Libro: Gente Toxica

Capítulo 3
El descalificador

¡Excelente trabajo!, lastima que lo entregaste tarde.

Muchas de las personas desperdician a diario minutos de sus horas y de

su tiempo tratando de descalificar a todos aquellos que se encuentran a

su alrededor. Parece que disfrutan. Menospreciar y rebajar a los demás,

sea cual sea la tarea que están realizando o el vínculo que tengan con

sus víctimas.

¿Si alguna vez pasaste este tipo de ataque verbal, cómo es posible que

te hayas cuestionado el origen de estas agresiones?, que te hayas

preguntado cuáles fueron las causas y la motivación y seguramente no

hayas encontrado la respuesta.

El descalificador, tiene por objetivo controlar nuestra autoestima,

hacernos sentir nada ante el demás, para que esta forma, pueda brillar y

ser el centro del universo.

Si haces algo el descalificador te criticará por accionar y si no accionas

te juzgará por no hacerlo punto su especialidad son unos dobles

mensajes y los mensajes ambivalentes. Los descalificadores hoy tendió

San y mañana te bajan del pedestal en un instante. Desestabilizan tus

emociones y te roban un sueño su idea es que vivas desconfiando que

te sientas inseguro y seas dependiente de sus palabras y de sus

opiniones.
 Invalidar, descalificar, manipularse los objetivos coma las metas de

descalificador. Él procura tener el control y poder sobre tus emociones

como tu alma y tu razón para luego destruir tu estima y que entonces

que pases a depender absolutamente de el. “Es el digno representante

de la gente toxica”

Aprendamos a reconocernos y a accionar de la forma más productiva y

eficaz para que nadie salga herido ni perjudicado.

2. Como reconocer a un descalificador y evitar salir lastiman

Conocer identificar el modus operandi del descalificador nos permitirá

neutralizar sus ataques, defendemos y resguardemos inteligentemente y

así coartar y limitar su avance y sus intenciones.

Comencemos a visualizar las tácticas y estrategias del descalificador:

 Se esconde detrás de máscaras: juega el papel del amigo coma

del compañero y por qué no hasta de un hermano.

 Finge estar interesado en lo que haces, pero en su mente tramará

cómo sacar ventaja de aquello en lo que está trabajando.

 Es irónico y sarcástico: mediante indirectas e insinuaciones te

hará creer que lo que estás haciendo no está del todo bien,

influyendo de esta manera negativamente en la motivación y

energía que volcaste en tu proyecto.

 Vivirá usando una lupa para ver con detalle tus defectos, para

luego utilizarlos a su favor y poder desvalorizarte en el momento

indicado convirtiéndote en su presa y en su víctima.

para que su figura y su poder se aumenten.

 Estar atento a escuchar los reclamos y las quejas que tú le hagas

sobre ti mismo coma para que en el momento adecuado y certero

pueda sacarlos a la luz y menoscabar tu estima y tu poder.

 A tus errores y tus fracasos y reducir al máximo el valor de tus

logros y de tus éxitos.

 Por los momentos intentar hacer un Ángel, un Ángel

enmascarado y agazapado, que en el momento preciso será

capaz de dar la estocada final. Si por alguna circunstancia debe

enfrentarse o competir con él, ejemplo: en un proyecto laboral

esté “Ángel” no le va a importar haberte dicho hermano en algún

momento, sino que avanzar a toda la artillería lista para

desvalorizar tus logros y hacerte quedar como una pobre persona

que no consigue nada de lo que se propone en la vida.

 Vivirá escondido detrás de una máscara para jugar así su mejor

juego, ocultando su mal humor coma su irritabilidad y falta de

dominio propio al no poder presentarse y relacionarse tal cual es.

 Su objetivo es tener poder y control sobre todo cuanto sucede y

sobre todos aquellos que estén a su alcance.

 Solo él tiene razón y conoce a la perfección todos los temas y

Asuntos que puedan tratarse.

¿Conoces a alguien así?

Seguramente en cientos has tenido que convivir con muchos de ellos, y

hoy, mientras estás leyendo esto, estás viendo mentalmente el retrato

convivencia. Ellos sienten que, cuanto mayor control tienen, mayor es su

satisfacción.

