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Trabajo Tema IX Legislacion

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República Bolivariana de Venezuela

Universidad Nacional Experimental


“Antonio José de Sucre”
Vice-Rectorado Puerto Ordaz
Departamento de Ingeniería Industrial
Asignatura: Legislación industrial.

Trabajo de investigación grupal.


Tema: régimen de funcionario
público y salvaguarda a patrimonio.

Facilitador: Estudiantes:
Abg. Maite López. Katherine Hernández; Ci:26.936.518.

María Subero; Ci:24.855.074.

María Ferrer; Ci:26.455.463.

Josué Bastardo; Ci:21.248.335.

Marcí Pinto; Ci:25.393.370.

Ciudad Guayana, julio del 2022.


1) funcionarios públicos y función pública.

Estudiante: Katherine Hernández.

En Venezuela, los funcionarios públicos se rigen por la Constitución de la República


Bolivariana de Venezuela (CRBV) de 1999, la Ley del Estatuto de la Función Pública
(LEFP) y, continuamente, se les aplican otras leyes como es el caso de la Ley Orgánica
del Trabajo, los Trabajadores y las Trabajadoras (LOTTT) de 2012.

Sin embargo, la relación jurídica que une al empleado público con el Estado ha variado
profundamente a lo largo del tiempo. Es natural que así sea, pues responde
inevitablemente a la idea que en cada momento esta se asume del Estado y de la
Administración, de las funciones que se le atribuyan, de sus relaciones con la sociedad y,
en el fondo, de la misma evolución del sistema social, ya que el subsistema público
constituye una parte del todo.

Es decir, es natural que la relación jurídica entre los funcionarios públicos y el Estado
haya cambiado, porque el Estado, la Administración, sus funciones y sus relaciones con la
sociedad, evolucionan juntas como un todo.

El Art. 3 de la LEFP, dice que cualquier funcionario o funcionaria público será toda
persona natural que, en virtud de nombramiento expedido por la autoridad competente, se
desempeñe en el ejercicio de una función pública remunerada, con carácter permanente.

Esto quiere decir que un funcionario público es aquella persona que, en régimen de
trabajo por cuenta ajena (Un trabajador por cuenta ajena es una persona que,
voluntariamente, decide prestar sus servicios profesionales a una empresa u
organización, trabajando bajo el mandato de su empleador, quien además le proporciona
un salario fijo a cambio de su trabajo), presta sus servicios de forma permanente a la
Administración Pública.
Así, el funcionario público obtiene su retribución del Estado y se vincula mediante una
relación estatutaria, que supone que los derechos y deberes del funcionario se regulan
esencialmente por las leyes y reglamentos y no por contratos individuales o convenios
colectivos, y que el funcionario no tiene un derecho adquirido a mantener una
determinada regulación de sus condiciones de empleo.

Entonces, se puede acotar que un funcionario público es aquella persona que presta sus
servicios a la Administración Pública (la administración pública comprende el conjunto de
órganos del sector público conformados para realizar la tarea de administrar y gestionar,
es llevada a cabo por las entidades que conforman el poder ejecutivo tales como: los
ministerios, los gobiernos regionales y locales, como también los Organismos Públicos
Descentralizados, el Poder Legislativo, el Poder Judicial, etc.). Dado que el funcionario
público desempeña sus funciones para el Estado, este debe contribuir con una retribución
para el conjunto de empleados públicos que posee.

En ese orden de ideas, la Función Pública (o funciones públicas) es la actividad que


cumple quien desempeña un cargo o ejerce real y efectivamente parte del Poder Público,
ya sea como autoridad, agente o auxiliar. En otras palabras, es la labor ejercida y
realizada por todo funcionario público (persona que ejerce el Poder Público), en el
desenvolvimiento de su cargo.

Se puede decir también que la función pública es un conjunto del cual forman parte todos
los funcionarios públicos (empleados públicos que ingresan a la Administración mediante
nombramiento de la autoridad competente o tras superar determinadas pruebas selectivas
más o menos rigurosas, y sus relaciones con la Administración se someten a un régimen
especial de Derecho Administrativo, distinto del que corresponde a los trabajadores).

Clasificación de los funcionarios públicos

Siguiendo el anterior orden de ideas, el artículo 19 del Estatuto clasifica a los funcionarios
públicos en dos categorías, a saber:
1) funcionarios de carrera y

2) funcionarios de libre nombramiento y remoción, los cuales todos, en principio, están


sujetos al Estatuto.

(i) Funcionarios de carrera (artículo 19 LEFP): son aquellos que, habiendo ganado el
concurso público, superado el período de prueba y en virtud de nombramiento, prestan
servicios remunerados y con carácter permanente.

(ii) Funcionarios de libre nombramiento y remoción (artículo 19 LEFP): aquellos que son
nombrados y removidos libremente de sus cargos, sin otras limitaciones que las
establecidas en el Estatuto. Ellos, a su vez, se dividen en: Cargos de alto nivel (artículo 20
LEFP) o aquellos relacionados con la dirección política del país o con las tareas de los
más altos gobernantes:

Vicepresidente Ejecutivo; Ministros; Jefes de Oficinas Nacionales o equivalentes;


Comisionados Presidenciales; Viceministros; directores generales, directores y demás
funcionarios de similar jerarquía al servicio de la Presidencia de la República,
Vicepresidencia Ejecutiva y Ministros; miembros de las juntas directivas de los institutos
autónomos nacionales; directores generales, directores y demás funcionarios de similar
jerarquía en los institutos autónomos; registradores y notarios públicos; Secretario
General de Gobierno de los estados; directores generales sectoriales de las
gobernaciones, directores de las alcaldías y otros cargos de la misma jerarquía; máximas
autoridades de los institutos autónomos estadales y municipales, así como sus directores
y funcionarios de similar jerarquía; y Cargos de Confianza (artículos 20 y 21 LEFP) o
aquellos cuyas funciones requieren de un alto grado de confidencialidad en los despachos
de las máximas autoridades de la Administración Pública, de los viceministros, de los
directores generales y de los directores o sus equivalentes. También son cargos de
confianza, aquellos cuyas funciones comprenden principalmente actividades de seguridad
del Estado, de fiscalización e inspección, rentas, aduanas, control de extranjeros y
fronteras, sin perjuicio de lo establecido en el Estatuto.
Puede decirse que existen distintos tipos o grados de confidencialidad: primero, aquellos
cuyas funciones ordinarias y principales requieran de un alto rango de confidencialidad y
no de eventualidad; segundo, aquellos cuyas funciones sean principalmente fiscalización
e inspección, todo lo que sea contraloría; y tercero, aquellos que manejan seguridad
nacional.

2) qué sucedió con los trabajadores de función pública con la promulgación de la


LOTTT?

Estudiante: María Ferrer.

