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Informe de García-Sayán Sobre Su Visita A Bolivia.

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Naciones Unidas A/HRC/50/36/Add.

1
Asamblea General Distr. general
11 de mayo de 2022

Original: español

Consejo de Derechos Humanos


50º período de sesiones
13 de junio a 8 de julio de 2022
Tema 3 de la agenda
Promoción y protección de todos los derechos humanos,
civiles, políticos, económicos, sociales y culturales,
incluido el derecho al desarrollo

Visita al Estado Plurinacional de Bolivia

Informe del Relator Especial sobre la independencia


de los magistrados y abogados, Diego García-Saván*

Resumen
El Relator Especial sobre la independencia de los magistrados y abogados realizó una
visita oficial al Estado Plurinacional de Bolivia del 15 al 22 de febrero de 2022. El propósito
de la misión era examinar, en un espíritu de cooperación y diálogo, la situación de la
administración de justicia.
El Relator Especial felicitó la apertura del Estado Plurinacional de Bolivia a su visita
y la franqueza de los diálogos sostenidos. La sociedad boliviana, en sus distintas expresiones,
prestó una cooperación invalorable durante la visita con sus análisis, propuestas y
sugerencias.
El órgano judicial tiene una estructura basada en la Constitución de 2009, por la que
se crearon cuatro jurisdicciones, revalorando la jurisdicción indígena originario campesina.
Sin embargo, la legislación posterior limitó su ámbito material. La carrera judicial es muy
débil dada la alta proporción de jueces transitorios, así como regulaciones y prácticas que
afectan principios básicos como la inamovilidad. Existen dificultades en el acceso a la
justicia. Se constató, también, que los patrones de injerencia en el órgano judicial que el país
arrastra de larga data aún no han sido erradicados.
El órgano judicial enfrenta gran rezago procesal en la jurisdicción ordinaria y su
cobertura se limita, esencialmente, a áreas urbanas. El Relator Especial también se informó
sobre el impacto de la corrupción, que incide en una profunda desconfianza en la
administración de justicia. Las víctimas de violencia de género, feminicidio y de las graves
violaciones de los derechos humanos producidas en el contexto de la crisis sociopolítica de
2019/2020 siguen esperando justicia.

* El resumen del presente informe se distribuye en todos los idiomas oficiales. El informe propiamente
dicho, que figura en el anexo del resumen, se distribuye únicamente en el idioma en que se presentó.

GE.22-06970 (S)
A/HRC/50/36/Add.1

En cuanto a las personas privadas de libertad, un altísimo porcentaje se encuentra bajo


detención preventiva, así como en condiciones bastante precarias de detención. El Ministerio
Publico enfrenta dificultades en lograr una gestión transparente y eficaz.
El presupuesto del órgano judicial no alcanza siquiera el 0,5 % del presupuesto
general de la nación. Existe una crítica extendida sobre el actual sistema de designación por
sufragio universal de las altas autoridades judiciales e integrantes del Consejo de la
Magistratura.
El Relator Especial observó un acuerdo incipiente entre todos los actores del Estado
Plurinacional de Bolivia sobre la necesidad de avanzar en la modernización, reforma y
democratización de la justicia y ve la posibilidad de un gran acuerdo nacional para
fortalecerla.
El Relator Especial formuló recomendaciones destinadas a apoyar los esfuerzos de
reforma.

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Anexo

Informe del Relator Especial sobre la independencia de


los magistrados y abogados acerca de su visita al Estado
Plurinacional de Bolivia

I. Introducción
1. Por invitación del Gobierno, el Relator Especial sobre la independencia de los
magistrados y abogados realizó una visita oficial al Estado Plurinacional de Bolivia del 15 al
22 de febrero de 2022. El propósito de la misión era examinar, en un espíritu de cooperación
y diálogo, la situación de la administración de justicia, su independencia, el acceso a esta y
su capacidad de procesamiento de grandes retos nacionales como la corrupción, la violencia
contra la mujer y la defensa de los derechos de los pueblos indígenas.
2. El Relator Especial se reunió con altos cargos del Gobierno de diversos ministerios,
incluido el Presidente del Estado, los presidentes y directivos de las comisiones de la Cámara
de Senadores y la Cámara de Diputados de la Asamblea Legislativa Plurinacional, el Tribunal
Supremo de Justicia, el Tribunal Constitucional Plurinacional, el Tribunal Agroambiental, el
Consejo de la Magistratura, jueces y magistrados de tribunales departamentales, el Fiscal
General del Estado, la Defensora del Pueblo, el Procurador General del Estado y el Tribunal
Supremo Electoral. El Relator Especial desea reiterar su agradecimiento a las autoridades del
Estado Plurinacional de Bolivia, en particular al Ministerio de Justicia y Transparencia
Institucional y al Ministerio de Relaciones Exteriores, por la invitación y asistencia en la
preparación de la visita.
3. El Relator Especial se reunió con una amplia gama de representantes de la sociedad
civil, víctimas y sus equipos legales, incluidas organizaciones no gubernamentales, dirigentes
políticos, asociaciones de jueces y abogados, integrantes del sector académico y la
comunidad internacional. El Relator Especial expresa su agradecimiento a las personas que
compartieron con él sus experiencias y opiniones.

II. Marco jurídico e institucional


4. Una justicia independiente y accesible es central para la vida digna y el disfrute de los
derechos humanos. El Estado Plurinacional de Bolivia es parte de instrumentos
internacionales que apuntalan las obligaciones de contar con una administración de justicia
independiente, imparcial y accesible.
5. En el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, que el Estado Plurinacional
de Bolivia ratificó en 1982, se establece la obligación de velar por la adecuada administración
de justicia y garantizar una serie de derechos específicos, como el derecho de la persona a ser
oída públicamente y con las debidas garantías por un tribunal competente, independiente e
imparcial (art. 14, párr. 1). En un sentido semejante, en la Convención Americana sobre
Derechos Humanos, que el Estado Plurinacional de Bolivia ratificó en 1979, se estipula el
derecho de toda persona a un juicio justo y sus garantías.
6. En los Principios Básicos relativos a la Independencia de la Judicatura se establecieron
lineamientos que forman parte de los principios ius cogens del derecho internacional. De
acuerdo con el principio 1, la independencia de la judicatura será proclamada por la
Constitución o la legislación del país y todas las instituciones gubernamentales y de otra
índole la respetarán y acatarán. En estos principios también se estipula que las personas
designadas para funciones judiciales deben ser íntegras e idóneas y tendrán la formación o
las calificaciones jurídicas apropiadas, y se convienen las condiciones de servicio, la
inamovilidad en el cargo y los procedimientos disciplinarios, de suspensión o de separación.
7. La Constitución Política del Estado, adoptada en 2009, se ajusta a estas obligaciones
y estándares internacionales. En su artículo 13, párrafo IV, se estipula que los tratados y
convenios internacionales ratificados por la Asamblea Legislativa Plurinacional prevalecen

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en el orden interno. Además, se establece que los derechos y deberes consagrados en esta
Constitución se interpretarán de conformidad con los tratados internacionales de derechos
humanos ratificados por el Estado Plurinacional de Bolivia; y se destaca que son inviolables,
universales, interdependientes, indivisibles y progresivos. El Estado tiene el deber de
promoverlos, protegerlos y respetarlos.
8. En el artículo 12, párrafo I, de la Constitución se establece que el Estado organiza y
estructura su poder público a través de los órganos legislativo, ejecutivo, judicial y electoral.
La organización del Estado está fundamentada en la independencia, separación, coordinación
y cooperación de estos órganos. Asimismo, en el artículo 178, párrafo I, se reconoce que la
potestad de impartir justicia se sustenta en los principios de independencia, imparcialidad,
seguridad jurídica, publicidad, probidad, celeridad, gratuidad, pluralismo jurídico,
interculturalidad, equidad, servicio a la sociedad, participación ciudadana, armonía social y
respeto a los derechos.
9. En el artículo 2 de la Ley del Órgano Judicial (Ley núm. 025), de 2010, se establece
que este es un órgano del poder público, se funda en la pluralidad y el pluralismo jurídico,
tiene igual jerarquía constitucional que los órganos legislativo, ejecutivo y electoral y se
relaciona sobre la base de independencia, separación, coordinación y cooperación.

