Rivers - Medicina, Magia y Religión
Rivers - Medicina, Magia y Religión
Rivers - Medicina, Magia y Religión
WHR Rivers
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN
Nuestros Clásicos, 1
WHR RIVERS
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Publicaciones URV
El bloque de la colección:
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Xavier Allué (URV) Josep
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Comelles (URV) Susan
DiGiacomo (URV)
Mabel Gracia (URV) Angel
Martínez Hernaez (URV) Enrique
Perdiguero (UMH)
Oriol Romaní (URV)
Imagen de la cubierta: miembros de la expedición al Estrecho de Torres (1898). De pie (de izquierda
a derecha): Rivers, Seligman, Ray y Wilkin. Sentado: Haddon.
capítulo 1 17
capítulo 2 41
capítulo 3 63
capítulo 4 91
capítulo 5 117
1915, cuando el interés por la etnología del Dr. Rivers estaba despertando
profundamente por las controversias sobre los efectos trascendentales de la difusión
cultural en la historia de la civilización, y, en consecuencia, de una nueva
interpretación de los factores psicológicos involucrados en el proceso. En este libro
se expresan los efectos de esta doble estimulación; y es doblemente interesante
porque representa una fase en el desarrollo de las opiniones que fueron modificadas
más tarde, después del 1918, por razones indicadas en su ensayo «The Aims of
Ethnology» a Psychology and Politics. Por esta razón he creído necesario volver a
imprimir (como capítulo
de las Conferencias FitzPatrick, un día me comentó: «En Perry hará unas grandes
generalizaciones y unos grandes avances; mi función es avanzar paso a paso y
consolidar las ganancias ». Quizás, esta apreciación del trabajo es apropiada, o
siquiera excesivamente modesta, un paso más que ha conseguido en este libro.
g. y lliot s MITHA
University College London
1 de enero de 1924
NOTA A LA SEGUNDA EDICIÓN
GES
Noviembre, 1926
1
Medicina, magia y religión son términos más bien abstractos; cada uno denota un
gran grupo de procesos sociales, ya través de ellos la humanidad ha regulado su
comportamiento para con el mundo que le rodea. Para nosotros, estos tres grandes
grupos de procesos no se distinguen claramente el uno del otro. Uno de ellos es en
torno a nuestra vida social, mientras que los otros dos forman categorías sociales
completamente diferentes la una de la otra y tienen muy pocos elementos en
común. Si hacemos un sondeo exhaustivo a la humanidad, veremos que esta
distinción y separación no existe. Hay muchos pueblos que tienen estos tres tipos
de procesos sociales tan relacionados entre sí, que la separación de uno de ellos
del resto es difícil o bien imposible; mientras que hay otros pueblos en que
raramente se pueda decir que existe el proceso social llamado 'medicina',
Métodos de investigación
En cualquier intento de estudiar una institución social, hay tres líneas básicas de
enfoque o de método de estudio. Analizamos la institución históricamente, intentando
aprender cómo se ha ido construyendo a lo largo de los años, cómo se han producido
estos avances aquí y aquellos otros allí; también estudiamos las condiciones sociales
con las que esta institución ha progresado en un lugar determinado, se ha estancado
en otro o, incluso, ha degenerado en un tercero. E intentamos volver a sus orígenes,
aseguramos los pasos con que se ha diferenciado de otras instituciones y ha
alcanzado una existencia independiente.
18 WHR RIVERS
Dentro del ámbito de este libro, sería casi imposible analizar este tema
exhaustivamente. Mi objetivo será más bien considerar las líneas de investigación
con que se estudia esta materia
y, por este motivo, me limitaré lo máximo posible a una parte del mundo: Melanesia
y Nueva Guinea, que han sido el campo de mis investigaciones, con referencias
puntuales a la cultura australiana. Ya ha pasado el tiempo aquel en que la sociología
intentaba entender las instituciones humanas, comparando ejemplos sacados al
azar de cada rincón del mundo. La tendencia actual 1 en la ciencia que se ocupa de
estos temas es limitar las investigaciones a una serie de pueblos cercanos. Si
sacamos conclusiones de estos estudios, entonces podremos empezar a observar si
los podremos aplicar a otras partes del mundo.
Me veo obligado a empezar a definir los tres tipos de procesos sociales que serán el tema de nuestro estudio.
La distinción entre magia y religión es la que, durante mucho tiempo, ha puesto a prueba la ingenuidad de los
estudiosos de la sociedad humana. Para muchos pueblos, incluyendo los que este libro analiza principalmente,
les es muy difícil trazar una línea definida entre las dos, y necesitan un término que las incluya a ambas. A
veces, en inglés, la palabra que se utiliza en este sentido es mágico-religioso, y, como no tenemos uno mejor,
la emplearé ocasionalmente en este libro. El uso de este término implica una determinada actitud hacia el
mundo. Si el tema se estudia desde nuestro punto de vista, esta actitud supone observar los fenómenos que se
tratan con medios sobrenaturales. Subrayo, desde nuestro punto de vista, porque claramente el uso del
término 'sobrenatural' implica la existencia del concepto 'natural', y es simplemente este concepto tal como lo
tenemos, que falta entre los pueblos de los que me ocuparé. La esencia de la medicina, tal como la conocemos
hoy en día, es que se refiere a la enfermedad como un fenómeno sujeto a las leyes naturales, es decir, la
entendemos como si fuera otro ramo de la naturaleza. La distinción entre la actitud del practicante moderno de
la medicina y la actitud mágico-religiosas depende de la diferencia que existe, en cada caso, en el concepto de
enfermedad. Uno de propósitos principales de este libro es el de descubrir la naturaleza del concepto de
enfermedad entre aquellos que no distinguen la medicina de la magia y la religión. que falta entre los pueblos
de los que me ocuparé. La esencia de la medicina, tal como la conocemos hoy en día, es que se refiere a la
enfermedad como un fenómeno sujeto a las leyes naturales, es decir, la entendemos como si fuera otro ramo
mágico-religiosas depende de la diferencia que existe, en cada caso, en el concepto de enfermedad. Uno de
propósitos principales de este libro es el de descubrir la naturaleza del concepto de enfermedad entre aquellos
que no distinguen la medicina de la magia y la religión. que falta entre los pueblos de los que me ocuparé. La
esencia de la medicina, tal como la conocemos hoy en día, es que se refiere a la enfermedad como un
fenómeno sujeto a las leyes naturales, es decir, la entendemos como si fuera otro ramo de la naturaleza. La
distinción entre la actitud del practicante moderno de la medicina y la actitud mágico-religiosas depende de la diferencia que existe,
Una manera de acercarse al problema es indagar hasta qué punto diferentes grupos de
humanos han apartado determinados miembros de la comunidad para tratar la
morbidez. Cuando tenemos indicios de esta división y especialización de funciones
sociales, al mismo tiempo debemos tener indicios precisos que aquellos que han
alcanzado esta función de especialización también han llegado a un estado de
pensamiento en el que separan la morbidez de otros fenómenos naturales . Aquí,
debemos considerar un punto de la nomenclatura. Si tratamos el tema de la medicina
desde un punto de vista comparativo, y entre personas de cultura rudimentaria, nos
encontramos con una dificultad que
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 21
surge de la riqueza de la lengua inglesa con respecto a las palabras por parte de los
practicantes del arte curativo. En este libro, cuando tengo que hablar de los miembros
de la comunidad que se ocupan de tratar con las enfermedades, como los tengo que
llamar? 'Doctors', 'médicos' o 'chamanes'? 'Chamán' parece el más apropiado, ya que
es un término que no se utiliza entre nuestros practicantes, y no tiene connotaciones
derivadas de nuestra civilización. Sin embargo, este término tiene una desventaja,
porque se utiliza frecuentemente en la literatura antropológica para referirse a los
brujos y los comerciantes de diversas formas de magia, que no deben tener contacto
con la morbidez y, evidentemente, no ejercen de actividades terapéuticas. Por lo tanto,
propongo utilizar el viejo palabra 'curandero'. Cuando hablo de un curandero me refiero
a un miembro de la sociedad, que tiene como función especifica la de curar
enfermedades. Puede que tenga otras funciones, como la formación de la lluvia, el
fomento de la vegetación
un concepto que puede ser expresado por una fórmula que nosotros llamamos
'definición'. Un concepto de este tipo es el resultado de un proceso muy avanzado de
generalización y de abstracción, y todos sabemos que es muy difícil enmarcar una
definición así, incluso con el amplio sistema de conocimiento exacto que tenemos. Es
evidente que cuando nos referimos al concepto de enfermedad para un pueblo como los
melanesios, no hablamos de una definición exacta sino más o menos de un sistema
indefinido de ideas, que a pesar de no ser formulado claramente por un grupo de
individuos, se relaciona con su comportamiento
- es decir, las reacciones hacia las características del entorno que hemos clasificado
conjuntamente con la categoría de enfermedad.
categoría todavía existe en las 'manos de Dios' de nuestras estatuas y en los rituales
orales de nuestra religión, pero ha dejado de participar en nuestra medicina ortodoxa,
aunque todavía forma parte del comportamiento popular para con la enfermedad. En
el arte profesional de la medicina y en la práctica de la mayoría del laicado, la actitud
hacia la enfermedad se dirige por la creencia de que se produce por causas naturales,
es decir, por un conjunto de creencias por las que la enfermedad se forma como
resultado inevitable de los cambios de nuestro medio ambiente, totalmente
independiente del medio humano o sobrenatural.
Del mismo modo, la muerte o las lesiones durante una batalla no son atribuidas
a la destreza superior del enemigo o al fracaso de la defensa, sino que se cree que un
brujo ha conducido el misil del salteador, ha interferido en los movimientos defensivos
de la víctima o en la integridad de sus armas. El ejemplo de la mordedura de una
serpiente no se atribuye al acto natural de un animal venenoso -tal como lo
pensaríamos nosotros-, sino que se cree que un brujo ha puesto la serpiente en el
camino de la víctima, que el animal ha sido dotado
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 25
de poderes especiales por el brujo, o incluso se sostiene que el animal que ha mordido
la víctima es el brujo en forma de serpiente.
Los que creen que la categoría principal de la causa de la enfermedad es
mediante humano, tienen una creencia firmemente arraigada a este tipo de
producción, no sólo donde la causa sería contrario misteriosa o desconocida, sino
también en aquellos casos donde la causa parecería pertenecer al ámbito que
llamamos 'natural', incluso para la mente más inexperta de nuestra comunidad.
Además, nos damos cuenta de que las ideas que tienen que ver con la causa de la
enfermedad no son creencias vacías desprovistas de consecuencias prácticas,
sino que actúan como motivos de los procesos de tratamiento en caso de lesión o
por actos de venganza, si el proceso mágico termina en la muerte de la víctima. Si
tuviéramos que definir la magia como la acción exclusiva que se identifica con los
seres humanos, esta parte del tema pronto se habría acabado.
por los que el sanador / a llega a su objetivo. Pocas veces los agricultores lo
constatan, y muy a menudo están satisfechos si basan sus opiniones en
deducciones contaminadas por ideas derivadas de su esfera de conocimiento e
interés.
Mi opinión -ya que no es más que una opinión- es que el conocimiento concreto
de la curanderas aumenta en diferentes partes del mundo y, por tanto,
encontraremos que el elemento religioso de los rituales médicos ha sido
desestimado o, incluso, ignorado allí donde existe. Sin embargo, en cualquier
momento de la historia de la ciencia debemos basar nuestros argumentos en los
hechos registrados, y en el informe que facilitaré, mi objetivo es el de ilustrar las
dificultades y las incertidumbres del tema, más que presentar cualquier conclusión
definitiva.
Los ejemplos que analizo en este capítulo son aquellos en los que se cree que
la enfermedad es debido a la intervención directa de un agente humano, y aquellos
en los que según los indicios disponibles parece que los métodos de diagnóstico y
de tratamiento dependen del poder que se cree implícito en el curandero y sus
rituales, o que se vuelven efectivos a través de la intervención de seres no
humanos, que no necesitan rituales definitivos de propiciación y de súplica por
persuadirlos para la intervención en el proceso curativo. Si consideramos estos
casos, nos será útil distinguir determinados tipos, según la naturaleza de los
procesos para los que se cree que se puede producir la enfermedad. El método de
tratamiento sería más bien similar a una norma como la que debería seguir la
naturaleza de la causa.
Podemos distinguir tres clases principales: (1) aquellas en las que se proyecta
algún objeto mórbido (o sustancia) dentro del cuerpo de la víctima; (2) aquellas en las
que se extrae algo del cuerpo; y (3) aquellas en las que el brujo actúa sobre alguna
parte del cuerpo de la persona o bien sobre algún objeto que ha estado en contacto
con el cuerpo de la persona y, por tanto, se cree que el brujo puede actuar sobre la
persona como un todo. A continuación, analizamos en detalle estas tres clases.
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 27
El tipo de caso en el que se supone que la causa de una enfermedad es una sustancia u
objeto proyectado en el cuerpo de la víctima está dividido en dos grupos: si el objeto
mórbido ha encontrado su camino dentro del cuerpo de la víctima directamente por medio
humano o por la acción de algún medio no humano. Ambos casos son bastante comunes
en Australia, donde se cree que los objetos materiales como la piedra, los cristales, los
fragmento de hueso o las hojas son proyectados dentro de un cuerpo, en algunos casos
por brujos o en otros por seres espirituales, que o castigan la intrusión en sus madrigueras
sagrados u otras ofensas. La enfermedad también se produce así entre los Massa de Nueva
Guinea.
pasará en breve la persona a quien se quiere hacer daño. El principio mágico pasará del haz en
el cuerpo de la víctima.
Así, en el caso de una enfermedad causada por la introducción de objetos o
esencias mórbidas dentro del cuerpo del paciente, el tratamiento será desarrollado
desde la etiología, con el objetivo de extraer el objeto o la esencia del cuerpo, y hacer
desaparecer la causa de la enfermedad. Para realizar este propósito no siempre es
necesario o incluso normal descubrir, el agente por el cual los objetos han sido
introducidos. En algunas comunidades donde se atribuye la enfermedad a esta causa,
hay hombres y mujeres que creen tener el poder de extraer objetos, normalmente
chupando alguna parte del cuerpo de la persona; y después enseña una piedra, un
cristal u otro objeto al paciente como resultado del proceso. Porque en muchos de estos
ejemplos, la enfermedad la ha producido una sugestión, activada por el conocimiento de
algún tipo de ofensa causada a una persona que se cree que tiene el poder de producir
así la enfermedad; la visión del objeto que se dice que se ha extraído, provoca un efecto
curativo y hace desaparecer la sugestión. En algunos casos, especialmente aquellos en
los que la sustancia es de tipo inmaterial, es necesario descubrir el único agente que
puede extraer el que se ha implantado en el cuerpo y, para descubrir quién ha producido
la enfermedad, se utiliza un método de adivinación.
