Tarjetas Gráficas de Última Generación
Tarjetas Gráficas de Última Generación
Tarjetas Gráficas de Última Generación
rimero fue AMD con el lanzamiento de Radeon HD 7970 la que incluyó novedades
importantes en su arquitectura interna; y, ahora, NVIDIA, presenta la flamante
NVIDIA GTX 680 y la arquitectura Kepler.
A día de hoy, AMD ha conseguido lanzar desde la gama alta hasta la baja dentro
de la familia Southern Islands, que es el nombre en clave de esta generación de
chips basados en la arquitectura GCN (Graphics Core Next). NVIDIA, de
momento, se conforma con su modelo GTX 680, competidor directo de la AMD
Radeon HD 7970. Enfrentamos a ambas para ver qué se puede esperar de estas
arquitecturas.
Cambios relevantes
Como casi siempre que hay una competencia extrema entre dos compañías, no es
extraño que haya muchas coincidencias en sus lanzamientos. No significa que se
copien, sino que la tecnología se exprime al máximo llegando a soluciones
similares en apariencia.
Novedades en AMD
Con la familia Radeon HD AMD ha pasado de la arquitectura VLIW (Very Long
Instruction Word) a la GCN (Graphics Core Next). Tradicionalmente, AMD ha
estado por delante de NVIDIA en eficiencia y consumo bruto de energía, lo que
ponía a NVIDIA en una posición complicada, pero también AMD ha estado por
detrás de NVIDIA en un apartado clave para el futuro de los procesadores
gráficos: GPGPU.
Con GPGPU, se trata de usar los recursos de paralelismo en las arquitecturas
gráficas para acelerar aplicaciones y código que en una arquitectura x86 no
puede paralelizarse más allá de un nivel básico. En este campo, NVIDIA ha
estado por delante con su tecnología CUDA, una API desarrollada por la firma
para facilitar la programación de aplicaciones que aprovechen el paralelismo de
sus chips gráficos.
AMD ha detectado esta carencia y ha rediseñado los bloques sobre los que se
construyen sus chips. El paralelismo en una tarjeta gráfica se basa en la
integración de centenares o miles de unidades de procesamiento relativamente
simples (shaders) que realizan cálculos a nivel de píxel, vértices o geometría.
En generaciones anteriores, AMD había optado por un paralelismo óptimo para
procesar gráficos, donde apenas hay dependencias entre operaciones. Pero,
en GPGPU, sí las hay, y, en estos casos, gran parte de los recursos de
computación en la arquitectura VLIW estaban a la espera de la resolución de
dependencias. Con GCN, AMD ha conseguido liberarse en gran medida de estas
dependencias y aumentar el rendimiento en aplicaciones GPGPU sin penalizar el
rendimiento gráfico.
AMD necesita de un PCB más grande para alojar un procesador con más de 4.000 milllones
de transistores. NVIDIA, con 3.500 millones, puede adoptar un menor tamaño y consumir
menos
Novedades necesarias
Además de su giro en la arquitectura, AMD ha adoptado tecnologías tan
necesarias como PCI-E 3.0, que aumenta el ancho de banda disponible por cada
línea PCI Express desde 500 Mbps a 1 Gbps. Y ha optimizado el consumo
gracias a una gestión dinámica del TDP y a la reducción del consumo en reposo.
En aspectos como la gestión multimonitor, EyeFinity alcanza su versión 2.0
para seguir como referencia en la gestión de múltiples pantallas e integra el modo
3Dcon varios monitores, del mismo modo que lo hace NVIDIA con 3DVision
Surround. Otra novedad interesante de AMD es DDMA (Discrete MultiPoint
Audio), de manera que se pueden transmitir diferentes flujos de sonido a distintos
dispositivos. Además, con Fast HDMI es posible alimentar monitores 4K a través
de una única conexión HDMI.
En vídeo, la novedad es VCE (Video Codec Engine), junto con Steady Video
2.0 y UVD 3.0. Con Steady Video, se consiguen escenas menos bruscas
mediante el procesamiento de las imágenes que conforman las secuencias.
El avance de NVIDIA
Con el modelo GTX 680, NVIDIA se ha puesto al día en cuanto a arquitectura con
cambios no tan radicales como los de AMD, pero sí con optimizaciones en
eficiencia energética. Uno de los más notables ha sido el de unificar relojes. Es
decir, antes NVIDIA usaba una velocidad de reloj para el chip, pero
los shadersfuncionaban al doble de megahercios, lo que implica mayor consumo
energético; así que ha reducido la velocidad de reloj de los shaders, de modo
que funcionan a la velocidad del núcleo. Al ser una velocidad menor, para un
mismo número de shaders, el rendimiento baja.
Por eso, NVIDIA ha diseñado shaders más simples, aunque con la misma
estructura que en la anterior generación, pero ha integrado muchos más. Y de
paso ha duplicado el resto de unidades funcionales que acompañan a
los shaders. En conjunto, NVIDIA ha conseguido aumentar el rendimiento de sus
tarjetas sin un aumento espectacular del número de transistores. Como
consecuencia, el funcionamiento es similar a Fermi, pero aumentado y
optimizado. El resultado es una tarjeta que no necesita conectores de 8 pines, con
un tamaño inferior al de la de AMD y con un TDP inferior.
En otros apartados, se ha compensado la reducción del ancho del bus de memoria
con el aumento de la frecuencia, e introducido tecnologías como GPU Boost, que
aumenta la velocidad de reloj de forma dinámica siempre que haya margen
térmico. Además, también aumenta el voltaje dinámicamente para ofrecer más
estabilidad.
En el campo del vídeo, NVIDIA permite ahora controlar cuatro monitores en
el modo 3D Vision Surround. Además, es compatible con PCI-E Gen 3 y añade
la tecnología Adaptive Vsync, que permite desactivar el sincronizado vertical
cuando la tasa de frames cae por debajo de los establecidos (60 fps, por ejemplo).
En cuanto a la eficiencia, se traduce en un buen nivel de ruido en funcionamiento y
en un control fino de las frecuencias de trabajo de forma dinámica.
Utilidades de interés
Como herramientas para controlar y monitorizar estas nuevas tarjetas, puedes
recurrir a los controladores, pero también a MSI AfterBurner y EVGA Precision
Tool. En ambos casos, tienes la posibilidad de controlar y monitorizar todos los
parámetros de funcionamiento de la gráfica. Para las GTX 680, el control de reloj
dinámico se administra mejor con EVGA Precision Tool.
Lo peor
El precio de las tarjetas de gama alta sigue estando fuera del alcance de la mayoría de los
usuarios.