Rodeo de Cría

Bovinos: Manejo Reproductivo Eficiente de un Rodeo de Cría

 
El artículo trata sobre cuestiones básicas del manejo reproductivo de un
rodeo de cría (para la producción de terneros) que permita ordenarlo para lograr
un correcto manejo. Se hace énfasis en un Servicio acotado en el tiempo, al
control de los reproductores y la edad de las vaquillonas para brindarles el primer
servicio.

Ing. Agr. Matías Fertig* Méd. Vet. Damián Luchetti **

*INTA Esquel **Cambio Rural, Gob. Costa, Chubut
Carpeta Técnica - Junio 2005

Introducción
 
En el noroeste del Chubut la mayoría de los establecimientos de
producción bovina se dedica principalmente a la cría debido a que las condiciones
ecológicas dificultan la continuación de los engordes y no resulta sencillo llegar a
terminar toda la hacienda antes del segundo invierno.

Durante muchos años una gran parte de los terneros de destete (6 a 8

meses de vida) se destinaban a faena, por lo tanto el objetivo primordial de los
criadores fue destetar terneros gordos y lo más pesados posibles. A partir de la
incorporación de los engordes a corral y de los engordes a campo con o sin
suplementación, apareció un nuevo mercado para los criadores donde no importa
tanto el peso y estado de los terneros a vender. Contrariamente a la situación
anterior, un ternero excesivamente pesado es castigado en el precio por lo
invernadores debido a que la ganancia de este último está muy relacionado a la
cantidad de kilogramos que engorde el animal desde que lo compra hasta su
venta. Por lo tanto el objetivo de los rodeos de cría debe ser lograr la
mayor cantidad de carne por unidad de superficie.

Las producciones zonales de sistemas de cría presentan valores promedio

de 14 kg carne/ha/año, valor que aparecería como un piso fácilmente mejorable.
Las posibles explicaciones de estas bajas producciones pueden encontrarse en el
manejo extensivo que se realiza en estos sistemas que se caracterizan por:

1. Escaso apotreramiento.
2. Uso poco eficiente del forraje producido.
3. Bajos índices reproductivos derivados del uso del servicio no estacionado.
4. Baja oferta forrajera de los campos debido al deterioro del recurso forrajero
como consecuencia de manejos erróneos o a una baja productividad
forrajera natural.
  

El principal producto del sistema de cría es el ternero y los esfuerzos

principales deben apuntar a lograr la mayor cantidad de terneros posibles.

La cantidad de terneros destetados/ha es el parámetro que más influye en los

resultados del sistema.
Para poner un ejemplo simple, teniendo 120 vacas es preferible destetar
110 terneros de 175 kg (19.250 kg) que 100 terneros de 185 kg (18.500 kg).

La máxima eficiencia en un sistema de cría se logra obteniendo que todas

las vacas desteten un ternero cada año. No sirve intentar aumentar la eficiencia
del rodeo a través de herramientas más complejas (cruzamientos, incorporación de
la inseminación artificial, etc) o implantación de recursos forrajeros, si no se posee
un rodeo ordenado y eficiente.

Para que se entienda este concepto supóngase que se tiene una "Fábrica"
de carne cuya materia prima es el Forraje (pasto); cuanto más carne se produzca
con la menor cantidad de pasto, más eficiente será la fábrica. En muchos casos
cuesta asumir el concepto del costo del pasto (materia prima) porque en general
se produce sobre praderas naturales que no requieren de insumos extras para
producir, variando en cantidad y calidad de acuerdo a las condiciones climáticas.

Para que se pueda evaluar económicamente la eficiencia de la cría se

debe poner precio al pasto.

Para hacer un cálculo simplificado, se puede obtener un costo de

oportunidad aproximado del mismo basado en lo que se podría obtener vendiendo
el pasto en vez de utilizarlo con los animales. Haciendo un cálculo rápido en base
al precio de un fardo de mallín ($4 /fardo de 25 kg), el pasto que se utiliza tendría
un costo de $0,16/kg. Considerando que en muchos lugares la posibilidad de
enfardado está limitada y la calidad forrajera no es tan buena, se estima que el
precio del pasto utilizado es una cuarta parte que el del fardo, lo que daría un
valor "teórico" de $0,04 /kg de pasto.

Considerando que el pasto tiene un costo para el productor, cuanta mas

carne se produzca por kilo de pasto, más eficiente y rentable será el sistema.
Considerando una hectárea con una producción determinada de pasto, debe
optimizarse como primera medida la producción de carne/ha en vez de la
producción individual de cada animal (como se puede ver en el ejemplo anterior de
la cantidad de terneros).
Momento y duración del servicio
 
El servicio es el punto de partida para una producción eficiente. En este
aspecto son muy importantes tanto la duración del servicio como el momento
en que se inicia el entore.
 

