LETANIAS
LETANIAS
LETANIAS
Oh Dios, que habéis instruido los corazones de los fieles con la luz del Espíritu Santo,
concedednos, según el mismo Espíritu, conocer las cosas rectas y gozar siempre de sus
divinos consuelos. Por Jesucristo, Señor Nuestro. Así sea.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo. Perdónanos Señor.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo. Escúchanos Señor.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, Ten piedad de nosotros.
Las Misericordias de Dios, son más grandes que todas sus obras.
Por eso cantaré las Misericordias de Dios para siempre.
Letanías a Dios Padre
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo... ¡Perdónanos, señor!
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo... ¡Escúchanos, señor!
Cordero de Dios que quitas los pecados del mundo... ¡Ten piedad de nosotros, señor!
Te lo pedimos por Jesucristo Tu Hijo nuestro señor, por intercesión de María Santísima y
de todos los Santos. Amén.
Letanías al Padre Celestial
Padre Santo. Te alabamos
Padre Justo. Te alabamos
Padre que eres Perfecto. Te alabamos
Padre que eres Uno con el Hijo. “
Padre que amas al Hijo. “
Padre que estás en el Hijo. “
Padre que enviaste al Hijo. “
Padre de las luces de quien desciende toda dádiva buena y todo don perfecto. Te alabamos
Padre a quien se va por Jesús.
Padre a quien podemos conocer en Jesús.
Padre a quien contemplamos en Jesús.
Padre que estás con Jesús.
Padre que estás con Jesús.
Padre cuyo Nombre ha manifestado Jesús.
Padre que concedes todo lo que Te pedimos en nombre de Jesús.
Padre que Amas a todos los que amamos a Jesús.
Padre a quien plugo dar el Reino a la gente sencilla.
Padre que debe ser Amado en espíritu y verdad.
Padre en cuya Casa hay muchas moradas.
Padre que Ves en lo secreto.
Padre que siempre Trabajas.
Padre que Honras a quien Te sirve.
Padre que eres el Viñador.
Padre a quien podemos Glorificar dando mucho fruto.
Abba Padre a Quien todo es posible.
Padre en cuyas Manos encomendó Jesús su Espíritu.
Padre de Quien salió y Retornó Jesús.
Padre que eres Glorificado por Jesús.
Padre que Glorificas a Jesús.
Padre a Quien Jesús pidió otro Consolador.
Padre que prometiste el Espíritu Santo.
Padre de Quien procede el Espíritu de la Verdad.
Padre a Quien bendijo Jesús para revelar los Misterios del Reino a la gente sencilla.
¡Oh Padre Mío! Amadísimo Te adoro, Te doy Gracias e imploro Tu clemencia y me ofrezco
hoy a Ti, con todas mis obras, en unión del Verbo Divino y en expiación universal, sólo porque
Te amo, Ampárame en este día que Te consagro mi corazón. Amén.
Padre nuestro, que estás en los cielos, ten misericordia de nosotros.
Padre de Nuestro Señor Jesucristo, ten misericordia de nosotros.
Padre de las misericordias y Dios de todo consuelo, ten misericordia de nosotros.
Padre, hemos pecado contra el cielo y contra Ti, ten misericordia de nosotros.
Dios Padre, bendito por la eternidad, ten misericordia de nosotros.
Padre, digno de ser adorado en Espíritu y en verdad, ten misericordia de nosotros.
Padre, sin el que nadie va al Hijo, ten misericordia de nosotros.
Padre de la Gloria y Señor de cielos y tierra, ten misericordia de nosotros.
Tú que enviaste a tu Hijo al mundo, ten misericordia de nosotros.
Tú de quien toma nombre toda paternidad en el cielo y en la tierra, ten misericordia de
nosotros.
Tú que nos elegiste en el Hijo antes de la creación del mundo, ten misericordia de nosotros.
Tú, que nos predestinaste como hijos de adopción, ten misericordia de nosotros.
Tú, que escondes tus misterios a los prudentes y sabios y los revelas a los pequeños, ten
misericordia de nosotros.
Tú, que nos has bendecido con toda bendición espiritual en los cielos, ten misericordia de
nosotros.
Tú, que perdonas nuestros pecados, ten misericordia de nosotros.
Tú, que nos has elegido para que seamos santos e inmaculados en tu presencia, ten
misericordia de nosotros.
Tú, que das el espíritu bueno a quienes te lo piden, ten misericordia de nosotros.
Padre de las luces, del cual desciende todo bien, ten misericordia de nosotros.
Padre que das vida y resucitas a los muertos, ten misericordia de nosotros.
