Talibanes
Talibanes
Talibanes
Casi veinte años después de esa invasión que marginó a los talibanes de su poder en
esta nación asiática, la situación de 1996 parece más que real. En una ofensiva que ha
neutralizado en cuestión de semanas los poderes estatales del Gobierno de Ashraf Ghani,
este grupo islamista está ya a las puertas de Kabul con la intención de retomar su poder
tras confirmar su presencia en más del 90 % del país.
La Unión Soviética trató desde 1980 establecer un gobierno socialista que respondiera a
las doctrinas lanzadas desde Moscú. Para ello, la URSS invadió militarmente el país con
la certeza de poder establecer rápidamente su influencia debido a que para entonces
Afganistán era una nación eminentemente rural y extremadamente pobre. Pero se
equivocaron.
La guerra de Afganistán supuso una inversión histórica para la URSS que prácticamente
la catapultó a la quiebra y posterior desaparición. Tras el fin de su influencia en la zona,
se abrió un periodo de inestabilidad política en el que varios señores de la guerra
establecieron su poder en determinadas zonas y realizaban enfrentamientos étnicos y
tribales entre sí sin tener un poder fáctico sobre todo el estado.
Los talibanes fueron derrocados del poder en 2001, tras una incursión militar
liderada por Estados Unidos, pero poco a poco el grupo islamista fue
ganando fuerza a lo largo y ancho de Afganistán, hasta retomar
efectivamente el control del país a mediados de agosto de 2021.
En que creen los Talibanes: Los talibanes gobernaron de acuerdo con una
interpretación rígida de la ley islámica, la Sharia. Las ejecuciones públicas y las
flagelaciones eran comunes, y la mayoría de las mujeres tenía prohibido trabajar o
estudiar y se les obligaba a usar un traje que lo cubría todo en público, el burka. Los
talibanes prohibieron los libros y películas occidentales y destruyeron artefactos culturales
de otras tradiciones, incluidas las estatuas gigantes de Buda de 1.500 años en el valle
central de Bamiyán.