Bioetica 3-4
Bioetica 3-4
Bioetica 3-4
«La dignidad está por encima de cualquier precio y, por lo tanto, no tiene
equivalente» (E. Kant)
Dignidad:
“El interés y el bienestar del ser humano prevalecerán frente al exclusivo interés
de la sociedad o de la ciencia”
Convenio sobre los Derechos Humanos y la Biomedicina
4 principios
Por el bien de la totalidad del individuo, es lícito privarse de alguna parte como
único camino para obtener el bien de la totalidad.
Por ejemplo, hay que privar a la persona de un miembro cancerígeno para lograr
que su salud sea mejor.
Además, se suele exigir que la relación “todo-parte” sea restringida al individuo
y no se aplique a la relación individuo-sociedad.
Así, por ejemplo, no sería lícito acabar con la vida de una persona inocente para
salvar a la sociedad de un peligro.
Debe procurarse que todos los que participan en una acción puedan ejercer
conscientemente su libertad.
Se trata de un concepto de libertad que no es simple libre arbitrio, sino que
asume las consecuencias que lleva consigo la elección hecha.
El valor moral no atenderá sólo a la autonomía con la que se ha realizado la
acción, sino también a la realización de la persona en esa elección
Bioética principialista
Principios de la bioética
Principio de autonomía
Principio de beneficencia
Principio de no maleficencia ( primum non nocere ).
Principio de justicia
Sts caso Canterbury vs Spence: consentimiento informado
El caso
Uno de los primeros reconocimientos legales de que los médicos eran demasiado
paternalistas en la forma como practicaban su profesión y cómo se comunicaban con los
pacientes, fue el hito del caso Schloendorff vs. Society of New York Hospital, que tuvo
lugar en 1914, en la Corte de Apelaciones de Nueva York. En ese caso, un médico
creyó que estaba actuando a favor de los mejores intereses del paciente y removió un
tumor maligno en contra de los deseos del mismo; fue hallado culpable de agresión con
lesiones. En la opinión de la mayoría, presidida por el juez Benjamín Cardozo, se
consideró que “un cirujano que efectúa una operación sin el consentimiento del paciente
comete una agresión”.
Jerry Watson Canterbury (1939-2017) fue un empleado del FBI que sufrió una ruptura
de disco en 1958. Fue operado por el Dr. William T. Spence, un conocido
neurocirujano de Washington, y como resultado de la cirugía, y una posterior caída de
su cama mientras estaba hospitalizado, terminó con una hemiplejía y con incontinencia.
Canterbury demandó por negligencia. Fue dado de alta del hospital tres meses y medio
después, con las piernas parcialmente paralizadas. Durante el juicio en 1968, la defensa
argumentó que, dado que Canterbury carecía del testimonio de un experto, el caso no
podía continuar. Esta falta de testimonio fue probablemente el resultado de una
"conspiración de silencio" que, en ese momento, impidió que los médicos testificaran
unos contra otros. El juez Spottswood W.Robinson del Tribunal de Circuito de DC
permitió que el caso llegara a un jurado, decidiendo que no era necesario un experto en
tales casos y que el estándar para el consentimiento informado era lo que un paciente
razonable querría saber al presentar un informe. En el segundo juicio, el Dr. Spence
reconoció que le había dicho a Canterbury y a su madre que las complicaciones de la
cirugía podrían resultar en una "debilidad" sin mencionar la parálisis, y que evitó más
información para no disuadir al paciente de continuar con la operación.
La justicia resolvió que médicos y cirujanos no podían ocultarse más detrás de los
privilegios terapéuticos, como excusa para una falta de adecuada revelación a los
pacientes [2]. Decisiones adicionales de la Corte fueron llevando efectivamente al
comienzo de una nueva era de cómo los cirujanos necesitarían reconceptualizar la
relación médico-paciente.
Autonomía y autodeterminación
La autonomía no es ilimitada, es parte de la libertad responsable del ser humano que
sabe que debe actuar respetando la libertad de los demás, aunque ello le limite o le
ocasione un problema, y sabe también que debe actuar conforme a su propia dignidad
de persona. Esto le obliga moralmente a cuidar y respetar los bienes básicos que
conforman su dignidad: la vida, la salud, la conciencia propia y de los demás.
