PRELAB 9. Polarimetría D-Glucosa
PRELAB 9. Polarimetría D-Glucosa
PRELAB 9. Polarimetría D-Glucosa
Marco teórico:
Existen moléculas que desvían la luz en cierto ángulo. Esta desviación de la luz es
denominada como polarización o difracción de la luz. Las moléculas que poseen
esta capacidad son aquellas cuya estructura es asimétrica. Su asimetría permite
que los enlaces se encuentren en constante rotación en busca de una posición
más estable. Este movimiento recibe el nombre de rotación específica la cual es
medida a través de los grados de rotación de cada enlace. (Sanz, 2011)
Una de estas moléculas es la sacarosa. Esta puede ser cuantificada y medida por
medio de un sacarímetro. Este equipo está diseñado para determinar la desviación
que es producida en un eje de luz polarizada linealmente a través de una solución.
Esto permite realizar la medición de la sacarosa en muestras líquidas. El resultado
es expresado en grados Brix o bien como gramo de sacarosa por cada gramo de
líquido. (Connors, 1981)
Al realizar mediciones utilizando un sacarímetro o cualquier otro equipo derivado
de un polarímetro es imperativo realizar todas las operaciones lo más cercanas a
las condiciones estándar. Una desviación de las temperaturas puede causar
lecturas erróneas del equipo ya que está diseñado para trabajar en estas
condiciones para obtener lecturas ya conocidas previamente. Segundo, la celda
debe de ser de 1 dm y tratada con extremo cuidado ya que cualquier daño o
mancha de grasa corporal pueda modificar el movimiento del haz de luz enviado
por el equipo dando lecturas falsas. (Sanz, 2011)
La principal importancia de un polarímetro en el campo de la ingeniería química,
es que permite tener un control estricto tanto del grado de concentración de ciertos
analitos como de las constantes de rotación. Con estos datos es posible manipular
la constante de equilibrio de una solución para volver ciertos procesos más
veloces o más lentos dependiendo de lo necesitado. Por ejemplo, en la industria
azucarera se verifica que los niveles de “pol” o la polarimerización del azúcar sea
bajo pero que la concentración de la sacarosa sea lo más alta posible. Este
equilibrio se maneja según la velocidad de ciertos puntos críticos del proceso en
los cuales se remueve la mayor cantidad de agua para aumentar la concentración.
(Ortiz, 2012)
Referencias: