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Diferencias Entre El Procedimiento Administrativo y El Procedimiento Contecioso Administrativo.

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REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD DEL ZULIA


FACULTAD DE CIENCIAS JURÍDICAS Y POLÍTICAS
ESCUELA DE DERECHO
CÁTEDRA: PROCEDIMIENTOS ADMINISTRATIVOS Y CONTENCIOSOS –
ADMINISTRATIVOS.

DIFERENCIAS ENTRE EL PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO Y EL


PROCEDIMIENTO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO

Autores:
Gutiérrez, María CI: 27.237.244
Sánchez, Marlon CI: 25.201.784
Urribarrí, Gladys CI: 13.371.741
Villalobos, Neidelín, CI: 27.723.348

Sección: 004.

Maracaibo, Febrero de 2019


INTRODUCCIÓN

Indudablemente, nuestro ordenamiento jurídico se encuentra sometido a una


variedad de principios, dentro de los cuales encontramos fundamentalmente el
principio de la legalidad, en virtud del cual toda la actuación de la Administración
Pública debe realizarse de acuerdo a lo establecido en la ley, lo cual a su vez se
configura como la esencia del Estado de Derecho.

En un comienzo las actuaciones de la misma se encontraban apartadas de


todo carácter procedimental, lo cual genero una preocupación y a su vez el
desarrollo de normas adjetivas que vinieran a regular las actuaciones de la misma
en concordancia con este principio, es por esto que nuestro ordenamiento jurídico
elaboró la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos, en la cual se regulan
todos los pasos consecutivos que debe seguir la Administración, así como los
requisitos que se deben cumplir en cada paso para llegar a dictar un acto
administrativo que se encuentre apegado a derecho.

Sin embargo, con el paso del tiempo en la vida práctica se fueron suscitando
ciertos problemas en los cuales la Administración abusaba de los poderes y
prerrogativas que le han sido otorgadas y reconocidas en nuestro ordenamiento
jurídico, razón por la cual fue necesario establecer como mecanismo de control y
una de las garantías del principio de la legalidad lo referente a los procedimientos
contenciosos siendo una vía distinta a la esfera de la Administración Pública en la
cual se busca justamente velar por el cumplimiento de este principio de legalidad y
asegurar los intereses y derechos subjetivos de los ciudadanos.

Cuando hablamos de procedimiento, debemos entender por éste un camino


que está conformado por diversos pasos, los cuales nos permiten llegar a la
consecución de un fin, sin embargo es necesario tener en cuenta que desde el punto
de vista jurídico podemos encontrar una variedad de procedimientos, dentro de los
cuales podemos encontrar a su vez los procedimientos administrativos y los
contenciosos administrativos, los cuales no deben confundirse ya que si bien es
cierto que se encuentran interrelacionados cada uno de estos es autónomo e
independiente del otro, ya que poseen su propio ámbito de desarrollo, su propia ley
que las regula y circunstancias a las cuales deben atender para la procedencia de
los mismos, entre otros aspectos.
ESQUEMA

INTRODUCCIÓN
1. Nociones básicas conceptuales.
1. Procedimiento.
2. Procedimiento administrativo.
3. Procedimiento contencioso administrativo.
2. Diferencias entre el procedimiento administrativo y contencioso administrativo
1. Ámbito en el cual se desarrollan.
2. Naturaleza del procedimiento administrativo y el procedimiento
contencioso administrativo.
3. Requisitos de procedencia.
4. Regulación legal.
5. Recursos administrativos y contenciosos.
6. Asistencia y representación en los procedimientos
CONCLUSIONES
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS.
DIFERENCIAS ENTRE EL PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO Y EL
PROCEDIMIENTO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO

I. NOCIONES BÁSICAS CONCEPTUALES.

1) Procedimiento:

“el procedimiento consiste en un sentido jurídico, en una


pluralidad de actos jurídicamente regulados a priori, que
guardan entre si una relación de coordinación o
concurrencia, de modo que cada uno de ellos es el
presupuesto de validez de los posteriores, y estos a su
vez la condición de la eficacia de los anteriores” (Araujo,
1998).