Padre que ves en lo escondido, ten misericordia de nosotros.
Agricultor que trabajas hasta ahora, ten misericordia de nosotros.
Tú, que haces salir el sol sobre buenos y malos, ten misericordia de nosotros.
Tú, que haces llover sobre justos e inicuos, ten misericordia de nosotros.
Tú, que has contado todos los cabellos de nuestras cabezas, ten misericordia de nosotros.
Tú, que no perdonaste a tu propio Hijo, sino que lo entregaste por todos nosotros, ten
misericordia de nosotros.
Tú, que nos has llamado para asociarnos a tu Hijo, ten misericordia de nosotros.
Tú, que nos has gratificado en tu amado Hijo, ten misericordia de nosotros.
Tú, que nos has transportado al Reino del Hijo de tu amor, ten misericordia de nosotros.
Tú, que nos has hecho dignos de tener parte con tus santos, ten misericordia de nosotros.
Tú, que nos has invitado a las bodas del Hijo, ten misericordia de nosotros.
Tú, que nos has amado y nos has dado el consuelo eterno, ten misericordia de nosotros.
Tú, que amaste tanto al mundo que le has dado a tu Hijo Unigénito, ten misericordia de
nosotros.
Tú, que con magnífica voz proveniente del cielo ensalzaste a tu Hijo, ten misericordia de
nosotros.
Tú, que te has complacido en tu Hijo, ten misericordia de nosotros.
Tú, a quien ha complacido darnos el reino, ten misericordia de nosotros.
Tú, cuya Faz contemplan siempre los ángeles en los cielos, ten misericordia de nosotros.
Tú, que entregaste al Hijo para redimir al siervo, ten misericordia de nosotros.
Tú, que tanto amor nos has dado como para que nos llamemos y seamos tus hijos, ten
misericordia de nosotros.
Tú, que has querido que nos transformemos a imagen de tu Hijo, ten misericordia de
nosotros.
Tú, que estás sobre todos, por todos y en todos nosotros, ten misericordia de nosotros.
Tú, que has preparado un reino a tus elegidos antes de la creación del mundo, ten
misericordia de nosotros.
Padre de los huérfanos y juez de las viudas, ten misericordia de nosotros.
Tú, que sin acepción de personas juzgas a cada uno según sus obras, ten misericordia de
nosotros.
Tú en cuya casa hay muchas moradas, ten misericordia de nosotros.
Padre benigno, paciente y rico en misericordia, ten misericordia de nosotros.
Oremos. Oh Dios, que por boca de Cristo, tu Hijo, te has manifestado como el sembrador de
la Buena semilla y el cultivador de las ramas selectas que se encuentran en todos los hijos de
tu Iglesia, concédenos a tus fieles, que somos tu viña y tu campo, que, quitadas las espinas y
abrojos, demos frutos dignos y abundantes.
Oh Dios, virtud inconmovible y luz eterna, mira propicio a todo el cuerpo de tu Iglesia y por tu
perpetua providencia cumple en él tranquilamente la obra de salvación, para que todo el
mundo experimente y vea cómo se yergue lo caído y cómo se renueva lo envejecido, y que
todas las cosas son de nuevo creadas por Aquél de quien tuvieron principio.
Oh Dios, excelsitud de los humildes y fortaleza de los justos, que te has dignado instruir al
mundo por medio de tu Hijo Unigénito de tal modo que toda acción suya se convirtiera en
enseñanza nuestra, suscita en nosotros el fervor de tu Espíritu para que lo que Aquél nos
enseñó con su palabra y su ejemplo podamos imitarlo eficazmente.
Oh Dios, que haces que las mentes de los fieles se unan en una sola voluntad, concédenos
amar lo que mandas y desear lo que prometes para que en medio de las mundanas
vicisitudes nuestros corazones se fijen allí donde están los gozos verdaderos.
Oh Dios, de quien procede todo lo bueno, otorga a los que te suplicamos que pensemos
mediante tu inspiración lo que es recto y bajo tu gobierno lo cumplamos. Por nuestro Señor
Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo, Dios, por los siglos
de los siglos. Amen.
Son muy buenas las letanías y se conocen casos de verdaderos milagros por el rezo
constante de ellas. Son como miles de flores que suben a Dios y no se apartan de Él,
hasta que Él las mire..... Señor, ten piedad de nosotros.
Padre Celestial; que Tu voluntad se cumpla en la tierra como en el cielo.
Verbo Divino; que Tu voluntad se cumpla en la tierra como en el cielo.
Espíritu Santo; que Tu voluntad se cumpla en la tierra como en el cielo.
