Suelos Alcalinos y Sodicidad
Suelos Alcalinos y Sodicidad
Suelos Alcalinos y Sodicidad
DE GUATEMALA.
Sede:
Morales, Izabal.
Ingeniero Agrónomo:
Noé Humberto Paiz Gutiérrez.
Clase:
Nutrición Vegetal
Estudiante:
Gregorio Ottoniel Jerónimo Galdámez.
Carné:
202003171
Semestre:
Quinto Semestre:
Mayo 2022.
Suelos alcalinos en guatemala
Entre los estudios más actuales de correlación y calibración de metodologías
destacan los trabajos efectuados por Chonay et al., (2002). Uno de ellos fue
realizado en suelos de las tierras altas de Guatemala, comprendiendo los
departamentos de San Marcos, Quetzaltenango, Totonicapán, Sololá, Quiché,
Chimaltenango, Sacatepéz, Guatemala, Chiquimula, El Progreso, Jutiapa, Jalapa
y Santa Rosa, en un total de 60 localidades. En este estudio se encontró que
Mehlich 1 extrae P, K, Ca, Mg, Mn, Zn, pero no Cu y Fe mientras que Mehlich 3 y
Olsen Modificado extraen todos los nutrientes. Sugiere la utilización de acetato de
amonio para la obtención de Ca y Mg, y para los micronutrientes la solución
DTPA. Para los suelos de la pendiente volcánica del pacífico y suelos del Pacífico,
los autores encontraron que Mehlich 1 y 3 no son capaces de extraer Cu y Fe y
ningua de las soluciones es capaz de determinar Zn en cantidades confiables.
Estos autores determinaron los niveles críticos con las metodologías en estudio.
Otros estudios reportados por Chonay (2002) han sido conducidos a nivel de tesis
entre los que destacan los efectuados por Palencia et al., (1974), Estrada (1973),
Hurtarte (1984), Meneses (1986), Espinoza (1986), Marquez (1987), Yoc (1989),
entre otros.
De introducción más reciente a Guatemala ha sido el empleo de resisnas de
intercambio iónico para el análisis de P y cationes intercambiables (Pérez et al.,
2012). Este método tiene la ventaja de ser independiente del pH y se supone que
simula mejor la dinámica de absorción de P por las raíces de plantas (Van Raij, et
al., 2009).
https://www.icta.gob.gt/publicaciones/Informes%20Finales%20IICA-CRIA
%202020/9%20MA%C3%8DZ%20ORIENTE/M%C3%A9todos%20extracci
%C3%B3n-ICTA-Antonieta%20Alfaro/Evaluaci%C3%B3n%20de%20metodolog
%C3%ADas%20de%20extracci%C3%B3n.pdf
Sodicidad
Los suelos sódicos no debieran considerarse suelos salinos. El problema reside
en que el complejo de cambio de estos edafotaxa posee niveles altos de sodio.
Como resultado, puede decirse que su estructura es inestable en términos físicos.
En consecuencia tienden a desmenuzarse y agrietarse rápidamente cuando se
secan. Por el contrario, si están húmedos se hunden al colapsarse su estructura
(compactación). Cuando se endurecen comienzan a impermeabilizarse,
aumentando la escorrentía superficial. Esta última arrastrará en suspensión
arcillas, materia orgánica y nutrientes, reduciendo más aún su aptitud para las
producciones agrarias.
En general un exceso de sodio intercambiable no perjudica el desarrollo de las
plantas por sus efectos químicos, sino por la degradacción física que hemos
mencionado, especialmente cuando los suelos tienen una estructura fina. La
dispersión de las arcillas y a la consiguiente destrucción de los agregaddos alteran
su estructura de tal modo que los hace muy compactos y pocos porosos, por lo
que terminan siendo altamente impermeables al agua, entorpeciendo a su vez la
penetración en profundidad de los sitemas radiculares de las plantas. No resulta
posible rehabilidad estos suelos sin apelar a un drenaje artificial. Se pueden
agregar yeso y cloruro de calcio, así como otros materiales que liberen el calcio
(sulfuro, ácido sulfúrico, materia orgánica).
Un suelo salino-sódico tiene en exceso sales solubles y sodio intercambiable. Al
objeto de rehabilitarlos hay que seguir las recomendaciones de manejo para
suelos salinos y mejorar el drenaje. El lavado de este tipo de suelos sin atender a
los puntos señalados anteriormente podría deteriorar más aun su estructura.
Nunca es recomendable utilizar aguas de riego con un alto contenido en sodio,
especialmente si los suelos ya son de por sí impermeables, por cuanto se agrava
el problema, si no se inicia.
Interpretacion analisis de suelo (fosforo), por metodo Olsen y Bray.
Solución extractora de Olsen Modificada:
Esta solución está compuesta de NaHCO3 0.5 M, EDTA 0.01 M y 0.5 g de
Superfloc 127 para 10 litros de solución. En suelos ácidos que contengan fosfatos
ligados al Al y Fe, la concentración de fósforo en la solución incrementa conforme
sube el pH. Reacciones de precipitación secundaria se reducen al mínimo, debido
a que la concentración de Al, Ca y Fe, se mantienen a un bajo nivel (Ramos,
2003).
Olsen. A diferencia de Bray P1, Olsen es el método recomendado para los suelos
calcáreos. En general puede usarse en suelos neutros a alcalinos. En la práctica,
el contenido de carbonatos de un suelo se usa para definir el uso de Olsen, esto
es, si el contenido de carbonatos totales rebasa el 5%. El nivel crítico para este
método esta alrededotr de los 20 ppm.