Competencia vs capacidad
Aunque tanto la competencia como la capacidad se refieren a la capacidad del
paciente para tomar decisiones autónomas, cada una se determina de manera
diferente y se usa en diferentes contextos.
o Competencia: término legal que solo puede determinar el tribunal
o Capacidad de toma de decisiones: evaluada por un médico en el ámbito
sanitario
Los paciente deben reunir cuatro condiciones para que sus decisiones sean
racionales y autónomas:
La comunicación exige mucho más de los médicos, ya que deben entregar a los
pacientes toda la información que necesitan para tomar sus decisiones.
Incluye:
o La explicación de diagnósticos, pronósticos y tratamientos complejos en
un lenguaje simple
o Confirmar o corregir la información que los pacientes puedan haber
obtenido de otras fuentes
o Asegurarse que los pacientes entiendan las opciones de tratamiento,
incluidas las ventajas y desventajas de cada una
o Contestar las preguntas que tengan y comprender la decisión que tome el
paciente y, si es posible, sus razones.
Persuasión
o Es el uso de argumentos razonables con la intención de inducir en otra
persona la aceptación de una determinada opción
o No anula la autonomía,
o Es éticamente aceptable siempre y cuando la argumentación sea leal y no
esté sesgada por intereses ajenos al paciente
Manipulación
o Todos intento de modificar la decisión por medios no puramente
persuasivos sin llegar a la amenaza ni a la restricción física
o Informacional: falsear la información
o Psicológica, relacionado con los procesos mentales
o Opciones disponibles modificando sus características o atractivos
Coacción
o Es el uso de amenazas o ejecuciones de daños para influir en alguien
o Éticamente es inaceptable
Consentimiento informado
Autonomía.-
Beneficencia.-
Principio de Beneficencia
La beneficencia exige que los profesionales sanitarios sientan como una motivación
propia el mejor interés del paciente, por encima de otras razones menos nobles (p. ej.,
reembolso).
Beneficencia paternalista
Cuando el médico actúa desde un espíritu benevolente al proporcionar un tratamiento
beneficioso que, en opinión del médico, es lo mejor para el paciente, sin consultar al
paciente o anulando los deseos del paciente, se considera "paternalista".
En este caso, el deber de beneficencia requiere que el médico intervenga para salvar
la vida del paciente o colocar al paciente en un entorno protector, en la creencia de que
el paciente está comprometido y no puede actuar en su mejor interés en este momento.
Los hechos del caso son extremadamente importantes para juzgar que la autonomía
del paciente está comprometida.
Justicia
Se basa fundamentalmente en que todas las personas tengan las mismas oportunidades
de diagnóstico y tratamiento en caso de enfermedad. Los cambios sucedidos en la
medicina de los últimos 50 años terminaron con una medicina accesible para todos los
enfermos a través de la beneficencia pública o la atención privada. Los gastos actuales
en sanidad crecen en forma geométrica y crean un sensible desfase con los recursos
presupuestarios, que solo crecen en forma aritmética.
El mayor consumo médico, los gastos provocados por los métodos de diagnóstico y
tratamiento actuales, se analizan y valoran en términos económicos, en busca de mejor
coste-eficacia y coste-eficiencia. Su resultado ha creado la «medicina gerenciada», que
impone regulaciones administrativas que perturban fuertemente la relación médico-
paciente y, en muchos casos, atrasan diagnósticos y tratamientos.
La falta o imposibilidad de poder asignar recursos en forma igualitaria crea
oportunidades, lo que en economía se conoce como «coste de oportunidad», que
significa no haber aplicado el único recurso disponible a quien más lo necesita o más
puede serle útil. Esta situación se ve diariamente en la última cama libre de la unidad de
terapia intensiva, la última dosis de determinado fármaco o el último turno en una lista
de atención o espera.
Hace referencia al concepto de equidad en medicina, lo que significa que las ventajas y
las cargas de la atención sanitaria deben repartirse de forma equitativa. En un plano
individual, esto supone que todas las personas tienen derecho a la igualdad en la
atención médica, con independencia de factores como su sustrato étnico, la ubicación
geográfica o la capacidad o no de pagar la asistencia. En la práctica, este noble objetivo
es imposible de alcanzar para todos y cada uno de los pacientes. También resulta difícil
para la sociedad en su conjunto, dado que la atención sanitaria es un recurso finito y, a
veces, escaso. COSTE Y OPORTUNIDAD Y TERCER PAGADOR La aparición de la
atención de la salud a través de obras sociales y seguros ha permitido que una gran
cantidad de la población acceda a los servicios de salud, de modo que en la relación
médico-paciente aparece la figura del «tercer pagador», obligado a administrar los
fondos recaudados, interviniendo entre un enfermo medicalizado y un médico que busca
la mejor elección entre los métodos diagnósticos y los tratamientos que se deben
emplear. A veces el médico debe optar entre el «principio de autonomía del enfermo» y
el de «justicia», pensando en el bien de toda la cohorte con la administración más justa
de los recursos escasos, que pertenecen a la obra social que la atiende.