Se deja claro los sujetos que se encuentran dentro del ámbito de aplicación de la LOTTT
(2012), exceptuando a los miembros de los cuerpos armados que integran la Fuerza
Armada Nacional Bolivariana, así como también a los servicios policiales quedando
también excluidos los funcionarios públicos por tener estos una relación estatutaria con la
administración publica sin embargo, se deja bajo la tutela de la LOTTT a los trabajadores
que presten servicio tanto en las Fundaciones como en las Empresas del Estado y así lo
recoge expresamente el artículo 6 de la referida Ley, al señalar que los trabajadores
contratados y las trabajadoras contratadas al servicio de la Administración Pública
Nacional, Estadal y Municipal, centralizada y descentralizada, se regirán por las normas
contenidas en la LOTTT; esto último, también tiene su fundamento en lo establecido en
los artículos 108 y 115 de la Ley Orgánica de la Administración Pública (2014), los cuales
por remisión señalan que los trabajadores que se desempeñen dentro de las Fundaciones
y Empresas del Estado se regirán por la legislación laboral ordinaria.

Ahora bien, como quiera que el artículo 6 de la LOTTT, establece la posibilidad de


reconocer el tiempo de servicio y ser computado a la antigüedad, es importante
determinar el alcance y los efectos que esta disposición genera. Por ello, es preciso traer
a colación el último párrafo del artículo 6 de la Ley Orgánica del Trabajo, Trabajadores y
Trabajadoras que a tenor establece:

Artículo 6. El tiempo desempeñado en la administración pública nacional, estadal y


municipal, centralizada y descentralizada, será considerado para todos los efectos legales
y contractuales como tiempo de servicio efectivamente prestado y computado a la
antigüedad.

Se desprende del referido artículo el reconocimiento legal del tiempo de servicio


desempeñado dentro de la Administración Pública en cualquiera de sus estamentos:
nacional, estadal o municipal, se traten éstos de organismos o entes, tanto centralizados
como descentralizados. En ese sentido y partiendo de que la Administración Pública se
encuentra ceñida a una serie de principios que arropan su funcionamiento y se extienden
incluso, en algunos casos, a quienes laboran en ella, es preciso indicar que la misma es
regulada como una sola organización que comprende el Poder Nacional, Estadal y
Municipal, por un lado, mientras que, por el otro, desde un plano más descentralizado,
comprende los Institutos Autónomos, las Fundaciones y las Empresas de Estado.

En atención a lo anterior, al decir de Almeida (2004) la Administración Pública es


concebida como un todo homogéneo, donde se precisa con carácter general los derechos
básicos o esenciales de todos los que tengan una relación de empleo con la misma, con
independencia de la naturaleza jurídica del vínculo que une a la Administración y al
empleado o funcionario público. Es por ello que aún y cuando las normas que regulen la
relación laboral o estatutaria sean diferentes, el tiempo laborado en la administración
pública es el mismo, independientemente que ésta sea desarrollada en órganos o entes
centralizados o descentralizados.

Por otro lado, en análisis de la doctrina que hace referencia al empleo público ofrecido a
la Administración, se trae como referencia el concepto restringido que refiere Palomar
Olmeda (2003), donde se señala que el derecho de la Función o el empleo público, es el
conjunto de normas, que, constituyendo un todo armónico dentro del ordenamiento
jurídico, tienen por objeto regular la relación de servicio prestada para las
Administraciones Públicas; siendo que la antigüedad es una sola.

En ese mismo orden de ideas, es importante mencionar que el artículo 141 de la LOTTT
establece el régimen de prestaciones sociales, señalando el derecho que tienen todos los
trabajadores y trabajadoras a recibir las prestaciones sociales que les recompensen la
antigüedad en el servicio y los ampare en caso de cesantía. Asimismo, continúa
señalando la norma, que dicho régimen establece el pago de este derecho de forma
proporcional al tiempo de servicio, calculado con el último salario devengado por el
trabajador o trabajadora al finalizar la relación laboral; sustentando y garantizando tal
derecho a través de los principios de intangibilidad y progresividad de los derechos
laborales.

Dentro del mismo contexto, precisa el literal b, del artículo 142 de la LOTTT, que la
garantía y cálculo de prestaciones sociales se pagarán en función de que, adicionalmente
y después del primer año de servicio, el patrono o patrona depositará a cada trabajador o
trabajadora 2 días adicionales y acumulativos de salario por cada año de servicio y éstos
se causarán cumplido que fuere el segundo año de servicio, los cuales se continúan
causando en base al tiempo trabajado después del primer año, hasta un máximo de 30
días de salario por año laborado, de tal manera que por el segundo año de servicio el
trabajador acumula 2 días adicionales, por el tercer año de servicio el trabajador acumula
4 días, por el cuarto año de servicio el trabajador acumula 6 días más, por el quinto año
de servicio acumula 8 días adicionales y así, de manera, sucesiva y progresivamente se
va acumulando hasta garantizar, tal como lo señala la LOTTT, un máximo de 30 días
adicionales por año de servicios.

Ahora bien, como quiera que el contenido normativo contemplado en el último párrafo del
artículo 6 de la LOTTT posee un carácter amplio debido a la propia naturaleza jurídica de
la institución de donde proviene; sin embargo, haciendo una interpretación restrictiva de la
norma al establecer ésta claramente que el tiempo desempeñado dentro de la
administración será considerado para todos los efectos legales y contractuales como
tiempo de servicio efectivamente laborado, es así como, se desprende del artículo que
este tiempo acumulado será computado a la antigüedad del trabajador, en cuyo caso
puede ser considerado para la garantía y cálculo de prestaciones sociales, tomando en
consideración los dos (2) días adicionales establecidos en el artículo 142 de la LOTTT.

Lo anterior en virtud que el legislador no establece el alcance de lo contemplado en dicha


norma, como sí lo hace en el artículo 12 del Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley
sobre el Régimen de Jubilaciones y Pensiones de los Trabajadores y las Trabajadoras de
la Administración Pública Nacional, Estadal y Municipal (2014), la cual si realiza
claramente la distinción de que ese tiempo sólo será considerado para el otorgamiento de
la jubilación, señalando, en ese sentido, que la antigüedad que resulte de computar los
años de servicios prestados en forma ininterrumpida o no, en órganos y entes de la
Administración Pública, va a ser tomada en cuenta para el otorgamiento del beneficio de
la jubilación; situación ésta que no se evidencia en el contenido normativo del artículo al
cual se está haciendo alusión.

Es por ello que, finalmente, para aquellos trabajadores que ya venían acumulando días
adicionales, por la antigüedad obtenida con ocasión a la prestación del servicio a la
Administración Pública, esta acumulación deberá continuar en forma progresiva, es decir
que el cómputo de estos días adicionales no iniciaría desde cero, sino que, por el
contrario, en estricto apego al contenido gramatical y exegético de la norma establecido
en el último párrafo del artículo 6 de la LOTTT, y trayendo a colación una de las máximas
jurídicas utilizada por Tribunales del país la cual refiere que donde no distingue el
Legislador, no debe distinguir el Intérprete, se pudiera concluir que dicho tiempo
desempeñado en la Administración Pública Nacional, Estadal y Municipal, centralizada y/o
descentralizada, debe ser considerado para todos los efectos legales y contractuales
como tiempo de servicio efectivamente prestado y computado a la antigüedad, todo ello
en atención a los principios que resguardan y tutelan los derechos de los trabajadores
como lo son los principios de continuidad, intangibilidad y progresividad de los derechos
laborales.