III. Sistema de justicia

A. Marco jurídico e institucional del órgano judicial

10. La administración de justicia en el Estado Plurinacional de Bolivia ha pasado por


varios procesos de reforma. Un antecedente importante fueron las reformas de 1994, por las
que se estableció el Tribunal Constitucional, el Consejo de la Judicatura, la Defensoría del
Pueblo, un nuevo sistema para la designación de magistrados y el reconocimiento de la
justicia indígena1.
11. El 7 de febrero de 2009, se promulgó la nueva Constitución Política del Estado en la
que se establece, en el artículo 178, párrafo I, que la potestad de impartir justicia emana del
pueblo boliviano. En la Constitución se reconocen cuatro jurisdicciones:
a) Jurisdicción ordinaria: imparte justicia en materia civil, comercial, familiar, de
niñez y adolescencia, tributaria, administrativa, laboral y de seguridad social, de
anticorrupción y penal;
b) Jurisdicción agroambiental: imparte justicia en materia agraria, forestal,
ambiental, de aguas, de derechos de uso y aprovechamiento de los recursos naturales
renovables, hídricos, forestales y de la biodiversidad; demandas sobre actos que atenten
contra la fauna, la flora, el agua y el medio ambiente, y sobre las prácticas que pongan en
peligro el sistema ecológico y la conservación;
c) Jurisdicciones especiales reguladas por ley;
d) Jurisdicción indígena originario campesina: en el artículo 190 se establece que
las naciones y pueblos indígena originario campesinos ejercerán sus funciones
jurisdiccionales y de competencia a través de sus autoridades, y aplicarán sus principios,
valores culturales, normas y procedimientos propios.
12. En cuanto a su estructura, la jurisdicción ordinaria se ejerce por el Tribunal Supremo
de Justicia, los tribunales departamentales, los tribunales de sentencia y los jueces. La
jurisdicción agroambiental se ejerce por el Tribunal Agroambiental y jueces
agroambientales; y la jurisdicción indígena originario campesina se ejerce por sus propias
autoridades. Hasta el momento no existe ninguna jurisdicción especial (art. 179).

1 Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas (ACNUDH) en el Estado Plurinacional de
Bolivia, Sistema Judicial Boliviano: Estado de situación, buenas prácticas y recomendaciones para
el trabajo en el sector, desde el enfoque de derechos humanos (2017). Disponible en:
https://biblioteca.cejamericas.org/handle/2015/5608.

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13. El Tribunal Constitucional Plurinacional vela por la supremacía de la Constitución,


ejerce el control concentrado de la constitucionalidad y precautela el respeto y la vigencia de
los derechos y las garantías constitucionales (art. 196). Además, ejercerá la justicia
constitucional y dirimirá los conflictos de jurisdicción. Actualmente está regulado por la Ley
núm. 027 de julio de 2010.
14. El Consejo de la Magistratura es la instancia responsable del control y fiscalización
del manejo administrativo y financiero del órgano judicial, del régimen disciplinario de la
jurisdicción ordinaria, agroambiental y de las jurisdicciones especializadas. Las juezas y los
jueces serán designados por el Consejo de la Magistratura. Las servidoras y los servidores de
las jurisdicciones ordinaria, agroambiental y especializadas están sujetos al régimen
disciplinario establecido por la Ley núm. 025. Su ejercicio es responsabilidad del Consejo de
la Magistratura.
15. Dentro del Tribunal Supremo de Justicia, existe una Dirección Administrativa y
Financiera, creada por el artículo 7 de la Ley núm. 025, “para la gestión de los recursos
económicos de las jurisdicciones ordinaria y agroambiental, y del Consejo de la
Magistratura”.
16. La Constitución de 2009 estableció que se elegirán mediante sufragio universal las
personas candidatas a integrar las altas cortes y demás altas instituciones del órgano judicial
(arts. 182, 188, 194 y 198). De esta forma se designarán a quienes integren, por un período
de seis años, el Tribunal Supremo de Justicia, el Tribunal Constitucional Plurinacional, el
Tribunal Agroambiental y el Consejo de la Magistratura. Cualquier persona que cumpla con
los requisitos estipulados en el artículo 182 de la Constitución y en la Ley núm. 025 podrá
presentar su postulación ante la Asamblea Legislativa Plurinacional, de manera directa o por
organizaciones sociales debidamente reconocidas.
17. La Asamblea Legislativa Plurinacional efectúa la preselección sobre la base de una
previa calificación y evaluación basada en meritocracia2. Por el voto de dos tercios de sus
miembros presentes habilita hasta 54 precalificados, por circunscripción departamental, para
el Tribunal Supremo de Justicia; mientras que para el Tribunal Agroambiental, habilita hasta
28 precalificados, por circunscripción nacional. La Asamblea también efectúa la preselección
para el Tribunal Constitucional Plurinacional y el Consejo de la Magistratura. En todos los
casos, la mitad de las personas precalificadas deberán ser mujeres y se respetará la
interculturalidad. La Asamblea remite las nóminas al Órgano Electoral Plurinacional, que
procede a la organización del proceso electoral y será el único responsable de difundir los
méritos de las personas candidatas.

B. Marco jurídico e institucional del Ministerio Público

18. Según la Ley Orgánica núm. 260 de julio de 2012, el Ministerio Público “tiene por
finalidad defender la legalidad y los intereses generales de la sociedad, ejercer la acción penal
pública e interponer otras acciones en el marco establecido por la Constitución Política del
Estado, los Tratados y Convenios Internacionales en materia de Derechos Humanos, y las
leyes. Tiene autonomía funcional, administrativa y financiera”. En la misma ley se regula la
carrera fiscal.
19. Para ocupar la posición de Fiscal General del Estado se requiere designación por dos
tercios de los miembros presentes en la Asamblea Legislativa Plurinacional, previa
convocatoria pública y calificación a través de concurso público. Ejercerá sus funciones por
seis años, sin posibilidad de nueva designación.
20. El Ministerio Público debe informar a la sociedad sobre sus actuaciones y hacerlas
transparentes, además del control y la fiscalización establecidos en la Constitución, a cuyo
efecto el Fiscal General del Estado deberá informar anualmente a la Asamblea Legislativa

2 Asamblea Legislativa Plurinacional, Reglamento de preselección de candidatas y candidatos para la


conformación del Tribunal Constitucional Plurinacional, Tribunal Supremo de Justicia, Tribunal
Agroambiental y Consejo de la Magistratura.

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Plurinacional y a la sociedad sobre las actividades desempeñadas, dificultades y logros en el


ejercicio de su misión.

IV. Asuntos estructurales


21. En el momento de la visita del Relator Especial, y según fue informado en entrevistas
con el Consejo de la Magistratura, había 1.134 jueces en la jurisdicción ordinaria (para
11,67 millones de personas), de los cuales el 47 % estaba desempeñando funciones de modo
transitorio.
22. En 2020, había 865 juzgados y tribunales en el país, de los cuales 567 se encontraban
en capitales (65 %) y 298 en provincias (35 %)3. La cobertura del órgano judicial sigue
estando limitada principalmente al área urbana. Estos 865 juzgados y tribunales se encuentran
únicamente en 164 municipios de los 339 municipios del país, es decir, el 48 %. De acuerdo
al informe de rendición de cuentas del Tribunal Supremo de Justicia, en 2020 cada juez
conocía un promedio de 530 causas4.
23. En lo que respecta a la jurisdicción agroambiental, en 2020, existían cupos para
63 agroambientales; no obstante, solo 51 plazas estaban ocupadas por lo quedaban 12 cargos
acéfalos5.
24. El Servicio Plurinacional de Defensa Pública, creado por la Ley núm. 463, llega
únicamente a 99 municipios de los 339, aunque según la Defensora del Pueblo, el país cuenta
con apenas 51 defensores públicos. Organizaciones de la sociedad civil informan que hasta
2018, durante casi una década, esta institución contó con la cooperación internacional para
la cobertura de salarios. En promedio existe un defensor por cada cinco fiscales, con un nivel
salarial sustancialmente más bajo y menores posibilidades de acceso a capacitación. La Ley
núm. 463 eliminó la carrera defensorial y el Instituto de Capacitación de la Defensa Pública6.
25. El Servicio Plurinacional de Asistencia a la Víctima tiene presencia en 43 municipios
únicamente. El Relator Especial tuvo conocimiento de que la falta de incentivos, como un
salario adecuado, ha producido una alta rotación que debilita la institución. Para remediarlo,
el servicio cuenta con 12 pasantes de últimos años de universidad 7.
26. La Contraloría General del Estado identificó problemas en la estructura del órgano
judicial que afectan su desempeño8. Por ejemplo, el control y la fiscalización son compartidos
entre el Consejo de la Magistratura y la Dirección Administrativa y Financiera del Tribunal
Supremo de Justicia. Ello es un evidente elemento perturbador pues establece una suerte de
bicefalia administrativa que explicaría en parte la ineficiencia existente en la ejecución
presupuestal. Asimismo, la Contraloría identifica una falta de claridad en la representación y
la jefatura en el órgano judicial, así como un desarrollo normativo insuficiente con respecto
a lo establecido en la Constitución. Por ejemplo, el código procesal para la jurisdicción
agroambiental está pendiente desde 2009 y los códigos de procedimiento para la jurisdicción
ordinaria necesitan actualización.
27. Hay confusión en cuanto a las competencias de cada jurisdicción. Por ejemplo, la
justicia ordinaria recibe casos que deberían presentarse a la jurisdicción agroambiental. Se
denota una falta de información sobre esta jurisdicción, también entre quienes desempeñan
la abogacía, según las contribuciones aportadas por el Tribunal Agroambiental.
Adicionalmente, en desacuerdo con la Constitución, la Ley de Deslinde Jurisdiccional (Ley
núm. 073) ha limitado el ámbito material de la jurisdicción indígena originario campesina, lo
cual también incide en un recargo de la jurisdicción ordinaria.
28. El Tribunal Constitucional Plurinacional, por su lado, enfrenta una carga de trabajo
elevada por el abuso de la figura de inconstitucionalidad para actuar sobre problemas en

3 Fundación CONSTRUIR, “Informe sobre el Estado de la Justicia en Bolivia 2020”, pág. 88.
4 Tribunal Supremo de Justicia, “Rendición Pública de Cuentas Final 2020”, pág. 11.
5 Fundación CONSTRUIR, “Informe sobre el Estado de la Justicia en Bolivia 2020”, pág. 103.
6 Fundación CONSTRUIR, “Estado de la Justicia en Bolivia 2019”, pág. 149.
7 Contribuciones de la Misión Técnica del ACNUDH en el Estado Plurinacional de Bolivia.
8 Entrevista con la Contraloría General del Estado.