El segundo tipo de producción de una enfermedad es aquel en el que se cree que algo
es abstraída del cuerpo. Encontramos ejemplos en Australia, donde la abstracción de la
grasa del riñón o más concretamente de la grasa del omento, es una de las creencias
más extendidas. Por lo que sabemos, en Nueva Guinea y Melanesia esta creencia no
existe; pero en muchas partes de estas regiones se cree en la causa de las
enfermedades por medio de la abstracción del alma o de alguna parte de esta. Por lo
que sabemos, el ejemplo melanesio de este proceso en todos los casos es debido a
agentes espirituales.
Así, en las islas Banks, un espíritu llamado quiero puede tomar la Atai, es decir,
el alma de un hombre. El tratamiento consiste en la recuperación del alma a través
de un ser llamado gismana, de quien lo Atai abandona su cuerpo buscando el alma
del paciente.
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 29
En la isla del duque de York, situada entre la punta norte de Nueva Bretaña y
el extremo sur de Nueva Irlanda, este tratamiento se desarrolla de la siguiente
manera: el curandero unta un poco de lima sobre una hoja del árbol drago , lo
envuelve todo en una hoja de otro tipo, y coloca la envoltura en una hoguera hasta
que queda casi carbonizado. Entonces, el paciente se coloca de pie con los brazos
alzados, y el curandero le pasa el paquete caliente alrededor del cuerpo, con
movimientos similares a las curvas del cuerpo de una serpiente, mientras que el
paciente pica pies en el suelo como si se quitara de encima la influencia del kaia. Después,
el curandero abre el paquete y extrae una pizca de lima, sobre el que dice el
conjuro siguiente:
«Lima del exorcismo, hago desaparecer el pop; abolir la serpiente teo; hago desaparecer el espíritu
de la Ingiet ( una sociedad secreta); abolir la serpiente balivo;
hago desaparecer el pitón; abolir el perro kaia ( un tipo especial de perro, distinto de los que existen
en la Nueva Bretaña, que pertenece a la familia del kaia.
Los otros animales llamados a la fórmula también son familiares del kaia) ».
«Lima del exorcismo. Abolir el fluido viscoso. Hago desaparecer la enredadera Kete; abolir el
To PILANS; hago desaparecer el To WuwuTawur; abolir el Tumbalá. Los hemos hundido
profundamente en el fondo del mar. El vapor se levantará para mantenerlos lejos; el nubes
alzarán para mantenerlos
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lejos; la noche debe reinar para mantenerlos lejos; la oscuridad debe reinar para mantenerlos lejos;
ellos deben dirigirse a las profundidades del mar ».
Esta es una traducción literal del original. A continuación, el padre Meier nos
da la expresión de su significado completo:
«Esta es la lima del exorcismo, con lo alejo el pop, los diferentes tipos de serpientes, el espíritu de
la Ingi y el perro kaia. Esta es la lima, con lo alejo la viscosidad pegajosa del estanque kaia, la
enredadera llamada Kete, y los kaia llamados To pilares, To Wuwu-Tawur y Tumbalá. Los he
hundido y ahora se encuentran por debajo de las grandes profundidades del mar. Un vapor
denso, unas nubes impenetrables, la noche oscura y la oscuridad negra los rodeará y los
bloqueará el camino hacia el mundo superior, por lo que se quedarán eternamente en el infinito
abismo del mar ».
«Coco del exorcismo. Abolir la viscosidad pegajosa del kaia; hago desaparecer la viscosidad pegajosa
del cangrejo; abolía todos los estanques de viscosidad pegajosa amarilla; fuera cada enjambre de
serpientes teo; fuera la saliva de la serpiente teo;
fuera el To Wuwu-Tawur; fuera la vitalidad de la enredadera Kete; fuera todas las plantas
trepadoras alai-Puka; fuera todas las aguas rojas y marrones (aguas que contienen alga roja) ».
«Hago desaparecer todas las aguas del kaia; fuera todos los pulpos; fuera toda la sangre de la serpiente
árbol ».
"Abolir todos los vientres hinchados; hago desaparecer todas las hierbas y arbustos
secados; iré a buscar su alma otra vez en el hoyo del kaia ». (Se dice que el kaia habita dentro de
los hoyos, en las montañas).
relacionadas con la magia simpática, que establece una conexión cercana con
nuestra segunda categoría, en la que la enfermedad se produce por la extracción
de algo del cuerpo. Según Keysser, los
Kai creen en una sustancia del alma que no sólo impregna todas las partes del
cuerpo, sino que también extiende su presencia en todo lo que haya sido con
contacto con aquel cuerpo. Cuando un brujo se asegura una parte del cuerpo de la
víctima candidata, o bien un objeto que ha estado en contacto con su cuerpo, se
cree que él está asegurando una parte del alma de esta persona; y es a través de
la acción de los procesos mágicos sobre esta parte aislada del alma que los
rituales del brujo hacen efecto. A menudo varios brujos trabajan juntos, cada uno
de ellos realizan diferentes rituales que a continuación describiré, primero de
manera individual y luego de manera colectiva.
De este modo, un brujo que asegura parte de la sustancia del alma de alguien
a quien desea hacerle daño, se traslada en una caseta solitaria situada en un lugar
que tiene la fama de ser el escondite de un fantasma o de otro ser espiritual, así
que todo el mundo lo evita, excepto aquellos que han experimentado una iniciación
especial en este tipo de magia, o bien han adquirido unos conocimientos que, de
alguna manera, les permite visitar el lugar con total impunidad. A menudo, algunos
brujos actúan juntos, y cada uno de ellos realiza los ritos que describiré
inicialmente uno por uno y, después, unitariamente.
Tan pronto como sea posible, el brujo envuelve el GA en una hoja de las que
gustan a las orugas, con la idea de que mientras las orugas se coman la hoja, los
gusanos hagan lo mismo con el cuerpo de la víctima. Una vez envuelto en la hoja,
el GA se pone en una pequeña caña de bambú, que se ha de haber cosechado en
un lugar habitado por fantasmas o espíritus. Se añaden fragmentos de la corteza de
algunos árboles en el paquete; algunos se añaden para que éste tenga un peso
concreto, ya que es con el peso del paquete que se puede juzgar si la sustancia del
alma está presente o ha desaparecido. Otro árbol, cuya corteza se añade, tiene un
tronco muy grueso, y se utiliza con la esperanza de que el cuerpo de la víctima se
hinche; mientras que la corteza de los árboles se añade por su olor maligno. La
caña de bambú y la corteza se envuelven dentro de otra hoja y se atan con una
planta trepadora que se marchita muy rápidamente; de este modo se indica la
rápida consumación y la muerte de la víctima. En este estado, el paquete se
compacta firmemente hasta que hace el tamaño necesario para que pueda encajar
en una pieza de bambú más grande, que también debe provenir de un lugar donde
habite un fantasma o un espíritu. Esta se vuelve a poner en otra pieza de bambú,
que se cierra con la savia espesa de un árbol y se cubre con cáscaras. Así,
mientras se envuelve y se sella el paquete, el brujo invoca la cacatúa blanca:
«Cacatúa, cacatúa, ven y rasga el cuerpo de x; mordéis sus entrañas hasta hacerlas
añicos para que muera ». A continuación, se liga el paquete a una vara, y se le
cantan unas palabras mediante las cuales los espíritus invocan desde el agujero
donde reposan para llevarse el alma de la víctima en la casa de los muertos. El
paquete se envuelve con una enredadera con espinas para atormentar el cuerpo de
la víctima con dolorosas punzadas; posteriormente se pone dentro de una hoja con
el pelo hasta que cause picor e irritación en la piel; y todo el conjunto se envuelve
con una hoja seca del árbol del pan, con la idea de que cuando ésta caiga al suelo,
así lo haga el cuerpo de la víctima, que se secará y caerá a la tumba.
brujo pica el paquete con la palma de la mano, para que los dolorosos golpes
afecten el cuerpo de la víctima. Entonces, el paquete se liga nuevamente a una
planta trepadora, mientras se recita la fórmula: «Caed y podrían sesión como los
pepinillos. Que la víctima desaparezca entre dolores. Que sus extremidades se
retuerzan de dolor. Que todo su cuerpo se retuerza de dolor. Que sus entrañas se
encojan de dolor. Que sus órganos de reproducción se deformen de dolor ». Estos
procedimientos no se realizan de una sola vez, sino que se repiten una y otra vez
durante muchos meses.
Cada dos días el brujo entra en la cabaña solitaria donde guarda el alma
encarcelada y la trata acercándole el paquete a las cenizas del fuego, en cada
ocasión, y esto continúa hasta que la víctima empieza a enfermar, momento en que
los actos entran en una nueva fase. Después de haber sido cubierto de espinas
finas, el paquete se calienta al fuego y se añade la corteza de un árbol cubierta de
tubérculos, de forma que el cuerpo de la víctima se cubra de protuberancias
parecidas. El paquete se humedece con la raíz masticada de una planta de
pimentón picante, porque a la víctima le suba la fiebre. El fuego con el que se
calienta el paquete debe estar hecho sólo con unos determinados tipos de madera
y con una enredadera, la sección de la que se ha de oscurecer cuando se la corta;
con la idea de que la piel de la víctima se oscurezca y su sangre se vuelva negra.
Cada día,
«Águila y halcón, vosotros dos, he aquí su presa. Tome con las garras afiladas. Desgajado su
cuerpo y hacerlo añicos. Entonces, que la corrupción, los gusanos y los escarabajos lo destruyan
totalmente ».
nera similar otro día, lo coloca entre piezas de madera bajo el peso de una piedra,
y lo cubre todo de cenizas.
De vez en cuando, para asegurarse de que el alma todavía está en el
paquete, el brujo en la cabaña a oscuras y escucha. Si siendo un susurro que
proviene del techo, o algún otro sonido, se da por satisfecho porque el alma
todavía está y para que los esfuerzos aún esperan su recompensa. A pesar de ello,
para ayudar a cumplir su propósito, el brujo debe someterse a muchas dificultades
y restricciones. No se debe bañar, ni debe dejar que la lluvia frote su piel. Sólo
puede beber agua de los charcos que hayan sido calentados por el sol, ya que el
agua fresca de un arroyo apaciguaría la fiebre alta de su víctima. Incluso, se podría
considerar insegura el agua pura de cualquier tipo, y sólo puede beber si esta se
ha utilizado para cocinar. No puede comer verduras hervidas, pero debe asar su taro
al fuego. Mientras duren estos actos, es necesario que se abstenga de cualquier
relación sexual y debe evitar comer alimentos de hombres que no se hayan
abstenido.
dolor, suspiran, gimen y emiten fuertes quejas. Sus amigos los visitan, los lamentan
y opinan sobre la gente que los puede haber embrujado. Así, mientras algunos
brujos hacen ver que tienen una enfermedad mortal, otros sacan los paquetes del
fuego y los aprietan con trapos, con la idea de que la víctima sea castigada con una
agonía mortal: que su garganta y su corazón sean comprimidos el uno con el otro; su
respiración, cortada; y que la víctima misma, debido al terror y de la desesperación,
sea arrastrada hacia la muerte. Mientras algunos imitan la muerte de la víctima y
otros hacen el gemido de la muerte, se cortan los paños y cada paquete cae al
suelo. Al mismo tiempo, se tala un árbol de los alrededores que se denomina como
la víctima.
Estos ritos elaborados por los Kai serían considerados por todos los etnólogos y
etnòlogues como un ejemplo de magia, pero tienen algunos rasgos que los acercan
mucho a la religión. En este sentido, las fórmulas no son decisivas, aunque más de
una parece contener un elemento de llamada para con poderes más elevados. Algo
aún más significativo en la actitud religiosa es la ordenanza por la que se establece
que algunos de los objetos que se utilizan en los ritos deben provenir de un lugar
habitado por fantasmas o espíritus. Los métodos de tratamiento parecen ser
puramente mágicos y, si consideramos los ritos como un todo, los tendremos que
observar como mágicos más que como religiosos.
Los ritos de los Kai proporcionan ejemplos característicos de las dos clases
compatibles de magia, conocidas respectivamente como 'magia imitativa o
homeopática', y 'magia contagiosa'. Hasta ahora, el principio que se pensaba que
había detrás de estas formas de magia es de una naturaleza más o menos
misteriosa.
Así, Sir James Frazer remite la creencia en la conexión entre una persona y una
parte separada de su cuerpo, con una relación «que podemos concebir como una
especie de éter invisible, que no es diferente de lo que la ciencia moderna presupone
precisamente por
38 WHR RIVERS
un propósito similar, es decir, para explicar cómo las cosas pueden influir físicamente
las unas a las otras, a través de un espacio que aparentemente está vacío ».
Está claro que Sir James Frazer no pretende que su explicación de la magia
contagiosa sea algo más que una expresión figurativa -en el lenguaje de la ciencia
moderna- los modos de pensamiento que determinan las acciones del hombre
salvaje. Sin embargo, sean cuales sean los equivalentes a los que traducimos su
lenguaje, las ideas que forman la base de la magia contagiosa no tendrán un
carácter abstracto sino místico, que creo contrario a la naturaleza concreta de los
procesos mentales de los pueblos de cultura rudimentaria. A menudo el salvaje
practica ritos de la más alta complejidad, simplemente porque esta línea de
conducta le ha sido prescrita por las tradiciones inmemoriales de la comunidad;
pero allí donde se pueden descubrir los motivos directos de sus acciones,
El interés especial que tiene la mezcla entre medicina y magia que practican los Kai
radica en el carácter concreto y definido de las creencias que hay detrás de estos
ritos tan elaborados. El salvaje tiene pocos conceptos más definidos que el del alma
y el de su existencia después de la muerte. Sólo tenemos que calificar este concepto
con la adición de la creencia de que el alma es divisible, para obtener el principio
subyacente a la magia de los Kai; un principio tan definido como cualquiera de los que
hay detrás de la conducta religiosa del hombre civilizado. La magia contagiosa de los Kai
no se basa en ninguna creencia mística de acción a distancia, sino en la creencia de
que el brujo está en posesión de una parte del alma de otra persona, una parte de la
esencia vital de la persona que se quiere destruir. Se podría considerar que la
conducta del brujo implica una creencia según la cual la acción sobre una parte es
equivalente a la acción sobre el todo, pero es probable que haya una cierta confusión
entre la parte y el todo, o más concretamente, en el caso de los Kai,
entre el alma y la sustancia del alma. El hecho de que esto sea así lo demuestra la
confusión que existe entre el alma y la sustancia del alma que se encuentra en varias
partes de la descripción hecha por Keysser.
