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Filosofía Unidad 1

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Diversas formas de saberes: saber mítico,

saber empírico, saber práctico o vulgar, saber


religioso, etc.

El hombre necesitó desde siempre adquirir ciertos conocimientos que le permitieran orientarse
en su medio ambiente, a fin de poder actuar y satisfacer de esa manera sus necesidades. Es
por eso que debemos de entender el problema del conocimiento en función de la vida y
desterrar aquella falsa idea de que el hombre por naturaleza busca conocer puesto que posee
determinadas facultades para conseguirlo.

La verdad es que el conocimiento surgió no por inclinación sino, repitámoslo, porque el


hombre para vivir tiene que llevar a cabo, una serie de actividades para ver cubiertas sus más
básicas necesidades. Uno de los filósofos contemporáneos Ortega y Gasset ha utilizado la
frase “saber a qué atenerse” respecto a las cosas y a los demás hombres, como la
característica más general de este tipo de saber mediante el cual el hombre puede orientarse
y actuar dentro de su medio. En efecto imaginemos lo que sucede cuando el hombre se
encuentra en un estado de incertidumbre cuando no sabe cómo comportarse con
determinados objetos, indudablemente no podrá actuar; pero, puesto que el ser humano no
puede permanecer en la inactividad, se verá en la necesidad de buscar una serie de
mecanismos que le permitan salir de ese estado de incertidumbre.

Pues bien en los tiempos antiguos cuando la humanidad no poseía todavía conocimientos
científicos, ya se idearon algunos sustitutos que posibilitaran al hombre saber cómo
comportarse frente a los seres que le rodeaban así surgieron por ejemplo las llamadas
ordalías y los oráculos. Los primeros cumplían una finalidad judicial, de modo que cuando se
deseaba saber si alguien era culpable o inocente, la forma de averiguarlo era haciéndole
ingerir veneno al supuesto culpable de manera que si vivía, ello era prueba de su inocencia, al
contrario si moría se pensaba que efectivamente fue culpable.

En el caso de los oráculos estos representan también una forma  de saber a qué atenerse, de
ahí, que cuando los antiguos griegos iban a iniciar alguna empresa importante se consultaban
los oráculos famosos, como el de Delfos, con la esperanza de saber lo que debían hacer en el
futuro. Sin embargo a través de la historia de la cultura es posible rastrear otros tipos de
saberes mucho más complejos, que han constituido diversos modos de apropiación de la
realidad, esto es diversas formas de comprender y actuar en el mundo, tales como el mito, la
magia y el sentido común. Todos ellos, saberes pre-científicos, los cuales analizaremos a
continuación.
Saberes prefilosóficos

En este tema nos ocuparemos de la naturaleza de la explicación pre filosófico y científica.


Primeramente hablaremos sobre el pensamiento mítico, seguidamente del saber mágico y
posteriormente del saber empírico práctico. Estos constituyen las primeras formas culturales
o simbólicas, que el hombre adopta y le permiten actuar y satisfacer las necesidades en la
cotidianidad. Por lo tanto, estos saberes se caracterizan por ser espontáneos, ya que se
adquieren sin métodos, son superficiales porque desconocen, las causas, las leyes y
principios de la realidad y por último son acríticos ya que no se pregunta  el por qué de las
cosas. La importancia de estos saberes sin embargo radica en que son una forma para saber
a qué atenernos, o sea saber cómo comportarnos en relación a otros hombres y al mundo que
nos rodea

Pensamiento mítico

El propósito de esta temática consiste principalmente, en que se logre diferenciar el


conocimiento filosófico, de los llamados saberes pre científicos que históricamente le
precedieron y que, aun ahora, conviven con aquel. Etimológicamente, el termino mito significa
“decir o narración”, y generalmente se le identifica, como fabula, engaño, ilusión etc. Sin
embargo, como tendremos oportunidad de aclarar a la luz de las modernas investigaciones
que sobre el pensamiento mítico se han llevado a cabo, este adquiere una nueva faz, cuando
lo entendemos dentro del contexto de las civilizaciones arcaicas, donde por el hecho de tener
vigencia social constituye una “historia sagrada”, que sirve de guía práctica y de explicación
del mundo.

Para que pueda concer mas acerca de este m ito sobre pandora le invitp a leer
rapidamente, el “Mito de la caja de pandora” para poder tener acceso al
documento haga clic en el título del mismo.

