Trabajo Grupal #2 U.C. Contencioso Tributario.
Trabajo Grupal #2 U.C. Contencioso Tributario.
Trabajo Grupal #2 U.C. Contencioso Tributario.
INTRODUCCIÓN
1
Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, Enmendada en el 2009, Gaceta Oficial
Extraordinaria No. 5.908 de 19 Febrero 2009.
Bolivariana de Venezuela y el Plan de la Patria, Plan Económico Social 2019-20252, se basa en
un sistema mediante el cual se despliega la actividad de la administración tributaria, sobre
áreas estratégicas, de actividad regulatoria y actividad de gestión económica, conforme a la
noción de estado social. Desde nuestro punto de vista, la Constitución establece claramente y
con suficiente amplitud, los mecanismos que permiten el ejercicio de la potestad tributaria y
sus relaciones con los administrados. Así, analizando el marco constitucional se debe destacar
que nuestra Constitución, declara al Estado Venezolano en su artículo 2, como un Estado
democrático y social de Derecho y de Justicia, que propugna como valores superiores de su
ordenamiento jurídico y de su actuación, la vida, la libertad, la justicia, la igualdad, la
solidaridad, la democracia, la responsabilidad social y en general, la preeminencia de los
derechos humanos, la ética y el pluralismo político, todo conforme los principios normativos
establecidos en el marco constitucional y legal, que desarrollan los principios aplicables a la
estructura de la administración pública previstos en la Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela, el Proyecto Nacional Simón Bolívar, Plan de Desarrollo Económico
y Social de la Nación. 2019-2025, Decreto con Rango, Fuerza y Valor de Ley Orgánica de la
Administración Pública3 y Código Orgánico Tributario.
1.- La función legislativa del Poder Público Nacional y el Principio de Reserva Legal
Tributaria
2
Ley Constituyente del Plan de la Patria, Proyecto Nacional Simón Bolívar, Tercer Plan Socialista de Desarrollo
Económico y Social de la Nación 2019-2025, publicado en la Gaceta Oficial de la República Bolivariana de
Venezuela N°6.442, extraordinario de fecha 03 de abril de 2019.
3
Decreto N° 6.217, publicado en la Gaceta Oficial N° 5.890 Extraordinario, de fecha 31 de julio de 2008.
2
Contencioso Administrativa, previsto en el artículo 259 de nuestra Constitución de la República
Bolivariana de Venezuela.
La distribución vertical del poder público y los sujetos de derecho estatales. Conforme
a nuestra Constitución, en sentido vertical, el Poder Público tiene tres ramas, el Poder Nacional,
el Poder Público Estadal y el Poder Público Municipal, que se distribuyen en un conjunto de tres
niveles de personas jurídicas de derecho público estatales que son, a nivel nacional, la
República; a nivel estadal, los Estados que forman la Federación, más las otras entidades
políticas territoriales tales como el Distrito Capital y, a nivel municipal, los Municipios. Por
tanto, jurídicamente hablando, y esto tiene una repercusión básica en nuestro Derecho
Tributario, en Venezuela no existe una sola Administración Tributaria Pública, como complejo
orgánico, ni pueden las Administraciones Públicas, como tales, ser personas jurídicas. En efecto,
hemos dicho, tenemos tres niveles político–territoriales que son la República, los Estados y los
Municipios. Por eso, definitivamente, la Administración Pública en Venezuela, en los tres
niveles territoriales.
Por otra parte, la distribución horizontal del poder público y la administración pública
como complejo orgánico, además del sistema de distribución vertical del Poder en tres niveles
territoriales, la Constitución establece un sistema de distribución horizontal del Poder Público
que sigue las líneas clásicas de la separación de poderes, pero sólo como separación orgánica y
no como separación funcional. En efecto, en cada uno de los niveles territoriales, Nacional,
Estadal y Municipal, el Poder Público tiene una distribución orgánica horizontal peculiar. Estos
cinco conjuntos orgánicos se encuentran separados, y cada uno de ellos tiene sus competencias
constitucionales específicas. La Administración Pública Tributaria, como complejo orgánico, se
encuentra ubicada, en principio, en el denominado Ejecutivo Nacional, que conforma los
órganos estatales que ejercen el Poder Ejecutivo Nacional.
3
La Potestad Tributaria, de acuerdo con los fines que justifican y dan legitimidad a su
existencia y poder, el Estado y la multiplicidad de entidades que lo integran debe satisfacer las
necesidades colectivas asumidas como públicas por el ordenamiento jurídico; para ello requiere
efectuar numerosos gastos para atenderlas y obtener una voluminosa masa de recursos que lo
pongan en capacidad de cubrirlos. Por consiguiente, el conjunto de operaciones instrumentales o
mediales de los entes públicos, encaminadas a obtener los ingresos y bienes, así como contraer o
causar las deudas, con el objeto de realizar los gastos públicos necesarios para desarrollar
posteriormente las funciones y los servicios públicos, y adicionalmente propender a la
redistribución de la riqueza social, se denomina actividad financiera o -genéricamente- finanzas
del Estado, y conforma la hacienda pública; actividad que da lugar al amplio objeto y a los
múltiples fines de las ciencias financieras técnicas y al derecho financiero o de la hacienda
pública.