3) análisis del proceso de laboralización de la función pública teniendo en cuenta el


ingreso, la estabilidad y el derecho colectivo en esa rama.

Estudiante: Zara Pinto.

La función pública siempre ha estado regida por sus propias normas distintas del derecho
laboral. Tiene su propio estatuto donde se establecen tareas públicas asignadas a
funcionarios que éstos tienen el deber de cumplir, lo cual se diferencia de la relación
contractual que priva en el derecho laboral. Sin embargo, la función pública se ha ido
laboralizando con el paso del tiempo. En muchos casos esa liberalización ha derivado de
cambios legislativos, en otros han sido producto de los hechos, que, en materia laboral,
han sido históricamente canales naturales para avances y reivindicaciones. En el presente
ensayo se realizará un análisis del proceso de liberalización de la función pública en
Venezuela, tocando aspectos como el ingreso, estabilidad y el derecho colectivo del
trabajo en la función pública.

La designación o acto de nombramiento de los funcionarios es un acto administrativo que


al emitirse subsumía al funcionario en un régimen de personal establecido unilateralmente
por el Estado, ha venido estando condicionado por las tareas públicas que tienen
asignadas los funcionarios públicos y que éstos tienen el deber de cumplir. Por ello, no
eran propias del derecho de la función pública figuras como la sindicalización, el derecho
a huelga, la contratación colectiva, ni le eran aplicables regímenes de beneficios
pertenecientes al derecho laboral. En Venezuela, a lo largo de los años, privó esta
corriente, con algunos intentos de llevar las normas laborales al campo funcionarial, hasta
que luego del proceso de recuperación de la democracia en 1958, se presentaron
esfuerzos por aplicar beneficios laborales a los funcionarios públicos.

En la Constitución de 1947 se adopta con rango constitucional por primera vez el sistema
estatutario como sistema de regulación de las relaciones de empleo público, lo que
posteriormente se repite en la Constitución Nacional de 1961(artículo 122), que equivale
al actual artículo 144 de la Constitución de 1999. Ahora bien, la sanción de la Ley de
Carrera Administrativa en 1970, momento en el cual se regula mediante una ley especial
por primera vez la función pública, comienza a generarse debates por las iniciativas de
algunos sectores de la sociedad de extender algunos derechos de los trabajadores a los
funcionarios públicos. En el proyecto presentado por la Comisión de Administración
Pública del Congreso Nacional de aquellos años, se proponía la prohibición expresa de la
contratación colectiva y la huelga en la función pública. Sin embargo, luego de
discusiones al respecto, se llegó a la conclusión de que no era necesaria la prohibición
expresa de tales aspectos y luego mediante las vías de hecho, como es común en el
ámbito laboral, fueron produciéndose cambios que permitieron introducir elementos del
derecho laboral en el ámbito funcionarial, verbigracia las llamadas “Actas Convenio”, que
eran una manera de ir regulando las condiciones de trabajo de los funcionarios, y la
aceptación de la sindicalización en la función pública.
A partir de la entrada en vigencia de la Reforma Parcial de la Ley de Carrera
Administrativa de 1975, se introducen aspectos relevantes de naturaleza laboral en la
función pública, como lo son la aplicación a los funcionarios públicos el régimen general
de prestaciones sociales de la Ley del Trabajo y el derecho a la sindicalización, lo cual
condujo por la vía de los hechos a la suscripción de contratos colectivos en algunos
sectores de la administración pública y al uso de la huelga como mecanismo conflictivo de
lucha para exigir cumplimiento de acuerdos y reivindicaciones laborales.

El estado como conjunto orgánico que persigue unos fines superiores, sólo puede
considerarse existente en cuanto que es actual, y esta actualidad la alcanza cuando
actúa, es decir, cuanto de modo permanente e ininterrumpido realiza una serie de actos.
En el momento en que tales actos dejan de tener lugar cesan de ser una realidad
presente para convertir en pasado histórico (García-Pelayo, 2001).

Observando al Estado como conjunto de entes órganos e instituciones, está la


Administración pública, de la cual existen cuando menos dos concepciones, una orgánica
y otra material, y cuyo concepto en sentido orgánico, y desde el punto de vista restringido
(Por cuanto si bien la Administración desde el punto de vista orgánico realiza siempre una
actividad administrativa, también la realizan otros órganos de los otros Poderes del
Estado), apunta al conjunto de estructuras administrativas, de ministerios, de oficinas y
departamentos que forman parte del Poder Ejecutivo. La Administración como actividad,
en cambio, es una noción material que atiende a una acción o tarea administrativa
realizada por el Estado (Brewer-Carías, 2005).

Esta actividad administrativa se materializa a través de quienes ejercen las funciones


propias del cargo que ocupen dentro de la Administración. Por tanto, es a través de los
funcionarios públicos como el Estado y la Administración pública ejecuta las acciones
dirigidas a cumplir con sus cometidos y fines superiores.
La Sala Político Administrativa del Tribunal Supremo de Justicia, en Sentencia de fecha
15 de mayo de 2001, signada bajo el número 000943, estableció lo que debe entenderse
por función pública en los siguientes términos:

Con carácter general la función pública es toda la actividad destinada a realizar los
intereses del colectivo. Lo cual es por antonomasia la ratio de la prestación del servicio
público llevada a cabo por la Administración Pública. Esa función pública en específico
está tanto delineada como regulada por el ordenamiento jurídico. Así, en particular ex lege
y reglamentariamente se estatuye las competencias y atribuciones que los agentes
públicos tienen, y así mismo, los fines que se persiguen con su ejercicio y sus límites, las
cuales, por principio, como se expresó, atienden a la realización del interés público, y en
tal sentido, como es obvio, excluyen absolutamente propósitos quebrantadores de la Ley,
o en general de los principios, derechos y garantías que soportan a un Estado de
Derecho.

Resulta evidente que, entre el trabajador en el sector privado y su empleador, existe un


vínculo jurídico de naturaleza contractual de derecho privado, conforme al cual trabajador
y patrono convienen las condiciones de trabajo, reguladoras de esa prestación dentro del
marco normativo laboral, tiene que ver con la teoría de la relación de trabajo (Alfonzo-
Guzmán, 2016).

No así ocurre en el sector público, lo cual ha significado un punto de discusión abordado


entre dos tendencias contrapuestas; por un lado la tesis tradicional administrativista que
plantea la rigidez estatutaria; para los administrativistas, hay una marcada diferencia entre
las relaciones de empleo en el sector privado, y las del sector público; es diferente la
naturaleza de la prestación de servicio en uno y otro, de allí que se requiera
necesariamente de instrumentos legales distintos y que para el sector público debe haber
normas de derecho público, regulación unilateral por parte del Estado, la conformación de
derechos, deberes y condiciones de trabajo reguladas por un Estatuto de manera
diferenciada; y por otra parte la corriente laboralista, que se fundamenta en la
equiparación de la relación jurídica entre el funcionario y el Estado a la relación jurídica de
naturaleza contractual entre el trabajador y su Patrono, que el mundo del trabajo es uno
sólo, por lo cual, aun cuando pueden existir situaciones especiales o grupos específicos
de trabajadores, que por sus características requieran ciertas particularidades, pero todos
ellos deben estar sometidos a una misma legislación: la legislación laboral.