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procesos judiciales9. Este Tribunal aborda todos los temas y el efecto es negativo pues al
presentar una acción de inconstitucionalidad, se frena el proceso ante cualquier juzgado y se
recarga al Tribunal. En su informe de rendición de cuentas de 2020, el Tribunal
Constitucional Plurinacional estableció que el 94 % de causas recibidas corresponden a
acciones de defensa dentro de procesos judiciales, el 3,7 % a acciones de
inconstitucionalidad, y el 1 % a conflictos de competencia. De las acciones de defensa
recibidas, el 51 % se refieren a acciones de libertad10.
29. En este marco se han hecho intentos en los últimos años de abordar la problemática
judicial. En 2015, se anunció una cumbre “para revolucionar la justicia” y se denominó
Cumbre Nacional de Justicia Plural para Vivir Bien. La Cumbre se celebró en Sucre en 2016
y en ella se emitieron recomendaciones para dar seguimiento al fortalecimiento de la
administración de justicia.
30. El 26 de enero de 2017 se promulgó la Ley de la Comisión de Seguimiento a las
Conclusiones de la Cumbre de Justicia (Ley núm. 898). Con el mandato de implementar las
conclusiones de la Cumbre, la Comisión fue conformada por representantes de las Cámaras
de Senadores y Diputados, Ministerio de Justicia y Transparencia Institucional, Ministerio
de Gobierno, Procuraduría General del Estado, las presidencias o máximas autoridades del
Tribunal Supremo de Justicia, Consejo de la Magistratura, Ministerio Público y el sistema
universitario. En el artículo 4 se establece que su vigencia será hasta el cumplimiento de sus
funciones.
31. El balance sobre dicha Comisión no es alentador. De conformidad con la información
recibida de la sociedad civil, además de la escasa información de que se dispone sobre su
trabajo, parece carecer de un plan para dar seguimiento a lo acordado. Sobre su composición,
se destaca que carece de representación de los pueblos indígenas y de la sociedad civil.

A. Acceso a la justicia

32. La administración de justicia en la jurisdicción ordinaria está enfrentando un gran


rezago procesal. Según diversas fuentes, la retardación de justicia se debe a códigos
procesales demasiado formalistas, modelos anacrónicos de gestión de tribunales, deficiente
formación de jueces y fiscales, así como a la corrupción11. En la gestión de 2020 del Tribunal
Supremo de Justicia, este indicador de retardación ha llegado al 57 %.
33. En 2020, se calculaba ya un 51 % de carga procesal pendiente en el tema penal, un
10 % en el de violencia/anticorrupción, 12 % en asuntos de familia y 14 % en lo
administrativo/fiscal/del trabajo y seguridad social12. En 2021, la Contraloría General calculó
que una causa en el órgano judicial puede tomar hasta 10 años en resolverse13. Según los
datos recogidos de la sociedad civil sobre el propio análisis del órgano judicial, la mora
procesal es un problema persistente que obedece a la ausencia o número insuficiente de
juzgados14.
34. Víctimas y familiares expresaron encontrar obstáculos para acceder a la justicia, lo
que incluye tener que aportar los medios probatorios para la investigación, verse en necesidad
de asumir gastos o realizar pagos para que sus casos avancen y no tener acceso a información.
35. El órgano judicial ha hecho esfuerzos por abordar esta mora procesal. Durante la
gestión correspondiente a 2020 se desarrollaron un total de 2.293 audiencias durante las
jornadas judiciales de descongestionamiento, enfocadas en personas privadas de libertad15.
Adicionalmente, la incorporación de la conciliación en la Ley núm. 025 facilita el acceso a
la justicia. La Ley núm. 1173 de 2019, sobre la abreviación procesal penal, incorpora
disposiciones que facilitan la conciliación también en materia penal para ciertos delitos. La

9 Entrevista con el Tribunal Constitucional Plurinacional.


10 Fundación CONSTRUIR, “Informe sobre el Estado de la Justicia en Bolivia 2020”, pág. 105.
11 Según un estudio de 2012 de la Comisión Andina de Juristas.
12 Fundación CONSTRUIR, “Informe sobre el Estado de la Justicia en Bolivia 2020”, pág. 87.
13 Entrevista con la Contraloría General del Estado.
14 Fundación CONSTRUIR, “Informe sobre el Estado de la Justicia en Bolivia 2020”, pág. 86.
15 Ibid., pág. 97.

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conciliación extrajudicial se regula por la Ley núm. 708 de 201516. Sin embargo, no hay datos
para poder establecer el impacto de estas medidas.
36. Restablecer los juzgados de paz es una idea que se recogió como una forma de mejorar
el acceso a la justicia y descongestionar tribunales. El Relator Especial alienta esta
posibilidad sabiendo que dicho espacio jurisdiccional no abordaría el reto de los casos
mayores o de implicancias penales. Los jueces de paz son nombrados de entre los ciudadanos
con mayor influencia en la comunidad por lo que constituye un mecanismo de participación.
El Estado Plurinacional de Bolivia ya tiene una experiencia previa de jueces ciudadanos en
1999, considerada una reforma innovadora en su momento. La Ley de descongestionamiento
y efectivización del Sistema Procesal Penal (Ley núm. 586), de 2014, eliminó la figura
argumentando que retrasaba los procesos judiciales.
37. En 2006, se promulgaron reformas a la Ley de Organización Judicial (Ley
núm. 1455), la cual incorporaba la justicia de paz, pero que, sin embargo, no se puso en
marcha. La actual Ley núm. 025 no incluyó a los juzgados de paz en su estructura17.
38. La corrupción fue referida como un problema serio. Muchos de los interlocutores
comentaron su impacto y la profunda desconfianza que existe en la justicia boliviana. El
Relator Especial escuchó testimonios de personas que han sido extorsionadas por jueces,
fiscales y autoridades penitenciarias para facilitar procesos o cursar órdenes. El temor les
impide denunciar la corrupción públicamente.
39. El Relator Especial tomó conocimiento -y protestó al respecto- de la excarcelación de
Richard Choque Flores, que había cometido delito de feminicidio; la corrupción es la razón
de su liberación irregular. El Sr. Choque Flores había sido condenado a 30 años de prisión
por el secuestro y el asesinato de una mujer, y le fue permitida la detención domiciliaria por
decisión de un juez de ejecución penal usando un procedimiento exprés corrupto basado en
un informe médico falso. En otro caso, Felipe Froilán Molina Bustamante, condenado por el
asesinato en 1980 del líder socialista Marcelo Quiroga Santa Cruz a 30 años de presidio sin
derecho a indulto, fue beneficiado por otro juez de ejecución penal con una irregular libertad
condicional en febrero de 2020.
40. En marzo de 2022 se anunció que el Consejo de la Magistratura intervendría los
Juzgados de Ejecución Penal. Esto se tradujo en la destitución de 11 jueces y la apertura de
proceso disciplinario para otros 7. Es un paso positivo que abre la necesidad del diseño de
políticas preventivas y de un ejercicio más constante y transparente de la función judicial.
Además, el 4 de febrero, se constituyó la Comisión de Revisión de Casos de Violación y
Feminicidio, al amparo de la Ley núm. 898, para analizar los casos en los que los sentenciados
fueron liberados antes de 2013, año en que entró en vigencia la Ley Integral para Garantizar
a las Mujeres una Vida Libre de Violencia (Ley núm. 348).
41. La impunidad frente al delito es una indicación de las dificultades de acceso real a la
justicia. El aumento de casos de feminicidios, que continúan impunes, suscita indignación y
preocupación en la sociedad boliviana. Así, son preocupantes los datos sobre los
869 feminicidios que se produjeron entre 2013 y octubre de 2021. De 2013 a 2020, se
contabilizan solo 272 procesos por este delito, de acuerdo con las contribuciones del Servicio
Plurinacional de la Mujer y de la Despatriarcalización. Un estudio realizado por la Entidad
de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres en
2019 determinó que los plazos procesales en casos de violencia contra la mujer no se
cumplen, lo cual repercute en el abandono de las víctimas. Solo se han creado 27 juzgados y
tribunales especializados en virtud de la Ley núm. 348, que están sobresaturados por la carga
procesal y atienden también casos de delitos de corrupción. La Defensoría del Pueblo
presentó en 2019 la propuesta de crear 31 juzgados sobre violencia contra la mujer.
42. La falta de transparencia y de acceso a la información dificulta el seguimiento de
procesos, así como la participación vigilante de la sociedad civil. Muchos refirieron al Relator
Especial la dificultad que enfrentan para obtener información y datos del órgano judicial y

16 Ibid., págs. 132 a 135.


17 ACNUDH, Sistema Judicial Boliviano - Estado de situación, buenas prácticas y recomendaciones
para el trabajo en el sector, desde el enfoque de derechos humanos (2017), pág. 320.

