Drogas Recreativas
Drogas Recreativas
Drogas Recreativas
Actualmente se ha comenzado a considerar este proceso como un sistema dinámico no lineal, esto es, que
la magnitud del cambio en el riesgo lleva a consecuencias que no se correlacionan de manera lineal con
ese cambio: podrían ser mucho mayores o también mucho menores a lo esperado. Por este motivo, la
predicción de lo que va a ocurrir con un paciente en particular es una tarea casi imposible. Esto favorece,
por otro lado, que el equipo clínico abandone una visión lineal que sólo parece provocar frustraciones tanto
en los pacientes como en el equipo.
Etapa experimental
Primer acercamiento al consumo.
Los efectos de la sustancia dependen de la farmacología, de las expectativas que tenga el sujeto y del
estado anímico previo.
Efectos farmacológicos son muy importantes.
Etapa de uso controlado
Los efectos farmacológicos aún son relevantes.
El sujeto todavía consume porque le agrada.
Esta etapa puede prolongarse por largo tiempo, incluso por toda la vida, sin llegar a constituir un
problema.
Mayor riesgo es pasar a etapa de abuso.
Etapa de abuso
Inicia con la incapacidad de valorar correctamente las consecuencias de sus acciones.
Consumo a pesar de problemas en distintas áreas: personal, familiar, laboral, sanitaria, jurídica.
Patrón de consumo “desadaptativo”.
Carencia en el control del consumo y mantenimiento de la conducta a pesar de las consecuencias
negativas.
Etapa de dependencia y adicción
Dependencia→ consumo de una sustancia con el fin de evitar la aparición de síntomas de privación, sea
en forma preventiva o paliativa.
Adicción→ es el consumo compulsivo de la sustancia gatillado generalmente por claves ambientales o
internas.
OTROS FENÓMENOS CLÍNICOS DE IMPORTANCIA
Tolerancia
Tolerancia metabólica
Disminución de la biodisponibilidad.
Acción hepática.
Barbitúricos, OH, opiáceos.
Tolerancia farmacológica
Disminución de número o respuesta de receptores.
Disminución de mecanismos intracelulares.
Barbitúricos, OH, opiáceos, anfetaminas, cocaína, nicotina, cafeína.
Tolerancia condicionada
Mecanismo compensatorio paralelo.
Opiáceos, OH, nicotina, BZD y otras drogas.
Abstinencia→ fenómeno agudo. Surge ante la interrupción brusca del consumo regular de una sustancia
que provoque tolerancia. Cada sustancia provoca un síndrome con características clínicas particulares.
Puede ir acompañado de trastornos tanto físicos como psicológicos.
Craving→ ansias/poderoso deseo de consumo de una sustancia.
Sensibilización→ aumento de los efectos de una droga ante la misma dosis. Influida por el ambiente.
Intoxicación→ estado posterior a consumo de sustancia. Síndrome reversible específico de una sustancia
debido a su uso. La recuperación es completa, salvo cuando se han producido lesiones tisulares u otras
complicaciones.
Sobredosis→ consumo de cualquier droga o medicamento en una cantidad que provoca efectos adversos
agudos físicos o mentales.
La sobredosis intencionada es una forma habitual de suicidio o tentativa de suicidio.
La sobredosis puede producir efectos pasajeros o prolongados e incluso la muerte.
La dosis mortal de una sustancia concreta varía en cada persona y según las circunstancias.
BASES NEUROBIOLÓGICAS DEL CONSUMO
1954→ Olds y Milner→ sistema de motivación y recompensa encargado de procesar estímulos que
provocan placer.
Sistema dopaminérgico mesocorticolímbico.
MAGNITUD DEL PROBLEMA
SITUACIÓN MUNDIAL
Muertes relacionadas con drogas en 2017 y cambios en el período 2008-2017.
Mercado mundial
¿QUÉ PASA EN CHILE?
Evolución de prevalencias de consumo de drogas
CLASIFICACIÓN DE DROGAS
Marihuana→ mezcla de hojas, flores y tallos de los individuos femeninos del cáñamo (Cannabis sativa).
Efectos
Sensación de bienestar (euforia).
Estado somnoliento de relajo y calma.
Apatía, con un sentimiento de desconexión del mundo habitual.
“Al fumador las cosas le parecen graciosas mientras no son especialmente divertidas para el
observador”.
Distorsión del sentido del tiempo, asociado con profundos déficit en la memoria y el
aprendizaje.
Pérdida del estado de alerta, la coordinación y el juicio que se requieren para las tareas
complicadas.
A largo plazo produce trastornos emocionales→ ansiedad y depresión, trastorno de la
personalidad con irritabilidad, agresividad, inquietud, disminución del apetito y del sueño, que
ceden con el consumo. Aumenta más de cinco veces el riesgo de sufrir psicosis.
Situación legal del uso de Cannabis.
Uso medicinal de Cannabis (UMC)→ utilización de esta planta (o sus derivados) con el objetivo de
aliviar síntomas, tratar un estado o una condición médica.
Prescripción
• Falta de conocimientos, preparación y capacidad de prescripción en médicos.
