Manual de Educación

Cristiana

Escrito por: Lic. Julia García Núñez

 Lo que me has oído decir en presencia de muchos testigos,
encomiéndalo a creyentes dignos de confianza, que a su vez estén
capacitados para enseñar a otros.
2Ti 2:2 (Nueva Versión Internacional)

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Agradecimientos
A mi amado Dios y Padre: Solo Él me ha dado Vida.

A mi esposo e hijas, por su paciencia para que realizara esta labor, dedico este
trabajo. GRACIAS, por estar entre los que sostienen mi vida.

A nuestros amados alumnos e hijos en Cristo. La mayor bendición que mi

esposo (Raúl Martínez) y yo hemos recibido es encontrar hombres y mujeres
que, en algún momento, Dios nos permitió cubrir con el manto del ministerio
magisterial.

A mis padres naturales y espirituales, Víctor y Lesdia, que sembraron en mí la

dulce Palabra de Dios. A mi suegro Roberto, hombre con visión del Reino,
quien me animó a escribir, y editó por primera vez este folleto para la PIPC.

A ti lector. Dios te bendiga y puedas usar cada una de estas palabras para Su
gloria y honra. Amén.

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 Tabla de Contenidos
I. Introducción al estudio……...………………………………....
II. Cuatro áreas que debe tener presente el Maestro…………..
III. ¿Cómo podemos enseñar?......................................................
IV. Veinte métodos e ideas y algo más…………………………..
V. Conclusiones…………………………………………………..

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 I. Introducción al estudio

1. Qué es un Maestro Cristiano

Según el diccionario Strong un maestro es uno que construye, edifica y fortifica.

Significa además tener hijos y ser Padre de familia.

El Maestro es aquel que guía a alguien a aprender. No se enseña

verdaderamente a menos que se obtenga un aprendizaje, debemos saber que
nada hacemos con tener conocimiento nosotros y hablar repetidamente una
hermosa conferencia o una lección bien preparada si no vemos al menos en el
90 % de nuestros alumnos el resultado. La mayor prueba de nuestro ministerio
en la enseñanza es lo que sucede en la vida de nuestros alumnos.

De ahí que es muy importante la relación entre alumno y maestro, la ayuda de

este en el proceso de aprendizaje dependerá no solamente de su interés en la
instrucción del alumno sino también en la actitud del estudiante hacia ese
comunicador. Así es que no recibiremos mucha ayuda de alguien que no nos
gusta. El Maestro está para guiar al alumno, ya que él antes ha andado por ese
camino puede guiar mejor a otro para que dirija sus pasos sin tropiezos.

Algo que notamos actualmente en los medios de enseñanza es indiferencia,

ignorancia o negligencia por eso debemos despertar interés en la instrucción.
Aunque la enseñanza cristiana reconoce que hay inspiración fuera de las
Escrituras, se da a la Biblia un lugar supremo porque ella es la Palabra de Dios,
inspirada divinamente y dada a nosotros para revelar al hombre su destino, el
plan de salvación. Como Él nos enseña: Los pensamientos del hombre serán
juzgados, las obras del hombre serán premiadas y su vida será guiada.

La tarea del maestro cristiano está dirigida a tres partes importantes del ser
humano:

1. Al cuerpo, porque este tiene conciencia del mundo. Por medio de los cinco
sentidos, el hombre constantemente está recibiendo información y aprendiendo
cosas del mundo en que vive, esta es la gran diferencia entre el hombre creado
por Dios y el resto de la creación. El Maestro cristiano constantemente apelará,
a estas sensaciones y hará llegar sus conocimientos a través de las puertas del
ojo, oído, sentidos del gusto, tacto, y el olfato.

2. Al alma que tiene conciencia de sí misma. Si logramos estimular los sentidos

esto hace más fácil la adquisición de conocimiento. Debemos lograr que haya
adquisición del conocimiento porque en el conocer hay poder. Mi pueblo
perece -dijo Dios- por falta de conocimiento (Oseas 4:6). Es bien importante
esta área porque nuestra memoria tiene la capacidad de retener, conservar y
reconocer todas nuestras experiencias y conocimientos adquiridos; de ahí que
podamos escribir en la mente de un niño mucho mejor de lo que imaginamos
porque generalmente está ávida de informaciones. Se cree que el conocimiento
para ser recordado perdurablemente debe ser adquirido gradualmente.

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3. Al espíritu, que tiene conciencia de Dios. De ahí que las experiencias vividas
con Dios en la niñez -como pueden ser sus peticiones contestadas-, de forma
asombrosa hacen una mella increíble e inolvidable en la mente de los
pequeños.

La Escuela Dominical o el encuentro semanal de Educación Cristiana, es la

institución bíblica que se dedica al estudio de la Palabra de Dios. El deber de
trazar y enseñar las Escrituras ha sido siempre una responsabilidad de su
pueblo. En el Antiguo Testamento vemos como Dios ordenó a los israelitas
enseñar a sus hijos con diligencia:

Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y

diligentemente las enseñarás a tus hijos, y hablarás de ellas cuando te sientes
en tu casa y cuando andes por el camino, cuando te acuestes y cuando te
levantes. Y las atarás como una señal a tu mano, y serán por insignias entre
tus ojos. Y las escribirás en los postes de tu casa y en tus puertas. (Deut. 6:6-9)

Cuando en el futuro tu hijo te pregunte, diciendo: "¿Qué significan los

testimonios y los estatutos y los juicios que el SEÑOR nuestro Dios os ha
mandado?", entonces dirás a tu hijo: "Éramos esclavos de Faraón en Egipto, y
el SEÑOR nos sacó de Egipto con mano fuerte. "Además, el SEÑOR hizo
grandes y temibles señales y maravillas delante de nuestros ojos contra Egipto,
contra Faraón y contra toda su casa; y nos sacó de allí para traernos y darnos
la tierra que El había jurado dar a nuestros padres." Y el SEÑOR nos mandó
que observáramos todos estos estatutos, y que temiéramos siempre al SEÑOR
nuestro Dios para nuestro bien y para preservarnos la vida, como hasta hoy. Y
habrá justicia para nosotros si nos cuidamos en observar todos estos
mandamientos delante del SEÑOR nuestro Dios, tal como El nos ha mandado.
(Deut. 6:20-25)

En tiempos de la Iglesia primitiva se estableció la Escuela de enseñanza para

niños y adultos con el propósito de enseñarles la doctrina de Cristo. El ejemplo
ya lo había dado el mismo Jesús, quien constantemente enseñaba a las
multitudes:

Y quien dé siquiera un vaso de agua fresca a uno de estos pequeños por

tratarse de uno de mis discípulos, les aseguro que no perderá su
recompensa." Mat 11:1 Cuando Jesús terminó de dar instrucciones a sus doce
discípulos, se fue de allí a enseñar y a predicar en otros pueblos. (Mateo
10:42)

De nuevo comenzó Jesús a enseñar a la orilla del lago. La multitud que se

reunió para verlo era tan grande que él subió y se sentó en una barca que
estaba en el lago, mientras toda la gente se quedaba en la playa. (Mar 4:1)

Cuando llegó el sábado, comenzó a enseñar en la sinagoga. --¿De dónde sacó

éste tales cosas? --decían maravillados muchos de los que le oían--. ¿Qué
sabiduría es ésta que se le ha dado? ¿Cómo se explican estos milagros que
vienen de sus manos? (Mar 6:2)

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2. Cualidades de un Maestro Cristiano

Pensando en la enseñanza, el Maestro es la figura principal de Educación

Cristiana. Es bueno tener un buen organizador de este departamento pero si
este hermano hace planes y los maestros no realizan el trabajo de enseñar
como es debido, todo fue en vano. Solo teniendo el ministerio magisterial
puedes llevar adelante tu grupo.