No es aconsejable el servicio continuo durante todo el año ni servicios

prolongados (6 meses o más) ya que se generan numerosos inconvenientes, tales
como:

 Gran diferencia entre la cabeza y la cola de parición generando así lotes

muy desparejos
 Inconvenientes para realizar un buen diagnóstico de preñez por tacto rectal
y la separación de las vacas vacías.
 Mayor demanda de mano de obra provocada por una prolongada parición.
 Problemas con los toros ya que se estarán entorando tanto vacas que están
en condiciones de ser servidas como vacas por parir, pariendo, o recién
paridas.
 Dificultad para alimentar adecuadamente a las vacas de acuerdo a sus
requerimientos.
 Problemas para el destete. Deben realizarse destetes escalonados debido a
la gran diferencia de edades de los terneros. Asimismo, se realizan destetes
en invierno, con baja disponibilidad de forraje en cuanto a cantidad y
calidad, acentuando el llamado "stress" del destete,
 Inconvenientes para el manejo a nivel sanitario debido a la gran diferencia
de edades dentro del rodeo.
 Alargamiento del intervalo entre partos a más de un año, reduciendo la
eficiencia del rodeo de cría. La vaca que pare a principios o durante el
invierno, es muy posible que no quede preñada hasta la primavera, ya que
los mayores requerimientos derivados del ternero que está lactando no le
permitirán obtener un estado nutricional adecuado para una ovulación
adecuada y el anestro posparto se alargará.
 

Teniendo en cuenta todos estos inconvenientes que se generan con un

servicio continuo o prolongado es aconsejable que:

El entore o servicio estacionado no debe durar mas de tres meses.

Esto es fundamental para aumentar la eficiencia de un rodeo de cría. Los
tres meses máximo de duración surgen de la duración de la preñez en la vaca
(aproximadamente 283 días) y busca lograr un intervalo entre partos que no
supere los 365 días.
 Cuanto más corto sea el servicio (sin resentir los porcentajes de preñez)
más estacionado y más eficiente será el rodeo. La duración del ciclo estral de la
vaca (días transcurridos entre celos) es de 21 días en promedio (entre 19 y 23).
Esto quiere decir que una vaca en 90 días tiene 4 oportunidades de quedar
preñada.

Estacionar el servicio permite tener a todo el rodeo en el mismo estado

fisiológico, con los mismos requerimientos nutricionales. Con un rodeo así
ordenado se puede desarrollar un plan de manejo del pastoreo y un plan sanitario.

En cuanto a la época mas conveniente para realizar los servicios hay que
tener en cuenta los requerimientos nutricionales de una vaca de cría y tratar de
hacerlos coincidir con la oferta forrajera a lo largo del año.

El servicio debe estacionarse en el momento en el cual se produce la

mayor oferta forrajera, de manera que las vacas se encuentren en buena condición
y tengan una ovulación normal luego del anestro postparto. Este momento es
coincidente generalmente con la primavera climática y comienzos del verano es
decir, diciembre - enero (varía de acuerdo a cada zona). Independientemente de
eso, se presenta la restricción del invierno para adelantar mucho el servicio. En un
servicio demasiado temprano, los terneros nacerán en pleno invierno y
aumentarán las pérdidas.

La época adecuada de servicio en la región es en primavera y verano, desde

mediados de noviembre o principios de diciembre hasta mediados de febrero o
principios de marzo.

Sin embargo, el momento ideal de inicio del servicio variará para cada
zona y establecimiento en función de su producción forrajera y el grado de
rigurosidad del invierno.

Luego de la parición, las vacas no sólo deben recuperarse del parto y de

las restricciones invernales sufridas, sino que deben amamantar sus terneros y
reiniciar sus ciclos. Esto implica un aumento de los requerimientos de las mismas.
En un rodeo, los requerimientos promedio en un momento determinado incluyen
animales en distinto estado fisiológico (momento de la gestación, lactancia, etc) y
la curva de requerimientos promedio toma la forma siguiente:
 Esta curva es la que debe ser compatibilizada con la oferta forrajera del
campo para la determinación del momento del servicio.(1)

En el gráfico que sigue se presentan las curvas de oferta forrajera de un

mallín de Trevelin y uno de la zona de Gobernador Costa. El momento de máxima
oferta forrajera en Trevelin se puede ver que está desplazado un poco mas hacia
la primavera, indicando que el servicio podría comenzar un poco antes en esta
zona.

Sin embargo, el momento ideal de inicio del servicio variará para cada
zona y establecimiento en función de su producción forrajera y el grado de
rigurosidad del invierno.