Todos alguna vez fuimos víctimas de un descalifica buscador; incluso los

mismos que ahora descalifican han sufrido en su momento permanentes

agresiones que lastimaron su estima y sus ganas de crecer.

3. Poder y control

La mentalidad de la persona descalificadora es avasallante y precisa.

Sabe con exactitud cuál es el dar do que saldrá de su boca, ya que su

fin es destruir tu estima.

Es detallista: observará a la perfección cada una de tus acciones para

poder así determinar en qué momento disparar los perdigones.

El descalificador se encargará de hacerte cumplir sus exigencias o, de lo

contrario, te hará la vida imposible.

Otro rasgo llamativo de este tipo de personas es que pretenden “ser

perfectas”; el descalificador jamás podrá admitir un error, y por supuesto

no sentirá culpa por nada; Por otro lado, nada de lo que sucede obtiene

su atención, con excepción de aquello relacionado con lo que él quiere

alcanzar.

Control, poder y más control y poder, es lo que anhelan estas personas:

control sobre tus acciones y tú emociones. Su agresión aumentará en la

medida en que tomen conciencia de que quienes están a su alrededor,

en cuanto puedan, se alejarán de sus vidas, perdiendo así todo lo que

alguna vez se esforzaron por alcanzar.

Muchas personas desperdician a diario minutos y horas de su periodo

tratando de infamar a todo aquellos que se encuentran a su entorno. En

primer lugar, la persona descalificadora se tomará tiempo para

conocerte; de a poco, encontrará una forma de satisfacer tus

necesidades, de llevarte paz y cooperar contigo, para que, una vez que

le hayas dado toda tu confianza, sean sus palabras y sus decisiones las

que tengan poder y peso sobre tu vida. Muchas veces hasta dudamos

de lo que somos capaces de hacer. Desde ese lugar de autoridad y

poder, toda palabra que salga de su boca será aceptada por ti, y como

no sabrás cómo manejar la frustración y la desvalorización continuas

que recibes, reprimirás toda la bronca contenida. Como no serás capaz

de enfrentar la situación, inconscientemente te equivocarás más

seguido, quedando expuesto a la palabra autorizada que descalifica y

subestima todas tus emociones y capacidades. Es importante que sepas

que a partir de la reiterada manipulación que el descalificador hará de

tus valores, con el tiempo correrás el riesgo de parecerte a él. El agresor

te enseña que "el mundo empieza y termina en cada uno", lo cual, a la

larga, podrá convertirse en tu propia creencia.

5. Ni príncipe ni verdugo: “por el libre albedrio”

El descalificador tiene como objetivo controlar nuestra autoestima,

hacernos llorar “nada” ante los demás, para que, de este modo, él pueda

destellar y ser el meollo del planeta. Tal vez, en algún momento de sus
 vidas, hayan sido descalificados y, por lo tanto, tal vez ocurra que la

descalificación sea la única manera que conocen o que encontraron para

relacionarse con los demás. Quizás es la única forma posible que tienen

de sentirse, por algunos instantes, importantes. La máscara del "ego

elevado" es la elegida por ellos. Los hallaremos siempre con un ego

altísimo, capaz de invalidar cualquier acción o a cualquiera que trate de

superarlos. Personas de este tipo pueden encontrarse en todas partes,

sea cual fuere el ámbito en donde nos hallemos, tanto en el terreno

laboral, como en el social o familiar. Son seres que proyectan en los

otros todas las frustraciones e inseguridades que no les permitieron

crecer ni desarrollar su potencial y sus sueños. El descalificador conoce

a la perfección todo lo que eres capaz de alcanzar si te lo propones e

ideas metas para alcanzarlo. Sabe que cuentas con la genética de un

campeón, y como conoce tu potencia intentará por todos los medios

hacerte sucumbir y amedrentarte. Este es el único camino que conoce y

que es capaz de ejecutar el descalificador para que nada se salga de su

control. Quizás, en este momento, te preguntes: "Una persona

descalificadora: ¿podría formar pareja?, ¿sería capaz de sentir amor?,

¿de compartir sus pensamientos con un amigo?, ¿podría trabajar en

equipo?, ¿sentir la belleza de vivir?" La respuesta es "no", a menos que

tome conciencia de sus actitudes, de su manipulación y decida revertir

su mentalidad y su trato.