La importancia y trascendencia de esta categoría de fuente tributaria es un claro reflejo del
principio constitucional de legalidad, el cual rige toda la existencia y funcionamiento del Estado,
pero tiene en el ámbito tributario relevancia propia y contenido muy especial. Conocida es la
frase que ha identificado a la ley como el "núcleo del principio de legalidad" por ser la expresión
de la voluntad general, a través del órgano legislativo, en todo el ordenamiento jurídico, pero con
especial significación en el campo tributario. Este entramado constitucional, permite articular el
Principio de separación orgánica de funciones, que conforme lo establece el artículo 136 de la
Constitución, todos los órganos pertenecientes al Poder Público, poseen sus funciones propias pero
colaborarán entre sí en la realización de los fines del Estado".
Norma capital que encuentra su correspectivo en el deber general de todos los ciudadanos
establecido en el artículo 131 de la Constitución, que textualmente expresa: "Toda persona tiene el deber
de cumplir y acatar esta Constitución, las leyes y los demás actos que, en ejercicio de sus funciones,
dicten los órganos del Poder Público". A lo cual se suma el "sometimiento pleno a la ley y al derecho" de
la Administración Pública, imperativamente ordenado en el artículo 141 de la CRBV, el cual comprende a
la Administración Tributaria.
En el ámbito específico de los tributos, en la sección del Sistema Tributario, establece el
artículo 317 de la CRBV: "No podrá cobrarse impuestos, tasas ni contribuciones que no estén
establecidos en la ley, ni concederse exenciones y rebajas, ni otras formas de incentivos fiscales,
sino en los casos previstos en las leyes. Ningún tributo tendrá efecto confiscatorio".
Correlativamente, en el capítulo de los deberes de los ciudadanos, el artículo 133 de la CRBV
4
prevé: "Toda persona tiene el deber de coadyuvar a los gastos públicos mediante el pago de
impuestos, tasas y contribuciones que establezca la ley". El artículo 202 de Constitución define lo
que debe entenderse por ley: "acto sancionado por la Asamblea Nacional como cuerpo
legislador". En tanto que los códigos son "las leyes que reúnen sistemáticamente las normas
relativas a determinada materia". A estas disposiciones se agregan las que prevén las
competencias legislativas en materia de tributos del Poder Público Nacional, del Poder Público
Estadal y del Poder Público Municipal, contenidas en los artículos 156, 164, 179 y 180 de la
Constitución, las cuales asignan la "potestad tributaria" a los órganos legislativos y la vinculan a
las leyes nacionales, estadales y municipales (ordenanzas municipales).
Las normas constitucionales citadas consagran en forma integral el principio de legalidad
tributaria, en sus diversos aspectos, desde el principio de necesaria intervención de la
representación del pueblo para la creación de los tributos en todas sus especies.
Por otra parte, la reserva legal tributaria es descrita por el artículo 3 del COT así:
"Artículo 3: Sólo a las leyes corresponde regular con sujeción a las
normas generales de este Código las siguientes materias: 1. Crear,
modificar o suprimir tributos; definir el hecho imponible; fijar la alícuota
del tributo; la base de su cálculo; e indicar los sujetos pasivos del mismo.
2. Otorgar exenciones y rebajas del impuesto. 3. Autorizar al Poder
Ejecutivo para conceder exoneraciones y otros beneficios o incentivos
fiscales. 4. Las demás materias que les sean remitidas por este Código".
La Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia4, ha señalado que la doctrina mas
calificada en la materia, define a los impuestos en términos generales como:
“Aquella prestación exigida por el Estado (en las distintas expresiones
del Poder Público) que se caracteriza por tener como hecho generador de
la obligación tributaria un hecho de la vida común tomado como índice
de capacidad contributiva, destinado a costear los servicios generales de
la administracion, sin que el Estado otorgue una contraprestación
individualizada al obligado por el referido pago.”
Igualmente, la Sala Político Administrativa del Tribunal Supremo de Justicia 5, define el
impuesto como:
“aquel ingreso exigido sin contraprestación, cuyo hecho generador está
constituido por negocios, actos o supuestos de naturaleza jurídica o
económica que ponen de manifiesto la capacidad contributiva del sujeto
4
Sentencia de la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, Nº 1397, de fecha 21 de noviembre
de 2.000.
5
Sentencia de la Sala Político Administrativa del Tribunal Supremo de Justicia Nº 01928, de fecha 27 de
julio de 2.006.