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del Ministerio Público. Es evidente que la transparencia y el libre acceso a la información


pública contribuyen al combate a la corrupción y, en general, al delito. Sin embargo, el Estado
Plurinacional de Bolivia aún no cuenta con una legislación sobre acceso a la información
pública.
43. Y se tiene, finalmente, el drama de la impunidad y de la falta de resultados efectivos
frente a graves violaciones de derechos humanos. Mucho se ha escrito sobre las violaciones
de derechos humanos del último trimestre de 2019, cuando al menos 37 personas fallecieron
y centenares fueron heridas. Como constató el Grupo Interdisciplinario de Expertos
Independientes18, lo ocurrido involucra la responsabilidad del Estado por actos de agentes
estatales. Durante su misión, el Relator Especial se reunió con las víctimas de las masacres
de Sacaba, Senkata y Zona Sur para escuchar sus testimonios y lamentó profundamente que
hayan pasado más de dos años esperando justicia.
44. El informe19 del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes sobre la crisis
sociopolítica de 2019-2020 reflejó obstáculos en el acceso a la justicia de las víctimas y sus
familiares. Por ejemplo, presiones de operadores de justicia para que las víctimas aporten los
medios probatorios para la investigación y denegación de acceso al proceso y a las diligencias
del caso. La Defensoría del Pueblo20 informó en 2020 que había constatado una falta de
investigación o una investigación deficiente por parte del Ministerio Público de las
violaciones ocurridas entre noviembre y diciembre de 2019.
45. La acumulación de causas, las limitaciones a la disponibilidad de instituciones
judiciales en el país y las omisiones de la justicia frente a violaciones de derechos humanos
o a fenómenos delictivos como feminicidios forman parte de un cuadro muy delicado que da
cuenta que el acceso a la justicia es un tema para atender con prioridad.
46. Como aspecto positivo, el Relator Especial destaca que la Procuraduría General se
encuentra promoviendo una legislación que permita al Estado resarcir a las víctimas de
violaciones de derechos humanos, incluidas las de Sacaba, Senkata y Zona Sur. Tomó nota
también de la creación de una Mesa Interinstitucional para responder a las víctimas con el
apoyo de la Misión Técnica de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas
(ACNUDH) en el Estado Plurinacional de Bolivia.

B. Justicia indígena originario campesina

47. La Constitución de 2009 significó una revaloración de la justicia indígena. Varias


disposiciones establecen que las naciones y pueblos indígenas gozan, entre otros derechos,
del “ejercicio de sus sistemas políticos, jurídicos y económicos acorde a su cosmovisión” y
del derecho a la consulta previa.
48. La norma constitucional pauta un claro principio al establecer la obligatoriedad de
acatar “las decisiones de la jurisdicción indígena” y la obligación del Estado de promover y
fortalecerla. Además, le otorga la misma jerarquía que a la jurisdicción ordinaria. Sin
embargo, hay una deuda pendiente. Los mecanismos de coordinación y cooperación de las
jurisdicciones constitucionalmente reconocidas debían regularse y precisarse en una Ley de
Deslinde Jurisdiccional realmente ajustada a las disposiciones constitucionales (art. 192,
párr. III).
49. Según la información recabada, entre 2008 y 2009 se elaboró un anteproyecto con las
organizaciones representantes de las naciones y pueblos indígena originario campesinos. Sin
embargo, este anteproyecto fue modificado cuando fue puesto en consideración de la
Asamblea Legislativa Plurinacional. Dicho órgano aprobó la actual Ley de Deslinde
Jurisdiccional (Ley núm. 073), en 2010, con cambios sustanciales, en especial lo referente a
los ámbitos de competencia de la jurisdicción indígena. Asimismo, limita excesivamente el

18 Véase https://cancilleria.gob.bo/webmre/system/files/pdf_banner/2021-GIEI-Bolivia-informe-
final.pdf.
19 Véase https://gieibolivia.org/informes/.
20 Defensoría del Pueblo, “Crisis de Estado -Violación de los Derechos Humanos en Bolivia. Octubre a
diciembre de 2019”, La Paz (2020).

9
A/HRC/50/36/Add.1

derecho de las naciones y pueblos indígenas a ejercer sus sistemas jurídicos propios dada la
extensa lista de temas que no entran en el ámbito de la vigencia material de esta jurisdicción
contenida en el artículo 10 de la ley.
50. El reclamo contra la Ley núm. 073 existe desde su adopción. Una de las conclusiones
de la Cumbre de Justicia de 2016 fue la modificación de esta ley, siguiendo el marco del
anteproyecto consensuado entre 2008 y 2009. Las conclusiones de la Cumbre fueron
aceptadas como vinculantes por el Gobierno, el cual además se comprometió a incluir la
participación de las naciones y los pueblos indígenas en la comisión de implementación de
la Cumbre21. La demora en reformar esta ley también fue abordada en agosto de 2018, en la
Cumbre Nacional de Justicia Indígena Originario Campesina en Cochabamba.
51. Desde la sociedad civil se ha destacado la falta de un estudio o mapa socio jurídico
que permita identificar los sistemas jurídicos existentes en la justicia indígena originario
campesina; sus formas, cosmovisiones y sanciones. Se ha planteado que permitiría generar
mecanismos de coordinación y cooperación entre jurisdicciones22.

C Personas privadas de libertad

52. La situación de las personas privadas de libertad está íntimamente ligada al


desempeño de la justicia. Dos caras de esta situación son, en primer lugar, el elevado
hacinamiento existente y, en segundo lugar, la alta proporción de personas privadas de
libertad sin sentencia condenatoria firme.
53. En marzo de 2021, según la Dirección General de Régimen Penitenciario, El Estado
Plurinacional de Bolivia contaba con 20 recintos penitenciarios urbanos, con capacidad para
albergar a 5.346 personas. No obstante, la población de esos recintos ascendía a
18.703 personas lo que supone tasas de hacinamiento del 349,8 %. El 64,10 % de las personas
privadas de libertad estaba bajo detención preventiva. Es decir, siete de cada diez personas
privadas de libertad no tenían condena. En el caso de las mujeres privadas de libertad, en
2020, el 71 % de ellas no contaban con una condena23.
54. La prisión preventiva debe ser utilizada excepcionalmente, durante el menor tiempo
posible y solo en casos que presenten ciertos elementos de gravedad. Además, se debe
garantizar la separación entre presos preventivos y condenados en todos los lugares de
privación de libertad. La prisión preventiva no puede constituir un castigo para las personas
que no han sido juzgadas.
55. El rezago procesal24 y el abuso de la prisión preventiva han exacerbado el
hacinamiento en las cárceles bolivianas, cuyas condiciones son de gran preocupación.
Durante su visita al Estado Plurinacional de Bolivia en 2017, el Subcomité para la Prevención
de la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes ya había señalado
que las personas privadas de libertad carecen de un nivel de vida adecuado y el acceso a
alimentación, asistencia médica, medicinas, ropa, camas y artículos de aseo depende
principalmente de la capacidad económica de las personas privadas de libertad y en muchos
casos del apoyo de familiares. En algunos lugares de privación de libertad, las condiciones
observadas por el Subcomité constituyen un trato cruel, inhumano y degradante25.
56. La Defensoría del Pueblo realizó un estudio en 2018 sobre las vulneraciones a las
garantías constitucionales en la aplicación de medidas de privación de libertad. Se describen
los principales problemas que conducen al uso abusivo26. Por un lado, el Código de
Procedimiento Penal vigente asimila la prisión preventiva a la pena; por otro lado, la
privación de libertad y restricción de otros derechos es la regla y no la excepción. Así, los
imputados, en la práctica, deben demostrar su inocencia y la inexistencia de riesgos

21 Fundación CONSTRUIR, “Estado de la Justicia en Bolivia 2019”, págs. 118 y 119.


22 Fundación CONSTRUIR, “Informe sobre el Estado de la Justicia en Bolivia 2018”, pág. 19.
23 Fundación CONSTRUIR, “Informe sobre el Estado de la Justicia en Bolivia 2020”, pág. 169.
24 CAT/OP/BOL/3, párr. 29.
25 Ibid., párrs. 75 y 77.
26 Defensoría del Pueblo, “Vulneraciones a garantías constitucionales en la aplicación de medidas
cautelares”, La Paz (2018), págs. 62 a 65.