6. Palabras mortíferas

Acá indica que a partir de cuando recibimos las ofensas o maltratos, en

nuestra mente lo primero que se activa es el preguntarnos y

cuánto hay de cierto o error en las insinuaciones que se nos hacen.

Cuando operamos bajo este modelo comenzamos a darle más crédito a

todas las palabras descalificadoras y a su manipulación que no

merecemos.

Cuando nuestra mente comienza a interpretar lo que otros nos han dicho

comenzamos a sentirnos de acuerdo a los que hemos interpretado.

La mayoría tomamos las palabras descalificador como “palabras

sagradas “sin nardos cuenta que nos estamos haciendo cargos de sus

dichos que poco tiene que ver con nuestra reflexión.

Paulatinamente vamos incorporando lo que el descalificador dice y le

otorgamos un valor desbastador que lucha en contra de todo aquello

que nos hemos propuesto.

Debemos tener en cuenta que al hacer carne lo que nos dicen podremos

llegar a tomar peores decisiones para nuestra vida.

Mientras nuestra estima pierde valor no solo nos apegamos a los falsos

mandatos, si no que todo lo malo y negativo que haya pasado recobra

fuerza y vuelve a seguir creciendo y lastimando nuestras emociones.

Con dichos como

  No sirves

  No puedes

  Ten cuidado

  No llores

  No sea tonto

  No te demuestre débil
   ¡Que incapaz!

  Eres culpable de lo que pase

Lastimosamente terminan convirtiéndose en creencias que asumimos

como tales y que no nos animamos a rechazar.

La ley de concentración establece que: “Cuanto más pienses sobre una

cosa, mas esta se hace realidad “, es decir que aquello que piensas

acerca de ti mismo será aquello en lo que te convertirás.

El estar en la posición de víctima no solo trae angustia si no frustración a

tu vida, sino que también te transformara en la presa preferida del

descalificador, y lo peor de todo es que por si un instante te animas a

responder a su agresión, la culpa por responder y defenderte te

producirá una angustia mayor.

Cuando sucede algo así es poner todo en orden en tu mente y refutar

todo lo que es cierto.

“Un pensamiento verdadero acarea otro pensamiento cierto, y la suma

de ellos sanara, tu estima y cambiara el valor y el poder de tus

decisiones.”

Como hacer para romper con un descalificador en nuestra vida

1. Debes hacer cambiar y ordenar tu propia atmosfera interior es

decir a que personas vas a dejar entrar a tu círculo más íntimo y a

cuáles no.

2. Cuando defendemos nuestra creencia y valores, podrás afirmar tu

estima, tu valoración y tus acciones.

todo lo que nos propongamos, y con una cuota de perseverancia las

mejores oportunidades estarán presente delante nuestro.

A veces en muchas ocasiones el descalificador nos han dicho que no

éramos capaz, que no servíamos, sin embargo, si tenemos actitud de

aprender y refutar lo que una vez aceptaste, sin cuestionar, todo nuestro

potencial será puesto en marcha y los mejores éxitos tendrán nuestro

nombre.

“Si hay victoria en vencer al

Enemigo, la hay mayor cuando

El hombre se vence a sí mismo.”

7. Limpieza emocional

Si anhelamos ser personas influyentes, debemos empezar por

reconocer que solo podremos alcanzar la meta si somos capaces de

tener valor, estima, energía, fuerza, aliento, motivación, respeto y amor

por los otros.

El valor que le podamos dar a otro nos dará el empuje que en

determinado momento necesitamos.

Estando en paz, podremos quitar de nuestro lado toda aquella persona

que tenga como meta desvalorizar y descalificar nuestra vida.

Que no hacer frente a un descalificador.

• No confrontes al descalificador. Él podría llenarte de angustia y

remordimientos al pensar mal de Él.

• No actúes como El. Podrías salir más lastimado.

batalla***

CLAVES PARA TRATAR A UN DESCALIFICADOR.

• No lo contradigas.

• No lo confrontes en público.

• Acércate al descalificador.

• Míralo y sonríe.

¡No caigas en su juego!