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Discipulado Profetas LV

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DISCIPULADO CRISTIANO

PROFETAS
NIVEL IV
CONTENIDO

Introducción

1. El Ministerio del profeta


2. Características del ministerio de profeta
3. Vida, contexto histórico, entorno del profeta
4. Un reino perdido por la idolatría
5. El ministerio profético de Elías
6. Algunas lecciones de profecía en la vida de un profeta
7. Elías un aliado de Dios
8. Ministerio publico de Elías
9. Ministerio privado de Elías
10. El ultimo ministerio de Elías
11. Eliseo el nuevo profeta de Israel
12. El profeta Elías, hombre de Dios y hombre del pueblo
13. Guerra espiritual
14. El mensaje final de Elías
15. Un corazón intercesor
16. El avivamiento en el tiempo de Elías
INTRODUCCION

En el A.T el profeta fue usado por Dios de una manera constante, y muchas de las advertencias
al pueblo de Israel para que enderezara sus caminos vinieron precisamente de los profetas que
Dios levantó en esos tiempos. La tarea de los Profetas en el Antiguo Testamento es resumida
básicamente en una doble función: Recibir de Dios el mensaje mediante revelación y declarar al
pueblo el mensaje de Dios.

Los Profetas en la actualidad preparan el camino para la Segunda Venida de Cristo, proclamando
un mensaje que guía al arrepentimiento, y provee revelación y entendimiento sobre las Escrituras
que deben cumplirse antes que Cristo vuelva. Los Apóstoles y Profetas de la Iglesia han sido
comisionados con esa unción y responsabilidad. Los Profetas funcionan dentro de la Iglesia de la
siguiente manera: Son proclamadores de la Palabra de Dios, llenos del Espíritu Santo, llamados
por Dios para advertir, animar, fortalecer y consolar: “Pero el que profetiza habla a los hombres
para edificación, exhortación y consolación” 1ª Corintios 14:3.

En ocasiones son videntes que predicen el futuro. “Y levantándose uno de ellos, llamado Agabo,
daba a entender por el Espíritu, que vendría una gran hambre en toda la tierra habitada; la cual
sucedió en tiempo de Claudio” Hechos 21:10-11

Tienen la misión de poner al descubierto el pecado, proclamar la justicia, advertir del juicio
venidero y combatir la mundanalidad y tibieza en el pueblo de Dios Lucas 1:14-17

Los mensajes de los Profetas no se han de considerar infalibles. Sus mensajes se sujetan a la
evaluación de la Iglesia, a otros Profetas y a la Palabra de Dios. Se requiere que la congregación
discierna y pruebe si lo que contiene es de Dios: “Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad
los espíritus si son de Dios; porque muchos falsos profetas han salido por el mundo».1ª Juan 4:1

Una verdadera profecía es aquella en la cual el Espíritu Santo inspira a alguien a comunicar las
palabras puras y exactas de Dios para un individuo o grupo al cual el Señor quiere hablar. Es
entregada por la persona que profetiza “sin añadir ni sustraer». Para su efectividad máxima es
necesario que se cumplan condiciones precisas: En el tiempo de Dios. Y con la actitud y el
espíritu adecuado.

La Biblia, es la revelación total de los pensamientos y la voluntad de Dios, por lo tanto es la


Palabra Profética completa 2ª Pedro 1:19-21., es perfecta y suficiente para acercarnos a la
revelación de Dios. No debe añadirse, ni quitarse palabras de las Escrituras Deuteronomio 4:2;
Lucas 21:33; Apocalipsis 22:18-19. Toda Palabra Profética que se entregue el día de hoy, debe
estar en total acuerdo con el contexto y el espíritu de la Palabra de Dios.

Con estas breves consideraciones, animamos a los siervos del Señor, a estudiar este ministerio
que ha sido designado por Dios para la edificación del cuerpo de Cristo.
El MINISTERIO DEL PROFETA
1. Introducción

Definición de profeta: ¿Que es un profeta? Es aquel cuya boca ha sido tocada para hablar por
Dios.

Y tocando con él sobre mi boca, dijo: He aquí que esto tocó tus labios, y es quitada tu culpa, y
limpio tu pecado. Isaías 6:7

Y extendió Jehová su mano y tocó mi boca, y me dijo Jehová: He aquí he puesto mis palabras en
tu boca. Jeremías 1:9

Los profetas son hombres y mujeres de Dios que ejercen una influencia importante en la historia
del hombre y en el A.T en la Biblia hebrea, la Ley, los Profetas y los Escritos eran las divisiones
más importantes clasificadas. Esta categoría de profetas, contenía seis libros históricos escritos
desde una perspectiva profética: Josué, Jueces, 1ª y 2ª Samuel y 1ª y 2ª Reyes. Y también había
los dieciséis libros proféticos específicos de Isaías a Malaquías, y por último, Moisés el autor del
pentateuco, fue profeta. De tal manera que las dos terceras partes del A.T fueron escritas por
profetas.

Algunas veces los escritores, cuando hablan de la profecía dada por un profeta, con
frecuencia se refieren nada más a aquellos eventos que, o bien han tenido su cumplimiento en la
vida de naciones o personas o la tendrán en el futuro. Esta es una función del profeta y aunque
es importante, solo es una parte de su misión. El profeta advierte, dirige, intercede, enseña, y
aconseja. Y lo que es más importante, El profeta esta en los muros para ver lo que el Señor está
haciendo y así poder llamar a la iglesia a responder adecuadamente.

2. El oficio de Profeta

“A ti, pues, hijo de hombre, te he puesto por atalaya a la casa de Israel, y oirás la palabra de mi
boca, y los amonestarás de mi parte” Ezequiel 33:7

El profeta debe advertir a la iglesia tibia del juicio venidero y si no lo hace se hará responsable de
la sangre del pueblo. El atalaya, que hace referencia el versículo anterior, tiene como
responsabilidad advertir a la gente a apartarse del pecado y aceptar la salvación de Dios.

El oficio de profeta cristiano no se debe confundir con el don de profecía. El don de profecía es
una palabra inmediata del Señor para la iglesia en reuniones para dar dirección, exhortación,
amonestación o consolación. El Espíritu Santo puede hablar de ese modo por medio de cualquier
persona. Sin embargo, hablar así no comisiona al profeta de esa ocasión para ese oficio.

Un profeta cristiano es un vigía. Su labor es sobre los muros de la ciudad y Dios le demanda su
presencia por completo. El Espíritu de Dios vive, se mueve y actúa por medio de El

El profeta es un centinela de la casa de Israel. Su trabajo es advertir a los pecadores la desgracia


y el peligro. Él debe advertir al impío para que se vuelva de su camino para vivir. Si un alma
perece por su negligencia esto es su propia culpa. Obsérvese por lo que tienen que responder los
que disculpan el pecado, halagan a los pecadores, y les exhortan a creer que tendrán paz aunque
sigan en pecado.

¡Cuánto más sabios son los hombres en sus preocupaciones temporales que en las espirituales!
Ponen atalayas para guardar sus casas y centinelas para que les adviertan de la aproximación
del enemigo, pero cuando se juegan la felicidad o miseria eterna de su alma, se ofenden si los
ministros obedecen el mandamiento de su amo y dan una fiel advertencia; prefieren perecer
escuchando cosas dulces

Dios le asignó al profeta el trabajo de vigía (Atalaya). Como tal, era responsable de advertir al
pueblo el juicio venidero. Por ser el atalaya, debía anunciar lo que les esperaba en el futuro. Esa
era su responsabilidad única. No tenía que convencer, sino decir claramente lo que vendría. La
responsabilidad recaería así sobre los oyentes y el profeta habría cumplido con su trabajo.

——–La vida misma y el aliento del profeta cristiano es la intercesión dentro de la iglesia—–

El oficio de profeta, en el Nuevo Testamento, es desarrollado por completo en el Antiguo


Testamento. Por ejemplo, el oficio de apóstol parece totalmente Nuevo. Los maestros existían
antes, aunque oímos poco de ellos. Se conocían a los sanadores, aunque con frecuencia quien
sanaba era también el profeta. Se hablaba del don de lenguas, pero se ha cuestionado si el don
se ejercía o meramente se profetizaba. Isaías 28:11

Por ejemplo la profecía de Saúl ¿Fue lengua o interpretación? Si no lo fue, ¿entonces que fue?

Luego bajarás delante de mí a Gilgal; entonces descenderé yo a ti para ofrecer holocaustos y


sacrificar ofrendas de paz. Espera siete días, hasta que yo venga a ti y te enseñe lo que has de
hacer. Aconteció luego, que al volver él la espalda para apartarse de Samuel, le mudó Dios su
corazón; y todas estas señales acontecieron en aquel día. Y cuando llegaron allá al collado, he
aquí la compañía de los profetas que venía a encontrarse con él; y el Espíritu de Dios vino sobre
él con poder, y profetizó entre ellos. Y aconteció que cuando todos los que le conocían antes
vieron que profetizaba con los profetas, el pueblo decía el uno al otro: ¿Qué le ha sucedido al hijo
de Cis? ¿Saúl también entre los profetas? Y alguno de allí respondió diciendo: ¿Y quién es el
padre de ellos? Por esta causa se hizo proverbio: ¿También Saúl entre los profetas? Y cesó de
profetizar, y llegó al lugar alto. 1a Samuel 10:8-13

Se habla de los pastores, como en jeremías, pero una vez más ¿Quiénes eran, sacerdotes,
profetas o ambos?

!!Ay de los pastores que destruyen y dispersan las ovejas de mi rebaño! dice Jehová. Por tanto,
así ha dicho Jehová Dios de Israel a los pastores que apacientan mi pueblo: Vosotros
dispersasteis mis ovejas, y las espantasteis, y no las habéis cuidado. He aquí que yo castigo la
maldad de vuestras obras, dice Jehová. Y yo mismo recogeré el remanente de mis ovejas de
todas las tierras adonde las eché, y las haré volver a sus moradas; y crecerán y se
multiplicarán. Y pondré sobre ellas pastores que las apacienten; y no temerán más, ni se
amedrentarán, ni serán menoscabadas, dice Jehová. Jeremías 23:1-4

La profecía y el oficio de profeta, sin embargo, no solo se desarrollaban por completo, sino que
también eran lo más importante en el plan del Señor. En sus profetas, y por medio de ellos, El
advirtió, riño, bendijo, sano, enseño, anuncio, rescato, llamo a Israel al arrepentimiento, sometió a
reyes, dio revelación para doctrina, castigo Cada libro, desde Isaías hasta Malaquías, esta escrito
por un profeta o es acerca de un profeta.
Dios no se deshizo de los profetas y de la profecía cuando nació la iglesia. En cambio, su función
y su poder fue expandido, por virtud de la Cruz y la resurrección. Así el profeta dejo de ser un
vigia solitario al que con frecuencia su propio pueblo lo mataba, y se convirtió en parte integral de
la iglesia mediante la guía del Espíritu Santo.

En el Antiguo Testamento, Dios no actuaba a menos de informar primero a sus profetas:

Porque no hará nada Jehová el Señor, sin que revele su secreto a sus siervos los profetas. Amós
3:7.

Bajo el Nuevo pacto, el cuerpo de Cristo necesita profetas mas que nunca, porque el Padre no
actuara sin el clamor de los vigías que convocan al cuerpo a no darle a El descanso en oracion
continua, hasta que El establezca La Iglesia y la haga alabanza en la tierra.

Sobre tus muros, oh Jerusalén, he puesto guardas; todo el día y toda la noche no callarán jamás.
Los que os acordáis de Jehová, no reposéis, ni le deis tregua, hasta que restablezca a Jerusalén,
y la ponga por alabanza en la tierra. Isaías 62:6-7

Dios ha puesto guardas sobre los muros de Sion, es decir, los profetas y fieles intercesores que
nunca dejan de orar por el establecimiento del reino de Dios y del justo gobierno de Cristo en la
tierra….sin darle tregua….Hasta que realice todo lo que ha prometido.

Hay mucha expectativa en la iglesia de Cristo en esta época a medida que el Espíritu Santo ha
impulsado a los maestros a hablar de unidad, autoridad y discipulado. Cualquiera puede darse
cuenta que el Señor está preparando a su iglesia para el capítulo final de la historia. Todos
debemos estar bajo autoridad, por eso, necesitamos apóstoles y profetas. Dios ha proporcionado
un trabajo preparatorio para tales líderes a lo largo del Nuevo Testamento

“Por eso la sabiduría de Dios también dijo: Les enviare profetas y apóstoles; y de ellos, a unos
mataran y a otros perseguiran”Lucas 11:49

“Y a unos Dios puso en la iglesia, primeramente apóstoles, luego profetas, los tercero maestros,
luego los que hacen Milagros, después los que sanan, los que ayudan, los que administran, los
que tienen don de lenguas” 1a Corintios 12:28

Edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo
Jesucristo mismo, Efesios 2:20

Todo profeta ahora debe saber que la palabra de Dios es totalmente verdad y no puede ser
quebrantada, porque enseña que de las cenizas de la tribulación el Señor del cielo y la tierra dará
entrada a una nueva era de Gloria. Al igual que Jesús sufrió, así la iglesia, debe soportar el
sufrimiento para ser resucitada a la plenitud de la nueva era

Puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él
sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios. Hebreos 12:2

3. Profetas del Espíritu y de la palabra

La mano de Jehová vino sobre mí, y me llevó en el Espíritu de Jehová, y me puso en medio de un
valle que estaba lleno de huesos. Me dijo entonces: Profetiza sobre estos huesos, y diles: Huesos
secos, oíd palabra de Jehová. Ezequiel 37:1,4
Características que debe manifestar un profeta:

1. Conocimiento divinamente revelado:

Dios revela al profeta todo lo relacionado con las personas, los acontecimientos y la verdad
redentora. Los profetas en el A.T ponían en claro la voluntad de Dios para su pueblo
mediante instrucción, corrección y advertencia. Ellos pronunciaban juicios antes que
ocurrieran. De una obscura historia del pueblo de Israel salió la profecía específica sobre el
Mesías, y el reino de Dios, así como la predicción sobre los futuros acontecimientos mundiales.

1. Poderes dados divinamente:

El profeta entra en la esfera de lo milagroso cuando es lleno del Espíritu Santo, manifestándose la
vida y el poder de Dios de manera sobrenatural en un mundo que esta aparentemente cerrado a
ese poder.

1. Un estilo de vida característico:

El profeta abandona el mundo para vivir únicamente para Dios, protestando enérgicamente contra
la idolatría, la inmoralidad y toda forma de pecado. Procura cambios justos y Defiende la voluntad
de Dios sin pensar en el riesgo personal.

1. Su mensaje

El mensaje del profeta, debe tocar tres puntos:

1. La naturaleza de Dios: Creador, Todopoderoso, Santo, Recto, Justo

El profeta declara a Dios como el creador y todopoderoso gobernante del universo. Quien hace
que los eventos históricos sirvan a sus propósitos de salvación y juicio. Enfatiza en la santidad de
Dios, su rectitud y justicia, que rechaza el pecado, la iniquidad y la injusticia; quien es clemente y
lento para actuar con ira. Y por su santidad exige santidad en los que le siguen, con un pacto de
obediencia a sus mandamientos como parte de esa relación.

¿No has sabido, no has oído que el Dios eterno es Jehová, el cual creó los confines de la tierra?
No desfallece, ni se fatiga con cansancio, y su entendimiento no hay quien lo alcance. Isaías
40:28

Así dice Jehová a su ungido, a Ciro, al cual tomé yo por su mano derecha, para sujetar naciones
delante de él y desatar lomos de reyes; para abrir delante de él puertas, y las puertas no se
cerrarán Isaías 45:1

En aquel día estará grabado sobre las campanillas de los caballos: SANTIDAD A JEHOVÁ; y las
ollas de la casa de Jehová serán como los tazones del altar. Zacarías 14:20

Santo era Israel a Jehová, primicias de sus nuevos frutos. Todos los que le devoraban eran
culpables; mal venía sobre ellos, dice Jehová. Jeremías 2:3

2. El pecado y el arrepentimiento:

El profeta debe participar de la aflicción de Dios por la desobediencia, infidelidad, idolatría e


inmoralidad de su pueblo. Su mensaje debe ser así:”Arrepiéntanse o perecerán”. En el A.T los
profetas predijeron varios juicios con catástrofes lamentables, como decir la destrucción de
Samaria por los Sirios y la destrucción de Jerusalén por Babilonia.

Tocad bocina en Gabaa, trompeta en Ramá: sonad alarma en Bet-avén; tiembla, oh Benjamín.
Efraín será asolado en el día del castigo; en las tribus de Israel hice conocer la verdad. Los
príncipes de Judá fueron como los que traspasan los linderos; derramaré sobre ellos como agua
mi ira. Efraín es vejado, quebrantado en juicio, porque quiso andar en pos de vanidades. Yo,
pues, seré como polilla a Efraín, y como carcoma a la casa de Judá. Oseas 5:8-12

3. Predicción y esperanza mesiánica

El profeta, a pesar del pecado y la desobediencia del pueblo, siempre debe tener un mensaje de
esperanza, pues el sabe que Dios cumplirá sus pactos y sus promesas por medio de su
remanente fiel. Un día no esperado, vendrá el Mesías y por su medio Dios ofrecerá una naciente
era mesiánica. Siempre el profeta tiene que comunicar la palabra de Dios aun pueblo obstinado,
sin menoscabo de que fuere rechazada. El profeta es un defensor del Antiguo pacto y
comunicador del Nuevo, viviendo en el presente pero señalando hacia el futuro.

Y dijo: Anda, y di a este pueblo: Oíd bien, y no entendáis; ved por cierto, mas no
comprendáis. Engruesa el corazón de este pueblo, y agrava sus oídos, y ciega sus ojos, para
que no vea con sus ojos, ni oiga con sus oídos, ni su corazón entienda, ni se convierta, y haya
para él sanidad. Y yo dije: ¿Hasta cuándo, Señor? Y respondió él: Hasta que las ciudades estén
asoladas y sin morador, y no haya hombre en las casas, y la tierra esté hecha un desierto; hasta
que Jehová haya echado lejos a los hombres, y multiplicado los lugares abandonados en medio
de la tierra. Y si quedare aún en ella la décima parte, ésta volverá a ser destruida; pero como el
roble y la encina, que al ser cortados aún queda el tronco, así será el tronco, la simiente
santa. Isaías 6:9-13
Características del Ministerio de
profeta: Predicador a la iglesia
1. Generalidades

Había entonces en la iglesia que estaba en Antioquía, profetas y maestros: Bernabé, Simón el
que se llamaba Níger, Lucio de Cirene, Manaén el que se había criado junto con Herodes el
tetrarca, y Saulo. Hechos 13:1

Del Griego prophetes=uno que habla pública o abiertamente; uno que habla en nombre de otro.
Del Hebreo NAHBI O NABI, derivado del verbo NABHA que significa “burbujear o fluir”, es un
concepto que tiene conexión con la actitud del profeta en que el fervor emocional burbujeaba
dentro de ellos.

En asirio este verbo es NABU que significa proclamar, ser intérprete, o sea es alguien que habla
en lugar de Dios. En hebreo Ro eh y hozeh acto físico de ver

(Antiguamente en Israel cualquiera que iba a consultar a Dios, decía así: Venid y vamos al
vidente; porque al que hoy se llama profeta, entonces se le llamaba vidente.) Dijo entonces Saúl
a su criado: Dices bien; anda, vamos. Y fueron a la ciudad donde estaba el varón de Dios. Y
cuando subían por la cuesta de la ciudad, hallaron unas doncellas que salían por agua, a las
cuales dijeron: ¿Está en este lugar el vidente? Ellas, respondiéndoles, dijeron: Sí; helo allí delante
de ti; date prisa, pues, porque hoy ha venido a la ciudad en atención a que el pueblo tiene hoy un
sacrificio en el lugar alto. Cuando entréis en la ciudad, le encontraréis luego, antes que suba al
lugar alto a comer; pues el pueblo no comerá hasta que él haya llegado, por cuanto él es el que
bendice el sacrificio; después de esto comen los convidados. Subid, pues, ahora, porque ahora le
hallaréis. Ellos entonces subieron a la ciudad; y cuando estuvieron en medio de ella, he aquí
Samuel venía hacía ellos para subir al lugar alto. 1ª Samuel 9:11.

Ro’eh: Hebreo, = vidente, Indica una capacidad especial para ver el reino espiritual y prever los
acontecimientos futuros. Este titulo sugiere que el profeta no era engañado por la apariencia
externa de las cosas; mas bien, el veía las cosas como realmente eran desde la perspectiva de
Dios mismo. Como vidente el profeta recibía sueños, visiones, y revelaciones de Dios que lo
capacitaban para trasmitir las realidades espirituales del pueblo de Dios.

Nabi= profeta Esta palabra aparece más de 309 veces en el A.T. no esta muy claro el origen de
esta palabra, pero el significado del verbo hebreo profetizar era: “Poner en circulación palabras
abundantes de la mente de Dios, y por medio del Espíritu de Dios”. Así que un Nabi era un
portavoz que pronunciaba palabras bajo el poder inspirador del Espíritu Santo.

Profetes= Profeta: “Uno que habla en nombre de otro” Ellos hablaron en nombre de Dios al
pueblo del pacto, a base de lo que ellos oían, veían y recibían de El.

El oficio de profeta era para edificación del cuerpo; para hacerlo crecer y renovarlo, ya sea local o
universalmente.

En aquellos días unos profetas descendieron de Jerusalén a Antioquía. Y levantándose uno de


ellos, llamado Agabo, daba a entender por el Espíritu, que vendría una gran hambre en toda la
tierra habitada; la cual sucedió en tiempo de Claudio. Entonces los discípulos, cada uno
conforme a lo que tenía, determinaron enviar socorro a los hermanos que habitaban en Judea; lo
cual en efecto hicieron, enviándolo a los ancianos por mano de Bernabé y de Saulo. Hechos
11:27-30

Los profetas eran creyentes que hablaban bajo el impulso directo del Espíritu Santo en el nombre
de Dios y cuyo principal interés era la vida y la pureza espirituales de la iglesia. Bajo el Nuevo
pacto el Espíritu Santo los designo y capacito para transmitir un mensaje de Dios a su pueblo

Nuestra base el Antiguo Testamento:

Necesitamos la base de los profetas del A.T para comprender el ministerio profético en la iglesia.
Su tarea principal era dar un mensaje de Dios por medio del Espíritu Santo a fin de alentar al
pueblo de Dios a permanecer fiel a su relación del pacto. A veces también predecían el futuro
como el Espíritu se los revelaba.

Términos usados para los profetas en el A.T

1. Varón de Dios Deuteronomio 33:1; 1ª Samuel 9:6; 2ª Reyes 4:9; 2ª Crónicas 8:14
2. Siervo de Dios, siervo de Jehová 1ª Samuel 3:9
3. Mensajero Malaquías 3:1; Hageo 1;13
4. Declarante de la palabra de Dios Deuteronomio 5:5; Jeremías 2:2
5. Hombre de espíritu Oseas 9:7
6. Vidente 1ª Samuel 9:11
7. Interprete o enseñador Isaías 43:27
8. Atalaya (centinela) Ezequiel 3:17
9. Predicador Oseas 5:1
10. Función del profeta:
11. Predicar: predicar aquí se usa en contraste con la de enseñar. La enseñanza se dirige
principalmente a la mente del que escucha, mientras que la predicación afecta las emociones y la
voluntad. El objetivo principal de la enseñanza es impartir información, mientras que la
predicación es provocar una reacción y una respuesta. A los sacerdotes de Israel les competía lo
primero y a los profetas lo segundo

Oíd palabra de Jehová, hijos de Israel, porque Jehová contiende con los moradores de la tierra;
porque no hay verdad, ni misericordia, ni conocimiento de Dios en la tierra. Oseas 4:1

Sacerdotes, oíd esto, y estad atentos, casa de Israel, y casa del rey, escuchad; porque para
vosotros es el juicio, pues habéis sido lazo en Mizpa, y red tendida sobre Tabor. Oseas 5:1

2. Predecir: También veían y anunciaban acontecimientos futuros que sucederían en un futuro


lejano o cercano.

En el primer año de Belsasar rey de Babilonia tuvo Daniel un sueño, y visiones de su cabeza
mientras estaba en su lecho; luego escribió el sueño, y relató lo principal del asunto. Daniel dijo:
Miraba yo en mi visión de noche, y he aquí que los cuatro vientos del cielo combatían en el gran
mar. Y cuatro bestias grandes, diferentes la una de la otra, subían del mar. Daniel 7:1-3

Que deshago las señales de los adivinos, y enloquezco a los agoreros; que hago volver atrás a
los sabios, y desvanezco su sabiduría. Yo, el que despierta la palabra de su siervo, y cumple el
consejo de sus mensajeros; que dice a Jerusalén: Serás habitada; y a las ciudades de Judá:
Reconstruidas serán, y sus ruinas reedificaré; que dice a las profundidades: Secaos, y tus ríos
haré secar; Que dice de Ciro: Es mi pastor, y cumplirá todo lo que yo quiero, al decir a Jerusalén:
Serás edificada; y al templo: Serás fundado. Isaías 44:25-29
Así dice Jehová a su ungido, a Ciro, al cual tomé yo por su mano derecha, para sujetar naciones
delante de él y desatar lomos de reyes; para abrir delante de él puertas, y las puertas no se
cerrarán: Yo iré delante de ti, y enderezaré los lugares torcidos; quebrantaré puertas de bronce, y
cerrojos de hierro haré pedazos; y te daré los tesoros escondidos, y los secretos muy guardados,
para que sepas que yo soy Jehová, el Dios de Israel, que te pongo nombre. Isaías 45:1-3

3. ¿Cómo recibían los profetas el mensaje de Dios?

Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los
profetas, Hebreos 1:1

Dios les hablaba de muchas maneras:

1. Principalmente lo hacía mediante el Espíritu Santo, los profetas eran investidos de Su poder para
llevar a cabo una determinada tarea.

Entonces el Espíritu de Jehová vino sobre Gedeón, y cuando éste tocó el cuerno, los abiezeritas
se reunieron con él. Jueces 6:34

El Espíritu de Jehová comenzó a manifestarse en él en los campamentos de Dan, entre Zora y


Estaol. Jueces 13:25

Y así que vino hasta Lehi, los filisteos salieron gritando a su encuentro; pero el Espíritu de Jehová
vino sobre él, y las cuerdas que estaban en sus brazos se volvieron como lino quemado con
fuego, y las ataduras se cayeron de sus manos Jueces 15:14

1. Por medio de visiones

Aconteció en el año treinta, en el mes cuarto, a los cinco días del mes, que estando yo en medio
de los cautivos junto al río Quebar, los cielos se abrieron, y vi visiones de Dios. Ezequiel 1:1

1. Por símbolos

Y dijo: Abre la ventana que da al oriente. Y cuando él la abrió, dijo Eliseo: Tira. Y tirando él, dijo
Eliseo: Saeta de salvación de Jehová, y saeta de salvación contra Siria; porque herirás a los sirios
en Afec hasta consumirlos. 2ª Reyes 13:17

1. Por objetos

Así me dijo Jehová: Ve y cómprate un cinto de lino, y cíñelo sobre tus lomos, y no lo metas en
agua. Y compré el cinto conforme a la palabra de Jehová, y lo puse sobre mis lomos. Vino a mí
segunda vez palabra de Jehová, diciendo: Toma el cinto que compraste, que está sobre tus
lomos, y levántate y vete al Éufrates, y escóndelo allá en la hendidura de una peña. Fui, pues, y
lo escondí junto al Éufrates, como Jehová me mandó. Y sucedió que después de muchos días
me dijo Jehová: Levántate y vete al Éufrates, y toma de allí el cinto que te mandé esconder
allá. Entonces fui al Éufrates, y cavé, y tomé el cinto del lugar donde lo había escondido; y he
aquí que el cinto se había podrido; para ninguna cosa era bueno. Y vino a mí palabra de Jehová,
diciendo: Así ha dicho Jehová: Así haré podrir la soberbia de Judá, y la mucha soberbia de
Jerusalén. Este pueblo malo, que no quiere oír mis palabras, que anda en las imaginaciones de
su corazón, y que va en pos de dioses ajenos para servirles, y para postrarse ante ellos, vendrá a
ser como este cinto, que para ninguna cosa es bueno. Porque como el cinto se junta a los lomos
del hombre, así hice juntar a mí toda la casa de Israel y toda la casa de Judá, dice Jehová, para
que me fuesen por pueblo y por fama, por alabanza y por honra; pero no escucharon. Jeremías
13:1-11

1. Por parábolas y sueños

Vino a mí palabra de Jehová en el año noveno, en el mes décimo, a los diez días del mes,
diciendo: Hijo de hombre, escribe la fecha de este día; el rey de Babilonia puso sitio a Jerusalén
este mismo día. Y habla por parábola a la casa rebelde, y diles: Así ha dicho Jehová el Señor:
Pon una olla, ponla, y echa también en ella agua; junta sus piezas de carne en ella; todas buenas
piezas, pierna y espalda; llénala de huesos escogidos. Toma una oveja escogida, y también
enciende los huesos debajo de ella; haz que hierva bien; cuece también sus huesos dentro de
ella. Pues así ha dicho Jehová el Señor!:Ay de la ciudad de sangres, de la olla herrumbrosa cuya
herrumbre no ha sido quitada! Por sus piezas, por sus piezas sácala, sin echar suerte sobre
ella. Ezequiel 24:1-6

El profeta que tuviere un sueño, cuente el sueño; y aquel a quien fuere mi palabra, cuente mi
palabra verdadera. ¿Qué tiene que ver la paja con el trigo? dice Jehová. Jeremías 23:28

1. La misión del profeta:

Era tratar de promover un cambio. Ellos querían que el pueblo y la nación se volvieran de la
idolatría y maldad a las enseñanzas de la ley.

El ejemplo clásico fue Elías a quien Dios uso para sacar de la idolatría a Israel, quien influenciado
por el espíritu de Jezabel, se había ido con los baales y vivía un sincretismo marcado por una
doble vida, adorando a Baal y a Jehová.

El profeta además de advertir es un dirigente que marca pautas a seguir por la palabra de Dios,
también intercede, enseña, y aconseja. Y lo que es más importante, El profeta es uno que
permanece en los muros como vigía, o atalaya, como una torre puesta en un lugar alto para ver
lo que el Señor está haciendo y así poder llamar a la iglesia a actuar con denuedo.

Cuando se habla de la misión de Elías, Jesús comienza hablando de Juan el bautista, quien
predicaba a las orillas del Jordán. Y hace referencia a El en Mateo 11:7-15 hablando de la caña
sacudida por el viento y de un hombre que llevaba vestiduras delicadas. Pero enfatiza
preguntando si salieron a ver a un profeta , agregando que este hombre era más que un profeta y
se refiere a El como el mensajero que prepararía el camino del mesías.

Mientras se iban los discípulos de Juan, Jesús comenzó a hablarle a la multitud acerca de Juan:
«¿Qué salieron a ver al desierto? ¿Una caña sacudida por el viento? Si no, ¿qué salieron a ver?
¿A un hombre vestido con ropa fina? Claro que no, pues los que usan ropa de lujo están en los
palacios de los reyes. Entonces, ¿qué salieron a ver? ¿A un profeta? Sí, les digo, y más que
profeta. Éste es de quien está escrito: »”Yo estoy por enviar a mi mensajero delante de ti, el cual
preparará tu camino.” Les aseguro que entre los mortales no se ha levantado nadie más grande
que Juan el Bautista; sin embargo, el más pequeño en el reino de los cielos es más grande que
él.12 Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos ha venido avanzando
contra viento y marea, y los que se esfuerzan logran aferrarse a él. Porque todos los profetas y la
ley profetizaron hasta Juan. Y si quieren aceptar mi palabra, Juan es el Elías que había de
venir. El que tenga oídos, que oiga. Mateo 11:7-1 NVI

Leia en el libro de John Loren “La misión de Elías”, un comentario sobre la fortaleza de este
profeta de Dios, cuya vida contrastaba con la de las cañas sacudidas por el viento, que en la
mañana se erguían altas en medio de los rayos del sol, y durante el calor del día se hundían.
También el habla sobre la vestimenta de Juan y dice que el usaba un chaleco de pelo de camello,
con el lado suave hacia afuera y las cerdas punzantes hacia adentro.

Que queremos decir con todo esto, bueno jesus estaba hablando de un hombre con una misión
poderosa que nunca reflejo inestabilidad dando a entender que no era movido por vientos de
doctrina y astucia de los hombres, decidido a no ser derrotado por la oposición que había hacia
El, y nunca se levanto temblando cuando hubo amenazas, además quiso reflejar con su vida y
vestimenta la idea de sacrificio, mortificación y arrepentimiento.

Imaginémonos traer puesto un chaleco cuya parte interior estaba lleno de púas, cerdas que lo
mortificaban y le recordaba que el arrepentimiento , debía ser tal, el dolor de la púas del pelo del
camello, como el llamado al arrepentimiento por la aspereza de nuestros pecado contra la
naturaleza justa de Dios. Un pelo de camello exterior y uno interior que le pinchaba
profundamente hacia un continuo arrepentimiento. Esta era la misión de Juan, muy parecida a la
de Elías.

1. Características del profeta en el A.T:


2. Vivía una estrecha relación con Dios y era su confidente, veía al mundo y a su pueblo desde la
óptica de Dios y no del hombre.

En verdad, nada hace el Señor omnipotente sin antes revelar sus designios a sus siervos los
profetas. Amos 3:7 NVI

2. Era amigo de Dios y participaba con Dios en su sufrimiento por causa de los pecados del pueblo.
Experimentaba las mismas reacciones emocionales que experimentaba Dios

Pero yo estoy lleno de la ira del Señor, y ya no puedo contenerme. «Derrama tu ira sobre los
niños de la calle, sobre los grupos de jóvenes, porque serán apresados el marido y la mujer,
la gente madura y la entrada en años. Jeremías 6:11NVI

3. Amaba al pueblo de Dios y sufría con El. Quería lo mejor para ellos por eso advertia,consolaba
y daba esperanza
4. Se preocupaba por que el pueblo tuviera confianza en Dios y no en las cosas terrenales y
temporales. Animaba haciendo énfasis a vivir conforme al pacto

Pero ustedes sembraron maldad, cosecharon crímenes y comieron el fruto de la mentira, porque
confiaron en sus carros y en la multitud de sus guerreros. Un estruendo de guerra se levantará
contra su pueblo, y todas sus fortalezas serán devastadas, como devastó Salmán a Bet Arbel en
el día de la batalla, cuando las madres fueron destrozadas junto con sus hijos. Oseas 10:13-14
NVI

5. Era muy sensible ante el pecado y la maldad. No aceptaba nunca la crueldad, el delito, la
inmoralidad y la injusticia; Cero tolerancia ante la complacencia, la transigencia, los pretextos y
las excusas

¡Espántense, cielos, ante esto! ¡Tiemblen y queden horrorizados! —Afirma el Señor—. »Dos son
los pecados que ha cometido mi pueblo: Me han abandonado a mí, fuente de agua viva,
y han cavado sus propias cisternas, cisternas rotas que no retienen agua. Tu maldad te
castigará, tu infidelidad te recriminará. Ponte a pensar cuán malo y amargo es abandonar al
Señor tu Dios y no sentir temor de mí —afirma el Señor, el Señor *Todopoderoso—. Jeremías
2:12-13,19 NVI
6. Criticaba siempre la santidad superficial y trataba de estimular la obediencia a toda la palabra que
Dios había revelado en su ley. No le gustaba las medias tintas, exigía total fidelidad a Dios
7. Tenía una visión para el futuro con predicciones de juicio y destrucción así como de restauración
y renovación

Por eso, así dice el Señor Todopoderoso: “Voy a castigarlos. Los jóvenes morirán a filo de
espada, y sus hijos y sus hijas se morirán de hambre. 23 No quedará ni uno solo de ellos. En el año
de su castigo haré venir una calamidad sobre los hombres de Anatot.” » Jeremías 11:22-23

8. Era un hombre triste y solitario, perseguido siempre por los falsos profetas que estaban
mintiendo, profetizando paz, prosperidad, y seguridad para el pueblo pecador
9. Características del profeta en el N.T
10. Proclamaban e interpretaban la palabra de Dios, y eran llenos del Espiritu Santo, llamados por
Dios para exhortar, animar, edificar y consolar

Entonces Pedro, con los once, se puso de pie y dijo a voz en cuello: «Compatriotas judíos y todos
ustedes que están en Jerusalén, déjenme explicarles lo que sucede; presten atención a lo que les
voy a decir.15 Éstos no están borrachos, como suponen ustedes. ¡Apenas son las nueve de la
mañana! En realidad lo que pasa es lo que anunció el profeta Joel: »”Sucederá que en los
últimos días —dice Dios—, derramaré mi Espíritu sobre todo el género humano. Los hijos y las
hijas de ustedes profetizarán, tendrán visiones los jóvenes y sueños los ancianos. En esos días
derramaré mi Espíritu aun sobre mis *siervos y mis siervas, y profetizarán. Arriba en el cielo y
abajo en la tierra mostraré prodigios: sangre, fuego y nubes de humo. El sol se convertirá en
tinieblas y la luna en sangre antes que llegue el día del Señor, día grande y esplendoroso. Y
todo el que invoque el nombre del Señor será salvo.”Hechos 2:14-21 NVI

2. Ejercían el don de profecía


3. Hablaban con franqueza y visión, mostrando valor en lo moral con un inquebrantable compromiso
por la palabra. , influían sobre los que les rodeaban con un espíritu positivo de justicia social y
espiritual
4. Proclamaban la voluntad de Dios y la exhortación y el estimulo del pueblo de Dios a la justicia, la
fidelidad y la paciencia. Dicha proclamación no debía ser primordialmente la predicción del futuro.