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A/HRC/50/36/Add.1

procesales, ya que en el artículo 235 de dicho Código se establece que por “peligro de
obstaculización” se entiende a toda circunstancia que permita sostener fundamentadamente
que el imputado con su comportamiento entorpecerá la averiguación de la verdad.
57. Las personas en situaciones de mayor vulnerabilidad, por su contexto socioeconómico
que implica una dificultad para presentar documentos de trabajo, registros domiciliarios,
entre otros, son generalmente identificadas con el posible riesgo de fuga. La Defensoría
también informó que el uso de la medida se ve favorecida por la práctica de los operadores
de justicia de anular audiencias por problemas internos; y lo que es aún más preocupante,
advirtió la utilización de la anulación de audiencias para extender plazos de prisión
preventiva.

D. Ministerio Público

58. El Ministerio Público cuenta con 575 fiscales para 11,67 millones de habitantes, con
solo el 30 % de fiscales ingresados de conformidad con la carrera fiscal. El Ministerio Público
informó haber recibido a la primera promoción de fiscales graduados de un programa de
estudios de siete meses (dos de los cuales se encuentran en prácticas). Espera contar con una
segunda promoción en 2022. Sin embargo, esta integración a la carrera parecería precisar de
sustento legal, ya que la Ley orgánica del Ministerio Público establece que los fiscales
departamentales deben ser designados por convocatoria pública y calificación a través de un
concurso público. Los sueldos de los fiscales de materia son menores a los de un juez. Al
igual que el órgano judicial, el Ministerio Público tuvo que reducir los salarios debido a la
pandemia de enfermedad por coronavirus (COVID-19) en 2021. En línea con los criterios
explicados sobre la carrera judicial, el país necesita contar con una carrera fiscal.
59. Según el informe de rendición de cuentas públicas, el 43 % de las causas de la carga
procesal del Ministerio Público en 2020 corresponden a delitos de violencia contra las
mujeres, un 13 % corresponden al delito de robo, un 10 % a lesiones graves y leves y el 34 %
a otros hechos27.
60. El Instituto de Investigaciones Forenses, que depende del Ministerio Público, cubre
solo el 10 % de los 339 municipios, y no alcanza para responder a la demanda. Cuenta con
recursos humanos insuficientes en ciertas especialidades lo cual crea desconfianza en sus
pronunciamientos. Se informa también de la falta de medios para la recepción y custodia de
evidencias, que puede desembocar en deterioro de pruebas28.

E. Otras instituciones

61. La Defensoría del Pueblo fue incorporada en la normatividad boliviana con las
reformas de 1994 e incluida en la Constitución de 2009 (art. 218, párr. III). En la norma
vigente es referida como una institución con autonomía funcional, financiera y
administrativa, que no recibe instrucciones de los órganos del Estado. La Ley núm. 870, de
2016, regula sus atribuciones, prerrogativas, organización y funcionamiento.
Adicionalmente, fue designada como el Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura,
en septiembre de 2021 (Ley núm. 1397).
62. La Defensoría del Pueblo, se encuentra acreditada con estatus A por la Alianza Global
de Instituciones Nacionales de Derechos Humanos dado su cumplimiento de los principios
relativos al estatuto de las instituciones nacionales de promoción y protección de los derechos
humanos (Principios de París)29. Sin embargo, se ve debilitada en su desempeño. La actual
Defensora del Pueblo fue elegida interinamente por la Asamblea Legislativa Plurinacional

27 Fundación CONSTRUIR, “Informe sobre el Estado de la Justicia en Bolivia 2020”, pág. 122.
28 Defensoría del Pueblo, “Los institutos de investigación forense no garantizan el acceso a la justicia”,
La Paz (2020), págs. 80 a 82.
29 Véase (en inglés solamente) https://ganhri.org/wp-content/uploads/2022/02/StatusAccreditation
ChartNHRIs_28.12.21.pdf.

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A/HRC/50/36/Add.1

en enero de 2019. A la fecha, más de tres años más tarde, no se ha electo a ninguna persona
como Defensor o Defensora del Pueblo.
63. En el país hay alrededor de 83.000 abogadas y abogados registrados. La Ley del
ejercicio de la abogacía de 2013 establece que los colegios podrán incorporar a quienes
cuenten con copia legalizada de la credencial emitida por el Ministerio de Justicia y el
señalamiento de domicilio procesal. En ningún caso los colegios podrán incorporar a
profesionales del derecho que no estén previamente registrados y matriculados. Los colegios
de abogados deberán remitir periódicamente al Ministerio de Justicia las listas actualizadas
de sus afiliados.
64. El Relator Especial toma nota de la necesidad de registro en el Ministerio de Justicia
para ejercer la abogacía y recuerda que un colegio de abogados, para cumplir sus funciones,
debe ser un órgano autónomo, entendido como organización independiente del Estado o de
otras instituciones nacionales que puede fijar sus propias normas y regulaciones, tomar sus
propias decisiones sin influencias externas, representar los intereses de sus miembros y estar
en condiciones de mantenerse por sí solo30. Además, observó que estas asociaciones han
tenido una participación limitada en los procesos de reforma de justicia; a pesar de contar
con información valiosa para dichos procesos.
65. La Procuraduría General del Estado es una institución de representación jurídica
pública que tiene como finalidad promover, defender y precautelar los intereses del Estado
(Ley núm. 064, arts. 2 y 230). También es una institución relevante para la efectiva
administración de justicia. Fue creada por la Constitución, en su capítulo tercero denominado
“Función de Defensa del Estado”. La designación de la Procuradora o el Procurador General
corresponderá a la Presidenta o el Presidente del Estado, y debe cumplir con los requisitos
exigidos para la Magistratura del Tribunal Supremo de Justicia. Posteriormente, la Ley
núm. 064 de 2015 detalló más aspectos sobre esta designación.
66. La Procuraduría está extremando esfuerzos para dar un seguimiento más cercano a los
casos emblemáticos de derechos humanos enfrentados por el Estado. Por ejemplo, aquellos
ligados al contexto de violencia de 2019 y 2020, para poder responder a la exigencia de
justicia de las víctimas.

F. Carrera judicial

67. La carrera judicial es reconocida como una garantía de la independencia del órgano
judicial en la Constitución. Se rige por la Ley núm. 025, que establece que la carrera judicial
garantiza la continuidad y permanencia de jueces en el desempeño, en tanto demuestren
idoneidad profesional y ética, además de ser evaluados positivamente. El Consejo de la
Magistratura es el ente encargado de establecer un sistema de carrera judicial que permita el
acceso de profesionales del derecho que demuestren idoneidad profesional.
68. Pese al marco normativo de 2010 (Ley núm. 025), el Reglamento de la Carrera
Judicial se hizo público únicamente en setiembre de 2018. Dicho reglamento mantiene dos
modalidades de ingreso a la carrera judicial: aprobación del curso de formación en la Escuela
de Jueces del Estado y mediante convocatoria pública. Sin embargo, el Consejo de la
Magistratura ha llevado a cabo designaciones por medio de la Ley de Transición para el
Tribunal Supremo de Justicia, Tribunal Agroambiental, Consejo de la Magistratura y
Tribunal Constitucional Plurinacional (Ley núm. 212), de 201131.
69. Según los datos presentados en 2020, únicamente el 44 % de jueces en funciones es
de carrera. La alta proporción de jueces transitorios, que supera a los 500, es preocupante.
Está demostrado que una alta tasa de provisionalidad conspira contra una conducta
independiente de jueces y juezas. Se ha cuestionado, como otro elemento que conspira contra
el principio de la inamovilidad, el artículo 46 de la Ley núm. 025, que establece que quienes
integran los tribunales departamentales desempeñarán la función por solo cuatro años,
renovables a otros cuatro; y que luego salen del sistema judicial pese a haber adquirido