Es importante que comprenda la estructura, significado y repercusión de tales ideas en


la vida social del hombre, ya que hoy todavía existe un gran numero de las llamadas
sociedades primitivas, en las que ese tipo de saber se mantiene, no es menos cierto,
que aun en nuestra sofisticada civilización occidental, es posible desenmascarar
algunas creencias en cuya base están presentes concepciones míticas como, por
ejemplo: el mito de la superioridad de la razas, el culto a los héroes, (hoy en día
personificados en algunos líderes políticos, cantantes y artistas etc.), como también en
un destino inexorable, e incluso en la manera mítica como ciertas personas entienden
la ciencia.
El mito como otras formas culturales, posee una unidad de lo diverso, que en su caso
consiste en la objetivación de los sentimientos, es decir, que el sentimiento humano
al exteriorizarse ha quedado plasmado en determinadas objetividades, como: en
normas, narraciones, usos, ritos, danzas y leyesde la comunidad. Este aspecto hay
que destacarlo, aunque el pensamiento no está exento de cierta racionalidad, no
obstante,los fenómenos eran percibidos rodeado de cualidades emotivas de alegría o
de pena, angustia o confianza, repelentes o agradables. Todo lo cual pone de relieve
que el mundo en que vive el primitivo es fundamentalmente emotivo, y será
precisamente en esa atmosfera emotiva, donde el “hombre empieza a aprender un
arte nuevo y extraño, el arte de expresar lo cual significa organizar sus instintos más
hondamente arraigados, sus esperanzas y temores” (E. Cassirer, El Mito del Estado).

De acuerdo a lo anterior, podemos entender que para el hombre de mentalidad mítica, las
cosas no son indiferentes, sino buenas o malas, dañinas o perjudiciales, dependiendo o no
que sirvan para satisfacer diversas necesidades. Ahora bien, el pensamiento mítico ha
cumplido una doble función:

Especulativa

Puesto que da respuestas a los problemas de los orígenes, tanto del mundo, de los dioses
como de los hombres. En la actualidad la importancia de tales relatos, radica en el hecho
mismo de la pregunta, o sea, en el que algunos hombres hayan sentido la necesidad de
averiguar el porqué de algunos fenómenos, de donde provienen, y en algunos casos hacia
qué fin tendían.

Guía práctica

Se refiere a su función como guía práctica, y ello debido a que cualquier sociedad, aun la
primitiva no podría subsistir mucho tiempo sin un determinado orden, sin leyes que regulen la
vida en común. Pues bien, “la sociedad primitiva ha solucionado ese problema echando mano
del mito, que como ya sabemos representa una historia verdadera”. En efecto, los patrones de
conducta, los usos, obligaciones y prohibiciones, todo adquiere su sentido y su razón de ser
en las creencias y relatos míticos guardados celosamente por la tradición, la cual se encarga
de conservarlos y transmitirlos de generación en generación” (Álvarez de Bittner María
Cayetana, texto de Filosofía, SUED.) En este tipo de mentalidad el pasado juega un papel
importante, pues en él se encuentran los modelos, no solamente de conducta, establecidos
por los dioses, sino también el de las distintas festividades, actividades y oficios que el
individuo realiza. “Es el tiempo fuerte de los orígenes” como gusta denominar Mircea Eliade, el
que puede ser recreado a través de rituales, de ahí, la generalizada creencia de un tiempo
cíclico en el que todo puede volver a suceder.
El mito tiene su propia racionalidad, su ordenamiento y es esto lo que nos permite una
interpretación de En las diversas mitologías (griega, egipcia, maya, azteca, etc.) el relato
cosmológico narra cómo se ha formado el mundo a partir de un principio inicial: agua, caos,
tierra, hasta desembocar en el mundo establecido y familiar.A partir de esos principios, los
dioses hicieron surgir todo aquello que en el mundo contemplamos: hombre, montañas, ríos,
mares, etc. debido a ello el mito cosmogónico se considera como una historia sagrada y por lo
tanto no puede ponerse en tela de juicio.

Antropogonía

Estas representan una explicación sobre el origen del hombre. El cual dentro de la mentalidad
primitiva no marca la etapa más importante de la creación y ello debido a que el hombre no se
ve a sí mismo como un ser superior con respecto a los otros seres vivos. Esto se explica
porque la visión del mundo fundamentalmente es como un todo y por lo tanto no hay
diferencias insalvables entre una especie y otra.