Recordemos:

El profeta Del Nuevo Testamento, no es hacedor de Milagros, ni sanador ni maestro,


ni evangelista; no está en el foco central. Es el capacitador de la bujía que pone en marcha a
otros. Por ejemplo, la obra de Juan el Bautista estuvo oculta en el desierto y se hizo en ayuno y
en lo escondido para que otros pudieran brillar. El fue el intercesor desde el desierto desolado
para que las puertas de las cárceles interiores pudieran abrirse y otros llegaran a Jesús.

El profeta del N.T es el grifo del agua del favor de Dios. Según el mandato del padre, el profeta
abre o cierra el grifo de vida. Las reservas de los Ríos de gracia están en sus manos.
Vida, contexto histórico, entorno
del profeta Elías
1. Introducción

Elías ‫ אֵ ִליָּהו‬ēliyahū “Dios es el señor” o “Mi Dios es Jehová”, “Yah es él” o “Jehová es mi Dios”.
Elías profeta de Israel. Su nombre aparece en el Antiguo Testamento en hebreo como
eµléÆyyaÆhuÆ y eµléÆyyaÆ, en griego como leiou, y en el Nuevo Testamento como Åleias.

Fue un profeta relevante que vivió en el siglo IX a. C. De él hablan los capítulos 17 a 21 de 1a


Reyes y los capítulos 1ª y 2ª de Reyes. Según 1ª Reyes 17:1 y 2ª Reyes 1:8 era oriundo de
Tishbé (de ahí el prefijo, el tisbita como se le conoce en la Biblia, versión de Cipriano de Valera)
en la región de Galaad, al oriente del río Jordán.

Aunque Elías residía en Galaad, el lugar de su nacimiento era otro (quizás Tisbé de Neftalí). La
Septuaginta tiene en sus registros el nombre ek thesboµn teµs galaad, lo que indica Tisbé de
Galaad. Tradicionalmente se lo ha considerado como un lugar ubicado a unos 13 kilómetros al
norte del Jaboc. Lo que podemos afirmar es que Elías fue, uno de los más grandes profetas que
Dios levanto en la antigüedad, y su espíritu y fervor son dignos de imitar, pero difíciles de
comparar e igualar. No existe información sobre su origen. Esta referencia, incluso, es oscura.

El nombre de Elías que significa “El Señor es mi Dios”, representa la firme convicción de la vida
de Elías. Este profeta se concentro alrededor del conflicto entre la adoración al Señor y la
adoración a Baal. Su misión era hacer que los Israelitas se dieran cuenta de su apostasía y
llamarlos a que volvieran a la fidelidad al Dios de Israel. Por ello Elías fue un restaurador y
reformador que procuro restablecer el pacto. El A.T termina con la profecía de que Elías
aparecería otra vez

He aquí, yo os envío el profeta Elías, antes que venga el día de Jehová, grande y
terrible Malaquías 4:5

Esta profecía se cumplió parcialmente en la aparición de Juan el Bautista y pudiera tener un


futuro cumplimiento antes de la venida de Cristo, y algunos estudiosos de la palabra y
particularmente escatologos creen que serán dos personajes que aparecerán y por tres años y
medio predicaran el evangelio y neutralizaran las señales y maravillas de los profetas del
anticristo.

Entonces Jesús se acercó y los tocó, y dijo: Levantaos, y no temáis. Y alzando ellos los ojos, a
nadie vieron sino a Jesús solo. Cuando descendieron del monte, Jesús les mandó, diciendo: No
digáis a nadie la visión, hasta que el Hijo del Hombre resucite de los muertos. Entonces sus
discípulos le preguntaron, diciendo: ¿Por qué, pues, dicen los escribas que es necesario que
Elías venga primero? Respondiendo Jesús, les dijo: A la verdad, Elías viene primero, y
restaurará todas las cosas. Mas os digo que Elías ya vino, y no le conocieron, sino que hicieron
con él todo lo que quisieron; así también el Hijo del Hombre padecerá de ellos. Entonces los
discípulos comprendieron que les había hablado de Juan el Bautista. Mateo 17:7-14

Y daré a mis dos testigos que profeticen por mil doscientos sesenta días, vestidos de cilicio. Estos
testigos son los dos olivos, y los dos candeleros que están en pie delante del Dios de la tierra. Si
alguno quiere dañarlos, sale fuego de la boca de ellos, y devora a sus enemigos; y si alguno
quiere hacerles daño, debe morir él de la misma manera. Estos tienen poder para cerrar el cielo,
a fin de que no llueva en los días de su profecía y tienen poder sobre las aguas para convertirlas
en sangre, y para herir la tierra con toda plaga, cuantas veces quieran. Apocalipsis 11:3-6

1. Su Ministerio

El ministerio profético de Elías está registrado en 1ª Reyes 17–19; 21; 2ª Reyes 1–2. Estas
narraciones están escritas en el hebreo clásico más puro “de un tipo que difícilmente pueda
encontrarse después del siglo VIII” No podrían haber durado mucho tiempo en forma oral.
Describen su ministerio en el reino del norte durante la dinastía de Omri.

Se pueden hacer dos observaciones sobre la importancia de Elías. Primero, que sigue la tradición
veterotestamentaria de la profecía extática que proviene de los días de Samuel, y segundo que es
un precursor de los rapsodistas o profetas escritores del siglo VIII. Su nexo con la tradición
anterior se ve en que, en primer lugar, es un hombre de acción, y sus movimientos determinados
por el Espíritu Santo desafían la predicción humana.

En el fondo de la obra de Elías siguen existiendo las escuelas proféticas de la época de Samuel.
Su nexo con los profetas posteriores se basa en su constante esfuerzo por hacer volver a su
pueblo a la religión de Moisés, tanto en la adoración de Jehová como único Dios, como en la
proclamación del modelo mosaico de justicia para la comunidad. Esta defensa de la fe mosaica
por parte de Elías se apoya en varios detalles que sugieren un paralelo entre Elías y Moisés.

En los tiempos del Profeta Elías, el pueblo hebreo que habitaba en el reino de Israel, comenzó a
apartarse de la fe y a venerar a los dioses paganos, como Baal y otros más. Durante el reinado
de Acab (877-854 antes de Cristo), Elías sintió el llamado a servir a Dios como su Profeta y se
convirtió en un ferviente defensor de la verdadera Fe.

Así, el profeta Elías trató de convencer al impío rey Acab a rechazar a los ídolos y dirigirse al
verdadero Dios, pero el rey no lo escuchó.

Elías tras su victoria, huye por temor a la venganza de Jezabel y se adentra en el desierto,
deseándose la muerte. Sin embargo, después que el Ángel de Jehová le da de comer y beber se
sintió reconfortado y anduvo hasta el monte Horeb, donde se escondió en una cueva.

En medio de una depresión el profeta, ora a Jehová y manifiesta su exceso de celo en su misión,
Dios se le manifiesta y le apoya presentándose como una voz apacible y suave tras vientos,
temblores y un fuego y le da nuevas misiones, señalando a Eliseo como su sucesor.

La maldad de Acab y Jezabel enfrentada por Elías no se limitaba al culto de Baal, sino que se
proyectaba en el despojo de sus súbditos. El episodio de la viña de Nabot es representativo de la
repetida historia del despojo de las tierras de los campesinos por los gobernantes y grandes
propietarios. 1Reyes 21

Otros profetas se referirían a estas situaciones: Elías expresa la sentencia divina contra Jezabel y
contra la descendencia de Acab. Derrotado y muerto éste en combate con las tropas del rey
de Aram, a pesar de los buenos augurios de los falsos profetas, le sucedió su hijo Ocozías, que
anduvo por el camino de su padre y de su madre e hizo pecar a Israel y murió pronto.

!!Ay de los que juntan casa a casa, y añaden heredad a heredad hasta ocuparlo todo! ¿Habitaréis
vosotros solos en medio de la tierra? Isaías 5:8
Codician las heredades, y las roban; y casas, y las toman; oprimen al hombre y a su casa, al
hombre y a su heredad. Miqueas 2:2.

Tras la muerte de Ocozías, (852 a. C.) Dios traspasa el oficio de profeta a Eliseo, Elías es
arrebatado en un carro de fuego con caballos de fuego a la vista de Eliseo. Eliseo toma el manto
de Elías y es de este modo reconocido por Jehová como su profeta. 2ª Reyes 2:1-13

Muchos creyeron que Juan el Bautista era Elías que vino a preparar su camino. De hecho para
reforzar esta misión, el propio Juan vestía como Elías. Los Evangelios sinópticos, en un pasaje
que se conoce como la Transfiguración, muestran a Elías y Moisés hablando con Jesús.

Mientras ellos se iban, comenzó Jesús a decir de Juan a la gente: ¿Qué salisteis a ver al
desierto? ¿Una caña sacudida por el viento? ¿O qué salisteis a ver? ¿A un hombre cubierto de
vestiduras delicadas? He aquí, los que llevan vestiduras delicadas, en las casas de los reyes
están. Pero ¿qué salisteis a ver? ¿A un profeta? Sí, os digo, y más que profeta. Porque éste es
de quien está escrito: He aquí, yo envío mi mensajero delante de tu faz, El cual preparará tu
camino delante de ti. De cierto os digo: Entre los que nacen de mujer no se ha levantado otro
mayor que Juan el Bautista; pero el más pequeño en el reino de los cielos, mayor es que él.
Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los
violentos lo arrebatan. Porque todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan. Y si queréis
recibirlo, él es aquel Elías que había de venir. El que tiene oídos para oír, oiga. Mateo 11:7-15

1. Eventos en su vida (Ciclos)

La vida de Elías presenta seis ciclos o eventos, que son:

1. Su predicción de sequía y su posterior huida


2. El encuentro en el monte Carmelo
3. La huida a Horeb
4. El incidente de Nabot
5. El oráculo acerca de Ocozías
6. Su traslado o arrebatamiento.

Con excepción del último, todos se refieren básicamente al choque entre la adoración a Jehová o
a Baal.

Evento # 1: Elías aparece sin introducción, y después que hizo llegar a Acab el oráculo
anunciándole una sequía se aleja de la jurisdicción de este rey, primero al uadi Querit, al este;
elohísta del Jordán, y de allí a Sarepta (la actual Sarafend debajo de Sidón todavía preserva el
nombre y domina las ruinas de este antiguo puerto sobre el Mediterráneo) 1ª Reyes 17

Evento #2: La tradición judía, narra el cese de la sequía una vez eliminado el culto a Baal en el
monte Carmelo. La sequía impuesta y retirada por la palabra de Jehová fue un reto a la soberanía
de Baal sobre la naturaleza. Elías pone de manifiesto el desafío, y la supremacía de Jehová y
queda espectacularmente demostrada. El culto a Baal en el monte Carmelo no fue totalmente
exterminado. 1ª Reyes 18:1; Lucas 4.25; Santiago 5:17,

Evento #3. Se describe la huida de Elías a Horeb a fin de librarse de la ira de Jezabel, es
particularmente significativo. Horeb (Sinai) era el monte sagrado en el que se manifestó el Dios
del pacto de Moisés, y el viaje de Elías a este lugar representa el retorno de un profeta leal, pero
descorazonado, a la fuente misma de la fe por la cual había luchado. Aparentemente la comisión
final fue sólo parcialmente cumplida por Elías. 1ª Reyes 19; 19:15–18
Evento #4: Se describe el incidente de Nabot el cual ilustra y justifica el principio arraigado en la
conciencia religiosa de Israel, que consideraba que la tierra que poseía una familia o clan israelita
era un don de Jehová, y que no reconocerlo y no respetar los derechos del individuo y la familia
en el seno de la comunidad del pacto traería como consecuencia el juicio. Elías surge como el
campeón de las poderosas demandas éticas de la fe mosaica que tan significativamente faltaban
en el culto a Baal. 1ª Reyes 21

Evento #5: Continúa ilustrando el choque entre Jehová y Baal. La dependencia de Ocozías del
dios de la vida de Siria, Beelzebú (Beel-zebul en los textos de Ras Shamra), que significa “Señor
de las moscas”, probablemente fuera una forma de ridiculizar a la deidad siria, provoca el juicio de
Dios. Un juicio de fuego también cae sobre los que trataron de resistir la voz de Jehová atacando
a su profeta 2ª Reyes 1:1-5; 2ª Reyes 1:6-16; 2ª Reyes. 1:9–15.

Evento #6: Describe el arrebatamiento de Elías en un torbellino le da un toque dramático al final


de su espectacular carrera profética. 2ª Reyes 2:12; 2ª Reyes 13:14

El relato del arrebatamiento reproduce este modelo con bastante precisión. También el hecho de
que Dios responde a Elías con fuego en dos ocasiones parece llevarnos de vuelta a la exhibición
de la presencia y el juicio de Dios en el fuego en las narraciones del Éxodo. No es de extrañar,
entonces, que en el pensamiento judío se considere a Elías como el equivalente de Moisés. En
segundo lugar, se habla de que su ministerio había de ser restablecido “antes que venga el día de
Jehová, grande y terrible”, era un tópico común de discusión durante el ministerio de Jesús

Ellos respondieron: Unos, Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, alguno de los profetas Marcos
8:28

Su vida de profeta finalizó en una manera extraordinaria: fue llevado al cielo en una carroza de
fuego, Fue el profeta Elíseo quien presencio este hecho y recibió la capa de Elías con la cuál
realizó el primer milagro. El profeta Elías permanece ahora en el cielo, en alma y cuerpo, igual
que el antepasado Enoc quien también fue llevado vivo al cielo en alma y cuerpo,

Y aconteció que yendo ellos y hablando, he aquí un carro de fuego con caballos de fuego apartó
a los dos; y Elías subió al cielo en un torbellino. 2ª Reyes 2:11

Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque le llevó Dios. Génesis 5:24.

Mediante los grandes Milagros que realizó, Elías ayudó al restablecimiento de la verdadera Fe en
Dios dentro del pueblo Israelita y de esta forma destruyó la idolatría. Por medio de estos hechos,
preparó la llegada del Salvador del mundo. La ferviente defensa de la verdadera fe, la absoluta
obediencia a la voluntad de Dios, la pureza y la castidad de su vida, la dedicación a la oración y a
la contemplación de los misterios divinos, son las cualidades que distinguen a este gran profeta.
Sus contemporáneos, viendo sobre él la bendición de Dios, lo llamaban “El hombre de Dios”

El título o nombre Elías en las escrituras también se emplea de diversas maneras, por ejemplo:
Elías el Profeta, Precursor: En este caso Elías es un título que se da a aquel que es un precursor,
como por ejemplo, Juan el Bautista, quien fue enviado a prepara el camino para Jesús.
Restaurador: También se aplica a personas por motivos de las misiones particulares que habrían
de cumplir. Elías, en la tradición judía es esperado aún en los hogares en las festividades de
Pascua y se le reserva un asiento en la mesa.
Un Reino perdido por la idolatría
1. Introducción

Primera Y segunda de reyes es una historia completa de cómo se perdió un reino. Dios llamó y
apartó a la nación de Israel, escogiéndola como su propio pueblo y dándole una identidad. Lo que
sucedió en este país es una imagen de lo que está sucediendo en el curso de toda la historia
humana y lo que pasa, de manera individual, en nuestras vidas.

En la Biblia hebrea los libros de 1ª y de 2ª de Reyes son un solo libro. Se les llama
apropiadamente Reyes por el hecho de que relata las vidas de varios gobernantes, comenzando
por Saúl y David, hasta la división del reino bajo Roboam, el hijo de Salomón. Estos dos libros
siguen el curso de las diversas dinastías en Israel, el reino del norte, y la única dinastía de la casa
de David en el reino del sur de Judá.

El carácter del reino se decidía por el carácter del rey. Cuando el rey andaba en obediencia y
humildad, adorando y obedeciendo a Dios, la bendición de Dios, se manifestaba en forma de
prosperidad y de victoria. En cada uno de estos casos, el enfoque era el rey, y lo que El hacía y
la relación que tenia con Dios.

Las lluvias caían a su debido tiempo, crecía la cosecha y florecía la economía de la tierra.
Obtenían la victoria sobre sus enemigos, incluso cuando estos se aliaban en su contra,
consiguiendo siempre la victoria cuando el rey caminaba con Dios.

Pero cuando el rey desobedecía y adoraba a otros dioses, de inmediato había hambre, sequias, e
invasiones y la tierra padecía situaciones muy difíciles y graves. Los reyes que obedecían eran
siempre figuras de Cristo, como en el caso de David, Salomón, Ezequías, Joas y Josafat.

Dios escogió a Israel, que no ocupó un lugar destacado ni obtuvo el favor de Dios gracias a sus
propios esfuerzos porque fue Dios el que escogió a esta nación. El fue quien la formó, la moldeó y
produjo una nación que habría de convertirse en un símbolo para el mundo de lo que Dios está
dispuesto a hacer en cualquier vida en particular

Desde sus comienzos, hubo dos divisiones en la monarquía. David durante los primeros siete
años solo fue rey de Judá y fue hasta después de siete años cuando se convirtió en rey sobre
ambas divisiones de la nación. La división entre las diez tribus en el norte y las dos tribus de Judá
y Benjamín en el sur, donde estaba Jerusalén, existió desde el principio.

La influencia de ese pequeño reino se extendió hasta los últimos rincones de la tierra, pero ellos
caminaron en desobediencia rechazando la soberanía de Dios. Salomón, el hijo de David,
introdujo el principio que fue el origen en la corrupción del reino, enamorándose de la hija del
faraón de Egipto.

Había algo malo en esto, su padre era el rey de Egipto, el lugar en el que Dios, redimió a su
pueblo. (Egipto representa siempre en las Escrituras una figura o una imagen del atractivo que
tiene el mundo para el corazón humano.)

Cuando Salomón llevó a la hija del faraón a su palacio, se crearon alianzas con otros pueblos
alrededor de Israel y como consecuencia matrimonios con mujeres idolatras y juntamente con
ellas sus ídolos, quienes lo separaron de su Dios y lo sedujeron , haciendo que su corazón se
alejase del templo, donde debía haberse centrado su alabanza
Seguidamente, Roboam, su hijo, dividió el reino, de modo que las diez tribus del norte fueron
separadas de las otras dos tribus y se estableció un reino aparte en el norte, que fue gobernada
por Jeroboan, por designio de Jehová. A partir de ese momento estos dos reyes, David y
Jeroboam, se convierten en los representantes de los dos principios espirituales que se siguen en
los dos reinos y se convierten en la vara de medir de los reyes que les sucedieron. 1ª Reyes
11:28-40

Leemos una y otra vez en estos libros acerca de un rey que o bien seguía en los caminos de
David, su padre, sirviendo al Señor su Dios, derrumbando todos los ídolos y eliminando la
adoración falsa y abominable en la que había caído Israel, o seguían los caminos de Jeroboam,
hijo de Nabat, que fue el causante de que Israel se prostituyese tras los dioses que El había
establecido.

En esos momentos no había en Israel, el reino del norte, reyes santos. No había más que una
continua sucesión de reyes que asesinaban a sus predecesores con el fin de quedarse con el
trono, pero de vez en cuando; intervenía Dios en su gracia enviando a profetas, en un esfuerzo
por detener la caída del reino del norte. En Judá, el reino del sur, había unos cuantos reyes
santos y estos reyes se destacan como luces en medio de la oscuridad, siendo ellos como
ejemplo: Josafat, Joas, Ezequías y Josías.

Durante todo ese tiempo de decadencia Dios realizó varios esfuerzos por acabar con la
corrupción y la decadencia del reino, que dependían principalmente del ministerio de Elías y de
Eliseo. Los libros de los Reyes son especialmente notables por el ministerio de estos dos
poderosos profetas de Dios.

1. Reyes y profetas

Pregúntese ahora, después de afirmar esta historia de 1a y 2a reyes, ¿que tuvo que ocurrir para
que dos profetas del tiempo de Elias y Eliseo sean considerados y mencionados en dos libros
dedicados casi exclusivamente a los reyes de Judá e Israel?

La historia del profeta Elías ocupa cuatro capítulos en el primer libro de los Reyes y dos en
segundo: 1ª Reyes capítulos 16 al 21; 2ª Reyes capítulos 1 y 2. En la Biblia de los cristianos, los
libros de los reyes se les llaman libros históricos, pues cuentan la historia de los reyes. Pero
preguntémonos, ¿que hace un profeta en medio de reyes? ¿Cómo es que Elías, el defensor de
los pequeños fue a parar en medio de la historia de los grandes?

En la Biblia de los judíos, los libros de los reyes tiene otro nombre, a saber: Libros proféticos o
mas bien profetas anteriores. Para ellos la finalidad de estos libros no es informar al pueblo lo que
hacían los reyes, sino que su finalidad es formar y enseñar al pueblo a leer la historia de los
reyes con los ojos de un profeta. Pregúntate: ¿Ya intentaste leer la historia con los ojos de un
profeta?

El lenguaje de estos seis capítulos sobre la historia de Elías, es simple y profunda. Es un lenguaje
popular, son historias contadas por el pueblo, con un significado profundo, pues su sentido va
más alla de la simple letra.

Dios no le habló nunca a la nación por medio de un rey sino que usó al rey para gobernar, para
controlar y para administrar justicia. La vida y el carácter del reino eran debidos al carácter
reflejado por el rey. Cuando Dios quería hablarle a la nación, enviaba a un profeta. Oseas, Amós,
Joel, Isaías y Jeremías también fueron profetas que llevaron a cabo su ministerio en estos reinos,
pero los únicos que aparecen en 1ª y 2ª de Reyes son Elías y Eliseo.
Elías tenía una fuerte personalidad y vivía llevando un cinto de cuero y vestía de tela de camello.
Era una persona que llevaba el pelo ralo, de aspecto sucio y debía tener aspecto de ser un
personaje enérgico y duro. Se encontró una y otra vez, cara a cara con el rey con el propósito de
transmitirle un mensaje de juicio y su vida estuvo en peligro en muchas ocasiones, pero era un
hombre fiel y Dios le protegía.

Él solo, desafío el poder de Baal y les reto a someterse a una prueba para ver quien conseguía
que descendiese fuego del cielo y elimino a cuatrocientos sacerdotes que promovían esta
abominable adoración 1ª Reyes 18:20

El ministerio de Elias era un ministerio de Amor, Fuego y Juicio. Cuando Elías fue transportado
al cielo en un carro de fuego, su manto cayó sobre Eliseo. En contraste con Elías, el ministerio de
Eliseo era un ministerio de Gracia, de Dulzura y de Gloria por todo Israel. ¿A qué se debía esto?
Si estudia usted lo que dice detenidamente verá que estos dos hombres juntos son una figura del
ministerio de Jesucristo.
El Ministerio profético de Elías
1. Introducción

El capítulo 17 de Primera de Reyes, nos presenta el ministerio profético de Elías en el reino del
norte, durante los reinados de Acab y su hijo Ocozias. El nombre Elías, que significa “El Señor es
mi Dios”, representa la firme convicción de la vida de Elías.

Y acercándose Elías a todo el pueblo, dijo: ¿Hasta cuándo claudicaréis vosotros entre dos
pensamientos? Si Jehová es Dios, seguidle; y si Baal, id en pos de él. Y el pueblo no respondió
palabra. Viéndolo todo el pueblo, se postraron y dijeron!:Jehová es el Dios, Jehová es el Dios! 1ª
Reyes 18:21,39

Hubo otros profetas antes de él, pero no realizaron milagros. Elías comienza el ministerio de los
milagros en la Biblia. Los profetas que llevaron a cabo su ministerio en Judá, el Reino del Sur, no
hicieron milagros porque en aquel entonces el testimonio de Dios era lo más importante para la
vida de la nación, pero en Israel, el Reino del Norte, la presencia de Dios fue rechazada y
adoraron en su lugar los becerros de oro.

En este caso el ministerio de los milagros es el testimonio ante el pueblo de que Dios sigue
obrando entre ellos. Dios intentó advertirles y reaccionaran de qué se habían apartado de él. El
ministerio de Elías es una revelación de la forma cómo Dios trata con aquellos que se han
apartado de Él. Para comenzar su ministerio, cerró los cielos, de manera que no llovió sobre la
tierra durante tres años.

En seguida, hizo descender fuego del cielo sobre los dirigentes y otros, que habían sido enviados
para arrestarle y traerle ante la presencia del rey. Cuando estos milagros empezaron a llamar la
atención del pueblo, se produjo el arrepentimiento, hasta cierto punto. Entendieron que Dios
estaba actuando con mano dura, como lo hace en ocasiones con nosotros, a fin de que
despertemos y nos demos cuenta de que nos estamos apartando de la adoración a él.

Ee produjo por fin el juicio a Baal, y las dos filosofías de Israel chocaron en una confrontación que
tuvo lugar en el Monte Carmelo. Dios los honro enviando fuego del cielo para destruir la ofrenda
de Elías, incluyendo toda el agua que fue derramada sobre la ofrenda y el altar de piedra y Dios
reinó con gran poder. Cuando cayó dicho juicio, se volvieron a abrir los cielos y la lluvia cayó
sobre la tierra.

Todo ello es una imagen de lo que sucede en nuestras vidas cuando nos resistimos al derecho
que tiene Dios a gobernar nuestros corazones. Entonces Dios nos somete a disciplina y, por fin,
vence nuestra rebeldía, y somos humillados. Entonces es cuando la lluvia de Dios se derrama en
nuestros corazones para dar nuevamente fruto y traer bendición.

Por eso las historias de Elías sirven como base para que el pueblo pueda discernir entre los
verdaderos y los falsos profetas.

Pasando a otro punto, nos encontramos con el extraordinario relato del temor que le tenía Elías a
Jezabel. Esto es algo que llama la atención. Aquí tenemos a un intrépido profeta, un vigoroso
hombre de Dios que se había enfrentado él solo con cuatrocientos sacerdotes sobre la cima de la
montaña, corriendo aterrorizado de una mujer enfurecida, clamando mientras se oculta bajo un
arbusto : “Señor, ya he tenido bastante. Ya tuve más que suficiente al tener que enfrentarme con
cuatrocientos sacerdotes de Baal, como para que esta mujer venga tras de mí, esto ya es
demasiado.
Ella estaba amenazando su vida. Esto resulta divertido porque Elías dice: “Señor, ya he tenido
suficiente, quítame la vida, pero como es natural eso no lo dice en serio. Todo lo que hubiera
tenido que hacer hubiera sido salir a buscar a Jezabel y ella hubiera satisfecho su deseo. Pero en
lugar de ello, se oculta bajo el árbol, a pesar de lo cual Dios le trata con su gracia maravillosa.

Lo primero que hace es concederle una buena noche de descanso y a continuación Dios le ofrece
una buena comida. Finalmente Dios le enseña el secreto más importante que jamás había
aprendido Elías, que Dios no siempre se manifiesta a través del terremoto, del fuego y del trueno,
sino que en muchas ocasiones lo hace a través del silbo apacible y tranquilo de una conciencia
transformada.

El libro termina con la historia del rey Acab, su fracaso, su insensatez y su deseo egoísta de
apoderarse de la viña de Nabot, haciendo que caiga el juicio de Dios. En el capítulo 22 nos
enteramos de cómo obra Dios por medio de lo que parecen circunstancias accidentales. Los dos
reyes, el de Israel y el de Judá, salen al campo de batalla. Acab, rey de Israel, intenta conseguir,
en su endiablada sabiduría, que el rey de Judá se coloque en la primera línea del campo de
batalla.

Acab le pone al rey de Judá su propia armadura para que le confundan con el rey de Israel y le
ataquen, pero ya Dios tenía preparado juicio para este malvado rey y voló una flecha por el aire
(por casualidad) de un guerrero del lado contrario y encuentra su objetivo, atravesando la
armadura y dándole de lleno en el corazón.

Al concluir este libro de 1ª de Reyes, el versículo que debe quedar grabado en nuestra mente y
en nuestro corazón es éste:

“Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón porque de él emana la vida.” Proverbios. 4:23

Las circunstancias exteriores no deben nunca impedir que reinemos sobre nuestra vida. Nada de
lo que tengamos que afrontar, en cuanto a tensiones externas y circunstancias del exterior,
conseguirán hacernos sucumbir. No debemos permitir volver a encontrarnos sometidos a
esclavitud y atado por la carne y el demonio. Será algo que solo sucederá si permitimos que
“otros dioses” se apodere de nuestro corazón y destronen a Dios. Cuando nuestras emociones
se encariñen con alguna otra cosa, que rivalice con la adoración a Dios, nuestros días en el reino
estarán contados.

1. El llamado de un profeta

Al principio de la historia del pueblo de Dios no tenía muy claro lo que era un profeta. Habían
profetas para todo, y no solo en el pueblo de Dios, sino también en otros pueblos. El profeta era
una figura común de la cultura de aquel tiempo.

Al principio, tanto en Israel como en otros pueblos, los profetas eran grupos religiosos de artistas
y cantantes, videntes y poetas, hombres carismáticos, quienes ayudados por instrumentos
musicales, entraban en trance colectivo y bailaban. Nadie se resistía, todos participaban. Eran
grupos muy populares. Y el pueblo los asociaba con las divinidades. Por eso eran consultados
para resolver los problemas como decir: Salud, falta de agua.

Después de esto llegarás al collado de Dios donde está la guarnición de los filisteos; y cuando
entres allá en la ciudad encontrarás una compañía de profetas que descienden del lugar alto, y
delante de ellos salterio, pandero, flauta y arpa, y ellos profetizando. Y cuando llegaron allá al
collado, he aquí la compañía de los profetas que venía a encontrarse con él; y el Espíritu de Dios
vino sobre él con poder, y profetizó entre ellos. 1ª Samuel 10:5,10
Los profetas eran los consejeros del pueblo, llamados videntes, y estos grupos eran consultados
por los reyes y por los políticos. Con el apoyo de un profeta era más fácil llevar al pueblo a
obedecer al gobierno y a cumplir las órdenes. Asi se hace hoy, los políticos y los hombres de
poder, buscan el apoyo de la religión; ven y oyen programas religiosos, viajan a Roma, van cinco
veces por semana a la iglesia.

Saúl, David y Salomón, surgen cada cual en su tiempo, con el apoyo de un profeta. Hasta el
mismo rey Jeroboan, tan criticado posteriormente por los propios profetas, tiene el apoyo del
profeta para realizar la separación entre los reinos de Israel y Judá.

Entonces todos los ancianos de Israel se juntaron, y vinieron a Rama para ver a Samuel, y le
dijeron: He aquí tú has envejecido, y tus hijos no andan en tus caminos; por tanto, constitúyenos
ahora un rey que nos juzgue, como tienen todas las naciones 1ª Samuel 8:4-5

Tomando entonces Samuel una redoma de aceite, la derramó sobre su cabeza, y lo besó, y le
dijo: ¿No te ha ungido Jehová por príncipe sobre su pueblo Israel? Y Samuel dijo a todo el
pueblo: ¿Habéis visto al que ha elegido Jehová, que no hay semejante a él en todo el pueblo?
Entonces el pueblo clamó con alegría, diciendo!:Viva el rey! 1ª Samuel 10:1,24

Nadie porque lo quiera o lo desee puede convertirse en profeta. Uno no puede heredar el manto
de profeta, no puede ser dado por una persona a otra, aunque un individuo puede ser el
instrumento del Señor para tal cosa, como lo fue Elías con Eliseo. No hay modo que un individuo
pueda convertirse en profeta por medio de la carne.

”Porque muchos son los llamados y pocos los escogidos” Mateo 22:14

Nadie puede acudir a Dios en su propio momento, no puede hacerlo. Acudimos a Dios cuando El
nos llama, o no acudimos en absoluto, somos nacidos de Nuevo del Espíritu, no por ningún
hombre. Si lo escogemos a El, lo hacemos solamente cuando El nos ha escogido y llamado. Tal
elección es mucho más difícil para el profeta. Un individuo no solo no puede convertirse en
profeta a menos que Dios lo llame, sino que puede convertirse en profeta solo al responder en
obediencia cuando El le llama, como El le llama, y en un reconocimiento confirmado dentro del
cuerpo de Cristo.

Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a
las naciones. Y yo dije! Ah!!!Ah, Señor Jehová! He aquí, no sé hablar, porque soy niño. Jeremías
1:5-6

Entonces, el candidato llamado por Dios será formado y su formación será como ninguna otra.
Probablemente le serán necesarios no menos de doce años, Pablo paso catorce años de
disciplina y formación

Después, pasados catorce años, subí otra vez a Jerusalén con Bernabé, llevando también
conmigo a Tito. Gálatas 2:1

El llamado a un profeta es dado solamente por el Señor. Fue su Espíritu Santo quien llamo
y hablo por medio de cada profeta del Antiguo Testamento; siguió siendo igual en los tiempos del
Nuevo testamento y sigue siendo así en la actualidad, aunque existe una diferencia.

