 De esta manera, al
israelita que escape de morir bajo la espada de Hazael, lo matará Jehú. Y a
quien no pueda matar Jehú, lo matará Eliseo. 18 Pero debes saber que siete
mil personas no se arrodillaron delante de Baal ni lo besaron; a ellos yo los
voy a dejar con vida.
Elías le contestó:
Eliseo dejó a Elías, y fue a buscar dos toros suyos y los mató. Tomó la
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madera del yugo que unía a los toros, y con ella hizo fuego para asar la
carne. Eliseo invitó a su gente a comer la carne asada, y luego se fue a
buscar a Elías. Desde ese momento, Eliseo fue su ayudante.