En primer lugar, resulta necesario comprender ¿qué se entiende por el


termino de procedimiento? desde un punto de vista etimológico, proviene de un
vocablo latín que es "procederé", este a su vez se compone del prefijo pro que
significa adelante, y cedo que significa marchar; en este sentido, se entiende por
procedimiento a un camino por recorrer que conduce a una determinada finalidad,
siendo necesario seguir una secuencia de pasos para llegar a esta meta a través de
diversos momentos.

Desde un punto de vista jurídico el procedimiento se refiere a una serie de


pasos que se deben necesariamente de seguirse para llegar a un fin, además el
procedimiento se rige por un nexo de eficacia y un nexo de legitimidad ya que de no
seguirse estos pasos acarrearía la anulación de todas las actuaciones
subsiguientes, y esto obligaría a reponer el procedimiento al estado en que se
encontraba cuando la causa de la nulidad lo produjo.

2) Procedimiento administrativo: se entiende por procedimiento administrativo


a "Un conjunto de actos preparatorios o de trámite que preceden al administrativo
decisorio, y asimismo, los trámites y diligencias posteriores a éste". (Citado por
Giannini, 1993).
Los procedimientos administrativos no son otra cosa sino una serie de actos o
de pasos que debe de seguir la Administración Pública para emitir su
pronunciamiento a través de un acto administrativo, el cual debe ceñirse por las
disposiciones normativas que establece nuestro ordenamiento jurídico.

3) Procedimiento contencioso administrativo: se trata de un conjunto de actos


y tramites que ordenados cronológicamente marcan el inicio, desarrollo y término de
las controversias deducidas ante la jurisdicción contencioso administrativa.

Se trata de procedimiento contencioso administrativo ya que este busca la


obtención de un pronunciamiento que dirima un conflicto u oposición de intereses
suscitados entre las partes.

II) DIFERENCIAS ENTRE EL PROCEDIMIENTO ADMINISTRATIVO Y EL


PROCEDIMIENTO CONTENCIOSO ADMINISTRATIVO.

1) Ámbito en el cual se desarrollan: En este sentido podemos encontrar la


afirmación según la cual;

“En la mayoría de los estados modernos se ha instituido


la jurisdicción contencioso administrativa, llamada a
conocer de lo contencioso- administrativo, o sea, el
conjunto de recursos jurisdiccionales organizados para la
protección de los individuos contra los excesos de poder
de la administración” (Jeze, 1934).

Mientras que, el procedimiento administrativo “es un conjunto de actos de


autoridades administrativas coligados entre sí y tendientes a una única finalidad”.
(Citado por Giannini, 1993).

De lo cual podemos establecer que la diferencia fundamental entre los


procedimientos contenciosos y los procedimientos contenciosos administrativos la
podemos encontrar en el ámbito en el cual se desarrolla cada uno de estos, es decir,
el procedimiento administrativo se lleva a cabo dentro de la propia esfera de la
Administración Pública, mientras que los procedimientos contencioso administrativo
tienen lugar en una esfera diferente a ésta, en un ámbito jurisdiccional, siendo
entonces un mecanismo que permite asegurar la protección de los ciudadanos en
contra de las arbitrariedades y abuso de poder de la Administración Pública, razón
por la que resulta indispensable que este control sea ejercido por autoridades
distintas de aquellas pertenecientes a la Administración.

2) Naturaleza del procedimiento administrativo y el procedimiento contencioso


administrativo: por un lado “el procedimiento administrativo viene a ser un producto
del estado de Derecho” (Citado por Vllanova, 1983). Mientras que “El procedimiento
contencioso administrativo es un conjunto de normas referentes a los presupuestos,
contenidos y efectos del proceso administrativo, de este modo tratan de destacar
que el estudio de esas normas constituye un sector del derecho procesal”. (Citado
por González, 1967).