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 39
Es posible que el lector se haya dado cuenta de que los procesos de diagnóstico y de
pronóstico no han sido tratados con profundidad. A pesar de que la naturaleza de la
creencia en la causa determina directamente el tipo de tratamiento, normalmente el
descubrimiento de la causa no requiere ningún rito en especial. El paciente o sus
amigos lo deducen inmediatamente de su conocimiento de los actos, que habrían
ofendido un hombre o un espíritu, con la supuesta capacidad de causar una
enfermedad.
Cuando alguien enferma, el paciente puede saber al instante a quien ha ofendido, por
lo que no es necesario ningún proceso de diagnóstico en especial. A menudo, sin
embargo, el paciente o sus amigos recurren a unos hombres en concreto, dueños de un
lugar sagrado llamado tomog
42 WHR RIVERS
Este santuario también era consultado con fines pronósticos, según los cuales
un lagarto sin vida era signo de la muerte del paciente. También se practican otras
formas de adivinación. En la isla Murray y sobre todo en las islas occidentales del
estrecho de Torres, se utilizan las calaveras de los familiares con este fin, y así el
alma a quien pertenecía el cráneo en vida facilita la información deseada en un
sueño.
El culto a los antepasados es aún más claro en Melanesia. En muchas zonas de
esta provincia etnográfica, este culto proporciona un ejemplo de un orden
relativamente elevado, en el que son claramente presentes los elementos de súplica
y de propiciación. También en este caso, se puede observar que la llamada a las
almas de los antepasados se puede realizar con fines diagnósticos, en ritos que de
otro modo tienen un carácter indudablemente mágico.
el espíritu del padre del hombre enfermo hablará con su hijo o su hermano mientras
duerme, y le dirá si el hombre enfermo se podrá rehacer o no. En el último caso, es
posible que este pronóstico adverso no satisfaga la gente; aún así se matará un
segundo cerdo de una especie más valorada que la primera, con la esperanza de
obtener una respuesta más favorable. Asimismo, se ofrece una oración al antepasado
para permitir que el hombre enfermo se esté con los amigos. El único tratamiento
empleado es el de la fricción, pero esto evidentemente es poco importante si lo
comparamos con las estrictas prácticas religiosas de adivinación a partir de los sueños
o la oración, a través de las que la gente intenta descubrir y, si es necesario , trata de
impedir un resultado mortal.
Pienso que es una tema de interés que la ayuda de los poderes sobrehumanos o
divinos se muestre tan relacionada con el pronóstico. Es instructivo el hecho de que este
arte difícil e incierto ponga de relieve, en pueblos como los melanesios, la
interdependencia entre la medicina y la religión, de una manera más clara que cualquier
otro aspecto de su arte de curar.
cialmente el coco y la parra de betel. El tabú, así como el símbolo por el que se le
conoce, se llama Kenjo. El proceso del Kenjo tiene un gran número de variedades,
cada una de ellas es la propiedad de un hombre o de un pequeño grupo de hombres.
El derecho a la práctica se adquiere en parte mediante la compra, en parte mediante
la instrucción de alguien que ya posea este arte. El conocimiento adquirido de esta
manera incluye varios ritos. Uno se lleva a cabo cuando el tabú es impuesto, otro
cuando se elimina, y aún hay otro que permite cosechar frutos de los árboles tabú
para su uso. Además, se aprenden algunos ritos, y con la ayuda de estos se cura
total o parcialmente la enfermedad contraída por quien utiliza un fruto de un árbol
tabú, sin haber realizado los ritos pertinentes al momento de recogerlo. Cada uno de
estos ritos tiene un nombre especial. Salang es lo que se utiliza para el proceso
terapéutico. Salvo expresiones concretas, todos pertenecen al mismo hombre o grupo
de hombres. De este modo, sólo un hombre capaz de imponer o de eliminar el tabú
puede tratar la enfermedad causada por la infracción de este. Además, como
veremos a continuación, hay una estrecha semejanzas entre los ritos relacionados
con el proceso del tabú y aquellos que son más estrictamente médicos. El Sr. Hocart
y yo encontramos casi un centenar de ejemplos de procesos combinados entre un
tabú y la medicina de este tipo, y en registramos más de sesenta. Lo que viene a
continuación es un ejemplo de uno de estos procesos, concretamente el que está
relacionado con el tabú conocido como kirengge, cuya infracción produce epilepsia y
otros ataques convulsivos.
El símbolo del Kenjo es erigido encima o al lado del árbol o de los árboles que
deben ser declarados tabú, y consta de varias plantas que normalmente tienen cuatro
hojas o brotes; de ahí que el cuatro sea el número sagrado de la isla. El símbolo tabú kirengge
también incluye una piedra y un coral, que irritan la piel cuando se tocan, así como la
mariposa tiene como nombre kirengge. El uso extendido de esta palabra para designar
la mariposa y la epilepsia es por semejanzas entre los movimientos del insecto y los de
la enfermedad.
Se ponen las hojas y otros objetos en un palo forzado, por el lado del árbol que
debe ser protegido, con la siguiente fórmula:
«Esto es vuestro, espíritus del Kenjo. Esto es vuestro, cuarteto de mujeres
viejas, cuarteto de mujeres viejas que conoces el Kenjo. Vosotros, cuarteto de
mujeres viejas a Mbakia, sed favorables. Ki
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 45
Por lo tanto, estas palabras indican que se elimina una cierta influencia del
fruto, y tenemos una razón para creer que esta influencia es la del tomate o el
fantasma que supuestamente produce la epilepsia.
Si se quiere eliminar totalmente el tabú del árbol, las hojas y otros objetos que
forman el símbolo del Kenjo deben ser depositados en un lugar poco frecuentado, para
que no haya ningún peligro de que alguien los pise; un acto que se cree que tiene
resultados mortales. cuando el
Kenjo se elimina, se recita la fórmula: «Marchad y vaya vosen al cielo, no permanezcáis
en la tierra, vos, espíritu del Kenjo. Marchad. Refrescarse en el agua fresca. Marchaos,
mirando el Sol; marcháis, mirando el cielo; ascendente y observe el trueno que suena
en el cielo. Volveos-en, por no venir nunca más. Marchad ».
humo de algunas hojas, que aspira mientras el curandero pronuncia por encima su
estas palabras: «Sed favorable, vos, mujer anciana. Vos, nuevo espíritu. Vosotros,
cuarteto de mujeres ancianas ». Entonces se ponen las hojas alrededor del cuello
del paciente, mientras se recitan estas palabras: «Sed favorable, vos. Favoreced
este hombre. Dejar vivir ». A continuación se coloca una cinta alrededor de la
cabeza del paciente, y una banda de hojas a sobre su hombro, y se pronuncian los
siguientes términos: «Sed favorable y deje que cesen los ataques». Después de
esto, el curandero deja el paciente y se va sin mirar atrás. Este tratamiento se
realiza los cuatro últimos días de luna menguante. Se pone en práctica dos días
seguidos; entonces, se deja un día para que el espíritu o los espíritus del
Kenjo trabajen, y, luego, al cuarto día, se reanudan los ritos. La costumbre de reservar
el tercer día para la acción de los poderes divinos es un rasgo normal del proceso Salang
de un Kenjo. Al final de los cuatro meses, se repite el proceso entero.
El elemento religioso
no es un hecho castigado por los compañeros del infractor, sino que el castigo
proviene directamente de poderes más elevados sin ninguna intervención humana.
Los ritos del curandero sólo son el medio con el que se obtiene la ayuda de estos
poderes. Están diseñados para poner fin a la desgracia ocasionada tras la rotura del
tabú, que debe ser considerado un pecado antes de que un crimen. Aunque haya
llamado el agente humano 'curandero', este podría ser considerado tanto o más
adecuadamente como sacerdote, porque tiene el privilegio especial de invocar los
poderes más elevados para dejar sin efecto la pena que el enfermo ha atraído hacia él
mismo con su sacrilegio. Aunque el sacerdote conserva el brazalete entregado como
cuota, se considera que este ha ofrecido a los espíritus ya través de esta actividad se
ha efectuado el cuidado.
Espero tratar este proceso de fusión en otra ocasión. Por ahora, todo lo que
necesito indicar es que los dos elementos de este proceso son de carácter
claramente religioso. Se han unificado dos grupos de creencias relacionadas con la
causa y el tratamiento de las enfermedades, sin destruir modo el carácter religioso
del producto de la fusión. Sin embargo, tenemos ejemplos en la isla de Eddystone
en que un proceso de fusión similar ha dotado de un carácter religioso los procesos
de producción de las enfermedades que, de otro modo, pertenecerían claramente a
la categoría de magia. De este modo, la rotura de un tipo de tabú expone el
transgresor / a la acción de uno de los hombres del grupo llamado
njiama. En algunos de estos casos, la sangre sale a borbotones de la boca del paciente,
que muere al instante, pero en casos más leves se practica un rito de tratamiento que
emula los métodos similares a los de otros ritos curativos relacionados con los tabúes.
Por lo tanto, la naturaleza religiosa del arte médico es tan fuerte en la isla de
Eddystone, que los actos del mismo tipo que la magia de otros lugares se diagnostican y
se tratan con medios que suponen la súplica a los espíritus de los muertos , así como su
propiciación, y son los objetos principales de los ritos religiosos de la gente. Parece
haberse puesto en marcha un proceso de unificación por el que las formas más diversas
de contemplar las enfermedades, unas maneras que pertenecen claramente a
categorías totalmente diferentes en lugares distintos, se han agrupado en torno un
mismo patrón, teniendo en cuenta los diagnósticos y los tratamientos. Hasta cierto punto,
esto mismo es válido en las creencias relacionadas con la causa, donde se mantiene
que la producción de las enfermedades por el hombre no sería efectiva a menos que el
portador / a de la enfermedad se hubiera hecho merecedor / a
50 WHR RIVERS
Ahora he de analizar brevemente aquellos casos en que se cree que las enfermedades
surgen independientemente de alguna acción por parte de los seres humanos o de los
poderes más elevados. Esta creencia existe en muchas partes de Melanesia y de Nueva
Guinea y probablemente es universal, aunque ha atraído poco la atención, aparte de las
costumbres más chocantes que muestran la relación entre el arte de curar y la magia y la
medicina.
domésticos. De este modo, el profesor Seligman nos dice que entre los Sinaugolo de
Nueva Guinea sólo se consulta un brujo cuando el tratamiento ordinario ha sido
inútil.
En algunos casos las creencias que sustentan el tratamiento de ejemplos graves
de una enfermedad, también tienen que ver con el tratamiento de estas enfermedades
menores. Así, en la isla de Eddystone, algunas dolencias que supuestamente
provienen 'de ellas mismas' aún se tratan con medidas similares a las que se utilizan
en enfermedades atribuidas a la infracción de un tabú. Un tratamiento así se
acompaña de una crema como ofrenda a los seres espirituales, la ofrenda
característica de los ritos curativos de un tabú.
de curar los pueblos salvajes. Incluso cuando se decide que ha intervenido algún
factor humano o espiritual, aunque puede quedar un amplio ámbito de variación en el
tratamiento que se adopte. Si podemos juzgar, por la siguiente experiencia en la isla
de Eddystone, pueblos como los melanesios que depositan su fe en muchos doctores
y no se contentan sólo con un físico o con un remedio.
Un hombre que nos había hecho de ayudante en la isla cayó enfermo con una
neumonía apical. Después de haber estado enfermo varios días, sentí que quería
que lo tratara yo y atendí durante el resto de la enfermedad. A él ya la estaba
visitando un brujo de la isla de renombre kundakolo, a quien le debo gran parte del
conocimiento de la medicina de Eddystone. En una de mis últimas visitas otro de
nuestros ayudantes, también un brujo de renombre que vino conmigo, llevó a cabo
un tratamiento tan pronto como yo terminé mi entrevista, que consistía en friegas,
escupitajos y oraciones. Su tratamiento estaba diseñado para remediar los
sudores, que en aquellos momentos eran la causa principal de las quejas. Yo ya
sabía que tenía dos rivales en mi arte, durante mis cuidados al paciente, pero no
fue hasta después de que él se hubiera recuperado que supimos que haber al
menos una docena. El primer diagnóstico fue que el paciente sufría de brujería o mba,
y se llamaron sucesivamente tres brujos diferentes para que realizaran tres tipos de
tratamientos distintos para su condición. Entonces, yo empecé mis visitas, pero al
mismo tiempo avisaron dos practicantes más que aplicaron otras dos 'curas' para la
brujería. El diagnóstico de la mba
El alto nivel de especialización de la función médica que existe en la isla de Eddystone nos puede servir como
introducción de un tema que hasta ahora he dejado de lado. En el primer capítulo mencioné que uno de los
medios con los que se puede distinguir la medicina de la magia y la religión es la cuestión de la diferencia entre
la habilidad curadora del brujo y del sacerdote. En el área que estudio en estas conferencias especialmente,
debo decir de una vez que hay muy pocos indicios de esta diferenciación. En Australia, Nueva Guinea y
Melanesia puede parecer que el remedios más simples, de los que hablaré ahora mismo, se pueden utilizar
para cualquiera de ellos. Al respecto no hay diferencia entre el curandero y el grupo general del pueblo.
