Los 9 Tipos de Autoestima y Sus Características
Los 9 Tipos de Autoestima y Sus Características
Los 9 Tipos de Autoestima y Sus Características
Los tipos de autoestima se pueden clasificar en varios niveles según los modelos
más conocidos y usados: el de Hornstein y el de Ross. La autoestima es el aprecio
y estima que alguien tienes hacia sí mismo y es extremadamente importante para
llevar una vida plena, sentirse capaz de enfrentar dificultades y tener logros tanto a
nivel profesional como personales.
Por otro lado, la autoestima de una persona necesita ser “alimentada” de forma
externa continuamente para que se desarrolle de forma adecuada desde etapas
infantiles.
Este tipo podría corresponderse con el de autoestima fuerte o elevada, ya que las
personas con ese tipo de autoestima no se ven influidas por lo que ocurra a su
alrededor de forma negativa.
Estas personas también se caracterizan por presentar una alta autoestima pero no
por mantenerla en el tiempo.
Por otro lado, se muestran muy indecisos y temen equivocarse, por lo que siempre
buscarán el apoyo de otra persona. Tampoco luchan por sus puntos de vista ya
que de forma general se valoran de forma negativa.
Podríamos decir que las personas que tienen esta autoestima son aquellas que
prefieren pasar desapercibidas en todo momento y que piensan que no pueden
conseguir nada.
Por otro lado, suelen ser muy sensibles e influenciables y prefieren no enfrentarse
a nadie incluso aunque sepan que la otra persona no lleva la razón.
5-Autoestima inflada
Las personas con este tipo de autoestima se caracterizan por tener una
personalidad fuerte y creerse mejor que las personas que tienen a su alrededor.
Por ello, nunca suelen escuchar ni prestarles atención alguna.
Clasificación de Ross
Según expone Ross una persona puede tener autoestima derrumbada, vulnerable
y fuerte.
1- Autoestima derrumbada o baja
Las personas que la tienen no se suelen apreciar a sí mismas, lo que les lleva a
no sentirse bien en su vida.
Esto les hace ser excesivamente sensibles a lo que los demás puedan decir de
ellas, de forma que si es negativo le dañará y si es positivo, hará que su
autoestima aumente.
Esto le llevará a crear mecanismos de defensa con el fin de evitar este tipo de
situaciones o tener que tomar decisiones, dado que teme equivocarse y hacer las
cosas mal.
Nuestros padres van a ser los encargados de forjar nuestra autoestima desde que
nacemos. Si ellos no lo tienen presente pueden afectar de forma negativa con las
etiquetas o comentarios que nos asignan al dirigirse a nosotros: “eres tonto” o
“eres un niño desobediente” son algunos ejemplos comunes.
Para gozar de una buena autoestima algo muy importante que tiene que existir en
nuestra vida son las metas y objetivos.
El ser aceptado y respetado por las personas que nos rodean también nos ayuda
a desarrollar un tipo de autoestima, en este caso de tipo alto.
Por otro lado, el recibir interés por las personas que te importan también es otro
elemento a tener en cuenta y que ayudará a formar la autoestima.
Quererse
Por ello, tenemos que prestar más atención a aquellos que nos hace especial y
únicos y que además se nos da fenomenal hacer.
La perfección no existe como tal, siempre habrá algo que no sepamos hacer del
todo bien. El ser extremadamente críticos no nos beneficiará y entorpecerá
nuestra autoestima y nuestro amor a nosotros mismos.
Todo el mundo se equivoca y nosotros también nos tenemos que permitir hacerlo,
pues si no nos equivocamos jamás podremos aprender como es debido. Hay que
ver los errores como fuentes de aprendizaje y no como ataques personales.
Metas realistas
Tenemos que ser capaces de ponernos metas que sí son viables y que somos
capaces de cumplir tanto a corto como a largo plazo. Si no se hace de esta forma
sólo nos creará malestar y una vez más no estaremos contentos con nosotros
mismos.
Sentirse orgulloso
Hay que sentirse orgulloso de lo que somos y hemos conseguido en nuestra vida
porque ha sido fruto de nuestro esfuerzo y dedicación única y exclusivamente.
De forma general existen tres tipos de autoestima que a su vez pueden tener
diferentes subtipos. Por un lado, nos encontramos la autoestima alta que se divide
en alta y estable y alta e inestable. Por otro lado, tenemos la autoestima media y la
baja. Ésta última y al igual que la alta, se puede dividir en baja e inestable y en
baja y estable. En algunas clasificaciones también se incorpora la autoestima de
tipo inflada.
Referencias
Ellis, Albert (2005) The Myth of Self-esteem: how rational emotive behavior therapy
can change your life forever.Prometheus Books.
Fuente: www.lifeder.com