MONARQUIA y REPUBLICA
MONARQUIA y REPUBLICA
MONARQUIA y REPUBLICA
Abarca desde la fundación de roma hasta el año 243 de la era romana, respecto a la fundación de
esta ciudad se sabe que se desarrolló en la península itálica en ella convivieron latinos, etruscos y
los sabinos la conjunción de estas tribus dio origen a Roma.
La población de la comunidad estaba compuesta por 30 curias (10 curias por cada 3 tribus), estos
habitantes se reúnen atendiendo a un criterio especifico, como la agrupación de carácter
aristocrático denominado gens que es la unión de varias familias muy extensas con antepasados
comunes, ligados también por el mismo gentilicio cada una bajo la autoridad de un paterfamilias,
ellos dirigen roma política, religiosa y socialmente conocidos como patricios, por otro lado
encontramos a los plebeyos estos son los más pobres así como los de origen extranjero estos
recurrían a familia poderosas en busca de apoyo a cambio de un servicio. Existía desigualdad entre
los patricios y plebeyos eso produjo muchas luchas internas se daba con el objetivo de desterrar las
diferencias entre estos individuos. En este periodo el poder público estuvo integrado por tres
elementos: el rey, los comicios y el senado
1. El rey
Durante el periodo monárquico Roma vivió bajo el gobierno de siete reyes, el primero de los cuales,
Rómulo, crea el senado. A su muerte le sucede Numa Pompilio, Tulio Hostilio y Anco Marcio.
Tarquino el Antiguo, Servio Tulio, Finalmente, Tarquino el Soberbio, el último de los monarcas, es
un déspota que pretende gobernar dictatorialmente y termina siendo destituido y desterrado. Con él
concluye la época monárquica.
Los comicios constituían la asamblea político-legislativa de este periodo. Existían dos tipos de
comicios:
A. Los comicios por curias Las curias
Es la división interna de las tres tribus que integraban la población sus funciones eran asegurar el
ejercicio de los derechos políticos y, por otro, el aspecto religioso y las festividades en general. La
asamblea de las curias se denomina pueblo, populus, es la reunión de todos los ciudadanos tanto a
patricios como a plebeyos. En estos comicios el voto se efectuaba por curia y en cada una de ellas,
por individuo con lo cual, si del total de 30 curias 16 votaban en un mismo sentido, la propuesta
sería aprobada. Tanto la convocatoria para la reunión de los comicios como la propuesta de ley, que
de ellos surgiera eran facultades propias del rey.
B. Los comicios por centurias
El crecimiento de Roma hizo necesaria una reforma administrativa que está basada en un censo
económico de la población que da origen a la aparición de los comicios por centurias. Estos nuevos
comicios se reunían en el Campo Marte y la unidad de voto era la centuria. La votación seguía
realizándose como en los comicios por curias solo que en este en primer término se tomaba el voto
de las centurias correspondientes a los caballeros y a la primera clase y si ganaban ya no se tomaba
en cuenta el resto.
2. El senado
En un principio, constituía única y exclusivamente un cuerpo consultivo y de apoyo al rey, cuyos
consejos cobraban cada vez mayor ascendiente. Estaba integrado por 100 miembros escogidos por
el propio monarca adquiera verdadero poder político cuando la monarquía cae, puesto que es el
único que va a subsistir como cuerpo permanente de gobierno.
3. Fuentes formales del derecho en la Monarquía
En este periodo las fuentes formales del derecho se reducen prácticamente a una: la costumbre de
los antepasados (mores maiorum). Sin embargo, dice que se publicó una colección de leyes reales
(llamada ius civile Papirianum, aunque a partir de la caída de la monarquía también estas
disposiciones cayeron en desuso.
LA REPÚBLICA
Esta etapa de la historia romana queda comprendida entre los años 510 y 27 a.C. Al principio,
durante este periodo persiste una gran pugna entre patricios y plebeyos, situación que provoca que
estos últimos decidan abandonar la ciudad para fundar una nueva, lo cual, según la leyenda, no se
lleva a cabo merced al famoso discurso de Menenio Agripa que les hace desistir.
A partir de ese momento, los plebeyos obtienen el derecho de ser representados por dos magistrados
especiales, los tribunos de la plebe (tribuni plebis). Asimismo, tenían facultades para convocar a la
asamblea de la plebe (concilium plebis) que dio origen a los plebiscitos.
En esta etapa Roma se convierte en una de las potencias más poderosas del mundo antiguo a pesar
de ello Interiormente se suscita una serie de guerras civiles como el encabezado por los Gracos, o el
movimiento de Espartaco, que van erosionando al sistema republicano. En consecuencia, se recurre
a la figura del dictador tal es el caso de Sila y de Julio César hasta llegar a la creación del
triunvirato. El primero de ellos estuvo integrado por Julio César, Pompeyo y Craso, y el segundo
por Octavio, Marco Antonio y Lépido.
Es de hacer notar que en esta época el poder público estaba integrado por el senado, los comicios y
los magistrados.
1. El senado
Tiene una importancia considerable, su opinión es considerada en todas las cuestiones importantes y
está capacitado para decidir en los asuntos relacionados con la paz y la guerra. Los plebeyos son
aceptados en él.
2. Los comicios
Los comicios curiados pierden importancia e intervienen sólo en determinados actos religiosos y de
derecho privado, tales como las adrogaciones y la confección de los testamentos. Funcionaban sin la
participación efectiva de los ciudadanos y estaban constituidos por 30 lictores que representaban a
cada una de las curias; se reunían siempre bajo la presidencia del gran pontífice.
