1. COMPONENTES PRINCIPALES DEL SISTEMA.

a. Compresor.

 Hermético.
 Alternativo.
 Tornillo.
 Scroll.

 Semi hermético.
 Alternativo.
 Tornillo.

 Abierto.
 Alternativo.
 Tornillo.

b. Condensador.

 Condensadores refrigerados por aire.

 Condensadores refrigerados por agua.
 Contracorriente.
 De inmersión.
 Multitubulares.
 Evaporativos.

c. Recipiente de Líquido.

 Verticales.
 Horizontales.

d. Válvula de Expansión.

 Manual.
 VET’s.
 Electrónicas

e. Evaporador.

 De tubos.
 De tubos y aletas.
 Tubo y carcaza.
  Placas.
f. Trampa de Succión.

 Verticales.
 Horizontales.

g. Instrumentación.

 Control eléctrico.
 Control electrónico PLC.

h. Refrigerante.

 HCFC.
 HFC.
 Naturales.

2. CRITERIOS DE SELECCIÓN.

i. Grupo A: Variables técnicas. Reúne la definición del equipo mecánico que

cumple con las necesidades termodinámicas del ciclo. Ningún sistema debe
descartar, el COP (Coeficiente de Operabilidad), como variable crítica, ya que,
no es la única influyente en los ciclos de refrigeración. El estudio de estas
variables nos permite determinar:

a. Carga Térmica.
b. Tipo de sistema: Directo, Indirecto.
c. Elementos del sistema de refrigeración.

ii. Grupo B: Variables Financieras. Correspondería al análisis del impacto

económico, que los criterios de selección impondrían sobre el proyecto.

a. Costo de capital.
b. Costo de operación.
c. Beneficios en el proceso productivo o comercial.

iii. Grupo C: Variables Locativas: Corresponde al análisis del impacto, que el

medio físico, ejerce sobre el proyecto de refrigeración, por ejemplo: Latitud
geográfica, más específicamente, la temperatura ambiental del lugar donde se
encontrara ubicado el proyecto.

a. Espacio de Ubicación.
b. Espacio Necesario.
DIMENSIONADO DE LAS TUBERÍAS EN SISTEMA DE REFRIGERACIÓN CON
REFRIGERANTES HALOCARBONADOS.
Una vez que conocemos la ubicación de los componentes principales del circuito
frigorífico, es necesario analizar cuál será el trazado de las tuberías frigoríficas que
interconectarán el resto de los elementos de la instalación. Los factores principales por
considerar en el diseño son los siguientes:
a. Minimización de las pérdidas de carga.
b. Adecuado retorno de aceite al compresor.
c. Adecuada alimentación de líquido en el dispositivo de expansión.
d. Minimización de los costes.
Un criterio comúnmente empleado es limitar las caídas de presión en el circuito a 1 K
equivalente en cada una de las líneas de interconexión, es decir, teniendo en cuenta la
relación entre presión y temperatura del refrigerante dentro de la campana de saturación, en
cada tubería la pérdida de presión no debe crear una caída de temperatura en el fluido
superior a 1 K equivalente. Según esto, los valores orientativos para cada línea son los
siguientes:
i. Caída de presión en línea aspiración.
a. < 0,1 bar ≈ 1K (Alta T° evaporación, 5ºC a -10ºC).
b. < 0,05 bar ≈ 1K (Baja T° evaporación, -10ºC a -40ºC).

ii. Caída de presión en línea descarga y líquido.

a. < 0,3 bar ≈ 1K (Alta T° condensación, 50ºC a 40ºC).

