Material Examen Final Arquitectura Propietaria
Material Examen Final Arquitectura Propietaria
Material Examen Final Arquitectura Propietaria
CAPÍTULO
Arquetipos de
Aplicación
387
388 Guía de Arquitectura N-Capas orientada al Dominio con .NET 4.0 (Beta)
Aplicaciones Web
Servicios
A la hora de diseñar aplicaciones web es muy importante tener en cuenta una serie
de aspectos en las fases iniciales de diseño de la arquitectura, independientemente del
estilo arquitectural seleccionado. Las principales recomendaciones son:
390 Guía de Arquitectura N-Capas orientada al Dominio con .NET 4.0 (Beta)
No envíes información sensible sin codificar: Siempre que haya que enviar
información sensible como un usuario y un password se debe usar SSL o bien
cifrar y signar el contenido para garantizar la confidencialidad y la autoría de
la información enviada.
la lógica de la aplicación se concentre en el servidor y que la parte del cliente sea solo
la interfaz gráfica. La comunicación entre el cliente y el servidor se realiza
estrictamente a través de servicios web usando HTTP.
La estructura general de las capas de una aplicación RIA sueles ser en N-Capas,
como la explicada en la presente guía de Arquitectura N-Capas donde además
incluimos tendencias DDD.
En el caso de una aplicación RIA, es completamente necesario hacer uso de la Capa
de Servicios Distribuidos, pues debemos comunicarnos con la lógica de negocio y
acceso a datos del servidor de una forma remota y desde la programación cliente:
Diseña la aplicación para usar servicios: La forma normal en que una RIA
debería trabajar es consumiendo servicios web para realizar la lógica de
negocio de la aplicación. De esta forma se facilita la reutilización de la
infraestructura web existente. Solo se debería transferir lógica de negocio al
cliente por razones de eficiencia o para mejorar la respuesta de la interfaz
gráfica.
dividir y cargar los módulos. Es muy importante realizar una carga bajo
demanda de los módulos para reducir el tiempo de descarga de la aplicación y
trasladar la lógica de negocio costosa computacionalmente al cliente para
mejorar el tiempo de respuesta disminuyendo la carga en el servidor.
Componentes clave
Identifica las tareas que debe realizar el usuario y los flujos de ejecución
de dichas tareas: De esta forma es más sencillo diseñar las pantallas y los
pasos a realizar para conseguir un objetivo.
Como podemos observar, en una aplicación de servicios (SOA) las capas internas
son muy similares a las de otro tipo de aplicaciones. Podría pensarse que la capa de
396 Guía de Arquitectura N-Capas orientada al Dominio con .NET 4.0 (Beta)
servicios también es idéntica a la capa de otro tipo de aplicaciones, pero esto no es así.
Las capas de servicios de una aplicación N-Tier está pensada, en general, para que esos
servicios sean consumidos internamente por las capas del cliente de la aplicación y solo
por este, en ese caso tendríamos un control del desarrollo extremo a extremo. En este
entorno, los arquitectos conocen bastante bien la topología de despliegue de la
aplicación y otros factores a tener en cuenta de forma que pueden obviar ciertas
consideraciones y recomendaciones por no ser necesarias.
En las aplicaciones de servicios SOA esto no es así. El arquitecto tiene que planear
muy cuidadosamente el conjunto de servicios a ofertar, de forma que sean mínimos,
oferten la funcionalidad completa y ofrezcan al consumidor contratos de datos
(DTOs) desacoplados de los objetos internos del servicio (Entidades del Dominio).
Este punto es fundamental para que las aplicaciones consumidoras puedan
evolucionar a diferente ritmo que el Servicio SOA. Está relacionado precisamente
con uno de los principios de SOA: „Los Servicios en SOA deben ser Autónomos‟.
Además de la especial atención en el diseño de los servicios, es muy importante
tener en cuenta todos los aspectos relativos a seguridad, formatos, entornos, etc. del
servicio.
En general, un servicio puede ser desplegado a través de internet, en una intranet, en
una máquina local o en cualquier combinación de las tres posibilidades. Los servicios
desplegados a través de internet requieren decisiones sobre autorización, autenticación,
límites de zonas seguras etc. Usando para ello claves, certificados, etc. Los servicios a
consumir por una intranet, pueden basar su seguridad en sistemas como Active
Directory mientras que los servicios que se consumen en la misma máquina pueden no
requerir protección dependiendo de los usuarios y seguridad de la misma. Los servicios
que se despliegan en varios de estos entornos a la vez deberían implementar
mecanismos de autentificación y seguridad acordes a cada una de las posibilidades.
Ya hemos hablado sobre lo que es una aplicación de servicios y sobre los entornos
en los que se puede desplegar. No obstante, independientemente del entorno de
despliegue existen una serie de consideraciones comunes a tener en cuenta a la hora de
diseñar nuestra aplicación de servicios:
Diseña solo para el contrato del servicio: Los servicios deben ofrecerse a los
consumidores a través de una interfaz y nunca de su implementación. De la
misma forma, no se debe implementar ninguna funcionalidad que no esté
reflejada en la interfaz.