Aquellos que combinan la práctica de la medicina con la de los ritos mágicos o religiosos adquieren su artes
con un proceso especial, ya sea por iniciación o por instrucción. A Melanesia siempre se ha de adquirir este
conocimiento. La instrucción más completa en cualquier rama del arte medicomàgic o medicoreligiós no será
disponible para un alumno sin que éste le dé dinero a su instructor. Sin embargo, esta instrucción y adquisición
casi siempre incluye tanto la producción como la cura de las enfermedades, en los casos en que la enfermedad
se atribuye a factores humanos, y el conocimiento para representar los ritos que no sean de una naturaleza
curativa en que la medicina se alía con la religión. La instrucción más completa en cualquier rama del arte
medicomàgic o medicoreligiós no será disponible para un alumno sin que éste le dé dinero a su instructor. Sin
embargo, esta instrucción y adquisición casi siempre incluye tanto la producción como la cura de las
enfermedades, en los casos en que la enfermedad se atribuye a factores humanos, y el conocimiento para
representar los ritos que no sean de una naturaleza curativa en que la medicina se alía con la religión. La
instrucción más completa en cualquier rama del arte medicomàgic o medicoreligiós no será disponible para un
alumno sin que éste le dé dinero a su instructor. Sin embargo, esta instrucción y adquisición casi siempre
incluye tanto la producción como la cura de las enfermedades, en los casos en que la enfermedad se atribuye
a factores humanos, y el conocimiento para representar los ritos que no sean de una naturaleza curativa en que la medicina se alía
una reputación especial para el éxito en la aplicación de remedios. con los Tinons
Salang podemos ver claramente la diferencia entre un curandero y un sacerdote.
Sería interesante mencionar algunos de los condicionantes que parecen haber
llevado hacia esta distinción. Uno de ellos es que el Tinons Salang, que desea que
su tratamiento tenga éxito, debería utilizar un tipo de instrumento especial hecho de
una concha designada como rikerike, con la que se pueden cortar y raspar las
raíces o los otros ingredientes de su farmacopea. Quien pisa este instrumento enoja
el tomate o el antepasado fantasma del que derivan los poderes del curandero, y el
fantasma muestra su enojo para con el castigo de la enfermedad. Debido al peligro
que se provoca, los hombres que han comprado el conocimiento de un tabú en
algunos casos rechazarán utilizar el conocimiento del tra tamiento asociado, y
dejarán esta parte del arte a otros que quieran correr el riesgo. Otro elemento
disuasorio es la necesidad de abstinencia sexual por parte de un curandero,
especialmente en ritos como la cura de úlceras.
Hay que decir que el fracaso generalizado para distinguir entre un curandero y
un brujo o sacerdote no es por ningún fracaso en la especialización de igual función
médica. Es más, el problema es
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 55
la inversa. Pueblos como los papúes o los melanesios han aportado, en algunos
aspectos, una diferenciación de la función médica hacia un tono mucho más elevado,
al que incluso hemos llegado nosotros en nuestro arte médico más especializado. En
la isla de Eddystone el tratamiento de diferentes enfermedades es tan especializado
que alguien tratará el reumatismo, alguien la fiebre, un tercero la epilepsia, y un cuarto
la locura; aunque en cada caso el cuidado de la enfermedad está íntimamente
asociada a ciertas funciones religiosas. Un ejemplo de especialización similar al
estrecho de Torres ya está en este escrito, y todavía se puede encontrar otro ejemplo
en la isla de Tami, en el noreste de la costa de Nueva Guinea, donde hay una persona
que sabe cómo se cura el dolor del pecho, otro el dolor en el abdomen, un tercero el
reumatismo, y un cuarto el resfriado. Por lo tanto, la especialización está presente en
un nivel preeminente; pero esta especialización ha cogido una dirección que
probablemente ha sido antagónica al desarrollo de nuestra diferenciación de la función
social que, después de siglos de progreso, ha hecho de la medicina un ámbito de la
vida social totalmente independiente.
enfermedades epidémicas
Quedan por considerar algunos puntos especiales. Hasta ahora he tratado la enfermedad
como si fuera una condición que sólo afecta a los individuos, y no he dicho nada de los
casos de las enfermedades que afectan simultáneamente una población entera o una gran
proporción de la población. Ahora debemos prestar atención a la actitud de los pueblos
que estudiamos hacia las enfermedades epidémicas.
prados. Se le pagó al brujo, que envió cocos jóvenes en los que había impartido
poderes ( manda), y la leche de estos cocos se esparció por las puertas de cada
afectado, porque la epidemia se contuviera.
Cuando una epidemia atribuida al Ave visita la isla, la gente acude a quien conoce
los ritos apropiados. Este hombre, con algunos compañeros, visita un pueblo
abandonado. Tras pronunciar los nombres de algunos fantasmas, probablemente los
de sus predecesores que conocían los ritos, dice: «Tú, a la raíz del cielo, baja y vete.
Hay un final para los hombres; hay un final para los jefes; y uno para las mujeres de
los jefes; y uno para los hijos de los jefes. Ven y vete, tú, etc. ». El orador termina con
una exclamación como un ladrido, mientras todos los presentes llaman. Entonces se
distribuye la raíz de cúrcuma y todos la mastican y la escupen sobre el camino, tal y
como hacia la orilla, haciendo todo el ruido posible, con la idea de llevarse el Ave. Cuando
llegan a la orilla, el líder de la ceremonia dobla una hoja grande con forma de canoa.
En esta imitación de barco pone las cenizas, alguna de las hojas utilizadas para
construir los techos de las casas, y cinco conchas pequeñas de ornamento llamadas ovalado.
Entonces pronuncia las siguientes palabras: «Tú! Vete a Ysabel; vete a Choiseul
(islas vecinas). No te quedes en Mandegusu ». Entonces se lleva la canoa en el mar y
se pone sobre las olas, para que se vaya de la isla. Se cree que el Ave vuelve al lugar
de donde vino.
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 57
los ritos kaia de la península de Gazelle y de la isla del Duque de York, que
describí en el primer capítulo, muestran un ejemplo de un proceso similar. Se cree
que el ser medio serpiente, medio humano, llamado kaia es capaz de extraer el alma
de cualquier persona que tome fruta de los árboles de la barriada donde él vive, y
las personas de otras barriadas son especialmente propensas a sufrir su acción. Es
probable que la creencia en la eficacia de este ser sea fomentada por los
habitantes del barrio, como medio de protección para su propiedad ante la gente de
otros barrios. Sería un gran error observar las instituciones de las islas de Salomón
y Nueva Bretaña como invenciones de la gente para el interés de la propiedad
privada. Sin embargo, la creencia en la producción de enfermedades como castigo
por robo proporciona un motivo que tiende a perpetrar las ideas y las prácticas que
llevan la medicina hacia una relación muy íntima con la religión. Aquí sólo tenemos
uno de los innumerables ejemplos que muestran que, entre los pueblos de culturas
rudimentarias, la distinción entre una categoría social y otra es mucho más difícil
que en nuestra cultura. El carácter religioso del arte médico entre estos pueblos es
sólo un ejemplo de la forma en que la religión y la actitud religiosa invaden cada
una de
58 WHR RIVERS
Otro tema bien ilustrado por los actos descritos en este libro es la evidencia de la
parte que juega la sugestión en la producción y el cuidado de las enfermedades en los
pueblos como los papúes y los melanesios. No podemos tener ninguna duda de que
algunos procesos como los que he expuesto aquí son eficaces. Las personas que han
ofendido a alguien de quien se cree que tiene poderes mágicos, enferman, e incluso
se mueren, como resultado directo de su creencia; y si el proceso no ha ido tan lejos
se curan, si se pueden convencer de que el hechizo se ha expulsado. Del mismo
modo, alguien que haya invadido el lugar frecuentado por un fantasma o un espíritu,
posiblemente sufrirá una enfermedad mortal, porque creerá que ha perdido el alma; y
se curará después de la representación de los ritos que se atribuyen el poder de
restaurar el alma perdida en su cuerpo. Sin duda, en este caso, este factor real de
sugestión se mezcla con el fraude, especialmente por parte de aquellos a los que se
asigna la producción y la cura de enfermedades por su conocimiento especial. Si
alguien se pone enfermo, con síntomas que se atribuyen por creencia popular a un
brujo, o algún espíritu cuya influencia se cree que está por debajo de los poderes de
un sacerdote, el brujo o sacerdote rápidamente estará preparado para aceptar el rol
que le toca para ganar dinero
Sin embargo, la lección principal que nos transmiten los hechos expuestos, es de
una importancia que llega más lejos de los límites de nuestro tema en especial.
Esta lección es la racionalidad del arte de curar en pueblos como los papúes y los
melanesios. Las prácticas de estos pueblos en relación con las enfermedades no
son una miscelánea de costumbres desconectados y sin significado, sino que están
inspiradas en ideas definidas respecto a la causa de las enfermedades. Sus modos
de tratamiento siguen directamente sus ideas, por lo que respecta a la etiología y la
patología. Desde nuestro punto de mira moderno, podemos darnos cuenta de que
estas ideas son incorrectas. Pero el punto importante es que, aunque las creencias
de los papúes y los melanesios sean incorrectos en cuanto a la causa de las
enfermedades,
una vez se dan por hechas, el cuerpo de la práctica médica las sigue con una
consistencia lógica, que nosotros tardaríamos a emular en nuestra búsqueda de
una medicina fundada en las ciencias de la fisiología y la psicología.
Sin embargo, se debe señalar que los ejemplos del arte de curar representados
en este libro no siempre han formado parte de un sistema estrictamente lógico y
consistente. Un caso proveniente de la isla de Eddystone ejemplifica como la causa
de las enfermedades por agentes como mateana y Sea, al igual que para el mal de
ojo y para la brujería, se han convertido en subordinados al culto a los antepasados
en que se basa el Kenjo. La infinidad de creencias conectadas con el ser llamado Ave da
otro ejemplo de la misma isla. Como ejemplo de Nueva Guinea podemos mencionar
el uso que hace el
kai de diferentes remedios, como sangrar y masajear, que por lo que sabemos no
provienen directamente de sus ideas respecto
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 61
La evolución independiente
Si hubiera escrito sobre esto hace unos años, mi manera de tratar el tema habría
sido muy simple. En aquel tiempo, al igual que la mayoría de estudiantes de la
sociedad humana, creía que después de una amplia dispersión sobre la Tierra,
ocurrida en una época tan distante como para poner su estudio casi fuera del
alcance de la ciencia práctica , la raza humana había desarrollado sus costumbres
e instituciones con un alto nivel de independencia
Además, cuando he comparado las ideas patológicas con los diagnósticos y las
prácticas terapéuticas de diferentes pueblos, debería haber sostenido cualquier
parecido que parezca ser el resultado natural de la unidad de acción de la mente
humana. Las enfermedades de una parte del mundo son como las de otra parte, lo
que yo debería haber observado como el hecho más natural del mundo, como si la
raza humana hubiera evolucionado en creencias similares respecto a la naturaleza
de las enfermedades y las prácticas similares con que se modifican o neutralizan sus
efectos.
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 65
Debería haber explicado las similitudes entre las creencias y las prácticas de
la medicina y las de la magia y la religión, de un modo similar. Habría tenido que
argumentar que, si la magia y la religión han salido de las creencias y los
sentimientos de la raza humana hacia los misterios de la naturaleza o para con su
propio nacimiento, vida y muerte, o ambos juntos, estos misterios son de carácter
similar en todas partes. Debería haber visto natural que la mente humana que está
en formación debería haber reaccionado de maneras tan parecidos como para
haber producido el culto al Sol y en otros cuerpos celestes, a la vegetación y otras
fuerzas naturales, junto con el culto a los muertos, que se pueden encontrar en
tantos lugares de la Tierra. No me habría sorprendido que un corpus de
costumbres y creencias que englobara la reacción de la raza humana hacia sus
semejantes de la naturaleza, o de su propia vida, estuviera tan conectado con el
que engloba su actitud hacia las enfermedades. Si entonces, como ahora, he dado
un nivel de importancia preeminente al gran misterio de la muerte, como el motivo
más importante en el desarrollo de la religiosidad de la raza humana, la conexión
de la religión con el arte diseñado para encontrarse con la enfermedad, la
precursora de la muerte, debería haber parecido especialmente natural. Me hubiera
quedado a la extensa parte donde las ideas que están conectadas con la muerte y
con la vida después de la muerte, llevan al desarrollo religioso de la raza humana,
En este breve esbozo de lo que habría dicho si hubiera escrito esto hace varios
años, hay muchas cosas que sigo pensando que son ciertas. Si repasamos la
historia de la humanidad, veremos que ha actuado un proceso de especialización de
la función social, sin lugar a dudas, y yo debería haber considerado como
estrictamente cierta la distinción creciente entre la medicina, la magia y la religión,
como ejemplo de este proceso de especialización.
ridad. El error radica en una capitulación demasiado simple de un proceso que realmente ha
sido extremadamente complejo.
3 r Ivers, WH «The Disappearance of Useful Artes », Festschrift tillegnad Edvard Westermarck. Helsingfors:
1912, p. 109.
4 y lliot s MITHA, G. «Ancient Mariners», Report and Proceedings of the Belfast Natural History and
En vez que la cultura humana nos obsequie con un proceso simple de evolución
directa, tenemos un proceso muy complejo de interacción entre las personas y sus
culturas, produciendo productos mezclados, en el caso que nos ocupa, mezclas de
medicina con magia y religión que necesitan nuevos métodos de investigación y
largos años de estudios antes de que se pueda reconocer la naturaleza exacta del
proceso, una verdad total en lugar de parcial.
a ustrÀlia
Australia se caracteriza por la gran influencia del agente humano en las creencias
sobre la producción de la enfermedad. De acuerdo con las visiones imperantes, se
considera que este continente es la residencia especial de la magia, y no hay
ninguna duda de que la actitud australiana hacia la enfermedad está muy ligada a
las prácticas similares que normalmente se llaman 'magia' .
P olinèsia
Mientras que Australia, situada a un lado de Melanesia, nos ofrece en cualquier nivel
y desde diferentes puntos de vista un ejemplo de la relación entre la medicina y la
magia; Polinesia, situada en el al-
70 WHR RIVERS
tro lado, nos ofrece un ejemplo sorprendente de la íntima relación entre la medicina y la
religión. En algunas partes de la Polinesia, la magia parece ausente y, exceptuando
algunos remedios simples, el cuidado de la enfermedad se obtiene mediante una llamada
directa a los poderes superiores y, especialmente, a aquellos que se llaman Atua, que
derivan seguramente de fantasmas de antepasados muertos.
1904, p. 2.