Solución extractora de Bray y Kurtz 1:
Este método conocido como Bray 1 se trata de una extracción con una solución
mezcla de NH4F 0,03N y HCl 0,025N, que se basa en el efecto solubilizador de
H+ sobre el P del suelo y la capacidad de ión F- de bajar la actividad del Al+3,
evitando la re adsorción de los fosfatos en el sistema de extracción (Boschetti et
al., 2003). Ha sido utilizado para el análisis de P en suelos ácidos, sometidos a
fertilización con roca fosfórica y abonos orgánicos (Sociedad Española de la
Ciencia de suelos, 1982).
Bray P1. Este método se recomienda usarlo en suelos neutros o ácidos, ya que la
composición de la solución así lo determina. En contraparte, Bray P1 no ha
funcionado muy bien en suelos con alto contenido de carbonato, debido a que el
HCl del extractante es neutralizado por los carbonatos del suelo y da valores muy
bajos de P extraído. Se recomienda no usarlo en suelos que han recibido roca
fosfórica pues tiende a sobre estimar los valores de fósforo. Para este método se
ha determinado en la práctica un nivel crítico que está en los 30 ppm, es decir, los
suelos que estén por encima de este valor tienen muy bajas probabilidades de
respuesta a la adición de fósforo. Sin embargo, también debe tomarse en cuenta
los niveles de rendimiento del cultivo.
Metodos para interpretar análisis de suelos
La eficiencia de las prácticas de nutrición es evaluada mediante la cuantificación
de la concentración de nutrientes en la solución del suelo y en la planta, lo que es
conocido como seguimiento nutricional.
De esta forma es posible entender cuánto del fertilizante apicado y cuanto del
suplmento nativo de nutreintes está disponible para ser absorbido por el cultivo. La
correcta interpretación de los resultados ayuda a estimar la capacidad del suelo
para proveer nutrientes a la planta y realizar un diagnostico del estatus nutricional
del cultivo.
Los analisis de suelos y foliares son utilizados como herramientas de diagnostico
los cuales cuantifican la concentración de nutreintes en el suelo, su posible
disponibiidad a la planta y su real absorción. La calibración de los análisis de
suelos y foliares permiten estimar la probabilidad de respuesta a la aplicación de
nutrientes en forma de fertilizantes para poder diseñar los cimientos de un
programa de seguimiento nutricional.
Las muestra pueden ser sometidas a extracción química según las metodologías
de Mehlich 1, y Mehlich 3 (Mehlich 1953 y 1984, respectivamente), Olsen
modificado (Olsen et al., 1954) y Bray y Kurtz 1 (Bray y Kurtz, 1945). En los
extractos obtenidos se procede a determinar P (espectrofotometría de absorción
atómica). Adicionalmente se determinan las bases intercambiables con acetato de
amonio a pH 7 y los elementos menores con DTPA. Además se determina el pH
en agua (relación 1:10), la materia orgánica por el método de oxidación del
dicromato de potasio y la clase textural por el método de Bouyoucos.
Espectrofotometria
En los metodos espectrofotométricos se mide la intensidad de luz (energía
radiante o radiación electromagnetica) para determinar la concentración del analito
presente en una muestra.
Podemos dividir los métodos espectrofotométricos en dos grandes grupos según
qué es lo que medimos para cuantificar al analito:
Espectrofotometría de absorción:
En estos casos se mide la Absorbancia (A) del analito, esto es la luz absorbida por
el analito, y esta magnitud se relaciona con la concentración (C).
A ∞ c (la absorbancia es directamente proporcional a la concentración)
Espectrofotometría de emisión:
En este caso se mide la luz emitida por un analito previamente excitado, la señal
emitida se realaciona con la concentración de la especie que emite luz cuando
vuelve desde un estado excitado (estaddo de mayor energía al que llegó
absorbiendo energía) a su estado basal (estado de menor energía posible tal
como se encuentra naturalmente).
Señal emisión ∞ C (la emisión es directamente proporcional a la concentración)
Espectrofotometria Mehlich
Solución extractora de Mehlich I: esta solución es llamada también de doble
ácido o Carolina del Norte; está constituida por una mezcla de HCl 0.05 M y
H2SO4 0.0125 M. El empleo de esta solución como extractora de fósforo, potasio,
sodio y micronutrientes del suelo, se basa en la solubilización de esos elementos
por el efecto del pH entre 2 y 3, siendo el papel del Cl- el de restringir el proceso
de re adsorción de los fosfatos recién extraídos. Las ventajas de este método son
la facilidad de obtención de extractos, bajo costo de análisis y simplicidad
operacional (Da Silva, 1999).
Los extractores ácidos disuelven predominantemente el P ligado al Ca y
cantidades menores de P ligado a Fe y Al, en virtud de las diferencias de
solubilidad de esos fosfatos. Por extraer muy poco P ligado al Fe y Al, se obtiene
comúnmente un valor bajo de P en suelos arcillosos que son fertilizados con
fosfatos solubles en agua a lo largo de los años y que producen bien (Da Silva,
1999).
Solución extractora de Mehlich III:
La solución ácida con ion complejante más utilizada para la extracción de P es la
mezcla de HCl con NH4F, actuando el ion fluoruro más eficientemente en la
formación de un fuerte complejo con iones Al+3, liberando así el fósforo ligado al
metal. Los fosfatos de calcio son también extraídos por la precipitación del fluoruro
de calcio. Por lo tanto, la solución Mehlich III, tiene su acción basada en la
presencia del ion fluoruro y en el pH ácido. Este extractor ha sido adoptado por ser
multielemental, después de que el espectrofotómetro ICP se volvió popular en los
laboratorios de Estados Unidos. Esta solución está compuesta por ácido acético
0.2 N, nitrato de amonio 0.25 M, fluoruro de amonio 0.015 M, ácido nítrico 0.013 M
y EDTA 0.001 M regulada a pH 2.5 (Da Silva, 1999).