La psicoterapia individual es recomendable en las situaciones 3 y 4. La situación 3 describe a Carlos, quien presenta rasgos obsesivos, ha subido mucho de peso, se siente angustiado y apático, no trabaja y tiene una mala relación con sus padres separados. La situación 4 describe a María, quien está en una relación tóxica y ha pensado en arrojarse por la ventana debido a las grandes peleas con su pareja.
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La psicoterapia individual es recomendable en las situaciones 3 y 4. La situación 3 describe a Carlos, quien presenta rasgos obsesivos, ha subido mucho de peso, se siente angustiado y apático, no trabaja y tiene una mala relación con sus padres separados. La situación 4 describe a María, quien está en una relación tóxica y ha pensado en arrojarse por la ventana debido a las grandes peleas con su pareja.
La psicoterapia individual es recomendable en las situaciones 3 y 4. La situación 3 describe a Carlos, quien presenta rasgos obsesivos, ha subido mucho de peso, se siente angustiado y apático, no trabaja y tiene una mala relación con sus padres separados. La situación 4 describe a María, quien está en una relación tóxica y ha pensado en arrojarse por la ventana debido a las grandes peleas con su pareja.
La psicoterapia individual es recomendable en las situaciones 3 y 4. La situación 3 describe a Carlos, quien presenta rasgos obsesivos, ha subido mucho de peso, se siente angustiado y apático, no trabaja y tiene una mala relación con sus padres separados. La situación 4 describe a María, quien está en una relación tóxica y ha pensado en arrojarse por la ventana debido a las grandes peleas con su pareja.
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LECTURA 7
A continuación de presentan distintas situaciones. Identifique en cuales es
recomendable la psicoterapia individual SITUACIÓN 1 Contacta una joven de 35 años solicitando terapia para ella y su madre. Cuando se pregunta por el motivo de consulta (telefónicamente) relata que su hermano (de 33 años) es ludópata y su madre se encuentra muy afectada por esta situación. Tienen otra hermana mayor pero “pasa” del tema. SITUACIÓN 2 Contactan Felipe (50) y Karla (48) para realizar terapia de pareja. La solicitud es impulsada por la mujer, quien manifiesta que es el último intento antes de una separación. La queja de ella está vinculada con que él es poco cariñoso, está siempre enfadado, no la apoya en sus proyectos… Él no ve tanto problema en la situación. Cree que ella maximiza las cosas. Se inicia un trabajo de pareja en donde se consiguen varios cambios, especialmente por parte de él. En el proceso terapéutico se revisa la historia y él percibe que no estuvo afectivamente presente en muchas circunstancias importantes para ella (muertes de familiares, intromisión de la “suegra” –con mucha presencia-, migración de la esposa, etc.). Esta toma de conciencia impulsa un cambio significativo en él: está mucho más afectuoso con ella, la acompaña, no se enfada… y ella sigue anclada en la queja de las carencias del pasado. SITUACIÓN 3 Carlos, de 23 años contacta para realizar terapia individual por sugerencia de su anterior terapeuta familiar. Presenta algunos rasgos obsesivos (comprar música en internet solo de discos originales, pagar o comprar solo a precios de cifras en redondo…) engordó mucho en los últimos 4 meses, se encuentra muy angustiado y apático. No trabaja. Terminó el bachiller y se encontró “trabado” para poder seguir avanzando. Convive con su madre. Sus padres llevan separados desde sus 11 años con una muy mala relación: los acuerdos los resuelven en juzgados. No quiere que sus padres acudan a terapia. SITUACIÓN 4: María, de 28 años, abogada, consulta porque se encuentra en una relación de pareja que define como “tóxica” con la que se están presentando problemas que no había experimentado antes: broncas grandísimas donde ella pierde el control y se golpea a sí misma. En el último mes ha pensado, en varias ocasiones, arrojarse por la ventana. Vive con sus padres, es económicamente autónoma. SITUACIÓN 5 Melisa llama por teléfono para solicitar terapia. Tiene 40 años, está embarazada y convive con Adrián, de 38 años de edad, quien tiene una hija (Mariana) de 6 años de un matrimonio anterior (con su ex esposa mantiene una relación cordial). Refiere que “no soporta” a la niña de él, no puede pasar tiempo con ella. Los fines de semana alternos (en que él cuida a la niña) ella bien se va de casa o está de muy mal humor. En alguna ocasión que, por trabajo, él le pidió que se encargara de cuidarle se quedó durmiendo mientras le puso la tele a la niña. Se alegra cuando Mariana lo pasa mal. Esto genera importantes discusiones entre ellos. Según manifiesta todo “va perfecto” salvo este tema de su hija. Él lo pasa muy mal, también, con toda esta situación y le dice que no sabe hasta cuándo podrá tolerarlo; le pide que entienda que tiene una hija.