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 71
de Polinesia. Unos remedios internos como los que se utilizaban en Tonga habían derivado
de las Fiji 8.
La práctica médica de las islas hawaianas, aunque está íntimamente ligada a la
religión, contiene más elementos de carácter médico. David Malo 9, una autoridad
nativa, dice que el tratamiento médico de los enfermos era un asunto que pertenecía
al culto de los dioses. El tratamiento era aplicado por un Kahuna o cura, e incluía la
administración de un número de hierbas, así como el uso del baño de vapor. Sin
embargo, el carácter religioso del tratamiento se muestra con las ofrendas a los
dioses en diferentes niveles, y cuando el paciente era un líder no se le administraba
nunca un medicamento sin una oración.
y ndonèsia
I, p. 315.
72 WHR RIVERS
Una de las maneras en que se cree que el agente humano produce una
enfermedad es actuando en partes separadas del cuerpo, la denominada magia 'por
sugestión'; y aunque los indicios no son concluyentes, parecería que esta forma de
magia se apoya en la creencia de un alma-sustancia divisible similar a la de los Kai de
Nueva Guinea 11.
A Melanesia y en Australia a veces es difícil estar seguro de si los efectos perjudiciales
que siguen los ritos de un brujo no dependen de la administración de venenos. En
Indonesia el uso de los venenos es un hecho, sin duda, y el ejemplo más sorprendente
es la producción de la enfermedad intestinal prolongada, que a menudo acaba con la
muerte, causada por la administración de bambú en polvo. Incluso cuando los efectos
mórbidos pueden ser atribuidos con toda seguridad al veneno, la expresión de un
hechizo y otras acciones de la envenena / a demuestran que el proceso no está muy
lejos de la magia, y el mismo agente falla probablemente cuando distingue entre las
medidas en que él administra algunos venenos reales, y aquellas en las que los efectos
mórbidos se deben totalmente a la creencia de la víctima en los poderes de la magia
de alguien a quien él ha ofendido.
Una característica importante de los ritos llevados a cabo por un cura, cuando
trata una enfermedad en la isla de Nias 12, es que crea imágenes de madera llamadas adu,
que probablemente representan los fantasmas de un antepasado 13. Se hacen
diferentes clases de adu,
que tienen nombres especiales, para diferentes tipos de enfermedades. Así, hay un tipo que
se hace cuando el paciente tiene fiebre, los pies hinchados y una sensación de pesadez en
las extremidades; otro cuando la fiebre va acompañada de pesadillas; y un tercero cuando
también se tienen dolores en la cabeza y el cuerpo. los adu se hacen de diferentes maneras,
y una característica importante es que cuanto más grave es la enfermedad, mayor es el
número de clases de madera que se deben utilizar. En uno de los casos, la adu ba mbumbu, se
pone en práctica cuando todos los otros remedios han fallado, y se hacen de 50 a 1.000
imágenes de tantas clases de madera como se puedan conseguir.
un adu se trata de unas cuantas maneras. Puede ser colgado de un árbol como una
ofrenda a un espíritu malvado que se cree que produce la enfermedad, o se puede
construir delante del paciente, o en el tejado de su casa. Puede que se eche a un río; en
este caso, la creencia es que la enfermedad ha entrado en el adu y que se lo llevará la
corriente del agua. La enfermedad también se puede extraer de un paciente si se le toca
con una cría de cerdo, que luego se mata y su sangre se extiende por la adu.
Hay diferentes ritos que acompañan el uso de la adu. Se pueden hacer ofrendas a
los seres a quien se atribuye la acción de la enfermedad, y en el caso de la adu ba
mbumbu, el cura trepa al tejado de la casa del paciente para rezar al dios Sol '. El
paciente puede ser aislado y su dieta regulada, y puede que se le den remedios, como
los hongos del árbol donde se cree que habita el espíritu maligno al que se atribuye la
enfermedad.
í India
No sólo se cree que una enfermedad recae sobre alguien como castigo por las
ofensas que ha cometido en su vida actual, sino que la doctrina de la transmigración
ha traído consigo la creencia de que la enfermedad puede ocurrir como castigo por
las ofensas causadas en existencias pasadas, y que deben ser remediadas con
prácticas de penitencias religiosas.
Un pueblo de la India, los Todas, que tienen una cultura peculiar en muchos
aspectos, expone una fase interesante en la especialización de la medicina y la
religión. Hay una distinción definitiva entre el cura y la sanguijuela, y también una
semejanza cercana en las fórmulas de las medidas terapéuticas de uno, y los ritos
proféticos y religiosos del otro 14.
x ina y Japón
China nos obsequia con un ejemplo médico que se parece en muchos sentidos a los
de nuestra de la edad media. La doctrina principal en que se apoya la medicina china
es que la enfermedad depende de la alteración del equilibrio normal entre la sangre,
los humores y la vida espiritual. El elemento principal del sistema de diagnóstico es un
examen muy elaborado del polvo.
À Fric
En África, al igual que en las otras partes del mundo ya comentadas, la enfermedad se
atribuye tanto al agente humano como el espiritual, pero muchas personas africanas
muestran una creencia en la producción de la enfermedad por causas naturales en un
alcance bastante mayor que en austronèsies.
Se cree que hay diferentes tipos de seres espirituales que causan una enfermedad,
pero los fantasmas de los muertos parecen ser los más importantes. En algunos lugares se
hace una distinción entre los fantasmas de la gente ordinaria y los de los líderes o reyes.
También se encuentra la creencia en dioses especiales conectados con la enfermedad y,
como en otras partes del mundo, la enfermedad epidémica es la que se atribuye
especialmente a estas divinidades.
Los amuletos, diseñados para evitar una enfermedad, ocupan un lugar importante en la
medicina africana. A menudo se parecen a los fetiches que se utilizan para el tratamiento de
las enfermedades.
Algunos pueblos africanos parecen tener la idea definitiva de la causa de la
enfermedad por condiciones climáticas u otras condiciones naturales, y entonces
sus remedios pueden ser puramente médicos y faltos de carácter religioso; aunque
la naturaleza de los remedios normalmente les lleva más cerca de la edad media
que de nuestro tiempo actual. Este desarrollo del arte auténtico de la medicina ha
sido registrado entre varias personas bantú, pero parece que ha cogido su máxima
expresión entre los masai 17,
de los que se dice que nunca atribuyen la enfermedad a la acción de los espíritus, y
sólo alguna vez al agente humano. Sólo nos han
hablado de una enfermedad, la elefantiasis del escroto, que es vista como un castigo por pecado.
Entre los masai, los remedios internos son conocidos para todos y sólo los
procedimientos quirúrgicos son practicados por los especialistas. En algunas partes
de África, alguien puede tener buena reputación debido al éxito en el tratamiento de
algún tipo de enfermedad. Tal como se vio en el caso de Melanesia, donde ha habido
una especialización en la función médica, ésta ha seguido a menudo líneas
diferentes, incluso antagonistas, que promoverían la separación entre la medicina, la
magia y la religión.
a Meric
Además de estas líneas de tratamiento, que llevan la medicina a ser tan cercana
a la religión, se utiliza un número de medidas que incluye las plantas como remedios
internos, la sangría, la cauterización, la cataplasma el masaje y los baños de vapor.
Las personas civilizadas que vivían en México y América Central, cuando estos
países fueron conquistados por los españoles, practicaban el arte de la medicina que
era muy similar en general al de otras partes de América, pero de un tipo más
avanzado.
Entre los aztecas que tienen el registro de medicina más completo, la presencia
de la enfermedad era normalmente atribuida a los dioses; aunque ocasionalmente
se creía que la brujería era la res-
80 WHR RIVERS
responsable. Se creía menudo que una enfermedad se originaba por algún error
cometido por parte del paciente, normalmente alguna infracción del ritual. Había dioses
especiales de la enfermedad. En México no sólo causaban una enfermedad, sino que
había divinidades especiales de curación, una de las cuales es una diosa de las
hierbas, y otra que había descubierto las propiedades curativas del aguarrás.
Los incas del Perú tenían una farmacopea extensiva, y practicaban la sangría,
pero no sabemos si sus ritos religiosos estaban muy ligados a la salud ya la
enfermedad, al igual que en el caso del
aztecas y los mayas. Los mapuches de Chile 19 tienen dos clases de sacerdotes, uno
de los cuales también actuaba como médico; mientras que los cirujanos forman otro
cuerpo de practicantes especializados. Se dice que aquellos que fueron alguna vez
médicos o sacerdotes tienen que ver con los espíritus, a la acción de los que parece
que se atribuya la enfermedad. Los mapuches utilizan muchas hierbas y utilizan la
sangría, los masajes y los baños de vapor.
Este estudio, por muy breve que sea, es suficiente para demostrar que existe una
gran similitud entre las diferentes regiones de la tierra, en el carácter general de las
creencias relacionadas con la causa de la enfermedad, y en las medidas que se
utilizan para combatir sus efectos. Como ya he dicho, la mayoría de estudiantes de
la sociedad humana ha creído que estas similitudes son el resultado de la
uniformidad en el trabajo de la mente humana en respuesta a su entorno. Se cree
que son ejemplos de analogía en el curso de la evolución, debido a la semejanza de
los materiales que modela el proceso de evolución y de la uniformidad en el trabajo
de la sociedad humana, con la que se lleva a cabo este modelado . Sólo cuando las
afinidades se encuentran entre personas vecinas, que se creían distantes las unas
de las otras, se sabe que han estado en contacto; ya que se ha tenido por
costumbre explicarlas mediante la transmisión de una cultura a otra. Por otra parte,
se ha supuesto que se han originado independientemente, y esta visión es todavía 20 más
apoyada. Sus defensores no son capaces de ver como el hombre, en etapas
anteriores de su vida, puede haberse movido por el mundo con la suficiente libertad
como para dispersar ampliamente el objeto y la costumbre que ha tenido lugar si
estas similitudes son la causa de la transmisión. Propongo tener en cuenta las
visiones contrarias, según las cuales estas semejanzas dependen de la transmisión,
o bien son el resultado de procesos de origen independiente.
En primer lugar, tal vez debería manifestar el argumento favorable a la hipótesis del
origen independiente que presentan los fenómenos de la enfermedad. Muchas de las
semejanzas culturales, que se cree que han aparecido independientemente en
diferentes partes del mundo, se relacionan con las características de la atmósfera del
hombre que se alejan de ser uniformes. Así, diferentes partes de la Tierra muestran
diferencias importantes en los movimientos aparentes del Sol, y en el curso y la
naturaleza de las estaciones.
Esta dificultad inicial no está presente, o bien está en un grado mucho menor, allí
donde el mismo hombre está involucrado más directamente. Los fenómenos de
nacimiento y de muerte son los mismos en todas partes. La complicación con la que se
encuentra el partidario del origen independiente es explicar la gran diversidad mostrada
por el modo de reacción de una persona hacia las vivencias de la propia vida.
Esta similitud de condiciones para todo el mundo también se presenta por los
fenómenos de la enfermedad, aunque de alguna manera en menor medida. Con
nuestro avanzado conocimiento, reconocemos un grado considerable de diversidad
en las enfermedades de diferentes partes del mundo, pero, en las fases más
bruscas de su desarrollo, el hombre trata más con síntomas que con
enfermedades, o más estrictamente hablando, lo hace más que nosotros. Las
principales manifestaciones de una enfermedad, como el dolor, la fiebre, la
alteración de la digestión, las inflamaciones, o las ulceraciones y erupciones, son
las mismas en todas partes, y tienen una apariencia natural tan similar y notable
que la enfermedad ofrece una oportunidad más favorable para los defensores del
origen independiente.
Sólo puedo considerar brevemente dos problemas que surgen de los materiales
que os presento en este libro. Estos nos servirán para ilustrar el tipo de situación
con la que estamos confrontados.
Por otra parte, la India y África son las ubicaciones más importantes de la
creencia de la posesión como producción de la
84 WHR RIVERS
22 A veces, estas creencias opuestas se pueden relacionar unas con otras. De este modo, los
pueblos del oeste de África que hablan Ewe creen que el hecho de que el alma de una persona
abandone su cuerpo proporciona la oportunidad de que un espíritu sin hogar entre en el cuerpo y
provoque la enfermedad. y liso, AB The Ewe-speaking Peopless. Londres: 1890, p. 107.
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 85
de los que son capaces de curar la enfermedad cuando se debe a otras causas
que no sean la pérdida del alma; mientras que un alma perdida sólo puede ser
recuperada por una clase especial de chamanes.
El segundo problema que trío, con el propósito de ilustrarlo, indica una cierta
diferencia que distingue los remedios domésticos de muchos pueblos de aquellos
que son o deberían ser aplicados sólo en personas con calificaciones especiales.
Anteriormente he mostrado que los medios para combatir la enfermedad adoptados
por Malasia y Nueva Guinea siguen sus creencias respecto a su causa. Una vez
conocemos la teoría de la enfermedad en Melanesia y Papúa, su diagnóstico y
medidas terapéuticas parecen ser las consecuencias lógicas de esta teoría. Las
acciones que pueden parecer no tener ningún sentido o, incluso, que parecen
ridículas en un examen superficial, son sólo el resultado natural de las visiones que
el pueblo sostiene sobre la naturaleza de la enfermedad. Sin embargo, he afirmado
que había excepciones.
La naturaleza de estos remedios naturales está bien representada por los Kai, pueblo
nororiental de Nueva Guinea, los rituales son complejos y prolongados, basados en
la creencia de la abstracción del alma o de la sustancia del alma, de la que ya he
dado una explicación completa (ver pág . 84 y ss.). Además de las me-
86 WHR RIVERS
Para el dolor de pecho con dificultad para respirar, la gente acaricia el pecho con
una especie de ortiga, y este remedio también se utiliza para calmar el dolor muscular
que acompaña largos recorridos o el transporte de cargas pesadas. Los baños de
vapor, utilizados para dolores reumáticos, se producen con piedras calentadas,
estirándose y cubriéndose con hojas, colocadas en un agujero que ha sido cavado en
el suelo.
La parte más dolorosa del cuerpo se expone al vapor que sale de las hojas; el
vapor se puede producir poniendo piedras calientes en recipientes de coco que son
utilizados para llevar agua. Hay un remedio curioso que se utiliza para la sordera
causada por la oclusión del meato auditivo externo. Se introduce un pequeño objeto
para fregar el conducto y puede permanecer durante varios días. Este método de
limpieza que Keysser llama the augean stable of the Papuan ear se dice que es muy
eficaz en la restauración del oído.
