Señor, escucha nuestras oraciones y concédenos según
tu voluntad, porque tú vives y reinas por los siglos de los siglos.
Todos: Amén.
Obispo: Oremos en silencio por las intenciones que cada uno trae
en su corazón.
(Silencio)
Obispo: Dios todopoderoso y eterno, que concediste a tus fieles la
gracia de la renovación espiritual, concédenos, te rogamos, que
quienes han recibido el Espíritu S
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Señor, escucha nuestras oraciones y concédenos según
tu voluntad, porque tú vives y reinas por los siglos de los siglos.
Todos: Amén.
Obispo: Oremos en silencio por las intenciones que cada uno trae
en su corazón.
(Silencio)
Obispo: Dios todopoderoso y eterno, que concediste a tus fieles la
gracia de la renovación espiritual, concédenos, te rogamos, que
quienes han recibido el Espíritu S
Señor, escucha nuestras oraciones y concédenos según
tu voluntad, porque tú vives y reinas por los siglos de los siglos.
Todos: Amén.
Obispo: Oremos en silencio por las intenciones que cada uno trae
en su corazón.
(Silencio)
Obispo: Dios todopoderoso y eterno, que concediste a tus fieles la
gracia de la renovación espiritual, concédenos, te rogamos, que
quienes han recibido el Espíritu S
Señor, escucha nuestras oraciones y concédenos según
tu voluntad, porque tú vives y reinas por los siglos de los siglos.
Todos: Amén.
Obispo: Oremos en silencio por las intenciones que cada uno trae
en su corazón.
(Silencio)
Obispo: Dios todopoderoso y eterno, que concediste a tus fieles la
gracia de la renovación espiritual, concédenos, te rogamos, que
quienes han recibido el Espíritu S
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“Y esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados… Y os
daré corazón nuevo, y pondré un espíritu nuevo dentro de
vosotros… y os daré un corazón de carne” (Ez 36, 25-26)
13 de noviembre de 2009 (I) RITOS INICIALES
ACTO PENITENCIAL
(El Obispo invita al acto penitencial)
Hermanos, antes de celebrar estos sagrados misterios,
reconozcamos nuestros pecados.
(Se hace una pausa de silencio, después de la cual todos juntos
hacen la confesión)Yo confieso
Obispo: Dios Todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna. Amen.
Ten piedad
Gloria Giombini
(II) LITURGIA DE LA PALABRA
1º Lectura (Hch 2,1-4)
Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles
Cuando llegó el día de Pentecostés estaban todos reunidos en un mismo lugar. De pronto vino del cielo un ruido, como el de una violenta ráfaga de viento, que llenó toda la casa donde estaban. Se les aparecieron unas lenguas como de fuego, las que separándose se fueron posando sobre cada uno de ellos. Y quedaron llenos del espíritu Santo y se pusieron a hablar en idiomas distintos en los cuales el Espíritu les concedía expresarse. Palabra de Dios.
R. Te alabamos Señor.
Salmo Responsorial
(SALMO 103, 1-2A. 5-6.10 ,12)
2 T: Envía tu Espíritu Señor, y repuebla la faz de la tierra
Bendice, alma mía, al Señor.
¡Dios mío, qué grande eres! Te vistes de belleza y majestad, la luz te envuelve como un manto.
Cuántas son tus obras, Señor,
y todas las hiciste con sabiduría; la tierra está llena de sus criaturas. ¡Bendice, alma mía al Señor!
Todos ellos aguardan
a que les eche comida a su tiempo; se la echas y la atrapan, abres tu mano y se sacian de bienes
Les retiras el aliento, y expiran,
y vuelven a ser polvo; envías tu aliento y los creas, y repueblas la faz de la tierra
2º Lectura Rm (10,9-18)
Lectura de la Carta del Apóstol San Pablo a los Romanos:
"Hermano si confiesas con la boca que Jesús es Señor y crees en
tu corazón que Dios lo resucitó entre los muertos, será salvo. Pues creer con el corazón nos da acceso a Dios, y proclamar con los labios conduce a la salvación. Por eso dice la Escritura: Ninguno de los que creen en El será confundido. Esto quiere decir que no hay distinción entre judío y griego todos tienen un mismo Señor el cual da abundantemente a todo el que lo invoca. En efecto, el que invoque el nombre del Señor será salvado. Pero, ¿cómo invocarían al Señor sin antes haber creído en El? ¿Cómo creer en El si antes no oyeron hablar de El? y ¿cómo oír si no hay
3 quien predique? y ¿cómo irán a predicar sin ser enviados como dice la Escritura? ¡Qué lindo es el caminar de los que traen buenas noticias! Aunque no todos obedecieron la Buena Nueva, según lo que dice Isaías: "Señor quién ha creído en nuestra predicación", por lo tanto la fe nace de una predicación y lo que se proclama es la Palabra de Cristo. Me pregunto ¿acaso no oyeron? ¡Claro que sí! pues por toda la tierra resonó la voz de los predicadores y se oyeron las palabras hasta el último rincón del mundo". Palabra de Dios
Palabra de Dios
R. Te alabamos Señor.
Canto: Aleluya, Aleluya, Aleluya, Aleluya (bis)
Evangelio (Mt 4,18-22)
S. El Señor esté con ustedes
T. Y con tu espíritu
S: Lectura del Santo Evangelio según San Mateo
T: Gloria a ti Señor Jesús.