Ahora el llamado del profeta debe ser independientemente confirmado por el Señor por medio del
cuerpo, la iglesia, y ese cuerpo debe sostener y mantener al profeta tanto en su formación como a
lo largo de su ministerio, cosa que no se hacia en el Antiguo Testamento.
El profeta del A.T estaba por encima de todos los demás. El profeta del N.T no solo es llamado
dentro del cuerpo, sino que también todo el cuerpo se basa sobre el fundamento de apóstoles y
profetas

Edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo
Jesucristo mismo, Efesios 2:20

1. Manera del llamado

Los profetas son llamados de muchas maneras diferentes, en momentos diferentes, y bajo
circunstancias diferentes:

“Era Moisés de edad de ochenta años, y Aarón de edad de ochenta y tres, cuando hablaron a
Faraón” Éxodo 7:7

“Y era Abram de edad de setenta y cinco años cuando salió de Haran” Génesis 12:4

Samuel sin embargo era solo un niño que dormía sobre el piso del templo cuando Dios lo llamo:

El joven Samuel ministraba a Jehová en presencia de Elí; y la palabra de Jehová escaseaba en


aquellos días; no había visión con frecuencia. Y aconteció un día, que estando Elí acostado en
su aposento, cuando sus ojos comenzaban a oscurecerse de modo que no podía ver, Jehová
llamó a Samuel; y él respondió: Heme aquí. Y corriendo luego a Elí, dijo: Heme aquí; ¿para qué
me llamaste? Y Elí le dijo: Yo no he llamado; vuelve y acuéstate. Y él se volvió y se acostó. Y
Jehová volvió a llamar otra vez a Samuel. Y levantándose Samuel, vino a Elí y dijo: Heme aquí;
¿para qué me has llamado? Y él dijo: Hijo mío, yo no he llamado; vuelve y acuéstate. Y Samuel
no había conocido aún a Jehová, ni la palabra de Jehová le había sido revelada. Jehová, pues,
llamó la tercera vez a Samuel. Y él se levantó y vino a Elí, y dijo: Heme aquí; ¿para qué me has
llamado? Entonces entendió Elí que Jehová llamaba al joven. Y dijo Elí a Samuel: Ve y
acuéstate; y si te llamare, dirás: Habla, Jehová, porque tu siervo oye. Así se fue Samuel, y se
acostó en su lugar. 1a Samuel 3:1-10

Jeremías no solo era un niño sino que también fue llamado y ordenado desde antes de su
concepción:

Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a
las naciones. Y yo dije! Ah!!!Ah, Señor Jehová! He aquí, no sé hablar, porque soy niño. Jeremías
1:5-6

Juan el Bautista fue anunciado antes de su Concepción, y fue también lleno del Espíritu Santo
desde su nacimiento

Pero el ángel le dijo: Zacarías, no temas; porque tu oración ha sido oída, y tu mujer Elisabeth te
dará a luz un hijo, y llamarás su nombre Juan. Y tendrás gozo y alegría, y muchos se regocijarán
de su nacimiento; porque será grande delante de Dios. No beberá vino ni sidra, y será lleno del
Espíritu Santo, aun desde el vientre de su madre. Lucas 1:13, 15

El llamado del Señor puede llegar sobre un individuo directamente, al hablarle el Espíritu Santo a
El mientras escucha; o el llamado puede llegar indirectamente, por medio de otra persona, como
Elías llamo a Eliseo
Partiendo él de allí, halló a Eliseo hijo de Safat, que araba con doce yuntas delante de sí, y él
tenía la última. Y pasando Elías por delante de él, echó sobre él su manto. 1a Reyes 19:19

El llamado puede llegar mientras se esté despierto o dormido, por visión, sueño o conversación
interior. Samuel estaba dormido, pero fue despertado y oyó al Señor; ¿Fue en voz audible o en el
interior de su espíritu? Isaías estaba en el templo, parece que en su servicio regular como
sacerdote, porque parecía estar dentro del lugar santo cuando tuvo su visión

En el año que murió el rey Uzías vi yo al Señor sentado sobre un trono alto y sublime, y sus
faldas llenaban el templo. Por encima de él había serafines; cada uno tenía seis alas; con dos
cubrían sus rostros, con dos cubrían sus pies, y con dos volaban. Y el uno al otro daba voces,
diciendo: Santo, santo, santo, Jehová de los ejércitos; toda la tierra está llena de su gloria. Y los
quiciales de las puertas se estremecieron con la voz del que clamaba, y la casa se llenó de humo.
Entonces dije !Ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios, y habitando
en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos.
Y voló hacia mí uno de los serafines, teniendo en su mano un carbón encendido, tomado del altar
con unas tenazas; y tocando con él sobre mi boca, dijo: He aquí que esto tocó tus labios, y es
quitada tu culpa, y limpio tu pecado. Después oí la voz del Señor, que decía: ¿A quién enviaré, y
quién irá por nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí. Isaías 6:1-8

Dios llama sus siervos de cualquier manera que escoja, aunque con más frecuencia por medio de
visiones o sueños. Pablo fue derribado al suelo en una visión, Juan el amado fue llevado al cielo
para darle la visión del profeta de escribir el libro de Revelaciones.

Mas yendo por el camino, aconteció que al llegar cerca de Damasco, repentinamente le rodeó un
resplandor de luz del cielo; y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué
me persigues? Hechos 9:3-4

La revelación de Jesucristo, que Dios le dio, para manifestar a sus siervos las cosas que deben
suceder pronto; y la declaró enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan, que ha dado
testimonio de la palabra de Dios, y del testimonio de Jesucristo, y de todas las cosas que ha
visto. Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las
cosas en ella escritas; porque el tiempo está cerca. Yo Juan, vuestro hermano, y copartícipe
vuestro en la tribulación, en el reino y en la paciencia de Jesucristo, estaba en la isla llamada
Patmos, por causa de la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo. Yo estaba en el Espíritu en
el día del Señor, y oí detrás de mí una gran voz como de trompeta, Apocalipsis 1:1-3,9-10

Los grandes líderes provenían de vidas accidentadas: Moisés era un asesino, Jacob un
engañador, Abraham engaño a Abimelec, David cometió adulterio y asesinato, Pedro negó a
Jesús tres veces, Juan y Santiago luchaban por ser los primeros, Pablo era un perseguidor y
asesino de Cristianos. Nuestras vidas perdidas por el pecado se convierten por la gracia de Dios
en la cruz y la resurrección, nuestras heridas y traumas se han convertido en nuestra escuela y
preparación.

Dios convierte nuestro pecado en la fuerza del ministerio, ¿Parece esto absurdo? No estamos
orgullosos de lo mal que hacemos, pero la gracia de Dios es tal que al final le damos gracias por
ellos. Nuestros pecados se han convertido en el pase para nuestro llamado en lugar de ser
nuestra descalificación.

Hermano, a lo mejor ha pensado que tiene un llamado como el de Elías, ha creído oír algunas
palabras que pretendían provenir del Santo Espiritu, quizás lo fueran, quizás oyera
correctamente. A lo mejor en su interior ha dicho que mejor se lo calla y no se lo dice a nadie,
porque pensara que le dirán que lo olvide, o se burlaran de usted. Pero a pesar de estos
pensamientos, usted ha seguido dándole vueltas en su cabeza, y a veces cree que se estaba
volviendo loco, o quizás se sintió llamado sin nada de presión emocional y veces en la iglesia
alguien le dirá que puede que tenga un llamado a profeta.

Si eso es lo que ha estado sucediendo, puede que esto no se definitivo, pero el Espíritu Santo
confirmara su llamado con señales seguras. Si El no lo hace, usted no fue realmente llamado,
pero dele a El mucho tiempo. Si ahora no siente nada y nunca lo ha sentido, puede que El aun no
le haya dado el llamado. No debemos de actuar en base a los sentimientos sino según su palabra
segura y su confirmación dentro del cuerpo de Cristo.

“Esta es la tercera vez que voy a vosotros. Por boca de dos o tres testigos se decidirá todo
asunto” 2ª Corintios 13:1

Es Dios quien llama ¿Quién puede estar delante de El? Pero tranquilo. El llamara a quien le
plazca, y El es lo bastante poderoso para llegar hasta quienes El quiere.

1. La confirmación del llamado del profeta

¿Cómo se reconoce el llamado de Dios al ministerio de profeta?

Cuando ya estamos claros de todos los eventos que se han sucedido hasta llegar a ese momento
en que Dios nos da señales claras, usando ángeles, señales personales y mediante otras
personas extrañas y no creyentes que nos han dicho cosas, de las cuales no conocían su
profundidad. El Señor viene y nos reprende mediante la boca de los niños, El habla por medio de
cualquier persona o cosa para confirmar su mensaje a sus siervos los profetas.

Líderes, pastores, hermanos extraños pueden venir impulsados por Dios para imponernos manos
y orar por nosotros y profetizan diciéndonos palabras que afianzan lo oído en otras ocasiones,
ven objetos, lugares donde nos ven ministrando, etc.

El Señor trabaja ahora como lo hizo en los tiempos bíblicos. Sus tratos con Abraham, Moisés,
Jeremías, Ezequiel y todos los demás profetas, del Antiguo y Nuevo Testamento no son distintos
a los tratos con los profetas actuales. Estos son llamados en muchas maneras y momentos, de
grado a grado. En muchas ocasiones tenemos un ministerio prospero y Dios nos llama a dejarlo
para ir a ejercer un nuevo llamado y a veces será bajo prueba y dificultad, bajo fuego de
tribulación.

El camino sigue siendo un camino de fe, estrechez económica, dificultades, pero El ha prometido
y El es fiel para proveer. Llamados a veces dramáticos, con grandes aventuras con una comisión
como fue profetizada. El llama y seguro que cumplirá su palabra:

“Fiel es el que os llama, el cual también lo hará” 1ª Tesalonicenses 5:24

1. La disciplina y la formación de un profeta

En el Antiguo Testamento, la formación se realizaba poniéndolo bajo el cuidado y la disciplina de


un profeta más viejo. Las enseñanzas no eran en aulas de clase, aunque los discípulos se
sentaban a los pies del maestro, su aprendizaje se producía siempre por incidentes que la vida
les daba. Los profetas en la actualidad, son formados principalmente por el Señor Jesucristo
mismo mediante su Santo Espíritu. Su formación es tanto teórica como practica, o sea, en la vida
diaria y en el salón de clases.
Por eso cuando se habla de una escuela de profetas, debemos entender al tipo de formación que
puede preparar la iglesia en general para entender y alimentar a los profetas que surgen en
medio de ella. El Espíritu Santo es el maestro, quien levanta a sus profetas. El ya no los separa
para que se sienten bajo un maestro, como en el A.T.

El profeta ahora es una parte integral dentro del Cuerpo, la iglesia; el cuerpo se convierte en su
lugar de formación. Por eso, muchos profetas se pierden en su llamado o no entienden su
formación por la falta de apoyo de la iglesia. Es importante entonces, que la iglesia reconozca a
sus profetas y les proporcione el ambiente en el cual ellos puedan desarrollarse y madurar.

A veces, se hace difícil reconocer un profeta cuando está comenzando, sin embargo hay pistas
que deben alertar a los ancianos y líderes de la iglesia, para poder identificarlos:

1. Grandes tragedias pueden señalar una especial preparación de Dios en una vida.
2. Personas que son soñadoras y visionarias al recibir el Espíritu Santo deberían ser observadas
porque allí puede haber un profeta.
3. Quienes con frecuencia se identifican a si mismos con las cargas de otros, pueden ser profetas
en formación.
4. Quienes tiene dones de enseñanza pueden ser escogidos por el Señor para profetizar.

Todo lo anterior solo son indicaciones, nada puede ser concluyente aparte del llamado y la
confirmación del Espíritu Santo.

Un pastor puede ser o no ser profeta. Un profeta puede ser o no ser pastor. Pero es casi
imposible llevar puestos ambos sombreros. Un pastor debe tener al rebaño en su corazón de una
manera especial; no debe alimentarlos en aguas rápidas o exponerlos a lo que aun no pueden
asimilar. Sin embargo, el profeta, con frecuencia es llamado a hacer eso: El profeta debe
entender que todo lo que el dice afectara al pastor, pero eso no debe silenciarlo. Si ambos
llamados están en un solo corazón, esa persona casi se ve partida en dos.

Dios puede tocar a cualquiera para el ministerio de profeta, recogedor de basura, alcalde,
banquero, un conserje, un senador. Moisés estaba oculto entre los juncos y luego en la casa del
faraón. Jesús tuvo que ser ocultado en Egipto. Tanto nuestra humanidad como Satanás podrían
destruir a los elegidos de Dios si estos fueran descubiertos prematuramente, por tanto, cuando el
Espíritu Santo revela a un profeta en sus inicios, la iglesia debe estar muy alerta para protegerlo y
cuidarlo.

1. La humillación y muerte del yo

Como dijimos antes, un profeta más viejo formaba a un profeta más joven humillándolo,
aplastándolo y rompiendo su orgullo, derrotándolo, y revelando su pequeñez y su incapacidad
delante de Dios. Se ponía a prueba al neófito y esta resultaba en éxito solo si el principiante
perdía la evaluación. Debía aprender que no podía tener éxito por sus propios recursos, y
cualquier cosa sea emocional o física, que mostrara su ser corrompido, y que lo llevara a querer
conquistarlo, denotaba tener confianza en la carne, y el identificarlo ayudaba a su vocación.

La formación del profeta revela y rebaja, una a una, todas las motivaciones falsas y escondidas
de su vida. El que es un proveedor de su casa pudiera ser humillado y no seguirlo siendo,
también la gente podría criticarlo por esto, y ser una humillación que debía soportar y de la que
debía aprender.

Eliseo derramo agua sobre las manos de Elías, ¿Qué significaba esta actividad en los tiempos de
este profeta? Derramar agua sobre las manos de otra persona no era tarea de los hombres y se
hacia cuando la gente terminaba de comer, “”ellos comían con los dedos”, las sirvientas de la
casa le ponían un recipiente bajo las manos y luego le derramaban agua para que se las lavaran.
Además llevaban una toalla para que también se secaran. Esta tarea era considerada muy baja y
siempre la hacían las mujeres.

A los hombres occidentales, se les puede pedir que ayuden a lavar los platos y hacer otras
labores propias de la mujer, a los orientales no, y por lo tanto que se les pida que hagan la tarea
de una mujer es una humillación que no la pueden aceptar. Derramar agua sobre las manos de
Elías, fue para Eliseo, la degradación final y por lo tanto prueba superada para su graduación.

Cuando la humillación sea completa, estaremos preparados para graduarnos para la profecía. La
gente no reconocerá a los profetas en formación como personas que tienen sabiduría y un sano
juicio, pues el Señor frustra hasta su sentido común. Los profetas en formación se ponen en
ridículo a si mismos más veces de las que creen. El Señor puede darle dos o tres visiones y el las
comparte a la congregación y todo anda bien, hasta ese momento.

El profeta comienza a hincharse de orgullo, por su mente carnal, y llega a estar fuertemente
engañado, pues después no se dan más situaciones como estas porque Dios lo va a probar, y
termina totalmente rebajado y humillado delante de los miembros de la iglesia. Dios lo dispuso de
ese modo, y aun si el profeta tiene abundante sentido común, no puede escapar al proceso de
humillación esencial para su formación.

Nadie os prive de vuestro premio, afectando humildad y culto a los ángeles, entremetiéndose en
lo que no ha visto, vanamente hinchado por su propia mente carnal, y no asiéndose de la
Cabeza, en virtud de quien todo el cuerpo, nutriéndose y uniéndose por las coyunturas y
ligamentos, crece con el crecimiento que da Dios Colosenses 2:18-19

Un poco mas de explicación sobre una porción del versículo anterior, en la versión
internacional, “No dejen que les prive de esta realidad ninguno de esos que se ufanan en fingir
humildad y adoración de ángeles. Los tales hacen alarde de lo que no han visto; y, envanecidos
por su razonamiento humano, refiriéndose a aquellas sectas y religiones falsas, donde los falsos
maestros de Colosas que basaban su enseñanza en supuestas visiones y revelaciones. Sus
afirmaciones eran falsas porque Jesucristo es la revelación final y completa de Dios en la
humanidad

No debe confundirse esto como que Dios lo esta tentando, pues Dios no tienta a nadie, pero si
prueba nuestros corazones. Hemos conocido personas cuyas vidas enteras han sido una serie de
tragedias. Y detrás de todo esto se encontraba la gema que la mano de Dios estaba puliendo, un
profeta estaba siendo formado. Detrás de la formación de todo profeta ocurre la muerte del yo a
fin de que surja la unidad y el profeta pueda capacitar a otros para que brillen.

El profeta debe aprender como oír hablar a Dios en sueños y visiones, debe pulir sus dones de
percepción y de conocimiento por medio de la práctica. Debe aprender a combinar la franqueza
con la cortesía, la ley y seguir al Espíritu por encima de la letra con misericordia, sobre todo,
aprender el poder y los caminos de la intercesión y como llamar al cuerpo a ella.

Pero es importante recordar que el carácter del profeta y su personalidad afectara fuertemente la
manera en que haga su labor, pues hasta que El muera a si mismo, será considerado un idolatra,
quien estará adorando su propia imagen, buscando que la gente lo ame, lo honre y lo adore.
Todos tenemos un poco del rey Nabucodonosor, y al igual que El, tenemos nuestros hornos de
fuego para lanzar a aquellos que se niegan a unirse a nuestra idolatría.
Nuestra naturaleza carnal, aunque ya ha sido rebajada por la obra de la cruz, sigue gobernando
demasiado en nuestras vidas; por lo tanto, el Espíritu Santo debe continuar trayéndonos a un
Daniel y sus amigos para mostrarnos, por medio de nuestro mal carácter, que estamos
guardando tesoros que no vienen de Dios , aunque así lo creamos.

Cuando una persona cae a tierra y muere, diariamente, muere más y más a su yo, y al ambiente
que le rodea, de cosas impuestas por otros, Así, es liberado de otros y es libre para estar para
ellos. En un principio eso causa problemas porque todos a su alrededor se ven obligados a
cambiar el modo en que se relacionan con esa persona; pero gradualmente, la gente necesitada
comienza a buscarla.

El ya no está solo, porque ellos sienten y quieren su libertad. Ellos pueden decir que no serán
forzados a entra en su molde, ni tampoco serán juzgados o condenados. Con esa persona ellos
comenzaran a encontrarse a si mismos en lugar de convertirse en una copia o sombra de ella. Así
un profeta se convierte en un capacitador, debido a que ha caído y se ve a si mismo no como un
dios sino como una criatura, y otros son liberados alrededor de El

Porque nosotros que vivimos, siempre estamos entregados a muerte por causa de Jesús, para
que también la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal. De manera que la muerte
actúa en nosotros, y en vosotros la vida. 2ª Corintios 4:11-12

El profeta del A.T llamaba a las personas a regresar a la ley; las llamaba a aceptarla y a volver a
vivir de modo exterior a ellos. Así, El era necesariamente alguien que imponía. Sostenía y
defendía un modo de vida, un cuadro, un molde que estaba fuera de la persona y al cual debía
conformarse.

El profeta del N.T está al lado de su hermano, hablándole la palabra de Dios, para que cada
hermano pueda experimentar la inscripción de la ley que Dios hace de modo único en su propio
corazón. Y así lo dice Jeremías:

Pero este es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días, dice Jehová: Daré
mi ley en su mente, y la escribiré en su corazón; y yo seré a ellos por Dios, y ellos me serán por
pueblo. Y no enseñará más ninguno a su prójimo, ni ninguno a su hermano, diciendo: Conoce a
Jehová; porque todos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande, dice
Jehová; porque perdonaré la maldad de ellos, y no me acordaré más de su pecado Jeremías
31:33-34

En el A.T la idolatría se explicaba en términos externos, pero en el N.T es un mal interno, asi el
profeta del viejo pacto gritaba contra el pecado como algo de lo que había de despojarse como si
fuera ropa; pero el profeta del nuevo pacto debe mirar al corazón de las personas.

Reuníos, y venid; juntaos todos los sobrevivientes de entre las naciones. No tienen conocimiento
aquellos que erigen el madero de su ídolo, y los que ruegan a un dios que no salva. Isaías 45:20

Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos
deseos y avaricia, que es idolatría; Colosenses 3:5

Al profeta del nuevo pacto ya no le indigna el pecado, pues se le han sacado los colmillos, por la
misericordia de la cruz. Ahora, el profeta permanece al lado, para que el Santo Espíritu pueda
capacitar a cada persona en su propio camino, a fin de que el proceso de reconocer el pecado,
pedir perdón y ser cambiado pueda escribir el carácter de Dios en el corazón de cada persona.
En el A.T el profeta advertía a no pecar, y compulsivamente se obedecía y se vivía a la altura de
un cuadro del glorioso Israel. En el N.T detrás de la advertencia de no pecar, esta el amor de Dios
Padre entrenando a sus hijos a medida que crecen en El.

El pecado sigue siendo horrendo, pero en el Nuevo pacto, es transformado en gloria por su
misericordia. Por lo tanto, el profeta del N.T es llamado a morir a todo ofrecimiento que pudiera
tener la vida a fin de que pueda permanecer sin egoísmo al lado de cada hermano, tribu y nación
y que Dios pueda obrar sin obstáculos para salvar y levantar a sus hijos.

Yo sé, y confío en el Señor Jesús, que nada es inmundo en sí mismo; mas para el que piensa
que algo es inmundo, para él lo es. Pero si por causa de la comida tu hermano es contristado, ya
no andas conforme al amor. No hagas que por la comida tuya se pierda aquel por quien Cristo
murió. No sea, pues, vituperado vuestro bien; porque el reino de Dios no es comida ni bebida,
sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo. Porque el que en esto sirve a Cristo, agrada a Dios,
y es aprobado por los hombres. Así que, sigamos lo que contribuye a la paz y a la mutua
edificación. No destruyas la obra de Dios por causa de la comida. Todas las cosas a la verdad
son limpias; pero es malo que el hombre haga tropezar a otros con lo que come. Bueno es no
comer carne, ni beber vino, ni nada en que tú hermano tropiece, o se ofenda, o se debilite.
¿Tienes tú fe? Tenla para contigo delante de Dios. Bienaventurado el que no se condena a sí
mismo en lo que aprueba. Pero el que duda sobre lo que come, es condenado, porque no lo hace
con fe; y todo lo que no proviene de fe, es pecado. Así que, los que somos fuertes debemos
soportar las flaquezas de los débiles, y no agradarnos a nosotros mismos. Cada uno de nosotros
agrade a su prójimo en lo que es bueno, para edificación. Porque ni aun Cristo se agradó a sí
mismo; antes bien, como está escrito: Los vituperios de los que te vituperaban, cayeron sobre
mí. Porque las cosas que se escribieron antes, para nuestra enseñanza se escribieron, a fin de
que por la paciencia y la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza. Pero el Dios de la
paciencia y de la consolación os dé entre vosotros un mismo sentir según Cristo Jesús, para que
unánimes, a una voz, glorifiquéis al Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo. Romanos 14:10-
15:7

2. La preparación no es instantánea

El llamado de un profeta demanda años de morir al yo, por eso, nadie puede convertirse en
profeta rápidamente. La época del café instantáneo y la televisión, no puede producir una profecía
instantánea. Los apóstoles y profetas son fundamentales para la iglesia porque han sido llevados
a más muerte del yo que otros que no son así escogidos, y motivados a renacer en El. Ellos no
tienen menos pecado que otras personas; estando consciente del engaño y la villanía de su
corazón que ha llegado a un punto de profunda desesperación en cuanto a llegar a ser alguna
vez leal a Dios. Esa conciencia de la impotencia es la que Dios quería.

Cuando pablo comenzó su ministerio, Jesús le dijo que El era un pecador: ¿Por qué me
persigues? Más adelante Pablo predico que “todos están bajo pecado”.

Y cayendo en tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? Hechos 9:4

¿Qué, pues? ¿Somos nosotros mejores que ellos? En ninguna manera; pues ya hemos acusado
a judíos y a gentiles, que todos están bajo pecado. Romanos 3:9

Al final de su ministerio, cuando Dios había depositado una unción de sanidad tal que tomaban
pañuelos de su cuerpo y se ponían sobre los enfermos, para que sanasen le escribió a Timoteo
una carta donde le enseñaba lo siguiente:
De tal manera que aun se llevaban a los enfermos los paños o delantales de su cuerpo, y las
enfermedades se iban de ellos, y los espíritus malos salían Hechos 19:12

Palabra fiel y digna de ser recibida por todos: que Cristo Jesús vino al mundo para salvar a los
pecadores, de los cuales yo soy el primero. 1ª Timoteo 1:15

El llamado de Dios a un oficio elevado como el de profeta, nunca es para elevar a la persona y su
honor. Más bien es una invitación a la humillación.

Pues mirad, hermanos, vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, ni muchos
poderosos, ni muchos nobles; sino que lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los
sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo
menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de que nadie se jacte
en su presencia. 1ª Corintios 1:26-31

La iglesia de Jesucristo no tiene que asustarse o sentirse ofendida por aquellos que quieren estar
en la línea de batalla, estos hermanos puede que sean los que el Señor está preparando para el
oficio mas elevado. Debemos dejar de tenerle temor al pecado, no porque vayamos a recomendar
que se peque más, sino que tenemos que aprender a amar a los pecadores, a fin de que Dios
pueda utilizar todo en la vida para levantar a sus profetas para que cumplan la misión
encomendada.

Pero lamentablemente, la iglesia siempre ha tenido una atmosfera rígida para la producción de
profetas y apóstoles. Somos crueles, honramos y recompensamos a un soldado herido en batalla,
pero cuando un soldado de Jesucristo cae herido en batalla, no le ayudamos, sino que lo
rematamos. Muchos profetas han sido perseguidos para que salieran de la iglesia, o se les ha
restringido y callado, y no llegaron a madurar conforme a la plenitud de Cristo. La formación de un
profeta es la disciplina más difícil y atroz a ser soportada en cualquier lugar en la tierra. Debemos
convertirnos como iglesia en parte de la solución y no ser parte del problema.
Algunas lecciones de profecía en la vida de
un profeta
1. introducción

Jesús camino más de treinta millas bajo un sol candente, para llegar a un lugar ubicado en
Samaria, capital de Israel, y allí alcanzar a una mujer samaritana, con el mensaje de salvación,
para darnos la muestra de un gran milagro de conversión, jamás registrado. En un poco tiempo
nuestro Señor Jesucristo, despertó a una extraña para que pasara de un encuentro casual a
un pleno y glorioso reconocimiento de El como el Mesías esperado.

La encuentra en el pozo de Jacob, mientras descansa esperando a los discípulos que habían ido
a comprar comida. No había ningún recipiente para sacar agua, por lo que los extraños no
podían sacar agua y eso evitaba que fueran a contaminarla. Este era un pozo sagrado en la
historia de Israel. Por lo que Jesús dependía de alguien que pasara por el lugar, y fuera a sacar
agua.

Estaremos estudiando en este capítulo algunas lecciones que el profeta debe aprender para
ubicarse en su contexto de relación con los demás, para lo cual haremos uso de una porción
bíblica que es narrada en el capitulo cuatro del evangelio de Juan. Juan 4:1-29

1. Hay necesidad de depender de otros

Todos estamos claros en que a nadie le gusta depender de los demás, particularmente en estos
tiempos donde estamos acostumbrados a actuar individualmente sin que nadie se meta en
nuestros asuntos. No nos gusta recibir nada de nadie porque nuestro orgullo no nos permite
aceptar pues eso nos hiere fácilmente. Es humillante dicen algunos, cuando tiene que depender
siempre de la mano caritativa, con excepción de algunas épocas como en navidad donde todos
se dan algo y hay intercambio de un regalito.

A un profeta se le complica su tarea cuando en muchas ocasiones tiene que dar una palabra
dura, difícil, y eso le trae odio de los que le oyen, pero son los mismos que Dios ha puesto para
alimentarlo. Sobre el tema Jesús fue específico cuando mando a sus discípulos a evangelizar y
les dijo que no llevaran nada:

Y les dijo: No toméis nada para el camino, ni bordón, ni alforja, ni pan, ni dinero; ni llevéis dos
túnicas. Y en cualquier casa donde entréis, quedad allí, y de allí salid. Y dondequiera que no os
recibieren, salid de aquella ciudad, y sacudid el polvo de vuestros pies en testimonio contra
ellos. Y saliendo, pasaban por todas las aldeas, anunciando el evangelio y sanando por todas
partes. Lucas 9:3-6

Los profetas deben aprender que deben vivir del pueblo del Señor. Dios les quiere enseñar
humildad y fiel dependencia. Esto genera un tipo de relación en la cual el ministerio profético tiene
un efecto pleno. Y La palabra habla de esto muy claro, diciendo que quienquiera que de a un
profeta abre puertas al Señor:

El que a vosotros recibe, a mí me recibe; y el que me recibe a mí, recibe al que me envió. El que
recibe a un profeta por cuanto es profeta, recompensa de profeta recibirá; y el que recibe a un
justo por cuanto es justo, recompensa de justo recibirá. Y cualquiera que dé a uno de estos
pequeñitos un vaso de agua fría solamente, por cuanto es discípulo, de cierto os digo que no
perderá su recompensa. Mateo 10:40-42
En el libro de Reyes, leemos sobre la mujer sunamita, viendo la necesidad de Eliseo el profeta, le
preparo un cuarto para que descansara, por lo tanto, ella recibiría la recompensa de un profeta.
Dios quiere hacer bien a su pueblo, pero El no invadirá, sino que nosotros debemos darle nuestro
permiso, por lo tanto, El viene de diferentes maneras, y una de ellas es en forma de profeta. Si
el pueblo le da a un profeta, abre el camino para que el Señor le de al pueblo. De la misma
manera, el Señor hace que sus profetas sean dependientes del pueblo.

Y cualquiera que os diere un vaso de agua en mi nombre, porque sois de Cristo, de cierto os digo
que no perderá su recompensa Marcos 9:41

Es importante entender, que un profeta no vende sus servicios, y a medida que dan, Dios los
recompensa por medio del pueblo.

Dad, y se os dará; medida buena, apretada, remecida y rebosando darán en vuestro regazo;
porque con la misma medida con que medís, os volverán a medir. Lucas 6:38

Los siervos que sirven al Señor, no son personas asalariadas, que dejan el ministerio cuando
ocurre algún problema, o pastores que huyen cuando llegan los lobos, sino que son aquellos que
entregan sus vidas por las ovejas como un don gratuito de Dios. El pastor nunca debe recibir un
salario, El al igual que los levitas vive de las ofrendas dadas a Dios. Son suyas para poder
comer.

Yo soy el buen pastor; el buen pastor su vida da por las ovejas. Mas el asalariado, y que no es el
pastor, de quien no son propias las ovejas, ve venir al lobo y deja las ovejas y huye, y el lobo
arrebata las ovejas y las dispersa. Así que el asalariado huye, porque es asalariado, y no le
importan las ovejas. Juan 10:11-13

El siervo es libremente dado por Dios al pueblo, y el pueblo debe dar libremente a los siervos de
Dios. Ningún profeta, ya refiriéndonos a ellos, puede legítimamente establecer términos de salario
como una demanda antes de ir a una congregación. Debemos dar con generosidad y ocuparnos
de que otros lo hagan igual. Dios sigue mandando a sus siervos, los profetas a que dependan
totalmente de El. Esto es bueno para la iglesia y para el profeta.

La mujer samaritana, se acerco a Jesús, probablemente muy cansada, venia de caminar varias
millas, (A 1 MILLA DE SICAR ESTABA EL POSO DE JACOB) cargando la vasija para recoger el
agua, y sin embargo Jesús le ordeno sin nada de cortesía, que le diera agua; no tomo en cuenta
su cansancio ni el calor del día, ni el esfuerzo que ella tenía que hacer, además no olvidemos que
los judíos y los samaritanos no se llevaban bien. Esto representa el hecho, de que ella estaba
delante de alguien de autoridad.

Jesús se enteró de que los fariseos sabían que él estaba haciendo y bautizando más discípulos
que Juan (aunque en realidad no era Jesús quien bautizaba sino sus discípulos). Por eso se fue
de Judea y volvió otra vez a Galilea. Como tenía que pasar por Samaria, llegó a un pueblo
samaritano llamado Sicar, cerca del terreno que Jacob le había dado a su hijo José. Allí estaba el
pozo de Jacob. Jesús, fatigado del camino, se sentó junto al pozo. Era cerca del mediodía. Sus
discípulos habían ido al pueblo a comprar comida. En eso llegó a sacar agua una mujer de
Samaria, y Jesús le dijo: Dame un poco de agua. Pero como los judíos no usan nada en común
con los samaritanos, la mujer le respondió: ¿Cómo se te ocurre pedirme agua, si tú eres judío y
yo soy samaritana? Juan 4:1-9 NVI
Había varios caminos que conducían de Judea a Galilea: Uno localizado cerca de la costa del
mar, otro que atravesaba la región de Perea, y un tercero que pasaba por el centro de Samaria. A
pesar de la fuerte antipatía que había entre los judíos y samaritanos, por considerarlos herejes al
no tomar el pentateuco como la ley de los judíos.

El historiador Josefo relata que en Judea se acostumbraba atravesar la región de los samaritanos
durante las temporadas de fiestas porque era la ruta más corta. Jesús decide pasar por esta
ciudad, acortando su viaje a Galilea, porque tenía una cita divina al encontrarse con la mujer
samaritana a quien se revelo como el Mesías.

Quisiera comentar a propósito, que es posible que ella se hubiera dado cuenta que estaba en
presencia de un profeta, por lo que si ella hubiera sido una mala mujer, no se le hubiera permitido
acudir a ese pozo. Era un pozo sagrado y sus pecados lo habrían contaminado. Además, en esos
tiempos y en esa ciudad, si un hombre hablaba con una mujer en público, ella se hubiera sentido
avergonzada, y se hubiera quedado callada o llamado a los hombres de su familia, para que le
defendieran del ofensor abusivo que le estaba hablando.

Solamente dos tipos de mujeres podían haberle respondido a Jesús o una prostituta o una
profetiza. Ella le respondió: ¿Cómo tú siendo judío me pides a mí de beber que soy
samaritana? Pero ya lo dijimos antes, Jesús no le pidió sino le ordeno. Podemos decir entonces,
que ella no estaba preparada para reconocerlo como profeta, todavía.

Era usual que las mujeres llegaran en grupos a sacar agua en la mañana o en la tarde, para
evitar el calor del sol. ¿Por qué entonces esta mujer llego sola? Algunos que analizan este
versículo a la luz de las costumbres comentan que ella estaba avergonzada públicamente por el
hecho de haber tenido varios marido, y con el que vivía no era su marido, o sea vivía como una
prostituta. Pero nosotros queremos ir un poco más allá y considerar otros aspectos
complementarios. La vida pasada de la Samaritana, había sido toda una tragedia, cinco de sus
esposos habían muerto, y Ella había aprendido a esperar problemas, y no bendiciones. Pero
también queremos considerar el hecho de fuera una profetiza.

¿Por qué decimos que ella era una profetiza entre su pueblo, y no una prostituta? Por su
pregunta. Y Jesús inmediatamente le hablo de tal manera que lo reconociera como un profeta:

“Si conocieras el don de Dios, y quien es el que te dice: Dame de beber, tu le pedirías, y El te
daría agua viva”

Si supieras lo que Dios puede dar, y conocieras al que te está pidiendo agua —contestó Jesús—,
tú le habrías pedido a él, y él te habría dado agua que da vida .Juan 4:10 NVI

1. Un verdadero profeta habla con analogías y parábolas para que se descubra la verdad

Un profeta “muerto al yo” enseña siempre con parábolas y analogías. A fin de que otros puedan
aprender mediante el descubrimiento. Aunque Jesús pudo haberle dicho, “Yo soy el Hijo de Dios”,
El no tomo un atajo para enseñar. El punto aquí es que debemos ser sometidos a varias etapas
de aprendizaje, por nosotros mismos y voluntariamente.

La samaritana, seguía a esas alturas sin entender: “Ella le dijo, Señor, no tienes con que sacarla,
y el pozo es hondo. ¿De dónde pues tienes el agua viva? ¿Acaso eres tú mayor que nuestro
padre Jacob, que nos dio este pozo, del cual bebieron El, sus hijos, y sus ganados? “
Señor, ni siquiera tienes con qué sacar agua, y el pozo es muy hondo; ¿de dónde, pues, vas a
sacar esa agua que da vida? ¿Acaso eres tú superior a nuestro padre Jacob, que nos dejó este
pozo, del cual bebieron él, sus hijos y su ganado? Juan 4:11-12 NVI

Ella seguía sin ver ni comprender. Pero Jesús le estaba ofreciendo un regalo diferente

Todo el que beba de esta agua volverá a tener sed respondió Jesús—,pero el que beba del agua
que yo le daré, no volverá a tener sed jamás, sino que dentro de él esa agua se convertirá en un
manantial del que brotará vida eterna Juan 4:13-14

Ella entonces comienza a entender que El ciertamente es el Mesías. Eso para ella era una
bendición extraordinaria. Pero era demasiado bueno para que fuera verdad. Muchas veces es
más fácil creer con más facilidad las malas noticias que las buenas.

Todos hemos leído en relación con la vida pasada de la Samaritana, había sido toda una
tragedia, cinco de sus esposos habían muerto, Ella en este proceso, había aprendido a esperar
problemas, y no bendiciones, por lo que encontrar al Mesías realmente significaba algo grandioso
para ella.

Estas experiencias pasadas, producían en ella el anhelo de poder cambiar de vida, y cuando
Jesús le habla de esa posibilidad, surge en su mente un a idea de probar lo que Él le ofrecía.

Todo el que beba de esta agua volverá a tener sed —respondió Jesús—, pero el que beba del
agua que yo le daré, no volverá a tener sed jamás, sino que dentro de él esa agua se convertirá
en un manantial del que brotará vida eterna. Señor, dame de esa agua para que no vuelva a tener
sed ni siga viniendo aquí a sacarla. Juan 4:13-15 NVI

Al igual que Nicodemo, en los versículos anteriores de Juan 3, La mujer no entendía que Jesús le
hablaba a cerca de su necesidad espiritual. Ella estaba pensando en no tener que caminar tanto
apara sacar agua de un pozo que le quedaba tan lejos y por lo tanto no tenia que ir muy seguido.