30 A/73/365, párr. 89.


31 Fundación CONSTRUIR, “Estado de la Justicia en Bolivia 2019”, pág. 50.

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valiosa experiencia. Además, un juez de un tribunal departamental debe renunciar a su cargo


para poder presentarse a una elección para ser magistrado de las altas cortes.
70. El principio de inamovilidad debe ser garantizado por el Estado. Esto no debe
entenderse como sinónimo de la renuncia a elementos sólidos de evaluación permanente que
puede llegar a excluir de la carrera a quienes incumplen con sus deberes de administrar
justicia. Se ha constatado, sin embargo, que no existe un sistema de evaluación establecido,
público, transparente y predecible. En testimonios recogidos en algunos tribunales
departamentales se indicó, por ejemplo, que se puede cesar a los vocales de un tribunal en
cualquier momento. Varias organizaciones de la sociedad civil indicaron que mediante el
acuerdo 073/2017 de mayo de 2017, se “agradeció sus funciones” a 89 jueces, basando su
decisión en la condición transitoria de los mismos.
71. No existe información oficial del número de jueces o juezas destituidos en los últimos
años, así como tampoco datos sobre los procesos disciplinarios iniciados y concluidos contra
operadores judiciales por parte del Consejo de la Magistratura32.
72. La falta de una carrera judicial es un aspecto crítico que atenta contra la calidad del
sistema judicial y su independencia; a ello se suma a la alta proporción de jueces transitorios.
Todo esto debilita los procesos de perfeccionamiento y especialización y genera un cuadro
de precariedad en quienes desempeñan funciones judiciales y en la fiscalía.
73. En su informe de rendición de cuentas del año judicial 2020, el Tribunal Supremo de
Justicia señaló que promovió el desarrollo de un proyecto de ley de modificación a la Ley
núm. 025 que fue remitido a la Asamblea Legislativa Plurinacional. El proyecto plantea un
porcentaje mínimo del 6 % de los recursos del Tesoro General del Estado para la
administración de justicia. El Tribunal Supremo de Justicia también promovió un proyecto
de ley de carrera judicial33.
74. Durante su visita, el Relator Especial acogió con beneplácito la información sobre el
objetivo de la administración actual de regularizar a todos los jueces transitorios antes del
final del año 2022, por medio de un esfuerzo conjunto del Consejo de la Magistratura y la
Comisión de la Ley núm. 898.

G. Selección y nombramiento de las altas cortes

75. La Constitución de 2009 estableció que las autoridades máximas del órgano judicial,
incluido el Consejo de la Magistratura, serían elegidas mediante sufragio universal. Se han
llevado a cabo dos elecciones de altas cortes en el país, en 2011 y 2017. En la mayoría de las
entrevistas efectuadas durante la visita se expresó preocupación sobre este sistema de
designación. El Relator Especial recogió una extendida valoración crítica indicando que
dicho sistema está politizado y no siempre ha conducido a escoger a las personas más idóneas.
76. Se indicaron dos áreas particularmente problemáticas. La primera se refiere al proceso
de preselección de candidatos a ser sometidos a votación popular que es conducido y decidido
por un órgano político, la Asamblea Legislativa Plurinacional. Además del Consejo de la
Magistratura, solamente los colegios de abogados participan en la preselección y elaboración
de exámenes. La sociedad civil no tiene participación. El Relator Especial recogió la
preocupación sobre el hecho de que varios postulantes llegaron a la última fase del proceso
de preselección con calificaciones muy bajas. La segunda tiene que ver con la elección por
sufragio universal. El Relator Especial tomó nota con preocupación de la baja legitimidad de
dichas votaciones dada la escasa participación del electorado. Según el Órgano Electoral
Plurinacional, la participación fue del 78 % en 2017, uno de los porcentajes más bajos de los
últimos años en el Estado Plurinacional de Bolivia, donde se suele superar el 90 % de
concurrencia. Otro aspecto relevante es que la mayor parte de votos fue en blanco o nulo.
Según la información recabada, en los votos de 2017, el 53,8 % fueron nulos en el caso del
Tribunal Agroambiental, el 53,76 % fueron nulos para el Consejo de la Magistratura, el

32 Fundación CONSTRUIR, “Estado de la Justicia en Bolivia 2019”, pág. 59.


33 Fundación CONSTRUIR, “Informe sobre el Estado de la Justicia en Bolivia 2020”, pág. 99.

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13,5 % blancos para el Tribunal Agroambiental y solamente el 31,04 % fueron votos válidos
para el Consejo de la Magistratura34.
77. En sus distintos informes, el Relator Especial ha insistido en la exigencia de
prevalencia de criterios y procedimientos de designación vinculados a la calidad y mérito
profesional y al compromiso con los valores del estado de derecho, de conformidad con los
Principios Básicos relativos a la Independencia de la Judicatura. Si bien no existe un modelo
universal de procesos de selección y designación, es esencial que en estos procesos no sean
los criterios ni las consideraciones de índole político los que prevalezcan. Cuanto más alejado
esté el poder político de los procesos de selección y designación, mejor.

V. Obstáculos a un sistema judicial independiente e imparcial

A. Presupuesto

78. El presupuesto asignado en los últimos tres años a todo el sector justicia, incluido el
Ministerio Público, no ha llegado ni al 0,50 % del total del presupuesto nacional. Estos
recursos tan limitados no permiten sustentar una institucionalidad fuerte y, en especial,
remuneraciones adecuadas que atraigan a las personas más calificadas y prevengan la
corrupción.
79. El Relator Especial se reunió con jueces y fiscales de distintos niveles y el tema
presupuestal fue abordado como un punto crítico generador de inestabilidad. El panorama
constatado evidencia remuneraciones bajas, muchas de los cuales, además, se vieron
reducidas por las restricciones fiscales derivadas del impacto de la pandemia de COVID-19.
80. Además de la asignación insuficiente de recursos presupuestales, se constata que estos
recursos no siempre son materia de una ejecución eficiente, lo que genera usualmente una
devolución del exceso no gastado pese a las enormes necesidades existentes. Esta situación
contradictoria tiene su principal explicación en una estructura ineficiente de administración
y gestión de recursos presupuestales asignados a la justicia. Parte de ello se debe a la confusa
distribución de responsabilidades en esta materia en la que concurren funciones asignadas al
Consejo de la Magistratura junto con otras asignadas a los Tribunales Departamentales y al
propio Tribunal Supremo de Justicia.
81. Por ejemplo, en el primer trimestre de 2021, el Tribunal Supremo de Justicia informó
una ejecución del 33,75 % de su presupuesto, y el Consejo de la Magistratura, del 29 %35.
Según informó el Tribunal Departamental de la Paz durante la visita, algunos tribunales
departamentales se ven en la necesidad de alquilar instalaciones para poder celebrar todas las
audiencias necesarias para su efectiva gestión.
82. Es indispensable que la administración y gestión se encuentren en instancias
especializadas y que quienes son la parte sustantiva del sistema de justicia, como son los
jueces, vocales y magistrados, se constriñan a administrar justicia y no se involucren en
asuntos administrativos y de gestión. Adicionalmente, la instancia pertinente para ese efecto
debe contar con los recursos financieros y humanos apropiados para ejercer su función, así
como con las condiciones institucionales para garantizar una mayor eficiencia en la ejecución
presupuestal.

B. Injerencias

83. Esta Relatoría ha abordado el tema de la independencia de la justicia en el Estado


Plurinacional de Bolivia a lo largo de varios años. Expresó preocupación por un proceso
penal contra una exalcaldesa de La Paz ocurrido en 1998, que se habría caracterizado por
fuertes presiones políticas y mediáticas36. Se refirió a la detención de una jueza en 2011,

34 Ibid., pág. 70.


35 Véase https://daf.organojudicial.gob.bo/Documentos/RC24_09_2021.pdf.
36 Véase la comunicación BOL 2/2012. Todas las comunicaciones mencionadas en el presente informe
están disponibles en https://spcommreports.ohchr.org/Tmsearch/TMDocuments.

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A/HRC/50/36/Add.1

estableciendo además preocupación por un patrón de amedrentamiento sistemático ya que