"En aquel tiempo caminaba Jesús a orillas del lago de Galilea y vio a dos hermanos: Simón llamado Pedro, y a Andrés, que echaban las redes al agua porque eran pescadores. Jesús les dijo: "síganme y los haré pescadores de hombres". Los dos dejaron inmediatamente sus redes y lo siguieron. Más allá vio a otros dos hermanos: Santiago y Juan que con Zebedeo, su padre, estaban en su barca, zurciendo las redes. Jesús los llamó y ellos también dejaron la barca y al padre y lo siguieron".
Palabra del Señor
R. Gloria a Ti Señor Jesús.
4 (III) LITURGIA DEL SACRAMENTO
(Los confirmandos se ponen de pie)
Monitor: El Padre Ricardo Rodríguez como Capellán de nuestra universidad pedirá a Monseñor Adriano Tomasi Obispo Auxiliar de Lima conceda el sacramento de la Confirmación a estos jóvenes
P: Monseñor Adriano: estos jóvenes cristianos de nuestra
Universidad solicitan por mi intermedio el Santo Sacramento de la Confirmación.
O: ¿Tienes seguridad de que están suficientemente preparados y
son dignos de recibir esta santo sacramento?
P: Estos jóvenes fueron bautizados con la promesa de que serían
"educados en la fe" y de que "un día recibían por las Confirmación la plenitud del Espíritu Santo". Ese fue el compromiso de sus padres y padrinos en el Bautismo. Como responsable de la acción catequística tengo la satisfacción de decir a nuestra comunidad reunida y a Monseñor Adriano que estos jóvenes han recibido la catequesis adecuada a su edad.
O: En el nombre del Señor y de la Iglesia aceptamos que reciban el
sacramento que los confirmará en la vida del Espíritu que recibieron el día del Bautismo.
Monitor: Nos alegramos por ellos y acogemos a estos jóvenes con
un fuerte aplauso (toman asiento y se disponen a escuchar la exhortación del Obispo)
HOMILÍA
5 RENOVACIÓN DE LAS PROMESAS BAUTISMALES
(Los jóvenes se acercan al Cirio Pascual y encienden sus velas,
luego encienden las velas de los confirmados y padrinos mientras se canta)
Obispo: Queridos Jóvenes, ¿saben lo que van a recibir?
Confirmandos: Sí, recibiremos al Espíritu Santo que Jesús prometió.
Obispo: Respondan ahora entonces: ¿renuncian a Satanás y a
todas sus obras y seducciones? En concreto: a orientar su vida al margen de Dios, a menospreciar a los demás, pensar que no necesitan de nada y de nadie, a creerse mejores que los demás?
Confirmandos: Sí, renuncio.
Obispo: ¿Renuncian al engaño, a la mentira, a la adulación, a la
hipocresía?
Confirmandos: Sí, renuncio.
Obispo: Renuncian al egoísmo de preocuparse sólo por ustedes
mismos, de no ayudar a los demás, de no compartir lo suyo con los otros?
Confirmandos: Sí, renuncio.
Obispo: La fe que se les dio en el Bautismo y que ahora actualizan,
exige un compromiso. Se comprometen a: - Tomar el Evangelio como norma de vida - Hacer de las Bienaventuranzas pauta de comportamiento - Orar por los hermanos - Celebrar el día del Señor
6 - Dar testimonio y extender así el Reino de Dios, trabajando por la promoción del hombre
Confirmandos: Sí, me comprometo
Obispo: ¿Creen en Dios, Padre Todopoderoso, creador del cielo y
de la tierra?
Confirmandos: Sí, creo
Obispo: Creen en Jesucristo, su único hijo, Nuestro Señor, que
nació de Santa María Virgen, murió, fue sepultado, resucitó de entre los muertos, y está sentado a la derecha del Padre?
Confirmandos: Sí, creo.
Obispo: Creen en el Espíritu Santo vivificador, que hoy, en el
Sacramento de la Confirmación se comunica a ustedes de modo particular, como a los apóstoles en Pentecostés?
Confirmandos: Sí, creo.
Obispo: ¿Creen en la Santa Iglesia Católica, en la comunión de los
santos, en el perdón de los pecados, en la resurrección de la carne y en la vida eterna?
Confirmandos: Sí, creo.
Obispo: Esta es nuestra fe. Esta es la fe de la Iglesia, que nos
gloriamos de profesar en Cristo Jesús, Señor Nuestro.