El corazón de ella cree aunque su mente todavía no esta segura. Ella responde dando una señal.
Tenemos que aprender a sentir cuando el corazón de la otra persona se ha abierto para creer y
cuando se ha cerrado. Por ejemplo, Zacarías y María recibieron ambos la visitación del ángel
Gabriel, y ambos le preguntaron a Gabriel una pregunta práctica, pero Gabriel sabía que Zacarías
no creía y María si creía. Por tanto, Zacarías fue disciplinado, y María recibió señales para
confirmar su camino.

“Dijo Zacarías al ángel, ¿En que conoceré esto? Porque yo soy viejo, y mi mujer es de edad
avanzada. Entonces maría dijo al ángel, ¿Cómo será esto? Pues no conozco varón. Lucas
1:18,34

“Y ahora quedaras mudo y no podrás hablar, hasta el día en que esto se haga, por cuanto no
creíste en mis palabras, las cuales se cumplirán a su tiempo” Lucas 1:20

“Respondiendo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del altísimo te cubrirá
con su sombra: por lo cual también el Santo ser que nacerá, será llamado Hijo de Dios” Lucas
1:35

Si una persona cree Dios le dará señales para que pueda saber que ha oído correctamente y así
estará seguro que no ha seguido su propia imaginación. Pero si alguien no cree, Dios no le dará
una señal, y la razón es que si tuviera que darle una señal al incrédulo, Dios le estaría
demostrando que podría creer en Dios. Y Dios estaría actuando conforme al pensamiento de esa
persona. ¿Quién entonces seria Dios? Dios no dará una señal a un incrédulo a fin de convencerlo
para que crea. El incrédulo debe creer primero, luego Dios confirmara.

Un siervo del Señor, a menudo es tentado a pensar lo siguiente: “Si el Señor hiciera este milagro,
las personas tendrían que creer”. Pero una señal solo le mostrara a su siervo que no puede
obligar a las personas a creer. Solo el Espíritu Santo da la gracia para creer; de otra manera, ni la
persuasión ni los milagros, causaran una verdadera creencia. Y esto que decimos lo podemos
apoyar con lo que sucedió con los fariseos y saduceos quienes fueron a Jesús después del
milagro de la conversión de los panes y los peces:

“Vinieron los fariseos y los saduceos para tentarle, y le pidieron que les mostrase señal del cielo.
Mas El respondiendo, les dijo: Cuando anochece, decís: buen tiempo; porque el cielo tiene
arreboles. Y por la mañana hoy abra tempestad; porque tiene arreboles el cielo nublado.
¡Hipócritas! Que sabéis distinguir el aspecto del cielo, ¡mas las señales de los tiempos no
podéis! La generación mala y adultera demanda señal; pero señal no le será dada, sino la señal
del profeta Jonás. Dejándolos, se fue” Mateo 6:1-4

Jesús le dijo: Ve, llama a tu marido, y ven acá. Juan 4:16

Debido a que la mujer no entendía la naturaleza del agua viva que Jesús le ofrecía, el le cambio
la conversación para enfocarse en su verdadera necesidad espiritual de experimentar la
conversión y ser limpia de pecado. El conocimiento de Jesús de su vida intima no solo revelo su
capacidad sobrenatural sino que permitió concentrase en la condición espiritual de la mujer.

Jesús le dio una señal a la mujer samaritana, porque El sabia que en su corazón ella ya había
creído. Y luego el sabiendo que ella no tenia marido, le dice: “Ve, llama a tu marido, y ven
acá”. Pues si, ella le había estado mintiendo, actuando como si no creyera, y la verdad es que si
cree. La mujer samaritana, ha estado huyendo de Jesús, por lo tanto, El le da una oportunidad de
irse actuando como si El no fuera profeta y así no supiera que ella no está casada. El no la
obligara a creer, si ella quiere irse, El la invitara a hacerlo.

1. Un profeta no presiona

Quien cuando le maldecían, no respondía con maldición; cuando padecía, no amenazaba, sino
encomendaba la causa al que juzga justamente; 1ª Pedro 2:23

Un verdadero profeta debe quedarse mudo y ser humilde delante de la voluntad de otra persona;
nunca debe obligar a otro a hacer su propia voluntad. Con sensibilidad, Jesús le estaba diciendo
a la samaritana, “Muy bien, no te obligare, Ve y llama a tu marido y luego ven acá, sabiendo que
tal vez no regresaba.

Si la mujer hubiera querido irse, habría aprovechado la oportunidad cuando Jesús le dijo que
fuera a llamar a su marido. Ella sin embargo, rápidamente le respondió que no tenia marido, y la
verdad, esta respuesta no tuvo nada de importancia; lo importante es que se quedo.

Pero alguno dirá: Tú tienes fe, y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tus obras, y yo te mostraré
mi fe por mis obras Santiago 2:18

La verdadera fe es lo que hacemos y no lo que pensamos o decimos. Las dudas no molestan a


Dios cuando a pesar de ello, vivamos nuestra fe. La mujer no confeso que creía, pero se quedo
cuando se le dio la oportunidad de huir. Entonces hablo el profeta y dijo:
Respondió la mujer y dijo: No tengo marido. Jesús le dijo: Bien has dicho: No tengo
marido; porque cinco maridos has tenido, y el que ahora tienes no es tu marido; esto has dicho
con verdad. Juan 4:17-18

Jesús le demostró que podía ver su vida, y por esta señal, ella comprobó que El era un verdadero
profeta. Algunas personas han malinterpretado lo que el dijo y piensan que ella era una mala
mujer; pero se puede dar una explicación diferente a esta respuesta del Señor. En la ley del A.T
que podemos leer en Deuteronomio, se requería que el cuñado de una viuda la desposara
cuando el hermano muriera, a fin de garantizar un heredero. Así por ejemplo, Booz no pudo
casarse con Rut hasta que el familiar más cercano se negó a adoptar ese papel para ella.

Cuando hermanos habitaren juntos, y muriere alguno de ellos, y no tuviere hijo, la mujer del
muerto no se casará fuera con hombre extraño; su cuñado se llegará a ella, y la tomará por su
mujer, y hará con ella parentesco. Deuteronomio 25:5

La mujer samaritana ha tenido cinco maridos porque cada uno de ellos ha muerto. El sexto
familiar la ha tomado en su casa, pero aun no se ha casado con ella. Si una mujer no estaba
casada, o si había perdido a su esposo, se pensaba que estaba maldecida

Echarán mano de un hombre siete mujeres en aquel tiempo, diciendo: Nosotras comeremos de
nuestro pan, y nos vestiremos de nuestras ropas; solamente permítenos llevar tu nombre, quita
nuestro oprobio. Isaías 4:1

Si ella perdía a un segundo esposo, era considerada doblemente maldecida. Pero si perdía un
tercero, luego a un cuarto y también a un quinto, la gente comenzaba a considerarla como siendo
preparada para un elevado servicio como profetiza.

Las profetisas podían hablar a los hombres en público. Tanto hombres como mujeres podían
buscarle para pedir un consejo. Damos un ejemplo de Ana, la profetiza:

Esta, presentándose en la misma hora, daba gracias a Dios, y hablaba del niño a todos los que
esperaban la redención en Jerusalén. Lucas 2:38

Podemos afirmar que esta mujer había tenido dos señales de Jesús, sus modales un poco
bruscos y sus tiernas palabras. Ella a estas alturas ya sabe que Jesús es un profeta. Pero El
quiere que ella vea más, pero su actitud es temerosa de creer. Entonces ella de improvisto
planteo una pregunta impertinente para que el profeta la resolviera:

“Nuestros padres adoraron en este monte, y vosotros decís que en Jerusalén es el lugar donde se
debe adorar” Juan 4:20

Tanto Judíos como samaritanos admitían que Dios les había ordenado a sus antepasados
señalar un lugar especial para adorarlo. Los Judíos que reconocían el canon hebreo en su
totalidad, escogieron Jerusalén,

Más bien, elegí a Jerusalén para habitar en ella, y a David para que gobernara a mi pueblo
Israel 2a Crónicas 6:6

Pero los Samaritanos que solos aceptaban el pentateuco, concluyeron que el primer lugar en el
cual Abraham construyo un altar a Dios fue Siquem, que se podía ver desde el Monte Gerisim.
Fue allí que los Israelitas proclamaron las bendiciones prometías por Dios antes de entrar a la
tierra prometida, por esta razón, escogieron el Monte Gerisim como lugar para su templo.
Abram atravesó toda esa región hasta llegar a Siquén, donde se encuentra la encina sagrada de
Moré. En aquella época, los cananeos vivían en esa región Allí el Señor se le apareció a Abram y
le dijo: «Yo le daré esta tierra a tu descendencia.» Entonces Abram erigió un altar al Señor,
porque se le había aparecido. Génesis 12:6-7NVI

Cuando el Señor su Dios los haya hecho entrar en la tierra que van a poseer, ustedes bendecirán
al monte Guerizín y maldecirán al monte Ebal. Esos montes están al otro lado del Jordán, hacia
el oeste, en el territorio de los cananeos que viven en el Arabá, en la vecindad de Guilgal, junto a
las encinas de Moré. Deuteronomio 11:29-30

Sin embargo, era inútil discutir acerca del lugar de adoración, pues ambos lugares pronto serian
innecesarios en la vida de quienes adoren a Dios de manera autentica. Aun mas, Jerusalén seria
destruida junto con su templo.

1. Un profeta siempre llega con una palabra de revelación

Jesús sin molestarse por la pregunta hecha por la samaritana, acerca de donde deberían adorar
los hombres, aprovecho la oportunidad para ampliar el pensamiento de la samaritana con una
nueva revelación.

Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y
en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. Juan 4:23

Como una aclaración, esta parte del versículo, Jesús la menciona, para referirse a la muerte,
resurrección y ascensión de Jesús tras haber completado la redención. Y al hablar de verdaderos
adoradores Jesús estaba aclarando que tras su venida como mesías y Salvador, los adoradores
serian identificados, no por un lugar o santuario en particular, sino por su adoración al Padre a
través del Hijo. Gracias a la venida de Cristo desapareció cualquier otra diferencia entre
adoradores falsos y verdaderos, cuyo lugar sea predeterminado. Los verdaderos adoradores, son
todos aquellos que adoran a Dios desde cualquier lugar, a través del Hijo y de todo corazón.

Porque la circuncisión somos nosotros, los que por medio del Espíritu de Dios adoramos, nos
enorgullecemos en Cristo Jesús y no ponemos nuestra confianza en esfuerzos
humanos. Filipenses 3:3

A estas alturas la gloriosa presencia del Señor Jesús esta inundando el espíritu de ella. Ahora ya
no tiene deseos de huir, sospecha que el es el Mesías, Ella le dice:

“Sé que ha de venir el Mesías, llamado el Cristo; cuando el venga nos declarara todas las
cosas” Juan 4:23

Pero El ha venido como algo más que la expectativa judía del Mesías; El es el Hijo de Dios, lo
cual nadie había entendido aun, aunque los profetas lo habían profetizado. Por lo tanto, El utiliza
una frase que no podía ser otra cosa sino una importante señal para ella:

“Yo soy, el que habla contigo” Juan 4:26

Jesús utiliza estas palabras para decirle a la mujer que El era más que el Mesías, y en seguida el
Espiritu Santo le confirmo esa revelación con señales certeras. A esas alturas ya los discípulos
habían regresado y ellos están sorprendidos de ver a Jesús hablando en público con una mujer
extraña. Aunque ellos fueron respetuosos, dando a ella una señal de aceptación. En vista de su
creencia, ella dejo la vasija, como una señal clara de fe.
Entonces la mujer dejó su cántaro, y fue a la ciudad, y dijo a los hombres: Juan 4:28

El agua es sagrada, y los recipientes para agua en tiempos bíblicos se relacionaban con la
santidad de la vida. Por lo que nunca debían perderse, dejarlos olvidados o tirarlos. Si una vasija
se caía y se rompía, eso era una tragedia, ni siquiera se tiraban los pedazos. Los grandes
pedazos de una vasija rota se usaban como platos para mezclar o cortar, y pedazos pequeños se
usaban para rascar heridas pues se asociaban con virtudes de sanidad.

Esta samaritana llego al pozo buscando agua terrenal y en Jesús encontró agua celestial de vida.
Por lo que dejo su vasija de agua como señal de que la verdadera santidad y religiosidad no se
encuentran en las formas en que samaritanos o judíos adoran, sino en las personas que acaban
de conocer. Ella conoció a alguien que era más que Mesías era el Hijo de Dios.

1. Un profeta se olvida del pasado

Si alguien recibe un llamado de Dios, debe dejar atrás cualquier forma de vida que tenia antes

Y ellos, dejando al instante la barca y a su padre, le siguieron. Mateo 4:22

Eliseo tomo sus bueyes, los mato, corto, y quemo su arado y sus arreos para hacer una
barbacoa para despedirse de sus familiares y amigos. Así el dio tres señales irrevocables; sus
bueyes estaban muertos, el no podía regresar a su trabajo en la agricultura y también sus
instrumentos estaban quemados. Toda su familia había comido sal con Él para ser testigos de su
abandono del trabajo para irse a servir a Jehová., no había manera de regresar al pasado.

Quienquiera que reciba un llamado de Dios a un elevado servicio, evangelismo, profecía,


sacerdocio, maestro, pastor o cualquier otro, debe renunciar a lo que le haya formado. Y esto no
es un insulto a su herencia sino que es para cortar los lazos que lo ligan, es para negar cualquier
otra formación adicional mediante la vieja naturaleza carnal. Ahora esa persona será formada
para Dios y servirá solo al Dios que le ha llamado.

Por lo tanto debemos oír y obedecer a Dios. Cuando el nos llama aparte, tenemos que darle la
espalda a muchas cosas, sino es que a todo lo que ha sido importante para nosotros y eso puede
incluir a nuestros padres. El Espíritu Santo buscara destruir las relaciones idolatras con cualquier
familiar a fin de poder establecer un verdadero amor a Él. Ningún ser humano en sus fuerzas
puede discernir la diferencia entre idolatrar y honrar a los padres. Como siempre, dependemos de
Jesús, quien puede guiarnos por ese camino estrecho.

Y amaba Jesús a Marta, a su hermana y a Lázaro. Cuando oyó, pues, que estaba enfermo, se
quedó dos días más en el lugar donde estaba. Luego, después de esto, dijo a los discípulos:
Vamos a Judea otra vez. Juan 11:5-7

Algunos criticaron la actitud de Jesús a sabiendas de que su amigo Lázaro moría. Peros si Jesús
se hubiera apresurado a ir habría desobedecido a su padre y cometido idolatría y esto hubiera
puesto en peligro a su amigo. Las hermanas de lázaro pusieron una carga de amistad sobre el
llamado pidiendo ayuda; era un intento de controlarlo y manipularlo. El temor había vencido el
caminar en el Espíritu de María y Marta.

Estas cosas suceden en este tiempo en las iglesias. Una hermana de una iglesia estaba
enferma, el pastor fue informado pero no acudió a visitarla. La familia se indigno por esta actitud
del pastor. La amistad es maravillosa pero puede ser una cubierta para la idolatría y como tal
suplantar el mandato de Dios. Los siervos de Dios no nos deben nada. Si es leal a su llamado, el
siervo debe ir o venir solo como el Espíritu Santo le dirija. Si responde a una necesidad distinta a
la nuestra, eso no significa que no se interese por nosotros.

Un Hermano líder de una iglesia murió mientras su pastor estaba de viaje. Los lideres y
familiares le llamaron de larga distancia diciéndole lo que había pasado, y el pastor se preguntaba
si debía acudía a apoyar a la familia, teniendo que dejar el compromiso que tenia con otra
congregación de profeta y maestro. Una de las preguntas que afloraban a la mente del pastor
era acaso Dios no sabia que el hermano iba a morir y de todos modos me mando a cumplir este
compromiso.

El pastor oro al señor, para que le diera una guianza sobre lo que tenía que hacer, y Dios le dijo
que se quedara en donde estaba, aunque eso podría haber provocado descontento y alboroto
en su iglesia. Gloria a Dios porque fueron pocos los que intentaron reclamarle por tal actitud y no
fueron oídos por los demás miembros de la iglesia. El Señor le protegió cuando El le obedeció y
le apoyo por medio de sus líderes maduros. Hablo por teléfono con la familia y un pastor amigo le
cubrió mientras El regresaba. Dios es fiel y también lo fue su iglesia.

La mujer samaritana aprendió la lección de profecía. Ella no solo dejo su vasija sino que también
deja al Señor. Pedro, Santiago y Juan querían quedarse en la cumbre del monte de la
transfiguración con Jesús. La iglesia muchas veces cae en la trampa de pesar que es en los
servicios de adoración y oración donde Dios está presente.

El sentimiento de su presencia puede a lo mejor ser mayor en reuniones grupales, pero la iglesia
no debe vivir por sentimientos, porque los sentimientos de los cuales habla la gente en este
contexto son siempre buenos sentimientos. Pero Jesús esta donde está el sufrimiento. Donde la
gente sufre y tiene necesidad, ahí está El, y es ahí donde la iglesia es llamada a estar.

La mujer dejó su cántaro, volvió al pueblo y le decía a la gente: Vengan a ver a un hombre que
me ha dicho todo lo que he hecho. ¿No será éste el Cristo? Salieron del pueblo y fueron a ver a
Jesús. Juan 4:28-30 NVI

La mujer no cae en el error de hacer un ídolo de la presencia personal de Jesús; ella


inmediatamente piensa en otras personas, deja su presencia y acude a amigos que aun no le
conocen a El. El primer amor la hace salir y con denuedo llama a otros a que conozcan el dueño
del agua de vida.

“Venid, ved a un hombre que me ha dicho todo cuanto he hecho ¿No será este el Cristo?

También ella como profetiza no dice todo, sino les da el derecho a sus paisanos de que
descubran por ellos mismos la verdad total. Vecinos que la habían a lo mejor visto mal por su
reputación pero que ahora podían expresarse así:

Ya no creemos solamente por tu dicho, porque nosotros mismos hemos oído, y sabemos que
verdaderamente este es el Salvador del mundo, el Cristo” Juan 4:42

Muchos profetas, predicadores, maestros y evangelistas han preparado mensajes y enseñanzas


bosquejando la verdad de modo espectacular, pero los que habían oído y entendido habían
regresado a la incredulidad y el olvido. ¿Sera que llego el diablo y arrebato la palabra?
¿Necesitamos orara mas por protección? Tal vez, o quizás nunca hemos entendido la lección de
la transparencia. Hemos hecho demasiado, no, demasiado poco. Les quitamos su derecho a
descubrir. Nuestros oyentes caen porque la búsqueda no ha sido la suya propia. Sabio es el
siervo que ha aprendido a invitar a otros a la búsqueda en lugar a darles demasiadas respuestas.
…El Salvador del mundo…. Esta frase también la leemos en 1ª Juan 4:14:

“Y nosotros hemos visto y declaramos que el Padre envió a su Hijo para ser el Salvador del
mundo”

Y nos ubica en el clímax de la historia de la mujer de samaria. Los mismos samaritanos entraron
a formar parte del grupo de testigos de Jesús como Mesías e Hijo de dios en el evangelio de
Juan. Este episodio en la vida de Jesús, describe el primer ejemplo de evangelismo que
trasciende las culturas.

1. Un profeta es un testigo

Un profeta recién llamado (neófito) se preocupa porque las cosas marchen bien , sea lo que sea,
sanidad, predicación, enseñanza, etc. Y realmente no cree que Dios lo hace, sino es por su
esfuerzo. Mientras que un profeta maduro, está en silencio delante de la voluntad de otra
persona, es un observador silencioso de lo que Dios hace, es Dios quien actúa, y es un vigía o
testigo que observa siempre lo que Dios hace, o lo que Dios está operando entre los hombres.
Este profeta esta en el Espíritu, es decir, no actúa con sus propias fuerzas, en la carne.

Muchas veces los profetas toman la intercesión de una manera que se agotan por completo
debido a la sobrecarga y no dejan que el Espíritu labore. Esto los hace andar distraídos; pero
deben de aprender que el siervo del Señor es ciego, no ve nada oculto, no finge ninguna
sensibilidad psicológica; no ve visiones o percepciones a menos que el Espíritu Santo lo revele.

Esta situación lo diferencia del vidente. Un vidente no es un profeta. El vidente ve por un esfuerzo
excesivo de sus propios poderes psíquicos, y mediante la ayuda de espíritus demoniacos de
adivinación. Un profeta ve solamente cuando el Señor abre sus ojos para ver. Un vidente comete
el primer pecado de conocimiento prohibido; mira donde puede y con frecuencia da a conocer lo
que debería mantener oculto. No así el profeta de Dios.

La primera ayuda de la redención es restaurar a las personas a caminar libre con el Señor, por el
que no hace nada, mientras el Espíritu de Dios trabaja con ellos. Durante toda la conversación de
Jesús con la samaritana, lo vemos tranquilo siguiendo el viento del Espíritu que sopla sobre ella.
Su habilidad son las del padre por medio de El. Y es que no se necesita ser tan inteligente, sino
ministrar con sabiduría y aprendizaje. El conocimiento es importante, pero no es por lo que
debemos esforzarnos, ni tampoco es en nuestro poder, ni en las fuerzas del caballo, sino en el
poder del Espíritu.
Elías, un aliado de Dios
1 Reyes 17:1–19:18

1. Introducción

Dios llamó a los profetas para ser la conciencia de Israel por más de cuatrocientos años., entre
ellos, Ahías, Semaías, Jehú, hijo de Hanani, y otros, pero ninguno de ellos brilló tanto como Elías
y Eliseo, los personajes más destacados de los libros de los Reyes.

Elías confrontó a Acab y su esposa Jezabel y Eliseo a Joram, hijo de Acab. Estos aliados de Dios
luchaban por la pureza y continuidad de la adoración al único Dios vivo, en medio de un reino casi
totalmente perdido. Los milagros realizados (5 de Elías y 10 de Eliseo) autenticaron la credibilidad
del poder de Dios y de sus juicios. Sabemos que la obediencia a Dios conduce a la vida eterna; el
pecado lleva a la muerte eterna.

1. Anuncio y preparación de Elías: 1ª Reyes 17:1–24

Mientras Acab, el rey de turno continuaba llevando a Israel en una continua apostasía que estaba
acabando con la religión hebrea, el profeta Elías surge brillando con luz propia. Se dice que entró
en acción como una tormenta y salió como un torbellino. Era alguien de quien no se sabe su
historia previa, niñez, juventud, preparación, fisonomía ni estatura. En las Escrituras no se
mencionan sus padres, parentesco o nivel social. Solamente dice que era tisbita, de la región de
Galaad y que usaba vestimentas hechas con piel de camello

Y ellos le respondieron: Un varón que tenía vestido de pelo, y ceñía sus lomos con un cinturón de
cuero) Entonces él dijo: Es Elías tisbita 2 Reyes 1:8

De repente, se presentó ante el rey más temido y terrible de Israel; en el punto más oscuro de la
historia hebrea, y totalmente solo, Elías se enfrentó a ese monarca. Tan sólo escuchar su
nombre, que significa “mi Dios es Jehová”, ofendía al rey que no creía en Dios. Pero Elías con
toda autoridad le declaró:

“Vive Jehová Dios de Israel, en cuya presencia estoy, que no habrá lluvia ni rocío en estos años,
sino por mi palabra” 1ª Reyes 17:1

Sin duda, esta fue una declaración extraña y sin sentido para un adorador del dios de la lluvia y la
fertilidad. También, su profecía fue un reto a Baal, porque conforme a la mitología cananea, éste
moría durante la temporada de sequía. La mención del rocío con la lluvia es muy importante. No
llueve mucho en esa región, pero el rocío cae durante 100 a 180 días al año, ayudando así a la
agricultura. Las lluvias del otoño y de la primavera y el rocío del verano eran necesarios para las
cosechas de Israel. El Señor había amenazado con retirarlas de la tierra si su pueblo se apartaba
de El para servir a otros dioses.

Y si desdeñareis mis decretos, y vuestra alma menospreciare mis estatutos, no ejecutando todos
mis mandamientos, e invalidando mi pacto, yo también haré con vosotros esto: enviaré sobre
vosotros terror, extenuación y calentura, que consuman los ojos y atormenten el alma; y
sembraréis en vano vuestra semilla, porque vuestros enemigos la comerán. Pondré mi rostro
contra vosotros, y seréis heridos delante de vuestros enemigos; y los que os aborrecen se
enseñorearán de vosotros, y huiréis sin que haya quien os persiga. Y si aun con estas cosas no
me oyereis, yo volveré a castigaros siete veces más por vuestros pecados. Y quebrantaré la
soberbia de vuestro orgullo, y haré vuestro cielo como hierro, y vuestra tierra como
bronce. Levíticos 26:15-19

Así como apareció, Elías desapareció repentinamente, dejando al rey enfurecido y castigado con
tres años de sequía. Acab, siendo hebreo y conociendo la ley de Moisés, sin duda entendió que el
juicio afectaba a toda la nación debido a la apostasía de su pueblo

Y se encienda el furor de Jehová sobre vosotros, y cierre los cielos, y no haya lluvia, ni la tierra dé
su fruto, y perezcáis pronto de la buena tierra que os da Jehová Deuteronomio 11:17

Antes de que Dios pueda hacer grandes cosas por medio de nosotros, es casi seguro que
primero tenga que poner a prueba nuestra fe y paciencia. Así es como nos enseña hasta que
alcanzamos la madurez. Antes de obedecer a Dios en las cosas grandes, es necesario aprender
a obedecerlo en las pequeñas. Sin duda esto fue lo que sucedió a Elías. El profeta aprendió a
confiar en Dios, y para lograr esto, tuvo que experimentar la mano del Señor que lo preparaba en
cuatro áreas de su vida:

1. Obediencia
2. Paciencia
3. Confianza
4. Acción

1. Obediencia:

Y vino a él palabra de Jehová, diciendo: Apártate de aquí, y vuélvete al oriente, y escóndete en el


arroyo de Querit, que está frente al Jordán. 1ª Reyes 17:2–3

“Y vino a él palabra de Jehová…” Esto dio a Elías la autoridad divina para realizar su siguiente
acción. Su huida para esconderse en el arroyo de Querit de ninguna manera muestra que temía a
Acab o que dudara que Dios podía protegerlo. Tampoco quiere decir que él trataba de huir del
mandato del Señor. Es posible que Dios hubiera preparado dos lecciones para Elías:

1. Evitar que se enorgulleciera de su propio valor.


2. Demandar de él una obediencia total aunque no pareciera tener sentido el mandato divino.

2. Paciencia

Beberás del arroyo; y yo he mandado a los cuervos que te den allí de comer. Y él fue e hizo
conforme a la palabra de Jehová; pues se fue y vivió junto al arroyo de Querit, que está frente al
Jordán. Y los cuervos le traían pan y carne por la mañana, y pan y carne por la tarde; y bebía del
arroyo. Pasados algunos días, se secó el arroyo, porque no había llovido sobre la tierra. Vino
luego a él palabra de Jehová, diciendo: Levántate, vete a Sarepta de Sidón, y mora allí; he aquí
yo he dado orden allí a una mujer viuda que te sustente. 1ª Reyes 17:4–9

Elías sin duda, no alcanzaba a comprender por qué tenía que huir si estaba protegido por Dios.
El no entendía por qué tener que esperar junto a un arroyo que se secaba poco a poco y tener
que comer de la comida que le traían los cuervos dos veces al día. Los judíos habían sido
enseñados a rechazar cierto grupo de aves que la ley consideraba inmundas y entre ellas se
incluía el cuervo.

Fue una lección de paciencia la que tuvo que aprender el fiel profeta. A veces, es fácil obedecer
y esperar a Dios cuando las cosas son razonables, pero cuando se nos pide hacer algo contra
nuestras tradiciones, nos vemos obligados a preguntarnos ¿Por qué no mejor mandarlo a otro
lugar donde no hubiera sequía? ¿Por qué tenía que sufrir las mismas incomodidades que los que
no amaban a Dios? ¿Por qué no lo mandaba Dios ante el rey de nuevo para retar al dios Baal?

Cuando el arroyo quedó totalmente seco, el Altísimo lo mandó a presentarse ante una viuda de
Sarepta de Sidón para pedirle sustento. De nuevo, Elías se vio forzado a ser paciente, porque
comprendía que una viuda era la persona menos indicada para sostener a un hombre fuerte. Él
sabía que las viudas eran las primeras en morir de hambre durante una sequía prolongada. Pero
sin cuestionar a Dios, obedeció incondicionalmente.

3. Confianza

Entonces él se levantó y se fue a Sarepta. Y cuando llegó a la puerta de la ciudad, he aquí una
mujer viuda que estaba allí recogiendo leña; y él la llamó, y le dijo: Te ruego que me traigas un
poco de agua en un vaso, para que beba. Y yendo ella para traérsela, él la volvió a llamar, y le
dijo: Te ruego que me traigas también un bocado de pan en tu mano. Y ella respondió: Vive
Jehová tu Dios, que no tengo pan cocido; solamente un puñado de harina tengo en la tinaja, y un
poco de aceite en una vasija; y ahora recogía dos leños, para entrar y prepararlo para mí y para
mi hijo, para que lo comamos, y nos dejemos morir. Elías le dijo: No tengas temor; ve, haz como
has dicho; pero hazme a mí primero de ello una pequeña torta cocida debajo de la ceniza, y
tráemela; y después harás para ti y para tu hijo. Porque Jehová Dios de Israel ha dicho así: La
harina de la tinaja no escaseará, ni el aceite de la vasija disminuirá, hasta el día en que Jehová
haga llover sobre la faz de la tierra. Entonces ella fue e hizo como le dijo Elías; y comió él, y ella,
y su casa, muchos días. Y la harina de la tinaja no escaseó, ni el aceite de la vasija menguó,
conforme a la palabra que Jehová había dicho por Elías. 1ª Reyes 17:10–16

Elías tenía que aprender a confiar en Dios y la viuda a depender de Jehová. Debemos recordar
que ella no era israelita y que el lugar donde vivía pertenecía al padre de la perversa Jezabel.
Elías decidió probar a la viuda pidiéndole agua para beber. Esto no sería nada difícil si no hubiera
una sequía.

La viuda reacciono en forma positiva, y demostró tener hospitalidad. Le dio a Elías agua y
pan aunque al principio respondió que sólo tenía lo suficiente para un solo alimento antes de
morir.

Dios nos pide que le entreguemos todo, y entonces él nos dará a nosotros. La viuda al aprender
a obedecer y depender de Jehová ya no tenía que esperar la muerte, sino que por obedecer,
ella recibió la vida.

4. Acción

Después de estas cosas aconteció que cayó enfermo el hijo del ama de la casa; y la enfermedad
fue tan grave que no quedó en él aliento. Y ella dijo a Elías: ¿Qué tengo yo contigo, varón de
Dios? ¿Has venido a mí para traer a memoria mis iniquidades, y para hacer morir a mi hijo? El le
dijo: Dame acá tu hijo. Entonces él lo tomó de su regazo, y lo llevó al aposento donde él estaba, y
lo puso sobre su cama. Y clamando a Jehová, dijo: Jehová Dios mío, ¿aun a la viuda en cuya
casa estoy hospedado has afligido, haciéndole morir su hijo? Y se tendió sobre el niño tres
veces, y clamó a Jehová y dijo: Jehová Dios mío, te ruego que hagas volver el alma de este niño
a él. Y Jehová oyó la voz de Elías, y el alma del niño volvió a él, y revivió. Tomando luego Elías al
niño, lo trajo del aposento a la casa, y lo dio a su madre, y le dijo Elías: Mira, tu hijo vive.
Entonces la mujer dijo a Elías: Ahora conozco que tú eres varón de Dios, y que la palabra de
Jehová es verdad en tu boca. 1ª Reyes 17:17–24
Elías encaró una prueba muy difícil, por medio de la cual demostraría su fe completa en Jehová.
Llegó el día en que el hijo de la viuda enfermó y murió. Aunque ella estaba consciente de que no
iban a morir debido a la sequía, ya que este varón representaba la presencia de Dios en su
humilde hogar, se sintió afectada por sus propios pecados y exclamó: “¿Qué tengo yo contigo,
varón de Dios? ¿Has venido a mí para traer a memoria mis iniquidades, y para hacer morir a mi
hijo?”

Sin duda, la angustia que sentía la pobre mujer se la transmitió también a Elías ¿Qué haría? Lo
único que se le ocurrió fue pedir a Dios que devolviera la vida a aquel niño. Nunca antes había
ocurrido algo parecido, pero después de orar tres veces sobre el cuerpo del pequeño en privado,
Dios le concedió la vida. La lección que aprendieron equivale al mensaje del evangelio de
salvación, ya que la mujer exclamó: “Ahora conozco que tú eres varón de Dios, y que la palabra
de Jehová es verdad en tu boca”

Hay dos razones para que se den los milagros en la Biblia:

1. Acreditar al mensajero de Dios “conozco que tú eres varón de Dios”


2. Autenticar el mensaje “la palabra de Jehová es verdad en tu boca”

Esta acción decisiva de Elías fortaleció la fe de la viuda y también la del profeta, para que pudiera
hacer cosas aún más grandes. En toda solución se requiere un acto de fe, la fe es el paso
necesario entre la promesa y la confianza absoluta. Todo acto de fe produce milagros.

1. Lecciones aprendidas:

1. Acab aunque tenía mucho poder, no contaba con defensas contra el juicio dictado por Elías de
sequia nacional. Las consecuencias del pecado nos afectan en donde menos lo esperamos y más
nos duelen.

2. Así como Dios uso a Elías quien era un desconocido y sin antecedentes y cualidades
excepcionales, Dios también quiere usar a todas aquellas personas que como Elías, se
dispongan a servirle incondicionalmente.

3. Por la obediencia de Elías, Dios proveyó lo necesario para su sobrevivencia.

4. Dios nos sorprende de las formas como a veces nos provee

5. Dios uso a Elías para bendecir a Israel y uso la viuda para bendecir a Elías

6. Dios nos provee la vida cuando nos rodea la muerte.

Por tanto, es por fe, para que sea por gracia, a fin de que la promesa sea firme para toda su
descendencia; no solamente para la que es de la ley, sino también para la que es de la fe de
Abraham, el cual es padre de todos nosotros. (como está escrito: Te he puesto por padre de
muchas gentes ) delante de Dios, a quien creyó, el cual da vida a los muertos, y llama las cosas
que no son, como si fuesen. El creyó en esperanza contra esperanza, para llegar a ser padre de
muchas gentes, conforme a lo que se le había dicho: Así será tu descendencia. Y no se debilitó
en la fe al considerar su cuerpo, que estaba ya como muerto (siendo de casi cien años, o la
esterilidad de la matriz de Sara. Tampoco dudó, por incredulidad, de la promesa de Dios, sino que
se fortaleció en fe, dando gloria a Dios, plenamente convencido de que era también poderoso
para hacer todo lo que había prometido; por lo cual también su fe le fue contada por justicia. Y
no solamente con respecto a él se escribió que le fue contada, sino también con respecto a
nosotros a quienes ha de ser contada, esto es, a los que creemos en el que levantó de los
muertos a Jesús, Señor nuestro, el cual fue entregado por nuestras transgresiones, y resucitado
para nuestra justificación. Romanos 4:16-25

Ministerio público de Elías


1ª Reyes 18:1-46

1. Elías reta al rey Acab 1ª Reyes 18:1-40

El clímax en la vida del profeta Elías es el duelo entre Jehová y Baal en el Monte Carmelo,
historia dramática que la encontramos descrita en el libro de los reyes.

En el capítulo 17, encontramos varios milagros, que solo son el preámbulo al milagro mas
portentoso de Dios a través de Elías en el Monte Carmelo. Este evento fue determinante y allí se
decidiría quien era el único Dios vivo y verdadero ¿Jehová o Baal?

Elías entra en acción respaldado por las victorias que había experimentado antes, que le dieron la
confianza inquebrantable delante de Jehová. Después de la resurrección del hijo de la viuda, y
Pasados tres años, Elías, busco al rey Acab, pues la sequia había devastado la tierra de Israel, y
Acab estaba desesperado por salvar los caballos que usaba para su defensa militar, y así fue
como instruyo a Abdías, un alto oficial, a que buscara agua por toda la tierra.