Adorable Trinidad; que Tu voluntad se cumpla en la tierra como en el cielo.
Voluntad de Dios, infinitamente Santo reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios infinitamente Perfecta reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, infinitamente Recta reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, impenetrable en tus decretos reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, infinitamente adorable reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, todopoderosa reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, que haces todo con sabiduría reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, ocupación eterna de los santos reina soberanamente sobre nosotros.
Volunta de Dios, alimento de todas las almas justas reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, amor de los corazones fieles reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios que premias todas las cosas reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, medida del mérito y del premio de nuestras obras reina soberanamente
sobre nosotros.
Voluntad de Dios, alegría y delicia de nuestras almas, reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, nuestra fuerza y nuestra seguridad reina soberanamente sobre nosotros
Voluntad de Dios, nuestra consolación y nuestro reposo, reina soberanamente sobre
nosotros.
Voluntad de Dios, remedio a nuestros males y a las penas de esta vida reina soberanamente
sobre nosotros.
Voluntad de Dios, nuestra esperanza y sostén en la muerte reina soberanamente sobre
nosotros.
Voluntad de Dios, cuyo reino es nuestro único fin, nuestra salvación, nuestra fidelidad,
reina soberanamente sobre nosotros.
Señor Dios Todopoderoso, soberanamente bueno e infinitamente sabio; por el mérito de
la perfecta sumisión con la cual Cristo, nuestro Salvador, aceptó el cáliz de su Pasión;
por la conformidad de su divina Madre a tu voluntad santa
y por la perfecta obediencia de San José a todas tus órdenes:
concédenos la gracia de cumplir en todas las cosas,
y hasta el momento de nuestra vida, tu santísima, justísima y adorabilísima voluntad,
tal como se cumple en el cielo. Amén.
Son muy buenas las letanías y se conocen casos de verdaderos milagros por el rezo
constante de ellas. Son como miles de flores que suben a Dios y no se apartan de Él,
hasta que Él las mire..... Señor, ten piedad de nosotros.
Padre Celestial; que Tu voluntad se cumpla en la tierra como en el cielo.
Verbo Divino; que Tu voluntad se cumpla en la tierra como en el cielo.
Espíritu Santo; que Tu voluntad se cumpla en la tierra como en el cielo.
Adorable Trinidad; que Tu voluntad se cumpla en la tierra como en el cielo.
Voluntad de Dios, infinitamente Santo reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios infinitamente Perfecta reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, infinitamente Recta reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, impenetrable en tus decretos reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, infinitamente adorable reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, todopoderosa reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, que haces todo con sabiduría reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, ocupación eterna de los santos reina soberanamente sobre nosotros.
Volunta de Dios, alimento de todas las almas justas reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, amor de los corazones fieles reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios que premias todas las cosas reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, medida del mérito y del premio de nuestras obras reina soberanamente
sobre nosotros.
Voluntad de Dios, alegría y delicia de nuestras almas, reina soberanamente sobre nosotros.
Voluntad de Dios, nuestra fuerza y nuestra seguridad reina soberanamente sobre nosotros
Voluntad de Dios, nuestra consolación y nuestro reposo, reina soberanamente sobre
nosotros.
Voluntad de Dios, remedio a nuestros males y a las penas de esta vida reina soberanamente
sobre nosotros.
Voluntad de Dios, nuestra esperanza y sostén en la muerte reina soberanamente sobre
nosotros.
Voluntad de Dios, cuyo reino es nuestro único fin, nuestra salvación, nuestra fidelidad,
reina soberanamente sobre nosotros.
Señor Dios Todopoderoso, soberanamente bueno e infinitamente sabio; por el mérito de
la perfecta sumisión con la cual Cristo, nuestro Salvador, aceptó el cáliz de su Pasión;
por la conformidad de su divina Madre a tu voluntad santa
y por la perfecta obediencia de San José a todas tus órdenes:
concédenos la gracia de cumplir en todas las cosas,
y hasta el momento de nuestra vida, tu santísima, justísima y adorabilísima voluntad,
tal como se cumple en el cielo. Amén.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, perdónanos Señor
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, escúchanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, ten piedad de nosotros.
Jesús Manso y humilde de corazón,
Haz nuestro corazón semejante al tuyo.
Omnipotente y sempiterno Dios, mira al Corazón de tu muy amado Hijo y a las alabanzas y
satisfacciones que te tributa en nombre de los pecadores; concede benigno el perdón a los
que invocamos tu misericordia, en el nombre del mismo Jesucristo, tu Hijo, que contigo vive
y reina en unión del Espíritu Santo Dios, por todos los siglos de los siglos. Amén.