Todos: Amén.
IMPOSICIÓN DE LAS MANOS
Obispo: Oremos hermanos, a Dios Padre Todopoderoso y
pidámosle que derrame el Espíritu Santo sobre estos hijos de adopción, que renacieron ya a la vida eterna en el Bautismo, para
7 que los fortalezca con la abundancia de sus dones, los consagre con su unción espiritual y haga de ellos imagen perfecta de Jesucristo.
(Todos oran en silencio unos instantes.)
Dios todopoderoso, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que
regeneraste, por el agua y el Espíritu Santo, a estos siervos tuyos y los libraste del pecado: escucha nuestra oración y envía sobre ellos el Espíritu Paráclito; llénalos de espíritu de sabiduría y de inteligencia, de espíritu de consejo y fortaleza, de espíritu de ciencia y de piedad: y cólmalos del espíritu de tu santo temor. Por Jesucristo Nuestro Señor. Amén.
CRISMACIÓN
(Los jóvenes se acercan al Obispo acompañados por los padrinos
que colocan la mano derecha sobre el hombro del ahijado)
El Obispo crisma haciendo la señal de la Cruz en la frente del
Confirmando diciendo:
Obispo: NN. recibe por esta señal el don del Espíritu Santo.
Confirmando: Amén
Obispo: La paz sea contigo.
Confirmando: Y con tu espíritu.
PLEGARIA UNIVERSAL
1.- Padre, Maestro y Señor de todos los hombres te pedimos que
escuches las oraciones de tu Iglesia: hoy te rogamos por el Papa Benedicto XVI, nuestro Arzobispo el Cardenal Juan Luis y por todos nuestros pastores, para que la Iglesia sea testigo del Reino de Cristo ante los hombres. Roguemos al Señor.
8 2.- Te pedimos señor que reunidos en torno a la Eucaristía, con la esperanza de la vida eterna, afirmemos nuestro compromiso cristiano, buscando siempre la verdad, para ser así hijos de la luz que profetizan con su vida personal y comunitaria. Roguemos al Señor.
3.- Pedimos por nuestro país, por nuestros gobernantes y
autoridades, para que desde su ser humano y cristiano, sean capaces de descubrir con fe y caridad las necesidades de los hombres en especial de los más pobres. Roguemos al Señor.
4.- Pedimos hoy por nosotros los confirmados, para que desde el compromiso juvenil colaboremos para que nuestra Universidad sea cada día testigo del amor de Dios entre los hombres. Roguemos al Señor.
5.- Por nosotros los padrinos para que seamos testimonio y ejemplo para los jóvenes que esperan mucho de nosotros. Que nuestra vida diaria sea un verdadero ejemplo de vida para nuestra familia.. Roguemos al Señor.
6.- Por nosotros los catequistas, para que seamos consecuentes
con la misión a la Dios nos ha llamado y que nuestro modo de vida lleve a Cristo a los jóvenes de nuestra universidad y hagamos de esta casa una fuente de vida y de fe. Roguemos al Señor
(IV) LITURGIA EUCARÍSTICA
(Los recién confirmados presentan al altar las ofrendas)
Santo:
Cordero:
Comunión:
ORACIÓN FINAL Y BENDICIÓN
9 O: Bendito sea el nombre del Señor T: Ahora y por siempre O: Nuestro auxilio es el nombre del Señor T: Que hizo el cielo y la tierra O: La bendición de Dios todopoderoso Padre, Hijo y Espíritu Santo descienda sobre vosotros. T: AMÉN
Oración al Espíritu Santo
Ven, Espíritu Creador, visita las almas de los fieles; e inunda con tu gracia los corazones que Tú creaste. Espíritu de Sabiduría, que conoces mis pensamientos más secretos, y mis deseos más íntimos, buenos y malos; ilumíname y hazme conocer lo bueno para obrarlo, y lo malo para detestarlo sinceramente. Intensifica mi vida interior, por el don de Entendimiento. Aconséjame en mis dudas y vacilaciones, por el don de Consejo. Dame la energía necesaria en la lucha contra mis pasiones, por el don de Fortaleza. Envuelve todo mi proceder en un ambiente sobrenatural, por el don de Ciencia Haz que me sienta hijo tuyo en todas las vicisitudes de la vida, y acuda a Ti, cual niño con afecto filial, por el don de Piedad. Concédeme que Te venere y Te ame cual lo mereces; que ande con cautela en el sendero del bien, guiado por el don del santo Temor de Dios; que tema el pecado más que ningún otro mal; que prefiera perderlo todo antes que tu gracia; y que llegue un día a aquella feliz morada, donde Tú serás nuestra Luz y Consuelo, y, cual tierna madre; enjugas “toda lágrima de nuestros ojos”, donde no hay llanto ni dolor alguno, sino eterna felicidad. Así sea.
