David Huerta Poesía Moderna
David Huerta Poesía Moderna
David Huerta Poesía Moderna
México, 2019
Diseño de colección nueva época: Mónica Zacarías Najjar
ISBN: 978-607-30-2372-6
ISBN de la serie: 968-36-4324-8
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entre rigor y destellos aleatorios arrojaran resultados
como éste:
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bitación la noche entera, afiebrados y oscurecidos
—turulatos, diría David— al contacto con estas
criaturas alucinantes e inflamables. Escuchemos esta
enumeración:
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bisutería verbal sin demasiado chiste; aforismos
inanes y anodinos o galimatías sintácticos en nada
comparables con estos tres versos:
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allá de lo estrictamente literario. Compartir una mesa
o una caminata con él es estar dispuesto a ceder el
curso de la conversación al magisterio de las poten-
cias aleatorias del azar y la casualidad que llevan de
la física a la métrica dantesca, de la poesía juglares-
ca a la soslayada importancia de The Band para la
lírica de Bob Dylan, de las proezas físicas de los
héroes homéricos al promedio de bateo de su tocayo,
el Big Papi, David Ortiz. En cierta ocasión en que
David nos invitó a comer a mí y a mi hija entonces
adolescente, en algún momento me descubrí total-
mente al margen de una charla sobre actrices, acto-
res, películas y series de moda para mí —casi un
cuarto de siglo más joven que él— desconocidos por
completo.
En una entrevista reciente, al referirse a su pri-
mera poesía, contenida en El jardín de la luz, de
1972, David declaró que tal vez aquel organismo
unicelular se haya convertido, al paso de los años,
en un animalito cordado más vivaz “que aquel bicho
que habitaba los océanos profundos de la adolescen-
cia literaria”. Lamento tener que contradecirlo aquí:
aquella pequeña criatura luminosa ha terminado por
convertirse, a lo largo de casi cinco décadas, en un
superorganismo complejo y fabuloso que a un tiem-
po alumbra y oscurece lo que toca, en una maquina-
ria verbal sensible y sofisticada que, como afirma
Luis Vicente de Aguinaga, tiene ya “la vivacidad y
la consistencia de los cuerpos autónomos”.
Víctor Cabrera
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En donde estés
9
Antes de expresar una opinión política
10
La orden
No quiero saber
si lo comiste.
o si aquel alimento
y aquella orden
las apagaron para siempre.
11
Western
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La constelación M
A campo abierto,
o en dibujos febriles,
la acompañan el Perro,
el Venado, el Alcaraván,
el Murciélago, el Gato,
y otras galaxias y formaciones estelares
que día a día la destilan.
Es la constelación llamada M.
Obsérvala. Huélela
en su cielo, en sus territorios
fecundantes.
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n la ci dad
E
u
La lluvia cae
sobre la ciudad envenenada.
Un olor de agua
se mezcla
con el agrio tejido
del humo.
El clima pesa
cual una mano
hecha de mecates
y crudos caldos.
Nadie camina por las calles.
Nadie respira
en las habitaciones.
El mundo se cierra
con un lejano chasquido.
Alguien abre los ojos.
En la ciudad
Humeante la atmósfera
Cargada con aprendizajes
Todos los imaginados y posibles
Los respiramos y soñamos
Regresa la "Región más trasparente".
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Cristales
15
Plegaria
16
A una cantante de rock
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Noviazgo
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Vivimos
a la manera de los náufragos, silenciosos y rodeados
por el tumulto, por las muchedumbres que nos
ignoraban.
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Mi amor, esta cintura. Este vientre donde tu cabeza
reposó,
estos músculos que supieron entregarte los salmos,
los himnos
y la dicha de estar desnudos, juntos, abiertos,
fatigados.
Novia, fui yo también tu novia. Yo fui tu compañía
y deberás guardar este negro testimonio de mi
desdicha para saber
que existo, amor mío, centenar de demonios,
apetecida cueva.
20
Antes de besar una ausencia
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que cambia la plenitud deseosa del agua por un ansia,
por una desesperación empapada de brusco abandono,
22
Comedia
(Fragmento)
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con un aire de uñas que cayeron
de diccionarios cerrados durante mucho tiempo—
esto, esto, con un costado de sociedad civil y otro
costado
hecho de barrialosas inflamaciones y lagos que se
extinguen,
denso de espectrales fisonomías y sílabas descoyuntadas,
lleno de estrías y huella de vejámenes,
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nariz y brisa de ríos sobre el antebrazo, boca
de vaso imantado de menta, manos hundidas en la
confusión
de las flores ensombrecidas, tierna saliva
donde dan vuelta besos y palabras, nuca
de la que se desprenden eslabones de vértigo
y sobrenaturaleza, cuello levantado
en ondulantes aceites y espadas minúsculas
—y en el rostro tuyo, finalmente, circuido
de azules emanaciones, nada más
que una serenidad de puma sobre un perfecto
peñasco.