Teogonía

Por lo que respecta a las teogonías hay que señalar que tienen como tema principal, el
exponer a través de largas cadenas genealógicas el surgimiento de los distintos dioses, a
partir de aquellos que se consideraban más importantes y poderosos, hasta desembocar
finalmente en aquellos dioses cuyo radio de acción era más limitado, tales como los llamados
dioses funcionales, cuyo objetivo consistía en favorecer determinadas actividades prácticas,
como: la siembra, la caza, etc., o los tutelares que tenían como misión proteger el hogar.

En conclusión tendríamos que:

1.       A ese nivel cultural nos damos cuenta dequees prácticamente nulo el uso que de la libertad
personal hace el individuo puesto que se rige exclusivamente por las creencias, usos,
oráculos, por la tradición de la sociedad.

2.       El hombre mítico no tiene clara conciencia de su poder creador. De ahí que todo aquello que
es producto del desarrollo cultural como: la cerámica, navegación, uso de herramientas, etc.
su uso y origen son un legado de ciertos dioses que de esa manera mostraron su
benevolencia con los hombres.

3.       La mentalidad mítica es fatalista dominada por prejuicios y creencias que le impiden


modificar lo establecido siendo además acrítica y dogmática pues acepta las cosas sin
discusión, sin razón, únicamente por la fuerza de la tradición y sus creencias.
El pensamiento mágico

La magia puede entenderse como poder sobre las fuerzas de la naturaleza y poder


de adivinación. Tanto en un caso como en el otro se trata claramente de un arte de una
técnica que confiere poder al hombre.

En las sociedades arcaicas, el pensamiento mágico se encuentra profundamente vinculado al


pensamiento mítico, no obstante el primero presenta caracteres  propios, y en cierto sentido
constituye un paso adelante en comparación con la mentalidad mítica, pues como dice
Cassirer, “la fe en la magia es ya una de las primeras manifestaciones mediantes la cuales el
hombre fue obteniendo confianza en sí mismo”. De hecho “a través de ella el ser humano ya
no se siente a merced de las fuerzas naturales, ya que el mago cree efectivamente  que
puede lograr determinados fines, e incluso provocar algunos fenómenos naturales como, por
ejemplo, hacer llover, apagar fuegos, hacer curaciones en casos difíciles, hacer
encantamientos, hechizos,producir males y actos de adivinación;  mediante su voluntad, la
que puede verse favorecida obteniendo el  apoyo de seres  sobrenaturales, tales prácticas
son llevados a cabo por determinados ritos, los que para ser efectivos deben realizarse
repitiendo ciertas frases y observando determinadas reglas en un orden que no puede variar”.
(Álvarez de Bittner María Cayetana, texto de Filosofía, SUED.)

Precisamente la creencia de que el hombre puede dominar las fuerzas de la naturaleza, llevó
a J. Frazer  a afirmar, que la magia es mítica en sus medios pero científica en sus fines.

Por otro lado, la mentalidad primitiva en general percibe el mundo impregnado de


cualidades emotivas, ello permite entender por qué algunos pueblos, creen que algunos días
son propicios a diferencia de otros que son nefastos, de allí la necesidad de que las empresas
se realicen en los primeros a fin de que tengan buenos resultados.
En las sociedades primitivas, las prácticas mágicas son variadas y están presentes, en todas

aquellas actividades que tienen importancia para su conservación, por ejemplo, en la época

de la siembra, o de la recolección, en la caza, nacimientos, etc. Tales prácticas eran ejercidas

por personas que disponían de ciertos conocimientos, como por ejemplo el que algunas

hierbas pueden ser buenas o malas para la salud. Dichos saberes se guardaban celosamente,

siendo transmitidos a unos pocos iniciados a través de generaciones. Este hecho nos permite

comprender el enorme prestigio y poder que los magos adquirían en el seno de sus

sociedades. A su vez, la mentalidad mágica opera por medio de lo que Frazer denomina

magia imitativa, lo cual supone que lo semejante produce lo semejante, de modo tal, que si se

desea obtener una buena caza,  o una abundante pesca, se pinta un animal, o se fabrica un

pez, en la confianza que éstas logran atraer a las especies en cuestión. Saber del sentido
común (empírico, vulgar, ordinario o del hombre práctico)

Este tipo de saber, es el resultado de experiencias propias a través de los sentidos, pero
fundamentalmente de las ajenas, que a través de los tiempos se ha ido conservando y
transmitiendo como parte del legado cultural de la humanidad. El saber empírico práctico, no
pretende dar respuestas teóricas a grandes interrogantes. Más bien, su interés se circunscribe
en resolver problemas que se le presentan al ser humano en el  diario vivir, es decir, a la
satisfacción de las necesidades inmediatas, de ahí, que sea prioritariamente utilitario.