Al respecto, Alegría (2005) dice lo siguiente:

Lo que en todo caso debe resaltarse es que la concepción estatutaria a ultranza, está
perdiendo espacio de forma evidente. Los funcionarios públicos están adquiriendo cada
vez un estatus frente al ente público, que implica el ejercicio de derechos considerados
como privativos en el mundo del trabajo regido por la Ley del Trabajo y esto supone un
cambio trascendental. Pareciera estarse abriendo paso a una concepción unitaria del
mundo del trabajo donde las diferencias entre Empleados- Administración, por un lado y
por el otro, trabajador-patrono van perdiendo perfiles; adecuando áreas comunes. (p.57)

La asunción del sistema estatutario de la función pública en Venezuela tiene como


antecedente constitucional primigenio la Constitución de 1947, la cual en su artículo 90
dispuso: Artículo 90. El Estado dictará un estatuto que rija sus relaciones con los
funcionarios y empleados públicos, en el cual se establecerán las normas de ingreso a la
administración y las de ascenso, traslado, suspensión y retiro. Los empleados públicos
están al servicio de la Nación y no de parcialidad política alguna.

Asimismo, la Constitución de 1961 en su artículo 122 estableció: Artículo 122. La ley


establecerá la carrera administrativa mediante las normas de ingreso, ascenso, traslado,
suspensión, retiro de los empleados de la Administración Pública Nacional, y proveerá su
incorporación al sistema de seguridad social. Los empleados públicos están al servicio del
Estado y no de parcialidad alguna.

Todo funcionario o empleado público está obligado a cumplir los requisitos establecidos
por la ley para el ejercicio de su cargo. Como ya mencionamos, la Ley de Carrera
Administrativa en 1970 es la que viene por primera vez a regular, mediante una ley
especial, la función pública atendiendo al mandato constitucional dispuesto en el citado
artículo 122, disposición ésta que fue asumida de manera similar por la vigente
Constitución de 1999 cuando en su artículo 144 establece: Artículo 144. La ley
establecerá el Estatuto de la función pública mediante normas sobre el ingreso, ascenso,
traslado, suspensión y retiro de los funcionarios o funcionarias de la Administración
Pública, y proveerá su incorporación a la seguridad social. La ley determinará las
funciones y requisitos que deben cumplir los funcionarios públicos y funcionarias públicas
para ejercer sus cargos. En acatamiento a esta disposición constitucional, en el año 2002,
es sancionada la vigente Ley del Estatuto de la Función Pública, en la que se regulan los
distintos aspectos de las relaciones de empleo público por mandato expreso de la
Constitución, consagrando entre otros aspectos, de manera expresa el derecho a la
contratación colectiva y el derecho a huelga, derogando prácticamente con el artículo 32
al artículo 8 de la Ley Orgánica del Trabajo e incluyendo aspectos del derecho laboral, a
la función pública (Caballero, 2006).

La estabilidad de los funcionarios públicos de carrera El derecho a la estabilidad, es un


derecho exclusivo de los funcionarios de carrera, es decir, no tienen derecho a ella los
funcionarios de libre nombramiento y remoción. La estabilidad constituye la columna
vertebral de la función pública y más específicamente de la carrea administrativa, sin
estabilidad no podría concebirse la carrera administrativa.

La Ley del Estatuto de la Función Pública establece en su artículo 30 que “los funcionarios
o funcionarias públicos de carrera que ocupen cargos de carrera gozarán de estabilidad
en el desempeño de sus cargos. En consecuencia, sólo podrán ser retirados del servicio
por las causales contempladas en la presente Ley”. La referida disposición, nos impone
destacar cuáles son esas causales contempladas en la Ley para poder retirar de su
servicio a un funcionario de carrera. De acuerdo a lo establecido por el artículo 78 de Ley
del Estatuto de la Función Pública son:

1. Por renuncia escrita del funcionario o funcionaria público debidamente aceptada.

2. Por pérdida de la nacionalidad.

3. Por interdicción civil.

4. Por jubilación y por invalidez de conformidad con la ley.

5. Por reducción de personal debido a limitaciones financieras, cambios en la


organización administrativa, razones técnicas o la supresión de una dirección, división o
unidad administrativa del órgano o ente.
6. Por estar incurso en causal de destitución.

7. Por cualquier otra causa prevista en la presente Ley. Como cualquier situación
administrativa, y en este caso cualquier acto no ingresó por concurso, no es funcionario
de carrera y por tanto las inspectorías son competentes para conocer de las solicitudes de
reenganche. Es este pues, otro aspecto más que se suma a la tendencia laboralizadora
que ha surgido en los últimos años.

3. EL DERECHO COLECTIVO DEL TRABAJO Y LA FUNCIÓN PÚBLICA

La convención colectiva en la administración pública, es un hecho reciente data en


Venezuela. Dentro de los antecedentes nacionales contemporáneos se ubica en el año
1958, la creación de una Junta Normalizadora de Salarios y Condiciones de Trabajo de
los Obreros al Servicio del Estado y la subsiguiente creación de la Oficina Normalizadora
de Salarios, como ente centralizador de la política colectiva del Estado; Posteriormente el
Procurador General de la República asume la dirección exclusiva de todos los Contratos
Colectivos, y cesa en sus funciones dicha Oficina Normalizadora de Salarios (Ramírez,
2008). Mediante las vías de hecho, como es común en el ámbito laboral, fueron
produciéndose cambios que permitieron introducir elementos del derecho laboral en el
ámbito funcionarial, verbigracia las llamadas “Actas Convenio”, que eran una manera de ir
regulando las condiciones de trabajo de los funcionarios, y la aceptación de la
sindicalización en la función pública. A partir de la entrada en vigencia de la Reforma
Parcial de la Ley de Carrera Administrativa de 1975, se introducen aspectos relevantes de
naturaleza laboral en la función pública, como lo son la aplicación a los funcionarios
públicos el régimen general de prestaciones sociales de la Ley del Trabajo y el derecho a
la sindicalización, lo cual condujo por la vía de los hechos a la suscripción de contratos
colectivos en algunos sectores de la administración pública y al uso de la huelga como
mecanismo conflictivo de lucha para exigir cumplimiento de acuerdos y reivindicaciones
laborales.