El Maestro por eso debe tener:

Una personalidad fuerte. Debemos entender que el Maestro no solo enseña por
lo que dice sino que enseña mucho más por lo que él mismo hace. Puede
predicar mucho más con su diario vivir, manteniendo un testimonio y una vida
que respalde lo que enseña.

Una personalidad cristiana. Es imposible que usted sea un Maestro eficaz de la

enseñanza si no es un cristiano. Si es un hijo de Dios dotado de su Espíritu al
tener contacto con sus alumnos, ellos podrán percibir su intachable experiencia
cristiana y desearán imitarle, tomando su vida como un ejemplo a seguir. Es
precioso ver como con nuestras vidas conducimos a los alumnos a seguir las
pisadas de Jesús.

Un entusiasmo cristiano. Hoy en día hay la misma necesidad de la Palabra de

Dios que ha existido en todo tiempo. El éxito nuestro dependerá del entusiasmo
que el maestro ponga en la tarea, y este entusiasmo viene principalmente de la
fe que tiene en cada labor que va a realizar.

Por eso debemos ejercitar nuestra fe:

En Dios: Si usted cree en Dios, procure ejercitar su fe como la de Pablo,
Lutero, Moody.

En la Biblia: Nuestro mejor ejemplo de maestro, el Señor Jesús, nos enseña la

fe que Él tenía en las Sagradas Escrituras, por eso notamos como citaba
pasajes del A.T como base y apoyo a toda su enseñanza.

En la tarea: Si usted como maestro entiende que Dios le ha llamado a servirle

tenga plena confianza en su Palabra sabiendo que toda labor que realice en su
obra no es en vano. Si usted está en el centro de la voluntad de Dios Él
respaldará su obra. Debes comprender que Él te ha escogido para esta labor y
en ti confía para hacerla.

Por último en esta introducción deseo compartirte la historia de un cristiano en

Inglaterra llamado Roberto Raikes, quien hace más de 300 años, celebró la
primera Escuela Dominical de nuestros tiempos en un barrio bajo de
Glouchester. Dirigido por Dios sorteó todos los obstáculos que se le
presentaron para hacer menguar su visión por la enseñanza cristiana, y
finalmente su plan de acercamiento a grupos en barrios y aldeas se extendió
por todo el país y trascendió incluso a otras naciones. Así se organizó
oficialmente la enseñanza para niños de todas las edades, jóvenes y adultos,
conocidas desde su comienzo como Escuela Dominical. El plan de Dios ha

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continuado y cada día más personas reciben educación cristiana a través de
estos encuentros. Entendiendo la necesidad actual de Maestros de Educación
Cristiana procuramos en nuestras congregaciones buscar métodos sencillos y
prácticos para cada hermano que se sienta movido por el Espíritu Santo a
trabajar en tan magna labor.

El Maestro cristiano por tanto necesita ser sensible a la necesidad de llevar la

sana doctrina, y para esto debe llenarse como Roberto Raikes de la visión de
Dios. Según el diccionario Strong tener visión significa alcanzar algo, tener
revelación e incluye además la acción de perforar o de mirar con atención.

Sobre la Visión, el Señor nos enseña en su Palabra:

Conforme á todo lo que yo te mostrare, el diseño del tabernáculo, y el diseño

de todos sus vasos, así lo haréis. (Éxodo 25:9)

Al igual que Dios diseñó todos los objetos del templo natural, él tiene un diseño
particular para que sea realizado en todos sus vasos, sus hijos que compró con
la sangre de su Jesús.

Y persistió en buscar a Dios en los días de Zacarías, quien tenía entendimiento

por medio de la visión de Dios; y mientras buscó al SEÑOR, Dios le prosperó.
(2Crónicas 26:5)

Al ser enseñados por personas con visión del reino somos dados a seguir su
andar. La visión del reino es entender es Dios quien establece su señorío en
los corazones, formando y edificando así el cuerpo de Jesucristo.

Al hablar de Educación Cristiana, tenemos necesariamente que hablar de la

Visión de Dios establecida en un hombre, porque para enseñar la Santa
Palabra se necesitan personas fieles y dedicadas, conscientes de sus
limitaciones, paro ante todo conocedores de la visión de Dios. Solo mirando
con atención el camino trazado por Dios podremos cumplir el ministerio para el
cual se nos ha llamado.

3. Ser Maestro es un Ministerio

Y El dio a algunos el ser apóstoles, a otros profetas, a otros evangelistas, a

otros pastores y maestros, a fin de capacitar a los santos para la obra del
ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo. (Efesios 4:11)

Con esta certeza de que enseñar la Palabra, es uno de los cinco ministerios
primarios el Maestro que enseña en Educación cristiana (Escuelas
Dominicales) debe ser alguien con el ministerio magisterial., debemos estar
consientes que Maestro cristiano no es solo el que cada domingo (o una vez en
semana) esta frente a un grupo mostrando las verdades de la Biblia, o
trasmitiendo lo que dice un folleto preparado para esa ocasión. Sino es un
cristiano con la responsabilidad de un ministerio como señala los versos
mostrado es alguien con el ministerio para capacitar y edificar el cuerpo de

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Cristo. Es alguien a quien Dios ha llamado para un ministerio específico y la
Biblia menciona su ministerio especial como lo es el de un Pastor, Profeta etc.
Es necesario que pensemos en el ministerio de la enseñanza como algo
sublime hermoso útil, que Dios nos ha encomendado, tal vez hay personas que
trabajan como Maestros y no han comprendido cuan importante es este
servicio al Señor en este ministerio que han puesto en sus manos.

La enseñanza es un manto, una cobertura espiritual sobre los que escuchan y

son ministrados a través de este ministerio. Este manto deben tenerlo las
ovejas sobre sus hombros, y dentro de este manto las Escrituras nos revelan
que deben llevar algo envuelto:

La gente llevaba sobre sus hombros la masa que aún no tenía levadura y sus
artesas envueltas. (Éxodo 12:34)

La masa de harina sin leudo es tipo de la Palabra de Dios con aceite y sin
mezcla. El ministerio magisterial actúa así, fíjese que no se le entregó al pueblo
el alimento elaborado sino la materia prima para preparar su alimento al salir.
El ministerio magisterial provee harina amasada con aceite a las ovejas a
través de la unción del maestro. Cuando se recibe el rhema de Dios estamos
capacitados para preparar alimento para otros. Mientras estudias, oras y te
preparas recibes esta unción con la cual podrás instruir a tus alumnos a través
de la enseñanza y ministración a su vida. La palabra de Dios con unción
magisterial, purifica los corazones y es como espada de dos filos que revela la
verdad de Dios. En boca del ministerio magisterial la Palabra también tiene una
acción profética sobre la vida de aquellos que están bajo el manto de la
enseñanza. Por eso debemos llevarlo adelante con responsabilidad, estamos
para asegurar la Palabra escrita en los corazones.

En la palabra la enseñanza se tipifica con las alas del halcón y nos revela que
el Maestro tiene conocimiento y revelación de Dios.

¿Es tu sabiduría la que hace que el halcón vuele y que hacia el sur extienda
sus alas? (Job 39:26)

…no ceso de dar gracias por vosotros, haciendo memoria de vosotros en mis
oraciones, para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de gloria,
os dé espíritu de sabiduría y de revelación en el conocimiento de él,
alumbrando los ojos de vuestro entendimiento, para que sepáis cuál es la
esperanza a que él os ha llamado, y cuáles las riquezas de la gloria de su
herencia en los santos, y cuál la supereminente grandeza de su poder para con
nosotros los que creemos, según la operación del poder de su fuerza (Efesios
1:19)

Ellos aprenden la doctrina de los Apóstoles y Pastores y la desmenuzan al

dársela al pueblo, igual que en tiempos del A.T se enseñará doctrina no solo a
adultos sino también a niños y jóvenes. Un ministerio cristiano responsable
ante Dios pondrá atención siempre en la enseñanza doctrinal. Siempre mirando
la gran responsabilidad que nos ha sido confiada deseamos hacer lo mejor y
nos preguntamos como lograrlo.