Muchos de los saberes acumulados por el pensamiento empírico practico o de sentido común,
se ha originado como resultado de aciertos y errores se desarrollaron técnicas más o menos
rudimentarias con las cuales manipular la realidad. También se condenso en esas frases de
experiencia popular que constituyen los refranes, y en general se traducen en recursos y
saberes, con lo cual el individuo puede actuar con relativa eficacia.

Ahora bien, aunque dichos saberes han proporcionado una comprensión de la realidad
anterior a la que la Filosofía y la ciencias llevarán a cabo, y aunque tampoco conviene olvidar
que gran parte de ello han sido confirmado por la ciencia, el saber empírico práctico es
limitado porque es fragmentario y asistemático, adquirido sin métodos, asimismo, por percibir
lo inmediato y lo superficial se ha conformado en muchas ocasiones  ideas incorrectas que no
corresponden a la realidad. Por lo tanto, es importante destacar que la mentalidad de quienes
se  quedan al nivel del sentido común, es en general conservadora, acrítica y dogmática. 

A continuación se ejemplifica el saber por sentido común y el conocimiento sistémico, veamos:


Por sentido común sabemos que la figura humana ahuyenta los pájaros  imposibilitando  que
se acerquen al cultivo y lo coman,  lo copiamos  en forma de muñeco y repetimos lo
enseñado. (Ejemplo de sentido común). 

En la imagen se representa el grado de conocimiento repetitivo al momento de la siembra


basada en los sentidos (que desconoce las teorías de la respiración celular, la fotosíntesis, los
posibles paracitos o insectos que afectan la planta y la debilitan, y de igual manera
desconocimiento de insecticidas, químicos o control biológico  etc.)Sin un conocimiento
sistemático sino solo de sentido común. Ejemplo del conocimiento sistemático que
corresponde a la disciplina filosófica que es en sí, rigurosa y critica de una realidad que se
muestra solamente en apariencia el filósofo busca la esencia y mejorar de acuerdo al
conocimiento la existencia misma. 

El desarrollo de la ciencia y la tecnología como resultado de la reflexión y la investigación 


filosófica dan como resultado mejores rendimientos en el trabajo, en la  producción en el
campo y en la vida de una sociedad.  

El saber por sentido común. Este tipo de saber es el resultado de experiencias propias, pero
fundamentalmente ajenas, que a través de los tiempos se han ido conservando y trasmitiendo
como parte del legado de la humanidad. Algunas de sus principales características son las
siguientes: Utilitario
El saber empírico práctico permite resolver los problemas que se
presentan al ser humano en su diario vivir

Acumulativo
Muchos de los saberes acumulados por el pensamiento del sentido
común han sido originados como resultado de las actividades que los
hombres realizan tanto individual como colectivamente

A metódica
Se adquiere sin método

Acrítica
Carece de respuestas fundamentadas ante los eventuales
cuestionamientos y desconoce las causas científicas de los fenómenos.
Dogmatica
Por que se adopta como una realidad sin someterla a la refutación.

Común
Es común porque todos los individuos lo poseen y comparten un abanico
de verdades carentes de articulación crítica.

Paso del mito al logos

Hay quienes piensan, como Burnet, que el surgimiento del pensamiento racional se debió a
que los griegos inventores de la Filosofía eran unos pueblos dotados de una inteligencia
excepcional. En tal sentido, afirma “que los filósofos jónicos han franqueado la vía que la
ciencia a partir de este momento no han tenido más que seguir”, de ahí que la aparición del
logos sea considerado como una especie de “milagro” o “dádiva de los dioses”.

A nuestro juicio la interpretación anterior resulta bastante simplista, pues aunque los dotes
intelectuales de muchos griegos hayan sido elevadas, no obstante hay que señalar algunos
factores externos que favorecieron la aparición del pensamiento filosófico entre los que se
podrían mencionar:

1.       La prosperidad económica de Mileto, cuna de la Filosofía, ciudad habitada por


ricos comerciantes. Este hecho es importante destacarlo pues el bienestar material
habría producido el ocio, necesario para que algunos hombres pudiesen
dedicarse a la tarea de intentar conocer racionalmente la realidad. En
consecuencia favoreció la utilización del tiempo libre.