b. < 0,2 bar ≈ 1K (Baja T° condensación, 40ºC a 20ºC).
A continuación, se explica con más detalle el por qué seleccionar el diámetro de tubería en
base a estos criterios.
Tubería de Líquido: Al momento de determinar el diámetro de la tubería, se debe tener en
cuenta, que la caída de presión (∆ P) en el tramo de tubería no debe ser grande, con la
finalidad de evitar la formación de gas en la línea de líquido, es decir, la vaporización
parcial del refrigerante, desde la salida del recipiente de líquido, hasta el sistema de
expansión. Análogamente, otra situación, que no debe ocurrir, es que la cantidad de líquido
refrigerante que circule por la tubería no sea la adecuada, exceso o falta de éste, de igual
forma, lo mismo ocurre con la presión del refrigerante, lo que originaria problemas en la
alimentación de refrigerante en el sistema de expansión, reduciendo así el efecto
refrigerante.
La caída de presión que debe existir en la línea de líquido, debido a la fricción, no debe ser
mayor que la correspondiente a aproximadamente un cambio de 0,5 a 1 K en la temperatura
de saturación del refrigerante.
Subenfriar el líquido refrigerante, es un método factible, para compensar los efectos que el
exceso de caída de presión origina en el refrigerante. Esto para garantizar una correcta
alimentación de líquido en el dispositivo de expansión, evitando así perdida de capacidad
en el evaporador.
Si el subenfriamiento es insuficiente, se producirá, la vaporización parcial del refrigerante
en la línea de líquido, reduciendo la eficiencia del sistema.
Las caídas de presión, originadas por fricción, en la línea de líquido, son causadas por
accesorios como electroválvulas, filtros secadores y válvulas manuales, así como por la
tubería y los accesorios entre la salida del recipiente de líquido y el dispositivo de
alimentación de refrigerante en el evaporador.
Líneas de líquido ascendentes, son una fuente de pérdida de presión, estas pérdidas se
suman pérdida de carga total en la línea de líquido. La pérdida causada por tuberías
ascendentes es de aproximadamente 11,3 kPa por metro de elevación de líquido. La pérdida
total es la suma de todas las pérdidas por fricción, más, l pérdida de presión por tuberías
ascendentes.
Tubería de succión: La tubería de succión, al momento de estimar el diámetro adecuado,
es más crítica que la tubería de líquido y de descarga desde el punto de vista del diseño y la
construcción del sistema. Las tuberías deben tener un tamaño que: (1) proporcione una
caída de presión mínima a plena carga, (2) ser tales que, el aceite retorne desde el
evaporador al compresor bajo condiciones de carga mínima, y (3) evitar que el aceite migre
desde un evaporador activo a uno inactivo. La caída de presión excesiva, en la línea de
succión, reduce la capacidad del sistema, porque fuerza al compresor a operar a una presión
de succión más baja, para así, mantener una temperatura de evaporación adecuada. La línea
de succión normalmente es dimensionada para tener una caída de presión por fricción no
mayor que la equivalente a un cambio de aproximadamente 1 K en la temperatura de
saturación.
Para temperaturas de aspiración inferiores a 5 ° C, la caída de presión equivalente a un
cambio de temperatura dado disminuye. Por ejemplo, a –40 ° C en la línea de succión con
R-22, la caída de presión equivalente a un cambio de 1 K en la temperatura de saturación es
de aproximadamente 4,9 kPa. Por lo tanto, a baja temperatura, las líneas deben estar
dimensionadas adecuadamente para una caída de presión muy baja, o bien, para pérdidas de
temperatura equivalentes más altas, esto lleva consigo una pérdida en la capacidad del
equipo, la cual debe ser aceptada. Para caídas de presión muy bajas, cualquier tubo vertical
de succión o de gas caliente debe tener el tamaño adecuado para asegurar el arrastre de
aceite por el tubo de modo que el aceite siempre se devuelva al cárter del compresor.
Cuando el tamaño de la tubería debe reducirse para proporcionar una velocidad de gas
suficiente para arrastrar el aceite por los tubos verticales con cargas parciales, se imponen
mayores caídas de presión a plena carga. Por lo general, estos pueden compensarse
sobredimensionando las líneas y componentes horizontales y verticales.
Las tubería de drenaje de líquido que va desde el condensador al recipiente de líquido debe
estar dimensionadas, de tal manera que, el refrigerante, circule a una velocidad de 0,5 m/s o
menos para garantizar un flujo positivo por gravedad sin que se produzca un retroceso del
líquido refrigerante.
