Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                
0% encontró este documento útil (0 votos)
194 vistas4 páginas

El Verdadero Discipulado, Parte 2

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1/ 4

SERIE: EL VERDADERO DISCIPULADO

Estudio 2: ¿Qué es el discipulado?, parte 2.


9 Mark / 20 al 25 de septiembre del 2021
Texto inicial: 2 Timoteo 3:16-17

Repaso

La semana pasada iniciamos en nuestros grupos pequeños una nueva serie sobre el discipulado
cristiano. Estudiamos como en la Biblia, un discípulo es presentado como alguien que sigue la
vida y enseñanza de otra persona. Nuestro llamado como cristiano no solo es ser verdaderos
discípulos de Cristo sino también hacer discípulos. De hecho, el último mandato que Jesús le dio
a sus seguidores fue ir y hacer discípulos (Mateo 28:16-20).

En sentido general estudiamos como todo cristiano es llamado por Dios a contribuir en la obra de
la iglesia de hacer discípulos a través de relaciones deliberadas y mutuamente motivadoras.
Definimos DISCIPULADO como la motivación intencional de cristianos sobre la base de
relaciones deliberadas, de amor y entrenamiento en la Palabra de Dios.

En nuestro primer estudio de esta serie también consideramos 3 aspectos del verdadero
discipulado:

 En primer lugar, el Discipulado es INTENCIONAL y DELIBERADO – no es algo que


simplemente sucede, es el resultado de una iniciativa con propósito de parte de otros
cristianos.

 En segundo lugar, el discipulado es RELACIONAL porque implica más que solo


observar una lección que está en video – implica que los humanos compartamos nuestras
vidas unos con otros.

 En tercer lugar, el discipulado es Amoroso. Discipular es AMAR – cuidar del alma de


alguien de esta manera ES amor.

El discipulado intencional relacional no es frío y práctico, sino que se parece mucho a la misma
esencia de como Dios nos ha llamado a amarnos unos a otros dentro de su iglesia. Estamos
llamados a entregar de forma deliberada nuestras vidas para el bien espiritual de los
demás, así como Cristo entregó su vida para nuestro bien eterno. Ciertamente, Cristo hizo
por nosotros lo que nunca haríamos unos por otros, él cargó nuestros pecados como un sustituto
perfecto sin pecado, nosotros no podemos hacer eso. Sin embargo, estamos llamados en nuestro
estado imperfecto y caído, a reflejar ese perfecto amor de Cristo. ¿Cómo? Derramando nuestras
vidas para el bien espiritual de los demás, para su motivación y bendición. Eso es lo que la Biblia
describe como amor entre cristianos.

1
¿Cuáles otros elementos son distintivos del discipulado cristiano?

Hoy veremos otros 3 elementos del discipulado bíblico:

Cuarto, el discipulado bíblico implica entrenar en la Palabra de Dios.


El discipulado implica entrenamiento. Tiene mucho contenido para transmitir y aplicar. Sin
embargo, este entrenamiento no puede estar en cualquier cosa. Lo que le enseñamos a las
personas y le ayudamos a asimilar es lo que pasarán contemplando y haciendo el resto de su
vida. Si le enseñamos a la gente a depender de sí mismos o volverse a las cosas del mundo,
nunca encontrarán a Dios.

El discipulado debe estar fundamentado en la Palabra de Dios. Es la Palabra de Dios la que da


vida y no el consejo sabio del discipulador. La autocertificación del poder y habilidad de las
Escrituras para transformar es evidente a través de todo el canon.

2 Timoteo 3:16-17:

«Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir,
para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado
para toda buena obra» (RVR60). (Ver Isaías 55:10-11; Santiago 1:21; 2 Pedro 1:3-4).

En su forma más simple, hacer discípulos es la tarea diaria de enfocar a otros en la Palabra de
Dios. Como discipuladores, trabajamos duro para no cultivar una dependencia en nosotros y en
lugar de eso entrenar cristianos para que se vuelvan a las Escrituras de forma consistente.

IV. EL DISCIPULADO BÍBLICO ES COMO UNA TUBERÍA

Para comprender mejor el concepto de discipulado, consideremos la imagen de un conducto para


derramar bendiciones espirituales en la vida de otra persona.