Con la vigencia de la Ley Orgánica del Trabajo el 01 de Mayo de 1991, y su artículo 8, se


perfila definitivamente la convención colectiva de trabajo, como un instrumento normativo
en cuyo ámbito de validez subjetivo era posible incorporar no solo laborantes regidos por
normas de la relación común de trabajo, sino también funcionarios o empleados públicos,
adquiriendo de esta forma el derecho a discutir y aprobar convenciones colectivas del
trabajo, a la solución pacífica de los conflictos y a la huelga. La Ley Orgánica del Trabajo,
los Trabajadores y las Trabajadoras, dedica un capítulo especial (del artículo 442 al 447)
para regular y desarrollar las convenciones colectivas en el sector público. El legislador
busca cumplir con un mandato constitucional puesto que la Constitución Nacional de
1999, en los artículos 95, 96, 97, reconoce expresamente a los trabajadores del sector
público los derechos propios de la libertad sindical, derecho al conflicto, derecho a la
negociación colectiva y derecho a huelga. También persigue con ello dar cumplimiento a
las obligaciones que dimanan del Convenio del OIT (Organización Internacional del
Trabajo) Nº 98, relativo a los principios del Derecho de Sindicación y Negociación
Colectiva, ratificado por Venezuela.

4) analizar la ley de carrera administrativa (estructura, objeto y fines, si está vigente


o no y como protege a los funcionarios públicos en materia laboral).

Estudiante: María Subero.

LEY DE CARRERA ADMINISTRATIVA 


Gaceta Oficial Extraordinaria Nº 1.745 de fecha 23 de mayo de 1975
 
EL CONGRESO DE LA REPUBLICA DE VENEZUELA
 
Decreta

la siguiente,

LEY DE CARRERA ADMINISTRATIVA

(hoy derogada por la Ley del estatuto de la Función pública)

La presente Ley regula los derechos y deberes de los funcionarios públicos en sus
relaciones con la Administración Pública Nacional mediante el establecimiento de un
sistema de administración de personal que permita estructurar técnicamente y sobre la
base de méritos, todas las normas y procedimientos relativos a las diversas situaciones
jurídicas y administrativas de los funcionarios públicos, con exclusión de toda
discriminación fundada en motivos de carácter político, social, religioso o de cualquier otra
índole.

A los efectos de la presente Ley las expresiones funcionario público, empleado público y
servidor público tendrán un mismo y único significado. Los funcionarios públicos pueden
ser de carrera o de libre nombramiento y remoción.

Los funcionarios de carrera son aquellos que, en virtud de nombramiento, han ingresado a
la carrera administrativa conforme se determina en los artículos 34 y siguientes, y
desempeñan servicios de carácter permanente.

Se consideran funcionarios de libre nombramiento y remoción, los siguientes:

1. Los Ministros del Despacho, el Secretario General de la Presidencia de la


República, el Jefe de la Oficina Central de Coordinación y Planificación, los
Comisionados Presidenciales, los demás funcionarios de similar jerarquía
designados por el Presidente de la República y los Gobernadores de los Territorios
Federales.
2. Las máximas autoridades directivas y administrativas de los organismos
autónomos de la Administración Pública Nacional, los Directores Generales, los
Directores, Consultores Jurídicos y demás funcionarios de similar jerarquía al
servicio de la Presidencia de la República, de los Ministerios o de los organismos
autónomos y de las Gobernaciones de los Territorios Federales.
3. Los demás funcionarios públicos que ocupen cargos de alto nivel o de confianza en
la Administración Pública Nacional y que por la índole de sus funciones, el
Presidente de la República mediante Decreto, excluya de la carrera administrativa,
previa aprobación por el Consejo de Ministros. 

Quedan exceptuados de la aplicación de la presente Ley:

1. Los funcionarios al servicio del Poder Legislativo Nacional;


2. Los funcionarios del servicio exterior amparados por la Ley de Personal del
Servicio Exterior y la Ley Orgánica del Servicio Consular;
3. Los funcionarios del Poder Judicial, del Ministerio Público y del Consejo Supremo
Electoral;
4. Los miembros de las Fuerzas Armadas Nacionales en su condición de tales y de
los cuerpos de seguridad del Estado;
5. Los miembros del personal directivo, académico, docente y de investigaciones de
las Universidades Nacionales y
6. Los obreros al servicio de la Administración Pública Nacional, contratados por ésta
en tal carácter, de acuerdo a la Ley del Trabajo.

De la gestión de la Función Pública


 

La competencia en todo lo relativo a la función pública y a la administración de personal


en la Administración Pública Nacional se ejercerá por:

1. El Presidente de la República;
2. Los Ministros del Despacho; y
3. Las máximas autoridades directivas y administrativas de los organismos
autónomos de la Administración Pública Nacional.

De la Oficina Central de Personal

Su principal función: elaborar y organizar el sistema de administración de personal y


supervisar su aplicación y desarrollo.

Los miembros del Directorio de la Oficina Central de Personal y sus suplentes, deberán
reunir los siguientes requisitos:

1. Poseer la capacidad necesaria en administración de personal;


2. No tener antecedentes delictivos;
3. No tener vínculos de parentesco con el Presidente de la República hasta el cuarto
grado de consanguinidad y segundo de afinidad. 
De las Oficinas de Personal

Su principal función:

1.      Dirigir en el seno del organismo respectivo la aplicación y mejora de las


normas y de los procedimientos que en materia de administración de personal
señalen la presente Ley y sus Reglamentos;
2.      Realizar los cursos de adiestramiento a que se refiere el artículo 47 de la
presente Ley;
3.      Realizar en el organismo respectivo, los exámenes que se requieran para la
incorporación a la carrera administrativa o para ascender dentro de la misma,
en la forma que se determine en el Reglamento;
4.      Proponer ante la máxima autoridad administrativa del organismo respectivo,
los nombramientos de ingreso o de ascenso, retiros y demás movimientos de
personal;
5.      Cuidar de que se elaboren debidamente los expedientes en caso de hechos
que dieren lugar a la aplicación de las sanciones previstas en esta Ley;
6.      Enviar periódicamente a la Oficina Central de Personal una relación detallada
de los movimientos de personal, así como todas las informaciones que ésta les
solicite en materia de administración de personal en el organismo respectivo;
7.      Prestar a las Juntas de Avenimiento las facilidades que éstas requieran para
el cabal cumplimiento de sus funciones;
8.      Actuar como órgano regular entre el organismo respectivo y la Oficina Central
de Personal;
9.      Los demás que se establezcan en la presente Ley y en su Reglamento.

De las Juntas de Avenimiento

En cada organismo a cuyos funcionarios se aplique la presente Ley existirá una Junta de
Avenimiento integrada por dos miembros designados así: un representante de la máxima
autoridad administrativa del organismo; y un representante de los empleados a su
servicio, postulado por la organización gremial que agrupe en su seno a la mayoría de
ellos. El Jefe de la respectiva Oficina de Personal, actuará como Coordinador de la Junta.
DE LOS DERECHOS, DEBERES E INCOMPATIBILIDADES DE
LOS FUNCIONARIOS PUBLICOS

De los Derechos
Derecho a:

 Estabilidad cargo
 Ser informado por su superior inmediato acerca del cargo al que se incorpore.
 Ascenso
 Vacación anual
 Bonificación de fin de año (cumpliendo 3 meses en el cargo)
 Jubilación por limite de edad y años de servicios.
 Organizarse sindicalmente.
 Remuneraciones correspondientes al cargo que desempeñe
 Régimen de los permisos remunerados y no remunerados.
 Indemnización al renunciar
 Créditos que pueda otorgar el instituto nacional de vivienda.