• Desconocimiento de políticas y regulaciones nacionales.
• Necesidad de investigar y estandarizar la asignación de nombres, dosificación, vía de
administración y el control del UMC.
Usuarios
• Tratamiento eficaz para diversas afecciones→ dolor y salud mental los más destacados.
• Tres de cada cuatro pacientes informaron una mejoría sintomática.
• Los problemas del sueño son muy frecuentes en los usuarios de cannabis medicinal y están
estrechamente relacionados con el dolor.
• Los usuarios solicitan estándares mejorados de pureza, producción y una mayor
investigación sobre UMC.
Cocaína→ procede de la planta de la coca, que contiene varios alcaloides, entre ellos la cocaína.
Colombia, Bolivia y Perú son los principales productores mundiales.
Efectos→ incrementa los niveles de noradrenalina (NA), dopamina (D) y en menor medida de
serotonina por bloqueo de su recaptación presináptica.
Efectos según vía de administración
Efectos
Provocan alteraciones sensoriales y de conciencia de carácter escenográfico.
El sujeto experimenta una inmersión total en un mundo onírico.
No provocan adicción ni dependencia, pero, por la misma naturaleza de la experiencia, sí pueden
provocar sensaciones de despersonalización o desrealización, menos o más persistentes en algunas
personas más predispuestas (trastornos de personalidad inestables).
Se han descrito actos de automutilación con algunas sustancias.
Drogas sintéticas
MDMA (Éxtasis)
Estimulante y alucinógeno.
Pastillas de 300 mg aprox.
Efectos comienzan a los 20-60 minutos, siendo máximo a los 60-120 minutos, y tienen una
duración de 4 a 6 horas.
Estimula los receptores serotoninérgicos del SNC implicados en el estado de ánimo, sueño,
emociones y apetito; también estimula receptores dopaminérgicos, relacionados con la
gratificación cerebral, y norepinefrínicos.
Efectos:
• Intoxicación aguda→ efectos psicológicos (alteración de la atención y pseudoalucinaciones)
y efectos físicos simpaticomiméticos; el más llamativo es el síndrome hipertérmico,
causante de las muertes ocurridas relacionadas con estas sustancias.
• Hipertermia + ejercicio extenuante del baile→ tratamiento consiste básicamente en
disminuir la temperatura corporal, a lo cual ayudará una buena hidratación.
• Horas o días después del consumo de la droga, el sujeto se puede sentir somnoliento,
fatigado e insomne.
• Consumo crónico→ trastornos del sueño, astenia, irritabilidad, dificultad para la
concentración, tristeza y depresión.
• Aunque no existe una clara evidencia de que produzca efectos psiquiátricos a largo plazo, se
ha descrito en varias ocasiones el desarrollo de psicosis paranoide indistinguible de la EQZ.
Drogas inhalables
Efectos:
Síntomas agudos:
• Vértigo, somnolencia, habla con arrastre de las palabras y marcha inestable.
• Impulsividad, excitación e irritabilidad.
• A medida que aumentan los efectos sobre el SNC, aparecen ilusiones, alucinaciones y
delirios.
• Confusión, torpeza psicomotora, labilidad emocional y alteración del pensamiento.
• Se experimenta “viaje” eufórico, soñador, que culmina en un corto período de sueño.
• La intoxicación puede durar desde minutos a > 1 hora.
Muerte súbita→ paro respiratorio u oclusión de las vías aéreas debido a depresión del SNC o
arritmias.
Popper→ nitritos de alquilo→ ésteres de ácido nitroso que se presentan en forma de un líquido
altamente volátil, incoloro o amarillento a temperatura ambiente y de olor afrutado.
Efecto vasodilatador de los músculos lisos.
Uso recreativo→ incrementar la estimulación sensorial placentera.
Efectos→ aumento de la presión intracraneal, taquicardia, mareos, debilidad, palidez, dolores de
cabeza, náusea, vómito, irritación peribucal, mejillas y nariz y dermatitis.
EVALUACIÓN CLÍNICA
ADICCIÓN
Presencia de conductas compulsivas de búsqueda y consumo de sustancias como respuesta a señales
ambientales o internas.
No todas las sustancias la provocan.
La adicción se presenta como un fenómeno de dos componentes:
El primero es el ansia por la droga (sensación desagradable, de intenso deseo por consumir).
Segundo, conductas automáticas de búsqueda de la sustancia (impulso).
“Craving”.
El complejo ansia/impulso (‘craving’) es gatillado por claves ambientales asociadas al consumo (fines de
semana, tener dinero, crepúsculo, amigos ‘de carrete’, música, ver una botella, ver polvos blancos, olores,
etc.); por otros estados afectivos (tristeza, rabia, y sobre todo estrés) y por el consumo mismo de la sustancia
(cebado o ‘priming’) o de otra (alcohol gatilla la cocaína o al revés). Hay que hacer notar que la mayoría de
los consumidores no llegan a esta etapa de adicción, pero en todos ellos las claves ambientales tienen
relevancia.
EVALUACIÓN CLÍNICA
Anamnesis completa
Obtener detalles del tipo, la cantidad, vía de administración y la frecuencia de la sustancia.