A mi hijo le gustan los equipos de construcción. Él se emociona cuando una grúa toma una pieza
de tubería, la levanta en el aire y la coloca entre piezas contiguas de tubería.

El propósito de una tubería es mover el fluido hacia la dirección que debe ir, asegurarse de que
va desde la fuente hasta el destino previsto. El discipulado bíblico se parece mucho a lo que es
una tubería. Los cristianos que se fundamentan en la verdad de Dios se encuentran en la posición
de hacerles un bien a los demás. Dios usa a los cristianos como conductos de su verdad.
Tomamos la verdad de Dios, aprendemos a vivir de acuerdo a ella y luego lo pasamos a los
demás.

2
Las tuberías no tienen mucho de que enorgullecerse. La función de la tubería es simplemente
estar en el lugar correcto, llevando la verdad de Dios hacia los demás.

1ra Corintios 4:7


7 Porque ¿quién te distingue? ¿o qué tienes que no hayas recibido? Y si lo recibiste, ¿por qué te
glorías como si no lo hubieras recibido?

¿Eres tú una tubería?

V. UN PROCESO, NO UN PROGRAMA

¿Por qué puede ser fácil pensar en el discipulado como un programa en lugar de un
proceso?

Muchos programas han sido desarrollados para hacer «crecer» discípulos. Pero debido a que
cada persona es diferente y tiene diferentes luchas y tentaciones, el discipulado no puede ser
presentado muy fácilmente.

En esencia, el discipulado es más que todo cualquier cosa que hacemos de manera intencional
para ayudar a otros cristianos a crecer en santidad. Es un proceso de ser transformados a la
imagen de Cristo; no es un programa.

 Puede incluir la lectura de un buen libro cristiano y discutirlo;


 puede significar hacer un resumen de un libro de la Biblia juntos;
 puede significar tomar una clase de fundamento y discutirla durante el almuerzo;
 puede significar compartir conocimientos del sermón de la semana durante un café;
 puede significar llevar a tus hijos a jugar en la casa de otra madre para hablar acerca del
devocional del último domingo;
 puede significar invitar a un hombre o mujer solteros a cenar y hablarles sobre lo que
enseña la Escritura del matrimonio y la crianza... y podríamos seguir.

Lo que representa el discipulado en la práctica es algo muy amplio. La clave está en que
cualquier cosa que hagas debe estar fundamentada en la verdad de la Escritura y ser
presentada sobre la base de una relación intencional y amorosa. En pocas palabras, eso es el
discipulado.

CONCLUSIÓN
Mientras avanzamos en esta clase consideraremos muchas de las especificaciones de lo que
parece ser el discipulado en la práctica, por ejemplo, como discutir un libro con alguien, como
estudiar la Biblia juntos, y muchos otros temas específicos.

3
Pero conforme terminamos este estudio, quiero recordarte que:

 El discipulado es intencional y deliberado y por tanto requiere que decidas, con la ayuda
de Dios, trabajar para ser un canal de transmisión de bendición espiritual en la vida de
otra persona, como un aspecto de tu obediencia personal al mandato de Cristo de ir y
hacer discípulos.

 El discipulado es relacional – requiere que busques conocer a otras personas e invertir


tiempo en ellas para su bien espiritual. No puede ser hecho a través de un video o cursos
de internet... requiere que (como parte de la iglesia local) inviertas tiempo real en
personas reales.

 El discipulado es amar – no existe una mejor manera en que puedas mostrar amor a tu
hermano creyente en Cristo que considerando de forma deliberada y seria como puedes
hacerle un bien espiritual a través de tu relación con él.

 El discipulado implica entrenamiento en la Palabra de Dios – queremos que sea la


Palabra la que transforme y cambie a las personas, y no nuestras opiniones e ideas
personales.

Lee el siguiente texto e identifica los elementos del discipulado cristiano:

1ra Tesalonicenses 2:7-8

7 Antes fuimos tiernos entre vosotros, como la nodriza que cuida con ternura a sus
propios hijos.

8 Tan grande es nuestro afecto por vosotros, que hubiéramos querido entregaros no sólo
el evangelio de Dios, sino también nuestras propias vidas; porque habéis llegado a sernos
muy queridos.

También podría gustarte