De los Deberes
Sin perjuicio de los deberes que impongan las leyes y reglamentos especiales, los
funcionarios públicos están obligados a: 

1.      Prestar sus servicios personalmente con la eficiencia requerida para el


cumplimiento de las tareas que tengan encomendadas, conforme a las
modalidades que determinen los reglamentos;
2.      Acatar las órdenes e instrucciones emanadas de los superiores jerárquicos
que dirijan o supervisen la actividad del servicio correspondiente, de
conformidad con las especificaciones del cargo que desempeñen;
3.      Guardar en todo momento una conducta decorosa y observar en sus
relaciones con sus subordinados y con el público, toda la consideración y
cortesía debidas;
4.      Guardar la reserva y secreto que requieran los asuntos relacionados con su
trabajo;
5.      Vigilar, conservar y salvaguardar los documentos, bienes, e intereses de la
administración confiados a su guarda, uso o administración;
6.      Atender regularmente las actividades de adiestramiento y perfeccionamiento
destinados a mejorar su capacitación;
7.      Poner en conocimiento de sus superiores las iniciativas que estimen útiles
para la conservación del patrimonio nacional o el mejoramiento de los servicios;
8.      En general, cumplir y hacer cumplir la Constitución, las leyes, los reglamentos
y los diversos actos administrativos que deban ejecutar.

Sin perjuicio de lo dispuesto en las leyes y reglamentos especiales, se prohíbe a los


funcionarios públicos: 
1. Celebrar contratos por sí, por personas interpuestas o en representación de otro,
con la República, los Estados, los Municipios y demás personas jurídicas de
derecho público, salvo las excepciones que establezcan las leyes;
2. Realizar propaganda o coacción política con motivo o en ocasión del desempeño
de sus funciones, así como en dicha oportunidad ostentar distintivos que los
acrediten como miembros de un partido político;
3. Auspiciar gestiones de personas públicas o jurídicas que pretendan celebrar
contratos con la República o que soliciten o exploten concesiones administrativas,
o que sean proveedoras o contratistas de la misma; y
4. Aceptar cargos, honores o recompensas de gobiernos extranjeros sin que preceda
la correspondiente autorización del Senado. 
.

De las Incompatibilidades

El ejercicio de un destino público remunerado es incompatible con el desempeño de


cualquier cargo, profesión o actividades que menoscabe el estricto cumplimiento de los
deberes del funcionario.

El ejercicio de los cargos académicos, accidentales, asistenciales, docentes, edilicios, o


electorales declarado por la Ley compatible con el ejercicio de un destino público
remunerado, se hará sin menoscabo del cumplimiento de los deberes inherentes a éste,
en conformidad con lo que establezca el Reglamento de esta Ley.

DEL SISTEMA DE ADMINISTRACIÓN DE PERSONAL


 

Para ingresar a la Administración Pública Nacional, es necesario reunir los siguientes


requisitos:
1. Ser venezolano.
2. Tener buena conducta.
3. Llenar los requisitos mínimos correspondientes al cargo respectivo.
4. No estar sujeto a interdicción civil, y
5. Las demás, que establezcan la Constitución y las Leyes. 

Esta comprende los artículos que regulan:


 El ingreso a la administración pública nacional
 El nombramiento
 El juramento

Del Sistema de Clasificación de Cargos

El sistema de clasificación de cargos comprende el agrupamiento de éstos en clases


definidas. Cada clase deberá ser descrita mediante una especificación oficial que incluirá
lo siguiente: 
1.      Denominación de la clase a la que se le asigna, también un código para su mejor
identificación;
2.      Descripción de las atribuciones y deberes inherentes a la clase de cargo;
3.      Los requisitos mínimos exigidos para desempeñar el cargo;
4.      Cualesquiera otros que determine el Reglamento respectivo.

Las denominaciones de clases de cargos, así como su ordenación, y la indicación de


aquellos que sean de carrera, serán aprobados por el Presidente de la República
mediante Decreto. Las denominaciones aprobadas serán de uso obligatorio en la Ley de
Presupuesto y en los demás actos y documentos oficiales, sin perjuicio del uso de la
terminología que se aporte para designar en la respectiva jerarquía los cargos de jefatura
o de carácter supervisorio.

Del Sistema de Remuneraciones

El sistema de remuneraciones comprende los sueldos, compensaciones, viáticos,


asignaciones y cualesquiera otras prestaciones pecuniarias o de otra índole que reciban
los funcionarios públicos por sus servicios. En dicho sistema se establecerán escalas
generales de sueldo, divididas en grados con montos mínimos, intermedios y máximos.
Cada cargo deberá ser asignado al grado correspondiente, según el sistema de
clasificación, y remunerado con una de las tarifas previstas en la escala.

De la Calificación de Servicios

El sistema de calificación de los servicios comprende el conjunto de normas y


procedimientos tendientes a evaluar y calificar la eficiencia y conducta de los funcionarios
públicos, y se regirá por lo establecido en los reglamentos de la presente Ley.

La evaluación de los servicios de los empleados, inclusive los sometidos al período de


prueba se hará una vez al año, por lo menos, y se les notificará el resultado de tal
evaluación.

La evaluación y calificación resultantes de los servicios se tendrán en cuenta para tomar


decisiones en materia de ascensos, aumentos de sueldos y licencias.

Del Sistema del Adiestramiento

El sistema de adiestramiento de personal dirigido al mejoramiento técnico profesional,


moral y cultural de los funcionarios, se realizará por la Oficina Central de Personal y las
Oficinas de Personal, conforme a lo establecido en los artículos 10 y 13 de la presente
Ley.
Para el cumplimiento de lo anteriormente establecido en relación a la formación de los
funcionarios públicos, la Oficina Central de Personal programará y dictará cursos
permanentes u ocasionales, tomando en cuenta los adelantos de la ciencia administrativa
y su procedencia y necesidad de aplicación a la Administración del Estado.

De las Situaciones Administrativas

Se considera en servicio activo a los funcionarios de carrera que desempeñan el cargo


correspondiente en el organismo a que pertenezcan o bien que se les haya conferido una
comisión de servicio de carácter temporal en otro cargo de su propio organismo o de otro
organismo de la Administración Pública Nacional.

El disfrute de permisos o licencias, otorgadas de conformidad con el Reglamento


respectivo no altera la situación de servicio activo.

Los funcionarios que estén en situación de servicio activo tienen todos los derechos,
prerrogativas, deberes y responsabilidades inherentes a su condición.

Del Retiro de la Administración Pública Nacional

El retiro de la Administración Pública procederá en los siguientes casos: 


1. Por renuncia escrita del funcionario debidamente aceptada;
2. Por reducción de personal, aprobada en Consejo de Ministros, debida a
limitaciones financieras, reajustes presupuestarios, modificación de los servicios, o
cambios en la organización administrativa;
3. Por invalidez y por jubilación de conformidad con la Ley;
4. Por estar incurso en causal de destitución. 