Consecuencias del uso de sustancias del paciente.
Percepción de su uso y su disposición al cambio.
Antecedentes de tratamientos previos.
Otras conductas de riesgo.
Presencia de comorbilidad psiquiátrica→ Trastorno de la personalidad (límite y antisocial), Trastornos
depresivos, Trastorno bipolar, Desórdenes de ansiedad, Trastorno de estrés postraumático, Trastornos
de la alimentación, Esquizofrenia, desorden hiperactivo y déficit de atención.
Presencia de un trastorno por uso de sustancias en la familia del paciente.
Revisión de los factores sociales que pueden contribuir al uso de sustancias o facilitar el tratamiento.
Importancia de los factores sociales
Una pareja romántica con un trastorno por consumo de sustancias.
Amigos que tienen TCS.
Vivir en una comunidad caracterizada por la pobreza, la violencia y/o alta disponibilidad de alcohol y
otras drogas.
Relaciones familiares y sociales interrumpidas.
Incumplimiento de responsabilidades en la escuela o el trabajo.
Participación legal.
Problemas financieros.
Comportamiento violento.
Abuso/negligencia infantil.
Participación en conductas sexuales de alto riesgo.
No participar en actividades que alguna vez fueron agradables.
Evaluación de uso
Cantidad diaria
1 papelillo de cocaína = 1 gramo = 3 dosis (líneas).
Marihuana se mide en “pitos”.
Frecuencia de consumo→ día / semana / fin de semana / mes.
Estimación del nivel del problema
Grado de control sobre el consumo.
Problemas médicos en el último mes.
Clima familiar.
Escuela (sólo en caso de ser estudiante en los últimos meses).
Trabajo-finanzas.
Conductas problemáticas (por ej.: robo, venta de enseres personales para consumir, peleas,
vagabundaje).
Problemas con la justicia.
Problemas de salud mental.
Pedir al paciente que se coloque una nota de 1 a 7 según el mayor o menor problema que crea tener
en esa área. El entrevistador, a continuación, coloca su propia nota de 1 a 7 según su estimación
del nivel de problema. Por último, se hace un promedio de las dos notas, y esa es la nota de problema
del área.
Evaluados todos los parámetros, se establece una nota promedio de gravedad. Con esta nota y la
medición del consumo se puede tener una idea bastante acertada del estado del problema del
paciente. La decisión y el tipo de tratamiento que se aplique es un proceso en etapas y no tiene
criterios exactos.
Examen mental
Apariencia general. Proceso de pensamiento.
Comportamiento e interacción. Contenido del pensamiento (ideación suicida
Habla y voz. u homicida, alucinaciones, delirios).
Actividad del motor. Visión.
Estado de ánimo y afecto. Juicio.
Percepciones. Funcionamiento cognitivo.
Examen físico
Mala higiene personal.
Pérdida o aumento de peso significativo.
Signos de uso de drogas inyectables, incluidas cicatrices (“marcas de rastro”).
Signos de inhalación (atrofia de la mucosa nasal y perforación del tabique nasal).
Evidencia de intoxicación aguda o abstinencia→ dificultad para hablar, marcha inestable, pupilas
puntiformes, comportamiento extraño o atípico, cambios en el nivel de excitación (agitación o sedación),
taquicardia, inyección conjuntival, sudoración, ojos llorosos, secreción nasal.
Signos de daño por sistema→ cardiovascular (HTA, IC, EBSA, miocardiopatía), gastrointestinal (hepatitis
B, C, DHC), renal (insuficiencia renal), SNC (deterioro cognitivo, ACV), broncopulmonar.
Signos sugerentes de ITS (verrugas, sífilis, VIH, gonorrea).
Pruebas de laboratorio
Utilidad limitada para realizar un diagnóstico de TCS.
Pueden usarse para detectar el uso reciente de drogas (control “honesto”).
No proporcionan información sobre la frecuencia o intensidad de uso.
Útiles para monitorear la abstinencia a lo largo del tiempo (“recaídas”).
Pesquisa cabello, orina y sangre.
CRITERIOS DSM-5
Trastornos relacionados con sustancias y trastornos adictivos.
Trastornos relacionados con sustancias.
Trastornos por consumo de sustancias.
Trastornos inducidos por sustancias.
Intoxicación.
Abstinencia.
Trastornos mentales inducidos por sustancias.
Trastornos no relacionados con sustancias.
El DSM-5 califica las sustancias psicoactivas en 10 clases de drogas:
Alcohol. Opiáceos.
Cafeína. Estimulantes (anfetaminas, cocaína).
Cannabis. Sedantes / hipnóticos / ansiolíticos.
Alucinógenos. Tabaco.
Inhalantes. Otras sustancias.
Trastorno por consumo de sustancias (TCS).
Control deficitario:
1. Consumo de grandes cantidades de sustancias o lo hace durante un tiempo más prolongado de
lo previsto.
2. Deseos insistentes de dejar o regular su consumo y relata esfuerzos fallidos por disminuir o
abandonar este.