Las aplicaciones móviles tienen muchas restricciones que limitan lo que podemos
hacer con ellas e indican lo que no debemos hacer. Lo normal es que una aplicación
móvil siga estas recomendaciones:
Reducción de costes.
Escalabilidad.
Por otro lado las aplicaciones en la nube tienen también una serie de inconvenientes
a considerar antes de mudar una aplicación entera:
Arquetipos de Aplicación 401
Aplicaciones web: Estas aplicaciones son ideales para la nube ya que ofrecen
una interfaz estándar a través de HTML y HTTP y garantizan que el sistema es
multiplataforma.
Utiliza colas para sincronizar las distintas instancias de los niveles de servicio.
Los componentes que se usan en cada una de estas capas ya existen. Al crear una
OBA lo que hacemos es integrarlos y personalizarlos para que resuelvan nuestros
problemas. Los principales componentes de una OBA son:
Los problemas que solucionan las OBAs son muy diversos, pero en general se
pueden encajar dentro de alguna de estas 3 categorías:
En general, las capacidades o usos que se le pueden dar a las herramientas para
construir una OBA son:
Llegar a más usuarios: Utilizar una interfaz conocida, como office, para
llegar a más usuarios.
En general, aunque las OBAs pueden ser muy distintas unas de otras, existen una
serie de consideraciones de diseño que son comunes para todas ellas. Estas
consideraciones son:
Crea plantillas de documentos LOB para los diseños comunes que vayan a ser
reutilizados: Estas plantillas contienen metadatos que permiten enlazar datos
de la LOB posteriormente.
Capa de datos: Esta capa encapsula los mecanismos para almacenar y acceder
a los diferentes tipos de datos requeridos por la aplicación.
408 Guía de Arquitectura N-Capas orientada al Dominio con .NET 4.0 (Beta)
Capa de productividad: Esta capa organiza los documentos subidos por los
usuarios, permite crear y publicar reportes y generar un documento con
información de múltiples fuentes.
MOSS implementa todo lo que necesitamos para crear nuestro sistema de gestión de
contenidos. Estas son las características disponibles para explotar SharePoint:
Cuando se diseña una aplicación SharePoint hay muchas decisiones de diseño que
hay que tomar con cuidado. A continuación se presentan las principales
recomendaciones:
Integra tu LOB con office: Integra las herramientas de office que son útiles y
específicas para tu solución.
Expón los datos de los LOBs a través de servicios para que sean usados
por SharePoint y OBAs: Exponer los datos de los LOBs a través de servicios
permite que office y SharePoint los manipulen y los formateen para el usuario.
11
CAPÍTULO
El proceso de Diseño de
la Arquitectura
A partir de esta información deberemos generar los artefactos necesarios para que
los programadores puedan implementar correctamente el sistema. Como mínimo, en el
proceso de diseño de la arquitectura debemos definir:
A continuación vamos a examinar en más detalle cada uno de estos pasos para
comprender qué debemos definir y dejar claro en cada uno de ellos.
El proceso de Diseño de la Arquitectura 413
El desarrollo del caso de uso implica tratar algún requisito de calidad: Si el caso
de uso requiere tratar temas como la seguridad, la disponibilidad o la tolerancia
a fallos del sistema, es un caso de uso importante ya que permite tratar los
aspectos horizontales del sistema a la vez que se desarrolla la funcionalidad.
Es muy importante tener claro que no se debe tratar de diseñar la arquitectura del
sistema en una sola iteración. En esta fase del proceso de diseño analizamos todos los
casos de uso y seleccionamos solo un subconjunto, el más importante
arquitecturalmente y procedemos a su desarrollo. En este punto, solo definimos los
aspectos de la arquitectura que conciernen a los casos de uso que hemos seleccionado y
dejamos abiertos el resto de aspectos para futuras iteraciones. Es importante recalcar
que puede que en una iteración no definamos por completo algún aspecto del sistema,
pero lo que tenemos que tener claro es que debemos intentar minimizar el número de
cambios en futuras iteraciones. Esto no significa que no debamos “asumir que el
software evoluciona”, sino que cuando desarrollemos un aspecto del sistema no nos
atemos a una solución específica sino que busquemos una solución genérica que
permita afrontar los posibles cambios en futuras iteraciones. En definitiva, todo esto se
resume en dar pasos cortos pero firmes.
Es interesante a la hora de desarrollar el sistema tener en cuenta las distintas
historias de usuario, sistema y negocio. Las historias de usuario, sistema y negocio son
pequeñas frases o párrafos que describen aspectos del sistema desde el punto de vista
del implicado. Las historias de usuario definen como los usuarios utilizarán el sistema,
las historias de sistema definen los requisitos que tendrá que cumplir el sistema y como
se organizará internamente y las historias de negocio definen como el sistema cumplirá
con las restricciones de negocio.