2.       Por otro lado Mileto no poseía una casta sacerdotal poderosa, lo que posibilitaría
que el saber se fuese volviendo laico. También cabe mencionar una serie de
cambios que a partir del siglo VII se habían ido operando: la aparición de la
moneda, la escritura alfabética, el mayor progreso técnico, la organización política
de las ciudades y el comercio que no sólo favoreció a la economía, sino también al
intercambio cultural con otros pueblos, en especial hay que resaltar las técnicas
geográficas y astronómicas importadas de Egipto y Babilonia.

Pasaremos a analizar a continuación algunos de los cambios que se operan con el


surgimiento del pensamiento racional en contraposición con el pensamiento mítico tradicional.
Recordaremos que la relación que el hombre mítico establece con los demás seres vivos
es simpatética, o sea de solidaridad e igualdad, puesto que el hombre no se considera como
un ser superior. En cambio al surgir el pensamiento filosófico el hombre tomó consciencia de
las diferencias que existen entre él y el resto de los seres, por ende prevalece una
visión analítica que le permitió advertir que su diferencia especifica es precisamente la razón
o logos, a través de la cual inaugura una segunda forma de apropiación de la realidad que
será denominada por los griegos conocimiento filosófico.

Ahora bien, es importante comprender que este nuevo trato con las cosas, significa que

algunos hombres a mediados  del siglo VII a. de C. habían puesto en duda sus antiguas

creencias, ya no les bastaba simplemente con narrar las viejas mitologías sobre el surgimiento

del mundo (las antiguas cosmogonías). No olvidemos al respecto que para la mentalidad

mítica las cosas podrían cambiar a capricho de los seres sobre naturales (dioses), de ahí que,

aquello solo podría ser objeto de narración; además como ya explicamos, para el pensamiento

prefilosófico en general las cosas solo se perciben bajo una concepción de utilidad, esto es

como cosas para, o como instrumento, por medio de los cuales el hombre satisface diversas

necesidades.

Pues bien, con el surgimiento del pensamiento filosófico el hombre toma distancia de las

cosas, las ve por primera vez como objetos con una consistencia, poseedoras de un ser fijo

que puede ser definido, ya que circunscribimos con precisión los límites donde las cosas

empiezan y terminan el perfil unitario de su aspecto, es decir de su idea. Platón y Aristóteles

pensaron que los hombres al percibir las cosas de otra manera tuvieron que asombrarse o

admirarse, de modo que en ese estado estaría la base del filosofar. De todas maneras fue la

necesidad de salir del estado de incertidumbre, de reconocer que las antiguas creencias eran

insuficientes para entender la realidad, lo que los llevó a desarrollar una nueva vía de acceso

a la misma, que será la Filosofía.

A partir del nacimiento del logos, el hombre se da cuenta de que puede hacer uso de su

racionalidad y por lo tanto todas las cosas deben someterse a ella.)

Repitamos que el conocimiento en sentido estricto surgió con los griegos debido a que, ellos

supieron que detrás de los cambios aparentes existe una realidad permanente que es el ser

de las cosas; pero, además, que dicho ser posee una consistencia afín con el entendimiento

humano, en otras palabras, que el descubrimiento es accesible a la razón. J. Pierre Vernant


resume tales cambios al decir que: el nacimiento de la Filosofía aparece solidaria de dos

grandes transformaciones mentales, un pensamiento positivo que excluye toda forma

sobrenatural y que rechaza la asimilación implícita establecida por el mito, entre fenómenos

físicos y agentes divinos. Un pensamiento abstracto que despoja a la realidad de este poder

de mutación que le presta el mito.

Ahora bien, en cuanto a las características de esta forma de pensamiento, es conveniente

precisar el sentido que los griegos dieron a la actividad filosófica, la cual ya lo hemos dicho,

consiste en un que hacer racional cuyo objetivo es definir los primeros  principios

constitutivos del ser, exponiendo en un sistema deductivo la estructura profunda de lo real.