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Muchas veces el camino no es fácil pero nuestra fe debe ser optimista y abarca
creer lo que dice la Palabra Santa al respecto, una de las cosas que nunca
podemos olvidar es que estamos alimentando a muchos con el maná espiritual.
Acuérdate… de engrandecer su obra la cual contemplan los hombres. (Job
36:24)

II. Cuatro áreas que debe tener presente el Maestro

Existen 4 áreas fundamentales que un buen maestro debe tener en cuenta

para que sus enseñanzas sean efectivas:

1. Conocimiento
2. Teología
3. Características de los alumnos
4. Métodos de enseñanza

1. Conocimiento

Mi pueblo fue destruido, porque le faltó conocimiento. Por cuanto desechaste

el conocimiento, yo te echaré del sacerdocio; y porque olvidaste la ley de tu
Dios, también yo me olvidaré de tus hijos. (Oseas 4:6)

Hay dos cosas que hacen que falte el conocimiento: poco interés en estudiar
las Escrituras, y conformarse solamente con estudiar la lección que debemos
impartir. Ambas traen debilitamiento espiritual, el maestro cristiano debe
procurar constantemente alimentarse y escudriñar la Biblia sabiendo que en
ella tenemos vida eterna. (Juan 5:39).

Otro recurso para alcanzar conocimiento es escuchar las enseñanzas que

imparte el Pastor, o líder espiritual, y así mantenernos enfocados en la visión
que Dios esta dando a su siervo para este tiempo.

Una de las cosas que debemos tener presente es la necesidad del

conocimiento de la Escritura para poder explicarla con claridad, pero más aún
debemos hacer énfasis en el enfoque espiritual que podemos brindar en cada
lección para poderla aplicar la enseñanza a nuestras vidas.

Algo que debemos señalar en el conocimiento es que no siempre el maestro

“se las sabe todas” como erróneamente se cree. Sea capaz, cuando hay una
pregunta cuya respuesta desconoce, de dejarla pendiente para el próximo
encuentro. Esto le ayudará a buscar la respuesta detalladamente, y traer a sus
alumnos una respuesta satisfactoria. (Aunque ellos olviden su pregunta, un
buen maestro toma nota de ella, y trae la explicación a la próxima clase).

Recuerde que la Biblia fue dada al hombre para conocer su destino de

salvación, y como guiar su vida en la justicia de Dios. Aunque es bueno que
consulte otros libros (manuales, diccionarios, enciclopedias, etc.) siempre la

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fuente de su enseñanza e inspiración debe ser, sin lugar a dudas, la Palabra de
Dios.

El Maestro siempre imparte a sus alumnos algo de su propio espíritu y de su

actitud hacia las verdades sublimes que está enseñando. Tienes que saber
poner la voluntad del Señor antes que todas las cosas pues en tu comunicación
se notará si en tu vida aplicas tu propia voluntad o la de Él. (Aun los niños
perciben en el timbre de voz, tu estado de ánimo, si estás inseguro en tu
enseñanza o si te falta conocimiento para tratar un tema específico).

El Maestro convertido, consagrado, y seguro de lo que enseña la Palabra será

el mejor testimonio de la vida de Cristo que pretende implantar en otros.

2. Teología.

Esta palabra no es una nebulosa o algo complicado, tampoco es un esfuerzo

por tener las palabras apropiadas para dirigirse a los eruditos. Todo el que
enseña algo acerca de Dios tiene una teología, (siempre que hables de Cristo y
de tu fe en Él aplicas una teología). Como maestros debemos animarnos a
estudiar esta materia para conocer si nuestra teología está de acuerdo con la
Escritura y con las doctrinas fundamentales de la Iglesia con la que trabajas,
teniendo en cuenta que nunca debe haber contradicción en la enseñanza
magisterial y la enseñanza Pastoral. Quiero recordarles que un buen Pastor
casi siempre es un buen maestro y conocedor de la palabra mucho más si
verdaderamente tiene su ministerio activo.

…y para proclamarlo me nombró heraldo y apóstol. Digo la verdad y no

miento: Dios me hizo maestro de los gentiles para enseñarles la verdadera fe.
(1 Timoteo 2:7)

Por esto necesitamos ser ministrados por enseñanza pastoral, y dentro de

nuestras posibilidades someternos a Seminarios de Teología para enriquecer
nuestro aprendizaje. Lo más importante es que tú mismo hayas experimentado
un encuentro con Dios, debes conocerle personalmente; esto es mucho más
que conocer algo de Dios, es tener una relación íntima con Él y mantener una
comunión constante con su Espíritu para poder presentárselo a otros.

En ocasiones nos sentimos incapacitados para llegar a otros con la Palabra,

por eso el Señor nos aconseja a pedir de Él sabiduría para guiar a otros,
Aprenderás mucho con la ayuda de Dios que iluminará el entendimiento a
todos los que se lo piden. Depender de la gracia de Dios después que nos
hemos preparado debidamente, es algo que trae mucha bendición y
crecimiento al cuerpo de Cristo.

Como mas podemos aprender es estudiando para enseñar a otros, también es

bueno ser amigo de maestros cristianos que aporten a nuestra vida natural y
espiritual de sus experiencias vividas, y nos ayuden a evitar errores, y a
sentirnos cada día más inspirados en el ministerio magisterial.

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Recuerda que también a los Maestros que Jesús les dice en Mateo 28:20:
Estoy con vosotros todos los días hasta el fin del mundo.

3. Característica de los alumnos.

El Maestro debe amar a sus alumnos, orar por ellos individualmente, tener fe
en ellos, si no tienes fe en la obra que Dios va a hacer en ellos mejor no le
enseñes pues puedes contagiarles tus dudas.

Otro aspecto a recomendarte en este punto es conocer a tus alumnos según

sus edades y problemas naturales y espirituales. Debes fijarte en tus alumnos
para aprender lo que puedas acerca de él.

El Maestro debe tratar de conocer la mente de su discípulo, donde va a plantar

la semilla a fin de que produzca fruto espiritual y fe en Dios para salvación de
su alma.

Jesús conocía a sus discípulos y les adaptaba sus conocimientos y

experiencias según fueran sus oyentes: a los agricultores, les hablaba de
sembrar la semilla y plantar viñas (Mateo 13); a los pastores les habló de sus
ovejas perdidas, (Lucas 15:3-7); a las amas de casa les habló de escobas y
velas (Lucas 15:8-10). Por medio de estas ilustraciones el pudo enseñarles
verdades importantes.

Supo apreciar lo bueno que había en sus discípulos, recuerda cuando vio a
Natanael acercársele un día dijo: He aquí un verdadero Israelita Juan 1:47,
Ciertamente Natanael tendría cosas que no eran buenas, pero Jesús resaltó su
lado bueno se le acercó por medio de la simpatía y el aprecio, Natanael llegó a
ser su discípulo.

Es algo muy importante que el maestro conozca a sus alumnos, sería

magnífico que cada Maestro dominical fuera un psicólogo, es muy difícil
conocer la amplia vida de los niños e introducirnos en su gran mundo, pero al
menos debemos intentarlo.