A. Los comicios por tribus
Los ciudadanos se agrupan atendiendo a un criterio territorial basado en el domicilio.
La ciudad de Roma se divide en 4 sectores y el campo romano en 31. También en estas asambleas
la mayoría de las tribus es quien decide, de manera que el triunfo correspondía siempre a las tribus
rústicas ya que tenían más poder. Las funciones político-legislativas se distribuían entre esta nueva
asamblea y el comicio centuriado. En estas asambleas se reunían siempre convocados por un
magistrado.
3. Los magistrados
La figura del rey es sustituida por dos magistrados, llamados cónsules, que eran los jefes civiles y
militares del Estado, elegidos por los comicios y cuyo cargo duraba un año, la autoridad religiosa es
confiada al gran pontífice.
Los magistrados detentaban un poder muy amplio: algunos de ellos tenían el imperium o facultad
discrecional de mando, que incluía la coercitio o poder disciplinario, la iurisdictio o facultad de
administrar justicia y el ius agendi cum populo o cum senatu, o derecho de convocar y presidir a las
asambleas cívicas o al senado. Por otro lado, los cargos eran de elección popular y se desempeñaban
de forma gratuita, por tal motivo, el cargo se definía como un honor y la carrera política era
denominada cursus honorum. Las magistraturas podían ser patricias o plebeyas. A su vez, las
magistraturas podían ser ordinarias o extraordinarias: unas existían de forma habitual, como
órganos estables del gobierno, mientras las segundas aparecían en casos de excepción, para resolver
situaciones de emergencia.
Como magistrados ordinarios figuran los pretores, censores, ediles curules y cuestores.
Los pretores eran los encargados de administrar justicia desempeñaban el cargo durante un año; los
censores elegidos cada 5 años para ejercer por un plazo de 18 meses, durante los cuales
desempeñaban su cargo, realizaban el censo de la población, admitían a los nuevos miembros del
senado y también intervenían en la concesión de contratos de obras públicas y en los
arrendamientos de terrenos estatales. Los censores no tenían imperium pero su función fue muy
prestigiada y a través de la elaboración de las listas de ciudadanos y de senadores de hecho ejercían
una vigilancia moral y jurídica sobre toda la población, generalmente se trataba de excónsules; los
ediles curules desempeñaban funciones de policía urbana y además conocían de los litigios en los
mercados. Por último, los cuestores estaban encargados de la administración del erario público y
también intervenían en el gobierno de las provincias, duraban un año en el cargo. Los magistrados
ordinarios podían ser prorrogados un año más en el desempeño de sus funciones, encargándose
durante ese lapso del gobierno de alguna provincia.
La magistratura extraordinaria por excelencia era la del dictador, para casos de excepción, pero
estaba contemplada dentro del orden legal. En momentos de peligro para la República, con acuerdo
del senado, cualquiera de los cónsules podía nombrar a un dictador, funcionario que ejercería
entonces el poder de forma unipersonal, en tanto que desaparecían las demás magistraturas. El
dictador permanecía en su cargo mientras se mantuviera el problema y como máximo durante seis
meses.
Los magistrados que tenían imperium eran los cónsules, los pretores y el dictador. Los demás
detentaban un poder más limitado denominado, potestas. Los primeros se conocen como
magistrados mayores, los otros como magistrados menores.
4. Fuentes formales del derecho en la República
La costumbre sigue existiendo al igual que en el periodo anterior, pero, por otro lado, ya contamos
con la presencia de la ley, los plebiscitos, los senadoconsultos, los edictos de los magistrados y la
jurisprudencia.
A. La ley
Es una disposición dictada por el pueblo cuando éste se reunía en comicios, deben ser de carácter
general. Justiniano señala que la ley es aquello que el pueblo romano establece a propuesta de un
magistrado; por ejemplo, un cónsul.
En atención a su procedencia, las leyes pueden ser divididas en curiadas y centuriadas. Las primeras
son emitidas en los comicios por curias y las segundas aquellas que surgen de los comicios por
centurias.
El conjunto de dichas leyes era también denominado leges rogatae, para distinguirlas de las leges
datae, que eran emitidas por los distintos magistrados en el ejercicio de sus funciones.
La ley consta de tres partes.
a. Praescriptio. Es aquella parte de la ley donde se indica el nombre del magistrado que la
propuso y el día en que fue votada.
c. Sanctio. En ella se señalan las disposiciones relativas a su observancia, así como la sanción
aplicable en caso de que la ley sea infringida.
Los plebiscitos
Es todo aquello que la plebe ordena y establece. En un principio estas medidas sólo eran
obligatorias para los plebeyos, pero por disposición de la Ley Hortensia se declaran obligatorias
para todos los ciudadanos, adquiriendo así el carácter de ley. Los plebiscitos pueden distinguirse de
las leyes en cuanto a la manera en que se citan unos y otras. A los plebiscitos se les designa con el
nombre del tribuno que efectuó la propuesta, mientras que a las leyes se las conoce por los nombres
de ambos cónsules.
Los senadoconsultos
Es toda medida legislativa emitida por el senado; sin embargo, durante su primera etapa consistían
en simples consejos dirigidos a diversos tipos de magistrados. Con el transcurso del tiempo, la labor
del senado fue tornándose cada vez más legislativa, en especial al finalizar la República, cuando se
dictan normas para reglamentar determinadas situaciones, sobre todo de carácter administrativo.
Generalmente, el senadoconsulto se emitía a petición del príncipe, después de una propuesta o
discurso que él mismo realizara la llamada oratio principis, situación que a la larga traería como
consecuencia la pérdida de la autonomía del senado.