En primer lugar resulta preciso destacar que el procedimiento administrativo


se encuentra sometido al principio de la legalidad y la instrumentalidad ya que este
debe indicar el camino a transitar con cierta preparación, emisión, impugnación y
ejecución de la voluntad administrativa, mientras que el procedimiento contencioso
administrativo se encuentra implícitamente vinculado con el derecho procesal, al
tratarse de un conjunto de normas que tienen como finalidad analizar la manera en
la que se han constituido estos procesos administrativos.

Existen dos vías a seguir atendiendo al principio de la legalidad en cuanto a


los actos administrativos se refiere: la vía administrativa y la vía contencioso
administrativa, que son “dos caminos o procedimientos autónomos con sustantividad
y finalidad propia pero necesariamente sucesivos, desde los puntos de vista lógico y
cronológico (citado por Farías, 2006) esto es, donde termina uno y comienza el otro.

Cada uno de estos procedimientos se caracteriza por ser independientes


entre sí, desde el punto de vista de su sustantividad hasta el objeto que persigue
cada uno de ellos, mas sin embargo estos son necesariamente sucesivos ya que
como se ha indicado es necesario agotar la vía administrativa para poder entonces
acudir a la vía jurisdiccional.

En este sentido, si bien es cierto que el procedimiento administrativo se


compone de una serie de actividades que se dirigen evidentemente a producir un
acto administrativo que se encuentre apegado a lo estipulado por las normas
jurídicas atendiendo al principio de la legalidad, también se espera que esta
adecuación se logre en la instancia de su propia producción, es decir en la propia vía
administrativa; sin embargo es posible plantearnos ¿qué sucede de no ser este el
caso?, pues bien, cuando esto no sucede es posible acudir a la vía jurisdiccional
para la revisión de estos actos administrativos, siendo a su vez, otra de las formas
de garantías que el legislador ofrece a los administrados o ciudadanos.

En el curso de las actividades de la administración pueden producirse actos


ilegales que causen daños y perjuicios a particulares y a entidades privadas o
públicas, en estos casos en los cuales surgen situaciones conflictivas es
indispensable la intervención de un órgano jurisdiccional que resuelva la
controversia.

Es necesario que exista un sistema de control jurisdiccional que proteja a los


administrados contra los actos irregulares de la administración, por medio de la
anulación de los actos administrativos contrarios a derecho, y además cuando sea
procedente el restablecimiento de las situaciones jurídicas subjetivas indebidamente
lesionadas, y la condena al pago de la indemnización de daños y perjuicios
provenientes de la actividad administrativa, lo cual evidentemente se logra a través
del procedimiento contencioso administrativo.

3) Requisitos de procedencia: Determinados autores señalan que

“La vía administrativa tiene un carácter preliminar, en


tanto que constituye un presupuesto procesal no solo
cuando la administración pública obra como tal, sometida
a su derecho estatutario, sino cuando actúa como
cualquier otro sujeto sometido al derecho común, pues
también se da la exigencia del agotamiento de la vía
administrativa para poder enjuiciar a la Administración
pública correspondiente" (González, 1967).

En primer lugar es necesario destacar que procedimiento administrativo se


considera como un paso previo, un requisito para deducir una pretensión jurídica
frente a la Administración Publica, y por tanto, como un presupuesto procesal que es
exigido por el ordenamiento jurídico. En este sentido podemos destacar los
siguientes artículos de la Ley Orgánica de Procedimientos Administrativos:

“Interpuesto el recurso de reconsideración, o el


jerárquico, el interesado no podrá acudir ante la
jurisdicción de lo contencioso administrativo, mientras que
no se produzca la decisión respectiva o no se venza el
plazo que tenga la administración para decidir" (Artículo
92 de la LOPA1981, citado por González, 1967).

“La vía contencioso administrativa quedará abierta


cuando interpuestos los recursos que ponen fin a la vía
administrativa, estos hayan sido decididos en sentido
distinto al solicitado, o no se haya producido decisión en
los plazos correspondientes. Los plazos para intentar los
recursos contenciosos son los establecidos por las leyes
correspondientes" (Artículo 93 de la LOPA 1981, citado
por González, 1967).