Es muy importante la vida de un niño, el hombre es diferente de los animales,

tiene una infancia prolongada. Cuando Cristo vino al mundo, el podía haber
venido siendo grande, pero Él quiso pasar por la larga etapa de los niños, los
judíos mostraban sumo interés a sus niños, y así Jesús recibió todas las
enseñanzas de las Escrituras, como un buen judío. Nosotros vemos claramente
que Jesús se ocupo de los niños. Nuestros niños son los futuros padres,
futuros guías religiosos y de la sociedad, etc. En este tiempo se le da nueva
importancia en todo el mundo a los niños. Nosotros comos cristianos debemos
más que nunca velar por los niños en el buen Camino.

El maestro debe conocer quienes son los padres de sus alumnos, cómo es el
ambiente de su hogar y quiénes son sus amigos, todo esto le ayudará a
comprender por qué actúan de formas determinadas.

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En nuestras escuelas dominicales notamos que hay variedades de edades,
pero tienen un buen grado de escolaridad o viceversa. Todos estos
pormenores deben de tenerse en cuenta al enseñar, si hay muchos niños
sabemos que la mejor forma es dividir en clases.
Teniendo en cuenta las características de cada edad:

Por ejemplo:
Niños de 3-5 años. (Párvulos).
Niños de 6-8 años. (Principiantes).
Niños de 9-11 años. (Primarios).
Niños de 12-14 años. (Intermedios).

También tenemos los del Departamento de Cuna que son los menores de 3
años. Debe tenerse en cuenta que si se van a acoplar algunas edades es
recomendable que sean los niños de 6-11, o los de 9-14, pues nunca acoplaran
los párvulos con el departamento de cuna, Intermedios, etc.
Vamos a dar un vistazo a cada una de estas clases:

Departamento de cuna

Los niños de esta edad no son muñecos para que los mayores estemos
jugando con ellos solamente, ellos deben ser la razón para elaborar buenos
planes, y no las víctimas de malos planes en Educación Cristiana.

Para estos niños se requiere un maestro dotado de paciencia y amor con ellos,
(es preferible que sea una muchacha). A veces pensamos que estos niños no
aprenden nada, “El nos dijo: ….a toda criatura”; note que aprenden a decir el
nombre de sus padres y señalar los objetos por su nombre o por algún
monosílabo que entendamos, por lo tanto aunque sean pequeños e
intranquilos, podemos usar el tiempo de la clase para enseñarlos, no solo como
entretenimiento, es muy práctica en esta edad los objetos y las láminas.

Ejemplo: “Ven, esto es una oveja” (procuren que repitan su nombre, su sonido,
etc.) Háblele de lo que comen, después dígale que Dios hizo las ovejas, así
cada domingo háblele de algo de la creación y háblele de Dios para que lo
tenga en su mente. También puede hacerle una historia como estas:

1. Propósito: Enseñarles que Dios los cuida:

Jesús esta hablando con sus amigos, Él se sentó para descansar. Escuchó el
canto de los pajaritos, estos cantaban y cantaban, a Jesús le alegró el canto de
ellos. Jesús miró las flores que crecen por todos lados: muy bonitas, de
muchos colores. Jesús se alegró con ellas y dijo: Dios cuida de las flores, y de
las aves y, ¿sabes?: Dios también cuida de ustedes y se alegra con ustedes.

2. Propósito: Enseñarles que Jesús nació:

Había una vez un papá y una mamá, que iban a tener su primer nené. Un día
caminaron mucho, mucho hasta que llegaron a una casa: Tun Tun, ¿se puede
pasar? No, no hay lugar. Y siguieron caminando y caminando hasta que
llegaron a otra casa: Tun Tun ¿se puede pasar? No, aquí no hay lugar, pero si
quieren dormir váyanse para el corral de las vacas. Y el papá tomó pajas, y la

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mamá se acostó y aquella noche nació un niñito que es el Señor Jesús, el Hijo
de Dios.

(Las historias están basadas en: Mateo 6: 26-30. Mateo 18-25).

Los párvulos 3-5 años

Son tal vez los más inquietos, no los regañes por esa inquietud, mas bien
aprovéchela para que ellos aprendan.

Ejemplo: Durante la clase donde David venció a Goliat…

“Y el gigante Goliat se cayó… Vamos a ponernos todos en pie y vamos a ver
como se cayó el gigante”.

Seguramente nunca olvidara esta lección.

Tiene que tener presente que estos pequeñines no prestan atención por mucho
tiempo, por eso debe de usar el pizarrón, dibujos etc.A este grupo se le puede
enseñar muy bien los textos, pero deben ser textos cortos o una parte del verso
para que lo retenga. Estos niños creen todo lo que se les dice, enséñeles de
las cosas lindas de Dios para sus vidas: “Mi Padre celestial, me ama a Mi “.
Háblele de Su Jesús.etc.

Tal vez sea bueno observar el trato que se le da a este niño en un pre-escolar,
toda explicación debe dársele con palabras sencillas, pero claras para que él
comprenda. A estos niños les encanta usar figuras para colorear y usted puede
usar estas manualidades para aplicar lo que dibujen, así aprenden las
verdades espirituales. Ellos son capaces de memorizar historias como las que
pusimos por ejemplo para los alumnos del Departamento de Cuna.

Principiantes 6 a 8 años

Son muy parecidos a los de la clase anterior, y también les agrada hacer
trabajos manuales. Les agrada cooperar, pueden traer alguna flor para adornar
el local o que busquen figuras en revistas o libros, estas se pueden usar para
enseñarles. Son muy curiosos así que no les muestre nada relacionado con la
clase hasta que esta no comience.

En esta edad es importante enseñarles textos relacionados con la salvación, el

pecado, el arrepentimiento y la fe. Explíquele cada una de estas cosas, que
cada uno sepa como pueden ser salvos. La Hermana Luisa Walter nos testifica
que a los cinco años le entregó su vida a Cristo y desde esa fecha le siguió
toda la vida.

Por eso los maestros deben orar mucho por ese grupo de niños y enseñarles
como ellos necesitan de Dios. Así como, en esta edad, ellos tienen buen
apetito también están ávidos de una enseñanza espiritual. Esta continua
hambre espiritual y mental debe ser satisfecha, aprovechémosla.

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Primarios. (9 a 11 años)

A esta edad los niños de distintos sexos no se llevan bien entre sí, de ser
posible se tendrán en clases separados, las nenas con una maestra y los niños
con un maestro. Les gusta a esta edad imitar a alguien, es bueno que el
maestro sepa instruirlos poniendo a Moisés, Josué, Samuel, Pablo, Cristo,
Ester, Rut, Ana, María, como grandes Héroes de la fe, dignos de imitar.
Los primarios son capaces de memorizar mucho, aproveche para enseñarles
textos bíblicos, puede guiarlos para aprender Salmos cortos en sus casas, y en
tiempos breves aun en las clases. Guíelos a ser amigos entre los grupos
cristianos, esto ayudará a que no busquen amistades fuera de la Iglesia que lo
puedan mal influenciar. El Maestro puede hacer salidas con ellos a un lugar de
campo, algún lugar recreativo o turístico -según las posibilidades-, ellos lo
estimaran y querrán como un buen amigo.

A estos alumnos por lo general les gusta leer, usemos esto para que lean en
sus casas porciones bíblicas que UD. le señale, o póngale como tarea buscar
la historia bíblica donde dijo “cierta frase” el personaje que están estudiando.

Puede enseñarles costumbres útiles para su futuro como: leer la Biblia, asistir a
la Iglesia, ofrendar, diezmar, trabajar para el Señor, anímeles para que
pregunten en la clase.

A esta edad se debe enfatizar la conversión genuina, la próxima edad es

cuando sobreviene la crisis espiritual, es de suma importancia que en esta
época logre que tengan experiencias con Dios y decidan por Cristo.

