T G. STEINER - en El Castillo de Barba Azul
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G: . S/e., J1~ f
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durante la noche misma. de la música electrónica
co~ndida en su fria quemadura. Una gran por- te pero dificil de investigar. para no hablar de
clan de la humanidad que se encuentra entre los expresarlo cuantitativamente. es la cuestión del
trece años y. digamos. los veinticinco. vive ahora desarrollo de las facultades mentales cuando ese
inmersa en esa constante baraúnda. El martillea desarrollo se realiza dentro de una perpetua matriz
de la música rocko pop crea un espacio envolvente. sonora. ¿Qué le estarán haciendo al cerebro esos
Actividades tales como leer. escribir. comunicarse----'- vociferantes martillos durante fases claves de su
privadamente. estudiar. actividades que antes desarrollo? Notenemos precedentes que nos digan
estaban enmarcadas en el silencio. ahora se desa- cómo maduran las formas de vida ni cómo se
rrollan en un campo de estridentes vibraciones. desarrollan cerca de los niveles del ruido organiza-
Esto significa que la naturaleza esencialmente do que ahora nos cae como cascada durante todo
lingüística de tales actividades se ha adulterado; el día y la achispada noche (en particular el rack es
son sólo vestigios de la antigua "lógica". aficionado a los colores luminosos alrededor);
La nueva esfera sonora es global. Se agita a Cuando unjoven recorre una calle de Vladivostock
gran velocidad a través de lenguas. ideologías. o de Cincinnati. cuando un automóvil pasa hacien-
fronteras y razas. El estrépito que me llega a través do oír su radio en el volumen máximo ocurre que
de las paredes en una noche invernal del noreste de una cápsula sonora encierra al individuo y dismi-
los Estados Unidos está resonando muy probable- nuye el mundo exterior para reducirlo a una serie
mente al mismo tiempo en una sala de baile de de superficies acústicas. Un régimen pop impone
Bogotá. por medio de un aparato de transistores en severos esfuerzos fisicos al oído humano. Algo del
~embotamiento o daños que se siguen de ello ha sido
Narvik, en un fonógrafo tragamonedas de Kiev y
mediante una guitarra electrónica en Bengazi. La en realidad medido. pero sabemos muy poco sobre
composición es el éxito del último mes o dela--~ los efectos psicológicos de la saturación causada
última semana de los pops: ya tiene corno auditorio por el alto volumen y la repetición de una misma
a toda la sociedad de masas. Los elementos de este música (a menudo se oyen las mismas dos o tres
esperanto musical son móviles. El rack y el pop piezas durante todo el día). ¿Qué tejidos de la
engendran concéntricos mundos de moda y esta- sensibilidad están siendo entorpecidos o exacer-
blecen un estilo de vida. La música popular aportó bados? . . .
consigo sociologías de las maneras públicas y Sin embargo aquí nos encontramos incuestio-
privadas, de solidaridad de grupo. nablemente ante un conjunto de hechos con sus
Se han estudiado muchos contextos de la códigos de reconocimiento tan difundidos y diná-
cultura de los decibeles. Lo que es más importan- micos que constituyen una "metacultura". La
música popular tiene su semántica. su teoría de
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coanálisis y el estudio de los grandes medios de confOrmidad con los máximos valores morales e
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intelectuales. eran pasajes de autores griegos, de rían hasta la luna. De manera menos tangible pero
Shakespeare, de MUtan. Sospecha uno que para más significativa se ha estimado que alrededor del
muchos de nosotros ahora la imagen del recurso o 75 por ciento de los individuos más talentosos de
refugio decisivo sería menos una piedra de toque las naciones desarrolladas. de los hombres y mu-
que. un diapasón. De la musique avant toute chose. jeres cuya inteligencia mensurable se aproxima al
máximo, está trabajando ahora en las ciencias.
Parece pues que la política y las humanidades
Si la música es uno de los principales "lengua- cuentan ahora sólo con un cuarto de los recursos
jes independientes de la palabra".la matemática es mentales óptimos de nuestras sociedades y alistan
otro. Cualquier argumentación sobre una poscul- su personal en gran medida por debajo de la linea
tura y futuras humanidades debe tener decisiva- de excelencia. Es casi una perogrullada insistir en
mente en cuenta el papel que desempeñan las que ningún período anterior de la historia ofrece
ciencias naturales y la matemática. Las esferas de un paralelo con el actual crecimiento exponencial
estas disciplinas pueden muy pronto ser las esfe- en cuanto a tasa, multiplicidad y efectos del pro-
ras centrales. Las estadísticas pueden ser superfi- greso científico y técnico. Es igualmente evidente
ciales o ambiguas en su interpretación. Pero las que hasta el fantástico ritmo actual de crecimiento
que registran el crecimiento de las ciencias están (por más que esté intercalado por fases de desilu-
en realidad levantando el mapa de un nuevo sión o de reorganización en ciertas naciones en alto
mundo. El número de articulas que puede conside- grado desarrolladas) se duplicará por lo menos a
rarse relevante en el progreso de la química, la comienzos de la década de 1980. Esta fenomeno-
física y las ciencias biológicas --es decir, la reciente logía trae consigo demandas enteramente sin pre-
bibliografia activa de estos tres campos solamen- cedentes sobre absorción de información y su
te- se estima superior a los tres millones. Los--- aplicación racional. Nos encontramos menos ante
índices críticos de las ciencias -inversiones, esa costa de lo ilimitado que infundía pavor a
publicaciones, número de hombres especialmente Newton que en medio de mOvimientos de marea,
formados, porcentaje del producto nacional bruto para los cuales ni siquiera tenemos un modelo
directamente destinado a la investigación y el teórico.
desarrollo- se duplican cada siete o diez años. Podemos identificar una media docena de
Entre ahora y 1990. de conformidad con una terrenos de máxima presión, puntos en los que la
reciente proyección, las monografias publicadas ciencia pura y las realizaciones técnicas alterarán
sobre matemática. física. química y biología, si se estructuras básicas de la vida privada y de la vida
las alineara en una estanteria imaginaria, llega- social.
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