Este pueblo humilde de Nueva Guinea utiliza, más o menos de esta manera,
cinco tipos de tratamientos rudimentarios que se encuentran la mayoría sobre la
Tierra, es decir, el uso de cataplasmas, sangría, masaje, baños de vapor o
provocación de una inflamación de la piel con el propósito de calmar los síntomas
de otra inflamación. Además, estas prácticas están aparte del sistema terapéutico,
basado en la creencia en la producción de la enfermedad por
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 87
Sería mucho más fácil señalar como las medidas encontradas entre los Kai podrían
haber sido descubiertas por procesos llamados 'del azar' o 'de accidente'. Sin
embargo, toda la historia de invención muestra que los nuevos descubrimientos no
surgen de esta manera, sino que son el resultado directo de las condiciones físicas
y sociales en las que tienen nacimiento. Aunque las invenciones se llegaran a
concretar por accidente, sería difícil aceptar la posición que estos toscos salvajes
descubrieron, independientemente y por casualidad, cinco de los procedimientos de
nuestra medicina medieval y moderna.
La visión de la medicina de otras partes del mundo que he facilitado en este capítulo
muestra que lo que es verdad para los kai es cierto también en casi todas las
poblaciones humildes de la Tierra. Cuando encontramos que estas poblaciones
obtienen muestras de sangre, aplican la digitopuntura, crean un vacío en la piel del
paciente y utilizan masajes y baños de vapor, etc .; estas prácticas no forman parte
de la combinación de la religión y la medicina es la característica más sorprendente
de la actitud de estas poblaciones hacia la enfermedad. Estas no son practicadas
por una clase especial de personas que combinan en varios grados las funciones de
sacerdote y sanguijuela, sino que pueden ser representadas por cualquiera, o por
personas que han adquirido una reputación especial debido a la traza para la
práctica y la habilidad, y no a través de los procesos
88 WHR RIVERS
La mayoría de pueblos de la Tierra que utilizan la sangría, los masajes y los baños
de vapor, ciertamente no los ponen en práctica por motivos surgidos de las ideas y
creencias en lo que respecta a la enfermedad, las que dominan gran parte de su
comportamiento en la presencia de la enfermedad. Si han surgido independientemente
en diferentes partes de la Tierra, entonces no lo han hecho de la atmósfera
mágico-religiosas que rodea la enfermedad. En lugar de ello deberían atribuirse a algún
tipo de reacción en contra de esta atmósfera religiosa, a un movimiento en una parte del
cuerpo en contra de una visión de la enfermedad que forma parte de un sistema de
creencias que regula el comportamiento, no sólo hacia la enfermedad, sino para con
otros aspectos de la naturaleza.
Los argumentos especiales en contra del origen independiente, que indica cada
uno de las costumbres cuando estos se examinan libremente, se reafirman con la
ausencia de cualquier relación del conjunto de creencias que determina la actitud de
las poblaciones más humildes de la Tierra hacia la enfermedad.
Sin duda, una opción posible para los defensores del origen independiente es
decir que las prácticas como la sangría y los baños de vapor, tal como existen en
Nueva Guinea, son sólo los principios de un movimiento hacia la medicina racional
entre una población que, hasta entonces, ha sido dominada por un sistema de
brujería o de oficio de sacerdote. Ellos podrían decir que las formas rudimentarias
con que estos remedios suceden son naturales como primer producto de
tendencias de pensamiento que ha producido las formas más elaboradas y
acabadas de estas prácticas entre nosotros. Como respuesta a este argumento,
haré una sugerencia.
En el último capítulo expuse las dificultades con que nos encontramos cuando
intentamos explicar estas semejanzas desde la hipótesis del origen independiente. La
coexistencia entre dos creencias más o menos opuestas, respecto a la causa de la
enfermedad en América, y el fracaso de derivar los remedios domésticos del humilde
pueblo de Papúa por su teoría de la enfermedad, son difíciles de explicar en esta
hipótesis; mientras que son fáciles de entender si los movimientos de la humanidad
sobre la superficie de la Tierra en los primeros tiempos eran más extensivos de lo
supuesto hasta ahora.
la etnología está buscando ahora la solución a estos problemas, como aquellos que
indicaban los factores presentados en el capítulo anterior.
Si este sorprendente acuerdo entre el antiguo Egipto, las islas Salomón y América
del Norte es el resultado de la propagación de la cultura, o si el período de cuatro días
ha sido independientemente escogido
Una encuesta más amplia muestra que el número tiene una gran importancia,
no sólo en ceremonias religiosas, sino también en conexión con la enfermedad.
Así, cuando un paciente es aislado con un adu delante de él, en la isla de Nias, el
aislamiento dura cuatro días. En un ámbito diferente de tradición, la comida se
pone apartado para el uso del alma durante cuatro días después de la muerte, y
durante estos cuatro días la gente no va a los campos de arroz. De nuevo, en
países lejanos como Grecia o Japón, encontramos una clasificación cuadruplicada
prominente. En el caso de Grecia, debo referirme a los cuatro elementos, los cuatro
humores, etc. La cuestión de si la existencia de una curación de cuatro días en
Egipto, en la isla de Eddystone y en América del Norte se debe a la transmisión o
al origen independiente es sólo una parte de una cuestión mucho más grande,
como que Egipto, Grecia, Indonesia, Japón, las islas Salomón y América del Norte
tienen características geográficas, 24.
24 [ No fue hasta agosto de 1918, el año después de la entrega de estas conferencias, que el Dr.
Los tipos de procesos que tienen lugar cuando una cultura se trasplanta a una
nueva ubicación se puede formular de la siguiente manera: los elementos de la
cultura que se han trasplantado tienden a arraigarse a su nuevo medio, de tal
manera que están en armonía con la naturaleza física y cultural de su nuevo
entorno, y si tienen éxito cuando se arraigan, tienden a ser modificados en la
dirección de la cultura indígena por la que son asimilados. Esta propuesta tiene dos
partes -una trata el éxito o el fracaso de los nuevos elementos de la cultura para
sobrevivir en esta ubicación; la otra trata la tendencia de la modificación que se
muestra en ella misma en mayor o menor grado en los casos de éxito.
Menos obvios pero igual de importantes son los caracteres del entorno social en el que se transmite un
nuevo elemento de cultura. Este entorno podría ser tan adverso a la nueva práctica introducida que, si esto
tuviera éxito para implantarse del todo, pronto decaería y desaparecería bajo la oposición indígena respecto a
la dirección de pensamiento y de acción. Así, posiblemente la naturaleza tan diferente del entorno social de la
Melanesia y la Polinesia es lo que ha llevado a una marcada diferencia entre estas dos regiones, con respecto
a su uso de las prácticas estrictamente médicas. Los remedios médicos y quirúrgicos comparables a los de los
pueblos civilizados son más frecuentes en la Melanesia que en la Polinesia. Incluso cuando las prácticas
estrictas de medicina o de cirugía se encuentran en la Polinesia, a menudo existen indicios de que han sido
introducidas recientemente. Esta diferencia entre las dos provincias etnográficas nos presenta un problema
sorprendente que a primera vista parece difícil de explicar, ya sea en la hipótesis de la transmisión, o bien en la
del origen independiente. Los polinesios son sin duda más inteligentes que los melanesios, y si tomamos
nuestra civilización como estándar, observaremos que la cultura polinesia ha conseguido un nivel
considerablemente más alto de desarrollo que la de Melanesia. Si creemos que cualquiera de los remedios
médicos o quirúrgicos han sido descubiertos independientemente en esta parte del mundo, es difícil entender
que los pueblos más inteligentes y cultivados deberían haberse retrasado en estos descubrimientos. ya sea en
la hipótesis de la transmisión, o bien en la del origen independiente. Los polinesios son sin duda más
inteligentes que los melanesios, y si tomamos nuestra civilización como estándar, observaremos que la cultura
polinesia ha conseguido un nivel considerablemente más alto de desarrollo que la de Melanesia. Si creemos
que cualquiera de los remedios médicos o quirúrgicos han sido descubiertos independientemente en esta parte
del mundo, es difícil entender que los pueblos más inteligentes y cultivados deberían haberse retrasado en
estos descubrimientos. ya sea en la hipótesis de la transmisión, o bien en la del origen independiente. Los
polinesios son sin duda más inteligentes que los melanesios, y si tomamos nuestra civilización como estándar,
observaremos que la cultura polinesia ha conseguido un nivel considerablemente más alto de desarrollo que la
de Melanesia. Si creemos que cualquiera de los remedios médicos o quirúrgicos han sido descubiertos independientemente en esta part
Si por otro lado observamos el asunto desde un punto de vista formado por la
hipótesis de la transmisión, nos encontramos con un problema de gran interés. Si
esta hipótesis debe funcionar, deberíamos encontrar alguna razón por la que las
prácticas médicas y quirúrgicas hayan sido adoptadas por las poblaciones humildes
de los melanesios en una medida más completa que la de los polinesios cultos.
Creo que la razón es evidente si aplicamos el principio que acabo de enunciar.
la que es recibida y por el grado en que se adapta a las creencias y los sentimientos
naturales de la gente.
Un ejemplo de un tipo diferente está presente en la distribución de la sangría en
la zona este. Con el modo de obtener muestras de sangre, la práctica que consiste
en la aplicación de la digitopuntura que crea un vacío en la piel del paciente y la
aplicación de sanguijuelas, está bien establecida en la India, pero es casi ausente
en China, aunque muchas de las artes médicas de este país son conocidas por
haber venido de la India. Aquellos que han registrado la ausencia o la rareza de la
sangría en China observan que es debido al disgusto del derramamiento de sangre,
característico de este pueblo, un disgusto que es principalmente responsable del
bajo estado de la cirugía china. Que la práctica de la sangría no sea indígena en
China viene dado muy probablemente por la existencia del método de aplicación de
la digitopuntura que crea un vacío en la piel del paciente. Si creemos que esta
práctica ha sido desarrollada independientemente en China, también deberíamos
considerar la posición de un pueblo que puso tantas objeciones a la visión de la
sangre que la práctica casi universal de la sangría es poco conocida entre ellos. Aún
así fueron llevados a descubrir una medida terapéutica muy especializada que en
otros lugares está íntimamente asociada con la sangría.
Ahora ya puedo pasar a la segunda parte del tema que expongo, es decir, a la
modificación de algunas prácticas introducidas por la influencia del entorno físico y
social, al que se exponen estas prácticas. Podría empezar considerando varios
ejemplos de este proceso de modificación tomado de otros ámbitos de la vida social.
26 r Ivers, WHR Rep. Brit. Asoc. Dundee: 1912, p. 599; History of Melanesian Society. Cambridge:
Ahora estudiaré algunos ejemplos en los que las prácticas que han pasado de un
lado a otro de la Tierra, parecen haber sufrido un cambio. Como he dicho antes, la
demostración científica de este cambio sólo puede seguir un proceso gradual que
se apoya sobre un estudio más profundo de lo que es posible en una ocasión como
ésta. Mi objetivo actual es indicar qué procesos médicos y quirúrgicos son los
adecuados para esta línea de estudio.
la sangría
Empezaré con la posibilidad indicada por la actitud china sobre la sangría, que
acabo de analizar. Observamos que aunque la sangría fuera raramente practicada
en China, el uso de ventosas, una práctica muy similar, está tomando mucha volada
en la práctica médica de su pueblo. Se cree en la posibilidad de que esta práctica
haya surgido en China como modificación del uso de ventosas con sangría, como
consecuencia de la objeción de los chinos al derramamiento de sangre. Si es así,
que el uso de las ventosas sea el único superviviente de un grupo de prácticas
introducidas, es una cuestión que sólo se puede responder mediante una amplia
encuesta. (He
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 101
admitir que esta encuesta mostrará ciertamente que la práctica del uso de
ventosas no surgió en China).
Otro caso en el que la práctica de la sangría puede haber sufrido modificaciones,
en el objetivo o al menos en el método, es la frecuencia de la sangría como rito
religioso. En muchas partes del mundo, la sangría mediante incisiones o cicatrices
forma parte de un ritual religioso, mientras que en otros lugares es una característica
de las costumbres asociados al duelo por los muertos y de otras prácticas sociales,
que probablemente tienen o han tenido un significado religioso. El problema es decidir
si hay alguna relación entre esta forma de sangría y si tiene un propósito terapéutico.
Nosotros conocemos diferentes hechos que apuntan a una conexión entre los dos
tipos de prácticas. De este modo, la sangría en la Polinesia mediante cortes y de
incisiones como práctica terapéutica es una característica especial de las islas del
oeste, como Samoa, y parece que no tiene tanto éxito en el este del Pacífico. Una
diferencia similar caracteriza las dos regiones en cuanto a la sangría con objetivos
religiosos.
el masaje
método del rozamiento hacia el tronco. Este movimiento, de arriba hacia abajo, es
característico de Melanesia y otros lugares, donde se intentan eliminar agentes nocivos del
cuerpo. El objetivo es forzar el espíritu que vive en las extremidades a abandonarlas.
Según mi punto de vista, estos ejemplos son suficientes para demostrar que hay
una conexión entre el arte del masaje terapéutico y el higiénico, y las manipulaciones
por las que muchos grupos extraen o expulsan estos agentes materiales o
inmateriales del cuerpo, las que se cree que son las causas de las enfermedades.
Tengo que conformarme a plantear el problema y dejarlo para un futuro estudio, con
una base muy amplia como la consideración, si este último uso ha surgido de una
modificación de una práctica terapéutica introducida, o si el uso terapéutico se
convierte de una práctica más antigua, basada en creencias mágicas o religiosas.
Sólo diré que en Oceanía se duda poco de la respuesta. El masaje, muy desarrollado
en la Polinesia, o ha sido introducido en Melanesia casi con toda certeza los mismos
polinesios, o bien más probablemente por los grupos inmigrantes que forman la otra
capa de la sociedad polinesia. Si fue introducido así, es cierto que ha sido modificado
de acuerdo con las ideas indígenas de los melanesios, teniendo en cuenta la causa y
el origen de la enfermedad.
las saunas
Ba-Bonga 32, se cierra el paciente en una habitación pequeña llena de alfombras y de brasas
que le harán sudar profundamente.