DE LAS RESPONSABILIDADES Y DEL REGIMEN DISCIPLINARIO

Los funcionarios públicos responden penal, civil, administrativa y disciplinariamente por


los delitos, faltas, hechos ilícitos e irregularidades administrativas cometidas en el ejercicio
de sus funciones. Esta responsabilidad no excluye la que pudiere corresponderles por
efecto de leyes especiales o de su condición de ciudadanos.

Corresponde al Ministerio Público intentar las acciones a que hubiere lugar para hacer
efectiva la responsabilidad civil, penal, administrativa o disciplinaria en que hubieren
incurrido los funcionarios públicos con motivo del ejercicio de sus funciones. Sin embargo,
ello no menoscaba el ejercicio de los derechos y acciones que correspondan a los
particulares o a otros funcionarios, de conformidad con las leyes.

Para el mejor cumplimiento de la función constitucional del Ministerio Público, las


máximas autoridades de los diversos organismos de la administración pública están en la
obligación de suministrarle toda la información y documentación que el Fiscal General de
la República les solicitare.

Independientemente de las sanciones previstas en otras leyes, aplicables a los


funcionarios públicos en razón del desempeño de sus cargos o por el ejercicio de sus
funciones, éstos quedan sujetos a las siguientes sanciones disciplinarias: 
1. Amonestación verbal;
2. Amonestación escrita;
3. Suspensión del cargo, con o sin goce de sueldo;
4. Destitución. 

DISPOSICIONES TRANSITORIAS 
Con el objeto de determinar si los funcionarios públicos que actualmente prestan sus
servicios en la Administración Pública Nacional lo hacen en forma satisfactoria y si reúnen
los requisitos mínimos previstos en el sistema de clasificación de cargos se practicarán
los exámenes correspondientes.

A los funcionarios públicos que conforme a los exámenes realizados estén prestando
servicio satisfactoriamente, reúnan los requisitos mínimos del cargo y los previstos en el
artículo 34 de la presente Ley, y tengan más de un año en el desempeño del cargo, la
Oficina Central de Personal les expedirá un certificado en el cual se les declarará
funcionarios de carrera.
Si practicado el examen el empleado resultare reprobado, tendrá derecho a que se le
practique un nuevo examen, el cual deberá realizarse en un plazo no mayor de un año, ni
menor de tres (3) meses. El funcionario podrá optar además a que se traslade a otro
cargo para el cual sí reúna los requisitos exigidos, en cuyo caso y previa aprobación de
los exámenes correspondientes, se le declarará funcionario de carrera.

Si practicado el nuevo examen, el empleado resultare reprobado, éste será retirado de la


función pública, pero tendrá derecho al pago de las prestaciones y a que se le incorpore
en el registro de elegibles para cargos cuyos requisitos reúna de conformidad con esta
Ley y su Reglamento.

DISPOSICIONES FINALES
A la muerte del funcionario de carrera, sus herederos tendrán derecho a percibir el pago
de las prestaciones sociales a que hace referencia el artículo 26 de esta Ley.

Sin perjuicio de los derechos que la presente Ley otorga a los empleados públicos, el
presidente de la República, mediante Decretos, aplicará en forma progresiva las
disposiciones de la misma relativas a sistemas y procedimientos.

A los efectos de la presente Ley, la Contraloría General de la República establecerá los


procedimientos de control que se requieran en el área de su competencia.

Dado en Caracas, a los trece días del mes de mayo de mil novecientos setenta y cinco. -
Año 166° de la Independencia y 117° de la Federación.

(L.S.)
CARLOS ANDRES PEREZ
 
REFORMA PARCIAL DEL REGLAMENTO GENERAL DE LA LEY DE CARRERA
ADMINISTRATIVA

Decreto N 3.209 07 de enero del 1999


El funcionario de carrera que haya egresado por una de las causas previstas en los
ordinales 1 y 2 del artículo 53 de la Ley de Carrera Administrativa, podrá reingresar en un
cargo de carrera de la misma clase de cargo al que desempeña el funcionario cuando se
produjo su retiro de la Administración Pública Nacional.

En los casos de funcionarios de carrera retirados de cargos de libre nombramiento y


remoción, el reingreso se hará en un cargo de la misma clase a la del último cargo de
carrera desempeñado. Para reingresar a una clase de cargo diferente deberá cumplir los
requisitos exigidos para su ejercicio".
Decreto N 1.378 de fecha 15 de enero de 1982, publicado en la Gaceta Oficial N 2.905
Extraordinario de fecha 18 de enero de 1982, mediante el cual se dictó el Reglamento
General de la Ley de Carrera Administrativa con la reforma.

Dado en Caracas, a los siete días del mes de enero de mil novecientos noventa y nueve.
Año 188 de la Independencia y 139 de la Federación.

(L.S)
RAFAEL CALDERA

5) análisis de la ley orgánica del patrimonio público, (alcance, vigencia, fecha de


promulgación, objeto, fines y estructura.).
Estudiante: Josué Bastardo.

Alcance.

En la a ley orgánica de patrimonio público se tiene como rango de alcance los recursos y
personal que estén relacionados con el patrimonio público nacional, pues la corrupción en
las instituciones del estado son un flagelo que disminuyen el nivel de acción de estas
instituciones; por eso esta ley sanciona las conductas y actividades dentro de las
instituciones públicas para de esa manera poder tener una mejor distribución de las
riquezas de la nación y que estas vallan a los lugares asignados en el momento que lo
necesiten.

A esta ley están sujetos:


 Funcionarios públicos.
 Consejos comunales.
 Comunas.
 Organizaciones socio productivas.
 Demás instancias y expresiones organizativas del poder popular.
 Personas naturales o jurídicas,
 Públicas o privadas.

Las disposiciones de esta ley se aplican a las personas nombradas en el título I de la


presente ley, ya sea que estas estén cumpliendo funciones dentro o fuera del país.

Vigencia

Decreto Nº 1.410, mediante el cual se dicta el Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley
de Reforma de la Ley Contra la Corrupción. Decreto Nº 1.412, mediante el cual se dicta el
Decreto con Rango, Valor y Fuerza de Ley de Reforma de la Ley Orgánica de
Identificación.

Fecha de promulgación.

Esta ley fue promulgada el miércoles 19 de noviembre del 2014

Objeto y fines.

Objeto

La siguiente ley tiene por objeto promover los valores éticos y morales que vallan en
contra de los actos de corrupción en la administración pública, por medio de
establecimiento de normas que lleven a cumplir el objetivo de atacar la corrección por
medio de la información y la acción jurídica del estado.

Fines

El fin de esta ley es proteger el patrimonio público y garantizar su confiable utilización con
respecto a los recursos que llegan a distintas instituciones del estado, esto mediante el
principio de honestidad, probidad, participación, transparencia, eficiencia, legalidad y
rendimiento de cuentas.

Estructura.

Titulo 1: De las disposiciones fundamentales.