Abdías, era temeroso de Jehová, de los pocos que quedaban, había escondido cien profetas de
Dios, en varias cuevas sustentándolos con agua y comida, pero cuando se encontró cara a cara
con el profeta Elías, que le pidió audiencia con el rey Acab, demostró mas temor a Acab que a
Jehová. Le rogo a Elías que no le pidiera la audiencia, pues tenia temor que el rey lo matara.

Y es que el rey buscaba a Elías para matarlo pues era el responsable directo, de la crisis de
sequia que ellos vivían, Abdías suplico al profeta tres veces no hacerle esa petición, pero Elías
insistió resuelto a enfrentar al rey, en un duelo final.

1. Elías desafía a los profetas de Baal

Entonces Acab convocó a todos los hijos de Israel, y reunió a los profetas en el monte Carmelo. Y
acercándose Elías a todo el pueblo, dijo: ¿Hasta cuándo claudicaréis vosotros entre dos
pensamientos? Si Jehová es Dios, seguidle; y si Baal, id en pos de él. Y el pueblo no respondió
palabra. Y Elías volvió a decir al pueblo: Sólo yo he quedado profeta de Jehová; mas de los
profetas de Baal hay cuatrocientos cincuenta hombres. Dénsenos, pues, dos bueyes, y escojan
ellos uno, y córtenlo en pedazos, y pónganlo sobre leña, pero no pongan fuego debajo; y yo
prepararé el otro buey, y lo pondré sobre leña, y ningún fuego pondré debajo. Invocad luego
vosotros el nombre de vuestros dioses, y yo invocaré el nombre de Jehová; y el Dios que
respondiere por medio de fuego, ése sea Dios. Y todo el pueblo respondió, diciendo: Bien dicho.
Entonces Elías dijo a los profetas de Baal: Escogeos un buey, y preparadlo vosotros primero,
pues que sois los más; e invocad el nombre de vuestros dioses, mas no pongáis fuego debajo. 1ª
Reyes 18:20-25

El duelo en el monte Carmelo fue una espectacular confirmación de la soberanía de Jehová aun
en los tiempos más oscuros. Esa era la prueba más apropiada para comprobar lo que dice su
palabra:

Acerca, pues, de las viandas que se sacrifican a los ídolos, sabemos que un ídolo nada es en el
mundo, y que no hay más que un Dios. 1 Corintios 8:4
Sin duda, la sequía de tres años y medio ya había disminuido la confianza del pueblo en los
poderes de Baal. Ese ídolo tenía la apariencia de un toro y representaba la fuerza y fertilidad, así
como el deseo de tener poder y gozar del placer sexual. Pero por si todavía quedaran dudas en
Israel, la demostración de Elías removería cualquier deseo de continuar sirviéndolo.

Y acercándose Elías a todo el pueblo, dijo: ¿Hasta cuándo claudicaréis vosotros entre dos
pensamientos? Si Jehová es Dios, seguidle; y si Baal, id en pos de él. Y el pueblo no respondió
palabra. 1ª Reyes 18:21

El Señor nunca ha tolerado componendas en asuntos espirituales. No hay nada tan peligroso
como el liderazgo de personas que profesan conocer a Cristo, pero lo niegan con sus obras

Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni caliente. !!Ojalá fueses frío o caliente! Pero por cuanto
eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca. Apocalipsis 3:15–16

Profesan conocer a Dios, pero con los hechos lo niegan, siendo abominables y rebeldes,
reprobados en cuanto a toda buena obra. Tito 1:16

Elías dio a los profetas de Baal toda la ventaja posible, les permitió escoger el mejor becerro y el
monte más cercano a los centros de adoración de Baal. También les concedió todo el día para
hacer sus rituales.

1. Los profetas falsos claman a Baal

Y ellos tomaron el buey que les fue dado y lo prepararon, e invocaron el nombre de Baal desde la
mañana hasta el mediodía, diciendo: !!Baal, respóndenos! Pero no había voz, ni quien
respondiese; entre tanto, ellos andaban saltando cerca del altar que habían hecho. Y aconteció al
mediodía, que Elías se burlaba de ellos, diciendo: Gritad en alta voz, porque dios es; quizá está
meditando, o tiene algún trabajo, o va de camino; tal vez duerme, y hay que despertarle. Y ellos
clamaban a grandes voces, y se sajaban con cuchillos y con lancetas conforme a su costumbre,
hasta chorrear la sangre sobre ellos. Pasó el mediodía, y ellos siguieron gritando frenéticamente
hasta la hora de ofrecerse el sacrificio, pero no hubo ninguna voz, ni quien respondiese ni
escuchase. 1ª Reyes 18: 26–29

Todos los presentes estuvieron de acuerdo que la competencia favorecía a los profetas de Baal.
La ausencia de Jezabel revela que tenía dudas acerca de su propio dios. Es cómica la forma en
que Elías se burló de los profetas al no obtener respuesta. La mofa de Elías es apropiada, porque
representa la insensatez de creer en dioses muertos, sordos y ciegos, teniendo al alcance al Dios
único y verdadero, cuya presencia permea y cubre los cielos más altos, el Seol más bajo y hasta
lo más profundo del mar

Si subiere a los cielos, allí estás tú; Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás. Si
tomare las alas del alba Y habitare en el extremo del mar, Salmos 139:8–9

Los profetas de Baal, aturdidos y agobiados, empezaron a cortar sus cuerpos con cuchillos. Si
Baal no quería contestar a sus plegarias, por lo menos debía responder a la agonía física de sus
profetas. Es interesante recordar que Baal requería el sacrificio de los primogénitos. Este
incidente revela la ineficacia de tales sacrificios; Dios condena tales acciones de su
pueblo, porque los esfuerzos humanos nunca serán suficientes para obtener redención.

Y no haréis rasguños en vuestro cuerpo por un muerto, ni imprimiréis en vosotros señal


alguna. Yo Jehová. Levítico 19:28
Hijos sois de Jehová vuestro Dios; no os sajaréis, ni os raparéis a causa de
muerto Deuteronomio 14:1

40. Elías clama a Jehová 1ª Reyes 18:30–40.

Es muy claro el contraste entre los gritos desesperados de los profetas de Baal y la calma
y seguridad de Elías, quien llamó al pueblo para presenciar el milagro. Primero, armó y reparó el
altar con doce piedras, que representaban a las doce tribus unidas en adoración. Después de
cortar el becerro, lo mojó con doce barriles de agua

Después, Elías hizo una oración breve. Que Jehová podía mandar fuego de lo alto no era nada
nuevo; ya lo había hecho con Abram, Lot, los hijos de Aarón y Salomón. De pronto, un fuego que
consumió la carne, la madera, el agua y la piedra bajó del cielo. Sin duda que “Dios es fuego
consumidor”

Y sucedió que puesto el sol, y ya oscurecido, se veía un horno humeando, y una antorcha de
fuego que pasaba por entre los animales divididos Génesis 15:17

Entonces Jehová hizo llover sobre Sodoma y sobre Gomorra azufre y fuego de parte de Jehová
desde los cielos; Génesis 19:24

Y salió fuego de delante de Jehová y los quemó, y murieron delante de Jehová Levítico 10:2

Cuando Salomón acabó de orar, descendió fuego de los cielos, y consumió el holocausto y las
víctimas; y la gloria de Jehová llenó la casa.2 Crónicas 7:1

Porque Jehová tu Dios es fuego consumidor, Dios celoso Deuteronomio 4:24

Porque nuestro Dios es fuego consumidor Hebreos 12:29

¿Cuál fue el castigo de Dios para los profetas? ¿No era suficiente con la humillación pública que
tuvieron que soportar? ¿No pudo haberlos salvado Elías, llevándolos al arrepentimiento y
enrolándolos en la escuela de profetas de Jehová? Dios, quien conoce la tremenda profundidad
de la depravación del hombre, ya había revelado cuál sería su castigo. Los profetas falsos tenían
que morir sin misericordia porque sólo inspiraban falsedad, confusión y traición a Jehová

¿Mudará el etíope su piel, y el leopardo sus manchas? Así también, ¿podréis vosotros hacer bien,
estando habituados a hacer mal? Jeremías 13:23

Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá? Jeremías
17:9

Tal profeta o soñador de sueños ha de ser muerto, por cuanto aconsejó rebelión contra Jehová
vuestro Dios que te sacó de tierra de Egipto y te rescató de casa de servidumbre, y trató de
apartarte del camino por el cual Jehová tu Dios te mandó que anduvieses; y así quitarás el mal de
en medio de ti. Deuteronomio 13:5

El profeta que tuviere la presunción de hablar palabra en mi nombre, a quien yo no le haya


mandado hablar, o que hablare en nombre de dioses ajenos, el tal profeta
morirá. Deuteronomio 18:20
Más evita profanas y vanas palabrerías, porque conducirán más y más a la impiedad. Y su
palabra carcomerá como gangrena; de los cuales son Himeneo y Fileto, que se desviaron de la
verdad, diciendo que la resurrección ya se efectuó, y trastornan la fe de algunos. 2 Timoteo 2:16-
18

1. Elías ora pidiendo la lluvia

Entonces Elías dijo a Acab: Sube, come y bebe; porque una lluvia grande se oye. Acab subió a
comer y a beber. Y Elías subió a la cumbre del Carmelo, y postrándose en tierra, puso su rostro
entre las rodillas. Y dijo a su criado: Sube ahora, y mira hacia el mar. Y él subió, y miró, y dijo: No
hay nada. Y él le volvió a decir: Vuelve siete veces. A la séptima vez dijo: Yo veo una pequeña
nube como la palma de la mano de un hombre, que sube del mar. Y él dijo: Ve, y di a Acab: Unce
tu carro y desciende, para que la lluvia no te ataje. Y aconteció, estando en esto, que los cielos
se oscurecieron con nubes y viento, y hubo una gran lluvia. Y subiendo Acab, vino a Jezreel. Y
la mano de Jehová estuvo sobre Elías, el cual ciñó sus lomos, y corrió delante de Acab hasta
llegar a Jezreel. 1ª Reyes 18:41-46

La victoria fue total para los adoradores de Jehová. Y para cerrar con broche de oro, la fe de Elías
fue premiada, a pesar de que el rey sus seguidores, su esposa, no dieron señal de
arrepentimiento, Dios decidió recompensar a Israel con lluvia.

Tengamos cuidado con la idolatría, pues no solo serán dioses falsos de madera o piedra, sino
que puede ser cualquier cosa que roba el lugar de Cristo. Si confiamos totalmente en Dios, El nos
dará todo lo necesario para sostenernos.
Ministerio privado de Elías
1ª Reyes 19:1-18

1. Elías huye a Horeb

Acab dio a Jezabel la nueva de todo lo que Elías había hecho, y de cómo había matado a espada
a todos los profetas. Entonces envió Jezabel a Elías un mensajero, diciendo: Así me hagan los
dioses, y aun me añadan, si mañana a estas horas yo no he puesto tu persona como la de uno de
ellos. Viendo, pues, el peligro, se levantó y se fue para salvar su vida, y vino a Beerseba, que está
en Judá, y dejó allí a su criado. Y él se fue por el desierto un día de camino, y vino y se sentó
debajo de un enebro; y deseando morirse, dijo: Basta ya, oh Jehová, quítame la vida, pues no soy
yo mejor que mis padres. 1ª Reyes 19:1-4

Sólo un día había pasado desde aquellos momentos increíbles en que Dios había mandado fuego
del cielo ante todo el pueblo idolatra demostrando así su existencia y poder. Ahora Jezabel, con la
anuencia del rey, lo perseguía para matarlo. El profeta ya no tenía fuerzas para enfrentarse a la
furia de la malvada reina y huyó presa de depresión y ansiedad.

Cuando se experimenta una emoción intensa por mucho tiempo, llega un punto en que el cuerpo
se cansa y cae en un decaimiento que puede afectar a las personas. Eso fue exactamente lo que
sucedió con el fiel profeta.

¿Cómo era posible que después de haber visto un milagro tan grande, la gente rechazara a Dios?
Esto era demasiado para Elías y con las emociones acumuladas y el cuerpo cansado, optó por
abandonar el ministerio que Jehová le había encomendado.

“Quítame la vida, pues no soy yo mejor que mis padres”

Totalmente exhausto, Elías sólo podía ver lo negativo de la vida y se quedó dormido.

1. Elías recibe la ministración de los ángeles

Y echándose debajo del enebro, se quedó dormido; y he aquí luego un ángel le tocó, y le dijo:
Levántate, come. Entonces él miró, y he aquí a su cabecera una torta cocida sobre las ascuas, y
una vasija de agua; y comió y bebió, y volvió a dormirse. Y volviendo el ángel de Jehová la
segunda vez, lo tocó, diciendo: Levántate y come, porque largo camino te resta. Se levantó, pues,
y comió y bebió; y fortalecido con aquella comida caminó cuarenta días y cuarenta noches hasta
Horeb, el monte de Dios. 1ª Reyes 19:5–8

Cansado después de caminar unos 270 Km., Elías necesitaba un descanso físico que el Señor
proveyó en manos de los ángeles, porque todavía tenía que emprender otro viaje de más de 320
kms hasta el monte Horeb. Él conoce nuestros límites y se preocupa de nosotros. Tomar un
merecido descanso es suficiente para sentirnos mejor y asi enfrentar los problemas que nos
aquejan.

C.El celo de Elías por Jehová 1ª Reyes 19:9–18

El respondió: He sentido un vivo celo por Jehová Dios de los ejércitos; porque los hijos de Israel
han dejado tu pacto, han derribado tus altares, y han matado a espada a tus profetas; y sólo yo
he quedado, y me buscan para quitarme la vida.1ª Reyes 19:10
Elías ya llevaba casi cuatro años viviendo la vida en el espíritu con su voluntad, y pensamientos
orientados hacia Dios, entonces es normal que Elías empezara a pensar como Dios y sintiera el
mismo celo divino. El problema es que Elías era humano y su mente y espíritu no podían igualar
la paciencia que Jehová demostraba hacia la maldad de Israel.

Es muy posible que Elías esperara resultados más impresionantes e impactantes como
recompensa por el celo de Jehová. Sin duda, se quedó perplejo ante la tremenda paciencia de
Dios hacia su pueblo, que seguía insistiendo en seguir sus malos caminos. ¿Por qué no mandar
fuego del cielo para consumirlos a todos? Elías se sentía totalmente solo por la indiferencia del
pueblo. Su actitud refleja una queja contra Dios por no ser más vengativo con ellos.

Entonces el Señor se manifestó en tres formas: Primero, causó una terrible tempestad, tan fuerte,
que destrozó grandes peñas. Segundo, causó un gran terremoto y tercero, un fuego. Pero,
aunque a veces el Omnipotente usa esos métodos para revelarse, él no se manifestó en ellos,
sino que lo hizo en un silbo apacible y delicado

El le dijo: Sal fuera, y ponte en el monte delante de Jehová. Y he aquí Jehová que pasaba, y un
grande y poderoso viento que rompía los montes, y quebraba las peñas delante de Jehová; pero
Jehová no estaba en el viento. Y tras el viento un terremoto; pero Jehová no estaba en el
terremoto. Y tras el terremoto un fuego; pero Jehová no estaba en el fuego. Y tras el fuego un
silbo apacible y delicado. Y cuando lo oyó Elías, cubrió su rostro con su manto, y salió, y se puso
a la puerta de la cueva. Y he aquí vino a él una voz, diciendo: ¿Qué haces aquí, Elías? El
respondió: He sentido un vivo celo por Jehová Dios de los ejércitos; porque los hijos de Israel han
dejado tu pacto, han derribado tus altares, y han matado a espada a tus profetas; y sólo yo he
quedado, y me buscan para quitarme la vida. Y le dijo Jehová: Ve, vuélvete por tu camino, por
el desierto de Damasco; y llegarás, y ungirás a Hazael por rey de Siria. A Jehú hijo de
Nimsi ungirás por rey sobre Israel; y a Eliseo hijo de Safat, de Abel-mehola, ungirás para
que sea profeta en tu lugar. Y el que escapare de la espada de Hazael, Jehú lo matará; y el
que escapare de la espada de Jehú, Eliseo lo matará. Y yo haré que queden en Israel siete
mil, cuyas rodillas no se doblaron ante Baal, y cuyas bocas no lo besaron. 1ª Reyes 19:11-18

Elías, cubriendo su rostro, entendió claramente que los vientos, terremotos y fuego pueden
destruir la vida de los hombres. Pero también sabía que solamente el “silbo apacible y delicado”
del Espíritu Santo puede regenerar a los hombres por medio de la palabra de Dios.

Respondió Jesús y le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede
ver el reino de Dios. Nicodemo le dijo: ¿Cómo puede un hombre nacer siendo viejo? ¿Puede
acaso entrar por segunda vez en el vientre de su madre, y nacer? Respondió Jesús: De cierto,
de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de
Dios. Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es. No te
maravilles de que te dije: Os es necesario nacer de nuevo. El viento sopla de donde quiere, y
oyes su sonido; mas ni sabes de dónde viene, ni a dónde va; así es todo aquel que es nacido del
Espíritu. Juan 3:3–8

Pero desecha las cuestiones necias e insensatas, sabiendo que engendran contiendas. Porque
el siervo del Señor no debe ser contencioso, sino amable para con todos, apto para enseñar,
sufrido; que con mansedumbre corrija a los que se oponen, por si quizá Dios les conceda
que se arrepientan para conocer la verdad, y escapen del lazo del diablo, en que están
cautivos a voluntad de él. 2 Timoteo 2:23–26

Sin embargo, el Señor todavía no terminaba con él. Necesitaba que el profeta fuera a ungir a dos
futuros reyes: a Hazael de Siria y a Jehú de Israel, así como a Eliseo como profeta de Israel a las
siguientes generaciones.
El ultimo ministerio de Elías
1. Introducción

Algunos estudiosos de la palabra afirman que después de que Elías huyó de Jezabel su
ministerio se debilito porque cambió sus convicciones firmes por unas menos comprometedoras.
Pero esto no es cierto. Después de su encuentro con Jehová en el monte Horeb Elías continuó en
servicio activo aunque no en público. El nuevo trabajo consistía en prepararse para su muerte y
seleccionar al nuevo discípulo.

Partiendo él de allí, halló a Eliseo hijo de Safat, que araba con doce yuntas delante de sí, y él
tenía la última. Y pasando Elías por delante de él, echó sobre él su manto. Entonces dejando él
los bueyes, vino corriendo en pos de Elías, y dijo: Te ruego que me dejes besar a mi padre y a mi
madre, y luego te seguiré. Y él le dijo: Ve, vuelve; ¿qué te he hecho yo? Y se volvió, y tomó un
par de bueyes y los mató, y con el arado de los bueyes coció la carne, y la dio al pueblo para que
comiesen. Después se levantó y fue tras Elías, y le servía. 1ª Reyes 19:19–21

El último ministerio de Elías fue cuidar de los profetas que estudiaban en una escuela profética,
fundada durante la dinastía del rey Omri y que después desapareció. Esto era clave para
promover la verdad y la adoración a Jehová que Acab intentaba sustituir con la de Baal. Elías se
dedicó a animarlos y apoyarlos, y quizá tuvo parte en la fundación de la escuela. De ésta surgió
Eliseo para reemplazar al profeta Elías y así empezó un nuevo capítulo del ministerio profético de
Israel.

1. Eliseo y su deseo

Aconteció que cuando quiso Jehová alzar a Elías en un torbellino al cielo, Elías venía con Eliseo
de Gilgal. Y dijo Elías a Eliseo: Quédate ahora aquí, porque Jehová me ha enviado a Bet-el. Y
Eliseo dijo: Vive Jehová, y vive tu alma, que no te dejaré. Descendieron, pues, a Bet-el. Y
saliendo a Eliseo los hijos de los profetas que estaban en Bet-el, le dijeron: ¿Sabes que Jehová te
quitará hoy a tu señor de sobre ti? Y él dijo: Sí, yo lo sé; callad. Y Elías le volvió a decir: Eliseo,
quédate aquí ahora, porque Jehová me ha enviado a Jericó. Y él dijo: Vive Jehová, y vive tu alma,
que no te dejaré. Vinieron, pues, a Jericó. Y se acercaron a Eliseo los hijos de los profetas que
estaban en Jericó, y le dijeron: ¿Sabes que Jehová te quitará hoy a tu señor de sobre ti? El
respondió: Sí, yo lo sé; callad. Y Elías le dijo: Te ruego que te quedes aquí, porque Jehová me ha
enviado al Jordán. Y él dijo: Vive Jehová, y vive tu alma, que no te dejaré. Fueron, pues, ambos.

2ª reyes 2:1–6

Antes de la milagrosa ascensión de Elías, Dios preparó a todos para aquel evento; Eliseo ya lo
sabía de antemano y aparentemente Dios ya lo había revelado a todos los profetas con el fin de
fortalecer su fe. La historia empieza con una escena entre Elías y Eliseo que salen juntos de
Gilgal hacia Bet-el.

Elías pidió a Eliseo que se quedara en Gilgal, quizá para tener la oportunidad de encontrarse a
solas con Dios en el camino, o tal vez para probar la fe de Eliseo. Éste insistió en continuar con
Elías por el intenso deseo que tenía de estar con él y para no perderse de nada de lo que pudiera
ocurrir. Bet-el era el principal centro de adoración a Baal y se ubicaba a 16 Km al norte de
Jerusalén.

Allí también radicaban los estudiantes profetas, quienes salieron a recordar a Eliseo que ese día
Dios se llevaría a Elías. Eliseo sabía que el día había llegado para que Dios escogiera al sucesor
de Elías. Esto no quiere decir que esperaran un sucesor, sino que sabían que el gran profeta no
se quedaría entre ellos.

Posiblemente por esta razón, Eliseo insistió en seguir a Elías hasta Jericó aunque Elías le pedía
que no lo acompañara “vive Jehová, y vive tu alma, que no te dejaré” Por tercera vez lo probó
Elías en Jericó, pidiéndole que lo dejara solo, porque Dios le pedía ir al Jordán. Y por tercera
ocasión, Eliseo insistió en acompañarlo.

1. Elías asciende en un torbellino

Y vinieron cincuenta varones de los hijos de los profetas, y se pararon delante a lo lejos; y ellos
dos se pararon junto al Jordán. Tomando entonces Elías su manto, lo dobló, y golpeó las aguas,
las cuales se apartaron a uno y a otro lado, y pasaron ambos por lo seco. Cuando habían
pasado, Elías dijo a Eliseo: Pide lo que quieras que haga por ti, antes que yo sea quitado de ti. Y
dijo Eliseo: Te ruego que una doble porción de tu espíritu sea sobre mí. El le dijo: Cosa difícil
has pedido. Si me vieres cuando fuere quitado de ti, te será hecho así; mas si no, no. Y aconteció
que yendo ellos y hablando, he aquí un carro de fuego con caballos de fuego apartó a los dos; y
Elías subió al cielo en un torbellino. 2ª Reyes 2:7–11

Llegando al Jordán y con los cincuenta profetas viéndolos a distancia, Elías hizo un último milagro
al dividir las aguas del río. Esto debe haberles recordado a Josué, el sucesor de Moisés. ¿Quién
tendría el valor de seguir a Elías y pagar el alto precio que él había pagado? Tal vez fue por eso
que los cincuenta candidatos se mantuvieron “a lo lejos” y Eliseo no lo dejó, insistiendo en querer
continuar su ministerio.

Habiendo cruzado el Jordán, Elías declaró a Eliseo: “Pide lo que quieras que haga por ti, antes
que yo sea quitado de ti”. Él pidió: “que una doble porción de tu espíritu sea sobre mí”. Por fin
Eliseo supo la razón por la cual no lo dejaba solo. Lo que quería no era sobrepasar a Elías en sus
hazañas milagrosas, sino recibir una doble porción de su fe como sucesor legítimo así como bajo
la ley hebrea, el primogénito pedía su herencia al padre.

Esto significa que Eliseo estaba dispuesto a seguir a Jehová a toda costa sin tomar en cuenta el
precio que tendría que pagar por ser doblemente responsable “cosa difícil has pedido”. Elías
entonces le propuso una condición: “si me vieres cuando fuere quitado de ti, entonces sabrás que
Dios te ha escogido”. Su título como sucesor dependía de su habilidad y persistencia en ver y
entender el mundo espiritual. Su determinación y valentía fueron recompensadas cuando vio el
“carro… con caballos de fuego” llevándose a Elias en un torbellino.
Eliseo el nuevo profeta de Israel
Viéndolo Eliseo, clamaba !:Padre mío, padre mío, carro de Israel y su gente de a caballo! Y nunca
más le vio; y tomando sus vestidos, los rompió en dos partes. Alzó luego el manto de Elías que
se le había caído, y volvió, y se paró a la orilla del Jordán. Y tomando el manto de Elías que se le
había caído, golpeó las aguas, y dijo: ¿Dónde está Jehová, el Dios de Elías? Y así que hubo
golpeado del mismo modo las aguas, se apartaron a uno y a otro lado, y pasó Eliseo. Viéndole los
hijos de los profetas que estaban en Jericó al otro lado, dijeron: El espíritu de Elías reposó sobre
Eliseo. Y vinieron a recibirle, y se postraron delante de él. 2ª Reyes 2:12–15

1. Introducción

Mientras Eliseo miraba la espectacular visión, exclamó: “Padre mío, Padre mío” mostrando
dependencia y respeto absoluto hacia Dios. Y de Elías exclamó: “gente de a
caballo”, representando las fuerzas divinas que eran las defensas verdaderas de Israel. El carro
era el armamento más poderoso de aquellos tiempos y representaba el poder supremo de Dios.
Elías había sido el instrumento divino escogido para realizar sus propósitos en aquel reino
apóstata.

Su siguiente paso fue golpear el río Jordán con el manto que Elías había dejado, en señal de que
ahora Eliseo tenía las mismas funciones de aquél. Los profetas todavía estaban al otro lado y
pudieron ver que en efecto el Espíritu de Dios descansó sobre Eliseo. Éste les hizo la pregunta:
“¿Dónde está Jehová el Dios de Elías?” como si dijera: ¿están ustedes convencidos de que yo
soy el que continuará el ministerio profético? Entonces ellos mostraron su comprensión
postrándose ante Eliseo. Esto no significa que lo adoraron, sino que, siendo ellos también
profetas, de esa forma mostraban respeto y honra al sucesor genuino de Elías.

1. Búsqueda del cuerpo de Elías

Y dijeron: He aquí hay con tus siervos cincuenta varones fuertes; vayan ahora y busquen a tu
señor; quizá lo ha levantado el Espíritu de Jehová, y lo ha echado en algún monte o en algún
valle. Y él les dijo: No enviéis. Mas ellos le importunaron, hasta que avergonzándose dijo: Enviad.
Entonces ellos enviaron cincuenta hombres, los cuales lo buscaron tres días, mas no lo
hallaron. Y cuando volvieron a Eliseo, que se había quedado en Jericó, él les dijo: ¿No os dije yo
que no fueseis? 2ª Reyes 2:16–18

Los profetas no entendían que Elías había ascendido físicamente a la presencia de Dios e
insistieron en buscarlo para enterrarlo para que no sufriera la maldición de no ser sepultado. Es
obvio que ellos no lograron ver el “rapto” que Eliseo vio y quedaron fuera de la maravillosa visión
por no desear ser como Elías. Buscaron durante tres días sin encontrar cosa alguna (como en el
caso del cuerpo de Moisés que tampoco fue hallado) y por fin se convencieron de que Elías había
sido trasladado al cielo por Dios.

Ellos sólo tenían que creer lo que Eliseo dijo: ¿Acaso no acababa de separar el río Jordán,
comprobando que su palabra era verdad? Muchas veces es más fácil insistir en ideas, métodos,
costumbres y opiniones personales o tradicionales que abrirnos a nuevas posibilidades y
experiencias. ¿Estamos atentos a la voz, métodos y experiencias que Dios tiene para nosotros?

¿Cuántas bendiciones han quedado fuera de nuestro alcance porque preferimos conformarnos
con lo poco que tenemos o por miedo a entregarnos completamente a Dios? De cuántas
bendiciones nos perdemos y a cuántos trabajos inútiles no dedicamos, simplemente por no tener
fe en la palabra de Dios.
1. Primer milagro de confirmación profética

Y los hombres de la ciudad dijeron a Eliseo: He aquí, el lugar en donde está colocada esta ciudad
es bueno, como mi señor ve; mas las aguas son malas, y la tierra es estéril. Entonces él dijo:
Traedme una vasija nueva, y poned en ella sal. Y se la trajeron. Y saliendo él a los manantiales
de las aguas, echó dentro la sal, y dijo: Así ha dicho Jehová: Yo sané estas aguas, y no habrá
más en ellas muerte ni enfermedad. Y fueron sanas las aguas hasta hoy, conforme a la palabra
que habló Eliseo. 2ª Reyes 2:19–22

El ministerio profético de Eliseo seria declarar la verdad divina y condenar la falsedad, no


tanto predecir el futuro. No obstante, Dios permitía y usaba los milagros, aun los aparentemente
insignificantes, para dar lecciones claras y significativas al pueblo de Israel. Dios seguía
interesado en los detalles que afectaban a su pueblo. El milagro de la purificación del agua
contaminada simboliza ese ministerio profético

Así como el agua contaminaba la tierra fértil, la adoración a Baal contaminaba y destruía la
fertilidad espiritual del pueblo de Israel. Eliseo primero pidió una “vasija nueva” (simbólicamente
pura y limpia) en donde echó sal declarándola pura y limpia para ofrecer vida y no muerte. Dios
se proponía usar la vida del profeta Eliseo en Israel como un vaso nuevo y limpio para llamar a su
pueblo a la pureza.

1. Segundo milagro de confirmación profética

Después subió de allí a Bet-el; y subiendo por el camino, salieron unos muchachos de la ciudad, y
se burlaban de él, diciendo!:Calvo, sube! !!calvo, sube! Y mirando él atrás, los vio, y los maldijo
en el nombre de Jehová. Y salieron dos osos del monte, y despedazaron de ellos a cuarenta y
dos muchachos. De allí fue al monte Carmelo, y de allí volvió a Samaria. 2ª Reyes 2:23–25

El segundo milagro tuvo que ver con un problema moral de la juventud israelita, grandemente
influenciada en esos días por los profetas de Baal. Saliendo de Jericó, Eliseo fue a Bet-el, centro
de adoración a Baal. Allí fue objeto de la burla de un gran número de jóvenes que le faltaron el
repeto diciéndole “calvo” (expresión degradante que significa “loco”, o sin inteligencia).

Hay escritores que suponen que estos muchachos eran una pandilla organizada para oponerse a
su ministerio. Estos muchachos pudieron haber oído a sus padres burlarse de las noticias de que
Elías había subido al cielo , posiblemente diciendo: “Si Eliseo dice eso, que nos muestre como se
hace.

“¡Sube!” le gritaban, dando a entender que habían oído de la ascensión de Elías y retaban a
Eliseo a hacer lo mismo. Muy parecido a la burla que le hicieron a Jesús cuando estaba en la
cruz:

Y diciendo: Tú que derribas el templo, y en tres días lo reedificas, sálvate a ti mismo; si eres Hijo
de Dios, desciende de la cruz. Mateo 27:40

Eliseo entonces “los maldijo en el nombre de Jehová”. Para reivindicar el honor del Señor, Eliseo
pronuncio juicio divino contra ellos, expresado en la ley del pacto de bendición y maldición.

Si anduviereis conmigo en oposición, y no me quisiereis oír, yo añadiré sobre vosotros siete


veces más plagas según vuestros pecados. Enviaré también contra vosotros bestias fieras que os
arrebaten vuestros hijos, y destruyan vuestro ganado, y os reduzcan en número, y vuestros
caminos sean desiertos. Levíticos 26:21-22
A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y
la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu
descendencia; Deuteronomio 30:19

Salieron entonces dos osos y despedazaron a cuarenta y dos jóvenes. Sin duda, ellos trataban de
desacreditar el ministerio de Eliseo y el resultado fue todo lo opuesto. Dios mismo juzgo a los
muchachos depravados al enviar los dos osos. Obsérvese que los osos hirieron a los muchachos
pero la palabra no dice que murieron. , y este juicio fue una advertencia a Israel de que le
aguardaban la maldición del pacto de Dios si persistían en rebelarse.
El profeta Elías hombre de Dios, hombre del
pueblo
1. Introducción

En el principio de la historia de Israel, Ellos tuvieron una organización social que respetaba las
necesidades de todos sin excepción. La unidad era mayor aunque cada tribu cuidaba de
sus familias, como mejor le parecía y las decisiones más importantes se tomaban en las
reuniones de los líderes. Pero no todo eras perfecto, había problemas, pero todos participaban de
la vida social y política.

Este pueblo de Dios, quiso imitar a los pueblos vecinos, y adoptaron el régimen monárquico, que
les permitió algunas ventajas, como producir mas, se volvieron mas fuertes, pero la monarquía
sustituyo la unidad que tenían antes y el pueblo fue menos escuchado, y sus valores, y modo de
ser fueron dejados de lado, o sea el estado se distancio del pueblo, lo que trajo como
consecuencia pagos de impuestos, injusta en la distribución de responsabilidades entre cada
tribu.

Como consecuencia de este tipo de gobierno el pueblo del norte y el centro de Israel, que eran
los que mas trabajaban y producían, se separaran y proclamaran su independencia. Y se
establecieran dos pueblos, el norte o Israel y el sur o Judá.

El pueblo que se separo, tenían la esperanza que la nueva monarquía resolviera todos sus
problemas, pero solo fue un cambio de rey pero no de sistema y por eso esta separación no
beneficio nada al pueblo, ya que estos gobernantes, usaban mal el poder, y cuando hacían
grandes obras, estas no beneficiaban a los más necesitados. Estos reyes estaban más
interesados en si mismos y en su fama, por lo que se volvieron tiranos.

1. El Israel en la época de Elías

Esta era la situación del pueblo hebreo, en los tiempos de Elías, más o menos cincuenta años
después de la separación de Israel en norte y sur (Israel y Judá)

En los 57 años después de su independencia, Israel había tenido siete reyes. Tres fueron
asesinados en golpes de estado, porque había mucha inestabilidad política, siendo a esas alturas
su capital Samaria, la cuarta capital del país después de Siquem, Fanuel y tersa.

Si es cierto, que había desarrollo económico, exportaban a otros reinos, pero esto provoco la
explotación del débil, y en nombre del desarrollo, los valores del pueblo fueron mancillados u
olvidados. La política externa eran más o menos, algunos problemas con los sirios, pequeños
desacuerdos con Judá y Tiro, pero de manera general existían relaciones adecuadas.

La relación con Jehová estaba en decadencia, pues el rey Acab por conveniencia se caso con
Jezabel, hija del rey de Tiro, quien introdujo ritos de adoración a dioses paganos, con la
multiplicación de sus sacerdotes idolatras y satánicos, lo que provoco incluso la persecución y
muerte de los sacerdotes que ministraban a Jehová.

Ese fue el escenario que se encontraba Israel, cuando Elías comenzó su ministerio, quien fue
una persona que impresiono a todos, amigos y enemigos, porque enfrento este tipo de situación y
fue valiente al desafiar a los poderosos de turno, defendiendo la fe del pueblo de Dios y confiando
en que Jehová estaría con El, siempre comprometido con su pueblo y con su Dios.
Se crearon muchas leyendas alrededor de este profeta, que surgieron a lo largo de toda sus
historia, y aunque pudo haber algunas exageraciones, la Biblia solo registra los eventos que a
Dios le era necesario que su pueblo conociera.

A todos nos gustaría tener quizás todo un libro de la Biblia en donde encontrar más información
acerca de este profeta, e incluso conocer más como realmente vivió, sin embargo, el
conocimiento humano pide más, Dios no fue tan expresivo para enseñarnos muchas facetas en
la vida de este profeta, pero si nos permitió conocer un área muy importante y es de una de estas
cualidades o dones que queremos enfatizar mas en este estudio sobre su vida y ministerio, del
corazón intercesor que El mostro a todos los que vivieron cerca de El,

Elías no dejo ningún escrito, fueron sus discípulos los que transmitieron lo que aprendieron de El,
recuerdos que fueron conservados de boca a boca, pero al final del siglo nueve a.C alguien
decidió ponerlo por escrito , y es para nosotros ahora, una verdadera historia de Fe. Estos
discípulos tenían el espíritu de Elías y luchaban para mantener al pueblo en la fidelidad a Dios y
en la observancia de su ley.