3. Inversión de gran parte del tiempo intentando conseguir la droga, consumiéndola o
recuperándose.
4. Deseo intenso de consumir.
Deterioro social:
5. El consumo recurrente puede llevar al incumplimiento de deberes en los ámbitos académicos,
laborales o domésticos.
6. Puede seguir consumiendo a pesar de los problemas recurrentes o persistentes en la esfera social
o interpersonal causados o exacerbados por los efectos del consumo.
7. Se reducen o abandonan importantes actividades sociales, ocupacionales o recreativas debido al
consumo de sustancias.
Consumo de riesgo:
8. Puede producirse un consumo recurrente de la sustancia incluso en situaciones en las que
provoca un riesgo físico.
9. La persona consume de forma continuada a pesar de saber que padece un problema físico o
psíquico recurrente o persistente que probablemente se pueda originar o exacerbar por dicho
consumo.
Criterio farmacológico:
10. Tolerancia.
11. Abstinencia.
Se deben cumplir al menos 2 de los 11 ítems.
Dimensionalidad:
Leve→ 2 o más síntomas.
Moderado→ 4-5 síntomas.
Grave→ más de 6 síntomas.
MANEJO INTEGRAL DE ADICCIONES A DROGAS RECREATIVAS
En caso de la detección de consumo o de la intención del mismo es importante explorar:
Qué conocimientos tiene sobre las diferentes drogas→ efectos buscados, efectos negativos o posibles
consecuencias sobre la salud tanto a corto como a medio y largo plazo.
Qué cantidad de drogas consume y desde cuándo.
Vías de administración.
Las situaciones de consumo y contextos.
Posibles combinaciones de drogas (policonsumo), analizando el conocimiento sobre posibles
sinergias, antagonismos y efectos secundarios.
Estadio del cambio en el que se encuentra respecto a un consumo determinado.
Intentos previos de abandono o disminución en el consumo, analizando las diferentes situaciones.
Detección de un consumo problemático y la negativa de su existencia:
Establecer una relación de confianza que nos permita establecer un vínculo terapéutico en el futuro.
Es imprescindible no censurar su conducta ni moralizar nuestros mensajes (verbales y no verbales).
Respeto por la autonomía, pero límites de confidencialidad.
Siempre tenemos que dejar una puerta abierta para un posible cambio de actitud a futuro.
El proceso que puede precisar de bastante tiempo, necesario para trabajar las resistencias y poder
plantear alternativas de cambio válidas.
Una vez que el adolescente sea consciente de la existencia de un problema con su consumo, podrá
plantearse la intención de cambio.
TRATAMIENTO DE ABUSO Y ADICCIÓN A SUSTANCIAS
La adicción se manifiesta como un balance entre la intensidad del deseo de consumir y la eficacia de las
estrategias de afrontamiento del deseo (autocontrol) que tiene el sujeto.
Todo el tratamiento apunta a:
Aumenta la eficacia de las estrategias de afrontamiento y la confianza en las propias capacidades.
Disminuir la influencia de los estímulos ambientales.
No se puede esperar un resultado único y válido para todas las personas.
La mayoría de los pacientes sometidos a algún tipo de rehabilitación son capaces de mostrar resultados
positivos en un plazo prudente.
PRINCIPIOS DEL TRATAMIENTO DE ADICCIONES
El objetivo es lograr el autocontrol consciente de las conductas de consumo.
Es un tratamiento crónico o de largo plazo.
No existe una meta única y ésta debe negociarse con cada paciente.
La medicación tiene un valor secundario.
El proceso de cambio es una progresión de ciclos de gradual mejoría.
MANEJO FARMACOLÓGICO DE DEPENDENCIAS
Cocaína
No existen medicamentos aprobados por la FDA para el manejo del trastorno por consumo de cocaína.
Se han realizado múltiples revisiones de alta calidad de la literatura existente con psicoestimulantes,
modafinilo, bupropión, topiramato y disulfiram que muestran los más prometedores.
El bupropión, los psicoestimulantes y el topiramato, pueden mejorar la abstinencia y los
antipsicóticos pueden mejorar la adherencia.
La literatura actual no respalda firmemente ningún fármaco para el manejo de esta adicción.
Marihuana
Actualmente, no hay farmacoterapias aprobadas por la FDA disponibles, aunque se han propuesto
varias (por ej.: cannabinoides [tetrahidrocannabinol], antidepresivos y ansiolíticos).
Estos medicamentos aún no tienen evidencia suficiente para respaldar el uso clínico, y se necesitan
ensayos más grandes y a más largo plazo en representativos poblacionales que buscan tratamiento.
PSICOTERAPIA APLICADA A MANEJO DE ADICCIONES DE DROGAS RECREATIVAS
Terapia cognitiva conductual (TCC)
Terapia de aceptación y compromiso (TAC)
Entrevista motivacional (EM)
Terapia familiar (TF)
TF breve estratégica
Terapia centrada en soluciones
TF multidimensional
TF multisistémica
Importancia del apoyo psicosocial→ el apoyo psicosocial es un proceso interactivo donde el individuo
obtiene ayuda emocional, instrumental y económica de la red social en la que se encuentra inserto.