De esta manera es posible establecer que la vía administrativa no supone


necesariamente la existencia de un acto de la Administración Pública, ya que en los
procedimientos de su formación lo que se busca es justamente que se dicte ese
acto, mientras que la vía contenciosa exige además de la existencia de un acto
administrativo, que ese acto cause estado y no sea posible impugnarlo a través de la
vía administrativa, siendo un requisito fundamental agotar la vía administrativa a
cabalidad para poder acudir entonces a la vía jurisdiccional, siendo inconcebible
acudir a la jurisdicción contencioso administrativo sin haber agotado previamente
todos los recursos que ofrece la vía administrativa.

4) Regulación legal: atendiendo a las diferencias y particularidades de cada


uno de estos procedimientos podemos encontrar dos leyes distintas que se ocupan
de regular a estos mismos, por un lado encontramos la Ley orgánica de
Procedimientos Administrativos, y por el otro la Ley orgánica de la Jurisdicción
Contencioso Administrativa.

“Esta ley tiene como objeto regular la organización, funcionamiento y


competencia de los órganos de la jurisdicción contencioso administrativa, salvo lo
previsto en leyes especiales” (Artículo 1 de la Ley orgánica de la Jurisdicción
Contencioso Administrativa, citado por González, 1967)

“La Administración Pública Nacional y la Administración


Pública Descentralizada, integradas en la forma prevista
en sus respectivas leyes orgánicas, ajustarán su actividad
a las prescripciones de la presente ley. Las
administraciones Estatales y Municipales, la Contraloría
General de la República y la Fiscalía General de la
República, ajustarán igualmente sus actividades a la
presente ley, en cuanto les sea aplicable" (Artículo 1 de la
LOPA 1981, citado por González, 1967).

En este sentido, la ley Orgánica de Procedimientos Administrativos viene a


regular todo lo referente a los denominados procedimientos administrativos, los
cuales se encuentran dentro de la esfera de la Administración Pública y que por lo
tanto va a regular cada una de las actuaciones de los integrantes de la misma en
cada uno de esos pasos dirigidos a producir un acto administrativo, mientras que los
procedimientos contencioso administrativos vienen a regularse por la Ley Orgánica
de la Jurisdicción Contencioso Administrativa, por pertenecer a una esfera distinta a
la Administración Pública, la cual va a establecer el ámbito de competencia de cada
uno de los órganos que integran esta jurisdicción, así como lo referente a su
estructura y las atribuciones de cada uno de estos.

5) Recursos administrativos y contenciosos: "Existen dos categorías de


recursos que pueden ser ejercidos con relación a los actos y operaciones de la
administración: los recursos administrativos y los recursos contenciosos" (Citado por
Lares, 1988).

Los recursos administrativos son los medios que disponen los interesados
para obtener por la vía administrativa la reconsideración de aquellos actos que
estimen contrarios a la ley, la equidad o la conveniencia colectiva. Los recursos
administrativos son dos: el recurso de reconsideración o reposición, es decir la
solicitud que se dirige al propio actor del acto impugnado para que lo evoque o lo
modifique, y el recurso jerárquico, la solicitud que se dirige al superior para que
revise la decisión impugnada y la revoque o modifique.

Mientras que los recursos contenciosos son los medios de que disponen los
interesados para someter ante un tribunal, en la forma legal, una pretensión jurídica
con la finalidad de que esta sea satisfecha mediante una sentencia. Así mismo se
pueden establecer determinadas diferencias de acuerdo al autor Eloy Lares:

1) Los recursos administrativos se plantean ante autoridades administrativas,


los recursos contenciosos en cambio se plantean ante órganos jurisdiccionales, es
decir, ante tribunales (Citado por Lares, 1988).