El filósofo debe de proporcionar una serie de argumentos congruentes para afirmar que algo

es así, el cual excluye el aceptar una cosa por fe o porque simplemente la tradición  o el

sentido común así lo estima. En un comienzo el conocimiento filosófico estuvo unido al

científico, pero en la medida que los conocimientos se vuelven más amplios y complejos

fueron dando lugar al surgimiento de las ciencias particulares.

Las cosas poseen un ser que el filósofo se propone descubrir, así el filósofo cosmológico
Heráclito de Éfeso dirá en su famosa frase que la naturaleza o physys gusta de ocultarse.
( Farre Luis,1959)

Buscar la esencia de las cosas motiva la investigación y despierta en el alma esta sed por
encontrarla y no se tranquiliza hasta dar cuenta de ella. Ten presente esta reflexión en tu
mente y sigue con ánimo el estudio disciplinado de la filosofía recuerda siempre la máxima
filosófica conócete a ti mismo.

Pensamiento filosófico

“Desde una perspectiva general, la filosofía es una ocupación humana a la cual la mayoría de
los humanos dedica solo unos cuantos momentos conscientes de sus vidas. Filosofar es
pensar sobre todo o sobre cualquier cosa en el universo. Mejor dicho, filosofar es vivir
nuestras vidas reflexivamente. Esto no significa, como comúnmente se cree, que la debe
apartar de la realidad concreta o que nos lleva a poner las cabezas en las nubes. Por el
contrario, la filosofía nos baja de las nubes puesto que pretende proporcionar una mejor
comprensión de nuestro puesto en el mundo” (Rápalo y Soriano; 2002).
 “En consecuencia se puede decir que cualquier persona que se inquiete por la existencia y se
preocupe en resolver sus incógnitas, está abocado a ser filosofo; que llegue a serlo realmente
dependerá de la intensidad con que penetre en los problemas y de la madurez que pueda
adquirir en sus reflexiones, para lo cual el estudio de lo que han hecho otros pensadores y de
cómo lo han hecho es de gran ayuda” (Rápalo y Soriano; 2002).

 La filosofía estudia las causas profundas y últimas de las cosas, cuyo objetivo es


definir los principios constitutivos del ser.

 Tiene como objeto de estudio la TOTALIDAD de la realidad por que investiga el


fundamento de la naturaleza. y no solo a un sector o campo de estudio específico.

 El filósofo trata de cuestionar los fenómenos y fundamentarlos.

 El filósofo estudia el ser posible, es decir, aquello que puede llegar a ser, y no
solamente con los hechos o con lo dado.

 Se apoya en distintos métodos (mayéutica, la fenomenología, la dialéctica etc.)

 La actitud del filósofo para percibir la realidad como totalidad es una actitud intelectual,
una actitud del pensamiento (de la razón) en la que se investiga el objeto a través de
las interrelaciones en las cuales está inmerso.

Algunos de los filósofos más representativos de los inicios de nuestra disciplina, son por
ejemplo:

Sócrates

A la supuesta certeza de los sabios de su tiempo , Sócrates antepuso su principio de que la “vida sin examen no vale la pena de ser
vivida (Rápalo y Soriano; 2002 ) que sin dejar obras escritas tenemos conocimiento de él sobre todo a través de su discípulo más
destacado,

Fuente: Pixabay

Platón

El cual nos enseña una actitud conceptual de la Filosofía que se desarrolló en la cosmopolita Atenas, tendiente a superar el
relativismo axiológico, moral y gnoseológico, recordemos la frase famosa generada por la consulta del templo de Apolo conócete a ti
mismo siendo una invitación para asumir una consciencia filosófica.

Fuente: Pixabay

 En cambio, Platón establece que la  reflexión filosófica se extiende a la fundamentación del
conocimiento racional e inteligible. Por consiguiente, Sócrates, y Platón, construyeron una
Filosofía orientada a la auto reflexión del espíritu, sobre sus supremos valores teóricos y
prácticos. A su vez, la Filosofía de Aristóteles se dirige preferentemente al conocimiento
científico y su Filosofía primera nos permite conocer los principios últimos de la realidad.
Aristóteles en su Filosofía  presenta  una concepción del universo que no está desligad de los
supuestos que plantean las ciencias. Leonardo da Vinci. La Filosofía como autorreflexión destaca dos concepciones:
la Filosofía como reflexión de la totalidad y la ciencia como reflexión de lo particular. Estos elementos aunque parecen
ser antagónicos tienden hacia la constitución del objeto de la Filosofía; denominado la
totalidad el que puede entenderse, por una parte como el mundo exterior (el macrocosmos)
o la concepción del universo, y el mundo interior (microcosmos) o concepción del yo. Ahora
bien, de acuerdo a lo desarrollado podemos definir la Filosofía como una ciencia superior, que
tiene por objeto la totalidad y no como el caso de las ciencias particulares que al constituirse
llevan a cabo un proceso de reducción científica por lo cual estudia una parte de la realidad, la
Filosofía en cambio como hemos repetido nos permite tener una visión de conjunto de la
realidad, que nos permite buscar un mayor número de determinaciones que expliquen los
hechos. 