1. Elías hombre de Dios

El profeta Elías es conocido como “El hombre de Dios”, no de cualquier Dios, sino de Jehová, el
Dios nuestro, Dios vivo y liberador, el Dios de la alianza. Este profeta permitió que Dios tomase su
vida por su cuenta, la palabra del Señor vino hasta Él y le empujaba a accionar; el ángel de Dios
le animaba y orientaba, el Espiritu de Dios podía disponer de El y arrebatarlo en cualquier
momento para los servicios más imprevisibles, la mano de Dios venia sobre El y le hacia correr
más aprisa que el propio rey.

Y vino a él palabra de Jehová, diciendo: Apártate de aquí, y vuélvete al oriente, y escóndete en el


arroyo de Querit, que está frente al Jordán. Vino luego a él palabra de Jehová, diciendo:
Levántate, vete a Sarepta de Sidón, y mora allí; he aquí yo he dado orden allí a una mujer viuda
que te sustente. Pasados muchos días, vino palabra de Jehová a Elías en el tercer año, diciendo:
Ve, muéstrate a Acab, y yo haré llover sobre la faz de la tierra. Y allí se metió en una cueva,
donde pasó la noche. Y vino a él palabra de Jehová, el cual le dijo: ¿Qué haces aquí, Elías? Y la
mano de Jehová estuvo sobre Elías, el cual ciñó sus lomos, y corrió delante de Acab hasta llegar
a Jezreel. 1ª Reyes 17, 18,19

Estas experiencias con Jehová, capacita a Elías para percibir y desenmascarar la falsa imagen de
Dios divulgada por la religión de Acab y se convierte para el pueblo en un hombre que tiene la
revelación del Dios vivo y verdadero. Por eso la gente hablaba del Dios de Elías; pues El no
actuaba por interés propio, era el celo de Dios que lo impulsaba y todo lo que hacía, lo hacía en
el nombre de Dios.

Cuando llegó la hora de ofrecerse el holocausto, se acercó el profeta Elías y dijo: Jehová Dios de
Abraham, de Isaac y de Israel, sea hoy manifiesto que tú eres Dios en Israel, y que yo soy tu
siervo, y que por mandato tuyo he hecho todas estas cosas. 1ª Reyes 18:36

Para la gente, los pobres, sus compañeros de la escuela de profetas, la comunidad en general de
Betel y Jericó, Elías era el hombre de Dios que siempre hablaba la “Palabra de Dios” ese siervo
dispuesto, hombre de fuego cuya palabra ardía como una antorcha y como aquel que debe volver
al final de los tiempos para restablecer las tribus de Israel, y así preparar al pueblo de Dios para la
gran batalla final.

1. Elías hombre de Oración


Esta es la lección más importante que nos ha quedado en la memoria de este gran profeta, quien
tenía un corazón intercesor, hombre como nosotros, que oro con insistencia para que no
lloviera, y no hubo lluvia en la tierra por tres años y medio. De nuevo volvió a orar y el cielo envió
su lluvia y la tierra volvió a producir fruto.

Y es que Elías sabia orar, pues su oración accionaba el poder de Dios favor del pueblo: Devolvió
la vida al hijo de la viuda; trajo la lluvia después de una sequia prolongada, hizo descender fuego
sobre el capitán que cumplía las ordenes injustas del rey ACab e hizo que el fuego consumiera el
sacrificio y probo al pueblo que Jehová es el verdadero Dios.

¿Cómo llenaba su vida de oración con Dios? en las fuentes de la fe que estaban en el origen del
pueblo hebreo:

1. Se retiro al desierto de Querit, del otro lado del Jordán, de donde en tiempos de los jueces, el
pueblo había venido para ocupar la tierra, y allí bebió del torrente de agua y recibía pan y carne,
como el pueblo en los tiempos en el desierto

Apártate de aquí, y vuélvete al oriente, y escóndete en el arroyo de Querit, que está frente al
Jordán. 1ª Reyes 17:3

Partió luego de Elim toda la congregación de los hijos de Israel, y vino al desierto de Sin, que está
entre Elim y Sinaí, a los quince días del segundo mes después que salieron de la tierra de
Egipto. Éxodo 16:1

Toda la congregación de los hijos de Israel partió del desierto de Sin por sus jornadas, conforme
al mandamiento de Jehová, y acamparon en Refidim; y no había agua para que el pueblo
bebiese. Éxodo 17:6

1. Anduvo por el desierto al sur de Betsaida, cuarenta días y cuarenta noches, donde en tiempos del
Éxodo el pueblo anduvo durante cuarenta años

Y volviendo el ángel de Jehová la segunda vez, lo tocó, diciendo: Levántate y come, porque largo
camino te resta. Se levantó, pues, y comió y bebió; y fortalecido con aquella comida caminó
cuarenta días y cuarenta noches hasta Horeb, el monte de Dios. Y allí se metió en una cueva,
donde pasó la noche. Y vino a él palabra de Jehová, el cual le dijo: ¿Qué haces aquí, Elías? 1ª
Reyes 19:7-9

Y te acordarás de todo el camino por donde te ha traído Jehová tu Dios estos cuarenta años en el
desierto, para afligirte, para probarte, para saber lo que había en tu corazón, si habías de guardar
o no sus mandamientos. Deuteronomio 8:2

1. Fue hasta el monte Horeb, montaña de Dios, donde en tiempos del Éxodo, naciera el pueblo y
fuera concluida la alianza con Dios.

En el mes tercero de la salida de los hijos de Israel de la tierra de Egipto, en el mismo día llegaron
al desierto de Sinaí. Habían salido de Refidim, y llegaron al desierto de Sinaí, y acamparon en el
desierto; y acampó allí Israel delante del monte. Éxodo 19:1-2

1. Vivía en la soledad de las montañas, pues el Dios de Israel era conocido como un Dios de las
montañas
Y los siervos del rey de Siria le dijeron: Sus dioses son dioses de los montes, por eso nos han
vencido; mas si peleáremos con ellos en la llanura, se verá si no los vencemos. Vino entonces el
varón de Dios al rey de Israel, y le habló diciendo: Así dijo Jehová: Por cuanto los sirios han
dicho: Jehová es Dios de los montes, y no Dios de los valles, yo entregaré toda esta gran multitud
en tu mano, para que conozcáis que yo soy Jehová. 1ª Reyes 20:23,28

1. Convivió con la viuda que a pesar de la sequia y de la pobreza conservaba el ideal antiguo de la
alianza y practicaba el compartir de los poco que tenia

Levántate, vete a Sarepta de Sidón, y mora allí; he aquí yo he dado orden allí a una mujer
viuda que te sustente. 1ª Reyes 17:9

En pocas palabras, Elías volvió a caminar el camino que antes había recorrido el pueblo de Dios,
y vuelve a las fuentes de la fe y así se reencuentra con Dios y se pone a su servicio.

1. La posición de un profeta con corazón de intercesor

Elías al igual que Jehová, toma posición en los conflictos. Se coloca del lado de los pequeños y
oprimidos, y asume su causa, toma posición contra los grandes que los oprimen y explotan.

1. Toma posición contra el rey Acab, que ha violado la alianza,

Y él respondió: Yo no he turbado a Israel, sino tú y la casa de tu padre, dejando los


mandamientos de Jehová, y siguiendo a los baales. 1ª Reyes 18:18

2. Toma posición contra la reina Jezabel que roba y mata

De Jezabel también ha hablado Jehová, diciendo: Los perros comerán a Jezabel en el muro de
Jezreel 1ª Reyes 21:23

3.Toma posición contra el rey Ocosias que consulta a los falsos dioses

Entonces el ángel de Jehová habló a Elías tisbita, diciendo: Levántate, y sube a encontrarte con
los mensajeros del rey de Samaria, y diles: ¿No hay Dios en Israel, que vais a consultar a Baal-
zebub dios de Ecrón? Por tanto, así ha dicho Jehová: Del lecho en que estás no te levantarás,
sino que ciertamente morirás. Y Elías se fue. 2ª Reyes 1: 3-4

4.Toma posición contra el rey Joram de Judá que mata a los hermanos y lleva al pueblo a
prostituirse con otros dioses

Y le llegó una carta del profeta Elías, que decía: Jehová el Dios de David tu padre ha dicho así:
Por cuanto no has andado en los caminos de Josafat tu padre, ni en los caminos de Asa rey de
Judá, sino que has andado en el camino de los reyes de Israel, y has hecho que fornicase Judá y
los moradores de Jerusalén, como fornicó la casa de Acab; y además has dado muerte a tus
hermanos, a la familia de tu padre, los cuales eran mejores que tú; he aquí Jehová herirá a tu
pueblo de una gran plaga, y a tus hijos y a tus mujeres, y a todo cuanto tienes; y a ti con muchas
enfermedades, con enfermedad de tus intestinos, hasta que se te salgan a causa de tu
persistente enfermedad. 2ª Crónicas 21:12-15

5. Toma posición contra los falsos profetas que apoyan el gobierno injusto de Acab y Jezabel
Entonces Elías les dijo: Prended a los profetas de Baal, para que no escape ninguno. Y ellos los
prendieron; y los llevó Elías al arroyo de Cisón, y allí los degolló. 1ª Reyes 18:40

6. Toma posición también contra el capitán que ejecuta órdenes injustas de prisión

Volvió el rey a enviar a él otro capitán de cincuenta con sus cincuenta; y le habló y dijo: Varón de
Dios, el rey ha dicho así: Desciende pronto. Y le respondió Elías y dijo: Si yo soy varón de Dios,
descienda fuego del cielo, y consúmate con tus cincuenta. (C) Y descendió fuego del cielo, y lo
consumió a él y a sus cincuenta. 2 Reyes 1:11-12

7. Toma posición a favor de la viuda y de su hijo

Elías le dijo: No tengas temor; ve, haz como has dicho; pero hazme a mí primero de ello una
pequeña torta cocida debajo de la ceniza, y tráemela; y después harás para ti y para tu
hijo. Porque Jehová Dios de Israel ha dicho así: La harina de la tinaja no escaseará, ni el aceite
de la vasija disminuirá, hasta el día en que Jehová haga llover sobre la faz de la tierra. 1ª Reyes
17:13-14

8. Toma posición a favor de Abdías, el empleado del rey, que arriesgo su vida protegiendo a los
sacerdotes de Jehová

Y yendo Abdías por el camino, se encontró con Elías; y cuando lo reconoció, se postró sobre su
rostro y dijo: ¿No eres tú mi señor Elías? Y él respondió: Yo soy; ve, di a tu amo: Aquí está
Elías. Pero él dijo: ¿En qué he pecado, para que entregues a tu siervo en mano de Acab para
que me mate? ¿Y ahora dices tú: Ve, di a tu amo: Aquí está Elías; para que él me mate? Y le
dijo Elías: Vive Jehová de los ejércitos, en cuya presencia estoy, que hoy me mostraré a él. 1ª
Reyes 18:7-8,14-15

9.Toma posición a favor de Nabot, campesino asesinado a causa de su fidelidad a la ley

Y Nabot respondió a Acab: Guárdeme Jehová de que yo te dé a ti la heredad de mis padres.


Entonces vino palabra de Jehová a Elías tisbita, diciendo: Levántate, desciende a encontrarte con
Acab rey de Israel, que está en Samaria; he aquí él está en la viña de Nabot, a la cual ha
descendido para tomar posesión de ella. Y le hablarás diciendo: Así ha dicho Jehová: ¿No
mataste, y también has despojado? Y volverás a hablarle, diciendo: Así ha dicho Jehová: En el
mismo lugar donde lamieron los perros la sangre de Nabot, los perros lamerán también tu sangre,
tu misma sangre. Y Acab dijo a Elías: ¿Me has hallado, enemigo mío? El respondió: Te he
encontrado, porque te has vendido a hacer lo malo delante de Jehová. He aquí yo traigo mal
sobre ti, y barreré tu posteridad y destruiré hasta el último varón de la casa de Acab, tanto el
siervo como el libre en Israel. 1ª Reyes 21:3, 17-21

La tierra no se venderá a perpetuidad, porque la tierra mía es; pues vosotros forasteros y
extranjeros sois para conmigo. Levíticos 25:23

10. Toma posición en favor del capitán que por amor a la vida desobedece la orden del rey

Volvió a enviar al tercer capitán de cincuenta con sus cincuenta; y subiendo aquel tercer capitán
de cincuenta, se puso de rodillas delante de Elías y le rogó, diciendo: Varón de Dios, te ruego que
sea de valor delante de tus ojos mi vida, y la vida de estos tus cincuenta siervos. He aquí ha
descendido fuego del cielo, y ha consumido a los dos primeros capitanes de cincuenta con sus
cincuenta; sea estimada ahora mi vida delante de tus ojos. 2ª Reyes 1: 13-15
11. Toma posición a favor del pueblo confundido que fue desviado por la propaganda oficial de los
falsos profetas

Entonces Acab convocó a todos los hijos de Israel, y reunió a los profetas en el monte
Carmelo. Y acercándose Elías a todo el pueblo, dijo: ¿Hasta cuándo claudicaréis vosotros entre
dos pensamientos? Si Jehová es Dios, seguidle; y si Baal, id en pos de él. Y el pueblo no
respondió palabra. Viéndolo todo el pueblo, se postraron y dijeron: !!Jehová es el Dios, Jehová es
el Dios! 1ª Reyes 18:20-21,39
Guerra espiritual
1. Introducción

Hay una guerra muy antigua entre el espíritu de Elías y el espíritu de Jezabel. En esta guerra
Elías representa la voz del cielo, la voz del arrepentimiento y el regreso a Dios. Jezabel, en el
sentido opuesto, todo lo que busca entorpecer y derrotar la labor del arrepentimiento. Su meta es
silenciar el llamado profético.

Para comprender mejor lo anterior debemos entender a estos dos adversarios como los muestran
las escrituras. Cada uno es la contrapartida del otro. Elías es valeroso, Jezabel es descarada.
Elías va contra todo mal, Jezabel va contra todo lo bueno. Si Elías habla con las palabras de
Dios, Jezabel habla con base al mundo de la brujería y el engaño.

Elías era el líder espiritual de la escuela de los profetas en Israel. Bajo su autoridad estaban los
hijos de los profetas, cientos de videntes y ministros profetas que proclamaban la Palabra del
Señor. Pero en esta Guerra, Jezabel asesino sistemáticamente a los siervos de Dios. Hasta que
llego Elías como el último de los profetas y reto a los 450 profetas de Baal y a los 400 profetas de
Acera a demostrar su poder: sus dioses contra el poder de Jehová.

Y Elías volvió a decir al pueblo: Sólo yo he quedado profeta de Jehová; mas de los profetas de
Baal hay cuatrocientos cincuenta hombres. 1a Reyes 18:22

Estos falsos profetas, sacerdotes satánicos, que comían en la “mesa de Jezabel” eran los
individuos más poderosos y demonizados que el reino de las tinieblas pudo producir. El Rey
Acab, esposo de Jezabel envío un mensaje a todo Israel y la nación para que viniesen y
presenciasen el conflicto existente entre el Señor y sus dioses.

Envía, pues, ahora y congrégame a todo Israel en el monte Carmelo, y los cuatrocientos
cincuenta profetas de Baal, y los cuatrocientos profetas de Asera, que comen de la mesa de
Jezabel. 1a Reyes 18:19

1. Elías contra los falsos profetas

Hubo un reto promovido por Elías y los falsos profetas y los términos fueron muy simples: cada
uno debía poner un buey en el altar. Elías les dijo: “…invocaran el nombre de su dios, y yo
invocare el nombre del Señor. El que responda con fuego, ese es el Dios verdadero!

Invocad luego vosotros el nombre de vuestros dioses, y yo invocaré el nombre de Jehová; y el


Dios que respondiere por medio de fuego, ése sea Dios. Y todo el pueblo respondió, diciendo:
Bien dicho. 1a Reyes 18:24

Seis horas mas tarde los sacerdotes de lo oculto no podían aun producir fuego, pasaron doce
horas y Elías comenzó a burlarse de ellos y les dijo ¡Griten mas fuerte! Les decía. Seguro que es
un dios, pero tal vez este meditando, o este ocupado o de viaje. ¡A lo mejor se ha quedado
dormido y hay que despertarlo!

Y aconteció al mediodía, que Elías se burlaba de ellos, diciendo: Gritad en alta voz, porque dios
es; quizá está meditando, o tiene algún trabajo, o va de camino; tal vez duerme, y hay que
despertarle. 1a Reyes 18:27
Justo antes de la noche Elías oro sobre su sacrificio y en ese momento cayo el fuego del Señor y
quemo el holocausto, la leña, las piedras y el suelo, y hasta lamio el agua de la zanja. Cuando
todo el pueblo vio esto, se postro y exclamo:” ¡Jehová es el Dios, Jehová es el Dios!
Inmediatamente después de esta demostración del poder de Dios, Elías instruyo a los israelitas a
reunir a los profetas de Baal y ejecutarlos.

Entonces cayó fuego de Jehová, y consumió el holocausto, la leña, las piedras y el polvo, y aun
lamió el agua que estaba en la zanja. Viéndolo todo el pueblo, se postraron y dijeron: !!Jehová es
el Dios, Jehová es el Dios! 1a Reyes 18:38-39.

Podríamos concluir que después de esto, Elías se dirigió donde Jezabel y con las misma
confianza y autoridad, la destruyo. Pero no fue así, Elías sin embargo, es preso en una batalla
espiritual. Jezabel en un ataque de ira, soltó maldiciones contra Elías que lo abrumaron y se
afligió su alma y tuvo miedo, y un temor tal que prefirió huir en lugar de enfrentarla.

¿Como es posible que un profeta tan poderoso pueda asustarse y huir? La respuesta no es
sencilla, y aun más, la situación de El se vuelve difícil, y se aleja del lugar. Lo encontramos
después sentado bajo un árbol de enebro, lamentándose que no era mejor que sus padres y
rogando por su muerte ¿Que fue lo que abrumo a este hombre de Dios de tal manera que cayo
preso de tanto miedo y desaliento? El espíritu de Jezabel

Y él se fue por el desierto un día de camino, y vino y se sentó debajo de un enebro; y deseando
morirse, dijo: Basta ya, oh Jehová, quítame la vida, pues no soy yo mejor que mis padres. 1a
Reyes 19:4

Hay que entender que cuando nos enfrentamos al espíritu de Jezabel, un principado poderoso,
puede que podamos resistir la tentación y la brujería, pero debemos protegernos del espíritu de
desaliento y de miedo ya que puede que venga contra nosotros y silencie nuestra oración.

1. La batalla continua

Esta Guerra entre Elías y Jezabel continúa y ha estado en los eventos más importantes de la
historia del hombre. Recordemos que las Escrituras se refieren a Juan el Bautista como el que
debía venir antes del Señor Jesucristo, con el espíritu y el poder de Elías.

E irá delante de él con el espíritu y el poder de Elías, para hacer volver los corazones de los
padres a los hijos, y de los rebeldes a la prudencia de los justos, para preparar al Señor un
pueblo bien dispuesto. Lucas 1:17.

Jesús dijo de Juan el bautista:

Y si queréis recibirlo, él es aquel Elías que había de venir Mateo 11:14

Mas os digo que Elías ya vino y no le conocieron, sino que hicieron con él todo lo que quisieron;
así también el Hijo del Hombre padecerá de ellos. Entonces los discípulos comprendieron que les
había hablado de Juan el Bautista. Mateo 17:11-13,

Incluso Juan tenía la apariencia de Elías. Como Elías, Juan proclamo la necesidad de
arrepentirse del pecado que veía. Específicamente la vida adultera del rey Herodes y su esposa
Herodías. Cuando Juan los confronto Herodías lo encarcelo ¿Quien manipulaba a Herodías y la
controlaba? De la misma forma como el espíritu de Elías ministraba a través de Juan, Jezabel
tenía influencia en el mundo a través de Herodías.
Porque el mismo Herodes había enviado y prendido a Juan, y le había encadenado en la cárcel
por causa de Herodías, mujer de Felipe su hermano; pues la había tomado por mujer. Porque
Juan decía a Herodes: No te es lícito tener la mujer de tu hermano. Pero Herodías le acechaba, y
deseaba matarle, y no podía; Marcos 6:17-19

Y así como Jezabel actuó contra Elías, Herodías lo hizo contra Juan. El miedo y el desaliento
cubrieron la vida de este siervo de Dios, quien había visto descender al Espíritu Santo como una
paloma sobre Jesús, y quien escucho la voz audible del padre al referirse a su Hijo Jesús. Este
hombre que había tenido contacto con la Trinidad, ahora duda de su visión.

Se presento la oportunidad, de que este espíritu maligno actuara cuando Herodes dio un
banquete Debido a la Guerra entre estos espíritus, Herodías hizo que su hija danzara frente a
Herodes, excitándoles a tal punto que este le prometió lo que ella quisiera. Y ella a petición de su
madre demanda la cabeza de Juan el Bautista, quien fue degollado, porque denuncio el pecado y
que mejor que silenciar su boca y eliminar su autoridad. De esta manera la confrontación eterna
entre ambos espíritus se detendría al menos temporalmente.

Y le juró: Todo lo que me pidas te daré, hasta la mitad de mi reino. Saliendo ella, dijo a su madre:
¿Qué pediré? Y ella le dijo: La cabeza de Juan el Bautista. Entonces ella entró prontamente al
rey, y pidió diciendo: Quiero que ahora mismo me des en un plato la cabeza de Juan el
Bautista. Marcos 6:23-25

En todos los tiempos, siempre ha abundado la idolatría y la hechicería, voces que rechazan la
autoridad de Dios y exaltan la rebelión, En casi todos los medios de comunicación, pero mas en el
cine y la televisión se induce a que se cometan inmoralidades sexuales, pornografía, violaciones,
abuso sexual en niños, adulterio, fornicación, es el espíritu de Jezabel, que esta presente con
mas intensidad que nunca.

Pero alegrémonos, los que aborrecemos el pecado y la corrupción, el espíritu de Elías también
esta presente entre nosotros, para conducirnos al arrepentimiento y preparar a la gente a que se
vuelva a Dios.

1. Dios siempre nos hace ganar

Dios destruyo a Jezabel, a través de Jehu, el recién Coronado rey de Israel quien fue enviado por
la palabra del Señor a través de Eliseo, sucesor de Elías, para que se cumpliera el juicio de Dios
contra esta terrible mujer. Jehu y sus hombres llegaron con mucho furor ante Jezabel y los reyes
de Judá se acercaron a Él y le preguntaron si venía en son de paz.

El respondió, ¿Qué paz, con las fornicaciones de Jezabel tu madre, y sus muchas hechicerías?.
Jehu mato a los dos reyes e inmediatamente enfrento a Jezabel. Quien murió aplastada cuando
la tiraron del Segundo piso y Jehu la atropello con su caballo

Entonces Joram dijo: Unce el carro. Y cuando estaba uncido su carro, salieron Joram rey de
Israel y Ocozías rey de Judá, cada uno en su carro, y salieron a encontrar a Jehú, al cual hallaron
en la heredad de Nabot de Jezreel. Cuando vio Joram a Jehú, dijo: ¿Hay paz, Jehú? Y él
respondió: ¿Qué paz, con las fornicaciones de Jezabel tu madre, y sus muchas
hechicerías? Entonces Joram volvió las riendas y huyó, y dijo a Ocozías: !!Traición, Ocozías!
Pero Jehú entesó su arco, e hirió a Joram entre las espaldas; y la saeta salió por su corazón, y él
cayó en su carro. Viendo esto Ocozías rey de Judá, huyó por el camino de la casa del huerto. Y lo
siguió Jehú, diciendo: Herid también a éste en el carro. Y le hirieron a la subida de Gur, junto a
Ibleam. Y Ocozías huyó a Meguido, pero murió allí. Vino después Jehú a Jezreel; y cuando
Jezabel lo oyó, se pintó los ojos con antimonio, y atavió su cabeza, y se asomó a una ventana. Y
cuando entraba Jehú por la puerta, ella dijo: ¿Sucedió bien a Zimri, que mató a su
señor? Alzando él entonces su rostro hacia la ventana, dijo: ¿Quién está conmigo? ¿quién? Y se
inclinaron hacia él dos o tres eunucos. Y él les dijo: Echadla abajo. Y ellos la echaron; y parte de
su sangre salpicó en la pared, y en los caballos; y él la atropelló. . 2a Reyes 9:21-33

Había algo en el espíritu de Jehu que hoy en día necesitamos en nuestra Guerra contra Jezabel.
Jehu no tuvo misericordia, no permitió ninguna clase de simpatía o compromiso con este espíritu
demoniaco. Este espíritu maligno quiere silenciar nuestra autoridad spiritual callando nuestra voz.
Y en la medida que nos libramos de sus seducciones debemos aprender a hablar en contra de las
influencias de Jezabel.

Usemos el nombre de Jesús para ordenar a este espiritu a alejarse de nuestros hijos, nuestra
familia, iglesia y de nuestra alma, no dejemos que intente degollarnos como lo hizo con Juan el
Bautista.
El mensaje final de Elías el profeta
1. Introducción

El profeta Malaquías revela unas palabras que tienen un significado profético impactante que a
veces se interpreta mal. Familiarizarse con este pasaje podría ayudarnos a entender lo que
estamos queriendo explicar:

“Mirad, yo os envío al profeta Elías, antes que venga el grande y terrible día del Señor. El
convertirá el corazón de los padres a los hijos y el corazón de los hijos a los padres. No sea que
yo venga y hiera la tierra con maldición.”Malaquías 4: 5,6

En los tiempos de Jesús, se creía que el profeta Elías regresaría del cielo a vivir en la Tierra o
posiblemente renacería en un nuevo hombre. Jesús preguntó una vez a sus discípulos,

“¿Quién dice la gente que soy yo? Ellos respondieron: Unos, Juan el Bautista; otros, Elías (la
forma griega de Elí) y otros, algún antiguo profeta que ha resucitado” Lucas 9:18,19

Los Judíos Vivian esperando que Elías viniese pronto a anunciar la llegada del mesías, pero esta
profecía en Malaquías no debe entenderse que el profeta del Antiguo Testamento volvería a la
tierra. ¿Sería que esta profecía se refería al regreso del espíritu de avivamiento y reforma de
Elías? ¿Por qué decimos esto? El ángel Gabriel al aparecérsele a Zacarías le dijo así:

“Precederá al Señor, con el espíritu y poder de Elías, para volver el corazón de los padres a los
hijos y de los rebeldes a la prudencia de los justos; a fin de preparar para el Señor un pueblo bien
dispuesto” Lucas 1:17

Gabriel fue el primero en anunciar que en Juan el bautista se cumplía la profecía de Malaquías.
Juan habría de preceder al Señor para realizar una tarea especial de avivamiento y reforma.
Jesús confirmo esto más tarde cuando dijo:

“Porque todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan. Y si queréis recibirlo, El es aquel Elias
que había de venir” Mateo 11:13-14

…Yo os envió al profeta Elías… Malaquías profetiza que Elías vendría y ministraría antes de la
llegada del día del Señor. El N.T revela que eso se refiere a Juan el Bautista

Mientras ellos se iban, comenzó Jesús a decir de Juan a la gente: ¿Qué salisteis a ver al
desierto? ¿Una caña sacudida por el viento? ¿O qué salisteis a ver? ¿A un hombre cubierto de
vestiduras delicadas? He aquí, los que llevan vestiduras delicadas, en las casas de los reyes
están. Pero ¿qué salisteis a ver? ¿A un profeta? Sí, os digo, y más que profeta. Porque éste es
de quien está escrito: He aquí, yo envío mi mensajero delante de tu faz, El cual preparará tu
camino delante de ti. De cierto os digo: Entre los que nacen de mujer no se ha levantado otro
mayor que Juan el Bautista; pero el más pequeño en el reino de los cielos, mayor es que él.
Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia, y los
violentos lo arrebatan. Porque todos los profetas y la ley profetizaron hasta Juan. Y si queréis
recibirlo, él es aquel Elías que había de venir. Mateo 11:7-14

Quien con el espíritu y poder de Elías, preparo el camino para el Mesías.


E irá delante de él con el espíritu y el poder de Elías, para hacer volver los corazones de los
padres a los hijos, y de los rebeldes a la prudencia de los justos, para preparar al Señor un
pueblo bien dispuesto. Lucas 1:17

Pero la profecía de Malaquías no finaliza allí, existe también un cumplimiento para estos tiempos,
observemos lo que dice:

“Yo os envió al profeta Elías, antes que venga el grande y terrible día del Señor” Malaquías 4:5

La mención de Elías, tenía el propósito de anunciar la llegada del Mesías, Juan fue un tipo de
Elías durante el primer advenimiento de Cristo. Moisés y Elías aparecieron juntos en el monte de
la transfiguración y también es posible que sean los dos testigos en la gran tribulación. Este
personaje mencionado en apocalipsis su tarea será predicar la reconciliación con Dios para que
las almas puedan creer y ser liberadas de la maldición de Dios

Que también se expresa como “El gran día de su ira” en apocalipsis 6:17, sinónimo de la segunda
venida. Es por eso que este otro cumplimiento apunta hacia un periodo justamente antes del
regreso de Jesús. Sobre este punto algunos creen que Elías vendrá otra vez durante el periodo
de la tribulación y será uno de los dos testigos mencionados en Apocalipsis Apocalipsis 11:3

…Hará volver el corazón de los padres hacia los hijos…..El futuro ministerio del profeta
venidero se describe en términos de reconciliar a las familias con Dios y de reconciliar a las
personas unas con otras. Juan predico con ese fin. Tanto los padres, como los pastores, deben
hacer de esa meta de Juan el bautista su propio propósito para la iglesia preparándose para la
venida del Señor.

1. Espíritu y poder de Elías

Para entender mejor esta profecía, necesitamos regresar a los tiempos de Elías. Descubrimos
que la primera persona llena del espíritu y poder de Elías” no fue Juan el Bautista, sino Eliseo,
siervo de Elías. Cuando Dios revelo que pronto llevaría a Elías al cielo, Eliseo pidió recibir un
doble porción del espíritu de Elías:

“Eliseo dijo: Te ruego que una doble porción de tu espíritu venga sobre mí. Y Elías le dijo: Cosa
difícil has pedido. Sime ves cuando yo sea quitado de ti, asi te será hecho, Si no, no” 2ª Reyes
2:9-10

Mientras Eliseo era testigo del rapto de Elías, fue bautizado con la doble porción del espíritu de
Elías que solicito:

“Al verlo, los hijos de los profetas que estaban en Jerico del otro lado, dijeron: El espíritu de Elias
reposo sobre Eliseo” 2ª Reyes 2:15

¿Qué hará el espíritu y poder de Elías?

“El hará volver el corazón de los padres hacia los hijos y el corazón de los hijos hacia los
padres” Malaquías 4:6

En un sentido literal el avivamiento trae una nueva expresión de amor a la familia que se extiende
a la comunidad. La unidad más básica de cualquier sociedad, gobierno o iglesia es la familia. El
derramamiento del Espíritu Santo siempre resultara en el amor que lleva la obediencia de Sus
mandatos, Jesús dijo:
“Si me amáis, guardareis mis mandamientos” Juan 14:15

“Honra a tu padre y a tu madre, no irritéis a vuestros hijos, para que no se desalienten”

El mensaje de Elías traerá el poder del amor y bendición a las familias que lo reciban y maldición
a las que lo rechacen

“Yo soy Jehová tu Dios fuerte, celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la
tercera y cuarta generación de los que me aborrecen. Pero trato con invariable amor por mil
generaciones a los que me aman y guardan mis mandamientos” Éxodo 20:5-6

1. Características de los dos hombres de Dios

A continuación comentaremos sobre las características que sobresalieron tanto en la vida de


Elías como de Juan el Bautista, estos dos grandes profetas del Antiguo y Nuevo Testamento.

1. Predicaban con denuedo, y atrevimiento ante los gobernantes y reyes

Cuando Acab vio a Elías, le dijo: ¿Eres tú el que turbas a Israel? Y él respondió: Yo no he
turbado a Israel, sino tú y la casa de tu padre, dejando los mandamientos de Jehová, y siguiendo
a los baales. Envía, pues, ahora y congrégame a todo Israel en el monte Carmelo, y los
cuatrocientos cincuenta profetas de Baal, y los cuatrocientos profetas de Asera, que comen de la
mesa de Jezabel. 1ª Reyes 18:17-19

Porque el mismo Herodes había enviado y prendido a Juan, y le había encadenado en la cárcel
por causa de Herodías, mujer de Felipe su hermano; pues la había tomado por mujer. Porque
Juan decía a Herodes: No te es lícito tener la mujer de tu hermano Marcos 6:17-18

Tanto Elías como Juan nunca mostraron temor al predicar su mensaje en forma directa y sin
rodeos antes los gobernantes de esa época. Jesus dijo también que esto ocurriría otra vez en los
postreros tiempos:

….Y os llevaran ante gobernantes y reyes por mi causa, por testimonio a ellos… Marcos 13:9

2. Practicaban una dieta rigurosa y vivian un estilo de vida sencillo

Comían pan, agua, langostas y miel silvestre, ¿sería esta una dieta rigurosa? Esto sin duda les
ayudaba a mantener su mente clara y sus cuerpos fuertes y sujeta la carne al espíritu.

Entonces él se levantó y se fue a Sarepta. Y cuando llegó a la puerta de la ciudad, he aquí una
mujer viuda que estaba allí recogiendo leña; y él la llamó, y le dijo: Te ruego que me traigas un
poco de agua en un vaso, para que beba. Y yendo ella para traérsela, él la volvió a llamar, y le
dijo: Te ruego que me traigas también un bocado de pan en tu mano. 1ª Reyes 17:10-11

Y Juan estaba vestido de pelo de camello, y tenía un cinto de cuero alrededor de sus lomos; y
comía langostas y miel silvestre. Marcos 1:6

La iglesia debe tener una conexión estrecha entre cuerpo y espíritu, que comer y que beber y los
hábitos personales, tendrán un efecto directo en la manera que discernamos la verdad.

3. Vestían ropa modesta


En aquellos tiempos los reyes y sacerdotes solían usar adornos lujosos y túnicas largas
ornamentadas, que contrastaban con la modestia y sencillez de Elías y Juan. En estos tiempos
se da mucha atención a la moda y a la ostentación en forma tan arrogante y los diseñadores de
modas se preocupan en destacar la sexualidad de la persona.

Una vez más la iglesia necesita a los Elías de los últimos tiempos que den testimonio de Cristo
dando ejemplo de humildad y sencillez a través de vestirse modestamente.

Y ellos le respondieron: Un varón que tenía vestido de pelo, y ceñía sus lomos con un cinturón de
cuero. Entonces él dijo: Es Elías tisbita. 2a Reyes 1:8

Y Juan estaba vestido de pelo de camello, y tenía un cinto de cuero alrededor de sus lomos ) y
comía langostas y miel silvestre. Marcos 1:6

4. Fueron grandes discipuladores

Elías no solo convirtió a Eliseo en su discípulo, sino que también visitaba las escuelas de los
profetas que estaban esparcidas por toda la tierra de Israel. Estos centros de entrenamiento
combinaban la instrucción espiritual con la práctica de destrezas en el trabajo.

Juan enseñaba su fe y les dedicaba tiempo igual que Elías, por eso el ultimo gran movimiento de
Dios será dirigido por laicos llenos del Espiritu Santo. La iglesia debe concentrarse en entrenar,
hacer discípulos y movilizar a cada miembro de la iglesia.