Intermedios (12 a 14 años)

A veces por necesidad pueden unirse a clases de jóvenes, pero nunca con
menores porque pierden interés en la enseñanza.

Esta es la edad más difícil que encontramos en la enseñanza espiritual. No se

trata de un niño, tampoco de un adulto, a veces ellos mismos no se entienden y
cambian mucho en su trato con los demás. Debe tratarlos con amor y con
amabilidad sin dejar de mostrarse recto. Es importante que evidencie ante ellos
siempre su respeto hacia las cosas de Dios, pues constantemente están
observando a su profesor.

No les gusta que les den sermones, ni que se les aconseje, se creen “grandes”
y conocedores de todo lo que van a hacer. Cuando corrija una actitud en la
clase evite dirigirse a alguno en particular, pues si lo avergüenza delante de los
otros seguramente se rebelará contra usted. Deje que ellos piensen por si
solos, por lo regular conocen todas las historias bíblicas, es bueno y edificante
enseñarles doctrinas básicas y fundamentales del Evangelio esto los estimulará
más a aprender.

Ellos necesitan conocer el porqué de todas las cosas, les gusta averiguar por
sí solos, a veces estos alumnos prueban el pecado para saber que es, dudan
mucho de todo, si se les regaña fuerte públicamente en cada encuentro pueden

15
perderse, tenemos que ganarlos con mucho amor y evitar sermonearle
constantemente sobre su comportamiento.

Es bueno que se les permita trabajar en la obra del Señor: visitando, con la
música, en actividades de jóvenes. La mayoría de los adolescentes abandonan
la enseñanza bíblica hay que hacer todo lo posible porque su elección sea
continuar escuchando Palabra de Dios, y lograr que si alguno aun no ha tenido
un encuentro verdadero con Dios en esta época lo experimenten. Si ya son
cristianos ayúdelos a crecer espiritualmente.

Los maestros de esta edad no deben ser dictadores sino sus amigos allegados,
Las tentaciones juveniles azotan mucho en esta generación, no le muestre un
evangelio de prohibición, sino lo positivo de conocer a Dios y servirle, el gozo y
el privilegio de la vida cristiana.

A ellos les gusta que reconozcan su labor, que se interesen por ellos, hable con
ellos fuera de la clase y converse con ellos de sus gustos, estos alumnos viven
en el presente. Esto nos muestra que si una acción afecta su vida, en el futuro
no les causa mucha impresión. Muéstreles que haciendo esto o aquello en el
presente pierden o ganan en este tiempo, de esa manera están más dispuestos
a decidir prontamente.

Se hieren fácilmente por la censura merecida, mucho más por la inmerecida, y

también por falta de elogios. Es más reservado ahora, que cuando tenia solo
ocho años.

El maestro de los intermedios debe orar por su clase y además lograr que ellos
también tengan tiempo de oración y comunión con Dios, puede ser al finalizar
la clase, o en algún rato que determinen la comunión les ayudará a salir
victoriosos.

Jóvenes.

Es la edad en que fijan su rumbo, el maestro puede ayudarles a trabajar en el

servicio cristiano, pueden hacerlo en visitas, en la música de la Iglesia, en
grupos de expresión corporal o pantomimas, dando clases infantiles, etc.

Enséñeles y trate que aprendan proverbios de Salomón, que estudien sobre los
misioneros, sus vidas entregadas a Dios, libros de grandes héroes de la fe
cristiana. Enséñeles las profundidades de la vida cristiana y sus deberes para
con la Iglesia, es bueno es que les ayude en sus tendencias hacia el sexo
opuesto, enseñándoles bíblicamente cómo deben formar hogares cristianos.
Guíelos a tener una vida íntima con el Señor, procure que tengan comunión por
sí solos con Él.

Esta es la edad del despertamiento religioso, el alma joven anhela las cosas de
Dios pero tiene poca inclinación a hablar de ellas. El maestro debe mostrar
franqueza con ellos aunque a veces sus esfuerzos aparentemente no sean
apreciados. Procure que ellos tomen parte en la clase.

16
El mayor bien que Educación Cristiana puede hacer por el joven es continuar
sin vacilación las enseñanzas de las grandes verdades acerca de Dios,
procurando que satisfagan sus interrogantes con respuestas bíblicas.

Adultos.

Si lo programan, Educación Cristiana tendrá un buen grupo de adultos, a ellos

se les debe instruir en deberes cristianos, en cuanto a sus hogares, la
sociedad, las doctrinas y cómo compartirla con sus hijos.

El trabajo del adulto con los jóvenes es de mucho valor, pueden apoyarlos en
sus deseos de servir a Dios, conocer la Palabra, tener una relación especial
con su Dios.

El adulto confronta en sus vidas distintos problemas en todo momento, el

maestro debe guiarles a confiar plenamente en el Señor y a depender de El
para toda su vida, procure que participen en las clases, que usen sus Biblia y
permítales en ocasiones narrar sus propias experiencias en el servicio al
Señor. La enseñanza puede ser muy eficaz de esta forma pues es recordada
por un testimonio vivo.

Puede ser que alguno de los adultos aun no haya entregado su vida a Dios,
ellos también necesitan ser guiados a Dios.

Es necesario que logre su atención a la clase, por eso desde el comienzo debe
captar su atención y su tarea durante la lección es mantener la misma, no solo
que estén allí de cuerpo presente sino que también ellos estén atentos y
aprendiendo la enseñanza.

Debe recordar que su deber no queda cumplido cuando finaliza la clase, debes
recordar a cada uno en tus oraciones, conocer si es posible sus peticiones, las
luchas que confrontan para poder apoyarles y recordarles como pueden contar
con el Señor.

III. ¿Como podemos enseñar?

Cuando pensamos en cómo enseñar, a nuestra mente acuden muchos

métodos y formas para enseñar. Ahora, es necesario que quien enseña sepa
preparar correctamente una lección.

Entendemos que usted orará durante la semana por su clase, por sus alumnos,
mencionando en sus oraciones sus nombres y pidiéndole a Dios sabiduría.

La Biblia dice:

Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará,

pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie. (Santiago 1:5)

17
Si no tiene un manual, es usted quien debe preparar la clase, pero aun
teniendo a su alcance un manual debe buscar figuras, lápices, libros etc. Todo
lo que usted piense usar en su clase debe procurarlo y tenerlo organizado,
antes de la lección.

Procure siempre llegar temprano, esto es muy importante: si tiene un aula o

lugar para la clase, acomode los asientos de tal forma que los alumnos puedan
sentirse cómodos en la enseñanza cristiana.

Si usted ha preparado debidamente la lección confié en Dios que Él le ayudará

a desarrollarla con libertad.

Hemos dicho que debemos buscar el material, este debe estar de acuerdo con
la edad del alumno y el medio ambiente en que se desenvuelve, por eso es
muy importante que los Maestros visiten a sus alumnos, y converse con ellos
en sus hogares, esto les dará una idea más cercana de lo que debe
enseñarles. Y así, aunque tenga delante un manual podrá conducir su clase a
la necesidad del alumno.

Un Ejemplo: En el manual viene la lección de la multiplicación de los Panes y

los Peces, y sus alumnos necesitan entregar sus vidas a Jesús. ¿Qué haremos
para aplicarles esta lección de los milagros de Jesús? Puede aplicar la clase no
solo viendo el milagro sino cómo el niño entregó lo que tenía a Jesús, igual
podemos entregarnos confiadamente nosotros a Él sabiendo que hará algo
más útil con nuestras vidas de lo que nosotros podremos hacer o entendemos.
Así vemos que si durante la semana hemos visitado y preparamos nuestra
lección con tiempo, lograremos nuestro objetivo.