El preguntar de la filosofía

Naturalmente la ciencia hace sus preguntas y son contestadas en sus respectivos campos de
estudio:

¿Qué es lo que proporciona energía a las células? lo contesta la Bilogía; ¿Por qué se dilatan
los metales? Lo contesta la Física; ¿Si aumenta la producción, bajarán los precios? Lo
contesta la Economía. Lo propio de la filosofía es el preguntar radical (su radicalidad) y
universalidad (su totalidad). Así tenemos preguntas como:

 ¿Cuál es el primer principio de donde surgen todas las cosas?

 ¿Qué hay por debajo de la apariencia de las cosas?

 ¿Existe Dios?

 ¿Son las cosas tal como las percibimos?

 ¿Habrá la historia humana llegado a su fin?

 ¿Quién es el hombre?

 ¿Cuál es la mejor de las sociedades posibles?

Ejercicio para reflexionar: ante un rosal que se ha secado como lo explicará el filósofo

Contraste e interacción de otros saberes con el


saber filosófico

Una vez analizada las características de los saberes pre-científicos, y la función que prestan
“como saber a qué atenerse”, esto es, como saber en el sentido primario y general,
pasaremos, a examinar un nuevo tipo de conocimiento: el teórico. Brevemente quisiéramos
recordar, que esa nueva forma de apropiación de la realidad, se origino cuando los hombres
dejaron de ver las cosas, “como cosas para” o instrumentos, a través de los cuales se podían
satisfacer diversas necesidades,  o sea, cuando se corta la relación  utilitaria, y a su vez, se
toma distancia de la misma. Será entonces cuando se desarrolla la vida teórica, al percibir las
cosas como objetos, con una consistencia, es decir poseedores de un ser fijo, que puede
definirse. Estas transformaciones en las maneras de percibir la realidad, fueron llevadas a
cabo por los filósofos griegos del periodo presocrático, época en la cual todavía el
conocimiento filosófico y científico  se encontraba unido. Solo con el transcurso del tiempo, se
dará paso a un proceso de alejamiento y diferenciación entre los distintos campos del saber. A
diferencia de la Filosofía estudia las causas observables de las cosas, las ciencias estudian
un sector, un campo particular de la totalidad de la realidad, pues cada una de ellas sea
constituida por reducción, aislando un campo temático y, desarrollando sus propios métodos y
técnicas de investigación, asimismo fueron creando sus propias categorías, y un lenguaje
técnico o también denominado  lenguaje objeto.

El conocimiento científico estudia el hecho, lo dado, ya que su propósito consiste en: comprender,
explicar y predecir los fenómenos. El científico percibe o capta la realidad por los sentidos y
termina deduciendo la ley con la razón, pues no hay otra forma más que empezar estudiando el
fenómeno por la apariencia y ahondar la investigación hasta intuir la ley científica en el plano de
la esencia.

En el siguiente esquema se muestra la filosofía como madre de las ciencias.

Además es objetivo y universal, objetivo puesto que la investigación científica, debe


realizarse sin que intervengan en lo posible factores subjetivos, universales, porque se trata
de conocimientos que son aceptados y compartidos. También es crítico, superador del
sentido común, y en continuo proceso de revisión  y verificación. Añadamos que
es sistemático, pues cada ciencia desarrolla conocimientos ordenados, y encadenados
mutuamente, de manera que un pensamiento sirve de base al que le sigue y así en forma
sucesiva. Es importante señalar que el conocimiento filosófico y el de las ciencias particulares
tienen mucho en común pese a sus diferencias, puesto que se trata de conocimientos
teóricos, metódicos y sistemáticos, y ambos deben de avanzar en estrecha vinculación, ya
que el filosofo al estudiar un fenómeno en sus interrelaciones, necesariamente hace uso de
conocimientos, que le son aportados por la ciencias particulares, tanto naturales, como
sociales. De ahí, que su saber sea un saber de segundo grado, pero as u vez, desde la
Filosofía, se ha desarrollado una reflexión crítica, sobre los fundamentos, límites, métodos y
resultados de las ciencias, como también han sido muchos los filósofos, que se han dedicado
al análisis lógico sistemático del lenguaje de las ciencias.