Tiene un rol crucial en los comportamientos de riesgos asociados al consumo.
Previene recaídas y reincidencia en el tiempo.
Emocional→ empatía, el cuidado, el amor y la confianza.
Instrumental→ conductas específicas que directamente ayudan a quien lo necesita.
Informativo→ provee conocimientos para enfrentar situaciones problemáticas.
Evaluativo→ transmisión de información.
TCC→ se basa en las teorías del aprendizaje (condicionamiento clásico, condicionamiento operante,
aprendizaje social) y la psicología cognitiva.
Muy útil en programas de prevención de recaídas.
Personas aprenden a conducirse mejor.
Modificación de pensamientos y conductas que facilitan evitar la recaída.
Adquisición de un patrón general de conducta (estilo de vida) compatible con la recuperación.
TAC→ es una TCC de tercera generación. Nace para trabajar los trastornos de “evitación experiencial”
(inflexibilidad psicológica).
La persona no está dispuesta a entrar en contacto con experiencias privadas aversivas (pensamientos,
recuerdos, sensaciones) y se comporta deliberadamente para alterar la forma o la frecuencia de dichas
experiencias.
Provoca una importante limitación en la vida personal.
La evitación experiencial jugaría un papel relevante en la conducta adictiva en la medida en que los
sujetos sigan la regla de evitar o escapar del malestar, o consumir droga para sentirse bien de inmediato
y así poder continuar con su vida.
Esto lleva al consumo para evitar o reducir el malestar.
El objetivo básico de la TAC es generar flexibilidad ante los eventos privados, es decir, el desarrollo
de la aceptación psicológica o el que la persona sea capaz, en presencia de malestar, de actuar en
una dirección valiosa→ ej.: un padre que, en vez de consumir para liberar estrés del trabajo, se quede
en casa cuidando a su hijo.
El desarrollo de flexibilidad psicológica en adicciones supondrá que la elección conductual de un
sujeto no dependerá del malestar ni de las “ganas” de consumir que esté experimentando.
Toma relevancia lo que sea importante para él en función de sus valores personales.
La persona aprende a lidiar con sus circunstancias personales y a relacionarse de manera diferente con
los pensamientos y emociones.
EM→ es una técnica sencilla de trabajo. La EM es una estrategia útil para promover motivación y
adherencia al tratamiento.
Su mayor importancia es que podría constituir por sí misma el tratamiento.
La EM asume que:
Los pacientes tienen motivaciones conflictivas para cambiar.
Desean el cambio, pero creyendo que la situación está bajo su control, por lo que no es tan
necesario cambiar.
O bien “saben” que tienen que abandonar el consumo porque “les hace mal”, pero también saben
que consumir tiene gratificaciones.
No es adecuado intentar persuadir al paciente para que cambie (cambiar / no cambiar).
Permite al paciente reflexionar sobre lo que le ocurre, clarificar sus ambivalencias y encontrar por sí
mismo una solución que le es propia.
Rol del terapeuta→ clarificar motivaciones, focalizar trabajo, entregar apoyo, sugerir otras formas de
entender el problema.
Elementos que rigen la EM:
Motivación intrínseca→ la capacidad de cambio está en el interior de cada persona y es
prácticamente imposible “imponerla desde el exterior”.
Elección y control propios→ la persona está más motivada para hacer cambios cuando se basan
en sus propias decisiones que si una figura de autoridad le dice lo que tiene que hacer.
Autoconvencimiento→ el paciente debe utilizar sus propios argumentos para iniciar un cambio.
Autoconfianza→ cuánta más confianza tenga una persona en que puede cambiar, será más fácil
que lo consiga. Esto tiene gran influencia en la capacidad para iniciar una nueva conducta y
mantenerla como hábito.
Ambivalencia→ en prácticamente todas las situaciones de cambio se produce una contradicción
entre la conducta que se desea conseguir y la que se quiere renunciar. Es preciso ayudar a gestionar
la angustia que genera esta ambivalencia.
Adecuación a cada persona→ no sirven las recetas universales, y es preciso escuchar y
comprender las vivencias de cada persona ante una situación de cambio.
Respeto a la persona→ por encima de todo, la EM ha de basarse en el respeto a la decisión de la
persona que va a emprender el cambio y evitar la imposición de la conducta por parte del profesional
sanitario.
TF→ son intervenciones que consideran que el problema de la dependencia a sustancias en adolescentes
interactúa circularmente con el funcionamiento del sistema familiar. Plantean que el enfrentamiento del
problema requiere implementar cambios significativos en su entorno social directo.
Debilitando factores que contribuyen a la dependencia.
Fortaleciendo aquellos aspectos facilitadores de su recuperación.
Como características comunes tienen un alto grado de adaptabilidad a distintas situaciones clínicas.
Surge en parte como respuesta a las propias limitaciones del tratamiento individual y las observaciones
de altas tasas de recaídas cuando los pacientes volvían con su familia de origen.
La introducción de las familias en el desarrollo de planes terapéuticos:
Reduce las altas tasas de fracasos terapéuticos por abandonos de la desintoxicación y por recidivas
tempranas.