Al enseñar procure que sus alumnos vean cuan interesado está usted en que
ellos aprendan, pregúntele con el fin de saber si ellos entienden. Fuera de la
clase sea un amigo de él para que estos tengan confianza en ustedes.

Tenemos mucho interés en que cada Maestro sepa personalmente preparar

una lección. Estos son los pasos a seguir en la preparación:

1. Propósito
2. Pasaje Bíblico
3. Texto
4. Ilustración o Introducción
5. Enlace o Puente
6. Desarrollo de la lección
7. Aplicación

Expliquemos estos puntos detalladamente:

1. Propósito

Hay tres propósitos primordiales que debe procurar cada maestro:

- Ganar al alumno
- Edificarle en Cristo

18
 - Enviarlos a trabajar para Cristo

Teniendo en mente estos ideales, los Maestros al preparar su lección cada

domingo deben buscar un propósito específico para su clase y encaminarla
según ese enfoque.

El Maestro debe llevar al alumno la Palabra de Dios clara y convincente. Para

que el Maestro no se pierda al escribir su lección buscará lo que desea enseñar
y basado en ese propósito, enseñará su lección, casi siempre los manuales no
traen los propósitos escritos por lo tanto el Maestro al estudiarlo debe pensar
cual va a ser su propósito al enseñar, estudiando la lección del manual en la
semana usted descubrirá el propósito y podrá aplicárselo a su clase.

Cuando Jesús enseñó a sus discípulo sus enseñanzas era acerca de sus vidas
espirituales, Jesús no se tomaba el tiempo para enseñarles como muchos
procuran mostrarnos, cómo tener mejores leyes sociales, cómo llegar a ser
importantes en los negocios, estudios etc. En realidad Jesús enseñaba de los
que perdura para siempre: El enseñaba de las cosas infinitamente más
importantes, les mostraba los sufrimientos de este mundo, y lo pasajero que
era, pero a la vez les prometía un galardón grande en los cielos (Mateo 5:10-
12).

Nuestro Maestro enseñaba a sus discípulos de los tiempos, a creer plenamente

en Él como el Hijo de Dios. Además los preparaba y les enseñaba las sanas
doctrinas, instruyéndolos así para que fueran testigos suyos en toda la tierra.

En 1Corintios 2:9, Pablo nos señala las grandes cosas que Dios ha preparado
para aquellos que Él ama y que están al alcance de todo maestro para ser
enseñadas. Enseñe a adorar, a rendirse a Dios, a vivir correctamente y a servir
a Dios.

Fíjese un propósito para cada clase, no les enseñe solo un estudio, y no se

pierda la bendición de fijar el propósito claramente en el alumno.

2. Pasaje bíblico

Después que usted ha buscado el propósito para su lección ha de buscar el

Pasaje Bíblico (pueden ser varios pasajes) para desarrollar su lección y lo
anotará en sus apuntes. Este Pasaje Bíblico debe ser leído 2 o 3 veces por el
maestro, pensando que cada verso o cada palabra debe ser un apoyo para la
enseñanza de sus propósitos.

Ejemplo: Si su propósito es mostrarle al niño que Jesús es la luz del mundo,

puede usar estos pasajes para explicar la lección: Juan 9:1-12, 35-41 y 8-12.

3. Texto

El texto de oro como lo llamamos en la Escuela Dominical debe ser un texto

que encierre la verdad que usted ha enseñado, debe de enseñarlo de tal forma
que cada uno sepa decirlo de memoria. A pesar de que el tiempo haya

19
transcurrido, si es un texto básico, cada vez que el alumno lo recuerde ha de
pensar en la verdad bíblica que encierra.

Al enseñar el texto, debe de explicarse brevemente lo que quiere decir, sobre

todo si el texto tiene alguna palabra complicada para el vocabulario de sus
estudiantes. Si enseña a niños muy pequeños puede sustituir la palabra
compleja por otra más sencilla.

4. Introducción o Ilustración.

Ya tenemos el propósito, hemos buscado el pasaje bíblico y el texto, pero,

¿cómo vamos a comenzar nuestra clase?

Debemos comenzarla así: con una buena ilustración o introducción. Es muy

portante que sea “bien buena”, pues de esta manera llamamos la atención del
alumno y el interés por lo que se va a decir, si espontáneamente esto se logra
aprenden mucho más.

La Introducción puede ser algo breve ocurrido, un testimonio, un pequeño

cuento (si es para niños) puede ser a través de una lámina, y describir lo que
hay en ella de tal forma que lleve al alumno de lo conocido a lo desconocido.

Para enseñar el propósito que hemos elegido como ejemplo anteriormente

podemos hacerlo así: mostrar la lámina de una luz, o simplemente, pedirle que
cierren sus ojos para ver si identifican algo que esté en sus manos, o apagar la
luz si es de noche y de pronto encenderla para que noten la diferencia, si son
mayores, háblele de alguna persona que ha perdido la vista….

5. Puente o Enlace

El puente o enlace se usa entre la Introducción y el Desarrollo, o sea es lo que

enlaza la introducción a la enseñanza bíblica, no debemos pasar bruscamente
de un lado a otro, muchos manuales no traen este enlace, debemos nosotros
crearlo para que no aparezca un salto en la enseñanza y se pierda el interés.

Casi siempre el puente es una pregunta:

Por ejemplo, ya hizo la ilustración de la lección y dice: ¿Sabías que Jesús

cuando caminó acá en la tierra se ocupaba de los que tenían una aflicción o
enfermedad? Jesús en su amor se compadeció de los que no tienen vista
natural y espiritual.

En la historia de hoy veremos qué hizo por ellos……

Seguidamente puede enfocar su verdad espiritual del día.

20
6. Desarrollo

Este es el cuerpo, o punto más largo de nuestra lección, no podemos hacer

una introducción larga y un desarrollo corto, sería igual que tener una cabeza
grande con un cuerpo pequeño, no se sostiene así la enseñanza.

Hemos leído la historia o enseñanza en la que vamos a basar el desarrollo, si

escribe la lección para su uso personal, puede hacer un bosquejo solo con los
puntos importantes que quiera tratar. Si está preparando una lección para que
otros puedan compartir, es importante que usted, copie la explicación de cada
punto del bosquejo para los maestros que atiende. (Tal es el caso de preparar
un Manual o Expositor para otros).

Narre despacio el desarrollo y con interés, ponga toda su mente y sus acciones
a trabajar, dándole vida al desarrollo. Si está narrando una historia bíblica a
alumnos que por primera vez la escuchan dibuje con sus palabras cada detalle
de la misma, para beneficio espiritual de los oyentes.

Si son alumnos conocedores de la Palabra podemos hablarle de parámetros

que deseamos señalar en esta historia sin develar el nombre del personaje,
pues si empieza mencionando el personaje bíblico, pueden perder todo interés
en su historia.

Ejemplo: Mientras Jesús vivía acá en la tierra era 100 % humano y también 100
% divino, en ese tiempo no había mucho desarrollo para ejercer la medicina, ni
muchos médicos con conocimiento para ayudar a los enfermos, como tampoco
sabían mucho de Dios, los religiosos manipulaban mucho cuando alguien
estaba enfermo, tanto los líderes espirituales con conocimiento de Dios como
del ocultismo. Se imaginan Jesús encontrándose con hombres que no veían
nada, ¿como se puede imaginar un ciego las cosas que nunca han visto?
(Permita que hablen)

Así continúe narrando todo este maravilloso milagro de Jesús, todo lo que lo
rodeaba, sin perder de vista que su interés es mostrar que Jesús es La luz del
mundo…para esto puede poner interés Juan 9:35-41 y el capitulo 8:12.