La naturaleza humana está en constante evolución:


Conocimiento Teológico

 Es la exposición ordenada y sistemática de todo lo que Dios ha revelado al hombre, ayudado
por la fe.

La religión, es otra forma de conocimiento, que posee legitimidades que la diferencian del
pensamiento filosófico o crítico. Éste, es una actividad netamente humana ordenada a darle
sentido a la vida del hombre y la sociedad, en el mundo; aquélla, en cambio, aún siendo una
actividad humana, tiene por objeto, no la relación con el mundo, sino la <<religación>> del
hombre con la divinidad, entidad trascendente, que no es accesible por procedimientos
racionales. El sujeto religiosos por consiguiente, percibe la realidad, la verdad por la vía de la
<<revelación>>, la <<inspiración>> y que, al final, no se considera incompatible con lo
racional.

Hay quienes han intentado armonizar la fe y la razón. No se trata de que la razón
explique  todo,  y  así  elimine  el  espacio  de  la  fe;  se  trata  de  buscar  una  armonía,  punto
por punto, entre las afirmaciones  de la fe y lo que la razón puede demostrar.

Santo Tomás de Aquino encarna este modelo en el
siglo XIII. Tomás sostuvo que mientras que la fe mira más lejos que la razón, lo hace con me
nos  nitidez.  Por  ejemplo,  por  la  razón  sabemos  que  Dios  es  uno;  pero  por  la  fe
sabemos que Dios es Uni-Trino. La fe y la razón son distinguibles (son dos facultades
distintas)  pero  están  en  armonía.  Tomás  consideraba  que  Aristóteles  había  llegado  a
conclusiones  verdaderas  —como  la existencia  de Dios— no por la luz de la fe, sino por
la  luz  de  la  razón.  Aquello  a  lo  que  difícilmente  se  accede  por  la  razón,  ha  sido
revelado  en  la  Escritura,  puesto  que  es  importante  para  la  salvación.  La  revelación
asegura  que  todos  -incluso  aquellos  que  no  se  ejercitan  diariamente  en  cuestiones
estrictamente  racionales—  pueden alcanzar la salvación. (Roldan, 2006) En la Encíclica
Veritatis, se pone de relieve algunas verdades fundamentales de la doctrina católica, su
propósito es articular la fe a través de la reflexión filosófica, ya que esta tiene como
propósito fundamentar la fe. La Filosofía tiene la gran responsabilidad histórica de ser la
consciencia crítica de los problemas vigentes de la realidad actual.

La filosofía como investigación sistemática, rigurosa y  reflexiva de la realidad trata sobre,


las formas de apropiación de la misma, el paso del mito al logos, el despertar de la
conciencia( el conócete a ti mismo), busca las esencias, analiza las formas
argumentativas de un razonar lógico, crea teorías de conocimiento( empirismo,
racionalismo, críticas entre otras) políticas, antropológicas, ontológicas, metafísicas, tiene
conciencia de lo real y lo aparente, analiza el significado del lenguaje como formas de
expresión simbólicas, reflexiona sobre la norma ética, la conducta moral y el debate
axiológico entre muchas más áreas del caminar en el asombro filosófico, por lo tanto la
mente humana abierta a todas sus posibilidades busca la verdad y en el camino
encuentra verdades que no se oponen a la verdad revelada.

El hombre es el único ser en toda la creación visible que no solo es capaz de saber, sino
que sabe también que sabe, y por eso se interesa por la verdad real de lo que se le
presenta. Nadie puede permanecer sinceramente indiferente  a la verdad de su saber. Si
descubre que es falso, lo rechaza; en cambio, si puede confirmar su verdad, se siente
satisfecho. (Ratio, 1998) Tendrá que estar en silencio, y comenzar a  reconocer su
existencia. Se sugiere leer el "Dialogo de Fedon de Platón" para poder tener acceso
al documento haga clic sobre el título del mismo.

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