Location via proxy:   [ UP ]  
[Report a bug]   [Manage cookies]                
0% encontró este documento útil (0 votos)
279 vistas5 páginas

Resumen de Los Paragrafos

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1/ 5

Lopez Varela Alexia

Fernanda
7HM7
RESUMEN DE LOS PARAGRAFOS DEL
“ORGANON DE LA MEDICINA”
Introduccion a la Clinica Terapeutica Homeopatica
Resumen de los parágrafos del Organon 

Parágrafo 58
El tratamiento antipático es deficiente (más aplicado en afecciones crónicas)  pues sólo trata al
síntoma prominente ya que es unilateral, por lo que no puede esperarse el alivio por completo de
la enfermedad, produce mejoras efímeras y aparentes, seguidas de agravación. 

Parágrafo 59 
Los tratamientos paliativos, no tienen una correcta función, los síntomas importantes de una
enfermedad continúan, sin que el estado opuesto, una recaída, una agravación evidente de la
enfermedad y precede a la agravación. Ejemplos: café.

Parágrafo 60
Tras no ver mejoría en el paciente con el remedio alopático empleado, el médico se ve obligado a
repetir la dosis, pero incrementada a fin de combatir la agravación que ha desencadenado, con el
riesgo de producir otra enfermedad o con lo cual se puede realizar una supresión. 

Parágrafo 61
Un efecto medicinal contrario a los síntomas de la enfermedad no proporciona más que un alivio
de corta duración, después del cuál el mal empeora constantemente, del mismo modo el método
inverso, el verdadero arte de curar es exactamente lo opuesto, lo contrario. 

Parágrafo 62
Las causas de que dependen los resultados perniciosos del tratamiento paliativo, antipático y la
eficacia del opuesto, del tratamiento homeopático, se explican por los hechos siguientes,
deducidos de múltiples observaciones, que ninguno antes que yo ha encontrado, aunque eran
muy palpables y muy evidentes y de una importancia infinita para el arte de curar.

Parágrafo 63
Acción primaria del medicamento es todo agente que obra sobre la vitalidad, todo medicamento,
desarmoniza más o menos la fuerza vital y produce cierta alteración en la salud del individuo por
un periodo más o menos largo y acción secundaria, la acción de resistencia es una propiedad, es
ciertamente una acción automática de nuestra fuerza vital de conservación, la fuerza vital sobre
el organismo.

Parágrafo 64
Durante la acción primaria de los agentes morbíficos artificiales (medicamentos) sobre nuestro
cuerpo sano, como se verá en los ejemplos siguientes, la fuerza vital parece conducirse
simplemente de una manera pasiva (receptiva), como si estuviese obligada a sufrir las
impresiones del poder artificial exterior que la domina y de ese modo altera su estado de salud, 
si no hubiese en la naturaleza un estado exactamente opuesto a la acción primaria, intenta
neutralizarse a sí misma, es decir, hacer su poder superior útil en la extinción del cambio
verificado en ella por el agente externo

Parágrafo 65
Después de una acción primaria de un medicamento que a grandes dosis genera un cambio
profundo en una persona sana, se va a producir un estado exactamente opuesto, la cual será la
acción secundaria.

Parágrafo 66
Una dosis pequeña produce una acción primaria que es apenas perceptible por el observador,
pero el organismo viviente sólo emplea contra ella tanta reacción (acción secundaria) como es
necesaria para el restablecimiento de la condición normal.

Parágrafo 67
Explica la acción benéfica que tiene lugar con el tratamiento homeopático; mientras que por otra
parte demuestran la falsedad del tratamiento antipático y paliativo de las enfermedades, con
medicamentos que obran antagónicamente. Un remedio homeopático puede tener algún síntoma
antagónico secundario.

Parágrafo 68
Las dosis infinitamente pequeñas que se usan son exactamente suficientes para dominar y
remover la enfermedad  y una vez eliminada la enfermedad natural por la reacción de la fuerza
vital a la medicación homeopática, que la fuerza vital no necesita emplear contra esta pequeña
desviación de su salud, aún más considerable reacción que la que bastaría para elevar el estado
presente al de salud

Parágrafo 69
La alopatía no cura porque pretende anular un síntoma por su opuesto medicinal, pero como el
síntoma medicinal antagónico no puede (como en el tratamiento homeopático) ocupar el lugar de
la desviación morbosa presente en el organismo como una enfermedad semejante, más fuerte, y
no puede, por lo tanto como un medicamento homeopático, afectar la fuerza vital con una
enfermedad artificial semejante, además porque es unilateral, 

Parágrafo 70
La enfermedad, sólo puede convertirse al estado fisiológico, por otra revolución producida en
dicho estado por medio de medicamentos, cuyo poder curativo es único. Ni las medicinas
alopáticas ni las enfermedades que difieran de la enfermedad preexistente pueden curar a ésta,
sólo el tratamiento homeopático aplicado a la totalidad de los síntomas puede curar a una
afección preexistente.