El país en el que los baños de vapor han conseguido su nivel máximo de
desarrollo es en América, especialmente en la costa oeste, entre los avanzados
pueblos de Pueblo Indians de Nuevo México y Arizona, y entre los antiguos aztecas de
México. La casa del vapor es la institución más importante. Entre muchos poblados
estadounidenses eran representativos de los hombres de la casa-club de Melanesia y,
en otras partes, es característica la exclusión de las mujeres. Por otra parte, entre el
Pueblo Indians, la casa del vapor ha sido descrita 33
como el lavabo, el Ayuntamiento, la cámara del Consejo, la habitación del club y la iglesia
del pueblo.
Si hay algo en común en las casas de vapor americanas y los baños de las
otras partes del mundo es evidente que ha sufrido un proceso de modificación. Si es
así, podemos tener pocas dudas de que este proceso fue fruto de una práctica
terapéutica e higiénica introducida en América y que se ha sometido a un proceso de
desarrollo, probablemente a través de un proceso de fusión con otras prácticas
sociales. Por lo tanto, la casa del vapor ha convertido en una de las instituciones
más importantes del pueblo.
p.537
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 105
La circumsició y la subincisió
Sin embargo una operación similar se practica en las Fiji y Tonga, donde tiene un
propósito terapéutico. Aunque la práctica era originaria
106 WHR RIVERS
de las Fiji, nuestra descripción proviene de Tonga 34. Se abre la uretra y se coloca un
hilo, por tanto, una punta aguanta desde la apertura oficial y la otra por el meato. El
hilo se mueve en ocasiones adelante y atrás para producir dolor y sangrar. La
operación es el remedio favorito para el tétanos. Mariner observó diferentes casos en
los que su uso era seguido de una recuperación para el paciente. La operación se
utiliza también en casos de heridas que tengan hemorragias de sangre en la cavidad
abdominal, y el motivo es sacar la sangre por medio de la uretra.
La semejanza entre las prácticas australianas y las fijianos indica que pueden
estar relacionadas las unas con las otras. Si suponemos que dos pueblos, que no
están el uno muy lejos del otro geográficamente y que se parecen físicamente,
inventaron esta extraordinaria operación con total independencia la una de la otra,
esta teoría exige una gran credulidad científica. Podemos estar seguros de que la
práctica se ha transferido de un pueblo a otro, o más probable aún, que la práctica
de Australia o de las Fiji sean dos manifestaciones muy diferentes de una
costumbre proveniente de inmigrantes que llegaron a las dos localidades. Aquí, y
en los casos que hemos considerado, el indicio no es suficiente para mostrar el
propósito primario de la operación. Parece que lo más probable sea un ejemplo de
un remedio quirúrgico que fue introducido en Australia entre un pueblo muy
interesado en la mutilación como característica de la ceremonia o de la iniciación a
la madurez, y fue adaptado y aplicado para este nuevo propósito. Este tema lo he
analizado con gran detalle en mi libro Psicología y Etnología ( 1926).
Por otra parte, la práctica del masaje se encuentra a lo largo del Pacífico, y es
especialmente destacada en las islas del este, como Haití, donde los muertos son
momificados en plataformas o en canoas. La distribución de la Polinesia indica que el
masaje se asocia a un movimiento anterior al de la práctica de la sangría.
Hay otros puntos que me gustaría haber analizado, si hubiera habido tiempo.
Sólo puedo hacer referencia al carácter especial de los procesos como la
venisecció o el uso de ventosas, que es poco probable que hayan sido descubiertos
independientemente por pueblos bárbaros que ahora lo practican. También podría
mencionar que la frecuente asociación para todo el mundo de sumergirse en frío
después del baño de vapor -un costumbre tan poco natural que su práctica en la
Polinesia alarmó mucho los primeros misioneros, ya que ignoraban que el hecho de
sumergirse en frío era una característica de los baños de vapor de su propia
cultura.
Historia y evolución
Este curso se ha complicado debido a dos factores que son contrarios en este
progreso. El crecimiento de la civilización ha aportado nuevas formas de
enfermedad, o ha aumentado la frecuencia de las anteriores, principalmente como
resultado de las modificaci
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 111
clasificarlo como una característica negativa pero necesaria de las etapas intermedias
de la evolución. Creo que en muchos aspectos de la vida social (reconocida
especialmente en la ciencia), se convierten en claras las indicaciones que la
especialización puede llegar demasiado lejos, y que con más avances podríamos
retornar a las interrelaciones entre los diferentes aspectos de la cultura humana que
son característicos de estados anteriores.
éxito de las formas rudimentarias de la sociedad humana, que se han esforzado para superar los efectos de la
enfermedad. La eficacia de los rituales es una creencia fuerte para los pueblos salvajes y bárbaros, y las
sanguijuelas, los brujos y los sacerdotes son la causa del éxito. Como la medicina ha avanzado y se ha
diferenciado de la magia y la religión, este juego de factores físicos no se ha detenido. Ahora se pueden
encontrar pocas personas que nieguen el hecho de que el éxito de algunas recetas complejas y la mayoría de
y la sugestión. La característica que sobresale de la medicina de hoy en día es que a estos factores físicos no
se les permite actuar involuntariamente, sino que se convierten en objetos de estudio y, por tanto, la época
actual observa el crecimiento de un sistema racional de fisioterapia. Una característica de este sistema, que se
convierte en bastante clara, es que se debe hacer una reconversión de los agentes que hasta ahora han hecho
la función de sacerdote en vez de médico. Si la medicina consiste en mantener el control sobre ciertos
aspectos pertinentes de la enfermedad; debería aprender más del sacerdote, si es que verdaderamente no
sería deseable algún tipo de colaboración frecuente entre los dos. Si la medicina consiste en mantener el
control sobre ciertos aspectos pertinentes de la enfermedad; debería aprender más del sacerdote, si es que
verdaderamente no sería deseable algún tipo de colaboración frecuente entre los dos. Si la medicina consiste
en mantener el control sobre ciertos aspectos pertinentes de la enfermedad; debería aprender más del
sacerdote, si es que verdaderamente no sería deseable algún tipo de colaboración frecuente entre los dos.
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 115
Londres: 1908.
5
Mente y medicina 37
Las primeras relaciones entre mente y medicina están muy ligadas al proceso por el
que la medicina se separó de la magia y de la religión. La historia de la medicina
revela un proceso largo y accidentado, lejos de ser completo, en el que poco a poco
la actitud del hombre frente a la enfermedad se convirtió diferente de la que tenía
delante de muchos otros misterios que la rodeaban. Inicialmente, los intentos para
tratar con las enfermedades tomaron dos caminos. En el primero se adscribió la
enfermedad a la acción de seres diferentes a sí mismo, pero capaces de ser tratados
con ritos de oraciones y ofrendas. Dado que estos ritos, sea donde sea que los
estudiamos, revelan una actitud de respeto y de apelación, e implican poderes que el
hombre por sí solo no posee, parece legítimo mirar los seres a los que se dirigen
como superiores y más poderosos que sí mismo. El corpus general de los ritos y las
creencias son el nexo entre el ser humano y estos poderes superiores que
constituyen el aspecto de la vida que conocemos como religión. Uno de los primeros
modelos de comportamiento del hombre se puede considerar parte de la religión y de
la actitud religiosa frente a la enfermedad.
37 [ Una conferencia, dada en la biblioteca John Rylands, el día 9 de abril de 1919. Estoy en deuda
con la cabeza de la biblioteca, el doctor Henry Guppy, por haberme autorizado a volver a publicar esta
conferencia].
118 WHR RIVERS
que se producía, oa utilizar él mismo una serie de medidas para neutralizar sus
efectos. Las creencias y las medidas de este tipo constituyen el aspecto de la vida
que se conoce como magia, pero este aspecto no es tan susceptible de ser definido
como la religión y necesita que lo desglosamos en bastantes elementos diferentes.
Uno de estos es ciertamente la religión degenerada, creencias y ritos que ya no
implican ninguna referencia a unos poderes superiores que en algún momento
tenían su razón y sanción.
La gran mayoría de las medidas que las tribus primitivas existentes utilizan
para intentar tratar con las enfermedades pertenecen a una de las dos categorías:
la de magia o de religión. Lo que sabemos de la historia de la humanidad indica
que no fue hasta muchos años después, y sólo en unos cuantos lugares del
mundo, que el ser humano llegó a una concepción de la enfermedad que se parece
al que se atribuye a los procesos de los sistemas de medicina modernos. El hecho
de que la medicina haya desatado de sus relaciones con la religión y la magia, está
muy ligado a la sustitución gradual del concepto de causa física por agentes
espirituales del animismo, que constituía la primera actitud hacia la naturaleza.
Todas las pruebas que tenemos a nuestro alcance nos demuestran que,
cuando el ser humano renunció a su interpretación inicial animista del universo, la
reemplazó por las explicaciones materialistas. En la medida que los acontecimientos
no se atribuían a los espíritus o los agentes humanos directamente, se creía que
dependían de la acción de agentes materiales. De este modo, los agentes
supuestamente efectivos en la producción de la enfermedad han sido principalmente
de dos tipos en la historia de la medicina. Entre las tribus que han sido influidas
especialmente por creencias que implican los animales, esta rama de la creación ha
sido prominente en las teorías relacionadas con la producción de la enfermedad. Por
otra parte, la evidente conexión de la sangre con la vida nos ha llevado a la creencia
de que la enfermedad es causada sobre todo por un aspecto alterado de este
líquido, y esta creencia constituyó el punto de partida de la patología humoral, la
cual durante muchos siglos formó la base de la medicina. En el campo médico, los
dos grandes
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 119
progresos de nuestro tiempo han seguido las dos líneas principales de la creencia
primitiva. Los organismos microscópicos y ultramicroscópico de la teoría del germen de
la enfermedad han sustituido los gusanos y las serpientes 38 de la medicina primitiva;
mientras que en lugar de los viejos humores hay alteración, en la proporción apropiada,
de secreciones internas que ahora están siendo reconocidas como la causa inmediata
de muchos estados mórbidos.
Cuando el ser humano pensó en otros agentes que no fueran materiales como
causa de la producción de la enfermedad, su concepto de la actividad implicada
era muy diferente al de la 'mente', según lo sosteníamos nosotros mismos o, en
todo caso, el psicólogo. El agente al que atribuyó la enfermedad era más espiritual
que mental, y fue concebido con forma y capacidad para la existencia
independiente. Podría ser que fuera un espíritu que nunca hubiera sido humano ni
hubiera tenido asociaciones humanas; o uno que alguna vez adquirió forma
humana; pero había venido a través de la muerte de su anfitrión para adquirir una
existencia independiente
o, finalmente, podría ser un alma que aún mantuviera su lugar habitual dentro de un
cuerpo humano pero que podría abandonarlo en sueños o cuando estaba en tránsito
para actuar como productor de la enfermedad.
38 Cuando estas creencias primitivas se consideran previsiones de la teoría del germen, habría que
recordar como vienen naturalmente de las creencias generales respecto a las características animales
de ciertas formas de la cultura humana.
120 WHR RIVERS
fe y de la sugestión. Las medidas curativas, que aún son utilizadas por muchos
pueblos, actúan con los mismos procesos y deben su éxito a la fe que inspiran o la
característica más misteriosa que llamamos 'sugestión'.
40 Las Psychonéuroses et leur traitment moral. París: 1908. Traducido al inglés por j elliffe, se y w Hite, wa como
The Psychic Treatment of Nervous Diseases. Nueva York y Londres: 1906.
41 Las Manifestation fonctionelles diciembre psychonéuroses. París: 1911. Traducido al inglés por j elliffe,
se como The Psychoneuroses and their Treatment by Psycotherapy. Philadelphia y Londres: 1913.
adquirió un grado de factores sexuales tan exclusivo, que el corpus general tanto de
profesionales médicos como laicos no prestar la atención que merecía. No supieron
reconocer la inmensa importancia de los mecanismos mentales, dejados al
descubierto por los métodos de análisis de Freud y, el cuerpo de indicios, que era
proporcionado de esta manera para ilustrar la influencia del inconsciente.
Uno de los aspectos más importantes del trabajo de Freud fue el rol que
asignó al inconsciente, que le permitió adoptar de la manera más completa el
principio de determinación en la esfera mental, que había tenido tanto valor al
progreso de la ciencia física. Para este progreso es esencial que el estudioso crea
implícitamente, o al menos actúe como si lo hiciera, que todo acontecimiento físico
tiene su antecedente físico, sin la presencia del que no habría llegado a existir. El
proceso de la ciencia física depende ampliamente de la solidez de la fe en esta ley
de causa que no permite a ningún residuo ni anomalía -por muy insignificante que
parezca- ser apartado como consecuencia del azar o de un accidente. El
investigador exitoso de la ciencia hace de este residuo o anomalía el sujeto de una
investigación paciente,
Propongo que ahora consideramos algunos otros de los principios más importantes que constituyen la
base del éxito en el tratamiento de estos trastornos. Uno de estos principios se puede ver como la
consecuencia del determinismo físico. Es una norma general de la medicina que el médico no debe estar
satisfecho sólo para tratar los síntomas, sino que cuando ha asignado los síntomas a su causa debería
atacar esta fuente con remedios apropiados y tratar los síntomas con las condiciones para las que se han
producido. Este principio se sostiene por la psicología médica. Si se cree que los síntomas se han producido
por factores físicos, consecuentemente los remedios también serán de naturaleza física. No creo que ni
siquiera el materialista más extremo, tras admitir que los síntomas dependen de un susto en la infancia, un
reproche con relación a una falta menor en la juventud, o la ansiedad de la vida adulta, esperaría que se
produjera ninguna mejora permanente mediante la administración de la medicina o de una intervención
quirúrgica. Sin embargo, hay que señalar que estas medidas pueden tener éxito en algunos casos, no sólo
por su esfuerzo psíquico, sino porque con la eliminación de los estorbos secundarios pueden romper un
círculo vicioso y crear, entonces, una apertura para la acción de las fuerzas mentales intrínsecas que
trabajan hacia la recuperación. la sino porque con la eliminación de los estorbos secundarios pueden romper
un círculo vicioso y crear, entonces, una apertura para la acción de las fuerzas mentales intrínsecas que
trabajan hacia la recuperación. la sino porque con la eliminación de los estorbos secundarios pueden romper
un círculo vicioso y crear, entonces, una apertura para la acción de las fuerzas mentales intrínsecas que
trabajan hacia la recuperación. la vis medicatrix naturae aplica a la esfera mental, así como la material.