5
pasivo (obligado por Ley al pago del tributo), como consecuencia de la
posesión de un patrimonio, la circulación de bienes o la adquisición o
gasto de la renta, y cuya característica primordial que lo diferencia de las
otras especies de tributos, es que la materia gravada resulta independiente
de toda actividad del Estado respecto del contribuyente, es decir, se
adeuda por el simple acaecimiento del presupuesto de hecho previsto en
la norma, indistintamente del destino concreto que la ley le haya
asignado.”
La tasa es aquel tributo cuyo hecho imponible consiste en una actuación de la
Administración que se refiere o que afecta, directa o indirectamente, al sujeto pasivo. Así,
estaremos ante una tasa cuando el Estado pretende satisfacer una necesidad colectiva por medio
de una actividad que se concreta en prestaciones individualizadas a sujetos determinados, y en
base a estas prestaciones hace pagar a estos sujetos un tributo. En el derecho positivo venezolano
no encontramos una definición de tasa en el Código Orgánico Tributario, más si en la ley que
regula el poder público municipal, como veremos más adelante, quizás como reflejo de la
tendencia descrita en el derecho comparado de la preferente utilización de dicho tributo en el
ámbito local.
Donde si conseguimos una conceptualización de tasa en el derecho positivo venezolano
es en Ley Orgánica del Poder Publico Municipal, la cual establece lo siguiente:
“Artículo 163: Los Municipios podrán crear tasas con ocasión de la
utilización privativa de bienes de su dominio público, así como por
servicios públicos o actividades de su competencia, cuando se presente
cualquiera de las circunstancias siguientes: 1. Que sean de solicitud o
recepción obligatoria por los usuarios. 2. Que no puedan realizarse por
el sector privado, por requerir intervención o ejercicio de autoridad o
por estar reservados legalmente al sector público. La recaudación
estimada por concepto de tasas guardará proporción con el costo del
servicio o con el valor de la utilización del bien del dominio público
objeto del uso privativo."
En cuanto a las tasas, constituye una categoría tributaria que puede visualizarse por
ejemplo, con los peajes los cuales constituyen una modalidad de tasa por la utilización de bienes
del dominio público. El monto pagadero al Municipio por la obtención de la licencia de
actividades económicas seria un ejemplo de una tasa.
En el caso, de la Ley de Registro y Notariado Público, los comúnmente derechos de
registro, pagaderos por los particulares para los trámites de protocolización de documentos ante
las oficinas de Registro Público, son también tasas. Es necesario destacar, la sentencia de la Sala
6
Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia del 14 de septiembre de 2004 6, que declaro
inconstitucional el Artículo 15 del Decreto con Fuerza de Ley de Registro Público y del
Notariado publicado en la Gaceta Oficial N° 5.556, Extraordinario, del 13 de noviembre de 2001,
pues en dicha decisión la Sala Constitucional establece en forma clara y contundente que en
Venezuela las tasas, al ser tributos, están sometidas en forma absoluta e inflexible al principio de
reserva legal en materia tributaria. En la referida sentencia se señala sobre las tasas lo siguiente:
"Es sabido que nuestra legislación carece de una definición de tasa como figura tributaria, pero
la misma ha sido definida pacíficamente por la doctrina e incluso por ordenamientos jurídicos
extranjeros como aquel tributo cuyo pago retribuye un servicio individualizado y concreto que
recibe un contribuyente o un servicio potencialmente al alcance de ese contribuyente."
Ahora bien, en fecha 16 de diciembre de 2021, fue publicada en Gaceta Oficial
Extraordinaria N°6.668, la Ley de Registros y Notarías. En la referida reforma, se establecen
nuevas escalas para el cálculo de las correspondientes tasas por los servicios, los cuales serán
establecidos por el Servicio Autónomo de Registros y Notarías, mediante providencia, dentro de
los límites previstos legalmente. Es por ello, que las referidas tasas están definidas por la ley y su
pago tiene los alcances de contrapartida por la prestación del servicio, cuyo destino es la
financiación de la actividad que la origina, cuya utilización es indispensable, delegándose su
ejecución legalmente al ejecutivo nacional.
CONCLUSIONES
6
Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, sentencia de fecha 14 de septiembre de 2004,
expediente 02-1548.
7
Así, estaremos ante una tasa cuando el Estado pretende satisfacer una necesidad
colectiva por medio de una actividad que se concreta en prestaciones individualizadas a
sujetos determinados, y en base a estas prestaciones hace pagar a estos sujetos un
tributo.
3. Las tasas previstas en la Reforma de la Ley de Registro y Notariado Público, de
acuerdo a lo expuesto, son conformes al principio de legalidad, igualdad tributaria, que
deben propiciar el ejercicio eficiente de la actividad de recaudación tributaria por parte
del Poder Público Nacional.
BIBLIOGRAFÍA