25
Propagaciones
26
Estrella
27
Antes de emprender un viaje
28
Geografía y paisaje
29
Ciencia poética / tratado número 1
30
Fuentes de un diccionario griego-español
La literatura exquisita,
las setenta filosofías,
los documentos privados
que aparecen en los papiros de Egipto,
textos burocráticos y económicos,
las fórmulas mágicas, matemáticas y astrológicas,
las cartas de un hijo a un padre pidiendo dinero,
los pleitos, los contratos entre particulares
que compraban una cabra,
las palabras fantásticas que inventaban los curas,
algunos autores de los que jamás se sacó el léxico…
NOTA
31
Literatura
Lo escrito, lo penosamente
garabateado
en cuadernos exánimes;
lo taquigrafiado, las líneas
y los renglones
del ansia y el deseo,
se desdoblan
sobre las encendidas blancuras
de la página.
Abren sobre las hojas
un murmullo de alas
y de frondas de tinta
—vehículos veloces.
Si tan sólo un instante
y un miligramo
de esas tenues aventuras
llegaran, vibrantes y sin mancha,
a los ojos que leen...
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Construcción del mundo
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Personas
La tercera persona
se enmascara,
se extingue
como una ficción.
La primera
y la segunda personas
son esto:
hogueras
escondidas,
rostros
hechos de alcohol,
fracturas
del horizonte,
animales vencidos,
espíritus
de abismos.
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Insomnio
Embozado
yo gozo del insomnio
y de sus turbias vinculaciones,
de sus torvas alucinaciones,
de sus angustias
de sudar y durar.
yo lo lleno, lo llevo,
lo tacho y lo suspendo
y en vilo cuezo en él
adjetivos, cápsulas
de agrios vocablos
o de sílabas y migajas, tramos
de inesperadas inoculaciones
y de ondulantes
enfermedades.
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Piano desértico
Un Genio la enriquecería
hasta convertirla en una Luna
o en un pedazo de galaxia.
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Bajo el agua
Acércate y saca
de las inflamaciones
del agua
las imágenes
que necesitas:
un alfiler de oro,
un vaso de transparente
blancura,
un anillo
manchado de barro,
un pedazo de papel
con tu nombre escrito
a tinta y desesperación.
El agua es una
fulguración
en el ansia de tus manos.
Las imágenes
laten,
corazones intempestivos,
bajo la superficie.
37
Lo que veo
38
Animal instantáneo
39
Domingo
40
Conjuro desde septiembre
41
Estos errores
42
Desmoronamientos
Desmoronamientos
de cuanto preguntaba
aquí:
en el puño fecundo
del corazón.
Humillaciones de la noche.
Senderos
de invisibilidad
y angustia
para el que se extravía,
Dame, noche,
el fuego y la resurrección.
43
Me caigo y me levanto
44
Cosas en la muerte
45
Donde caíste
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Nota sobre la procedencia de los poemas
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El azul en la flama (Era, México, 2002): “Cosas en la
muerte”; “Cristales”.
La olla (Agrupación para las Bellas Artes, Ciudad
Obregón, 2003): “Estos errores”; “Piano desértico”.
La calle blanca (Era, México, 2006): “Conjuro desde
septiembre”; “Bajo el agua”; “Construcción del
mundo”; “En donde estés”; “Ciencia poética /
Tratado número 1”; “Me caigo y me levanto”.
Tres poemas (La Dïéresis, México, 2015): “Comedia”.
vc
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Índice
Nota introductoria
David Huerta: elogio de la maquinaria
sensitiva
Víctor Cabrera 3
En donde estés 9
Antes de expresar una opinión política 10
La orden 11
Western 12
La constelación M 13
En la ciudad 14
Cristales 15
Plegaria 16
A una cantante de rock 17
Noviazgo 18
Antes de besar una ausencia 21
Comedia 23
Propagaciones 26
Estrella 27
Antes de emprender un viaje 28
Geografía y paisaje 29
Ciencia poética / tratado número 1 30
Fuentes de un diccionario griego-español 31
Literatura 32
Construcción del mundo 33
Personas 34
Insomnio 35
Piano desértico 36
Bajo el agua 37
Lo que veo 38
Animal instantáneo 39
Domingo 40
Conjuro desde septiembre 41
Estos errores 42
Desmoronamientos 43
Me caigo y me levanto 44
Cosas en la muerte 45
Donde caíste 46