Parágrafo 71
En el tratamiento curativo está comprendido en los tres puntos siguientes: 
1. ¿Cómo el médico descubre lo que es necesario saber para curar las enfermedades?
2. ¿Cómo adquiere el conocimiento de los instrumentos apropiados para la curación de las
enfermedades naturales, el poder patogenésico de los medicamentos?. 
3. ¿Cuál es el método más conveniente de emplear estos agentes morbíficos artificiales
(medicamentos), para la curación de las enfermedades naturales?
Parágrafo 72
Enfermedades agudas: enfermedades a que el hombre está sujeto son ya procesos rápidos y
morbosos de la fuerza vital anormalmente desviada que tienen tendencia a terminar su periodo
más o menos rápidamente, pero siempre en un tiempo de curación mediana
Enfermedades cronicas: enfermedades con un principio pequeño e imperceptible, desvían
dinámicamente el organismo vivo, que le obligan a separarse gradualmente del estado de salud
de tal modo  la llamada fuerza vital solamente les opone al principio y durante su curso, una
resistencia imperfecta, impropia e inútil, que es incapaz por sí misma de destruir y las sufre
irremediablemente siendo cada vez más apartada de la normal, hasta que al fin el organismo se
destruye. 

Parágrafo 73
Las nfermedades agudas, generalmente sólo son explosiones pasajeras de la psora latente que
espontáneamente vuelve a su estado latente si la enfermedad aguda no fue de carácter demasiado
violento y reprimido prontamente. 

Parágrafo 74
Algunas enfermedades crónicas son producidas artificialmente en el tratamiento alopático con el
uso prolongado de medicamentos heroicos violentos, administrados en grandes y progresivas
dosis.

Parágrafo 75
Los trastornos de la salud que son ocasionados por la práctica alopática son las de más difícil
curación, las más incurables, es aparentemente imposible descubrir o encontrar remedios para
curarlas cuando han alcanzado gran desarrollo.

Parágrafo 76
Las devastaciones en el organismo, consecuencia de tratamientos alopáticos prolongados, sólo
pueden ser remediadas por la fuerza vital. No hay ni puede haber arte curativo humano para
restablecer al estado normal estas innumerables condiciones anormales tan a menudo causadas
por el arte alopático, que no es curativo.

Parágrafo 77
No es apropiado denominar enfermedades crónicas a las que se provocan las personas por sus
hábitos de vida insalubre, estos estados de mala salud que la gente se ocasiona, desaparecen
espontáneamente, con tal que no exista en el cuerpo ningún miasma crónico, mejorando el modo
de vivir, y no pueden llamarse enfermedades crónicas.

Parágrafo 78
Las verdaderas enfermedades crónicas son las que tienen su origen en un miasma crónico, las
cuales abandonadas o no dominadas con el empleo de los remedios que les son específicos,
siempre van en aumento y empeorando. Incapacidad de la fuerza vital para extinguirlas

Parágrafo 79
Hasta ahora sólo la sífilis ha sido conocida, hasta cierto punto, como tal enfermedad miasmática
crónica, que sin medicación cesa solamente con la terminación de la vida. La sicosis igualmente
indesarraigable por la fuerza vital sin tratamiento médico apropiado, no era reconocida como
enfermedad miasmática crónica de carácter peculiar, a pesar de que lo es indudablemente, y los
médicos piensan que la ha curado cuando han destruido las excrecencias de la piel, pero
escapaba a su observación la discrasia existente ocasionada por ella.

Parágrafo 80
Miasma crónico de la psora es la única causa fundamental, real, productora y única de
innumerables enfermedades

Parágrafo 81
La psora, al pasar por millones de individuos durante cientos de generaciones, ha llegado a
desplegar innumerables formas morbosas, sobre tal variedad de organismos compenetrados del
miasma psórico, produce una variedad innumerable de defectos, lesiones, desarreglos y
sufrimientos que hasta ahora habían sido tratados y considerados en las obras antiguas de
patología, bajo cierto número de nombres especiales, como enfermedades de carácter
independiente, enfermedades diferentes.

Parágrafo 82
La homeopatía no tiene tratamientos aplicables a enfermedades, los síntomas de cada caso
individual y según se trata de una enfermedad aguda o de una enfermedad crónica, determinarán
el tratamiento. Considerando que en las enfermedades agudas los síntomas principales nos
impresionan y son evidentes a nuestros sentidos con más rapidez, y de aquí que se requiera
mucho menos tiempo para trazar el cuadro patológico y un interrogatorio breve, como que todo
es evidente por sí mismo, mientras que en una enfermedad que ha estado gradualmente
progresando por varios años, los síntomas son mucho más difíciles de descubrir.

También podría gustarte