He puesto este ejemplo que puede parecer difícil, pero así comprende que
debemos tomar un tiempo especial para preparar la clase y hacer lo mejor para
el Señor.

Si tus alumnos son pequeños ten presente buscar el significado de las palabras
poco comprensible para ellos. Si son personas preparadas, igual puedes
buscar la esencia espiritual en un Diccionario Bíblico de las palabras que
quieras enfatizar para el crecimiento de su alma.

7. Aplicación o culminación

Tal vez este es el momento más importante de la lección, ahora usted, va a

tratar que los alumnos pongan en práctica la lección, y va a darle una
aplicación espiritual, para su diario vivir. En este caso hemos tomado la luz

21
espiritual que Cristo da, muéstreles cuan importante es la luz de Dios, cuan
terrible es para el hombre espiritual el mundo de tinieblas. Si son nenes
hábleles, que ellos pueden reflejar la luz de Dios en sus vidas y diario vivir, que
Dios les ha llamado para ser luz en el mundo, y para que reflejen su luz.

Acá también puede, enseñar o repetir el texto para que recuerden la lección.
No recomendamos a los maestros de niños que les lean la historia Bíblica en
clase para después explicarla, pues esto se hace monótono. Los mayores y
jóvenes sí pueden seguir la lectura con UD, e irle aplicando cada verso que
desee destacar en la misma.

Así que el maestro no debe tener nunca el Manual delante, y como ya

señalamos es poco pedagógico leérselo a los alumnos. El fin es que lea la
lección y la aprenda, prepare su bosquejo y no pierda en ningún momento el
interés de su clase y lo que está exponiendo en ella.

Por eso es necesario conocer lo que vamos a enseñar. Debes estudiar la

Palabra de Dios cada día, meditar en lo que dice, en lo que deseas enseñar: la
Biblia es nuestro gran libro de texto. No te conformes con estudiar solo el
capítulo que vamos a compartir, estudia sobre ese tema, apóyate en los
pasajes paralelos y contextos; aprende aun de los pasajes que nunca has
estudiado, puede serte muy útil.

Es importante por eso para el Maestro Cristiano, estudiar Teología, y conocer

doctrina de la Biblia, Geografía Bíblica, Historia del mundo antiguo, etc.

Procuremos estudiar durante la semana la enseñanza no lo deje para el último

día de la semana, gran parte del éxito de nuestro Ministerio depende del tiempo
que empleemos en estudiar lo que ministramos y el tiempo de comunión que
tenemos en oración y meditación con Dios.

No todos nuestros alumnos pueden ser enseñados de la misma manera,

algunos tienen unas necesidades espirituales distintas a otros. Ordene un plan
para llevar a cabo, no use siempre el mismo propósito, sino que su enseñanza
sea progresiva para que puedan crecer espiritualmente, así como lo hace en lo
natural. Si seguimos un orden evitamos un día estar hablando de las
profundidades del Apocalipsis y el próximo del comienzo de la Creación….

Acostumbramos a dar nuestras clases así: estudiamos la lección, la

exponemos con sus puntos y terminamos con el texto y ya… Esto solo logra
cubrir un tiempo en la Iglesia, pero si deseas moldear e instruir cumpliendo con
un ministerio, buscarás medios y métodos para fijar cada enseñanza.

Según la edad, hay distintos métodos muy apropiados para usar.

Por eso queremos hablarte un poco de figuras visuales, franelógrafos, láminas,

pizarra, etc., etc.… Teniendo presente que Recuerdes: Aprendemos mucho por
lo que vemos (el 50 %). Pero más aprendemos de lo que se hace (80%).

22
 IV. Veinte métodos e ideas y algo más.

1. Tareas

Se les da instrucciones para realizar tanto en la clase como fuera de ella.

Deben estar a la altura del alumno y sus habilidades. El maestro debe recordar
revisar cada tarea, mostrar interés por ella. (Primarios - Adultos)

2. Conferencias

El maestro puede presentar todos los datos sin solicitar participación del
alumno, a veces es el mejor método para trasmitir conocimiento. (Jóvenes y
Adultos)

3. Esgrima Bíblico

Enseñar el manejo de la Biblia nunca puede ser un mero pasatiempo, sino un

método para reforzar la enseñanza. (Primarios - Adultos)

4. Pizarra.

Un método fácil y sencillo, adaptable. Puede poner en él números, figuras,

bosquejos, diagramas, mapas, todo cuanto pueda escribir o dibujar (si sabe
hacerlo con cualquier dibujo sencillo que vaya realizando mientras habla a los
pequeños, ellos estarán pendiente de cada palabra y de cada trazo). Se
transforma en ayuda visual y da oportunidad también para que el alumno
participe activamente.

Puede escribir también el bosquejo de su enseñanza, textos, palabras claves,

la tarea que desea que realicen. Cuando copias algo puede ser repetido por
ellos copiándolo y leyendo. De esta manera podrán recordar hasta el 90%.
También puede escribir preguntas que ellos sean capaces de responder, la
pizarra es muy útil para repasar enseñanzas anteriores. Repasar la lección en
ella cuantas veces sea necesario hasta que este convencido que entendieron
cada cosa. (Este método es valido para todas las edades)

5. Carteles

Letrero para desplegar en el momento oportuno, o tenerlo en el aula para que

al entrar sean confrontados con una frase o verdad. (Primarios - Adultos)

6. Preguntas

Hay tres tipos de preguntas: aquella que te pide recordar, la que orienta, y la
que te hace pensar.

Evite preguntas demasiado simples que puedan contestarse con un si o no,

siempre se puede añadir un por qué. (Para todas las edades)

23
Puedes notar como Jesús el Maestro de los Maestros, enseñaba usando el
método de preguntas, así encontramos más de cien preguntas en sus
enseñanzas. Sus preguntas eran tales como: ¿vosotros que pensáis? ¿Que os
parece? ¿Donde compraremos pan para que coman estos?, Lo usaba en sus
introducciones: (¿A qué se asemeja el reino de los cielos?) Así tenía a sus
oyentes pensando y atendiendo.

Por eso al hacer una pregunta el Maestro debe captar la atención del alumno, y
a la vez, que el alumno pueda responderla, es bueno también para el alumno
que se distrae mantenerle atento con preguntas, esto produce siempre un
ligero movimiento en la clase y hace que el alumno atienda. Si desea hacerle
pensar, mire como lo hacia el Señor, ¿Quien de vosotros podrá añadir a su
estatura un codo? ¿Y por el vestido por qué acongojáis? ¿Y… por qué miras la
mota que esta en tu hermano?

Por medio de preguntas puedes saber qué y cuánto conocen tus alumnos,
mientras solo se recuerda el 10 % de lo que oye, de lo que el dice se retiene el
70 %. Por eso la importancia de la pregunta para que puedan retener el
conocimiento.

Recuerde: Evite preguntas sugestivas, no sirven para ayudar en el aprendizaje.

