Bachué
Bachué
Bachué
Cuenta esta historia que de las aguas de alguna de las lagunas sagradas nació una bella mujer que se hacía llamar
Bachué. Junto a ella, de su mano, caminaba también un niño de unos tres años de edad.
Bachué se dedicó a buscar un lugar seguro, donde pudiera vivir tranquila. Entonces pensó que lo mejor era bajar de la
montaña hacia el valle, en donde se encuentra el pueblo de Iguaque, pues el clima era menos frío. Al llegar al sitio
escogido, Bachué construyó una casa para vivir con el niño, tiempo después, el niño se hizo hombre y entonces se casó
con Bachué.
Este matrimonio permitió poblar de personas la tierra pues cada vez iban de un lugar a otro, fundando territorios y
dejando hijos en cada uno de estos sitios. Dicen que, en cada parto, Bachué tenía entre cuatro y seis bebés.
Después de muchos años, cuando Bachué y su esposo ya eran ancianos, vieron que había mucha gente en muchos
lugares, entonces tomaron la decisión de volver al sitio de donde salieron por primera vez. La pareja, tomada de las
manos emprendió el camino hacia Iguaque. Sus hijos, los muiscas, entristecidos por su partida, iban detrás.
Al llegar a la laguna, Bachué les habló a sus hijos dándoles un mensaje para que mantuvieran la paz y el equilibrio
entre ellos y la naturaleza. En medio de las lágrimas se despidió, tomó de nuevo la mano de su esposo y caminó con él
hacia la orilla de la laguna. Con sólo pisar el agua, Bachué y su marido, se convirtieron en dos inmensas serpientes, se
sumergieron en la laguna y desaparecieron.
Se decía que Bachué a veces se presentaba ante los indios que la invocaban para pedirle auxilio y para agradecerle los
favores que habían recibido de ella.
Obtenido de: https://www.culturarecreacionydeporte.gov.co/es/bogotanitos/cuenta-la-leyenda/bachue-y-el-origen-
del-hombre