 Capítulo 1: De las disposiciones generales
o Este capítulo cuenta con 6 artículos en los cuales podemos los aspectos
más resaltantes que se den de conocer antes de entrar de lleno con la
aplicación de la ley, Pues aquí encontraremos desde que organismos están
sujetos a esta ley hasta una clasificación para determinar quiénes son
funcionarios públicos y patrimonio público; por ende, este primer capítulo es
de gran importancia para determinar ciertos aspectos que se mencionaran
en capítulos posteriores.

Titulo 2: De la prevención de la corrección y la salvaguarda del patrimonio público.

 Capítulo 1: De los principios y deberes


o Este capítulo cuenta con 16 artículos, aquí se mencionan aspectos de
trasparencia con respecto a la información de las instituciones públicas, al
menos que esta información tenga que ver con la seguridad del estado,
pues esta ya seria de carácter reservado; por otro parte este capítulo habla
sobre la imparcialidad de los funcionarios, la simplificación de los trámites
administrativos, el uso de vehículos oficiales y otros temas de carácter
informativo y de responsabilidad administrativa.
 Capítulo 2: De la educación y promoción de la ética pública y moral administrativa
Este capítulo cuenta con 4 artículos, los cuales los dos primeros tienen como eje
central la educación con respecto a la materia de corrupción, ya que se debe de
incluir dentro de los estudios de prescolar hasta la educación universitaria materias
que se enfoquen en el estudio ético y moral; por otra parte también este capítulo se
enfoca en el cumplimiento por parte de los órganos indicados en el artículo 4 en el
cual estos deben de prever los recursos presupuestarios para cumplir con la
obligación de la promoción educativa de materia en contra de la corrupción.
 Capítulo 3: Conflictos de intereses.
Este capítulo cuenta con 7 artículos, estos tratan los asuntos relacionados a los
conflictos de interesas, por lo tanto, el empleado público debe atender a la ética
pública y a la moral administrativa.
 Capítulo 4: De la declaración jurada de patrimonio y la declaración jurada de
intereses de las personas sujetas a esta ley.
Este capítulo cuenta con 13 artículos, aquí se establecen los requisitos para la
presentación el cual el contralor general de la república establecerá en gaceta
oficial, además de eso nos indica cuando se debe presentar la declaración jurada
de intereses y de patrimonio, también establece las pautas para las prórrogas y
todo lo referente a la consignación de los reclamos y la verificación jurada de
patrimonio, son solamente algunos puntos de gran importancia que se mencionan
en este capítulo.

Titulo 3: Del control social en materia contra la corrección

 Capítulo 1: De la contraloría social.


Este capítulo cuenta con 3 artículos, los cuales nos mencionan el tema de la
contraloría social, en los cuales se mencionan los deberes en el ejercicio de la
contraloría social, pues eso se refiere a la exigencia del rendimiento de cuentas al
funcionario público, vigilar y realizar seguimientos entre otras acciones de
verificación y vigilancia.
 Capítulo 2: De la administración, manejo y custodia de los bienes y recursos
financieros comunitarios.
Este capítulo cuenta con 1 solo artículos el cual está enfocado en la mención de
deberes de las personas que están a cargo de la administración de los recursos de
los consejos comunales, comunas, organizaciones socio productivas y demás
instancias y organizaciones.

Título 4: De las atribuciones y deberes de la contraloría general de la república y del


ministerio público en materia de lucha contra la corrección.

 Capítulo 1: De la contraloría general de la república.


Este capítulo cuenta con 4 artículos, estos hablan de los deberes y atribuciones de
la contraloría general de la republica los cuales se mencionan en el artículo 54 de
este capítulo, además también se hablan de las potestades aclaratorias, las
competencias que se deben de tomar para investigar y fiscalizar y por último la
remisión al ministerio público.
 Capítulo 2: Del ministerio público.
Este capítulo cuenta con 1 solo artículos, el cual está desarrollado en base a los
deberes y atribuciones del ministerio público.

Título 5: De las denuncias y protección al denunciante.

 Capítulo 1: De las denuncias por los actos de corrección.


Este capítulo cuenta con 2 artículos, el cual el primer artículo se desarrolla en base
a la potestad de denunciar y el segundo artículo se basa en la obligación de
denunciar los actos de corrupción.
 Capítulo 2: De las denuncias ante los órganos de control fiscal.
Este capítulo cuenta con 3 artículos, aquí se desarrollan en donde debe de
realizarse y como una denuncia en los órganos de control fiscal, además en este
capítulo se menciona la confidencialidad de la identidad del denunciante y también
se menciona la consecuencia existente de hacer una denuncia falsa.
 Capítulo 3: De la protección al denunciante.
Este capítulo cuenta con 6 artículos los cuales están hechos para brindarle
protección y asistencia a todo aquel ciudadano o funcionario que necesite hacer
una denuncia con respecto a un hecho de corrupción.

Título 6: De las sanciones administrativas.

 Capítulo 1: De las sanciones administrativas y sus procedimientos.


Este capítulo cuenta con 6 artículos, en el capítulo se empieza hablando de los
supuestos de las sanciones pecuniarias, en las cuales se nombran un conjunto de
situaciones que generan sanciones; por otro punto también tratan los
procedimientos administrativos para dichas sanciones, los recursos administrativos
entre otros puntos a estudiar para las sanciones administrativas.

Título 7: De los delitos contra el patrimonio público y la administración de justicia en la


aplicación de esta ley.

 Capítulo 1: Del enriquecimiento ilícito y el procedimiento para su determinación.


Este capítulo cuenta con 4 artículos, los cuales hablan primeramente como se
define el enriquecimiento ilícito dentro de la ley, además este capítulo proporciona
características que nos pueden generar la posibilidad de presunción de
enriquecimiento ilícito.
 Capítulo 2: De otros delitos en materia de corrupción.
Este capítulo cuenta con 33 artículos donde se mencionan un conjunto de delitos
que tienen que ver con corrupción dentro de las instituciones como lo son el
peculado, peculado culposo, peculado de uso, utilización de vehículos del sector
público con fines particulares, malversación genérica, malversación agravada,
malversación específica, corrección propia y corrección impropia entre otras.
 Capítulo 3: De los delitos contra la administración de justicia en la aplicación de
esta ley.
Este capítulo cuenta con 5 artículos, de los cuales tratan los delitos de denegación
de justicia, retardo procesal, obstaculización de la justicia, incumplimiento de
funciones y calumnia genérica, además de todo esto también se menciona las
penalizaciones y acciones administrativas,
 Capítulo 4: De los delitos de corrección en el sector privado.
Este capítulo cuenta con 2 artículos, los cuales hablan de los tipos de delitos o
sobornos en el sector privado, pues aquí nos encontraremos con el soborno activo
en el sector privado y el soborno pasivo en el sector privado.

Título 8: De los delitos transnacionales.

Este capítulo cuenta con 2 artículos en los cuales también tratan los delitos activos y
pasivos, pero ahora en el ámbito transnacional.

Título 9: Procedimiento penal y medidas preventivas.

Este capítulo cuenta con 14 artículos, los cuales se enfocan en el en los temas de Acción
civil para resarcir daños, exacciones, procedencia de las acciones, concordancia legal,
obligación de los bancos entre otros aspectos a tomar en cuenta en este capítulo.

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