No haga preguntas largas, tampoco deben ser indefinidas; no señale a un
alumno para que responda antes de formular la pregunta, pues los demás
pierden el interés por pensar en la respuesta; no haga siempre las preguntas
en un orden para que todos atiendan, permita que ellos a su vez pregunten
(habrá logrado despertar las mentes en su enseñanza y el interés por la
Palabra). Que el maestro conteste con preguntas al alumno es un logro alto en
la enseñanza pues devuelve al alumno la responsabilidad de pensar y analizar.
(Jesús enseñó usando este método Ejemplo, Mateo 21:23-27; Lucas 10:25,26;
14:3-6; 18:18-19)

7. Grupos de estudio

Divídase en grupos la clase de cuatro a seis alumnos que debatan un tema

señalado y luego traigan conclusiones a la clase. Cada grupo tiene que tener
un líder y cambiar opiniones, durante 5 o 10 minutos siempre debe dar una
conclusión apropiada. (Intermedios, Jóvenes y Adultos)

8. Debate.

Los alumnos presentan puntos de vista particulares sobre un asunto (siempre

debe ser con un tema o propósito que UD, haya seleccionado para traer a
clase). Pueden debatirse doctrinas bíblicas, la vida de personajes bíblicos o
problemas de la vida actual, dando siempre al final el maestro la orientación
que ofrece la Biblia. (Jóvenes y Adultos)

24
9. Composición

El alumno escribe con sus propias palabras una porción bíblica o la enseñanza
de la lección. En los más pequeños permita que lean la Biblia, y narren la
historia con sus propias palabras, exponiendo lo que ven en ella, es muy útil,
para recordar la historia bíblica y su enseñanza. (Primarios - Jóvenes)

10. Repetición

(Para todas las edades)

11. Trabajo Manual

Los alumnos construyen algo relacionado con la lección. Puede hacerse en

casa o en la Escuela Bíblica. (principiantes y primarios)

12. Mural

Ayuda a gravar la enseñanza. (Para todas las edades)

13. Representación

Se le llama también dramatización (primarios y adultos) Se puede usar con los

principiantes si se hace con mucha sencillez.

Una forma muy eficaz, para niños es dar la lección, y después señalar a varios
alumnos para que la representen, o traer escrito cada papel, y lograr que ellos
la dramaticen, o durante el desarrollo ir leyendo la parte de la historia que
deseas representar y que los alumnos, previamente escogidos actúen según
vas leyendo. Aunque pueda ocasionar risa en algunos, esta enseñanza la
graban muy bien. (Párvulos a Principiantes)

14. Lenguaje de señas

Los niños usan sus manos para representar un canto, permite el movimiento
(necesarios para los párvulos y principiantes).También puede enseñárseles el
texto con acciones o ir narrando toda la clase mientras ellos repiten las señas.

15. Narración

Arte de madres, tías y abuelas, bien útil para el maestro. Elimínele los detalles
esenciales. En ocasiones hay que resumir y en otras ampliar. Útil para toda
edad especialmente para los párvulos y primarios.

16. Conversación dirigida

Es una conversación, en la cual el que dirige, relaciona cualquier actividad del

día con el propósito de la enseñanza básica de la lección .Se usa durante el
juego, el trabajo manual, el canto, etc. (párvulos y principiantes)

25
17. Juegos

Consiste en poner a los alumnos a compartir, para hallar respuestas que

correspondan a determinadas preguntas, reconocer hechos, completar
declaraciones, descubrir una frase, mostrar láminas y que digan a qué historia
pertenece, o algún versículo etc.(primarios)

18. Franelógrafo

Es muy útil, y aunque para muchos obsoleto, capta la atención de los alumnos
de forma eficaz. Solo que debes saber usar las figuras, y hacerlo en forma
correcta. (Principiantes - Jóvenes)

19. Excursiones

Magnífico método donde podemos usar la creación (Primarios - Adultos)

20. Enseñanza interactuada.

Este es el método que más resultado está dando en este tiempo y el que más
se usa.

Ejemplo: puede comenzar su clase interactuada, usando uno de los métodos

antes expuesto, digamos: juego o esgrima bíblico, tratando de ver quien
encuentra primero el capítulo que va a tratar.

1. Usar como introducción el hacer preguntas de repaso.

2. Traer un personaje vestido a la clase de forma que llame la atención,
(puede ser con ropas de hoy exageradas o vestimenta de tiempos bíblicos)
para esto puede usar a un alumno que sea maduro o a su ayudante. Este
personaje puede traer ideas de la clase, o narrar algún hecho de este
tiempo, o ser usado para ilustrar parte de la lección bíblica.
3. Si tiene la posibilidad de video, da la introducción de su clase y pone la
historia bíblica en video, o en audio grabado previamente.
4. Puede traer escrita la historia en distintos papeles y que sus alumnos la
dramaticen durante el desarrollo.
5. Para los más pequeños: Puede dar parte de la lección interactuada con un
personaje que les agrade: payasos, títeres, marionetas, o algún otro que
pueda captar su atención y afirmar la enseñanza.
6. No podemos pararnos frente a nuestros alumnos sin habernos preparado
previamente de la mejor forma para llegar a ellos con la lección bíblica.
7. ilustración con objetos. Cualquier cosa puede serle útil para ellos recordar,
Ejemplo: traiga una lámpara, para hablar de la luz; unos trozos de pan, y
compártalos mientras habla de la multiplicación de los panes; flores para
hablarles de lo que Dios creó… etc.

26
Algo para recordar:

La clase debe tener parámetros. Las reglas o costumbre de su clase, la

establece cada maestro, es difícil muchas veces mantener la disciplina, por eso
antes de llamar la atención usted debe exponer qué reglas tendrá su clase.

1. qué tiempo deben estar sentados

2. cuándo pueden preguntar
3. de qué forma deben hacerlo
4. un método sugerido por conocedores de la enseñanza es:

L: Levantar la mano para todo lo que necesite.

I: Interésate no solo por sentirte bien sino también por tu amigo (o hermano).
S: Solo te pones de pie si te doy permiso (el permiso consiste de dos pasos:
primero lo Solicitas, segundo se te otorga).
T: Tienes que obedecer a tu Maestro, sin molestar.
O: Obremos juntos para aprender.

Esto puede aparecer en el mural, y ser premiado el alumno que cumple y

mantiene la disciplina. Para que sea respetada, uno de los mejores métodos es
que los rebeldes e intranquilos sean confrontados por los que sí desean
participar y aprender. También usar el método de contar hasta tres para que
todos hagan silencio; o sorpresivamente traer algo interesante para entregar a
quien mantiene las reglas, y las cumple. Otra forma muy efectiva es darle
tareas para realizar en la clase, así se sentirán importantes y parte de la
misma.

V. Conclusiones

Estadísticamente, la mayoría de las personas que están en nuestras Iglesias

mundialmente reciben a Jesús antes de sus 18 años. Por eso debemos como
Maestros locales poner todo nuestro empeño en hacer lo mejor para nuestro
Dios.

Estas ideas expuestas, han acompañado mi vida desde que decidí un día
dedicar mi vida al servicio de Dios, para que su palabra fuera conocida en el
corazón de niños. Enseñar ha sido la labor que por más tiempo he realizado
llevando la Palabra a adolescentes, jóvenes y adultos, o sea, no son meras
ideas, ellas son el resultado de mi experiencia en las aulas por más de 30
años. Donde quiera que Dios me haya permitido he podido compartir, ministrar
y también formar a otros Maestros. Gracias a Dios estas enseñanzas han sido
utilizadas con éxito tanto en grupos pequeños, como en congregaciones
numéricas.

Debido a la alta tecnología que nos está inundando, debemos constantemente

renovar nuestro deseo de alcanzar a los nuestros con el mensaje de Dios. Lo
que hasta un tiempo dio resultado en la enseñanza cristiana ya se mira con
indiferencia, para nada hablamos de cambiar el mensaje, sino los métodos,

27
para llegar a estos que constantemente se están perdiendo en vicios y
pecados, siendo bombardeados con una TV que nada bueno trae de Dios.

Creo firmemente que el poder para ejercer el ministerio magisterial viene de la

oración; aun nuestras experiencias vividas, nuestros conocimientos, nunca,
pueden sustituir el tiempo de comunión con Dios. Por eso debemos conocerle
íntimamente. Cada día más.

Este es nuestro reto para el tiempo que vivimos: Trabajemos.

Hasta que toda la tierra sea llena del conocimiento de Dios como las aguas
cubren la mar. Habacuc 2:14.

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