Desmenuzar los casos de uso en varias historias de usuario, sistema y negocio
nos permitirá validar más fácilmente nuestra arquitectura asegurándonos de que cumple
con las historias de usuario, sistema y negocio de la iteración.
Tipo de
Ventajas Consideraciones
aplicación
Ofrecen alta
disponibilidad y fácil
acceso a los usuarios
fuera de su entorno
habitual.
Proporcionan una
interacción muy
dinámica.
Soportan escenarios
desconectados o con
conexión limitada.
Son altamente
interoperables
Una vez que tenemos decidido el tipo de aplicación que vamos a desarrollar, el
siguiente paso es diseñar la arquitectura de la infraestructura, es decir, la topología de
despliegue. La topología de despliegue depende directamente de las restricciones
impuestas por el cliente, de las necesidades de seguridad del sistema y de la
infraestructura disponible para desplegar el sistema. Definimos la arquitectura de la
infraestructura en este punto, para tenerla en consideración a la hora de diseñar la
arquitectura lógica de nuestra aplicación. Dado que las capas son más “maleables” que
los niveles, encajaremos las distintas capas lógicas dentro de los niveles del sistema.
Generalizando existen dos posibilidades, despliegue distribuido y despliegue no
distribuido.
El despliegue no distribuido tiene la ventaja de ser más simple y más eficiente en
las comunicaciones ya que las llamadas son locales. Por otra parte, de esta forma es
más difícil permitir que varias aplicaciones utilicen la misma lógica de negocio al
mismo tiempo. Además en este tipo de despliegue los recursos de la máquina son
compartidos por todas las capas con lo que si una capa emplea más recursos que las
otras existirá un cuello de botella.
El despliegue distribuido permite separar las capas lógicas en distintos niveles
físicos. De esta forma el sistema puede aumentar su capacidad añadiendo servidores
donde se necesiten y se puede balancear la carga para maximizar la eficiencia. Al
mismo tiempo, al separar las capas en distintos niveles aprovechamos mejor los
recursos, balanceando el número de equipos por nivel en función del consumo de las
capas que se encuentran en él. El lado malo de las arquitecturas distribuidas es que la
serialización de la información y su envío por la red tienen un coste no despreciable.
Así mismo, los sistemas distribuidos son más complejos y más caros.
Tras decidir qué tipo de aplicación desarrollaremos y cuál será su topología de
despliegue llega el momento de diseñar la arquitectura lógica de la aplicación. Para ello
emplearemos en la medida de lo posible un conjunto de estilos arquitecturales
conocidos. Los estilos arquitecturales son “patrones” de nivel de aplicación que definen
un aspecto del sistema que estamos diseñando y representan una forma estándar de
definir o implementar dicho aspecto. La diferencia entre un estilo arquitectural y un
patrón de diseño es el nivel de abstracción, es decir, un patrón de diseño da una
especificación concreta de cómo organizar las clases y la interacción entre objetos,
mientras que un estilo arquitectural da una serie de indicaciones sobre qué se debe y
qué no se debe hacer en un determinado aspecto del sistema. Los estilos arquitecturales
se pueden agrupar según el aspecto que definen como muestra la siguiente tabla:
418 Guía de Arquitectura N-Capas orientada al Dominio con .NET 4.0 (Beta)
Una vez realizados los pasos anteriores, tendremos una arquitectura candidata que
podremos evaluar. Si tenemos varias arquitecturas candidatas, realizaremos la
evaluación de cada una de ellas e implementaremos la arquitectura mejor valorada.
Cualquier arquitectura candidata debería responder a las siguientes preguntas:
Todas las decisiones sobre arquitectura deben plasmarse en una documentación que
sea entendible por todos los integrantes del equipo de desarrollo así como por el resto
de participantes del proyecto, incluidos los clientes. Hay muchas maneras de describir
la arquitectura, como por ejemplo mediante ADL (Architecture Description Language),
UML, Agile Modeling, IEEE 1471 o 4+1. Como dice el dicho popular, una imagen
vale más que mil palabras, por ello nos decantamos por metodologías gráficas como
4+1. 4+1 describe una arquitectura software mediante 4 vistas distintas del sistema:
Vista del proceso: La vista del proceso del sistema muestra cómo se comporta
el sistema tiempo de ejecución, qué procesos hay activos y cómo se
comunican. La vista del proceso resuelve cuestiones como la concurrencia, la
escalabilidad, el rendimiento, y en general cualquier característica dinámica
del sistema.
Vista física: La vista física del sistema muestra cómo se distribuyen los
distintos componentes software del sistema en los distintos nodos físicos de la
infraestructura y cómo se comunican unos con otros. Emplea para ello los
diagramas de despliegue.