Partiendo él de allí, halló a Eliseo hijo de Safat, que araba con doce yuntas delante de sí, y él
tenía la última. Y pasando Elías por delante de él, echó sobre él su manto.1ª Reyes 19:19

Los discípulos de Juan le dieron las nuevas de todas estas cosas. Y llamó Juan a dos de sus
discípulos, Lucas 7:18

5. Su mensaje era arrepentimiento y muerte al yo.

Y Elías le dijo: Te ruego que te quedes aquí, porque Jehová me ha enviado al Jordán. Y él dijo:
Vive Jehová, y vive tu alma, que no te dejaré. Fueron, pues, ambos. 2a Reyes 2:6

Y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado. Pues éste es aquel de
quien habló el profeta Isaías, cuando dijo: Voz del que clama en el desierto: Preparad el camino
del Señor, Enderezad sus sendas Mateo 3: 2-3

6. De actitud y carácter humilde

Acab subió a comer y a beber. Y Elías subió a la cumbre del Carmelo, y postrándose en tierra,
puso su rostro entre las rodillas. 1ª Reyes 18:42

Yo a la verdad os bautizo en agua para arrepentimiento; pero el que viene tras mí, cuyo calzado
yo no soy digno de llevar, es más poderoso que yo; él os bautizará en Espíritu Santo y
fuego. Mateo 3:11

7. Sufrieron persecución

Entonces envió Jezabel a Elías un mensajero, diciendo: Así me hagan los dioses, y aun me
añadan, si mañana a estas horas yo no he puesto tu persona como la de uno de ellos. Viendo,
pues, el peligro, se levantó y se fue para salvar su vida, y vino a Beerseba, que está en Judá, y
dejó allí a su criado. 1ª Reyes 19:2

Saliendo ella, dijo a su madre: ¿Qué pediré? Y ella le dijo: La cabeza de Juan el Bautista. Marcos
6:24

8. Precedieron a reyes

Y la mano de Jehová estuvo sobre Elías, el cual ciñó sus lomos, y corrió delante de Acab hasta
llegar a Jezreel. 1ª Reyes 18:30

Como está escrito en el libro de las palabras del profeta Isaías, que dice: Voz del que clama en el
desierto: Preparad el camino del Señor; Enderezad sus sendas. Lucas 3:4

9. Daban siempre gloria a Dios en todo

Respóndeme, Jehová, respóndeme, para que conozca este pueblo que tú, oh Jehová, eres
el Dios, y que tú vuelves a ti el corazón de ellos. 1ª Reyes 18:37

Vosotros mismos me sois testigos de que dije: Yo no soy el Cristo, sino que soy enviado delante
de él. El que tiene la esposa, es el esposo; mas el amigo del esposo, que está a su lado y le oye,
se goza grandemente de la voz del esposo; así pues, este mi gozo está cumplido. Es necesario
que él crezca, pero que yo mengue. Juan 3:28-30

10. Repararon el altar de Dios

Entonces dijo Elías a todo el pueblo: Acercaos a mí. Y todo el pueblo se le acercó; y él arregló el
altar de Jehová que estaba arruinado. 1a Reyes 18:30

En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo:


arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado Mateo 3:1-2

11. Predicaron avivamiento y reformas

Envía, pues, ahora y congrégame a todo Israel en el monte Carmelo, y los cuatrocientos
cincuenta profetas de Baal, y los cuatrocientos profetas de Asera, que comen de la mesa de
Jezabel. Entonces Acab convocó a todos los hijos de Israel, y reunió a los profetas en el monte
Carmelo. Y acercándose Elías a todo el pueblo, dijo: ¿Hasta cuándo claudicaréis vosotros entre
dos pensamientos? Si Jehová es Dios, seguidle; y si Baal, id en pos de él. Y el pueblo no
respondió palabra. 1a Reyes 18:19-21

Bautizaba Juan en el desierto, y predicaba el bautismo de arrepentimiento para perdón de


pecados. Y salían a él toda la provincia de Judea, y todos los de Jerusalén; y eran bautizados por
él en el río Jordán, confesando sus pecados. Marcos 1:4-5

12. Encaminaron la gente a Dios

Cuando llegó la hora de ofrecerse el holocausto, se acercó el profeta Elías y dijo: Jehová Dios de
Abraham, de Isaac y de Israel, sea hoy manifiesto que tú eres Dios en Israel, y que yo soy tu
siervo, y que por mandato tuyo he hecho todas estas cosas. 1ª Reyes 18:36
El siguiente día vio Juan a Jesús que venía a él, y dijo: He aquí el Cordero de Dios, que quita el
pecado del mundo. Juan 1:29

Un corazón intercesor
1. Definición de intercesión

Es la oración santa, fiel y perseverante mediante la cual alguien le suplica a Dios por otro u otros
que desesperadamente necesitan la intervención de Dios.

“Y busque entre ellos hombre que hiciese vallado y que se pusiera en la brecha delante de mi, a
favor de la tierra, para que yo no la destruyese; y no lo halle” Ezequiel 22:30

Etapa en la que hacemos vallado, y esto significa levantar un cerco de tierra apisonada, de
estacas, de piedras sueltas o ramas espinosas, para defensa de un sitio o para impedir la entrada
en él. Es cuando, guiados por el Espíritu Santo oramos, clamamos y gemimos, al Señor, por las
necesidades ajenas, ya que “nuestro Rey, quien está sentado en el Trono, halla Su Suprema
Gloria en la intercesión”; en ella debemos hallar también nosotros nuestra suprema gloria.

Por medio de la intercesión, el Señor continúa Su Obra Salvadora, y sin ella no puede hacer
nada. Solo por medio de ella podemos hacer nuestra obra, y sin ella nada vale. Por medio de la
intercesión Él recibe del Padre el Espíritu Santo y todas las bendiciones espirituales para impartir;
por medio de ella, nosotros mismos somos llamados a recibir la plenitud del Espíritu de Dios, con
el poder de impartir bendiciones espirituales a otros

——El poder de la Iglesia para bendecir reposa en la intercesión———

Pedir y recibir dones celestiales para llevarlos a los hombres. La fe en la Palabra de Dios, no se
puede ejercitar ni perfeccionar tanto en ninguna otra manera como en la intercesión que pide,
espera y busca la respuesta. A través de la Escritura, en la vida de todos los santos, en la vida del
propio Hijo de Dios, a través de la historia de la iglesia de Dios, Dios es, ante todo, un Dios que
oye la oración.

1. cualidades del intercesor:


2. Ofrece sacrificios espirituales
3. Se Para en la “brecha” =Se colocarse entre Dios y el pueblo, como sacerdotes

Vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo,
para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo. 1 Pedro. 2:5

3. Deja sus propias necesidades, y suplica por las necesidades de otro y de esta manera Dios se
encarga de las nuestras.

Respondió Job a Jehová, y dijo: Yo conozco que todo lo puedes, Y que no hay pensamiento que
se esconda de ti. ¿Quién es el que oscurece el consejo sin entendimiento? Por tanto, yo hablaba
lo que no entendía; Cosas demasiado maravillosas para mí, que yo no comprendía. Oye, te
ruego, y hablaré; Te preguntaré, y tú me enseñarás. De oídas te había oído; Mas ahora mis ojos
te ven. Por tanto me aborrezco, Y me arrepiento en polvo y ceniza. Y quitó Jehová la aflicción de
Job, cuando él hubo orado por sus amigos; y aumentó al doble todas las cosas que habían sido
de Job Job 42:1-6, 10,
4. Muerte

De cierto, de cierto os digo, que si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, queda solo; pero
si muere, lleva mucho fruto. Juan. 12:24

Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos. Juan 15:13

5. Identificación

¿Quién ha creído a nuestro anuncio ¿y sobre quién se ha manifestado el brazo de


Jehová? Subirá cual renuevo delante de él, y como raíz de tierra seca; no hay parecer en él, ni
hermosura; le veremos, mas sin atractivo para que le deseemos. Despreciado y desechado entre
los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; y como que escondimos de él el
rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos. Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y
sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Mas él
herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue
sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados. Todos nosotros nos descarriamos como
ovejas cada cual se apartó por su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros.
Angustiado él, y afligido, no abrió su boca; como cordero fue llevado al matadero; y como oveja
delante de sus trasquiladores, enmudeció, y no abrió su boca. Por cárcel y por juicio fue quitado;
y su generación, ¿quién la contará? Porque fue cortado de la tierra de los vivientes, y por la
rebelión de mi pueblo fue herido. Isaías. 53:1-6

3. Integridad -carácter santo- Salmo. 24:3-6; 51:10


4. Deleite y Disciplina

Deléitate asimismo en Jehová, Y él te concederá las peticiones de tu corazón. Salmo 37:4

Escucha, oh Jehová, mis palabras; Considera mi gemir. Está atento a la voz de mi clamor, Rey
mío y Dios mío, Porque a ti oraré. Oh Jehová, de mañana oirás mi voz; De mañana me
presentaré delante de ti, y esperaré. Salmo 5:1-3

Tarde y mañana y a mediodía oraré y clamaré, Y él oirá mi voz. Salmo 55:17

7. Conocimiento y Autoridad

Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste el conocimiento, yo
te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu Dios, también yo me olvidaré de tus
hijos. Oseas. 4:6

Entonces Moisés respondió a Dios: ¿Quién soy yo para que vaya a Faraón, y saque de Egipto a
los hijos de Israel? Y él respondió: Ve, porque yo estaré contigo; y esto te será por señal de que
yo te he enviado: cuando hayas sacado de Egipto al pueblo, serviréis a Dios sobre este
monte. Dijo Moisés a Dios: He aquí que llego yo a los hijos de Israel, y les digo: El Dios de
vuestros padres me ha enviado a vosotros. Si ellos me preguntaren: ¿Cuál es su nombre?, ¿qué
les responderé? Y respondió Dios a Moisés: YO SOY EL QUE SOY. Y dijo: Así dirás a los hijos
de Israel: YO SOY me envió a vosotros. Éxodo. 3:11-14

8. Sensibilidad al Espíritu Santo

Y mientras Pedro pensaba en la visión, le dijo el Espíritu: He aquí, tres hombres te


buscan. Levántate, pues, y desciende y no dudes de ir con ellos, porque yo los he
enviado. Hechos. 10:19-20
Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la
palabra en Asia; y cuando llegaron a Misia, intentaron ir a Bitinia, pero el Espíritu no se lo
permitió. Y pasando junto a Misia, descendieron a Troas. Y se le mostró a Pablo una visión de
noche: un varón macedonio estaba en pie, rogándole y diciendo: Pasa a Macedonia y
ayúdanos. Cuando vio la visión, en seguida procuramos partir para Macedonia, dando por cierto
que Dios nos llamaba para que les anunciásemos el evangelio. Hechos. 16:6-10B.

1. Propósito

En la Biblia hay muchas oraciones intercesoras en que los santos suplican a Dios por varios
motivos:

1. Para que Dios desviara un juicio Génesis 18:23-32


2. Para que un pueblo sea restaurado Nehemías 1; Daniel 9
3. Para que Dios libre del peligro Hechos 12:5,12; Romanos 15:31
4. Para que Dios bendiga a su pueblo Números 6:24-26; 1ª Reyes 18:41-45
5. Para recibir el poder del Espíritu Santo Hechos 8:15-17; Efesios 3:14-17
6. Para que alguien sea sanado 1ª Reyes 17:20-21; Santiago 5:14-16
7. Por el perdón de pecados Esdras 9:5-15; Daniel 9; Hechos 7:60
8. Por los gobernantes 1ª Crónicas 29:19; 1ª Timoteo 2:2
9. Por el crecimiento espiritual Filipenses 1:9-11; Colosenses 1:10-11
10. Por un pastorado eficiente 2ª Timoteo 1:3-7
11. Por la obra misionera eficaz Mateo 9:38; Efesios 6:19-20
12. Por la salvación del mundo Romanos 10:1
13. Para que las personas alaben a Dios Salmo 67:3-5
14. Ejemplos de intercesión del creyente

En la biblia se registran numerosos ejemplos de oraciones poderosas:

1.Antiguo Testamento

1. Oración de Reyes 1ª Crónicas 21:17; 2ª Crónicas 6:14-42


2. Oración de Profetas 1ª Reyes 18:41-45; Daniel 9
3. Oración de Sacerdotes 2ª Crónicas 34:20-28; Esdras 9:5-15; Joel 1:13,2:17-18
4. Mediación de Abraham a favor de Ismael Génesis 17:18
5. Mediación de Abraham a favor de Sodoma y Gomorra Génesis 18:23-32
6. Las oraciones de David por un hijo 2ª Samuel 12:16; 1ª Crónicas 29:19
7. Las oraciones de Job por sus hijos Job 1:5
8. Oración de Moisés por el pueblo que se negó a entrar en Canaán Números 14:1-20
9. La oración de Elías 1ª Reyes 18:21-46

2.Nuevo Testamento

1. Los padres rogando por sus hijos enfermos Marcos 5:22-43; Juan 4:47-53
2. Las madres pidiendo bendición por sus hijos Marcos 10:13
3. Un hombre pidiendo sanidad por su siervo Mateo 8:6-13
4. La madre de dos apóstoles intercediendo por ellos Mateo 20:20-21

3.La iglesia intercede

1. La iglesia orando por la liberación de Pedro Hechos 12:5,12


2. La iglesia de Antioquia oraba por Bernabé y Pablo Hechos 13:3
3. Santiago ordena orar por los enfermos Santiago 5:14
4. Santiago ordena orar unos por otros Santiago 5:16
5. Pablo pide oración por todos los hombres 1ª Timoteo 2:1-3
6. Pablo ora por varias iglesias o personas

Romanos 1:9-10; 2ª Corintios 13:7; Colosenses 1:3,9-12; 1ª Tesalonicenses 1:2-3; 2ª


Timoteo 1:3

1. Pablo pide oración por su ministerio

Romanos 15:30-32; 2ª Corintios 1:10-11; Efesios 6:19-20; Filipenses 1:19; Colosenses 4:3-
4; 1ª Tesalonicenses 5:25.

1. El corazón intercesor de Elías

Hemos dado ejemplos de personajes del A.T y del N.T, que tenían un corazón dispuesto a
cambiar el propósito expreso de Dios; o sea, que su oración provoca que Dios ceda ante
situaciones que traerían consecuencias en la vida de otros, pero que cuando Dios es movido
por el intercesor, que se pone en la brecha, suceden cosas sobrenaturales.

Y es que estos corazones intercesores que son mediadores a favor de otros, se convierten en
siervos colaboradores de Dios, y de esa forma Dios permite que esa persona justa lo
persuada a cambiar su voluntad temporal y traer redención en lugar de juicio.

Dios no pasa por alto la intercesión de un siervo fiel siempre y cuando permanezca en la
esperanza de la redención. Esta intervención podría ser rechazada por Dios solo cuando el
pecado haya llegado a límites extremos. Génesis 18:23-32

Esto que hablamos pudiera entenderse como un misterio que a Dios se le deba persuadir
mediante la intercesión de un hombre pecador, que falla, y que sin embargo, Dios se vuelva de
la ira a la misericordia. Y esto se confirma por el hecho de que Dios no es una deidad
implacable o un Dios de inflexible destino, sino es un Dios personal que se deleita en ser
conmovido por el amor, la fe y las oraciones de su pueblo.

La temática que nos motiva en este tiempo es el profeta Elías, un hombre que amaba a Dios con
todo su ser y que fue un instrumento que Dios uso en los tiempos de los reyes para traer un
avivamiento en Israel, que estaba siendo asediado por el espíritu de idolatría y apostasía llamado
también el espíritu de Jezabel.

Quisiéramos comenzar diciendo que Elías demuestra un espíritu de intercesión que prevalece
sobre los efectos destructivos del pecado y de la debilidad humana. Este siervo se presenta
delante del rey Acab y primero trae un mensaje de juicio de parte de Dios contra la desobediente
Israel “No habrá lluvia ni rocío”.

Dios detendría la lluvia durante tres años y medio y al hacer esto, Dios ridiculiza a Baal, porque
los adoradores de este dios creían que el controlaba la lluvia y era responsable de las cosechas
abundantes, pero Elías en una oración ferviente provoco en el corazón de Dios los resultados
mencionados.

Las lluvias de otoño y primavera y el roció del verano eran necesarias para la cosecha de Israel.El
Señor, había amenazado con retirarlas de la tierra si su pueblo se apartaba de El para servir a
otros dioses
Si obedeciereis cuidadosamente a mis mandamientos que yo os prescribo hoy, amando a Jehová
vuestro Dios, y sirviéndole con todo vuestro corazón, y con toda vuestra alma, yo daré la lluvia de
vuestra tierra a su tiempo, la temprana y la tardía; y recogerás tu grano, tu vino y tu aceite. Daré
también hierba en tu campo para tus ganados; y comerás, y te saciarás. Guardaos, pues, que
vuestro corazón no se infatúe, y os apartéis y sirváis a dioses ajenos, y os inclinéis a ellos; y se
encienda el furor de Jehová sobre vosotros, y cierre los cielos, y no haya lluvia, ni la tierra dé su
fruto, y perezcáis pronto de la buena tierra que os da Jehová Deuteronomio 11:13-17

Elías oro pidiendo sequia y Dios respondió. La sequia demostró que Baal, el dios de las lluvias y
de la fertilidad, era impotente ante el Señor.

Elías era hombre sujeto a pasiones semejantes a las nuestras, y oró fervientemente para que no
lloviese, y no llovió sobre la tierra por tres años y seis meses Santiago 5:17

Debemos ir un poco a los antecedentes del rey Acab para ubicarnos en porque Dios permitió que
esta oración trajera maldición en lugar de bendición para su pueblo, porque se supone que un
intercesor lo que hace es mover a Dios hacia el perdón por su misericordia:

1. Inicio del reinado de Acab, 1ª Reyes 16:29–34.

La historia de Acab, séptimo rey de Israel, por estar ligada al ministerio del profeta Elías, se le da
un lugar en esta narración. Pero el personaje más importante en estos relatos no es Acab sino
Elías. Pero antes, tomaremos de estos versículos algunos aspectos sobresalientes del rey Acab.

Acab gobernó 22 años, fue el peor y el más malo de los reyes de Israel. Tuvo éxito político y
económico, e hizo alianzas logrando que Israel del norte fuese en aquel tiempo una nación
prospera y respetable. Su debilidad de carácter lo convierte en un muñeco manejado por Jezabel,
su esposa.

Ninguno de los reyes de los judíos ha dejado una historia más triste. Su pecado más grande fue
el de unirse a esta mujer extranjera, fanática, astuta, perversa, vengativa, resuelta y diabólica. La
mujer más pervertida de quien habla la Biblia. Ella era de procedencia sidonia o fenicia, hija del
rey de Sidón y edifico un templo a Baal en Samaria, y mantuvo a 850 sacerdotes paganos, mato a
los profetas de Jehová y abolió el culto a Él.

El casamiento con mujeres extranjeras ya se había visto como algo muy dañino en el caso de
Salomón, ya que ello resultaba en la introducción de la idolatría. Hay mucha semejanza entre
Salomón y Acab en este sentido. El nombre de Jezabel tiene nexos con el dios sidonio. Su
nombre alude a Baal como “príncipe”. Esta mujer es notable al tratar por todos los medios de
impulsar la idolatría en el pueblo de Israel a niveles inimaginables.

Baal significa “señor y dueño”, y debía ser el sustituto de Jehová, el Dios de Israel. Para lograr
esto, había que borrar toda señal del verdadero Dios. Acab construyó su propio altar y santuario
al dios Baal. Su afán fue convertir a todo Israel a este abominable culto.

Tenían ceremonias en el que se ofrecían víctimas humanas; hasta niños eran sacrificados. Esta
clase de idolatría era más peligrosa que otra cualquiera. Pero entre los cananeos, Baal era el dios
supremo. Jezabel fue tan enemiga de Jehová, que perseguía hasta la muerte a los profetas de
Dios. Durante el reinado de Acab ella integro a su servicio a cientos de profetas falsos.

Acab demostró una total ignorancia y una falta de respeto por la ley de Dios. Alguien
escribió: “Con Acab se acaba todo lo bueno que quedaba en Israel”. Pero fue, justamente en este
tiempo, el peor de Israel, cuando apareció uno de los profetas más destacados de toda la historia:
Elías. Acab y Elías sobresalen por sus extremos opuestos: la impiedad y la perversidad de uno; y
la justicia y la santidad del otro. Por este último, rompemos el hilo de la historia para darle entrada
al gran profeta.

2. Primer Enfrentamiento de Elías con Acab 1ª Reyes 17:1–24

7. El anuncio de la sequía, 1ª Reyes 17:1–7.

El libro de Reyes tiene más que ver con profetas que con reyes. Es profeta de Dios el que viene
siendo el personaje más importante de la historia. Son más importantes los profetas que los
mismos reyes, porque saben interpretar los eventos históricos a la luz de su relación con el Dios
de Israel. Quiere decir que en lugar de gobernar en el nombre y el espíritu de Dios, los reyes, por
su rebeldía y su apostasía, llevaron la nación a la ruina.

El profeta Elías aparece de repente en la historia. No se sabe casi nada de su origen, parientes,
ni nada. Lo que sí conocemos es su lugar de origen: una aldea llamada Tisba; por eso se le
clasifica a Elías como tisbita. La aldea pertenecía a Galaad en la Transjordania.

Este mismo profeta, desconocido por todos, obedece la voz de Jehová y anuncia al rey acab la
sequia. Dios quería dar a su pueblo Israel una lección que provocaría mucho sufrimiento y esto lo
haría por tres razones:

1. Demostrar que Jehová es el único y verdadero Dios; y soberano de la creación. Los dioses de los
idólatras cananeos eran solo poderes de la naturaleza, como la lluvia, el sol, y el trueno.
2. Dios quería sanar a Israel de esta enfermedad mortal: La idolatría.
3. Esta sequia probaría que la naturaleza para vivir dependía de Jehová su creador

El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor del cielo y de la tierra,
no habita en templos hechos por manos humanas, ni es honrado por manos de hombres, como
si necesitase de algo; pues él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas. Y de una
sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y
les ha prefijado el orden de los tiempos, y los límites de su habitación; para que busquen a Dios,
si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de
nosotros. Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios
poetas también han dicho: Porque linaje suyo somos. Hechos. 17:24–28

Guardaos, pues, que vuestro corazón no se infatúe, y os apartéis y sirváis a dioses ajenos, y os
inclinéis a ellos; y se encienda el furor de Jehová sobre vosotros, y cierre los cielos, y no haya
lluvia, ni la tierra dé su fruto, y perezcáis pronto de la buena tierra que os da
Jehová. Deuteronomio. 11:16, 17.

Después de este mensaje tremendo de Elías, no se habla más de una respuesta dada a Elías por
el rey Acab, es más, ni siquiera se vuelve a hablar del rey acab por un buen rato. Sólo leemos
que Dios si se dirige a Elías para demostrarle su interés por su bienestar. Y le dice que se
esconda probablemente porque debido a la noticia que le dio al rey, de la sequia, a lo mejor el rey
estaba muy molesto y podría hasta matarlo. Lo que sí es evidente es la forma como Elías
obedeció la palabra de Jehová.

Se considera a Elías como el personaje más importante que se levantó desde los días de
Moisés. Elías aparece, en el tiempo de Dios, en un momento oportuno y de mucha necesidad. Es
cuando Israel está en la más oscura idolatría, y cuando hasta los mismos sacerdotes se habían
apartado de Jehová.
Entonces surge un hombre diferente, con un ministerio diferente: el profeta Elías. Aunque es
cierto que en el pasado hubo profetas como Moisés, Samuel y otros, también es verdad que su
ministerio no fue como el de Elías. El rey debía haberse sentido muy privilegiado de tener frente a
sí a un hombre del tamaño de Elías.

Después del anuncio de la sequía, Dios dirigió a Elías a un lugar de retiro. ¿Sería para su propia
seguridad?, lo más probable es que sí. ¿Sería para alentarlo y prepararlo? Aunque parezca
extraño que cuervos alimenten a Elías, y el arroyo se seque, Dios hace milagros para sostener a
su profeta. Después lo haría por medio de una viuda.

El que alimenta las aves del cielo ¿no podrá usar los cuervos para sustentar a su siervo en las
dificultades? ¿Quién no recuerda el maná y las codornices en el tiempo de Moisés? ¡Cuánto se
parecen Elías y Moisés!

¿Quién prepara al cuervo su alimento, Cuando sus polluelos claman a Dios, Y andan errantes por
falta de comida? Job 38:41

Dios sustento a Elías en el arroyo de Querit porque El se había aliado con Dios contra la
apostasía de su pueblo y como Elías había llevado la carga de Dios, ahora el Señor llevaría su
carga

Todas las sendas de Jehová son misericordia y verdad, Para los que guardan su pacto y sus
testimonios. Salmo 25:10

Bendito el Señor; cada día nos colma de beneficios El Dios de nuestra salvación. Dios, nuestro
Dios ha de salvarnos, Y de Jehová el Señor es el librar de la muerte. Salmo 68:19-20

24. Elías y la viuda de Sarepta 1ª reyes 17:8–24.

…Se seco el arroyo…

Al haberse secado el arroyo, Dios le ordeno a Elías que fuera a un territorio pagano habitado por
los adoradores de Baal, y allí Dios proveyó para Elías por medio de una viuda pobre. Esta
experiencia fortaleció más la confianza de Elías el profeta en la providencia de Dios.

En algunas ocasiones, aun cuando estemos en la voluntad de Dios, El permitirá experiencias


como las vividas por este siervo fiel, porque la misma le a ayudaría a formar su carácter y a salir
de situaciones todavía más difíciles, pero fortalecido en su fe y confianza a Dios.

Al no contar con agua por que el arroyo se seco, la provisión de Dios para el profeta debía venir
de otra forma. Entonces la palabra de Jehová vino a Elías: al igual que en el primer episodio, llega
la palabra de Dios al profeta con nuevas instrucciones.

….Levántate, vete a Sarepta de Sidon….

Sarepta de Sidón era una aldea costera que quedaba unos 11-16 km. al sur de Sidón, territorio
fenicio. En realidad, esta aldea quedaba entre dos puntos importantes en la costa del mar
Mediterráneo: Sidón y Tiro. Ahora Elías, siempre bajo la dirección de Dios, se sale de los límites
de Israel para ser alimentado por una mujer gentil. Elías fue enviado a vivir allí, en un territorio
gobernado por Et-baal, el suegro de Acab. De esta manera demostró el poder de Dios, en el
mismo lugar donde se adoraba al impotente Baal proveyendo milagrosamente para la viuda en
medio del hambre.
Y en verdad os digo que muchas viudas había en Israel en los días de Elías, cuando el cielo fue
cerrado por tres años y seis meses, y hubo una gran hambre en toda la tierra; pero a ninguna de
ellas fue enviado Elías, sino a una mujer viuda en Sarepta de Sidón Lucas. 4:25, 26

Las viudas eran la clase social más humilde y necesitada, y por quienes Dios siempre ha tenido
una gran preocupación

A ninguna viuda ni huérfano afligiréis Éxodo. 22:22

Aprended a hacer el bien; buscad el juicio, restituid al agraviado, haced justicia al huérfano,
amparad a la viuda.Isaías. 1:17

El que el profeta haya tenido que depender de una mujer extranjera para su sustento va en contra
de toda costumbre de los hebreos. Ella era una mujer desconocida, pobre. Pareciera que Dios
quería que Elías reconociera su propia vulnerabilidad, pidiendo ayuda a alguien más vulnerable
todavía.

El relato permite una analogía con la historia de Jesús y la mujer samaritana. Tanto Elías como
Jesús pidieron agua primero. Ambos aparentan ayudar pero salen ayudados. Pareciera que Dios
quería enseñarle a Elías la misma lección que aprendió el Apóstol Pablo: “Bástate mi gracia,
porque mi poder se perfecciona en tu debilidad” 2 Corintios. 12:9

Hay una marcada diferencia entre las dos respuestas de la viuda ante las peticiones de Elías.
Cuando pide agua, se apresura a dársela. Cuando se trata de comida, la mujer le responde de la
siguiente manera:

“Y ella le respondió: vive Jehová tu Dios, que no tengo pan cocido; solamente un puñado de
harina tengo en la tinaja, y un poco de aceite en una vasija; y ahora recogía dos leños, para entrar
y prepararlo para mi y para mi hijo, para que lo comamos, y nos dejemos morir”1ª Reyes 17:
17:12

Ella reconoció que Elías seguía al Dios de Israel y no a los dioses de Sidón. Es seguro que la
petición de Elías debió sorprender y preocupar a esta viuda. ¿Que pudo haber pensado cuando
Elías le pidió su última comida? Entonces Elías le responde así:

Elías le dijo: No tengas temor; ve, haz como has dicho; pero hazme a mí primero de ello una
pequeña torta cocida debajo de la ceniza, y tráemela; y después harás para ti y para tu hijo.1ª
Reyes 17:13

Ella responde con fe y obedece al profeta.

Porque Jehová Dios de Israel ha dicho así: La harina de la tinaja no escaseará, ni el aceite de la
vasija disminuirá, hasta el día en que Jehová haga llover sobre la faz de la tierra. Entonces ella
fue e hizo como le dijo Elías; y comió él, y ella, y su casa, muchos días. 1ª Reyes 17:14-1

La viuda por esa actitud fue milagrosamente recompensada y sin duda que esta mujer de Sidón
recibió una prueba del amor de Dios, la que sería un testimonio para todos.

Alguien escribió: “La fe de un gentil vale más que la incredulidad de diez judíos juntos, aunque
aquella sea del tamaño de un grano de mostaza.”
El que recibe a un profeta por cuanto es profeta, recompensa de profeta recibirá; y el que recibe a
un justo por cuanto es justo, recompensa de justo recibirá. Y cualquiera que dé a uno de estos
pequeñitos un vaso de agua fría solamente, por cuanto es discípulo, de cierto os digo que no
perderá su recompensa. Mateo. 10:41, 42

Más importante aun, Jesús mismo alaba a esta mujer

Pero a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a una mujer viuda en Sarepta de Sidón Lucas.
4:26

….Comió ella y su casa muchos días….

Las necesidades y el sufrimiento de la viuda no pasaban desapercibidos para Dios, por eso, El
envió a Elías a fortalecer la fe de ella, y a traerle bendiciones materiales, en un momento en que
ella creía que ya todo esta perdido.

…Y ahora recogía dos leños, para entrar a prepararlo para mí y para mi hijo, para que lo
comamos y nos dejemos morir….

La fe de la viuda en Dios y su palabra la llevo a aceptar lo invisible por lo visible. Termino la viuda
recibiendo no solo la bendición material sino también espiritual.

1. Elías y el hijo de la viuda de sarepta

Después de estas cosas aconteció que cayó enfermo el hijo del ama de la casa; y la enfermedad
fue tan grave que no quedó en él aliento. Y ella dijo a Elías: ¿Qué tengo yo contigo, varón de
Dios? ¿Has venido a mí para traer a memoria mis iniquidades, y para hacer morir a mi hijo? El le
dijo: Dame acá tu hijo. Entonces él lo tomó de su regazo, y lo llevó al aposento donde él estaba, y
lo puso sobre su cama. Y clamando a Jehová, dijo: Jehová Dios mío, ¿aun a la viuda en cuya
casa estoy hospedado has afligido, haciéndole morir su hijo? Y se tendió sobre el niño tres
veces, y clamó a Jehová y dijo: Jehová Dios mío, te ruego que hagas volver el alma de este niño
a él. Y Jehová oyó la voz de Elías, y el alma del niño volvió a él, y revivió. Tomando luego Elías
al niño, lo trajo del aposento a la casa, y lo dio a su madre, y le dijo Elías: Mira, tu hijo vive.
Entonces la mujer dijo a Elías: Ahora conozco que tú eres varón de Dios, y que la palabra de
Jehová es verdad en tu boca. 1ª Reyes 17:17-24

El segundo milagro de Elías en sarepta, fue devolverle la vida al hijo de la viuda. Dios demostró
su poder, pues aunque decían que baal podía revivir a los muertos, eso solo era un mito cananeo.
Este es el primer caso registrado en la Biblia de alguien que es resucitado de los muertos.

Se resolvió el problema del hambre pero ahora se presenta otra dificultad ¿ que sigue?

Después de estas cosas aconteció que cayó enfermo el hijo del ama de la casa; y la enfermedad
fue tan grave que no quedó en él aliento. 1ª Reyes 17:17

Ya no es el hambre el problema principal, sino la muerte. La viuda acusa al profeta por la muerte
del hijo.

¿Qué tengo yo contigo, oh hombre de Dios? ¿Has venido a mí para traer a memoria mis
iniquidades, y para hacer morir a mi hijo? 1ª Reyes 17:18
A pesar de haber obedecido al profeta y así proveerle de alimento, arriesgándose ella, la viuda
se encuentra abatida. Acusa al profeta de haber ocasionado la muerte de su hijo por causa del
pecado de ella. El haber reconocido a Elías como profeta no suaviza el reclamo; lo hace más
duro. Ella aparentemente es de la opinión de que la misma presencia del profeta acarrea el
castigo de Dios.

Elías, siguiendo la costumbre de antaño, lleva al hijo de la viuda a su habitación. Existía la


creencia de que el contacto físico entre una persona vigorosa y otra permitiría la restauración de
la vida. Le recuerda a Dios que él mismo lo había mandado a la viuda. ¿Su obediencia ahora
repercute en la muerte del hijo? Son palabras ásperas pero no desesperadas.

“Y clamando a Jehová, dijo: Jehová Dios mío ¿aun a la viuda en cuya casa estoy hospedado has
afligido, haciéndole morir a su hijo?

Elías se acuesta sobre el cadáver del hijo y pide a Dios le restaure la vida al muerto. Dios
escuchó la plegaria de Elías y respondió devolviéndole la vida al hijo.

¿Cuál sería la actitud de la mujer ante todo esto? El colmo de la prueba para la viuda fue la
muerte de su único hijo ¿Pensaría esta mujer que todo esto era un castigo de Dios? ¿Acaso la
visita del profeta despierta en ella el remordimiento por algún pecado oculto? Pero Dios envió a
Elías para fortalecer la fe de aquella mujer, y también la del mismo profeta.

Los siervos de Dios tienen también sus propias necesidades; y Dios las usa, a veces, para
traernos a un conocimiento más completo de él y a una fe más firme en su Palabra. ¿Tendría la
viuda alguna duda de quién era Elías? ¿Sería un verdadero profeta de Dios? Si acaso no le
reconoció por su manera de vestir o de hablar como un israelita, ahora sí estaba bien convencida
de quién era Elías.

3. Segundo enfrentamiento de Elías con Acab, 1ª Reyes 18:1–19.

El cap. 18 contiene dos historias, La una tiene que ver con la resolución del problema de la
sequía. La otra consiste en la lucha entre Jehová y Baal en el monte Carmelo por la supremacía
en Israel. 1ª Reyes 18:1–20, 41–46; 18:21–40

1. Vino palabra de Jehová

Sucedió que después de mucho tiempo… vino la palabra de Jehová a Elías…

Debido a esa sequía de tres años y medio, la situación era insoportable. Jehová envía a Elías
para informar al rey que la sequía va a terminar. Se suponía que el rey estaba en control y debía
poder resolver las crisis del pueblo. Sin embargo, esta historia revela que el rey es impotente ante
la situación. Algunos ven esta historia como una forma de hacer de menos al rey. Nuevamente,
quien está en control es Dios por medio de su profeta, no el rey.

1. Acab llamó a Abdías…

Acab, desesperado, se ve obligado a buscar agua y alimento para los animales, pues muchos de
ellos estaban muriendo por falta de agua. He aquí un rey, que debería estar preocupádo por
asuntos de mayor envergadura, se encuentra reducido al trabajo de un pastor de ganado, uno de
los oficios de menos categoría. Al mismo tiempo, Acab busca a quien cree culpable de la
situación nacional: Elías. En medio de todo esto, Dios siempre tiene a un hombre que le teme y
está dispuesto a servirle: Abdías
Abdías significa “Siervo de Jehová”, era un israelita piadoso, mayordomo en la misma corte de
Acab. Para el tiempo del reinado de Acab, el puesto de mayordomo se había engrandecido y
representaba el puesto de más poder, superado solo por el del rey. Cuando Jezabel perseguía a
los profetas, Abdías logró rescatar a cien de ellos.

La persecución de los profetas de Jehová de parte de Jezabel obedecía a dos razones


principales:

1. Su frustración por no poder hallar a Elías a quien ella culpaba de la sequía


2. la misma sequía hacía más grande su odio por el Dios de los hebreos. Los profetas asesinados
por ella tenían la desdicha de vivir en un lugar y en un momento inoportunos. La furia de ella era
muy grande.
3. Abdías: El hombre bueno en una situación incómoda 1ª reyes 18:1-15

A veces el Señor nos manda a lugares y circunstancias difíciles que nos ponen en riesgo, pero
que son a la vez lugares y momentos estratégicos. Nuestra respuesta a la dirección del Señor
puede ser la clave en el cumplimiento de su voluntad en la vida nuestra y en la de su pueblo.
Abdías, el administrador en la corte de Acab, se encontró en tales circunstancias.