Luego de la parición, las vacas no sólo deben recuperarse del parto y de

las restricciones invernales sufridas, sino que deben amamantar sus terneros y
reiniciar sus ciclos. Esto implica un aumento de los requerimientos de las mismas.
En un rodeo, los requerimientos promedio en un momento determinado incluyen
animales en distinto estado fisiológico (momento de la gestación, lactancia, etc) y
la curva de requerimientos promedio toma la forma siguiente:
  

Se observa a modo de ejemplo en el gráfico siguiente la relación entre los

requerimientos del rodeo con un servicio en Diciembre-Enero-Febrero y la oferta
forrajera disponible en la zona de Trevelin. Como se puede ver el servicio y los
requerimientos del rodeo se ajustan a la oferta existente a lo largo de la época de
servicio.

Revisión pre-servicio de vacas y toros

 
La revisión de vacas y toros antes del servicio es una práctica poco
difundida en la zona pero es de gran importancia para el ordenamiento del rodeo y
la eficiencia reproductiva del mismo. Se complementa con la selección realizada en
el momento del tacto, en el cual se eliminan los vientres vacíos sin ternero al pie y
las vacas vacías que por edad (boqueo) no entrarán al siguiente servicio, entre
otras.
 Los criterios utilizados para el rechazo de animales previo al servicio
pueden tener causas sanitarias (problemas de cáncer de ojo, brucelosis, etc),
genéticas, reproductivas, de estado (vacas en muy mal estado) o de vejez y edad
dentaria.

Asimismo, 45-60 días previo al servicio debe realizarse la revisión física y

clínica de los toros. El examen físico comprenderá la edad (dentadura), estado
locomotriz (aplomos, problemas en los garrones), visión del toro y el examen
genital. El examen clínico de los toros se refiere principalmente al diagnóstico de
enfermedades que puedan afectar la capacidad reproductiva del toro (orquitis,
epididimitis, etc).

La importancia de la revisión, especialmente de los toros, radica en que

un porcentaje adecuado de toros (2-4% de acuerdo a la zona y establecimiento)
puede ser insuficiente para lograr un adecuado porcentaje de preñez si no se
encuentran en buen estado. Un toro con, por ejemplo, problemas en los garrones
es un toro que no trabaja, y por ende es un toro menos.

Edad de las hembras al primer servicio

El servicio a los 15 meses de edad es una herramienta tendiente a
aumentar el número de terneros a obtener, aumentar la eficiencia del rodeo por
eliminación de una categoría improductiva (vaquillonas de 2 años para reposición)
y lograr un ternero más en la vida útil de la vaca.

La utilización de ésta práctica requiere tener un rodeo o establecimiento

organizado y manejado de manera racional, ya que realizarlo en forma inadecuada
puede generar grandes daños al futuro vientre.
En el caso del servicio a los 27 meses (tradicional) se requiere un "menor"
cuidado del animal, ya que dispone de un año mas para su desarrollo previo a la
entrada en servicio.

Los animales destinados a servicio de 15 meses de edad deben ser

seleccionados al destete, teniendo en cuenta que deberán llegar a un peso y
desarrollo mínimo para su servicio 9 meses después. El lote debe manejarse con
una sanidad adecuada y con un nivel nutricional que les permita un aumento
constante de peso.

Se requiere, para su entrada en servicio, que alcancen el 60% del peso

adulto del animal, el cual en el caso de vacas de 450 kg se encuentra en 270 kg de
peso vivo. Es vital que el animal mantenga un ritmo de crecimiento mínimo desde
el destete hasta su servicio. Si los animales pierden peso durante el invierno y en
primavera lo recuperan, se obtendrá una vaquillona gorda con poco desarrollo
corporal (los 270 kg los logrará no por desarrollo sino por deposición de grasa), lo
cual generará problemas con la gestación y parto posteriores.
 Es vital, teniendo en cuenta lo planteado en los párrafos anteriores,
realizar una revisión pre-servicio de esas vaquillonas, que incluirá pesarlas,
determinar su condición corporal y realizar un tacto para descartar animales que
no estén desarrollados reproductivamente.

Estos animales deberán mantener un ritmo de crecimiento adecuado

luego del servicio, así como en el invierno siguiente. Deben tener un nivel
nutricional alto, ya que son animales que además de seguir creciendo para llegar a
su peso adulto deben gestar un ternero.

Conclusiones
Es importante lograr la mayor cantidad de terneros destetados por hectárea. Esto
se logra con un manejo reproductivo eficiente del rodeo de cría. El
estacionamiento del servicio en la época de mayor oferta forrajera con una
duración no superior a los 90 días son medidas básicas para ordenar el rodeo. Esto
debe complementarse con lograr un buen desarrollo de las terneras y vaquillonas
para llegar a su primer servicio a los 15 meses de edad y no a los 27 en los casos
en los que se pueda aplicar esta práctica. Por último revisar antes del servicio las
hembras y los machos para eliminar los animales no aptos para la reproducción.

(1) Un Equivalente vaca es el requerimiento diario de una vaca de

400 kg que gesta y cría un ternero hasta su destete a los 6
meses de edad con 160 kg.