serían varios los jueces encarcelados y procesados por presión del Ministerio de Gobierno37.
Se refirió también a la destitución de tres magistrados del Tribunal Constitucional
Plurinacional en 201438. En febrero de 2020 expresó preocupación por el patrón de
persecución política y judicial, con fines de represalia, así como actos de hostigamiento en
contra de antiguas autoridades, líderes políticos y sociales39. En julio de 2021, el Relator
Especial reaccionó en redes sociales ante la remoción de vocales de tribunales electorales.
84. Desde la sociedad civil se recogieron ejemplos exponiendo el impacto de presiones
externas e internas en operadores de justicia. Dichas presiones vienen de actores que buscan
la obtención de condenas o de la práctica de instituciones públicas de querellarse
judicialmente en casos que perciben como sensibles. Asimismo, en varios ejemplos la
respuesta de las autoridades ha sido demandar el procesamiento de operadores de justicia a
través de discursos punitivos40.
85. En el informe del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes, el Relator
constató varias recomendaciones referidas a la administración de justicia que comparte y
hace suyas. Por ejemplo, en dicho informe41 se observó con preocupación la existencia de
tipos penales ambiguos tales como sedición, terrorismo o incumplimiento de deberes.
Además, el Relator Especial destaca la recomendación que explica que garantizar la
independencia del sistema de justicia incluye que las autoridades se abstengan de
pronunciarse sobre investigaciones y procesos penales en curso o que estén por iniciarse.
86. El Relator Especial recibió información en reuniones celebradas con la sociedad civil
sobre casos en los cuales jueces y fiscales han recibido amenazas o han sido objeto de
procesos disciplinarios. Estos ejemplos incluían a una jueza que denunció injerencia tras
emitir un fallo contra un familiar de altas autoridades; otro juez fue denunciado luego de
dictar el cierre de un caso de un empresario de un partido opositor, y dos jueces fueron
aprehendidos sin órdenes de detención por sus decisiones.
87. Jeanine Áñez, quien ejerció la presidencia del Estado Plurinacional de Bolivia entre
noviembre de 2019 y noviembre de 2020, se encuentra en prisión preventiva desde marzo de
2021. Enfrenta dos procesos penales por hechos ocurridos en 2019. En el proceso
denominado “Golpe de Estado I”, fue imputada, junto con otros actores, por los delitos de
sedición, conspiración y terrorismo. En el conocido como “Golpe de Estado II”, se encuentra
imputada por incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a las leyes y la
Constitución. Estos juicios han capturado la atención de la opinión pública en el país y en el
extranjero. Tomando en consideración que la Sra. Áñez cumplía una huelga de hambre
durante la visita del Relator Especial al Estado Plurinacional de Bolivia, este pudo ser testigo
del ambiente de confrontación y preocupación que rodea el caso.
88. Dicho caso pone de manifiesto problemas estructurales de la administración de
justicia como la generalización de la detención preventiva. El Relator Especial fue enfático
en que todas las personas procesadas tienen derecho a un juicio justo y a todas las garantías
procesales que establecen los instrumentos internacionales y la normatividad boliviana. Para
toda persona privada de libertad, el Estado tiene la responsabilidad de garantizar su integridad
y salud. El Relator Especial recordó que, en el caso particular de una huelga de hambre, esta
obligación estatal se tenía que respetar escrupulosamente.
89. El 21 de febrero, en presencia del Relator Especial, el Ministro de Justicia y la Misión
Técnica del ACNUDH firmaron un protocolo para la observación de procesos judiciales. El
documento prevé que la Misión Técnica dé seguimiento a casos de crímenes de lesa
humanidad como los vinculados a la crisis de 2019-2020; causas contra miembros del Poder
Judicial y del Tribunal Electoral, entidades de creación constitucional, el Poder Ejecutivo;
feminicidios, violencia de género y casos que involucren a la población LGBTIQ+, y casos

37 Véase la comunicación BOL 4/2011.


38 Ibid.
39 Véase la comunicación BOL 1/2020.
40 Fundación CONSTRUIR, “Informe sobre el Estado de la Justicia en Bolivia 2018”, pág. 90.
41 Véase https://cancilleria.gob.bo/webmre/system/files/pdf_banner/2021-GIEI-Bolivia-informe-
final.pdf.

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con grave impacto en el respeto, protección y promoción de los derechos humanos. El


protocolo se está aplicando ya al caso de la Sra. Áñez. El Relator Especial espera que esta
medida contribuya a fortalecer las garantías judiciales y el debido proceso en este y los demás
casos.
90. La corrupción puede ser una herramienta de ataque a la independencia judicial.
Durante su visita, el Relator Especial se enteró de situaciones que son preocupantes
indicadores de lo que puede ser posible por medios ilícitos, irregulares y corruptos. Por
ejemplo, en 2020, hubo una serie de denuncias públicas sobre la designación de 140 jueces
por presunta “venta” de cargos judiciales. En 2021, la convocatoria pública para vocales tuvo
que ser suspendida por existir presuntas irregularidades. Asimismo, ya se han mencionado
excarcelaciones irregulares por órdenes de jueces de ejecución. Todas las instancias de
corrupción en un órgano judicial deben ser sancionadas con todo el peso de la ley.
91. Durante su visita, el Relator Especial pudo constatar que estos patrones que el país
arrastra de larga data aún no han sido erradicados. La independencia del sistema judicial debe
ser garantizada por el Estado, esa es su obligación internacional y constitucional. Todas las
instituciones gubernamentales y de otra índole están llamadas a respetar y acatar dicha
independencia.

VI. Reforma del sistema

A. Posibles propuestas de reforma constitucional de la modalidad


de elección por sufragio universal

92. En la perspectiva de concretar ajustes al proceso de elección de las altas cortes, en su


visita, el Relator Especial ha recogido distintas iniciativas y sugerencias. Sin que se pretenda
acotar o restringir la variedad de alternativas, destaca un par de posibles opciones.
93. Por un lado, se ha presentado la posibilidad de realizar enmiendas parciales al texto
constitucional por medio de un referéndum. Esta propuesta se sustenta en la idea de que el
único aspecto a modificar de la Constitución ―ampliamente considerada como expresión de
grandes conquistas sociales― sería el de la elección por sufragio universal de las altas cortes.
Esta propuesta plantea la creación de una comisión nacional de postulaciones, integrada por
representantes independientes de la sociedad que elabore, sobre la base de méritos y
exámenes, ternas sobre las cuales la Asamblea Legislativa Plurinacional elija por dos tercios
del total de sus miembros a las personas que asumirán esas altas funciones. Esto supondría
una reforma parcial de la Constitución que sería sometida a referéndum popular aprobatorio
o denegatorio.
94. Por otro lado, sin una reforma constitucional, hay propuestas que contribuirían a
enriquecer los mecanismos de selección y designación con procedimientos más participativos
y plurales. En esencia apuntarían a fortalecer la fase de la preselección, sobre los que votaría
la Asamblea Legislativa Plurinacional, con propuestas generadas en un espacio pluralista y
participativo. Este espacio, por su composición plural y rigor procesal, podría preparar una
lista corta con un orden de prelación. La Asamblea, en principio, se atendría al orden de
prelación planteado salvo que existiesen razones y motivos de fondo fundados para no
hacerlo. El voto popular ratificatorio entonces podría adquirir un carácter simbólico que
refrenda una elección meritoria celebrada en la Asamblea Legislativa Plurinacional sobre la
base de la selección alcanzada por esa comisión independiente y plural.

B. Gran acuerdo por la reforma de la justicia

95. En la sucesión de entrevistas y reuniones de trabajo producidas, así como en la


documentación recibida, se constató la aspiración compartida de encontrar rutas para alcanzar
un gran acuerdo nacional de la justicia que aborde temas como los aquí planteados.
Instituciones públicas y privadas, dirigentes políticos y organizaciones de la sociedad civil
convergen en esta aspiración.

16
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96. Desde que se inició la visita fue visible y persistente el afán de acercar la justicia a la
gente y hacer que esta funcione mejor. La sociedad boliviana expresó la esperanza, con
distintos enfoques y análisis, de contar con una justicia independiente, eficiente y guiada por
los principios y estándares de derechos humanos.
97. Sin perjuicio de otros espacios de expresión de opiniones y análisis, la situación
evidencia la exigencia de un gran acuerdo nacional por la justicia. El Relator Especial ve
condiciones para apuntar, de manera laboriosa y persistente, a este gran acuerdo nacional,
como criterio orientador de un proceso sostenido con metas de corto, mediano y largo plazo.
Ello supondría la participación activa de las instituciones públicas más relevantes sobre el
tema, tanto del Poder Ejecutivo, Legislativo y Judicial, así como de las agrupaciones
políticas, colegios profesionales (en particular, de abogados), universidades,
representaciones sociales, entre otras.