Aumenta el compromiso de los pacientes y sus familias.
Aumentar la adherencia al tratamiento.
Disminuir el consumo de sustancias post-tratamiento.
Mejorar el funcionamiento familiar y la normalización de los pacientes.
TF breve estratégica (TFBE)→ es una intervención breve que se utiliza con adolescentes que
consumen drogas y/o que presentan otros problemas de conducta.
Consiste en una terapia sistémica breve (8 y 24 sesiones) y estratégica, focalizada en el problema.
Se basa en dos principios
La familia es un sistema y por lo tanto lo que afecta a un miembro de la familia afecta a todos
los miembros del sistema familiar.
Los patrones de interacción familiar influyen en el comportamiento de cada miembro de la familia.
El enfoque estratégico breve establece que los cambios en las familias con adolescentes
consumidores de drogas están directamente relacionados con:
La calidad de la relación terapéutica entre el terapeuta y la familia (“alianza terapéutica”).
La utilización de la reestructuración para el cambio en los patrones de interacción disfuncionales.
Trabaja para que la familia posea habilidades de interacción que resulten más funcionales y que
puedan gestionar la conducta de abuso de drogas en el adolescente.
Terapia centrada en soluciones→ se busaca derivar la atención de los problemas a las soluciones que
pueden funcionar. Se presta poca atención a la naturaleza de los problemas o a la forma en que estos
aparecieron.
Los problemas son intentos fallidos de resolver los conflictos (conflictos sin salida).
Una de las ideas centrales del modelo es que ningún problema sucede todo el tiempo.
Siempre hay “excepciones a la regla”.
El cambio es inevitable.
Sólo se necesita un pequeño cambio para repercutir en el sistema.
Los pacientes cuentan con la fuerza y los recursos necesarios para cambiar (“cualquier logro
cuenta”).
No es necesario saber mucho sobre el problema para resolverlo.
Existen muchas maneras de enfocar una situación, ninguna es más correcta que la otra.
Centrarse en lo que es posible y puede cambiarse y no en lo que es imposible e intratable.
TF multidimensional→ es un tratamiento para el abuso de drogas ambulatorio centrado en la familia.
La base central de este enfoque consiste en examinar cómo se produce el uso de drogas de los
adolescentes en términos de redes de influencias. El terapeuta desarrolla sesiones en las que trabaja
individualmente con el adolescente y otras con toda la familia.
Toma de decisiones.
Negociación.
Habilidades de vida.
Habilidades sociales.
Se trata de que los jóvenes tengan capacidad para:
Comunicar sus pensamientos.
Expresar sus sentimientos.
Desenvolverse de forma más eficaz en las situaciones de la vida cotidiana.
El trabajo con la familia incluye:
Padres observen su estilo particular en la educación de los hijos.
Aprendan a diferenciar la influencia sobre los hijos del control sobre éstos.
Adquieran habilidades de influencia positiva y apropiada sobre sus hijos.
TF multisistémica→ maneja los factores asociados con severos comportamientos antisociales en niños
y adolescentes que abusan de drogas. Es un modelo de trabajo con jóvenes agresores, violentos
crónicos para prevenir o atenuar la actividad delictiva.
El modelo se basa en un enfoque social y ecológico de la mente humana que considera que la
delincuencia es una conducta multideterminada.
La intervención en este modelo es flexible, integradora y multifacética.
Trabaja identificando factores individuales y familiares que puedan influir en las conductas
irresponsables.
Capacitar a los padres a través de habilidades y recursos para resolver las dificultades de crianza
de los adolescentes y relacionarse de forma efectiva.
METAS DEL PLAN DE TRATAMIENTO
Metas del programa de tratamiento
La meta de un tratamiento es el resultado de un proceso de negociación con el paciente.
Es diferente para cada persona.
No todas las personas requieren tener como meta la abstinencia.
Siempre provienen del paciente, por lo que se requiere aprender a escuchar lo que el paciente está
proponiendo.
A partir de esa meta es posible negociar su materialización.
Esta negociación busca que la meta sea una conducta observable (y no una idea, o un principio valórico,
por muy valioso que sea).
Son concretas y precisas.
Abordaje de las “recaídas”
Las “recaídas” constituyen el núcleo de los problemas de las personas con abuso a largo plazo.
Este es un concepto tomado de la infectología, esto es, una vez mejorada la enfermedad, esta se
manifiesta de nuevo al volver a tomar el huésped contacto con el germen.
Las emociones negativas derivadas del abandono del consumo son predictoras potentes de las
recaídas, incluso más que la dependencia fisiológica o la historia de exposición a la sustancia.
Sin embargo, este es un concepto inadecuado en adicción, en primer lugar porque no es claro que exista
una “mejoría” en el sentido habitual del término.
Definir una recaída es un problema mayor. No existe ningún consenso, ningún criterio ni ninguna norma
que permita entender en qué consiste una recaída. Algunos autores lo asimilan a volver a tener
conductas de consumo iguales a las que se tenía antes del tratamiento, lo que significa definir a qué se
le va a llamar “tener la misma conducta”. Otros definen recaída como el primer consumo después de
iniciado el tratamiento, independientemente de la cantidad. Pero con este criterio, prácticamente todos
los tratamientos fracasan.