Otro principio que hoy día está encontrando aceptación general en la medicina de
la psicología es que los trastornos funcionales mentales y del sistema nervioso
dependen esencialmente del estorbo de los aspectos instintivos y emocionales o
afectivos de la mente. Actualmente, se acepta ampliamente que en el intento de volver
a los orígenes de estos trastornos se tenga que buscar entre las experiencias de un
tono emocional más fuerte. Este principio ha sido más o menos reconocido desde hace
tiempo y sostiene las creencias generales que se expresan en el dicho, que dice que «lo
que mata es la preocupación y no el trabajo». Pero ha sido sólo recientemente que
hemos aprendido a apreciar el alcance de su aplicación ya utilizarla en el tratamiento
como
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 127
guía de primera importancia. Hacía tiempo se sabía que, en los trastornos mentales
más explícitos de demencia, no se conseguía nada dialogando con el paciente
como medio para refutar sus delirios. Incluso parece que estos diálogos sólo
podrían intensificar y fijar los delirios del paciente, por lo que le permitirían adoptar
el papel de abogado. Ahora nos damos cuenta de que esta es una consecuencia
necesaria de la base emocional del trastorno. Los delirios son el producto de un
proceso de racionalización mediante los que el paciente ha intentado explicar su
estado emocional anormal. El tratamiento dirigido a estos productos secundarios no
toca de ninguna manera los factores más profundos y esenciales.
43 consultar el British Journ. Psych., 1918, vol. ix, p. 236 y Mental Hygiene, 1918, vol. ii, p. 513.
44 Art. «Psycho-Therapeutics», Hastings 'Enciclopaedia of Comparative Religion and Ethics. Vol. x, p.433.
Este artículo se puede consultar para obtener información referente a otros agentes terapéuticos que no
he considerado en este capítulo.
128 WHR RIVERS
proceso mórbido a la luz adecuada, y reducir el poder por el que el hábito ha sido
adquirido por los productos secundarios del proceso mórbido. En otros casos, otra
vez, la inteligencia del paciente puede ser insuficiente para permitir que solucione el
conflicto sin ayuda, y el proceso de reeducación debe ayudar al paciente a entender
la naturaleza de su trastorno y los procesos por los que puede guiar sus pasos de
nuevo hacia el camino de la salud.
El próximo agente se resume con el término de autonomía. Hay una tendencia pronunciada por los que
sufren neurosis de evitar el sufrimiento a toda costa. Dado que todos los deberes sociales, incluso aquellos en
los que están implicados los familiares más cercanos, están obligados a ser molestos o claramente
inquietantes, el paciente busca la calma y la soledad y, si lo dejamos solo, estas tendencias sociales pueden
convertirse en un hábito y convertir alguien que antes de su enfermedad era popular socialmente en un recluso
o un misántropo. Los dolores y el malestar corporal que no se han dado en la salud y cuando se tratan dejan
de molestar, con la neurosis probablemente crecerán en intensidad e insistencia. Pueden absorber tanto la
atención que los esfuerzos del paciente se dedican exclusivamente a evitar todas las condiciones, como el
ruido y la excitación, que empeoran o parece que empeoren sus problemas. Tiene tendencia a recurrir a los
medicamentos por su cuenta o por su instancia física, y cuando estos son meramente paliativos y no pueden
llegar a las raíces de su enfermedad, sólo sirven para acentuar sus temores y sus dolores, aunque no llegue a
caer en el mal mayor de una adicción a las drogas. Se esfuerza por borrar de su mente todos los pensamientos
y recuerdos inquietantes, incluso las experiencias que son tan impactantes que si sus esfuerzos no estuvieran
cuando estos son meramente paliativos y no pueden llegar a las raíces de su enfermedad, sólo sirven para
acentuar sus temores y sus dolores, aunque no llegue a caer en el mal mayor de una adicción a las drogas. Se
esfuerza por borrar de su mente todos los pensamientos y recuerdos inquietantes, incluso las experiencias que
son tan impactantes que si sus esfuerzos no estuvieran dirigidos exclusivamente a evitar el dolor directo,
reconocería inmediatamente la inutilidad de su intento. y cuando estos son meramente paliativos y no pueden
llegar a las raíces de su enfermedad, sólo sirven para acentuar sus temores y sus dolores, aunque no llegue a
caer en el mal mayor de una adicción a las drogas. Se esfuerza por borrar de su mente todos los pensamientos
y recuerdos inquietantes, incluso las experiencias que son tan impactantes que si sus esfuerzos no estuvieran
considera dolorosas, una vez afrontadas, en realidad son menos terribles de lo que
parecen cuando se miran desde la distancia. Se esforzará para mezclarse con sus
compañeros, a pesar de la molestia inmediata que este hecho le pueda producir, y
aquí debe aprender de nuevo y por medio de la experiencia que los dolores de la
realidad no son equiparables aquellos que ha imaginado.
El tercer agente que debo tener en cuenta es la sugestión. Aunque este término
se utiliza libremente y de manera asertiva en la psicología médica, ciertamente no
hay un acuerdo referente a su significado concreto y se incluyen muchos aspectos
entre sus actividades que tienen poco que ver con su naturaleza. 46 Utilizo el término
para referirme a un proceso que pertenece, esencialmente, en la parte instintiva de
la mente. En el ser humano es la representante de un
The Represión of War experience. Proc. Roy. Soc. of Med., 1.918 (sección de psiquiatría). Vol. x y, p. 1.
'Encyclopaedia.
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 131
los aspectos del instinto gregario: el instinto que hace posible que todos los miembros
de un grupo actúen al unísono, para que de esta manera parezca que actúan para un
propósito en común. Según esta perspectiva, es un proceso que difiere -esencialmente
en naturaleza- de los procesos mentales que producen la uniformidad del
comportamiento que dota a los miembros de un grupo de una idea o de un sentimiento
común. Sus actividades se encuentran definitivamente en la esfera del inconsciente,
de manera que cuando el médico utiliza la sugestión conscientemente, emplea de
manera artificial un agente que pertenece a la región del inconsciente.
Otra manera, y tal vez más legítima, de hacer uso de la hipnosis es para el
diagnóstico. La experiencia disociada o olvidada se puede recuperar más
rápidamente por medio de la hipnosis que por el proceso de asociación libre, el
análisis de los sueños, u otras maneras de obtener el acceso al inconsciente. Este
uso del hipnotismo como instrumento de autoconocimiento no necesita interferir
demasiado con el principio de la independencia; el proceso hipnótico simplemente da
el conocimiento desde el que comienza el proceso terapéutico y sobre el que se
basa.
Me tendré que conformar con esta breve explicación de algunos de los principios
más importantes de la terapia mental y de las organizaciones dispuestas a poner en
práctica estos principios. He de finalizar este capítulo señalando que los principios
básicos de la medicina de la mente son también los de todos los sistemas de sonidos
o de educación, y determinan el éxito en la vida social, en la salud, así como en la
enfermedad.
No es tan fácil comparar el rol de la sugestión del grupo con el que se toma
para determinar el destino del individuo. Esencialmente la sugestión es un proceso
que tiende a producir la unanimidad en el grupo social, y su acción es incluso
inevitable cuando tratamos con trastornos sociales, más que con trastornos
individuales.
El médico que sabe que la sugestión no se puede excluir, pero que su
influencia puede ser para un bien o para un mal será prevenido con anterioridad, y
será el mismo para el estadista. La sugestión es la responsable del pánico o del
colapso, al igual que puede ser la responsable de la armonía para una
136 WHR RIVERS
finalidad más provechosa. El sabio estadista, que comprende la permanente pero aún
fugaz naturaleza de este organismo, en esta interpretación puede hacer mucho para
evitar los peores aspectos y cambiarlos para un propósito útil; mientras que la gente
que entiende debe ser prevenida de ser víctima de los excesos de los que este
organismo es capaz. En la sociedad, así como en el individuo, la fuerza de la
sugestión es mayor cuanto más involuntaria es en la acción. Y, como en la medicina,
sus mayores peligros se deben evitar con el conocimiento; se debería hacer lo posible
para evitar el peligro y hacer de la sugestión un instrumento de bien en la vida social y
política, si se entienden su naturaleza y modo de acción.
La materia de la formación ética está relacionada tanto con la educación como con el arte de gobernar.
Aquí, la importancia del autoconocimiento y la independencia está tan bien reconocida que no es necesario
concentrarse demasiado detenidamente. Deberá ser suficiente apuntar que los principios que se han
presentado en esta conferencia y que están universalmente aceptados como medios para tratar con las
tendencias incorrectas en aquellos aspectos de comportamiento que, a pesar de ser claramente anómalos,
normalmente todavía se ven dentro de los límites de la salud, son adecuados para la corrección de las
la psicología médica apoya la estrecha relación entre la afección mental y el delito al que tienden los recientes
desarrollos en sociología y jurisprudencia. Además, si se aceptan los principios de la psicología médica que se
presentan aquí, se deberían retirar al menos casi los obstáculos de la aceptación de esta estrecha relación que
se presenta mediante el problema de la responsabilidad moral. Se observará que el reconocimiento del delito
como manifestación de la enfermedad, lejos de suponer una ausencia de responsabilidad, lógicamente debería
llevar a un tratamiento que no difiera demasiado de aquel que suponga esta responsabilidad. La manera de
tratar el delito y el trastorno moral que indica por su relación con la enfermedad, difiere de la del método
antiguo, en el que la persona equivocada no era simplemente incitada a ejercer su voluntad, sino que se le
mostraba la forma en que se había producido su tendencia defectuosa y entonces tendría ayuda en la
aplicación de sus esfuerzos voluntarios. deberían retirar al menos casi los obstáculos de la aceptación de esta
estrecha relación que se presenta mediante el problema de la responsabilidad moral. Se observará que el
reconocimiento del delito como manifestación de la enfermedad, lejos de suponer una ausencia de
responsabilidad, lógicamente debería llevar a un tratamiento que no difiera demasiado de aquel que suponga
esta responsabilidad. La manera de tratar el delito y el trastorno moral que indica por su relación con la
enfermedad, difiere de la del método antiguo, en el que la persona equivocada no era simplemente incitada a
ejercer su voluntad, sino que se le mostraba la forma en que se había producido su tendencia defectuosa y
entonces tendría ayuda en la aplicación de sus esfuerzos voluntarios. deberían retirar al menos casi los
responsabilidad moral. Se observará que el reconocimiento del delito como manifestación de la enfermedad,
lejos de suponer una ausencia de responsabilidad, lógicamente debería llevar a un tratamiento que no difiera demasiado de aquel que su
MEDICINA, MAGIA Y RELIGIÓN 137
una gran tensión en los defectos aparentemente menores que preceden una conducta definitivamente inmoral,
y dirija la atención y los esfuerzos del penitente, tanto como la conducta que ha dado lugar a la penitencia. Esta
semejanza de la práctica tradicional de la Iglesia Católica con la de los sistemas más modernos de la
vista, el uso de los motivos religiosos cuando se tratan trastornos mentales está definitivamente en conflicto
con el principio de la autoconfianza. La esencia de la religión es que esta inculca confianza de otro poder
distinto al del sufridor / a. Siempre tiene que haber una cierta presencia de este conflicto, y en algunas de las
formas que la religión adopta como organización terapéutica, este conflicto es muy obvio. Pero en los avances
más recientes de la doctrina religiosa, en la que se reconoce que el poder más elevado actúa por procesos
mentales normales, el conflicto deviene de poca importancia. El profesor / a moderno de religión no dice al
sufridor / a que evitará los problemas exclusivamente con el acto de la fe, sino que aconseja el
autoconocimiento y la autoayuda. Para expresar con palabras sencillas su consejo, dice que Dios sólo ayuda
aquellos que se ayudan a sí mismos y, por tanto, sigue la línea propuesta fundamentalmente en esta
conferencia. Así, si consideramos la religión una organización terapéutica, reconozco que sólo estoy tratando
una parte del asunto. Sin embargo, no puedo dejar este aspecto de banda. Es necesario que aquellos que
emplean agentes religiosos en el tratamiento de las enfermedades, ya sean médicos como sacerdotes, se den
cuenta que si lo hacen así se están dirigiendo, en cierto modo, a uno de los principios de la psicología médica
y, si este hecho se reconoce, evitarán los malos que acompañarían una aplicación tan cruda de la organización
religiosa. Además, ningún tratamiento del tema de la mente y de la medicina sería completo, si se ignora la
religión. Uno de los resultados más sorprendentes de los avances modernos de nuestro conocimiento sobre la
influencia de los factores mentales hacia las afecciones, es que en medicina se está devolviendo en cierta
medida a aquella cooperación con la religión que ya existió en las primeras etapas del progreso de la
humanidad. den cuenta de que si lo hacen así se están dirigiendo, en cierto modo, a uno de los principios de la
psicología médica y, si este hecho se reconoce, evitarán los malos que acompañarían una aplicación tan cruda
de la organización religiosa. Además, ningún tratamiento del tema de la mente y de la medicina sería completo,
si se ignora la religión. Uno de los resultados más sorprendentes de los avances modernos de nuestro
conocimiento sobre la influencia de los factores mentales hacia las afecciones, es que en medicina se está
devolviendo en cierta medida a aquella cooperación con la religión que ya existió en las primeras etapas del
progreso de la humanidad. den cuenta de que si lo hacen así se están dirigiendo, en cierto modo, a uno de los
principios de la psicología médica y, si este hecho se reconoce, evitarán los malos que acompañarían una
aplicación tan cruda de la organización religiosa. Además, ningún tratamiento del tema de la mente y de la
medicina sería completo, si se ignora la religión. Uno de los resultados más sorprendentes de los avances
modernos de nuestro conocimiento sobre la influencia de los factores mentales hacia las afecciones, es que en
medicina se está devolviendo en cierta medida a aquella cooperación con la religión que ya existió en las
primeras etapas del progreso de la humanidad. ningún tratamiento del tema de la mente y de la medicina sería
completo, si se ignora la religión. Uno de los resultados más sorprendentes de los avances modernos de nuestro conocimiento sobr
ÍNDICE ONOMÁSTICO
M Orley, SG (desde 1883 hasta 1948). Arqueólogo estadounidense especializado en cultura maya.