VII. Conclusiones
98. El Relator Especial felicita los esfuerzos del Estado Plurinacional de Bolivia para
fortalecer la administración de justicia. Sin embargo, hay inercias que se arrastran, así
como nuevos retos y amenazas, que impiden su repercusión significativa en el acceso a
la justicia, la lucha contra la impunidad, la protección de las mujeres frente a la
violencia de género y en abordar la alta proporción de personas privadas de libertad
sin sentencia condenatoria.
99. La carencia de autoridades judiciales, fiscales y defensa pública en buena parte
del país rural, la falta de adecuada financiación, la deficiente gestión y la neutralización
de la jurisdicción indígena mantienen a la justicia muy lejos de la gente y de las
necesidades de la sociedad. A ello se añade la tendencia a la judicialización, por la vía
ordinaria, de casos y situaciones que podrían ser procesadas de otra forma.
100. Varias reformas constitucionales han introducido modificaciones institucionales
importantes en las últimas décadas. Hitos importantes fueron las reformas parciales
adoptadas en 1994 que establecieron el Tribunal Constitucional, el Consejo de la
Judicatura y la Defensoría del Pueblo, así como un nuevo sistema para la designación
de magistrados y el reconocimiento de la justicia indígena como espacio de solución de
conflictos.
101. Luego de un importante proceso constituyente, la nueva Constitución Política del
Estado de 2009 estableció la actual estructura institucional de la justicia.
102. La elección por sufragio universal de integrantes de las altas cortes y el Consejo
de la Magistratura establecida en la Constitución de 2009 no ofrece las garantías
suficientes para evitar injerencias políticas, no asegura el nombramiento de personas
idóneas a los cargos ni ha generado legitimidad en los procesos de votación popular
marcados por el ausentismo y el voto nulo o en blanco.
103. A raíz de la historia sociopolítica reciente, y la crisis de 2019-2020, existe una
profunda desconfianza de los actores políticos y sociales del país en la administración
de justicia como tal, lo cual incide negativamente en los esfuerzos de fortalecimiento y
reforma institucionales.
104. Los jueces, juezas, vocales y magistrados bolivianos se encuentran en situación
de alta vulnerabilidad, expuestos a diversas formas de injerencia o presión. Esta
vulnerabilidad se debe a la falta de una carrera judicial, al alto número de jueces
transitorios y remuneraciones bajas. La injerencia política, así como la presión de
agentes no estatales, sumadas a las bajas remuneraciones, abren la puerta a la
corrupción.
105. El Tribunal Constitucional Plurinacional enfrenta una carga de trabajo elevada
por el abuso de la figura de inconstitucionalidad para actuar sobre problemas y
aspectos de los procesos judiciales ordinarios. Esto incide en la crisis actual del órgano
judicial pues recarga la jurisdicción ordinaria y distorsiona la razón de ser de la
jurisdicción constitucional.

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106. La jurisdicción indígena originario campesina, reconocida en la Constitución de


2009, ha sido relegada por la legislación posterior (Ley de Deslinde Jurisdiccional de
2010) a conocer solo de temas de relevancia limitada y marginal para la administración
de justicia.
107. La justicia de paz podría desempeñar un papel relevante para procesar
contenciosos y conflictos menores. Sin embargo, la Ley núm. 025 no contempla esta
figura.
108. La situación de las personas privadas de libertad es grave tanto por la tasa de
hacinamiento (del 349,8 %) como por la alta proporción en detención preventiva, es
decir, sin sentencia condenatoria. El Relator Especial recuerda que el Estado se
encuentra en una posición especial de garante respecto de las personas privadas de
libertad.
109. La participación activa y veeduría de la sociedad civil, en todas sus expresiones
y formas de organización, es un elemento imprescindible de la reforma, fortalecimiento
y funcionamiento transparente e independiente del órgano judicial. La relevancia del
acompañamiento de la comunidad internacional también se hace evidente.

VIII. Recomendaciones
110. Se debe extremar esfuerzos para construir y reconstruir confianza entre todos
los actores políticos e institucionales del país y en la justicia. Todas las instituciones del
Estado deben respetar y observar la independencia del sistema judicial. Hay consensos
favorables recogidos por el Relator Especial de cara a contar con un sistema de justicia
independiente, accesible, eficiente y que funcione de acuerdo a los estándares
internacionales de derechos humanos y en la Constitución.
111. Es crucial que el énfasis en una justicia de esas características sea una política de
Estado y que se sostenga en el tiempo, con amplio respaldo y participación de todas las
fuerzas políticas y sociales. De cara a ese objetivo, el Relator Especial recogió numerosas
manifestaciones en favor de la conveniencia y urgencia de vertebrar un gran acuerdo
nacional al respecto y hace un llamado a la sociedad e instituciones bolivianas a marchar
en esa dirección.
112. El Relator Especial recomienda a todos los sectores relevantes a impulsar un
debate nacional sobre las reglas vigentes y deseables para la selección y designación de
integrantes de las altas cortes y el Consejo de la Magistratura, para identificar la mejor
manera de reformar este mecanismo. El Relator Especial insiste en el crucial criterio
de prevalencia de procedimientos de designación no políticos, vinculados estrictamente
a la calidad y mérito profesional y al compromiso con los valores del estado de derecho
y los estándares contenidos en los Principios Básicos relativos a la Independencia de la
Judicatura.
113. El Estado debe dotar de recursos apropiados al órgano judicial. Dicha dotación
podría establecerse por ley, con un porcentaje mínimo del presupuesto nacional. El
presupuesto debe poder abordar una mejora de sueldos de los operadores de justicia,
la creación de nuevos juzgados, la formación del personal y que el órgano judicial
mejore su cobertura en todos los municipios del país.
114. El Relator Especial insta al Gobierno a elaborar un plan de reforma estructural
y de fortalecimiento del órgano judicial, que incluya un diseño institucional para una
gestión más eficiente. Es indispensable que la administración y gestión del sistema
judicial se encuentre en instancias especializadas y que quienes son la parte sustantiva
del sistema de justicia, los jueces, vocales y magistrados, se constriñan a administrar
justicia y no se involucren en asuntos administrativos y de gestión.
115. El Estado Plurinacional de Bolivia debe establecer una efectiva carrera judicial,
por medio de legislación que tome en consideración los Principios Básicos relativos a la
Independencia de la Judicatura, incluyendo, entre otros aspectos, la idoneidad para
desempeñar las funciones judiciales, criterios y procedimientos apropiados para la

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selección y designación, y garantías normativas e institucionales de inamovilidad de


quienes se desempeñen con integridad.
116. Se debe, asimismo, regularizar a todos los jueces transitorios antes del final de
2022, por medio de un esfuerzo conjunto del Consejo de la Magistratura y la Comisión
de la Ley núm. 898, llevando a cabo las pruebas de evaluación e idoneidad que
garanticen la solvencia profesional y apego a los estándares democráticos de quienes
pasarían a ser jueves titulares.
117. El Relator Especial recomienda al Gobierno que aumente el número de juzgados
y fiscales especializados y dedicados exclusivamente a la violencia contra la mujer,
tomando en consideración la Ley núm. 348. La Comisión de Revisión de Casos de
Violación y Feminicidio debe presentar sus conclusiones a la brevedad, incluyendo
planes y programas de acción.
118. El Relator Especial insta al Gobierno a atacar la corrupción en el sistema judicial
con políticas de transparencia y rendición de cuentas, así como la sanción de los jueces
responsables por prácticas corruptas.
119. El Relator Especial exhorta al Gobierno a que afirme y garantice el espacio de la
jurisdicción indígena originario campesina, reconocida en la Constitución, por medio
de la reforma a la vigente Ley de Deslinde Jurisdiccional, ampliando sustantivamente
la competencia de esta jurisdicción y tomando en consideración la participación,
opinión y contribuciones de los pueblos indígenas.
120. El Relator Especial insta al Gobierno a restaurar el espacio y papel de la justicia
de paz impulsando las modificaciones normativas necesarias.
121. El Relator Especial insta al Gobierno a poner fin a la generalización y abuso de
las detenciones preventivas. Todas las personas procesadas tienen derecho a un juicio
justo y a todas las garantías procesales que establecen los instrumentos internacionales
y la normatividad boliviana. Las detenciones preventivas deben ser excepcionales.
Corresponde al Estado asegurar el derecho de toda persona privada de libertad a vivir
en condiciones de detención compatibles con su dignidad personal.
122. Con respecto a la crisis sociopolítica de 2019-2020, el Ministerio Público debe
avanzar sin demora en las investigaciones de oficio, sin hacer recaer la iniciativa o carga
probatoria en las víctimas, sus familiares o sus representantes. Debe garantizarse la
celeridad y eficacia de la investigación y el derecho de las víctimas a participar.
123. El Poder Ejecutivo podría preparar y presentar a consideración de la Asamblea
Legislativa Plurinacional, para su aprobación expedita, proyectos encaminados a dictar
la legislación que permita al Estado resarcir a las víctimas de violaciones de derechos
humanos, incluidas las de Sacaba, Senkata, y Zona Sur producidas en 2019.
124. El Relator Especial exhorta al Gobierno a designar al titular de la Defensoría del
Pueblo.
125. El Relator Especial insta al Gobierno a elaborar y dictar la legislación pendiente
para el funcionamiento del órgano judicial, en particular, el código procesal
agroambiental y disponer las reformas necesarias al Código Penal y Código de
Procedimiento Penal en los temas particulares de prisión preventiva, para evitar su
abuso.
126. El Estado Plurinacional de Bolivia debe contar con una política criminal que
permita guiar el trabajo del Ministerio Público y del Instituto de Investigaciones
Forenses y fortalecer sus capacidades y la formación de su personal.
127. El Relator Especial insta al Gobierno a dar sustento institucional al Comité de
Género del órgano judicial.

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128. El Relator Especial exhorta al Gobierno a adoptar una ley de acceso a la


información pública.
129. El Relator Especial insta al Gobierno a mejorar la formación de la profesión legal
para lograr un mejor funcionamiento de la institucionalidad, en concordancia con los
principios del estado de derecho y las garantías de los derechos humanos.

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