El primer parámetro que permite diferenciarlos se refiere a las autoridades


ante las cuales son presentados o interpuesto estos recursos, en el caso de los
recursos administrativos se plantean ante las autoridades de la Administración
Pública, mientras que los recursos contencioso administrativo se plantean

2) En este segundo parámetro podemos referirnos a la amplitud de libertad


que tiene el ciudadano al momento de interponer estos recursos;

“Los recursos administrativos el recurrente puede invocar


como fundamento de su demanda motivos de todo orden:
puede impugnar la legitimidad o el mérito de acto y alegar
por lo tanto la violación de reglas de derecho, errores de
hecho, razones de equidad y de carácter técnico, la
inconveniencia e inoportunidad de la medida, entre otros;
mientras que el recurso contencioso solo se puede fundar
en infracciones a reglas de derecho" (Lares, 1988).

En este mismo orden de ideas cuando hablamos de los recursos


administrativos se tiene una libertad más amplia ya que se puede alegar una
variedad de supuestos, los cuales van desde errores en las situaciones de hecho
hasta la violación de preceptos y normas jurídicas, mientras que al momento de
interponer los recursos contenciosos se tiene una libertad restringida ya que solo
puede alegarse la violación de las normas jurídicas.

3) En este parámetro la diferencia fundamental es que, en el caso de los


recursos administrativos la autoridad puede incluso otorgar más de lo que se ha
solicitado, mientras que los tribunales que conocen de los recursos contenciosos
administrativos se rigen por el principio de presentación, y en virtud de esto se
encuentran limitados a lo que se ha alegado en el proceso y por lo tanto deben
resolver únicamente sobre la pretensión que se presenta, sin poder otorgar más de
lo que se ha solicitado.

“La autoridad administrativa que conoce de un recurso


administrativo tiene ordinariamente amplios poderes:
puede confirmar, revocar o modificar el acto impugnado,
e incluso puede conceder más de lo pedido por el
recurrente. Las facultades del órgano jurisdiccional que
conoce de un recurso contencioso son limitadas, y en
ningún caso puede incurrir en ultra petita, es decir, no
puede conceder más de lo pedido por el recurrente"
(Lares, 1988).

4) De la misma manera las formas mediante las cuales finalizan estos


procesos constituyen figuras diferentes, en el caso de los procedimientos
administrativos estos culminan mediante un acto administrativo que es el resultado
de todo ese procedimiento administrativo el cual va encaminado justamente a dictar
un acto administrativo, mientras que los procedimientos contencioso administrativo
culminan a través de una sentencia judicial definitivamente firme en virtud de la cual
se adquiere el carácter de cosa juzgada y de esta manera resulta imposible someter
nuevamente a juicio la pretensión planteada.

“La decisión que recae sobre un asunto administrativo es


un acto administrativo sometido al régimen legal de estos
tipos de actos, el pronunciamiento que se emite en
relación con un recurso contencioso es una sentencia
provista de la autoridad de cosa juzgada " (Lares, 1988).
6) Asistencia y representación en los procedimientos: El procedimiento
administrativo por llevarse a cabo en sede administrativa permite que el mismo
pueda ser realizado por el administrado (interesado) frente a la administración sin
estar asistido por un abogado mediante solicitud escrita que debe seguir los
requisitos que contempla el artículo 49 de la Ley Orgánica de Procedimientos
Administrativos. Por ejemplo indicar el organismo al cual esta dirigida la petición
entre otros ya que el procedimiento no es una simple formalidad sino que permite el
desarrollo de la actividad administrativa

“Toda persona interesada podrá, por sí o por medio de su


representante, dirigir instancias o peticiones a cualquier
organismo, entidad o autoridad administrativa. Estos
deberán resolver las instancias o peticiones que se les
dirijan o bien declarar, en su caso, los motivos que
tuvieren para no hacerlo" (Artículo 2 de la LOPA 1981,
citado por González, 1967).

Mientras que el procedimiento contencioso administrativo se lleva a cabo en


sede judicial ante la jurisdicción contencioso administrativo la cual va a regular las
actuaciones de la administración pública partiendo del principio de reversibilidad
según el cual todo acto de la administración pública está sujeto a revisión y el
principio de la legalidad por el cual toda actuación debe estar acorde a la ley. Sin
embargo para llegar a esta se debe agotar primeramente la vía administrativa e
introducir el recurso correspondiente.