Declarar una recaída es nada más que la aplicación de un criterio valórico (“es malo que haya hecho
eso”) de tipo dicotómico (una situación que existe/no existe) sobre un continuo de conductas.
Diagnosticar una “recaída” presiona negativamente al paciente que siente que ha fracasado en su
propósito de abstinencia.
Esto lleva a una disminución de su autoeficacia (confianza en su conducta).
Focaliza la atención sobre el consumo mismo, olvidando que hay muchas otras dimensiones que pueden
mostrar una importante mejoría en el sujeto.
Como ya se ha dicho, la mejoría se da en ciclos a lo largo de un prolongado periodo de tiempo.
No hay maneras precisas de predecir lo que va a ocurrir en el próximo periodo.
Las recaídas no son factor de pronóstico o tratamiento y se debería evitar su uso.
Persistencia del consumo
Factores cognitivos
Carencia de recursos de afrontamiento.
Escasa auto confianza.
Expectativas de efecto de la sustancia.
Concepto de enfermedad que tenga el paciente.
Pensamientos permisivos.
Factores neurobiológicos
Apetencia por la sustancia ante estímulos ambientales (deseo).
Hábito (impulso búsqueda).
Incapacidad de evaluar consecuencias negativas.
Incapacidad de inhibir conductas desadaptativas.
Cebado (priming).
Estados afectivos.
Manejo
Cada uno de los factores de persistencia del consumo puede ser abordado con alguna acción
específica.
El hecho de que un sujeto inicie un tratamiento lo lleva a una mejoría significativa de su estado
anímico y ansioso, por lo que hay que evitar la precipitación en el diagnóstico de una depresión y el
uso de antidepresivos.
Se ha demostrado que los antidepresivos pueden incluso favorecer la aparición de las habituales
conductas automáticas de búsqueda de sustancia, por lo que hay que utilizarlos con mucha cautela.
Idealmente realizar controles frecuentes (una vez a la semana).
Analizar todos los factores que favorecen el consumo.
Técnicas de afrontamiento de la ansiedad.
Sesiones individuales o grupales.
Se debe considerar el control sostenido en el tiempo.
Una de las mayores dificultades con los pacientes es que abandonan el tratamiento con alta
frecuencia.
Esto no significa que su pronóstico sea necesariamente peor.
No existe un programa de rehabilitación único que satisfaga las necesidades de todos los pacientes,
ni que sea igualmente necesario y/o aplicable en todos ellos.
De ahí́ la importancia de mantener registros de evaluación y compararlos en distintas etapas de
tratamiento (por ejemplo, a los seis meses, al año, etc.).
PREVENCIÓN DEL CONSUMO DE DROGAS RECREATIVAS
Principales factores de riesgo y protección para consumo de drogas en adolescentes:
Cómo realizar consejería a los adolescentes
El consejo debe respetar los valores y la cultura del receptor, utilizando códigos de comunicación que
resulten cercanos.
Crear un entorno que facilite la atención y resulte atractivo.
Utilizar varias fuentes de información: videos, folletos, carteles.
Uso de cuestionarios breves para realizar una evaluación rápida.
Orientar el consejo en función de la fase en la que se encuentra el paciente, intentando ajustar al máximo
la comunicación bidireccional.
Emplear siempre un enfoque multidisciplinar.
Conocer los recursos de la comunidad.
Repetir los mensajes de asesoramiento.
El mensaje ha de ser positivo, evitando hablar de salud.
Hay que utilizar recursos de motivación sobre aspectos que atraigan a los adolescentes.
Debe ser adecuado a la edad.
SENDA→ el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol
(SENDA), creado el 21 de febrero de 2011 por la ley N.º 20.502, es la entidad del Gobierno de Chile radicado
en el Ministerio del Interior y Seguridad Pública.
Misión:
Por ley, la misión de Senda consiste en:
Ser responsable de elaborar y ejecutar políticas de prevención del consumo de drogas y alcohol.
Ejecución de políticas en materia de tratamiento, rehabilitación e integración social de las
personas afectadas por el consumo de drogas y alcohol.
Elaboración de una estrategia nacional de drogas y alcohol.
Mayores de 18 años
Cuestionario autoevaluación CAD-20
1. ¿Ha usado drogas diferentes de las que se utilizan por razones médicas?
2. ¿Ha abusado de las drogas de prescripción médicas?
3. ¿Ha abusado de más de una droga al mismo tiempo?
4. ¿Puede transcurrir más de una semana sin que utilice drogas?
5. ¿Puede dejar de utilizar drogas cuando quiera?
6. ¿Ha tenido lagunas mentales o alucinaciones como resultado del uso de una droga?
7. ¿Alguna vez se ha sentido mal o culpable acerca de su uso de drogas?
8. ¿Su pareja (o familiares) se quejan constantemente con su involucramiento con el uso de
drogas?
9. ¿El abuso de drogas ha creado problemas con su pareja o familiares?