Alcance
1. La Declaración trata de las cuestiones éticas relacionadas con la medicina, las
ciencias de la vida y las tecnologías conexas aplicadas a los seres humanos,
teniendo en cuenta sus dimensiones sociales, jurídicas y ambientales.
2. La Declaración va dirigida a los Estados. Imparte también orientación, cuando
procede, para las decisiones o prácticas de individuos, grupos, comunidades,
instituciones y empresas, públicas y privadas
Objetivos
Principios
1.
i. Dignidad Humana y derechos humanos
ii. Beneficios y efectos nocivos
iii. Autonomía y responsabilidad individual
iv. Cosentimiento
v. Personas carentes de la capacidad para dar su consentimiento
vi. Respeto de la vulnerabilidad humana y la integridad personal
vii. Privacidad y confidencialdad
viii. Igualdad, justicia y equidad
ix. Igualdad, justicia y equidad
x. No discriminación y no estigmatización
xi. Respeto de la diversidad cultural y del pluralismo
xii. Solidaridad y cooperación
xiii. Responsabilidad social y salud
xiv. Aprovechamiento compartido de los beneficios
xv. Protección de las generaciones futuras
xvi. Protección del medio ambiente
SEMANA 4
Bioética personalista
«La dignidad está por encima de cualquier precio y, por lo tanto, no tiene
equivalente» (E. Kant)
Dignidad:
“El interés y el bienestar del ser humano prevalecerán frente al exclusivo interés
de la sociedad o de la ciencia”
Convenio sobre los Derechos Humanos y la Biomedicina
4 principios
Por el bien de la totalidad del individuo, es lícito privarse de alguna parte como
único camino para obtener el bien de la totalidad.
Por ejemplo, hay que privar a la persona de un miembro cancerígeno para lograr
que su salud sea mejor.
Además, se suele exigir que la relación “todo-parte” sea restringida al individuo
y no se aplique a la relación individuo-sociedad.
Así, por ejemplo, no sería lícito acabar con la vida de una persona inocente para
salvar a la sociedad de un peligro.
Debe procurarse que todos los que participan en una acción puedan ejercer
conscientemente su libertad.
Se trata de un concepto de libertad que no es simple libre arbitrio, sino que
asume las consecuencias que lleva consigo la elección hecha.
El valor moral no atenderá sólo a la autonomía con la que se ha realizado la
acción, sino también a la realización de la persona en esa elección
Bioética principialista
Principio de autonomía
Principio de beneficencia
Principio de no maleficencia ( primum non nocere ).
Principio de justicia
Alcance
1. La Declaración trata de las cuestiones éticas relacionadas con la medicina, las
ciencias de la vida y las tecnologías conexas aplicadas a los seres humanos,
teniendo en cuenta sus dimensiones sociales, jurídicas y ambientales.
2. La Declaración va dirigida a los Estados. Imparte también orientación, cuando
procede, para las decisiones o prácticas de individuos, grupos, comunidades,
instituciones y empresas, públicas y privadas
Objetivos
Principios
1.
i. Dignidad Humana y derechos humanos
ii. Beneficios y efectos nocivos
iii. Autonomía y responsabilidad individual
iv. Cosentimiento
v. Personas carentes de la capacidad para dar su consentimiento
vi. Respeto de la vulnerabilidad humana y la integridad personal
vii. Privacidad y confidencialdad
viii. Igualdad, justicia y equidad
ix. Igualdad, justicia y equidad
x. No discriminación y no estigmatización
xi. Respeto de la diversidad cultural y del pluralismo
xii. Solidaridad y cooperación
xiii. Responsabilidad social y salud
xiv. Aprovechamiento compartido de los beneficios
xv. Protección de las generaciones futuras
xvi. Protección del medio ambiente