La tubería de líquido desde el recipiente hasta el evaporador debe estar dimensionadas para
mantener velocidades inferiores a 1,5 m/s, minimizando o evitando el golpe de ariete
cuando se utilicen solenoides u otras válvulas de accionamiento eléctrico.
Tubería de descarga: La caída de presión en las tuberías de gas caliente, aumenta la
potencia requerida por el compresor por unidad de refrigeración y a su vez disminuye la
capacidad del compresor. La caída de presión se minimiza dimensionando adecuadamente
las tuberías para obtener bajas pérdidas por fricción, pero manteniendo las velocidades
adecuadas en el refrigerante para arrastrar y transportar el aceite en todas las condiciones de
carga, evitando así, que, por ejemplo, el aceite quede retenido en el condensador, sifones o
partes bajas del sistema. La caída de presión en la tubería de descarga se diseña , para que
no supere el equivalente a un cambio de 1 K en la temperatura de saturación del
refrigerante.
Las tablas de dimensionamiento recomendadas se basan en un cambio de 0,02 K/m en la
temperatura de saturación
En cuanto a la configuración y trazado de las líneas frigoríficas, se pueden establecer los
siguientes criterios generales:
a. Las líneas han de ser lo más cortas posibles, para minimizar los costes y las
pérdidas de carga.
b. Usar el mínimo número de accesorios posibles, para minimizar los costes, las
pérdidas de carga y la posibilidad de fugas.
c. Evitar en la medida de lo posible exponer la tubería a temperaturas
extremas, que puedan alterar el funcionamiento del sistema. En caso de
necesidad, instalar un buen aislamiento.
d. El trazado lo realizaremos de manera que no interfiera en el uso normal del
edificio.
e. Proteger las tuberías adecuadamente para que no sufran daños.
f. Las tuberías deben tener pequeñas pendientes para facilitar el retorno de aceite
al compresor.
g. Las tuberías deben estar debidamente fijadas a los soportes de sujeción.
h. Las tuberías de aspiración y descarga deben tener ligeras pendientes (2 %) en el
sentido del avance del refrigerante, para favorecer el retorno de aceite, ya que
este se mezcla peor con el vapor que con el líquido refrigerante.
i. Se deberá instalar un sifón a modo de “trampa de aceite” a la salida de cada
evaporador siempre que la tubería de aspiración salga por el techo de la cámara.
Y si el compresor se encuentra a una cota superior, se instalará una trampa cada
4 ó 5 m a lo largo del montante vertical, estando ésta compuesta por un sifón y
un contrasifón (Figura 2). Una vez alcanzada la cota final del compresor, se
 realizará la conexión por la parte alta de la línea de aspiración, también
mediante contrasifón, para evitar retornos de aceite montante abajo.
j. Si se trata de una instalación centralizada con varios evaporadores en paralelo,
se instalará un doble montante. Éste consiste en dos tuberías verticales, una de
ellas dimensionada con un diámetro adecuado para trasportar la potencia
frigorífica del evaporador de menor capacidad. El segundo tubo vertical deberá
dimensionarse para transportar el resto de potencia frigorífica de la instalación.
k. Para la línea de descarga del compresor, si el condensador se encuentra a una
cota superior, también será necesario instalar un doble montante, siguiendo el
mismo principio que en la línea de aspiración.
l. Las derivaciones a cada evaporador desde la línea de líquido principal se
realizarán por la parte inferior de la tubería, para evitar que se arrastren hacia los
evaporadores burbujas de vapor que se podrían formar en la parte superior.

En cuanto a las velocidades de diseño, dependen de cada tipo de línea:

LÍNEA DE ASPIRACIÓN Y DESCARGA
Es la más crítica de diseñar. Los criterios de dimensionado son: Para limitar la pérdida de
carga ∆P ≤ 1K.
a. Velocidad máxima: 10 m/s (tramos horizontales); 14 m/s (tramos ascendentes).
Para asegurar el retorno de aceite
a. Velocidad mínima: 2,5 m/s (horizontales); 5 m/s (ascendentes).
b. Velocidad menor de 5 m/s a la salida vertical del separador de aceite, si existe,
para que no se produzca arrastre de aceite.
LÍNEA DE LÍQUIDO
Los criterios de dimensionado son: ∆P ≤ 1K (incluyendo la caída de presión por cota si la
tubería es ascendente), para evitar la revaporización del líquido
a. Velocidad: 0,5 a 1 m/s (del recipiente de líquido a la v. expansión) y ≤ 0,5 m/s (del
condensador al recipiente).
En el caso de las líneas de líquido, el retorno de aceite no suele ser un problema, ya que en
la mayoría de los casos este es miscible con el refrigerante líquido y es arrastrado sin
dificultad.