10. ¿Ha perdido amigos por su uso de drogas?
11. ¿Ha descuidado su familia o faltado al trabajo como consecuencia del uso de drogas?
12. ¿Ha tenido problemas en el trabajo y/o escuela debido al uso de drogas?
13. ¿Ha perdido algún trabajo debido al abuso de drogas?
14. ¿Se ha involucrado en peleas cuando está bajo la influencia de las drogas?
15. ¿Se ha involucrado en actividades ilegales con tal de conseguir drogas?
16. ¿Lo han arrestado por posesión de drogas ilegales?
17. ¿Alguna vez ha experimentado los síntomas físicos de retirada (sudoración, taquicardia,
ansiedad, etc.) cuando ha dejado de usar drogas?
18. ¿Alguna vez ha tenido problemas médicos como resultado del uso de drogas (pérdida de
memoria, convulsiones, sangrado, entre otros)?
19. ¿Ha pedido a alguien que le ayude a resolver su problema con las drogas?
20. ¿Ha estado en un tratamiento específicamente relacionado con el uso de drogas?
Acceso a tratamiento: población general
El gobierno ofrece en forma gratuita alternativas de tratamiento orientadas a hombres y mujeres que
presentan consumo problemático de alcohol y otras drogas, mayores de 18 años y que pertenezcan a
Fonasa.
Requisitos para acceder:
Mujer u hombre con problemas de consumo de drogas y/o alcohol
Tener 18 años o más
Ser beneficiario de Fonasa
Menores de 18 años:
Acércate al consultorio de atención primaria más cercano a tu domicilio.
Serás evaluado y recibirás la información necesaria para atenderte a través del programa de
tratamiento para población adolescente de 10 a 19 años inserto en el régimen de garantías del
sistema público de salud AUGE.
Beneficiarios de Fonasa tienen una tarjeta que los acredita, lo que requiere inscripción previa en el
sistema de salud.
Acceso a tratamiento: infanto-adolescente general
Hombres y Mujeres menores de 20 años, con consumo problemático de alcohol u otras drogas, que no
sean beneficiarios de las GES de Consumo Perjudicial y Dependencia de Alcohol y Otras Drogas en
personas menores de 20 años, ni del Programa de tratamiento para adolescentes que han cometido
infracción de ley.
Requisitos para acceder:
Mujer u hombre con problemas de consumo de drogas y/o alcohol. Tener menos de 20 años, afiliados
al sistema público o privado de salud y que, por las características de su consumo y las
consecuencias asociadas, no acceden a tratamiento en el Sistema de Garantías Explícitas en Salud
(GES).
Este programa es para menores de 20 años y no tiene límite inferior de edad.
Para este programa no es necesario que el niño, niña o adolescente sea beneficiario de FONASA.
Acceso a tratamiento: población adulta en situación de calle
Dirigido a personas mayores de 18 años que se encuentren en situación de calle y sean beneficiarios
de algún programa dependiente del Ministerio de Desarrollo Social y la Familia y que presenten consumo
problemático de alcohol y/u otras drogas.
Requisitos para acceder:
Hombres y mujeres, mayores de 18 años, derivadas de Programas Calle y Noche Digna del
Ministerio de Desarrollo Social y la Familia, que presenten consumo problemático de alcohol y otras
drogas.
La persona será atendida en el sistema público de salud, particularmente Atención Primaria.
Acceso a tratamiento: específico en mujeres
Programa de tratamiento con sensibilidad de género, para mujeres mayores de 18 años, consumidoras
problemáticas de drogas y alcohol, que se encuentren afiliadas al Fondo Nacional de Salud (FONASA).
El programa está disponible en las modalidades de residencial, en la cual pueden ingresar embarazadas
y/o con hijos (preferentemente menores de 5 años), y en modalidad ambulatoria.
Requisitos para acceder:
Mujer con problemas de consumo de drogas y/o alcohol.
Tener 18 años o más.
Ser beneficiaria de Fonasa.
CONCLUSIONES
Los profesionales de Atención Primaria ocupan un lugar muy importante para realizar la prevención primaria
y la detección temprana del consumo.
Existen numerosas barreras, como la falta de formación, el desconocimiento del problema y las ventajas de
la intervención, así como el tiempo reducido de consulta, que dificulta la atención de pacientes con
dependencia de drogas recreativas.
El proceso de tratamiento y rehabilitación puede ser largo y con cumplimiento de metas lejanas a las
planteadas, lo que puede repercutir negativamente en el equipo de salud.
El manejo integral, por medio de diversas psicoterapias, es clave en el tratamiento, evolución y pronóstico
de los pacientes, por lo cual los y las médicos de familia deben familiarizarse y atreverse a usarlas para
ofrecer la oportunidad a los pacientes y sus familias de hacerse partícipes del proceso.
Nuestro rol como médicos de familia es trabajar desde la promoción y la prevención, usando y armando
redes con el intersector, a fin de llegar a edades más tempranas evitando el consumo.
Al tener una prevalencia significativa en la población, con poca problematización, se debe aprovechar cada
oportunidad de atención para indagar en el consumo y dependencia de drogas recreativas.
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