A pesar de su rechazo original a ir donde el rey, termino yendo, y así jugó un papel pequeño pero
importante en la historia y el destino del pueblo de Israel. Termino demostrando tres cualidades:

1. El valor fue parte de su carácter


2. Arriesgo su vida, hizo la voluntad de Dios
3. Por el valor demostrado, fue que se dio la confrontación en el monte Carmelo

Cada persona que teme a Dios tiene un círculo de influencia entre los que no le temen. Aunque le
cueste la vida, a veces Dios requiere que alguien sea un eslabón en la cadena de eventos que él
tiene planificados para su pueblo. Debemos estar dispuestos a responder con audacia a la tarea
difícil que el Señor nos encomiende

Abdías recibe la comisión de ayudar al rey a buscar lo necesario para mantener el ganado, pero
de pronto se encuentra con Elías. Abdías reconoce a Elías, se postra sobre su rostro en señal de
su sumisión. Dado ya el reconocimiento del profeta por Abdías, las palabras “Eres tú, Elías mi
señor” no forman una pregunta. Más bien, la frase expresa gozo y satisfacción en forma de
exclamación al ver al profeta. Parafraseando lo anterior sería algo así: “Después de tanto tiempo,
Elías, ¡eres tú!”

Cuando Elías le pide a Abdías que anuncie ante Acab su presencia, el mayordomo se asusta. La
respuesta de Abdías a la petición de Elías no tan solo expresa su temor sino también recrimina al
profeta, por exponerlo a la ira del rey. También, reitera el vigor con el que el rey ha buscado al
profeta. Su propia vida peligraría si se le anunciara al rey.

Acab iba a matar a Elías, pero este no se atemorizo. El tenia una encomienda de parte de Dios y
estaba decidido a cumplirla, porque sabía que si Dios lo había mandado, El lo respaldaría y lo
protegería aun del rey. Porque para Dios no hay nada imposible.,

Pero el valiente profeta se adelanta y se enfrenta a Acab. Este se hace el ofendido y acusa a
Elías de ser el que está trastornando a Israel. Elías, seguro y valiente, al ver a su disposición
todos los recursos espirituales del poder de Dios, le devuelve la acusación. Le dice, en otras
palabras: “Tú eres el único responsable de lo que está pasando”. Es como si le preguntara: “¿Por
qué tus dioses de la lluvia y de la fertilidad no te han ayudado? Reúneme a todo Israel y a tus
profetas para un culto especial, para decidir quién es quién”.
4. Elías y la confrontación entre Jehová y Baal, 1ª Reyes 18:20–40.

1. Introducción

En el tiempo de Elías, época en que el pueblo de Dios era influenciado por corrientes politeístas
y muchos practicaban servir a dioses falsos, era preciso que alguien los guiara a
servir únicamente a Jehová. Ante la vacilación del pueblo respecto a su absoluta fidelidad, Elías
usa una expresión para describir su condición vacilante. Les dice:

¿Hasta cuándo claudicareis vosotros entre dos pensamientos? o dicho de otra manera ¿Hasta
cuándo vacilaréis entre dos opiniones? Parafraseando podríamos decir: “¿Por cuánto tiempo
seguiréis queriendo vivir sirviendo a dos señores? Sea la versión que uno escoja, el significado
es claro.

Israel no había rechazado totalmente al Señor, pero practicaban un culto mixto adorando a dioses
como baal y al Dios todopoderoso Jehová. Lo que planteaba Elías era que tenían que escoger
quien era Dios, si Jehova o Baal, y luego servir a Dios de todo corazón.

…Sólo yo he quedado como profeta de Jehova, pero de los profetas de Baal hay 450 hombres.

Es un poco extraño que Elías diga esto, ya que Abdías les había informado respecto a 100
profetas de Jehová escondidos en cuevas y a quienes había provisto protección y sustento. Es
posible que Elías haya dicho esto para proteger a Abdías; en su defecto, podría estar
simplemente expresando su dependencia en Jehová, ya que tenía que enfrentar a un grupo tan
grande de profetas de Baal.

El gran espectáculo se celebraría a unos 70 m. de altura para que todos pudieran verlo. El monte
Carmelo estaba rodeado de una gran llanura. Además, el monte estaba ubicado en la costa
palestina, el punto de un antiguo centro de adoración. El propósito fundamental no era que se
supiese cuál de los dos dioses era el más grande y poderoso, sino cuál era el único y verdadero
Dios para Israel.

El pecado no era que rechazaban totalmente a Jehová, sino que había un sincretismo marcado
en ese tiempo, por influencia de Acab y Jezabel se habían fusionado ambas religiones
pertenecientes a dos diferentes culturas.

El pueblo vacilaba, es decir, era como la ola del mar, no tenía firmeza. Quería servir a Jehova y a
Baal al mismo tiempo. ¿Eran renuentes o tenían temor de romper con alguna forma de
adoración?

Muchos nos dicen hoy que “debemos tener una mente abierta. Que no debemos ser estrechos en
nuestra manera de pensar”. Pero la verdad es una sola. Cuando la dividimos o la mezclamos con
una mentira, ya deja de ser verdad. En las cosas de Dios, no hay lugar para combinaciones. Ser
indecisos o neutrales en las cosas espirituales es algo que no agrada a Dios; es una
demostración de hipocresía

Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al
uno y menospreciará al otro. No podéis servir a Dios y a las riquezas.Mateo 6:24

Aborrezco a los hombres hipócritas; Mas amo tu ley. Salmo. 119:113


1. Los preparativos

Dénsenos, pues, dos bueyes, y escojan ellos uno, y córtenlo en pedazos, y pónganlo sobre leña,
pero no pongan fuego debajo; y yo prepararé el otro buey, y lo pondré sobre leña, y ningún fuego
pondré debajo. 1ª Reyes 18:23

Elías, con una actitud propia de un verdadero profeta de Jehová, inicia los preparativos para el
gran evento. El sabio y astuto profeta es quien establece las condiciones:

1. Habrá dos cultos separados.

No hubiera existido orden, sería un problema si los cultos eran unidos. Separados seria mas fácil
llegar a una decisión.

2. El fuego del cielo sería la respuesta

Respuesta milagrosa y verdadera para tomar una decisión final; y no por una ley u opinión de
personas.

—Ellos tomaron el toro que les fue dado, y lo prepararon. Luego invocaron el nombre de Baal…

Los profetas de Baal tuvieron la oportunidad de tener el primer culto. Este les ocupó casi todo el
día. Su ritual llegó a tal extremo que algunos perdieron el sentido y actuaron como locos. El
cortarse con cuchillos era una costumbre en los cultos paganos. Entre el “dios adorado y el
adorador” se hacía como un “pacto de sangre”. Daban gritos y danzaban; perdieron el control, no
sabían lo que hacían. ¿Tratarían de llamar la atención y de inspirar lástima en sus dioses?

Baal fue sordo a la oración de sus sacerdotes. Los dioses del fuego no respondieron. Las “burlas
proféticas” de Elías fueron mordaces. Sus palabras sonaron hasta chistosas, pero el profeta
hablaba con el más severo sarcasmo y la más profunda ironía. Los profetas de Baal debían
seguir en su frenesí, porque tal vez su dios estaba haciendo sus necesidades y no los podía
atender en ese momento

1. Reconstrucción del altar

Elías tomó doce piedras…

Vamos ahora al sencillo culto del profeta de Dios. Antes de ello, el altar es reparado. El que Elías
haya tenido que reparar el altar indica que el monte Carmelo había sido un lugar de adoración a
Jehová. La persecución al culto a Jehová de parte de la reina Jezabel había provocado la
destrucción de los altares dedicados a Jehová.

Y si me hicieres altar de piedras, no las labres de cantería porque si alzares herramienta sobre él,
lo profanarás Éxodo 20:25

Y Moisés escribió todas las palabras de Jehová, y levantándose de mañana edificó un altar al pie
del monte, y doce columnas, según las doce tribus de Israel. Éxodo 24:4

Las 12 piedras parecen figurar la unidad gloriosa del antiguo Israel, las doce tribus, y esta
contienda era de gran importancia tanto para Judá como para Israel, aunque estuvieran
separadas, en Israel del norte y Judá; seguían siendo todavía un pueblo en los planes del Señor.
Con los mismos pactos y un mismo destino.
Elías construye el altar en el nombre de Jehová y hace todos los preparativos prescritos para la
presentación de un sacrificio a Jehová. Todo el proceso sigue lo estipulado con excepción de la
zanja. No hay indicios de que una zanja figurara en el sistema sacrificial de los hebreos.

Todo esto sería una acción misteriosa para los observadores hebreos. La zanja es lo
suficientemente grande como para contener 15 litros. Esta zanja simplemente se llenaría del
excedente de agua que no quedó absorbido por el sacrificio y la leña. La cantidad exacta de agua
derramada no se sabe, pero era lo suficiente como para dejar a la gente sorprendida.

Cuando llegó la hora de ofrecerse el holocausto, se acercó el profeta Elías y dijo: Jehová Dios de
Abraham, de Isaac y de Israel, sea hoy manifiesto que tú eres Dios en Israel, y que yo soy tu
siervo, y que por mandato tuyo he hecho todas estas cosas. Respóndeme, Jehová, respóndeme,
para que conozca este pueblo que tú, oh Jehová, eres el Dios, y que tú vuelves a ti el corazón de
ellos.1ª Reyes 18:36-37

El hombre de Dios elevo una sola, sencilla pero poderosa, oración intercesora; y esta es
suficiente para que suceda el milagro. Desde el cielo cae el fuego sobre el sacrificio y lo consume
todo. El profeta demuestra que si Jehová respondía, no era por medio de un ritual, sino por medio
de un milagro. Venía en respuesta al clamor de un hombre justo para que todo el pueblo
supiese quién era el verdadero y único Dios de Israel.

¿Cuáles fueron los resultados de este hecho tan extraordinario? La respuesta no se hizo esperar:

Entonces cayó fuego de Jehová, y consumió el holocausto, la leña, las piedras y el polvo, y aun
lamió el agua que estaba en la zanja. 1ª Reyes 18:38

Israel respondió: ¡Jehová es Dios! ¡Jehová es Dios! Esta aclamación, alegre y segura, es una
expresión de verdadera adoración; fue hecha con admiración y temor, como un reconocimiento
de la soberanía del Señor Jehová.

1. Juicio de Dios contra los sacerdotes

Entonces Elías les dijo: Prended a los profetas de Baal, para que no escape ninguno. Y ellos los
prendieron; y los llevó Elías al arroyo de Cisón, y allí los degolló. 1ª Reyes 18:40

El juicio de Dios tampoco se hizo esperar. ¿Parece muy dura y cruel la pena de muerte para los
falsos profetas? La ley establecía que los idólatras debían ser castigados con la muerte

El profeta que tuviere la presunción de hablar palabra en mi nombre, a quien yo no le haya


mandado hablar, o que hablare en nombre de dioses ajenos, el tal profeta morirá. Deuteronomio
18:20

Si te incitare tu hermano, hijo de tu madre, o tu hijo, tu hija, tu mujer o tu amigo íntimo, diciendo
en secreto: Vamos y sirvamos a dioses ajenos, que ni tú ni tus padres conocisteis, de los dioses
de los pueblos que están en vuestros alrededores, cerca de ti o lejos de ti, desde un extremo de
la tierra hasta el otro extremo de ella; no consentirás con él, ni le prestarás oído; ni tu ojo le
compadecerá, ni le tendrás misericordia, ni lo encubrirás, sino que lo matarás; tu mano se alzará
primero sobre él para matarle, y después la mano de todo el pueblo. Le apedrearás hasta que
muera, por cuanto procuró apartarte de Jehová tu Dios, que te sacó de tierra de Egipto, de casa
de servidumbre; para que todo Israel oiga, y tema, y no vuelva a hacer en medio de ti cosa
semejante a esta. Deuteronomio. 13:6–11.
Algunos piensan que este castigo es contrario al espíritu de gracia del evangelio. No obstante,
debemos recordar que Dios es amor pero también es justicia. Pese a ello, vale la pena elogiar la
conducta del profeta Elías. ¡Cuán asombrosa es su fidelidad a Dios! No le importa que toda una
nación como Israel sea odiosa a los ojos de su Dios.

¡Cuánto luchó, hasta para derrotar a su pueblo, si éste no era fiel a Dios! Si en alguna cosa
podemos estar de acuerdo con la perversa Jezabel, es en ver a Elías como su enemigo más
peligroso. ¡Cuántos Elías necesitamos hoy en el pueblo de Dios!

5. Elías anuncia el fin de la sequía

1. Introducción

Entonces Elías dijo a Acab: Sube, come y bebe; porque una lluvia grande se oye. Acab subió a
comer y a beber. Y Elías subió a la cumbre del Carmelo, y postrándose en tierra, puso su rostro
entre las rodillas. Y dijo a su criado: Sube ahora, y mira hacia el mar. Y él subió, y miró, y dijo: No
hay nada. Y él le volvió a decir: Vuelve siete veces. A la séptima vez dijo: Yo veo una pequeña
nube como la palma de la mano de un hombre, que sube del mar. Y él dijo: Ve, y di a Acab: Unce
tu carro y desciende, para que la lluvia no te ataje. Y aconteció, estando en esto, que los cielos
se oscurecieron con nubes y viento, y hubo una gran lluvia Y subiendo Acab, vino a Jezreel. Y la
mano de Jehová estuvo sobre Elías, el cual ciñó sus lomos, y corrió delante de Acab hasta llegar
a Jezreel. 1ª Reyes 18:41–46.

Elías dijo a Acab…

Es notable que hasta ahora aparezca de nuevo Acab. Durante toda la lucha entre Jehová y Baal
en el monte Carmelo no se menciona al rey. Es obvio que los personajes más importantes no son
el rey, Baal y sus profetas, ni Elías. Aunque mucha de la acción gira en torno al profeta de Dios, el
que realmente actúa milagrosamente es el Dios de Elías.

Sube, come y bebe; porque se oye el ruido de una fuerte lluvia…

Elías es ahora el dueño de la situación. Manda al rey a prepararse antes de que venga la lluvia.
Era preciso esto porque Jezreel quedaba a unos 23 km. de Carmelo. No hay porqué no atender el
consejo de su mensajero. Hacía falta hacer los preparativos necesarios para volver a su casa.

Postrándose en tierra… puso su rostro entre las rodillas

El profeta asume una postura de sumisión o meditación y ora a su Dios. Se presume que su
postura impide que el mismo profeta mire, y por lo tanto ordena que su criado (cuyo nombre se
ignora y hasta ahora se habla de él) le vaya avisando de las señales de la lluvia.

He aquí, veo una pequeña nube, como la palma de la mano de un hombre…

El siervo hace varios viajes a la cumbre para divisar la llegada de la lluvia. Dirige su mirada hacia
el mar Mediterráneo, que fácilmente se veía desde El Carmelo. Las lluvias, si es que aparecían,
vendrían de allí. La expresión descriptiva de la nube parece ser una metáfora común para
describir algo muy pequeño.

…cayó una fuerte lluvia.


Por fin Dios levanta el castigo. Una gran cantidad de nubes acompañadas por fuertes vientos
anuncian el fin del largo verano. Una vez más se demuestra que Baal no es el dios de la lluvia.
Dios cumple su promesa de enviar lluvia al pueblo que se arrepiente. Una vez más, la verdad
triunfa, aunque, a veces, los resultados parezcan ser temporales.

…pero la mano de Jehovah estuvo sobre Elías.

Todo esto es obra de Dios por medio de un hombre justo que se deja dirigir por su Espíritu. Elías
demuestra su fidelidad a Dios. ¿Por qué se adelanta Elías en su viaje? ¿Ocuparía las fuerzas
dadas por Dios para anunciar al pueblo el cese de la sequía? ¿Esperaría que Acab se arrepintiera
y renovara su pacto con Jehová?

De todas maneras la fe de Elías es impresionante. Veámoslo olvidarse de sí mismo para


postrarse en oración. Oigamos cómo manda decir a Acab que se apure para pasar el arroyo,
antes que crezca y no pueda pasar. Pero lo más grande de todo es que la mano del Señor
sostuvo a su profeta

Mas ahora traedme un tañedor. Y mientras el tañedor tocaba, la mano de Jehová vino sobre
Eliseo, 2 Reyes. 3:15

Vino palabra de Jehová al sacerdote Ezequiel hijo de Buzi, en la tierra de los caldeos, junto al río
Quebar; vino allí sobre él la mano de Jehová. Ezequiel. 1:3

18. Elías ante Jehová en Horeb 19:1–18.

…. Acab informó a Jezabel…..

Acab es todavía el rey de Israel. Será así, pero parece como si fuera otra cosa, ya que lo primero
que hace Acab es informar a Jezabel de lo acontecido en el monte Carmelo. Acab no dejó fuera
ninguno de los detalles en el informe. Dado el carácter de la esposa de Acab, no es difícil saber
quién era el verdadero poder detrás del trono.

¡Así me hagan los dioses y aun me añadan…!

Jezabel, en su furia como la sacerdotisa de Baal, comunica a Elías por medio de un mensajero
que él podría morir degollado al día siguiente. Llama la atención que a ella le interesaba poco que
la sequía hubiera terminado; lo único que pasaba por su mente era el desquite. No es
sorprendente que una falsa fe produce un falso vivir.

Si Jezabel hubiera querido la muerte del profeta, no se la hubiera anunciado de antemano. Más
bien, sugiere que lo deseado por Jezabel era que Elías se ausentara del país; Elías tuvo miedo y
huyó del alcance de la reina.

…. Así llegó a Beerseba…

Tal era su susto que el profeta de Jehová no tan solo abandona el territorio de Israel (reino del
norte) sino que se esconde en lo más remoto de Judá (reino del sur). Al igual que Jonás huyó de
Israel para escaparse de sus responsabilidades ante Jehová, así Elías abandona el territorio
nacional para escaparse de la furia de Jezabel.

Se fue un día de camino por el desierto…


Habiendo dejado a su siervo en la aldea de Beerseba, sigue camino para adentrarse en el
desierto del Néguev. Buscaba distanciarse lo más posible de la influencia de la reina.

Probablemente deja a su siervo para no comprometerlo y exponerlo a tortura; si el siervo no sabía


adónde iba, no podría divulgar su escondite.

Elías había alcanzado el límite de su resistencia. Quizá el estrés de los tres años de sequía y de
su lucha constante con los males de su nación le había quitado el ánimo. Quizá su confrontación
con los profetas de Baal en el monte Carmelo le había dejado emocional y espiritualmente
exhausto. Quizá las últimas amenazas de Jezabel lo habían asustado.

Quizá, como tantos siervos del Señor de hoy en día, simplemente estaba cansado de la lucha
diaria de servirle al Señor en un medio hostil. La respuesta del Señor a Elías, en su tiempo de
desesperación, nos puede servir de aliento e instrucción cuando nos encontremos en
circunstancias similares.

Dios cuidó de sus necesidades físicas. Esto nos da la pauta para pensar que Dios no lo había
dejado e Indica el cuidado y preocupación de Dios por nosotros a pesar de las circunstancias.
Dios lo tranquilizó con su palabra. Sintió la presencia alentadora de Dios. Recibió una
confirmación sorprendente de la presencia de Dios en su vida. La confirmación le vino, no a
través de maravillas y clamores, sino por la sencilla y profunda palabra de Dios. Dios sabía darle
una palabra quieta a un profeta gastado porque El sabe exactamente lo que necesitamos y
cuándo.

Dios le permitió llegar a la solución de su desesperación por medio de la relación que Elias tuvo
con Dios. Elías se dio cuenta de que la voz profética seguía siendo válida y necesaria por lo
que regresa a la tarea, refrescado en el Señor. Cuando el ministro o siervo del Señor está listo
para tirar la toalla, debe recordar que el Señor aún se preocupa y le cuidará en los tiempos de
desaliento, lo confortará con su palabra y le confirmará que su llamado está vigente.

¡Basta ya, oh Jehovah! ¡Quítame la vida!…

Reconociendo que era buscado por todas las fuerzas del poder ejecutivo de Israel, Elías empieza
a dudar de sus propias esperanzas. Elías sabe muy bien que Jezabel es capaz de cumplir su
amenaza. Atemorizado, pierde la fe y el valor; se pone al borde de la desesperación y de la
depresión. En esta crisis pierde el deseo de vivir. Es como si dijera: “Señor, me siento solo. ¿Para
qué seguir luchando? Todo es inútil.” ¡Cuánto se parece a Pedro quien, después de cortarle la
oreja a Malco para defender a su Maestro, lo niega ante una mujer.

Se recostó debajo de un arbusto… Y he aquí, un ángel le tocó…

Pero Dios no abandona a su siervo. Lo sostiene en su necesidad física y le infunde aliento para
seguir adelante.

Se levantó, comió y bebió… hasta Horeb, el monte de Dios.

Y Elías recobra tanta fuerza con aquel pan milagroso, que puede caminar por 40 días como unos
500 Km., hasta llegar a una cueva. Se cree que en esta misma se escondió Moisés una
vez Éxodo. 33:22

¿Qué haces aquí, Elías?


En una cueva en Horeb Dios habla con Elías. En este mismo monte Dios había hablado con
Moisés. El ambiente en la cueva no sería el mismo que Elías había experimentado en el monte
Carmelo. Ahora el mismo profeta se siente derrotado, luego de haber enfrentado con victoria a los
450 profetas de Baal. Permite que las circunstancias le afecten negativamente de tal manera que
cree que todo está perdido. Le parece que la causa de Jehová peligra por la apostasía de su
pueblo. Para colmo, aun su propia vida peligra a manos de Jezabel.

……Sal afuera y ponte de pie en el monte, delante de Jehovah…

Dios no permite que su profeta permanezca en el escondite; ordena que se ubique en el lugar de
la revelación (como Moisés). Es como si Dios le dijera: “Te has salido del ministerio que te
entregué. Recuerda que todavía sigues siendo mi profeta. No has terminado tu carrera”. Elías se
excusa ante Dios, pero el Soberano no entra en discusiones con su siervo.

….Viento… terremoto… fuego…

Entonces, Dios le da a Elías una demostración visible de su poder. En el AT Dios se manifiesta


por el viento, el fuego y los terremotos Dios puede manifestar su gloria en diferentes formas. El
usa los elementos de la naturaleza para mostrar su presencia y poder. Lo hace en forma ruidosa
e impetuosa, pero también por medio de un sonido apacible y delicado

Todo el monte Sinaí humeaba, porque Jehová había descendido sobre él en fuego; y el humo
subía como el humo de un horno, y todo el monte se estremecía en gran manera. Éxodo. 19:18

La tierra fue conmovida y tembló; Se conmovieron los cimientos de los montes, Y se


estremecieron, porque se indignó él. Humo subió de su nariz, Y de su boca fuego
consumidor; Carbones fueron por él encendidos.Salmo. 18:7–8

Y cuando oigas ruido como de marcha por las copas de las balsameras, entonces te moverás;
porque Jehová saldrá delante de ti a herir el campamento de los filisteos. 2a Samuel. 5:24

Entonces respondió Jehová a Job desde un torbellino, y dijo: ¿Quién es ése que oscurece el
consejo Con palabras sin sabiduría? Ahora ciñe como varón tus lomos; Yo te preguntaré, y tú
me contestarás. Job 38:1

Y miré, y he aquí venía del norte un viento tempestuoso, y una gran nube, con un fuego
envolvente, y alrededor de él un resplandor, y en medio del fuego algo que parecía como bronce
refulgente, Ezequiel. 1:4.

Elías necesitaba aprender que “después de la tempestad viene la calma”. Que la paciencia y la
confianza son también necesarias para servir y llevar adelante los propósitos y la obra de Dios.
Nótese que después de esta lección, Elías siente tanto temor de la presencia de Dios que,
impresionado por esta escena, se cubre el rostro Éxodo. 3:6.
El avivamiento en el tiempo de Elías
Entonces Elías tisbita, que era de los moradores de Galaad, dijo a Acab: Vive Jehová Dios de
Israel, en cuya presencia estoy, que no habrá lluvia ni rocío en estos años, sino por mi palabra1a
Reyes 17:1

Pasados muchos días, vino palabra de Jehová a Elías en el tercer año, diciendo: Ve, muéstrate a
Acab, y yo haré llover sobre la faz de la tierra.1a Reyes 18:1

1. Antecedentes
2. Israel había sido gobernado por líderes malos: Jeroboam, Nadab, Baasa, Ela, Zimri, Omri,
Acab,

Y habiendo tenido consejo, hizo el rey dos becerros de oro, y dijo al pueblo: Bastante habéis
subido a Jerusalén; he aquí tus dioses, oh Israel, los cuales te hicieron subir de la tierra de Egipto.
Y puso uno en Bet-el, y el otro en Dan Y esto fue causa de pecado; porque el pueblo iba a adorar
delante de uno hasta Dan. Hizo también casas sobre los lugares altos, e hizo sacerdotes de entre
el pueblo, que no eran de los hijos de Leví. Entonces instituyó Jeroboam fiesta solemne en el
mes octavo, a los quince días del mes, conforme a la fiesta solemne que se celebraba en Judá; y
sacrificó sobre un altar. Así hizo en Bet-el, ofreciendo sacrificios a los becerros que había hecho.
Ordenó también en Bet-el sacerdotes para los lugares altos que él había fabricado. 1a Reyes
12:28-32

Y Baasa hijo de Ahías, el cual era de la casa de Isacar, conspiró contra él, y lo hirió Baasa en
Gibetón, que era de los filisteos; porque Nadab y todo Israel tenían sitiado a Gibetón. 1a Reyes
15:27

En el año veintiséis de Asa rey de Judá comenzó a reinar Ela hijo de Baasa sobre Israel en Tirsa;
y reinó dos años. Y conspiró contra él su siervo Zimri, comandante de la mitad de los carros. Y
estando él en Tirsa, bebiendo y embriagado en casa de Arsa su mayordomo en Tirsa, vino Zimri y
lo hirió y lo mató, en el año veintisiete de Asa rey de Judá; y reinó en lugar suyo. 1a Reyes 16:8-
10

Y Omri hizo lo malo ante los ojos de Jehová, e hizo peor que todos los que habían reinado antes
de él; pues anduvo en todos los caminos de Jeroboam hijo de Nabat, y en el pecado con el cual
hizo pecar a Israel, provocando a ira a Jehová Dios de Israel con sus ídolos. 1a Reyes 16:25-26

2. Se habían convertido en adoradores de Baal y de los dioses cananeos

En la historia del reino del norte y del sur, todos los reyes del norte fueron idolatras, y muchos
del sur de Judá también, y solo después del exilio paro la adoración idolatra a otros dioses entre
los judíos.

¿Por qué la idolatría fue tan atractiva para los israelitas?

Tres factores que colaboraban en ello:

1. Los israelitas estaban rodeados por naciones paganas que creían que la adoración de varios
dioses era superior a la adoración de un solo Dios.
2. Los dioses de las demás naciones no exigían la clase de obediencia que exigía el Señor Dios de
Israel.
Por ejemplo, muchas de las religiones paganas incluían la inmoralidad sexual con las prostitutas
del templo como parte de sus ceremoniales religiosas. Sin lugar a dudas eso atraía s muchos
hombres de Israel. Por otra parte, Dios exigía que su pueblo obedeciera sus elevadas normas
morales a fin de mantener una relación salvadora con El.

1. A causa del carácter demoniaco de los ídolos. A veces la idolatría producía resultados genuinos y
demostrables para los que adoraban ídolos.

Porque los poderes demoniacos detrás de los ídolos eran capaces, aunque limitadamente, de dar
beneficios materiales, físicos y temporales. Los dioses de la fertilidad prometían el nacimiento de
hijos; los dioses del tiempo (Sol, luna, lluvia) prometían las condiciones apropiadas para las
cosechas abundantes y los dioses guerreros prometían protección de los enemigos y victoria en
la batalla.

3. Era un tiempo malo espiritual y políticamente

Cuando los lideres y el pueblo de Dios abandonan su ley y adoptan costumbres impías, Dios
enviaba profetas como Elías, y precisamente en los tiempos de Acab y otros reyes, como ya lo
dijimos, el pecado y la maldad habían empeorado progresivamente, prevaleciendo la rebeldía y
dureza de corazón contra los mandamientos de Dios. Hicieron pactos políticos con reyes
paganos y matrimonios de conveniencia .

Se habían apartado de los caminos de Jehová y de las enseñanzas de sus padre y líderes
religiosos, abandonando su relación con el pacto de Dios oponiéndose a las normas y leyes de
sus fundadores fundiéndose con la malvada cultura de los cananeos, prefiriendo los beneficios
materialistas y placeres inmorales. Se casaron con los cananeos y comenzaron a adorar a Baal,
astarot, produciéndose un sincretismo de las dos culturas y su forma de vida. Un matrimonio
mixto que casi destruye su identidad como pueblo de Dios.

1. Factores detonantes
2. Elías alerto a las personas de su condición moral y espiritual decadente
3. Elías fue usado en el juicio de Dios a Israel: Sequia de tres años: Contrariando a los dioses de la
lluvia, rocio, truenos

Entonces Elías tisbita, que era de los moradores de Galaad, dijo a Acab: Vive Jehová Dios de
Israel, en cuya presencia estoy, que no habrá lluvia ni rocío en estos años, sino por mi palabra1a
Reyes 17:1

3. No hubo respuesta al juicio

Y él respondió: Yo no he turbado a Israel, sino tú y la casa de tu padre, dejando los


mandamientos de Jehová, y siguiendo a los baales. 1a Reyes 18:18

1. Resultados
2. Elías fue el instrumento del avivamiento: La palabra de Dios vino a Él y le respondió a Acab el rey

Pasados muchos días, vino palabra de Jehová a Elías en el tercer año, diciendo: Ve, muéstrate a
Acab, y yo haré llover sobre la faz de la tierra Fue, pues, Elías a mostrarse a Acab. Y el hambre
era grave en Samaria. 1a Reyes 18:1-2

2. El pueblo desafío a Israel a hacer un compromiso


Y acercándose Elías a todo el pueblo, dijo: ¿Hasta cuándo claudicaréis vosotros entre dos
pensamientos? Si Jehová es Dios, seguidle; y si Baal, id en pos de él. Y el pueblo no respondió
palabra. 1a Reyes 18:21

3. Dios preservo a Elías durante todo el periodo de sequia

Y vino a él palabra de Jehová, diciendo: Apártate de aquí, y vuélvete al oriente, y escóndete en el


arroyo de Querit, que está frente al Jordán. Beberás del arroyo; y yo he mandado a los cuervos
que te den allí de comer. Levántate, vete a Sarepta de Sidón, y mora allí; he aquí yo he dado
orden allí a una mujer viuda) que te sustente. Entonces él se levantó y se fue a Sarepta. Y cuando
llegó a la puerta de la ciudad, he aquí una mujer viuda que estaba allí recogiendo leña; y él la
llamó, y le dijo: Te ruego que me traigas un poco de agua en un vaso, para que beba. 1a Reyes
17:2-4, 9-10

4. Elías puso a prueba a los profetas de baal y a sus dioses

Y Elías volvió a decir al pueblo: Sólo yo he quedado profeta de Jehová; mas de los profetas de
Baal hay cuatrocientos cincuenta hombres. Dénsenos, pues, dos bueyes, y escojan ellos uno, y
córtenlo en pedazos, y pónganlo sobre leña, pero no pongan fuego debajo; y yo prepararé el otro
buey, y lo pondré sobre leña, y ningún fuego pondré debajo. Invocad luego vosotros el nombre de
vuestros dioses, y yo invocaré el nombre de Jehová; y el Dios que respondiere por medio de
fuego, ése sea Dios. Y todo el pueblo respondió, diciendo: Bien dicho. Entonces Elías dijo a los
profetas de Baal: Escogeos un buey, y preparadlo vosotros primero, pues que sois los más; e
invocad el nombre de vuestros dioses, mas no pongáis fuego debajo. Y ellos tomaron el buey que
les fue dado y lo prepararon, e invocaron el nombre de Baal desde la mañana hasta el mediodía,
diciendo: !!Baal, respóndenos! Pero no había voz, ni quien respondiese; entre tanto, ellos
andaban saltando cerca del altar que habían hecho. Y aconteció al mediodía, que Elías se
burlaba de ellos, diciendo: Gritad en alta voz, porque dios es; quizá está meditando, o tiene algún
trabajo, o va de camino; tal vez duerme, y hay que despertarle. Y ellos clamaban a grandes
voces, y se sajaban con cuchillos y con lancetas conforme a su costumbre, hasta chorrear la
sangre sobre ellos. Pasó el mediodía, y ellos siguieron gritando frenéticamente hasta la hora de
ofrecerse el sacrificio, pero no hubo ninguna voz, ni quien respondiese ni escuchase.1a Reyes
18:22-29

5. Elías reparo el altar a Jehová y lo puso a prueba

Entonces dijo Elías a todo el pueblo: Acercaos a mí. Y todo el pueblo se le acercó; y él arregló el
altar de Jehová que estaba arruinado. Y tomando Elías doce piedras, conforme al número de las
tribus de los hijos de Jacob, al cual había sido dada palabra de Jehová diciendo, Israel será tu
nombre, edificó con las piedras un altar en el nombre de Jehová; después hizo una zanja
alrededor del altar, en que cupieran dos medidas de grano. Preparó luego la leña, y cortó el buey
en pedazos, y lo puso sobre la leña. Y dijo: Llenad cuatro cántaros de agua, y derramadla sobre
el holocausto y sobre la leña. Y dijo: Hacedlo otra vez; y otra vez lo hicieron. Dijo aún: Hacedlo la
tercera vez; y lo hicieron la tercera vez, de manera que el agua corría alrededor del altar, y
también se había llenado de agua la zanja. Cuando llegó la hora de ofrecerse el holocausto, se
acercó el profeta Elías y dijo: Jehová Dios de Abraham, de Isaac y de Israel, sea hoy manifiesto
que tú eres Dios en Israel, y que yo soy tu siervo, y que por mandato tuyo he hecho todas estas
cosas. Respóndeme, Jehová, respóndeme, para que conozca este pueblo que tú, oh Jehová,
eres el Dios, y que tú vuelves a ti el corazón de ellos. 1a Reyes 18:30-37

6. El fuego cayó por el poder de Dios

Entonces cayó fuego de Jehová, y consumió el holocausto, la leña, las piedras y el polvo, y aun
lamió el agua que estaba en la zanja. 1a Reyes 18:38
7. Jehová el verdadero Dios fue exaltado

Viéndolo todo el pueblo, se postraron y dijeron: !!Jehová es el Dios, Jehová es el Dios! 1a Reyes
18:39

8. Los falsos profetas fueron destruidos

Entonces Elías les dijo: Prended a los profetas de Baal, para que no escape ninguno. Y ellos los
prendieron; y los llevó Elías al arroyo de Cisón, y allí los degolló. 1a Reyes 18:40

9. El juicio de Dios sobre Israel fue quitado y llovió

Entonces Elías dijo a Acab: Sube, come y bebe; porque una lluvia grande se oye. Acab subió a
comer y a beber. Y Elías subió a la cumbre del Carmelo, y postrándose en tierra, puso su rostro
entre las rodillas. Y dijo a su criado: Sube ahora, y mira hacia el mar. Y él subió, y miró, y dijo: No
hay nada. Y él le volvió a decir: Vuelve siete veces. A la séptima vez dijo: Yo veo una pequeña
nube como la palma de la mano de un hombre, que sube del mar. Y él dijo: Ve, y di a Acab: Unce
tu carro y desciende, para que la lluvia no te ataje. Y aconteció, estando en esto, que los cielos se
oscurecieron con nubes y viento, y hubo una gran lluvia. (A) Y subiendo Acab, vino a Jezreel. Y la
mano de Jehová estuvo sobre Elías, el cual ciñó sus lomos, y corrió delante de Acab hasta llegar
a Jezreel. 1a Reyes 18:41-46

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