A diferencia del procedimiento administrativo, en el procedimiento


contencioso administrativo, siguiendo lo dispuesto en el artículo 28 de la Ley
Orgánica de la Jurisdicción Contencioso Administrativa. Las partes actuaran en el
juicio asistidos o representados por un abogado o abogada (pero en casos de
omisión, demora o deficiente prestación de los servicios públicos la acción puede
interponerse sin abogado)

Situación que acoge igualmente el artículo 49 de la CRBV al indicar que en el


debido proceso se aplicara a todas las actuaciones judiciales y administrativas, núm.
1º la defensa y asistencia jurídica. Por ende el Procedimiento administrativo se
diferencia del procedimiento contencioso administrativo en que el primero el
administrado o interesado puede o no estar asistido por un abogado y en el segundo
las partes deben actuar asistidas o representadas por un abofado (a) dado el
proceso se va llevar a cabo en la esfera jurisdiccional por suscitarse a una
controversia con la administración considerar que es un acto ilegal o ilegitimo.
CONCLUSIONES

Si bien es cierto que las actuaciones de la Administración Pública se


encuentran sometidas a las disposiciones legales que ofrece nuestro ordenamiento
jurídico, a lo largo de estos procedimientos o pasos que deben seguirse lo normal es
que esos actos administrativos que emanan de dicho procedimiento se encuentren
apegados al derecho y que atiendan a la justicia, por lo tanto debe evitarse a toda
costa cualquier arbitrariedad y la violación de los derechos o intereses de los
ciudadanos.

Sin embargo es posible plantearnos ¿qué ocurre cuando este no es el caso?,


nuestro ordenamiento jurídico como garantía de este principio y como defensa del
Estado de derecho nos ofrece una vía jurisdiccional que permite a través de sus
procedimientos impugnar estos actos administrativos que el ciudadano alega le es
contradictorio y desfavorable.

Resulta menester destacar que, a pesar de encontrarse vinculados cada uno


posee notables diferencias, ya que como se estudió anteriormente los
procedimientos administrativos son propios de la esfera de actuación de la
Administración Pública, mientras que los procedimientos contenciosos se dan dentro
del inter jurisdiccional; de la misma manera existen determinadas condiciones para
acudir a los mismos, en el caso de los procedimientos administrativos no se requiere
que se haya dictado previamente un acto administrativo, no obstante, para dar inicio
a los procedimientos contenciosos no sólo debe haberse dictado un acto firme, sino
que también se debe haber agotado la vía administrativa.

Otro de los aspectos que nos permiten diferenciar a estos procedimientos es


que cada uno posee una ley propia que va a regular todo lo referente a cada uno de
estos, individualmente, y los recursos a los cuales es posible acudir para impugnar
estos actos son completamente diferentes en cada una de éstas vías, incluso es
posible destacar que cada uno de estos posee una naturaleza jurídica propia y
particular.
Resulta entonces de suma importancia comprender los criterios que permiten
diferenciarlos para así desde el punto de vista práctico y sobre todo en el ejercicio de
nuestra profesión nos sea posible identificar en qué situaciones es procedente.

FUENTES BIBLIOGRÁFICAS

 Araujo, José. (1988). Tratado de Derecho Administrativo Formal.


Caracas, Venezuela. Editorial hermanos vadell. P. 391-408.
 Asamblea Nacional. Ley Orgánica de Procedimientos
Administrativos. (1981) Caracas, Venezuela. Gaceta oficial de la
República Bolivariana de Venezuela. Nº 2.818 extraordinarios. 1 de
julio de 1981.
 Asamblea Nacional. Ley Orgánica de la Jurisdicción Contencioso
Administrativa. (2010) Caracas, Venezuela. Gaceta oficial de la
República Bolivariana de Venezuela. Nº 39.447. Extraordinario 16 de
junio de 2010.
 González, Jesús. (1958). La ejecución forzosa en la nueva Ley de
Procedimiento. Madrid. Editorial DA. P. 15.
 Lares, Eloy. (1988). Manual de Derecho Administrativo, 7ª. Ed.
Caracas, Venezuela. Universidad Central de Venezuela. P. 673-723.

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